La Cultura Corporativa y Los Valores de La Empresa.
La Cultura Corporativa y Los Valores de La Empresa.
La Cultura Corporativa y Los Valores de La Empresa.
LA CULTURA CORPORATIVA
1. DIMENSIONES DE LA RSE
Los autores Carroll (1991), Aguilera y Puerto (2012) y Peña y Serra (2012) plantean la
responsabilidad social empresarial bajo cuatro dimensiones consideradas como las
principales funciones de la empresa: dimensión económica (se debe cumplir), dimensión
legal (se tienen que cumplir), dimensión ética (se deberían cumplir) y dimensión filantrópica
(se podrían cumplir).
Lisboa (2019) se refiere a los valores de una empresa son los propósitos que
orientan las actitudes de sus colaboradores y los mantienen vinculados a objetivos
comunes. Además, estos valores son la máxima expresión de la misión y visión de
una empresa.
Están formados por todos esos principios éticos y profesionales sobre los cuales
basamos todas las actividades dentro de la empresa, que evidencian de una manera
u otra, la identidad y espíritu de la misma. Podríamos decir, son los rasgos de la
personalidad de la compañía que, resumidos de manera simple y concisa, se usan
para transmitirle a propios y terceros la ruta que los fundadores o directivos han
decidido tomar. La manera más simple de «elegirlas» es preguntarse quién es y en
qué cree el dueño de la compañía, cómo responde ante situaciones de crisis y cómo
quiere que su entorno lo defina. De esta manera, se puede ir trazando esa
personalidad y lograr determinar los valores de una empresa. Además, como
estrategia de mercadotecnia la identidad corporativa es fundamental para definir
aspectos como el público objetivo, tono del mensaje, necesidades, entre otros.
Por lo tanto el Lisbo (2019) afirma que existen 9 valores empresariales que todos los
negocios deben cultivar:
2. Calidad: Vivimos en un mundo donde todos dicen que tienen los mejores
productos del mercado. Pero una cosa es afirmarlo y la otra es garantizarlo. Los
productos deben cumplir con los parámetros establecidos y prometidos, que sólo
pueden ser cercanos a la perfección.
4. Pasión: Pocas cosas atraen más a clientes que ver personas que disfrutan lo que
hacen. Por ello, el tener la pasión como valor de una empresa, servirá para crear y
mantener la emocionalidad al tope y transmitir esa motivación al exterior.
5. Competitividad: Tener la meta clara que sólo te puedes conformar estando en la
cima, es un valor que muy pocos logran llevar a la práctica.
Tu empresa solo puede ser la mejor solo si se exige lo mejor. Cuando esto sucede,
la moral, la pasión y la motivación nunca faltarán y el crecimiento de la organización
es una consecuencia natural.
Pero esto no llega hasta aquí, los valores de una empresa están ligadas a los
principios personales de las cabezas de la compañía. Por ello, también pueden
considerarse valores como libertad, resiliencia, lealtad, solidaridad, entre otros.