Seres de Otra Dimension - Segura, Miguel Angel
Seres de Otra Dimension - Segura, Miguel Angel
Seres de Otra Dimension - Segura, Miguel Angel
Querido lector, deseo de todo corazón darle las gracias por haber
tomado la decisión de leer este libro. Sin su complicidad, nada sería
igual.
A MODO DE INTRODUCCIÓN
La existencia del mundo espiritual es algo obvio para quienes
hemos investigado este tema, como lo es también para usted, ya
que ha decidido leer este libro y, por tanto, intuyo que cree que
existen otras dimensiones.
LA NOVELA
EL PSIQUIÁTRICO
Estuve trabajando como vigilante de seguridad en un psiquiátrico.
Lo cierto es que durante este tiempo descubrí un mundo asombroso
que antes obviaba. No se lo van a creer amigos lectores, pero he
descubierto que existen otras dimensiones donde habitan seres no
corpóreos que son inteligentes, los cuales actúan en nuestro mundo
sin que la mayoría de nosotros seamos conscientes de ello.
Nos enfrentamos, por tanto, a un peligro real y que afecta a multitud
de personas en todo el planeta. No vayan a ser ilusos y creer que
las víctimas están todas encerradas en un hospital psiquiátrico o
bajo tratamiento médico, porque no es así; la mayoría de las
personas que viven bajo el flujo de estos seres, ni siquiera son
conscientes de ello. El 99% de los afectados jamás ha pisado un
psiquiátrico ni ha sido tratado por enfermedades mentales. Aun así,
viven sometidos a estas fuerzas espirituales malignas, a las cuales
denomino: «seres de otra dimensión».
***
compañeros
, decidí tomarme unas vacaciones, ya que uno de
ellos era mi cuñado.
Entré a las ocho de la mañana, para cubrir el turno diurno, hasta las
ocho de la tarde.
Tengo que decir que las jornadas eran de doce horas, pues
trabajábamos una semana entera y teníamos otra de fiesta. Este
dato es importante, ya que el tiempo libre que tuve durante las
semanas de descanso me sirvió para indagar en ciertas cuestiones
que pronto conocerán.
Tardamos una media hora en hacer la ronda por las dos plantas y el
jardín, aunque normalmente se suele tardar algo menos, pero al ser
mi primer día, Pedro me fue dando algunas indicaciones durante el
trayecto y compartiendo conmigo algunas anécdotas ocurridas.
Al concluir, nos acercamos hasta la recepción para presentarme
ante mi otro compañero y, posteriormente, hicimos lo mismo con el
personal del hospital. Tengo que reconocer que fueron todos muy
amables, además había chicas muy guapas, y yo estaba soltero. Y
es que, tras el asesinato del hermano de mi novia, que fue
apuñalado en el dichoso almacén de juguetes, ella sufrió un trauma
tan fuerte que quiso alejarse de todo lo que le recordaba al crimen, y
como yo además de ser amigo de su hermano era compañero de
trabajo, decidió romper nuestra relación sentimental. En fin, cosas
que pasan en la vida y que uno debe aceptar por mucho que le
duelan. Perdí a un amigo y también a mi novia.
—Pues tengo que decirte que este servicio no tiene nada que ver
con el resto, al menos de los que he hecho hasta día de hoy.
—Gracias, compañero.
—¿Con todos?
—¿Alguien importante?
LA NUEVA INTERNA
Al día siguiente regresé al psiquiátrico para emprender la segunda
jornada de trabajo. La noche anterior reflexioné profundamente
sobre lo que Pedro me había contado. La verdad es que el impacto
que me causó provocó que tuviera una noche ajetreada, en la cual
soñé con situaciones extrañas.
—Pues uno de ellos era mi cuñado, así que imagínate lo que soy
capaz de creer después de conocer esa historia.
—Gracias, Luis. Pero dime, qué cosas son esas que has
presenciado aquí —dije expectante.
—Claro.
—Pues estos ojos han visto, por ejemplo, cómo una mujer de casi
noventa años saltaba desde una ventana de la última planta, y caía
de pie, como si nada, con una elasticidad asombrosa. Pero es que
aún hay más, porque al caer al jardín comenzó a correr a una
velocidad tremenda, agrediendo a los vigilantes que intentaban
detenerla. Ángel, esa anciana tenía la fuerza de tres hombres.
—Sí, antes todo el acceso era libre, tanto para los internos como
para los trabajadores. Sin embargo, tras el sucedo que te he
mencionado habilitaron esa planta para tratar casos especiales,
blindado el acceso para que otros internos no pudieran acceder,
incluso tampoco el resto del personal que no estuviera autorizado
para ello. La prueba la tienes en que vosotros —los vigilantes— sólo
podéis entrar en esa zona si os avisan.
Aquella mañana ignoraba que esta historia sería tan sólo la primera
de muchas que iría conociendo en los próximos días.
Santiago 4:7
|RVR95|
TERCER DÍA EN EL PSIQUIÁTRICO
El tercer día en el psiquiátrico había llegado, y se avecinaba
apasionante, sobre todo teniendo en cuenta que mi amigo Alberto
había accedido a responder a todas las preguntas que tuviera con
respecto al asunto que nos ocupa en esta historia.
Realicé la ronda inicial como los días anteriores, sin que hubiese
ninguna anomalía. Una vez concluida, nos quedamos unos minutos
en el jardín conversando con Luis, quien nos puso al día sobre las
noticias más recientes del deporte en nuestro país. El hombre
estaba emocionado porque se había anunciado el fichaje de Morata
para el Atlético de Madrid. Y, sí, como pueden intuir, el jardinero es
colchonero.
—Gracias, de verdad.
—¿Quiénes son los internos que hay en este hospital y por qué
están aquí?
—¿Me estás diciendo que todas las personas que hay ingresadas
aquí viven influenciadas por seres de otras dimensiones?
—Sí. Estos pacientes están manipulados por fuerzas oscuras, las
cuales se meten en sus cabezas para distorsionar la realidad en la
que viven. Algunos casos son mucho más severos que otros, como
por ejemplo los que tratamos en esta planta.
—En esos casos, que son menos del 5%, se avisa a la Fundación y
nos envían a un sacerdote experto en exorcismos. Cuando constata
que realmente el individuo no está poseso, se le deriva a otro
hospital psiquiátrico que trata enfermedades mentales. En el caso
de que el cura verifique que el individuo está bajo las garras de
seres de otras dimensiones, procedemos a dejarlo aquí y tratarlo
bajo el procedimiento habitual.
—Me ha dejado con la miel en los labios, tío. ¿No me vas a decir
nada ahora?
Varios minutos más tarde, una vez que me hallaba en el jardín,
observé a un pajarillo que volaba libremente, y al contemplarlo me
vino a la mente una reflexión curiosa que, la verdad, no sé cómo ni
por qué se instauró en mi cabeza. La cuestión es que analicé —a
través de ese pájaro— el mundo de las aves, y me di cuenta de que
ellas no necesitan trabajar para comer, ni tienen que preocuparse
por cosas absurdas como las que nos inquietan a los humanos. Los
pajarillos no tienen un techo, ni una nevera llena de comida; viven al
día y van de un lado para otro, sin saber qué les deparará el
mañana, pero aun así son felices y se pasan el día cantando. «¿Por
qué nosotros —las personas— vivimos tan obcecadas en
preocupaciones?», me pregunté en ese momento.
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pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así
como uno de ellos.
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Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre
celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
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Unas horas más tarde, nos juntamos con Marta para comer en el
jardín. La verdad es que no nos estaba permitido hacerlo en esa
zona, pero la dirección del centro hacía la vista gorda, sobre todo si
no dábamos demasiado el cante, por lo que no solía decirnos nada
siempre y cuando no nos juntásemos muchas personas.
Creo que por primera vez en esos tres días que llevaba trabajando
en el hospital, fui plenamente consciente de la gravedad que
suponía que alguien estuviera sometido a entidades malignas.
Unos minutos más tarde, estaba entrando por la puerta del local.
Allí, en una mesa sentado, me esperaba mi colega. Así que, tomé
asiento y comenzamos a charlar. Aunque antes de empezar a
profundizar en cosas misteriosas, el camarero nos tomó nota de lo
que queríamos cenar. Yo pedí carne a la brasa y patatas rellenas,
mientras que él cenó a base de pescado. Lo sé, Alberto se cuida
más que yo, qué le vamos a hacer.
—En algunos casos sí, pero no siempre. Ten en cuenta que todo
esto es muy complejo, nos enfrentamos a seres de otros mundos de
los cuales apenas sabemos nada.
—Lo que me estás contando tiene mucho que ver con lo que
sucedió con los muñecos malditos en el tremendo caso que afectó a
mi cuñado. Es como si tener fe en Dios protegiera a la gente de las
entidades malignas que proceden del mundo espiritual.
TESTIMONIOS DESGARRADORES
Necesitaba nutrirme de toda la información posible para avanzar en
mi investigación, así que decidí hablar con el personal del
psiquiátrico para recopilar los casos más inquietantes que
conocieran.
Voy a exponer los casos más significativos que conocí durante estos
días y, posteriormente, continuaré contándoles mi investigación.
LA SEÑORA LOURDES
Creo que todos tenemos que tener claro que, ante cualquier
situación extraña, lo primero que debemos hacer es buscar las
explicaciones racionales, ya que en la mayoría de casos, la lógica
será la que nos dé las respuestas y, por tanto, en temas mentales, lo
primero es que sean los especialistas médicos los que tomen
partido, para que puedan dar testimonio de si la persona sufre o no
alguna enfermedad que sea la causante de sus males.
En este caso, como bien nos explica nuestra amiga, los psiquiatras
descartaron que la señora Lourdes sufriera cualquier tipo de
trastorno mental.
EL CONTACTADO EXTRATERRESTRE
Hoy mismo, antes de redactar estas líneas, he visto algo en una red
social que me ha dejado alarmado, aunque claro, no debería,
porque cosas como ésta las observo decenas de veces todos los
días desde que investigo, por lo que tendría que estar habituado a
contemplarlas, pero es que no consigo acostumbrarme, me supera.
Tienen que saber que el tipo no era alguien famoso dentro del
mundo del misterio, pues apenas tenía 300 seguidores, sin
embargo, decenas y decenas de personas, han dejado sus emails
en los comentarios para recibir más información. Mi pregunta es:
«¿Nadie se da cuenta de que esta persona es una estafadora?»
Vamos a ver, seamos sensatos; «¿cómo puede saber el tipo que
una nave de otro planeta ha entrado en nuestro sistema solar?» Es
más, «¿y encima sabe que viene en misión de reconocimiento?»
¡Es absurdo que sepa esto! Pero es que, además, en casos
similares a éste, he escuchado a algunos tipos decir el número
exacto de tripulantes que hay en la nave e, incluso, el nombre de
todos ellos.
A las ocho menos diez, los compañeros del turno de noche nos
informaron de las novedades. Pocos minutos más tarde, iniciamos la
primera ronda por el edificio. Todo estaba tranquilo y se preveía una
mañana sin complicaciones, y así fue.
—Es verdad, te pido disculpas. Por cierto, ¿por qué te gusta más
ese nombre?
—Gracias.
—Vale, pero dime de qué tema se trata —dijo el hombre con cara de
circunstancia.
—Tranquilo que no diré nada, pero tienes que contarme todo lo que
pase esa noche, no quiero que omitas ningún detalle.
—Muchas gracias.
LA CASA MALDITA
Para la investigación en la vivienda de Paquillo quise contar con
alguien más, pero no podía decírselo a nadie que trabajara en el
psiquiátrico, y mucho menos en mi empresa de seguridad.
Tengo que decir que, nada más poner un pie en el interior, una
tremenda sensación de negatividad nos invadió a ambos.
Percibimos que el ambiente estaba cargado, como si una energía
malvada habitara allí adentro. También notamos que nos faltaba el
aire y nos costaba respirar. Era como si en ese lugar el entorno
fuese más pesado y su densidad generase la imposibilidad de
respirarlo. No sé, fue una situación muy extraña, ya que jamás en
nuestras vidas nos habíamos hallado ante nada parecido a aquello.
A medida que fueron pasando los minutos nos fuimos adaptando a
aquel entorno tan hostil, hasta que, finalmente, desapareció la
sensación de ahogo. Eso sí, la negatividad seguía presente.
—…
—¿Conocéis a Paquillo?
—…
—¿Sigues ahí?
—…
—…
—Sí, podemos.
—Todo a su tiempo.
—¿Cuándo lo haréis?
—…
—…
—¿Sigues ahí?
—…
—…
Esto fue lo que nos impulsó a crear una ouija artesana con papel y
bolígrafo, para experimentar con ella. El resultado fue sorprendente.
—…
—¿Alguien nos escucha?
—Hola.
—¿Quién eres?
—Asmodeo.
—¿Por qué?
—No.
—¿Entonces?
—Dices que me cuentas todo esto porque nadie me creerá, y si
hablo de ello lo que haré será desprestigiar lo que digo, pues crees
que todos me tratarán como a un loco. ¿Por qué estás tan seguro
de ello?
—¿Por qué dices entonces “nos vamos”? Será “me voy”, ¿no?
EN LA ACTUALIDAD
Hoy en día me tienen interno en el psiquiátrico debido a la condena
judicial. Según los que dictaron la sentencia, soy una persona que
sufre problemas mentales. Sin embargo, esto no es verdad.
¿Tú también crees que estoy loco o piensas que la historia que te
he contado es real?
«Revestíos con toda la armadura de Dios para que podáis estar
firmes contra las insidias del diablo».
Efesios 6:11
JESÚS ES EL CAMINO, LA
VERDAD Y LA VIDA
Notas
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]
Les recomendamos la novela cristiana «JAQUE MATE AL DEMONIO», de Miguel
Ángel de Jesús. Conocerán la historia de los asesinatos mencionados y de la Unidad
—secreta— de Crímenes Sobrenaturales del Gobierno.
Indice
AGRADECIMIENTOS
A MODO DE INTRODUCCIÓN
EL PSIQUIÁTRICO
LA NUEVA INTERNA
TESTIMONIOS DESGARRADORES
LA CASA MALDITA
EN LA ACTUALIDAD