Dolo e Imprudencia

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ESTUDIANTE:

Ana Etelinda Brizuela

CATEDRATICO:
Abg. Juan José Ayala

CLASE:
Derecho Penal I

TRABAJO:
Resumen de Dolo e Imprudencia
DOLO E IMPRUDENCIA

En el campo del derecho penal, por ejemplo, los errores cometidos por los tribunales de todo

el mundo, al imputar la responsabilidad por la práctica de un delito, han sido evidentes. Y esto

se debe a que después de verificar el tipo penal, surge la necesidad de indicar la modalidad de

imputación, es decir, la exigencia legal de indicar si el agente infractor actuó con dolo o

imprudencia. Si actuó imprudentemente, es necesario indicar si fue consciente o

inconscientemente. Si la imprudencia fue inconsciente, no hay mayores dificultades, sin

embargo, si fue consciente, es necesario indicar la modalidad de la imprudencia consciente, ya

sea gravísima, grave o leve. Esta es la estructura de la teoría significativa de la imputación,

cuyos fundamentos se presentaron en el libro fundamentos de la tkorfa significativa de la

imputación.

DOLO:

El dolo es la realización de una acción que suponga un daño o perjuicio a otro, debiendo

realizarse dicha acción de manera voluntaria. El dolo consiste en cometer un delito de manera

deliberada, con intencionalidad y sabiendo las consecuencias que puede traer consigo dicho

acto delictivo.

¿QUÉ ES EL DOLO?

Es la conciencia y voluntad de una persona para realizar una o varias acciones que supongan

un daño o perjuicio a otra persona.

Para entenderlo mejor, el autor del hecho, quería cometer dicha acción y la consecuencia de la

realización de esta acción es el perjuicio a la otra persona.


A partir del dolo los delitos se pueden agrupar en delitos dolosos y delitos no dolosos.

Por ejemplo, una persona va a una tienda de bisutería y coge un collar, se lo mete en el abrigo

y se va sin pagarlo. Esto es un delito doloso de hurto. Es doloso porque cuando cogió el collar

ya sabía que se iba a ir sin pagarlo y además es consciente de que al hacerlo la tienda tendrá

una pérdida económica.

Aunque casi todos los delitos van a ser considerados dolosos hay algunos casos de delitos

por imprudencia que no deben considerarse dolosos.

Un ejemplo de delito no doloso sería un atropello con resultado de muerte porque el conductor

no vio a una persona que cruzaba por donde no debía. La acción se debió a una imprudencia y

no a una acción voluntaria y premeditada para causar dicho daño.

CLASES DE DOLO

Dolo directo de primer grado

El autor de la acción provoca un daño de manera voluntaria. El resultado de esta acción es el

fin que quería conseguir el autor.

Ejemplo: Una persona fuerza la puerta de una casa para entrar a robar y se lleva un jarrón chino

de incalculable valor que sabía que estaba en esa casa.


Dolo directo de segundo grado

El resultado de la acción que el autor realiza no es el fin último planeado por dicho autor, pero

este sabe que se producirá, pues esta acción es necesaria para conseguir el fin planeado. En un

mismo acto se pueden cometer múltiples delitos dolosos.

Ejemplo: El resultado de forzar la puerta de la casa es romper la cerradura y, romper dicha

cerradura es necesario para poder entrar a robar el jarrón chino, que es el fin último de las

acciones que el autor está realizando.

DOLO EVENTUAL

Se produce cuando el autor no descarta que se pueda producir algún tipo de daño derivado de

la acción que va a realizar, pero, aun así, realiza la acción. Por lo tanto, el daño derivado de la

acción puede ocurrir o puede no ocurrir, sin que el autor esté seguro de ello antes de realizar la

acción.

Se cataloga igualmente de delito doloso a este tipo de delitos, aunque se haya producido de

manera eventual.

Ejemplo: Unos ladrones de bolsos van subidos en una moto y por el método del tirón van a

robar el bolso a una señora mayor. Es probable que al tirar del bolso con la moto en marcha

puedan tirar a la señora y hacerla daño. Aun así, deciden tirar del bolso y finalmente la señora

cae y se golpea con la acera.


IMPRUDENCIA:

Se entiende por imprudencia toda imprevisión, negligencia, impericia, falta de reflexión o de

cuidado que causa igual daño que un delito intencional, o bien, como la define la doctrina,

la falta de previsión de un acto previsible.

La imprudencia se ha definido como aquel cuidado y diligencia, como aquella atención que

puede exigirse al menos cuidadosa, atenta o diligente, pudiéndose presentar en ésta tanto

la culpa consciente como la culpa inconsciente, siendo más prudente el realizar

una conducta sin haberse preocupado por los peligros que podrían ocurrir.

LA IMPRUDENCIA EN DISTINTAS ACCIONES

La imprudencia suele reflejarse en conductas que ponen en peligro a uno mismo y/o a otras

personas. Un hombre que conduce a alta velocidad en una ciudad y sin frenar en los cruces está

actuando con imprudencia ya que podría provocar un accidente de gravedad. La persona que

realiza un trabajo en las alturas sin arnés ni ningún tipo de sujeción también está cometiendo

una imprudencia.

Cuando se habla de los errores que ha podido cometer un sanitario en el ejercicio de su labor y

que pueden traer consigo consecuencias para sus pacientes se habla de imprudencia y de

negligencia. En ocasiones, hay quienes los usen como sinónimos, pero son diferentes.

DIFERENCIAS CON LA NEGLIGENCIA

Así, una negligencia médica, por ejemplo, se produce cuando el profesional no actúa de

acuerdo a las normas de su profesión y tampoco acorde a las habilidades y destrezas que como

tal tiene.
Por el contrario, la imprudencia tiene lugar cuando dicho profesional realiza una acción de

forma temeraria poniendo en serio peligro la recuperación o la propia vida del paciente en

cuestión.

En el terreno del derecho, la imprudencia se asocia a la culpa, provocada por la omisión de una

diligencia necesaria para prever los efectos de la acción. Cuando la culpa resulta grave y no

puede excusarse, se trata de una imprudencia temeraria.

La imprudencia, en este marco, es punible cuando implica la existencia de una negligencia por

parte de aquel que no tomó las debidas precauciones. Al accionar sin prudencia y de manera

inexcusable, la persona imprudente comete un delito.

Supongamos que un muchacho lleva en su motocicleta a sus tres hijos menores de edad, todos

ellos al igual que él sin casco. Al girar en una calle, pierde el control del vehículo y los niños

caen al suelo, sufriendo diversas heridas. El conductor puede ser juzgado por su imprudencia,

ya que debió prever el riesgo de trasladar a sus hijos de ese modo.

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