FOLOSOFOS
FOLOSOFOS
FOLOSOFOS
A los pocos años de vida queda huérfano de padre, su vida de infante estuvo marcada por la
pobreza y los sacrificios maternos para poder sobrevivir y mantenerse, a pesar de contar con
parientes bastante acomodados, como los paternos; sin embargo, en medio de las penas
lograron afincarse como una familia de respeto y reconocimiento dentro de la sociedad
Sololateca.
A los 21 años de edad se casa con la profesora María del Socorro Ovalle, luciana de origen, a
quien conoció trabajando en San Juan la Laguna, misma que lo acompañara durante toda la
vida en su calidad de esposa, con ella procreó seis hijos: Carlos, Alfonso, Julio, Leonel, Antonieta
y Antonio.
Miembro del comité de redacción del proyecto de convención regional sobre el reconocimiento
de estudios y de diplomas de estudios superiores en América Latina y el Caribe de la UNESCO,
San José de Costa Rica, 21-28 de enero 1974.4
Parte a Estocolmo, donde anima un grupo de personas de la tercera edad y desarrolla talleres
de creatividad artística.
Creador de la antropocinética, aplica el término para analizar el mestizaje a través de la
creación estética en América Latina, desde la conquista hasta nuestros días.
Jaime Díaz Rozzotto fue un filósofo de origen guatemalteco
nació en Quetzaltenango, Guatemala, el 12 de diciembre de 1918. En
1937 obtuvo el Diploma de maestro de la Escuela Normal de Guatemala y
el examen de Bachillerato. Asistió a la Escuela de medicina durante dos
años, de donde fue expulsado por organizar una huelga contra los
métodos de enseñanza retrógrados. En 1944 participó en la revolución
contra Jorge Ubico, quien gobernó el país al servicio de los Estados
Unidos. Una huelga general expulsa al tirano el 25 de junio de 1944, y el
presidente democrático Juan José Arévalo es elegido, luego Jacobo Arbenz
Guzmán que implementa un programa revolucionario, en particular con la
realización de la reforma agraria. En 1951 Díaz Rozzotto se graduó en
Filosofía en la Universidad de San Carlos de Guatemala, luego obtuvo la
calificación para la educación secundaria. Después de ser redactor jefe del
Diario de Centroamérica, presidente del partido Renovación Nacional y magistrado del tribunal
electoral, fue nombrado Secretario General de la presidencia de la República en el Gobierno de
Arbenz. Con la invasión americana de 1954, se estableció un régimen neoliberal militarista que
borró todo el trabajo de los diez años (1944 - 1954) de la revolución del 20 de octubre de 1944.
Díaz Rozzotto es exiliado a México. En 1959, obtuvo un doctorado en filosofía cum laude por la
Universidad Autónoma de México, con una tesis sobre el carácter de la revolución en
Guatemala, y tiene la cátedra de Profesor de filosofía y sociología. Regresa clandestinamente a
Guatemala y permanece allí durante siete años, escondido de sus compañeros comunistas y del
pueblo guatemalteco. Es galardonado con la Cátedra de historia de la filosofía y la lógica en la
Universidad San Carlo de Guatemala (Quetzaltenango), pero, siempre oculto, sus conferencias
se difunden en cintas pregrabadas. Entonces la persecución se hace más dura con el gobierno
golpista del Presidente Peralta Asurdia. Díaz Rozzotto luego llegó a la Unión Soviética; colaboró
con el Instituto de América Latina de la Academia de Ciencias de Moscú y el Instituto de
Ciencias Sociales Para economía, política y filosofía. A su regreso a México, ocupó la Cátedra de
Filosofía de la ciencia, historia de la filosofía y filosofía política en la Universidad de Michoacán;
fue arrestado en 1966 y acusado de conspiración contra el Gobierno Mexicano. Después de ser
torturado, es entregado al gobierno guatemalteco y encarcelado en la ciudad de Guatemala,
donde es amenazado de muerte. Un movimiento de solidaridad en Guatemala y en toda
América Latina le permitió salir de la cárcel y viajar a Francia desde 1967. Es profesor de historia
y literatura latinoamericana en la École des Hautes Études de l''Amérique Latine, luego en el
CNRS, en París. Durante dieciocho años ocupó la Cátedra de Profesor de historia y literatura
latinoamericana en la Universidad de Franca Condado. Participó en la labor de la UNESCO de
1974 a 1984, como representante del movimiento mundial por la paz y del Partido Laborista
Guatemalteco, el único partido de la revolución que quedó en la clandestinidad. Después de su
retiro en 1987 vivió siempre en Marchaux, cerca de Besançon, sin interrumpir su actividad
como filósofo, escritor, poeta, crítico hasta su muerte el 29 de octubre de 2011.
José Cecilio del Valle nació el 22 de noviembre de 1777 en la villa de Jerėz
de Choluteca (actual Ciudad de Choluteca, honduras ) una comunidad
localizada a orillas del río del mismo nombre hoy parte de la República de
Honduras. Sus padres fueron don José Antonio Díaz del Valle y de doña
Gertrudis Díaz del Valle, criollos, de buena posición económica, y
terratenientes dedicados a la agricultura y ganadería. Otros parientes
cercanos de José del Valle además de la ganadería se dedicaron a la política.
Su bisabuelo, José Díaz del Valle, quien llegó a tener en sus haciendas más
de dieciséis mil cabezas de ganado, fue alférez mayor y regidor perpetuo de
Choluteca, y de origen andaluz. En su escudo familiar llevaba una leyenda
que decía "El que más vale no vale tanto como vale Valle". Su primo Dionisio de Herrera fue
Jefe de estado de Honduras (1824) y de Nicaragua (1830). Hijo de Paula Díaz del Valle y de Juan
Jacinto Herrera y Rivera quien también fue Teniente de Milicias y alcalde Mayor de
Tegucigalpa.6
Los padres de José Cecilio del Valle, deseosos de educar a su hijo de la mejor manera y no
encontrando en la provincia de Honduras un centro adecuado, se trasladaron a Nueva
Guatemala, capital del Reino de Guatemala, en 1789. "La situación de Guatemala en cuanto a la
vida moral y literaria aventajaba por mucho a la de Honduras".4 Aun así, la enseñanza era
subdesarrollada ya que esta, se encontraba casi paralizada debido a la influencia de las
instituciones de la colonia. Según José Milla y Vidaurre " Las doctrinas atrevidas que en Europa
habían producido una transformación completa en las ciencias morales y políticas, apenas eran
conocidas en Guatemala. Esta era la situación del Reino, cuando Valle hacia el aprendizaje, de
las primeras letras. Eso fue hasta que hombres como: Rayon, Villaurrutia y el costarricense, José
Antonio de Liendo y Goicoechea entre otros, se propusieron reformar el plan de estudio en
Guatemala. A los 12 años de edad, el joven José asistió por un tiempo a la escuela de los
hermanos betlemitas y posteriormente al Colegio Tridentino con el fin de aprender latín. Al
terminar en la escuela primaria, José del Valle, se convirtió en discípulo de Goicochea. Este le
abrió la puerta, y "despejó las vías que Valle debía recorrer como hombre de ciencias y letras".4
En 1791 ingresó a la Universidad de San Carlos, donde estudió Derecho Civil y Canónico. Se
graduó de bachiller en filosofía en 1794. En 1795 falleció su madre, lo que lo llevó a interrumpir
sus estudios. En 1803 obtuvo el título de abogado y comenzó a ejercer su profesión de
inmediato. Continuó sus estudios sobre Idiomas, Derecho, Economía, Ciencias Naturales,
Políticas, Finanzas, Historia, Geografía, y Matemáticas.8 El 12 de octubre de 1812, contrajo
matrimonio con Josefa Valero Morales, originaria de Comayagua. El 2 de marzo de 1834, "en un
camino desierto, yermo, e inhóspito, en donde se levantaban enormes nubes de polvo, y en
donde el sol calcinaba con sus rayos la humanidad de los caminantes, rodeado únicamente por
su familia y los arrieros", falleció Don José Cecilio del Valle. El enfermo, tuvo tiempo de pedir los
auxilios del confesor, y dijo, entre otras cosas, a su Capellán "Padre, conozco que ya estoy en el
último periodo de existencia, y necesito de los auxilios espirituales para devolver mi alma al
Creador que me la dio.
Vicente Alberto Masferrer Mónico (Alegría, antes Tecapa, 24 de julio de
1868-San Salvador, 4 de septiembre de 19323) fue un maestro, filósofo,
periodista, ensayista, poeta y político salvadoreño. Como escritor marcó
con sus letras toda una época de la literatura salvadoreña a través de la
definición de su pensamiento inclinado a la defensa de los más desposeídos
y de denuncia social.
Alberto Masferrer nació en Tecapa, hoy llamada Alegría, en el
departamento de Usulután, una población del oriente de El Salvador, de
origen pipil y dominado posteriormente por los lencas. Su padre no se casó
con su madre. Su educación fue autodidacta en combinación con educación formal. Su gusto
por la lectura le llevó a escoger la docencia como carrera. Al respecto, Arturo Ambrogi
expresaba: «Pocas veces he visto un lector tan tremendo como Alberto».
Entre 1928 y 1930 fundó y dirigió el periódico Patria, en el cual hacía denuncia social y abogaba
por la justicia para con los más necesitados en el marco de la pobreza generalizada del país.
Trabajó en periódicos y revistas nacionales e internacionales, fue redactor de los diarios El
Chileno y El Mercurio, de Santiago de Chile; el semanario La Reforma, diario Los obreros unidos;
en las revistas La República de Centroamérica, Actualidades, Bibliográfica Científico-Literaria, El
Simiente y otros.
Inició su carrera política al ser nombrado cónsul de El Salvador en Argentina (1901), Chile
(1902), Costa Rica (1907) y Bélgica (1910),6 así como en la Corte Internacional de Justicia en
1912;4 además se desempeñó como archivero de la contaduría mayor de la nación en
sustitución del señor don Juan de Dios Iraheta por el acuerdo ejecutivo del 17 de diciembre de
1889,7 redactor y director del Diario Oficial (1892),8 Secretario del Instituto Nacional (1890) y
Asesor del Ministerio de Instrucción Pública (1916).4 Bajo la premisa fundamental de la lucha
pacífica por los derechos de cada individuo, se convirtió en el ideólogo y director de la campaña
política que en 1930 llevó a la presidencia al ingeniero Arturo Araujo. Ese mismo año fue
elegido como diputado nacional, y se separó políticamente del presidente y de sus posturas.2
Ejerció la docencia en Guatemala, El Salvador, Honduras, Costa Rica, Chile y Argentina, siendo
bautizado como «maestro y director de multitudes» por Claudia Lars.2
Como escritor, su obra se caracterizó fundamentalmente por tratar temas sociales,9 exigiendo
un mínimo de derechos para cada persona, dignificando al ser humano a través del uso de
palabras fundamentalmente duras, polemizando sobre las costumbres socialmente
aceptadas.10 Utilizó ocasionalmente el seudónimo "Lutrin".4
Tras su derrota política y moral por el estallido de la violencia que trató de contener, se exilió
en Honduras, pero falleció víctima de su endeble salud y por parada cardiorrespiratoria en San
Salvador.
FILOSOFOS CENTROAMERICANOS
Algunas de sus obras son ¿Ha muerto la filosofía?; Gotas de amor y de filosofía; Hagamos el
amor. (Filosofía para esposos enamorados); Pensamiento filosófico; Diario íntimo de un
sacerdote; Diccionario de salvadoreñismos; El castellano en El Salvador; Poemas existenciales y
meditatio mortis; Filosofía de Andrés Bello, e Historia de la Filosofía en El Salvador.