Artritris

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 5

enfermedad inflamatoria crónica de carácter autoinmune y etiología desconocida que

tiene como órgano diana principal las articulaciones diartrodiales.

En la mayoría de los casos produce destrucción articular progresiva con distintos grados
de deformidad e incapacidad funcional.
Con frecuencia tiene manifestaciones extraarticulares en las que puede resultar afectado
cualquier órgano o sistema

La artritis reumatoide tiene distribución universal y su incidencia varía entre el 0,68 y el


2,9%, con una prevalencia que oscila entre el 0,3 y el 3% de la población, según los
distintos países.

Las mujeres sufren la enfermedad tres veces más que los hombres; sin embargo, en las
formas seropositivas y erosivas de la enfermedad esta desigualdad desaparece.
La artritis reumatoide puede aparecer a cualquier edad, pero es más frecuente entre la
cuarta y la sexta décadas de la vida.

Etiopatogenia

Existe una predisposición genética a padecer la enfermedad. Así lo indica la tendencia a


la agregación familiar, la elevada concordancia para la AR en los gemelos
monocigóticos y la asociación significativa con algunos antígenos de
histocompatibilidad.

La asociación más significativa en los enfermos de raza blanca es con el HLADR4, el


cual se considera además un marcador de gravedad de la enfermedad.

La activación de los linfocitos T implica el reconocimiento del antígeno asociado al


HLA( antígeno leucocitario humano)

El antígeno provoca una respuesta inmune en el huésped, de la cual se deriva una


reacción inflamatoria.

Los macrófagos y las células dendríticas tienen, entre otras, la función de procesar el
antígeno y presentarlo a los linfocitos T a su vez activan clonas de linfocitos
B(especializadas del sistema inmune que juegan un papel importante en la
respuesta humoral, el principal mecanismo de defensa contra patógenos)

Sintomatología

Sintomatología articular

poliartritis que suele afectar a las extremidades superiores, produciendo una


artritis simétrica del carpo y de las articulaciones interfalángicas proximales
Suelen aparecer dolor y rigidez matutina (siendo éste un dato muy típico cuando se
prolonga por más de 10 minutos y aparece tras el reposo prolongado o tras el descanso
nocturno

tumefacción y sensibilidad anormal de las articulaciones enfermas

Hallaremos también signos inflamatorios como enrojecimiento y aumento del calor


local

También es posible el desarrollo de una deformidad en boutonnière, con luxación dorsal


de la articulación, o una deformidad «en cuello de cisne»,

La afectación de las extremidades inferiores se localiza fundamentalmente en


el pie.

El tobillo (que duele al explorar la pronosupinación) puede verse afectad0 con mayor
frecuencia, aunque no tanto como la alteración del antepie, donde suelen aparecer las
primeras erosiones.

Pueden aparecer entonces luxación de las cabezas de los metatarsianos

En ocasiones pueden afectarse los tendones del tibial anterior, peroneos o el tendón de
Aquiles cuando se desarrollan nódulos reumatoides en su seno, pudiendo incluso llegar
a romperse.

te limitación para el paciente. La sinovitis en el hombro es difícil de apreciar, siendo


frecuente la lesión del manguito de los rotadores, apreciándose subluxación superior de
la glenohumera

La rodilla y la cadera pueden presentar signos y síntomas de artritis, refiriéndonos


al ritmo (inflamatorio) del dolor y a la existencia de derrame sinovial

La rodilla, sometida a la presión de la sinovial puede ser objeto de una evaginación


posterior de la membrana, originándose un quiste de Baker, que puede ser muy doloroso
y se puede romper, cayendo su contenido (líquido sinovial) a lo largo de la porción
posterior de la pierna, y produciendo un cuadro que remeda a una tromboflebitis

En la columna podemos hallar alteraciones de los segmentos que presentan


membrana sinovial, y debemos ser cuidadosos en este aspecto, ya que puede afectarse la
articulación atloaxoidea, que en ocasiones se puede luxar, presentando entonces un
cuadro grave y de difícil solución

Sintomatología extraarticular

es posible encontrar una afectación inespecífica del estado general, que cursa con
febrícula, malestar general, pérdida de peso moderada, así como una mayor frecuencia
de infecciones
Los nódulos reumatoides aparecen hasta en el 30% de los casos, y suelen desarrollarse
en zonas de presión, es decir, en sacro, antebrazo y en el codo, sobre el olécranon;
aunque también es frecuente observarlos en el tobillo o en el espesor de tendones,
(tendón de Aquiles)

Dentro de las manifestaciones cardíacas, la más frecuente es la presentación de


una pericarditis, que en ocasiones puede manifestarse como taponamiento cardíaco
(afortunadamente de no muy frecuente presentación),

Cuando aparece afectación miocárdica debemos pensar en la aparición de una de las


complicaciones de la AR, que es el depósito de amiloide.

La vasculitis suele aparecer en AR muy pasadas, de muchos años de evolución e


indica enfermedad grave. Su espectro clínico es muy extenso, desde pequeños infartos
en los dedos, hasta vasculitis sistémicas o incluso áreas de gangrena.

La afectación pulmonar más frecuente es la aparición de derrame pleural, cuyo


análisis demuestra una disminución de las diversas fracciones del complemento, una
elevación de la LDH, disminución de la glucosa y niveles de factor reumatoide
superiores que en suero

El riñón es uno de los órganos más frecuentemente afectados en la AR y, además, su


grado de afectación puede condicionar el pronóstico en estos enfermos

Son también frecuentes las neuropatías por atrapamiento, como el síndrome del túnel
del carpo.

La afectación del SNC, cuando aparece, es debida a la compresión producida por


una posible subluxación atlo-axoide.

Diagnóstico
El diagnóstico de la AR se debe realizar basándose en la historia clínica, la exploración
radiográfica y los hallazgos de laboratorio, después de descartar otras enfermedades

Historia clínica

e observa dolor articular de ritmo inflamatorio, con rigidez matutina prolongada


(muchas veces superior a 30 minutos), aumento de temperatura e impotencia funcional
de varias articulaciones (poliartritis), en forma simétrica, durante un período mayor de
dos meses.

Radiología

El primer hallazgo es un aumento de las partes blandas a expensas de la hipertrofia


sinovial y el derrame articular.
En el hueso yuxtaarticular se produce radiolucencia debido a osteopenia

Pruebas de laboratorio

Trastornos hematológicos.
Es habitual la presencia de anemia normocrómica y normocítica, típica de los procesos
inflamatorios crónicos y que mejora cuando se controla la actividad de la enfermedad

Reactantes de fase aguda


no son específicos de la artritis reumatoide, ayudan a su diagnóstico y, sobre todo, son
muy útiles para el seguimiento de la enfermedad y el control de la eficacia del
tratamiento
Las principales determinaciones son la velocidad de sedimentación globular (VSG), la
proteína C reactiva (PCR) y el aumento de la fracción α2 -globulina en el espectro
electroforético (proteinograma).

Factor reumatoide.
Son inmunoglobulinas dirigidas contra determinantes antigénicos localizados en el
fragmento Fc de las inmunoglobulinas IgG2 e IgG3 humanas.

Anticuerpos antinucleares. Se detectan en un 10-25% de los pacientes, sobre todo en


los seropositivos (factor reumatoide positivo) o entre los que padecen síndrome de
Sjögren secundario. N

También podría gustarte