Estudio Calidad de Vida

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Gustavo Francisco Petro U.

Alcalde Mayor

María Mercedes Maldonado Copello


Secretaria Distrital de Planeación

Roberto Prieto Ladino (E)


Carmelita Serna Ríos (Saliente)
Subsecretario de Información
y Estudios Estratégicos

Ariel Eliécer Carrero Montañez


Director de Estratificación

Mario Humberto Ruiz Sarmiento


Julieta Rodriguez Gonzalez
Mery Isabel Parada Avila
Wilson Mauricio Osorio Fonseca (Fotografía)
Dirección de Estratificación
Catalogación en la publicación Universidad Nacional de Colombia
Muñoz Conde, Manuel –1952
Calidad de vida urbana y Capacidad de pago en los hogares bogotanos / Manuel Muñoz Conde, Oscar
Fresneda Bautista, Luís Ignacio Gallo Peña, Jorge Martínez Collantes, Álvaro Moreno Rivas, Hugo Torres
Arias, Oscar Villamizar Díaz. – Alcaldía Mayor de Bogotá. Secretaría Distrital de Planeación. Universidad
Nacional de Colombia. Facultad de Ciencias Económicas. Centro de Investigaciones para el Desarrollo,
CID, 2012.
ISBN:
1. Calidad de vida – Bogotá 2. Economía del bienestar 3. Indicadores económicos – Bogotá 4. Plani-
ficación económica. 5. Planificación urbana. I. Fresneda Bautista, Oscar II. Gallo Peña, Luís Ignacio
III. Martínez Collantes, Jorge IV. Moreno Rivas, Álvaro V. Muñoz Conde, Manuel VI. Torres Arias,
Hugo VII. Villamizar Díaz, Oscar.
CDD-14 330.9 / 2012

Universidad Nacional de Colombia


Facultad de Ciencias Económicas
Centro de Investigaciones para el Desarrollo
Calle 44 # 45 – 67 Unidad Camilo Torres, Bloque 4
Bogotá D.C. Colombia
Teléfono: (57-1) 3165000 – Extensión: 10357
Fax: (57-1) 3165000 – Extensión: 10359
www.cid.unal.edu.co

Secretaría Distrital de Planeación - Dirección de Estratificación


Carrera 30 # 26 – 90
Teléfono: (57-1) 3358000
www.sdp.gov.co

Primera edición
Bogotá D.C. – junio de 2012
ISBN: XXX-XXX-XXX-XXX-X
Hecho en Colombia.

Editor: Álvaro Moreno Rivas


Corrección de estilo: Oscar Enrique Alfonso
Diseño de carátula: Oficina de Comunicaciones y
Fotografías: Mauricio Osorio Fonseca
Diseño, diagramación
e impresión: Marca Publicidad Ltda.

Está prohibida la reproducción total o parcial de este libro sin autorización expresa de la Secretaría
Distrital de Planeación – SDP, de la Alcaldía Mayor de Bogotá, y del Centro de Investigaciones para
el Desarrollo – CID, de la Universidad Nacional de Colombia.
Universidad Nacional de Colombia

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Rector

Jorge Iván Bula Escobar


Vicerrector General

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Vicerrector Académico

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Secretaria General

María Clemencia Vargas Vargas


Vicerrectora de la Sede Bogotá

Facultad de Ciencias Económicas

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de Ciencias Económicas

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Vicedecano Académico

Centro de Investigaciones para el Desarrollo - CID

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Director

Vilma Yolanda Narvaez Narvaez


Subdirectora (E)
Equipo de Investigación

Manuel Muñoz Conde*


Director Proyecto

Patricia Martínez Barragán


Coordinadora General

Investigadores

Oscar Fresneda Bautista


Ignacio Gallo Peña
Jorge Martínez Collantes
Alvaro Moreno Rivas*
Hugo Torres Arias
Oscar Villamizar Díaz
Ricardo Bonilla González**

Nelson Pachón García


Estadístico

Salomón Bechara Senior


Investigador Asistente

Stella Valbuena Correa


Auxiliar de Investigación

* Profesores Facultad de Ciencias Económicas Universidad Nacional de Colombia


** Actual Secretario de Hacienda Distrital y quién hizo parte de la Investigación en su primera fase, cuando era investigador del Centro
de Investigaciones para el Desarrollo - CID.
CONTENIDO

Pág.

PRESENTACIÓN 8
INTRODUCCIÓN 8
1 ASPECTOS CONCEPTUALES Y METODOLÓGICOS DEL ÍNDICE DE LA CAPACIDAD DE PAGO:
MEDICIÓN Y COMPARACIÓN 10
1.1 Orígenes del concepto y del índice de capacidad de pago 12
1.2 Problemas y perspectivas del uso del concepto de capacidad de pago en Colombia 14
1.3 Una aproximación compresiva e integral del método de la capacidad de pago 16
1.3.1 El enfoque convencional del consumidor y la capacidad de pago 16
1.3.2 Un nivel de bienestar constante 18
1.3.3 La disposición a pagar 19
1.4 Jerarquía de necesidades y ordenamientos lexicográficos: un marco general
para la capacidad de pago 21
1.5 La capacidad de pago y el enfoque de calidad de vida de Amartya Sen (primera aproximación) 27
1.6 Demanda jerárquica y la capacidad de pago: un enfoque de necesidades 30
1.7 El Índice de Capacidad de Pago de los hogares bogotanos 35
1.7.1 Estimación y cálculo de los componentes del Gasto Mínimo en Bienes Básicos
de los hogares bogotanos 37
1.7.2 Cálculo y resultados del Índice de Capacidad de Pago de los hogares bogotanos (ICP) 45
1.7.3 Una mirada a la estructura del gasto de los hogares desde diversos criterios de clasificación
de la unidad de análisis, con énfasis en los gastos en vivienda y los servicios públicos domiciliario 48
1.7.4 Elasticidades gasto y precio 57
1.7.5 Evolución del Índice de Capacidad de Pago de Bogotá 2003-2011 63
Apéndice 1.1 69
Apéndice 1.2 Determinantes microeconómicos del ingreso esperado de los hogares 72
Justificación 72
Ingresos esperados 72
Fuentes de ingresos 73
Las variables determinantes del ingreso 75
Método de estimación 76
Resultados 77

2 MEDICIÓN Y ANÁLISIS DEL ÍNDICE DE CALIDAD DE VIDA URBANA 79


2.1 Orígenes del concepto y del índice de calidad de la vida urbana 79
2.1.1 Calidad de vida: ‘capacidades’ y ‘funcionamientos’ 79
2.1.2 Diversidad constitutiva del concepto de Calidad de vida 82
2.1.3 Capacidades, necesidades y derechos humanos 83
2.1.4 La calidad de vida urbana 84
2.2 Aspectos metodológicos y operativos de la medición del Índice de Calidad de Vida Urbana 89
2.2.1 Las dimensiones de la calidad de vida urbana 89
2.2.2 El esquema propuesto 94
2.2.3 Niveles y enfoques metodológicos para evaluar la calidad de vida 108
2.2.4 Características de los índices de calidad de vida 111
2.3 Índice de Calidad de Vida Urbana: construcción y resultados por dimensiones 113
2.3.1 Procedimiento general para construir el índice 114
2.3.2 Indicadores seleccionados, ponderaciones obtenidas y cálculo de índices por dimensiones 117
2.3.3 Resultados principales 122
CONCLUSIONES 136
BIBLIOGRAFÍA 138
Introducción

D esde 2004, el Departamento de Planeación Distrital e investigadores del


CID de la Universidad Nacional de Colombia han conjugado esfuerzos fi-
nancieros, académicos e institucionales para desarrollar una serie de estudios
sobre la capacidad de pago (ICP) y la calidad de vida de los bogotanos (ICVU).
El desarrollo de los análisis y la presentación de los principales resultados han
demandado el diseño y la aplicación de encuestas de hogares con diversos gra-
dos de complejidad, lo cual ha permitido afinar los instrumentos conceptuales
y metodológicos en el diseño de índices de capacidad de pago (ICP) y calidad
de vida urbana (ICVU).

El presente trabajo hace parte de dicho esfuerzo académico e interinstitucio-


nal. Su objetivo central es presentar tanto las propuestas metodológicas para
la construcción de índices de capacidad de pago (ICP) y calidad de vida urbana
(ICVU), como su aplicación a partir de la Encuesta Multipropósito de 2011.
En la medida que las sociedades se hacen más complejas y que los gobiernos
subnacionales se ven sometidos a un mayor escrutinio por parte de los ciuda-
danos, es esencial contar con indicadores compresivos y parsimoniosos con los
cuales se pueda examinar el impacto de las políticas públicas.

En este libro se incorporan importantes avances en la discusión conceptual y


metodológica sobre la construcción de índices de capacidad de pago y calidad
de vida urbana. En primer lugar, se refina el análisis de las decisiones de gasto
de los hogares en bienes y servicios a partir del enfoque de ordenamientos
lexicográficos. Ello permite tener en cuenta el resultado importante de que
los individuos y los hogares establecen jerarquías de necesidades a la hora de
asignar su presupuesto. Un aspecto importante de seguir este marco concep-
tual es que se restringen los grados de sustituibilidad entre bienes; es decir,
que los cambios de precios de bienes de lujo no tendrán efectos sobre el gasto
de bienes necesarios de los hogares. En este orden de ideas, el mecanismo
para mejorar la capacidad de pago de los hogares restringidos al gasto mínimo
en bienes básicos consiste en mejorar sus condiciones laborales y sus ingresos.

De otro lado, se siguen los enfoques modernos de capacidades para elaborar


el índice de calidad de vida urbana, lo que extiende la idea de bienestar a un
problema multidimensional que no solo abarca los efectos estándar del ingre-
so, sino que contempla otros aspectos esenciales que no se pueden reducir a la
renta pecuniaria. También se hace un esfuerzo por relacionar la capacidad de
pago con el enfoque de capacidades de Sen e integrarlo en el índice compre-
sivo de calidad de vida urbana como un componente adicional. Ello se realiza
partiendo del hecho que la capacidad de pago se puede interpretar como una
capacidad básica de las personas, una idea no ajena al pensamiento inicial del
economista indio. Los resultados se presentan con diferentes clasificaciones.
Tanto el índice de capacidad de pago como el de calidad de vida urbana se
calcularon por estratos, localidades de la ciudad, clases sociales y quintiles de
ingreso. Se puede constatar sin dificultad que los patrones de los indicadores
son robustos a la clasificación, lo que permite hacer inferencias y sugerir algu-
nas medidas de política para mejorar en el futuro la línea base de 2011.

El libro consta de dos partes. En la primera (capítulo 1) se presentan los prin-


cipales desarrollos conceptuales y metodológicos del índice de capacidad de
pago. Se discuten los diversos enfoques a nivel histórico, nacional e internacio-
nal. Se muestra la pertinencia del enfoque de ordenamientos jerárquicos de las
necesidades y se aplican para construir un índice de capacidad de pago para
los hogares bogotanos. En la segunda parte (capítulo 2), se presenta el desa-
rrollo detallado y la discusión conceptual del enfoque de capacidades de Sen y
el debate internacional y local con otras vertientes y enfoques de la calidad de
vida. Se definen las dimensiones del indicador y se presentan los resultados
del indicador de calidad de vida urbana para Bogotá en 2011. Finalmente, se
resumen las principales conclusiones del estudio.
1
Aspectos conceptuales y metodológicos
del índice de la capacidad de pago:

medición y comparación
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

13

P ara empezar esta exposición sobre la


capacidad de pago conviene recordar
la interesante parábola con la que Sen (1999,
76-78) muestra la importancia de la estruc-
tar de las tres mujeres desempleadas. La de-
cisión será sencilla si se acota y se restringe el
conocimiento de la mujer A sobre la situación
de las aspirantes al cargo de jardineras. Pero
tura de la información a la hora de tomar el ejemplo nos da otra información que, en
decisiones con base en diversos criterios de este contexto, es más sustancial e importante
justicia. para entender las decisiones de las personas.

La situación es relativamente sencilla. Existen La mujer A no sólo tiene satisfechas sus nece-
cuatro mujeres: A, B, C y D. La mujer A desea sidades básicas, además tiene acceso a recur-
contratar a una persona para que le arregle sos financieros para contratar trabajo externo
su jardín. Tres mujeres desempleadas desean al hogar y satisfacer necesidades superiores;
obtener el trabajo, B, C y D. B es la más pobre como el disfrute de la belleza del paisaje y de
de las tres. C no era pobre, pero sufrió una las flores de su jardín. Las mujeres B, C y D
calamidad que le redujo sus medios de vida no tienen la posibilidad de elegir; carecen de
por debajo de la línea de pobreza, por ello es ingresos y riqueza. Al parecer, aun no pueden
la que más sufre su nueva condición. D es la satisfacer sus necesidades básicas. Esto es
menos pobre de las tres; sin embargo, padece evidente, pues la única manera en que pue-
una enfermedad terrible que reduce su cali- den obtener dinero es tener éxito en el mer-
dad de vida, pese a que lleva sus privaciones cado laboral. En una economía monetaria de
con buen ánimo. producción, el acceso a los bienes está media-
do por la moneda. El dinero compra bienes,
Sen le otorga a la mujer A la virtud de ser los bienes compran dinero, pero los bienes no
una persona reflexiva; lo que la obliga a es- compran bienes.
grimir algún criterio adicional, a la mera ha-
bilidad y competencia de las mujeres en el “Aquellos quienes no tienen la habilidad para
oficio de jardinera, para otorgar el contrato actuar por su propia cuenta tomando dinero
laboral. Desde una perspectiva igualitaria, no no de los bancos sino de individuos privados e
cabe duda que la mujer B debe ser la elegida: independientes, como lo son los trabajadores
“¿qué puede haber más importante -se pre- asalariados, no pueden experimentar banca-
gunta- que ayudar a la más pobre?” Pero, si rrota pero su existencia está ligada al deseo
la mujer C es la que más sufre, “no cabe duda de estos empresarios (quienes controlan, di-
-se dice- de que la primera prioridad debe ser recta o indirectamente, la manera en que su
que deje de estar triste”; ni más ni menos que fuerza de trabajo es gastada); una vez en po-
el argumento utilitarista. Finalmente, si le da sesión del dinero, el asalariado puede gastar
el trabajo a la mujer D, considera que “influi- libremente en el mercado”. (Cartelier, 1991,
ría muchísimo en la calidad de vida y en la 261-262).
libertad de padecer la enfermedad”; O sea, el
principio de capacidades. Es decir, la relación más importante -implícita
en la parábola de Sen- no es la información
Aunque Sen insiste en que la estructura de de que dispone la mujer A, sino la asimetría
información condiciona la decisión, su interés que existe entre ésta empresaria de las flores
se limita a la información del grado de males-
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

14

y las trabajadoras desempleadas. La primera fuerza de trabajo a empresarios independien-


dispone de medios financieros que obtiene tes. Sin capacidad de pago no existe capacidad
directamente de los bancos, mientras que las de estar bien alimentado, bien educado y go-
últimas tienen que someterse a los deseos, zar de una buena vida. Como lo expresa Paul
expectativas y criterios de justicia de la seño- Davidson (1978, 79-80): “después de todo, en
ra A. El problema no es tan elemental como lo los libros de texto elemental, los economistas
presenta Sen. Es insuficiente contar con em- han señalado siempre que la demanda de bie-
presarios reflexivos. En verdad, la estructura nes depende del deseo más la capacidad de
pecuniaria y monetaria del capitalismo es la pago. En una economía monetaria, la capaci-
que finalmente limita el acceso de las mujeres dad de pago implica la posesión de saldos para
B, C y D a los medios de pago, y por ende, transacciones”.
subordina sus necesidades y calidad de vida
a las condiciones de acumulación y demanda En el gráfico 1 se presenta un esquema que
efectiva a nivel agregado. resume lo dicho. Para mostrar los argumen-
tos, se supone que existen dos empresarias de
La capacidad de pago depende del acceso al las flores A y A’. La tecnología para arreglar
dinero, por ello para la mayoría de las perso- sus jardines es Leontief, cada una requiere un
nas que carecen de acceso directo al sistema solo trabajador. Las mujeres B, C son pobres y
financiero y no poseen medios de subsistencia, desempleadas.
la única manera de obtenerlo es vendiendo su

Gráfico 1
El Sistema del circuito monetario

Fuente: adaptado de Cartelier (1991)

El circuito monetario se explica de la siguiente ras B y C reciben sus salarios y los gastan en
manera. Las empresarias A y A’ estiman las los bienes que ofrecen las empresarias A y A’.
ventas de flores que esperan tener en el si- Una vez ellas reciben los ingresos por las ven-
guiente período; dada la tecnología, deciden tas derivadas de los gastos de B y C y de otros
contratar cada una a un jardinero, las mujeres empresarios, pagan sus deudas al banco, des-
B y C. Para adelantar los gastos de capital de truyendo el dinero creado inicialmente, ce-
trabajo y salarios, piden prestado a los bancos. rrando el circuito monetario. En este momen-
Una vez se abren las cuentas T giran sobre to debe quedar clara la asimetría entre los
ellas para cancelar los salarios. Las trabajado- diversos tipos de agentes del modelo. Son los
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

15

empresarios y los bancos los que definen las Se muestra la importancia de los ordenamien-
condiciones iniciales del flujo monetario. Los tos jerárquicos o lexicográficos para derivar el
trabajadores acceden a los medios de pago gasto mínimo en bienes básicos (GMBB) y se
únicamente si logran realizar sus planes de propone un índice de capacidad de pago (ICP)
venta de su fuerza de trabajo. Como lo mostró para los hogares bogotanos. A partir de la in-
Keynes ello no está garantizado a nivel agre- formación de la Encuesta Multipropósito de
gado. En general, la demanda efectiva se en- Bogotá de 2011, se calcula el índice de capa-
cuentra siempre por debajo del pleno empleo. cidad de pago y se hace un estudio detallado
y extensivo de la estructura del gasto de los
En este capítulo se presenta una reflexión con- hogares bogotanos.
ceptual y analítica sobre la capacidad de pago.

1.1
Orígenes del concepto y del índice de capacidad de pago

La capacidad de pago surge en el contexto de Tabla 1


la teoría fiscal clásica, que lo consideraba un Indicadores subjetivos de capacidad de pago
criterio justo para definir la participación de
los individuos en el pago de impuestos. Desde
el siglo XVI, pensadores de diversas vertien-
tes propusieron la “capacidad de pago” como
principio para justificar la tributación propor-
cional en el financiamiento de los bienes pú-
blicos. Como lo sostiene Musgrave (1967,95):
“la idea de capacidad de pago, además, apun-
ta a través de la imposición progresiva para la
financiación de los servicios públicos, hacia el
Fuente: Musgrave(1967, 100)
problema, más general, de la redistribución
de la renta”.
El problema, en la propuesta de Mill, es que
Con la revolución marginalista, el criterio ob- no existe un criterio objetivo y claro para ele-
jetivo de “capacidad de pago” fue desplazado gir una de estas fórmulas. Además, el enfoque
por un indicador subjetivo-utilitarista. Mill subjetivo redujo el principio de capacidad de
estableció que el indicador que medía de me- pago a un problema individualista; dejando de
jor manera la capacidad de pago era el “sacri- lado aspectos centrales como la estructura de
ficio igual”. Sin embargo, no profundizó en lo clases de la sociedad. Si bien es cierto que la
que entendía por sacrificio igual. De hecho, capacidad de pago es consistente con un es-
se puede hablar de sacrificio absoluto igual, quema progresivo de imposición, lo importan-
sacrificio proporcional igual y sacrificio mar- te es resaltar que autores como James Mill lo
ginal igual. Cualquiera que sea la definición consideraron un criterio superior al principio
elegida, el análisis necesitaba asumir la po- del beneficio; ya que este último tiene el ca-
sibilidad de hacer comparaciones interperso- rácter de un resultado regresivo. De donde,
nales de bienestar y que la utilidad marginal como los pobres requieren mayor protección
del ingreso fuera decreciente. En la Tabla 1 del Estado, estos tendrían que contribuir a los
se presentan los indicadores subjetivos de la ingresos públicos en una proporción superior
capacidad de pago. que la contribución de los ricos.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

16

Myrdal (1967) mostró las debilidades y las fa- ria de los individuos, definida en un sentido
lacias del análisis del Mill. Señaló, entre otras amplio; que incorpore los flujos de ingresos
cosas, que la utilidad marginal de la renta era provenientes de la actividad económica co-
inobservable; pues era un objeto metafísico, rriente al igual que las rentas derivadas de los
incluso si se pudiera estimar, el ejercicio re- activos financieros y reales de los ciudadanos.
quería reunir una gran cantidad de informa-
ción que difícilmente estaba disponible para En otras palabras, “la renta personal puede
los planificadores. Por último, consideró que definirse como la suma algebraica de: 1) el
la idea de capacidad de pago introducía un su- valor de mercado de los derechos ejercidos en
puesto implícito al igual que el principio del el consumo, y 2) el cambio en el valor acu-
beneficio. Ese supuesto era ni más ni menos mulado de los derechos de propiedad entre el
que la distribución de la renta y de la propie- principio y el final del periodo en cuestión”2.
dad inicial era justa; es decir que: la política Se introdujeron criterios progresivos en los
tributaria debería ser neutral en torno a la dis- bajos niveles de renta. Por ejemplo, se consi-
tribución inicial. deró necesario excluir, del pago de impuestos,
las rentas de subsistencia o las que cubrían
Sin embargo, los orígenes del concepto y del las necesidades básicas; así, la renta imponi-
índice de la capacidad de pago se justificaron ble era el ingreso neto del gasto en cubrir las
inicialmente en relación con criterios objeti- necesidades primarias de las personas.
vos como la renta y la propiedad de los indi-
viduos. Por ejemplo, según Adam Smith: “Los Posteriormente se incorporó la necesidad de
súbditos de todo Estado deberían contribuir al distinguir entre la renta ganada (salarios) y
sostenimiento del gobierno, tanto como sea la no ganada (de capital). “Bajo esta discri-
posible, en proporción a sus respectivas posi- minación, estaba la idea de que el sacrificio
bilidades; esto es, en proporción a las rentas implicaba no sólo una pérdida de disfrute de
que disfrutan respectivamente bajo protec- la renta, sino también el dolor de haber sufri-
ción del Estado”1. do en vano la desutilidad de ganar esa renta”
(Musgrave, 1967,98).
En ese sentido, el indicador objetivo para me-
dir la capacidad de pago era la renta moneta-

1.2
Problemas y perspectivas del uso del concepto de capacidad
de pago en Colombia

En Colombia, dos trabajos de investigación tarifas de los servicios públicos, contemplan-


han usado el principio de la capacidad de pago do capacidad de pago, y aspectos de cobertura
en la evaluación de las tarifas de los servicios y jurídicos de los subsidios. En este sentido,
públicos. El CID (2004) presenta una reflexión puede decirse que el estudio del CID enfatiza
de la capacidad de pago a partir de la teoría en la participación de los hogares en el pago
de utilidad ordinal y realiza análisis empíricos de los servicios, mientras que Ramírez (2007)
reduciendo la capacidad de pago al ingreso- extiende el análisis incorporando costos y fi-
gasto del hogar sin considerar la riqueza fi- nanciamiento del bien público.
nanciera. Ramírez (2007) evalúa la política de

1/
Citado por Musgrave (1967,68).
2/
Haig y Simona, citado por Atkinson y Stiglitz (1980).
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

17

El CID (2004, 13-14) considera que esta a los hogares de manera arbitraria y a teórica
aproximación al problema de la equidad en las en 10 grupos de ingresos. Algo así como un
tarifas de los servicios públicos es insuficien- ejercicio estadístico sin teoría.
te. De hecho, afirma:
Una alternativa sería tomar en serio la estruc-
“La equidad exige un compromiso que se tra- tura social y dividir los hogares en clases so-
duzca en una redistribución de la riqueza de la ciales disjuntas. Para ello se requiere definir
ciudad. Y los criterios distributivos tienen que el concepto de clase y establecer las fronte-
ser definidos en la esfera política. Las comi- ras entre una clase y otra. Literatura reciente
siones de regulación se han conformado con ha propuesto criterios como los derechos de
exigir subsidios cruzados. De manera equivo- propiedad sobre los activos que otorgan ren-
cada han pensado que esta redistribución es tas de monopolio a sus poseedores, lo que les
suficiente para garantizar equidad. Los he- garantiza ventajas sobre los no propietarios.
chos están mostrando que no basta con subsi- Entre los activos que la literatura señala es-
dios cruzados. Si se quiere que el sistema tari- tán: activos financieros, la tierra, el capital
fario sea equitativo debe tomarse seriamente cultural y el poder para la administración. A
la propuesta de George, Hotteling y Vickrey: lo anterior se le complementa con análisis de
los servicios públicos de la ciudad se financian las posiciones ocupacionales, prestigio y esta-
con la riqueza que genera la aglomeración ur- tus socioeconómico (Sorensen, 2000. Wolf and
bana. La financiación equitativa de los servi- Zacharias, 2007)3.
cios públicos no nace de los subsidios cruza-
dos sino de la riqueza de la ciudad”. Recientemente, el DANE (2011) presentó una
nueva aproximación al tema de capacidad de
En otras palabras, la capacidad pago se ex- Pago utilizando la Encuesta Multipropósito
tiende del nivel del hogar a la sociedad. Es (EMB). En un primer momento, se pretende
importante anotar que en los dos estudios se construir un índice de capacidad de pago a
encuentra que la estratificación no es un buen partir de los flujos de ingresos y gastos fami-
indicador de la capacidad de pago de los ho- liares con el fin de responder a tres requeri-
gares. Los análisis muestran que tanto a nivel mientos prácticos: (i) establecer la capacidad
nacional y de la región de Bogotá, se presen- tributaria del hogar o su condición como suje-
tan serios problemas de traslapes entre estra- to de subsidios; (ii) constituirse como medida
tos bajos con hogares en los deciles altos de aproximada del bienestar social, vía la capaci-
ingreso. De allí que pueda afirmarse que ho- dad para obtener en el mercado los bienes y
gares con ingreso altos, no solo pagan tarifas servicios que les son necesarios para alcanzar
menores, sino que posiblemente reciben sub- un nivel determinado de calidad de vida; y (iii)
sidios cruzados. Es decir: no contribuyen al la “capacidad de pago financiera” de los hoga-
financiamiento del bien público en el sentido res para poder acceder a la economía formal.
que establece la capacidad de pago, generan-
do resultados regresivos o no proporcionales El problema de la capacidad de pago (CP) se
en la provisión de servicios públicos. aborda, desde el marco convencional de la
teoría neoclásica, a través del problema dual
Estos problemas de cruces y traslapes entre de la teoría del consumidor. Dicho enfoque
estratos y deciles de ingreso no son fáciles de ofrece la posibilidad de conocer las elasticida-
corregir. Son resultado de ordenar y distribuir des precio e ingreso de la demanda, con lo que

3/
Ver apéndice 5.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

18

se obtiene la reconfiguración de la composi- En segundo lugar, se busca conceptualizar y


ción del consumo ante cambios en los precios estimar un índice de riqueza; mediante mé-
relativos de los bienes y modificaciones en todos de componentes principales, que per-
los ingresos. Para caracterizar los hogares, de miten discriminar a los hogares por estatus
acuerdo a su CP, se tuvieron en cuenta varia- socioeconómico. El índice de riqueza permite
bles de propiedades del hogar, condiciones de capturar aspectos más estructurales o de largo
vida, pobreza, capital humano y tenencia de plazo. Se usan tres grupos de variables para la
bienes. Sobre esa base se clasificaron los ho- construcción de este índice: acceso a servicios
gares para después distribuirlos en quintiles públicos e infraestructura pública, entorno y
de ingresos corrientes. características de la vivienda y la propiedad de
activos durables (tenencia de computadores,
Los resultados de los ejercicios no son muy hornos microondas, horno eléctrico o a gas,
sorprendentes. En el caso del análisis por el carro, televisor LCD o plasma).
lado de los gastos, los cuales de dividieron en
6 categorías (Alimentos, Salud, Educación, El principal resultado es la fuerte correlación
Vivienda, Servicios y Otros), se encontró que que existe entre el quintil de ingresos y el
los hogares más pobres gastan en alimentos, quintil del índice. En general, el índice está al-
vivienda y servicios, el 60% del total; mientras tamente correlacionado con medidas transito-
que para los quintiles de ingresos superiores, rias de la capacidad de pago. De todos modos,
el gasto en estas categorías es de apenas el es importante anotar que las variables elegi-
28%. Del lado de los ingresos se discrimina das, si bien reflejan decisiones de inversión en
por quintil y estrato; para comparar los pa- activos físicos por parte de los hogares, difí-
trones para ciertas variables como Educación, cilmente captan los aspectos más relevantes
Hacinamiento, Afiliación a la seguridad social de los balances de riqueza, expresados en los
y Tenencia de activos durables. derechos de propiedad sobre los flujos de ren-
dimientos de las empresas y los bancos.

1.3
Una aproximación compresiva e integral del método
de la capacidad de pago

A continuación se presenta un análisis del 1.3.1


criterio de la “capacidad de pago” desde dos El enfoque convencional del consumidor
ópticas. La primera es un acercamiento con- y la capacidad de pago
vencional a dicho indicador, partiendo de la
teoría axiomática del consumidor neoclásica. En este acápite se retoma, con algunas preci-
Este enfoque es consistente con el análisis siones, el concepto de capacidad de pago con
convencional de clasificar a los hogares por el que se propuso adelantar la investigación
decil de ingreso, el cual puede extenderse a lo que el CID desarrolló para el DAPD en dos
que se ha denominado ingreso comprensible etapas: una que terminó en julio del año 2000
(IC). La segunda pretende relajar los supues- y otra que arrancó en 2002 y culminó en 2004
tos de sustituibilidad ilimitada entre bienes con una publicación. Lo que aquí se presenta
o preferencias, introduciendo aspectos nove- se aproxima más el concepto de capacidad de
dosos como los ordenamientos jerárquicos o pago que se propuso en el año 2000 y que es
lexicográficos de las necesidades. bien diferente al concepto plasmado en la pu-
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

19

blicación de 20044. La aproximación del año En el Documento 2000 se proponen dos for-
2000 se retoma aquí, tratando de precisar al- mas posibles de medir la CP: la primera se re-
gunos aspectos y alcances de lo que se entien- laciona con la mayor o menor posibilidad de
de aquí como capacidad de pago. consumir bienes y servicios para alcanzar un
nivel dado de bienestar; la segunda se relacio-
En el Documento 2000 se utiliza como punto na con la disponibilidad a pagar por aquellos
de arranque un concepto que desarrolla Da- bienes y servicios públicos. Los dos casos pue-
río Cuervo en “La capacidad de pago de las den estudiarse a la luz de la teoría económica
familias, una aproximación metodológica para del consumidor.
medirla”5. Este documento hace énfasis en
la poca claridad del concepto, para lo cual se Recuérdese que en la aproximación neoclásica
cita a Cuervo; quien dice, hablando de la ex- del consumidor, se considera que éste tiene
presión Capacidad de pago: “Parece ser que una función objetivo, la función de utilidad,
no se exagera si se afirma que, al menos en que se maximiza al sujetarla a una restricción
la literatura económica, hasta el momento es presupuestal. La solución de este problema
poco lo que se ha avanzado en la dirección de da como resultado el sistema marshalliano de
plantear una explicación clara, definida y ge- funciones de demanda: demandas que están
neralizada que permita el reconocimiento y la en función de los precios y el ingreso. De aquí
aceptación inmediata del significado de esa también se obtienen las funciones indirectas
expresión” (CID. 2000: 5). de utilidad que están en función de los pre-
cios y el ingreso. El problema, planteado así,
Dada esta falta de claridad del concepto, en se conoce como el primal. Pero a veces es muy
ese documento se trata de asimilar con con- útil trabajar con el dual; éste se plantea como
ceptos como Poder de compra o Poder adqui- la minimización del gasto sujeto a que se al-
sitivo; es decir que la Capacidad de Pago (CP) cance un nivel dado de utilidad (bienestar).Su
se relaciona con los bienes y servicios que una solución da como resultado el sistema hicksia-
persona o un hogar puede comprar. En ese do- no de funciones de demanda; funciones que
cumento se hace una distinción entre CP y Po- dependen de los precios y el nivel de utilidad.
der adquisitivo, argumentando que el primero También se obtiene la función de gastos del
está más próximo a capacidad de compra (lo consumidor, que se define como el gasto mí-
que un hogar puede comprar con sus ingre- nimo necesario para alcanzar un nivel dado de
sos), mientras que el segundo se aproxima no utilidad para unos precios dados.
sólo a lo que se puede comprar sino que inclu-
ye los bienes y servicios a los que puede ac- De la hipótesis de maximización de utilidad
ceder un hogar, sin necesidad de comprarlos (en el caso del primal), o de la hipótesis de
(CID. 2004: 17).Sobre esta distinción se volve- minimización del gasto (en el caso del dual)
rá más adelante. se deducen las propiedades de las funciones
de demanda:

4/
A finales de 1999 el DAPD contrató con el CID un estudio cuyo fin era analizar si la estratificación socio económica de Bogotá co-
rrespondía con la capacidad de pago de los bogotanos; de ese estudio resultó un informe llamado “Diseño metodológico, operativo y
de análisis de una encuesta para medir la capacidad de pago de bienes y servicios públicos en los hogares del distrito capital: Informe
Final” de julio 10 de 2000 (Documento 2000); posteriormente el CID y el DAPD retoman la propuesta en 2002 y se revisa el instru-
mento, se realiza la encuesta y como resultado sale la publicación de 2004 llamada: “Equidad en las tarifas de servicios públicos:
Impacto en la capacidad de pago de los hogares de Bogotá D. C.” (Documento 2004). En ambos documentos se intenta dar un concepto
de capacidad de pago, pero entre ellos hay diferencias sustanciales.
5/
Documento CEDE No. 090 julio de 1993, (Cuervo, 1993).
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

20

1) Agotamiento del gasto bienes constante y, en efecto, el consumidor


2) Homogeneidad de grado cero en precios e permanece en el mismo nivel de bienestar, no
ingresos de las demandas marshallianas y de garantiza que, a los nuevos precios, esa ca-
grado cero en precios de las demandas hick- nasta sea la de mínimo costo para alcanzar el
sianas. nivel de bienestar; y ii) la forma de capacidad
3) La matriz de efectos sustitución (Slutsky) es de pago que se está analizando es concep-
simétrica y semidefinida negativa. tualmente correcta (así haya problemas con
su medición) pero, cuando se está estudiando
Este es, muy sucintamente, el resumen de la la capacidad de pago por un bien particular,
teoría que sirve de marco para los conceptos se necesitan criterios adicionales; capacidad
de capacidad de pago que se desarrollan aquí: de pago ¿para comprar qué cantidad? o, des-
i) Capacidad de pago, como poder de compra pués de que se compre cierta canasta de otros
que permite alcanzar, determinado nivel de bienes, ¿cuánto le queda disponible para ese
bienestar y, ii) Capacidad de pago, analizan- bien?
do la disponibilidad a pagar por algún bien o
servicio. La solución del primer problema es teórica-
mente sencilla; ya que se debería calcular el
1.3.2 gasto mínimo necesario para obtener, a cier-
Un nivel de bienestar constante tos precios, un nivel de utilidad dado. Si luego
cambian los precios, sólo habría que calcular-
Como se ha dicho, la CP se puede interpretar lo, a los nuevos precios, para obtener el mis-
como el poder de compra que tiene un con- mo nivel de utilidad. Así se estima el llamado
sumidor. Es decir: qué bienes y en qué can- Índice Verdadero de Costo de Vida (IVCV), que
tidad puede el consumidor comprar con sus es el cociente entre el gasto mínimo necesario
recursos, dados los precios de esos bienes. para alcanzar el nivel de utilidad -a los precios
Si se acepta esta definición de capacidad de corrientes- sobre el gasto mínimo necesario
pago, entonces se requiere alguna referencia; para alcanzar ese nivel de utilidad -a los pre-
y, desde el punto de vista conceptual, la mejor cios del año base. Esta razón constituye el ín-
referencia es un nivel de bienestar determi- dice más adecuado para medir la capacidad de
nado. Se toma algún año base y, por ejemplo, compra del ingreso nominal.
se estudia para saber en cuánto debe variar
el gasto cuando varían los precios, dejando el Por el contrario, el segundo problema tiene
nivel de bienestar constante. La capacidad de más dificultades para abordarlo. El Documen-
pago, entonces, se mediría como el ingreso to 2000, cita a Cuervo para afirmar que: “Si
real, es decir el ingreso dividido por algún ín- se tiene la necesidad, por ejemplo, de esta-
dice adecuado de costo de vida. blecer la capacidad de pago de un individuo
para cancelar un bien cualquiera, sólo en ca-
El índice más usado es el de Laspayres, que sos excepcionales, se puede llegar a la conclu-
índica cuánto debería variar el gasto, cuando sión que podría estar en condiciones de reali-
varían los precios, para poder comprar una zarlo, siempre y cuando fuera lo primero que
canasta de bienes determinada. Una variante efectuara con su ingreso”. (CID. 2000: 10). El
es calcular el número de esas canastas que se documento agrega: “Cuervo señala las graves
pueden comprar con el ingreso nominal en el dificultades que tiene este enfoque, ya que
período corriente. habría que diseñar una escala de prioridades
en el gasto de bienes, hasta llegar al bien con-
Esta forma de medir la capacidad de pago tie- siderado.”
ne dos problemas: i) si bien, deja la canasta de
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

21

Estas dificultades llevan a proponer la segun- tidad consumida, los límites de la integral. La
da aproximación al concepto de CP: la dispo- disposición a pagar es, entonces, una medida
nibilidad a pagar. de lo que está dispuesto a pagar un consumi-
dor por cada unidad consumida para alcanzar
1.3.3 un nivel dado de bienestar; es por ello que se
La disposición a pagar puede considerar como una buena aproxima-
ción de CP.
La disposición a pagar se mide como la inte-
gral definida de la curva inversa de demanda; De todas maneras, la aproximación de la dis-
siendo 0 y la cantidad demandada los límites ponibilidad a pagar (DP) como CP no está
de la integral. exenta de problemas. Si bien ambas están
relacionadas con los ingresos y los precios, y
Esta medida surge de la propuesta de Mars- asumen, por definición, que la persona que
hall de medir el bienestar del consumidor, con está dispuesta a pagar -cierta cantidad de di-
lo que él llamó el excedente del consumidor nero por cierta cantidad de un bien- está en
(esto es: la disposición a pagar menos de lo capacidad de pagarlo. Pero la DP es el límite
que debe pagar).La propuesta de Marshall re- inferior de la CP; es decir: en general, la CP es
cibió algunas críticas, pero Hicks propuso una mayor o igual a la DP.
forma de excedente de consumidor, que es,
conceptualmente más correcta. La demanda que hace un individuo por un
bien privado depende, entre otras cosas, de
Hicks parte de querer medir el cambio de ingresos y precios; es decir, de la capacidad de
bienestar de un consumidor, cuando cambian pago; y, evidentemente, de las preferencias.
los precios, y propone dos métodos de medi- En el caso de los bienes meritorios puede que
ción: i) la variación equivalente (VE) y ii) La un individuo no esté dispuesto a pagar ya que
variación compensatoria (VC).La VE mide la dentro de sus preferencias este bien no es im-
cantidad máxima de ingreso que estaría dis- portante, pero la sociedad lo valora de manera
puesto a ceder el consumidor para evitar la más alta, es decir la disposición a pagar está
variación del precio. La VC mide la cantidad limitada por las preferencias individuales y si
de dinero adicional que tendría que darse al el individuo valorara ese bien como lo hace la
consumidor si se quisiera compensarlo exac- sociedad, seguramente su DP sería mayor.
tamente por la variación del precio.
En otros casos, el individuo no reflejará su dis-
Estas dos variaciones son medidas adecuadas posición a pagar; tratará de revelar una me-
de cambio en el bienestar y se puede demos- nor, con el fin de obtener un mayor excedente
trar que ambas miden el cambio en el exce- del consumidor. Este caso se presenta mucho
dente del consumidor, calculado con la de- en los bienes públicos, como lo ilustra el pro-
manda hicksiana. Así, con la utilidad inicial blema del polizón.
se obtiene la VC y, dada la utilidad final, se
obtiene la VE. Es decir, tanto la VE como la VC Volviendo a la primera forma en que aquí se
son excedentes del consumidor, pero calcula- ha aproximado el problema de la CP, es el de
dos con las curvas de demanda compensadas. escoger el nivel de bienestar para el cual se
escogerían las demandas hicksianas o se cal-
Es por ello que parece más adecuado medir la cularía el IVCV ¿Cuál es la cantidad deseada
disposición a pagar con la demanda hicksia- de consumo para la cual se estudia la capaci-
na y se mide como la integral definida de la dad de pago del consumidor?
curva inversa de demanda, siendo 0 y la can-
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

22

Esto lleva a definir el consumo mínimo de los o los subsidios que algunos hogares reciben.
bienes, al cual los hogares deberían tener ac- Esos recursos se deben tener en cuenta en el
ceso; por esta razón es absolutamente perti- análisis porque indirectamente afectan la CP
nente relacionar la capacidad de pago con la del hogar.
pobreza. Así mismo tiene sentido insistir en
que una medida de capacidad de pago es el ni- Sobre este tema, el CID (2004) hace una dis-
vel de recursos con que cuente un hogar, y en tinción para incluir los bienes no comprados,
la necesidad de investigar si con esos recur- a los que el hogar tiene acceso; así, considera
sos se garantiza un consumo adecuado para que la CP, más esos bienes, constituyen el “po-
su sustento. der adquisitivo”.Sin entrar a discutir la conve-
niencia de ese nombre, es claro que ese tipo
La introducción del concepto del nivel de re- de bienes afecta directamente la capacidad de
cursos del hogar nos lleva, por último, a con- pago de un hogar: si un hogar recibe a un pre-
siderar los recursos con que puede contar un cio bajo cierta cantidad de un bien necesario,
hogar, diferentes a los bienes y servicios ad- es claro que los recursos ahorrados los puede
quiridos en el mercado y, que evidentemente, utilizar en comprar más de otros bienes o ser-
aumentan su bienestar, como son los bienes y vicios, es decir aumenta su capacidad de pago.
servicios que provee directamente el estado,

1.4
Jerarquía de necesidades y ordenamientos lexicográficos:
un marco general para la capacidad de pago

Uno de los presupuestos que están detrás del sigue un orden jerárquico de necesidades. En
análisis convencional del consumidor es que efecto, no todas las necesidades son iguales.
las decisiones de los agentes o de los hogares Existen unas necesidades más urgentes que
se sustentan únicamente en el pleno conoci- otras y no todo se puede reducir a un factor
miento de sus gustos y preferencias, lo que común. Estas ideas fueron sintetizadas ma-
les permite reducir todo a un denominador gistralmente por Georgescu Roegen (1954) en
común: la utilidad. En este sentido, las perso- cuatro principios:
nas son libres de elegir -bajo ciertas restric- • Principio de subordinación de las necesida-
ciones- el conjunto de bienes que les reportan des
la máxima utilidad o bienestar. Ello exige una • Principio de saciedad de las necesidades
completa sustitución entre bienes; es decir, • Principio de crecimiento de las necesidades
que siempre se pueda compensar la reducción • Principio de irreductibilidad de las necesi-
de un bien, aumentando la cantidad de otro dades
sin que el nivel de satisfacción se vea alterado.
El primer principio introduce restricciones
Sin embargo, como lo muestran Drakopou- mayores a la operación del principio de sus-
los y Karayiannis (2004), existen importan- titución bruta neoclásica. Establece que las
tes ejemplos de disidencia incluso dentro de necesidades se subordinan unas a otras; esto
la corriente principal. Autores como Platón, quiere decir que los hogares ordenan sus ne-
Smith, Ricardo, Jevons, Menger y Marshall cesidades a la manera de una pirámide, de
reconocieron que en verdad no existía una las más básicas a las más altas o sublimes.
completa sustituibilidad de las preferencias La idea es que existe un orden lexicográfico
y que el gasto de los consumidores más bien de las necesidades. Primero se satisfacen las
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

23

necesidades fisiológicas (aire, agua, alimento, precios de los bienes esenciales tendrá un
sexo, sueño); luego necesidades de seguridad efecto sobre las cantidades demandadas
(salud, educación, estabilidad, protección) y de bienes de lujo o de bienes menos nece-
finalmente las necesidades sociales (reconoci- sarios. El principio de irreductibilidad de
miento, verdad, justicia). La inconmensurabi- las necesidades justifica ciertas interven-
lidad de las necesidades desvirtúa el principio ciones públicas, sobre todo el control y las
que todo tiene un precio. Es decir: el criterio subvenciones a ciertos productos de pri-
de indiferencia, según el cual siempre es po- mera necesidad que cubren las necesida-
sible compensar al consumidor por la pérdida des esenciales de la gente. Al disminuir el
de un bien entregándole una cantidad de otro coste de estos productos esenciales, más
bien. personas están en disposición de satisfa-
cer sus necesidades prioritarias” (2005,
El segundo principio establece que los consu- 42-44).
midores tienen puntos de saturación definidos
para precios e ingresos finitos. En la teoría En el gráfico 2 se muestra un ejemplo sim-
convencional la saciedad es un resultado de ple de ordenamiento lexicográfico. En el eje
la utilidad marginal decreciente y de la exis- horizontal, se mide la cantidad del bien edu-
tencia de precios nulos o ingresos infinitos. cación que compra el consumidor (e). En el
El tercer principio privilegia el efecto ingreso eje vertical, el consumo de bienes necesarios
keynesiano, restando importancia a la susti- (y). Se asume que, con un ingreso menor a un
tución por el cambio en precios relativos. Los y* mínimo, el individuo preferirá siempre in-
hogares pueden avanzar en la escala de nece- gresos mayores, sin importar la cantidad de
sidades siempre y cuando su ingreso se incre- educación. Con un ingreso superior a y*, pasa
mente. Finalmente, los últimos dos principios lo contrario: el individuo preferirá mayor edu-
dicen que las decisiones del consumidor están cación. Este comportamiento permite dibujar
fuertemente influenciadas por el contexto so- dos tipos de curvas de cuasi indiferencia. Por
cial y las clases sociales a las que pertenece el debajo de y*, horizontales; y por encima de y*,
consumidor. Del mismo modo, reconoce que verticales (Lavoie, 1992,2005).
las decisiones de consumo están fuertemen-
te influenciadas por la historia. Las decisiones Gráfico 2

pasadas determinan la trayectoria futura del Esquema lexicográfico de preferencias


consumidor. Y las consecuencias del último
principio, como lo anota Lavoie:

“A causa del principio de irreductibilidad,


del engarce entre los principios de separa-
ción y de subordinación, no todos los bie-
nes pueden tratarse de manera idéntica.
Existe una asimetría en los efectos sobre
las cantidades demandadas derivados de
cambios en los precios. Toda variación de
los precios que afecte a bienes asociados
a una necesidad de rango secundario (un
cachivache cualquiera) no tendrá ningún
impacto sobre las cantidades demandadas
de bienes relacionados con una necesidad
esencial; en cambio, toda variación de
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

24

Si el consumidor se encuentra en un punto se podrá iniciar con el gasto de bienes de gru-


como A, su ingreso estará por encima de y*; pos superiores:
ello indica que el agente le otorga la priori-
dad a la educación respecto a los otros bie- “Nosotros pensamos que el concepto de ur-
nes necesarios. Por ello, A es preferido a C; gencia en la satisfacción de necesidades hu-
C es preferido a B; B es preferido a D; D es manas tiende a crear un ranking de bienes del
preferido a E; y E es preferido a G. Formal- consumidor tal que ellos pueden clasificarse
mente: A>C>B>D>E>G. Ahora bien, si se en grupos, mientras que el concepto de gustos
le preguntara al consumidor cuánto estaría es expresado dentro de cada grupo en térmi-
dispuesto a pagar para que no se reduzca su nos de la elección del consumidor individual
consumo de educación, éste ofrecería la suma de artículos que satisfacen sus preferencias
de ye-y*. personales. Dentro de los grupos, la disponi-
bilidad de sustitutos y bienes complementa-
Sin embargo, si se reduce la oferta del bien al rios ayuda a determinar la demanda por artí-
nivel de B, la compensación para el consumi- culos específicos” (Roy, 1943, 1-2).
dor debería ser infinita. Esto es así porque una
vez el individuo traspasa la barrera del y* su En otras palabras: no se presentan efectos
ordenamiento de preferencia cambia; ahora sustitución entre grupos de bienes, pero la
su prioridad es la educación, ye-y* subestima sustituibilidad al interior de los grupos es po-
la valoración del consumidor por la educación. sible. La lectura del Rey Lear puede alimentar
Lavoie (2005, 44) concluye lapidariamente: el espíritu, pero no satisface la necesidad de
alimento de la persona que padece hambre.
“En el fondo, la transacción imaginada Un ejemplo sencillo puede ilustrar las ideas
es semejante al pago de un rescate. Pues anteriores. Supongamos que los vectores de
bien, en el caso de un rescate, nunca pue- precios de dos grupos de bienes se pueden re-
de uno ser indiferente entre la recompen- sumir en los índicesp1 y p2. El vector de can-
sa exigida y el valor atribuido a la enti- tidades se representa por los índices q1 y q2,
dad en peligro. Por consiguiente la teoría respectivamente. Si el consumidor dispone de
neoclásica del bienestar queda invalida. un ingreso monetario M, se pueden presentar
Sea cual sea la reducción, el individuo no dos casos (Roy, 1943):
puede contribuir más que con la cantidad
ye-y*”. a) Si la cantidad de bienes del grupo 1 que sa-
tisfacen su necesidad prioritaria es L1, el gasto
Estas consideraciones tienen implicaciones será el siguiente (cuando su ingreso moneta-
claras y empíricamente contrastables sobre el rio es menor a p1L1):
comportamiento del consumidor. Como tem-
pranamente lo reconoció Roy (1943), se pue-
den clasificar el conjunto de bienes y servicios b) Si la cantidad de bienes del grupo 1 que sa-
en una estructura de grupos que satisfacen tisfacen su necesidad prioritaria es L1, el gasto
las diversas necesidades. Esto implica que los será el siguiente (cuando su ingreso moneta-
agentes o los hogares asignarán sus recursos rio es mayor a p1L1):
a la compra de aquellos bienes que satisfacen
sus necesidades prioritarias, una vez se alcan-
zan los umbrales de saciedad o satisfacción,
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

25

Gráfico 3 servicios, habitación y alimentación, el cam-


Función de demanda del primer grupo bio de precios relativos no afectará sus deci-
de bienes siones de demanda por dichos bienes. Solo si
los precios de los bienes básicos se reducen o
el ingreso de las familias aumenta, es posible
que los hogares más pobres aumenten el con-
sumo de bienes superiores.

La idea es que la capacidad de pago se defina


en términos de la diferencia entre el ingreso
observado del hogar y el ingreso mínimo que
le garantiza cubrir sus necesidades básicas. Es
claro que la capacidad de pago mide los recur-
sos potenciales que el consumidor estaría dis-
puesto a entregar por un consumo adicional
del bien superior o por evitar que su consumo
actual se reduzca.

En este sentido, se podría decir que los ho-


En el estudio del CID (2004) se afirma que “las gares de estrato 1 carecen de capacidad de
familias prefieren pagar los servicios públicos, pago; es decir, su ingreso se gasta en cubrir
así tengan que reducir los gastos de alimen- sus necesidades básicas; por tanto, deben re-
tos, educación y salud”. Lo que en el fondo cibir subsidios o transferencias con el fin de
establece el hallazgo empírico es que las fa- liberar recursos en el sentido que su ingreso
milias separan y subordinan sus necesidades; supere el umbral de y*. Un indicador alterna-
es decir, existe un orden lexicográfico o una tivo consiste en medir el número de meses de
jerarquía de orden ascendente, desde las ne- consumo actual que el hogar podría financiar
cesidades de subsistencia hasta las del espíri- con su riqueza no humana neta. Se mide como
tu. Las familias bogotanas pagan primero los la razón entre la riqueza financiera no huma-
servicios públicos porque dichos bienes satis- na neta liquida y el valor de la canasta básica
facen las necesidades básicas de los hogares. de la clase a la que pertenece.
El ordenamiento lexicográfico de los hogares
determina su comportamiento a la hora de Las ideas anteriores se pueden generalizar
asignar el presupuesto familiar a la adquisi- fácilmente. Considerando las sugerencias de
ción de bienes. En la medida que el hogar lle- Lancaster (1966), los bienes por sí mismos no
gue a su punto de saturación y aun cuente con proveen bienestar, ya que es únicamente su
recursos podrá adquirir bienes con caracterís- capacidad para generar ciertas características,
ticas que satisfacen necesidades superiores la que provee utilidad al consumidor. Por tan-
en la escala. Es por ello, que para familias del to, existe una tecnología asociada al consumo,
estrato 1 y 2 aumentos o reducciones de los donde los bienes son los insumos y la tecno-
precios de bienes como la educación o la cul- logía los transforma en características valo-
tura no afectan sus decisiones de asignación radas por las personas. Un bien puede aportar
presupuestal. a varias características; por ejemplo, el caviar
no es sólo alimento, también refleja distinción
El Distrito puede reducir el costo de la edu- social. De esta manera podemos agrupar los
cación y la salud. Pero si los hogares apenas bienes de acuerdo con su capacidad para sa-
pueden cubrir con sus ingresos los pagos de tisfacer diversas necesidades, o con su contri-
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

26

bución a diferentes características. Siguiendo pueden darse diversos grados de sustitución


la clasificación de necesidades jerárquicas se- entre A1 y A2, incluso plena sustitución entre
gún Maslo: fisiológicas, seguridad, comunidad bienes que componen cada submatriz A1 o A2,
y afecto, autoestima y autorrealización, po- pues si el precio de un bien que provee la ca-
demos sintetizarlas en 5 matrices de necesi- racterística asociada a la matriz A2 se reduce,
dades: A, B, C, D y E6. Del mismo modo, los el consumidor puede sustituir bienes de me-
bienes pueden agruparse de acuerdo con su nor complejidad de la matriz A1 por los que
contribución a cada una de ellas. El interior componen la matriz A2. Avanzar en la esca-
de cada una de las matrices de necesidades se la de necesidades, de A a E, solo es posible
puede dividir en submatrices; por ejemplo, la por aumentos del ingreso o de la capacidad de
necesidad A se compone de las subnecesida- pago de las personas; realmente, cambios en
des fisiológicas A1, A2. Lo anterior se muestra los precios de los bienes que proveen las ca-
en el gráfico 4. racterísticas de las necesidades superiores no
afectan las decisiones de gasto de los agentes
Como existe una plena subordinación de ne- si estos aún no han alcanzado los niveles de
cesidades, no puede presentarse sustitución saciedad de sus necesidades de menor escala
entre la necesidad A y la B; sin embargo, o más urgentes.

Gráfico 4
Ordenamiento jerárquico de necesidades

Fuente: Lavoie (1992, 81)

Gráfico 5
El patrón de gasto de una persona que carece
Esquema temporal de gasto sin Capacidad
de capacidad de pago se puede deducir fácil-
de Pago
mente a partir de unos sencillos supuestos. La
persona tiene un ingreso anual de M pesos. El
ingreso lo recibe con una frecuencia mensual;
por tanto, su remuneración equivale a M/12.
Si el ingreso le alcanza únicamente para com-
prar los bienes que satisfacen sus necesida-
des básicas, podemos decir, sin pérdida de
generalidad, que el ingreso es igual al gasto.
Si los gastos se hacen de manera secuencial
y linealmente a lo largo del mes, el patrón de
gastos se muestra en el gráfico 5.

6/
Véase: Lester D. Taylor and H. S Houthakker (2010), para una exposición breve.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

27

El patrón de gasto de una persona, cuyo in- Gráfico 6


greso mensual es mayor que el gasto mínimo Esquema temporal de gasto con Capacidad
en bienes que le permiten satisfacer sus ne- de Pago
cesidades básicas, le permite liberar recursos
para comprar otros bienes o adquirir activos
financieros. El esquema temporal se puede
mostrar en el gráfico 6.

1.5
La capacidad de pago y el enfoque de calidad de vida de Amartya Sen
(primera aproximación)

Como es bien conocido, el enfoque de capa- les puede elegir una colección. El enfoque se
cidades de Sen establece una estructura nor- basa en una visión de la vida en tanto com-
mativa para la evaluación de las ventajas y el binación de varios quehaceres y seres, en
bienestar de los seres humanos en un espacio los que la calidad de vida debe evaluarse en
que le permite tener en cuenta la diversidad términos de capacidad para lograr funciona-
de los seres humanos y su potencialidad para mientos valiosos” (Sen, 1993, 54-55). Lo que
elegir libremente el curso de sus vidas en realmente es importante son la libertades po-
términos de la habilidad real de las personas sitivas o el conjunto de oportunidades valio-
para “hacer actos valiosos, o alcanzar estados sas a disposición de las personas, las cuales
para ser valiosos”. (Sen, 1993,54) pueden tomar o no dependiendo de lo que
ellas valoran y desean para sí mismas. Como
Con tal fin, Sen establece una clara distinción muy bien observa Robeyns:
entre medios y fines para limitar e identificar
los “objetos de valoración”. En este sentido, “El enfoque de capacidades evalúa las
los recursos, el ingreso, la riqueza y los bie- políticas acorde a su impacto sobre las
nes primarios son medios pero no fines en sí capacidades de las personas. Pregunta
mismos; tienen importancia en la medida en si las personas gozan de buena salud, y
que son los insumos que les permiten a las si los medios o recursos necesarios para
personas alcanzar logros o funcionamientos. esta capacidad están presentes, tal como
Un funcionamiento es un logro alcanzado por agua limpia, acceso a doctores, protec-
la persona, es parte de lo que la persona es y ción de infecciones y enfermedades, y
hace actualmente. conocimiento básico de los problemas de
salud. Pregunta si las personas están bien
Sin embargo, el examen se debe hacer en el nutridas, y si las condiciones para esta
espacio de las capacidades, es decir de “las capacidad, tal como tener una oferta de
combinaciones alternativas de los funciona- alimentos suficiente y derechos sobre los
mientos que ésta puede lograr, entre las cua- alimentos puede cumplirse. Pregunta si
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

28

las personas tienen acceso a un sistema capacidad de pago, es porque sencillamente


de educación de alta calidad, a la parti- su ingreso es insuficiente o a penas le alcanza
cipación política real, a actividades de la para adquirir los bienes o canasta básica que
comunidad que les soporten y los forta- le permitiría escapar de la pobreza evitable.
lezcan para su lucha diaria y promue- Sen lo expresa de la siguiente manera:
va la amista real. Para algunas de estas
capacidades, el principal insumo son los “Es posible argumentar que la igualdad
recursos financieros y la producción eco- en la realización de ciertas ‘capacidades
nómica, pero para otros pueden ser las básicas’ proporciona un enfoque especial-
prácticas políticas y las instituciones, ta- mente plausible para el igualitarismo en
les como las garantías y protección del presencia de las privaciones elementales.
pensamiento libre, la participación políti- La expresión ‘capacidades básicas’ tenía
ca, las prácticas sociales y culturales, las la finalidad de separar la habilidad para
estructuras sociales, las instituciones so- satisfacer ciertos funcionamientos cru-
ciales, bienes públicos, normas sociales, cialmente importantes hasta ciertos nive-
tradiciones y hábitos” (2005,106-107). les adecuadamente mínimos.
La identificación de niveles mínimos
Sin duda, hablar de “capacidad de pago” exi- aceptables de ciertas capacidades básicas
ge responder una pregunta similar a la que (por debajo de los cuales se considera que
respondió Sen cuando introdujo su enfoque las personas padecen de privaciones es-
de capacidades. La pregunta es la siguiente: candalosas) puede proporcionar un enfo-
capacidad de pago ¿de qué? Contestar aquí a que de la pobreza, y comentare la relación
esta pregunta es de vital importancia para en- de esta estrategia con análisis más tradi-
tender el papel de la capacidad de pago en la cionales de la pobreza, que se concentran
evaluación de la calidad de vida de los hogares en el ingreso. Pero también es importante
bogotanos. reconocer que el uso del enfoque sobre
capacidad no se limita solo a las capacida-
En primer lugar, la capacidad de pago no es des básicas” (1993, 67-68).
un “objeto de valoración” en el sentido que lo
son el conjunto de funcionamientos que com- El esquema secuencial se resume de la si-
ponen el espacio de capacidades humanas o guiente manera. La capacidad de pago les
libertades de bienestar. permite a las personas acceder a bienes y ser-
vicios. Los factores de conversión, definidos
Es evidente que está definida en términos de por la función F(X) convierten las característi-
libertad; sin embargo, no en el sentido de li- cas de los bienes en funcionamientos.
bertad positiva (es decir: poder para, libre de
restricciones). En la literatura se han identificado tres tipos
Por el contrario, la capacidad de pago se pue- de factores: i) factores de conversión personal
de entender en el sentido de una libertad ne- (metabolismo, condición física, sexo, habilidad
gativa (decisión bajo restricciones). de lectura, inteligencia, etcétera.); ii) factores
de conversión social (políticas públicas, nor-
De otro lado, la capacidad de pago no es el in- mas sociales, prácticas discriminatorias, roles
greso o la riqueza en sentido literal. Se entien- de género, jerarquías sociales, relaciones de
de mejor como la capacidad de alcanzar las poder): iii) factores de conversión ambiental
necesidades más allá de las básicas o, como (clima, localización geográfica, contamina-
Sen las denomina, de las capacidades básicas. ción, infraestructura (Robeyns, 2005):
En otras palabras: si una persona no tiene
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

29

Es posible establecer una relación más clara como M-Consumo de bienes básicos. Donde
entre la capacidad de pago y el espacio de ca- M es el ingreso del hogar.
pacidades de Sen. Supongamos que existen
dos funcionamientos, F1 y F2. Se requieren los En el gráfico 7 se presentan las relaciones
bienes X e Y para transformar las característi- entre las variables y el conjunto de capaci-
cas de los bienes en Funcionamientos. dades.

Las relaciones formales son F1= g1(X) y


F2=g2(Y). La capacidad de pago es definida

Gráfico 7
Relaciones entre las variables y el conjunto de capacidades

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

Como se puede mostrar, la capacidad de pago ría por medio de políticas públicas que liberen
del hogar juega un papel prioritario en la for- gastos básicos de los hogares. El programa de
mación del espacio de capacidades y los fun- Bogotá sin hambre o los subsidios a los ho-
cionamientos. El espacio de elección de com- gares amplían su capacidad de pago, lo que
binaciones de funcionamientos se expande si, les permite tener un espacio de capacidades
por ejemplo, la capacidad de pago del hogar extendido como lo indican las flechas de color
aumenta; una manera de que esto suceda se- rojo.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

30

1.6
Demanda jerárquica y la capacidad de pago: un enfoque de necesidades

Se presentan ahora los fundamentos con- mentos de las características de subsistencia


ceptuales y operacionales para calcular el consistirán en alimentos básicos, en el grupo
índice de capacidad de pago de los hogares de características de confort consistirán en
bogotanos. El modelo sigue de cerca las de- alimentos de lujo. Se permite la sustitución
rivaciones de demanda jerárquica propuestas entre bienes que pertenezcan al mismo grupo
por Nachiketa Chattopadhyay, Amita Majum- de características, de lo contrario no es posi-
der y Dipankor Coondoo(2009). En el esque- ble la sustitución.
ma, existen ‘n’ bienes. Estos bienes pueden
ser bastante heterogéneos en su naturaleza. En resumen, la estructura básica del mode-
Por ejemplo, existen algunos alimentos, algo lo propuesto descansa en cuatro supuestos
de vestuario, combustibles, etcétera. Se pue- principales: 1) la compra es la única fuente
de suponer que el consumidor asigna la más de consumo; 2) la estructura jerárquica de la
alta prioridad a algunos atributos comunes utilidad está basada en las características que
poseídos por los bienes. Existe un nivel míni- representan varios bienes (opuesta a la jerar-
mo para cada uno de los atributos, tal que el quía basada en bienes individuales); 3) la es-
atributo siguiente más bajo en satisfacción no tructura de preferencias no considera la elec-
genere ninguna utilidad hasta que el consumo ción de calidades o marcas, no hay distinción
del anterior no haya llegado a ese nivel míni- entre diferentes cualidades de un mismo pro-
mo. Formalmente, lo anterior se expresa de la ducto consumido por un pobre o por un rico,
manera siguiente: los sustitutos perfectos se consideran como un
mismo bien (en nuestro marco, los sustitutos
El espacio CÌRn+ puede ser objeto de una par- imperfectos se abordan incorporando conve-
tición tal que C=PKi=1Ci, donde Cies el con- nientemente la elección de umbrales de satis-
junto de canastas que proveen el atributo ai facción); y 4) se excluyen variaciones drásticas
(con i=1,…,k); de modo que a1 es el atributo en precios relativos que puedan cambiar la je-
de más alta prioridad, a2 es el siguiente y así rarquía. Mientras los precios relativos de bie-
sucesivamente. Por ejemplo: a1=subsistencia, nes similares determinan su ordenación, se
a2= Confort, a3=Estatus social. pueden tomar estas ordenaciones como dadas
Si Ai es la medida del atributo ai proveído por en cada punto del tiempo. Es posible que al-
Ci, la ordenación de preferencia es tal que gunos bienes tengan diferentes ordenaciones
mientras A1<S1i (donde S1 es el mínimo nivel en diferentes puntos del tiempo.
del atributo a1 que se debe satisfacer), Cj para
j=2…k, solo contendrá ceros. Similarmente Los autores muestran que la función de gastos
pasa con a2<S2; y así sucesivamente. Los atri- asociada, consistente con esta función de uti-
butos descritos pueden llamarse “caracterís- lidad, puede ser de la forma:
ticas compuestas”. Por ejemplo: Subsistencia,
Confort, Estatus Social, a los que correspon- e(u, P) =e1(u, P1)si u≤ u*1=u01
den algunos rubros de alimentos, vestuario y
combustibles. Sin embargo, los grupos am- =e2(u, P1, P2)si u01<u ≤u*1+ u*2=u02
plios de bienes (alimentos, por ejemplo) que
pertenezcan a dos diferentes características =…(…)
compuestas diferirán en composición. Por
ejemplo, mientras el grupo de bienes de ali- =ek(u, P1,…, Pk)si u>u*1+…+u*k-1=u0k-1
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

31

Donde u*i es el nivel de utilidad correspon- gares con un gasto per cápita por debajo de la
diente al nivel de satisfacción mínimo de las Línea de Pobreza (LP), ii) hogares que están en
características ai; u0i es el nivel de utilidad el primer decil de la distribución del ingreso
acumulado de los niveles de satisfacción de per cápita y, iii) el resto de hogares. Se exclu-
las características a1, a2,…, ai; Pi es el índice yen rubros que sean consumidos por menos
de precios para los bienes del grupo i. Las ei del 5% de los hogares. Los autores muestran
son funciones que satisfacen las propiedades que hay varias especificaciones para estimar
estándar de la función de gastos. modelos jerárquicos de demanda; mencionan
el SLG y el AIDS, entre otros.En el artículo,
Para realizar los ejercicios empíricos, la mues- hacen la estimación usando el SLG, como a
tra se divide en tres grupos de hogares: i) ho- continuación se explica:

Donde C1 son los bienes del grupo de subsistencia. Despejando u y usando la identidad de Roy:

Si u01< u≤ u02, entonces:

Si u> u02, entonces

Si y es el ingreso per cápita, los grupos se delimitan así: y≤ Y1; ii) Y1<y ≤Y2; y iii) y> Y2.

Las correspondientes funciones de demanda se especifican así:


Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

32

Grupo de ingreso per cápita 1: Bienes del grupo 1.

Grupo de Ingreso per cápita 2:

Bienes del grupo 1:

Bienes del grupo 2:

Grupo de Ingreso per cápita 3:


Bienes del grupo1:

Bienes del grupo 2:

Bienes del grupo 3:

La estimación de las ecuaciones del modelo, en forma de participación en el gasto


total, es:
Grupo de bienes 1 (jÎC1)
1.1 Grupo de ingresos bajos

1.2 Grupo de ingresos medios

Se obtiene wj2, así:


Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

33

Se estima la demanda para los rubros de este


grupo de bienes y de ingreso así:

Con el wj3, se calcula la demanda para los ru-


bros de este grupo de bienes y de ingreso, así:
1.3 Grupo de ingresos altos

Se obtiene wjj3:

Grupo de bienes 3 (jÎC3)

Calculado el wj3, se estima la demanda para Grupo de ingresos altos:


los rubros de este grupo de bienes y de ingre-
so así:

Tabla 2
Elasticidades por grupos de bienes e ingresos
Grupo de bienes 2 (jÎC2)
2.1 Grupo de Ingresos medios
Bienes \ Ingresos Bajos Medios Altos

Subsistencia

2.2 Grupo de Ingresos altos Confort

Se obtiene wj3: Lujo

1.7
El Índice de Capacidad de Pago de los hogares bogotanos

La construcción del índice de capacidad de Las dos primeras son la aproximación de las
pago requirió estimar el gasto mínimo en “capacidades básicas” de Sen y el enfoque
bienes básicos (GMBB). El problema consiste constitucional de los “derechos básicos” de
en definir “la lista” de bienes que se consi- Martha Nussbaum (Walsh, 2000; Nussbaum,
deran esenciales y prioritarios para los hoga- 2000). La alternativa utilitarista no permite
res. Existen por lo menos tres aproximaciones discriminar entre los bienes que satisfacen
que podrían sustentar el conjunto no vacío de las necesidades básicas y los que se destinan
mercancías para determinar lo que denomina- al consumo ostentoso o de lujo, no necesa-
mos el GMBB. rio (Zaman, 1986).Sin embargo, con las dos
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

34

primeras opciones conceptuales se presentan pensamiento. Cuarto, la aproximación re-


algunos inconvenientes a la hora de hacerlos fleja aspectos relevantes de la condición
operativos. En primer lugar, el espacio de ca- humana, nominalmente prevalecía del
pacidades no es observable; en segundo lugar, sufrimiento y fallas en la satisfacción de
considera aspectos que trascienden las nece- las necesidades básicas. Quinto, la aproxi-
sidades más urgentes de las personas; y, por mación reside en el espacio analítico en
último, no necesariamente tienen una corres- el cual muchas políticas actualmente son
pondencia directa con las políticas públicas (K. formuladas. Finalmente usa las necesida-
A. Reinert, 2011). Del mismo modo que en la des básicas para identificar bienes bási-
teoría neoclásica de la utilidad se presentan cos relevantes que tienen soporte teórico
los casos de deseo no prudencial cuyas con- y empírico en la teoría económica del con-
secuencias pueden ser negativas para el con- sumidor” (K. A. Reinert, 2011, 55-56)
sumidor, el enfoque de capacidades también
adolece del problema de la existencia de fun- Adicionalmente, el enfoque de “bienes bási-
cionamientos sin valor; por ejemplo, la capaci- cos” es consistente con la estructura formal
dad de hacerle daño a una persona. propuesta en este documento, donde se con-
sideran seriamente los ordenamientos jerár-
Por el contrario, el tercer enfoque que deno- quicos y lexicográficos. En el estudio seminal
minamos de “bienes básicos” tiene ventajas de J.L. Baxter y I. A. Mossa (1996), se muestra
evidentes, frente a las aproximaciones enun- que existen rigurosos fundamentos concep-
ciadas, para la construcción de un índice de tuales y empíricos para diferenciar el gasto del
capacidad de pago, no sólo porque su objetivo consumidor en bienes básicos y no básicos.
es más estrecho que los que buscan los conoci- Según estos autores, las necesidades básicas
dos índices de bienestar y calidad de vida, sino se caracterizan por ser universales, jerárqui-
porque permite determinar la canasta mínima cas, saciables, medibles, irreductibles, conti-
básica de bienes que una persona tiene que nuas, estables, aditivas y absolutas. Lo cual
adquirir por medio del mercado para mante- conduce a predicciones sobre los patrones de
ner su vida normalmente, minimizando su ex- gasto de los consumidores. Primero, el gas-
posición a males y sufrimientos evitables. Por to en bienes básicos se caracteriza por tener
supuesto, ello no se reduce a las necesidades elasticidades menores que 1, mientras que los
meramente fisiológicas, sino, como lo anotaba bienes durables de confort o de lujo arrojan
Smith, debe incorporar aspectos que les per- valores mayores que 1. Segundo, la propor-
mitan a las personas aparecer en público sin ción del gasto en bienes básicos se reduce en
vergüenza. Enumeremos pues las ventajas del el total, a medida que aumenta el ingreso de
enfoque de “bienes básicos”: los hogares. Tercero, el gasto en bienes bá-
sicos es más estable, que el de otro tipo de
“Primero, se basa en criterios éticos mí- bienes, a lo largo del ciclo económico. Y por
nimos y de sentido común, y por lo cual último, el gasto en necesidades básicas está
evita los universalismos, demandas de menos correlacionado con el comportamiento
maximalismos que son difíciles de sopor- del ingreso en el largo plazo.
tar. Segundo, corresponde a un sentido no
procedimental de justicia, evitando apelar El índice de capacidad de pago pertenece a las
a fuentes externas de valoración. Terce- familias de índices de condiciones de vida o
ro, la aproximación selecciona aspectos de privación. El índice pretende examinar la
de valor que se intersecan con tradicio- capacidad de los hogares de acceder a bienes
nes éticas objetivas y subjetivas, evitando y servicios por medio de mercado, una vez
innecesarios conflictos entre escuelas de ya han cubierto sus necesidades o capacida-
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

35

des básicas. El índice de capacidad de pago se


puede expresar de manera general como:
Donde, es el gasto del hogar i en los bienes
básicos j y es el gasto mínimo o norma so-
Donde, s(xij) es una función no decreciente de cial de los bienes básicos j. El índice se cons-
su argumento. Sea xij la suma que posee la truye de manera sencilla, normalizando para
familia i del atributo j, donde i=1…n y j=1, 2, que el rango de los valores esté entre 0 y 1. La
3. wj es el peso correspondiente del atributo j expresión es la siguiente:
que se puede asumir igual para todos los ho-
gares. Para el índice de capacidad de pago, las
variables xij representan gastos; por tanto, se
puede entender como una variable continua. Si el índice Ii es negativo, se le asigna el valor
De este modo no existen mayores dificultades de cero (0). La interpretación es simple. Para
para integrar las diversas categorías en el ín- todo Ii £ 0 se considera que el hogar no tiene
dice. Ahora bien, existen varias aproximacio- capacidad de pago. Si es mayor que cero (0)
nes para hacer la transformación s(xij). En este se concluye que tiene capacidad de pago. El
trabajo se toma la sugerencia de Desai y Shah hogar con máxima capacidad de pago recibe
(1988) que especifica s(xij) como la distancia un índice de uno (1). En el gráfico 8 se pre-
del valor xij a su valor de referencia o norma senta una ilustración del comportamiento del
para j que representa la norma social. En el indicador.
caso que nos ocupa, diremos que es el gasto
mínimo del bien básico j es:

Gráfico 8
Esquema conceptual del Índice de Capacidad de Pago
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

36

1.7.1
taba en acápites anteriores, la capacidad de
Estimación y cálculo de los componentes pago para los hogares cuyos gastos sean me-
del Gasto Mínimo en Bienes Básicos de nores o iguales al mínimo de bienes básicos se
los hogares bogotanos consideran con una capacidad de pago igual
a cero y ésta va aumentando en la medida en
A continuación se presenta una breve des- que los hogares tienen un gasto mayor al defi-
cripción del procedimiento para determinar nido como gasto mínimo en bienes básicos. El
el Gasto Mínimo en Bienes Básicos (GMBB) a procedimiento para determinar el GMBB re-
partir de la información de la Encuesta Mul- quiere tres pasos (Véase el gráfico 9).
tipropósito de Bogotá de 2011. Como se ano-

Gráfico 9
Procedimiento generador del GMBB

La selección de los grupos de hogares es cla- Después de examinar varias alternativas para
ve, ya que cada grupo alcanzará a consumir discriminar a los hogares por gasto (o ingre-
cierto grupo de bienes -de acuerdo con la je- so) se logró la siguiente clasificación taxonó-
rarquía que éstos tengan en la satisfacción mica: i) ingresos bajos: con gasto per cápita
de bienes necesarios, menos necesarios, has- menor a $279.8007; ii) ingresos medios: con
ta llegar a los de lujo. Entonces, la selección gasto per cápita mayor o igual a $279.800 y
de los grupos de hogares debe hacerse de tal menor a $1.767.500 (que corresponde al lí-
forma que cada uno de ellos represente nive- mite superior del noveno decil en la distribu-
les de vida diferentes y, además, permita una ción del gasto); y iii) ingresos altos: con más
clara delimitación de los grupos de bienes de de $1.767.500.
acuerdo con su nivel de jerarquía.

7/
Para marzo de 2011, mes que corresponde a la mitad del periodo de recolección de la EMB-2011, el valor de la LP, versión antigua,
es de $321.000.
8/
Es de advertir que, dada la forma de las preguntas en la encuesta, la desagregación de artículos no se puede hacer de la mejor forma;
ya que, por ejemplo, se puede pensar que entre los alimentos hay algunos que podrían quedar clasificados como bienes de confort
o incluso de lujo, pero como en las preguntas de la encuesta todos los alimentos están en un solo rubro, no es posible identificarlos
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

37

Para seleccionarlos bienes en los diversos gru- sus participaciones son menores al pasar de
pos, se excluyeron aquellos bienes que son ingresos bajos a medios y de ingresos medios
comprados por menos del 5% de los hogares; a altos. En cinco grupos, este comportamiento
así, en el grupo de bienes básicos quedan los no se presenta; pero, las diferencias entre los
que son comprados por el 95% o más de todos tres niveles de ingreso es pequeña, salvo para
los hogares de la muestra; el grupo de bienes básicos durables -grupo en el cual la partici-
de confort está conformado por aquellos que pación en el gasto total es el doble en ingresos
son comprados por el 95% o más de los hoga- medios y altos respecto a la de ingresos bajos.
res de los grupos de ingresos medios y altos; Este comportamiento no se presenta con los
y el grupo de bienes de lujo está conformado bienes de confort, ya que su participación es
por los que son comprados por el 95% o más mayor en los hogares de ingresos altos que en
de los hogares de ingresos altos8. En defini- los de ingresos medios.
tiva, quedan 18 grupos: diez básicos, seis de
confort y dos de lujo9. Estos resultados son, en general, coherentes;
aunque algunos comportamientos no son los
La tabla 29, en el apéndice 1.1, muestra cómo esperados, podemos afirmar que son acep-
se realiza la asignación de los tipos de gasto en tables y que la clasificación resultante de los
los 18 grupos señalados anteriormente. Con bienes es una buena aproximación de lo que
tal agregación en mente, la tabla12 muestra serían bienes básicos, bienes para consumo
las participaciones de los diversos rubros de de hogares con ingreso medios (de confort) y
gasto en bienes y servicios. Se quieren desta- bienes de lujo.
car varios aspectos. 1) La participación en el
gasto total de los bienes confort y de lujo, de Por último, se especifican y se estiman los
los hogares de ingresos bajos, es de apenas modelos de represión del Sistema Lineal de
2.6%; es decir que más del 97% del gasto total Gasto como en Nachiketa Chattopadhyay et.
de estos hogares se va en los bienes básicos; Al (2009)10. La ecuación típica del SLG, en el
en el mismo sentido, se observa que lo que caso de n bienes, es
gastan los hogares de ingresos medios en bie-
nes básicos es el 86% de su gasto total, y en
los hogares de ingresos altos el 67%. En bie-
nes confort, esta proporción es de 13% para Donde xi=gasto en el grupo de bienes
hogares de ingresos medios y 25% para ho- i, γi=gasto mínimo en el bien básico i,
gares de ingresos altos; y, por último, los bie- βi=Propensión marginal a gastar en el grupo
nes de lujo representan, para los hogares de de bienes i X=gasto total. La forma reducida
ingresos medios, un 1.5%, mientras que para de este modelo es:
los altos un 8.3%. 2) Los gastos más represen- , donde
tativos en bienes básicos como son alimen-
tos, vivienda, transporte y comunicaciones
se comportan de la forma esperada; es decir,

9/
En Jerárquico, 2008 quedaron 26 grupos de bienes; 10 básicos, 8 de confort y 8 de lujo. Así, debido a la mayor desagregación que
tiene la ECV2008.
Como en Jerárquico, 2008; si, por ejemplo, un hogar de ingresos bajos tiene algún gasto en bienes de confort o de lujo, ese gasto
10/

queda en la estimación. Esto hay que tenerlo en cuenta a la hora de interpretar los resultados que a continuación se presentan, ya
que, por ejemplo, los resultados de la estimación de la demanda de bienes de lujo por parte de hogares con ingreso bajos puede no
tener ningún sentido y, por supuesto, ningún interés.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

38

Al pasar de la forma reducida a la forma es- se toma como gasto mínimo en bienes bási-
tructural, se llega a la expresión: cos (GMBB), base para los cálculos de capaci-
dad de pago. Obsérvese también que los λji
cambian las PMAGi, para los bienes no bási-
cos y los grupos de ingresos medios y altos, lo
cual tiene efectos sobre las elasticidades in-
Donde θn es el gasto de subsistencia en el
greso (gasto).
grupo n, que se supone conocido.
Por último la elasticidad ingreso (gasto) es la
En nuestro caso, la forma reducida es:
siguiente:
- para hogares con ingresos bajos:

Donde i representa el grupo de bienes y j el


grupo de ingresos, y=gasto per cápita del ho- con w1i= participación del gasto del bien i en
gar, YJ-1= gasto máximo per cápita del grupo el gasto total de los hogares con ingresos ba-
de ingresos inmediatamente anterior al que jos;
pertenece el hogar y dJ son dummies que in- - para hogares con ingresos medios:
dican la pertenencia del hogar a un grupo de
ingresos; si j=1 (grupo de ingresos más bajos)
d2=d3=0, si j=2 (grupo de ingresos medios)
entonces d2=1 y d3=0 y si j=3 (grupo de
ingresos altos) d2=0 y d3=1.
con w2i= Participación del gasto del bien i en
el gasto total de los hogares con ingresos me-
Obsérvese que si suponemos que el gasto mí-
dios;
nimo de subsistencia diferente de cero es solo
para los bienes básicos. La forma estructural - para hogares con ingresos altos:
de este modelo se puede expresar así:

con w3i= Participación del gasto del bien i en


el gasto total de los hogares con ingresos al-
tos.
Por tanto, el gasto mínimo para el grupo de
bienes i de los bienes básicos será: La tabla 3 presenta los resultados de la esti-
mación de la forma reducida, expresada en (1)
para cada uno de los grupos de bienes defini-
dos.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

39

Tabla 3
Sistema Lineal de Gasto (SLG)

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

40

En cuanto a los bienes básicos en alimentos, De las otras PMGi, no es claro el comporta-
vivienda, servicios personales y educación, el miento que deban tener; de todas maneras, lo
comportamiento de las PMAGi es el espera- que se observa es lo siguiente: para los bienes
do; es decir, estas propensiones son mayores confort (como vivienda, medicina y transporte
para los hogares de ingresos bajos, con re- y comunicaciones), las PMG son más altas para
lación a los ingresos medios; y la de los in- los hogares de ingreso medios; para servicios
gresos medios, más bajas que la de los altos. personales, el grupo de cultura y recreación y
Para los otros grupos de bienes básicos, este el de durables las PMGi son más altas en ho-
comportamiento no se presenta; así, para sa- gares de ingresos altos.
lud, transporte y comunicaciones, vestuario y
durables, las PMAGi no son significativamente En la tabla 4 se observan las elasticidades in-
diferentes entre los hogares de ingresos me- greso (gasto) en el punto medio; en cuanto a
dios y bajos, pero, de todas formas, las PMA- estas variables, también se esperaría que, al
Gi de los hogares con ingresos altos sí son menos para bienes básicos, las elasticidades
menores con relación a los otros hogares; en sean mayores en los hogares de ingresos ba-
recreación y cultura no hay diferencias entre jos; comportamiento que se da claramente en
las PMGi, mientras que en bebidas la PMGi es salud, cultura y recreación, educación y du-
bastante más alta para el último grupo de in- rables, pero que no es tan claro en los otros
gresos. bienes básicos.

Tabla 4
Elasticidades Ingreso o Gasto

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

41

Así, en alimentos, vivienda, transporte y co- grupo de ingreso alto; solo en servicios perso-
municaciones, servicios personales y vestua- nales y durables se observa el comportamien-
rio, la elasticidad aumenta al pasar del gru- to contrario. En bienes de lujo, las elasticida-
po de ingresos bajos al de ingresos medios y des son mayores en el grupo de ingresos altos.
disminuye al pasar del de ingresos medios al
de ingresos altos. En bebidas es en el único Por último, en la tabla 5 se observa el Gasto
grupo de los básicos donde la elasticidad crece Mínimo en Bienes Básicos (GMBB), calculado
con el ingreso. según se expresa en la ecuación 2. El valor
obtenido es de $317.364 per cápita, mensual,
En cuanto a los bienes confort, para casi todos discriminado de la siguiente forma: 29% en
los grupos, es mayor la elasticidad en los gru- alimentos, 36% en vivienda y 14% en trans-
pos de ingreso medio en comparación con el porte.

Tabla 5
Valor del Gasto Mínimo en Bienes Básicos (GMBB)

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

42

1.7.2
Cálculo y resultados del Índice Como se ha dicho en la metodología, los ho-
de Capacidad de Pago de los hogares gares con un ICP igual a cero carecen de ca-
pacidad de pago; es decir: sus ingresos no al-
bogotanos (ICP)
canzan a cubrir su Gasto Mínimo en Bienes
Básicos. En Bogotá, el porcentaje de hogares
En esta parte se presentan algunos resultados
en esta situación es el 18.9% del total, que
preliminares utilizando el ICP hallado como
corresponde a un poco más de 414.167 hoga-
se definió previamente. Se quieren mostrar el
res. Ciudad Bolívar y Usme son las localidades
porcentaje de hogares sin capacidad de pago,
donde hay una mayor proporción de hoga-
es decir, con un ICP = 0; y la distribución de
res sin capacidad de pago ya que en ellas la
indicador entre los hogares bogotanos. Ade-
proporción es de más del 40%, le siguen San
más, se muestra la relación que tiene este ín-
Cristóbal, Rafael Uribe Uribe y Bosa con más
dice con otras variables, como estrato del ho-
de 30%. En contraste, las localidades donde
gar, localidad donde el hogar vive, edad y sexo
hay menos hogares sin capacidad de pago son
del jefe, así como la categoría ocupacional. Es-
Teusaquillo, Chapinero, Usaquén, Barrios Uni-
tos cálculos permitirán identificar en parte las
dos, Fontibón y Puente Aranda.
características que determinan la capacidad
de pago del hogar.
Este resultado simplemente confirma el pro-
ceso de segmentación urbana de la capital. De
Todos los resultados que se presentan se de-
hecho, se podría decir que existe un proceso
ben tomar como preliminares ya que, se está
de acusación circular acumulativa que arroja
en proceso de afinar el índice, estudiando su
a un porcentaje importante de los ciudadanos
relación con otras variables, como las que se
bogotanos a trampas de pobreza y satisfacción
muestran acá y, adicionalmente, con otras va-
precaria de sus capacidades básicas o dere-
riables de importancia como son el ingreso y
chos básicos y de bienes básicos (Tabla 6).
los patrones de gasto, aspectos que en este
documento no se tratarán.
Tabla 6
Hogares sin Capacidad de Pago por localidad
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

43

Tabla 6
Hogares sin Capacidad de Pago por localidad

En la tabla 7 se presenta la incidencia de ho- Tabla 7


gares sin capacidad de pago por estratos. En Hogares sin capacidad de pago, por estrato
el estrato 1, el 52.2% de los hogares no tienen
capacidad de pago; en el 2, este porcentaje es
de 29.6%; y en el 3, es de 8.5 %; mientras que
en los estratos 4, 5 y 6 este porcentaje es de
cero o cercano a cero.

Es importante señalar que entre los hogares


no clasificados en estratos hay un alto por-
centaje de hogares sin capacidad de pago. Los
resultados no son sorprendentes. El alto por-
centaje de hogares sin capacidad de pago en
el estrato 1 sencillamente refleja otra cara de Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011
la pobreza; sin embargo, como lo muestran los
datos, hogares no pobres también pueden ca- Las tablas 8 y 9 presentan la incidencia de la
recer de capacidad de pago. no capacidad de pago, según sexo del jefe y
según su posición ocupacional, respectiva-
Puede decirse que un hogar pobre carece de mente. De acuerdo al sexo del jefe del hogar,
capacidad de pago, en tanto que lo contrario la diferencia no es significativa; aunque la in-
no necesariamente es cierto: existen hogares cidencia es un poco mayor en los hogares con
no pobres que carecen de capacidad de pago. jefatura masculina (19.1% contra 18.7%).
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

44

En cuanto a la posición ocupacional, se tie- Tabla 8


ne que los hogares con mayor incidencia de Hogares sin capacidad de pago, por sexo del
no capacidad de pago son aquellos cuyos jefes jefe del hogar
son empleados domésticos (42.4%), obreros
(29.9%), desocupados e inactivos (25.5%) y
trabajadores independientes (23%), mientras
que los de menor incidencia son los hogares
con jefe patrón (5.6%), profesionales inde-
pendientes (6.8%) y pensionados (7.8%).
Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

Tabla 9
Hogares sin capacidad de pago por posición ocupacional

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

1.7.3
Con estos resultados preliminares, se puede
decir que es necesario implementar políticas Una mirada a la estructura del gasto

públicas de provisión de bines básicos (Bo- de los hogares desde diversos criterios

gotá sin hambre, servicios de salud) que les de clasificación de la unidad de análisis,
permitan a los hogares sin capacidad de pago con énfasis en los gastos en vivienda
liberar parte de sus ingresos, con el objeto de y los servicios públicos domiciliario
que puedan salir de su situación de privación
básica. En este acápite se presenta un ejercicio de-
tallado de la estructura del gasto de los ho-
gares bogotanos. Se presenta un mayor nivel
de desagregación con el fin de identificar los
pesos de los gastos en la vivienda y los servi-
cios públicos domiciliarios.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

45

Esta información es vital para el diseño de po- servicios públicos (energía). Luego se mues-
líticas de servicios públicos y consumo básico tran las elasticidades gasto para cada uno de
de los hogares; permite identificar, de mane- los grupos de bienes definidos y las elastici-
ra específica, cuáles son los bienes y servicios dades precio propio de los servicios públicos
que inciden directamente en la capacidad de domiciliarios.
pago.
La estructura de gastos por deciles
La estructura de gasto se presenta siguiendo
cuatro criterios de clasificación de hogares: (i) En esta primera parte se muestra la estruc-
por deciles ordenados del gasto per cápita, (ii) tura del gasto en bienes y servicios ordenada
por los tres grupos de hogares considerados por deciles del gasto total de las personas. Sin
en el ejercicio de elaboración del ICP, es decir embargo, antes vale la pena mirar somera-
ingresos bajos, medios y altos, (iii) por quinti- mente la distribución del gasto en los deciles.
les ordenados por el ICP, y (iv) por estratos de En la tabla 10 se presenta dicha distribución.

Tabla 10
Distribución del gasto por deciles

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

El gasto del primer decil de hogares repre- Otra forma de ver la gran desigualdad que
senta apenas el 2% del gasto total de los bo- existe entre los hogares bogotanos, es no-
gotanos, mientras que el último decil alcanza tando que se necesita acumular el gasto de
el 36.7%: es decir, el gasto per cápita prome- más del 70% de los hogares de la ciudad para
dio del último decil es 18.5 veces mayor que alcanzar el % del gasto que los hogares más
el del primer decil. Prácticamente, la misma ricos, pertenecientes al último decil realizan.
diferencia que existe entre el ingreso per cá- Ello se refleja sin duda en el coeficiente de
pita de Japón y Sudan. Gini, cuyo valor es de 0.463, consistente con
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

46

los coeficientes de desigualdad del gasto11. Es En la tabla 11 se presenta la desagregación


en este contexto que se debe analizar la es- del gasto en bienes y servicios por decil. Como
tructura de gastos. se anotaba anteriormente, el grupo de gastos
de vivienda ha sido desagregado en cada uno
de sus componentes ya que interesa detallar
el monto de los pagos de servicios públicos.

Tabla 11
Estructura del gasto por deciles de los hogares

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

11/
Para 2004, si bien los conceptos de gasto eran un poco diferentes, el coeficiente de Gini era de 0.497
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

47

En Bogotá, el pago de los servicios básicos de a 8.35%, para caer en el décimo a 6.3%, esto
la vivienda es el de mayor peso relativo en debido a que, en este decil el número de per-
el gasto total de los hogares, ya que llega al sonas en edad de estudiar es muy pequeño.
24.6%, sobrepasando incluso al rubro de ali-
mentos que llega al 19.0%. El gasto en vestuario aumenta en los primeros
deciles hasta alcanzar el 7.1% en el cuarto de-
Se esperaría que en los primeros deciles el cil, para luego disminuir y ser de, apenas, un
peso más grande lo tuviesen los alimentos, 3.6% en el décimo. Obsérvese que los grupos
pero dado el monto que estos hogares dedican de gasto mencionados pertenecen todos a los
al pago de servicios públicos domiciliarios, el bienes básicos en la jerarquización de bienes
gasto por el pago de servicios de la vivienda que se definió antes12.
adquiere una importancia muy grande en el
presupuesto de los hogares. Si bien para el El peso de los otros grupos no es muy grande
total de hogares, el pago de acueducto, elec- para el total de hogares; sin embargo hay dos
tricidad y gas natural representa el 4.1% del grupos de los llamados confort que tiene un
gasto total de los hogares, para el primer decil peso importante: el de transporte y comunica-
este porcentaje es de 8.2%, para el segundo ciones que es de 4.8% y el del gasto en bienes
de 7.2%, mientras que en el noveno y décimo durables que es de 4%13. El primer grupo no
decil estas proporciones son de 3.4% y 2.6% llega al 2% en los primeros deciles, pero va
respectivamente. aumentando hasta alcanzar más del 6% en el
último decil. El gasto de bienes durables casi
El segundo componente en importancia es el llega al 6% en el último decil.
gasto de alimentos que representa el 22.5%
del gasto total de los hogares, cifra que en el En cuanto al conjunto de bienes de lujo (que
primer decil llega al 28.2% y va descendiendo sólo contiene dos grupos: servicios personales
sistemáticamente hasta llegar a19% en el úl- y bienes durables) el de servicios personales
timo decil. El tercer grupo de bienes es el de tiene un bajo peso en todos los deciles; pero el
transporte y comunicaciones que representa de durables, si bien no tiene ningún peso en
el 9.5% del gasto total, este grupo representa los primeros deciles, en el último llega a re-
el 13% del gasto total de los hogares del pri- presentar 7.5% del gato total de esos hogares.
mer decil y aumenta hasta llegar al 14.6% en
el tercer decil, para disminuir desde el cuarto
decil y representar solo el 5.6% de los gastos La estructura de gastos por grupos de
totales del décimo decil. Le siguen en impor- ingreso
tancia, el gasto en educación (7%) y el gasto
en vestuario (5%). Aquí se presenta la misma estructura del
gasto de los hogares pero ahora la desagre-
El gasto de educación es de 6.6% del total en gación se hace de acuerdo con los grupos de
los hogares del primer decil, disminuye en el “ingreso”: (1) Hogares con un gasto per cá-
segundo y tercer deciles, para llegar de nue- pita menor a $279.800 que llamaron hoga-
vo a 6.6% en el cuarto decil e ir aumentando res con “ingresos” bajos, (2) Hogares con un
paulatinamente y llegar, en el noveno decil, gasto per cápita mayor o igual a $279.800 y

12/
Ver Apéndice 1.1
Debe recordarse que en el conjunto de bienes básicos hay un grupo de transporte y comunicaciones y otro de durables; pero, en el
13/

conjunto de bienes de confort, también existe un grupo de transportes y comunicaciones (gas_trancomu1) y otro de durables (gas_du-
rable1), y es a estos últimos que se refiere este texto.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

48

menor a $1.767.500 (que corresponde al lí- altos con más de $1.767.500. En la tabla 12 se
mite superior del noveno decil en la distribu- puede observar la composición del gasto para
ción del gasto) y se denominaron hogares con estos tres grupos.
“ingresos” medios y (3) Hogares de ingresos

Tabla 12
Estructura del gasto por grupos de ingreso

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

49

Lo que se puede observar con facilidad es que El comportamiento de los otros grupos de bie-
se confirma lo que se ha dicho atrás. Una pre- nes es similar al que se presentó por deciles,
ponderancia del gasto en servicios de la vi- confirmando el hecho que el peso de los bie-
vienda en todos los hogares bogotanos, sobre nes de confort y de lujo es mínimo en los ho-
el gasto de alimentos, que en el caso de los gares de ingresos bajos, como corresponde a
hogares con bajos ingresos se ve reforzada la forma en que se construyeron esos grupos.
por al alto peso relativo del pago de servicios De allí la importancia que tienen las políticas
públicos domiciliarios. de tarifas de los servicios públicos y de canon
de arrendamiento sobre la equidad en la es-
Así el gasto en los servicios de la vivienda tructura del gasto de los hogares bogotanos y
representa el de 36.1% del total para el grupo en la determinación de la capacidad de pago.
de ingresos bajos, el 28.4% para el segundo
grupo y llega al 24.6% para el tercer grupo. La estructura de gastos por quintiles
Del gasto que hacen los hogares en servicios según el ICP
de la vivienda, los servicios públicos domici-
liarios corresponden al 20% en el grupo de En la tabla 13 se presenta la estructura del
ingresos bajos, 16.5% en ingresos medios y gasto de los hogares bogotanos, ordenada
10.5 % en ingresos altos. por quintiles del índice de capacidad de pago
(ICP).

Tabla 13
Estructura del gasto por quintiles de los hogares

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

50

El comportamiento, como es obvio, es similar ción de los servicios públicos y los gastos en
al que se observa en las otras clasificaciones. vivienda representan porcentajes superiores
Mostrando robustez en los resultados gene- que lo que se observa para los mismos rubros
rales. Para casi todos los grupos del conjunto en los quintiles más altos. Este resultado sen-
de bienes básicos, la participación va bajando cillamente confirma la conclusión de que las
a medida que el quintil aumenta. En educa- políticas de tarifas de servicios públicos y de
ción la participación va aumentando, pero en consumo básico son centrales para que los ho-
el último quintil disminuye, mientras que la gares sin capacidad de pago puedan liberar o
participación de los durables aumenta con los no recursos para acceder a bienes superiores
quintiles, así en el primer quintil la participa- en la jerarquía de bienes (confort y de lujo).
ción es de 0.4% y el último llega a 0.9%. En
el conjunto de bienes de confort y de lujo hay La estructura de gastos por estratos
un aumento en su participación en el gasto
total a medida que se asciende. Del mismo Por último en la tabla 14 se muestra la estruc-
modo, se encuentra que, en los quintiles más tura del gasto según el estrato al que pertene-
bajos de capacidad de pago (ICP), la participa- ce el hogar14.

Tabla 14
Estructura del gasto por estratos

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

14/
El estrato utilizado es el estrato de energía eléctrica que se pregunta en la encuesta, el estrato 9 es el de los hogares que no cuen-
tan con energía eléctrica o no informasen el estrato, por ello no se hablará de la composición del gasto de esos hogares.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

51

Recuérdese que es con base en esta estratifi- con los grupos de ingreso o con los quintiles
cación que se dan los subsidios en los servi- del ICP)15.
cios públicos domiciliarios; es, quizá, por ello
que en el estrato 1 se observa que el peso de En las tablas 15, 16, 17 y 18 se presentan los
los alimentos es mayor que el de la vivienda coeficientes de Gini que miden el grado de
(32.2% contra 26%). En los siguientes estra- concentración o inequidad del gasto mínimo
tos se vuelve a la situación “estándar” con una básico y del gasto total de los hogares colom-
mayor proporción en el gasto de servicios de bianos para las encuestas 2003, 2004, 2007
la vivienda. y 2011.

La hipótesis principal que puede explicar este El indicador se muestra tanto para estratos
hecho es que los hogares del estrato 1 reciben como para las localidades de la ciudad. Como
importantes subsidios en el consumo de ser- se puede observar, el indicador se reduce 0.01
vicios públicos domiciliarios, lo que incide en o 0.02 puntos; sin embargo, se mantiene re-
una menor proporción del gasto en servicios lativamente alto, en niveles de 0.41, para el
de vivienda. GMBB y en 0.46 para el gasto total entre 2003
y 2011.
Si se compara esta cifra, con las de la tabla 14
puede observarse que el peso del servicio pú- Es decir, a pesar de las políticas públicas del
blico domiciliario del estrato 1 es similar a los distrito y del gobierno nacional dirigido al
que tienen los hogares ubicados entre el ter- apoyo de la población más vulnerable y po-
cero y cuarto quintiles del ICP, lo que indicaría bre de la ciudad, el grado de concertación del
que muchos de los hogares de estrato 1 en gasto entre los hogares ya sea por estrato o
realidad tienen una mayor capacidad de pago localidad no cambia sustancialmente.
y que, por tanto, no deberían ser acreedores
de dicho subsidio. El otro hecho que vale la pena señalar es que
el Gini para el gasto mínimo en bienes básicos
Esto se reflejaría también en el hecho de que (GMBB) es menor que el gasto total. Este he-
el conjunto de bienes de lujo no tiene el com- cho se puede explicar en parte por las accio-
portamiento esperado en el sentido de que a nes públicas dirigidas a garantizar el acceso a
mayor estrato mayor proporción en el gasto los bienes necesarios o de subsistencia en la
de esos bienes (como si se da con los deciles, capital de la república.

Tabla 15
Coeficiente de Gini para el Gasto Básico, según estrato

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV 2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.

Nótese que el peso de los servicios públicos domiciliarios en el decil de más bajos gastos es de 8.2%; para el grupo de bajos ingresos,
15/

es de 7.6%; y para el quintil con más bajo ICP, es de 7.2%.


Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

52

Tabla 16
Coeficiente de Gini para el Gasto Total, según estrato

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV 2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.

Tabla 17
Coeficiente de Gini para el Gasto Básico, según localidad

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV 2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

53

Tabla 18
Coeficiente de Gini para el Gasto Total según localidad

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV 2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.

1.7.4 de hogares ordenados por el ICP16. La elastici-


Elasticidades gasto y precio dad se ha calculado en el punto medio de cada
intervalo, sea estrato o quintil, pero para el
En esta parte se presentan las elasticidades caso de las elasticidades precio para el estra-
gasto de los grupos de bienes construidos y to 1 o el primer quintil, se calcularon para el
las elasticidades precio propio para los bienes punto de gasto mínimo, ya que de otra mane-
que conforman el grupo de vivienda. Estas ra, para esos niveles de gasto las elasticidades
elasticidades se presentan por estrato de la no tendrían mucho sentido17.
vivienda donde habita el hogar y por quintiles

Se estimaron las elasticidades por deciles de gasto, pero los resultados no son estadísticamente significativos en muchos de los ca-
16/

sos; por lo cual, se optó por presentar solo la desagregación por estratos y quintiles, aunque para este tipo de desagregación también
se presentan algunos problemas de no significancia estadística.
17/
La elasticidad gasto del bien i, para el SLG, es de Bi/wi, donde Bi es la propensión marginal a gastar el gasto en el bien i y wi es la
participación promedio del gasto en el bien i sobre el gasto total. La elasticidad precio del mismo sistema es -1+i/Xi(1-Bi) donde i
es el gasto mínimo estimado y Xi es el gasto promedio en el bien i, en el caso del estrato 1 o del primer quintil se considera Xi =i
y, por tanto, la elasticidad es igual a -Bi, esto, dado que para estos grupos el gasto medio es menor al gasto mínimo estimado.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

54

Elasticidades según estratos Como es de esperarse, la elasticidad gasto de


de los hogares los alimentos es bastante alta para el estrato
1 y va descendiendo a medida que aumenta
En la tabla 19 se presentan los parámetros es- el estrato; en el estrato 2 esta elasticidad es
timados del SLG de los grupos de bienes y por prácticamente igual a 1, en el estrato 3 y 4 es
estrato18 y las elasticidades gasto estimadas de 0.9 y en los dos últimos es de 0.8 aproxi-
en el punto medio. madamente.

Tabla 19
Elasticidades gasto, por estrato

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

18/
En un anexo se presentan los resultados de las estimaciones econométricas.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

55

En cuanto a los servicios de la vivienda, las pasa del estrato uno al dos y del dos al tres,
elasticidades más altas se observan en los es- para luego disminuir en los estratos cuatro,
tratos dos y cinco, con un poco menos de 0.8. cinco y seis.
En los estratos tres, cuatro y seis son de 0.7,
mientras que para el estrato uno la elasticidad El mismo comportamiento se constata en
es de 0.43. Para los servicios de vivienda se transporte, servicios personales, cultura y re-
presentan en detalle los valores de las elastici- creación, educación y en los durables básicos.
dades gasto de cada uno de los subgrupos que En salud, la elasticidad gasto crece fuerte-
los componen ya que son de especial interés mente entre los estratos uno y dos, luego dis-
en este trabajo. Se consideran especialmente minuye en el estrato tres, para aumentar en
para los servicios públicos domiciliarios: los últimos estratos a valores que giran alre-
dedor de 1; incluso en el estrato cinco el valor
Acueducto, el estrato tres tiene la mayor elas- es de 1.2. En cuanto a vestuario, la elasticidad
ticidad, 0.7, mientras que en los otros estratos tiene un comportamiento similar al primer
dicha elasticidad está alrededor de 0.3 y 0.4. caso, pero en lugar de disminuir, en el último
estrato aumenta fuertemente.
Electricidad, la elasticidad está entre 0.3 y 0.4
en todos los estratos. En la clase de bienes de confort, los grupos de
vivienda, medicina prepagada y transporte y
Gas natural, el comportamiento de la elastici- comunicaciones tienen una elasticidad máxi-
dad gasto en este servicio, es diferente al de ma en el estrato dos para ir cayendo y alcanzar
los dos anteriores ya que en los estratos tres y un mínimo en el estrato seis. En cuanto a ser-
cuatro está es bastante alta, (0.8 y 1.1 respec- vicios personales también hay un máximo en
tivamente), mientras que en el resto de estra- el estrato dos, disminuye para el tres y luego
tos es, aproximadamente, de 0.2. aumenta un poco en los siguientes estratos.

Teléfono fijo; como se sabe, este servicio ha En cuanto a los durables en el estrato 2 se
sufrido importantes cambios debido a la gran presenta la menor elasticidad y el valor máxi-
competencia de la telefonía celular, ello debe mo se alcanza en el estrato seis. Y, por último,
incidir en el comportamiento de la demanda en cuanto al grupo de cultura y recreación es,
de los hogares. Para el estrato uno la elastici- de nuevo, el estrato dos el de mayor elastici-
dad es de 0.2, para los estratos dos y tres es dad, le sigue el estrato uno (2.8); los demás
de 0.6 y para los tres últimos estratos ésta es estratos también tienen elasticidades altas. En
de 0.5 aproximadamente. cuanto a los de lujo, se observa que la elastici-
dad gasto más alta para los servicios persona-
En los restantes grupos de bienes se distingue les se alcanza en el estrato 5 y en los durables
entre los bienes básicos, los de confort y los en el 3.
de lujo. En los bienes básicos se esperaría que
a medida que aumente el estrato, la elastici- En cuanto a las elasticidades precio de los
dad gasto vaya bajando, en realidad en ningún servicios públicos domiciliarios, en la tabla
grupo del conjunto de básicos sucede tal cosa; 20 se puede observar para cada uno de los
lo que se presenta en la mayoría de grupos es estratos.
que la elasticidad gasto crece a medida que se
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

56

Tabla 20
Elasticidades precio de servicios públicos por estrato

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

El comportamiento de las elasticidades es si- pueden observar las elasticidades gasto para
milar en los cuatro servicios domiciliarios: cada uno de los quintiles de hogares según su
Prácticamente nula en el primer estrato, para capacidad de pago.
luego ir aumentando y tener un máximo en el
estrato seis; esto es al menos así para acue- En alimentos, los de los dos primeros quinti-
ducto, electricidad y teléfono fijo; en gas natu- les alcanzan una elasticidad unitaria, mientras
ral este comportamiento es un poco diferente que ya en el tercer quintil esa elasticidad es
ya que la mayor elasticidad precio se da en el de 0.86; en el cuarto, de 0.75; y en el quinto
estrato cinco. Todos estos resultados, respal- es de 0.73. En vivienda básica todos los quin-
dan de alguna manera la idea de que los ho- tiles, excepto el cuarto, tienen elasticidades
gares bogotanos toman decisiones de gasto de un poco menores a 1; en tanto que el cuarto
acuerdo a un orden jerárquico. De hecho, las alcanza una elasticidad de 1.17. Observando
bajas elasticidades de los bienes básicos y en de nuevo los servicios públicos domiciliarios
particular de los servicios domiciliarios con- se tiene:
firma la idea que para mejorar la capacidad
de pago se requieren medidas que mejoren Acueducto: una mayor elasticidad a medida
los ingresos de los hogares ya sea mediante que se pasa del estrato uno al tres, para dis-
transferencias directas o reduciendo los cos- minuir en el estrato cuatro. Es de anotar que
tos de los servicios públicos. en este servicio, como en el de electricidad y
gas natural, la elasticidad gasto siempre es
menor a 1.
Elasticidades por quintiles de hogares
según el ICP
Electricidad: en el estrato uno se presenta la
mayor elasticidad gasto (0.7), luego disminu-
La clasificación por estratos presenta proble-
ye y se estabiliza alrededor de 0.5 en los es-
mas de identificación de los hogares. Por ejem-
tratos restantes.
plo, se pueden encontrar casos en los cuales
el hogar (o la persona) pertenece al estrato 1,
pero tiene capacidad de pago. Por el contra- Gas natural: con excepción del cuarto quintil,
rio, existen hogares en el estrato tres o cuatro la elasticidad gasto por este servicio se ubi-
que pueden carecer de capacidad de pago. Por ca alrededor de 0.6, con un valor máximo en
ello, es bueno presentar un análisis similar al el tercer quintil de 0.7; en el cuarto quintil la
anterior de elasticidades, pero discriminando elasticidad es 0.
por capacidad de pago (ICP). En la tabla 21 se
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

57

Teléfono fijo: este servicio tiene una elastici- quintil; algo similar sucede con servicios per-
dad gasto mayor a 1 en los quintiles uno, dos y sonales básicos, vestuario y durables básicos.
cuatro. En el quintil tres es cercana a 1, mien- En salud, la elasticidad gasto se ubica alrede-
tras que en el último es 0.6. La alta elasticidad dor de 1, siendo el quintil con menor elastici-
de este servicio, especialmente en los hoga- dad el sexto (0.9), sólo en el tercer quintil se
res con baja o mediana capacidad de pago, se presenta una elasticidad bastante alta (1.3).
explica por la gran competencia que enfrenta En cultura y recreación, la elasticidad más alta
con la telefonía celular. se alcanza en el segundo quintil 1.28; luego
cae a 0.76, en el tercer quintil, y aumenta en
Como el análisis que se hizo por estrato, para los dos últimos. En educación, la elasticidad
el resto de bienes, se hace referencia a la cla- crece hasta el tercer quintil; donde alcanza la
sificación de bienes básicos, de confort y de unidad. En el cuarto, baja a 0.6, y es práctica-
lujo. En la clase de bienes básicos: en trans- mente nula en el quinto.
porte y comunicaciones, la elasticidad gasto
va disminuyendo a medida que aumenta el

Tabla 21
Elasticidades gasto, por quintiles acorde con el ICP

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

58

En la tabla 22 se muestran las elasticidades tiles las elasticidades precio son muy cercanas
precio de los servicios públicos domiciliarios a cero y luego aumentan para llegar a niveles
por quintiles. El comportamiento es similar en entre 0.5 y 0.8, en el último quintil.
todos los servicios. En los dos primeros quin-

Tabla 22
Elasticidades precio de servicios públicos por quintiles

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

Tal vez lo más importante a resaltar de los re- 1.7.5


sultados de la tabla19 es la elasticidad prác- Evolución del Índice de Capacidad de Pago
ticamente nula para todos los servicios y los de Bogotá 2003-201119
gastos del aseo del hogar para el quintil 1 de
los hogares, según la clasificación de la capa- En este acápite se muestra la evolución del
cidad de pago. índice de capacidad de pago de los hogares
bogotanos para el periodo 2003-2011. Para
Esto quiere decir que cualquier aumento en ello se calculó el Gasto Mínimo en Bienes Bá-
las tarifas de los servicios públicos o la reduc- sicos (GMBB), de acuerdo con las encuestas de
ción de subsidios para estos hogares sencilla- 2003, 2004, 2007 y 2011; luego se determinó
mente se traduce en una disminución drástica el ICP (como se hizo para la encuesta Multi-
en la capacidad de pago. propósito de 2011). En la tabla 23 se presen-
tan los resultados, tomando la localidad como
Los hogares no pueden sustituir el consumo referencia.
de dichos bienes. Ello se reflejara en impago
de facturas y suspensión del servicio. Y en el
mejor de los casos, los hogares sencillamen-
te reducen en los gastos de los bienes menos
necesarios para cumplir con sus compromisos
con las empresas de servicios públicos domi-
ciliarios.

19/
Se presentan los cálculos para la Encuesta de Calidad de Vida de 2007 pues se requiere en los términos del contrato. Sin embargo,
dicha encuesta presenta serios inconvenientes y deficiencias que hacen que los resultados derivados de ella no sean comparables con
las otras encuestas.
Tabla 23
Evolución del ICP, por localidad
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV 2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.
59
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

60

Puede observarse que la proporción de los ho- Como se muestra en el gráfico 10, la reducción
gares sin capacidad de pago en la ciudad de de los hogares sin capacidad de pago se pre-
Bogotá tiende a disminuir. Pasando de 30.1% senta en prácticamente todas las localidades
en 2003 a 28% en el 2004 y a 18.9% en el de la ciudad. Sin embargo, entre 2004 y 2011
2011. Estos resultados muestran una impor- aumentan ostensiblemente en La Candelaria,
tante reducción a lo largo de los últimos ocho Usaquén, Chapinero y Usme. Lo mismo ocurre
años. en Bosa, Barrios Unidos, Rafael Uribe y Ciu-
dad Bolívar, entre 2003 y 2004.
Dicho patrón se podría explicar en parte por
las políticas distritales dirigidas a atender a la Es importante anotar que en las localidades
población en condiciones de pobreza y vulne- donde se concentra el mayor porcentaje de
rabilidad, así como por el cambio de fase del hogares sin capacidad de pago -como lo son
ciclo económico colombiano, que se eviden- Ciudad Bolívar, San Cristóbal, Tunjuelito Ken-
cia con claridad por la reducción de la tasa de nedy y Rafael Uribe- el indicador muestra una
desempleo y la recuperación del crecimiento reducción importante y continua entre 2004
económico en la ciudad y en la economía co- y 2011.
lombiana entre 2004 y 2011.

Gráfico 10
Evolución hogares sin capacidad de pago por localidades

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV 2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

61

En la tabla 24 se presenta la evolución del ín- Aunque entre 2003 y 2004 el número de ho-
dice de capacidad de pago (ICP) de acuerdo gares sin capacidad de pago aumentó en el es-
al estrato del hogar. Lo que vale la pena co- trato 1 (23%), el patrón que se observa es que,
mentar de esta tabla es la importante reduc- en general, en todos los estratos disminuye la
ción de los hogares sin capacidad de pago en cantidad de los hogares con privaciones de
los estratos 1, 2 y 3. En efecto, entre 2004 y bienes básicos.
2011, la reducción fue del 5%, 23% y 45%
respectivamente.
Tabla 24
Evolución del ICP, por estrato

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV 2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.

En la tabla 25 se presenta el ICP de acuerdo al reducen en un porcentaje mayor para aquellos


sexo del jefe del hogar. Lo más destacado de cuyo jefe es una mujer (10% versus 2%).
los datos es que al parecer no existen grandes
diferencias en términos de carencia de capaci- Lo contrario ocurre entre 2004 y 2011, cuan-
dad de pago entre hogares cuyo jefe del hogar do la mayor reducción se da en hogares cuyo
es hombre o mujer. Sin embargo, entre 2003 jefe es un hombre (29% versus 17%).
y 2004, los hogares sin capacidad de pago se

Tabla 25
Evolución del ICP por sexo del jefe del hogar

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV 2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

62

A pesar de los resultados positivos que mues- Tabla 26


tra el índice de capacidad de pago durante los Coeficiente de Gini para el Índice de Capaci-
últimos ocho años, es importante decir que en dad de Pago, según estrato
la ciudad de Bogotá persiste una gran inequi-
dad en la distribución del ingreso y el gasto de
los hogares.

De hecho, aunque se han reducido el número


de hogares sin capacidad de pago en la mayo-
ría de las localidades, aún persiste una alta in-
cidencia de privación en bienes básicos en las
localidades más pobres de la capital (Barrios
unidos, Rafael Uribe, Ciudad Bolívar, Usme).
Del mismo modo, en los estratos 1 y 2 se con-
centra el mayor número de hogares sin capa-
cidad de pago, 51% y 29% respectivamente.
Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV
2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.
Esto quiere decir que el distrito debe diseñar
esquemas de atención a los hogares y las per-
sonas que viven en estas localidades y que se Tabla 27
clasifican en los estratos mencionados. Coeficiente de Gini para el Índice de Capaci-
dad de Pago, según localidad
Las acciones deben contemplar entre otras
cosas, subsidios a los bienes básicos, políticas
de empleo público y transferencias directas de
ingreso. Solo de esa manera es posible mejo-
rar la situación de estas personas de manera
permanente.

Lo anterior se refuerza a partir de los resulta-


dos del coeficiente de Gini para la capacidad
de pago. En las tablas 26 y 27 se presenta el
indicador para los estratos y las localidades de
la capital. El índice de concertación es 0.66;
un nivel realmente muy alto para una urbe
moderna, no obstante su reducción de 7% en-
tre 2003 y 2011.

Fuente: Cálculos del CID a partir de las encuestas: ECV


2003, ECP 2004, ECV 2007 y EMB 2011.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

63

En el gráfico 11 se presenta la asociación en- por este problema y con ello reducir el núme-
tre el índice de capacidad de pago y la tasa ro de los hogares sin capacidad de pago. Los
de desempleo. Se observa una alta correlación esquemas de buffer de empleo son una buena
entre las dos variables. Esto quiere decir que alternativa de política social eficiente e inclu-
el determinante más importante de la existen- yente para Bogotá. Aunque existen restriccio-
cia de hogares sin capacidad de pago en las di- nes de orden financiero para que una política
ferentes localidades de la ciudad es la tasa de de este tipo se implemente en Bogotá de ma-
desempleo. Por ello, una de las acciones que nera generalizada, es posible en principio es-
debe emprender la Secretaría de Desarrollo e tablecer un esquema parcial para localidades
Integración Social es promover esquemas de como Ciudad Bolívar, Usme, Rafael Uribe, San
empleo público con el fin de reducir la tasa de Cristóbal, Bosa (Garay, Moreno et al. 2011).
desempleo en las localidades más afectadas

Gráfico 11
Encuesta multipropósito 2011. Localidades de Bogotá

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

64

Apéndice 1.1 Para clasificar a los hogares como capitalis-


tas, se usa únicamente la riqueza no huma-
En este orden de ideas, los trabajos que hacen na (activos financieros, tierra, capital, etc.).
operativo el análisis de clases y la estructura La riqueza no humana se calcula en términos
social en la determinación de la distribución netos; es decir, descontando la deuda finan-
de la riqueza extienden la definición del ingre- ciera, sin considerar las hipotecas de la casa
so a los activos y los pasivos del hogar. Como o apartamento del hogar. Se dice que un ho-
lo establecen Wolf y Zacharias (2007), el in- gar es capitalista si el valor real de su riqueza
greso comprensible (IC) se determina como: neta no humana es mayor o igual que un va-
lor arbitrario w*, que se determina de acuerdo
IC= Ingreso monetario - ingreso a la propie- con las condiciones de la región o del país. Por
dad - transferencias + contribuciones del em- ejemplo, se establece un ingreso mensual de
pleador a la seguridad - impuestos de renta 10 millones de pesos; entonces, dada una tasa
- impuestos a la propiedad - contribuciones de retorno del 10% sobre los activos, un hogar
personales a la seguridad social - impuestos se clasificaría como capitalista si su riqueza
al consumo + valor anualizado de la riqueza fuera igual o mayor de mil millones de pesos.
neta no humana + renta imputada por la casa Ahora, las distintas clasificaciones pueden re-
ocupada + transferencias en dinero + trans- sumirse en la tabla 28.
ferencias no pecuniarias.

Tabla 28
Teorías de clasificación de los hogares en la estructura social

Fuente: Wolf & Zacharias (2007).


Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

65

Tabla 29
Asignación de los rubros de gasto en las 18 categorías identificadas; según grupos de Gasto
(Bajo, medio y alto).
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

66

Tabla 29
Asignación de los rubros de gasto en las 18 categorías identificadas; según grupos de Gasto
(Bajo, medio y alto).

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

67

Apéndice 1.2 por trabajo independiente, pero también es-


Determinantes microeconómicos del in- tán los ingresos provenientes de activos como
greso esperado de los hogares son finca raíz, activos financieros o participa-
ciones en empresas, o transferencias, ya sean
Justificación las pensiones u otras como transferencias de
otros hogares o instituciones. El ingreso por
En la estimación que se ha hecho del Índice cada una de estas fuentes depende de las con-
de Capacidad de Pago, se utilizó el concepto diciones de los mercados y el pago que recibe
de Gasto Mínimo en Bienes Básicos; gasto que el perceptor está condicionado por las caracte-
se utiliza en el cálculo del índice. Ahora bien, rísticas personales relevantes en el mercado.
es claro que este ICP está determinado por Por ello en el análisis de los determinantes del
el ingreso de los hogares. Es por ello que el ingreso del hogar se toman las características
análisis de los ingresos de los hogares y de sus de los perceptores del hogar, especialmente
determinantes es de gran relevancia para en- del jefe, que en general es el mayor aportante.
tender las diferencias en la capacidad de pago
de los hogares. En este sentido se presentan los ingresos que
se han tenido en cuenta para el análisis y las
La variable “ingreso esperado”, que está re- variables que serán utilizadas para el estudio
lacionada con conceptos como el ingreso per- de la determinación del ingreso esperado.
manente y las expectativas que el hogar tiene
sobre sus ingresos a lo largo de su ciclo de
vida, se puede estimar utilizando encuestas Fuentes de ingresos
de corte transversal, donde hay información
de variables de características del hogar y de En la tabla 30 se puede observar el compor-
los miembros que lo conforman, y que son de- tamiento del ingreso de los hogares, según
terminantes de este ingreso esperado. deciles de hogares bogotanos y sus fuentes,
la definición de ingresos que se ha utilizado
En este documento se muestra los resulta- corresponde al ingreso corriente del hogar;
dos de la estimación del ingreso esperado de es decir: al ingreso que cotidianamente re-
los hogares utilizando la información de la cibe el hogar. Por tanto, excluye los ingresos
Encuesta Multipropósito recolectada por el por venta de propiedades, ganancias extraor-
DANE en 201120. dinarias, etc., desafortunadamente, algunos
ingresos que no son corrientes quedaron in-
Ingresos esperados cluidos, ya que el pago de cesantías está en
la misma pregunta de otros ingresos que sí
Los ingresos del hogar están determinados constituyen ingresos corrientes. De esta ma-
por los ingresos de todos los perceptores que nera los ingresos que se tuvieron en cuenta en
tiene el hogar y estos ingresos provienen de el análisis que aquí se presenta son: i) Ingreso
diferentes fuentes de acuerdo con los acti- laboral monetario (salarios, honorarios y ga-
vos que cada perceptor posea, las principales nancias de los trabajadores independientes),
fuentes son salarios, honorarios e ingresos ii) Ingreso imputado por uso de vivienda, iii) El

Este tipo de estimaciones fueron propuestas, inicialmente, por Miles D. (1997) Weiserbs y Guio (1999) y Muñoz (2004) las hizo para
20/

Colombia usando la Encuesta de Ingresos y Gastos del DANE realizada entre 1994 y 1995, en este documento se retoma parte de lo
presentado en Muñoz (2004).
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

68

ingreso por auto consumo y auto suministro, La tercera parte de la tabla permite analizar
iv) Ingreso por salarios en especie, v) Ingreso la importancia de cada fuente en el ingreso
por pensiones, intereses, dividendos, arren- total: así, se observa que el ingreso laboral re-
damientos, etc. y, vi) Ingresos por ayudas ex- presenta más del 70% del ingreso de los ho-
ternas en dinero. gares. Le sigue en importancia la imputación
del arriendo y el ingreso por pensiones, inte-
En primer lugar, se analiza la distribución de reses y participaciones. Por otro lado, aunque
este ingreso entre los hogares bogotanos; lue- el ingreso laboral es el más importante en to-
go se verá la importancia de cada fuente en el dos los deciles, el peso relativo de este rubro
ingreso total de los hogares. La tabla 30 está en el primer decil es mucho más bajo que en
dividida en tres partes, en la primera se mues- el resto de hogares, ya que no llega al 57%.
tran los montos totales de ingreso, los montos En este decil, la imputación del arriendo y
de cada fuente -esto para el total de hogares las transferencias adquieren un peso relativo
y por deciles. En la segunda parte se muestra bastante grande; así, el primer rubro alcanza
el porcentaje del ingreso que le corresponde a una proporción de casi 22% del ingreso total,
cada uno de los deciles; es decir, la distribu- y las transferencias del hogar representan casi
ción de ingresos entre hogares. En la tercera el 15%. En los deciles altos, si bien la partici-
parte se presenta la importancia de cada fuen- pación del ingreso laboral está entre el 68% y
te en el ingreso total. el 72%, también hay una importante partici-
pación del ingreso proveniente de pensiones,
Centrándose en la segunda parte, se observa intereses, arrendamientos, etcétera. En el úl-
que el primer decil de hogares recibe el 1.2% timo decil, esta fuente alcanza un poco me-
del ingreso total, mientras que el último de- nos de 16%. De donde es posible concluir que,
cil recibe casi el 40%. Por fuentes, se observa para los hogares de ingreso bajos, la vivienda
que la desigualdad es mayor en los ingresos es una de sus principales fuentes de bienestar;
provenientes de pensiones, arrendamientos, porque aunque pueda estar sobrevalorado el
etc. ya que el primer decil recibe sólo el 0.5%, valor que ellos consideran que vale el arren-
mientras que el último recibe más del 45%. damiento de sus viviendas, esta cifra refleja
Le sigue, en grado de desigualdad, el ingreso la importancia que estos hogares dan a tener
laboral monetario y el salario en especie. Por una vivienda propia. Por otro lado, el hecho de
el contrario, la fuente de ingresos con menor que las transferencias de otros hogares pesen
desigualdad es la de transferencias de otros tanto en los hogares de ingresos bajos -es-
hogares, incluso el primer decil de hogares pecialmente en los del primer decil- permite
es el que recibe más transferencias; es decir, concluir que la ayuda a estos hogares es muy
esta fuente de ingreso contribuye a la mejora importante para su subsistencia.
en la distribución del ingreso.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

69

Tabla 30
Distribución del ingreso corriente

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

70

Las variables determinantes del ingreso ellos requiera que algún adulto no trabaje, o
trabaje menos.
Estudiosos de los determinantes de los ingre-
sos del hogar han mostrado que algunas ca- Para la composición y tamaño del hogar se to-
racterísticas sociales, demográficas y econó- maron el número de personas por los siguien-
micas de las personas que componen el hogar tes grupos de edad: i) De cero a seis años, ii)
explican en buena parte dicho ingreso, en es- de siete a once años, iii) de doce a diez y siete
pecial las del jefe, ya sea porque él es el que años, iv) de diez y ocho a veinticuatro años,
más aporta recursos para el hogar, o porque v) de veinticinco a treinta y nueve años, vi)
esas características están relacionadas con las de cuarenta a sesenta y cuatro años y, vii) de
de otros miembros perceptores de ingresos. sesenta y cinco y más.
Variables como sexo, edad y nivel educativo
son de gran importancia en la determinación Fuera de las características demográficas del
del ingreso del hogar, especialmente del la- hogar, otras variables que inciden en el in-
boral, el hecho de que el cónyuge del jefe sea greso de los hogares son si el cónyuge es o
perceptor, o de que fuera del jefe y el cónyuge no, perceptor de ingresos y, si fuera del jefe y
haya otros perceptores, aumentan sustancial- el cónyuge hay otros perceptores de ingresos
mente los ingresos del hogar21. dentro del hogar. Por último, están la catego-
ría ocupacional del jefe y su nivel educativo;
En este orden de ideas las variables determi- la posición ocupacional y el nivel educativo
nantes del ingreso del hogar que se introdu- clasifican a la persona en el mercado laboral.
cen en este estudio son: la edad y la edad al Por ello se tomó una combinación entre po-
cuadrado del jefe que siempre son variables sición ocupacional y nivel educativo, creando
que se utilizan como proxys de experiencia dummies y dejando como referencia los jefes
en los modelos de Mincer, pero que en este desocupados e inactivos con secundaria o me-
caso además se utilizan como una proxy de la nos22. Entonces las dummies creadas fueron i)
edad del hogar. Esta última variable, Miles la desempleados o inactivos con educación su-
considera como un determinante importante perior, ii) empleados domésticos, iii) emplea-
del ingreso del hogar. El sexo del jefe, que por dos con primaria o menos, iv) empleados con
razones culturales, incide en el ingreso ya que algún grado de secundaria, v) empleados con
en general hay una discriminación en contra algún grado de educación superior, vi) obreros
de la mujer. El tamaño del hogar y la compo- con primaria o menos, vii) obreros con algún
sición por edades de las personas del hogar grado de secundaria, viii) obreros con algún
tienen una importante incidencia en el ingre- grado de superior, ix) patrones con primaria
so del hogar; hogares con más adultos tienen o menos, x) patrones con algo de secundaria,
posibilidades de mayores ingresos, por su po- xi) patrones con algo de superior, xii) pensio-
sibilidad de ser perceptores -ya sea como tra- nados con primaria o menos, xii) pensionados
bajadores o por tener alguna renta. Por el con- con algún grado de secundaria, xiv) pensio-
trario, un hogar con más niños, puede tener nados con algún grado de superior, xv) pro-
menores ingresos, ya que no son perceptores; fesionales independientes, xvi) trabajadores
pero, además, puede pasar que el cuidado de independientes con primaria o menos, xvii)

21/
Ver los artículos citados de Miles, Weiserbs et al. y Muñoz.
22/
Inicialmente se dejó como referencia a los hogares jefes desempleados con primaria o menos, pero dado que los hogares con jefes
desempleados con algo de secundaria no dio significativamente diferente de cero, entonces se consideró introducir estos hogares en
los de referencia.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

71

trabajadores independientes con algún grado respuesta, prejuicios, y no participación en el


de secundaria, xviii) trabajadores indepen- mercado laboral de ninguno de los miembros
dientes con algún grado de superior y, xix) del hogar, entre otras.
trabajadores familiares sin remuneración.
Ahora bien, esta censura en la información
Método de estimación destruye el supuesto de linealidad por lo que
emplear el método de estimación de mínimos
Antes de aplicar un modelo estadístico que cuadrados ordinarios se hace claramente in-
permita analizar los determinantes del ingre- apropiado: su uso produce estimadores ses-
so de los hogares, es necesario señalar que gados e inconsistentes. En general, con esta
el ingreso reportado por algunos hogares es estructura de datos, la variable respuesta se
cero. Este hecho es fundamental en la elec- puede modelar usando el estándar de Tobit,
ción de un modelo, pues la distribución de propuesto originalmente por Tobin en 1958, y
la variable dependiente no es absolutamente que se define como sigue:
continua como lo requiere un modelo de re-
gresión lineal, sino que es una mezcla; vale
decir, consta de una parte discreta y una parte
continua.

En general, en la literatura econométrica, a


conjuntos de datos con esta estructura se les
conoce como censurados; ya que la informa- Donde
ción correspondiente a la variables exógenas
se tiene. No obstante, la censura puede obe- La estimación se realiza empleando el método
decer a diferentes razones: de máxima verosimilitud y la violación de los
supuestos de normalidad y homocedasticidad
El establecimiento de umbrales de codifica- produce un estimador inconsistente para .
ción. Variables dependientes cuyos resultados Para que el supuesto de normalidad sea más
de medición corresponden a un problema de plausible se acostumbra tomar la transforma-
maximización (minimización) de los agentes ción logarítmica de la variable endógena. Por
económicos; resultados que se conocen como su parte, la heterocedasticidad se deriva del
de solución de esquina. hecho que la densidad de y dado x depende
fundamentalmente de que . En otras palabras
Defectos en la información como resultado de y x ya no son independientes y por tanto, ,
su recolección. Un ejemplo claro de este he- donde es un subvector de , que no incluye
cho ocurre en estudios biológicos cuando los un término constante.
instrumentos empleados en la medición pre-
sentan límites en los extremos de la escala. Una prueba útil para heterocedasticidad se
obtiene tomando ; así, cuando se obtiene
Características de los datos, como es el caso el modelo estándar. En el caso de heteroce-
de los estudios de supervivencia. En el caso dasticidad el modelo es estimado usando la
de la Encuesta Multipropósito, los ingresos siguiente función:
cero pueden obedecer a múltiples razones: no
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

72

tores diferentes al jefe. Así, si en el hogar el


cónyuge es perceptor, significa que el ingreso
es superior, en un 38%, al hogar donde el cón-
yuge no trabaja o no hay cónyuge. Ahora bien,
Donde .Para probar se debe usar, preferible- si el hogar tiene otros perceptores de ingre-
mente, la estadística de razón de verosimili- sos, diferentes al jefe y su cónyuge, el ingreso
tud23. adicional del hogar es de 34%.

Por último, se habla de los resultados de la


Resultados relación ingreso del hogar con la categoría
ocupacional y el nivel educativo del jefe. Re-
En la tabla 31 pueden observarse los resul- cordando que se ha tomado como hogar de
tados de la estimación de los ingresos de los referencia los jefes desocupados o inactivos
hogares; en cuanto a las características demo- con primaria o menos, se observa que un ho-
gráficas, se observa que un año más de edad gar con jefe patrón y educación superior reci-
del jefe aumenta el ingreso en 2.3%, pero ese be más del doble de lo que recibe el hogar de
crecimiento va disminuyendo lentamente con referencia, le siguen en ingresos los hogares
la edad. Los hogares con jefatura masculina con jefes empleados con educación superior
reciben 7.7% más que los hogares con jefe (188%), profesionales independientes (164%),
mujer; y, siguiendo con lo demográfico, se ob- por último se debe destacar que todos los ho-
serva que, como se planteó, el que haya me- gares (diferentes a los de referencia) reciben
nores de 18 años significa menores ingresos mayores ingresos que ese hogar, incluyendo
para el hogar. Por ejemplo, un niño adicional los hogares con jefe trabajador independiente
de entre 12 y 17 años significa para el hogar y primaria o menos (reciben 50% más ingre-
un 3% menos de ingresos, mientras que entre sos que el de referencia), o los hogares cuyo
más adultos tenga el hogar mayores son sus jefe es empleado doméstico (con 58% más),
ingresos: una persona adicional de entre 25 o incluso los hogares con jefes desempleados
y 39 años significa para el hogar un ingreso con educación superior (con 27% más).
adicional de más de 20%. Otros aspectos de
interés que salen de este análisis tienen que Tabla 31. Determinantes del ingreso del hogar
ver con el hecho de la existencia de percep- (Resultados)

Amemiya, T. (1985), Advanced Econometrics, Cambridge: Harvard University Press.


23/

Wooldridge, J. M. (2002), Econometric Analysis of Cross Section of Panel Data, Cambridge, MA: MIT Press. SAS/ETS®9.2 User’s
Guide, PROC QLIM.
Aspectos conceptuales y metodológicos del índice de la capacidad de pago: medición y comparación

73

Tabla 31
Determinantes del ingreso del hogar (Resultados)

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


2
Medición y Análisis
del índice de calidad de vida urbana
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

77

E n este capítulo, para empezar se expo-


nen los referentes conceptuales em-
pleados en el desarrollo de los análisis sobre
la calidad de vida en Bogotá a partir de los
el caso de Bogotá. Posteriormente se tratan
las cuestiones metodológicas que supone la
evaluación de las múltiples dimensiones de
la calidad de vida y se exponen los criterios
datos arrojados por la Encuesta Multipropó- prácticos y operativos aquí propuestos para
sito de Bogotá 2011. Se examina el conteni- construir un índice que permita medir la ca-
do general del concepto de calidad de vida y lidad de vida urbana. Finalmente, se presen-
se precisan las particularidades que adopta tan algunos resultados obtenidos del ejercicio
al referirlo a los contextos urbanos, como es realizado para su aplicación

2.1
Orígenes del concepto y del índice de calidad de la vida urbana

2.1.1 El enfoque de capacidades, propuesto por


Calidad de vida: ‘capacidades’ y ‘funcio- Amartya Sen, surge con el fin de responder a
namientos’ la pregunta sobre ¿cuál es el espacio adecua-
do para evaluar las ventajas de la gente y la
La noción de calidad de vida busca expresar forma como están distribuidas esas ventajas?
los fines que es deseable obtener para los (Gasper, 2007: 292). En esa perspectiva, Sen
individuos y la sociedad, respondiendo a las conceptualizó la calidad de vida en función de
preguntas acerca de ¿qué es la buena vida? aquellas capacidades que representan logros
y ¿qué hace que una vida sea valiosa? Ha valiosos para las personas. Las capacidades
sido definida de diferentes maneras dentro constituyen las oportunidades reales que les
de concepciones diversas sobre la justicia y permiten ser más libres y conducir sus vidas
sobre la forma de evaluar los avances de las en ese ámbito de libertad (Sen, 1987c: 36.
sociedades y la distribución de las ventajas a 1992 a: 40. Nussbaum y Sen, 1993). Expre-
su interior. Se ha entendido como la consecu- san las potencialidades para alcanzar lo que,
ción de la felicidad, como el acceso a recur- en términos aristotélicos, se considera una
sos y bienes, o como el respeto procedimen- buena vida, resaltando el papel de la libertad
tal de los derechos (Scalon, 1996: 245-246. para obtener logros, por las propias decisiones
Nussbaum y Sen, 1996: 15 y ss. Nussbaum, y la acción de otros, y conservando un espacio
1997: 279-280)24. para la convivencia de distintas concepciones
morales25.

24/
La exposición que se hace en las páginas siguientes consulta lo desarrollado en los trabajos de Fresneda O. y Martínez Collantes J,
“Evaluación de la calidad de vida: Aspectos conceptuales y metodológicos”, ed., 2012, pp. 25-54 y el no publicado, de González J. I.
y Fresneda O. en 2004. El significado de la “buena vida”, Calidad de vida en la Localidad de Engativá, CID, Universidad Nacional de
Colombia.
25/
Sen 1985 b, p. i, 1987c: 36, 1992: 40, 1996, 2009: 261 y ss.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

78

Las capacidades toman forma concreta y pue- El enfoque de la calidad de vida en términos
den especificarse en términos de funciona- de las capacidades también se diferencia de
mientos; es decir, aquello que se encuentra las posiciones que evalúan la calidad de vida
entre lo que las personas consideran valioso en términos del acceso a recursos o bienes27.
para ser o hacer. En este espacio de los ‘fun- Esa perspectiva, que A. Sen califica como de
cionamientos’, las ‘capacidades’ de una per- la opulencia, falla por dos razones; porque no
sona se definen a través de los vectores de tiene en cuenta las diferencias individuales,
ellas, que pueden ser escogidos o alcanzados que dan a cada cual unas posibilidades espe-
en función de su plan de vida (Sen, 1984 a: 81. cíficas para transformar los recursos de que
1992 a: 63. 1996: 55 y 70-72)26. dispone en capacidades; y porque no evalúa
los medios en sí mismos, sino lo que las perso-
Bajo esta perspectiva, el foco básico del exa- nas pueden lograr con los medios de que dis-
men de los avances sociales se ubica en la ex- ponen. Sobre estas bases, en el enfoque de las
pansión de las libertades reales; y la calidad de capacidades se cambia el énfasis; colocando la
vida se evalúa examinando la capacidad para prelación, que se había dado a los medios, en
lograr funcionamientos valiosos (Sen, 1996: las oportunidades reales de vivir (Sen, 1988,
56). Entender la calidad de vida en términos de 1992a, 2009: 263-264).
capacidades supera la visión del utilitarismo,
que ha sido una de las corrientes predominan- Se distingue, igualmente, de las posiciones
tes en el pensamiento sobre la justicia social que colocan el cumplimiento de los derechos
en los últimos siglos. En primer lugar, porque en términos de restricciones que deben ser
considera el bienestar en una multiplicidad de respetadas como elemento clave para en-
aspectos diferentes a las utilidades, que son tender la calidad de vida28. La limitación que
los únicos objetos que se consideran valiosos tienen se encuentra en que se quedan en el
dentro del hedonismo utilitarista (Sen, 2009: campo de la libertad negativa. Si lo importan-
263). Además, porque rechaza lo que es váli- te es lograr una buena vida, es preciso evaluar
do dentro de las concepciones propias de esa las consecuencias y analizar la pertinencia de
corriente de pensamiento en relación con el los derechos a la luz de sus posibles resulta-
uso de medios que lleven a la violación de los dos. El campo de evaluación se amplía y no se
derechos y libertades de algunos en razón de reduce solamente a aquellas dimensiones de
una mayor felicidad para otros (Rawls, 1971: la calidad de vida que están relacionadas con
37). restricciones procedimentales que garantizan
el ejercicio libre de ciertas actividades (Sen,
1984a, 1995).

26/
El término “functionings”, utilizado por Sen, es traducido en algunas de sus obras como “realizaciones”. Véanse, por ejemplo, los
libros del autor que ha publicado en español la editorial Paidós (Sen, 1985, 1990, 1993c).
27/
“En la evaluación de la justicia basada en capacidades, las reivindicaciones individuales no se valoran en términos de los recursos
o bienes primarios que poseen las distintas personas, sino en términos de las libertades de que realmente gozan para elegir entre los
diferentes modos de vivir que pueden tener razones para valorar. Es esta libertad real la que representa la ‘capacidad’ de una persona
para conseguir las varias combinaciones alternativas de realizaciones, esto es de haceres y estares.” (Sen, 1997, p. 115)
28/
Es la posición de la teoría de la justicia de Nozick para quien “…los derechos no especifican directamente lo que una persona
puede o no puede tener, sino que especifican las reglas que tienen que ser seguidas para sus posesiones y propiedades actuales sean
legítimas. Sen considera que la teoría de las titulaciones de Nozick representa un deontologismo estrecho porque ignora el valor de
las consecuencias al evaluar las acciones e instituciones. Considera además que la insistencia en una perspectiva de los derechos
independiente de las consecuencias es difícilmente sostenible.” (Hernández, 2006: 97-98) Cfr. Sen 1984b: 311-313.
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

79

El enfoque de capacidades de Sen acoge un relacionadas con la propia vida individual. El


consecuencialismo pluralista y sensible a los segundo, el propio del bien-estar, abarca las
derechos. Las consecuencias no se reducen realizaciones personales y los logros sociales
al marco estrecho de las utilidades del bien- colectivos dando cabida, dentro de él, a las
estarismo, sino que incorporan el amplio es- consideraciones de solidaridad (Sen, 1987 a,
pectro de información de las capacidades y los 1996: 62. Cortes y otros, 1999). El tercer nivel
funcionamientos o realizaciones (Hernández, es el de la evaluación de las personas como
2006: 87-88, 94 y ss.).Sen adopta una con- agentes y abarca el conjunto de sus objetivos,
cepción “integrada” de los derechos “…que tomando en cuenta todas las motivaciones
toma en cuenta la importancia y el valor de y las concepciones morales propias de cada
realizar los derechos, pero lo hace junto a quien. (Sen, 1987 a, 1987b, 1996)
otras consideraciones, entre las que se inclu-
ye la necesidad de evitar la miseria social y la Al colocar la calidad de vida en el ámbito del
opresión económica” (Hernández, 2006: 97). bien-estar, se introducen en su evaluación las
Los derechos son considerados tanto en su motivaciones de solidaridad y de equidad que
contenido deontológico como en relación con son características de este nivel. Además, la
las consecuencias a que están referidas sus calidad de vida asume en esta ubicación una
metas. Valen no solo en sus aspectos forma- especificidad adicional tomando en cuenta y
les, sino en relación con lo que se proponen destacando aquellas capacidades y funciona-
obtener y, de esta forma, son incorporados en mientos que están influenciados por las prin-
la evaluación en el espacio de las capacidades cipales políticas públicas; sea a través de las
y los funcionamientos29. La evaluación de las acciones gubernamentales o de otras formas
consecuencias toma en cuenta, como uno de de acción colectiva. Se resalta así que ade-
sus componentes, el cumplimiento y la reali- más del bien-estar individual, también son
zación de los derechos, así como su violación objetos valiosos que afectan las capacidades
(Hernández, 2006: 102). y funcionamientos los relativos a la buena po-
lítica pública encaminados a mejorar los esta-
En el espacio de evaluación de los logros y las dos generales de la sociedad y dar prioridad a
ventajas individuales, y sociales, con base en la solidaridad con los menos aventajados. En
las capacidades y los funcionamientos, lo que este contexto se otorga especial relieve, den-
abarca la calidad de vida tiene una delimita- tro de los componentes de la calidad de vida,
ción particular. Se ubica, en la perspectiva de a los funcionamientos y capacidades influen-
este trabajo, en el nivel del bien-estar (well- ciados por las acciones del Estado y a aquellos
being); uno de los tres campos o niveles, que de carácter colectivo, que afectan a distintos
de acuerdo con Sen pueden ser abordados en conjuntos de la población y tienen que ver con
la evaluación de los logros individuales y so- aspectos como los servicios y los bienes públi-
ciales. El primero de ellos es el del estándar cos (por ejemplo, sustentabilidad ambiental,
de vida, que comprende aquellas capacidades espacio público)30.

Los sistemas de evaluación social que toman en cuenta los derechos con este contenido son llamados por Sen sistemas de derechos
29/

como objetivos (“goal rights systems”; Sen, 1982, 2001). “If all goal rights take the form of rights to certains capabilities, then the
goal rights system may be conveniently called a capability right system.” (1984c: 16) Cfr. Nussbaum, 1997, 297 y ss., Hernández,
2006:101 y ss.
30/
Sen aclara que la evaluación que se hace desde el punto de vista de la capacidad no deja de tomar en cuenta funcionamientos
(“functionings”) que son obtenidos por la acción de otros (Sen, 1996: 72-73)
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

80

2.1.2 Sen acepta esta limitación en la formulación


Diversidad constitutiva del concepto de de su enfoque y señala que diferentes teorías
Calidad de vida axiológicas son compatibles con el reconoci-
miento de las capacidades y funcionamientos
Frente al monismo del utilitarismo, bajo la vi- como espacio de valoración (Sen, 1996: 77).
sión de Sen, la calidad de vida adquiere una Justifica, además, su indeterminación como
diversidad constitutiva e incorpora un conjun- algo inevitable ya que la vida pública y ética
to heterogéneo de capacidades. Para evaluar- contiene conflictos de valores que son imposi-
la, ante la inmensa diversidad de capacidades, bles de resolver racionalmente32.
muchas de ellas irrelevantes, se hace necesa-
ria la selección razonada de aquellas que sean Dentro del mismo enfoque de las capacidades,
especialmente valiosas para los objetivos que Martha Nussbaum ha criticado el relativismo
se proponen las personas (González y Fresne- de Sen señalando que sus planteamientos no
da, 2004, cfr. Williams, 1987: 98, Sen, 1987 proveen un marco para construir una concep-
a y 1987b: 108; Sen, 1992: 58; Foster y Sen, ción normativa de la justicia social especifi-
2001). cando un conjunto de capacidades que sean
prioritarias (Nussbaum, 2003: 33 y ss.). Ha
La visión de Sen supera las limitaciones de sostenido, con tal fundamento, una noción
las concepciones del utilitarismo, la opulen- sustantiva de la calidad de vida que, en con-
cia y los derechos negativos para evaluar los traposición con la Sen33, contiene elementos
avances de las sociedades y la situación de los esenciales de la buena vida, identificando ca-
individuos. Su teoría de la justicia define un pacidades de prioridad universal, a través de
“espacio” de los objetos a ser evaluados: el una lista que intenta recoger un amplio con-
delimitado por los funcionamientos y las ca- senso con base en una concepción de la dig-
pacidades (Sen, 1996: 77-78). No obstante, es nidad del ser humano y de la forma de vida
incompleta, al carecer de una pauta moral que correspondiente con esa dignidad (Nussbaum,
permita determinar las capacidades y funcio- 1997: 277, 2003: 40 y ss., Gaspers, 2007: 296
namientos relevantes. Su formulación queda y ss.).
abierta a que las capacidades valiosas sean
seleccionadas bien en el ámbito de la libertad La identificación y clasificación de dimensio-
individual, a través de las elecciones persona- nes que forman parte de conceptos como bien-
les, o bien a que se tome una norma colectiva estar, desarrollo humano o calidad de vida y
para definir las que se consideran importantes que comparten la preocupación por concretar
o básicas31. los espacios de evaluación de las capacidades
y funcionamientos valiosos, ha ocupado la

Diversos autores han puesto en evidencia esta limitación. Véase al respecto: Nussbaum, 1987: 40, 1997: 285 y ss. y 2003: 33 y ss.,
31/

Williams, 1987: 96 y ss., Hernández, 2006: 171 y ss., Boltvinik, 2007: 16 y ss., Gasper, 2007: 294.
32/
Como anota Andrés Hernández, “Desde la perspectiva de capacidades defendida por Sen las valoraciones morales siempre serán
incompletas, siempre habrá que convivir con cierta inconmensurabilidad e incompatibilidad de valores (…) Es imposible alcanzar una
teoría que a la hora de evaluar el bienestar, la desigualdad, la calidad de vida, la justicia de las instituciones, puede establecer un
orden completo y ser informativamente poderosa.” (2006: 172-173)
33/
“Me parece, entonces,-señala Nussbaum- que Sen debe ser más radical de lo que ha sido hasta ahora en su crítica a las explicacio-
nes utilitaristas del bienestar, mediante la introducción de una explicación objetiva y normativa del funcionamiento humano y me-
diante la descripción de un procedimiento de evaluación objetivo por el cual se puedan valorarlos funcionamientos por su contribución
a la buena vida humana.”(1987: 40, se toma la traducción de Sen 1996: 75-76)
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

81

atención de destacados autores. La diversidad Las necesidades señalan fines sociales, que
de sus respuestas a este problema se concre- tienen un valor por sí mismos, en el espacio
ta en “listas” de elementos o dimensiones de de los funcionamientos y realizaciones. Las
estos conceptos que muestran notables dife- capacidades expresan las potencialidades
rencias en las concepciones filosóficas y en los para alcanzarlos35. Los derechos otorgan la
objetivos de sus propuestas. No existe una so- fuerza de la obligatoriedad, apoyada en la ley,
lución única a las diversas orientaciones con- a las capacidades y las realizaciones relacio-
ceptuales y éticas, ni una sola respuesta que nadas con algunas necesidades, e identifica,
satisfaga todos los objetivos de un ejercicio de en su especificación concreta, bienes, servi-
esta naturaleza34. cios y acciones sociales para obtenerlas (Fres-
neda, 2007: 41, cfr. Williams, 1987: 99-100,
2.1.3 Sen, 1987: 109).
Capacidades, necesidades y derechos hu-
manos La prescripción que recae sobre la satisfacción
de las necesidades lleva a que tiendan a reco-
La perspectiva de la evaluación de la calidad nocerse y sancionarse como derechos huma-
de vida que se adelanta aquí para Bogotá se nos las condiciones para que esta satisfacción
sitúa en la concepción de capacidades para se haga efectiva36. No se trata, sin embargo,
definir esta noción y se proponen dos formas de un proceso automático, ni libre de compli-
complementarias de aproximación, para espe- caciones. Cada necesidad no tiene correspon-
cificar aquellos contenidos a tomar en cuenta. dencia con un derecho humano, ni cada de-
En la primera se identifican capacidades prio- recho tiene indispensablemente su correlato
ritarias, a partir de precisar aquellas reque- en una necesidad (Fresneda, 1995). Por ello es
ridas para la satisfacción de las necesidades. enriquecedor el examen de sus interrelacio-
En la segunda se consulta el marco de los de- nes para señalar capacidades valiosas.
rechos humanos para reconocer los campos
destacados de las capacidades a ser valorados Los derechos humanos sociales sancionan ju-
y expresados en una norma socialmente acep- rídicamente lo que el Estado y la sociedad de-
tada y jurídicamente sancionada. ben garantizar individual y colectivamente, y

Véase al respecto el trabajo de Alkire, 2002 donde se analizan las “listas” elaboradas por distintos autores entre ellos Nussbaum,
34/

Max-Neef et al., Doyal y Gough.


Para Julio Boltvinik, siguiendo a György MarKus, existe una unidad dialéctica entre capacidades y necesidades. El florecimiento hu-
35/

mano en el enfoque de Boltvinik es el “(…) desarrollo de capacidades y necesidades humanas entendidas como una unidad interactiva
del lado pasivo y el activo del ser humano” (2005: 10). Las necesidades se refieren a la parte pasiva, mientras que las capacidades se
ubican en el lado activo (Damián, 2007: 126).
Anota Sabina Alkire refiriéndose a las capacidades y necesidades básicas: “Una capacidad básica es una capacidad para disfrutar una
realización (functioning) que es definida en un nivel general y que se refiere a una necesidad básica, en otras palabras, una capacidad
para satisfacer una necesidad básica (una capacidad para evitar la desnutrición, una capacidad para educarse, y así sucesivamente)”
(Alkire, 2003: 8, citado y traducido por Boltvinik, 2003:407).
36/
La relación entre necesidades y derechos humanos dentro de la perspectiva de la historia es analizada por Bobbio. Para este autor
los “derechos del hombre”, son el producto de la civilización, y no están adscritos a un hombre abstracto, a un hombre eterno y subs-
traído del flujo de la historia. Esta universalización de los derechos humanos y su extensión a los derechos sociales expresa que al
nivel de los valores se ha ido creando un consenso en la determinación y reconocimiento de ciertas necesidades. Pero, de otra parte,
señala que tal consenso no significa que se haya logrado establecer los derechos naturales y permanentes, sino el camino para que
la humanidad en su conjunto reconozca valores históricamente generalizables (Bobbio, 1992: 132-133). Doyal y Gough encuentran
igualmente un vínculo entre la satisfacción de las necesidades y el papel de los derechos sociales bajo la intervención del Estado:
“Nuestra teoría de la necesidad humana nos lanza hacia una extensión radical, más una codificación, del derecho a unas prestaciones
de bienestar basadas en la idea de ciudadanía que hoy está presente en los estados de bienestar occidentales.” (1994:366)
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

82

lo que puede ser reclamado por los individuos 2.1.4


y las colectividades. En su formulación con- La calidad de vida urbana
creta con frecuencia señalan metas sociales
en la vía de la satisfacción de algunas nece- Tanto el marco de los derechos humanos
sidades o, en otras ocasiones, los medios para como el de las necesidades son de carácter
obtener realizaciones, en el espacio de bienes universal. Con estos referentes se llega a es-
y servicios. pecificar contenidos de la calidad de vida que
son aplicables a todas las épocas históricas,
Como señala Nussbaum, aunque hay una es- y a todos los contextos sociales y culturales.
trecha relación entre capacidades y derechos, Se evidencia así que hay un trasfondo común
el lenguaje de las capacidades ayuda a concre- para juzgar los logros y las ventajas en la vida
tar el, a veces ambiguo e impreciso, de los de- de las personas.
rechos, y a centrar su examen en las motiva-
ciones que los sustentan y en las finalidades a Sobre esta base, el término calidad de vida
que apuntan (2003: 37). El recurso al lengua- urbana, que se incorpora en este análisis, tie-
je de los derechos tiene para esta autora, sin ne un alcance particular. No se presenta como
embargo, la ventaja de resaltar la legitimidad un concepto alterno al genérico de calidad de
de demandas sociales de la población. (Cfr. vida. Ni se diferencia de él por sus contenidos.
1997: 292 y ss.). Para ella, además, los dere- Se utiliza en una perspectiva operativa, bus-
chos humanos han de ser entendidos en su cando destacar tres aspectos referentes a la
correspondencia con las necesidades funda- evaluación práctica de la calidad de vida de las
mentales, como los requisitos de una dignidad metrópolis contemporáneas.
básica, estipulada en la forma de un conjunto
de capacidades (Gasper, 2007: 296-298). El primero es destacar de la calidad de vida lo
que se relaciona con los marcos de las necesi-
Tomar como referente los contenidos de los dades y de los derechos humanos, los cuales
derechos humanos para concretar el conteni- cobran especial relieve en los contextos urba-
do de la calidad de vida en términos de capa- nos. Frente a formas de evaluación que bus-
cidades, tiene además una ventaja pragmática can dar cuenta de condiciones generales tanto
en tanto centra la atención en temáticas que de los contextos urbanos como los rurales, se
han tenido prelación y cuentan con un amplio intenta resaltar problemáticas propias de las
consenso en nuestro medio en torno al papel aglomeraciones urbanas que afectan la cali-
del Estado para el desarrollo de las políticas dad de vida. Por ejemplos lo relativo a la movi-
públicas. Estos derechos, contenidos en la lidad o lo relativo a la contaminación del aire y
Constitución Política colombiana y en trata- el ruido. Aunque son fenómenos relacionados
dos internacionales que comprometen al país, con la calidad de vida en todos los lugares, ad-
señalan también las áreas de política públi- quiere importancia tomarlos en cuenta en los
ca que están dirigidas a promover la “buena medios urbanos y, con menos frecuencia, en
vida”. En nuestra pretensión de examinar la las formas dispersas de poblamiento.
relación entre la evolución de calidad de vida
en Bogotá y los programas y proyectos de los El segundo es la incorporación, al análisis de
planes de desarrollo nacionales y distritales, la calidad de vida, de satisfactores de necesi-
la relación entre capacidades y funcionamien- dades y medios particulares para obtener lo-
tos, que conforman la calidad de vida, y dere- gros en los derechos humanos que son carac-
chos humanos nos permite conducir en mejor terísticos de las condiciones urbanas. Se trata
forma el análisis empírico. de tomar en cuenta, en los ejercicios de eva-
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

83

luación, características propias de las formas HABITAT (UN) para la Conferencia Mundial
de vida de los contextos urbanos. de 1996, (HABITAT, 1997). El Informe, junto
a los posteriores elaborados por esta agencia
El tercero es adecuar la evaluación de la cali- de las Naciones Unidas, da cuenta de lo propio
dad de vida a una forma particular de enten- de los fenómenos urbanos a nivel mundial, en
der y clasificar el cumplimiento de los dere- el entorno de la globalización, y señalan las
chos humanos en el contexto de las ciudades. ventajas de las nuevas formas que han asumi-
Dentro de expresiones como el “derecho a do las ciudades en la época contemporánea.
la ciudad” o “la ciudad de derechos”, que ha Identifican además los problemas y amenazas
ocupado un papel central en los Planes de De- asociados con la urbanización y las potenciali-
sarrollo de Bogotá, se encuentran manifesta- dades de las mismas ciudades para darles so-
ciones de estas tendencias. lución (HABITAT, 2001 y 2009).

La introducción de la noción de calidad de El análisis de las tendencias de urbanización y


vida urbana postula la conveniencia de ade- la distribución espacial de la población, a nivel
lantar evaluaciones de calidad de vida particu- mundial, se encuadra dentro de las transfor-
lares para los contextos de las ciudades, que maciones económicas, tecnológicas y en las
complementen otras evaluaciones de carácter condiciones sociales y políticas nacionales y
general dentro de las cuales sea posible obte- mundiales. Bajo estas influencias no solo ha
ner comparaciones entre regiones con diver- habido una proporción creciente de la pobla-
so grado de urbanización. Esta iniciativa tiene ción del planeta que vive en centros urbanos38,
justificación en las tendencias de urbanización sino que también las ciudades más populosas
de las últimas décadas, en las características han adquirido una nueva forma.
que han asumido las ciudades en ese trans-
curso y en el papel que han adquirido en el El documento de la Conferencia mundial de
mundo contemporáneo. Bajo este contexto HABITAT en 1996 identificó, además, algunos
se destaca una doble dinámica: mientras hay de los retos que esos cambios plantean en-
un distanciamiento, cada vez mayor entre las fatizando el relativo al logro de una vivienda
condiciones de vida de las ciudades frente a adecuada al alcance de todos y el desarrollo
los contextos rurales, que justifica hacer un sostenible de las ciudades. En otros documen-
seguimiento al fenómeno y poner en marcha tos de la agencia se amplía el campo de las
medidas de política que favorezcan a los habi- preocupaciones, tomando como marco de re-
tantes del campo, surgen y se agudizan pro- ferencia el proceso de globalización y los fenó-
blemáticas propias de los contextos urbanos menos que la acompañan. Al proceso de glo-
que merecen ser analizadas y tratadas en sus balización corresponde una realidad espacial
propias especificidades37. específica, que se expresa en patrones que
asumen las ciudades del mundo actual (HA-
Los rasgos y las tendencias generales de los BITAT, 2001).
fenómenos urbanos en el mundo actual se en-
cuentran caracterizados en el Informe Mundial En la misma línea de pensamiento, Manuel
sobre los asentamientos humanos Un mundo Castells y Jordi Borja señalan que la globali-
en proceso de urbanización, preparado por zación, basada en la revolución tecnológica de

Los párrafos siguientes se basan en lo planteado en el Documento Conceptual Encuesta Multipropósito para Bogotá, DANE, 2010,
37/

multicopiado.
38/
Según HABITAT (2009) a partir de 2008 más de la mitad de la población mundial vive en ciudades
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

84

la información y la comunicación, ha transfor- des cardiovasculares, cáncer y enfermedades


mado profundamente la estructura espacial y coronarias sean más altas en ellas. El creci-
social de las ciudades a nivel mundial. En esas miento de las ciudades guarda corresponden-
circunstancias, la ciudad, como forma espe- cia, además, con fenómenos como aumento
cífica de relación entre territorio y sociedad, de la violencia en las relaciones sociales y en
adquiere una nueva forma que transforma las la accidentalidad en el tránsito automotor, y
relaciones sociales, las formas de vida y la ma- también con el incremento del estrés y de las
nera como se integra culturalmente la socie- enfermedades mentales (HABITAT, 2001: 105
dad (Castells y Borja, 1997). y ss.).

La excesiva concentración poblacional en los Los fenómenos relacionados con la forma


centros urbanos conlleva el incremento de los como se ha dado la globalización han impuesto
problemas sociales y medioambientales. Los igualmente condicionamientos para el acceso
relativos a la vivienda y los servicios urbanos, a la vivienda por restricciones impuestas en
como los de conservación del medio ambiente el crédito. A través del incremento del trabajo
adquieren una forma más dramática con la ur- informal se dificulta aportar las garantías que
banización generalizada, y se hacen más agu- exigen las entidades financieras para obtener-
dos en las ciudades de tamaño mayor. Aunque lo. El sector financiero formal no cuenta con
no existe una determinación mecánica entre líneas de crédito para las poblaciones pobres,
los procesos de urbanización, acrecentados y los programas de apoyo gubernamentales
por la globalización, y las condiciones de vida no tienen una extensión que se corresponda
de la población, se presentan en este proceso, con la de las necesidades de nuevas viviendas
sin embargo, amenazas que se convierten en y la calidad de las existentes (HABITAT, 2001:
realidad en contextos particulares, como los 77 y ss.).
de los países latinoamericanos (Castells y Bor-
ja, 1997). El curso seguido por la globalización en las
ciudades ha llevado, además, a una progresiva
El crecimiento de las ciudades está asociado polarización social que tiene claras expresio-
con diversos fenómenos que afectan las con- nes en la configuración física de las grandes
diciones de vida de la población: aumento en ciudades contemporáneas y en las notables
los riesgos a la victimización criminal, falta de desigualdades en el acceso y consumo de ser-
condiciones adecuadas en la vivienda, insegu- vicios públicos urbanos. En algunas regiones
ridad alimentaria, etcétera. En el caso de la como la latinoamericana las desigualdades
salud, por ejemplo, los patrones de morbili- dentro de las ciudades se han incrementado
dad y mortalidad urbanos difieren de los de y la población en condiciones de pobreza se
las zonas rurales en razón a la “transición epi- concentra en ellas. La pobreza ha convertido
demiológica” que ha tenido mayor dinamismo en un fenómeno que cobra mayor importan-
en las grandes ciudades y que se expresa en cia en las ciudades debido a que los servicios
un cambio de predominio en la incidencia de básicos dejaron de ser provistos por el Estado,
las enfermedades transmisibles a las no trans- por lo cual la capacidad de pago de la pobla-
misibles. Los factores de riesgo de la salud por ción pasa a tener un papel crucial (HABITAT;
exposición a contaminación ambiental y rela- 2001).
cionados con el estilo de vida (tabaquismo,
alcoholismo, aumento de la ingesta de grasa, El origen de esta polarización se encuentra en
bajo consumo de fibra, sedentarismo) son ma- la segmentación del mercado laboral que ha
yores en las ciudades, lo que contribuye a que sido promovida por los procesos de flexibiliza-
las tasas de diabetes, obesidad, enfermeda- ción laboral que han acompañado a la globa-
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

85

lización, y sus efectos son más grandes en las en el acceso, que tienen que ser compensadas
ciudades. La flexibilización laboral ha creado por políticas públicas40.
un marco de relaciones laborales que acre-
cientan la desigualdad y la vulnerabilidad de En cuanto a las oportunidades económicas
amplios sectores de trabajadores (HABITAT, y el empleo, las necesidades funcionales de
2001: 13, Castells y Borja, 1997)39. desplazamiento al interior de las ciudades se
hacen más complejas de manera directa con
En el caso de las ciudades latinoamericanas, la el crecimiento urbano y poblacional, y las di-
configuración del espacio urbano a través de ficultades para una adecuada movilidad entre
las estructuras de conectividad, accesibilidad residencia y lugar de trabajo o estudio, tras-
y usos del suelo -relacionados con el compor- cienden más allá de los aspectos operativos,
tamiento de su renta, la ubicación en la es- a externalidades negativas que afectan de for-
tructura social y la carencia de instrumentos ma sustancial la calidad de vida: aumento de
adecuados de planeación urbana- han dado la contaminación y deterioro de la calidad del
como resultado procesos de segregación so- aire, accidentalidad y, especialmente, aumen-
cio espacial, que determinan nuevos factores tos en los tiempos de viaje que tienen impli-
que inciden de manera directa en la calidad caciones sobre la productividad y sobre el uso
de vida y la noción de bien-estar y que, en del tiempo libre, limitando la satisfacción de
casos extremos, conllevan a situaciones de ex- las necesidades propias de la vida familiar, el
clusión social. cuidado de los hijos y la recreación, por enu-
merar sólo algunos.
La marcada segmentación y fragmentación
en la ocupación del espacio entre grupos de La percepción sobre las condiciones propias de
altos y bajos ingresos, y clases sociales, mar- las ciudades en el contexto de la globalización
ca diferencias sustanciales en el acceso a los y los problemas que afrontan ha promovido
servicios y a las oportunidades económicas y múltiples proyectos a nivel internacional ten-
el empleo. En cuanto a los servicios, la mar- dientes a hacer un seguimiento de la evolu-
cada división y el aislamiento a nivel espacial ción de sus condiciones comunes recurriendo
contribuyen a reducir oportunidades en tér- a indicadores destacados de calidad de vida 41.
minos del acceso a los beneficios del desarro- Se expresa así el creciente interés por abordar
llo urbano, dificultar la movilidad social, de- el examen y tratamiento de condiciones que
bilitar la construcción y lazos de solidaridad, tienen en cuenta las circunstancias caracterís-
cooperación y contribuye a aumentar las con- ticas de la vida urbana.
diciones de vulnerabilidad social. Políticas de
corte neoliberal han influido en la localización Dentro de las iniciativas que concretan esta
de servicios sociales de educación, salud en tendencia se encuentran la propuesta de Indi-
términos de mercado generando dificultades cadores Urbanos que forman parte de la Agen-

39/
En el sitio web de la Globalization and World Cities Research Network del Geography Department at Loughborough University de
Leicestershire, UK (http://www.lboro.ac.uk/gawc/ ) pueden consultarse diversos documentos y publicaciones sobre globalización y
ciudad.
40/
En el caso Bogotano, los Planes Maestros de equipamientos constituyen una estrategia pública para reducir las brechas en términos
de acceso a los servicios urbanos.
En el documento City Indicators: Now to Nanjing, del Banco Mundial (Hoornweg Daniel et al., 2006), presentado al Tercer Foro
41/

Urbano Mundial realizado en Vancouver en 2006, se encuentra una relación de distintos proyectos relativos a indicadores urbanos y
una extensa bibliografía sobre el tema.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

86

da HABITAT (2004). Esta agencia de Naciones dos tópicos principales: servicios urbanos y
Unidas ha diseñado y aplicado igualmente un calidad de vida. Los referidos a calidad de vida
índice de desarrollo de las ciudades (The City consideran una amplia gama de temas dentro
Development Index; HABITAT “Global Urban de los cuales se encuentran participación cí-
Indicators Database”), calculado como prome- vica, cultura, economía, medio ambiente, vi-
dio ponderado de algunos de los indicadores vienda, equidad social, bienestar subjetivo y
urbanos de la Agenda. tecnología e información.

También se destaca el programa de “Indica- Otras iniciativas de sistemas de indicadores


dores Globales para Ciudades, enfoque Inte- que tratan la calidad de vida urbana se en-
grado de Medición y Monitoreo del Desempe- cuentran en el proyecto URBAN AUDIT (As-
ño de las Ciudades”, promovido por el Banco sessing the Qualility of Life of Europe´s Cities)
Mundial como un proyecto descentralizado y que se desarrolló entre 1998 y 2000 bajo la
dirigido por las mismas ciudades (World Bank, coordinación de EUROSTAT43, y los proyectos
2008 y s.f.)42 que pretende ayudar a las ciuda- Quality of Life de la FCM (Federation of Cana-
des en el monitoreo de su desempeño, propor- dian Municipalities)44 y European Common In-
cionando un marco para facilitar la recolección dicators (ECI), coordinado por Ambiente Italia
consistente y comparativa de los indicadores Research Institute45.
de ciudad. Los indicadores que utiliza tratan

2.2
Aspectos metodológicos y operativos de la medición del Índice de Calidad
de Vida Urbana

En la perspectiva de precisar la manera de se describe el procedimiento propuesto para


evaluar la calidad de vida, dando énfasis a combinar las distintas manifestaciones consi-
sus manifestaciones urbanas, se tratan cua- deradas en un índice o una medida agrega-
tro cuestiones básicas. Las dos primeras están da que sintetice los indicadores tomados en
referidas a la selección de las dimensiones o cuenta para expresar las dimensiones y carac-
tipos de capacidades que deben ser tenidas en terísticas escogidas y se presentan los resul-
cuenta (numerales 2.2.1. y 2.2.2.). La tercera tados de aplicar esos procedimientos.
trata sobre problemas metodológicos para la
medición de la calidad de vida que plantean la 2.2.1
exigencia de definir la opción a seguir dentro Las dimensiones de la calidad de vida
de las alternativas posibles para hacerlo (nu- urbana
meral 2.2.3). La cuarta hace referencia a algu-
nas características de los índices de calidad de Como se señaló, la diversidad constitutiva
vida (numeral 2.2.4). En el capítulo siguiente de la calidad de vida (urbana) implica que su

42/
En la página web http://www.cityindicators.org/Default.aspx se encuentra información sobre este programa.
43/
Información sobre esta iniciativa se encuentra en www.urbanaudit.org/ y en Leva, 2005: 32.
Puede consultarse en http://www.cityindicators.org/Deliverables/FCMqol2001_12-4-2007-10948.pdf y http://www.halifax.ca/qol/
44/

QOLRS.html
45/
Puede consultarse en http://www.cityindicators.org/Deliverables/eci_final_report_12-4-2007-1024955.pdf
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

87

medición incorpore un conjunto heterogéneo desarrollo humano o nivel y calidad de vida.


de capacidades que define el espacio concreto Más que identificar un consenso, que de par-
donde va a ser examinada. La enumeración de tida se sabe que no existe, se busca captar los
las capacidades requiere de una enorme lista ámbitos de evaluación destacados por esos
dentro de la cual muchas de ellas, o quizás la autores y confrontar distintas visiones, que
mayor parte, no poseen un valor significati- sirvan de referente para orientar la selección
vamente importante. Así, por ejemplo, si se en el contexto de los objetivos que se persi-
toman como referencia, las que se derivan de guen y las limitaciones de información que se
los bienes, es evidente el riesgo de volverlas tienen.
triviales, como en el caso de la capacidad de
elegir un nuevo detergente que aparece en Los autores o corrientes consultados son:
el mercado (cfr. Williams, 1987, p. 98; Sen, Maslow (1943 y 1987): teoría jerárquica de las
1992, p. 58). Gran número de capacidades necesidades; Doyal y Gough (1994): teoría de
pueden ser insignificantes y carentes de valor, las necesidades humanas; Martha Nussbaum
mientras que otras son importantes y tienen (2003 y 2012): listado de capacidades huma-
peso substancial (Sen, 1987b, p. 108). Sobre nas centrales; Max Neef et al.(1986): clasifi-
esta base, es necesario, como primer paso de cación de necesidades; el enfoque sueco del
la evaluación, precisar las dimensiones a con- bien-estar (Allard, 1996, Erikson, 1996): di-
siderar para, en etapa posterior, escoger las mensiones del bien-estar; Boltvinik (2005 a,
expresiones observables de las capacidades 2005b, 2007): necesidades, capacidades y flo-
y realizaciones seleccionadas (variables e in- recimiento humano.
dicadores) y la forma de combinarlas en una
medida general. Maslow

Para la evaluación de la calidad de vida de La teoría jerárquica (Maslow, 1943, 1991


Bogotá se consideró, como también se indi- [1987], Boltvinik, 2005b) se propone explicar
có anteriormente, que el marco de referencia las motivaciones como base de los comporta-
para elegir las capacidades, así como las reali- mientos humanos. Las necesidades se funda-
zaciones y funcionamientos correspondientes, mentan en motivaciones de carácter universal
se encuentra, de una parte, en seleccionar que se encuentran enraizadas en la esencia
aquellos requeridos para la satisfacción de las humana. En la base de las necesidades se en-
necesidades y, de otra, en determinar cuáles cuentran fines que tienen justificación en sí
de ellos son exigidos para alcanzar los objeti- mismos. Su satisfacción es la forma como se
vos a que apuntan los derechos humanos con- logra la realización de esa esencia.
signados en la Constitución Política y tratados
internacionales. Bajo tal orientación, se busca Las necesidades se diferencian por las moti-
además resaltar las áreas de intervención de vaciones que las generan y se organizan jerár-
las políticas públicas a que hacen referencia quicamente en su satisfacción siguiendo un
esos derechos en el ámbito del bien-estar. orden secuencial: fisiológicas, de seguridad,
de amor, de autoestima y de auto-realización.
Hacia la concreción de estos criterios se con- La aparición de una necesidad se basa en la
sultaron las propuestas de algunos destacados satisfacción previa de otra que se encuentra
autores en torno a la diferenciación y clasifica- en un nivel inferior dentro de la jerarquía. Los
ción de necesidades, de derechos humanos y seres humanos siguen una tendencia innata
de los elementos o componentes de nociones hacia niveles superiores en la satisfacción de
que dan cuenta de las múltiples dimensiones las necesidades.
de las capacidades como son las de bien-estar,
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

88

Las necesidades fisiológicas son las más po- En el último nivel se encuentran las necesida-
derosas y priman sobre las restantes en tanto des de autorrealización. Se refieren a la ten-
no estén satisfechas. Se refieren a la sobre- dencia o deseo de la persona de ser cada vez
vivencia física y comprenden entre otras la más lo que es capaz de llegar a ser, o, en otros
alimentación, la habitación, las condiciones términos, de hacer realidad lo que es en po-
para vivir libre de enfermedad corporal y el tencia.
descanso. Maslow señala que es imposible e
inútil hacer una lista de necesidades fisioló- Maslow plantea que existen ciertas condicio-
gicas fundamentales, que podría prolongarse nes sociales que son prerrequisitos inmedia-
considerablemente. tos para la satisfacción de necesidades: justi-
cia, equidad, libertades de expresión, de hacer
En el segundo nivel se encuentran las necesi- lo que uno quiera, de investigar, de defender-
dades de seguridad que emergen una vez se se. Y señala que las capacidades cognitivas
encuentren satisfechas las fisiológicas. Abar- (de percepción, intelectuales y de aprendizaje)
can cuestiones referidas a lo que se considera son también instrumentos para satisfacer las
dentro de términos como estabilidad, protec- necesidades.
ción, ausencia de miedo, ansiedad y caos, ne-
cesidad de orden y de protección. Se expresan El esquema de clasificación de Maslow se com-
en fenómenos como la preferencia a un em- pleta con otros dos tipos de necesidades que
pleo estable y con protección, y a las prácticas no se encuentran en la escala de jerarquía: las
de aseguramiento de distinto tipo (salud, des- cognitiva y la estética. La necesidad cognitiva
empleo, incapacidad, vejez). Según Maslow básica comprende funciones como entender,
las necesidades de seguridad pueden adqui- sistematizar, organizar, analizar, buscar rela-
rir un papel central cuando en el medio social ciones y significados, y construir un sistema
la ley, el orden o la autoridad se encuentran de valores. La estética como búsqueda de la
amenazados. belleza existe en todas las culturas y en las
etapas de evolución de los individuos sanos.
Las necesidades de sentido de pertenencia,
afecto y amor se encuentran en el siguiente Boltvinik resume el planteamiento de Maslow
nivel. Una vez satisfechas las necesidades fi- sobre las necesidades en la forma siguiente:
siológicas y de seguridad surgen las que tien-
den a obtener un puesto en los grupos de per- “El esquema completo de necesidades de
tenencia o en la familia. La insatisfacción de Maslow consistiría “… de la libertades
estas necesidades, que comprenden tanto dar sociales como prerrequisito para la sa-
amor, como recibirlo, expresa una grave pato- tisfacción de todas las necesidades, una
logía social. jerarquía formada por cinco niveles (fisio-
lógicas, de seguridad, afectivas, de esti-
Las necesidades de estima, en el nivel pos- ma y de autorrealización), las necesidades
terior, se manifiestan en el deseo de las per- cognitivas, que tendrían su propia jerar-
sonas de tener una apreciación de respeto o quía (saber y entender), y las necesidades
estima sobre ellos mismos y sobre los otros. estéticas” (2005b:83).
Las necesidades de autoestima conllevan sen-
timientos de confianza y valoración tanto so- Doyal y Gough
bre sí mismo como sobre los otros, y de ser
útiles y necesarios en el mundo. Doyal y Gough sostienen que las necesidades
humanas son objetivas, históricas (construi-
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

89

das socialmente), pero también universales. 9. Seguridad económica


Según su concepción hay ciertas necesidades 10. Enseñanza adecuada
básicas y permanentes para el desarrollo de 11. Seguridad en el control de nacimientos y
una existencia humana digna, aunque la for- en el embarazo y el parto.
ma como se satisfacen puede variar. “Las ne-
cesidades sociales básicas son derechos mo- “Las seis primeras necesidades intermedias,
rales que se transforman en derechos sociales señala Gough, contribuyen a la salud física,
y civiles a través de las políticas sociales, y mientras que las otras remiten a la autono-
cuyas formas concretas varían de cultura a mía. El único criterio para su inclusión en la
cultura así como los modos de satisfacción” lista es la determinación de si un conjunto de
(Rodríguez G.: 15). características de satisfactores contribuye de
forma positiva y universal a la salud física y a
Diferencian entre necesidades básicas, in- la autonomía.” (2008: 189).
dispensables para la sobrevivencia, y nece-
sidades intermedias. Dentro de las primeras El equipo de Max Neef
se catalogan la salud física, o supervivencia,
y la autonomía, que son condiciones previas Max-Neef propone dos taxonomías de las ne-
a toda acción individual en cualquier cultura. cesidades humanas; una según categorías
Los niveles de autonomía son afectados por axiológicas, que da lugar a las necesidades de
tres variables clave: i) el grado de compren- subsistencia, protección, afecto, entendimien-
sión que una persona tiene de sí misma, de to, participación, ocio, creación, identidad y
su cultura y de lo que se espera de ella como libertad; y otra según las categorías existen-
individuo dentro de la misma, ii) la capacidad ciales de ser, tener, hacer y estar (Max-Neef
psicológica (salud mental) que posee de for- et al., 1986). La clasificación “existencial”
mular opciones para sí misma y, iii) las opor- señala los ámbitos o dimensiones en las cua-
tunidades que le permitan tanto libertad de les se lleva a cabo la realización del hombre
acción como libertad política. como tal. Y la clasificación axiológica expre-
sa dimensiones que tienen una amplia acep-
Las necesidades intermedias expresan satis- tación. Esta clasificación puede considerarse
factores universales, es decir, las cualidades como tentativa y hasta cierto punto arbitraria
de los bienes, servicios, actividades y relacio- (Hopenhayn, 1990, p. 10). Max-Neef enumera
nes que favorecen la satisfacción de las ne- los satisfactores que contiene el cruce de ne-
cesidades básicas de salud física y autonomía cesidades según estas dos formas de agrupar-
en todas las culturas. Los títulos de la lista de las, apuntando hacia la especificación de un
satisfactores universales o necesidades inter- conjunto de capacidades, en la terminología
medias propuestos por Doyal y Gough son los de A. Sen, en lo que respecta al ser, al estar y
siguientes (1994: 77 y ss.; 200 y ss.): al hacer. Y, en cuanto a la categoría existen-
1. Alimentos nutritivos y agua limpia cial de tener, incluye también satisfactores en
2. Alojamientos adecuados a la protección términos de características que se requieren
de los elementos para la realización de las necesidades.
3. Ambiente laboral desprovisto de ries
gos Enfoque sueco sobre el bien-estar (Erik-
4. Medio físico desprovisto de riesgos son)
5. Atención sanitaria apropiada
6. Seguridad de la infancia En el modelo escandinavo de investigación
7. Relaciones primarias significativas (Allardt, 1996: 132-133) se utiliza una clasifi-
8. Seguridad física
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

90

cación de necesidades similar a la existencial 2. La salud y la vivienda. Ser capaz de tener


de Max Neef et al., aunque simplificada: tener, una buena salud, una alimentación adecua-
amar y ser. Las necesidades materiales e im- da, tener una vivienda adecuada.
personales se ubican en torno a la categoría 3. La integridad corporal. Ser capaz de mo-
de tener; las sociales en la de amar, y las ne- verse libremente, estar a salvo de cualquier
cesidades de desarrollo personal en la de ser. tipo de violencia, tener oportunidades de sa-
tisfacción sexual y de elección en materia de
En la corriente sueca se recurre a otro tipo reproducción.
de agrupamiento, que sigue más el criterio 4. La utilización de los sentidos, la imagina-
“institucional” de las escuelas estructural- ción y el pensamiento. Ser capaz de utilizar
funcionalistas (Erikson, 1996:103) y que con los sentidos, la imaginación, el pensamiento
variantes es utilizado igualmente en distintos y la razón de una manera informada y culti-
estudios sobre condiciones de vida e indicado- vada por una educación. Ser capaz de usar
res sociales: la imaginación y el pensamiento en relación
1. Salud y acceso al cuidado de la salud con la experiencia y la producción de obras
2. Empleo y condiciones de trabajo y eventos de elección propia. Ser capaz de
3. Recursos económicos utilizar lo que se piensa en un ámbito de li-
4. Educación y capacitaciones bertad de expresión. Ser capaz de tener ex-
5. Familia e integración social periencias placenteras y evitar el dolor que
6. Vivienda no sea necesario.
7. Seguridad de la vida y de la propiedad 5. La manifestación de las emociones. Ser
8. Recreación y cultura capaz de tener apego a las cosas y las perso-
9. Recursos políticos. nas, amar a aquellos que aman y cuidan de
nosotros, amar, sufrir, experimentar deseo,
Martha Nussbaum gratitud e ira justificada. No tener un desa-
rrollo emocional arruinado por el miedo y la
Nussbaum identifica una lista de capacidades ansiedad.
de prioridad universal que tenga una amplio 6. El uso de la razón práctica. Ser capaz de
reconocimiento (1997, 2003: 40-41, 2012: formar una concepción del bien y participar
39 y ss., Gasper, 2007: 296 y ss.). Intenta, de en la reflexión crítica acerca de la planifica-
esta forma, establecer las funciones más im- ción de la propia vida.
portantes del ser humano desde el punto de 7. El sentido de pertenencia. Ser capaz de
vista de la concepción de su dignidad. Según vivir con y hacia los demás, de reconocer y
Gasper “…el trabajo de Nussbaum puede ser mostrar preocupación por otros seres huma-
visto como justificación de una carta de de- nos; tener las bases sociales del autorrespe-
rechos, pero es menos riguroso y elaborado to y no humillación; ser tratado como un ser
que el trabajo paralelo de Doyal y Gough, el digno cuyo valor es igual a la de los demás.
cual corrobora pero también actualiza el en- Esto implica disposiciones de no discrimina-
foque detrás de su lista” (Gasper, 2007:.298). ción por motivos de raza, sexo, orientación
Nussbaum propone una lista de diez capacida- sexual orientación, etnia, casta, religión,
des prioritarias fundamentales (2003: 41-42, origen nacional.
2012: 53-55): 8. La relación con otras especies. Ser capaz
1. La vida. Ser capaz de vivir una vida hu- de vivir con la preocupación por y en rela-
mana de duración normal, sin morir prema- ción con animales, plantas, y el mundo de la
turamente. naturaleza.
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

91

9. La recreación. Ser capaz de reír, jugar y destacan desde los diferentes enfoques. Aun-
disfrutar de actividades recreativas. que las diferencias en los énfasis de los auto-
10. El control sobre el medio ambiente. res son notables hay coincidencias en buena
parte de los temas. La segunda, se relaciona
A. Político. Ser capaz de participar efectiva- con los atributos propiamente urbanos que in-
mente en las decisiones políticas que rigen la ciden en la calidad de vida; en el análisis, se
vida de uno, tener el derecho de participación han identificado, a su vez, dos grupos dentro
política, la protección de la libertad de expre- de ellos. El que se asocia con las necesidades
sión y de asociación. del habitar y que tienen que ver con las condi-
ciones del entorno; aquellos atributos colecti-
B. Material. Ser capaz de mantener la propie- vos que inciden directamente en el bienestar
dad (tierra y bienes muebles), y que los dere- de la población en relación con la vivienda,
chos de propiedad en igualdad de condiciones tales como los servicios públicos, el espacio
con los demás, con derecho a buscar un em- público y la calidad ambiental del entorno. El
pleo en igualdad de condiciones con los de- segundo tiene que ver con los atributos colec-
más, tener la libertad de búsqueda y captura tivos relacionados con la escala urbana o me-
injustificada. En el trabajo, ser capaz de traba- tropolitana y que reflejan condiciones propias
jar como un ser humano siendo, en ejercicio del medio urbano con alta incidencia en la ca-
de la razón práctica, y de entrar en relaciones lidad de vida directa o indirectamente entre
significativas de reconocimiento mutuo con los que se encuentran la movilidad, la calidad
otros trabajadores. ambiental general de la ciudad y los equipa-
mientos.
Julio Boltvinik
Bajo esta perspectiva y buscando dar cuenta
Con base en Maslow y otros autores, Boltvinik de dimensiones de la calidad de vida urbana
(2005b) propone una tipología más compacta en torno a temas que corresponden con el lo-
de necesidades: gro de derechos humanos y campos particu-
1. De sobrevivencia o materiales: necesidades lares de políticas públicas se proponen diez
fisiológicas y de seguridad (v. gr. alimentación, campos de la calidad de vida a destacar en la
refugio, seguridad). evaluación.
2. Cognitivas: saber, entender, educarse. 1. Salud y alimentación
3. Emocionales: afecto, amistad, amor; repu- 2. Condiciones de la vivienda
tación. 3. Calidad ambiental
4. De crecimiento: autoestima, logros y auto- 4. Equipamientos y dotaciones urbanas
rrealización. 5. Movilidad
6. Seguridad ciudadana
2.2.2 7. Trabajo
El esquema propuesto 8. Educación
9. Ocio y recreación
Para efectos de la identificación de las dimen- 10. Solidaridad y asociación
siones de la calidad de vida urbana, es im- 11. No discriminación
portante acotar dos condiciones. La primera 12. Capacidad de pago.
asociada a la noción de calidad de vida que
se soporta en el rápido recorrido realizado en Se encuentran coincidencias entre la clasifi-
el numeral anterior y que permite identificar cación presentada y algunas enumeraciones
áreas de necesidades que recurrentemente se de derechos humanos; y correspondencias
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

92

fuertes entre la agrupación de 14 núcleos de Por limitaciones en las fuentes de información


derechos, efectuada por el Comité Distrital de disponibles no se toman aspectos centrales de
Gestión Social Integral de Bogotá, y la lista las necesidades que Boltvinik denomina como
presentada46. de crecimiento (autoestima, logros y autorrea-
lización). El mismo motivo conduce a dejar de
En la tabla 32 se ilustra el contenido de las lado capacidades que Nussbaum agrupa en la
doce dimensiones identificadas en el marco categoría de control sobre el medio ambiente
de los autores y las corrientes reseñados. El político (ser capaz de participar efectivamente
cotejo permite observar que, a pesar de las en las decisiones políticas que rigen la vida de
discordancias en los distintos enfoques, hay uno, tener el derecho de participación política,
un campo de coincidencia importante. La la protección de la libertad de expresión y de
propuesta que aquí se acoge expresa los con- asociación).
tenidos centrales de esos enfoques, con una
forma particular de agrupación; adecuada a Luego de la tabla, se describen el contenido y
los propósitos de evaluación de política que el alcance temático que surgen del análisis de
se persiguen y al de destacar las condiciones cada una de las dimensiones para la evalua-
propias de la vida social en las ciudades con- ción de la calidad de vida urbana.
temporáneas.

Los 14 núcleos de derechos humanos del Comité son: 1.Trabajo, 2.Seguridad económica.3.Vivienda.4.Educación. 5. Alimentación
46/

y nutrición. 6. Ambiente sano.7.Salud. 8. Seguridad. 9. Recreación. 10. Participación. 11. Cultura. 12. Libre desarrollo de la per-
sonalidad. 13. Información, comunicación y conocimiento. 14. Justicia. Todos ellos encuentran concordancia con la lista expuesta,
excepto los relativos a “Libre desarrollo de la personalidad” y “Justicia”, para cuya evaluación no contamos con información en la
Encuesta Multipropósito 2011. Por la misma razón restringimos el alcance de la “participación” al ámbito de las relaciones primarias.
En los núcleos de derechos no encontramos, de otra parte, una ubicación clara de las dimensiones de “Equipamiento y dotaciones
urbanas”,”Movilidad” y “No discriminación””, que hemos incluido en nuestra lista. La de capacidad de pago se refiere al mismo campo
de la seguridad económica.
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

93

Tabla 32
Dimensiones de la calidad de vida, clasificaciones de necesidades y componentes
del desarrollo humano en los autores y sus enfoques tomados en cuenta
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

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Tabla 32
Dimensiones de la calidad de vida, clasificaciones de necesidades y componentes
del desarrollo humano en los autores y sus enfoques tomados en cuenta
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

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Salud y alimentación esta dimensión están formulados en términos
de oportunidades de acceso a los servicios de
Esta dimensión se ubica en el campo de las salud47, con lo que se reconoce el papel funda-
necesidades básicas de subsistencia que es el mental que tienen.
substrato para la sobrevivencia física, la rea-
lización de las actividades normales de las Se incluyen en la dimensión, además, la ali-
personas y el logro de una vida prologada. Su mentación, como condición necesaria para la
evaluación comprende tanto el sostenimiento supervivencia, el mantenimiento pleno de la
y extensión normal de la vida como el logro salud y de las capacidades físicas y mentales
de un buen estado de salud y la disposición de las personas. Las condiciones que permiten
de elementos o instrumentales que son nece- la satisfacción de las necesidades alimentarias
sarios para mantenerla: el acceso a servicios están consignadas en el derecho a la alimen-
para la prevención y curación de la enferme- tación que comprende el acceso físico y eco-
dad; una alimentación adecuada, y factores nómico a los alimentos adecuados o a medios
que la favorecen y disminuyen los riesgos que para obtenerlos. Este derecho está sanciona-
la amenazan. do en la Constitución Política colombiana48, la
Declaración Universal de Derechos Humanos,
El concepto de ‘salud’ tiene diferentes niveles el Pacto Internacional de Derechos Económi-
de comprensión. La Organización Mundial de cos, Sociales y Culturales y otros convenios
la Salud (OMS) la define como el “estado total internacionales.
de bienestar físico, mental y social”, dándole
un alcance semejante al de calidad de vida. Ha Las realizaciones de estos campos se captan
sido definida igualmente en términos de desa- a través del examen del estado nutricional de
rrollo y conservación de capacidades y poten- las personas. Entran en su evaluación los fac-
cialidades; y, en un sentido más específico, se tores que afectan el adecuado consumo de ali-
considera como un componente o una dimen- mentos o su asimilación, que se ubican en tres
sión de la calidad de vida. Su evaluación prác- grandes categorías (Maire y Delpeuch, 2006:
tica se hace, sin embargo, en la mayor parte 8 y ss.):
de los casos, por limitaciones de información • Inseguridad alimentaria: incluye los proble-
en términos de ausencia o presencia de enfer- mas de producción o de suministro de ali-
medad o daño (cfr. Martínez, 2012:). mentos y los de acceso de las familias y las
comunidades a productos alimenticios de
Según Doyal y Gough la salud, como necesi- buen valor nutricional, especialmente en
dad básica, puede definirse y evaluarse, en su términos de capacidad de pago.
sentido negativo “como reducción al mínimo • Higiene ambiental y acceso a los servicios de
de la discapacidad, la enfermedad y la muer- salud: comprende aspectos relativos a la hi-
te prematura” (1994: 220). El disfrute de una giene ambiental, el abastecimiento de agua
vida saludable y prolongada está condicionado y de productos alimenticios sanos, el sanea-
al acceso a una asistencia sanitaria segura y miento del medio ambiente, las formas de
oportuna que prevenga, en lo posible, la en- vida de las poblaciones, la prevalencia de
fermedad y la cure en caso de que ocurra, sin enfermedades infecciosas y parasitarias, y
que se comprometan recursos para la subsis- la cobertura y calidad de los sistemas de
tencia de la familia, ni se ponga en peligro el atención sanitaria.
patrimonio familiar. Los derechos relativos a

47/
Artículos 48 y 49 de la CP.
48/
Artículos 43, 44. 46 y 65.de la CP.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

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• Prestación de cuidados y prácticas de aten- tado por las edificaciones vecinas y sus usos,
ción: hacen referencia tanto a los cuidados a el espacio público inmediato (andenes, zonas
nivel familiar como a los aspectos más am- verdes) y la accesibilidad a la vivienda (vías).
plios de la solidaridad y la protección social
a nivel comunitario o nacional. Calidad ambiental

Condiciones de la vivienda La Declaración de Estocolmo (1972) sobre el


medio ambiente humano afirma que “el hom-
Este núcleo incluye las capacidades básicas de bre tiene derecho a la libertad, igualdad y ade-
supervivencia, en tanto determinantes de la cuadas condiciones de vida, en un medio am-
vida misma. Como derecho de tercera gene- biente de una calidad que permita una vida de
ración, o de solidaridad, está reconocido in- dignidad y bienestar.” Igualmente, el derecho
ternacionalmente en la Declaración Universal a un ambiente sano está reconocido en la CN,
de los Derechos Humanos (ONU,1948.Art.25), Art.79: “Todas las personas tienen derecho a
en el Pacto Internacional de Derechos Eco- gozar de un ambiente sano. La Ley garanti-
nómicos, Sociales y Culturales (ONU, 1966, zará la participación de la comunidad en las
Art.11), en la Primera Conferencia de la ONU decisiones que puedan afectarla.”
sobre Asentamientos Humanos (Vancouver,
1976). En Colombia, la Constitución de 1991 La calidad ambiental urbana “se entiende
(Art.51) lo reconoce explícitamente. En todos como un conjunto complejo de factores hu-
los casos, el derecho se define como el dere- manos y ambientales interrelacionados (tipo,
cho a una vivienda digna. La Corte Constitu- densidad y disposición de las construcciones,
cional (Sentencias T-585 de 2006 y C-444 de malla vial, densidad de población, presencia
2009) fijó los requisitos que debe cumplir la de áreas verdes, calidad del aire y del agua,
vivienda para que sea considerada “digna”. islas de calor, entre otros) que inciden favo-
Ellos son: habitabilidad (condiciones mínimas rable o desfavorablemente en la vida de los
de higiene, calidad de materiales y espacio), ciudadanos” (Luis Marino Santana Rodríguez,
localización que permita razonable acceso a 2010).
servicios fundamentales, seguridad en la te-
nencia, gastos inherentes a la vivienda, sopor- Si bien el concepto de calidad ambiental y en
tables (que no pongan en peligro otros gastos el medio urbano puede inscribirse dentro de
fundamentales del hogar). conceptos más integrales y más comprehen-
sivos como el de desarrollo sostenible, o aso-
Los servicios públicos domiciliarios (agua, al- ciarse a temas centrales de la calidad de vida
cantarillado, recolección de desechos, ener- como la salud49, la calidad ambiental urbana
gía, gas natural y telefonía local) son equipa- implica condiciones más complejas que supe-
mientos necesarios para que la vivienda pueda ran el enfoque hacia el uso y consumo de los
cumplir su función y en este sentido son parte recursos naturales.
del derecho a la vivienda (CN, Art.56). Igual-
mente, la vivienda no puede entenderse sin La carta para el derecho a la ciudad, por ejem-
considerar su entorno inmediato, represen- plo, establece el derecho a un medio ambien-

49/
La sentencia de la CC 058 de 1994 es ilustrativa al respecto: “la explotación de los recursos naturales y el ejercicio de las actividades
económicas no pueden vulnerar el derecho a un medio ambiente sano, no obstante lo importante que para la economía del país sea
la actividad económica que se vaya a desarrollar. El derecho al medio ambiente es fundamental para la existencia de la humanidad y
no se puede desligar del derecho a la vida y a la salud de las personas”.
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

97

te sano y sostenible basado en dos líneas: la tura ambiental, o la pérdida de valores socio
primera, la “prevención frente a la contami- - culturales de la población urbana.
nación y ocupación desordenada del territorio
y de las áreas de protección ambiental, inclu- Equipamientos y dotaciones urbanas
yendo ahorro energético, gestión y reutiliza-
ción de residuos, reciclaje, recuperación de El Plan de Ordenamiento Territorial de Bogotá
vertientes, y ampliación y protección de los define los equipamientos como:
espacios verdes” y la segunda, el “respeto al
patrimonio natural, histórico, arquitectónico, “el conjunto de espacios y edificios destinados
cultural y artístico y promoción de la recupe- a proveer a los ciudadanos del Distrito Capital
ración y revitalización de las áreas degradadas de los servicios sociales de cultura, seguridad
y de los equipamientos urbanos”. y justicia, comunales, bienestar social, edu-
cación, salud, culto, deportivos, recreativos y
Por otra parte, la política nacional de gestión de bienestar social, para mejorar los índices
ambiental urbana (MAVDT, 2009), establece de seguridad humana a las distintas escalas
que: de atención, en la perspectiva de consolidar
“la sostenibilidad de las ciudades no puede la ciudad como centro de una red regional de
referirse únicamente a las formas de ocupar, ciudades, buscando desconcentrar servicios
producir y consumir el espacio construido para que pueden ser prestados a menores costos
garantizar la permanente regeneración de sus en las otras ciudades de la región” (Decreto
sistemas sociales y económicos mediante la 190 de 2004)).
adopción de patrones de ordenamiento y ocu-
pación del suelo urbano. La vida humana en Los equipamientos y dotaciones urbanas
las ciudades depende fundamentalmente de constituyen un componente esencial para el
su relación con regiones próximas y lejanas desarrollo de los derechos sociales y econó-
de las cuales obtiene los insumos de energía y micos; su función trasciende la de contenedo-
materia esenciales para su reproducción sos- res de servicios a la población. De entrada, la
tenida y creciente” percepción de sectores como la educación y
la salud, no solo se da por la provisión de los
La política ha identificado en primer lugar, los bienes; también obedece a la prestación de los
componentes constitutivos del medio ambien- servicios y a las dotaciones. En el contexto te-
te o recursos naturales renovables; tales como rritorial, las condiciones de localización son la
agua, atmósfera, suelo y subsuelo, biodiversi- base para la accesibilidad; sus condiciones de
dad, fuentes primarias de energía no agotable, calidad y disponibilidad, de acuerdo a la de-
paisaje. Luego, los relacionados con factores manda, son base para la efectiva y oportuna
que interactúan e inciden sobre el ambiente prestación de los servicios.
en las áreas urbanas; que ocasionan contami-
nación y deterioro de los recursos naturales Desde la visión clásica de la dotación de equi-
renovables; pérdida o deterioro de la biodiver- pamientos, ésta se ha “inscrito en la lógica del
sidad o del espacio público; la inadecuada ges- estado del bienestar, donde los equipamientos
tión y disposición de residuos sólidos, líquidos públicos constituyen, para la ciudadanía, un
y gaseosos; el uso ineficiente de la energía y capital fijo de carácter colectivo, en tanto que
la falta de uso de fuentes no convencionales son espacios inalienables en el tiempo y des-
de energía; los riesgos de origen natural, los tinados a toda la comunidad de un territorio
pasivos ambientales y patrones insostenibles determinado”. (Ayuntamiento Gasteiz, Victo-
de ocupación del territorio, y de producción y ria, 2006). Se señala que es necesario tener
consumo; y la baja o falta de conciencia y cul- en cuenta aspectos cualitativos, más allá de la
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

98

cantidad, enfocados a la satisfacción de las Movilidad


necesidades.
La movilidad constituye un aspecto central
Desde el punto de vista espacial, la aproxi- dentro del concepto de calidad de vida urbana.
mación a los equipamientos urbanos parte de La movilidad “es la red de relaciones sociales
reconocer que su distribución en el territorio que se establecen a partir del intercambio de
no es homogénea. Aproximaciones teóricas flujos de personas, bienes y servicios sobre
(Crhistaller, 1933 y Von Tunnen, 1826, en- la base de una infraestructura determinada y
tre otros) han buscado explicar las formas y que tiene el potencial de dar forma y sentido
condiciones de localización. La teoría de lu- al espacio, de acuerdo con las singularidades
gar central, se soporta en la hipótesis de una de cada entorno urbano que se analiza (Revis-
distribución jerárquica de los centros urbanos, ta EIA, julio 2010).
como sistema, generándose nodos o lugares
centrales que concentran y abastecen los Desde esta perspectiva, la movilidad juega
servicios a determinado rango de población; parte de un sistema de relacionamiento social
Von Tunnen aporta la relación entre costos y de intercambio, asociado al espacio, supe-
de transporte y localización de las actividades rando visiones restrictivas enfocadas en la in-
económicas. Rondinelli, propone que: fraestructura; bajo esta óptica, aspectos como
la localización poblacional, el uso del suelo, las
“un sistema de equipamientos y asenta- dinámicas productivas, constituyen variables
mientos jerárquico y bien distribuido pue- necesarias para la comprensión del concepto
de proporcionar no solo el conjunto critico y que muestran la dificultad para un abordaje
de servicios y facilidades que se necesita comprehensivo de la misma.
en las áreas rurales para incrementar la
actividad agrícola y el ingreso, sino pro- La carta del derecho a la ciudad, promueve el
porcionar también los vínculos comer- derecho de movilidad y circulación en la ciu-
ciales, de transporte, administrativos y dad, de “acuerdo a un plan de desplazamiento
sociales que integran una región en una urbano e interurbano y a través de un sistema
economía auto sostenida”. (Rondinelli, de transportes públicos accesibles, a precio
1988). razonable y adecuados a las diferentes ne-
cesidades ambientales y sociales (de género,
La identificación de variables asociadas a los edad y discapacidad)”; igualmente propugna
equipamientos, alrededor tanto la aproxima- por:
ción desde el bienestar y la calidad de vida
como desde la de la localización, permiten vi- “la remoción de barreras arquitectónicas,
sualizar condiciones heterogéneas en térmi- la implantación de los equipamientos ne-
nos de satisfacción de necesidades de la po- cesarios en el sistema de movilidad y cir-
blación y de accesibilidad a las mismas, base culación y la adaptación de todas las edi-
para la comprensión de los fenómenos de se- ficaciones públicas o de uso público y los
gregación socio-espacial, tal como se ha pro- locales de trabajo y esparcimiento para
puesto en los estudios de política de hábitat garantizar la accesibilidad de las personas
y el Informe de Desarrollo Humano, de fenó- con discapacidad”, además del “estímulo
menos como la concentración, la distribución al uso de vehículos no contaminantes y
de bienes y servicios públicos en el territorio, establecimiento de áreas reservadas a los
como factores que contribuyen al mejora- peatones de manera permanente o para
miento o no de la calidad de vida. ciertos momentos del día”.
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

99

La movilidad urbana, se relaciona también chas las fisiológicas. Dentro de los elementos
con fuertes externalidades que afectan la cali- que incluyen, se destacan los relativos a la
dad de vida; deficiencias en la movilidad (por protección para mantener la vida y la integri-
ejemplo la congestión) inciden de manera di- dad personal estando a salvo de cualquier tipo
recta sobre la calidad del aire, la reducción de de violencia. Desde la perspectiva de las capa-
tiempo libre o el aumento de condiciones de cidades, Martha Nussbaum considera que la
inseguridad por alta accidentalidad. integridad física es una de las diez capacida-
des centrales que son requeridas para llevar
Si bien la construcción de un indicador que dé una vida humana digna y comprende el estar
cuenta de la movilidad incorporaría variables protegidos de ataques violentos (Nussbaum,
relacionadas con los aspectos anteriormente 2012: 53).
descritos, la aproximación a la calidad de vida,
desde un indicador de carácter sintético, tie- La seguridad ciudadana es sancionada en la
ne como la variable más sensible el tiempo de Declaración Universal de los Derechos Huma-
viaje en la ciudad; esta variable incorpora dos nos, que junto al derecho a la vida incluye el
dimensiones: refleja lo relativo a la calidad de relativo a la seguridad personal (ONU, 1948.
la infraestructura (mejoras sustanciales en la Art.3). El PNUD (2006: 35) la define como “la
capacidad y calidad se ven reflejadas en una condición personal, objetiva y subjetiva, de
reducción de los tiempos de viaje); y lo re- encontrarse libre de violencia o amenaza de
lativo a los flujos (transporte y tránsito) que violencia o despojo intencional por parte de
inciden igualmente en el tiempo. En el caso otros”50. De acuerdo con la Comisión Intera-
bogotano, el índice de desarrollo humano en mericana de Derechos Humanos, el concepto
su componente urbano ha involucrado a la de Seguridad Ciudadana significa que el Esta-
movilidad como componente junto con el de do “debe poner mayor énfasis en el desarrollo
los equipamientos. de las labores de prevención y control de los
factores que generan violencia e inseguridad
Desde la calidad de vida urbana, el tiempo que en tareas meramente represivas o reacti-
utilizado en viajes dentro de la ciudad tiene vas ante hechos consumados”.
una relación directa con el mejoramiento de
las condiciones de los hogares: mayor disponi- La protección y seguridad física personal se
bilidad de tiempo libre para el cuidado de los expresan en la ausencia de victimización por
hijos o el desarrollo de actividades de ocio y situaciones de violencia, y la presencia de de-
recreación; mejoras en la productividad labo- terminadas condiciones familiares, laborales,
ral y económica del conjunto que se traducen locales o de vecindario (entorno del hogar, en-
en mayores posibilidades de ingreso; menores tornos de trabajo, recreación) y generales (ur-
afectaciones a la salud, por efecto de exposi- banas, metropolitanas y del contexto político)
ción a emisiones. que permiten evitarlas.

Seguridad ciudadana Trabajo

Según Maslow (1943) las necesidades de se- En las economías monetarias de producción,
guridad surgen cuando se encuentran satisfe- la inseguridad económica está asociada a la

50/
http://es.wikipedia.org/wiki/Seguridad_ciudadana
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

100

existencia de desempleo involuntario. La ca- cas: disponibilidad de espacios, aceptabilidad


rencia de un empleo no solo le impone a las y calidad de los programas, adaptabilidad a
personas que lo padecen restricciones inacep- las condiciones culturales y tecnológicas, así
tables al acceso al mercado y a la satisfacción como accesibilidad sin discriminación por ra-
de sus necesidades básicas; además reduce zones económicas, de raza, género o religión.
su espacio de capacidades. De allí que Na-
ciones Unidas contemple el derecho al trabajo La CN (Art. 44 y 67) establece este derecho
como un derecho fundamental. Por supuesto, como universal y le fija un límite en diez años
las condiciones en las cuales se desenvuelve de educación obligatoria, un año de preesco-
dicha actividad deben cumplir con el estándar lar y nueve de educación básica, meta por en-
establecido por la OIT y demás organismos in- cima del planteamiento de los Objetivos del
ternacionales. El desempleo es el enemigo pú- Milenio, de los cinco años de la educación pri-
blico número uno. De allí que la política públi- maria. Si bien la meta colombiana es superior
ca nacional y territorial deben estar dirigidas a a las de los ODM, es notoriamente inferior a
resolver los serios problemas de coordinación las exigencias del mercado en otros países,
agregada que impiden ajustes rápidos y flexi- donde el límite inferior es el de 12 + 2, es
bles hacia el pleno empleo. En otras palabras, decir educación media más dos años de for-
los esquemas estatales deben garantizarle a mación técnica o tecnológica que prepare a la
cada persona la capacidad de encontrar un población para el mercado de trabajo. La ca-
empleo acorde con sus características y habi- lidad de vida se refleja en el acceso universal
lidades y con una remuneración justa. a la educación, los mayores niveles de esco-
laridad y la calidad de la misma, las garantías
Educación a la no discriminación y la seguridad en las
aulas, así como la pertinencia y oportunidad
La eliminación del analfabetismo y el acceso para el acceso al mercado de trabajo.
universal a la educación, principales logros de
la Revolución Francesa del Siglo XVIII, fueron Ocio y recreación
incorporados como propósitos en las diferen-
tes declaraciones internacionales firmadas en Dentro del marco conceptual planteado para
el siglo XX. La formulación mejor desarrolla- un índice de calidad de vida urbano, apare-
da es la del Pacto Internacional de Derechos cen como valores centrales el bien-estar hu-
Económicos, Sociales y Culturales de Nacio- mano y la satisfacción de las necesidades no
nes Unidas que, en el artículo 43, establece solo materiales sino inmateriales. De hecho,
la obligatoriedad de la educación primaria y el el uso del tiempo51 dentro de las aglomera-
acceso gradual a los niveles de educación se- ciones urbanas, intensivas en intercambios
cundaria y superior, bajo cuatro característi- de tipo social, cultural, político se ha confi-

51/
Los investigadores de ciencias sociales empezaron a utilizar encuestas para investigar el uso del tiempo de la población desde los
inicios del siglo pasado principalmente en Europa y los Estados Unidos. Existen antecedentes en Londres, 1913; la URSS, 1920 y USA,
1920 y 1934. Después de la II Guerra Mundial proliferaron este tipo de encuestas entre las que se pueden resaltar el llamado Estudio
Szalai auspiciado por la UNESCO entre 1965-66 en 13 ciudades de 11 países (Bélgica, Checoslovaquia, ex RFA, Francia, Hungría,
Bulgaria, Polonia, ex URSS, USA, Yugoslavia y Perú). Otros países del mundo han sistematizado este tipo de encuestas como Holanda
que la realiza cada 5 años y Dinamarca, Gran Bretaña y Francia que la llevan a cabo cada 10 años, Canadá realiza este tipo de estudios
como parte de la General Social Survey.
A mediados de la década del 70 se creó la International Association for Time Use Research y desde inicio de los años 90 en el marco
de Eurostat se ha promovido la armonización internacional sobre las encuestas de empleo del tiempo. Desde 1995, en 24 países en
desarrollo y en 22 países desarrollados se han completado o iniciado actividades de recopilación de datos sobre el empleo del tiempo.
En las Naciones Unidas la medición del tiempo y su utilización constituye una de las prioridades de investigación.
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

101

gurado como un tema de especial relevancia, Shaw y Freysinger, 1999; Dumazedier, 1967;
más allá de los intercambios de tipo mercantil Zallo, 1995; y Cuenca, 2000, por citar algu-
que puedan darse alrededor del consumo de nos).
bienes y servicios por ejemplo de tipo cultu-
ral, tecnológico o de bienes públicos asocia- Marx es partidario de un aumento del tiempo
dos a recreación y más específicamente con libre, entendido desde la preocupación capita-
el espacio público, atributo diferenciador de la lista por garantizar la recuperación de la fuer-
ciudad frente al medio rural. El tiempo libre, za del trabajo, para redistribuir la plusvalía
desde ciertas posiciones teóricas, hace parte generada por el trabajo humano, a fin de que
del ejercicio de la libertad como antagonismo todos se beneficien de ella y no únicamente
al trabajo. una minoría; y, finalmente, porque el tiempo
libre ha de¬ servir de marco, juntamente con
El uso del tiempo se entiende como una cate- el trabajo, para desarro¬llar plenamente to-
goría que expresa: das las capacidades humanas.

“el tiempo que dispone cada individuo, Otro de los enfoques contemporáneos para
cada grupo y cada sociedad. Es el marco abordar el tema del tiempo libre, tiene que ver
temporal de las actividades que la pobla- con las relaciones entre ingreso, economía y
ción realiza en la vida diaria, las cuales se tiempo libre: las condiciones para la genera-
distribuyen según un orden y una estruc- ción de una “cultura del ocio” y su participa-
tura que revelan el estado de desarrollo ción en la formación del PIB y las relaciones
de las fuerzas productivas y de las rela- con el ingreso y la capacidad de pago de la
ciones sociales. La vida diaria se estruc- población. Desde la teoría microeconómica se
tura según una rutina que puede variar señala, sobre la base de que el trabajador goza
con el sexo, la edad, la ocupación, el nivel de flexibilidad para elegir el número de horas
educacional, el grado de compromiso so- diarias de labor, que al elevarse el salario, las
ciopolítico y los intereses de cada perso- horas de trabajo ofrecidas aumentan inicial-
na. El estudio del uso del tiempo precisa y mente (efecto sustitución); pero pueden aca-
evidencia científicamente su organización bar disminuyendo a partir de un nivel salarial
y estructura para cada persona, grupos suficientemente alto, porque el efecto renta
fundamentales de población y a escala de se hace mayor que el efecto sustitución, fo-
toda la sociedad”. (Oficina Nacional de Es- mentándose de esta forma el ocio. (Pindyck y
tadísticas de Cuba, 2002) Rubinfeld, 2001)

En el contexto internacional, el concepto de Veblen, aporta la tesis del ocio como consu-
ocio ha tratado de englobar el de uso del tiem- mo improductivo; luego de la observación de
po libre, entendido como “toda aquella activi- actividades ociosas entre las clases acomoda-
dad realizada fuera de las obligaciones perso- das asociándolo a un distintivo o símbolo de
nales, familiares o laborales, aparentemente ele¬vado status social. En últimas, termina
elegida libremente por el individuo y, desde el asociándolo al carácter productivo, como ca-
punto de vista del gasto, provista en forma de pacidad de pago. Por otra parte, Friedmann,
bien o servicio” (Gabaldón Quiñónez, 2005). plantea la relación entre trabajo y ocio a partir
Sin embargo, el término ha sido objeto de nu- de un vínculo que puede ser de doble vía: la de
merosas y profundas reflexiones teóricas que la autonomía o como una relación de depen-
dan cuenta de su complejidad (Weber, 1958; dencia mutua.
Veblen, De Grazia, 1964; Neulinger, 1974; Or-
tega y Gasset, 1942; Henderson, Bialeschki,
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

102

Ahora bien, en cuanto a la formación del Pro- Dumazedier aporta una definición contempo-
ducto Interno, sólo aquellos bienes y servicios ránea más aceptada; asociada a las políticas
que impliquen pagos monetarios pueden ser públicas, permite profundizar los enfoques
captados a costa de aquellos en los que el ac- basados en bienestar-ingreso y en capacidad
ceso es de carácter público y que requieren de pago, donde se entiende por ocio “un con-
de aproximaciones diferentes soportadas en junto de ocu¬paciones a las que el individuo
el concepto de bienestar. Esto es concordante puede entregarse de manera completamente
con las últimas aproximaciones que dan espe- voluntaria, sea para descansar, sea para di-
cial relevancia a la noción de bienestar sobre vertirse, sea para desarrollar su información o
la mercantil, en cuanto el uso del tiempo libre su formación desinteresada, su participación
en las formas convencionales de medición de social voluntaria tras haberse liberado de sus
bienestar asociado a renta. obligaciones profesionales, familiares y socia-
les”. Desde su definición, igualmente asocia
El punto de partida de la relación de mayores el tiempo de ocio con planes de acción socio-
ingresos sinónimo de mayor bienestar, entra cultural orientados a hacer comprender, re-
en cuestionamiento al igual que su compen- crear y crear cultura: hacer del ocio un tiempo
sación a cambio de tener menos tiempo libre. de educación, asociando la problemática del
Por ejemplo, J. Rifkin (2004) se pregunta has- ocio con la de la educación y la cultura en
ta qué punto el hecho de que los estadouni- la ciudad; es decir, introduciendo una califica-
denses dispongan de un 29 por ciento más ción al uso de dicho tiempo.
de ingresos per cápita que los europeos, debe
interpretarse como una prueba de que los pri- Ahora bien, el desarrollo del concepto de uso
meros gocen de un estándar de vida superior del tiempo libre y sus mediciones, ha sido
que los segundos: amplio; particularmente, en relación con el
debate sobre la valoración del trabajo no re-
“si se mide la buena vida por la cantidad de munerado y desde el posicionamiento del
tiempo libre, el europeo medio disfruta de en- tema de género en la agenda internacional,
tre cuatro y diez semanas más de asueto al para la visibilización del rol de la mujer en el
año. La pregunta es, pues, si ese 29% adicio- trabajo doméstico; al igual que cambios en la
nal de ingresos permite comprar más alegría y concepción y uso del tiempo en el funciona-
felicidad, al menos la necesaria para justificar miento social y del proceso de urbanización
la renuncia a más de dos o tres meses de ocio (Durán, 1998), entre los que se encuentran
adicional al año”. los cambios en la estructura demográfica y
productiva de los países desarrollados, y los
Generalmente, las actividades de ocio con- hábitos de un número creciente de jubilados,
llevan, para el que lo disfruta, una utilización desempleados y estudiantes; la insatisfacción
intensiva de tiempo y, a menudo, también un de sectores, especialmente de mujeres, con la
gasto monetario de cierta envergadura. Lo an- invisibilidad de actividades no remuneradas;
terior no significa, sin embargo, que tiempo la expansión de un gran sector económico de
y dinero empleado en ocio discurran siempre actividades de ocio y medios de comunica-
en paralelo; pues muchas de estas actividades ción, el aumento del tiempo invertido en ac-
consumen tiempo pero apenas generan un tividades no directamente productivas, como
gasto monetario (por ejemplo, en actividades transporte y gestiones burocráticas; la profun-
como pasear o estar con los amigos). (Durán, dización de intercambios al interior de las ciu-
1998) dades, asociados al cambio y el uso de nuevas
tecnologías de la comunicación.
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

103

Por último, es importante destacar, para efec- y las redes que pueden mejorar la eficiencia
tos del Índice de Calidad de Vida Urbana, el de la sociedad. Putnam sistematiza cuatro
espacio público como atributo central de la dimensiones importantes del capital social:
condición urbana, de la satisfacción de las ne- capital formal o informal, lazos fuertes y dé-
cesidades individuales y del hogar, en cuan- biles, orientaciones internas o externas, y la
to recreación y como espacios de encuentro orientación a tender puentes o reforzar nexos.
o de valor simbólico. El espacio público tiene En Lin se destacan las relaciones entre indivi-
la característica de su accesibilidad universal, duos, recursos y redes, esta perspectiva toma
su uso colectivo y social, las condiciones de los postulados del intercambio de Homans
dominio y usufructo público y la gratuidad. como considerar a los individuos racionales en
Este se expresa en una oferta pública de ni- la consecución de sus intereses, suponer que
vel ciudad con amplitud de usos, donde las existen pocas dificultades para la cooperación,
condiciones de localización y accesibilidad son considerar que las normas regulan el marco
esenciales para garantizar su uso. colectivo, institucional de la acción, pero no la
acción misma, y utilizar un modelo de conduc-
Solidaridad y asociación ta subinstitucional donde los individuos eco-
nomizan, intercambian y procuran eficiencia
Al abarcar la calidad de vida, no solo las rea- en sus acciones.
lizaciones personales sino también la solida-
ridad (Sen, 1987 a, 1996: 62, Cortes y otros, Para la construcción de esta dimensión y la
1999) y los logros colectivos, la dimensión siguiente se tendrán en cuenta las perspecti-
de solidaridad y asociación cubre los aspec- vas de Putnam acerca del concepto de Capital
tos referentes a las necesidades de sentido Social.
de pertenencia, afecto, amor y realizaciones
primarias significativas planteadas tanto por No discriminación
Maslow, y por los demás autores referenciados
en el apartado anterior, como aspecto comple- Esta dimensión puede enmarcarse dentro del
mentario y con el objetivo de enriquecer el concepto de bienestar social al igual que en el
análisis de estas realizaciones, se incluye el concepto de bien-estar de Sen al responder de
concepto de capital social. igual manera que la dimensión solidaridad y
asociación a las necesidades de amor y de per-
En términos generales, el concepto de capital tenencia53 y a funcionamientos y capacidades
social se analiza teniendo en cuenta tres pers- de los individuos, que, aunque no responden
pectivas52: la de Coleman, que lo ve como una a necesidades básicas, en el contexto urbano
serie de recursos insertos en la estructura de pueden afectar la calidad de vida.
las relaciones sociales, en donde los actores
generan interdependencias y acciones de in- Con el fin de medir esta dimensión se plan-
tercambio que ocurren en eventos en los que tean 8 indicadores básicos que relacionan la
ellos tienen intereses y pueden estar total o percepción del jefe de hogar sobre temas de
parcialmente bajo su control. La de Putnam, desempeño de organismos públicos, respeto a
que se refiere a las características de la orga- los derechos humanos e igualdad de oportuni-
nización social como la confianza, las normas dades para poblaciones específicas.

Capital social: una lectura de tres perspectivas clásicas, René Millán, Sara Gordon. Revista Mexicana de Sociología, año 66, núm.
52/

4, octubre – diciembre de 2004.


53/
Pirámide de Maslow. A. Maslow, A Theory of Human Motivation, the philosophical library, 1946.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

104

Capacidad de pago La evaluación de la calidad de vida bajo la


perspectiva de las capacidades implica tomar
La seguridad económica es una evolución del en cuenta las características propias del espa-
derecho general a la seguridad y se expresa cio de funcionamientos y realizaciones posi-
como la necesidad de garantizar condiciones bles de obtener o efectivamente obtenidas en
de estabilidad y equidad en materia de trabajo las dimensiones destacadas.
y fuentes de ingreso, tales que permitan su-
perar la pobreza. El derecho a elegir el tipo La diversidad constitutiva de la calidad de
de trabajo se complementa con la estabilidad vida puede ser representada como una canas-
en el mismo, sea bajo la modalidad de empleo ta de los múltiples atributos que la compo-
o emprendimiento, como requisito para que nen54. Hay dos formas de especificarla. Optar
la familia obtenga ingresos permanentes y se por una u otra depende de los objetivos de la
independice de la asistencia social, así como evaluación y también de las restricciones que
el de prever una situación de contingencia impone disponer de la información adecuada.
derivada de la pérdida de empleo, tal como
el acceso a un seguro o subsidio temporal de La primera, la más ambiciosa, denominada
desempleo. de aplicación de elecciones, considera todo
el campo de opciones alternativas y permite
La superación de la pobreza es el otro elemen- comparar los distintos conjuntos del espacio
to de seguridad económica, que se expresa en de elección. Las capacidades de las personas
la capacidad de compra generada por el in- se especifican como la canasta de atributos
greso de las personas y su extensión al núcleo compuesta por el conjunto de vectores de las
familiar. La equidad en los ingresos se analiza realizaciones que están al alcance de cada una
desde dos ópticas, la de la distribución y la de de ellas. Esto permite “… comparar conjuntos
la capacidad de compra de los hogares, la pri- y no sólo puntos en este espacio, e implica el
mera como la construcción de mayor equidad asunto adicional que la importancia de la li-
en la medida que se avanza en reducir la con- bertad puede ampliarse bastante más allá del
centración de la riqueza y, la segunda, como valor que posee el elemento particular elegi-
la medición de la pobreza por ingresos, dada do…” (Foster y Sen, 2001: 233, cfr. González
una convención nacional del valor de la canas- y Fresneda, 2004).
ta combinada de alimentos y otros bienes.
En la práctica, por restricciones en la cobertu-
2.2.3 ra temática y la calidad de la información, la
Niveles y enfoques metodológicos para mayor parte de las veces es necesario quedar-
evaluar la calidad de vida se sólo en la evaluación de las realizaciones
y funcionamientos alcanzados. Este nivel res-
Niveles en la evaluación de la calidad de vida tringido constituye la evaluación elemental55.
y uso de indicadores indirectos En esta segunda forma de especificar la diver-

“La pluralidad constitutiva percibe el estándar de vida ante todo como una canastas de atributos múltiples aunque, en un segundo
54/

plano, acepte que tal canasta puede tener una representación numérica en la forma de un índice.” (Sen 1987a, pp. 2-3)
55/
“Es evidente –anota Sen- que la restricción de información planteará más problemas cuando pretendamos usar el enfoque de ‘ca-
pacidad’ para evaluar la libertad en vez del enfoque ‘bien-estar real obtenido’, pero incluso para este segundo enfoque esta limitación
plantea limitaciones sustantivas.” (Sen 1992: 67).
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

105

sidad propia de la calidad de vida, se toma en cia, y teniendo en cuenta los objetivos de la
cuenta un subconjunto de la canasta de la pri- evaluación que se haga y la información dis-
mera opción, que queda acotada por el vector ponible, se requiere adoptar una opción den-
de realizaciones logradas de las personas. tro de los enfoques prácticos existentes para
aplicar la perspectiva de las capacidades.
De otra parte, ya que los conjuntos de las ca-
pacidades de las personas no son directamen- Sen distingue tres enfoques metodológicos
te perceptibles es necesario evaluarlos empí- para la evaluación de los avances y ventajas
ricamente, en cualquiera de los dos niveles, en las capacidades: 1) el directo, 2) el com-
a partir de hipótesis sobre la forma como se plementario y 3) el indirecto (Sen, 2000: 107
manifiestan y, con frecuencia, a través de sus y ss., González y Fresneda, 2004, Fresneda y
expresiones indirectas (cfr. Sen, 1992 a: 66). Martínez, 2012).
Este hecho obliga a precisar el papel que se
asigna a las variables y a los indicadores utili- El enfoque directo
zados en relación con las capacidades y funcio-
namientos a los que se ha dado prioridad en la En el enfoque directo se examinan las venta-
evaluación. En ausencia de medidas directas jas de los individuos, comparando los vectores
del bien-estar se justifica recurrir a medidas de realizaciones que les corresponden (ya sea
“proxy” que expresen las capacidades a través los posibles a obtener o los logrados) y se llega
de cuestiones como el acceso a servicios. a una conclusión sobre el orden de sus respec-
tivos estados. “Esta es, en muchos aspectos, la
Enfoques de medición directo, indirecto forma más inmediata y genuina de incorporar
y complementario a la evaluación las consideraciones relativas a
las capacidades”. (Sen, 2000: 108)
Para adoptar una estrategia práctica tendiente
a evaluar los resultados de las políticas eco- Dentro del enfoque directo, el primer nivel de
nómicas y sociales sobre la calidad de vida, análisis es la “comparación de capacidades es-
Sen recomienda asumir una actitud pragmáti- pecíficas”, que consiste en el cotejo y ordena-
ca: “Es muy necesario ser pragmático –anota miento de las situaciones respecto a una va-
–cuando se utiliza la motivación que subyace riable de capacidad en particular56. Con base
en la perspectiva de las capacidades para em- en un conjunto de comparaciones de capaci-
plear los datos existentes con el fin de realizar dades específicas, es posible pasar al segun-
evaluaciones prácticas y análisis de la políti- do nivel de análisis consistente en una orde-
ca económica y social” (Sen, 2000: 107). No nación parcial agregada del conjunto de esas
siempre es la mejor salida, optar por una me- capacidades. Para hacerlo, las ponderaciones
dida directa de las capacidades. Algunas capa- juegan un papel integrador fundamental de
cidades son difíciles de medir y, del intento de las medidas parciales de las realizaciones se-
llegar a indicadores para cuantificarlas, pue- leccionadas (Sen, 2000: 108). Partiendo de la
den resultar cifras que ocultan más de lo que identificación del estado de los individuos en
revelan (Sen, 2000: 107). En cada circunstan- cada una de las capacidades, mediante indica-

56/
“La concentración de la atención en una determinada variable de capacidad, como el empleo, la longevidad, la capacidad de lectura
y escritura o la nutrición, es un ejemplo de ‘comparación de capacidades específicas’…a pesar de la cobertura incompleta de las com-
paraciones de capacidades específicas, estas comparaciones pueden ser bastante esclarecedoras, incluso por sí solas en los ejercicios
de evaluación.” (Sen, 1999: 108)
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

106

dores adecuados, se llega a un ordenamiento algunos de los objetivos a que están dirigidas
de su situación global, de acuerdo con la va- las capacidades, en ausencia de información
loración de sus estados en cada capacidad, y directa57.
una ponderación por rangos de las capacida- En esta línea de abordaje se podría, además,
des. El resultado puede ser un ordenamien- como indican Foster y Sen
to parcial, que irá completándose a través de
criterios adicionales que vayan precisando “…empezar con el espacio clásico de los
ponderaciones. En el marco de un análisis ingresos y considerar los otros determi-
de comparaciones ordinales, pueden hacerse nantes de las capacidades para obtener
comparaciones no sólo de ubicación relati- ‘ingresos ajustados’. Por ejemplo, el nivel
va, sino también de intensidad (Foster y Sen, del ingreso de una familia podría ajustar-
2001: 246-247). se hacia abajo por el analfabetismo y hacia
arriba por los niveles de educación eleva-
La “comparación total”, tendiente a obtener dos, etc., a fin de volverlos ‘equivalentes’
el ordenamiento completo tomando en cuenta en términos de logros de capacidad.”
las distintas capacidades, es el tercer nivel del
enfoque directo. Al decir de Sen es la variante Este procedimiento permite llegar a una eva-
“más ambiciosa de las tres. A menudo dema- luación global de las ventajas individuales,
siado ambiciosa.” Para él, es más un punto de en el espacio del ingreso, aunque con valores
referencia que una meta a alcanzar: “Podemos ajustados que tomen en cuenta las variacio-
avanzar en esa dirección –y posiblemente lle- nes individuales, de las familias y del contexto
gar bastante lejos –no insistiendo en la orde- socio-económico o geográfico que inciden en
nación completa de las alternativas”. (Sen, la conversión de los recursos o gastos en ca-
2000: 108) pacidades (Foster y Sen, 2001: 245-246). El
uso del ingreso en la perspectiva de la evalua-
El enfoque indirecto ción del bien-estar implica tomarlo en cuenta
teniendo en cuenta lo que significa para las
Otra opción para medir y evaluar el bien-es- familias o personas en términos de capacida-
tar, en el marco del enfoque de capacidades, des, de acuerdo con sus características pro-
recurre a procedimientos indirectos que dan pias (sexo, edad, etnia, etc., cfr. Foster y Sen,
un tratamiento especial a variables como el 2001: 245).
ingreso, los recursos o los bienes consumidos.
Estas informaciones son “proxys” de la magni- Las consideraciones hechas sobre los ingresos
tud de las capacidades de los individuos o los son extensibles a la capacidad de pago. Ella es
hogares a través de los recursos que permiten también una variable indirecta del bien-estar
alcanzarlas. El uso de los ingresos en combi- y de la calidad de vida en tanto expresa po-
nación con indicadores referidos a funciona- tencialidades de los recursos monetarios de
mientos, también puede ser útil para captar las personas para obtener en el mercado fun-

57/
En los Informes de Desarrollo Humano del PNUD se ha resaltado esta concepción:“El primer Informe de Desarrollo Humano, co-
rrespondiente a 1990, definió el desarrollo humano como el proceso de ampliarle las opciones a las personas. El ingreso es una de
esas opciones, pero no es la suma total de la vida humana. La salud, la educación, un buen entorno físico y la libertad de acción y
expresión son igualmente importantes…En ocasiones se dice que el IDH (Índice de Desarrollo Humano) mezcla medios y fines; se
asume que el ingreso es un medio para conseguir el desarrollo humano, mientras que los estándares de progreso en materia de salud
y educación son los fines. Sin embargo, el ingreso, según se utiliza en el IDH, también puede considerarse como una medida sustituta
para algunos de esos fines. El ingreso se trata como sustituto en lo que respecta a las satisfacciones derivadas de una serie de bienes
y servicios básicos.” (PNUD, 1992: 38 y 51).
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

107

cionamientos relacionados con capacidades pectos constitutivos de calidad de vida, con el


valiosas. Su uso en esta perspectiva puede, propósito de llegar a una medida que apoye la
como en el caso de los ingresos crudos, refi- evaluación de su estado, evolución y forma de
narse para tomar en cuenta las características distribución58. Se destacan tres características
particulares de las personas en la obtención de estos índices: su carácter agregativo, y su
de realizaciones. sensibilidad a la desigualdad y a los efectos
de las políticas públicas (González y Fresneda,
El enfoque complementario 2004). Estas características dan lugar a orien-
taciones prácticas tendientes a la construc-
Este enfoque es un híbrido de los anteriores. ción del índice de calidad de vida urbana.
En su aplicación típica se recurre al espacio
de las comparaciones por niveles de ingreso, Agregabilidad
completándolas con las que se relacionan con
expresiones más directas de las capacidades: De manera general, una medida de calidad de
“algunos factores como la existencia de asis- vida requiere incorporar, a través de indicado-
tencia sanitaria y su cobertura, la evidencia res apropiados, los distintos dominios de las
de discriminación sexual en la distribución de realizaciones que son consideradas pertinen-
recursos dentro de la familia y la presencia de tes. Por definición, dentro del enfoque directo
paro y su magnitud pueden complementar la de evaluación tiene un carácter multidimen-
información parcial que transmiten las medi- sional. Es una consecuencia de la pluralidad
das tradicionales en el espacio de la renta.” del concepto de calidad de vida (CDV). Si se
(Sen, 2000: 109) denotan sus dimensiones como Dl,…, Dp (sien-
do p el número de dimensiones consideradas
El enfoque complementario combina la infor- relevantes) la calidad de vida está expresada
mación referida a los ingresos, gastos o a la como una función de esas dimensiones (cfr.
capacidad de pago, con indicadores directos Rahman et al., 2003: 8-9).
de funcionamientos. El Índice de Desarrollo
Humano (IDH, PNUD) es un ejemplo de la for- A cada dimensión CDV=CDV(Dl, …, Dp)
ma de aplicarlo. corresponde un vector de indicadores
xj=(xj1,xj2...,xjmj); mj es el número de indicado-
2.2.4 res para cada dimensión j. Así, la medida de
Características de los índices de calidad calidad de vida puede representarse como:
de vida

Mediante un índice se busca expresar sinté-


ticamente elementos destacados de los as-

58/
Sobre las ventajas de obtener un índice que exprese en forma sintética el estado del bien-estar de la sociedad, anota Sen: “Si ob-
servamos las diversas cosas que pasan a nuestro alrededor, la función de una ‘medida’ o ‘índice’ es destilar y focalizar lo relevante
para nuestros propósitos. El ejercicio consiste en nada menos que proveer una base razonada para la valoración del progreso de la
sociedad. En el desarrollo de un índice, la cuestión central se relaciona con la evaluación sistemática de lo importante. La medición
tiene que integrarse a la evaluación, lo cual no es una tarea fácil… ¿Cuál es la necesidad de emprender un ejercicio tan ambicioso y
exigente? La razón básica es clara. Los cambios en una sociedad siempre se juzgan -tanto por los críticos como por los planificado-
res- de acuerdo con criterios explícitos o implícitos. Estas varas tienen una importancia crucial en la percepción sobre qué tan bien
marchan las cosas; qué más debe hacerse ahora y cuáles demandas deben formularse al gobierno y a otros entes responsables.”(Sen
1992b: 21-22). Sen insiste en que, para evaluar la calidad de vida, la medición no sólo es posible sino que, además, es un imperativo
ético. La sociedad necesita tener indicadores para poder informar. La información es la condición básica para la construcción de una
sociedad democrática (González y Fresneda, 2004: 16).
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

108

El índice de la calidad de vida urbana (ICVU) una variación en sus magnitudes a través de
se obtiene a partir de los valores de los indica- la distribución.
dores que corresponden a sus dimensiones, a
través de algún procedimiento de agregación. La evaluación de la calidad de vida, y más ge-
Una de las dimensiones está constituida por la néricamente del bien-estar, tiene que ver con
medida de capacidad de pago. la situación de desigualdad en dos sentidos
interrelacionados.
Desde una perspectiva metodológica, la selec-
ción de los indicadores a través de los cua- El primero se refiere a que la equidad es un
les se expresan las múltiples dimensiones de elemento constitutivo de la calidad de vida,
la calidad de vida obliga a fijar un centro de que es preciso considerar en la evaluación. Al
atención, a expresar un énfasis. No es siem- poseer un valor intrínseco, entre dos situa-
pre práctico recurrir al más amplio conjunto ciones con igual magnitud agregada de bien-
de indicadores, lo que podría dar lugar a una estar (utilidad o ingreso), es preferible aquella
imagen confusa y no apta para el diseño de en que haya menor desigualdad. Esta forma
las políticas59. En este tipo de mediciones se de tener en cuenta la desigualdad está asocia-
busca destacar las situaciones más significati- da con nociones normativas, y se expresa en
vas y que expresen las capacidades relevantes índices de bien-estar que castigan la inequi-
para los propósitos de la evaluación (Fresne- dad (cfr. Sen, 1973: 18, González y Fresneda,
da, 1998). 2004).

Un corolario, de esta forma de construir el ín- El otro sentido expresa la relación de eficien-
dice, es su cualidad de “descomponibilidad” cia entre la forma de distribución del bien-
entendida como la posibilidad que ofrece de estar y su nivel. La igualdad tiene un papel
examinar los logros en las distintas dimensio- instrumental y las medidas sobre la magnitud
nes consideradas como fracciones cuyo aporte de la desigualdad dan cuenta de la pérdida de
puede identificarse separadamente para dar bien-estar social que le es asignable.
cuenta de la calidad de vida en el conjunto del
espacio de evaluación escogido (cfr. Foster y Sensibilidad a los impactos de las políti-
Sen, 2001: 176). cas

Sensibilidad a la desigualdad Para los objetivos de nuestros análisis, en el


terreno práctico, es deseable que el índice de
Para los propósitos de la evaluación realiza- calidad de vida urbana exprese aspectos des-
da, el índice de calidad de vida debe dar base tacados de las políticas públicas en los espa-
para analizar las relaciones entre bien-estar cios de evaluación seleccionados. Esto con el
y desigualdad permitiendo establecer la ven- propósito de permitir examinar la forma como
taja relativa de grupos diferenciados por su esas políticas inciden sobre las distintas di-
posición social frente a distintas dimensiones mensiones de la calidad de vida (Cortés, Gam-
de la calidad de vida. Por ello, es preciso que boa y González: 8).
tome en cuenta indicadores que presenten

Esta orientación metodológica general para medidas sociales es la expresada por el PNUD en relación con el Índice de Desarrollo
59/

Humano del PNUD:“En cualquier sistema para medir y controlar el desarrollo humano el ideal sería incluir muchas variables para
obtener un panorama lo más amplio posible. Sin embargo, la actual carencia de estadísticas comparables lo impiden. Tampoco es total-
mente deseable tal amplitud. El exceso de indicadores podría crear una imagen confusa, lo cual quizás podría desviar a los diseñadores
de políticas de las principales tendencias generales. Por lo tanto, lo esencial es el énfasis.” (PNUD, 1990: 36)
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

109

2.3 índice de calidad de vida urbana (ICVU). Se


Índice de Calidad de Vida Urbana: cons- señalan, en primer lugar, los procedimientos
trucción y resultados por dimensiones generales para la construcción del índice, en
sus distintas etapas. A continuación se justifi-
Para evaluar la calidad de vida urbana se can los indicadores seleccionados en cada una
adoptó un enfoque que privilegia algunas di- de las dimensiones y subdimensiones elegidas
mensiones destacadas de las capacidades con de las capacidades. Posteriormente se expo-
el propósito de llegar a un índice o conjunto ne la técnica seguida para dar una pondera-
de índices para medirla, utilizando la informa- ción a estos indicadores y el procedimiento
ción disponible en la Encuesta Multipropósito propuesto para llegar a una medida sintética
de Bogotá de 2011. de la calidad de vida. En la sección relativa
a la capacidad de pago se señala, además de
En el campo informacional escogido, dentro de sus aspectos conceptuales, la forma como se
las distintas opciones metodológicas, se asu- construyó el índice sobre ese concepto.
me una orientación de evaluación elemental,
que examina los funcionamientos y realizacio-
2.3.1
nes alcanzados, sin tomar en cuenta las opcio-
nes posibles a ser escogidas. Se sigue además, Procedimiento general para construir

en principio, un enfoque complementario de el índice

evaluación a partir de la observación de las


ventajas de los hogares en los vectores de rea- Selección de indicadores
lizaciones correspondientes.
En cada una de las dimensiones identificadas
Bajo el enfoque complementario adoptado, se se seleccionan variables que expresan reali-
toma en cuenta, además, la información so- zaciones en la satisfacción de las necesidades
bre la capacidad de pago de los hogares que y/o el cumplimiento de los derechos humanos
completa la provista por indicadores directos y que, por su distribución estadística, permi-
de funcionamientos en los campos selecciona- tieran analizar desigualdades sociales. Las
dos. La capacidad de pago, como el ingreso, es variables a que se recurre captan las capa-
una expresión destacada del proceso de am- cidades y realizaciones (funcionamientos) de
pliación de las capacidades y es una medida maneras diversas. Algunas ponen de presente
indirecta de múltiples aspectos constitutivos formas de ser y de hacer de las personas que
de la calidad de vida. directamente apuntan a los aspectos constitu-
tivos de la calidad de vida. Otras se refieren a
En la evaluación se busca, de otra parte, obte- situaciones o recursos que son factores condi-
ner información desagregada de distintas di- cionantes de la calidad de vida, que están aso-
mensiones de la calidad de vida de forma que ciados a ella como servicios, procesos o recur-
pueda analizarse el posible efecto de políticas sos de los cuales dependen las realizaciones
y programas públicos de carácter sectorial so- (cfr. González y Fresneda, 2004).
bre aspectos particulares de la calidad de vida,
y la relación entre la evolución diferencial de En secciones posteriores se exponen los crite-
esas dimensiones. rios aplicados para escoger los indicadores de
cada una de las dimensiones de la calidad de
En este capítulo se exponen los lineamientos vida tomadas en cuenta.
metodológicos adoptados para establecer el
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

110

Procedimientos para obtener las pondera- nentes diferenciados a partir de los índices de
ciones de los índices de las dimensiones cada subdimensión a través de la técnica de
de la calidad de vida urbana componentes principales. Y en la tercera se
calculó un índice global de calidad de vida a
La selección de múltiples y heterogéneos fun- partir de los índices de las dimensiones recu-
cionamientos pertinentes para evaluar la cali- rriendo igualmente a la técnica de componen-
dad de vida equivale a establecer que tienen tes principales.
una ponderación positiva, aunque no se es-
pecifique exactamente cuál sea su valor (Sen, En la tercera etapa se encontró que no todos
1987b: 30). Para llegar a un ordenamiento los índices tenían correlación positiva entre sí.
completo de los individuos, familias o uni- Esto llevó a que, si se aplicara el método de
dades consideradas, tomando el conjunto de componentes principales, algunas dimensio-
variables escogidas, se requiere determinar nes quedaran con ponderación negativa. Ante
ponderadores que expresen el valor de cada este resultado, para mantener el aporte de to-
una de las realizaciones consideradas. (Foster das las dimensiones seleccionadas, se decidió
y Sen, 2001: 234, cfr. Sen, 1987b: 30-31) obtener el índice a través del promedio simple
de los índices parciales. Se volverá sobre este
No existen reglas definidas y fijas para la se- tema (secciones 2.3.3.1 y 2.3.3.2). Al utilizar
lección de los ponderadores. Llegar a ellos es, el promedio simple de los índices, se asume
según Foster y Sen, un asunto de buen jui- que cada una de las dimensiones tiene la mis-
cio, que requiere lograr un grado de consenso ma ponderación.
para la evaluación social.
Metodología estadística para la construc-
Para el ejercicio de esta evaluación de la cali- ción del índice de calidad de vida urbana
dad de vida en Bogotá se recurrió, en primera
instancia, a procedimientos que permiten ob- Los índices de cada dimensión o sub-dimen-
tener las ponderaciones a partir del comporta- sión se construyen como la combinación lineal
miento estadístico observado de las variables de las respuestas obtenidas a las diferentes
escogidas. Sin intentar llegar a un conjunto preguntas de la encuesta. Como, en general,
de ponderadores que exprese las valoraciones estas preguntas tienen respuestas categóri-
colectivas, se buscó una expresión sintética cas, para la construcción de estos índices se
de la magnitud de la calidad de vida a partir utiliza el método de las componentes princi-
de la asociación que presentan los indicadores pales para datos categóricos (CATPCA) discu-
seleccionados para las distintas dimensiones tidos por Kruskal (1964) y De Leeuw, Young
examinadas (Fresneda y Martínez, 2012). and Takane (1976). Las diferentes preguntas
constituyen las variables y las respuestas a
Para ello se siguió inicialmente un procedi- estas preguntas las categorías. Este método
miento en tres etapas. En la primera, se obtu- produce fundamentalmente dos resultados:
vo un índice para cada una de las dimensiones en el primero se asignan valores numéricos
simples que no tienen componentes desagre- a cada una de las respuestas de una determi-
gados de la calidad de vida, o de las subdi- nada pregunta, y en el segundo se obtienen
mensiones de aquellas que sí tienen diferen- ponderaciones para cada una de las variables.
ciación de componentes, utilizando la técnica
estadística de análisis de componentes prin- Utilizando la técnica estadística de análisis ca-
cipales categóricos. En la segunda, se elabo- tegórico de componentes principales se busca
ró un índice de las dimensiones con compo- obtener el peso de cada uno de los estados o
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

111

categorías de las variables seleccionadas, para nadas con las otras, aunque tengan una alta
obtener una medida general que exprese un valoración por sí mismas. Además, las ponde-
acercamiento a cada una de las diez dimensio- raciones se obtienen con referencia a un uni-
nes seleccionadas para especificar la calidad verso particular de estudio y los cambios que
de vida. presentan a través del tiempo o entre diferen-
tes poblaciones no expresan necesariamente
Estos índices se obtienen como funciones li- modificaciones en el marco valorativo, ni en
neales de la presencia de las diferentes cate- la importancia que le otorgan los individuos.
gorías que presentan las variables escogidas
y las ponderaciones obtenidas. La técnica En algunos casos, como en las dimensiones
permite definir el peso de cada una de dichas de alimentación y salud, condiciones de la vi-
categorías para obtener una nueva variable o vienda, y calidad de medio ambiente, la cons-
indicador que puede interpretarse como la ex- trucción del índice correspondiente requiere
presión oculta de cada dimensión de la calidad la construcción de subíndices; los cuales se
de vida. construyen mediante componentes principa-
les para datos categóricos. Los índices de cada
Al acoger medidas que captan la asociación dimensión, a su vez se forman mediante ta-
observada como criterio para llegar a las pon- les componentes para datos continuos. Sobre
deraciones de un indicador o índice para cada estas bases el índice de la dimensión j, que
dimensión de la calidad de vida, se acepta, no tiene subdimensiones, puede expresarse
de otra parte, como criterio válido de evalua- como:
ción que se tome en cuenta cada estado de
las variables en tanto contribuya a lograr un
resultado que es producto de distintas situa-
ciones con interdependencias entre sí. Otorga Siendo xjl,xj2,.....,xjmj las variables que compo-
una valoración al hecho de que las realizacio- nen el índice y aj1,aj2,.....,ajmj las ponderaciones
nes obtenidas son producto de una “correa- de cada una de ellas.
lización”, más que de una influencia inde-
pendiente. Las ponderaciones obtenidas dan Esta fórmula es también aplicada a las sub-
una idea del aporte de cada categoría en el dimensiones (SDji) de las dimensiones con
resultado alcanzado y expresan que vale más distintos componentes. Para las dimensiones
lo que, como tendencia, contribuye en mayor con subdimensiones, en una etapa adicional,
forma a alcanzar un resultado global positivo. se construye un índice con la técnica de com-
Manifiestan el posible grado de contribución ponentes principales. En este caso, el índice
de cada situación captada por los indicadores, de una dimensión es una combinación lineal
que define el espacio de evaluación, al logro de los índices parciales de las subdimensiones
conjunto, donde confluyen todas las que son (SDji), a los cuales se aplica la ponderación
tomadas en cuenta. (bji) obtenidas con esa técnica estadística:

Las componentes principales para datos cate-


góricos, como las otras técnicas estadísticas
factoriales, tiene la virtud de “develar” el peso El índice Dj, en todos los casos, resulta ser una
de cada categoría considerada de acuerdo con variable continua de media cero y varianza
su comportamiento estadístico observado, con uno. Para efectos de hacer comparables los di-
lo cual se controla la subjetividad. No obstan- ferentes índices, estos se estandarizan de tal
te, con esta técnica difícilmente se capta el manera que tomen valores entre cero y uno.
aporte de variables que no están correlacio- A cada una de las dimensiones se le constru-
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

112

ye un índice estandarizado usando el procedi- mensiones y sub-dimensiones de la calidad de


miento antes mencionado. vida con los indicadores escogidos. En la sec-
ción siguiente (2.3.3.) se presentan algunos
El Índice de Calidad de Vida Urbana (ICVU) resultados generales de los índices obtenidos.
se construye, en la tercera etapa, por la razón
anotada de la correlación negativa entre al- Salud y alimentación
gunos de los índices de las dimensiones como
promedio simple de los indicadores numéricos Para captar esta dimensión se toman en cuen-
relativos a cada una de las 12 dimensiones Dj. ta circunstancias que expresan el grado de
satisfacción de necesidades para la sobrevi-
vencia física y el desempeño de las activida-
des corrientes de las personas. Su evaluación
Por su forma de construcción el ICVU puede comprende, como se señaló, la consideración
asumir valores entre cero u uno. El valor cero de la situación de salud de los individuos y de
significa que se tienen las condiciones míni- factores destacados que favorecen su logro.
mas de todos los elementos examinados para Dentro de ellos tiene papel preeminente la
expresar la calidad de vida. El valor uno capta alimentación.
la situación límite donde un hogar posee los
valores máximos en todos los índices. Se consideran separadamente, para la cons-
trucción del índice, dos tipos de fenómenos
En la construcción de los diferentes índice y que pueden ser evaluados con la información
subíndices se utilizó el módulo de Componen- provista por la EMB. Sobre cada uno de ellos
tes Principales Categóricos del programa de se construye un índice: i) las condiciones de
cómputo estadístico SPSS, Versión 18. alimentación y ii) la salud. Esos índices luego
se combinan en uno global. La salud también
2.3.2 se capta a través de dos elementos que dan
Indicadores seleccionados, ponderaciones lugar a sendos índices los cuales, a su vez, se
obtenidas y cálculo de índices mezclan para dar lugar al índice de la sub-di-
por dimensiones mensión en su conjunto: i) el estado de salud y
ii) las protecciones y prácticas para mantener
En la sección se describen los indicadores la salud y evitar la enfermedad.
escogidos para captar las once primeras di-
mensiones de la calidad de vida urbana se- Condiciones de la vivienda
leccionadas. A la capacidad de pago, finalidad
primordial del estudio aquí presentado, se de- Los indicadores para la vivienda, que se han
dicó el capítulo anterior. elaborado a partir de la EMB 2011, compren-
Los indicadores están referidos a los hogares, den la calidad de los materiales de la edifi-
que constituyen aquí la unidad de análisis; y cación y de su estructura, el espacio privado
permiten compararlos y ordenarlos, dando lu- disponible, la cobertura y calidad de los servi-
gar a determinar cuáles de ellos se encuen- cios públicos básicos, y la calidad del entorno
tran en mejor o peor situación respecto a la directo de la vivienda.
calidad de vida.
Las condiciones de la vivienda se inscriben en
Se exponen también, en esta sección, los re- el llamado “derecho a la ciudad” a partir del
sultados generales obtenidos de la aplica- Foro Social Mundial (2001), el Foro Global Ur-
ción de la metodología y los procedimientos bano (2002) y la “Carta Mundial del Derecho
expuestos para llegar a los índices de las di- a la Ciudad” (2004-2005), como expresión no
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

113

sólo del derecho a una vivienda digna; tam- tenencia, calidad y cobertura de los servicios
bién a un ambiente sano y a los bienes y ser- públicos domiciliarios, y condiciones ambien-
vicios urbanos o metropolitanos en condicio- tales del entorno de la vivienda.
nes de equidad. Si bien aún no es reconocido
como un derecho del mismo nivel de los de- Calidad ambiental
rechos civiles, políticos, sociales, ambientales
y económicos, la administración distrital lo ha La calidad ambiental urbana involucra una
adoptado como guía de política (Plan de Desa- amplia gama de variables relacionadas con los
rrollo, Política de Hábitat). recursos naturales y con los efectos y exter-
nalidades negativas sobre el ser humano, la
De hecho, diversas baterías de indicadores economía y, aspectos más subjetivos como, la
de calidad de vida urbana incluyen una ca- cultura o el paisaje.
tegoría con datos espaciales de relativos a la
vivienda, el entorno inmediato y el urbano o De las variables identificadas dentro de la
metropolitano (espacio público, accesibilidad, EMB relacionadas con la calidad ambiental se
seguridad, condiciones ambientales). A nivel estudiaron las directamente relacionadas con
nacional el DNP ha manifestado la convenien- la percepción de calidad de los recursos na-
cia de complementar el índice de condiciones turales, calidad ambiental en el entorno de la
de vida con variables espaciales: “En el futuro vivienda, salud y, movilidad. Para efectos de
se espera adicionar al Índice, el potencial que la medición de calidad ambiental se sinteti-
agrega el entorno al estándar de vida del ho- zaron en tres tipos de variables de la encues-
gar: el medio ambiente, el riesgo (seguridad ta: la primera, relacionada con la percepción
ciudadana) y el acceso a bienes públicos.” frente a las condiciones globales de la ciudad
en cuanto la situación de los recursos natu-
Las nuevas condiciones arriba señaladas mo- rales y el manejo de los mismos; la segunda,
difican también el análisis de la vivienda, con el desarrollo de prácticas ambientalmen-
como elemento central de la calidad de vida te sustentables, que permite inferir actitudes
de los hogares. Esta categoría ha evolucio- constructivas hacia una ciudad sustentable;
nado desde el derecho a una vivienda digna el tercer grupo de variables, relacionadas con
(Vancouver, 1976) hasta el concepto de Há- las afectaciones al ambiente en el entorno de
bitat, que comprende el territorio y sus atri- la vivienda, fueron incorporadas dentro del
butos. “El territorio es, en primer lugar, un componente de vivienda y entorno, dado que
espacio geográfico en el que se despliega la estas constituyen el componente central de la
compleja gama de actividades que desarrollan calidad de vida en la escala barrial e inmediata
los seres humanos” (SDHT, 2007); espacio de la vivienda.
con determinadas características del paisaje
natural y el paisaje construido, y que confor- El índice se construyó a partir de la metodo-
man los denominados entornos inmediato (ca- logía definida para el ICVU, estableciendo dos
racterísticas arquitectónicas de la vivienda y subíndices: Calidad de los Recursos Natura-
de sus servicios internos, características del les y Servicios Ambientales, y Prácticas ami-
barrio o vecindario) y mediato (accesibilidad, gables y sostenibles con el Medio Ambiente,
condiciones de empleo, centros comerciales, arrojando una mayor ponderación a las varia-
equipamientos y espacios públicos urbanos o bles relacionadas con el barrido de las calles y
metropolitanos). Bajo esas consideraciones, la recolección de basuras, y al uso de aparatos
las condiciones de la vivienda son función de sanitarios de bajo consumo de agua. El pro-
las condiciones de habitabilidad, asequibili- grama asigna valores consistentes positivos a
dad, acceso directo, seguridad jurídica de la la valoración sobre mejoramiento de condicio-
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

114

nes ambientales y uso de prácticas ambiental- o no en los equipamientos, parques, colegios,


mente sustentables. bibliotecas, canchas y escenarios deportivos,
supermercados y zonas comerciales que im-
Movilidad urbana plícitamente contiene valoraciones de calidad
física y servicio. La segunda, busca incorporar
La variable de movilidad urbana se ha incor- el criterio de accesibilidad a las dotaciones bá-
porado como determinante de la calidad de sicas, es decir, la relación entre la vivienda y
vida urbana. Dentro del ICVU construido a los equipamientos básicos más cercanos, me-
partir de la EMB, se analizaron las preguntas diada por la relación a pie de tiempos de des-
relacionadas con calidad de la infraestructura, plazamiento mediante movilidad peatonal; la
accesibilidad, tipos de transporte y tiempos de cercanía y la facilidad de acceso, permite me-
viaje; se establecieron como parámetro, los dir los grados de integración de la población
viajes de más alta cotidianeidad (al trabajo y con los servicios sociales y dotaciones urbanas
al estudio), los cuales se traducen en variable básicas.
tiempo. Esta variable sintetiza las condiciones
de funcionamiento del componente a nivel Seguridad ciudadana
de infraestructura, operatividad (transpor-
te y tránsito) y los asocia a la calidad de vida Para el examen y la evaluación de las necesida-
en términos del uso del tiempo, el cual tiene des de protección y seguridad física se toman
afectaciones directas sobre la productividad en consideración tres elementos complemen-
(y por ende sobre el ingreso) y sobre el uso tarios. El primero se refiere al resultado del
del tiempo para actividades como el cuidado estado de seguridad en términos de la victi-
de los niños, la recreación o el esparcimiento; mización a que han sido sometidos los miem-
De manera indirecta, en términos ambienta- bros del hogar en delitos contra la propiedad,
les, mayores tiempos de viaje implican mayo- la vida y su integridad personal. El segundo
res gastos energéticos y externalidades como considera la percepción sobre las condiciones
contaminación. de seguridad del entorno de la vivienda, y el
tercero la apreciación sobre el mejoramiento
Por otra parte, variables de la EMB relacio- de los servicios de vigilancia de la ciudad
nadas con accesibilidad y calidad de las vías
locales fueron incorporadas dentro del índice Trabajo
de vivienda y entorno por cualificar las condi-
ciones de calidad de la vivienda. Los indicadores tomados en consideración
para construir este índice parten de las pre-
De acuerdo con la metodología estadística guntas de la encuesta que permiten determi-
descrita, fueron asignados valores y pondera- nar la situación del hogar en términos de em-
ciones a cada una de las variables. La asigna- pleo, desempleo e informalidad laboral, que
ción corresponde de manera coherente otor- definen los niveles de acceso a la seguridad
gando a menores tiempos de viaje una mayor social y establecen las condiciones de la cali-
calidad de vida. dad de empleo.

Equipamientos y dotaciones urbanas Educación

Con base en la EMB y el marco conceptual Para construir el indicador de educación se


descrito, y luego de valorar diferentes varia- tomó la información relacionada con los gra-
bles, se seleccionaron dos de ellas: la prime- dos de escolaridad de los miembros del hogar.
ra, se relaciona con la percepción de mejoría Este índice se construye por medio de com-
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

115

ponentes principales usando subindicadores • Participación en organizaciones: mide el


para los miembros del hogar, el jefe del ho- grado de participación en organizaciones o
gar y el uso de Internet para fines educativos. asociaciones de los miembro del hogar de
Los subíndices de educación se calculan como 10 años y más; en él se contemplan los ho-
(año de estudio)/(edad -5). La edad se corrige; gares con al menos un miembro de 10 años
de tal manera, a quienes son mayores de 28 y más que pertenece a alguna organización.
años se les coloca una edad de 28. • Red de soporte social o económico: mide el
grado de aprovechamiento de redes sociales
Ocio y recreación por parte de los miembros del hogar de 10
años y más, cuando se presentan problemas
El índice de ocio y tiempo libre se construyó a personales o económicos. Este indicador in-
partir de variables de la EMB que dentro del cluye tanto a los hogares cuya totalidad de
marco conceptual dan cuenta de las condicio- miembros no presentan problemas perso-
nes de acceso a actividades de ocio y a la forma nales como aquellos hogares en donde los
en que se usa el tiempo libre. Se han seleccio- miembros que presentan problemas acuden
nado variables relacionadas con la capacidad a su núcleo primario de asociación. Como lo
de pago destinada a actividades de ocio; en es el hogar, familiares o amigos.
especial frente a entretenimiento, consumo • Cuidado de niños, ancianos y voluntariado:
cultural y viajes, espectáculos culturales y de- mide el grado de apoyo a actividades de eco-
portivos. Por otra parte, se incorporaron varia- nomía del cuidado y voluntariado por par-
bles que no necesariamente se asocian a con- te de los miembros del hogar de 10 años y
sumo y que pueden medir indirectamente la más. Este indicador incluye a los hogares
acción de política en el espacio público, como con al menos un miembro del hogar de 10
las relacionadas con la formación de hábitos años y más que realiza actividades no remu-
saludables dentro del tiempo libre, asociados, neradas como cuidado de niños, ancianos,
mediante actividades deportivas, al uso dado discapacitados y voluntariado.
al tiempo libre por los hogares con actividades
que requieren consumo y otras como activida- Al hacer la primera revisión de los resultados
des de recreación en parques, o caminatas en del ejercicio estadístico, indicador a indicador,
espacios como la ciclovía y los parques. se encuentra que el mayor peso dentro de la
dimensión lo tiene la variable de actividades
Solidaridad y asociación de cuidado no remuneradas; seguido por el
aprovechamiento de las redes sociales y, por
Con el fin de medir esta dimensión, se plan- último, la pertenencia a organizaciones socia-
tean tres indicadores básicos obtenidos de la les.
EMB que relacionan la participación en orga-
nizaciones, el recurso de los hogares a redes No discriminación
sociales primarias al enfrentar problemas de
tipo personal o económico y, finalmente, la Para medir esta dimensión se seleccionaron
participación en labores de cuidado a otros ocho indicadores básicos que relacionan la
miembros del hogar, o a través de volunta- percepción del jefe de hogar sobre temas de
riado indirecto. Los indicadores son: partici- desempeño de organismos públicos, respeto a
pación en organizaciones, disposición de red los derechos humanos e igualdad de oportuni-
de soporte social o económico, y contribución dades para poblaciones específicas.
a actividades de cuidado de niños, ancianos y
voluntariado. En esta dimensión es posible identificar que
el mayor peso es para las percepciones de
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

116

igualdad de oportunidades para personas en Tabla 33


condición de discapacidad, mujeres y adultos Promedios de las dimensiones del ICVU.
mayores respectivamente; mientras que el Bogotá-2011
menor peso es para igualdad de oportunida-
des para la población LGBT, atención en ofici-
nas públicas y reacción de la Policía.

2.3.3
Resultados principales

La relación entre las diferentes dimen-


siones de la calidad de vida

Para su análisis y tratamiento estadístico,


como se señaló, todos los índices parciales de
las dimensiones, obtenidos con la metodolo-
gía expuesta, fueron normalizados para que
sus puntajes variaran entre 0 y 1. El valor uno
expresa la situación en la cual se tienen las
condiciones más favorables y el cero, la que Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011
tiene las peores. Con esta métrica, los prome-
dios de los índices así obtenidos y su distribu-
ción expresan limitaciones importantes en la La dispersión de los valores de los índices da
calidad de vida de los hogares bogotanos. El cuenta de la desigualdad, que es representada
promedio del índice de capacidad de pago es en los diagramas de caja del gráfico 1260. En
de 0,26 y los del indicador de ocio y recreación general, hay una concentración de la mayor
de 0,32, el de calidad ambiental de 0,53, los parte de valores en torno a la mediana de los
de movilidad y no discriminación de 0,51, el índices. En el de capacidad de pago se presen-
de seguridad ciudadana de 0,57 y el de educa- ta una aglutinación de hogares en los valores
ción de 0,59. Por arriba de 0,6 se encuentran inferiores, como se analizó en el capítulo an-
las otras dimensiones (Tabla 33). terior.

60/
El diagrama de caja muestra cinco estadísticos: mínimo, primer cuartil, mediana, tercer cuartil y máximo
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

117

Gráfico 12
Comportamiento estadístico de los subíndices de calidad de vida urbana

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

Este tipo de distribución de los índices lleva a mensiones de vivienda, alimentación y salud,
que su grado de desigualdad, medido a través y solidaridad y asociación; y los más elevados,
de los coeficientes de Gini, sea relativamente las dimensiones en educación, movilidad, no
bajo; exceptuando, de nuevo, el de la capaci- discriminación y seguridad ciudadana (Tabla
dad de pago, cuyo Gini llega a 0,67. Los más 34 y Gráfico 13).
bajos coeficientes se encuentran en las di-
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

118

Tabla 34
Coeficiente de Gini de los índices de las dimensiones de calidad de vida. Bogotá-2011

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

Entre la mayor parte de los índices hay una no llegan a 0,1. Hay, de otra parte, asociacio-
asociación positiva: a medida que crecen (de- nes negativas entre algunos índices y los de
crecen) los valores de uno de ellos tienden a movilidad, y solidaridad y asociación.
aumentar (disminuir) los otros. Sin embargo,
los coeficientes de correlación entre ellos no Estos resultados muestran la interdependen-
son altos. El más elevado se encuentra entre cia entre las dimensiones de la calidad de vida
el índice de seguridad ciudadana y el de con- y, a la vez, su relativa independencia en los
diciones de la vivienda, que llega a 0,42. Los valores que asumen y en los determinantes a
restantes son inferiores a 0,3 y en su mayoría que responden (Tabla 35).
Tabla 35
Matriz de coeficientes de correlaciones entre los índices de las dimensiones de la calidad de vida urbana. Bogotá-2011
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

*Muestra corregida por disponibilidad de datos. Fuente: CID – UN


119
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

120

La interrelación entre los índices se expresa ciación tienen correlación negativa con otras
en la proyección que tienen en un análisis de dimensiones, entre ellas hay diferencias en
componentes principales, donde entran todos sus relaciones con bloques diferentes de
ellos. En la primera componente se contrapo- ellas (Gráfico 13).
nen los índices de movilidad, y solidaridad y • Esta forma de asociación entre los índices de
asociación (SYA), a todos los otros que tienen las distintas dimensiones pone de presente
valores positivos. Y en la componente segunda que no todos ellos varían en el mismo senti-
se diferencian los de educación, ocio y recrea- do. Mientras que unos crecen otros pueden
ción (OYR), trabajo y solidaridad y asociación disminuir por efecto de factores particula-
(SYA), a los restantes, con valores superiores res. Por esta razón, la técnica de componen-
en el eje de la componente (Tabla 36 y Gráfico tes principales no es la adecuada para captar
13). el aporte de las distintas dimensiones a la
calidad de vida y, en este caso, se recurre al
De este análisis pueden extraerse algunas uso del promedio simple de los índices de
conclusiones interesantes: todas las dimensiones.
• Dentro de las dimensiones de la calidad de
vida que son más importantes en los medios Tabla 36

urbanos se encuentran, en el caso particular Análisis de componentes principales de los


índices de las dimensiones de la calidad de
de Bogotá, dos que no están correlaciona-
vida urbana. Bogotá - 2011
das positivamente con las más tradicionales
de educación, salud, vivienda, capacidad de
pago: las de movilidad, y la de solidaridad y
asociación.
• Otras de esas dimensiones más urbanas de
la calidad de vida sí tienen un comporta-
miento acorde con las que son de uso más
general. Ellas son las de calidad ambiental,
ocio y recreación, y seguridad ciudadana.
• La segunda componente muestra una doble
contraposición. De una parte, la que exis-
te entre la movilidad, y el trabajo y la edu-
cación; y, de otra, la que se presenta entre
la movilidad, y la solidaridad y asociación.
Cuando se trabaja o estudia la movilidad es
peor, según la metodología aplicada; y, aun-
que tanto movilidad como solidaridad y aso-

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

121

Gráfico 13
Análisis de componentes principales de los índices de las dimensiones de la calidad de vida
urbana. Bogotá-2011

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

Los índices de las dimensiones de la cali- encuentran otras facetas de la relación entre
dad de vida urbana por estratos dichos índices. Llama la atención que los índi-
ces de solidaridad y asociación, así como el de
Al observar, por estratos socioeconómicos, los no discriminación, a diferencia de los restan-
promedios de los índices de las dimensiones tes, disminuyen a medida que el estrato au-
que conforman la calidad de vida urbana, se menta. (Tabla 37 y Gráfico 14).
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

122

Gráfico 14
Promedio de los índices de las dimensiones de la calidad de vida urbana, por estratos so-
cioeconómicos. Bogotá- 2011

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

Tabla 37
Índices promedios de dimensiones del ICVU por estratos socio-económicos
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

123

El comportamiento del índice de la dimensión El índice de no discriminación, al igual que el


de solidaridad y asociación refleja una moda- de solidaridad y asociación, tiende a disminuir
lidad de las relaciones sociales característica con el aumento del estrato. Como se señaló,
de los estratos socioeconómicos bajos, que a se construye con base en percepciones de los
través de formas de asociatividad encuentran jefes de hogar sobre el desempeño de institu-
apoyos para solucionar los problemas perso- ciones públicas y sobre el para minorías so-
nales o económicos que afrontan. ciales que han sido objeto de discriminación.
Sobre esta base no es posible esperar que ten-
A través de redes sociales informales acceden ga una alta correspondencia con variables de
a personas de contacto cercano, como amigos, diferenciación social como el estrato.
vecinos, familiares u otros miembros del ho-
gar, para facilitar la satisfacción de sus nece- El índice de movilidad mide la percepción
sidades materiales. Y, al mismo tiempo, se re- acerca de tiempos de viaje con mayores des-
fuerzan aspectos referentes a las necesidades plazamientos (estudio y trabajo). Aunque pre-
no materiales de sentido, pertenencia, afecto, senta valores promedio que aumentan con el
amor y realizaciones primarias significativas. estrato, tiene correlación negativa con varios
índices de otras dimensiones (alimentación
Al aumentar el estrato crece la posibilidad de y salud, calidad ambiental, educación, ocio y
cubrir estas necesidades en el mercado dando recreación, trabajo, no discriminación, y soli-
una puntuación promedio inferior del índice daridad y asociación. Tabla 35). Esta situación
en los de niveles más altos. está afectada por dos circunstancias que influ-
yen en los resultados del índice. La primera,
La incorporación en el índice de estas expre- que los hogares sin trabajadores o con traba-
siones de apoyo y asociación permite valorar jadores en la vivienda, en su mayor parte in-
la relevancia que tienen los lazos con redes dependientes, obtienen un mejor índice; aun-
primarias para los hogares con niveles so- que esta situación no lleve a mejores índices
cioeconómicos bajos. Esto lleva a que el índice en otras dimensiones. La segunda, que los ho-
obtenido para esta dimensión no esté correla- gares de los estratos altos son los que gastan
cionado positivamente con los de otras dimen- un mayor tiempo promedio en desplazamiento
siones y con el estrato socioeconómico. al estudio en menores de 35 años, hecho que
se relaciona posiblemente con su localización
frente a los colegios privados y universidades,
y con el uso del vehículo particular (Tabla 38).

Tabla 38
Distribución de personas menores de 35 años que estudian, por estrato y tiempo empleado en
movilizarse al centro educativo. Bogotá - 2011
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

124

El modo de movilización al estudio, en prome- Los índices de las dimensiones de la cali-


dio, se da principalmente a pie en un 47,1% dad de vida urbana por localidades y cla-
dato interesante que muestra una relación ses sociales
cercana de los centros educativos con la po-
blación que va al estudio mayor de 5 años. Los promedios de los índices de las dimensio-
nes por localidades muestran la gran desigual-
Y son localidades con menor nivel socioeconó- dad espacial al interior de la ciudad. Algunos
mico las que usan con mayor frecuencia este índices tienden a guardar el mismo orden
medio de transporte. entre las localidades: capacidad de pago, ali-
mentación y salud, condiciones de la vivienda,
En las localidades de Usme, Tunjuelito, Bosa, seguridad ciudadana, educación. Otros tienen
Kennedy, La Candelaria y Ciudad Bolívar, don- un comportamiento que sugiere la influencia
de se concentra un amplio núcleo de hoga- de factores atados a particularidades locales:
res con bajo nivel socioeconómico, más del calidad ambiental, movilidad, equipamientos
60% de la población escolar usa este modo de (Tabla 39). Así, por ejemplo, las localidades
transporte. que logran el índice mayor en condiciones
ambientales son Fontibón, Engativá y Puente
Aranda, que ocupan una posición intermedia
en otros índices como el de capacidad de pago
(Gráfico 15).
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

125

Gráfico 15
Índice de Calidad Ambiental por Localidad. Bogotá-2011

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

Algo similar ocurre con los promedios de los En otras dimensiones, como el de trabajo el
hogares por posiciones de clase social61 del ordenes diferente, haciéndose evidentes opor-
jefe. En las dimensiones de educación, con- tunidades propias de las condiciones de cada
diciones de la vivienda, alimentación y salud grupo (Tabla 39).
se mantiene un orden que sigue la jerarquía
marcada por el indicador de capacidad de
pago.

61/
Se utiliza la clasificación de posiciones de clase social aplicada en el trabajo de Fresneda 2012: 57 y ss
126
Tabla 39
Promedio de los índices de las dimensiones de calidad de vida urbana por localidades. Bogotá - 2011
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011


Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

127

El índice de calidad de vida urbana Los estadísticos de la distribución de los pun-


(ICVU) tajes del ICVU por estratos socioeconómicos
(Gráfico 16) sustentan esa conclusión. Mien-
El índice promedio de calidad de vida urbana tras que las medianas del índice aumentan
(ICVU) apenas llega a 0.61, lo que muestra li- con el estrato, existen amplias zonas de coin-
mitaciones importantes en términos de capa- cidencia en los valores que asume entre dife-
cidades y libertades de los bogotanos. Las di- rentes estratos. La inclusión de las dimensio-
mensiones que explican este resultado son: la nes adicionales en el índice de calidad de vida
calidad ambiental, la seguridad ciudadana, el urbana, frente a otros de uso común, hace que
ocio y la recreación, la no discriminación y la resuma mayor cantidad y diversidad de infor-
capacidad de pago, que son las que presentan mación para valorar las condiciones de vida de
los valores promedio más bajos en indicadores la población.
relativos al desarrollo y mejoramiento de la
ciudad (Tabla 33). En la tabla 40 se muestran Gráfico 16
los promedios del índice agregado de calidad Diagrama de caja de los puntajes del ICVU
de vida urbana por estrato socioeconómico. por estratos socioeconómicos

Tabla 40
Promedios del ICVU por estratos socioeconó-
micos. Bogotá - 2011

*Muestra corregida por disponibilidad de datos.

Las particularidades del ICVU


Con otros indicadores sucede algo similar. Los
El índice de calidad de vida guarda relación coeficientes de correlación del ICVU con el
con otras variables que expresan los niveles del Índice de Condiciones de Vida (ICV) y con
de vida de los hogares y sus recursos, pero los niveles de ingreso per cápita son positivos
se diferencia claramente de ellas poniendo de pero no presentan niveles muy altos (Tabla
presente el resultado de las diversas dimen- 41). Como lo muestran los gráficos 17 y 18
siones y variables que incorpora. son considerables las distancias de no coin-
cidencia entre los hogares según los valores
del ICVU y los de las otras variables es consi-
derable.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

128

Tabla 41
Matriz de correlaciones del ICVU, el ICV y el ingreso per cápita de las unidades de gasto.
Bogotá - 2011

**Muestra corregida por disponibilidad de datos.

Gráfico 17
Distribución del puntaje promedio de los 12 sub índices sobre el puntaje total acu-
mulado en Calidad de Vida
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

129

Gráfico 18
Distribución del puntaje promedio de los 12 sub índices sobre Ingreso per cápita imputado.

Otro resultado interesante es que al parecer que el índice por estratos. Al parecer existen
en Bogotá existen dos ciudades: la que con- tres grandes grupos de localidades.
forman los estratos 1, 2 y 3; y la opulenta, que
componen los estratos 4, 5 y 6. Esta segmen- El conjunto compuesto por Teusaquillo, Usa-
tación de la ciudad en términos de la calidad quén, Fontibón y Chapinero, con índices que
de vida de los hogares bogotanos exige un re- están por encima de 0.64; el grupo más nu-
planteamiento de las políticas públicas. meroso que incluye a Barrios Unidos, Puen-
te Aranda, Engativá, Antonio Nariño, Suba y
Es urgente que las condiciones de vida urbana Tunjuelito, en los cuales el índice oscila entre
los estratos 1, 2 y 3 mejoren más rápidamente 0.61 y 0.64; y, finalmente, el grupo de la ma-
que la de los estratos 4, 5 y 6; pues, de lo con- yoría: La Candelaria, Kennedy, Santa Fe, Los
trario, el llamado efecto túnel se puede disipar Mártires, Rafael Uribe Uribe, Bosa, Ciudad Bo-
y generar serias tensiones entre la población lívar, San Cristóbal y Usme, en donde el ICVU
de las dos ciudades, deteriorando otros indi- está por debajo del índice de la ciudad (0.61).
cadores como los de convivencia y seguridad.
Una manera para lograr impactos positivos,
La Calidad de Vida por localidades y po- rápidos y permanentes en estas localidades
siciones de clase social podría ser diseñar esquemas de empleo públi-
co que permitieran aumentar la capacidad de
En el grafico 2.8 se muestran los promedios pagos de los hogares. Con ello, el ICVU me-
del ICVU por localidad. Esta radiografía de la joraría directamente y es muy probable que
ciudad muestra un patrón algo más complejo otros indicadores críticos también lo hicieran.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

130

Gráfico 19
Índices promedios de calidad de vida urbana por localidad

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

En el grafico 20 se muestra el ICVU por cla- trabajos con mayor calificación, y en las esca-
se social del jefe del hogar. Claramente, los las superiores de las jerarquías laborales, tie-
hogares que poseen derechos de propiedad nen los mejores indicadores de calidad de vida
sobre un activo (capital, capital humano o ri- en la ciudad.
queza financiera) y los que se encuentran en
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

131

Gráfico 20
Índices promedios de Calidad de Vida Urbana por clase social del jefe del hogar
Bogotá - 2011

Fuente: Cálculos del CID a partir de la EMB-2011

En efecto, los directivos, los profesionales y En la actualidad, los sectores de servicios pe-
técnicos y los empleados tienen índices por san mucho más en el PIB, mientras que las
encima del total de la ciudad (0.61). Vale la empresas del sector industrial poco a poco se
pena resaltar que el índice para los obreros in- han desplazado hacia fuera de la ciudad.
dustriales está por debajo del total de Bogotá.
Ello puede estar reflejando los cambios de la
estructura productiva de la ciudad.
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

132

CONCLUSIONES

El objetivo central de este estudio fue calcular hogares con mayor incidencia de no capa-
el Índices de Capacidad de Pago (ICP) y el Ín- cidad de pago son aquellos cuyos jefes son
dice de Calidad de Vida Urbana (ICVU) para la empleados domésticos (42.4%), obreros
Bogotá a partir de la información aportada por (29.9%), desocupados e inactivos (25.5%) y
la Encuesta Multipropósito de 2011. Los prin- trabajadores independientes (23%), mien-
cipales resultados se resumen a continuación: tras que los de menor incidencia son los
hogares con jefe patrón (5.6%), profesio-
1. En Bogotá, el porcentaje de hogares sin nales independientes (6.8%) y pensionados
capacidad de pago es del 18.9% del total, (7.8%).
que corresponde a un poco más de 414.167
hogares. Ciudad Bolívar y Usme son las lo- 4. La proporción de los hogares sin capacidad
calidades donde hay una mayor proporción de pago en la ciudad de Bogotá tiende a dis-
de hogares sin capacidad de pago ya que minuir. Pasando de 30.1% en 2003 a 28%
en ellas la proporción es de más del 40%, en el 2004 y a 18.9% en el 2011. Estos re-
le siguen San Cristóbal, Rafael Uribe Uribe sultados muestran una importante reduc-
y Bosa con más de 30%. En contraste, las ción a lo largo de los últimos ocho años. Di-
localidades donde hay menos hogares sin cho patrón se podría explicar en parte por
capacidad de pago son Teusaquillo, Chapi- las políticas distritales dirigidas a atender
nero, Usaquén, Barrios Unidos, Fontibón y a la población en condiciones de pobreza y
Puente Aranda. vulnerabilidad, así como por el cambio de
fase del ciclo económico colombiano, que
2. En el estrato 1, el 52.2% de los hogares no se evidencia con claridad por la reducción
tienen capacidad de pago; en el 2, este por- de la tasa de desempleo y la recuperación
centaje es de 29.6%; y en el 3, es de 8.5 %; del crecimiento económico en la ciudad y
mientras que en los estratos 4, 5 y 6 este en la economía colombiana entre 2004 y
porcentaje es de cero o cercano a cero. El 2011.
alto porcentaje de hogares sin capacidad de
pago en el estrato 1 sencillamente refleja 5. La reducción de los hogares sin capacidad
otra cara de la pobreza. Sin embargo, como de pago se presenta en prácticamente todas
lo muestran los datos, hogares no pobres las localidades de la ciudad. Sin embargo,
también pueden carecer de capacidad de entre 2004 y 2011 aumentan ostensible-
pago. Puede decirse que un hogar pobre mente en La Candelaria, Usaquén, Chapi-
carece de capacidad de pago, en tanto que nero y Usme. Lo mismo ocurre en Bosa, Ba-
lo contrario no necesariamente es cierto: rrios Unidos, Rafael Uribe y Ciudad Bolívar,
existen hogares no pobres que carecen de entre 2003 y 2004. Es importante anotar
capacidad de pago. que en las localidades donde se concentra
el mayor porcentaje de hogares sin capaci-
3. De acuerdo al sexo del jefe del hogar, la dad de pago -como lo son Ciudad Bolívar,
incidencia de la no capacidad de pago es San Cristóbal, Tunjuelito Kennedy y Rafael
un poco mayor en los hogares con jefatura Uribe- el indicador muestra una reducción
masculina (19.1% contra 18.7%). En cuanto importante y continua entre 2004 y 2011.
a la posición ocupacional, se tiene que los
Medición y Análisis del índice de calidad de vida urbana

133

6. Se observa una alta correlación entre la ciudad. Este indicador está por encima de
tasa de desempleo por localidad y la exis- 0.6 para todos los estratos.
tencia de hogares sin capacidad de pago.
Por ello, una de las acciones que debe em- 8. Otro resultado interesante es que al pare-
prender la Secretaría de Desarrollo e Inte- cer en Bogotá existen dos ciudades: la pri-
gración Social es promover esquemas de mera la conforman los estratos 1,2 y 3 y
empleo público con el fin de reducir la tasa la otra ciudad, la opulenta la componen los
de desempleo en las localidades más afec- estratos 4,5 y 6. Esta segmentación de la
tadas por este problema y con ello reducir ciudad en términos de la calidad de vida de
el número de los hogares sin capacidad de los hogares bogotanos exige un replantea-
pago. Los esquemas de buffer de empleo miento de las políticas públicas. Es urgente
son una buena alternativa de política social que las condiciones de vida urbana para los
eficiente e incluyente para Bogotá. Aunque estratos 1,2 y 3 mejoren más rápidamente
existen restricciones de orden financiero que la de los estratos 4,5 y 6, pues de lo
para que una política de este tipo se imple- contrario el llamado efecto túnel se puede
mente en Bogotá de manera generalizada, disipar y generar serias tensiones entre la
es posible en principio establecer un esque- población de las dos ciudades, deteriorando
ma parcial para localidades como Ciudad otros indicadores como los de convivencia y
Bolívar, Usme, Rafael Uribe, San Cristóbal seguridad.
y Bosa.
9. Los hogares que poseen derechos de pro-
7. El índice promedio de calidad de vida ur- piedad sobre un activo (capital, capital hu-
bana (ICVU) apenas llega a 0.54, lo que mano o riqueza financiera) tienen los me-
muestra un déficit importante en términos jores indicadores de calidad de vida en la
de capacidades y libertades de los bogo- ciudad. En efecto, los directivos, los pro-
tanos. Las dimensiones que pueden estar fesionales y técnicos, los empleados y los
explicando este resultado son: la calidad campesinos tienen índices por encima del
ambiental, la seguridad ciudadana, el ocio total de la ciudad (0.54). Vale la pena re-
y la recreación, la no discriminación y la ca- saltar que el índice para los obreros indus-
pacidad de pago. Este resultado no es sor- triales está por debajo del total de Bogotá.
prendente. De hecho, dichas dimensiones Ello puede estar reflejando los cambios de
son las que presentan los valores prome- la estructura productiva de la ciudad. En la
dio más bajos en términos de desarrollo y actualidad, los sectores de servicios pesa
mejoramiento en la ciudad. Sorprende, sin mucho más en el PIB, mientras que las em-
embargo, el alto valor del índice de movi- presas del sector industrial poco a poco se
lidad, 0.73, máxime cuando en los últimos han desplazado hacia fuera de la ciudad.
años se han presentado graves atrasos en
las grandes obras de infraestructura en la
Calidad de Vida Urbana y Capacidad de Pago en los hogares bogotanos – 2011

134

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