Resumen Procesal Penal 1

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RESUMEN DERECHO PROCESAL PENAL I.

GULLERMO OLIVER
FRANCISCA VIVEROS GUTIÉRREZ

CAPITULO I: INTRODUCCIÓN

1. EL DERECHO PROCESAL PENAL

Desde un punto de vista orgánico el derecho procesal es aquella rama del ordenamiento jurídico que se
preocupa de regular la organización y atribuciones de los tribunales con competencia penal.
Desde un punto de vista funcional es aquella rama del ordenamiento jurídico que se encarga de regular los
procedimientos penales.
Una corriente moderna destaca la evidente vinculación que existe entre el derecho procesal penal y el
derecho penal sustantivo. Este vínculo se generaría por la existencia de la política criminal, que según
Binder es “el conjunto de decisiones del Estado, relativas a los instrumentos que regulan la coerción
penal”. Estos instrumentos son básicamente:
- Las normas penales sustantivas: establecen cuales son los delitos y sus consecuencias jurídicas; y
- Las normas penales adjetivas o procesales: señalan cómo se determina la existencia de un delito
quienes intervienen en el proceso, quién recibirá las eventuales consecuencias jurídicas y cuáles serán
éstas específicamente. Desarrolla y completa la función punitiva (pero no forma parte del derecho
penal).
Binder dice que existe una evidente interrelación entre estos 2 tipos de normas, pues:
a. Ambas deben estar coordinadas para el logro de los fines políticos – criminales que se intentan alcanzar.

Por ejemplo evitar, en la medida de lo posible el cumplimiento efectivo de penas privativas de libertad
de corta duración por parte de los llamados delincuentes primerizos, dado su efecto desocializador.
b. La correlación de un defecto en algunas de estas normas incide necesariamente en las
otras.

Las modificaciones que se hagan en las normas sustantivas influyen en las normas procesales y
viceversa. Por ejemplo lo que ocurre con el dolo (art. 1 inc. 2 CP en relación con el art. 4 del CPP).

c. La operatividad de algunas normas influye en la aplicación de las otras.

Por ejemplo el art. 142 a) CPP, establece como supuesto la improcedencia de la prisión preventiva en
caso de que el delito imputado estuviere sancionado únicamente con penas pecuniarias o privativas de
derechos.

2. CONCEPTO DE PROCESO PENAL

Proceso penal: el conjunto de actos procesales destinados a determinar la existencia de un delito, la participación del
imputado en su realización, así como las consecuencias jurídicas que deban imponerse.
Este es un concepto totalmente descriptivo y parece insuficiente para determinar el verdadero proceso
penal, pues para ello se requeriría dotarlo de un criterio valorativo. Esto se logra incorporando la idea
de garantía al debido proceso, así, el procedimiento penal sólo es una expresión que se refiere al rito
que debe seguir la tramitación del proceso conforme a la ley. En cambio el proceso penal considera
tanto al rito como al respeto de las garantías.
El concepto de juicio no es sinónimo de proceso penal, pes aquel es solo la fase esencial o central de
éste. La ejecución de la sentencia también forma parte del proceso penal (art. 7 inc. 1 CPP).

3. EL PROCEDIMIENTO PENAL

A. EFICIENCIA Y GARANTÍAS EN EL DISEÑO PROCEDIMENTAL

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En la construcción de cualquier modelo procesal penal se produce una lucha entre fuerzas antagónicas:
a) Tendencia a la protección de garantías fundamentales. Establecer un sistema de resguardos a los
individuos frene al uso de la fuerza estatal. Se traduce en exigencias derivadas del debido proceso.
b) Tendencia de eficiencia de la persecución penal: busca conseguir la aplicación efectiva de la coerción
penal, y se traduce en la entrega de instrumentos y mecanismos idóneos al que persigue, al que juzga y
al que ejecuta.
De este modo el procedimiento penal que la legislación adopta siempre asume el carácter de síntesis
culturalmente condicionada de estas dos tendencias, ya que esto va a depender del contexto histórico y
cultural en el que se desarrolla.

B. SISTEMAS PROCESALES PENALES (clasificación de los procedimientos penales).

B.1. Sistema acusatorio.


Nota distintiva: el juzgar y el acusar se encuentran radicado en sujetos u órganos distintos. Es el sistema
más antiguo y constituye la tradición en el derecho anglosajón.
Modernamente, otras características:
a. Separación de la:
- Función de persecución: encargada al fiscal, que investiga y acusa.
- Función jurisdiccional: la detenta un tribunal, cuya tarea es la resolución o decisión del
conflicto.
b. Se reconocen un conjunto de garantías a favor del imputado (debido proceso).
c. La etapa central es el juicio propiamente tal, y es oral, público y contradictorio.

B.2. Sistema inquisitivo.


Tiene su origen en el derecho canónico y luego fue tomado por las monarquías absolutas. Es un
mecanismo de control, centrado en el poder. Su elemento distintivo es que las funciones de persecución
y juzgamiento se radican en un solo sujeto.
Otras características:
a. Principio de oficialidad. La persecución se sigue de oficio.
b. Búsqueda de la verdad material. Descubrir el modo en cómo sucedieron los hechos. (la
verdad formal alude a los hechos que se logran probar en juicio). El imputado se considera
objeto de la persecución (no sujeto).
c. Procedimiento secreto.
d. Procedimiento escrito.
e. Prueba legal o tasada. La ley señala cuales son los medios de prueba, como se rinden y cuál
es el valor probatorio que se les debe otorgar.
f. Existe una organización judicial jerarquizada. (recurso de apelación y trámite de consulta).
g. Compatibilidad con Estado autoritario.

B.3. Sistema inquisitivo reformado o mixto.


Nace en el periodo liberal. La investigación se mantiene a cargo del juez instructor, pero a esta etapa se
le agrega un juicio oral o por jurados. Surge como acusador el Ministerio Público (no investiga). Este
sistema rige hasta hoy en España.

b) EVOLUCIÓN HISTORICA DEL DERECHO PROCESAL PENAL CHILENO

A. PERIODO DE LA COLONIA.
En Chile y Latinoamérica regia la legislación española. Se aplicaban las Siete Partidas.

B. DESDE LA INDEPENDENCIA HASTA EL SIGLO XIX.


El sistema inquisitivo se mantuvo vigente en nuestro país.

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C. LA CODIFICACION HISPANOAMERICANA

Llegó el fenómeno de la codificación a América, a pesar de que el sistema imperante en


Europa era el mixto, la codificación se limitó a formalizar el sistema inquisitivo.

D. LA CODIFICACIÓN EN CHILE

En 1894 el Presidente Jorge Montt envió al Congreso el proyecto de Código de Procedimiento


Penal, que fue promulgado en 1906 y comenzó a regir en 1907. Del mensaje del Código se
infieren varias ideas:
- A juicio del poder ejecutivo era importante implementar un sistema mejor.
- Se admitía como gran falla del sistema, la reunión en una misma persona de las funciones de
instrucción y juzgamiento. Se apelaba a la honestidad de los jueces y a la posibilidad de los tribunales
superiores de revisar lo resuelto.

D.1. Estructura del procedimiento que instauró el Código de Procedimiento Penal.


La investigación se podía iniciar por denuncia, querella, de oficio por el juez del crimen o a
requerimiento del Ministerio Público.
Durante el sumario, se dictaba el “auto de procesamiento”. Luego, esta etapa se cerraba y podían
seguirse dos caminos:
o El sobreseimiento definitivo o temporal.
o La acusación, iniciándose la etapa de plenario

El sumario
Es la etapa de investigación, tiene como objetivos:

a. La comprobación del hecho punible y la averiguación de la persona del delincuente.


b. Asegurar a los presuntos culpables.
c. Asegurar la responsabilidad pecuniaria.

Características del sumario


a. Antejuicio, porque el verdadero juicio era el plenario. Sin embargo, era la etapa más
importante del procedimiento, porque el mismo juez que reunía los antecedentes era el
que dictaba el fallo.
b. Era secreto, tanto para tercero como para todos los intervinientes.
c. Era escrito. Se dejaba constancia de todas las diligencias en el expediente.
d. No era contradictorio. No era necesario escuchar a las partes para resolver.
e. No había orden, ni tampoco tenía un plazo máximo de duración

El auto de procesamiento
Era la resolución más importante del sumario, por los efectos que producía. El efecto más lesivo para el
inculpado era que normalmente traía aparejada la prisión preventiva. De pleno derecho se producía su
arraigo y en el certificado de antecedentes del procesado se dejaba registro de que se había dictado el
auto de procesamiento en su contra.

El plenario
Juicio propiamente tal. Era público, contradictorio, escrito y de tramitación ordenada. Primero había
una etapa de discusión (acusación + contestación a la acusación); luego un término probatorio (20 días)
y luego se dictaba sentencia definitiva.
Características de la prueba: (1) era posible renunciar a la prueba y atenerse al mérito del sumario; (2)
regía el sistema de prueba legal o tasada.

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E. EL CÓDIGO PROCESAL PENAL
Se instaura un nuevo sistema procesal penal, cuyo intento es adecuarse a la idea de un Estado
democrático de derecho, y a los tratados internacionales ratificados por Chile en materia de DD.HH. El
nuevo sistema es coherente con la tendencia internacional vigente, en cuanto al respeto de la persona y
sus derechos, esto se logra con la instauración de un sistema acusatorio.
Entre los cambios más importantes encontramos:
- La creación del Ministerio Público, cuya principal función es investigar.
- La creación de los juzgados de garantía, constituidos por los jueces de garantía, cuya
principal función es velar por la no vulneración de las garantías del imputado y de las
demás personas.
- Las creaciones de Juicio Oral en lo Penal, ante quienes se realiza el juicio, oral, público y
contradictorio. La novedad es que los jueces no conocen nada hasta el momento del juicio,
ahí lo único que se tiene a mano es el auto de apertura que le envía el juzgado de garantía,
que contiene los hechos y medios de prueba a utilizar en el Juicio oral.
- Se considera al imputado como un sujeto al cual se le reconocen una serie de derechos
(consagrado en el código). Se destaca el derecho a una defensa.
- Se vela por los intereses de la víctima y se le otorgan una serie de derechos.
- La procedencia excepcional de los recursos procesales. El más importante es el recurso de
nulidad.

CAPITULO II: PRINCIPIOS Y GARANTÍAS DEL DERECHO PROCESAL CHILENO


1. PRINCIPIOS DE LA PERSECUCIÓN PENAL

Son los aspectos fundamentales presentes en la organización del proceso penal, que en sí mismo no
constituyen una garantía individual.
Persecución penal en sentido amplio: todo lo que tiene lugar desde que comienza la investigación del
delito, hasta la dictación de la sentencia.
A. PRNCIPIO DE OFICIALIDAD Y PRINCIPIO DISPOSITIVO

a. Principio de oficialidad.

En virtud de este principio los delitos pueden y deben ser perseguidos de oficio por el Estado, sin
considerar la voluntad del ofendido o de otra persona. Su fundamento es que hay un interés público
comprometido, trae como consecuencia que las personas involucradas no pueden disponer del
conflicto.
Proyecciones de este principio en nuestra legislación:
- En el inicio del proceso: la investigación de los delitos puede comenzar de oficio (art. 172 CPP).
- En la disponibilidad de la pretensión punitiva: como el interés en la persecución penal es público, los
intervinientes no pueden disponer de la pretensión punitiva, ni resolver por su propia cuenta el
conflicto. El art. 166 inciso 2° CPP indica que cuando el Ministerio Público toma conocimiento de un
hecho con caracteres de delito debe promover la persecución penal, “sin que pueda suspender,
interrumpir o hacer cesar su curso”. Hay ciertas excepciones.
b. Principio dispositivo.

Los intervinientes pueden disponer del conflicto. El interés es particular o privado.


Proyecciones de este principio en nuestra legislación:
- En el Inicio del proceso: delitos de acción privada. Por ej.: delitos de injuria y calumnia.
- En la disponibilidad de la pretensión punitiva: establecimiento de los acuerdos reparatorios, por los
cuales, el legislador, respecto de algunos delitos, permite a ciertos intervinientes resolver por su cuenta
el conflicto y detener así la persecución penal (arts. 241 y ss. CPP)
• En CHILE rige el PRINCIPIO DE OFICIALIDAD, pero no de manera absoluta.

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B. PRINCIPIO DE INVESTIGACIÓN OFICIAL Y PRINCIPIO DE
APORTACIÓN DE PARTE.
a. Principio de investigación oficial.

El tribunal tiene la facultad de instruir por sí mismo la investigación. El juez debe y puede de oficio
producir la prueba. Búsqueda de la verdad material.
b. Principio de aportación de parte

La carga de la prueba y la iniciativa en la producción y rendición de ella corresponde a las partes.


Búsqueda de la verdad formal.
Es el principio que rige en Chile, ya que nos caracterizamos por la pasividad del tribunal. Pero sí puede
sugerirlas (art. 98 inc. 4 CPP). Debe esperar a que las partes suministren la prueba.
Actuación del tribunal para encontrar la verdad material
Casos excepcionales de actuación de oficio:
- Art. 329 inc. 4°: tras la declaración de un testigo o de un perito, los jueces del tribunal de
juicio oral en lo penal pueden plantearle preguntas para aclarar sus dichos.
- Art. 326 inc. 3°: en el caso que el acusado declare, los jueces también pueden plantearle
preguntas para aclarar sus dichos.
- Art. 337: el tribunal de juicio oral en lo penal puede constituirse en un lugar distinto de la
sala de audiencias cuando lo estima necesario para apreciar mejor circunstancias relevantes
de los hechos que conoce.

Actuación de oficio del tribunal para cautelar garantías


En general, los casos en que se permite la actuación de oficio del tribunal no se relacionan con la
búsqueda de la verdad material, sino con la cautela de garantías. Ejemplos en los arts.: 10, 106, 152, 163,
170 inc 3°, y 458.

C. PRINCIPIO ACUSATORIO.

Las funciones de investigación, acusación y de juzgamiento se encuentran radicadas en entes distintos.


En Chile la función de investigación y acusación esta en el Ministerio Público y la de juzgamiento en el
tribual. En nuestro país el principio acusatorio tiene un mérito de carácter formal, pues las funciones de
acusar y juzgar están radicadas en sujetos distintos, que sin embargo, forman parte del Estado.
En forma excepcional y parcial se logra este principio, con los delitos de acción privada ya que quién
acusa en el procedimiento especial para esta clase de delitos es el querellante (arts. 400 y ss. CPP).
A pesar de lo recién señalado, el modelo que escogió Chile tiene un carácter acusatorio más
desarrollado que el que inspira otros modelos. Lo que justifica la tendencia a consagrar el principio
acusatorio es que resulta fundamental para la operatividad de ciertas garantías con que cuentan los
individuos frentes a la persecución penal.
D. PRINCIPIO DE LEGALIDAD Y PRINCIPIO DE OPORTUNIDAD.

a. Principio de legalidad.

El Estado tiene el deber de perseguir todo delito que llegue a su conocimiento.


Históricamente esto tenía fundamento en la aceptación de las “teorías absolutas de la pena” de acuerdo
con las cuales la imposición de la pena se justifica por sí misma, se castiga por el solo hecho de haber
delinquido.
Modernamente el principio de legalidad aparece vinculado con exigencias propias del Estado de
Derecho, como la igualdad ante la ley (se asegura que a todos los que cometan un delito se les va a
perseguir por igual) y la seguridad jurídica (se garantiza a los ciudadanos que de no delinquir no se les
podrá castigar).
Fuertes críticas:

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- La imposición de la pena solo se justifica por el hecho de lograr con ello una finalidad de prevención
de delitos; no sería legítimo entonces que se persiga y castigue a un sujeto si se sabe que la pena a
imponer no tendrá ningún efecto preventivo.
- Ningún sistema procesal penal en el mundo soporta la aplicación estricta del principio de legalidad
porque los recursos con que todo sistema cuenta son escasos. Cada vez se crean más tipos penal lo que
en la práctica surjan sistemas informales de selección de casos. En teoría el principio de legalidad en la
persecución penal es manifestación de la igualdad ante la ley, pero en la práctica la perturba.
b. Principio de oportunidad

Es aquel, en cuya virtud, la persecución penal del Estado puede no desarrollarse cuando así lo
aconsejen motivos de utilidad social o razones políticos criminales.
Se distinguen 2 sistemas:
a) Principio de oportunidad reglada: la libertad del Estado para no perseguir los delitos que
lleguen a su conocimiento por motivos de utilidad social o político criminales, está limitada
solo para determinados casos, y siempre sujeta a control.
b) Principio de oportunidad libre: su aplicación no está limitada a ciertos casos y, por lo tanto, no
está sometida a ningún control. Por ejemplo, en EE.UU.

Objetivos del principio de oportunidad:


- Descriminalización de los hechos, cuando existen mejore reacciones que la penal o cuando
no existe necesidad de ella.
- Alcanzar mayor eficiencia en el sistema penal.

En CHILE con el sistema actual rige el PRINCIPIO DE LEGALIDAD pero no de modo absoluto
sino que como regla general. Art. 166 inc. 2° CPP.

Manifestaciones del principio de oportunidad en Chile:


a. Mecanismos de selección de casos:
- Facultad de no inicio (art. 168 CPP). (*No parece correcto considerarlo manifestación del
principio de oportunidad)
- Archivo provisional de la investigación (art. 167 CPP).
- Principio de oportunidad en sentido estricto (art. 237 y ss. CPP).
b. Suspensión condicional del procedimiento.

2. GARANTÍAS INDIVIDUALES ANTE LA PERSECUCIÓN PENAL.

Importantes fuentes: PIDCP y la CADH, además de la Constitución.


I. GARANTÍAS JUDICIALES EN EL ESTADO DE DERECHO.

El diseño del procedimiento penal debe ser coherente con el modelo constitucional de cada Estado. Al
apreciar un modelo procesal penal nos hacemos idea del modelo constitucional.
El modelo chileno corresponde a un Estado democrático de Derecho. De la idea de Estado de
Derecho emana la exigencia de que la potestad punitiva del Estado esté sometida a la ley; de la de
Estado democrático, que el derecho penal esté al servicio de la persona, cautelando su dignidad.
De estas características se desprenden una serie de garantías que operan como limites a la potestad
punitiva del Estado, tanto en el derecho penal sustantivo como en el procesal penal.
El desarrollo de todo proceso penal implica siempre la afectación de garantías individuales. El art. 19 de
la CPR enumera una serie de garantías. También señala que la ley podrá, en ciertas hipótesis, establecer
casos en que pueden afectarse estas garantías.
II. CLASIFICACIÓN DE LAS GARANTÍAS JUDICIALES.

1. GARANTÍAS DE LA ORGANIZACIÓN JUDICIAL.

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Vinculadas con el tribunal. Características que debe tener la persona del juez.

A. DERECHO A UN JUEZ INDEPENDIENTE.


Consagrado en TT.II y en la CPR (art. 76 CPR). Distinguir:

a. Independencia institucional.
Implica solo que el poder judicial es independiente en el ejercicio de sus funciones respecto de los otros
poderes del Estado. Art. 76 inc.2 CPR.
b. Independencia personal del juez.
Implica que el juez no está sometido a ninguna persona en el ejercicio de sus funciones en el ámbito
jurisdiccional. Hay 2 dimensiones:
b.1. Una dimensión externa: el juez no depende de ninguna otra autoridad del Estado. Opera fuera del
Poder Judicial.
b.2. Una dimensión interna: el juez no depende de otros jueces o tribunales. Opera al interior del poder
judicial. Debe existir dentro de este poder del Estado una organización horizontal, no vertical, donde
cada juez es soberano para decidir el caso que conoce conforme a la ley. Está la posibilidad de que las
decisiones de un juez inferior puedan ser revisadas por un juez superior, ello obedece a la necesidad de
velar por las garantías de los ciudadanos, para disminuir la posibilidad de error.
En Chile la posibilidad de impugnar resoluciones judiciales por vía de recursos procesales es bastante
limitada, pero ello se ve equilibrado por características que el mismo sistema contempla:
- Separación existente entre el juez de garantía y el TJOP.
- El TJOP es colegiado lo que disminuye la posibilidad de incurrir en error.
- El control recíproco que cada uno de los intervinientes ejercer en el proceso.
B. DERECHO A UN JUEZ IMPARCIAL.

Fuentes: PIDCP, Pacto de San José de Costa Rica, art. 19 n°3 inc. 6 CPR.
a) Presupuesto estructural para este derecho: principio acusatorio.

El sistema acusatorio provee la estructura necesaria para que se haga realidad el derecho a ser juzgado
por un juez imparcial. El juez que va a juzgar no tiene ningún conocimiento de los hechos con
anterioridad a la audiencia del juicio; es en ella donde se rendirán las pruebas de cargo y descargo, lo
que permite que los intervinientes actúen ante el tribunal en pie de igualdad.
b) Vertiente de imparcialidad.

Imparcialidad, distingue:
Vertiente subjetiva: el juez tiene el deber de conocer los hechos, libre de todo prejuicio; se presume, por
lo que para desvirtuarla es necesario rendir prueba en contrario.
Vertiente objetiva: el juez debe aparecer como imparcial ante las partes y ante terceros.
c) Proyecciones de este derecho.

c.1. El juez debe carecer de intereses en el resultado del juicio.


En el COT se señalan las causas de implicancia y recusación. (arts. 195 y 196 COT).
c.2. El juez no debe dar a priori, mayor credibilidad a un interviniente por sobre otro.
Tanto el Ministerio Público como los tribunales con competencia penal forman parte del Estado, por lo
que podría eventualmente haber una suerte de inclinación por parte del juez, que es un funcionario
público a dar mayor credibilidad al fiscal. La defensoría penal pública, que es un servicio público, no
siempre interviene en el proceso, pudiendo el defensor ser un abogado particular. Procesalmente, el
fiscal es un interviniente como cualquier otro de los mencionados en el art. 12 CPP, y por lo tanto, se
desenvuelve en el proceso en iguales condiciones que los demás.
d) Problemas con esta garantía.

Existen elementos que eventualmente podrían perturbar el cumplimiento integro del derecho a ser
juzgado por un juez imparcial:

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i) Caso de delincuentes habituales.
ii) Los tribunales son permanentes y están asentados en un mismo lugar. Es más fácil que el
delincuente habitual sea conocido por el juez.
iii) Los jueces suelen pertenecer a un determinado nivel socioeconómico. Esto podría
eventualmente hacer que se ponga en jaque la garantía señalada.

C. DERECHO A UN JUEZ NATURAL.

Tiene su origen en la época feudal. Modernamente se dice que le exigencia de ser juzgado por un juez
natural se traduce en la predeterminación legal del juez, lo que quiere decir que éste debe estar
establecido por la ley con anterioridad. Hay 2 exigencias:
1.- Prohibición de comisiones especiales que juzguen.
2.- Que la ley establezca con anterioridad al tribunal competente (con anterioridad a la perpetración del
hecho).
Duda de si se respeta materialmente esta garantía cuando el tribunal, estando con anterioridad al hecho,
es modificado en cuanto a la persona del juez en él, por el poder Ejecutivo. Posibilidades
interpretativas: (1) para unos el tribunal debe estar establecido antes del hecho, pero se puede cambiar
con posterioridad a su integrante o titular; (2) para otros esto último no puede hacerse.

2. GARANTÍAS GENERALES DEL PROCEDIMIENTO.

A. DERECHO A UN JUICIO PREVIO.

Regulación: Art. 19 n°3 inciso 6 CPR y art. 1 inciso 1° CPP.


La doctrina al analizar el contenido de esta garantía distingue 2 aspectos:
1.- La imposición de una pena debe fundarse necesariamente en una sentencia condenatoria firme previa. Debe ser una
sentencia condenatoria firme fundada y cuyo incumplimiento configura un motivo del recurso de
nulidad. Art. 79 CP, art. 374 letra e), art. 468 inciso 1° CPP.
2.- Debe existir un proceso previo, legalmente tramitado. Es la exigencia de que la sentencia, especialmente la
condenatoria, este precedida de un conjunto de actos que se ajusten al procedimiento que la ley prevé.
Así se satisface por un lado, la igualdad ante la ley, en el sentido que el rito debe observarse por igual
para todas las personas que revisten la calidad de imputados y, por otro lado, la certeza jurídica, que
implica que nadie puede ser condenado sin esta ritualidad. Se pretende evitar que el Estado pueda
coaccionar a una persona sujeta a la potestad penal, de un modo que resulte atentatorio contra sus
derechos fundamentales.
El análisis del contenido del rito no es indiferente ya que podría incluir actuaciones contrarias a la
dignidad humana, por ello la CPR establece que este rito debe incluir: racionalidad y justicia. Estas
exigencias constituyen para la doctrina una consagración constitucional del debido proceso.
Lo que está claro es que si el legislador estableciera un procedimiento irracional o injusto se podría
entablar una acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad ante el TC y una posterior acción de
inconstitucionalidad, a fin de expulsar la norma legal inconstitucional del ordenamiento jurídico.
La tramitación del procedimiento debe ser respetuosa de la normativa procesal vigente en el momento
en que dicho procedimiento tiene lugar, se vincula con la retroactividad o irretroactividad de la ley
penal. En la CPR se garantiza la irretroactividad penal sustantiva (art. 19 n°3 inc. 8 CPR). Las leyes
procesales rigen in actum, es decir, son de aplicación inmediata, a medida que vayan teniendo lugar los
actos procesales. El art. 11 CPP establece que las leyes procesales penales son de aplicación inmediata,
salvo que a juicio del tribunal la ley procesal anterior sea más favorable para el imputado, lo que
requerirá en el caso concreto.
El objeto de la ley procesal no son los hechos constitutivos de delito, sino los actos jurídicos procesales
que se suceden a medida que el proceso se sustancia.

B. DERECHO A SER JUZGADOS EN UN PLAZO RAZONABLE.

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Regulación: Pacto Internacional de derechos civiles y políticos.
En materia penal no resultan aconsejables los procedimientos demasiado breves por el riesgo de error
en la imposición de una pena que, en teoría, es la reacción más grave que el Estado puede asumir contra
los DD.FF de una persona. Debe haber una reflexión antes de imponer o no una pena, lo que implica
el transcurso de cierto lapso de tiempo. Por otro lado, el proceso penal tiene una importante carga
aflictiva para el imputado, desde el inicio mismo del procedimiento, porque puede implicar la afectación
de derechos fundamentales.
La existencia de un plazo razonable resulta especialmente importante para el imputado que se encuentra
sujeto a una medida cautelar. Puede ocurrir con posterioridad que los antecedentes pierdan fuerza y que
la medida impuesta resulte ilegítima, frente a lo cual el ordenamiento procesal penal contempla
limitaciones en cuanto a la extensión en el tiempo de estas medidas.
La naturaleza aflictiva del proceso penal son tanto las actuaciones lesivas para los derechos del
imputado como el efecto social (a nadie le resulta grato que se sepa que está siendo investigado
penalmente). Si a ello se le suma que existe la presunción de inocencia, se llega fácilmente a la
conclusión de que la duración del proceso es un aspecto relevante a considerar.
A juicio de la Corte Interamericana de DD.HH el plazo razonable debe determinarse tomando en
cuenta los siguientes criterios:
1.- La complejidad del asunto.
2.- La actividad procesal del interesado.
3.- La conducta que hayan observado las autoridades judiciales.
Modelos de solución para determinar qué hacer cuando la duración del proceso penal se excede de los
márgenes tolerables:
a) Modelo de la compensación: la reparación por la vulneración del derecho a ser juzgado en un
plazo razonable debe tener lugar en la fase de individualización judicial de la pena, con lo que la
sanción a imponer deber ser atenuada, considerando dicha infracción como una compensación
parcial de la culpabilidad por el hecho. Es la OPINIÓN DOMINANTE.
b) Modelo del sobreseimiento: la única forma de alcanzar una satisfacción aceptable para el
derecho al juicio cuando la extensión es exageradamente indebida, es poner término a la
persecución penal en forma definitiva por vía del sobreseimiento. Postura abandonada.
c) Modelo de la ejecución penal: solo durante la ejecución de la pena ya impuesta debe tenerse en
cuenta la vulneración que se haya producido en el derecho del imputado a ser juzgado en un
plazo razonable, para conceder mayores beneficios penitenciario.

En el CPP el plazo razonable para ser juzgado no aparece explícitamente consagrado pero hay varias
disposiciones que establecen cuanto pueden durar determinadas etapas aisladamente consideradas, lo
que permite tener una idea de cuánto puede durar el proceso penal. Algunos ejemplos:
1.- Plazo fijado al fiscal para formalizar. En principio el fiscal no está sujeto a plazo y es libre de
formalizar la investigación en cualquier momento. Único plazo importante: el de la prescripción de la
acción penal. Pero en el caso de que se investigue latamente a una persona y se niegue el M.P. a
formalizar, el art. 186 permite que la persona afectada acuda al juez de garantía, para que este ordene al
fiscal informar acerca de los hechos que fueren objeto de la investigación o le fije plazo para que
formalice la investigación.
2.- Plazo para el cierre de la investigación. Duración máxima de 2 años (art. 247 inc.1 CPP). Es posible
que se establezca un plazo inferior, de acuerdo al art. 234 CPP.
3.- Opciones del fiscal luego del cierre de la investigación. El fiscal tiene 10 días para formular la
acusación, solicitar sobreseimiento o comunicar su decisión de no perseverar (art. 248 CPP).
4.- Realización de audiencia de preparación del juicio oral. Una vez que el juez recibe la acusación del
fiscal, tiene que notificarla y citar a audiencia de preparación de juicio oral. Plazo entre 25 a 35 días
después (art. 260 CPP).
5.- Envío del auto de apertura. Esta resolución debe enviarse por el juez de garantía al TJOP dentro de
las 48 horas siguientes al momento en que quede firme (art. 281 CPP).

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6.- Realización de la audiencia de juicio oral. Una vez recibido el auto de apertura, deberá tener lugar la
audiencia de juicio oral en lo penal no antes de 15 ni después de 60 días contados desde la notificación
de la resolución (art. 281 inc. 3 CPP).
7.- Comunicación de la decisión de la condena o absolución. Después de concluido el debate los jueces
se retiran a deliberar en privado, debiendo el tribunal comunicar su decisión de condena o absolución,
inmediatamente en la misma audiencia, pudiéndose prolongar hasta por 24 horas (art. 343 inc. 2 CPP).
8.- Lectura o comunicación del fallo. Son 5 días desde la comunicación de la decisión, siendo ampliable.
La sentencia se entiende notificada al tener lugar la lectura del fallo y desde ese momento empieza a
correr el plazo para interponer el recurso de nulidad (art. 344 CPP).
9.- Plazo de interposición del recurso de nulidad. Son 10 días desde la notificación de la sentencia (art.
372 CPP)
10.- Plazo para fallar el recurso de nulidad. En los 20 días siguientes a la fecha en que termina de
conocer de él (art. 384 inc. 1 CPP).

C. DERECHO A LA PRESUNCIÓNDE INOCENCIA.

Regulación: PIDCP, DUDH, CPP. El art. 4 del CPP señala: “Presunción de inocencia del imputado. Ninguna
persona será considerada culpable ni tratado como tal en tanto no fuere condenada por una sentencia firme”.
Se asegura al imputado un status básico, que consiste en que no se le puede considerar culpable
mientras no sea declarado así por una sentencia firme. En esta garantía hay 2 términos:
- Inocencia: significa que por el hecho de imputarle a una persona la comisión de un delito en un
proceso penal, no debe cambiar el estatus que le corresponde como cualquier ciudadano. Es criticable
ya que es un concepto referencial. El concepto solo adquiere sentido cuando se tiene la posibilidad de
ser declarado culpable por algo. Algunos en vez de hablar de presunción de inocencia prefieren hablar
de principio de no culpabilidad.
- Culpabilidad: se alude al conjunto de condiciones necesarias para hacer efectiva la responsabilidad
penal de una persona, por lo que la expresión se entiende en un sentido más amplio.
En todo caso no parece correcto referirse a esta exigencia como una presunción, ya que no posee la
estructura que toda presunción tiene: un hecho conocido (hecho base) y un hecho desconocido que se
deduce del primero (hecho presunto).
a) Presunción de inocencia como una decisión político criminal.

La inocencia es una garantía política. Se ha decidido no aplicar consecuencias jurídicas derivadas de un


delito antes de que exista una sentencia firme condenatoria. Ello se estima deseable aunque exista una
sospecha pública de que la persona del imputado sea culpable o una sospecha al interior del proceso
con motivo de su desarrollo.
b) Dimensiones de la presunción de inocencia.

b.1. Presunción de inocencia como regla de trato.


Obliga a que el imputado sea tratado como inocente mientras no exista una sentencia condenatoria
firme. Lo que se intenta es evitar que se impongan anticipadamente las consecuencias jurídicas de los
delitos. Art. 4 CPP.
El punto de quiebre son la medidas cautelares, que implican o pueden implicar una aplicación anticipada
de las consecuencias jurídicas de un delito. Dentro del CPP existen disposiciones que limitan la
aplicación de las medidas cautelares, porque se tiene conciencia de que pueden poner en jaque la
presunción de inocencia.
No obstante lo anterior, tras la modificación al CPP, con la ley 20.253 el legislador ha optado más por
la eficiencia en la persecución penal, que por el respeto a la presunción de inocencia.

Si se revisan los requisitos que el código exige para poder imponer la prisión preventiva, es posible
constatar que, en general, se es respetuoso de que las medidas cautelares solo se impongan cuando sea
necesario para asegurar los fines del procedimiento. Una excepción es que el peligro para la seguridad de la

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sociedad (art. 140 inc. 1 letra c)). En la práctica se planteó por un sector de la doctrina que el peligro
para la seguridad de la sociedad debía entenderse como pronóstico de una probable fuga sin embargo
este argumento perdió fuerza con la ley 20.074. Hoy se establece que “la prisión preventiva procederá cuando
las demás medidas cautelares personales fueren estimadas por el juez como insuficientes para asegurar las finalidades del
procedimiento, la seguridad del ofendido o de la sociedad”, con lo que parece claro que para el legislador la
seguridad de la sociedad no forma parte de “las finalidades del procedimiento.
b.2. Presunción de inocencia como regla de prueba
Es consecuencia de lo anterior. Dado que al imputado se le considera inocente, quien lo acusa debe
producir prueba para desvirtuar dicha situación. Por lo tanto, la carga de prueba corresponde al
acusador (el fiscal o el querellante). Es una regla dirigida a las partes y destinada a establecer la carga de
prueba.
Problema: determinar qué ocurre con las presunciones legales de responsabilidad penal o ficciones de
culpabilidad, porque se afirma que la presunción de inocencia se opone a la existencia de presunciones
de derecho – en las que no se admite prueba en contrario – y simplemente legales – que admiten
prueba en contrario – de responsabilidad penal. El art. 19 n°3 inc. 7 de la CPR dispone que “la ley no
podrá presumir de derecho la responsabilidad penal”. Subsiste el problema de las presunciones simplemente
legales.
b.2.1. Rechazo de las presunciones legales.
Distintas posturas:
b.2.1.1. Presunciones no son medios de prueba.
Conforme al art. 295 CPP los hechos se prueban con cualquier medio producido e incorporado en
conformidad a la ley. Las presunciones no son medios de prueba, sino solo pruebas que alteran el onus
probandi. En el nuevo sistema procesal penal no tendrían asidero las presunciones legales.
b.2.1.2. Presunciones están tácitamente derogadas.
Presunciones están tácitamente derogadas por ser incompatibles con la presunción de inocencia.
b.2.2. Aceptación de las presunciones legales.
b.2.2.1. Promulgación de leyes con presunciones con posterioridad a los tratados
El legislador ha ido incorporando en el ordenamiento jurídico presunciones simplemente legales de
responsabilidad penal con posterioridad a la ratificación de los TT.II. que consagran la presunción de
inocencia e incluso, con posterioridad a la entrada en vigencia del CPP. Si se sostiene que se encuentran
tácitamente derogadas las presunciones existentes al momento de la entrada en vigencia de dichos
cuerpos normativos, subsiste el problema respecto de las presunciones contempladas en leyes
posteriores, que habría que considerar vigentes.
b.2.2.2. Presunciones legales implican que el acusador debe probar el hecho base de la presunción.
Otra posibilidad es sostener que estas presunciones no implican un completo atentado contra la
presunción de inocencia, porque de todas formas el ente acusador tiene que probar algo, y eso es el
hecho base de la presunción. Una vulneración total de la presunción de inocencia consistiría en una
presunción absoluta de culpabilidad, en la que pudiera ampararse el ente acusador, sin que fuera
necesario que éste aportara prueba de cargo alguna, y que debiera la defensa probar su inocencia, de
modo que si no lo lograra tendría que dictarse condena.
Esto nada tiene que ver con las presunciones judiciales, que son inferencias que el juez hace a través de
hechos que han sido probados.

c) Presunción de inocencia como regla de juicio.

Se traduce en que si la prueba rendida por el acusador no fuere suficiente para demostrar la culpabilidad
del imputado – para lo cual nuestro sistema requiere que supere toda duda razonable (art. 340 inc. 1
CPP) – el tribunal deberá absolverle.
Esta regla se encuentra dirigida al juez y se relaciona con la valoración de la prueba.

D. DERECHO DE DEFENSA

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• Derecho de defensa material: Es el que le concede al imputado la posibilidad de ejercer
diversas facultades (ej. Derecho de información).
• Derecho de defensa técnica o letrada: Facultad del imputado de designar un abogado o que se
le designe uno defensor.

E. PROHIBICIÓN DE LA PERSECUCIÓN PENAL MÚLTIPLE

Art. 1 inc. 2 “La persona condenada, absuelta o sobreseída definitivamente por sentencia ejecutoriada ,
no podrá ser sometida a un nuevo procedimiento penal por el mismo hecho”. Esta garantía se
encuentra muy relacionada con la cosa juzgada y con el principio non bis in ídem procesal (no puede
perseguirse a una misma persona , por el mismo hecho, cuando ya ha sido condenada, absuelta o
sobreseída definitivamente).

3. GARANTÍAS DEL JUICIO


A. Derecho a un juicio público Art. 1CPP. “Toda persona tiene derecho a un juicio , previo, oral y
público”.
1. Finalidades de la publicidad:
a. Finalidad preventivo general: Lo que se pretende evitar es la comisión de delitos por la
colectividad.
b. La posibilidad de ejercer un control popular sobre la administración de justicia. (el art.
9 COT y el art. 8 inc.2 de la CPR establecen que los actos de los tribunales y órganos
del estado son públicos).
2. Manifestaciones de la publicidad
a. En materia de audiencias: La audiencia de juicio oral es por regla general pública.
b. En materia de registros judiciales: Son en general públicos (art. 44CPP).
3. Violación de la publicidad
Si la publicidad no se respeta en el juicio oral da lugar al recurso de nulidad por violación de las
disposiciones legales sobre publicidad del juicio (art. 374 letra d CPP).
4. Excepciones a la publicidad
Al ser la publicidad una garantía, para restringirla se requieren los motivos establecidos por la ley.
Limitaciones a la publicidad del juicio:
• Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos:
o En consideración de la moral, el orden público o seguridad nacional.
o El resguardo de la vida privada de las partes.
o Cuando sea necesario para no perjudicar los intereses de la justicia.
• Código Procesal Penal
o Art. 289. Que sea necesario para proteger la intimidad , el honor o la seguridad e
quien deba intervenir en el juicio
o Art. 289. Evitar la divulgación de un secreto protegido por la ley.
o Art. 286. Audiencias reservadas, a fin de solicitar la practica de diligencias de la
investigación por infracción a la ley de drogas sin el conocimiento del imputado.
o Art. 463 letra b. Procedimiento para la aplicación de medidas de seguridad.

4. DERECHO A UN JUICIO ORAL


Art. 1 inc. 1 291 CPP. La oralidad no se encuentra consagrada en los pactos internacionales.
La oralidad se ve manifestada no solo en la etapa de juicio sino que también en etapas preliminares. Así,
la oralidad más que un principio es un instrumento que permite hacer realidad otros principios, como
los de inmediación, concentración y continuidad.
1. Principio de inmediación
Debe existir una relación directa entre el tribunal y la prueba, de modo que éste puede
presenciar los medios probatorios para acreditar los hechos que son objeto del proceso.

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• Aspecto formal: Consiste en la exigencia de que el tribunal vea y oiga la prueba por sí
mismo, de modo que su sentencia se base exclusivamente en la percepción que de ella
tenga en el juicio oral.
Este aspecto justifica que no proceda el recurso de apelación en el juicio oral y en el
simplificado. En el procedimiento abreviado si procede la apelación puesto que en ella
no se rinde prueba.
• Aspecto material: Concierne a los medios de prueba de los que el tribunal debe
valerse, se traduce en que las pruebas practicadas en el juicio han de ser las más
cercanas a los hechos que se intenta acreditar.
• Aspecto temporal de la inmediación: Importancia de que trascurra el menor tiempo
posible entre los distintos momentos de producción de la prueba y entre ésta y la
dictación de la sentencia (art. 343 CPP).

En virtud de la relación directa entre el juez y la prueba mejora la calidad de la información que ingresa
al juicio, lo que permite disminuir las posibilidades de error en la sentencia y facilita la búsqueda de la
verdad respecto de los hechos objeto del proceso. Sin embargo, algunos sostienen que este principio
habría sido elaborado para permitir que el juicio fuera celebrado entre contendientes que se encontrasen
en condiciones de igualdad (al tener que rendirse los medios de prueba en la audiencia de juicio y en
presencia del juez , todas las partes tendrían la posibilidad de examinarlos libremente ) y no para buscar
la verdad.

2. Principio de concentración
Todos los actos necesarios para concluir el juicio deben realizarse en la misma audiencia (aunque esta
pueda prolongarse).

3. Principio de continuidad
El debate no debe ser interrumpido (aunque se puede suspender por un máximo de 10 días si fuese
estrictamente necesario).
La vulneración a este principio constituye un motivo absoluto de nulidad (art. 374 d).

4. El derecho a un juicio oral es renunciable


A lo que puede renunciar el imputado es a que se le juzgue conforme a la etapa que se encuentra al
término de la tramitación del procedimiento ordinario, denominada juicio oral. O sea, el juicio es
renunciable , la oralidad no.
Manifestaciones de la renunciabilidad
• Salidas alternativas (art. 237-246 CPP)
o Suspensión condicional del procedimiento: Requiere el consentimiento del imputado y
la manifestación de voluntad del fiscal.
o Acuerdo reparatorio: Requiere el consentimiento del imputado y el consentimiento de
la víctima.
• Procedimientos especiales
o Procedimiento abreviado (art. 406 CPP)
Se exige el consentimiento del imputado, debe aceptar los hechos por los que se le
acusa y los antecedentes de éstos.
o Procedimiento monitorio (art. 392 CPP)
Se aplica únicamente a las faltas por las cuales el fiscal requiere solo una pena de multa.
El fiscal presenta el requerimiento y si el juez de garantía lo considera fundado , dicta
sentencia de inmediato e impone pena de multa. El imputado tiene 15 días para
reclamar y solo si reclama tendrá lugar la tramitación del procedimiento simplificado,
si no reclama la resolución se considera firme.
o Procedimiento simplificado (art. 395 CPP)

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Tras el requerimiento del fiscal , se cita a una audiencia en la que el juez de garantía
pregunta al imputado si admite responsabilidad en los hechos, si la admite se dicta
sentencia de inmediato, si no, hay un juicio simplificado oral y ante el juez de garantía.

III. CONSIDERACIONES FINALES CON RESPECTO A LAS GARANTÍAS

1. Rango de las disposiciones que contienen las garantías


Existen garantías consagradas en la Constitución y en Tratados Internacionales (incorporados a nuestra
legislación en virtud del art. 5 CPR). De esta manera, el problema se presenta con las garantías
establecidas en una ley , pues bastaría una norma del mismo rango para que derogara la anterior. La
solución iría por dotar de más contenido a la garantía del debido proceso asegurada en la CPR en su art.
19 nº 3inc. 6.

2. Mecanismos generales de protección de las garantías


a. Mecanismos preventivos
i. Cautela de garantías (art. 10): Cada vez que el imputado no esté en
condiciones de ejercer los derechos que le otorgan las garantías judiciales , el
juez de garantía puede , incluso de oficio adoptar medidas necesarias para
asegurar su ejercicio. Si no fuese suficiente, puede ordenar la suspensión del
procedimiento y citar a los intervinientes a una audiencia en la que puede
decretar el sobreseimiento temporal.
ii. Autorización judicial previa (art.9): Toda actuación que prive al imputado o a
un tercero de los derechos que la constitución asegura, o lo restringe o
perturbare, requerirá de autorización judicial previa.
b. Mecanismos correctivos
i. La nulidad procesal (art. 159-160)
Se permite anular actuaciones o diligencias judiciales cuando no se han
observado las formas procedimentales y que por consecuencia se ha
producido un perjuicio reparable solo con la declaración de nulidad.
ii. Regla sobre exclusión de prueba ilícita (art. 276 inc. 3)
Se excluye, en la audiencia de preparación de juicio oral, prueba de cargo que
se quiera rendir en el juicio oral, por haber sido obtenida con vulneración de
garantías.
iii. El recurso de nulidad (art. 372)
Causa genérica del art. 373 letra a, según el cual corresponde anular el juicio o
la sentencia cuando en cualquier etapa del procedimiento o en el
pronunciamiento de la sentencia se hubieren infringido derechos o garantías
(…).
iv. Prohibición de lectura de registros y documentos (art. 334)
Se prohíbe incorporar como medio de prueba o dar lectura en el juicio oral a
actas o documentos que dieren cuenta de actuaciones o diligencias declaradas
nulas , o en cuya obtención se hubieran vulnerado garantías fundamentales.

3. Intervinientes favorecidos con estas garantías


Tradicionalmente se ha sostenido que estas garantías tienden a proteger a la persona del imputado. A
pesar de ello, en el último tiempo se ha abierto la interrogante de si el Ministerio Público puede ser
favorecido por estas garantías, sin embargo, la doctrina no es unánime.

CAPITULO III
LOS SUJETOS PROCESALES

1. Los tribunales con competencia penal

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Una de las particularidades del nuevo sistema procesal penal, es la creación de nuevos tribunales.
• Deficiencias del sistema antiguo:
o Concentración de las funciones de investigar, acusar y juzgar.
o Delegación de funciones que los jueces del crimen hacia en los actuarios.
o La necesidad de los jueces del crimen de realizar no solo actividad jurisdiccional, sino
también administrativa para lo cual no estaban preparados.
• Aspectos relevantes del nuevo sistema
o Se reservó para los jueces las funciones exclusivamente jurisdiccionales: pues atentaba
contra el principio de imparcialidad.
o Se liberó a los jueces de funciones administrativas: se creó en cada tribunal los cargos
de administradores de tribunales con competencia en lo criminal, auxiliares de la
administración de justicia.
o Se crearon dos clases de tribunales con funciones distintas: Juzgados de garantía y de
Juzgados de juicio oral en lo penal.
o La reforma solo alcanzó a los tribunales ordinarios no los especiales.

A. LOS JUZGADOS DE GARANTÍA (art. 14 del COT)

Son tribunales ordinarios integrados por uno o más jueces letrados y de derecho, permanentes, con
competencia en una comuna o agrupación de comunas, que actúan y resuelven unipersonalmente los
asuntos que la ley ha entregado a su conocimiento, en las etapas de investigación e intermedia, en
algunos procedimientos penales especiales y en la etapa de ejecución de la sentencia.

1. Estructura y organización:
A) Juez presidente: Elegido por el comité de jueces y su duración es de dos años, pudiendo ser
reelegido por un nuevo periodo. Sus funciones son: presidir el comité de jueces, calificar al
personal y proponer al comité un procedimiento objetivo y general para la distribución de
causas entre los jueces del tribunal.
B) Comité de jueces: Aprueba el procedimiento propuesto por el juez presidente, designa al
administrador del tribunal de la terna propuesta por el juez presidente y designa al personal del
tribunal.
C) Administrador del tribunal : Dirige las labores administrativas y de funcionamiento del tribunal,
distribuye las causas conforme el procedimiento objetivo y general aprobado, lleva la
contabilidad y cuenta corriente del tribunal, elabora el presupuesto anual del tribunal, dirige y
abastece de materiales de trabajo al tribunal y supervisa las unidades administrativas.
D) Unidades administrativas:
a. Unidad de sala: A cargo de la organización y asistencia en todo o relativo a las
audiencias.
b. Unidad de atención a público: Otorga información y orientación al público y lleva la
correspondencia.
c. Unidad de servicios: Encargada del soporte técnico y redes computacionales.
d. Unidad de administración de causas: Maneja las causas y registros que se llevan.

2. Reglas generales de competencia


Se aplican las reglas de los art. 108 y ss. Del COT, pero con ciertos matices.
• Regla de radicación o fijeza: Conforme el art. 109 COT “radicado con arreglo a la ley el
conocimiento de un negocio ante tribunal competente, no se alterará esta competencia por
causa sobreviniente”. La ley establece la radicación o fijeza respecto de tribunales no de jueces.
Sin embargo, los juzgados de garantía se componen de uno o más jueces, por lo que surge la
duda de si las causas se radican solo en el tribunal o en la persona del juez. La ley ha previsto
que las causas se distribuyan entre los jueces de los juzgados de garantía conforme a un
procedimiento objetivo y general, de manera que una vez asignada una causa a un juez, la única

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posibilidad de que conozca un juez distinto es que el originalmente designado falte o no pueda
intervenir, operando los mecanismos de subrogación del art. 206 y ss. Del COT. En
consecuencia las causas no solo se radican en los juzgados de garantía, sino que en la persona
del juez.

• Regla de ejecución de las resoluciones judiciales


La ejecución de las resoluciones le corresponde a los tribunales que las hubieren pronunciado
en primera o en única instancia (art. 113 COT). Sin embargo, la ejecución de las sentencias
penales y de las medidas de seguridad (…) serán de competencia del juzgado de garantía que
hubiere intervenido en el respectivo procedimiento penal.

3. Competencia material o funcional (art. 14 inc. 2 COT)


• Asegurar los derechos del imputado y demás intervinientes en el proceso penal, de acuerdo a
la ley procesal penal (por eso el nombre de juzgado de “garantía”).
o Respecto de la víctima:
-Fijar condiciones que velen por la protección de la victima al aprobar la suspensión
condicional del procedimiento o revocar dicha salida alternativa. (art. 238 y 239 CPP).
-Verificar que la victima manifiesta su conformidad con el acuerdo reparatorio en
forma libre e informada , sin estar bajo ningún tipo de coacción o amenaza (art. 241
CPP).
-Decretar ciertas medidas cautelares a petición de la victima (art. 155 CPP).
-Decretar ciertas medidas cautelares para proteger la seguridad de la victima (art. 140 y
155).
-Comunicar a la victima que el fiscal ha decidido aplicar el principio de oportunidad
(art. 170).

o Respecto del imputado


-Respecto de garantías judiciales o “cautela de garantías”: Cada vez que el imputado
no esté en condiciones de ejercer los derechos que le otorgan las garantías judiciales ,
el juez de garantía puede , incluso de oficio adoptar medidas necesarias para asegurar
su ejercicio. Si no fuese suficiente, puede ordenar la suspensión del procedimiento y
citar a los intervinientes a una audiencia en la que puede decretar el sobreseimiento
temporal.
Cuando se diseñó el nuevo sistema procesal penal, se pretendió dar a la cautela da
garantías un alcance limitado , para permitir al juez adoptar medidas solo frente a
impedimentos sobrevinientes que limitaran la capacidad del imputado para
comprender los efectos de la formulación de cargos y discernir su rol en el proceso.
Sin embargo, en la práctica la cautela de garantías se ha aplicado para situaciones de
afectación de derechos del imputado por cuestiones procesales, penitenciarias o de
otra índole.
Hay discusión con respecto a la oportunidad para que tenga lugar la cautela de
garantías. Una postura minoritaria estima puede ocurrir en cualquier etapa del
procedimiento (art. 10 inc. 1) otros piensan que solo puede suceder durante las etapas
de investigación e intermedia, es decir, antes de que llegue a conocimiento del tribunal
de juicio oral en lo penal, ya que de lo contrario se producirían grandes trastornos en
la tramitación de las cusas en la etapa de juicio oral.
-Respecto de garantías no judiciales: el juez de garantía puede otorgar o denegar
autorización para que se practiquen diligencias de investigación que pueden ser lesivas
de derechos (art. 9, 70 inc. 1 CPP), conceder una medida cautelar, examinar la
legalidad de la privación de libertad de cualquier persona (art. 95 CPP), declarar la
legalidad o ilegalidad de la detención del imputado en la audiencias de control de

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detención (art. 132 CPP), suspender el procedimiento contra el imputado
aparentemente inimputable por enajenación mental (art. 458 CPP)
• Dirigir personalmente las audiencias que procedan
En las audiencias el juez de garantía goza de facultades de dirección y de disciplina (art. 71 y 292 y
ss. CPP).
La regla general es que los jueces de garantía citen a audiencia cuando algún interviniente lo solicite
, o cuando el juez de garantía estime procedente resolver previo debate. Excepcionalmente, se
resuelve sin audiencia cuando se trata de solicitudes de mero trámite.
• Dictar sentencia en procedimiento abreviado (406 y ss.)
• Conocer y fallar las faltas penales
Tanto las del CP como las de leyes especiales. Para conocer de estos delitos existe el
procedimiento simplificado (se aplica para las faltas en las que no se pida pena de multa y para los
simples delitos para los cuales el Ministerio Público requiera una pena no superior a la de presidio
menor en su grado mínimo) y el monitorio (que se aplica a las faltas para las que el fiscal solicite
pena de multa).
• Conocer y fallar las faltas e infracciones a la ley de alcoholes
Aunque la mayor parte de las infracciones a esta ley las conocen los juzgados de policía local.
• Hacer ejecutar las condenas y las medidas de seguridad , y resolver solicitudes y reclamos
relativos a dicha ejecución
• Conocer y resolver asuntos correspondientes a la ley de responsabilidad penal juvenil
• Conocer y resolver los demás asuntos que la ley les encomiende
Como la tramitación de los delitos de acción privada (art. 400 a 405 CPP), o la visita de un juez de
garantía designado por el comité de jueces a la cárcel el último día hábil de la semana para indagar
si los presos sufren tratos indebidos (art.567 COT).

4. Competencia territorial
La regla general , tratándose de delitos cometidos dentro de la republica , es que será competente el
tribunal en cuyo territorio jurisdiccional se hubiere cometido el presunto delito, el cual se considera
cometido en el lugar donde se hubiere dado comienzo a su ejecución. (art. 157 inc. 1 y 3 COT).
Excepciones:
• Diligencias urgentes
En diligencias urgentes, si se requiere alguna autorización judicial previa , ésta podrá ser concedida
por el juez de garantía del lugar en que la diligencia deba realizarse.
• Conflictos de competencia
Mientras este conflicto no sea dirimido , cualquiera de ellos puede válidamente realizar actuaciones
y otorgar autorizaciones urgentes, sin que sea necesario que sean ratificadas por el juez competente.
• Control de la detención
Cuando una persona es detenida, debe ser conducida dentro de un máximo de 24 horas desde que
se practicó la detención ante el juez de garantía para la realización de la audiencia de control de
detención. Sin embargo, cuando la detención se practicare fuera del territorio jurisdiccional del juez
que hubiere emitió la orden , y dicho juez tuviere competencia en una ciudad asiento de Corte de
Apelaciones diversa, también será competente para conocer el juez del lugar en el que la detención
se practicó. (art. 70 inc.2)
• Agrupación y separación de investigaciones
El fiscal puede desarrollar la investigación conjunta de dos o más delitos, cuando ello resultare
conveniente. En dicho caso puede ocurrir que conforme a la regla general de competencia
correspondiera intervenir a dos o más jueces de garantía, en dicho evento el competente para seguir
conociendo será solo el juez de garantía del lugar de comisión del hecho que comenzó a
investigarse primero. (art. 159 inc. 1 COT).
• Designación de defensor para imputados privados de libertad

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Si un imputado se encuentra privado de libertad y carece de abogado defensor, cualquier persona
puede proponer para el un defensor determinado o solicitar que se le nombre uno. Dicha petición
la conoce el juez de garantía competente o a aquel correspondiente al lugar en que el imputado se
encuentre.
• Amparo ante el juez de garantía
Cualquier persona en el nombre de alguien privado de libertad pueden concurrir ante el juez de
garantía que conociere del caso o a aquel del lugar donde él se encontrare , para solicitar que ordene
que sea conducida a su presencia. El juez podrá examinar la legalidad de la privación de libertad, las
condiciones en que se encontrare el afectado , constituirse en el lugar en que estuviere, ordenar su
libertad o adoptar las medidas que fueren procedentes.
Si se trata de delitos cometidos fuera del territorio de la republica será competente el juez de garantía de
la jurisdicción de la corte de apelaciones de Santiago.
Y en el caso de en que intervienen mas de un juez de garantía en la investigación , si la condena es por
hechos investigados en forma conjunta, es competente durante la ejecución el juez de garantía que
conoció de estas investigaciones agrupadas , a pesar de que antes hubiera intervenido otro juez de
garantía.

5. Jueces de letra con competencia de juez de garantía


de acuerdo al art. 46 del COT, aparte de los jueces de garantía existen ciertos jueces de letras que
cumplen funciones propias de aquellos. (jueces mixtos).

B. TRIBUNALES DE JUICIO ORAL EN LO PENAL (TJOP)

“Tribunales colegiados y letrados, competentes para ejercer las atribuciones que les confiere la ley desde el momento de la
dictación del auto de apertura del juicio oral, hasta el pronunciamiento de la sentencia definitiva”. Hay 45 TJOP en
Chile y 6 en la V Región.
Integración y funcionamiento
Funcionan en salas de 3 miembros, entre los que se encontrará un juez presidente, pudiendo además
haber jueces alternos. La integración de la salas se hace mediante sorteo anual.
Respecto de la organización interna encontramos: Juez Presidente, Comité de Jueces, Administrador del
tribunal y Unidades Administrativas (son las mismas 4 de los Juzgados de Garantía más la unidad “de
apoyo a testigos y peritos”).
Las decisiones se adoptan por regla general de acuerdo a los acuerdos de las CA, pero existen reglas
especiales:
a) Sólo pueden concurrir a la decisión los jueces que hayan asistido a la totalidad de la audiencia
b) La decisión debe ser adoptada por mayoría de miembros de la sala
c) En caso de dispersión de votos, el juez que sostenga la opinión más desfavorable para el
imputado, tiene que optar por una de las otras. Si no hay acuerdo sobre la más favorable,
prevalecerá la que tiene el voto del juez presidente.

Competencia material o funcional


a) Conocer y juzgar causas por crimen o simple delito, salvo aquellas relativas a simples
delitos cuyo conocimiento y fallo corresponda a un juez de garantía. La excepción viene
dada por el procedimiento simplificado y por el procedimiento abreviado, donde el juez de
garantía puede conocer y juzgar simples delitos e incluso crímenes (arts. 388 y 406
respectivamente).
b) Resolver sobre la libertad o prisión preventiva de los acusados puestos a su
disposición. Deberá conocer de esto, ya que dentro de las 48 hrs siguientes a que quede firme
el auto de apertura del juicio oral, se pondrán a disposición estas personas. Puede producirse
problema de imparcialidad si el TJOP se pronunciara sobre la prisión preventiva u otras
medidas cautelares antes de la audiencia de juicio oral (art. 140 CPP) produciéndose un
adelanto de opinión que atente contra su imparcialidad.

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c) Resolver los incidentes que se promuevan durante el juicio.
d) Conocer y resolver las cuestiones relativas a la ley de responsabilidad penal juvenil.
e) Conocer y resolver los demás asuntos.

Competencia Territorial
Tienen competencia para conocer aquellos delitos que se cometan en las agrupaciones de comuna que
integran su territorio jurisdiccional, a excepción de delitos en el extranjero los cuales serán conocidos
por el TJOP de la jurisdicción de la CA de Santiago.
Los intervinientes podrán alegar la incompetencia del tribunal dentro de los 3 días siguientes a la
notificación de la resolución que fija la fecha de celebración de la audiencia de juicio oral.
Una excepción al principio de sedentariedad de los tribunales es que estos puedan desplazarse a otras
comunas como tribunales itinerantes (es lo que sucede en las zonas extremas del país).
Causas de inhabilitación (implicancia y recusación)
Se incluyeron las siguientes causales con la reforma:
a) Haber intervenido con anterioridad en el procedimiento como fiscal o defensor.
b) Haber formulado acusación como fiscal, o haber asumido la defensa, en otro procedimiento
seguido contra el mismo imputado.
c) Haber actuado el miembro del TJOP como juez de garantía en el mismo procedimiento.

Respecto de los plazos para hacer valer estas causales, hay 3 opciones:
a) 3 días siguientes a la notificación de la resolución que fija la fecha de juicio oral.
b) Si los hechos que constituyen la causal llegan a conocimiento del interviniente después de
vencido el plazo señalado, pero antes del juicio oral, el incidente deberá promoverse al iniciarse
la audiencia.
c) Si los hechos que constituyen la causal se conocen con posterioridad al inicio de la audiencia de
juicio oral, no podrán deducirse incidentes para inhabilitar a alguno de los jueces, pero el
tribunal podrá de oficio declarar tal inhabilidad. Además, se podría recurrir de nulidad con la
sentencia definitiva para anular esta y todo el juicio.

C. CORTES DE APELACIONES
Conocen de las siguientes materias:
1) Única instancia:
a. Recursos de nulidad fundados en ciertas causales (art 63 n°1 b COT y arts 373 b y 376
inc. 2° CPP). Generalmente procede respecto de una errónea aplicación del Derecho o
motivos de nulidad absoluta.
b. Extradición activa
c. Solicitudes que se le hagan cuando ciertas autoridades se nieguen a entregar
información
2) En primera instancia:
a. Ciertos desafueros
b. Querellas de capítulos
c. Recursos de amparo
3) En segunda instancia:
a. Apelaciones procedentes contra ciertas resoluciones de un juez de garantía

Según el art. 364 CPP, serán inapelables las resoluciones dictadas por un TJOP. Sin embargo, esto es
solo respecto de las sentencias definitivas, pues otras si podrán ser apeladas, por ejemplo, las que
conceden o rechazan medidas cautelares.
D. CORTE SUPREMA
La Sala Penal de la CS conoce de las siguientes materias:
a) Recursos de nulidad fundados en ciertas causales (art 98 n°3 COT y arts 373 a y 376 inc. 1°
CPP). Cuando es una infracción sustancial de garantía.

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b) Apelaciones contra sentencias de CA en recursos de amparo
c) Revisión de sentencias condenatorias firmes
d) Apelaciones contra resoluciones dictadas en querellas de capítulos
e) Ciertas solicitudes cuando algunas autoridades se negaren a dar determinada información al
Ministerio Público
f) Apelaciones y recursos de nulidad interpuestos contra sentencias dictadas en causas de
extradición pasiva

El pleno de la CS conocerá:
a) Apelaciones contra ciertas resoluciones dictadas en procedimientos de desafuero
b) Solicitudes de libertad condicional de personas condenadas a presidio perpetuo calificado

Así, podemos concluir que los tribunales con competencia penal son tanto los Juzgados de Garantía,
TJOP, CA, CS, Ministro CS como tribunal unipersonal (extradición pasiva) y los juzgados mixtos que
tienen competencia de Juzgado de Letras pero también como Juzgado de Garantía.

LOS INTERVINIENTES
Se distingue tanto de la expresión “partes” como de “sujetos del delito”. Cabe recordar que sujetos del
delito (sujetos activo y pasivo) sería impropio pues en el procedimiento penal no hay una sentencia
condenatoria firme, puede faltar el ofendido, pueden interponer querellas personas que no tengan
relación con la víctima, el ejercicio de la acción penal pública por regla general corresponde al
Ministerio Público, hay delitos en los que no hay sujeto pasivo particular (bienes jurídicos colectivos).
Partes alude a aquellos individuos que por medio de su actuación procesal, defienden intereses propios,
lo que no cuadra con las figuras de Ministerio Público ni defensor. Sin embargo, cabe mencionar que la
víctima aunque no se querelle y no participe en el juicio, podría impugnar el sobreseimiento temporal o
definitivo (art. 109 letra f CPP), por tanto, de todas maneras, será parte. Así, se habla de intervinientes
pues son aquellas personas que tienen facultades de actuación en el procedimiento, aún cuando no tengan la calidad de
partes.
Enumeración de los intervinientes (art. 12 CPP)
1) El fiscal
2) El imputado
3) El defensor
4) La víctima
5) El querellante

Este es un orden lógico, en el que son indispensables los tres primeros para que haya un juicio, sin
embargo, si el imputado se defiende solo, se podría considerar exclusivamente al fiscal y al imputado.
Momento en que se adquiere la calidad de interviniente (art. 12 CPP)
1) Desde que realizaren cualquier actuación procesal. Especial relevancia para el querellante, pues la
presentación de la querella será considerada su primera intervención.
2) Desde el momento en que la ley les permitiere ejercer facultades determinadas. Tiene relevancia respecto del
fiscal cuando inicia de oficio una investigación al tomar conocimiento de un hecho que reviste
caracteres de delito, el imputado goza de derechos desde su primera actuación en el
procedimiento, el defensor puede ejercer sus facultades desde actos iniciales investigación y la
víctima en cualquier etapa del procedimiento goza de ciertos derechos.

El que primero adquiere su calidad es la víctima, pues es considerado como tal desde la
realización del hecho delictivo. Así, podemos decir que el orden del art. 12 no es cronológico.
Los intervinientes en la etapa de ejecución
En esta etapa sólo intervienen el fiscal, el imputado, su defensor y el delegado a cargo de la pena
sustitutiva de prestación de servicios en beneficio de la comunidad, de libertad vigilada o de libertad
vigilada intensiva según corresponda, quedando fuera la víctima y el querellante.
A. MINISTERIO PÚBLICO

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Regulado en su LOC y en la CPR, es aquel “organismo autónomo y jerarquizado, encargado de dirigir la
investigación criminal y ejercer, en su caso, la acción penal pública, así como de proteger e informar a las víctimas y a los
testigos”. No ejerce funciones jurisdiccionales, pues no está adscrito a ninguno de los tres poderes
principales, para garantizar su autonomía.
Mecanismos de control
1) Control político: Conoce la CS y puede remover tanto al Fiscal Nacional como a Fiscales
Regionales a solicitud del PdlR, Cámara Diputados o 10 de los miembros de la CS o del Fiscal
Nacional (en el caso de los Fiscales Regionales). Procede por causales de incapacidad, mal
comportamiento, negligencia manifiesta en el ejercicio de sus funciones. Su quórum requiere
del pleno de la CS y la decisión de la mayoría de sus miembros en ejercicio.
2) Control procesal: Mecanismos que controlan al MP por parte del juez como de otros
intervinientes.
3) Control jerárquico: Es aquel control interno que realiza la institución a través de sus jefaturas,
puede ser de oficio, sobre funcionarios de menor jerarquía cuando la autoridad se percata de
irregularidades. El formalizado puede reclamar, y resolverá el Fiscal Regional dentro de 5 días
hábiles. Con este control se logra hacer efectiva tanto la responsabilidad disciplinaria como la
penal y civil de los fiscales.
4) Control ciudadano: La sociedad controla al MP a través de las cuentas públicas que realizan el
Fiscal Nacional como los Regionales.

Principios de organización del Ministerio Público


1) Unidad: Art. 2 inciso 1° LOCMP “el MP realizará sus actuaciones procesales a través de cualquiera de sus
fiscales que, con sujeción a los dispuesto en la ley, intervenga en ellas”. Cada fiscal representa al MP en los
actos procesal que realice con sujeción a la ley. Las funciones del MP como la dirección de la
investigación, ejercicio de la acción penal pública y protección de víctimas y testigos, por regla
general serán ejercidas por fiscales adjuntos, pues el Fiscal Nacional como el Regional tendrán
otras funciones, pudiendo en todo caso intervenir excepcionalmente como fiscales adjuntos en
determinadas hipótesis. Asimismo, los abogados asistentes del fiscal también podrán realizar
actuaciones procesales, salvo que se trate de comparecer a audiencias de juicio oral, al menos
que el fiscal le delegue sus facultades en forma expresa y específica respecto de una actuación.
Sin embargo, cabe agregar que solo podrán actuar ante Juzgados de Garantía con las
limitaciones ya mencionadas.
2) Jerarquía: Cada uno de los eslabones inferiores de la institución debe obediencia a los superiores
hasta llegar al Fiscal Nacional, quien solo puede impartir instrucciones de carácter general. Sin
embargo, los Fiscales Regionales sí pueden dictar instrucciones de carácter particular a los
fiscales adjuntos, de manera que el verdadero titular de la acción penal pública es el Fiscal
Regional.

Funciones del Ministerio Público


a) Dirección exclusiva de la investigación de los delitos

A pesar de que tengan la dirección exclusiva, esto no obsta a que investiguen directamente. En
cuanto a su exclusividad, solo el MP puede investigar con el apoyo de los auxiliares de la
investigación oficial (SML, policía). Sin embargo, los intervinientes siempre pueden solicitarle
determinadas diligencias al fiscal, quien estimará si son o no pertinentes. De rechazarse la solicitud,
se podrá reclamar ante autoridades MP o reiterar petición al juez de garantía una vez cerrada la
investigación.
b) En su caso, ejercer la acción penal pública

Sólo lo hará si una vez finalizada la investigación, concluye que tiene fundamentos serios para
formular la acusación. No obstante, hay casos en que la acusación es formulada por el querellante,
en el caso de forzamiento de la acusación (art. 258 CPP) y cuando el juez de garantía rechaza el

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requerimiento de medida de seguridad del MP. También cuando acusan ambos pero sólo el
querellante persevera en el juicio, cuando el fiscal no subsana oportunamente los vicios formales de
la acusación.
c) Protección e información a las víctimas y testigos

Hay una unidad en la Fiscalía Nacional de “División de atención a víctimas y testigos” y a nivel
regional “Unidades regionales de atención a víctimas y testigos” que cumplen con esta función del
MP.
Principios orientadores de la actividad del Ministerio Público
1) Principio de oficialidad: El Estado tiene la atribución privativa del ejercicio de la acción penal, sin
que sea necesario esperar que se manifieste la víctima o un tercero.
2) Principio de legalidad de la persecución: Una vez que el MP toma conocimiento de un hecho con
caracteres de delito, está obligado a investigas y eventualmente a acusar, sin que pueda
abandonar o suspender el procedimiento (salvo excepciones legales).
3) Principio de objetividad: Deberán adecuar sus actos a un criterio objetivo, velando únicamente por la
aplicación de la ley, investigar de igual forma los hechos que funden la responsabilidad como
aquellos que la eximan o atenúen. Este principio puede entenderse:
a. Como una exigencia de imparcialidad en la investigación: el MP tiene obligación de investigar
todas las hipótesis posibles de investigación para la acusación como la defensa. Se
critica porque no se adecúa al sistema acusatorio con contradictoriedad y porque esta
postura desmejora la posición del imputado, pues se relaja control judicial sobre
diligencias de la investigación.
b. Como una obligación de chequear las hipótesis plausibles planteadas por la defensa: principalmente
se refiere a que no solo se planteen, sino que sean chequeadas, y de que el MP actúe
correctamente ajustándose a la ley y la CPR.
4) Principio de eficiencia: El MP debe manejar los recursos con que cuenta de la mejor manera
posible
5) Principios de transparencia y probidad: Se permitirá y promoverá el conocimiento de los
procedimientos, contenidos y fundamentos de las decisiones que se adopten, asimismo, todos
los fiscales (nacional, regionales y adjuntos) deberán efectuar declaración jurada de intereses y
de patrimonio tras asumir el cargo.
6) Principio de responsabilidad: Se refiere a la responsabilidad disciplinaria, civil y penal de los fiscales
en la investigación y en el ejercicio de la acción penal pública.

Estructura del Ministerio Público


1) Fiscalía Nacional: Ubicada en la Región Metropolitana y a su cabeza está el Fiscal Nacional
asesorado por el Consejo General (compuesto por él y los Fiscales Regionales), luego viene el
Director Ejecutivo Nacional quien organiza y supervisa las unidades administrativas, que son
las siguientes:
a) División de Estudios, Evaluación, Control y Desarrollo de la Gestión
b) División de Contraloría Interna
c) División de Recursos Humanos
d) División de Administración y Finanzas
e) División de Informática
f) División de Atención a las Víctimas y Testigos

Asimismo, se le faculta a la Fiscalía Nacional para crear unidades especializadas con el objeto
de mejorar la investigación de los hechos que llegan a su conocimiento
2) Fiscalías Regionales: Existe una por región a excepción de la Región Metropolitana donde
son 4. A cargo se encuentra el Fiscal Regional, luego el Director Ejecutivo Regional quien
organiza y supervisa las unidades administrativas (las mismas que la Fiscalía Nacional a
excepción de la Contraloría Interna) y por último, los abogados asesores del Fiscal Regional.

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3) Fiscalías Locales: Son unidades operativas de las Regionales, están compuestas por un Fiscal
jefe, fiscales adjuntos, abogados asistentes y un administrador de la fiscalía.

Nombramiento y duración de los fiscales


El Fiscal Nacional dura 8 años y es nombrado por el PdlR, a partir de una quina elaborada por la
CS que debe contar con la aprobación de 2/3 de los senadores en ejercicio. Los Regionales también
duran 8 años y son designados por el Fiscal Nacional, de ternas que elaboran las CA. Los fiscales
adjuntos son nombrados por el Fiscal Nacional, de ternas que elaboran los Regionales y cesan en
su cargo al cumplir 75 años.

LA POLICÍA
Sujeto procesal que actúa como auxiliar del MP en las tareas de investigación, no es interviniente
(MP por regla general dirige y la policía la lleva a cabo). Está integrada por la PDI (investigar),
Carabineros de Chile (preventivo) y Gendarmería (hechos en recintos penales).
Funciones de la policía
1) Funciones vinculadas con la investigación de delitos
i) Funciones ejercidas en cumplimiento de las instrucciones de los fiscales: Deben llevar a cabo las
instrucciones que impartan los fiscales respecto de la investigación. No hay una forma
establecida en que los fiscales deban impartir las órdenes, resultando así, la comunicación
desformalizada. Las actuaciones de la policía serán realizadas bajo dirección y
responsabilidad de los fiscales.

ii) Funciones ejercidas sin orden previa: Cabe mencionar que estas actuaciones llevadas a cabo sin
instrucción del fiscal, si bien van de la mano con la autonomía y la rapidez de acción,
aumenta las posibilidades de que se cometan abusos, entonces se requerirán también de un
mayor control. La policía está autorizada para realizar las siguientes actuaciones sin orden
previa:
a. Prestar auxilio a la víctima
b. Practicar la detención en los casos de flagrancia, conforme a la ley. Dicha persona podrá ser
registrada en cuanto a su vestimenta, equipaje, vehículo y se le podrán incautar
especies relacionadas con el hecho investigado.
c. Resguardar el sitio del suceso. Consiste en evitar que sea alterado mientras no llegue
personal experto designado para ello. De ser un lugar abierto, se procederá al
aislamiento y de ser cerrado, la clausura del mismo. Al llegar personal experto, se
recogerá la evidencia, dando lugar a la “cadena de custodia”, registrando y
almacenándola de forma adecuada.
En cuanto a delitos flagrantes en zonas rurales o difícil acceso, la policía será quien
practique de inmediato las diligencias de la investigación, dando cuenta al fiscal a la
brevedad. Lo anterior es cuestionado por su aparente inconstitucionalidad pues el MP
tiene la dirección exclusiva de la investigación.
d. Identificar a los testigos y consignar las declaraciones que éstos prestaren voluntariamente, tratándose
de los casos a que se alude en las letras b) y c) precedentes. Se deberá llevar a cabo el control de
identidad pues dichas personas pueden suministrar informaciones útiles para la
indagación de un crimen, simple delito o falta (supuesto de procedencia del control de
identidad)
e. Recibir las denuncias del público.
f. Efectuar las demás actuaciones que dispusieren otros cuerpos legales. Por ejemplo, exámen de
alcoholemia
g. Control de identidad (art. 85 CPP). Las policías en determinados casos deberán realizar
controles de identidad, el cual marca un punto intermedio entre el ejercicio de la
libertad ambulatoria y la flagrancia delictiva. Procede en los casos en que la policía
estime que existe algún indicio(Ley N° 20.931) de que la persona controlada:

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i. Hubiere cometido o intentado cometer crimen, simple delito o falta
ii. Se dispusiese a cometerlo
iii. Pudiere suministrar información útil para la indagación de un crimen, simple delito o falta
iv. Cuando la persona se encapuche o emboce para ocultar, dificultar o disimular su identidad
v. Cuando los funcionarios policiales tengan algún antecedente que les
permita inferir que una determinada persona tiene alguna orden de
detención pendiente (agregado por Ley N° 20.931)
De lo anterior, se concluye que el funcionario policial deberá tener un indicio para
proceder a realizar el control, antes de la modificación de la Ley Agenda Corta del
2016, se exigían indicios (plural). Se critica por depender de la subjetividad del policía a
la hora de realizar el control de identidad, pareciéndose a la detención por sospecha.
Sin embargo, es posible palear lo anterior bajo la objetividad que implica que proceda
respecto de casos fundados, refiriéndose así a hechos objetivos verificables. En cuanto
a las faltas, la persona puede ser retenida, atentando así contra si libertad pues dichos
delitos no se castigan con penas privativas de libertad y de sancionarlos solo una vez
que fue consumada.
Otra modificación de la Ley N° 20.931 en esta materia es que funcionarios policiales
podrán utilizar medios tecnológicos de identificación para concluir con el
procedimiento.
Características del control de identidad
• Solo puede ser practicado por Carabineros o la PDI.
• Debe practicarse en el lugar donde la persona se encuentra.
• La identificación debe realizarse por medio de documentos expedidos por la autoridad
pública (C.I., pasaporte, licencia conducir).
• Se puede conducir a la persona controlada a la unidad policial más cercana cuando
haya sido imposible acreditar su identidad, o cuando éste se niegue. En dicha unidad se
podrá acreditar la identidad por cualquier forma (huella digital).
• La policía está autorizada para registrar vestimentas, equipajes y vehículos sin
necesidad de nuevos indicios, pudiendo además cotejar con existencia de órdenes de
detención pendientes.
• Más que una detención, es un procedimiento de investigación, de manera que una vez
finalizado, debe ser puesto en libertad, salvo flagrancia delictiva.
• Si la persona se niega a acreditar su identidad o proporciona una falsa, la policía puede
detenerla por la falta de usurpación de identidad.
• Este procedimiento sólo puede realizarse dentro de ocho horas.
• Puede realizarse a cualquier persona, incluso respecto de quienes gozan de algún
estatuto procesal especial (fuero parlamentario, querella de capítulos)

Aspectos relevantes de este procedimiento


• La privación de libertad momentánea por control de identidad no se transforma automáticamente en
detención, pues la detención procede respecto de otros supuestos (flagrancia delictiva y
orden judicial) pero puede llegar a convertirse en detención en los siguientes casos:
• Que haya una orden de detención pendiente
• Con ocasión del registro se encuentren cosas que son constitutivas de delito
• Se niegue a revelar su identidad o proporcione una falsa
• El control de identidad que se ejecuta sin respetar los supuestos o las formalidades que la ley prevé
constituye una afectación de garantías fundamentales, lo cual es controlable a través del amparo
especial ante el juez de garantía (art. 95 CPP). Dicho registro será considerado
antijurídico, por lo que la flagrancia detectada nunca debería haberse percibido, de
manera que la detención será ilegal y la evidencia constituirá prueba ilícita.

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• Mientras la persona esté siendo sometida a un control de identidad, existe la duda de si se puede o no
realizar diligencias investigativas que apunten a fines distintos de la identificación. Es discutible
pues el control de identidad solo busca determinar frente a qué persona se está, por lo
que serían improcedentes dichas diligencias, sin embargo, la jurisprudencia ha aceptado
diligencias de investigación, pues si no se puede investigar, dicho control no tendría
mucho sentido, lo que puede considerarse inconstitucional, ya que dirigir la
investigación es una facultad exclusiva del MP.
• Hay un control de identidad especial respecto de espectáculos deportivos que tiene un ámbito territorial
y temporal determinado, en el que se podrán realizar controles preventivos en dichos
recintos y sus inmediaciones, desde una hora antes que se abran las puertas, durante la
realización y hasta 3 horas después del término.
• Un segundo control de identidad especial es el control preventivo de identidad, entró en vigencia
con la “Ley Agenda Corta” (Ley N° 20.931) y procede respecto de cualquier persona
mayor de edad cuya identidad se quiera acreditar, que se encuentre en recinto público
o privado con acceso público y tendrá un duración de una hora como máximo. Según
el profesor, dicho control es abiertamente inconstitucional.

2) Funciones vinculadas con el cumplimiento de órdenes judiciales


Deberán cumplir con las órdenes que les dirigieren los jueces para la tramitación del
procedimiento como lo son las órdenes de detención.

Registro de actuaciones policiales


Todas las actuaciones realizadas por la policía deben constar en un registro, pues así sirve de
control de la actividad de la policía, para lo cual debe cumplir con las formalidades legales, ya
que de no ser así, el costo deberá soportarlo el MP. Estos registros no pueden reemplazar las
declaraciones de la policía en juicio oral, pues deberá acudir como testigo, separándose así del
registro de las diligencias, que en ningún caso podrá ser presentado como prueba documental.

Registro de las actuaciones del Ministerio Público


Se debe dejar constancia por cualquier medio que permita garantizar la fidelidad e integridad de
la información de las actuaciones que realice el MP.

B. EL IMPUTADO
Aquella persona natural a quien se le atribuye participación en un hecho punible. (exc. Lavado activos,
cohecho, financiamiento del terrorismo). Art. 7

Sentido de la calidad del imputado


a) En el sistema inquisitivo: Era considerado un objeto de la persecución penal, constituía una
relevante fuente de información para la averiguación de la verdad material. (ej. Declaración del
inculpado y confesión como medio de prueba). El código de procedimiento penal moderó
esto estableciendo que la confesión solo era útil para acreditar la participación, no el hecho
punible, y que no procedía la coacción para obtener la confesión (sin embargo no reconoció el
derecho a guardar silencio).
b) En el sistema acusatorio actual: La calidad de imputado se adquiere para acceder a un conjunto
de derechos que buscan evitar arbitrariedades y abusos en la persecución penal. El imputado
no es un objeto, es un sujeto procesal. La calidad de imputado no es aflictiva en si misma, ya
que no conlleva la afectación a sus derechos.
Adquisición de la calidad de imputado
En el momento de la primera actuación del procedimiento dirigido en su contra. La primera actuación
se entiende como cualquiera diligencia o gestión, sea de investigación, de carácter cautelar o de otra
especie, que se realizare por o ante un tribunal con competencia en lo criminal, MP o policía, en la que
se atribuyere a una persona responsabilidad en un hecho punible (art. 7 inc. 1 y 2).

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Término de la calidad de imputado
Hasta la completa ejecución de la sentencia (aunque algunos derechos pueden ejercerse incluso después
de que se dicte esta).

EL DERECHO DE DEFENSA
Es la facultad del imputado de intervenir en el proceso que se sigue en su contra, para oponerse a la
pretensión punitiva, y eventualmente a la de resarcimiento (art. 19nº3 de la CPR y 8, 93 y 94 del CPP).

Titular del derecho de defensa


Es el imputado no su defensor. Y puede incluso defenderse solo si ello no perjudica la eficiencia de la
defensa (art. 102). Con todo, esto último es discutible pues contraviene el art. 19 nº 3 inc. 4 de la CPR
que establece el derecho “irrenunciable” a ser asistido por un abogado defensor.

Derecho a defensa material (art. 8 inc. 2)→ Significa el ejercicio de los derechos y garantías que la
Constitución y las leyes confieren al imputado durante el procedimiento. “El imputado tendrá derecho
a formular los planteamientos y alegaciones que considerare oportunos e intervenir en todas las
actuaciones judiciales, y en las demás del procedimiento , salvo excepciones”.
Casos en los que el imputado no se le permite intervenir:
• Facultad del imputado de asistir a diligencias de investigación (art. 184). Si el fiscal no lo
considera útil, no deberá asistir.
• Practicar diligencias de investigación , sin conocimiento del imputado, autorizadas por el JG
(236 CPP).
• El tribunal puede disponer que el imputado abandone la sala donde se lleva a cabo el juicio
oral, cuando su comportamiento perturbare el orden (285 CPP).
Derecho a defensa técnica (art. 8 inc.1)→ Derecho a ser defendido por un letrado.
“El imputado tendrá derecho a ser defendido por un letrado desde la primera actuación del
procedimiento dirigido en su contra”.
Sentido del derecho de defensa: Condición de legitimidad del proceso penal (garantía del debido
proceso)

Proyecciones del derecho de defensa


a) Derechos de información (art. 14nº3 letra a PIDCP, art. 8 nº2 letra b PSJCR y art 92 inc. 2 letra
a CPP)
La información es un presupuesto fundamental, pues este permite una buena preparación de la defensa.
Y ésta debe recaer sobre: Los hechos que se le atribuyen y los derechos que le asisten.
1. Hechos que se le imputan: Existen varios momentos.
• Desde la primera actuación del procedimiento que se sigue en su contra , el imputado tiene
derecho a conocer el contenido de la investigación. Se exceptúan los casos en que se hubiere
decretado secreto de la investigación por el fiscal (no puede exceder 40 días). Como es
evidente, en el caso de secreto se priva al imputado de su derecho de información, por tanto, la
solución que damos es que aquellas piezas concretas de la investigación que contienen el hecho
investigado no podrían quedar cubiertas por el secreto (ej. Parte policial o la querella). Aunque
existen piezas que la misma ley prohíbe que sean cubiertas por secreto (declaración o actuación
del imputado, actuaciones en que participe el tribunal y los informes de peritos , respecto del
imputado o su defensor).
Con todo, se puede recurrir al JG para que limite el secreto (182 inc. 4 CPP) (excepciones:
delitos de drogas –cuyo plazo máximo es de 120 días ampliables por 60 más con autorización
del JG- y delitos terroristas – si hay riesgo para la seguridad de testigos o peritos, ciertas
actuaciones son en secreto hasta por 6 meses).

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• Al privar de libertad al imputado: Si la detención es por delito fragante se le informa de manera
verbal, si es por orden judicial se informa además a través de la intimación de la orden de
detención (exhibición) (art. 94 letra a y 135 CPP).
Este derecho resulta aplicable también a otros supuestos de privación de libertad.
• En el momento en que el imputado decidiere declarar por primera vez ante el Ministerio
Público: Esto no sucede mucho pues el imputado hace valer su derecho a guardar silencio. Si
declara ante la policía puede hacerlo sin su defensor si el fiscal lo autoriza.
• En el momento en que se formaliza la investigación.
• En la acusación: Dentro del contenido de la acusación se efectúa una relación circunstanciada
de los hechos atribuidos al imputado.
• Otros momentos:
o En la audiencia de preparación del juicio oral (el juez hace una exposición sintética de
las presentaciones que hubieren realizado los intervinientes), en el juicio oral (el juez
señala la acusación) y en el procedimiento abreviado (el imputado debe aceptar los
hechos de la acusación y para ello debe conocerlos).

2. Derechos que le asisten:


Esto interesa en el caso de los imputados privados de libertad. En la práctica , en las unidades policiales
se cuenta con formularios con información detallada sobre los derechos de los imputados, y se pide a
estos que los firmen (art. 135, 136 y 137 CPP).

1. Derecho de intervención en el procedimiento o “derecho a ser oído”


La regla general es que su intervención sea personal. Sin embargo, en la practica es usual que se haga
acompañar de un defensor. La excepción a esta intervención personal se da cuando el imputado se
encuentra en un estado de enajenación mental, donde sus derechos son ejercidos por un curador ad
litem (art. 459 CPP).

Proyecciones de este derecho:


• Derecho a solicitar al fiscal diligencias de descargo (desde el punto de vista del fiscal es una
proyección del principio de objetividad). Ante la solicitud del imputado de practicar una
determinada diligencia, el fiscal determinará si la practica o no, dependiendo de si la considera
útil para el esclarecimiento de los hechos (si el fiscal se negare se puede reclamar ante las
autoridades del MP o JG) (art. 93 inc.2 letra c) y 183 CPP)
• Derecho a declarar (98 inc1 CPP): Se distingue si el imputado declara ante:
o La policía (91 CPP): La policía solo puede interrogar autónomamente (sin orden del
fiscal) cuando el defensor se encuentra presente. Si a pesar de que el defensor no está
presente y el imputado quiere declarar, el fiscal tiene que autorizar la declaración (esta
declaración tiene el mismo valor que las realizadas ante el fiscal) (332 CPP).
o El Ministerio Público (194 CPP): Ante el fiscal o el abogado asistente del fiscal.
o Juez de Garantía (93 y 98 CPP) : Audiencia en la que se cita a todos los intervinientes y
puede tener lugar en cualquier parte del procedimiento. En la práctica, sin embargo, se
lleva a cabo de inmediato y solo frente al defensor y el fiscal. En esta la declaración no
se le toma juramento, solo se le “exhorta a decir la verdad”, por lo que no comete
delito si miente.
o Declaración en el juicio oral: Esta se presta luego de los alegatos de apertura (aunque
puede ser después). Luego es interrogado por los demás intervinientes.
• Derecho a solicitar que se archive la investigación: Por ejemplo, reiterar una petición de
diligencias (art. 93 inc.2 letra e CPP).
• Derecho a conocer el contenido de la investigación: Para los intervinientes la investigación es
pública, al menos que se declare su secreto. El imputado y los demás intervinientes podrán

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examinar los registros y documentos de la investigación fiscal y policial (pero solo podrán
obtener copias respecto de los registros y documentos de la investigación fiscal, los dela
investigación policial solo se pueden examinar).
• Derecho a solicitar sobreseimiento definitivo de la causa: Asimismo, el imputado tiene el
derecho de recurrir contra la resolución que lo rechace. Sin embargo, no está claro cual es el
medio de impugnación para hacerlo.
• Derecho a que se le otorgue tiempo y medios adecuados para preparar su defensa (art. 8 nº2
letra c PSJCR). No se encuentra este derecho en el PCP, pero hay varias disposiciones que
implícitamente se fundan en él como las de los art. 227, 228, 260, 262 y 281.
• Derecho a interrogar a testigos de cargo y presentar testigos de descargo (art. 14nº3 letra e
PIDCP y art. 8nº2 letra f PSJCR). Este derecho no se encuentra consagrado en el CPP. Se
refiere a la facultad de controlar la prueba del acusador y presentar la prueba propia.
• Derecho a recurrir del fallo ante un tribunal superior (art. 8 nº2 letra h PSJCR). En el CPP
existen varias disposiciones que se fundan en este derecho:
o Recurso de nulidad (sentencias del TJOP) art. 372.
o Recurso de nulidad (sentencias JG en juicio simplificado) art. 399.
o Recurso de nulidad (sentencias JG delito de acción privada) art. 405.
o Recurso de apelación (Sentencias JG procedimiento abreviado) art. 414.

2. Derechos que imponen un deber de abstención para el órgano persecutor y el tribunal.


• Derecho a guardar silencio (art. 19 nº7 letra f CPR, art. 8 nº2 letra g PSJCR y art. 93 letra g
CPP). Se basa en el aforismo “nadie puede acusarse a si mismo”, de esto se desprende que el
silencio no puede ser valorado en forma perjudicial para el imputado. Por ello debe
informársele que “el ejercicio de este derecho no le ocasionará ninguna consecuencia adversa”.
Correlativamente, supone la prohibición de todo método que coarte la libertad del imputado
para declarar, no obstante, si se permite que se ofrezcan ventajas penales y procesales que la ley
contemple.
• Derecho a no ser juzgado en ausencia (art. 93 letra i CPP). Se relaciona con la rebeldía (art. 99 y
100 CPP), el principal efecto de la rebeldía es que las resoluciones dictadas por el tribunal se
entienden notificadas al imputado desde que se pronuncian. Con todo, para determinar si el
procedimiento se suspende o no es necesario distinguir la etapa en la que se encuentre: si la
declaración de rebeldía se efectúa durante la investigación no se suspende, en cambio, si se
produce en la etapa del juicio oral, el procedimiento se sobresee temporalmente hasta que el
imputado comparezca o sea habido.
• Derecho a que exista una correlación entre la imputación y el fallo (principio de congruencia).
Exige que exista correlación entre la sentencia condenatoria y la acusación y que exista
correlación entre la acusación y la formalización de la investigación.
• Prohibición de reformatio in peius (art. 360 inc. 3 CPP).

3. DERECHO A LA DEFENSA TÉCNICA.


C. EL DEFENSOR
Regulación:
- Art. 19 n°3 inc. 2, 3 y 4 CPR, relativo al derecho de toda persona a una defensa jurídica, en la
forma que la ley señale.
- Art. 14 n°3 d) PIDCP: derecho a defenderse por sí o por un defensor.
- Art. 8 n°2 e) PSJCR: derecho irrenunciable a ser asistido por un defensor, si no lo hiciere por sí
mismo.
- Art. 8 inc. 1 y 102 a 107 CPP: derecho a ser defendido por un letrado (defensor).
- Ley 19.718, crea la defensoría penal pública.
Este derecho se tiene desde la primera actuación y hasta la ejecución de la sentencia.

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El imputado tiene el derecho de elegir quien lo defienda (“derecho a designar un defensor de su
confianza”). Tiene la posibilidad de que sea más de un defensor.
Si son varios imputados tienen la facultad de designar un defensor común. Pero podrán designar su
propio defensor y es obligatorio cuando se trata de defensas incompatibles (art. 105 CPP)

Defensa proporcionada por el Estado


De la regulación señalada se infiere que el Estado tiene el deber de proporcionar asistencia jurídica
gratuita a quien no pueda costearse un defensor, por lo que la defensa penal pública opera de manera
subsidiaria. Para esto se creó la Defensoría Penal Pública (Ley 19.718), y es aquel servicio público que
presta defensa a todo imputado que carece de abogado defensor, sea porque no puede tenerlo o porque no quiere. La regla
general es que el servicio de defensa sea gratuito; excepcionalmente cobra a quienes puedan pagar por el
(arancel). Así, se trata de no desincentivar la contratación de defensores particulares.

La Defensoría Penal Pública (ley 19.718)


Creada el 2001 para proporcionar defensa penal a los imputados o acusados que carezcan de abogado,
asegurando, el derecho a defensa técnica y el debido proceso en el juicio penal.
Concepto: Art. 1 la define como: “un servicio público, descentralizado funcionalmente y
desconcentrado territorialmente […], dotado de personalidad jurídica y patrimonio propio, sometido a
la supervigilancia del Presidente de la República, a través del Ministerio de la Justicia”. Se hace evidente
la diferencia, desde el punto de vista de la autonomía, con el Ministerio Público, ya que la DPP está
sometida a la vigilancia del Ejecutivo, por la necesidad de garantizar la alta calidad del servicio que
presta. El problema es que se corre el riesgo que tal servicio público resulte permeable a presiones o
favores políticos.
Misión de la DPP (art 2): proporcionar defensa penal a los imputados o acusados por un crimen, simple
delito o falta que sea de competencia de un JG o de un TJOP y de la CA o CS y que carezcan de
abogado.

Organización (art 4):


- A nivel nacional:
è Defensoría Nacional. Defensor nacional nombrado por el PdlR. Asiento en Santiago.
è Consejo de licitaciones de la defensa penal pública. Cuerpo colegiado. Funciones en r/c el
sistema de licitaciones de la defensa penal pública que la ley encomienda (art. 4 y 5).
è Unidades administrativas (art 8).

- A nivel regional:
è Defensorías regionales (art. 16 y ss.). Cada una a cargo de un defensor regional, nombrado
por el defensor nacional, previo concurso público. 5 años en el cargo, pudiendo ser
reelegido. Existe una en cada región, salvo en la RM que hay 2.
è Comités de adjudicación regionales. Funciones vinculadas con la licitación de la defensa
penal pública, llevando, en la práctica, los lineamientos que fija el Consejo de licitaciones.

- A nivel local:
è Defensorías locales (art. 23). Defensores locales. Si hay 2 o más, uno de ellos será el jefe.
è Existen los prestadores de defensa por licitación. En rigor no son de la DPP.
Momento en que se adquiere la calidad de defensor
Entre imputado y defensor, media el vínculo propio de todo mandato judicial. Para saber el momento
en que adquiere la calidad de defensor es necesario distinguir qué defensor es:
a. Defensor particular. Adquiere tal calidad desde el momento en que se confiere patrocinio y
poder según las reglas generales. En la práctica, es mediante un escrito que se presenta al
tribunal y es autorizado por el jefe de la unidad de administración de causas, y debe tener lugar
en la primera audiencia a la que el imputado sea citado.

29
Las formas de constitución del mandato judicial del art. 6 CPC son aplicables en materia pena,
pero solo en parte. La escritura pública es plenamente aplicable. El acta extendida ante juez de
letras o juez árbitro no lo es. Y la declaración escrita del mandante, autorizada por el secretario
del tribunal que esté conociendo de la causa es aplicable, pero solo en los tribunales superiores
con competencia penal (CA y CS).

b. Defensor público (art. 102 CPP). Hay que diferenciar:


- Defensor local: Puede asumir la defensa desde la primera actuación en el procedimiento que se
dirige contra el imputado, sin necesidad de constituir mandato. Debe hacerlo cada vez que le
falte abogado al imputado, sin perjuicio que pueda elegir otro de su confianza. En la práctica,
se determinan por un sistema de turnos para los detenidos o por designación del tribunal, para
que concurran en la primera audiencia, donde el imputado es consultado si acepta o no la
designación.

- Defensor licitado: Elegido por el imputado de una nómina (confeccionada por cada defensoría
regional). El defensor designado tiene patrocinio y poder suficiente por el solo ministerio de la
ley y tiene las facultades ordinarias del mandato judicial. Es una forma especial de constituir
mandato judicial, adicional a la del art. 6 CPC.
Momento en que termina la calidad de defensor
Deben aplicarse las reglas del mandato judicial y del mandato en general. Sin embargo, el CPP alude a la
renuncia y abandono de la defensa.
- Renuncia del defensor: El tribunal debe designar de oficio un defensor penal público que
asuma la defensa, a menos que el imputado designe uno de su confianza, caso en el cual, tan
pronto éste acepte el cargo, cesan las funciones del designado por el tribunal (art. 106).
- Abandono: Hay diversas actuaciones en el CPP en que debe estar presente el defensor. Entre
otras, en las siguientes audiencias: (1) A. de formalización de la investigación; (2) A. en la que
se resuelve la solicitud de prisión preventiva; (3) A. en la que se resuelve la solicitud de otras
medidas cautelares personales; (4) A. en que se resuelve la solicitud de suspensión condicional
del procedimiento; (5) A. de preparación del juicio oral; (6) A. de juicio oral. Si el defensor se
ausenta pueden producirse efectos importantes como la eventual declaración de nulidad
procesal (art. 103), la designación de un defensor público (remedia el vicio de nulidad) y la
imposición de sanciones al abogado defensor.
En todos estos casos de ausencia injustificada se entenderá un abandono de la defensa.
Sin embargo, el art. 106 inc. 2 CPP alude a “cualquier situación de abandono de hecho de la
defensa”, permite incluir los casos en que su negligencia o ignorancia sobre aspectos de
derecho penal sustantivo o derecho procesal penal, provoquen que el imputado quede en
situación material de indefensión.
Del art. 102 se desprende que si el tribunal puede impedir que el imputado se defienda
personalmente cuando ello perjudique la eficacia de la defensa, del mismo modo puede impedir
que un defensor continúe asumiéndola cuando ello provoque el mismo efecto, declarando el
abandono de la defensa.

Derechos y facultades del defensor


El defensor puede ejercer todos los derechos que la ley reconoce al imputado, salvo aquellos que son de
ejercicio personal y exclusivo de éste (art. 104 CPP). No se señalan en la ley cuales son tales derechos
exclusivos. La doctrina dice que son: el derecho de declarar judicialmente (art 98), el de consentir en la
realización de exámenes corporales (art 197), el de aceptar una suspensión condicional del
procedimiento (art. 237), el de celebrar un acuerdo reparatorio (art 241), el de admitir responsabilidad
en un procedimiento simplificado (art. 395), el de aceptar un procedimiento abreviado (art 406), etc. Así
también sucede con el derecho de celebrar convenciones probatorias, ya que al acordar que ciertos
hechos se dan por acreditados y no pueden ser discutidos en juicio oral, el imputado podría estar

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realizando “confesiones” sobre hechos propios, por eso en este caso la ley alude al imputado y no al
defensor (art 275 CPP).

D. LA VICTIMA
El rol de victima ha sufrido importantes cambios en la historia:
a. Primitivos sistemas acusatorios. Era parte necesaria. No había persecución penal pública.
b. Sistemas inquisitivos. “Expropiación” de las facultades de la víctima, se estableció la actividad
persecutora de oficio. Primaba el interés del Estado en aplicación de la pena, sobre el interés de
reparar el daño causado a la víctima.
c. Código de procedimiento penal de 1906. La víctima podía querellarse y el querellante era parte
acusadora, pero la víctima por sí no tenía derechos expresos en la ley.
d. En la actualidad. Es un evidente objeto político criminal, promover y respetar los intereses
concretos de la víctima. Se considera como un interviniente más.
Concepto
La víctima es “el ofendido por el delito” (art. 108 CPP). Con dicha expresión la ley pretende aludir al
titular del bien jurídico afectado, que no ha de confundirse con el perjudicado por el delito (Relación
con el art. 93 n°5 CPP (“ofendido” se refiere al titular del bien jurídico atacado). Otra opinión, que
sustenta el Ministerio Público, es que la definición legal de víctima es lo suficientemente amplia como
para entender incluidos también los sujetos pasivos de la acción. Por ejemplo en el caso de la muerte
del ofendido, son víctimas otras personas: (1) al cónyuge y los hijos; (2) a los ascendientes; (3) al
conviviente; (4) a los hermanos; (5) a los hermanos; (6) al adoptado o adoptante). Es un orden de
prelación. (Art. 108 inc. 2 y 3 CPP).

Derechos de la víctima (art. 109 CPP, listado de derechos de la víctima).


a. Derecho a solicitar medidas de protección.
Estas medidas normalmente se piden al fiscal, quien puede operar de distintas formas:
1. A través de la policía, dándole instrucciones para que proteja a la víctima.
2. Derivando a la víctima a la Unidad Regional de Atención a Víctimas y Testigos de la Fiscalía
Regional del Ministerio Público, para que se le brinde protección.
3. Solicitando al juez o al tribunal una medida para proteger a la víctima. Por ejemplo una medida
cautelar personal.
4. En su propia actividad. Por ejemplo, decretando el secreto de piezas de la investigación.

b. Derecho a presentar la querella


La víctima tiene por sí sola la calidad de interviniente, y no necesita querellarse para ejercer sus
derechos. Pero si presenta querella puede asumir un rol más activo en el procedimiento. Sirve, por
ejemplo, para: (1) el forzamiento de la acusación (art. 248 CPP); (2) solicitar prisión preventiva (art. 140
CPP); (3) para presentar acusación particular o adherir a la acusación del fiscal (art. 261 a) CPP). ¿Habrá
cosas que solo la víctima como querellante puede obtener? Sí, por ejemplo la acción civil
indemnizatoria, a condición de que la deduzca contra la persona del imputado (art. 261 CPP).
c. Derecho a ejercer acciones de carácter civil.
La victima tiene la posibilidad de perseguir la responsabilidad civil. Discusión sobre la necesidad de
querellarse con tal finalidad (Art. 261 CPP). En directa relación se encuentran las medidas cautelares
reales, que permiten asegurar el resultado de la acción civil y que la victima puede solicitar (art. 157
CPP).
d. Derecho a ser oída por el fiscal, antes de que éste pidiere o se resolviere la
suspensión o terminación anticipada del procedimiento.

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De aquí se desprende la necesidad de oír a la víctima antes de que se decrete el archivo provisional de la
investigación (art. 167), el ppio. de oportunidad (art. 170), la suspensión condicional del procedimiento
(art. 237 y ss.) y de que se solicite el sobreseimiento de la causa (art. 248 a)).
e. Derecho a ser oída por el tribunal antes de pronunciarse acerca del
sobreseimiento u otra resolución que ponga término a la causa.
Dentro del juicio oral se puede generar un conflicto entre este derecho de la víctima y el derecho del
acusado de pronunciar la última palabra antes de cerrado el debate. En la práctica se da preferencia al
derecho de este último interviniente.
f. Derecho a impugnar el sobreseimiento o la sentencia la sentencia absolutoria.
Esta impugnación no está condicionada al hecho de que la víctima efectivamente hubiere intervenido
en el procedimiento.
• Este listado no es taxativo. (art. 109). Otras disposiciones en el código, por ejemplo: art. 155,
182, 183, 237, 239 y 241 CPP.
E. EL QUERELLANTE
a. Concepto tradicional. Es la persona que manifiesta su voluntad de figurar como parte
acusadora en proceso penal, mediante la presentación de un escrito de querella.
b. Según el CPP (Art. 111 CPP). Es posible definir al querellante como la víctima, su
representante legal o su heredero testamentario, o alguna de las personas que se mencionan en
la indicada disposición, que, una vez que presentan un escrito de querella, puedan ejercer las
facultades que la ley establece.
La victima tiene más derechos que el querellante no víctima.
El tiempo para deducir la querella es hasta el cierre de le investigación. Se discute si cerrada la
investigación, en ciertos casos podrían ciertas personas querellarse (art. 257 CPP). El profesor cree que
no, basado en los arts. 112 inc 1 y 113 letra e) que menciona el escrito de querella, y no tendría sentido
si fuera una vez reabierta la investigación.

Quienes pueden ser querellantes


Antes podúa querellarse cualquier persona. Hoy, el art. 111 CPP establece una acción popular bastante
limitada, al disponer que la querella podrá ser interpuesta por la víctima, su representante legal o su
heredero testamentario.
También se podrá querellar cualquier persona capaz de parecer en juicio domiciliada en la provincia,
respecto de hechos punibles cometidos en la misma que constituyeren delitos terroristas, o delitos
cometidos por un funcionario público que afectaren derechos de las personas garantizados por la
Constitución o contra la probidad pública.
Los órganos y servicios públicos sólo podrán interponer querella cuando sus respectivas leyes
orgánicas les otorguen expresamente las potestades correspondientes.

* En algunas leyes especiales hay reglas que amplían el ámbito de personas que pueden deducir querella.
Por ejemplo, la ley 18.314, sobre conductas terroristas.

Facultades del querellante (no es un listado taxativo):


1. Intervenir en la investigación, aportando evidencias o solicitando diligencias (art. 183).
2. Solicitar medidas cautelares (art. 140 y 155).
3. Oponerse a la suspensión condicional del procedimiento y apelar de la resolución que lo decrete (art.
237 inc. 5 y 8).
4. Forzar la acusación (art. 258).
5. Adherirse a la acusación del fiscal o presentar acusación particular (art. 261 letra a) CPP).
6. Presentar demanda civil (art. 261 letra d)). En relación con el art. 59 y 60 CPP. Cuando procediere,
porque no siempre procede. Solo en el caso que el querellante sea la víctima.

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7. Conciliar con el imputado en la audiencia de preparación del juicio oral. Art. 273 CPP.
8. Intervenir activamente en las audiencias de preparación del juicio oral y de juicio oral.
9. Impugnar resoluciones.

CAPÍTULO IV
EL OBJETO DEL PROCESO PENAL Y LAS PRETENSIONES
EL OBJETO DEL PROCESO PENAL
Concepto
Lo que permite conectar a todos los actos del proceso penal es precisamente el objeto del proceso
penal, que puede definirse como un hecho hipotético que se imputa a alguien y del cual se espera
una consecuencia penal. Pueden haber procesos con objeto múltiple, ya sea por una conexión
subjetiva (cuando a un mismo sujeto se le atribuyen varios hechos punibles) u objetiva (cuando un
único hecho se atribuye a varios imputados).
Aplicaciones del concepto à Su importancia se analiza en base a distintos aspectos:
a) Principio de congruencia procesal

Precisa los límites del conocimiento del tribunal y la sentencia, de manera que el tribunal no puede
excederse de los términos en que fue formulada la acusación del MP. Es una garantía para el imputado
en cuanto a que el objeto del proceso no pueda ser modificado. Éste se va construyendo a medida que
avanza la investigación. Hay dos manifestaciones de este principio:

1. Debe haber una vinculación entre la acusación y la formalización (art 259 inc final CPP): Al
aparecer nuevos antecedentes respecto del delito contemplado en la formalización (recordar
que la formalización es siempre provisoria) que califiquen al delito de otra forma, se deberá
llevar a cabo una reformalización de la investigación. Al cerrarse la investigación (última
formalización), el objeto del proceso quedará fijado y no podrá ser modificado, salvo que sea
en beneficio del imputado.

2. Debe haber una vinculación entre la acusación y la sentencia (art 341 CPP): La sentencia
condenatoria no podrá exceder el contenido de la acusación. Sin embargo, cabe hacer una
precisión, los hechos no quedan definitivamente fijados con la acusación sino con la dictación
del auto de apertura. Esto es importante porque en la audiencia preparatoria de juicio oral se
pueden hacer correcciones formales a la acusación del MP, de manera que puede tener
diferencias con la acusación contenida en el auto de apertura.

En derecho comparado existen dos modelos relativos a la posibilidad de modificar una acusación para
efectos de congruencia con la sentencia:
i) Modelo de acusación flexible (Alemania, Italia y España): Permite modificar parcialmente
la acusación ya formulada, actualizándola a los resultados probatorios.
ii) Modelo de acusación rígido o preclusivo (Chile): La acusación sólo puede formularse en
una única oportunidad, sin posibilidad de modificarla con posterioridad para ajustarla a la
prueba rendida.
El tribunal solo podrá dar una calificación jurídica distinta a la acusación original respecto de la
concurrencia de causales modificatorias de responsabilidad penal, específicamente agravantes, bajo la
condición de que durante la audiencia el tribunal haya advertido a los participantes sobre esta
posibilidad (art 341 inc 2° CPP). Si el tribunal, una vez finalizado el debate, se percata de la posibilidad
de realizar una calificación jurídica distinta de la contenida en la acusación, que no haya sido examinada
en el debate, deberá reabrirlo para que los intervinientes lo discutan (art 341 inc 3° CPP) à en la
práctica ocurre tanto para calificaciones jurídicas que puedan favorecer como perjudicar al imputado.
La calificación jurídica no forma parte del objeto del proceso, pero la ley resguarda al imputado para
evitar que se afecte su derecho a defensa.

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Si se vulnera la exigencia de congruencia, será procedente el recurso de nulidad, art 373 letra a CPP si lo
infringe el MP, y art 374 letra f CPP, si lo infringe el tribunal.

b) Sirve para determinar litispendencia y cosa juzgada


La defensa podrá interponer excepción de cosa juzgada en la audiencia de preparación de juicio oral (o
antes), como también en el juicio oral. Si el MP al cerrar la investigación, se percata de que existe esta
circunstancia, puede solicitar el sobreseimiento definitivo. Respecto de la litispendencia, se debe hacer
valer en la audiencia de preparación de juicio oral (o antes).

c) Influye en la apreciación de la pertinencia de la prueba


En la audiencia de preparación de juicio oral se podrá excluir la prueba ofrecida por los intervinientes
para que no sea rendida en el juicio oral. Una de las causas de lo anterior es la impertinencia de la
prueba que se pretende rendir, por acreditar hechos que no guardan relación sustancial con la materia
que se someterá a conocimiento del TJOP. El objeto del proceso determinar la pertinencia o
impertinencia de la prueba.
El objeto accesorio: la cuestión civil
En Chile se permite ejercer la acción civil en el proceso penal, sin embargo, no podrá considerarse
como relevante para la determinación del objeto del proceso, salvo que se agreguen consideraciones
relativas al daño sufrido por la víctima u otros aspectos necesarios para el adecuado ejercicio de la
acción civil.

LAS PRETENSIONES EN EL PROCESO PENAL


El objeto del proceso penal es distinto al concepto de pretensión, sin embargo están relacionados.
Definición
La pretensión es una declaración de voluntad en la que se solicita al titular del órgano
jurisdiccional una actuación en contra de una persona distinta del autor de dicha declaración.
Clasificación
1) Pretensión punitiva: es una declaración de voluntad fundada en los hechos objeto del proceso,
por la que se solicita al tribunal la aplicación de una pena al responsable del delito, o de una
medida de seguridad al sujeto criminalmente peligroso. Esta pretensión siempre está
presente en el juicio penal, pues no hay juicio sin acusación y no hay acusación sin pretensión
punitiva, independiente de quien la formule (art 258 CPP). En cambio, si puede haber proceso
penal sin acusación como en el caso que hay una querella y luego de investigar se sobresee
porque no hay delito. (no proceso penal, pues no en todo proceso penal se formula acusación,
pero sí en todo juicio) Contiene los siguientes elementos:
a. Sujetos: Sujeto activo à aquel que realiza la declaración de voluntad
Sujeto pasivo (imputado) à aquel contra quien se realiza la declaración de voluntad
Destinatario de la pretensión à el tribunal
b. Objeto: la pena o medida de seguridad concreta que se solicita
c. Fundamento: el hecho punible (el objeto del proceso)

2) Pretensión de resarcimiento: es una declaración de voluntad por la que se pide al tribunal la


restitución de la cosa objeto del delito o la indemnización de perjuicios en contra del
responsable civil. Es contingente al proceso penal, por tanto no es necesario que esté presente.
3) Pretensión prejudicial: Es una declaración de voluntad emitida por uno de los intervinientes,
por la que se solicita a un tribunal que se pronuncie sobre determinadas cuestiones civiles, con
el fin de contribuir a la pretensión punitiva u obstaculizarla. Hay dos clases:
a. No devolutiva: Aquella que le corresponde conocer al propio tribunal penal
b. Devolutiva: Aquella que conoce un tribunal distinto al penal, caso en el cual el tribunal
penal tiene que suspender el procedimiento hasta que la cuestión se resuelva. Se
materializa con la dictación del sobreseimiento temporal.

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Para determinar si una cuestión civil corresponde a una devolutiva o no, hay que estar a los arts 173 y
174 del COT. La regla general es que no sea devolutiva, sólo lo será cuando se trate de materias
relacionadas con validez del matrimonio, cuentas fiscales, estado civil y derechos reales sobre
inmuebles.
CAPÍTULO V
LA ACCIÓN PENAL
PROBLEMAS EN TORNO A LA ACCIÓN PENAL
Es imposible aplicar conceptos civiles al ámbito procesal penal, pues son muy opuestos. El MP debe
ejercer la acción penal pública, no tiene un “derecho” a la jurisdicción, es decir, una acción como se
dice en materia procesal civil. Al igual que aquellas personas que se les permite querellarse, no es que
busquen la tutela de derechos individuales, sino que se haga efectivo el ius puniendi del Estado. En base
a lo anterior, la doctrina ha abandonado el concepto de acción en materia procesal penal, sustituyéndolo
por acusación. Cabe mencionar que en materia penal, el concepto de acción se puede utilizar en
distintos sentidos como para aludir al derecho de iniciativa (delitos de acción privada), al derecho a la
acusación (delitos de acción penal pública que persigue de oficio el MP) y como presupuesto para la
apertura del juicio oral (forzamiento de la acusación). En relación con lo anterior, se descarta el
concepto de acción del derecho procesal civil en materia procesal penal. Binder sostiene que sólo es
acción la privada que puede ejercer la víctima en los delitos de acción privada. Por otro lado, Maier
descarta totalmente el concepto de acción en materia procesal penal.

RÉGIMEN DE LA ACCIÓN PENAL EN CHILE


1) Acción penal y responsabilidad penal
La acción penal solo puede dirigirse contra personas naturales, pues son los únicos sujetos activos de
un delito (art 58 inc 2° CPP). No obstante, hay un ámbito en el que se les reconoce responsabilidad
penal a las personas jurídicas à lavado de activos, financiamiento del terrorismo, cohecho del
particular o soborno, cohecho a funcionario público extranjero en transacciones comerciales
internacionales (Ley N° 20.393) y receptación (incorporado por la ley agenda corta 2). El art 58 CPP
señala que la acción penal “no puede entablarse sino contra las personas responsables del delito”, sin
embargo, no se exige que se tenga certeza respecto de la responsabilidad penal en los hechos de contra
quien se ejerce, ya sea autor, cómplice o encubridor, pues ese nivel de certeza sólo se logrará con una
sentencia condenatoria firme. Así, el art 58 CPP se refiere a personas naturales que supuestamente
tienen responsabilidad penal, por lo que si en definitiva se determina que no la tienen, de ello no se
colige que no se ejerció acción penal.

2) Clasificación de la acción penal (art. 53 CPP)


El criterio de clasificación apunta a determinar cuál es el interés prevalente (y no concurrente, porque
no hay delitos en que sólo exista el interés de la víctima, ya que el derecho penal protege bienes
jurídicos, que a la sociedad le interesa preservar, aunque sean disponibles). De ser el de la sociedad, será
acción pública, si es de la víctima, acción privada.
a) Acción penal pública: Es aquella que, atendida la existencia de un interés público
prevalente, debe ser ejercida de oficio por el MP. También puede ser ejercida por las personas
la ley permite querellarse (art 111 CPP). Son la regla general en Chile, el legislador debe establecer
expresamente cuando un delito es de acción privada o acción penal pública previa instancia
particular. Además, serán públicas las acciones respecto de delitos cometidos contra un menor de
edad.

b) Acción penal pública previa instancia particular: Su persecución es realizada por el Estado, no por
la víctima. El inicio de la persecución tiene que ser a instancia del ofendido, quien debe denunciar el
hecho o querellarse, porque la tramitación del procedimiento o su publicidad pueden perjudicar
todavía más el interés que se pretende proteger. El listado de estos delitos es genéricamente taxativa
y son los siguientes: lesiones menos graves y las leves, violación de domicilio, violación de secretos,
ciertas amenazas, los delitos contra la propiedad industrial, la comunicación fraudulenta de los

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secretos de fábrica, delitos tributarios y los que otras leyes señalen de manera expresa. Si el
ofendido (víctima) está imposibilitado de ejercer libremente la denuncia, o quienes pudieren
formularla por él, también se encontraren imposibilitados o implicados, podrá proceder de oficio el
MP. Una vez iniciada la tramitación, seguirán las reglas generales de los delitos de acción pública,
pues la única limitación de estos delitos se encuentra en su inicio, de manera que la posterior
voluntad de la víctima o el desistimiento, carecen de efectos. Antes de que haya denuncia o
querella, se permite realizar actos excepcionales de investigación que tengan el carácter de urgentes
o que sean necesarios para impedir o interrumpir la comisión del delito ¿Significa esto que, aunque
no haya denuncia, procede la detención si se detecta una hipótesis de flagrancia? Sólo respecto de
los delitos sexuales comprendidos entre los arts 361 y 366 quáter del CP, para los demás no se
permitirá la detención.

c) Acción penal privada: Es aquella en que existe un interés particular preponderante que
impide la intervención del órgano oficial de persecución, y que sólo puede ser ejercida por
el ofendido. Se exige la interposición de una querella por parte de la víctima, el MP estará ausente
durante todo el procedimiento, resultando como únicos intervinientes el querellante, imputado
(querellado) y el defensor. Estos delitos están enunciados en el art 55 CP, y son, calumnias, injurias,
injurias livianas, provocación a duelo, denuesto o descrédito público por no aceptarlo, matrimonio
del menor sin el consentimiento de las personas designadas por ley y celebrado de acuerdo con el
funcionario llamado a autorizarlo. Se sigue un procedimiento especial llamado procedimiento por
delito de acción privada (arts 400 y siguientes CPP).

3) Renuncia y desistimiento de la acción penal


Para examinar la procedencia y los efectos de la renuncia y el desistimiento de la acción penal, habrá
que analizar por separado las situaciones:
a) Acción penal pública: La renuncia del ofendido carecerá de efectos y la del MP está prohibida. El
desistimiento (expreso) es la manifestación de voluntad explícita de no continuar ejerciendo
la acción penal, por parte del ofendido, no inhibe la acción penal de manera que el MP
continuará con la persecución penal. En cambio, el desistimiento tácito o abandono de la querella,
supone la inactividad del querellante, a partir de la cual el tribunal infiere la voluntad de
no continuar ejerciendo la acción y declara, de oficio o a petición de parte, abandonada la
querella. Esto tiene lugar cuando el querellante no adhiere a la acusación del fiscal o no acusa
particularmente en la oportunidad que correspondiere, no asistiere a la audiencia de preparación
del juicio oral sin causa justificada, y cuando no concurriere a la audiencia de juicio oral o se
ausentare de ella sin autorización del tribunal. Sin embargo, esta situación no inhibe la acción
penal pública.

b) Acción pública previa instancia particular: La renuncia de esta acción extingue la misma para el
renunciante y sus sucesores, no afectando a otras personas a las que también correspondiere su
ejercicio. El desistimiento no impide la prosecución de la persecución penal, pues iniciado el
procedimiento, se siguen las reglas de los delitos de acción penal pública.

c) Acción privada: La renuncia cabe y produce efectos, pues se extingue la acción penal y civil
emanada del delito. El desistimiento también produce efectos, pues decreta el sobreseimiento
definitivo de la causa, además se condena al querellante en costas, salvo que el desistimiento
obedezca a un acuerdo con el querellado. En cuanto al abandono, se decretará el sobreseimiento
definitivo si el querellante no asiste al juicio, su inactividad dura más de 30 días, o si habiendo
muerto o cayendo en incapacidad sus herederos o representantes legales no concurren a sostener
la acción en un plazo de 90 días. El perdón del ofendido es una causal de extinción de la
responsabilidad penal que puede tener lugar tras la sentencia condenatoria de este tipo de delitos,
si antes del inicio del procedimiento, será una renuncia de la acción, y si fuere después, un
desistimiento.

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CAPITULO VI: LAS MEDIDAS CAUTELARES

4. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN.
Regulación: arts. 122 al 156 CPP (M.C. Personales) y arts. 157 y 158 CPP (M.C. Reales).
Razón de necesidad de estas medidas es que un proceso penal requiere el transcurso de algún tiempo,
durante el cual, el imputado podría realizar actos que impidan o dificulten la ejecución de la sentencia,
frustrando los fines del procedimiento. Las M.C. se consideran un instrumento idóneo para evitar esta
posibilidad.
Se acostumbra a definir las M.C. como una privación o restricción de la libertad personal del imputado
o de su libertad de administración o disposición de sus bienes, para asegurar los fines del procedimiento
penal o los resultados del ejercicio de la acción civil.
Desde el punto de vista del derecho:
- M.C. personales: son aquellas que privan o restringen la libertad personal del imputado.
- M.C. reales: son aquellas que limitan la libre administración o disposición de sus bienes.
Desde el punto de vista de su finalidad:
- M.C. penales: son aquellas que apuntan a garantizar la ejecución del contenido penal de la
sentencia condenatoria.
- M.C. civiles: que tienden a garantizar el cumplimiento del contenido civil del fallo
condenatorio.

5. LAS MEDIDAS CAUTELARES PERSONALES

A. Concepto: Consisten en la privación o restricción de la libertad personal del imputado,


generalmente por resolución judicial, para asegurar los fines del procedimiento penal.

B. Fundamento: Las M.C. Personales tienen por fundamento asegurar la realización de los fines
del procedimiento (art. 122 inc. 1). Se acostumbra señalar que son fines del procedimiento: (a)
La correcta averiguación de la verdad; y (b) La actuación de la ley penal.

C. Derecho fundamental afectado


Las M.C. Personales privan o restringen la libertad personal del imputado. La libertad personal es “la
libertad física, de movimiento y de actividad. En su expresión jurídica se le denomina libertad de
movilización, locomoción o ambulatoria, y se traduce en la posibilidad de permanecer en un lugar o
desplazarse de un punto a otro, dentro o fuera del país, sin ninguna traba, salvo las limitaciones legales
establecidas en tutela de intereses colectivos o particulares”.

D. Principios informantes

i) Legalidad

Las M.C. solo pueden decretarse en los casos y formas que prevén la CPR y las leyes. Esto se desprende
de: (1) PIDCP; (2) Del art. 19 n°7 letra b) de la CPR; (3) art. 5 inciso 3 CPP; estas últimas 2 no se
aplican únicamente a las M.C. personales, sino es de aplicación general a toda forma de privación o
restricción de libertad.
El art.5 inc. 2 CP agrega de las disposiciones del código que autorizan la restricción de la libertad o de
otros derechos del imputado o del ejercicio de alguna de sus facultadas serán interpretadas
restrictivamente y no se podrán aplicar por analogía.
ii) Jurisdiccionalidad

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Las M.C. Personales solo pueden tener lugar previa resolución judicial. Art. 122 inc. 2. Sin embargo no
es una regla absoluta, hay excepciones (ejemplo: detención por flagrancia).
iii) Excepcionalidad
La regla es el pleno goce de la libertad personal. La imposición de M.C. personales, por excepción, solo
puede tener lugar cuando sea absolutamente indispensable para asegurar la realización de los fines del
procedimiento. Art. 122 inc. 1, primera parte, CPP.

iv) Provisionalidad
Las medidas cautelares personales sólo deben durar mientras subsista la necesidad de su aplicación. Por
ejemplo, la prisión preventiva debe terminar cuando no subsistan los motivos que la justificaron
v) Proporcionalidad
Obliga a que la medida cautelar personal decretada guarde armonía con la finalidad del procedimiento
que se cautela y con la gravedad del hecho investigado. Así, procederá la prisión preventiva sólo cuando
las demás medidas cautelares personales sean estimadas insuficientes para el logro del objetivo que se
quiere alcanzar y que existan ciertos casos en los cuales no resulta admisible su imposición. Esto es lo
que también explica que, en general, no quepa la detención ni ninguna otra medida cautelar personal
cuando se trata de faltas o delitos que la ley no sanciona con penas privativas ni restrictivas de libertad.
En materia de prisión preventiva, el juez está obligado por ley a realizar un examen de proporcionalidad
de tal medida en relación con la pena probable, al establecer como criterio para estimar que la libertad
del imputado es o no peligrosa para la seguridad de la sociedad, entre otros, la gravedad de la pena
asignada al delito (art 140 inc 3°). Otra consagración de lo señalado anteriormente, se encuentra en la
Ley de Responsabilidad Penal Adolescente (art. 33).
vi) Temporalidad
Las medidas cautelares personales deben tener una duración limitada, ya que no pueden extenderse más
allá de la sentencia definitiva. Respecto a la detención, no puede durar más allá de 24 hrs, plazo dentro
del cual el imputado debe ser puesto a disposición del tribunal. La prisión preventiva en cambio, al
alcanzar su duración la mitad de la pena privativa de libertad esperable en el evento de dictarse condena
o de la ya impuesta existiendo recursos pendientes, el tribunal debe citar a una audiencia para considerar
su terminación o continuación.
vii) Sustituibilidad
Las medidas cautelares personales, especialmente aquellas cuya ejecución supone el transcurso de un
tiempo a lo largo del cual pueden variar las circunstancias presentes en su inicio, pueden ser
modificadas por otras más o menos intensas. En cuanto a la prisión preventiva, se permite que el
tribunal de oficio o a petición de parte, en cualquier momento del procedimiento sustituya la medida
por alguna del art 155 CPP. Las del art 155 también permiten ser sustituidas, pues están establecidas en
orden decreciente, haciendo en su inciso final una remisión a las normas sobre prisión preventiva.

viii) Acumulabilidad
Dos o más medidas cautelares personales son acumulables entre sí, siempre que no sea iguales y que su
imposición conjunta sea posible. En los casos de prisión preventiva y la detención, se permite que el
tribunal interponga como medida cautelar accesoria, a petición del fiscal, la incomunicación del
imputado hasta por un plazo máximo de 10 días, cuando sea necesario para el éxito de la investigación.
En las medidas del art 155, se permite la acumulabilidad expresamente.
ix) Dignidad
Las medidas cautelares personales deben ser ejecutadas en forma tal que no importen un atentado
contra la dignidad del imputado privado de libertad. Algunas manifestaciones de este principio son los
siguientes, la prisión preventiva solo puede cumplirse en la residencia del imputado o en
establecimientos penitenciarios o lugares públicos destinados a tal fin, que se proteja la integridad de los
imputados sujetos a prisión preventiva, en especial separando a jóvenes y no reincidentes de la
población penitenciaria de mayor peligrosidad, separando a los presos de los condenados, entre otras.
x) Responsabilidad

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El Estado debe responder por los perjuicios sufridos por los imputados en cuya contra se decreten
medidas cautelares personales en forma injusta. Sin embargo, este principio se encuentra limitado por
nuestra CPR en el art 19 N°7 letra i), ya que para que proceda la indemnización de perjuicios siempre
que se haya dictado sobreseimiento definitivo o sentencia absolutoria, y que tras ello la CS declare
injustificadamente errónea o arbitraria la resolución que hubiere sometido a proceso o condenado en
cualquier instancia a la persona perjudicada. De lo anterior, se ha dicho que es aplicable respecto del
antiguo sistema de enjuiciamiento criminal, no teniendo una mayor aplicación en la actualidad. Sin
embargo, un sector de la doctrina ha entendido que al decretarse prisión preventiva u otra medida
cautelar personal, equivale a la exigencia constitucional de “someterse a un proceso”. Otros sostienen
su aplicabilidad actual, entendiendo la expresión “sometimiento a proceso” en un sentido amplio,
confirmando la supremacía constitucional y responsabilidad y la fuerza normativa de la CPR. Como
complemento a esta disposición constitucional, el art 5 inc 1° Ley N° 19.640, extiende a la
responsabilidad del Estado los daños causados en un proceso penal a las actuaciones injustificadamente
erróneas o arbitrarias del MP, lo cual deberá ser calificado por un tribunal competente.

E. Presupuestos de aplicación
El tribunal que decreta una medida cautelar personal debe primero constatar dos requisitos:
a) Fumus boni iuris : La probabilidad de que el hecho punible haya tenido lugar u que el imputado haya
intervenido en él. Art. 140 inc. 1 letra a y b, el solicitante de la medida cautelar debe acreditar que
existen antecedentes que justificaren la existencia del delito que se investigare, y que permitieren
presumir fundadamente que el imputado ha tenido participación como autor, cómplice o encubridor.
b) Periculum in mora (necesidad de cautela): amenaza de que el imputado pueda frustrar los fines del
procedimiento. Art. 140 inc. 1 letra c, al exigir que existan antecedentes calificados que permitieren al
tribunal considerar que la medida es indispensable para el éxito de diligencias precisas y determinadas
de la investigación, o que la libertad del imputado es peligrosa para la seguridad de la sociedad o del
ofendido, o que existe peligro de que el imputado se de a la fuga.

F. Clasificación
Reguladas fuera del código y dentro de él.
a) Dentro del CPP→ Citación (123, 124), detención (125-138), prisión preventiva (139-153),
medidas cautelares del art. 155 y la internación provisional en un establecimiento asistencial del
imputado con facultades mentales insuficientes o gravemente alteradas (464).
b) En otras leyes→ Medidas de protección al ofendido por delito contra la indemnidad sexual
(CP), retención de licencia de conducir, internación provisoria del imputado adolecente y las
medidas de protección a la victima de un delito constitutivo de violencia intrafamiliar.
Forma en la que afectan la libertad personal del imputado
a) Privativas de libertad→ Detención, prisión preventiva y la letra a del art. 155.
b) Restrictivas de libertad→ La citación y la mayoría de las medidas del art. 155.
Dependiendo de su autonomía
a) Principales→Se imponen sin la necesidad de otra medida cautelar.
b) Accesorias → Las que necesitan de una medida cautelar principal (ej. Prohibición de
comunicación del imputado detenido o preso).
En atención a su duración
a) Duración definida (citación, detención y prohibición de comunicación)
b) Duración indefinida (prisión preventiva y las medidas del art. 155)

G. La citación
a) Concepto
Orden judicial de comparecencia del imputado ante el tribunal. (art. 123 y 124 CPP)
b) Forma

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Se notifica la resolución que ordena la comparecencia, conteniendo: tribunal al que se comparece,
domicilio, fecha y hora de la audiencia, proceso, motivo, advertencia de apercibimiento si no comparece
(art. 33 inc. 1 y 2).
c) Efecto de la no comparecencia injustificada
el imputado podrá ser detenido o sometido a prisión preventiva hasta la realización de la actuación
respectiva. Existe duda con respecto a la procedencia de la prisión preventiva en este caso, tomando en
cuenta que no ha habido audiencia de solicitud de aquella.
d) Procedencia
Procede cuando sea necesaria la presencia del imputado ante el tribunal. Hay casos en los que es la
única medida cautelar que procede, por lo que no puede ordenarse detención. Como ocurre con las
faltas y otros delitos que no se sancionan con penas privativas ni restrictivas de libertad. (ex. ciertas
faltas donde si procede detención (124 y 134) y en el caso de incomparecencia injustificada del
imputado citado).

H. La detención (125-138 CPP)


a) Concepto
Medida cautelar personal que consiste en la privación de libertad del imputado, por breve tiempo, con
la finalidad de ser conducido al tribunal.

b) Procedencia (orden judicial o delito flagrante)


1. Detención por orden judicial
• A solicitud del Ministerio Público, sin previa citación, cuando de otra manera su comparecencia
pudiera verse demorada o dificultada (127 inc.1).
El fiscal debe fundar su solicitud con antecedentes demostrativos del hecho y de la
participación que en él se atribuye al imputado.
En la practica, usualmente, se opta por la detención en delitos graves (en los que normalmente
cabrá prisión preventiva) porque se piensa que una citación pondría al imputado sobre aviso y
podría fugarse. También cuando no ha sido posible citar al imputado.
• Cuando la presencia del imputado es condición de una audiencia y, citado éste, no compareció
a ella ni tampoco justificó su comparecencia (127 inc. 2).
En este caso también es exigible la solicitud del Ministerio Público, el tribunal no puede de
oficio decretar la detención del imputado.
• Crimen o simple delito dentro del despacho del tribunal
• Se requiere que la respectiva CA declare que ha lugar a la formación de causa en los casos de:
diputados, senadores, jueces, fiscal judicial o fiscal del MP.

La orden en general es escrita y debe contener (154):


a) Nombre y apellidos de la persona que debe ser detenida (o las circunstancias que la
individualicen o determinaren)
b) Motivo de la detención
c) Indicación de ser conducido al tribunal, al establecimiento penitenciario, lugar público de
prisión o detención o permanecer en su residencia.
Asimismo, la orden debe ser intimada (exhibida al imputado) en el caso que sea escrita, si es verbal no
se puede exhibir, por lo que se debe entregar una constancia de ella, con indicación del tribunal que la
expidió, el delito que le sirve de fundamento y de la hora que se emitió.

2. Detención por flagrancia


Cuando se sorprende a una persona in fraganti en la comisión de un delito.
Requisitos:
a) coetaneidad e inmediatez: cometiendo el delito o en el momento en que lo acaba de cometer.
b) Ostensibilidad: Hecho patente y manifiesto (se desprende de su observación)
Tipos de flagrancia:

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a)flagrancia real o propiamente tal: sorprender in fraganti (letras a y b)
b) Flagrancia ficta o virtual: concepto amplio de flagrancia (resto de las letras)

Art. 130. Se entenderá que se encuentra en situación de flagrancia


a) el que actualmente se encontrare cometiendo el delito
b) el que acabare de cometerlo
c) el que huyere del lugar de comisión del delito y fuere designado por el ofendido u otra persona
como autor o cómplice.
d) El que en un tiempo inmediato a la perpetración de un delito, fuere encontrado con objetos
procedentes de aquel o con señales, en sí mismo o en sus vestidos, que permitieren sospechar
su participación en él, o con las armas o instrumentos que hubieren sido empleados para
cometerlo.
e) El que las victimas de un delito reclamen auxilio, o testigos presenciales, señalaren como autor
o cómplice de un delito que se hubiere cometido en un tiempo inmediato.
f) El que aparezca en un registro audiovisual cometiendo un crimen o simple delito al
cual la policía tenga acceso en un tiempo inmediato.
Tiempo inmediato→Todo aquel que trascurra entre la comisión del hecho y la captura del imputado,
siempre que no hubieren trascurrido más de 12 horas.

Sólo las hipótesis a y b satisfacen los requisitos de la flagrancia, claramente la inmediatez no se da


después de transcurridas 12 horas, y en los casos c, d ,e y f no se da tampoco la ostnsividad dado que
no se requiere que el delito sea evidente para quien practica la detención.
La detención la puede practicar cualquier persona donde es facultativo practicarla o la policía en cuyo
caso es obligatorio practicarla (con excepción a los casos de las faltas del art. 134 inc. 4).

CPP→ Se entrega el imputado al ministerio Publico, a la policía o la autoridad judicial más próxima.
CPR→a disposición del juez competente.

Otros casos de detención (policía obligada a detener a pesar de no existir orden de detención
ni flagrancia) art. 129 inc. 3 y 4.

a) Al sentenciado a penas privativas de libertad que hubiere quebrantado su condena (el


quebrantamiento es un delito, si se sorprende infraganti es un caso de detención por flagrancia,
si pasan más de 12 horas se detiene sin orden y sin flagrancia)
b) Al que se fugare estando detenido
c) Al que tuviere orden de detención pendiente (en realidad es una detención por orden judicial,
por tanto debe ser intimada)
d) Al que fuere sorprendido en violación fragante de las medidas cautelares que se le hubieren
impuesto (se cuestiona su constitucionalidad dado que ésta solo permite la detención por delito
flagrante o por orden judicial). En este caso la expresión “violación flagrante” se utiliza de
manera estricta-flagrancia real-, no amplia.
e) Al que fuere sorprendido infringiendo las condiciones impuestas en virtud de las letras a) b) c)
y d) del art. 17 ter de la ley nº 18216- pena sustitutiva de libertad vigilada-. (prohibición de
acudir a determinados lugares, acercarse a la victima o sus familiares, obligación de mantenerse
en su domicilio o lugar que determine el juez por un lapso máximo de 8 horas diarias y la
obligación de cumplir programas formativos, laborales, culturales, etc.
f) Al que violare la condición del artículo 238 letra b) que le hubiere sido impuesta para la
protección de otras personas.
En tales casos existe la duda de si se configura el delito de desacato , si debe agravarse la medida
cautelar personal o si puede revocarse la suspensión condicional.

En los casos de comisión flagrante de delito:

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→Delitos de acción privada: La policía no puede detener.
→Delitos de acción pública previa instancia particular: No se puede detener si no se denuncia el hecho
(al menos que se trate de ciertos delitos de connotación sexual). A lo más podrá ejercer los actos
necesarios para impedir o interrumpir la comisión del delito.
→La policía puede entrar en lugar cerrado para detener al imputado, cuando se encontrare en su actual
persecución (no se requiere autorización judicial ni consentimiento del propietario).

3. Plazo de detención
Para poner al detenido a disposición del juez de garantía es de 24 horas. Desde el momento de la
detención. En el caso de detención por flagrancia por particular , un sector de la doctrina plantea que el
plazo se cuenta desde que la policía se hace cargo del detenido (pugnando esto con lo dispuesto en el
art. 131).
→Detención por orden judicial: La policía deberá conducir inmediatamente el imputado ante el juez.
→Detención por flagrancia: La policía deberá informar de la detención al MP, dentro de 12 horas.
Donde el fiscal podrá dejar sin efecto la detención u ordenar que el detenido sea conducido ante el juez
dentro de un plazo máximo de 24 horas. Si el fiscal nada manifestare deberá poner el detenido a
disposición del juez de garantía.

Incisos 3 y4 del art. 131, introducidos por la ley 20.074.


Cuando el fiscal ordene poner al detenido a disposición del juez, deberá en el mismo acto dar
conocimiento de esta situación al abogado de confianza de aquél o a la DPP.
Para los efectos de poner a disposición del juez al detenido , las policías cumplirán su obligación legal
dejándolo bajo custodia de gendarmería en el respectivo tribunal (sin necesidad de resolución judicial).
Asimismo, esto supone una vulneración a los derechos del imputado, tomando en cuenta que se puede
realizar la audiencia de control de detención luego de las 24 horas en las que se “pone a disposición del
juez el detenido”.

Por otro lado si el detenido por delito flagrante es un diputado, senador, juez o fiscal, el detenido debe
ser puesto inmediatamente a disposición de la CA.

4. Lugar de detención
→En su residencia (art. 138 legítima defensa privilegiada o presuncional )
→En un lugar público de detención (RG)

5. Deber de información de derechos


Existe el deber de informar al detenido de sus derechos, deber que recae en la policía, el fiscal y el juez.
Se debe informar del motivo de la detención y del catalogo de derechos que le asisten.

6. Finalidad y proporcionalidad de la detención


Su finalidad es conducir al imputado a la presencia judicial, por ello resulta cuestionable que se emplee
al imputado privado de libertad antes de que sea puesto a disposición del juez. Asimismo, la
proporcionalidad quiere decir que se debe aplicar una violencia proporcional al logro del objetivo de la
aprehensión del imputado, sobretodo si se resiste. Una violencia excesiva podría ser causal de delito de
aplicación de tormentos o violencia innecesaria.

7.La detención ilegal


7.1. Concepto
Es aquella que se realiza fuera de los casos y formas señalados por CPR y la ley o sin existir un fin del
procedimiento que la justifique, o aquella en que la verificación del caso que la autoriza ha sido posible
como consecuencia de un acto no ajustado a derecho.

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*no debe confundirse esta con la detención arbitraria (aquella que a pesar de ser legal no cumple las
exigencias de idoneidad, necesidad o proporcionalidad en sentido estricto , propias del principio de
prohibición de exceso o proporcionalidad), en ella no hay efectos previstos.

7.2. Clasificación
a) Originaria: aquella que se realiza fuera de los casos y formas señalados por CPR y la ley o sin existir
un fin del procedimiento que la justifique.
b) Derivada: Aquella que se presenta como consecuencia de otros actos no ajustados a derecho. Es
decir, la detención es producto de otros actos que sí se han alejado de lo que establece el ordenamiento
jurídico.

7.3 Efectos
Antes de la ley 20253
→El detenido quedaba en libertad
→La evidencia de cargo obtenida durante el registro del detenido debía ser excluida
Luego de la ley 20253
→No es puesto de inmediato en libertad (ya que igualmente se puede formalizar y pedir medidas
cautelares).
→No necesariamente la evidencia será excluida en la audiencia de preparación del juicio oral, pues la
declaración de ilegalidad no producirá efecto de cosa juzgada.
→no se puede solicitar la ampliación de la detención

La falta de información sobre los derechos al detenido no trasforma en ilegal su detención, asimismo, la
declaración de ilegalidad de la detención no significa necesariamente que se deba imputar al funcionario
policial o al particular que practicó la detención el delito de detención ilegal o de detención arbitraria.

8. Audiencia de control de detención


Es aquella en la que el detenido es presentado ante el juez competente, dentro de las 24 horas.
Siguientes al momento de la detención. Esto a veces era muy difícil de lograr cuando la detención se
practicaba en lugares muy distantes del territorio jurisdiccional del juez de garantía que dictó la orden.
Por ello, la ley 20.074 permitió que se pudiera realizar la audiencia de control no solo en el JG del que
emanó la orden, si no también del tribunal donde se practicó la detención (siempre que sean lugares de
asiento de Cortes diversas)
Su finalidad es que el juez se informe de la identidad del detenido y circunstancias de su detención.
Previo debate el juez resuelve declarando legal la detención o ilegal.
Si no se le han señalado sus derechos al imputado se le informará sobre ellos y se oficiará a las
autoridades competentes a fin de que apliquen las sanciones disciplinarias correspondientes.
→Se controla la detención en todos los casos de detención (por flagrancia o por orden).

8.1. Quienes intervienen en la audiencia


Necesariamente deben estar el fiscal (o el abogado asistente) y el imputado. Es posible que el defensor
no esté. (pero si es necesaria su presencia cuando se formalice la investigación o se decreten medidas
cautelares).
El fiscal o el abogado asistente (autorizado por el fiscal) procederán a formalizar la investigación y a
solicitar medidas cautelares (siempre que tuviere antecedentes necesarios y se encontrare presente el
defensor). Antes solo se permitía la presencia del abogado asistente, pero no podía formalizar ni pedir
cautelares, hoy en cambio, si puede.

8.2. Resolución del juez de garantía


a) Declaración de legalidad de la detención

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• Cuentan con antecedentes necesarios y está el defensor: Se puede formalizar la investigación y
pedir medidas cautelares. Así, la audiencia de control de detención se convierte en audiencia de
formalización de la investigación. [Contradicción art. 132 y 230, el primero establece la
obligación de formalizar, en cambio en el segundo se establece la posibilidad de formalizar. Al
respecto, en la práctica se considera que el MP no está obligado a formalizar en ningún
momento].
• No cuentan con antecedentes: El MP puede pedir ampliación de la detención hasta por 3 días,
con el fin de preparar su presentación. El JG accederá cuando estimare que los antecedentes
justifican esa medida”. Esto dependerá de la relación que exista entre las diligencias faltantes y
la privación de libertad del imputado. Una vez cumplido el término ampliado, el MP procederá
a formalizar y pedir medidas cautelares.
• *Algunos dicen que esta ampliación solo procede en los delitos de flagrancia pues, solo en ellos
se estima que el MP no tenga antecedentes en el control de detención. Aunque la ley no efectúa
ningún distingo, procediendo igualmente en caso de detención por orden judicial.
b) Declaración de ilegalidad de la detención
antes de la ley 20253 el detenido quedaba libre y el MP no podía aprovechar ese momento para
formalizar y pedir medidas, de modo que debía solicitar que se citara a todos los intervinientes a una
audiencia para tal efecto. Hoy el MP puede formalizar igualmente y dicha declaración no produce cosa
juzgada en relación con las solicitudes de exclusión de prueba que se formulen en la audiencia de
preparación de juicio oral.

8.3 Impugnación de la resolución del juez de garantía


contra la resolución que declara ilegal la detención se pretendió aplicar por mucho tiempo, el recurso de
apelación. Conforme el art. 370 son apelables las resoluciones del JG cuando pusieren termino al
procedimiento, impidieran su prosecución o lo suspendieran por más de 30 días. Algunas Cortes hacían
una interpretación amplia a la frase “hicieren imposible su prosecución”.
Esta discusión termina con el art. 132 bis incorporado por la ley 20253 que concede al fiscal o al
abogado asistente de fiscal apelar esta resolución, pero solo en el caso de los delitos de los artículos:
141, 142, 361, 362, 365 bis, 390, 391, 433, 436 y 440 del CP, y los de la ley 20.000 que tengan pena de
crimen.
*no se contempló la posibilidad de apelar en contra de la resolución que declara legal la detención.

8.4 Amparo ante el juez de garantía


En el antiguo Código de Procedimiento Penal se regulaba el recurso de amparo, que consagra hoy el
art. 21 de la CPR. En el Código Procesal Penal no existe una regulación semejante.
Regulación actual:
→ Auto acordado de la CS.
→Se aplica supletoriamente el Código Procesal Penal
→Sin embargo, algunos plantean que igualmente se aplica el Código de Procedimiento Penal, pues éste
no ha sido derogado expresamente ni tácitamente (pues no es incompatible con el Código Procesal
Penal).

Amparo ante el juez de garantía


Sin perjuicio de lo anterior, el CPP establece que toda persona privada de libertad tiene derecho a ser
conducida sin demora ante el juez de garantía, con el objeto de que se examine la legalidad de su
privación de libertad, y en todo caso para que examine las condiciones en que se encontrare,
constituyéndose si fuere necesario, en el lugar en que ella estuviere. El juez podrá ordenar la libertad del
afectado o adoptar las medidas que fueren procedentes. (art. 95)
→La persona privada de libertad también posee el mecanismo del recurso de amparo constitucional.

I. La Prisión Preventiva

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1. Concepto

Privación de libertad del imputado, por tiempo indefinido, mediante resolución judicial, a solicitud del
Ministerio público o del querellante, una vez formalizada la investigación, para asegurar los fines del
procedimiento, la seguridad del ofendido o de la sociedad, o evitar que el imputado se fugue. Es de
última ratio, debe utilizarse cuando las demás medidas se consideren insuficientes.
2. Requisitos para decretarla

Están el art. 140, conforme al cual debe haberse formalizado la investigación, solicitado por el fiscal o el
querellante, y acreditado por el solicitante el presupuesto material y la necesidad de cautela.
a) Que se haya formalizado la investigación: Se desprende del encabezado del art. 140, y del 230
i.2.
b) Que se solicite: juez de garantía no puede decretar de oficio la medida cautelar, solo puede ser
solicitada por el Ministerio Público o el querellante.
c) Que se acredite el supuesto material y la necesidad de cautela: el juez de garantía deberá fundar
la resolución que decrete o rechace esta medida cautelar a raíz de los antecedentes que el
solicitante invoca.

C1) El supuesto material (fumus boni iuris): acreditar que existen antecedentes que justifiquen la
existencia del delito, y antecedentes para presumir fundadamente su participación en el delito como
autor, cómplice o encubridor. La seriedad de los antecedentes se debe evaluar con una
consideración material (cantidad y calidad de los antecedentes) y legal (que no hayan sido obtenidos
vulnerando garantías, pues será prueba excluida por ilicitud).

No existe claridad con respecto a su estándar probatorio, algunos sostienen que los antecedentes
deben permitir prever que al ser examinada la prueba habrá buena probabilidad de obtener
condena. Otros exigen que la prueba permita un alto grado de convencimiento acerca de la
existencia y participación del delito. Otros señalan que el estándar es más elevado para el delito
(antecedentes que lo justifiquen) que para la participación (antecedentes para presumir
fundadamente).
Tampoco existe claridad sobre el significado de “delito” del art. 140, para algunos debe entenderse
como un hecho típico sin importar la antijuridicidad y culpabilidad, para otros debe ser entendida
en su sentido técnico (tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad). Nuestra opinión es entenderlo en un
sentido técnico –siguiendo la interpretación restrictiva del art. 5-, incluso debería de exigirse
también punibilidad pues no tiene sentido imponer la prisión preventiva a un hecho que no será
sancionable aunque se acredite –se justifica además en la punibilidad a que refiere el art. 1°-.
La calificación jurídica de los hechos y de la participación compete exclusivamente al juez. Por otro
lado, el art. 140 exige acreditar antecedentes, de modo que no puede fundarse la solicitud en
presunciones legales.

C2) La necesidad de cautela (periculum in mora): significa que la prisión preventiva es


indispensable para el éxito de diligencias precisas y determinadas de la investigación o para velar
por la seguridad de la sociedad o del ofendido, o por peligro de fuga. Esta última causal podría
tener eventuales problemas de constitucionalidad puesto que la CPR no alude a ella en la regulación
de estas medidas. Esta última causa también eliminó definitivamente la interpretación de peligro
para la sociedad como peligro de fuga.

C2.1) Prisión preventiva indispensable para el éxito de la investigación

“se entenderá especialmente que la prisión preventiva es indispensable para el éxito de la


investigación cuando existiere sospecha grave y fundada de que el imputado pudiere obstaculizar la
investigación mediante la destrucción, modificación, ocultación o falsificación de elementos de

45
prueba; o cuando pudiere inducir a coimputados, testigos, peritos o terceros para que informen
falsamente o se comporten de manera desleal o reticente”. La palabra “especialmente” quiere
significar que las situaciones descritas no son las únicas, y por otro lado, vienen a limitar la libertad
de los jueces.
Esta justificación viene dada en asegurar los fines del procedimiento, por tanto la previsión es
legítima, sin embargo esta medida debe durar el tiempo necesario para asegurar la evidencia, tras lo
cual debería quedar en libertad. El peligro para el éxito de la investigación debe ser concreto. En
todo caso, se podría cuestionar este supuesto argumentando en los medios idóneos con los que
cuenta el Estado para evitar que el imputado destruya material probatorio, por ello el PIDCP y la
CADH solo aluden a la hipótesis del peligro de fuga.
C.2.2) Libertad del imputado peligrosa para la seguridad del ofendido
Se entenderá esta cuando existieren antecedentes calificados que permitan presumir que el
imputado realizará atentados contra de aquél, su familia o sus bienes. Llama la atención la
referencia a los bienes, pues parece desproporcionado decretar prisión preventiva por un mal sobre
cosas y no personas. La redacción anterior aludía a atentados “graves” lo cual se suprimió a fin de
ampliar el supuesto de procedencia. Esta norma se podría justificar también en los fines del
procedimiento, en este caso, la prevención del hecho objeto del proceso.

C2.3) Libertad del imputado peligrosa para la seguridad de la sociedad

La ley no explica su significado, solo establece las circunstancias que debería considerar el tribunal para
determinar si es o no peligrosa: la gravedad de la pena asignada, el número de delitos que se le imputare
y el carácter de los mismos, la existencia de procesos pendientes, y el hecho de haber actuado en grupo
o pandilla. Además se indica que se entenderá especialmente que la libertad del imputado es peligrosa
para la sociedad cuando: los delitos imputados tengan asignada pena de crimen, cuando hubiese sido
condenado con anterioridad por delito de igual o mayor pena habiéndola cumplido o no, cuando se
encontrare sujeto a aluna medida cautelar personal, en libertad condicional o cumpliendo pena
sustitutiva de las privativas o restrictivas de libertad.

En un análisis crítico se puede establecer que el legislador ha adoptado un criterio de carácter


peligrosista (peligro de comisión de delitos por parte del imputado) sin apuntar a fines del
procedimiento sino que a fines materiales de prevención propios de la pena. Además, los criterios son
tantos que parece difícil sostener que la prisión preventiva es una medida última ratio. Aun así un sector
de la doctrina defiende el peligro de comisión de nuevos delitos como fines del procedimiento,
argumentando que la reiteración delictiva también puede frustrar las expectativas de una sentencia de
condena que pretenda dictarse sobre el primer delito, básicamente porque el nuevo delito puede hacer
ilusoria la primera condena que llegue a dictarse. Otras parte de la doctrina ha entendido el peligro para
la seguridad de la sociedad como un peligro en la afectación de la legitimidad del sistema penal, de
modo que podría decretarse prisión preventiva sin que exista peligro de reiteración de delitos sino solo
una alarma pública. Sin embargo, una u otra justificación es contraria al sistema iberoamericano de
derechos humanos que tan solo legitima la prisión preventiva en “los peligros de que el imputado
intente eludir el accionar de la justicia o de que intente obstaculizar la investigación judicial”.

c.2.4) Peligro de fuga: el art. 140 c lo menciona sin más regulación al respecto. Su incorporación trae
aparejado un posible problema de constitucionalidad, pues no se menciona en el art. 19 n°7 CPR como
supuesto de la prisión preventiva; aunque esto es dudoso pues sí aparece consagrado en tratados
internacionales de derechos humanos ratificados por Chile.
Aunque, el mayor problema que trae aparejado es impedir interpretar el peligro para la seguridad de la
sociedad como peligro de fuga del imputado. A diferencia de las anteriores, la ley no señala criterios que
los jueces deban considerar para estimar este peligro en algún caso concreto. De todos modos, la
doctrina ha propuesto algunos criterios como: arraigo en el país –domicilio, residencia, asiento familiar

46
o de negocio- y las facilidades para abandonar definitivamente el país u ocultarse; la pena que se espera;
actitud imputado frente al daño resarcible; comportamiento en el procedimiento.

c.2.5 Excurso: relación entre peligro para la seguridad de la sociedad y peligro de fuga. Evolución
histórica.

El peligro para la seguridad de la sociedad se incorpora por primera vez en el Acta Constitucional 3 de
1976 la que pasó luego a la CPR. Al Código de Procedimiento Penal se agrega en 1978 con dos ideas
distintas “por haber antecedentes graves de que tratará de eludir la acción de la justicia” (peligro de
fuga) “o continuará su actividad delictiva” (peligro reiteración delictiva). En 1991 se elimina su
contenido para adecuarlo a los tratados internacionales suscritos, de modo de no aludir al peligro de
reiteración, así que desde entonces comenzó a entenderse el peligro para la sociedad como peligro de
fuga. Posteriormente, es recogido en el Código Procesal Penal, sugiriendo sin contenido que el alcance
era el de peligro de fuga, incluso a través del art. 146 se permitía concluir esto al permitir reemplazar
por una caución económica la prisión preventiva que había sido impuesta “para garantizar la
comparecencia del imputado al juicio y a la eventual ejecución de la pena”. Otro sector estimaba que los
criterios previstos en la ley para estimar como peligrosa la seguridad de la sociedad no eran sino
elementos reveladores de un peligro de que no compareciera al juicio. Finalmente el 2008 se incorpora
el peligro de fuga como hipótesis de procedencia de la prisión preventiva, por lo que ya no se puede
entender el peligro para la seguridad de la sociedad de esa manera.

3. Excepción: principio de proporcionalidad

Aun cuando concurran los requisitos para decretar la prisión preventiva del art. 140 hay casos
excepcionales donde no procede su imposición, son los del art. 141:
a) Cuando el delito imputado estuviere sancionado únicamente con penas pecuniarias o privativas
de derechos: este imputado de ser condenado no será privado de libertad, por tanto no tiene
sentido aplicar esta medida. Guarda relación con la regulación de la citación que establece que
cuando el hecho atribuido al imputado es una falta o delito que la ley no castiga con pena
privativa o restrictiva de libertad solo cabe ordenar citación.
b) Cuando se tratare de delitos de acción privada: acá es el interés privado el primordial,
condiciona la persecución mediante querella y excluye la intervención del Ministerio Público,
además impide la aplicación de la más lesiva de las medidas cautelares personales.
c) Cuando el imputado se encontrare cumpliendo efectivamente una pena privativa de libertad: el
fundamento radica en que el imputado ya se halla privado de libertad, de modo que la medida
se hace innecesaria. No obstante se puede solicitar con anticipación a un cumplimiento de pena
que esté por cesar.

Aun verificándose una de estas excepciones, supuestos de improcedencia de la prisión


preventiva, podría imponerse en los siguientes casos de contraexcepción (art. 141 i.2):
1.- cuando el imputado ha incumplido alguna medida cautelar personal del art. 155
2.- cuando el tribunal considere, al ser requerido o citado el imputado, que pueda incumplir
con su obligación de permanecer en el lugar de juicio a presentarse a los actos del
procedimiento.
3.- cuando el imputado no concurra a la audiencia de juicio oral.

4. Tramitación de la solicitud

Se puede solicitar verbalmente (en audiencias: de formalización, de preparación juicio oral, de juicio
oral; o se puede solicitar por escrito (en cualquier momento de la investigación estando formalizada,
debiendo el juez citar a una audiencia para debatir sobre la medida). Esta petición debe ser siempre

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resuelta en una audiencia, donde la presencia del imputado y del defensor constituye un requisito de
validez.

5. Revocación y sustitución

Siempre puede ser revocada de oficio o a petición de algún interviniente, en cualquiera etapa del
procedimiento, así mismo puede ser sustituida por alguna medida del art. 155. Antes de la 20.253, si no
habían transcurrido dos meses desde su dictación y el imputado solicitaba la revocación podía el juez
rechazarla de plano o citar a una audiencia (la cual estaba obligado el juez a citar si habían pasado más
de dos meses). Hoy, la obligación del juez de citar a una audiencia ya no existe, por lo que puede
rechazar de plano la solicitud independiente del plazo transcurrido, o citar a esta también independiente
del plazo. Esta modificación es criticable puesto que la posibilidad de apelar frente a una resolución que
ordena/mantiene o niega/revoca la medida está supeditada al hecho de que esa resolución se dicte en
audiencia, de modo que tan solo cabría reposición ante un rechazo de plano. Tan solo el tribunal es
obligado al cabo de seis meses a llamar a una audiencia para considerar su cesación o prolongación.
Finalmente, si la medida ha sido impuesta para garantizar la comparecencia o eventual ejecución de la
pena, puede ser reemplazada por una caución económica suficiente, así frente a la rebeldía o si el
imputado se sustrae a la ejecución de la pena se ejecutará esta caución.

6. Recursos

La resolución que ordena, mantiene, niega lugar o revoca la prisión preventiva solo es apelable si es
dictada en una audiencia (art. 149), normalmente será realizada la audiencia en el juzgado de garantía,
sin embargo cuando el imputado esté en prisión preventiva y la causa pase a juicio oral será ese tribunal
el que fallará la mantención o cesación de la medida. Acá cabe preguntarse la procedencia de la
apelación en contra de la resolución que vaya a dictar el tribunal de juicio oral en lo penal debido a que
el art. 364 las declara inapelable. Tavolari dice que si procede, la conclusión contraria es absurda.

Se puede concluir que existen dos formas de apelación, una escrita que será la regla general y se
interpone dentro de los cinco días siguientes a la notificación de la resolución, concedida en el solo
efecto devolutivo. Y una forma verbal que es excepcional, interpuesta en la misma audiencia y procede
contra la resolución que niega o revoca la prisión preventiva, en delitos especialmente graves. En estos
casos, el imputado no será dejado en libertad sino mientras se encuentre firme la resolución, salvo que
no se haya puesto a disposición del tribunal en calidad de detenido. Para algunos esta apelación verbal
sería una excepción también a los efectos de la apelación pues se trataría de una apelación con efecto
suspensivo, aunque para algunos es discutible pues frente a una resolución que rechaza la medida se
estaría prolongando la detención del imputado, cuestión que puede ser realizada solo por una sentencia.
(Esta apelación verbal goza de preferencia para su vista y fallo, mismo día de ingreso o al siguiente
hábil).

Se ha discutido en la práctica si el fiscal no habiendo apelado contra la negación o revocación de la


medida podría hacerlo o no por escrito dentro de quinto día, jurisprudencialmente se ha dicho que si el
Ministerio Público -o el querellante- no apela en la misma audiencia no puede hacerlo después. En
nuestra opinión, debería poder realizarse ya que la apelación verbal tiene un sentido especial para
permitir que el imputado privado de libertad no quede libre mientras el tribunal de alzada no resuelva el
recurso, de modo que dejado el imputado en libertad cobra fuerza la regla general de apelación por
escrito.
Otro problema de praxis ocurre al determinar el significado de la frase detenido en “salvo el caso en
que el imputado no haya sido puesto a disposición del tribunal en calidad de detenido”, sobre si debe
entenderse en un sentido estricto o amplio. En un sentido estricto se invoca el art. 5 i.2, de modo que si
se revoca la prisión preventiva del imputado este no sería puesto frente al tribunal en calidad de
detenido y debería quedar inmediatamente en libertad sin esperar que la resolución quede firme. A

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favor del sentido amplio se argumenta que la finalidad de la 20.253 fue evitar que tanto los imputados
detenidos como los imputados sujetos a dicha medida quedaran en libertad antes de que el tribunal ad
quem confirmara su revocación.
Se ha discutido también la constitucionalidad de la parte de la disposición que impide poner al
imputado en libertad mientras la resolución que niega o revoca la prisión preventiva no se encuentre
ejecutoriada, pues la decisión quedaría entregada al fiscal que no es un juez; frente a esto la CIDH
señala que es arbitraria la prisión preventiva cuando es mantenida no obstante la decisión de un tribunal
de dejar al imputado en libertad.

Otro problema se ha originado a partir de la enumeración de algunos delitos especialmente graves para
la procedencia de la apelación verbal donde se señala “y los de la ley 20.000, que tengan pena de
crimen”. La dificultad está en determinar el alcance de la exigencia de pena de crimen, en orden a
establecer si se aplica tan solo para los de la ley 20.000 o si alcanza a los demás que nombra del Código
Penal. No es una cuestión baladí, puesto que dentro de los delitos enumerados del CP hay algunos que
son simples delitos como el secuestro simple (art. 141 CP) y el robo por sorpresa (art.436 CP). De
modo que si se sostiene solo la exigencia de pena de crimen para los de la ley de tráfico de
estupefacientes, uno de estos imputados por simple delito, solicitada la prisión preventiva y rechazada,
no podría quedar en libertad mientras no esté firme la resolución; mientras que con la interpretación
contraria, podría ser dejado en libertad de inmediato. En favor de la primera posición puede decirse que
la ley 20.253 introdujo modificaciones con el fin de endurecer el juzgamiento de ciertos delitos, en favor
de la segunda posición se puede argumentar con el trillado (la calificación es mía) arículo 5 i.2. que
obliga a interpretar restrictivamente las disposiciones que restrinjan los derechos del imputado.

Otra discusión se ha suscitado a propósito de si esta disposición solo se aplica cuando la prisión
preventiva se deja sin efectos y el imputado no queda sujeto a ninguna medida, o si también se aplica
cuando se sustituye por una del art. 155 o se reemplaza por caución. A favor de esta última opción se
ha dicho que la finalidad de la ley es evitar que en casos graves el imputado no quede en prisión
preventiva mientras la CA no revise el proceder del juez de garantía, aun cuando esté sometido a una
medida cautelar menos gravosa. A favor de la primera se puede argumentar que el precepto alude a
“revocación” de la prisión preventiva, no a la sustitución o reemplazo; todo esto sumado al art. 5.i.2.

También se ha discutido si es necesario que la apelación verbal cumpla o no con los requisitos de una
apelación (fundamentos y peticiones concretas). Un sector dice que no es necesario sosteniendo que
quedó constancia de ello en las comisiones del Senado. Otro afirma que si debe contenerlos. Nuestra
posición es que se eliminó la alusión a los requisitos por ser redundante, de modo que debería tratarse
por reglas generales de apelación.
Por otra parte se ha discutido si el art. 149 se aplica o no al juzgamiento de los adolescentes. La ley
sobre responsabilidad penal adolescente establece una medida cautelar personal que es la internación
provisoria en un centro cerrado, equivalente de la prisión preventiva. Algunos tribunales han dicho que
no, pues se alude a prisión preventiva y no a la internación provisoria que tiene sus propios fines; otros
tribunales han dicho que si puesto que la ley de responsabilidad penal adolescente se remite a las
normas del CPP en lo no previsto. En nuestra opinión si es aplicable este artículo, pues la LRPA no
establece los requisitos del fumus boni iuris ni del pelicurum in mora, de modo que a un adolescente
podría tratársele de peor forma que a un imputado mayor de edad, al no contener estos requisitos;
tampoco procedería el descuento a la sentencia de la pena temporal pues no menciona la internación
provisoria, lo cual es un absurdo. Con respecto a esta figura se ha discutido si también se le aplica o no
a la internación provisional del imputado enajenado mental en un establecimiento asistencial y quién
califica la gravedad del delito.
Puede darse que estando pendiente el recurso contra la resolución que dispone la libertad del
imputado, la CA pueda decretar una orden de no innovar para impedir la fuga del imputado antes de la
vista del recurso. Esto es muy extraño puesto que normalmente al presentarse la apelación escrita el
imputado ya estará en libertad.

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Finalmente, además de laposibilidad d eimpugnar via apelación la resolución que ordena o mantiene la
prisión preventiva, el imputado siempre tiene a su disposición la acción constitucional de amparo del
art. 21 CPR, especialmente en aquellos casos en los cuales no puede apelar (por ejemplo, juez de
garantía rechaza de plano su solicitud y no han transcurrido más de seis meses).
7. Ejecución. La autorización de salida diaria.

Durante su ejecución, el imputado debe permanecer separado de los condenados y ser tratado como
inocente, la afectación a sus derechos solo debe ser necesaria para evitar la fuga y garantizar la seguridad
de las demás personas del recinto penitenciario. Cualquier restricción que haga la autoridad del recinto
deberá ser comunicada al tribunal, pudiendo dejarla sin efecto. Existe la posibilidad de conceder al
imputado excepcionalmente un permiso de salida por el día o un período determinado.
8. Límites temporales y terminación

Si el imputado cumple en prisión preventiva la mitad del periodo de privación de libertad que debiera
sufrir si fuese condenado el tribunal citará a una audiencia para discutir su continuación. En todo caso,
la disposición permite que tras la discusión la prisión preventiva pueda continuar. A nuestro juicio la
medida cautelar no debería superar las dos terceras partes. El tribunal está obligado a poner término a la
prisión preventiva cuando se dicte sentencia absolutoria o sobreseimiento definitivo o temporal, aun no
estando firmes, eventualmente podría interponerse una medida del art. 155.
J. Medidas cautelares personales del art. 155
Estas medidas son tratadas por el legislador con un carácter residual “otras medidas cautelares
personales”, llama la atención pues son las que se aplican con más frecuencia. Su origen viene de hace
unas cuatro décadas en derecho comparado por la alta cantidad de internos en cárceles no estando
condenados.
1. Características
a) Debe haberse formalizado la investigación.
b) Procede a petición del fiscal, querellante o de la víctima
c) Se aplica supletoriamente las reglas de la prisión preventiva en cuanto a la procedencia,
duración, impugnación y ejecución. No se señala fumus boni iuris, solo alude al periculum in
mora al disponer que proceden para garantizar el éxito de las diligencias de investigación o la
seguridad de la sociedad, proteger al ofendido o asegurar la comparecencia del imputado a las
actuaciones. Se estima que el supuesto material es también exigible.
d) Son de aplicación preferente a la prisión preventiva (esta última procede cuando las demás son
consideradas insuficientes)
e) La diferencia entre estas y la prisión preventiva se halla en la necesidad de cautela. Los
antecedentes a invocarse para el fumus boni iuris son los mismos. Mientras que en el periculum
in mora si son insuficientes los antecedentes para justificar la prisión preventiva, suele
concederse las del art. 155 sobre la base de los mismos antecedentes.
f) Puede imponerse una o más.
g) Una vez decretadas, el tribunal debe ordenar las actuaciones y comunicaciones necesarias.
h) De ser incumplidas se permite la imposición de la prisión preventiva.
i) Le cabe apelación y acción constitucional de amparo.

2. Análisis en particular
a) La privación de libertad, total o parcial, en su casa o en la que el propio imputado señalare, si
aquélla se encontrare fuera de la ciudad asiento del tribunal
b) La sujeción a la vigilancia de una persona o institución determinada, las que informarán
periódicamente al juez.
c) La obligación de presentarse periódicamente ante el juez o ante la autoridad que él designare.
(Esto es lo que se conoce como ir a firmar, es la que más se impone)

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d) La prohibición de salir del país, de la localidad en la cual residiere o del ámbito territorial que
fijare el tribunal. (Lo primero es relativamente fácil de controlar vía Policía Internacional o
PDI, pero lo segundo no)
e) La prohibición de asistir a determinadas reuniones, recintos o espectáculos públicos, o de
visitar determinados lugares.
f) La prohibición de comunicarse con personas determinadas, siempre que no se afectare el
derecho a defensa.
g) La prohibición de aproximarse al ofendido o su familia y, en su caso, la obligación de
abandonar el hogar que compartiere con aquél.
h) La prohibición de poseer, tener o portar armas de fuego, municiones o cartuchos.

K. Medida cautelar especial del art. 156 bis


“En los casos de investigaciones por fraude en el otorgamiento de licencias médicas, el tribunal podrá,
en la oportunidad y a petición de las personas señaladas en el art. 155, decretar la suspensión de la
facultad de emitir dichas licencias mientras dure la investigación o por el menos plazo que,
fundadamente, determine”.
Parece curioso su ubicación dentro del párrafo de “otras medidas cautelares personales” puesto que
estas implican una privación o restricción de libertad ambulatoria del imputado, nada de lo cual acá
sucede. Además, de ser sorprendido flagrante realizando la conducta podría llegar a ser detenido. Es
extraño que la disposición obligue al tribunal a fijar un plazo de duración, pues nada de eso ocurre en
las otras medidas cautelares del CPP. Por otro lado, es evidente que esta medida cautelar especial no se
orienta a la consecución de ninguno de los fines del procedimiento. Finalmente, si bien el precepto
remite al art. 155 en la oportunidad o intervinientes que la pueden solicitar, no queda claro lo que
ocurre con la procedencia, impugnación o ejecución, le cabe el problema si procede o no la apelación,
por ejemplo.

3. LAS MEDIDAS CAUTELARES REALES (Art. 157 y 158)

a. Concepto
Ciertas medidas privativas o restrictivas de libertad de administración o disposición de bienes que el
tribunal puede adoptar en contra del imputado , para asegurar los fines civiles del procedimiento y
eventualmente , los fines penales (cuando la pena tenga un contenido patrimonial).
Son las mismas que las del art. 290 del CPC (secuestro de la cosa objeto de la demanda, nombramiento
de interventor, retención de bienes, prohibición de celebrar actos o contratos y otras medidas no
autorizadas expresamente por la ley).
b. Requisitos
1. Fumus boni iuris: Surge la duda sobre si es exigible, dado que a diferencia de las medidas
cautelares personales, no hay una referencia expresa sobre el punto. A su vez, el art. 298 CPC
al que se remite le 157 CPP, exige que se acompañen comprobantes que constituyan a lo
menos presunción grave del derecho que se reclama (antecedentes que justifiquen el hecho
punible y la participación que se atribuye en él al imputado- si se pide por la víctima para
asegurar el proceso civil, debe además fundar su perjuicio)
2. Periculum in mora: Basta con las exigencias que contiene cada medida.
3. ¿Formalización de la investigación?
• →Para algunos si: Ya que el art. 230 establece la obligación de formalizar cuando requiera la
intervención judicial para la resolución de medidas cautelares, sin que la disposición distinga
entre medidas cautelares reales y personales. Además el art. 61, señala que luego de la
formalización la victima puede preparar la demanda civil solicitando la práctica de diligencias
para esclarecer los hechos que serán objeto de su demanda y agrega, que puede pedir una
medida cautelar real.

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• →Para otros no: Pues el código no lo establece expresamente. Además, el art. 157 señala que
se pueden solicitar durante la etapa de investigación – y esta comienza antes de la
formalización-
c. Legitimado activo
Pueden ser solicitadas por el MP o por la víctima- se haya querellado o no-. (por tanto un querellante
no victima no puede solicitarlas)
d. Plazo para presentar la demanda civil
Una vez decretada la medida cautelar real, el plazo para presentar la demanda civil es de 15 días antes de
la fecha fijada para la realización de la audiencia de preparación del juicio oral. Y si se trata de un
querellante victima, debe hacerlo junto con su escrito de adhesión a la acusación del fiscal o de
acusación particular.
e. Impugnación
Art 158. Recurso de apelación. Sobre las resoluciones que “dan lugar o niegan las medidas” además, de
las que las mantienen o revocan.
f. Efectos
1. Se interrumpe la prescripción de la acción civil (si no se presenta la demanda civil, la
prescripción se considerará como no interrumpida)
2. Se determina la calidad de imputado de la persona en contra de quien se pide la medida (art. 7
inc. 2)


CAPITULO VII
SÍNTESIS DEL PROCEDIMIENTO ORDINARIO
La sentencia definitiva del procedimiento ordinario es de única instancia, por tanto inapelable- la única
posibilidad de recurrirla es a través de un recurso de nulidad-. En el caso del juicio simplificado pasa lo
mismo, más no en el procedimiento abreviado donde únicamente cabe apelación. Además, el tribunal
JOP tiene amplias facultades para pronunciarse sobre todas las cuestiones de hecho y derecho
invocadas y que respete el principio de congruencia (no condene por hechos distintos en la acusación).

1. Etapa de investigación
Su objetivo es el que el MP averigüe todo lo relativo a la existencia del hecho punible y la participación
(cuanta con el auxilio de la policía y tiene facultad para requerir información de toda persona,
institución o autoridad). El MP recopila evidencia, de la que se deja constancia en un registro, pero
carecerá de valor probatorio si no se incorpora luego en el juicio oral.
Durante esta etapa el fiscal puede hacer uso de los mecanismos de selección de casos (archivo
provisional , facultad de no inicio y principio de oportunidad en sentido estricto).
El fiscal procederá a formalizar la investigación.
En esta etapa también se pueden realizar las diligencias de investigación intrusivas (aquellas que afectan
derechos del imputado o de otras personas y que solo pueden llevarse a cabo con autorización del juez
de garantía, las que por RG solo pueden realizarse luego de la formalización).
También existen medidas de descongestión del sistema: como los acuerdos reparatorios o la suspensión
condicional del procedimiento.
Una vez que el fiscal realiza todas las diligencias de investigación se procede al cierre de la investigación
(aunque también ocurre este si se agotó el tiempo de investigación).

2. Etapa intermedia o de preparación del juicio oral


El fiscal puede –una vez cerrada la investigación-
• Solicitar el sobreseimiento definitivo o temporal al JG.
• Comunicar su decisión de no perseverar

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• Formular acusación (por escrito, la que contiene los hechos por que se causa, la participación
que se atribuye y la prueba que se presentará en el juicio oral)
El JG una vez presentada la acusación, debe citar a los intervinientes a la audiencia de preparación de
juicio oral que tiene por finalidad que los intervinientes muestren las pruebas que utilizarán, controlar la
acusación- la que puede ser corregida en sus errores formales- y fijar el objeto del juicio oral
determinando los medios de prueba que se podrán rendir en él.
La audiencia termina con la dictación de la resolución llamada auto de apertura del juicio oral (que
contiene los hechos, la participación y los medios de prueba) la que se envía al TJOP.
3. Etapa de juicio oral
Se rige por los principios de: inmediación, contradictoriedad, imparcialidad, oralidad, publicidad,
presunción de inocencia, continuidad y concentración.
• Todos los planteamientos se realizan de forma verbal
• No tiene valor la evidencia recopilada si no se incorpora como prueba en esta audiencia
• El tribunal valora la prueba con libertad, pero con el limite de la sana critica (reglas de la lógica,
máximas de experiencia y conocimientos científicamente afianzados)
• Solo se condena si se alcanza el grado de convicción más allá de toda duda razonable
• Se desarrolla en tres partes: actuaciones previas, el debate y la sentencia.
• Se puede renunciar al juicio oral
4. Con posterioridad a la sentencia: Impugnación y ejecución.

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