RESUMEN - Vitale - La Semiotica de Pierce

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La semiótica de Peirce

La semiótica de Peirce constituye una teoría de la realidad y del conocimiento que podemos
tener de ella por el medio exclusivo del que disponemos los signos. El único pensamiento
que puede conocerse es pensamiento en los signos y un pensamiento que no pueda
conocerse no existe, todo pensamiento debe existir necesariamente en los signos. Dicho
de otro modo, no podemos pensar sin signos.

Para Peirce la semiótica es equiparable a la lógica y tiene por objeto de estudio a la


semiosis. La semiosis, el instrumento de conocimiento de la realidad, es siempre para
Pierce un proceso triádico de inferencias lógicas mediante el cual a un signo (llamado
representamen) se le atribuye un objeto a parlir de otro signo (llamado interpretante) que
remite al mismo objeto y es una experiencia que cada uno hace en todo momento de su
vida.

Si alguien ve en la puerta de un negocio la imagen de una cruz color verde


(representamen), por ejemplo, comprende que allí hay una farmacia (objeto) a partir
de un proceso semiótico de inferencia que consiste en que el primer signo
(representamen) despierta en su mente otro signo, como la palabra "farmacia"
(interpretante), que lo lleva a conectar el primer signo (representamen) con el objeto
farmacia

El signo
El signo en Peirce recibe el nombre técnico de representamen. El representamen es una
"cualidad material" (una secuencia de letras o de sonidos, una forma, un olor, un olor, etc.)
que está en el lugar de otra cosa o se refiere a ella, su objeto, de modo que despierta en la
mente de alguien un signo equivalente o más desarrollado al que se denomina
interpretante, que aclara lo que significa el representamen y que a su vez representa al
mismo objeto, sólo con referencia a una suerte de idea, el fundamento del representamen.

REPRESENTAMEN

OBJETO INTERPRETANTE

Esta definición implica que existen tres condiciones para que algo sea un signo:
● Condición necesaria pero no suficiente: El signo debe tener cualidades que sirvan
para distinguirlo.
● Condición necesaria pero no suficiente: El signo debe tener un objeto, aunque la
relación del representamen con el objeto no basta para hacer de uno el signo de
otro. Para ello es necesario un interpretante
● Condición necesaria y suficiente: La relación semiótica debe ser triádica
El interpretante
Es otro signo mental, que se refiere al mismo objeto que el representamen y que puede
asumir diversas formas. Es la traducción de un signo en otro signo, que se corresponde con
el significado del primer signo.

Pierce distingue tres interpretantes de un signo:


● El interpretante inmediato (posibilidad)
Es el interpretante pensado como el concepto o significado que comporta todo signo
independientemente de su contexto y de las circunstancias de su enunciación. El
interpretante inmediato permite relacionar el signo con un objeto sin considerar una
situación comunicativa concreta en la que dicho signo aparezca: se trata de una
abstracción y de una posibilidad.

● El interpretante dinámico (hecho)


El interpretante dinámico es un efecto particular producido por el signo en un "aquí y
ahora" que lo vuelve un acontecimiento singular y real, este efecto provocado por el
signo en un acto de comunicación específico puede ser de naturaleza diversa.

● El interpretante lógico final (ley)


Presupone a los otros dos tipos de interpretantes. El interpretante final es el
interpretante pensado como un hábito que hace posible la interpretación recurrente y
estable de un signo. Por un lado, se trata del hábito que consiste en atribuir a un
representamen un objeto y, por otra parte, del interpretante que despierta la
unanimidad de los eruditos en un campo del conocimiento.
El interpretante final es la regularidad en la disposición a actuar en el mundo y a
intervenir en las cosas que un signo despierta en su intérprete.

El interpretante inmediato (el interpretante como concepto), el interpretante dinámico


(el interpretante como efecto real en el intérprete) y el interpretante final (el
interpretante como hábito) son tres instancias de la interpretación de un signo que
funcionan simultáneamente en un acto de semiosis.

El principio del pragmatismo


El pragmatismo consiste para Peirce en considerar que el significado lógico de los
conceptos se encarna en hábitos generales de conducta (La estufa como objeto que
calienta un ambiente, por ejemplo, desarrolla el hábito de conducta que consiste en prender
una estufa cuando hace frío; o de estufa como objeto caliente en no tocarla cuando está
encendida).
Desde este punto de vista, el pragmatismo sostiene que lo que nosotros pensarnos debe
ser entendido en términos de aquello que estamos dispuestos a hacer, por lo que Peirce
plantea que la lógica, lo que debemos pensar, debe aplicarse en la doctrina de lo que
decidimos deliberadamente hacer y, por consiguiente, una aplicación de la ética.

El objeto
Para que algo sea un signo debe 'representar', a otra cosa, llamada su Objeto. Este se
encuentra en lugar de otro y es tratado por otra mentes como si se fuera ese otro. Además,
el Objeto es aquello acerca de lo cual el Signo presupone un conocimiento para que sea
posible proveer información adicional sobre el mismo
Un Signo puede tener más de un Objeto (como una oración o un texto). Pero puede
considerarse que el conjunto de Objetos constituye un único Objeto complejo.

Peirce distingue en el objeto dos tipos:


● Objeto inmediato (interior a la semiosis): es el Objeto tal como es representado
por el Signo mismo, y cuyo Ser es dependiente de la Representación de él en el
Signo. (El planeta Venus, por ejemplo)
● Objeto dinámico (exterior a la semiosis): es la Realidad que, por algún medio,
arbitra la forma de determinar el Signo a su Representación. El objeto dinámico tiene
una existencia independiente respecto del signo que lo representa pero para que el
signo pueda representarlo, este objeto debe ser algo conocido para el intérprete, es
decir, debe tener de él un conocimiento colateral que es el resultado de semiosis
anteriores (Por ejemplo, el planeta Venus, pero llamado “Lucero del alba” o “Lucero
vespertino” segun la epoca del año)

El Fundamento
El signo representa a su objeto "no en todos los aspectos, sino sólo con referencia a una
suerte de idea", se le llama fundamento del representamen. Dicho fundamento es uno o
varios rasgos o atributos de un objeto que permiten identificarlo, es decir, los rasgos
distintivos que lo diferencian de otros objetos.
Es el fundamento del representamen lo que construye al objeto inmediato, es decir que el
signo instituye al objeto inmediato por medio del fundamento.

Humberto Eco:
Afirma que el fundamento es "un atributo del objeto en la medida en que dicho objeto se ha
seleccionado de determinada manera y sólo algunos de sus atributos se han elegido como
pertinentes para la construcción del objeto inmediato del signo".
Plantea que el fundamento es un componente del significado del signo, entendido como la
suma de rasgos semánticos que caracterizan su contenido. Esto es así porque estos
rasgos, como 'humano', 'femenino', 'adulto' para el significado del signo "mujer", son a su
vez los rasgos distintivos, atributos que diferencian al objeto mujer de otros objetos, es
decir, el fundamento de dicho signo. Para Eco el fundamento, el significado y el
interpretante de un signo son una misma cosa, ya que es imposible definir al fundamento si
no es en cuanto significado, y definir algún significado como no sea en forma de una serie
de interpretantes.

La semiosis infinita
Peirce afirma que un signo es cualquier cosa que determina a otra cosa (su interpretante) a
referirse a un objeto al cual ella también se refiere (su objeto) de la misma manera,
deviniendo el interpretante a su vez en signo y así sucesivamente hasta el infinito.
Un signo no está aislado, sino que
integra una cadena de semiosis: cada
signo es a la vez interpretante del que
lo antecede e interpretado por el que le
sigue. Como todos los pensamientos
son signos, también se remiten unos a
otros; y a su vez, todo conocimiento
está determinado por otros
conocimientos.

Sin embargo, hay que tener en cuenta


que la semiosis es virtualmente infinita,
por eso hay que distinguir entre la
semiosis infinita y la denominada “semiosis en acto", que le pone un término provisional a la
cadena cuando un interpretante final designa el objeto de un representamen en un acto
semiótico particular.

Las ramas de la semiótica


El hecho, dice Peirce, de que cada representamen se conecte con tres cosas (el
fundamento, el objeto y el interpretante) hace que la ciencia semiótica tenga tres ramas:

1. La gramática pura: Su finalidad es averiguar qué es lo verdadero en el


representamen utilizado por toda inteligencia científica como para que aquel pueda
encamar un significado = ¿Como debe ser el representamen para poder encarnar al
significado?
2. La lógica propiamente dicha: Es la ciencia formal de las condiciones de verdad de
las representaciones = ¿En qué sentido es verdadero que un representamen esté en
lugar de un objeto?
3. La retórica pura: Determina las leyes mediante las cuales, un signo da nacimiento a
otro y, especialmente, un pensamiento da nacimiento a otro pensamiento La retórica
pura concierne así al aumento "lógico" del conocimiento.

Las categorías
Las tres categorías que postula Peirce son tres modos de ser del fanerón (entendido por
Peirce como "todo lo que está presente en la mente, del modo o en el sentido que sea,
corresponda a algo real o no"), en otras palabras, tres puntos de vista sobre él. Peirce
sostiene que todos los fanerones (o ideas) pueden ser pensados desde tres categorías: la
Primeridad, la Segundidad y la Terceridad.

❖ La categoría de primeridad implica considerar a algo tal como es sin referencia a


ninguna otra cosa; a su vez, la primeridad se vincula con las ideas y las cualidades;
consiste en pura posibilidad. En el signo, el representamen (cualidad) se
corresponde con la categoría de primeridad = DOLOR
❖ La categoría de segundidad implica considerar a algo tal como es pero en relación
con otra cosa, que no involucre a una tercera cosa. Peirce vincula la categoría de
segundidad con la idea de existencia y del hecho, momento concreto y real. En el
signo, el objeto se corresponde con la categoría de la segunda, la de
existencia, pero si nos limitamos a la relación diádica entre un primero (el
representamen) y un segundo (el objeto) nos encontraríamos ante una relación
sin regularidad. = DOLOR DE MUELAS
❖ La categoría de terceridad es la que hace posible la ley y la regularidad. En el
signo, el interpretante se corresponde con la categoría de terceridad, pues
constituye una ley que pone en relación a un primero (el representamen) con
un segundo (el objeto) con el que él mismo está en relación = NEGRO COMO
SIGNO DE DUELO

El interpretante, incorpora una auténtica relación triádica, pues establece:


A. La relación del primero (representamen) con el segundo (objeto);
B. Su propia relación con el segundo (objeto);
C. El hecho de que la relación entre el primero (representamen) y el segundo (objeto)
es la misma que la del segundo (objeto) con el tercero (interpretante).

Los tres constituyentes de la semiosis, son a su vez tricotomizados por Peirce sobre la base
de las tres categorías faneroscópicas, a partir de lo que se obtienen nueve tipos de signos:

Signo en relación a PRIMERIDAD SEGUNDIDAD TERCERIDAD

REPRESENTAMEN Cualisigno Sinsigno Legisigno

OBJETO Icono Índice Símbolo

INTERPRETANTE Rema Dicente Argumento

Tipos de signo
El examen faneroscópico permite dividir al representamen en cualisigno, sinsigno y
legisigno. Estos son clasificados conforme a la propia naturaleza material del
representamen

➔ Cualisigno: Corresponde a la categoría de la primeridad porque es una cualidad (un


color, una forma, una textura, etc.) que en sí misma es una mera posibilidad hasta
que se manifieste en un sinsigno (un signo existente)
➔ Sinsigno: Corresponde a la categoría de segundidad porque es una cosa o un
evento real y verdaderamente existente que es un signo. Puede serlo únicamente a
través de sus cualidades; de modo tal que involucra a un cualisigno o a varios y
cobra significado gradas a un Legisigno (un tipo general del que es la manifestación)
Pero esos cualisigno son de una naturaleza peculiar y sólo forman un signo cuando
están efectivamente formulados o encamados.
➔ Legisigno: Corresponde con la categoría de terceridad porque es una ley que es un
signo entendido como un tipo general integrado en un sistema organizado. El
legisigno vuelve significante a los sinsignos, las manifestaciones "aquí y ahora" del
legisigno. Todo signo convencional es un legisigno (pero no recíprocamente). No es
un objeto único sino un tipo general que, como se ha acordado, será significante.
Cada legisigno significa por medio de una instancia de su aplicación, que puede ser
llamada una réplica de él.
Ícono, índice y símbolo
Las categorías de primeridad, segundidad y terceridad aplicadas al objeto permiten obtener
tres tipos de signos denominados iconos, índices y símbolos. Peirce afirma que la división
en iconos, índices y símbolos depende de las diferentes relaciones posibles de un
Signo con su Objeto Dinámico.

➔ Icono: Un icono es un signo que entabla una relación de semejanza, de analogía,


con su objeto, como una fotografía o un dibujo; se trata, de un signo puramente por
similitud con cualquier cosa a la cual sea parecido. En tanto primeridad, un ícono es
un representamen que por su cualidad es similar a su objeto, aquello a lo que
sustituye.
Los Iconos son clasificados por Peirce de acuerdo con el modo de primeridad que
comparten con su objeto en:
◆ Las imágenes: son los íconos que comparten cualidades simples del objeto,
como su color, su forma, su tamaño, etc.
◆ Los diagramas: son los iconos que comparten relaciones de las partes de su
objeto por medio de relaciones análogas entre sus propias partes, es decir,
existe en el ícono una analogía entre las relaciones·de las partes del
representamen y las del objeto.
◆ Las metáforas: es un tipo de icono porque implica una relación de similitud.
Ya sea entre referentes o entre contenidos, siempre se trata de una relación
de semejanza que hace posible la metáfora.

Peirce dice que la única manera de comunicar una idea directamente es mediante un
ícono; de ahí la importancia del uso de los íconos en textos didácticos y en las
comunicaciones, que buscan la simplificación y la rapidez en la interpretación de los
mensajes.
Aclara que un signo sigue siendo un ícono aun cuando el objeto al que representa no
existe, característica que sí poseen los índices.

➔ Índice: Es un signo que entabla con el objeto una relación existencial, de modo que
participan los dos de una misma experiencia (es un signo que se refiere al Objeto
que denota siendo realmente afectado por aquel Objeto)
Para Peirce, los índices se distinguen de los íconos y de los símbolos por tres
rasgos característicos:
1. Carecen de todo parecido significativo con su objeto.
2. Se refieren a entes individuales, unidades individuales, conjuntos unitarios de
unidades o continuidades individuales.
3. Dirigen la atención a sus objetos por una compulsión ciega.

La acción de los índices depende de asociaciones por contigüidad, y no de


asociaciones por parecido (como en los íconos) o de operaciones intelectuales (como
en los símbolos). Sin embargo, es difícil encontrar un signo que sea solamente un
índice, lo mismo que reconocer un signo que esté absolutamente desprovisto de
cualidad indicial.
En la lengua, Peirce considera también como índices a los cuantificadores porque
informan al receptor como debe escoger uno de los objetos y que el receptor tiene
libertad para seleccionar cualquier instancia de su preferencia dentro de los límites
expresados; asimismo, los nombres propios también son índices.

➔ Símbolo: es un signo que se refiere a su objeto dinámico por convención, hábito o


ley; usualmente una asociación de ideas generales que operan de modo tal que son
la causa de que el Símbolo se interprete como referido a dicho Objeto. Por otra
parte, los símbolos se caracterizan porque denotan clases de objetos, a diferencia
de los índices, que se refieren a un existente particular.
Cualquier palabra común puede ser un símbolo. (pájaro, matrimonio) Es aplicable a
cualquier cosa que pueda realizar la idea conectada con la palabra pero, en sí
misma, no identifica cosas. Para que pueda hacerlo el símbolo debe combinarse con
un índice. (este pájaro, nuestro matrimonio)
El Símbolo es un tipo general o ley: un Legisigno, como tal, actúa a través de una
Réplica. No sólo es general en sí mismo; también el Objeto al que refiere es de
naturaleza general.

Peirce hace hincapié en que pensamos sólo mediante signos mentales que tienen
una naturaleza mixta (intervienen símbolos, iconos e índices) y vincula los símbolos
con los conceptos (las ideas generales a las que se refiere en su definición de
símbolo) afirmando que la parte simbólica de nuestro pensamiento son los
conceptos.
En la semiosis infinita, los símbolos remiten a otros símbolos. Pero esta semiosis es
social y es histórica, ya que el significado de los símbolos se modifica con el tiempo
y con el uso.

Rema, dicente, argumento


Mediante la división faneroscópica del interpretante, se obtienen tres tipos de signos rema,
dicente y argumento

➔ Rema: En tanto primeridad, un rema es todo signo considerado aisladamente, que


en sí mismo no es ni verdadero ni falso, como casi todas las palabras, con
excepción de "sí" y "no". De esta manera. todos los nombres comunes
(correspondiente a una clase = Perro, animal) y los nombres propios (propiamente
dicho = Snoopy, Silvestre) son remas.
➔ Dicente: Se ubica en la categoría de segundidad, que es la de la existencia. Se
corresponde con una proposición, para su interpretante, es un signo de existencia
real.
A diferencia del rema, que no es ni verdadero ni falso, la proposición, que está en
relación real con el objeto, será verdadera o falsa.
➔ Argumento: Se corresponde con lo que denominamos comúnmente un
razonamiento, es todo un proceso de pensamiento que tiende razonablemente a
producir una creencia definida, con la la función de inducir al intérprete a cambiar su
pensamiento.
Un argumento debe involucrar a signos dicentes o premisas. La conclusión de un
argumento es un interpretante y lo representa como una instancia de una clase
general de argumentos que en su conjunto tiende a la verdad.

Los argumentos son tricotomizados en tres tipos según la clase de inferencia en la que se
basen: abductivos (abducción), deductivos (deducción) e inductivos (inducción).

La combinación de las tres dicotomías


La combinación de los signos obtenidos mediante la tricotomía del representamen , del
objeto y del interpretante se obtienen 10 clases de signos:

1. Cualisigno remático icónico


2. Sinsigno remático icónico
3. Sinsigno indicial remático
4. Sinsigno indicial dicente
5. Legisigno ícónico remático
6. Legisigno indicial remático
7. Legisigno dicente indicial
8. Símbolo remático legisigno
9. Símbolo dicente legisigno
10. Argumento SImbólico legisigno

Conocimiento de la realidad y tipos de inferencia


Dado que un conocimiento remite a otro conocimiento y que el objeto del signo es también
un signo pensado en semiosis anteriores, Pierce dice que cuando el pensamiento está
determinado por un pensamiento previo del mismo objeto se refiere sólo a la cosa
denotando este pensamiento previo. La semiosis infinita no es, por lo tanto, una propiedad
exclusiva del conocer, sino además y al mismo tiempo una propiedad de lo real.

Para Peirce el mundo no depende de nosotros y de nuestra intención de interpretarlo.


Distingue entre las cogniciones verdaderas y las falsas, las primeras son cogniciones cuyos
objetos son reales y las segundas tienen objetos irreales. Lo real es el consenso de una
comunidad (comunidad ideal, sólo guiada por el razonamiento lógico y el método
científico) sobre lo que es considerado públicamente verdadero y que determina
hábitos de conducta.

La comunidad homogénea de que habla Peirce, "tiende indefinidamente a la verdad" porque


para él la ciencia es siempre prospectiva y la cadena de semiosis implica un aumento del
conocimiento sobre el objeto representado. Sin Embargo, reconoce que toda creencia es
provisoria y está sujeta a una crítica continua.

No tenemos ninguna concepción de lo incognoscible, por ello lo que se piensa en las


cogniciones verdaderas es lo real. Es un real que solo existe en un acto de pensamiento
que lo conoce pero este no es un pensamiento arbitrario o accidental dependiente de una
idiosincrasia cualquiera, sino uno que persiste en opinión final.

En cuanto al modo como conocemos, Peirce rechaza la idea del conocimiento surgido
mediante la intuición, afirmando, por el contrario, que todo conocimiento surge de un
proceso de inferencia. Y postula tres tipos lógicos de inferencia que hace corresponder
con las categorías de primeridad, segundidad y terceridad:

● Abducción: consiste en elaborar una conjetura, en plantear una hipótesis explicativa


como base de un razonamiento, de una clase amplia. La abducción no brinda
ninguna certeza, pero se justifica porque es "la única esperanza de pautar
racionalmente nuestra conducta futura". Se corresponde con la categoría de
primeridad, y también con la iconicidad,puesto que la hipótesis está basada en
una cualidad y en la semejanza.

Alguien ve sobre la mesa unas papas que son todas blancas, entre diversas
bolsa, que hay en la habitación sólo una contiene papas blancas, por lo tanto
-infiere- las papas que están sobre a mesa fueron sacadas de esta bolsa

Estas papas son blancas→RESULTADO


Todas las papas de esta bolsa son blancas→REGLA
Estas papas salieron de esta bolsa→CASO

● Inducción: Presupone que es verdad de todo un conjunto lo que es verdad de un


número de casos del mismo, tomados aleatoriamente". Se corresponde con la
segundidad y la indicialidad, pues las premisas manifiestan una
correspondencia fáctica y la conclusión se establece sobre la base de esa
relación indicial.

Estas papas fueron sacadas de esta bolsa, todas estas papas son blancas;
por lo tanto todas las papas de esta bolsa son blancas

Estas papas salieron de la bolsa→CASO


Estas papas son blancas→RESULTADO
Todas las papas de la bolsa son blancas→REGLA

● Deducción: Se corresponde con la terceridad y con el símbolo porque en este


tipo de inferencia el punto de partida es una ley general

Todas las papas de esta bolsa son blancas, estas papas fueron sacadas de
esta bolsa, estas papas son blancas.

Todas las papas de la bolsa son blancas→REGLA


Estas papas salieron de la bolsa→CASO
Estas papas son blancas→RESULTADO

Peirce se opone la idea de la primacia de la inducción en el proceso de conocimiento, pues


con la inducción no puede generar una idea nueva (ni tampoco la deducción). Por ello
plantea que todas las ideas novedosas de la ciencia nacen de la abducción, cuyo fruto es la
postulación de una ley.
Todo conocimiento, constituye un proceso hipotético-deductivo-experimental compuesto de
tres momentos a los que les corresponde un tipo de inferencia:
1. abducción, que plantea una hipótesis sin fuerza
2. deducción, que extrae de la hipótesis diversas consecuencias
3. inducción, que pone a prueba dichas consecuencias, con lo que se verifica o no la
hipótesis

Peirce y el post-estructuralismo
El estructuralismo se convierte en una serie de proyectos sistemáticos y científicos, toman
la lingüística como modelo y tratan de desarrollar “gramáticas” que explicarían la forma y el
significado de las obras literarias.
Y sus oponentes son son diversos disidentes Post-Estructuralistas que afirman la
imposibilidad final de sus proyectos y exploraciones; investigan las formas en que se
subvierte este proyecto a causa de los funcionamientos propios de los textos.

Derrida: Post-Estructuralista
Se opone a un concepto de interpretación basado en la idea de un significado definitivo
atribuible a un texto, vinculado con la intención de un sujeto o con el referente que
representa. Por el contrario, un texto es concebido como una máquina significante que
produce un infinito diferimiento del significado, que nunca logra fijarse. Un texto produce así
una deriva infinita de interpretaciones, ninguna de las cuales es concluyente.
Apelando a Peirce, a la idea de semiosis infinita y a sus reflexiones sobre el carácter de
signo del objeto representado, Derrida sostiene que la "cosa misma" (el llamado "referente")
es siempre un representamen inserto en la cadena de semiosis ilimitada, por lo tanto "No
existe nada fuera del texto"

Eco:
Critica a Derrida y dice que no se pueden considerar equivalentes la deriva deconstructivista
y la semiosis infinita, ni tampoco plantear, que ante la ausencia de la intención del autor y
del referente, la lectura es un proceso de libre asociación. Para fundamentar su crítica a
Derrida, Eco desarrolla los siguientes argumentos:
● No es válido basarse en la teoría de Peirce para afirmar que no existe nada fuera del
texto, puesto que Peirce mismo sostiene que toda semiosis está determinada por un
objeto dinámico que es "la Realidad que de alguna manera contribuye a determinar
al signo"
● El interpretante final detiene el proceso sin fin de la interpretación
● Cualquier comunidad de intérpretes de un texto determinado, para poder ser la
comunidad de intérpretes de ese texto, debe alcanzar un acuerdo
● Gracias a esta interpretación determinada se crea un significado que está
privilegiado respecto de cualquier otra interpretación obtenida sin consenso de la
comunidad.
● La semiosis es virtualmente ilimitada, pero nuestras facultades cognitivas organizan,
encuadran y reducen esta serie indeterminada e infinita de posibilidades.

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