Las glándulas salivales incluyen glándulas mayores como las parótidas, submaxilares y sublinguales, las cuales secretan saliva de forma merocrina a la cavidad bucal. También incluyen glándulas menores distribuidas en la mucosa bucal como las labiales, genianas, palatinas y linguales. La saliva contiene agua, proteínas como la amilasa salival y componentes inorgánicos que ayudan a humedecer, proteger y digerir alimentos en la boca.
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Las glándulas salivales incluyen glándulas mayores como las parótidas, submaxilares y sublinguales, las cuales secretan saliva de forma merocrina a la cavidad bucal. También incluyen glándulas menores distribuidas en la mucosa bucal como las labiales, genianas, palatinas y linguales. La saliva contiene agua, proteínas como la amilasa salival y componentes inorgánicos que ayudan a humedecer, proteger y digerir alimentos en la boca.
Las glándulas salivales incluyen glándulas mayores como las parótidas, submaxilares y sublinguales, las cuales secretan saliva de forma merocrina a la cavidad bucal. También incluyen glándulas menores distribuidas en la mucosa bucal como las labiales, genianas, palatinas y linguales. La saliva contiene agua, proteínas como la amilasa salival y componentes inorgánicos que ayudan a humedecer, proteger y digerir alimentos en la boca.
Las glándulas salivales incluyen glándulas mayores como las parótidas, submaxilares y sublinguales, las cuales secretan saliva de forma merocrina a la cavidad bucal. También incluyen glándulas menores distribuidas en la mucosa bucal como las labiales, genianas, palatinas y linguales. La saliva contiene agua, proteínas como la amilasa salival y componentes inorgánicos que ayudan a humedecer, proteger y digerir alimentos en la boca.
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Las glándulas salivales son glándulas exocrinas con secreción de tipo merocrina, que
vierten su contenido en la cavidad bucal. Tienen a su cargo la producción de saliva y su
secreción, la cual humedece y protege la mucosa bucal. La saliva ejerce un papel importante en acciones criogénicas e inmunológicas, así como en la digestión de alimentos y en la fonación. La secreción de cada glándula salival presenta características diferentes, en la cavidad oral las secreciones se mezclan y constituyen lo que se denomina saliva mixta. Esta saliva bucal es viscosa, contiene prácticamente un 99% de agua y su pH se encuentra entre 6.8 y 7.2, que es el pH óptimo para que pueda actuar la ptialina, proteína que explicaré con posterioridad. Algunos autores consideran que la saliva mixta debe llamarse fluido bucal, ya que además de los componentes aportados por la saliva, contiene lucocitos, células epiteliales bucales descamadas, microorganismos y sus productos. Los principales constituyentes de la saliva, además del agua son los componentes proteicos y glicoproteínas; se trata de varias familias de moléculas salivales tales como la amilasa salival o ptialina, mucinas, lisozimas, IgAs, proteínas acidicas ricas en prolina, cistatinas, histatinas, estaterinas y en menor cantidad están las eritropoyetina, catalasas, peroxidasa y lactoperoxidasa entre muchas otras. La saliva también contiene componentes orgánicos no proteínas que vendrían siendo la urea, ácido úrico, colesterol, AMP cíclico, glucosa, citrato, lactato, amoniaco, creatina, etc. Y por último están los componentes inorganicos que son el sodio, potasio, calcio, cloruros, fluoruros, tiocianatos, fosfatos, bicarbonatos, etc. La estimación del volumen de la salivo que producen las glándulas salivales humanas pueden llegar a ser de 1.5 litros por día. Las glándulas salivales se clasifican, de acuerdo a su tamaño e importancia funcional, en glándulas salivales mayores y menores. Las glándulas salivales mayores son mas voluminosas y constituyen verdaderos órganos secretores. Se trata de tres pares de glándulas localizadas fuera de la cavidad oral, que desembocan a ella por medio de sus conductos principales. Se denominan respectivamente: parótidas, submaxilares y sublinguales. Las glándulas parótidas son las glándulas salivales mas grandes, se ubican a cada lago de la cara, en la celda parotídea por detrás del conducto auditivo externo. El extremo inferior de cada glándula contacta con un tabique fibroso que la separa de la glándula submaxilar. El conducto excretor principal de las parótidas, llamado conducto de Stenon, se abre en una pequeña papila de la mucosa del carillo, a la altura del primer o segundo molar superior. Las glándulas submaxilares son glándulas de tamaño medio. Se localizan en el triangulo submandibular por detrás y por debajo del borde libre del musculo milohioideo y desemboca a través de su conducto principal que es el conducto de Wharton en las carúnculas sublinguales, a cada lado del frenillo lingual. Las glándulas sublinguales son las mas pequeñas de las glándulas salivales principales. No son propiamente gladulas de localización extraoral por que se encuentran ubicadas profundamente en el tejido conectivo del piso de la boca, entre éste y el músculo milohioideo. No se trata de un par de glándulas, dado que a cada lado hay una glándula mayor y varias más pequeñas con sistemas ductales propios. El conducto excretor principal es el conducto de Bartholini, que desemboca en la carúncula sublingual muy próximo al conducto de Wharton de las glándulas submaxilares. Las glándulas salivales menores se encuentran distribuidas en la mucosa y submucosa de los órganos del sistema bucal. Se designan de acuerdo a su ubicación como: labiales, genianas, palatinas y linguales. Las glándulas labiales están constituidos por numerosos acumulos acinares, cada uno provisto de pequeños y cortos cordones excretores que se abren en la cara interna de los labios. En estas glándulas los conductos estriados, de diferentes longitudes, presentan células con escasas estriasciones basales. Las glándulas genianas o bucales, comprenden dos grupos: las genianas o yugales que son distribuidas por toda el área de la mejilla y las retromolares localizadas cerca de la desembocadura del conducto de Stenon en la región de los molares superiores. Contienen unidades mucosas, serosas y mixtas. Se ubican en la profundidad de la mucosa y algunas se mexclan con los haces de fibras musculares de la región. Las glándulas palatinas son numerosas unidades glándulas que constituyen, según su localización, tres grupos diferentes, que se ubican en la mucosas de: a) paladar duro b) paladar blando y la úvula y c) el pliegue glosopalatino (glándulas glosopalatinas). Los conductos excretores de estas pequeñas glándulas se abren a cada lado del rafe palatino. En el paladar blando existen glándulas mixtas con un importante componente seroso que se abren hacia la superficie nasal, mientras las glándulas que desembocan en la mucosa oral son predominantemente mucosas y forman masas mas voluminosas Las glándulas palatinas, como los otros tipos de glándulas menores de la variedad mucosa, cumplen una función protectora, tanto a nivel local, como por su aporte de mucinas a la saliva total. Las glándulas linguales se caracterizan por presentar tres grupos de formaciones glandulares y son: las glándulas linguales anteriores, tambien llamadas de Blandin y Nuhn; las dorsoposteriores o de Weber y las glándulas serosas de Von Ebner. Las glándulas de Blandin y Nuhn son dos masas glandulares voluminosas, constituidas por numerosos islotes de acinos localizados entre los adipocitos y los haces musculares de la región de la punta de la lengua. Las glándulas de Weber son formaciones glandulares bilaterales básicamente mucosas, que se localizan en la zona dorsal de la raíz lingual. Sus conductos desembocan en el fondo de las criptas amigdalinas linguales. La secreción de estas glándulas cumple una función mecánica y defensiva, limpia dicha cripta, evita la acumulación de restos celulares y la proliferación de microorganismos. Las glándulas de Von Ebner son un grupo impar de pequeñas masas glandulares que se distribuyen en el dorso y bordes laterales de la lengua, en la región de la V lingual. Sus conductos excretores desembocan en el surco circunvalado de las papilas caliciformes y en el pliegue que separa a cada papila foliada de su vecina. Cumplen un papel importante al limpiar surcos y eliminar los restos de alimentos y las células descamadas. Al mismo tiempo, la secreción de estas glándulas renueva y disuelve las partículas responsables del sabor, para que puedan llegar a los poros de los botones gustativos, los cuales son muy abundantes en esos dos tipos de papilas linguales.