Resumen C4 - Williams Henry Grijalva Santos

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COGNICIÓN, APRENDIZAJE Y EMOCIÓN

En los salones de clases, existen los procesos de aprendizaje que dependen de múltiples
situaciones cuyo objetivo primordial es que el alumno aprenda y se relaciona con lo cognitivo
y lo emocional. Un nuevo debate en pedagogía dónde aparte del razonamiento consciente, el
segundo elemento del aprendizaje son las emociones, la neurobiología de la emoción nos
ofrece relevantes datos sobre la emoción, la cognición y el aprendizaje, importantes en el
surgimiento del constructivismo.

Las respuestas emocionales poseen componentes fisiológicos para la correcta manifestación


de la conducta emocional. Existen determinadas estructuras cerebrales, así como mecanismos
hormonales y humorales, cuya actividad es necesaria para que ocurran las emociones.
Aunque es un aporte interesante a considerar, es una visión un tanto simplista, aspecto
esencial en el entendimiento de las emociones es la implicación del sistema límbico. Es
conocido que la activación de un organismo es el resultado de la interacción de varios
sistemas y estructuras, resultando que la corteza no es siempre el máximo órgano de la
activación de un organismo.
El control ejercido desde el sistema límbico, concretamente desde la amígdala y el
hipocampo, sobre la corteza se lleva a cabo de varias forma, los procesos emocionales
implican complejos mecanismos de ajuste y equilibrio funcional (homeostasis) que
garantizan la capacidad adaptativa básica de cualquier organismo. Por otra parte, también
enfatizar que la emociones representan un momento del proceso motivacional afectivo en el
que se puede perfilar cómo una emoción es el resultado de una conducta motivada. Las
emociones reflejan la relación entre los motivos (necesidades) y la probabilidad de éxito de
realizar la conducta apropiada para llegar al objetivo o meta que satisface la necesidad, es
decir, el planteamiento de las emociones como motivadoras de conductas.
Por último, algunas de las últimas aportaciones de la neurociencia afectiva, es que las
emociones son experimentadas continuamente, nuestro estado emocional varía a lo largo del
día en función de lo que nos ocurre y de los estímulos que percibimos. Esto no quiere decir
que siempre seamos conscientes de ello y que sepamos describir qué tipo de emoción
tenemos en un momento dado. Para entender el aspecto cognitivo de la emoción son
respuestas inmediatas del organismo que le informan de lo favorable o desfavorable de una
situación o estímulo concretos. Si la situación parece favorecer la supervivencia, la emoción
experimentada sería positiva (alegría, satisfacción, etc.), de lo contrario se experimentaría
una emoción negativa (tristeza, rabia, miedo). De esta forma, los organismos vivos disponen
de una "brújula" que va buscando aquellas situaciones que son favorables a su supervivencia
y alejándole de aquellas que son negativas para la supervivencia. En las aproximaciones
cognitivas iniciales de la emoción se defendía que la reacción ante una situación es de tipo
fisiológico, consistente en un incremento difuso y generalizado de la activación.
Posteriormente, la interpretación cognitiva de dicha reacción fisiológica es la que
determinará la cualidad de la emoción.
Como un concepto compuesto de activación fisiológica y cognición tiene importantes
implicaciones, se sugiere considerar como herramienta cognitiva la "Psicoeducación",
término muy utilizado, pero en diferentes contextos y, por consiguiente, con distintos
contenidos. Por lo tanto las emociones tienen alguna utilidad, incluso las emociones más
desagradables tienen funciones importantes en la adaptación social y el ajuste personal y
permite que el sujeto ejecute con eficacia las reacciones conductuales apropiadas y ello con
independencia de la búsqueda del placer, supresión del dolor y las angustias, que generen.
Nadie duda de que los seres humanos experimentan cada día su existencia la ¨consciencia¨
de cada individuo es indisoluble, única e inigualable de ahí la importancia de la educación
con emoción es mejor, tan importante la educación académica como la educación emocional,
tan ligadas una de la otra es imposible desarrollar una formación separadas, el acto de educar
se da entre dos actores los educandos y los educadores, debemos de poner atención que los
segundos influyen sobre las emociones y los sentimientos de los primeros, recordando que
el pegamiento del aprendizaje es sin duda la emoción

Aprendemos mucho de todo, menos de gestión emocional, de aprovechar la emoción para


los aprendizajes mejor ni hablamos, dónde se involucra , la cognición, el movimiento
corporal, preguntas, dinámicas y sobre todo neuro-herramientas, un extenso aprendizaje
sobre el cerebro límbico para que el neuro-educador proponga en el aula una nueva mirada
en la enseñanza aprendizaje, es urgente una nueva manera de enseñar , es urgente una nueva
manera de aprender y tomar consciencia emocional es imprescindible.

Esto significa que, las emociones son eventos o fenómenos de carácter biológico y cognitivo,
que tienen sentido en términos sociales. Se pueden clasificar en positivas cuando van
acompañadas de sentimientos placenteros y significan que la situación es beneficiosa, como
lo son la felicidad y el amor; negativas cuando van acompañadas de sentimientos
desagradables y se percibe la situación como una amenaza, entre las que se encuentran el
miedo, la ansiedad, la ira, hostilidad, la tristeza, el asco, o neutras cuando no van
acompañadas de ningún sentimiento, entre las que se encuentra la esperanza y la sorpresa.

Las emociones se clasifican además según la respuesta que brinda el sujeto como de alta o
baja energía, por último, es importante destacar que es posible que se manifiesten distintas
emociones a la vez, cada día el salón de clases se desbordan las emociones, las emociones
que más convivan en la enseñanza aprendizaje se convertirá en el estado de ánimo de los
alumnos, lo importante y urgente es saber si los niños dispuestos aprender lo hacen mal por
la falta de estímulo emocional del maestro en turno.

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