Seccion 1
Seccion 1
Seccion 1
de reumatología
volumen i
Editores
Donato Alarcón-Segovia
Javier Molina L.
Coeditores
José Fernando Molina R.
Luis J. Catoggio
Mario H. Cardiel
Juan Manuel Angulo S.
Primera edición en español, Bogotá, diciembre de 2006
© Los Editores Schering-Plough S.A.
isbn 978-958-44-0135-9
dirección editorial
Mauricio Pérez G.
corrección de estilo
Carlos Arturo Hernández
María Cristina Mora
Laura Martínez
ilustraciones
Jorge Iglesias
maqueta
C. Umaña
diagramación
Todos los derechos reservados.
Marco Robayo
Prohibida la reproducción total o parcial,
impresión
dentro o fuera de Colombia, del material
escrito y gráfico sin autorización expresa Editorial Nomos S.A.
de los editores y Schering-Plough S.A.
Impreso en Colombia
Las ideas y fotografías expuestas en este
libro son responsabilidad exclusiva de los Printed in Colombia
respectivos autores.
contenido
PRIMERA SECCIÓN
Conceptos básicos en reumatología
Introducción
jorge alcocer varela
5 Estructura y función de las articulaciones
diego luis saaibi s.
15 Fundamentos de la inflamación
carlos e. per andones
roberto miguel ar ana
23 Células del sistema inmune
gloria maría vásquez d.
35 Mecanismos de localización de células inmunes: moléculas de adhesión
roberto gonzález amaro
fr ancisco sánchez madrid
47 Anticuerpos, autoanticuerpos y sistema del complemento: mecanismos de daño inmune
alejandro ruiz-argüelles
55 Inmunorregulación en enfermedades reumáticas
jorge alcocer varela
josé c. crispín a.
69 Quimiocinas
yvonne richaud-patin
luis llorente
79 Apoptosis
felipe andr ade
91 Genética de las enfermedades reumáticas
marta e. alarcón-riquelme
julio gr anados arriola
S E G U N DA S E C C IÓ N
Clasificación y epidemiología de las enfermedades reumáticas
Introducción
mario h. cardiel
105 Clasificación general de las enfermedades reumáticas
fr ancisco r amos niembro
113 Criterios para la clasificación de las enfermedades reumáticas
fr ancisco r amos niembro
121 Epidemiología de las enfermedades reumáticas
mario h. cardiel
pablo riedemann
131 Repercusión socioeconómica de las enfermedades reumáticas
maría eugenia suárez-almazor
139 Historia de la reumatología precolombina
abr aham garcía kutzbach
edwin stuardo cajas
gonzalo cabrer a r amírez
claudia castellanos de bar á
TERCERA SECCIÓN
Evaluación del paciente reumático
Introducción
javier molina l.
149 Historia clínica del paciente reumático
maria constanza latorre m.
157 Examen clínico del paciente reumático
juan j. canoso
169 Enfoque diagnóstico del paciente con monoartritis
diego luis saaibi s.
federico rondón
181 Enfoque diagnóstico del paciente con poliartritis
alejandro díaz borjón
efr aín díaz jouanen
189 Laboratorio en enfermedades reumáticas
javier molina l.
ana maría bedoya l.
javier márquez h.
203 Estudio del líquido sinovial
hernando paúl
215 Radiología convencional en reumatología
carlos pineda villaseñor
luis manuel amezcua guerr a
233 Ultrasonografía en reumatología
esper anza naredo sánchez
243 Tomografía computarizada y resonancia magnética en reumatología
maurizio massaro c.
251 Medicina nuclear en reumatología
juan luis londoño blair
C UA RTA S E C C IÓN
Terapéutica en reumatología
Introducción
gr aciela s. alarcón
273 Antiinflamatorios no esteroideos
hermann gonzález b.
jorge rueda g.
285 Glucocorticoides orales y parenterales
elías forero iller a
josé a. salas siado
299 Glucocorticoides intraarticulares y sinoviortesis
philippe chalem
fernando chalem (†)
311 Antimaláricos
josé félix restrepo s.
321 Agentes modificadores del curso de la artritis reumatoide y otras entidades relacionadas
américa g. uribe
sergio m. a. toloza
gr aciela s. alarcón
339 Inmunosupresores
rosa l. chacón díaz
isaac abadí a.
349 Gammaglobulina endovenosa
arturo rodríguez de la serna
357 Agentes biológicos: principios básicos de tratamiento
inés colmegna
luis r. espinoza
379 Trasplante de médula ósea en enfermedades reumáticas
alejandro a. cardona t.
385 Tratamientos no tradicionales en reumatología
césar r amos remus
fr ancisco javier aceves ávila
gabriela sierr a jiménez
391 Nutrición y enfermedades reumáticas
reinaldo badillo abril
401 Fisioterapia y rehabilitación en el paciente reumático
jaime guzmán
417 Cirugía ortopédica en reumatología
david marcial barba
efr aín díaz borjón
juan montejo vargas
miguel lor a martínez
georges makdissy salomón
martín iglesias mor ales
oscar suárez river a
QU I N TA SECCIÓN
Artritis reumatoide
Introducción
martín a. rodríguez
437 Epidemiología
blanca hernández-cruz
r afael ariza-ariza
447 Etiopatogenia y patología
martín a. rodríguez
465 Manifestaciones articulares
sergio jacobelli g.
miguel gutiérrez t.
479 Manifestaciones extraarticulares
r afael valle
antonio iglesias g.
489 Tratamiento
mario enrique díaz cortés
javier molina l.
501 Enfermedad de Still del adulto
andrés quiceno
509 Artritis reumatoide juvenil
ruth maría er aso g.
clar a malagón
SE XTA SECCIÓN
Espondiloartropatías
Introducción
juan manuel angulo s.
535 Generalidades
rubén burgos vargas
julio c. casasola vargas
543 Complejo mayor de histocompatibilidad en
espondiloartropatías
gilberto vargas alarcón
julio gr anados arriola
555 Espondilitis anquilosante
edwin jáuregui
567 Artritis reactiva enterogénica y urogénica
juan manuel angulo s.
585 Artritis psoriásica
liliana candia zúñiga
javier márquez h.
luis r. espinoza
599 Artropatías asociadas a enfermedades
inflamatorias del intestino
josé a. gómez-puerta
r aimon sanmartí sala
SÉPTIMA SECCIÓN
Artropatías asociadas a infecciones
Introducción
luis r. espinoza
611 Artritis séptica no gonocócica
eduardo acevedo vásquez
jose fernando molina r.
619 Artritis gonocócica
luis fernando pinto peñar anda
ricardo a. pineda tamayo
629 Artritis postestreptocócica y fiebre reumática
romeo s. rodríguez suárez
643 Enfermedad de Lyme
angelina villasis keever
651 Artritis por micobacterias u hongos
fr ancisco medina rodríguez
661 Artritis virales
sergio r. gutiérrez ureña
sergio cerpa cruz
677 Aspectos reumáticos del sida
alberto berman
alberto j. spindler
eleonor a del valle lucero
[XI]
O C T A VA S E C C I Ó N
Osteoartritis
Introducción
generoso guerr a b.
691 Epidemiología y etiopatogenia
cristina drenk ard
ingrid strusberg
699 Clasificación y manifestaciones clínicas
mauricio abello banfi
711 Tratamiento y pronóstico
generoso guerr a b.
[XII]
prólogo
Escribir un libro de medicina es una tarea muy compleja y, en ocasiones, hasta tediosa.
Motivados por una vieja y sincera amistad, y con el ánimo de satisfacer el anhelo de escribir
un buen texto de reumatología en castellano que marcara un hito en la historia de la
Reumatología hispanoamericana, nos reunimos los editores jefes de este libro en México en
agosto de 2001.
Si bien en ese momento seleccionamos cuidadosamente los coeditores, los diferentes
temas y los mejores candidatos para escribir los capítulos, por diversas razones, nuestro
ambicioso proyecto no pudo cristalizarse hasta principios de 2004. Mencionábamos, en esa
época, que había llegado la hora de demostrar que los reumatólogos latinoamericanos no nos
encontrábamos, como dijera Octavio Paz, en los “suburbios de occidente, en las afueras de la
historia”.
Aunque en el transcurso del tiempo se presentaron dificultades, inclusive la siempre
lamentada e irreparable pérdida de nuestro querido amigo y compañero Donato Alarcón-
Segovia, estamos muy honrados y complacidos de presentar esta magnífica obra en dos
volúmenes a la comunidad médica hispanoamericana.
Un nuevo texto que cubra los aspectos fundamentales de las enfermedades reumáticas
debe ser bien ilustrado y sobresaliente, y tener una amalgama de amplio contenido clínico y
científico. Por tanto, el libro comprende 23 secciones que cubren 125 capítulos sobre aspectos
básicos, inmunológicos, epidemiológicos propios, históricos de la reumatología precolombina,
diagnósticos, clínicos y terapéuticos de las diversas entidades reumáticas; cada sección está
precedida, novedosamente, por una concisa introducción escrita por un verdadero experto en
el tema. Se han incluido tablas y un buen número de ilustraciones y fotografías –la mayoría
originales– con el fin de proporcionar al lector un mejor entendimiento de los diversos
procesos reumáticos.
En esta obra están plasmados el esfuerzo y el entusiasmo de investigadores y clínicos
de diferentes países de hispanoamérica, inclusive connotados latinoamericanos residentes en
los Estados Unidos que, con su sólida formación, han contribuido a la exitosa culminación de
este proyecto; ellos han sido rigurosamente seleccionados por nosotros, teniendo en cuenta su
conocimiento e información inédita procedentes de su gran experiencia.
Esta obra está destinada a cumplir las necesidades y los deseos de estudiantes, médicos
generales, internistas, reumatólogos y también ortopedistas, fisiatras y especialistas afines;
esperamos que sea una herramienta útil para todos estos profesionales que requieren bases
[xiii]
sólidas para tomar las mejores decisiones clínicas y terapéuticas. Por tanto,
estamos seguros de que este tratado será el texto de referencia para los médicos y
estudiantes hispanoamericanos.
Es nuestro deseo que este libro, cuyo resultado final no logró ver realizado,
sirva como testimonio de admiración y gratitud al trabajo encomiable de Donato
Alarcón-Segovia. Siempre lo recordaremos como lo que fue: un gran maestro.
Esperamos que esta edición nos mantenga actualizados hasta la próxima
que pretendemos publicar con la prontitud necesaria, el mejor ánimo y el decidido
apoyo de todos los autores de capítulos a quienes, sin excepción, queremos
agradecer su decidida y valiosa colaboración.
Finalmente, nuestros agradecimientos más sinceros a Schering-Plough, S.A.,
por su generoso patrocinio y muy especialmente a Mauricio Pérez, quien en todo
momento estuvo atento y vigilante en la producción y la organización de esta obra.
l o s e di t or e s
[xiv]
I N M E M OR I A M
Este escrito hubiese tenido otro mensaje diferente al que aquí expreso y, muy probablemente,
no lo hubiese escrito yo, si no es por el lamentable fallecimiento de Donato Alarcón-Segovia,
quien fuera mi padre y, para muchos como para mí, un maestro.
He aceptado escribirlo porque sé que participar en su preparación era de gran
importancia para él, así como lo era la formación de nuevos reumatólogos.
Donato Alarcón-Segovia nació el 6 de mayo de 1935. Estudió medicina en la
Universidad Nacional Autónoma de México, de donde se recibió con Mención Honorífica.
Ya desde joven mostró un interés particular por el lupus eritematoso, enfermedad sobre la
que escribió su tesis de pregrado. Posteriormente, realizó sus estudios de especialización
en Medicina Interna (Instituto Nacional de la Nutrición, 1959-1961) y Reumatología
(Mayo Graduate School of Medicine, Rochester, Minnesota, Estados Unidos) para,
posteriormente, fundar el Departamento de Inmunología y Reumatología del Instituto
Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, al cual dedicó el resto de
su vida. En 1992 fue nombrado Director del Instituto (1992-2002).
En los últimos meses, antes de fallecer el 21 de diciembre de 2004, conversábamos
sobre las clases a sus residentes en el Instituto donde hacía alusión a detalles de la historia
del arte. Dentro de la educación en la Reumatología, él combinaba también la educación
en el arte y la historia. La institución de la que fue director fue realzada con obras de
arte de jóvenes mexicanos las cuales promovió con exhibiciones dentro del Instituto. El
Instituto mismo fue renovado, se crearon nuevas secciones, como la de consulta externa
que lleva su nombre, y otras se modernizaron. Era amante de la arquitectura, la música y
la pintura.
Recibió un gran número de premios y reconocimientos, entre los que se encuentran:
el premio de la John Edward Noble Foundation (Mayo Foundation, 1964), el premio Philip
S. Hench por excelencia en Reumatología como residente de la Mayo Graduate School
of Medicine, el Premio Nacional de Ciencias Elías Sourasky 1974 en Ciencias (México,
1975) y el Premio Nacional de Ciencias y Artes (México, 1989), fue nombrado Master del
American College of Physicians y del American College of Rheumatology, el Premio 2003 de
Alumnos Distinguidos por la Philip S. Hench Society y la Mayo Clinic “por su destacada
contribución en investigación, educación, administración y esfuerzo humanitario”, y,
ya en los últimos meses de su vida, el Premio aesku “por una vida en contribución a la
autoinmunidad”. Este último premio ya no lo pudo recibir debido a su estado de salud.
Aún pocos meses antes de morir publicaba ensayos y escritos diversos, algunos publicados
por el Colegio Nacional (México).
[xv]
Eso era, un hombre de gran conocimiento, de interés general por las cosas que le
rodeaban, un individuo que veía como un deber el transmitir ese interés y ese conocimiento
a aquellos que quisiesen escucharle. Y así le escuchábamos todos porque al transmitirlo
lo hacía con gusto y con cariño. Para mí, personalmente, son momentos de nostalgia
entrañable las visitas a museos en su compañía, nuestro gusto común por los pintores
flamencos o el disfrutar de nuestro concierto preferido, el de violín de Johannes Brahms
tocado por Isaac Stern. También lo son esos momentos de trabajo juntos, escribiendo el
capítulo de etiopatogenia del lupus u otras obras en las que colaboramos y alrededor de las
cuales discutíamos puntos de vista o ideas. ¿Cuántos pueden decir de sus vidas: si volviese
a vivir, haría exactamente lo mismo? El lo decía y se refería a la Medicina, al tratamiento
y al cuidado de sus pacientes, a quienes siempre pensó y tuvo como prioridad.
Cuando alguien que ha dejado huella en los demás fallece, hay una pérdida real,
puesto que cada mente y cada proyecto de vida es único e irremplazable.
Este libro es parte de un proyecto de vida. Este libro contiene la experiencia y el
conocimiento necesarios para ayudar a crecer nuevos proyectos de vida, con la esperanza
de que sean por el bienestar de los enfermos. Así lo hubiese querido él.
[xvi]
p r e s en t a c i ó n
Cumpliendo una tradición que se remonta varios años atrás, Schering-Plough se complace
en presentar este Tratado de Reumatología, obra que –por lo extensa y erudita– no tiene
antecedentes en la literatura médica hispanoamericana.
Efectivamente, siendo las enfermedades reumáticas –especialmente aquellas que
afectan las articulaciones– tan antiguas como la existencia del hombre mismo, según ha
podido deducirse de los hallazgos paleopatológicos, le ha tomado un gran trecho a la medicina
clínica y a las ciencias básicas llegar al grado de conocimiento que se trasluce en esta obra.
Ese conocimiento, bellamente expresado en dos volúmenes, 1.500 páginas, 511 fotografías,
166 ilustraciones y 387 tablas, resume lo que para el año 2006 se sabe sobre las enfermedades,
los síntomas principales, los mecanismos moleculares, los procedimientos, los métodos
diagnósticos y los tratamientos en la práctica diaria de la Reumatología.
Como editores principales figuran los profesores Donato Alarcón-Segovia, el ilustre
médico e investigador mexicano recientemente desaparecido, y Javier Molina L., destacado
especialista colombiano y docente de estas materias por muchos años. El que aparezca
de primero el nombre de Donato Alarcón-Segovia constituye a la vez un reconocimiento,
como gestor e impulsador de esta obra, y un homenaje póstumo a quien fuera adalid de
estas ciencias, inicialmente en los Estados Unidos y, luego, en su tierra natal, desde donde
publicó extensamente y enseñó a varias generaciones de notables alumnos, muchos de los
cuales figuran aquí como coeditores y autores. Javier Molina L. después de sus primeros
años de formación académica en los Estados Unidos, no sólo reedificó y cimentó sus pasos
en Colombia sino que formó una verdadera escuela reumatológica, principalmente centrada
en Medellín y en la Universidad de Antioquia, pero que en las tres o cuatro últimas décadas
ha ejercido profundo impacto sobre la medicina interna del país y de varias naciones
latinoamericanas.
Como coeditores principales figuran José Fernando Molina R., Luis J. Catoggio,
Mario H. Cardiel y Juan Manuel Angulo. A ellos los acompañan 184 eminentes especialistas
de Norte, Centro y Suramérica y algunos originarios de España, como autores de los
125 capítulos: de ahí que la obra pueda recibir con propiedad el nombre de Tratado
Hispanoamericano de Reumatología y esté orientado fundamentalmente a satisfacer las
inquietudes de médicos y estudiantes iberoamericanos, en la acepción más generosa y cordial
de la palabra.
Schering-Plough considera que, además de sus ingentes esfuerzos de investigación
farmacológica conducentes a la búsqueda de nuevas terapias, cumple con una obligación
moral, personal y científica al llevar a los lectores, en su mayoría médicos o estudiantes de
medicina, un tratado como este, que resume lo más avanzado y reciente del conocimiento
en estas materias. Somos conscientes de lo transitorio e intemporal que puede ser el mismo,
[xvii]
dados los vertiginosos avances en la biología molecular, la genómica y la terapéutica que
seguirán acompañando las primeras décadas de este segundo milenio. Pero tendremos
la satisfacción, no sólo de traer ante quienes nos lean la nómina y los artículos de los más
brillantes especialistas en el mundo hispanoamericano, sino la de procurar inducir en las
mentes jóvenes el afán y la curiosidad por investigar, ahora y en el futuro, un grupo de
enfermedades que constituye uno de los mayores flagelos que puede sufrir la humanidad.
Deseo expresar mi agradecimiento a Schering-Plough, Fernando Marulanda y Ricardo
Ospina, quienes han sido una inagotable fuente de apoyo durante la elaboración de esta obra.
Así mismo quiero expresar mi agradecimiento a Pierre Verstraete, Sergio Ulloa, Claudia
Quiñónez, José Angel Galarza, Marcela Merino, Juan Orlando Vivar y Sonnia Carpio que
ayudaron a ser viable este proyecto. Todo no hubiera sido posible sin la incansable actitud
de Camilo Umaña, Marco Robayo, Carlos A. Hernández y Jorge Iglesias. Por último quiero
expresar mi inmenso agradecimiento a los editores y coeditores, que por el contexto de su
vida dan realce a esta obra, y a todos los autores quienes con su entusiasmo y mística nos
acompañaron en este proyecto.
m au r ic io pe r e z g.
di r e c c ió n e di t or i a l
di r e c t or m é dic o ,
l a b or at or io s s c h e r i n g -p l oug h s . a .
b o g o ta , c ol om bi a
[xviii]
nota sobr e
los au tor es
[xix]
Hospital de Niños de la Santísima Trinidad de Córdoba, de posgrado de Reumatología, Facultad de Medicina,
Córdoba, Argentina. Universidad Nacional de Tucumán, Tucumán, Argentina.
[xx]
Julio C. Casasola Vargas, M. D. Joaquín Coll, M. D.
Especialista en Reumatología, Hospital General de México, Especialista en Medicina Interna; profesor titular,
México, D. F., México. Departamento de Medicina Interna, Hospital del Mar,
Universidad Autónoma de Barcelona, Barcelona, España.
Claudia Castellanos de Bará, M. D.
Especialista en Reumatología; reumatóloga, Instituto Inés Colmegna, M. D.
Salvadoreño de Seguridad Social (ISSS), San Salvador, Rheumatology Research Fellow, Louisiana State University,
Salvador. New Orleans, Estados Unidos.
[xxi]
Efraín Díaz Jouanen, M. D. Guillermo García Ramos, M. D.
Jefe de Medicina, Hospital Ángeles Lomas; profesor de Especialista en Medicina Interna y Neurología; neurólogo,
Medicina, Facultad de Medicina, Universidad Autónoma de Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición
México, México, D. F., México. “Salvador Zubirán”; jefe, Departamento de Neurología,
México, D. F., México.
Cristina Drenkard, M. D., Ph. D.
Especialista en Reumatología; Senior Research Associate, Romeo García-Torres, M. D.
Division de Reumatología, Departamento de Medicina, Ex investigador titular C, Instituto Nacional de Cardiología
Emory University, Atlanta, Estados Unidos. “Ignacio Chávez”; ex jefe, Departamento de Patología,
Hospital de Especialidades, Centro Médico La Raza, IMSS,
Ruth María Eraso G., M. D. México, D. F., México.
Especialista en Pediatría y Reumatología; profesora
auxiliar de Reumatología Pediátrica, Facultad de Medicina, Francisco Godoy, M. D.
Universidad de Antioquia; pediatra reumatóloga, Hospital Especialista en Reumatología; Tegucigalpa, Honduras.
Pablo Tobón Uribe, Medellín, Colombia.
José A. Gómez-Puerta, M. D.
Luis R. Espinoza, M. D. Especialista en Medicina Interna; residente de Reumatología,
Especialista en Medicina y Reumatología; profesor y jefe, Servicio de Reumatología, Hospital Clínic, Barcelona,
Sección de Reumatología, Escuela de Medicina del Estado de España.
Louisiana, New Orleans, Estados Unidos.
Luis Alonso González, M. D.
Luis Fernández Domínguez, M. D. Especialista en Medicina Interna y Reumatología;
Especialista en Reumatología; adjunto clínico, Complejo reumatólogo, Clínica Universitaria Bolivariana, Medellín,
Hospitalario de Ourense, Madrid, España. Colombia.
Luis Felipe Flores-Suárez, M. D., Ph. D. Roberto González Amaro, M. D., Ph. D.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; Doctor en Inmunología; jefe, Departamento de
investigador titular, Departamento de Inmunología Inmunología, Facultad de Medicina, UASLP, San Luis
y Reumatología, Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Potosí, México.
Nutrición; miembro, Sistema Nacional de Investigadores,
México, D. F., México. Hermann González B., M. D.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología;
Josep Font, M. D., Ph. D. (†) reumatólogo, Clínica de Artritis y Reumatología, Instituto
Especialista en Medicina Interna y Enfermedades de Enfermedades Osteoarticulares, Centro Médico
Autoinmunes; jefe de servicio, consultor senior, Servicio Imbanaco; profesor ad honorem de Medicina, Universidad
de Enfermedades Autoinmunes, Hospital Clínic; profesor del Valle; profesor de Reumatología, Universidad Libre, Cali,
asociado, Facultad de Medicina, Universidad de Barcelona, Colombia.
Barcelona, España.
Julio Granados Arriola, M. D., Ph. D.
Elías Forero Illera, M. D. Especialista en Inmunogenética, maestro en Ciencias
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; docente, Médicas; investigador titular, Departamento de Inmunología
Facultad de Medicina, Universidad del Norte, Barranquilla, y Reumatología, Instituto Nacional de Ciencias Médicas y
Colombia. Nurición “Salvador Zubirán”; México D. F., México.
[xxii]
Guadalajara; investigador nacional, Sistema Nacional de División de Investigación; investigador nacional y profesor
Investigadores, Guadalajara, México. de posgrado de Reumatología, UNAM; Hospital de
Especialidades, Centro Médico La Raza, IMSS, México,
Jaime Guzmán, M. D. D. F., México.
Profesor asistente, University of Toronto; investigador
clínico, Toronto Rehabilitation Institute; científico asociado, Juan Carlos Jaramillo, M. D.
Institute for Work and Health, Toronto, Ontario, Canadá. Especialista en Ortopedia y Traumatología; jefe, Sección de
Ortopedia; jefe, Clínica de Hombro y Codo, Hospital Pablo
Renato Guzmán, M. D. Tobón Uribe, Medellín, Colombia.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; jefe,
Sección de Inmunorreumatología, Clínica SaludCoop 104 Edwin Jáuregui, M. D.
“Jorge Piñeros Corpas”, Bogotá, D. C., Colombia. Especialista en Medicina Interna y Reumatología;
reumatólogo, Clínica de Artritis y Rehabilitación, Bogotá,
Leonardo Guzmán Bondiek, M. D. D. C., Colombia.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; profesor
de Medicina, Facultad de Medicina, Universidad de Chile, Sergio A. Jiménez, M. D.
Hospital del Salvador, Santiago, Chile. Professor of Medicine and Professor of Biochemistry
and Molecular Biology, División de Reumatología,
Blanca Hernández-Cruz, M. D., M. Sc. Departamento de Medicina, Jefferson Medical College,
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; maestra Thomas Jefferson University, Filadelfia, Estados Unidos.
en Ciencias Médicas; investigadora adscrita, Servicio de
Reumatología, Hospital Universitario Virgen Macarena de Munther A. Khamashta, M. D., Ph. D.
Sevilla, Sevilla, España. Consultant Physician, Deputy Director, Lupus Research
Unit, St. Thomas’ Hospital, Londres, Inglaterra.
Graciela Ibáñez Landín, M. D.
Especialista en Reumatología; investigadora clínica María Constanza Latorre M., M. D.
independiente, Colegio Mexicano de Reumatología, México, Especialista en Medicina Interna y Reumatología; directora
D. F., México. científica, Clínica de Artritis y Rehabilitación, Bogotá, D. C.,
Colombia.
Antonio Iglesias G., M. D.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; profesor Juan Luis Londoño Blair, M. D.
titular, Facultad de Medicina, Universidad Nacional de Especialista en Medicina Nuclear; jefe, Servicio de Medicina
Colombia, Bogotá, D.C., Colombia. Nuclear; Hospital Universitario San Vicente de Paúl,
Medellín, Colombia.
Martín Iglesias Morales, M. D.
Especialista en Ortopedia con especialidad en mano, Miguel Lora Martínez, M. D.
Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Especialista en Ortopedia; Instituto Nacional de Ciencias
“Salvador Zubirán”, México, D. F., México. Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, México, D. F.,
México.
Sergio Jacobelli G., M.D.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; profesor Luis Llorente, M. D.
titular de Medicina, Escuela de Medicina; jefe, Servicio de Investigador titular; Departamento de Inmunología y
Reumatología, Pontificia Universidad Católica de Chile, Reumatología, Instituto Nacional de Ciencias Médicas y
Santiago, Chile. Nutrición “Salvador Zubirán”, México, D. F., México.
[xxiii]
José A. Maldonado Cocco, M. D. José Fernando Molina R., M. D.
Especialista en Reumatología, profesor asociado de Especialista en Medicina Interna y Reumatología;
Reumatología, Facultad de Medicina, Universidad de reumatólogo, Clínica Las Américas; profesor asociado de
Buenos Aires; director, Carrera de Médicos Especialistas, Reumatología, CES, Medellín, Colombia.
Universidad de Buenos Aires; jefe, Unidad de Medicina
Interna y Sección de Reumatología del Instituto de Juan Montejo Vargas, M. D.
Rehabilitación Psicofísica, Buenos Aires, Argentina. Especialista en Ortopedia; Instituto Nacional de Ciencias
Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, México, D. F., México.
David Marcial Barba, M. D.
Especialista en Ortopedia; jefe, Servicio de Ortopedia, Jorge Morales-Torres, M.D.
Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Especialista en Reumatología; presidente, Comité de
“Salvador Zubirán”, México, D. F., México. Osteoporosis de PANLAR; asesor, Comité Científico,
International Osteoporosis Foundation; Clínica de
Juan Carlos Marcos, M. D. Osteoporosis, Hospital Aranda de la Parra, León,
Jefe, Servicio de Reumatología, Hospital “General San Guanajuato, México.
Martín”, La Plata; profesor asociado de Reumatología,
cátedra de posgrado de Reumatología, Facultad de Ciencias Luis Carlos Morales Sáenz, M. D.
Médicas, Universidad Nacional de La Plata; docente adscrito, Especialista en Ortopedia; jefe, Sección de Cirugía de
cátedra de Medicina Interna B, Facultad de Ciencias Médicas Columna; miembro, Sección de Trauma, Departamento de
de la Universidad Nacional de La Plata, La Plata, Argentina. Cirugía Ortopédica y Traumatología, Fundación Santa Fé de
Bogotá, Universidad del Rosario, Bogotá, D. C., Colombia.
Javier Márquez H., M. D.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; Esperanza Naredo Sánchez, M. D.
reumatólogo, Hospital Pablo Tobón Uribe, Medellín, Especialista en Reumatología; médica adjunta, Sección de
Colombia. Reumatología, Hospital Severo Ochoa, Madrid; profesora,
Escuela de Ecografía, Sociedad Española de Reumatología,
Manuel Martínez Lavín, M. D. Madrid, España.
Jefe, Departamento de Reumatología, Instituto Nacional
de Cardiología “Ignacio Chávez”; profesor titular de Federico Navarro Sarabia, M. D.
Reumatología, Universidad Nacional Autónoma de México; Especialista en Reumatología; profesor asociado de
investigador nacional, grado III, México, D. F., México. Reumatología, Facultad de Medicina, Universidad de Sevilla;
jefe, Servicio de Reumatología, Hospital Universitario
Maurizio Massaro C., M. D. Virgen Macarena, Sevilla, España.
Especialista en Radiología; profesor, Universidad CES y
Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia. William Otero Escalante, M. D.
Especialista en Reumatología; Hospital Universitario de
Luis Fernando Medina Quintero, M. D. Santander; profesor de Cátedra, Departamento de Medicina
Especialista en Medina Interna y Reumatología; docente Interna, Universidad Industrial de Santander, Bucaramanga,
asistente, posgrado de Medicina Interna, Universidad del Colombia.
Valle, Cali, Colombia.
Eliseo Pascual Gómez, M. D.
Francisco Medina Rodríguez, M. D. Catedrático de Reumatología, Hospital General
Profesor, curso de postgrado en Reumatología, Universidad Universitario de Alicante, Facultad de Medicina de Alicante,
Nacional Autónoma de México; Unidad de Enfermedades Alicante, España.
Autoinmunes, Departamento de Reumatología, Centro
Médico Siglo XXI, México, D. F., México. Virginia Pascual Ramos, M. D.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología;
Ulises Mercado, M. D. Departamento de Inmunología y Reumatología, Instituto
Especialista en Reumatología, Mexicali, Baja California, Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salbador
México. Zubirán”, México, D. F., México.
[xxiv]
Reumatología e Inmunología, Departamento de Medicina, César Ramos Remus, M. D.
CEMIC, Buenos Aires, Argentina Especialista en Reumatología; jefe, Departamento de
Reumatología, Centro Médico Nacional de Occidente,
Sonsoles Piera-Velázquez, Ph. D. Instituto Mexicano del Seguro Social; director, Unidad de
Post-doctoral Fellow, División de Reumatología, Investigación en Enfermedades Crónico-Degenerativas, S.
Departamento de Medicina. Jefferson Medical College, C., Guadalajara, Jalisco, México.
Thomas Jefferson University, Filadelfia, Estados Unidos.
Anthony M. Reginato, M. D., Ph. D.
Ricardo A. Pineda Tamayo, M. D. Especialista en Reumatología; profesor, Departamento
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; jefe, de Reumatología, Alergia e Inmunología, Massachusetts
Unidad de Reumatología, Clínica Universitaria Bolivariana; General Hospital, Boston, Estados Unidos.
profesor asistente, Universidad Pontificia Bolivariana,
Medellín, Colombia. Antonio J. Reginato, M. D. (†)
Especialista en Reumatología; Departamento de
Carlos Pineda Villaseñor, M. D. Reumatología, Cooper Medical Center, Robert Wood
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; médico Johnson Medical School, Camden, New Jersey, Estados
adscrito, Departamento de Reumatología, Instituto Nacional Unidos.
de Cardiología “Ignacio Chávez”, México D. F., México.
José Félix Restrepo S., M. D.
Edgard Pinilla, M. D. Especialista en Medicina Interna y Reumatología; profesor
Especialista en Ortopedia, Fundación Santa Fé; director, asociado de Medicina Interna y Reumatología; coordinador,
programa de posgrado en Cirugía de Mano, Universidad El Unidad de Reumatología, Universidad Nacional de
Bosque; docente de Ortopedia y Cirugía de Mano, Pontificia Colombia, Bogotá, D. C., Colombia.
Universidad Javeriana, Universidad Colegio Mayor del
Rosario y Universidad El Bosque, Bogotá, D. C., Colombia. Pedro A. Reyes, M. D.
Especialista en Reumatología e Inmunología Clínica;
Luis Fernando Pinto Peñaranda, M. D. director de investigación, Instituto Nacional de Cardiología
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; “Ignacio Chávez”, México. D. F., México.
reumatólogo, Hospital Pablo Tobón Uribe; profesor,
Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín, Colombia. Edgardo Reyes Gutiérrez, M. D.
Departamento de Patología, Instituto Nacional de Ciencias
Bernardo A. Pons-Estel, M. D. Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, México, D. F.,
Especialista en Reumatología; coordinador general, Grupo México.
Latino-Americano de Estudio del Lupus; jefe, Servicio
de Reumatología Instituto Cardiovascular de Rosario; Yvonne Richaud-Patin, Q. C.
investigador adjunto, Departamento de Inmunología, Departamento de Inmunología y Reumatología, Instituto
Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador
Rosario; docente asociado de Reumatología, Hospital Zubirán”, México, D. F., México.
Provincial de Rosario, Rosario, Argentina.
Pablo Riedemann, M. D.
Ramón Pujol, M. D. Especialista en Reumatologia; magíster en Ciencias
Servicio Medicina Interna-UFISS de Geriatría; Hospital (Epidemiología Clínica); profesor asociado; director
Universitari de Bellvitge L´Hospitalet de Llobregat, de postgrado e investigacion, Facultad de Medicina,
Barcelona, España. Universidad de la Frontera, Temuco, Chile.
Andrés Quiceno, M. D. Santiago J. Rivero, M. D.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; director Profesor adjunto de Medicina, Departamento de
asociado Programa de Residencia en Medicina Interna, Inmunología Clínica y Reumatología, Escuela de Medicina,
Presbyterian Hospital, Dallas, University of Texas Pontificia Universidad Católica de Chile, Santiago, Chile.
Southwestern Medical Center, Dallas, Estados Unidos.
Martín A. Rodríguez, M. D., Ph. D.
Gerardo Ramírez, M. D. Especialista en Reumatología; doctor en Ciencias Médicas;
Especialista en Medicina Interna e Inmunología Clínica; director, Centro Nacional de Enfermedades Reumáticas,
profesor titular, Grupo de Inmunología y Epidemiología Ministerio de Salud y Desarrollo Social; jefe, Servicio de
Molecular, Universidad Industrial de Santander, Reumatología, Hospital Universitario de Caracas, Caracas,
Bucaramanga, Colombia. Venezuela.
[xxv]
Medicina, Facultad de Medicina, Universidad Autónoma de Francisco Sánchez Madrid, Ph. D.
Barcelona, Barcelona, España. Doctor en Inmunología; jefe, Sección de Inmunología,
Hospital Universitario de La Princesa, Universidad
Romeo S. Rodríguez Suárez, M. D. Autónoma de Madrid, Madrid, España.
Investigador titular F, Institutos Nacionales de Salud,
Secretaría de Salud; miembro titular, Academia Nacional de Raimon Sanmartí Sala, M. D.
Medicina y Mexicana de Pediatría; director general, Hospital Especialista en Reumatología; Unidad de artritis, Servicio de
Infantil de México “Federico Gómez”, México, D. F., México. Reumatología, Hospital Clinic, Barcelona, España.
[xxvi]
Francisco Téllez Zenteno, M. D. José Manuel Vega Ortiz, M. D.
Especialista en Neurología; investigador, Departamento Especialista en Medicina Interna y Reumatología; jefe,
de Neurología y Psiquiatría, Instituto Nacional de Ciencias Servicio de Reumatología, Hospital México, San José, Costa
Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, México, D. F., Rica; profesor de pre y postgrado, Escuela de Medicina,
México. Universidad de Costa Rica; director, programa de postgrado
en Reumatología, Escuela de Medicina, Universidad de
Edgardo David Tobías Arteaga, M. D. Costa Rica, San José, Costa Rica.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; director
científico, CIREI, Bogotá, D. C., Colombia. Patricia Julieta Vélez Sánchez, M. D.
Especialista en Medicina Interna y Reumatología;
Sergio M. A. Toloza, M. D. reumatóloga, CIREI, Bogotá, D. C., Colombia.
Mary Kirkland Research Fellow, División de Inmunología
Clínica y Reumatología, University of Alabama, Olga Vera Lastra, M. D.
Birmingham, Estados Unidos. Especialista en Reumatología; profesora de posgrado de
Medicina Interna, UNAM; Departamento de Medicina
América G. Uribe, M. D. Interna, Hospital de Especialidades, Centro Médico La Raza,
Mary Kirkland Research Fellow, División de Inmunología IMSS, México, D. F., México.
Clínica y Reumatología, University of Alabama,
Birmingham, Estados Unidos. Antonio Vidaller, M. D.
Especialista en Medicina Interna; Servicio Medicina Interna-
Oscar Uribe Uribe, M. D. UFISS de Geriatría, Hospital Universitari de Bellvitge
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; profesor, L´Hospitalet de Llobregat, Barcelona, España.
Sección de Reumatología, Universidad de Antioquia,
Medellín, Colombia. Isidro Villanueva Torrecillas, M. D., Ph. D.
Especialista en Reumatología; doctor en Ciencias; Assistant
Rafael Valle, M. D. Professor, Department of Medicine, College of Medicine,
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; jefe, University of Arizona, Tucson, Estados Unidos.
Sección de Reumatología, Hospital Militar, Bogotá, D. C.,
Colombia. Angelina Villasis Keever, M. D., M. Sc.
Especialista en Medicina Interna e Infectología;
Gilberto Vargas Alarcón, Ph. D. Departamento de Infectología, Instituto Nacional de
Investigador en Ciencias Medicas F, Departamento de Ciencias Médicas y de la Nutrición “Salvador Zubirán”,
Fisiología, Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio México, D. F., México.
Chávez”, México D. F., México.
Álvaro Villegas C., M. D.
Gloria María Vásquez D., M. D., Ph. D. Especialista en Ortopedia y Cirugía de Columna; Hospital
Especialista en Medicina Interna y Reumatología; doctora Pablo Tobón Uribe y Clínica Las Américas, Medellín,
en Ciencias y reumatóloga, Universidad de Antioquia, Colombia.
Medellín, Colombia.
[xxvii]
[xxviii]
PR I M E R A S E C C I Ó N
Conceptos
básicos en
r eum atologí a
[]
C on cierta frecuencia los temas que tratan las bases anatómicas, fisiopatológicas y
genéticas de las enfermedades reumáticas son las menos consultadas por los interesados en
el estudio de la reumatología. Usualmente existe mayor preocupación por el diagnóstico o el
tratamiento de las mismas. El empeño con el que han sido tratados los temas de esta sección y
su forma sencilla y atractiva parecen ser el primer paso para su reivindicación ante el lector. Se
han escrito con gran actualidad y rigor científico lo que permite extender los conceptos aquí
vertidos hacia un estudio más profundo.
El estudio de las enfermedades reumáticas durante la última década se ha distinguido
por el enorme progreso en el entendimiento de los mecanismos moleculares que regulan el
desarrollo del sistema inmune, tanto en condiciones normales como durante una respuesta
autoinmune. Los diferentes capítulos de esta sección nos ofrecen un panorama actualizado
de ello. Podemos reafirmar las bases histológicas de una articulación y lo especializado que
es el cartílago, tejido que no tiene vasos linfáticos ni nervios, pero que distribuye en forma
muy eficiente las cargas que soporta. Gracias a la disposición de sus fibras, en particular de
la colágena, logra rigidez y fortaleza durante la tensión y baja resistencia para la compresión.
También es de utilidad recordar que la membrana sinovial no posee membrana basal, lo
que le confiere una gran versatilidad en el manejo de partículas, células y solutos, desde y
hacia el espacio sinovial; provee además un mecanismo de difusión libre y otro de fagocitosis
activa. Es muy atractivo saber que la membrana sinovial es un tejido altamente especializado
que, además de permitir el paso de linfocitos durante un proceso inflamatorio, contiene
quimiocinas, sus receptores y señales de transducción que actúan en conjunto como
mecanismos de autorregulación.
Actualmente las enfermedades autoinmunes son causa importante de morbilidad y
mortalidad. La mayoría de ellas son incurables o muy difíciles de controlar. Los estudios
inmunológicos convencionales no permiten conocer a fondo su patogenia; sin embargo, algunas
terapias recientes, como el uso de antagonistas del TNF-a, han sido exitosas y estimulan a
seguir el estudio de otros blancos terapéuticos. El contenido de los capítulos sobre células,
citocinas, quimiocinas, anticuerpos y mecanismos de apoptosis proporcionan información
suficiente y actualizada para entender que las enfermedades autoinmunes se desarrollan cuando
los linfocitos autorreactivos pierden la tolerancia y se activan.
A pesar de que los mecanismos por los que esto sucede no son del todo conocidos, se piensa
que la autoinmunidad resulta de una combinación de factores genéticos, la influencia del medio
ambiente (¿infecciones?) y eventos celulares.
Todos los individuos toleramos nuestros tejidos propios y la falla en este
autorreconocimiento ocasiona una respuesta autoinmune, una enfermedad autoinmune o
ambas. Los modelos animales han permitido conocer en detalle los mecanismos de esta falta
de tolerancia, en particular, el estudio de las células CD4+. De la información contenida en esta
sección aprendemos que la tolerancia a lo propio puede ser central y periférica. En la tolerancia
central, los linfocitos inmaduros que reconocen antígenos propios en los tejidos linfoides
(médula ósea, en el caso de los linfocitos B, y el timo, en el caso de las células T) mueren por
[]
apoptosis. Los mecanismos principales de tolerancia periférica son la anergia (no hay función
inmune), la eliminación o muerte celular por apoptosis y la supresión por células T reguladoras.
En estos capítulos se puntualizan los avances logrados en la última década en el
conocimiento del desarrollo y la diferenciación de las células B, las células T, las células
dendríticas y los macrófagos, con especial énfasis en sus receptores celulares, sus productos
solubles y las vías de señalización que regulan estos procesos. Además, en años recientes se han
aclarado aspectos complejos de la respuesta inmune adaptativa, como la regulación del cambio
del isotipo de las inmunoglobulinas, la hipermutación somática y el desarrollo de las células
plasmáticas.
Las bases genéticas de las enfermedades reumáticas expuestas en el capítulo 9 nos llevan a
concluir que, en el futuro inmediato, contaremos con modelos moleculares de cada enfermedad
en que se combinen información genética y ambiental, así como sus diferentes interacciones.
Será importante definir el estado funcional de cada individuo en el contexto de su composición
genética, lo cual ya es una realidad mediante el uso de técnicas modernas a nivel de un solo
gen. Será, también, relevante para clasificar subgrupos moleculares de las heterogéneas
enfermedades que hoy diagnosticamos; ayudará también a predecirlas y a tener información
temprana sobre su desenlace y respuesta terapéutica.
j o r g e a l c o c e r va r e l a
Lecturas recomendadas
1. Middleton J, Americh L, Gayon R, Julián D, Aguilar L, Amalric F, Girard
JP. Endotelial cell phenotypes in the rheumatoid synovium: activated, angiogenic,
apoptotic and leakly. Arthritis Res Ther 2004;6:60-72.
2. Roux JD, Abbas AK. Paths to understand the genetic basis of autoimmune
disease. Nature 2005;435:584-9.
3. JianKun Zhu, XueBin Liu, Chun Xie, Mei Yan et al. T cell hyperactivity in
lupus as a consequence of hyperstimulatory antigen-presenting cells. J Clin Invest
2005;115:1869-78.
4. Feldmann M, Steinman L. Design of effective immunotherapy for human
autoimmunity. Nature 2005;435:612-9.
[]
1
estructur a y función de las
articulaciones
Diego Luis Saaibi S.
[]
conceptos básicos en reumatología
T a b l a 1 .1 . T i p o s d e A r t i c u l a c i o n e s
nombre c o m p o n e n t e s a r t i c u l a r e s t i p o s d e m o v i m i e n t o ejemplo
Anfiartrosis típicas o verdaderas Superficies articulares, capa de cartílago Flexión, extensión, rotación, muy Articulación intervertebral
hialino, ligamentos periféricos, fibrocartílago limitado por ligamentos (cuerpos vertebrales y disco)
Diartroanfiartrosis Igual que el anterior, sólo que el ligamento Casi ninguno Articulación de la sínfisis púbica
cuenta con una hendidura que es una
verdadera cavidad articular
Sinfibrosis Dos extremos óseos con un sustancia fibrosa Ninguno Huesos del cráneo
interpuesta
Sincondrosis Dos extremos óseos con un sustancia Ninguno Esfenoides con la apófisis
cartilaginosa interpuesta basilar del occipital
Enartrosis Formadas por un extremo a manera de Todos: flexión, extensión, aducción, Coxofemoral y escapulohumeral
cabeza y otro a manera de cavidad abducción, circunducción y rotación
Condilartrosis Cabeza más o menos prolongada y una Todos los de las enartrosis menos Metacarpofalángicas
cavidad glenoidea rotación
Encaje recíproco Superficies articulares cóncavas y convexas Todos menos rotación Carpometacarpiana del pulgar
Trocleartrosis Mezcla de una polea y una garganta para Flexión y extensión con movimientos Femorotibial interfalángicas
la polea de lateralidad menos extensos manos
Trocoides Un cilindro óseo que da vueltas apoyado Rotación solamente Radiocubital superior e inferior
sobre un anillo osteofibroso que lo rodea
Artrodias Caras casi planas Deslizamiento Astrágalo-calcánea
geno (10% a 30% del peso neto), proteoglicanos (3% a 10% rigidez y la fortaleza durante la tensión y la baja resis-
del peso neto) y agua (60% a 87% del peso neto), junto tencia para la compresión14, propiedades que ayudan a
con una muy pequeña proporción de sales inorgánicas, mantener la estructura del cartílago durante las cargas y
lípidos y otras glicoproteinas.6,7 La distribución de la ma- los movimientos articulares.9
triz y las células varía en las diferentes capas del cartílago. Colágeno. El colágeno es la proteína más abundante
Así, la capa superficial consiste de fibras de colágeno y del cuerpo y es el componente estructural de todos los
condrocitos que se orientan en forma paralela a la super- tejidos como parte de la matriz que soporta las célu-
ficie articular (figura 1.2). En las capas intermedias, las las. La familia del colágeno en los vertebrados incluye,
fibras de colágeno se encuentran orientadas más al azar al menos, 27 tipos de colágeno y 42 tipos diferentes de
y soportan las unidades denominadas condronas, que cadenas alfa.15 De ellos, restringidos sólo al cartilago se
contienen agrupaciones de condrocitos. En las capas más encuentran los colágenos II, IX, X y XI, mientras que
profundas, las fibras de colágeno que tienen una orienta- los colágenos VI y XXI se pueden encontrar en otros
ción casi vertical se insertan en el hueso subcondral cerca tejidos.
de la zona denominada línea de unión o tidemark, con El colágeno presente en el cartílago consiste en haces
una población de condrocitos que se orienta en filas con de fibras de colágeno tipo II que rodean una fibra cen-
orientación vertical8. tral de colágeno XI y tienen en la periferia colágeno IX
Esta distribución asimétrica de células y fibras de en relación 8: 1: 1. Es secretado como un polipéptido de
colágeno a través del cartílago está en relación con las procolágeno, el cual sufre de escisión de sus porciones
funciones mismas de los condrocitos y las propiedades terminales y, posteriormente, hace uniones cruzadas que
físicas del cartílago. Se sabe que los condrocitos son célu- le permiten una conformación de triple hélice, propia de
las sensibles a los cambios de presión, mecanoeléctricos y la fibra de colágeno. Tiene un recambio extremadamente
de concentración de las sustancias en la matriz celular.9 lento que, se calcula, es mayor de 100 años.16-18
Entonces, al ser estimuladas, estas células reaccionan Existe otro tipo de colágeno denominado colágeno
con activación de los canales de iones10, cambios en su asociado con fibrillas (facit) que, presente en cantidades
citoesqueleto11, cambios en la producción de citocinas muy pequeñas, cobra importancia cuando, ligándose a
(especialmente, IL-1β e IL-4), modulación de la respuesta otros colágenos, forma estructuras y uniones estrechas
a las integrinas (especialmente, α5β1)12) y expresión de entre el colágeno, las fibrillas y su medio ambiente.19 Es
receptores para citocinas13, entre otros. La distribución de de particular importancia en la superficie articular del
las fibras, especialmente del colágeno, obedece en parte cartílago, donde mantiene indemne al cartílago cuando
a las propiedades mecánicas más importantes de éste: la éste se ve sometido a fuertes cargas de tensión.20
[]
Estructura y función de las articulaciones
Monómero
Fluído
Intersticial
Ácido
hialurónico
Colágeno
Figura 1.2. Estructura del cartílago normal. Histología con microscopía de luz del F i g u r a 1 . 3 . Diagrama de la distribución de las
cartílago hialino; se puede apreciar la distribución asimétrica de las células en el fibras de colágeno y proteoglicanos en la matriz del
espesor del cartílago (Tomada con permiso de American College of Rheumatology). cartilago.
Proteoglicanos. Embebidas en la matriz celular, exis- las moléculas de agua y los glicosaminoglicanos, que se
ten moléculas de proteínas y polisacáridos que existen comportan entonces como un gel hidrofílico que ocupa
como monómeros o como agregados y que se denominan un volumen considerable en relación con su contenido
proteoglicanos. Los monómeros, como el agrecán, pre- de carbohidratos.
sentan una proteína central (proteína core), sobre la cual Se considera que la distribución asimétrica a través
se unen cerca de 150 moléculas de glicosaminoglicanos.21 de las diferentes capas de cartílago, del colágeno, los pro-
El queratán sulfato y el condroitín sulfato, dos glicosami- teoglicanos, los glicosaminoglicanos y el agua, es la que
noglicanos sulfatados presentes en el cartílago, son cade- permite a este tejido variar sus propiedades materiales
nas poliméricas de unidades de disacáridos repetidas en según la dirección de la carga.25 Este fenómeno, conocido
forma específica22; se distribuyen en forma heterogénea como anisotropía del cartílago, contribuye en forma muy
sobre la proteína central y producen una región rica en eficiente en la absorción y la transmisión de las fuerzas que
queratán sulfato y otra en condroitín sulfato, generando se desarrollan durante la locomoción. Finalmente, vale la
la estructura tridimensional de los proteoglicanos que pena recordar que el cartílago es una estructura dinámica
semeja al “cepillo de botella” (figura 1.3). que cambia de acuerdo con múltiples circunstancias, entre
En el cartílago, los monómeros de proteoglicanos ellas, la edad; de hecho, se espera que con el envejecimien-
forman agregados luego de unir su proteína central a la to se aumente la concentración de glicosaminoglicanos
molécula del ácido hialurónico mediante otra proteína ricos en queratán sulfato y que disminuya la relación de
denominada proteína de unión.18 La cadena de ácido carbohidratos, proteínas, condroitín sulfato y agua.26
hialurónico es una molécula de disacárido no sulfata-
do, tan larga como 4 µm, que facilita la inmovilización Tendones, c á psul a
de los proteoglicanos y le da una estructura rígida a la a rticul a r y lig a mentos
matriz extracelular.23,24 En realidad, gran parte de sus Las tres estructuras principales que limitan, estabi-
propiedades físicas se deben a la distribución espacial lizan y conectan una articulación son los tendones, los
de las moléculas de hidrógeno, oxígeno y nitrógeno, así ligamentos y la cápsula articular. Tienen una función
como a los puentes de hidrógeno que presentan cuando se predominantemente pasiva dado que los que realmente
encuentran en medios ricos en agua. Así, la facilidad para mueven las articulaciones son los músculos. Los liga-
“atrapar” moléculas de agua y sodio se traduce en hidra- mentos y la cápsula conectan una estructura ósea con
tación de los tejidos que son ricos en glicosaminoglicanos. la siguiente aumentando la estabilidad mecánica de las
Los estímulos externos pueden modular esta propiedad articulaciones y limitando el movimiento excesivo de
de hidratación; entre los más importantes está la presión la articulación. Por su parte, los tendones fijan los ex-
externa que es capaz de romper las débiles uniones entre tremos musculares al hueso transmitiendo las fuerzas
[]
conceptos básicos en reumatología
tensoras que se traducen, finalmente, en movimiento. El tridimensional de todas estas estructuras hacen que el
contar con el tendón genera en el músculo una distancia hueso sea trabecular (poroso) o cortical (compacto).
óptima entre la masa contráctil, “cuerpo”, y los verda-
deros sitios de acción del músculo, “origen e inserción M e m br a n a si nov i a l
musculares”. La membrana sinovial se define como el tejido blando
Composición. Los tendones y los ligamentos son te- que recubre los espacios de las diartrosis, las vainas ten-
jidos conectivos densos conformados por fibras para- dinosas y las bolsas. La palabra proviene del griego syn,
lelas de colágeno que contienen pocas células y vasos con, y ovium, huevo, nombre que le dio Paracelso por la
sanguíneos. Esta disposición del colágeno permite que apariencia macroscópica del líquido presente en las articu-
los tendones soporten grandes cargas unidireccionales, laciones.28 La definición de la membrana sinovial incluye
mientras que una porción menor de fibras organizadas no sólo la capa superficial de células, sino la matriz espe-
en forma oblicua, menos paralela, le permiten al tendón cializada sobre la cual se soporta o subíntima. Este tejido
soportar las fuerzas tensoras. En sus inserciones óseas, los es una capa continua de células no adherentes distanciadas
tendones cambian gradualmente de un tejido fibroso a un incluso hasta 1-2 mm, que incluye fibroblastos y macrófa-
tejido óseo y en esta unión juega un papel importante el gos especializados predominantemente y donde no existe
colágeno XXII, como se comentó previamente.19,20 membrana basal (figura 1.4). Si bien la matriz extracelular
cuenta con elementos propios de la membrana basal, tales
Hueso como la laminina y el colágeno tipo IV, no hay entactín (una
El hueso es una de las estructuras más fuertes, más glicoproteína sulfatada de gran afinidad por la laminina),
vascularizadas, de mayor recambio y de mayor facilidad la cual une diversos componentes para conformar la mem-
de reparación y reorganización del cuerpo, que respon- brana basal. La ausencia de membrana basal le confiere a la
de rápidamente a las necesidades físicas y metabólicas sinovial una gran versatilidad en el manejo de partículas,
del individuo. Las funciones del sistema esquelético son células y solutos, desde y hacia el espacio sinovial.
las de proveer protección a los órganos internos, proveer Existen múltiples artículos clásicos que describen la
uniones de rigidez cinemática y ser sitio de unión de los rápida absorción de sustancias desde el espacio sinovial,
músculos, facilitando la acción muscular con el corres- las cuales, habiendo sido introducidas en la articulación,
pondiente movimiento corporal. Otras funciones no me- pueden ser detectadas en el espacio subíntimo al cabo de
nos importantes son la hematopoyética, la endocrina y tan sólo unas horas con su posterior ubicación subsino-
el ser reservorio de minerales y diversos oligoelementos, vial y, finalmente, su evacuación a través de los capilares
entre otras sustancias y los linfáticos.29,30 Se considera que ello obedece a un
Composición. Está compuesto de una porción sólida mecanismo pasivo de difusión libre y a otro que involucra
y otra que no lo es (médula ósea). La porción sólida, a su la fagocitosis activa. Así, las funciones de la membrana
vez, consiste de un pequeño número de células (osteo- sinovial incluyen la producción de los componentes del
citos) y matriz extracelular orgánica que la rodea, que líquido sinovial, el facilitar la nutrición del cartílago, la
conforman la unidad estructural del hueso u osteón. El absorción de sustancias desde la cavidad articular y la
rasgo más característico del hueso es su gran contenido inmunovigilancia.
de material inorgánico, en forma de sales minerales, que Estructura. Desde las descripciones clásicas de J. A.
se une íntimamente a la matriz orgánica. Key se acepta que existen tres tipos de membrana sinovial
La matriz orgánica es una combinación de colágeno según las estructuras de la subíntima: fibrosa, areolar
tipo I (principal componente de la matriz extracelular) y adiposa. 31 La sinovial areolar es quizá la forma más
entrelazado por puentes cruzados de moléculas como especializada; es un tejido prominente hacia la luz de la
la piridolina y la deoxipiridolina, proteoglicanos, res- articulación, rico en pliegues y que puede desaparecer
ponsables de cerca de sólo 5% de dicha matriz, y otras con la extensión. La capa de células puede ser de 2 a 3
proteínas no colágenas que incluyen la osteocalcina y la hileras de células, por debajo de las cuales existen capi-
sialoproteína del hueso (tabla 1.2)27. La porción mineral lares, vénulas, nervios y, en algunos casos, diversos tipos
de la materia inorgánica consiste primariamente de calcio de linfocitos. La compleja composición de la matriz le
y fósforo en forma de cristales que semejan la hidroxiapa- confiere la posibilidad de enorme extensión (capa rica
tita, y es responsable de cerca del 65% al 70% del peso del en colágeno), además de un pequeño movimiento libre
hueso seco. Hay que recordar que el agua es abundante en (capa interna con casi ausencia de colágeno). La sinovial
el hueso y es responsable del 25% del peso neto del hueso. adiposa se aprecia fácilmente tapizando los cojines gra-
La materia inorgánica hace del hueso una estructura dura sos de los repliegues laterales, aunque también se puede
y rígida, mientras que el componente orgánico le brinda ver tapizando pequeñas vellosidades; presenta capilares
flexibilidad y elasticidad. La proporción y la disposición superficiales con pequeña diversidad de células y lo usual
[]
Estructura y función de las articulaciones
Ta b l a 1. 2 . c o m p o n e n t e s d e l a m at r i z ó s e a
nombre c o m e n ta r i o
es que repose sobre un sustrato rico en colágeno, el cual se Se ha demostrado que las células B intervienen activa-
apoya, a su vez, sobre tejido graso. Finalmente, la sinovial mente en el proceso inflamatorio, son fuente de citocinas
fibrosa es muy escasa en células superficiales así como en como el TNF, migran a través del cuerpo y regulan el
el número de capilares con que cuenta; ocasionalmente, flujo de células que transitan hacia el espacio articular,
se aprecian algunas células en el intersticio. función atribuida no sólo a la regulación en la expresión
Sinoviocitos. Se han descrito dos tipos de sinoviocitos, de diversos receptores de adhesión 35, sino a la confor-
uno semejante al macrófago y otro semejante al fibro- mación de un microambiente que facilita la migración, la
blasto. Los sinoviocitos tipo macrófago (células A) son captura y la inhibición de la apoptosis de diversas células
células derivadas de la médula ósea que llegan a la arti- que intervienen en el proceso inflamatorio de la artritis36;
culación a través del torrente sanguíneo durante la em- en los modelos con ratones, la transferencia de estas cé-
briogénesis, así como en los procesos inflamatorios. Están lulas induce artritis, dependiente específicamente de los
caracterizados por contener múltiples proyecciones del sinoviocitos tipo fibroblasto y mediada por el TNF.37
citoplasma en forma de filópodos, mitocondrias, fibrillas Estos dos tipos de sinoviocitos mantienen la homeosta-
intracelulares, vesículas micropinocitóticas, un aparato sis de la articulación en la medida en que las que semejan
de Golgi prominente y numerosas vacuolas (0,4-1,5 µm el macrófago son capaces de fagocitar, liberar citocinas e
de diámetro) que contienen material granular denso.32 iniciar/perpetuar una respuesta inflamatoria; incluso, se
Los macrófagos tienen una alta expresión de esterasas postula que algunas de las células que expresan marcadores
inespecíficas, marcadores propios de los macrófagos de macrófagos se comportan como células dendríticas por
como el CD68, el CD14 y el receptor de inmunoglobuli- su expresión de moléculas tales como la CD1a, la proteína
na FcγRIIIa, entre otros. inflamatoria del macrófago 3α (o CCL20 en la nueva no-
Los sinoviocitos tipo fibroblasto (células B) son cé- menclatura) y su receptor, el CCR6, que son marcadores
lulas mesenquimatosas, avasculares, no epiteliales, que de células dendríticas inmaduras, además de la proteína de
no expresan el marcador CD45 y sí actividad de la enzi- membrana asociada al lisosoma de las células dendríticas
ma uridina difosfo-glucosa dehidrogenasa (UDPGD) y (DC-LAMP), el CD83, y la proteína inflamatoria del ma-
diversas moléculas de adhesión vascular, tales como la crófago 3β (o CCL19) y su receptor el CCR7, marcadores,
molécula de adhesión de la célula vascular 1 o VCAM- a su vez, de las células dendríticas maduras.
1. Su ultraestructura muestra escasas vacuolas de gran Estas células dendríticas tendrían un papel crítico en
tamaño, mitocondrias, vesículas micropinocitóticas y la iniciación del proceso inflamatorio en entidades tales
abundante ergastoplasma y retículo endoplásmico. Su como la artritis reumatoide, dado que tanto las células
superficie es regular, aunque aquéllas que se encuentran dendríticas maduras como las inmaduras podrían migrar
en las capas más profundas de la membrana pueden pre- desde el torrente sanguíneo e interactuar con otras células
sentar largas proyecciones citoplásmicas.32 Estos fibro- inflamatorias perpetuando la inflamación.38 Incluso, se
blastos altamente especializados parecen originarse no podría postular que, así como se ha identificado que las
sólo en las células del intersticio mismo, sino que pueden células dendríticas del intestino podrían ser reservorio de
ser reclutadas del torrente sanguíneo (por ejemplo, en las bacterias39 y que algunas subpoblaciones de leucocitos de
artritis inflamatorias). Entre sus funciones se encuentra las observadas en el intestino inflamado logran unirse al
el secretar los componentes de la matriz intersticial, el endotelio de la membrana sinovial40, las células dendríti-
ácido hialurónico y otras glicoproteínas como la glicina, cas que logren llegar a la membrana sinovial provenientes
que proveen nutrientes para el cartílago y lubricación a del intestino podrían contener gérmenes intracelulares
la superficie articular.33,34 que generaran un estímulo antigénico persistente.41-44
[]
conceptos básicos en reumatología
La constante remodelación del tejido es una caracte- el HLADR+ estaban tanto en la membrana sinovial su-
rística propia de la sinovial. Este fenómeno está basado, perficial como en el intersticio. La concentración celular,
entre otros factores, en la presencia de las múltiples célu- en general, fue escasa aunque variable, 0 a 25 células por
las antes mencionadas y sus correspondientes citocinas, campo de gran aumento, aproximadamente 0 a 158 cel/
un equilibrio fluctuante entre la producción de enzimas mm2 con promedio de 33 por campo de gran aumento
que degradan la matriz (metaloproteinasas y catepsinas) o 47 cel/mm2.
y sus inhibidores (inhibidores titulares de las metalopro-
teinasas), además de los componentes de la matriz (co- Va s o s s a ng u í n e o s
lágenos, fibronectina, etc.). Así, las proteínas integrales Los vasos de la membrana sinovial incluyen capilares
de la membrana celular que median la adhesión interce- terminales ricamente ramificados que se ubican cerca de
lular hemofílica, como las caderinas, cobran particular la superficie de la membrana sinovial; algunos de estos
importancia. Durante el desarrollo, son las responsables capilares presentan una membrana basal fenestrada. Los
de la adecuada formación de los tejidos mientras que, en vasos pueden sufrir grandes modificaciones como parte
los adultos, lo son de la conservación de la integridad y del proceso inflamatorio, entre ellas, la de angiogénesis,
la arquitectura de los tejidos. En la membrana sinovial y la modificación del endotelio con la presencia de células
existe la caderina 11, derivada de los sinoviocitos tipo B, la endoteliales altas que recuerda las vénulas poscapilares de
cual parece ser responsable de la adecuada organización los centros germinales de los ganglios linfáticos.
de la membrana sinovial y su forma natural de reacción Por angiogénesis se conoce la formación de nuevos
en procesos inflamatorios como la artritis. capilares a partir de uno ya existente. Involucra diversos
pasos: presencia de un estímulo angiogénico adecuado,
Otras células presentes en la membrana sinovial degradación de la membrana basal, migración endotelial
Recientemente, Singh et al.45 han mostrado estudios (germinación), formación de una luz vascular provisio-
sobre la membrana sinovial de las rodillas en pacientes nal, anastomosis, síntesis de novo de membrana basal y,
sin antecedente de artritis y sin dolor articular. En este finalmente, incorporación de pericitos.46 Se considera
grupo de pacientes “sanos”, se logró identificar linfocitos que es un mecanismo fisiológico en los procesos de cre-
T CD4, CD8, macrófagos y células que expresan el HLA cimiento, reproducción y cicatrización, pero que puede
DR+. No se identificaron linfocitos B. Los linfocitos T se ser anormal en casos de neoplasia o alteraciones inflama-
observaron primordialmente en localización perivascu- torias crónicas tales como la artritis reumatoide.35
lar, mientras que los macrófagos estaban localizados en la Por otra parte, el cambio del fenotipo de los capilares
membrana sinovial superficial y las células que expresan hacia vénulas de endotelio alto parece ser el resultado de
Figura 1.4.
Membrana sinovial.
Se aprecia tejido
conectivo, adiposo y
capilares normales,
subyacentes a la capa
de recubrimiento
compuesta por
sinoviocitos (Tomada
con permiso del
American College of
Rheumatology).
[10]
Estructura y función de las articulaciones
citocinas vasoactivas e integrinas, propias del proceso ticos, entre ellos: el receptor de hialuronato del endotelio
inflamatorio, presentes en la sinovial, que generan una linfático, un homólogo del CD44 que aparece inicialmen-
migración acelerada de las células inflamatorias.47,48 Así, te en la célula pluripotencial de la linfogénesis como su
las células endoteliales también pueden participar acti- primer marcador (también llamado LYVE-1); el prox1
vamente en los procesos inflamatorios crónicos, aunque (factor de transcripción prospero-relacionado tipo home-
aún existe discusión sobre si estos cambios preceden o box1) marcador que parece señalar la primera verdadera
son el resultado de la activación de la membrana sinovial célula linfática; D6 o β–quimiocina del receptor D6, el
durante el proceso inflamatorio.49,50 VEGFR3 (receptor-3 del factor de crecimiento derivado
Como se ha comentado previamente, estas células del endotelio vascular) y la desmoplaquina que demarcan
pueden sufrir otros cambios fenotípicos con activación, la célula endotelial madura.56
angiogénesis, apoptosis o facilitación de la filtración de
solutos o componentes celulares desde el endotelio y hacia Nerv ios
el intersticio, lo que, si bien facilita la reparación de tejidos, Las diartrosis presentan diferentes tipos de inerva-
puede también aumentar la inflamación sinovial.35,51 ción según la estructura evaluada (tabla 1.3); de hecho,
la membrana sinovial normal muestra gran cantidad de
Linfáticos terminaciones nerviosas sensitivas y simpáticas. Esta rica
El sistema linfático ayuda a drenar el líquido linfático red de terminaciones nerviosas, presentes en la sinovial
del espacio extracelular, mantiene la homeostasis de los y la articulación, interviene no sólo en la sensibilidad al
fluidos, transporta leucocitos y células presentadoras de dolor sino que facilita la propiocepción, tanto para co-
antígenos a los órganos linfáticos y es esencial en la res- nocer la posición de la articulación estacionaria como
puesta inmune a los agentes infecciosos; así, durante la durante el movimiento (o cinestesia), mientras que al-
exposición a un agente inflamatorio, los aferentes linfáti- gunos receptores responden sólo a posiciones extremas
cos son la ruta a través de la cual, y luego de la fagocitosis de la articulación o en ángulos específicos de ubicación
de antígenos, las células dendríticas migran hacia los gan- espacial de la misma.57
glios linfáticos y los órganos linfoides.52,53 Se han descrito Las terminales sensitivas de la membrana sinovial
los linfáticos en la membrana sinovial normal, pero son normal son ricas en neuropéptidos, tales como sustancia
muy difíciles de identificar en un proceso inflamatorio P y el péptido relacionado con el gen de la calcitonina,
como la artritis reumatoide, quizá porque son destruidos mientras que las terminaciones simpáticas se localizan
o sus marcadores estructurales modificados como parte casi exclusivamente alrededor de los vasos sanguíneos. En
de los cambios por la inflamación54 . los procesos inflamatorios se ha descrito una disminución
Recientemente, se ha controvertido la idea de que en la de la inervación en las capas superficiales de la membrana
artritis reumatoide los linfáticos se encontraban ausentes. sinovial y una menor concentración de neuropéptidos
Xu H et al., mediante el uso de tinciones inmunohisto- en las capas profundas, lo cual sugiere disminución de
químicas que identifican el receptor de hialuronato de la neuropéptidos, menor capacidad de proliferación de las
célula linfática, LYVE-1 (receptor específico de linfáticos), terminaciones nerviosas o ambas durante los episodios
han logrado demostrar la presencia de estas estructuras de inflamación.58-60
vasculares, tanto en la membrana sinovial normal como De hecho, es claro que los neuropéptidos juegan un
en la afectada por artritis reumatoide u osteoartritis.55 papel importante en los procesos inflamatorios y la lesión
Formación. Los vasos sanguíneos se desarrollan del tisular que caracteriza a la artritis. Así, el sistema nervioso
mesodermo, inicialmente como precursores de células podría influenciar la respuesta inmune e inflamatoria de
endoteliales, en un proceso denominado vasculogénesis. diferentes formas: por la liberación de neuropéptidos des-
Estos vasos crecen y se ramifican hasta su red final de de las neuronas sensoriales en los sitios de inflamación;
maduración mediante gemación y posterior ramificación por el efecto del sistema autonómico sobre los órganos
(angiogénesis). Los vasos linfáticos aparecen luego que linfoides; por la liberación de hormonas pituitarias y su
se forman los vasos sanguíneos, lo que sugiere un ori- efecto final sobre las células inflamatorias, y por la pro-
gen vascular, pero, a diferencia de los primeros, cuentan ducción de neuropéptidos por los leucocitos y las células
sólo con células endoteliales con uniones intercelulares mesenquimatosas.
débiles y no tienen fenestraciones, membrana basal ni
pericitos, lo que los hace una estructura muy permeable For m ación de l a
a las macromoléculas y a la migración de células y de c av i d a d s i n o v i a l
patógenos.56 El proceso de formación de las articulaciones sino-
En la actualidad, existen diferentes marcadores que viales ocurre entre dos segmentos opuestos de hueso y
pueden facilitar el adecuado reconocimiento de los linfá- obedece a una detallada secuencia de eventos. Luego del
[11]
conceptos básicos en reumatología
periodo de condensación celular precondrogénica, se ob- una intrincada red local que modula, en tiempo y can-
serva la formación de la matriz del cartílago en la extremi- tidad y en forma sinérgica, la síntesis de hialuronan y la
dad en crecimiento. Esta matriz del cartílago inicialmente expresión de CD44.65
atraviesa la zona de la futura articulación para, más tarde, Migración de células hacia la membrana sinovial.
desarrollar metaplasia hacia una región no condrogéni- La membrana sinovial es una estructura altamente es-
ca denominada interzona.61 La interzona representa un pecializada que, además de permitir el tránsito usual de
centro muy activo en la expresión de señales y diversos leucocitos (procesos de vigilancia), puede reclutar rápi-
marcadores que incluyen la proteína 1 morfogénica deri- damente diversas células inflamatorias en los procesos
vada del cartílago (CDMP-1), la cual es idéntica al factor tanto de reparación tisular como de inflamación o artri-
de diferenciación del crecimiento 5 o GDF-5, las proteínas tis. El tránsito de leucocitos hacia una sinovial inflamada
morfogénicas del hueso (BMP), BMP-2, BMP-4, así como incluye la presencia de quimiocinas, sus receptores y las
sus antagonistas la cordina y la noggin.62,63 El aumento en señales de transducción que éstos generan, incluso las
la síntesis de hialuronan y la expresión de proteínas que β-arrestinas y las cinasas del receptor G que actúan como
se unen al hialuronan, tales como el CD44, delimitan la posibles autorreguladores.35
línea de la futura articulación.64 Existen moléculas que intervienen en la “captura” de
Entre los mecanismos involucrados en el desarrollo leucocitos (selectinas, CD44, CX3CR1 y sus ligandos) y
de la articulación se cuentan el movimiento y la relación otras que lo hacen en el proceso de adhesión firme de-
entre las células y la matriz intersticial.65 La presencia de pendiente de la activación (integrinas y las moléculas de
movimiento, aun por periodos tan cortos como 10 minu- adhesión intracelular, ICAM) que, finalmente, logran la
tos, genera señales intracelulares en las células sinoviales migración a través del endotelio.35,67-69 Este sistema es
semejantes a fibroblastos que pueden permanecer hasta redundante, dado que involucra múltiples ligandos para
por 24 horas y que conllevan una producción exagerada cada receptor y múltiples receptores para cada ligando,
de hialuronan y aumento en la expresión de CD44. Al y se ha observado su expresión exagerada en procesos
parecer, estos procesos están mediados por señales inter- patológicos como la artritis.
celulares que incluyen las cinasas reguladoras de señales Más recientemente, se han identificado nuevos recep-
extracelulares (ERK) 1 y 2 y las proteín cinasas activadas tores de superficie celular denominados receptores de
por mitogénesis (MAPK), entre otras.66 leucocitos semejantes a inmunoglobulina (LIR). Estos
Se considera que la concentración de hialuronan en la receptores parecen modular las interacciones con células
interzona es la que finalmente determina el desarrollo de mediante inhibidores ligados a tirosín-cinasa en forma
la cavidad sinovial. Así, una pequeña concentración de directa o luego de la interacción con los receptores Fc de
hialuronan se traduce en mayor capacidad de agregación la inmunoglobulina gamma. Entre las células que pueden
de las células, mientras que un exceso del mismo disgrega migrar a la membrana sinovial, se encuentran los linfo-
las células y genera el espacio sinovial. G. P. Dowthwait citos (T y B), los polimorfonucleares, los macrófagos, las
et al. han demostrado, también, que existe una estrecha células dendríticas y los mastocitos, entre otras.
relación entre la célula y la matriz, en lo que se considera
Ta b l a 1 . 3 . T i p o s d e I n e r va c i ó n
e s t r u c t u r a t i p o d e i n e r va c i ó n f u n c i ó n
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2
fundamentos de la
inflam ación
Carlos E. Perandones
Roberto Miguel Arana
h i s ta m i n a serotonina cininas
Contacto Cinina
Prostaglandinas y leucotrienos
B. Cininas tisulares Su síntesis a partir de los lípidos presentes en las mem-
branas celulares se ha esquematizado en la figura 2.2. La
Cininógeno biosíntesis de los eicosanoides se inicia por la activación
(HMW)
(LMW) de la fosfolipasa A2 y la liberación de ácido araquidónico
a partir de los fosfolípidos de membrana. Posteriormente,
Proteasas locales Calicreína por acción de las ciclooxigenasas (COX) o PGH2 sintetasas,
tisular
se transforma en prostaglandinas (PG) y tromboxano; o,
Precalicreína por acción de la lipooxigenasa, en leucotrienos. Los leuco-
trienos están involucrados fundamentalmente en la fisio-
Cinina patología del asma y exceden el interés de este capítulo.
En 1991, se demostró la existencia de dos isoenzimas de
Aldosterona, andrógenos, vagal.
ciclooxigenasa (COX-1 y COX-2), si bien había evidencias
que sugerían la presencia de otras ciclooxigenasas muchos
contracción bronquial y la contracción del músculo liso años antes. La ciclooxigenasa es una enzima limitante en
intestinal y uterino. Las cininas plasmáticas aumentan la síntesis de prostaglandina al convertir el ácido araqui-
la permeabilidad en la microcirculación de las vénulas, dónico en PGH2. Actualmente, se acepta la existencia, al
generando separación de las células endoteliales y au- menos, de tres isoformas de esta enzima (COX-1, COX-2,
mentando la presión hidrostática, lo que conduce a la COX-3); algunas de sus diferencias se encuentran esque-
formación de edema. La estimulación de algunas células matizadas en la tabla 2.2. La COX-1 se expresa en forma
inflamatorias por parte de las cininas es capaz de indu- constitutiva y cumple un papel importante en la fisiología
[17]
conceptos básicos en reumatología
Figura 2.2. Sintesis de Eicosanoides de la endoperóxido sintetasa de prostaglandina. La PGE2
es, a su vez, capaz de inducir IL-6.
Fosfolípidos
Otras prostaglandinas en la zona de inflamación son
la PGF2α, la PGD2, la prostaciclina y el tromboxano A2
Fosfolipasa A 2
(TXA2). La concentración de estos productos no supera
el 25% de la de la PGE2. La prostaciclina es el más impor-
tante de éstos; es un potente vasodilatador, tiene efecto
hiperalgésico, en el endotelio es antitrombótico y en la
Acido araquidónico
mucosa estomacal cumple una función citoprotectora. En
Ciclooxigenasa 5 Lipooxigenasa
la tabla 2.3 se encuentran esquematizadas las funciones
de las principales prostaglandinas.
PGH2 Leucotrienos (LTB4)
La conversión de PGH2 a PGE2 está mediada por una
enzima recientemente identificada y conocida como PGE2
sintetasa. Al igual que las ciclooxigenasas, se conoce una
PGE2 sintetasa constitutiva y una PGE2 sintetasa que pue-
Prostaglandinas
(PGE2 PGI2 TXA2) de ser inducida por estímulos inflamatorios como IL-1ß y
TNF-α. La primera se encuentra en el citoplasma, mien-
tras que la segunda, en la membrana perinuclear.
Evidencias recientes muestran que el producto final
de los tejidos, ya que genera prostaglandinas que inter- del metabolismo de PGD2, el 15-deoxi-∆12,14-PGJ2 (15d-
vienen en la homeostasis de los mismos. La COX-2 está PGJ2), tiene propiedades antiinflamatorias. Puesto que
casi ausente en condiciones fisiológicas y se expresa en tanto la PGE2 como la PGD2 son los productos del ca-
forma exagerada por estímulos inflamatorios y factores tabolismo de una ciclooxigenasa común, la cantidad de
de crecimiento entre otros, si bien, como muestra la tabla cada una depende de la eficiencia relativa de sus sintetasas
2.2, las cantidades constitutivas en el sistema nervioso específicas en diferentes condiciones. La modulación de
central, el endotelio y el riñón, explican algunas de sus la expresión y la actividad de estas enzimas podría ser un
funciones aceptadas actualmente. Así, se ha involucrado blanco terapéutico de mayor especificidad en el futuro.7
en la fisiopatología de enfermedades neurológicas, en la
regulación del flujo plasmático renal, en el efecto gonado- Óxido nítrico
trófico preovulatorio del folículo ovárico y en la expresión El óxido nítrico es un radical débil, sintetizado a partir
exagerada de distintos tumores. de la L-arginina por medio de una familia de enzimas
Hace más de treinta años, Flower y Vane postularon denominada sintasa de óxido nítrico (SON) virtualmente
la presencia de una tercera ciclooxigenasa al estudiar el en cualquier célula mamífera, pero fundamentalmente
efecto del acetaminofén sobre la síntesis de prostaglandi- en neuronas, macrófagos, neutrófilos, plaquetas, células
nas en el sistema nervioso central.5 Recientemente, esta endoteliales y músculo liso. Se conocen hoy tres isoformas
tercera isoforma, COX-3, fue clonada y muestra caracte- de sintasa de óxido nítrico, dos de ellas son constitutivas
rísticas catalíticas semejantes a la COX-1 y COX-2, pero (cSON), producidas en neuronas (SON1 o nSON) y en el
a diferencia de ellas, predomina en el sistema nervioso endotelio (SON3 o eSON), y una forma que se puede in-
central, es citoplasmática y es capaz de ser inducida por ducir (SON2 o iSON) y responsable de la gran producción
antiinflamatorios.6 El siguiente paso metabólico es la de óxido nítrico durante la inflamación. Las sintasas de
conversión de PGH2 en diferentes prostaglandinas, por óxido nítrico constitutivas son críticas para la fisiología
medio de enzimas recientemente identificadas. normal, ya que este óxido nítrico sirve para mantener
La PGE2 es el eicosanoide predominante en la infla- una adecuada perfusión, regular la permeabilidad mi-
mación humana. Es capaz de producir vasodilatación, crovascular, modular la agregabilidad plaquetaria y su
eritema y, sin bien no es capaz per se de producir dolor, adhesión endotelial, y regular la adhesión leucocitaria al
hay evidencias que sugieren que sensibiliza los recepto- endotelio; así es como su inhibición es capaz de causar
res para la acción de mediadores del dolor, de la misma daño tisular. A la inversa, la producción de óxido nítrico a
manera que lo hace con receptores para la acción de la partir de iSON es capaz de producir lesión en condiciones
histamina y la cinina. Además, su síntesis es capaz de fisiopatológicas, lo cual sugiere un efecto dual del óxido
aumentar por acción de estos dos últimos mediadores. nítrico. Debe destacarse que este paradigma de los efec-
Es un potente pirético. Su producción es estimulada por tos del óxido nítrico ha sido puesto en duda en modelos
IL-1, el factor de crecimiento derivado de plaquetas y el recientes de inflamación y seguramente su papel debe
factor de crecimiento epidérmico a través de la inducción ser diferente en situaciones de inflamación aguda versus
[18]
Fundamentos de la inflamación
Ta b l a 2 . 2 . C i c l o ox i g e n a s a s
I s o f o r m a s d e c i c l o o x i g e n a s a
COX - 1 COX - 2
Constitutiva Sí Sí
(en la mayoría de los tejidos) (sistema nervioso central, riñón, endotelio)
Se puede inducir No Sí
(por inflamación, cambios hemodinámicos,
deprivación salina, gonadotrofinas)
Inhibición Responsable de los efectos adversos de los AINE Responsable de los efectos terapéuticos de los AINE
Peso molecular 71 kd 70 kd
Secuencia aminoácidos Similitud del 60% con COX-2 Similitud del 60% con COX-1
Ácido acetilsalicílico Acetila la serina 530 Acetila la serina 516 (altas dosis)
Enzima acetilada No puede metabolizar el ácido araquidónico Puede metabolizar el ácido araquidónico
Km y Vmax para el ácido araquidónico Similar Similar
Expresión exagerada Tumores de colon y próstata, mama, poliposis familiar,
folículo ovárico preovulatorio
AINE: antiinflamatorios no esteroideos
Ta b l a 2 . 3 . Ef e c t o d e l a s p r o s t a g l a n d i n a s p r i n c i p a l e s
P r o s t a g l a n d i n a ( PGE 2 ) P r o s t a c i c l i n a ( PGI 2 ) T r o m b o x a n o ( T XA 2 )
Dolor Sí Sí Sí
Vasos Vasodilatación o vasoconstricción Vasodilatación Vasoconstricción
Plaquetas -- Disminuye adhesividad Aumenta adhesividad
Eritema Sí Sí --
Secreción gástrica Disminuye Disminuye --
Bronquios Broncodilatación Broncodilatación Broncoconstricción
Circulación pulmonar Vasodilatación Vasodilatación Vasoconstricción
Ductus arteriovenosos Cierre -- Cierre
Renina Liberación Liberación --
Otros efectos Fiebre
Angiogénesis
Natriurética
Contracción del músculo intestinal y uterino
Inducción del parto
Ovulación
inflamación crónica. La iSON es inducida por otros me- del citocromo C, modulando así las cadenas enzimáti-
diadores de inflamación, como histamina, cininas, IL-1, cas de respiración mitocondrial. Al igual que el pH y la
IL-17 y el TNF-α, lo cual sugiere mecanismos de perpe- temperatura, entre otros, es también capaz de desplazar
tuación del daño en condiciones de inflamación. Por su la curva de disociación de la hemoglobina, intervinien-
parte, el óxido nítrico es capaz de estimular o inhibir la do así en el aporte de O2 a los tejidos. En conjunto, esto
síntesis de prostaglandinas, según la concentración del muestra que el óxido nítrico es un factor importante en
primero, en pequeñas cantidades estimula y en grandes el mantenimiento de la integridad del flujo en la micro-
cantidades inhibe. circulación, elemento crítico hoy de la fisiopatología de
El óxido nítrico en la microcirculación es capaz de la sepsis, a tal punto que su producción excesiva, al me-
regular la permeabilidad capilar, producir vasodilatación, nos en dichos modelos, sugiere que tiene algún efecto
es antiagregante plaquetario, actúa sobre la deformabi- de protección de la microvasculatura.8,9 En tejidos espe-
lidad de los eritrocitos y la adhesividad de las plaquetas cíficos como, por ejemplo, el digestivo, el óxido nítrico
y los leucocitos, y, además, es un inhibidor de la oxidasa regularía la permeabilidad epitelial; así, el producto de
[19]
conceptos básicos en reumatología
las sintasas de óxido nítrico constitutivas mantendría la Complemento
barrera de la mucosa intacta y su disfunción intervendría Se describe detalladamente en el capítulo 5 de este
en los mecanismos fisiopatológicos de las enfermedades libro. Este conjunto de proteínas y reguladores, activados
inflamatorias intestinales10 y, también, jugaría un papel por las vías clásica, alternativa o de lectina, tiene como
en el compromiso pulmonar de la escleroderma.11 Ade- funciones principales la capacidad de liberar mediadores
más de los mecanismos descritos en la inflamación, no (anafilactoides), atraer células circulantes (quimiotácti-
deben olvidarse sus funciones antioxidantes; así es como cas), adherirse a las membranas celulares para facilitar
reacciona rápidamente con el superóxido para inactivar su fagocitosis (opsonizante) o inducir cambios en las
sus actividades biológicas, disminuye la migración de membranas que facilitan su lisis (líticas), todas funciones
neutrófilos, fuente principal de oxidación en sitios de centrales de cualquier respuesta inflamatoria.
inflamación, e inhibe la oxidasa de NADPH, el sistema
generador de superóxido encontrado primariamente en Células
los fagocitos. Se describen en detalle en el capítulo 3 de este libro.
Las células juegan un papel central en la respuesta infla-
Moléculas de adhesión matoria por tres motivos. Primero, tienen capacidad para
El papel principal de estas substancias (ver capítulo 4) identificar partículas extrañas y fagocitarlas (neutrófilos
es el de permitir la llegada y la localización de las células o monocitos) induciendo la formación de fagolisosomas,
inflamatorias al tejido. Esto se realiza por la interacción que inician el proceso de degradación enzimático de los
de moléculas de adhesión presentes en las células circu- agentes extraños. Segundo, tienen capacidad de liberar
lantes de la sangre con su complementaria presente en el productos químicos al medio inflamatorio, que contri-
endotelio vascular. Su expresión se encuentra regulada buyen al daño tisular (proteasas, radicales superóxidos),
por varios de los mediadores previamente descritos y al- así como también la producción y la liberación de media-
gunas jugarían un papel central en ciertas enfermedades dores (citocinas, serotonina, histamina). Tercero, actúan
reumáticas.12 como células presentadoras de antígeno para iniciar una
respuesta inmune más específica.
Citocinas
Como se puede apreciar en los capítulos 6 y 7, algunas Infl a m ación aguda
citocinas intervienen en los procesos de maduración de y crónic a
las distintas líneas celulares que posteriormente partici- La inflamación aguda es la respuesta inflamatoria ini-
pan en los fenómenos inflamatorios (factor estimulante cial a las noxas, generalmente virulentas como gérmenes
de colonia de granulocitos, IL-3). Otras tienen efectos más piógenos o cristales. Se caracteriza esencialmente por
específicos en la respuesta inmune que sigue a la presen- una reacción vascular e infiltración de los neutrófilos y
tación antigénica y sus consecuentes activaciones (IL-2, macrófagos. Ésta, a su vez, puede evolucionar a formas
IL-4, INFγ). Finalmente, otras intervienen en los distintos crónicas.
pasos de las respuestas inflamatorias con características La inflamación crónica es la respuesta a noxas de otro
específicas como la estimulación de la angiogénesis (IL- tipo, como la secundaria a infecciones intracelulares
8), la expresión exagerada de moléculas de adhesión (IL-1, como la tuberculosis o la que sigue a respuestas inmu-
IL-8), la proliferación fibroblástica (factor de crecimiento nes específicas. Así, los infiltrados característicos son los
derivado de plaquetas), la disminución (IL-4) o aumento linfocitos, plasmocitos y macrófagos, acompañados de
(IL-17) de las metaloproteinasas, la inducción de cola- proliferación fibroblástica.
genasas (IL-1, TNF-α), la quimiotaxis de los eosinófilos Debe entenderse que esta división es, a veces, arbitra-
(IL-5) o de los neutrófilos (IL-1, IL-8), la producción de ria ya que suelen encontrarse elementos de ambos tipos
reactantes de fase aguda (IL-6, IL-11), la fiebre (IL-1), de inflamación, muchas veces simultáneamente.
etc.1,13 Muchas de ellas han sido responsabilizadas como
centrales en la fisiopatología de enfermedades inflamato-
rias y potenciales blancos terapéuticos.13-18
[20]
Fundamentos de la inflamación
[21]
3
Células del
sistem a inmune
Gloria María Vásquez D.
Precursor DC
plasmocitoide CD34+
Célula dendrítica
Célula B Progenitor mieloide
mielodendrítico
Célula T
Célula NK
Megacariocito
Célula
dendrítica Granulocito
Eritrocitos
Plaquetas Monocito
vadas de monocitos, conocidas también como derivadas léculas del complejo mayor de histocompatibilidad clase I
de células CD14+ o DC1. La segunda vía mieloide pro- o II ni de moléculas coestimuladoras. Son presentadoras
duce células dendríticas independientes de CD14 y son de antígeno pobres, pero muy eficientes en los procesos de
conocidas como células de Langerhans.5 captación y procesamiento del antígeno. Por otro lado7, las
Además, existe un tercer grupo de células dendríti- células dendríticas maduras expresan altos niveles de clase
cas menos conocido, denominado plasmocitoide. Estas I y II y de moléculas coestimuladoras, pero su capacidad
células dendríticas pierden en su superficie marcadores de ingerir o procesar antígenos es muy pobre.2,8
asociados a las células B y presentan moléculas no clásicas En la actualidad se considera que las células den-
más asociadas con las células T (CD4 y CD38) y marca- dríticas son las células presentadoras de antígeno más
dores mieloides (CD123 y CD68). Se conocen también eficaces para desencadenar las respuestas primarias de
como DC2 y son indistinguibles morfológicamente de las los linfocitos T, por varias razones. Primero, las células
células dendríticas mieloides. Su capacidad de producir dendríticas están localizadas estratégicamente en los
IFN a/b, las ha posicionado como las células productoras puntos comunes de entrada de microbios y antígenos
de este tipo de citocinas en los humanos y desempeñan extraños, y en los órganos que pueden ser colonizados.
funciones muy importantes para conectar la inmunidad Segundo, las células dendríticas expresan receptores
innata con la adaptativa.4 que las capacitan para capturar microbios o antígenos.
La distribución diferencial de los receptores immuno- Tercero, estas células migran de manera preferente a las
globulin-like transcript-like y de los receptores de reco- zonas T de los ganglios linfáticos, a través de los cuales
nocimiento de patógenos (PRR), tales como los toll-like circulan los linfocitos T vírgenes en busca de antígenos
(TLR), ha permitido también establecer diferencias de extraños. Cuarto, las células dendríticas maduras expre-
linaje y funcionales entre las dendríticas plasmocitodes san coestimuladores, que son necesarias para activar los
y las dendríticas mieloides.6 linfocitos T vírgenes.
T a b l a 3 .1 . S u b p o b l a c i o n e s d e m a c r ó f a g o s
[25]
conceptos básicos en reumatología
F i g u r a 3 . 2 . I n t e r ac c i o n e s c e l u l a r e s e n l a i n d u c c i ó n d e l a r e s p u e s ta i n m u n e
Anticuerpos
CMH clase II
Célula
plasmática
Hipersensibilidad
Antígenos
tardía
exógenos
extracelulares Célula T Célula T
CD4 DTH
Citotoxicidad
CMH clase I
Célula T
Antígenos citotóxica
intracelulares
Supresión
Célula T
CD 8
Célula T
supresora
presan constitutivamente en ciertos tipos celulares. La las prostaglandinas, y la vía de la lipooxigenasa, la cual
tercera isoforma, la sintasa de óxido nítrico 2, conocida da origen a los leucotrienos.11
también como sintasa de óxido nítrico I o sintasa de óxido Para sus acciones inflamatorias y microbicidas, los
nítrico inducible, es inactiva en condiciones de reposo y macrófagos son atraídos a los sitios de inflamación por
se puede inducir en los macrófagos bajo estimulación de las moléculas de adhesión y por los gradientes de quimio-
las citocinas o los componentes microbianos encontrados cinas. Las moléculas de adhesión, además de mediar la
en el ambiente.10 migración de los monocitos a los sitios de inflamación,
Siempre se ha mantenido la idea de que la función del pueden iniciar la activación celular. Se encuentra una
oxido nítrico es simplemente microbicida, pero hoy se variedad de integrinas en los monocitos y los macrófa-
sabe que posee múltiples acciones en el sistema inmune. gos; ellas median la adhesión de estas células a las células
El oxido nítrico producido por la sintasa de óxido nítrico endoteliales y la trasmigración a través de las paredes
2 afecta la producción de citocinas, entre ellas, las IL-1, de los vasos. Las integrinas también se unen a varios
IL-6, IL-8, IL-10, IL-12, IFNg, TNF-a y la TGF-b. La di- componentes de la matriz del tejido conectivo, inclusive
ferenciación hacia Th1 también parece estar influenciada la fibronectina, la vitronectina, el fibrinógeno, la trom-
por el óxido nítrico. Otros ejemplos de actividades no bospondina, la osteopontina, el colágeno y la laminina,
microbiológicas incluyen la regeneración hepática y la y aumentan así la migración celular. Por su parte, la ac-
inducción de apoptosis.12,13 tivación se produce cuando estas integrinas interactúan
Hay eventos adicionales, como son la acidificación con sus ligandos y generan la activación de las vías de
lisosomal y la restricción del hierro, que ocurren dentro señalización que conducen a la activación de factores de
del macrófago y participan en su actividad microbicida. transcripción y producción de citocinas inflamatorias y
Otros mediadores inflamatorios secretados por el metaloproteinasas.10
macrófago son los metabolitos derivados del ácido ara- Adicional a las moléculas de adhesión, las quimioci-
quidónico. El ácido araquidónico se metaboliza por dos nas desempeñan un papel importante en la mediación de
vías mayores, la vía de la ciclooxigenasa, la cual produce la migración de leucocitos a los sitios inflamatorios. Los
[26]
Células del sistema inmune
receptores de algunas quimiocinas se expresan en las gerada de las moléculas del complejo mayor de histo-
superficies de los monocitos y los macrófagos. Las qui- compatibilidad clase II, los factores de crecimiento y las
miocinas son secretadas por células residentes y reclutan citocinas. Aunque es poco probable que los macrófagos
células inflamatorias. Algunas de las quimiocinas de las desempeñen una función causal en la artritis reumatoide,
que, hasta ahora, se ha reportado que tienen actividad estas células sí poseen amplias capacidades proinflamato-
sobre los monocitos macrófagos son: la proteína quimio- rias, destructivas y remodelativas, y contribuyen en forma
atrayante del monocito, las proteínas inflamatorias del considerable a la inflamación y la destrucción articular en
macrófago, la fractalina, la quimiocina derivada del ma- ambas fases de la enfermedad (fase aguda o fase crónica).
crófago, la monocina inducida por IFNg y otras. La activación observada en el linaje monocítico no sólo se
Como se mencionó previamente, una de las princi- restringe al infiltrado sinovial sino también a los mono-
pales funciones de los monocitos es la fagocitosis. Los citos circulantes. El espectro de la gravedad de la artritis
agentes microbianos y los cuerpos apoptóticos expresan puede asociarse con el grado de activación sistémica de
estructuras moleculares repetidas conocidas como pa- los monocitos/macrófagos.14,15
trones moleculares asociados a patógenos o a cuerpos
apoptóticos, los cuales son reconocidos por los receptores Diferenciación a osteoclasto
de estos patrones denominados PRR, que se expresan en El ligando del receptor activador de NF-kB es esencial
las superficies de los monocitos y las células dendríticas, para la diferenciación a osteoclasto. El receptor activador
y facilitan la fagocitosis del patógeno o del cuerpo apop- de NF-kB, se expresa en monocitos, células dendríticas y
tótico. El cubrimiento de este material extraño o propio osteoclastos. La expresión del receptor activador de NF-
con fracciones del complemento o anticuerpos facilita kB es entonces fundamental para inducir los estados tar-
la fagocitosis mediante los receptores del complemento díos de diferenciación del osteoclasto. Este proceso de
o receptores Fc e induce rearreglos de los filamentos de diferenciación es básico en el desarrollo de las erosiones
actina, los cuales facilitan la internalización y la forma- óseas observadas en la articulación reumatoide.16
ción de vacuolas citoplasmáticas. Además, los fagocitos
mononucleares pueden utilizar otros mecanismos para Linfocitos B
ingerir partículas como la pinocitosis o la endocitosis Los linfocitos B surgen de las células madres hemato-
mediada por receptores.10 poyéticas y pasan a través de una serie de estadios inter-
Otros receptores, como los receptores Fc y del com- medios (Pro-B, Pre-B, B inmaduras y B maduras). Luego
plemento, son importantes en las funciones de los mo- dan origen a las células plasmáticas, las cuales producen
nocitos/macrófagos. Los receptores Fc reconocen las las inmunoglobulinas (tabla 3.2).
partículas opsonizadas con anticuerpos, pero además, Un humano adulto posee aproximadamente de 1011
inducen activación celular por medio de los motivos de a 1012 células B; un buen número se encuentra en el bazo
activación basados en tirosina que se encuentran en su y en la médula ósea, pero también se encuentran en los
dominio intracelular. De los receptores del complemento, ganglios linfáticos, en las placas de Peyer del intestino, en
los más importantes en los macrófagos son el receptor de el tejido linfoide asociado a los bronquios, en la cavidad
C1q y el de CR1. El receptor de C1q promueve la fago- peritoneal y en los sistemas linfático y circulatorio. En
citosis de complejos inmunes, aumenta la citotoxicidad el bazo y en los ganglios linfáticos, las células B se dis-
mediada por anticuerpos y la liberación de citocinas. tribuyen dentro y alrededor de las áreas foliculares. En
Por su parte, el receptor de CR1 remueve los eritrocitos estas áreas existen unas estructuras conocidas como los
cubiertos por C3b y coopera con los receptores Fc para centros germinales, en los cuales se generan las células
mediar la fagocitosis. B de memoria.
Las células B expresan numerosos antígenos de super-
M acrófagos sinov i a les ficie. A algunos de ellos se les conoce su función como
Los macrófagos están presentes en la sinovial normal moléculas de adhesión celular o como receptores de
y se denominan sinoviocitos tipo A. Durante el estado interleucinas, hormonas, mitógenos, componentes del
proliferativo de la sinovitis reumatoide, estas células son complemento o inmunoglobulinas, mientras que otros
predominantes. Aquí, un primer paso es la conversión de se han identificado como moléculas indispensables para
monocitos a macrófagos maduros, los cuales colonizan la la interacción de las células B con las T (figura 3.3).
sinovial y el tejido subyacente. Estas células parecen jugar Los precursores de las células B pasan a través de va-
un papel muy importante en la artritis reumatoide, pues rios estadios de desarrollo en la médula ósea. Una célula
se encuentran en forma abundante en las articulaciones madre pluripotencial posee la capacidad de diferenciarse
inflamadas y en la unión pannus-cartílago, y muestran a células linfoides. Las células pro-B comienzan a expre-
claros signos de activación, tales como la expresión exa- sar antígenos específicos de linaje y las enzimas necesa-
[27]
conceptos básicos en reumatología
F i g u r a 3 . 3 . M o l é c u l a s q u e pa r t i c i pa n e n l a ac t i vac i ó n d e l a s c é l u l a s B
CD45
α ß Lck
ß
α
Y
BTK
Y
Syk
rias para la precombinación de las inmunoglobulinas y de inmunoglobulinas y su rápida secreción. Las células
la expresión de las regiones V de pre-B, además de l5, las plasmáticas se encuentran en los ganglios linfáticos, en
cuales, unidas, conforman la cadena liviana subrogada el bazo y en los sitios de inflamación crónica.
y los correceptores Iga e Igb. Las células pro-B inician
la precombinación de un segmento del gen D con un Subpoblaciones
segmento del gen J en ambos cromosomas. Durante el Las células B se clasifican en tres subpoblaciones que
estadio pre-B, las células recombinan un segmento del difieren en su desarrollo, su funcionalidad y en la expre-
gen V con la unión de DJ en un cromosoma y, si esta sión de sus marcadores de superficie.
precombinación es efectiva, esta cadena pesada (H) se Las células B primarias, o “convencionales” (células
une a la cadena subrogada y no se dan más recombina- B B-2), constituyen la mayoría de las células B, se activan
ciones del gen V. Estas células sufren unas 5 a 6 divisio- fácilmente y se cree que constituyen la primera línea de
nes antes de expresar las cadenas livianas y poseen las respuesta. Las células CD5+ (células B B-1) constituyen
enzimas para formar las inmunoglobulinas de superficie una pequeña proporción de células, abundantes sólo en
y se convierten, entonces, en células B inmaduras. Estas la etapa neonatal y en la cavidad peritoneal de los adultos.
células B inmaduras están listas para que, ante el estímulo Son productoras de altas cantidades de IgM sin respuesta
antigénico, sean convertidas en células tolerantes, células inmune específica, anticuerpos denominados natura-
maduras o células de memoria.10 les y que pueden ser de suma importancia en la defensa
Cuando las células B son activadas, dan origen a las rápida contra algunos patógenos. Por ultimo, están las
células plasmáticas, cuya función primaria es la produc- células B de memoria, que para su generación requieren
ción de anticuerpos. La célula plasmática es una célula de la estimulación antigénica. Los anticuerpos produci-
pequeña redonda u ovalada, con un núcleo denso y com- dos por estas células B de memoria mejoran su afinidad
pacto localizado en uno de los polos. El citoplasma se por procesos conocidos como hipermutación somática y
encuentra ocupado por el retículo endoplásmico rugoso selección del antígeno. Estas células pueden ser retenidas
organizado en láminas y por una cantidad notoria de por meses o años y constituyen un mecanismo de defensa
aparato de Golgi. Estas características reflejan la síntesis más refinado.
[28]
Células del sistema inmune
Ta b l a 3 . 2 . A l g u n a s p r o p i e da d e s b á s i c a s d e l o s l i n f o c i t o s T y B
P r o p i e d a d e s C é l u l a s T C é l u l a s B
Sitio de los precursores Timo Hígado fetal, tracto gastrointestinal, médula ósea
Marcadores Antígenos T Ig de superficie
Distribución tisular Interfolicular (paracortical) Folículos (cortical)
Porcentaje de linfocitos en sangre 80% 20%
Funciones inmunes Ayudadora, supresora, citotóxica Precursora de la célula plasmática
CMH
Célula presentadora
de antígeno
CD4
CD45
TCR
E G LCK LAT
Y D Célula T
Y
Z Z
Y
Y
ITK Y
ZAP-70
de unir al antígeno, ya sea del tipo ab o gd, el cual se une en las moléculas del CMH clase I o II, que se encuentran
en forma no covalente a cinco unidades CD3 (g, d, e, z en la superficie y allí, entonces, están disponibles para ser
y h). Las cadenas a, b, g y d del receptor de la célula T reconocidos por el receptor de células T. Las moléculas
tienen una secuencia de aminoácidos homóloga y con de CD4 son capaces de unirse a las moléculas del CMH
semejanzas estructurales a las cadenas livianas y pesadas clase II y estabilizar la unión del receptor de la célula T a
de las inmunoglobulinas.18 ellas. De igual manera, las moléculas CD8 son capaces de
Los genes que codifican el receptor de la célula T unirse a las del CMH clase I y estabilizar la unión receptor
se encuentran agrupados y sufren un rearreglo duran- de la célula T-antígeno-CMH15 (figura 3.4).
te el proceso de maduración. Esto crea un mecanismo Después de la unión receptor de la célula T-antígeno-
eficiente y compacto que permite los requerimientos de CMH y su estabilización, se inician las señales de acti-
diversidad para un receptor de antígenos. Las células T vación, que se transmiten a través de la célula hasta el
no reconocen proteínas nativas o carbohidratos. A cam- núcleo y generan la expresión de genes cuyos productos
bio, reconocen péptidos pequeños de 9-13 aminoácidos, son importantes para mediar las múltiples acciones de
aproximadamente, derivados de los antígenos proteicos la célula T.
que han sido producidos en las células presentadoras de Una característica de la activación de la célula T es la
antígeno. Estos antígenos provienen de proteínas externas producción de citocinas. Las células T CD4 se categori-
que son tomados por la vía endocítica hacia vesículas zan en dos grupos funcionales con base en las citocinas
intracelulares acidificadas y las cuales son degradadas a que producen: las llamadas Th1, o células T ayudadoras
pequeños péptidos que se asocian con las moléculas clase 1, se caracterizan por producir una serie de moléculas
II del complejo mayor de histocompatibilidad (CMH) o proinflamatorias, como la IL-2, el IFNg, el TNF-a y el fac-
de proteínas que surgen en forma endógena en el citosol tor estimulante de colonias de granulocitos y monocitos
y pueden ser fragmentadas en pequeños péptidos para (GM-CSF), que median las reacciones de hipersensibili-
asociarse a moléculas del CMH clase I. Así, las células dad retardada. En contraste, las células Th2, producen un
presentadoras de antígeno degradan proteolíticamente grupo de citocinas, como la IL-4, la IL-5, la IL-6 y la IL-10,
antígenos y presentan fragmentos peptídicos embebidos las cuales afectan la activación y la diferenciación de las
[30]
Células del sistema inmune
células B. La compleja interacción controlada del sistema cocitos humanos con capacidad de matar ciertas líneas
inmune se ilustra por la observación de que algunas de las celulares de tumores por ensayos de citotoxicidad in vitro.
citocinas producidas por las células Th2 (IL-4, IL-5, IL-10 La caracterización inicial de estas células mostró que se
y TGFb) poseen una potente actividad antiinflamatoria separaban en un gradiente de densidad diferente al de
que regula negativamente la respuesta Th1.18 las células T y B y se denominaron “linfocitos granulares
grandes”. La mayoría de las células asesinas naturales son
M astocito más grandes que los linfocitos y contienen en su citoplas-
Los mastocitos constituyen un grupo celular que con- ma gránulos azurófilos. Esta característica no les es co-
tiene gránulos citoplasmáticos cargados con un sinnú- mún a todos los grupos de las células asesinas naturales;
mero de agentes biológicos activos. Todos los mastocitos por eso, en la actualidad se recomienda que estas células
proceden de progenitores localizados en la médula ósea. se clasifiquen según sus marcadores de superficie.
En condiciones normales, no existen mastocitos circulan- Diferente a los linfocitos T y B, las células asesinas
tes. Los progenitores migran a los tejidos periféricos en naturales no poseen receptores que hayan sufrido rearre-
forma de células inmaduras y se diferencian in situ. Los glo. En los humanos, todas las células asesinas naturales
mastocitos maduros se distribuyen por todo el organismo, maduras poseen el fenotipo CD3-, CD56+ y la mayoría
aunque predominan en las proximidades de los vasos coexpresan CD16+, un receptor de baja afinidad para la
sanguíneos y los nervios, y bajo los epitelios; también se IgG, CD94 y CD161.
encuentran en los órganos linfáticos. Las células asesinas naturales se han implicado no
Existen dos subpoblaciones principales de mastocitos sólo en la lisis tumoral, sino en la inmunidad innata con-
que se diferencian por su localización anatómica, el con- tra bacterias intracelulares, virus y parásitos. Además,
tenido de sus gránulos y su actividad. Una de éstas son los participan en la regulación de la hematopoyesis y de la
mastocitos de las mucosas; su presencia depende de los respuesta inmune adaptativa, y se encuentran en forma
linfocitos T y se identifican por la presencia de triptasa abundante en la sinovial reumatoide. A pesar de que aún
y la ausencia de otras proteasas. Estos mastocitos predo- no es clara su función, se sabe que pueden regular algunas
minan en la mucosa intestinal y en los espacios alveola- funciones de las células T, como la producción de IFN g
res del pulmón. La segunda subpoblacion se denomina y la citotoxicidad, al ejercer como un puente axial entre
mastocitos del tejido conectivo. Éstos dependen poco de inmunidad innata y adaptativa.21
los linfocitos T y se reconocen por contener gránulos de
varias proteasas neutras, tales como triptasa, quimasa, Poli mor fonucle a r es
proteasa similar a la catepsina G y carboxipeptidasa. Los neu trófilos
mastocitos del tejido conectivo se encuentran en la piel y Los polimorfonucleares neutrófilos pertenecen a un gru-
la submucosa intestinal.11 po de células conocidas como granulocitos por el alto nú-
La función más conocida de los mastocitos es su par- mero de gránulos citoplasmáticos que poseen. Comprenden
ticipación en las reacciones de anafilaxis, ya que sufren entre el 60% y el 70% de los leucocitos del torrente sanguí-
un proceso de degranulación posterior a la reacción de neo. Estas células reciben su nombre debido a las caracte-
la IgE con el antígeno y posterior unión a su receptor rísticas de su núcleo, pues es multilobulado y sus gránulos
específico (FceR).11 no adquieren coloración después de las tinciones.
Recientemente se ha implicado el mastocito en la Los neutrófilos se generan a partir de precursores
patogénesis de la artritis reumatoide. Las evidencias mieloides en la médula ósea, por el efecto de factores
experimentales en el modelo de ratón sin mastocitos de- de maduración y diferenciación como el estimulador
mostraron que, en ausencia de este grupo de células, una de colonias de granulocitos y monocitos (GM-CSF) y de
artritis inflamatoria semejante a la artritis reumatoide no granulocitos (G-CSF).22,23
conducía a erosiones. Los argumentos fisiológicos para Estas células poseen diferentes tipos de gránulos li-
explicar este hallazgo se basan en que el mastocito secreta sosómicos: azurófilos o primarios, los cuales contienen
un sinnúmero de mediadores inflamatorios, entre ellos mieloperoxidasa, lisozima, hidrolasas ácidas y un número
citocinas tales como el TNF-a, y que más que las células apreciable de proteínas antimicrobianas como las defen-
de linaje monocito/macrófago, los mastocitos serían las sinas. Los gránulos específicos o secundarios contienen
responsables de los fenómenos destructivos observados lactoferrina, proteasas y proteínas de membrana del sis-
en la artritis reumatoide.19,20 tema NADPH oxidasa; por último, los gránulos terciarios
son ricos en gelatinasa.
Célul a s a sesina s nat ur a les Los polimorfonucleares neutrófilos son parte esencial
Las células asesinas naturales (Natural Killer - NK) se del sistema inmune innato, pues son la primera barrera de
identificaron inicialmente como una población de leu- defensa y reconocen las partículas que van a ser fagocita-
[31]
conceptos básicos en reumatología
das gracias a la presencia de receptores de membrana que Eosinófilos
identifican estas partículas o microorganismos opsoniza- Los eosinófilos son granulocitos cuyos gránulos se
dos por fracciones del complemento, proteína C reactiva tiñen con colorantes ácidos y, por lo general, poseen un
o por anticuerpos especialmente del tipo IgG. núcleo bilobulado. Constituyen del 2% al 5% de los leu-
Una vez las partículas o microorganismos son fagoci- cocitos circulantes. A diferencia de lo que sucede en los
tados, se inicia la producción de los mediadores inflama- neutrófilos, los eosinófilos secretan el contenido de sus
torios, entre ellos, citocinas, prostaglandinas, leucotrienos gránulos al espacio extracelular.
y, de suma importancia, los reactivos intermediarios del Los eosinófilos reconocen las partículas extrañas o
oxígeno. Posterior a la fagocitosis, se da también la fu- los micororganismos por medio de sus receptores Fce y
sión de los lisosomas que permite poner en contacto los receptores de C3b. Esta unión conlleva a la liberación de
microorganismos con sustancias microbicidas.10 las moléculas contenidas en los gránulos, como la pro-
Se sabe que los polimorfonucleares neutrófilos par- teína básica mayor y la proteína catiónica del esoinófilo.
ticipan en los eventos inflamatorios y destructivos de Además y de manera semejante a los polimorfonucleares
muchas de las enfermedades reumáticas, entre ellas, la neutrófilos, el eosinófilo presenta explosión respiratoria y
artritis reumatoide, pero la patología reumática en la que producción de reactivos intermediarios del oxígeno.22
los polimorfonucleares neutrófilos desempeñan un papel Aunque la eosinofilia puede encontrarse ocasional-
importante es la gota. En ésta, las células son reclutadas en mente en todas las enfermedades reumáticas, es carac-
la sinovial y son activadas posteriormente a la fagocitosis terística de algunas de ellas, como en la vasculitis de
de cristales de urato monosódico.16 Churg-Strauss, el síndrome de eosinofilia-mialgia, la
Otras entidades en las cuales se observa un infiltrado fascitis eosinofílica y el síndrome de hipereosinofilia
neutrofílico en algunas de sus formas y que desarrollan idiopático.16
anticuerpos contra sus componentes son las vasculitis. Lo
que aún no queda claro es la participación del neutrófilo
en la patogénesis de estas entidades.16
[32]
Células del sistema inmune
I n t r o d u cc i ó n Moléc ul a s de a dhesión
La adhesión intercelular y la de células con compo- de célu l a s i nmunes
nentes de la matriz extracelular son fenómenos que están Como se expuso anteriormente, se han descrito múl-
mediados por moléculas (receptores de adhesión) que tiples receptores de adhesión y con base en sus caracte-
se expresan en la superficie celular y que interactúan en rísticas bioquímicas y funcionales se han agrupado en
forma específica con ligandos o contrarreceptores. Se diversas familias y superfamilias. Es conveniente recordar
han descrito múltiples receptores de adhesión, los cua- que una familia de moléculas se caracteriza porque sus
les se han agrupado de acuerdo con sus características miembros tienen una homología (secuencia de aminoáci-
bioquímicas y funcionales.1-3 Asimismo, se conocen con dos) entre sí mayor del 50% y que en una superfamilia esta
cierta precisión los fenómenos, normales y patológicos, homología es menor del 50%. Los receptores de adhesión
en los que los receptores de adhesión tienen un papel que son de interés desde el punto de vista inmunológico se
clave. Lo anterior incluye la agregación plaquetaria, la han agrupado en la superfamilia de las inmunoglobulinas
neoformación de vasos sanguíneos, la metástasis de cé- y las familias de las selectinas y las integrinas.
lulas tumorales y la cicatrización.1, 2, 4 En relación con el Antes de exponer las principales características de los
sistema inmune, los fenómenos de adhesión intercelular diferentes receptores de adhesión es importante mencio-
están claramente involucrados en situaciones clave como nar que algunas de estas moléculas tienen la capacidad
la presentación de antígenos a células T, la recircula- de variar la afinidad de su interacción con los ligandos
ción de linfocitos, la citotoxicidad mediada por células correspondientes. Además, es necesario mantener en
inmunes y la inflamación. De esta forma, múltiples re- mente que la expresión de los receptores de adhesión es
ceptores de adhesión participan en forma importante en distinto en las diferentes poblaciones y subpoblaciones de
procesos mediados por células inmunes y caracterizados leucocitos y que ésta cambia con el estado de activación
por inflamación y necrosis.5 Es importante mencionar y diferenciación de estas células. Por último, es necesario
que los receptores de adhesión de interés inmunológico recordar que, acorde con su naturaleza, los receptores de
participan fundamentalmente en fenómenos dinámicos adhesión generan diversas señales intracelulares, posterior
y que existe otra serie de moléculas (por ejemplo, las a la interacción con su correspondiente ligando o contra-
cadherinas) que son expresadas por células no inmunes rreceptor.6, 7 Estas señales son de gran importancia para la
(por ejemplo, las células epiteliales) y que median fenó- supervivencia, la activación y la migración celular.8
menos que son principalmente estáticos (por ejemplo,
la adhesión de las células endoteliales a la membrana Receptores de adhesión de la superfamilia
basal). En el presente capítulo se revisan las moléculas de las inmunoglobulinas
de adhesión que son relevantes desde el punto de vista Como su nombre lo indica, estas moléculas se ca-
inmunológico, así como el fenómeno de extravasación racterizan por poseer uno o más dominios tipo inmu-
de estas células y su importancia en la inflamación. Fi- noglobulina. Estos dominios están constituidos por 110
nalmente, se exponen las perspectivas terapéuticas que aminoácidos, aproximadamente, poseen 7 ó 9 haces
ofrece este campo. antiparalelos y no tienen una función específica. En la
[35]
conceptos básicos en reumatología
tabla 4.1 se anotan los principales receptores de adhe- Las moléculas de adhesión intercelular ICAM-1, ICAM-2
sión que pertenecen a esta superfamilia. La molécula e ICAM-3 interactúan principalmente con integrinas de
CD2 (también denominada como LFA-2) se expresa en leucocitos y tienen un importante papel en los fenómenos
todos los linfocitos T y las células NK, interactúa con de presentación de antígeno, citotoxicidad mediada por
LFA-3 (CD58) y algunos datos indican que también lo leucocitos y extravasación de los mismos. La ICAM-1
hace con CD59. LFA-3 se expresa en diferentes células, (CD54) se expresa en leucocitos y en células endoteliales
tanto derivadas de la médula ósea como no hematopoyé- activadas e interactúa principalmente con las integrinas
ticas. Las señales generadas a través de CD2 tienen una de leucocitos LFA-1 y Mac-1. Al igual que la ICAM-3, la
importante función de coestimulación en la activación ICAM-1 tiene un papel importante en la formación de la
de los linfocitos T. sinapsis inmunológica, la adhesión de células dendríticas
La molécula CD31 (PECAM-1) se expresa en leuco- a linfocitos T y la activación de estas últimas. Por lo an-
citos, plaquetas y células endoteliales (principalmente terior, la ICAM-1 y la ICAM-3 son moléculas relevantes
en las uniones intercelulares) y su ligando es la misma en la generación de la respuesta inmune. En contraste
molécula (interacción homofílica CD31:CD31), así como con la ICAM-1, la ICAM-2 (CD102) se expresa en forma
la integrina αvβ3. Este receptor de adhesión es importante constitutiva en las células endoteliales y diferentes da-
en la interacción leucocito-endotelio y participa en el tos indican que esta molécula tiene menos importancia
fenómeno de migración transendotelial de leucocitos. en la generación de la respuesta inmune. La ICAM-2
T a b l a 4 .1 . P r i n c i p a l e s r e c e p t o r e s d e a d h e s i ó n q u e p a r t i c i p a n e n e l f e n ó m e n o i n f l a m a t o r i o
F a m i l i a y r e c e p t o r L i g a n d o ( s ) D i s t r i b u c i ó n c e l u l a r
Superfamilia de la Ig
– CD2 (LFA-2) CD58 (LFA-3) Células T, linfocitos NK
– CD31 (PECAM-1) CD31 (PECAM-1) Células endoteliales
– CD54 (ICAM-1) CD11a,b/CD18 (LFA-1, Mac-1) Células endoteliales, leucocitos, otras células
– CD102 (ICAM-2) CD11a,b/CD18 (LFA-1, Mac-1) Células endoteliales, leucocitos
– CD50 (ICAM-3) CD11a/CD18 (LFA-1), DC-SIGN (CD209) Leucocitos
– CD106 (VCAM-1) CD29/CD49d (VLA-4), integrina a4b7 Células endoteliales, monocitos
– JAM-1 JAM-1, CD11a/CD18 (LFA-1) Células endoteliales, leucocitos
– JAM-2 JAM-3, CD29/CD49d (VLA-4) Células endoteliales cuboidales
– JAM-3 JAM-2,-3, CD11b/CD18 (Mac-1) Células endoteliales, leucocitos
Selectinas
– CD62L GlyCAM-1, CD34, MAdCAM-1 Leucocitos
– CD62E CLA, ESL-1 Células endoteliales
– CD62P PSGL-1, CD24 Células endoteliales, plaquetas
Integrinas
Subfamilia b1
– CD29/CD49a,b,c,e,f Colágeno, laminina, fibronectina Amplia
(VLA-1,-2,-3,-5,-6)
– CD29/CD49d (VLA-4) CD106 (VCAM-1), JAM-2, fibronectina Leucocitos
Subfamilia b2
– CD11a/CD18 (LFA-1) ICAM-1,-2,-3, JAM-1 Leucocitos
– CD11b/CD18 (Mac-1) ICAM-1, fibrinógeno, factor C3b, JAM-3 Células mieloides
Subfamilia b7
– a4b7 MadCAM-1, fibronectina, CD106 (VCAM-1) Linfocitos intraepiteliales, linfocitos T y B sanguíneos
– aEb7 Cadherina-E Linfocitos intraepiteliales
Otros receptores
– CD209 (DC-SIGN) CD50 (ICAM-3) Células dendríticas
– CD43 Galectina-1, ICAM-1 (?), HLA clase I (?) Leucocitos
– CD44 Ácido hialurónico, fibronectina, colágeno Amplia
– GlyCAM-1 CD62L (selectina-L) Células endoteliales cuboidales
–MAdCAM-1 Integrina a4b7, CD62L (selectina-L) Células endoteliales cuboidales
[36]
Mecanismos de localización de
células inmunes: moléculas de adhesión
interactúa también con LFA-1 y es posible que, además, diciones, la selectina-L que se encuentra en la membrana
lo haga con Mac-1. Por otra parte, la ICAM-3 (CD50) se es hidrolizada por una metaloproteasa y un fragmento de
expresa exclusivamente en células derivadas de la médula este receptor de adhesión es liberado y puede ser detecta-
ósea (incluso, en las células de Langerhans de la piel)9 e do en forma soluble en los líquidos biológicos.14,16 Se ha
interactúa tanto con integrinas de leucocitos como con la observado que CD62L interactúa en forma específica con
molécula DC-SIGN (CD209), la cual se detecta en células diversos carbohidratos unidos a moléculas de naturale-
dendríticas derivadas de la médula ósea. Se ha propuesto za peptídica. Hasta el momento, se han descrito diversas
que la ICAM-3 es una molécula fundamental en la gene- moléculas que interactúan con la selectina-L, pero los li-
ración de la sinapsis inmunológica, en la generación de gandos fisiológicos parecen corresponder exclusivamente
la respuesta inmune y en otros fenómenos importantes a MAdCAM-1 y a una glicoforma de CD34 que específi-
de las células inmunes.10, 11 Se han descrito también las camente se detecta en las células endoteliales.17,18 Aunque
moléculas ICAM-4 y -5, pero por su patrón de expresión diversos datos indican que GlyCAM-1 interactúa específi-
(eritrocitos, sistema nervioso central) y función, éstas no camente con CD62L19, parece evidente que esta molécula
son de importancia inmunológica. no media fenómenos de adhesión intercelular ya que no
La molécula VCAM-1 (CD106) se expresa princi- posee una región transmembrana y no se ha detectado en
palmente en células endoteliales (también se detecta la superficie celular. A pesar de que los ligandos de CD62L
en algunas células derivadas de la médula ósea) y tiene no están plenamente caracterizados20,21, es evidente que
como contrarreceptores a las integrinas VLA-4 y α4β7. las células endoteliales activadas y aquéllas con morfología
La principal función de este receptor es la de mediar las cuboidal expresan contrarreceptores de esta selectina que
interacciones leucocito-endotelio, pero también partici- hacen posible la interacción leucocito-endotelio.22
pa en la adhesión de células progenitoras de la médula La selectina-E (CD62E) se expresa en las células endo-
ósea con el estroma y en la diferenciación de las células teliales e interactúa con las moléculas CLA (antígeno de
de músculo estriado. Recientemente se han descrito tres linfocitos cutáneos) y ESL-1, que se detectan en algunas
receptores adicionales (moléculas JAM) que tienen un subpoblaciones de leucocitos.23 Las células endoteliales
papel importante en la interacción leucocito-endotelio en reposo no expresan CD62E, pero posterior a su activa-
y la extravasación de células del torrente sanguíneo. La ción (por ejemplo, con TNF-α) ocurre una inducción del
molécula JAM-1 se expresa en leucocitos y células endo- gen correspondiente. Como en el caso de la selectina-L,
teliales (principalmente en las uniones intercelulares) y se también se ha descrito una forma soluble de CD62E en el
ha descrito que tiene como ligandos a la integrina LFA-1 y, suero, cuyo nivel parece ser proporcional al grado de ex-
a través de una interacción homofílica, a la misma JAM-1. presión en los tejidos. Por último, la selectina-P (CD62P)
El segundo miembro de este grupo (JAM-2) se expresa se detecta tanto en las células endoteliales como en las
en células endoteliales (principalmente en el endotelio plaquetas e interactúa con el ligando de selectinas mejor
cuboidal de las vénulas poscapilares y en los vasos linfáti- caracterizado desde el punto de vista estructural y fun-
cos) y tiene como contrarreceptores a la integrina VLA-4 cional, la molécula PSGL-1.24 Las plaquetas y el endotelio
y a JAM-3. El último miembro de este grupo (JAM-3) se en reposo no expresan CD62P, pero bajo condiciones de
expresa, al igual que JAM-1, en células endoteliales y di- activación se induce rápidamente el transporte de esta
ferentes subpoblaciones de leucocitos. Se ha descrito que molécula de sus depósitos intracelulares hacia la mem-
esta molécula tiene diferentes ligandos que incluyen a la brana plasmática, donde se le detecta minutos después
misma JAM-3, a JAM-2 y a las integrinas de leucocitos de la adición del estímulo inductor de activación. La mo-
Mac-1 y α xβ2. Como se ha mencionado anteriormente, lécula PSGL-1 se detecta en diferentes subpoblaciones de
las moléculas JAM, al igual que CD31, se localizan en las leucocitos y funciona también como un receptor de adhe-
zonas de unión célula-célula de diferentes endotelios y se sión que genera señales de activación e induce distintos
ha propuesto que todas ellas tienen un papel relevante en fenómenos celulares. Como se expone a continuación,
la regulación de la permeabilidad vascular. las selectinas tienen un papel fundamental en las etapas
iniciales de la interacción leucocito-endotelio y están
Selectinas claramente involucradas en la generación del proceso
Las selectinas se caracterizan por poseer regiones de inflamatorio, así como en el fenómeno de recirculación
repetición propias de las proteínas reguladoras del com- de linfocitos.25
plemento, así como un dominio tipo factor de crecimien-
to epidérmico y otro más tipo lectina.12,13 La selectina-L Integrinas
(CD62L) se expresa con intensidad variable en la mayoría Estos receptores de adhesión corresponden a molécu-
de los leucocitos y esta expresión disminuye significativa- las heterodiméricas constituidas por una cadena α y otra
mente luego de la activación celular.14,15 Bajo estas con- β6,26,27 Con base en el tipo de cadena β que poseen (que se
[37]
conceptos básicos en reumatología
designan con números arábigos), este numeroso conjunto antígenos de diferenciación de leucocitos CD11a/CD18
de moléculas (más de 22) se ha agrupado en subfamilias.28 y se le refiere con mayor frecuencia como la molécula
Las diversas cadenas α se identifican mediante números LFA-1. Esta integrina se expresa en forma constitutiva
(arábigos o romanos) o letras. Las integrinas muestran un en todos los leucocitos y tiene como contrarreceptores a
fenómeno que ha sido denominado como activación, que las moléculas de adhesión intercelular ICAM-1, ICAM-2
consiste en el incremento en la afinidad por sus ligandos e ICAM-3, así como a JAM-1. LFA-1 media fenómenos
o contrarreceptores.29 Esta activación puede ser inducida de adhesión de leucocitos entre sí y de éstos con células
por señales intracelulares y extracelulares y resulta en un endoteliales. De esta forma, esta integrina tiene gran im-
incremento de la adhesividad de la célula que expresa portancia en la extravasación de leucocitos, la respuesta
a la integrina.30 De esta forma, una célula puede incre- inflamatoria, la generación de la respuesta inmune y la
mentar o disminuir su capacidad de adhesión mediada fase efectora de la misma. Al heterodímero α Mβ2 (CD11b/
por integrinas dependiendo de su estado de activación.31 CD18) se le denomina con mayor frecuencia como Mac-1
Las subfamilias de integrinas de interés inmunológico y se ha determinado que se expresa exclusivamente en
corresponden a las que posen en común a la cadena β1, células mieloides. Esta molécula corresponde también a
la β2 y la β7. un receptor para complemento (CR3) y, por esta razón,
Las integrinas β1 han sido denominadas también interactúa tanto con el factor C3b de este sistema como
como moléculas VLA y una o varias de ellas se detec- con ICAM-1 y JAM-3. De acuerdo con lo anterior, este
tan en prácticamente todas las células de los mamífe- receptor participa tanto en el proceso de fagocitosis de
ros. Una notable excepción a lo anterior lo constituyen partículas opsonizadas por complemento, como en la
los leucocitos polimorfonucleares neutrófilos, que al adhesión entre leucocitos y de éstos con el endotelio. La
parecer sólo bajo ciertas condiciones expresan al hete- integrina α Xβ2 muestra un patrón de expresión y fun-
rodímero CD49d/CD29 (α4β1). Los distintos miembros ciones similares (receptor de complemento, adhesión) a
de ésta y otras subfamilias se distinguen por el tipo de Mac-1, en tanto que el heterodímero αDβ2 se expresa en
cadena α que poseen, las cuales se identifican con nú- la mayoría de los leucocitos y parece tener como principal
meros o letras. Estas cadenas polipeptídicas correspon- ligando a ICAM-3.
den también a antígenos de diferenciación de leucocitos La subfamilia de integrinas β7 tiene dos miembros
y, de esta forma, los heterodímeros α1β1 (VLA-1), α 2β1 principales, los heterodímeros α4β7 y αEβ7. Esta integrinas
(VLA-2), α3β1 (VLA-3), α4β1 (VLA-4), α5β1 (VLA-5), α6β1 se expresan fundamentalmente en los linfocitos que se
(VLA-6), corresponden respectivamente a CD49a/CD29, localizan en forma preferencial en los epitelios del tracto
CD49b/CD29, CD49c/CD29, CD49d/CD29, CD49e/CD29 gastrointestinal y del árbol respiratorio. Los linfocitos que
y CD49f/CD29. Existen integrinas β1 adicionales que no se encuentran en la membrana sinovial, principalmente
son de gran interés inmunológico. Cada una de estas inte- bajo condiciones de inflamación, muestran también una
grinas tiene un patrón de expresión distinto y algunas de expresión importante de α4β7. Los ligandos de esta inte-
ellas se comportan como antígenos de activación tardía grina corresponden a MAdCAM-1 y VCAM-1,34,35, así
en linfocitos, mostrando un incremento de su expresión como la fibronectina, en tanto que el contrarreceptor de
tiempo después de la activación de estas células. Los li- αEβ7 es la cadherina-E. Los receptores de adhesión de esta
gandos de las integrinas β1 corresponden a proteínas de subfamilia claramente dirigen a las células linfoides ha-
la matriz extracelular, principalmente colágeno, fibro- cia sitios definidos, razón por la cual se han denominado
nectina y laminina. Para cada uno de estos ligandos, se como diriginas. Otras moléculas, tales como CLA (ligan-
conoce con precisión el sitio de interacción y la secuencia do de CD62E) o MAdCAM-1 (ligando de α4β7 y CD62L),
de aminoácidos que involucra. En el caso particular de también participan en la recirculación de linfocitos y su
la integrina CD49d/CD29 (α4β1), se han detectado como localización preferente en determinados tejidos; por lo
ligandos principales a los receptores de adhesión VCAM- anterior, se les considera también como diriginas.
1 y JAM-2, los cuales se expresan fundamentalmente en
células endoteliales. De esta forma, esta integrina media Otras moléculas de adhesión
fenómenos de adhesión entre células endoteliales y leu- La molécula DC-SIGN (CD209) es una molécula tipo
cocitos y tiene un papel importante en la extravasación lectina que se expresa en las células dendríticas derivadas
de linfocitos en, al menos, dos etapas distintas de su in- de la médula ósea y que tiene como ligando principal a
teracción con las células endoteliales. ICAM-3, aunque también interactúa en forma específi-
Las integrinas de los leucocitos tienen en común a la ca con ICAM-1 e ICAM-2. Diferentes datos indican que
cadena β2 (CD18) e incluyen a los cuatro heterodímeros esta molécula tiene un papel importante en la adhesión
que forma ésta con las cadenas α L , α M, α X y α D.32,33 La de linfocitos T a células dendríticas, que está claramente
primera de estas integrinas (αL/β2) corresponde a los involucrada en la formación de la sinapsis inmunológica
[38]
Mecanismos de localización de
células inmunes: moléculas de adhesión
y que, por lo tanto, participa en el fenómeno de presenta- estudios ex vivo e incluso in vivo. Todos los datos genera-
ción de antígenos. La leucosialina (también denominada dos por estos estudios han dado lugar a un modelo de ex-
como sialoforina o CD43) se expresa en la gran mayoría travasación que propone que este proceso se lleva a cabo
de las células derivadas de la médula ósea y tiene un papel a través de una serie de etapas secuenciales en las que
complejo en fenómenos de adhesión celular. Aunque se participan diferentes receptores de adhesión, así como
han descrito diversos ligandos de esta molécula (ICAM-1, otras moléculas, fundamentalmente citocinas (figura
galectina-1, moléculas HLA clase I), existe controversia 4.1). Este modelo es aplicable tanto a la extravasación
sobre si éstos en realidad reaccionan específicamente con de leucocitos que ocurre durante el proceso inflamato-
CD43 y corresponden a contrarreceptores fisiológicos del rio como a la que se observa durante la recirculación de
mismo. Además, se ha informado que CD43 puede ejercer linfocitos y su localización selectiva en determinados
un efecto repulsivo que inhibe la adhesión intercelular. tejidos.36,37
Además de su papel complejo como presunta molécula
de adhesión, CD43 genera importantes señales intracelu- Inflamación
lares y parece así participar en la activación de leucocitos El proceso inflamatorio se inicia con la liberación de
en general y de linfocitos T en particular como molécula citocinas por las células residentes (principalmente, ma-
de coestimulación. La molécula CD44 es un receptor de crófagos) de un tejido, el cual es inducido por agentes
ácido hialurónico, así como de otros componentes de la externos (por ejemplo, bacterias), internos (por ejemplo,
matriz extracelular. Este receptor de adhesión se expre- cristales de urato monosódico o complejos inmunes) o
sa en múltiples células y en la mayoría de los leucocitos. como consecuencia de un fenómeno de autoinmunidad
CD44 participa en la interacción leucocito-endotelio y patológica (figura 4.1). Entre estas citocinas proinflamato-
funciona como una dirigina en la recirculación de linfo- rias se encuentra el TNF-α que ejerce un poderoso efecto
citos a órganos linfoides periféricos. Algunas isoformas proactivador sobre las células endoteliales de las vénulas
de esta molécula están involucradas en las metástasis he- poscapilares. Este efecto resulta, entre otros fenómenos,
matógenas de distintas células tumorales. en la inducción de expresión de distintas moléculas de
adhesión en las células endoteliales, incluyendo CD62E,
M ec a nismos de CD62P, ICAM-1 y VCAM-1.38 Una vez que ha sucedido
e x t r ava s a c i ó n y lo anterior, el incremento en la adhesividad del endotelio
loc a liz ación de por los leucocitos del torrente sanguíneo hace posible que
célu l a s i nmunes la interacción aleatoria de estas células (contacto inicial)
El proceso de extravasación de leucocitos se ha es- progrese a la siguiente etapa del proceso, que consiste en
tudiado en gran detalle, fundamentalmente a través de el rodamiento de los leucocitos sobre el endotelio activa-
modelos in vitro, los cuales se han complementado con do.39,40 Este contacto inicial y el rodamiento están media-
Figura 4.1. Proceso de extravasación de leucocitos hacia un foco inflamatorio. Como se especifica en el texto, en este proceso se pueden
identificar diferentes etapas, las cuales han sido señaladas con números. La denominación de cada etapa se menciona a continuación y
las principales moléculas de adhesión y citocinas involucradas se anotan entre paréntesis: 1) generación del foco inflamatorio y liberación
de citocinas (TNF-α y quimiocinas); 2) difusión de citocinas quimiotácticas y su localización en la cara luminal del endotelio (quimiocinas);
3) activación de endotelio (TNF-α); 4) contacto inicial (selectinas, sus ligandos y VLA-4/VCAM-1); 5) rodamiento (selectinas, sus ligandos
y VLA-4/VCAM-1); 6) adhesión firme (integrinas β2, ICAM-1, 2 y VLA-4/VCAM-1); 7) polarización del leucocito (quimiocinas, IL-15); 8)
migración transendotelial (integrinas β1 y β2, sus ligandos, PECAM-1, moléculas JAM, cadherina VE); 9) migración a través de la matriz
extracelular (integrinas β1 y sus ligandos); 10) constitución del infiltrado celular inflamatorio.
[39]
conceptos básicos en reumatología
dos principalmente por selectinas y sus contrarreceptores, cito. En este proceso de migración también parecen estar
los cuales interactúan en una forma muy dinámica (cons- involucradas las integrinas β2 y β1.
tantes de pegamiento (Kon) y liberación (Koff) muy rápi- Una vez que el leucocito se ha extravasado, migra
das), lo que hace posible el fenómeno de rodamiento.41-43 por el tejido a través de la matriz extracelular guiado
Se ha encontrado que en las etapas de contacto inicial y por el gradiente quimiotáctico, el cual tiene una ma-
rodamiento participan también la integrina α4β1 (VLA-4) yor concentración de citocinas quimiotácticas en el
y sus correspondientes ligandos (en estas circunstancias, foco inflamatorio. Como se esperaría, los principales
VCAM-1 y JAM-2), esto en el caso de linfocitos y eosi- receptores de adhesión involucrados en esta etapa del
nófilos, ya que no está claro que los neutrófilos expresen proceso son aquéllos que interactúan con proteínas de
esta integrina. Durante el fenómeno de rodamiento, en los la matriz extracelular, que corresponden a las integri-
leucocitos se generan señales intracelulares de activación nas β1. Finalmente, los leucocitos, que han sido guiados
a través de sus moléculas de adhesión (CD62L, integrina por el gradiente quimiotáctico (quimiotaxis) y las zonas
α4β1), así como de diferentes receptores de quimiocinas. con mayor disponibilidad de ligandos de receptores de
Lo último es consecuencia de la presencia de quimiocinas adhesión (haptotaxis), arriban al foco inflamatorio y se
en la cara luminal de las células endoteliales, las cuales constituyen en el infiltrado celular, en el cual usualmente
provienen del foco inflamatorio y se encuentran unidas se observa predominio de una o varias subpoblaciones de
a proteoglicanos de la membrana plasmática de estas leucocitos (neutrófilos, eosinófilos, linfocitos, etc.).44,45Lo
células. Las señales intracelulares generadas a través de anterior indica que el proceso de extravasación hacia un
estos receptores inducen la activación del leucocito y de tejido inflamado no es un fenómeno aleatorio y que en un
sus integrinas (β2 y α4β1) con el consecuente incremento foco inflamatorio dado solamente algunos leucocitos son
en la adhesividad de estas células. Lo anterior tiene como inducidos a migrar.25,46 Se conoce que lo que determina
consecuencia que el fenómeno de rodamiento finalice y la selectividad anterior es fundamentalmente el tipo de
que el leucocito quede firmemente adherido al endotelio quimiocinas que se generan in situ, lo cual a su vez está
(etapa de adhesión firme). fuertemente influido por el agente que induce el proceso
Posteriormente, las señales intracelulares proactiva- inflamatorio.46
doras (fundamentalmente las generadas a través de los Las quimiocinas constituyen una amplia familia de
receptores de quimiocinas) inducen un cambio en la mor- citocinas (al menos 40) de bajo peso molecular que indu-
fología del leucocito, con la generación de un frente de cen activación y quimiotaxis de diversas células, incluso
avance (en la parte anterior de la célula) y una prolonga- leucocitos.47 Estas citocinas ejercen su efecto a través de
ción citoplásmica en el polo opuesto que se ha denomina- la interacción con al menos 15 receptores distintos, los
do como urópodo. Este fenómeno de polarización celular cuales tienen la capacidad de unir en forma específica
incluye también a un rearreglo de diferentes moléculas una o varias quimiocinas.48,49 Las quimiocinas se han
de la superficie celular, observándose una concentración clasificado en varios grupos de acuerdo con la secuen-
de receptores de quimiocinas en el frente de avance y una cia de aminoácidos en su extremo amino-terminal. De
relocalización de ICAM-3 y otros receptores de adhesión esta forma, se han descrito las siguientes subfamilias: 1)
(por ejemplo, CD43) en el urópodo. Esta morfología fa- CC (quimiocinas β), que incluye a CCL15 o RANTES y
cilita el reclutamiento de otros leucocitos (a través del CCL2, CCL7 y CCL8, que corresponden a MCP-1, -2 y
urópodo, que concentra algunas moléculas de adhesión), 3, respectivamente; 2) CXC (quimiocinas α), que incluye
así como la migración celular y la detección del gradien- a CXCL8 y CXCL10 (IL-8 e IP-19, respectivamente); 3)
te quimiotáctico generado por las quimiocinas, lo cual CX3C, que comprende a la fractalcina o CX3CL1; 4) por
es facilitado por la concentración de receptores de estas último, la subfamilia C incluye únicamente a la linfo-
citocinas en el frente de avance. Una vez que los leucoci- tactina o XCL1. Como cada subpoblación de leucocitos
tos se han polarizado, se inicia el proceso de migración (eosinófilos, neutrófilos, etc.) y de linfocitos (células B,
transendotelial, el cual parece ocurrir fundamentalmente células T de memoria, etc.) expresa un conjunto específico
a través de las uniones intercelulares de las células endote- de receptores para quimiocinas, estas citocinas poseen
liales (diapédesis); sin embargo, también se ha informado la capacidad de atraer en forma preferencial o exclusiva
que los leucocitos son capaces de extravasarse migrando a distintos tipos celulares. De esta forma, se conoce que
a través de una célula endotelial. En el primer caso, son un subgrupo de quimiocinas CXC (que incluye a CXCL-8
de particular importancia para el proceso diversos re- o IL-8) ejerce su efecto principalmente sobre neutrófi-
ceptores de adhesión que se concentran en las uniones los, en tanto que otro (que incluye a CXCL-12 o SDF-1)
intercelulares del endotelio, tales como moléculas JAM, lo hace predominantemente sobre linfocitos. En el caso
CD31 y cadherina VE, así como sus correspondientes de las quimiocinas CC, también es evidente que cada
contrarreceptores expresados en la membrana del leuco- una de éstas ejerce, en mayor o menor medida, un efecto
[40]
Mecanismos de localización de
células inmunes: moléculas de adhesión
preferencial sobre subpoblaciones definidas de células
mononucleares o polimorfonucleares. Con relación al
fenómeno inflamatorio, es necesario mantener en mente
que existen otras citocinas quimiotácticas (por ejemplo,
IL-15) y que se han descrito desde hace tiempo diversas
moléculas que también tienen importancia en la atracción
y la activación de leucocitos (prostaglandinas, leucotrie-
nos, factor activador de plaquetas o PAF, etc.).
La información existente sobre receptores de adhesión
y citocinas quimiotácticas ha permitido proponer que la
extravasación de un leucocito está determinada por los
denominados códigos de migración, los cuales estarían da-
dos por el efecto conjunto de la expresión de moléculas de
adhesión definidas y la producción y liberación de ciertas
quimiocinas.50,51 De esta forma, la abundante expresión
de un ligando de un determinado receptor de adhesión
(por ejemplo, MAdCAM-1) en las vénulas poscapilares
regionales y la simultánea liberación de una citocina
quimiotáctica para linfocitos (por ejemplo, CXCL-12 o
SDF-1), resultaría en la inducción de extravasación de
linfocitos T que expresaran la integrina α4β7 y el receptor
CXCR4 (que interactúa con CXCL-12) (figura 4.2). Lo
anterior explica la infiltración selectiva de un tejido por
ciertas subpoblaciones de leucocitos y abre la posibilidad
de manipular en forma discriminada ciertos fenómenos F i g u r a 4 . 2 . Códigos moleculares de migración y extravasación.
inflamatorios, sin afectar a otros (tabla 4.2). Los leucocitos se extravasan siguiendo códigos moleculares, los
cuales están constituidos por receptores de adhesión y factores
quimiotácticos, principalmente quimiocinas. Se muestran dos
Recirculación de linfocitos linfocitos que comparten la expresión de algunas moléculas de
adhesión (VLA, PSGL-1, ESL-1), pero sólo la célula que se representa
Desde hace tiempo se hizo evidente que los linfocitos arriba posee el receptor (CXCR4) para la quimiocina que se encuentra
tienen una vida media relativamente larga y que aquéllos en la superficie del endotelio (SDF-1α), así como la integrina
(heterodímero α4 b7) que interactúa con la dirigina MAdCAM-
que se encuentran en el torrente sanguíneo no están en
1. Por lo anterior, solamente el linfocito de arriba es capaz de
este compartimiento durante toda su existencia. De esta interactuar en forma efectiva con las células endoteliales, lo que
forma, diversas evidencias indican que, en ausencia de permite su migración transendotelial y la localización en el tejido
correspondiente.
un foco inflamatorio, ocurre una extravasación cons-
tante de linfocitos hacia diversos tejidos, principalmente
Ta b l a 4 . 2 . E j e m p l o s d e q u i m i o c i n a s y s u s r e c e p t o r e s q u e pa r t i c i pa n e n f e n ó m e n o s i n f l a m at o r i o s
Q u i m i o c i n a R e c e p t o r C é l u l a s q u e e x p r e s a n e l r e c e p t o r C o n d i c i ó n e n l a q u e p a r t i c i p a
CCL
RANTES (CCL5) CCR1, 3, 5 Monocitos, linfocitos T, eosinófilos Fenómenos inflamatorios crónicos,
hipersensibilidad inmediata
MCP-1, 2, 3, 4 (CCL2, 8, 7, 13) CCR2, 3 Linfocitos T, monocitos Hipersensibilidad de tipo tardío
MIP-1a, b (CCL3, 4) CCR1, 5 Monocitos, macrófagos, linfocitos Th1, Fenómenos inflamatorios crónicos
células dendríticas
Eotaxina (CCL11) CCR3 Eosinófilos Hipersensibilidad inmediata
CXCL
IL-8 (CXCL8) CXCR1, 2 Neutrófilos Fenómenos inflamatorios agudos
GROa, b (CXCL1,2) CXCR2 Neutrófilos Fenómenos inflamatorios agudos
IP-10 (CXCL10) CXCR3 Linfocitos Th1 Hipersensibilidad de tipo tardío
CX3CL
Fractalcina (CX3CL1) CX3CR1 Linfocitos T, monocitos Fenómenos inflamatorios crónicos
[41]
conceptos básicos en reumatología
a órganos linfoides secundarios, y que posteriormente anticuerpos monoclonales dirigidos contra moléculas
estas células ingresan de nuevo al sistema circulatorio a de adhesión. El bloqueo de la integrina a4b1 (VLA-4)
través de los vasos linfáticos.50-52 Como en el caso de la tiene un efecto terapéutico importante en modelos ani-
inflamación, la migración transendotelial de linfocitos males de asma, artritis reumatoide y encefalomielitis o
que se observa durante su recirculación no es un fenó- nefritis autoinmunes. También se ha observado un im-
meno aleatorio y está también determinado por códigos portante efecto antiinflamatorio cuando se administran
de migración.52,53 De esta forma, se ha descrito que los anticuerpos dirigidos contra integrinas de leucocitos,
linfocitos T vírgenes (también denominados naive) mi- contra su principal ligando (ICAM-1) y específicos para
gran en forma preferencial a los ganglios linfáticos; una la integrina α4β7. La administración de estos agentes
subpoblación de células de memoria lo hace a la piel y otra biológicos (producidos en ratones) a humanos tiene to-
al tejido linfoide asociado al intestino.54 Esta localización dos los inconvenientes de los anticuerpos xenogénicos,
preferente de células linfoides ha sido denominada como entre los que se puede mencionar su alta inmunogenici-
homing, expresión que no tiene una traducción afortuna- dad y su vida media corta. Lo anterior ha dificultado la
da al idioma español. Aunque no se ha determinado con realización, en humanos, de estudios a largo plazo con
precisión la función y las consecuencias del fenómeno de este tipo de anticuerpos. A este respecto, se espera que
recirculación de linfocitos, se ha propuesto que asegura la producción de anticuerpos monoclonales quiméricos
la adecuada distribución de las células inmunes y que (anticuerpos “humanizados” de ratón) o sus fragmentos
optimiza su función de vigilancia. sintéticos (fragmentos Fv, que contienen solamente el si-
Es importante mencionar que, bajo condiciones de in- tio de combinación con el antígeno) sea de gran ayuda en
flamación crónica (por ejemplo, en la membrana sinovial este campo. Se espera que la estrategia antiinflamatoria
reumatoide), es posible observar también el fenómeno basada en anticuerpos progrese en forma significativa
de recirculación de linfocitos. Bajo estas condiciones, se a corto plazo.
observa en esos tejidos un cambio en el endotelio de las Como se ha mencionado anteriormente, se conocen
vénulas poscapilares regionales, el cual adopta una mor- con precisión las regiones de los distintos ligandos que
fología cuboidal, la cual es propia de los órganos linfoides son responsables de la interacción con su correspondiente
secundarios. De esta forma, el fenómeno inflamatorio receptor de adhesión. También se conoce, en la mayor
crónico conduce a que el tejido se comporte como un ór- parte de los casos, el sitio de interacción en estos recep-
gano linfoide y que los linfocitos que egresan de ese tejido tores, así como las secuencias de aminoácidos o residuos
a través de los vasos linfáticos reingresen posteriormente de carbohidratos que reconocen los mismos. Lo anterior
al mismo mediante su extravasación selectiva. ha permitido generar diversas moléculas sintéticas que
tienen la capacidad de bloquear la interacción de selec-
Pe r s pe c t i va s t e r a pé u t ic a s tinas con sus ligandos, así como la de integrinas β1 y
Toda la información anterior hace evidente que los β2 con sus contrarreceptores. Aunque es ampliamente
receptores de adhesión tienen un papel fundamental en conocido que el proceso de llevar a la práctica clínica
la patogenia del fenómeno inflamatorio y que es posible este tipo de substancias es largo, se espera que también
ejercer un efecto terapéutico sobre el mismo mediante la este tipo de estrategia antiinflamatoria tenga un progreso
manipulación farmacológica de estos receptores.55,56 Esta significativo en un futuro no muy lejano.
información también hace evidente que, desde el punto Diferentes estudios han demostrado que múltiples fár-
de vista teórico, el bloqueo de una de las etapas de la in- macos antiinflamatorios de uso común tienen efecto sobre
teracción leucocito-endotelio tenga como consecuencia la expresión o la función de los receptores de adhesión. A
que las subsiguientes no sucedan y que, por lo tanto, el este respecto, se ha encontrado que los glucocorticoides
proceso inflamatorio se vea interrumpido. Existen dos es- inhiben la expresión de receptores de adhesión que se de-
trategias principales para la manipulación farmacológica tectan en las células endoteliales (ICAM-1, VCAM-1), por
de las moléculas de adhesión, el bloqueo de la interacción lo que interfieren con la interacción leucocito-endotelio.34
ligando-receptor y la inhibición de la expresión o la ac- Además, estos fármacos inhiben la síntesis de citocinas
tivación de los receptores de adhesión. involucradas en la activación de células endoteliales, así
El bloqueo de la interacción de una molécula de adhe- como de aquellas con efecto quimiotáctico (por ejem-
sión con sus respectivos ligandos o contrarreceptores se plo, TNF-α y CXCL8 o IL-8, respectivamente). También
puede obtener con el empleo de diferentes herramientas, existen evidencias de que otros agentes inmunosupre-
principalmente con anticuerpos monoclonales y ligandos sores, como el metotrexate, y antirreumáticos, como las
solubles. Diferentes estudios en modelos experimenta- sales de oro, inhiben la expresión de diversos receptores
les indican que es posible bloquear in vivo diferentes de adhesión (ICAM-1, VCAM-1, CD62E) en las células
procesos inflamatorios mediante la administración de endoteliales; es muy probable que parte de la actividad
[42]
Mecanismos de localización de
células inmunes: moléculas de adhesión
farmacológica de estas substancias sea consecuencia de no se ha comercializado. Sin embargo, estos resultados
este efecto. También es posible que esta información sea claramente indican que este tipo de fármacos tiene un
de utilidad para la generación de nuevos compuestos con gran potencial antiinflamatorio. De la misma forma, se ha
mayor actividad antiinflamatoria. encontrado que diferentes estatinas (por ejemplo, simvas-
Desde hace tiempo se conoce que los antiinflamatorios tatina y atorvastatina) bloquean la interacción de LFA-1
no esteroideos ejercen su efecto sobre el proceso inflama- con sus contrarreceptores y los fenómenos de adhesión
torio tanto por la inhibición de ciclooxigenasas, como por intercelular mediados por los mismos. Además, estos in-
mecanismos adicionales. Estos últimos incluyen al blo- hibidores disminuyen también la síntesis de TNF-α, así
queo de algunos factores de transcripción involucrados como de diferentes citocinas quimiotácticas (por ejemplo,
en la regulación de la expresión de genes cuyos productos CXCL-8 o IL-8 y CCL2 o MCP-1). Otro efecto importan-
participan en la inflamación.57 Además, se ha encontrado te de estos agentes farmacológicos es la inhibición en la
que la mayoría de estos fármacos antirreumáticos tienen expresión de moléculas HLA clase II, lo cual interfiere
efectos inhibitorios diversos sobre distintos receptores de con el fenómeno de presentación de antígeno. Resultados
adhesión. A este respecto, se ha encontrado que el ácido preliminares sugieren que estos fármacos tienen un gran
acetilsalicílico induce la hidrólisis de CD62L y su libera- potencial terapéutico como agentes inmunomoduladores
ción al medio extracelular, con la consecuente disminu- y antiinflamatorios en distintas enfermedades mediadas
ción de expresión de este receptor en la superficie de los por el sistema inmune.
leucocitos.58 Otros antiinflamatorios, como la indome- Es evidente que también existen diferentes agentes
tacina o el diclofenaco, ejercen un efecto similar tanto in farmacológicos que en forma indirecta afectan la expre-
vivo como in vitro e inhiben el rodamiento de leucocitos sión o la función de las moléculas de adhesión. Un ejem-
sobre el endotelio activado.59 También se ha encontrado plo notable de lo anterior lo constituyen los bloqueadores
que el piroxicam y el meloxicam inhiben la expresión de del TNF-α (infliximab, etanercept, adalimumab) que, al
la integrina de leucocitos Mac-1 (CD11b/CD18), así como impedir la interacción de esta citocina con sus corres-
su activación. Además, estos antiinflamatorios interfieren pondientes receptores, inhiben la activación de las células
también con la activación de integrinas b1.60,61 endoteliales y, por lo tanto, la interacción leucocito-en-
Los fármacos de uso común como los inhibidores de dotelio. La discusión de este tipo de fármacos está fuera
la fosfodiesterasa (PDE) o de la reductasa de la hidroxi- de los objetivos del presente capítulo.
metilglutaril-coenzima A (HMG-CoA) tiene también
un efecto importante sobre la expresión y la función de Conclusiones
diferentes receptores de adhesión. La pentoxifilina y el Las moléculas de adhesión tienen un papel clave en
rolipram (el primero, un inhibidor inespecífico de fos- diversos fenómenos fisiológicos y patológicos. De par-
fodiesterasas y el segundo, un inhibidor selectivo de la ticular importancia en el área de la reumatología y las
isoforma 4, que preferentemente se expresa en leucocitos) enfermedades mediadas por el sistema inmune resulta su
interfieren con la adhesión de leucocitos al endotelio e clara participación en el fenómeno inflamatorio. De esta
inhiben la polarización y la migración de los linfocitos.62 forma, el conocimiento adecuado de estos receptores per-
Lo anterior parece ser consecuencia de la inhibición de la mite comprender mejor la patogenia de múltiples padeci-
expresión de integrinas β2, del bloqueo de la activación mientos reumáticos y entender los distintos mecanismos
de integrinas β1 y de la interferencia con la expresión de acción de los fármacos con actividad antiinflamatoria.
de selectinas por células endoteliales.63 Además, estos También es claro que este conocimiento ha dado lugar a
inhibidores de PDE bloquean la síntesis de TNF−α e in- la búsqueda de nuevos fármacos que regulen el fenómeno
terfieren con la activación de los linfocitos T. Todos estos inflamatorio y a explorar el potencial antiinflamatorio de
resultados se han observado in vitro y, hasta el momento, medicamentos que fueron inicialmente diseñados con
no es claro que con las dosis de pentoxifilina adminis- blancos terapéuticos diferentes. De esta forma, esta área
tradas en la práctica clínica se consigan estos efectos in del conocimiento es de importancia permanente tanto
vivo. Por otra parte, el rolipram muestra una potencia para el médico general como para aquéllos especializados
mucho mayor, pero este inhibidor selectivo de la PDE4 en el área de la reumatología.
[43]
conceptos básicos en reumatología
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[45]
5
anticuerpos, autoanticuerpos
y sistem a del complemento:
mecanismos de
daño inmune
Alejandro Ruiz-Argüelles
somática, es decir, aquélla de todas las moléculas protei- las clases de inmunoglobulina G (IgG), A (IgA), M (IgM),
cas restantes del organismo. En la actualidad, se sabe que D (IgD) y E (IgE), respectivamente. En las cadenas li-
la diversidad inmunológica se origina a través de una serie geras sólo se reconocen dos isotipos llamados κ y λ. La
de mecanismos que, en conjunto, permiten la síntesis de estructura de los isotipos de las cadenas pesadas confiere
1011 a 1012 moléculas de anticuerpos distintas entre sí. a los anticuerpos sus funciones efectoras, amén de que les
Estos mecanismos son: 1) la abundancia de genes de línea permite, a ciertos isotipos, conformarse como polímeros.
germinal distribuidos en 2 a 3 diversos segmentos; 2) la Como se observa en la figura 5.3, la IgG, la IgD y la IgE
recombinación de los genes de los distintos segmentos; 3) siempre se encuentran en forma de monómeros; la IgA
la imprecisión y la adición de nucleótidos en los sitios de puede encontrarse como un monómero pero también
la recombinación; 4) la hipermutación somática sobre las como un dímero, mientras que la IgM es un pentámero.
secuencias germinales de los genes V, y 5) la combinación La tabla 5.1 resume algunas características de las inmu-
de las dos cadenas que conforman a los receptores.2 noglobulinas humanas.
Las regiones constantes de las moléculas de anticuer- En el curso de una respuesta inmune existe un orden
pos en el hombre presentan cierto polimorfismo que per- en la aparición de los diferentes isotipos de inmunoglo-
mite distinguirlas en clases o isotipos. Los isotipos de las bulinas. Así, en las respuestas primarias, que ocurren
cadenas pesadas se llaman γ, α, µ δ y ε, y corresponden a aproximadamente 2 semanas después del desafío antigé-
T a b l a 5 .1 . P r o p i e d a d e s d e l a s i n m u n o g l o b u l i n a s h u m a n a s
I g G I g A I g M I g D I g E
Clase de cadena H g a m d e
Subclase de cadena H g1, g2, g3, g4 a1, a2
Clase de cadena L k o l k o l k o l k o l k o l
Fórmula molecular g2L2 a2L2 o (a2L2)2 SC*J** (m2L2)5 J** d2L2 e2L2
Valencia 2 2 o 4 10 2 2
Coeficiente S*** 6-7 7 19 7-8 8
Peso molecular, kd 150 160 o 400 900 180 190
Movilidad electroforética g g rápida a b g rápida a b g rápida g rápida
Activa el complemento + no ++++ no no
Concentración sérica, mg/dL 1000 200 120 3 0.05
Vida media, días 23 6 5 3 2
Transferencia placentaria sí no no no no
Degranulación de mastocitos +/- no no no ++++
Lisis de bacterias + + +++ ? ?
Actividad antiviral + +++ + ? ?
[48]
Anticuerpos, autoanticuerpos y sistema del
complemento: mecanismos de daño inmune
nico, el isotipo que predomina es la IgM, una molécula homeostática, y los patogénicos, que sí son responsables
multivalente con gran capacidad de activar al sistema del daño tisular que ocurre en muchas enfermedades au-
de complemento y, por ende, muy eficaz para la destruc- toinmunes. La diferencia primordial entre unos y otros
ción de microorganismos susceptibles. En las respuestas parece ser su grado de maduración. Todas las células B,
secundarias, aquéllas que ocurren cuando persiste o se cuando son estimuladas inicialmente por un antígeno,
repite el desafío antigénico, predominan los anticuerpos sea propio o no, sintetizan moléculas de anticuerpos
de tipo IgG que, amén de ser los más abundantes, tienen codificados por los genes de la línea germinal, es decir,
la capacidad de atravesar la barrera placentaria. Los anti- por genes inmutados obtenidos por la herencia. Estos
cuerpos del isotipo IgA son responsables de la inmunidad anticuerpos suelen ser polirreactivos y de baja afinidad,
de las mucosas, y suelen producirse en respuesta a los lo que quiere decir que reaccionan con varios antígenos,
antígenos que ingresan al organismo por vía respiratoria física y químicamente semejantes entre sí, pero con baja
o intestinal. La inmunoglobulina E es particularmente energía, con todos y cada uno de ellos. Cuando el estí-
eficaz en la eliminación de parásitos con cutícula, aunque mulo antigénico persiste o se repite, ocurren mutaciones
cuando se produce en exceso es responsable de las reac- en la progenie del clon activado, que conducen a la sín-
ciones alérgicas y anafilácticas, mientras que la inmuno- tesis de anticuerpos monorreactivos y de alta afinidad,
globulina D no tiene funciones efectoras conocidas.3,4 es decir, anticuerpos que reaccionan con gran energía
con uno solo de los antígenos que sus predecesores re-
Au toa nticuer pos conocían. Este fenómeno se conoce como maduración
Se denominan así a las moléculas de inmunoglo- de la especificidad y sucede, como ya se indicó, en todas
bulinas dirigidas específicamente contra antígenos los clones de células B, sean dirigidos contra antígenos
propios.5-8 Por mucho tiempo se consideró que los fe- propios o no propios. En el caso de clones autorreactivos,
nómenos autoinmunes, específicamente la presencia de los anticuerpos polirreactivos, codificados por la línea
autoanticuerpos, eran necesariamente anormales, y los germinal inmutada, corresponden a los autoanticuerpos
términos “autoinmunidad” y “enfermedad autoinmune” fisiológicos, también llamados naturales, en tanto que
se usaban como sinónimos. En la actualidad se acepta aquéllos que han madurado su especificidad por muta-
que en los individuos sanos hay clones de células autodi- ciones somáticas, corresponden a los autoanticuerpos
rigidas que no tienen ninguna consecuencia patológica y patogénicos.12-17
que, por el contrario, parecen jugar un papel fisiológico Los genes de la línea germinal que codifican autoanti-
y protector para el desarrollo de diversas enfermedades cuerpos se encuentran en todos los individuos sanos, y se
degenerativas. De hecho, y aunque parezca paradójico, es han conservado a lo largo de la evolución de las especies,
muy probable que las reacciones autoinmunes fisiológicas lo que indica que deben jugar un papel favorable para su
constituyan un mecanismo para evitar el desarrollo de supervivencia. Además, en el repertorio inmunológico
enfermedades por autoinmunidad.9-11 del neonato, la proporción de autoanticuerpos es muy
Es menester entonces reconocer que existen dos gran- abundante, lo que sugiere que forman parte esencial del
des categorías de autoanticuerpos, los fisiológicos, que no sistema inmune ingenuo, antes de su exposición a los
sólo no producen daño sino que parece que su función es antígenos del medio ambiente biológico. Lo que aún no
[49]
conceptos bÁsicos en reumatología
se sabe con certeza es porqué sólo en ciertos individuos clásica, se desencadena por la interacción de complejos
ocurre la aparición de autoanticuerpos patogénicos y, por antígeno-anticuerpo con una molécula del todo seme-
ende, la enfermedad autoinmune. Las explicaciones más jante en su estructura a la MBL, conocida como C1q, que
convincentes en la actualidad son múltiples, tales como la al unirse a las subunidades C1r y C1s (homólogas de las
coexistencia de genes de susceptibilidad, factores hormo- MASP) forma el complejo C1 capaz de escindir y activar
nales, factores ambientales y deficiencias en la remoción a las moléculas C2 y C4. Por cualquiera de las vías que
de restos apoptóticos, entre otras.18-22 se inicie la activación del complemento, todas coinciden
Aceptado el hecho de que el sistema inmunocompe- en la hidrólisis de C3 en sus subunidades C3a y C3b. La
tente normal es capaz de reconocer antígenos propios y, última es responsable de escindir a C5, también en dos
por consecuencia, de que la presencia de células auto- subunidades funcionales, C5a y C5b. Las subunidades
rreactivas en el repertorio inmunológico no es sinónimo C3a y C5a son responsables de las reacciones anafilác-
de enfermedad, parece prudente analizar cuál es el papel ticas en el sitio anatómico donde ocurre la activación
normal de los autoanticuerpos. Con fines didácticos, los del complemento, lo que se traduce en aumento de la
autoanticuerpos fisiológicos pueden clasificarse en seis permeabilidad vascular y extravasación de leucocitos;
categorías, como se resume en la tabla 5.2. la molécula C3b, amén de escindir a C5, es una de las
opsoninas más eficaces, es decir, una molécula promo-
Sistem a del com plem ento tora y facilitadora de la fagocitosis. La subunidad C5b,
Se conoce con este nombre a un complejo sistema de en interacción con los componentes C6, C7, C8 y C9,
proteínas plasmáticas que, de manera semejante al siste- ensamblan complicados polímeros de forma cilíndrica,
ma de coagulación, interactúan en forma de una cascada llamados complejos de ataque a la membrana o MAC (del
sucesiva de activación que resulta en tres consecuencias inglés, membrane attack complex) que se insertan a través
finales: la anafilaxia, la fagocitosis y la citólisis. Por ello, de la membrana de la célula blanco y provocan su lisis
es un sistema central en el proceso inflamatorio que suele por desequilibrio osmótico. En resumen, la activación
acompañar a muchas de las reacciones inmunitarias.23 del sistema de complemento, independientemente de la
El sistema de complemento puede activarse por tres vía que la desencadene, resulta en el proceso de infla-
vías cuya nomenclatura es algo paradójica, y que se es- mación y de necrosis tisular. En diversas enfermedades
quematizan en la figura 5.4. Desde el punto de vista filo- autoinmunes, las lesiones inflamatorias características
genético, la más antigua de ellas es la conocida como la de ciertos órganos, como el riñón y las articulaciones,
vía alterna, que se desencadena por la activación directa son el resultado de la activación del complemento por la
de una de las proteínas del complemento conocida como reacción de autoantígenos con autoanticuerpos.24,25
C3, por diversas sustancias presentes en microorganismos El complemento tiene, además, diversos mecanismos
patógenos, en toxinas o en venenos. Una segunda vía, más de regulación, algunos de ellos plasmáticos, como el in-
reciente en la evolución, se desencadena por la interacción hibidor de esterasa de C1 o el inactivador de C3, y otros
de carbohidratos expuestos en la cápsula de diversas bac- que operan en la superficie celular, como el factor ace-
terias patógenas, con una proteína endógena captadora lerador del decaimiento (CD55 o DAF, del inglés, decay
de manano, llamada MBL (del inglés, mannan-binding accelerating factor) y el factor homólogo de restricción
lectin), que al activarse capta y activa a dos proteasas lla- (CD59 o URF, del inglés, homologous restriction factor).
madas MASP-1 y MASP-2 (del inglés, MBL-associated La deficiencia congénita del inhibidor de C1 se traduce
serine proteases) que, a su vez, escinden otras moléculas clínicamente como edema angioneurótico hereditario,
circulantes del sistema de complemento, llamadas C2 y mientras que la deficiencia en el anclaje de CD55 y CD59,
C4, que finalmente activan a C3. La tercera y más mo- por defectos genéticos en la expresión de glicosil-fosfati-
derna vía desde el punto de visto evolutivo, llamada vía dil-inositol en la membrana celular, es responsable de la
Ta b l a 5 . 2 . C at e g o r í a s f u n c i o n a l e s d e l o s au t oa n t i c u e r p o s
Autoanticuerpos Función
Depuradores Eliminan de la circulación o de los tejidos, células senescentes o modificadas y restos celulares
Potenciadores Colaboran con las funciones efectoras de anticuerpos contra microorganismos patógenos
Reguladores Por medio de circuitos antiidiotípicos, presentan sinergia o son antagonistas del estímulo inducido por un antígeno exógeno
Editores Por medio de la inducción de apoptosis de células inmaduras, participan en la edición del repertorio inmunológico
Protectores Por medio de la modulación de la expresión de autoantígenos, previenen reacciones patológicas
Otros Todos aquellos cuya función se desconoce actualmente
[50]
Anticuerpos, autoanticuerpos y sistema del
complemento: mecanismos de daño inmune
inmunológico, la más lógica de las cuales, en opinión del
Vía clásica Vía de la MBL Vía alterna autor, se presenta en la tabla 5.3.
Por estar fuera del objetivo de este capítulo, no se des-
Unión Ag/Ac Manosa MBL Activador
criben los detalles de cómo operan estos mecanismos en
distintas enfermedades humanas. Baste mencionar que
prácticamente todos ellos participan, en menor o menor
grado, en las diversas enfermedades por autoinmunidad,
C1q, C1r, C1s MBL, MASP 1 y 2 C3
C4,C2 C4,C2 Factor B y D así como en las enfermedades reumáticas reactivas en las
que no participan fenómenos autoinmunes. En el cortejo
sintomático de las enfermedades autoinmunes multior-
gánicas, como el lupus eritematoso sistémico, un meca-
Convertasa de C3 nismo determinado puede ser responsable de algunas
manifestaciones, mientras que, simultáneamente, otro
u otros pueden explicar el resto del cuadro clínico. Por
ejemplo, la anemia hemolítica de un paciente con lupus
C3a y C5a C3b C5b eritematoso es causada por el efecto citotóxico de anti-
C6
cuerpos específicos (I.3.a en la tabla 5.3), a la vez que el
C7
ANAFILAXIA FAGOCITOSIS C8 depósito de complejos inmunes (I.4.a) explica la nefro-
C9 patía, y la infiltración linfoide de sus glándulas salivales
(II.1) es causante del síndrome de Sjögren.
CITÓLISIS
Para finalizar, es importante hacer énfasis en que, sal-
F i g u r a 5 . 4 . Existen tres vías generales para la activación del vo excepciones, el papel fisiopatológico de la respuesta
sistema de complemento. La vía clásica se desencadena por la
unión de un antígeno con un anticuerpo, por lo que supone la inmune no se puede sostener de manera tan definitiva
participación de la inmunidad adaptativa. La vía de la MBL se como en el caso de las enfermedades infectocontagiosas.
desencadena por la reacción de radicales de manosa, presentes en
múltiples microorganismos patógenos, con una lectina que tiene
Si tratásemos de hacer una analogía con los postulados de
gran afinidad por este tipo de azúcar. La vía alterna, seguramente
la más ancestral de las tres, es activada directamente a partir de C3
por diversos factores que se encuentran en exotoxinas, endotoxinas
y venenos de especies animales. Todas confluyen en una vía común, Ta b l a 5 . 3 . M e c a n i s m o s i n m u n o pat o l ó g i c o s
que resultan en la anafilaxia, la fagocitosis y la lisis, tanto de las I) Humorales
células involucradas en el proceso de activación, como de otras que
se encuentren en la vecindad. Estos fenómenos se traducen clínica e 1) Inactivación o estimulación:
histopatológicamente como inflamación. a) Hormonas
b) Enzimas
c) Receptores
hemólisis que se observa en la hemoglobinuria paroxística d) Proteínas nucleares
nocturna. Se ha descrito la deficiencia adquirida de estos 2) Liberación de mediadores químicos:
últimos reguladores, CD55 y CD59, en algunos pacientes a) Anafilaxia generalizada
con lupus eritematoso sistémico.26 b) Anafilaxia localizada
3) Efecto citotóxico:
M ec a nismos de da ño a) Elementos formes de la sangre
i nmunológico b) Células endoteliales
Aunque tradicionalmente concebido como un protec- c) Otras células
tor, el sistema inmune puede ser el responsable de lesio- 4) Depósito de complejos inmunes:
nes orgánicas o alteraciones funcionales diversas, como a) Con leucocitos polimorfonucleares
respuesta a la presencia de un antígeno. Ilustrativos de b) Sin leucocitos polimorfonucleares
esta aseveración es el caso de la reacción asmática en res- II ) C e l u l a r e s
autoinmunes, en los que la respuesta inmunológica des- Tomado de: Pérez-Tamayo R, Ruiz-Argüelles A. Mecanismos de daño inmunológico.
regulada desempeña un papel fisiopatológico total. Exis- En: Martín-Abreu L, Martín-Armendariz LG, editores. Fundamentos del
diagnótico. Décima edición. México, D.F.: Méndez Editores; 2002. p.739-57.
ten diversas clasificaciones de los mecanismos de daño
[51]
conceptos bÁsicos en reumatología
Koch para afirmar el origen inmunológico de una enfer- encuentra en personas sin enfermedad alguna o afec-
medad, encontraremos límites y controversias en la gran tadas por otras enfermedades, relacionadas o no en sus
mayoría de las veces, ya que: 1) los efectores inmunológi- mecanismos fisiopatológicos, y 3) salvo en situaciones
cos en cuestión (verbigracia, anticuerpos antinucleares) muy contadas (la alergia, por ejemplo), la transferencia
se encuentran en la mayoría, mas no en todos los sujetos de los efectores inmunológicos no es capaz de reproducir
afectados por la enfermedad asociada (lupus eritematoso la enfermedad con la que se asocia.27
en este ejemplo); 2) el mismo efector inmunológico se
[52]
Anticuerpos, autoanticuerpos y sistema del
complemento: mecanismos de daño inmune
[53]
6
inmuno-
regulación
en enfer medades reum áticas
Citocina C é l u l a s p r o d u ct o r a s Funciones
[57]
conceptos bÁsicos en reumatología
T a b l a 6 .1 . C i t o c i n a s y s u s p r i n c i p a l e s f u n c i o n e s ( c o n t i n u a c i ó n )
Citocina C é l u l a s p r o d u ct o r a s Funciones
[58]
Inmunorregulación en
enfermedades reumáticas
T a b l a 6 .1 . C i t o c i n a s y s u s p r i n c i p a l e s f u n c i o n e s ( c o n t i n u a c i ó n )
Citocina C é l u l a s p r o d u ct o r a s Funciones
NK = célula citotóxica natural; LAK= linfocito citotóxico; Mo/MØ = monocito/macrófago; MO= médula ósea.
células en el paciente con enfermedad activa; por otro alcanzan la remisión.6 Curiosamente, comparado con
lado, es probable que en algunos pacientes la alteración alteraciones en la producción de otras citocinas, lo hace
se deba a un defecto primario de la célula T que, quizá, en forma relativamente temprana.6 Es posible que la in-
anteceda a la aparición de la enfermedad y predisponga hibición de la sobreproducción de IL-10 sea un factor que
al individuo a desarrollarla. facilite que los pacientes logren la remisión. Tanto en un
El interferón γ (IFNγ), es otra citocina clave en el modelo en ratón, como en un estudio clínico piloto, se
proceso de activación de las células T, particularmen- demostró que el bloqueo de IL-10 disminuye la actividad
te Th1. En forma análoga a la IL-2, los niveles de ARN del LES.25,26 Se demostró, además, que la producción de
mensajero (ARNm) para IFNγ en células mononucleares anticuerpos anti-ADN de doble cadena es mucho más
de pacientes con LES que son estimuladas in vitro son sensible al bloqueo de IL-10 que la producción de inmu-
muy bajos. Los pacientes con LES tienen frecuentemente noglobulinas totales.26
anticuerpos anti-IFNγ; por otro lado, dicha citocina se Horwitz et al. han mostrado que en las fases tempra-
expresa en altas concentraciones en el tejido renal de nas del lupus existe un desequilibrio entre la producción
pacientes con nefropatía. Lo anterior sugiere que existe de IL-10 e IL-12. En varios trabajos se ha encontrado una
una producción continua de IFNγ en los pacientes con relación inversa en la producción de ambas citocinas, lo
LES y que dicha citocina podría tener un papel pato- cual apoya el concepto de que la disminución en la pro-
génico local. Además, el IFNγ promueve la activación ducción de citocinas Th1 en el LES puede ser secundaria
policlonal de las células B en los pacientes con LES, lo al desequilibrio entre la IL-10 y la IL-12.6,27 Liu y Jones
que puede contribuir a la producción de anticuerpos en comprobaron que los monocitos son los responsables de
esta enfermedad. la deficiencia en la producción de IL-12 y que la adminis-
•Polarización Th2: hiperactividad de células B con tración de IL-10 acentúa dicha deficiencia.28 Esto se debe
inmunidad celular deprimida. La producción de IL-10 a que la síntesis de IL-12 es inhibida por IL-10; la adición
en el sistema inmune de los pacientes con LES está anor- de IFNγ tiene un efecto contrario. Estos datos cobran
malmente aumentada.20-23 Dicho aumento se debe a la relevancia especial a la luz de la información que enlaza
producción de IL-10 por monocitos, células B y, posible- la función de las células dendríticas y la IL-12, al tiempo
mente, por células T de memoria CD4+CD45RO+.21 Los que se sabe que el defecto en la producción de IL-12 se
familiares sanos de pacientes con LES que pertenecen a asocia de manera importante con la duración del periodo
familias multicaso tienen una alteración similar, pero de de remisión en los pacientes con LES (vide infra).
menor magnitud.24 Esto sugiere que se trata de un defecto La IL-10 protege a los linfocitos B de la muerte en los
subyacente, probablemente un factor que predispone a la órganos linfoides mediante la inducción de Bcl-2, una
aparición de la enfermedad. Por otro lado, el aumento en proteína antioxidante que previene la muerte celular pro-
la producción de IL-10 desaparece cuando los pacientes gramada (apoptosis). La eliminación de linfocitos B por
[59]
conceptos bÁsicos en reumatología
Estimulación F i g u r a 6 . 1 . Principales
Célula T Inhibición circuitos de regulación inmune
CD8 en el humano.
Célula T
IL-10 CD4 MØ = Macrófago
Th1
IL-2
IFN- IL-10
CD28 Célula
plasmática
IL-1 IL-4
B7 IL-6
IFN- IL-10
TNF- IL-13
MØ
IL-4
L-
IL-5
IL-10
CD28 CD40 Célula
C
CD40L B
IL-6
Célula T IL-13
CD4
Th2 IL-10
IL-6 Anticuerpos
Célula T
CD8
IL-1, B7
IFN-
AIL-10? MØ
IL-2
IFN-
IL-4 Anticuerpos
Th1 IL-5 patogénicos
CDp IL-6
IL-10
IL-13
Figura 6.2. Principales
Th0
alteraciones de la
inmunorregulación en
células de pacientes
con lupus eritematoso Th2
sistémico. Célula B
Estimulación
MØ = Macrófago; ADN-anti-ADN Inhibición
ARN-anti-RNP
CDp = célula dendrítica.
apoptosis en los centros germinales es determinante en recombinante a los cultivos de células B de pacientes con
la constitución de un repertorio normal de linfocitos B LES aumenta la producción de IgG.
libre de células autorreactivas. La interpretación de varios • Alteraciones en la función de células dendríticas.
trabajos realizados en células B de pacientes con LES dan Recientemente, los IFN tipo I (α, β, Ω) han ocupado un
la idea de que la IL-10 actúa de manera directa sobre la papel importante en los modelos de patogénesis del LES31;
conformación del repertorio de células B, favoreciendo de hecho, se sabe que en ratones NZB, la enfermedad es
la permanencia de aquéllas que son autorreactivas. Tam- menos grave en ausencia del receptor de IFNα/β.32
bién indican que la producción excesiva de esta citocina Para que un monocito sea capaz de iniciar una res-
puede explicar la disminución de la inmunidad mediada puesta inmune, es necesario que se diferencie en una
por células y particularmente, la deficiente producción y célula dendrítica. La evidencia indica que el suero de los
respuesta a la IL-2 (vide supra). Así, la sobreproducción de pacientes con LES es un ambiente que favorece dicha di-
IL-10 es teóricamente congruente con las teorías vigentes ferenciación. Cuando se cultivan monocitos de sujetos
sobre la patogénesis del LES.29 Es probable que el desequi- sanos en suero de pacientes con LES, rápidamente ad-
librio en la síntesis de IL-10 sea un factor que facilite la quieren morfología y función de célula dendrítica.33 El
aparición de la enfermedad y que, una vez desencadenada, IFNα es el responsable de esa propiedad.34 Es importante
la amplifique y perpetúe.30 señalar que no todos los pacientes con LES tienen nive-
La producción de otra de las citocinas Th2, la IL-4, se les elevados de IFNα en suero. Sin embargo, las células
ha encontrado incrementada en células mononucleares mononucleares de una gran proporción de ellos (entre el
de pacientes con LES. Por otro lado, el adicionar IL-4 50 y el 100%) tienen una sobreexpresión de genes regu-
[60]
Inmunorregulación en
enfermedades reumáticas
lados por el IFNα.35,36 Pascual et al. han propuesto que T a b l a 6 . 2 . P r i n c i p a l e s c a r a ct e r í s t i c a s
de secreción de IFNα lo que trae como consecuencia la – Son glucoproteínas de bajo peso molecular (menos de 80 kd)
sobreactivación de las células dendríticas y la pérdida – Generalmente, actúan a corta distancia, de manera paracrina
de tolerancia a autoantígenos.31 Existen varias molécu- o autocrina
las en los pacientes con LES que podrían explicar dicho – Son producidas de novo durante la activación celular
incremento en el tono de IFNα como son los complejos – Poseen una vida media corta que les permite la
ADN-anti-ADN y ARN-anti-RNP, o fragmentos de cé- interacción con receptores de alta afinidad
lulas apoptóticas.31 – Regulan la transcripción de varios genes mediante segundas señales, aún
Las células dendríticas plasmocitoides son otro subti- no bien definidas, que conducen a cambios en el comportamiento celular
po de células dendríticas con características peculiares. – Se agrupan en familias, como interleucinas (IL), interferones (IFN),
Son IL-3Rα+ y CD11c-. Se sabe que son especialmente factores de necrosis tumoral (TNF), hemopoyetinas y quimiocinas
importantes para la producción de IFNα.37 Dependiendo
de los estímulos que reciben durante su maduración, las
células dendríticas plasmocitoides inducen respuestas
inmunes con diferentes características. Así, cuando se ac- corrigiendo gradualmente.6 Es probable que las células
tivan en presencia de ADN bacteriano y CD40-L, secretan dendríticas de los pacientes con LES activo estén anor-
IL-12 y favorecen respuestas tipo Th1; cuando se activan malmente polarizadas hacia la función relacionada con
en presencia de virus, producen IFNα y favorecen la ge- IFNα y, así, favorezcan la generación de células T efecto-
neración de células T que secretan IFNγ e IL-10.38,39 En ras ante antígenos propios. Es plausible que lo que permite
un trabajo previo, describimos que la producción de IL- a los pacientes con LES alcanzar la remisión y mantenerla
12 en cultivos de células mononucleares tiene una fuerte sea la despolarización funcional de las células dendríticas
correlación con la duración del periodo de remisión de y el regreso hacia la zona funcional asociada a respuestas
los pacientes con LES inactivo. Así, las células mononu- tipo Th1. Es probable que el incremento en la producción
cleares de los pacientes que llevan pocos años en remisión de IL-10 que se comentó anteriormente esté relacionado
clínica (<5 años) tienen un defecto en la producción de con la polarización de las células dendríticas.
IL-12. Éste es claro, aunque de menor magnitud que el de • Alteraciones en el patrón de secreción de citocinas por
pacientes con enfermedad activa. Conforme el periodo monocitos. La expresión del ARNm para IL-1 en células
de remisión va siendo más prolongado, el defecto se va mononucleares y en el tejido renal de pacientes con LES
Ta b l a 6 . 3 . I n m u n o r r e g u l ac i ó n e n l o s pac i e n t e s c o n l u p u s e r i t e m at o s o s i s t é m i c o
C i t o c i n a Ef e ct o
IL-1 – Aumento en la expresión in vivo del mARN en células mononucleares y tejido renal de pacientes con lupus
eritematoso sistémico activo
– Disminución de su síntesis en respuesta a la estimulación in vitro
IL-2 – Defecto reversible en la síntesis de IL-2 por células T
– Defecto en la síntesis de IL-2 en familiares de pacientes con lupus eritematoso sistémico
– Defecto reversible en la respuesta de células T a IL-2
– Disminución en la expresión de la cadena z del complejo asociado al receptor de células T, que contribuye a la deficiencia en
la síntesis de IL-2
IL-6 – Expresión anormal de IL-6 en suero, tejido renal y líquido cefalorraquídeo en pacientes con enfermedad activa
IL-10 – Incremento en la producción de IL-10, principalmente por células B y monocitos
– Incremento en la síntesis de IL-10 en familiares de pacientes con lupus eritematoso sistémico
IL-12 – Defecto en su síntesis en pacientes con enfermedad activa
– El defecto se corrige lentamente durante la remisión de la enfermedad
IFN-a – Las células mononucleares de los pacientes con lupus eritematoso sistémico muestran un patrón de expresión de
genes consistente con la activación por IFNa
IFN-g – Disminución en su síntesis por células mononucleares estimuladas in vitro
– Aumento en la expresión de su mARN en el tejido afectado (por ejemplo, riñón)
TNF-a – Disminución en su síntesis por monocitos estimulados con lectinas
– El defecto en su producción se asocia con nefropatía
[61]
conceptos bÁsicos en reumatología
activo es anormalmente alta. Se ha documentado, además, ción de otras citocinas proinflamatorias, favorecen la
un incremento en la expresión del receptor de IL-1. A pesar activación de linfocitos T, causan la acumulación de
de lo anterior, los monocitos de los pacientes con LES son linfocitos y de neutrófilos en la membrana sinovial al
pobres productores de IL-1 cuando se estimulan in vitro. inducir la expresión endotelial de moléculas de adhe-
En lo que al factor de necrosis tumoral (TNF) se refie- sión, estimulan la producción de enzimas destructivas
re, se sabe que su producción se encuentra disminuida en en fibroblastos y macrófagos, favorecen la génesis de
los monocitos de pacientes con LES estimulados in vitro osteoclastos a partir de células progenitoras y la expre-
con lectinas. Se ha demostrado que la pobre respuesta sión de RANKL.41-43
del TNF-α está asociada al haplotipo DR2/DQw1 y a La IL-8 funciona como un péptido activador de neu-
la presencia de enfermedad renal. Dada la bien docu- trófilos. Su síntesis local constituye un mecanismo im-
mentada asociación del LES con el complejo mayor de portante por el cual los neutrófilos y las células T son
histocompatibilidad (CMH) y al hecho de que el TNF- reclutados y activados en la sinovia de los pacientes. Ade-
α se codifica en el brazo corto del cromosoma 6, estos más, contribuye a la degradación del cartílago articular
hallazgos podrían ser de particular relevancia en la etio- al inducir la desgranulación de neutrófilos con la subse-
logía del LES. cuente liberación de proteasas.44
Se ha demostrado la presencia de IL-6 en suero, tejido La IL-10 participa también en la remodelación y en
renal y líquido cefalorraquídeo de pacientes con lupus, la degradación de la matriz extracelular a través de la re-
particularmente en aquéllos con enfermedad activa. Los gulación negativa del transcrito para colágeno tipo I, así
factores que conducen a esta expresión constitutiva no como por el incremento en la expresión de los genes para
se conocen, pero pueden incluir otras citocinas regula- estromelisina y colagenasa tipo I (metaloproteasas).
doras. En modelos de artritis en ratones se ha observado
Los defectos de inmunorregulación en el LES son que la sobreexpresión de IL-12 acelera la progresión de la
complejos y sólo parcialmente comprendidos. Es eviden- enfermedad y aumenta su gravedad. En forma análoga,
te, sin embargo, que mientras mejor se definan los efectos estudios realizados en pacientes con artritis reumatoide
específicos de las moléculas comentadas, más posibilida- muestran que esta citocina se expresa en niveles elevados
des habrá de contar con nuevos abordajes terapéuticos en la articulación. Esta elevación se relaciona con una
basados en medicamentos inductores de la producción, pobre producción de IL-10.45
de las mismas citocinas o antagonistas específicos de ellas, La IL-15 tiene la capacidad de inducir la expresión de
que puedan llegar a completar o a reemplazar el arsenal TNF-α, IL-1, IFNγ y otras citocinas proinflamatorias. Su
terapéutico disponible que, hasta la fecha, es insuficiente capacidad patogénica se demostró en un modelo en rato-
(figura 6.2 y tabla 6.3). nes: al inyectarles la molécula recombinante, se observó
la inducción de sinovitis con predominio de linfocitos T.
Artritis reumatoide Lo anterior sugiere que la IL-15 puede reclutar y activar
La membrana sinovial está compuesta por numerosas las células T en la membrana sinovial y así contribuir a
células (linfocitos T y B), sinoviocitos tipo A [derivados de la patogénesis de la artritis reumatoide. Otro efecto po-
macrófagos] y tipo B [derivados de fibroblastos], células tencialmente patogénico de la IL-15 es su capacidad para
dendríticas, células plasmáticas, mastocitos y osteoclas- estimular la diferenciación de osteoclastos.46
tos, todas ellas con capacidad de producir o ser blanco La IL-18, originalmente conocida como factor in-
de la acción de las citocinas. ductor de IFNγ, es un producto de los macrófagos ac-
Bajo condiciones fisiológicas, las citocinas y los facto- tivados que actúa en forma sinérgica con la IL-12 en
res de crecimiento forman una red intrincada que man- varias funciones. La IL-12, la IL-15 y la IL-18 inducen de
tiene el equilibrio entre el depósito y la degradación de la manera importante la producción de IFNγ por el tejido
matriz extracelular. Sin embargo, en la artritis reumatoide sinovial in vitro. La IL-18 promueve en forma indepen-
el equilibrio se rompe y se presenta una sobreproducción diente la síntesis de factor estimulador de colonias de
de citocinas proinflamatorias, lo que favorece la degrada- granulocitos y macrófagos (GM-CSF). Además, induce
ción de los componentes de la sinovia. Entre los factores la síntesis de TNF-α y la producción de óxido nítrico
sobreexpresados que participan en esta desregulación se por macrófagos, efectos que son potenciados por la IL-
encuentran IL-1β, IL-6, IL-8, TNF-α, TGFβ y GM-CSF. 12 y la IL-15. Esto sugiere que el sinergismo entre las
En la tabla 6.4 se presenta un resumen de los principales IL-18, 12 y 15 puede ser de importancia en el sustento
hallazgos de estas moléculas en la sinovia de los pacientes de la respuesta Th1 y en la producción de monocinas en
con artritis reumatoide.40 la artritis reumatoide.47
El TNF-α y la IL-1 tienen un papel central en la Los factores solubles que se liberan en la articulación
patogénesis de esta enfermedad. Promueven la produc- no sólo participan en el detrimento de ésta. Existen tam-
[62]
Inmunorregulación en
enfermedades reumáticas
Ta b l a 6 . 4 . I n m u n o r r e g u l ac i ó n e n l o s pac i e n t e s c o n a r t r i t i s r e u m at o i d e
C i t o c i n a † Ef e ct o
† La flecha indica si la citocina en cuestión se encuentra alta o baja en el tejido sinovial de los pacientes con artritis reumatoide.
bién mecanismos reguladores que pretenden disminuir IL-10 en pacientes con artritis reumatoide con resultados
la respuesta inflamatoria. Éstos incluyen a la IL-10 y al promisorios.48,49
TGFβ1. La primera, producida por macrófagos y linfoci- Es evidente que el inicio de la sinovitis en la artritis
tos, inhibe la síntesis de citocinas proinflamatorias, mien- reumatoide no se explica por una respuesta inmune di-
tras que incrementa la del receptor soluble de TNF-α y la rigida únicamente por células T, o por macrófagos y lin-
del antagonista del receptor de IL-1. El TGFβ1 inhibe la focitos T, sino a todo un conjunto celular que participa
activación de células T a través de la supresión de la sínte- en forma activa liberando factores solubles y regulando la
sis del receptor de IL-2. Empero, a pesar de sus funciones expresión de numerosas moléculas. Estudios recientes su-
inhibidoras, ambos poseen el efecto opuesto, ya que la gieren que las diferencias en la producción de citocinas en
IL-10 per se incrementa la síntesis de metaloproteasas la artritis reumatoide de evolución corta y de fase crónica
del tipo de las colagenasas y estromelisina y disminuye la son cuantitativas más que cualitativas. Así, se desconoce
síntesis del ARNm para colágeno. Por su parte, el TGFβ1 el mecanismo que conlleva a la cronicidad de la sinovitis
incrementa la angiogénesis y la quimiotaxis de neutrófi- característica de la artritis reumatoide. No obstante, se
los, monocitos y fibroblastos, produciendo con ello efectos reconoce a los macrófagos y sus productos solubles (facto-
devastadores en la cavidad articular. res de crecimiento y quimiocinas) y en menor grado a los
La IL-4 y la IL-13 tienen como función la inhibición de linfocitos T, células endoteliales, fibroblastos y sinoviocitos
la síntesis de citocinas y de la función de macrófagos. Su como los posibles responsables de la perpetuación del pro-
presencia, así como la de la IL-10, es relativamente baja en ceso inflamatorio. Es importante recalcar que no ha sido
la membrana sinovial de los pacientes con artritis reuma- posible correlacionar los niveles elevados de una citocina
toide. Es posible que por esa razón no puedan neutralizar en particular con la destrucción articular. Es necesario
el efecto de las citocinas proinflamatorias. Se sabe que considerar la abundancia y la diversidad de las citocinas
en los modelos de artritis en ratones, la sobreexpresión liberadas en la membrana sinovial, así como la información
de IL-10 en la articulación disminuye la intensidad de la del papel individual que desempeña cada una de ellas en el
enfermedad. Asimismo, en años recientes se ha utilizado desarrollo y perpetuación del proceso inflamatorio.
[63]
conceptos bÁsicos en reumatología
Con base en la información disponible, es posible
plantear la siguiente secuencia de eventos: un primer
contacto entre las células presentadoras de antígenos y
los linfocitos T, que en su forma activa inician la síntesis
y la liberación de factores solubles. Los macrófagos y los
sinoviocitos tipo A sintetizan y liberan IL-1β, que actúa de
manera paracrina, e incrementan la quimiotaxis de neu-
trófilos, linfocitos y monocitos. Además, la IL-1β induce
la proliferación de fibroblastos que conduce a hiperplasia
y, de forma autocrina, aumenta la síntesis y la liberación
del TNF-α y de la IL-6. El TNF-α estimula la prolifera-
ción de los sinoviocitos tipo B y la síntesis de IL-6, IL-8 y
TGFβ1 por estas células e incrementa la proliferación de
las células endoteliales. Esto se traduce en un aumento de
la angiogénesis. El efecto combinado de IL-1β y TNF-α
favorece la síntesis de metaloproteasas y PGE2, y dismi-
F i g u r a 6 . 3 . Principales moléculas y células participantes en la
nuye la de colágeno y proteínas de la matriz extracelular. patogenia de la artritis reumatoide.
Además, induce la diferenciación de vénulas de endotelio MØ = Macrófago.
alto que favorecen la migración de células inflamatorias.
Por otro lado, esta combinación de citocinas colabora En la sangre periférica de los pacientes con síndrome
en el fenómeno de hiperplasia y formación del pannus primario de Sjögren, se ha observado una disminución
a través de la estimulación de los sinoviocitos que, a su en el número de linfocitos T CD4+. A pesar de que la
vez, inducen la síntesis y liberación de la IL-8. Esta qui- población total de linfocitos T está disminuida, el bajo nú-
miocina actúa sobre las células endoteliales e incremen- mero presente comprende en un alto porcentaje a células
ta la expresión de moléculas de adhesión y, por ende, la activadas que expresan la molécula CD25. Estos linfocitos
transmigración celular. Además, esta molécula activa las T activados pueden eventualmente infiltrar las glándulas
funciones de los neutrófilos tales como la movilización salivales.51,52
del calcio intracelular, la desgranulación y el estallido de Por otra parte, la anormalidad más evidente que existe
la cadena respiratoria. Por otra parte, la IL-8 aumenta la a este nivel es la hiperactividad de los linfocitos B, que
proliferación de células endoteliales e induce la síntesis sufren una expansión clonal y usan diferentes segmentos
de más IL-8 por éstas. La IL-6 liberada por macrófagos y genéticos V-J, lo que se refleja en la hipergammaglobu-
sinoviocitos tipo A y B, estimulados por la combinación linemia, los altos niveles de autoanticuerpos (como el
de IL-1β y TNF-α, actúa sobre las células plasmáticas factor reumatoide, anti-Ro y anti-La). Es común, además,
incrementando la producción de factor reumatoide in encontrar anticuerpos anti-tiroideos. Esta hiperactividad
situ (figura 6.3). de linfocitos B concuerda con la gran producción de IL-10
por dichas células. Otras citocinas encontradas en el suero
Síndrome de Sjögren primario o sobrenadantes de cultivos de células mononucleares
El infiltrado linfocitario presente en las glándulas sa- son la IL-6 y el IFNγ que participan también en la acti-
livales de los pacientes con síndrome primario de Sjögren vación celular de linfocitos T y B. Es importante señalar
incluye células T (CD4+ y CD8+) y B CD19+CD5+; la que aun cuando los macrófagos no están disminuidos en
presencia de monocitos es escasa. En consecuencia, hay número y, al igual que los linfocitos B, producen IL-10,
un defecto en las funciones accesorias ejercidas por estas esta citocina se ha caracterizado por ser un potente factor
últimas células que, de alguna manera, podrían contri- de inhibición de sus funciones más importantes. La in-
buir a la regulación o la resolución de las reacciones in- capacidad de los macrófagos para actuar adecuadamente
munes que ocurren in situ.50 aunada a la ausencia periférica de citocinas involucradas
En la interacción de las células que conforman el infil- en los mecanismos de regulación, tales como IL-2, IL-4,
trado inflamatorio y las células epiteliales de las glándulas IL-5 e IL-13, impide que las citocinas que participan en
salivales ocurren diversas reacciones inmunológicas, en la activación de linfocitos T y B sean reguladas. Este tipo
las que las citocinas desempeñan una función destacada, de alteraciones contribuyen a perpetuar los procesos de
tanto en la activación continua de las células del sistema activación linfocitaria y con ello los procesos autoinmu-
inmune, que tiene como consecuencia inicial la infla- nes sin resolución.53
mación, como en la posterior pérdida de las funciones y La IL-10 que se produce como consecuencia de la ac-
atrofia de las glándulas. tivación de los linfocitos B actúa de manera autocrina y
[64]
Inmunorregulación en
enfermedades reumáticas
paracrina sobre los linfocitos T, ya sean CD4+ o CD8+. que aún no se sabe si las citocinas de reciente descubri-
Los altos niveles de esta citocina encontrados en las glán- miento como la IL-14, IL-15, IL-16 e IL-18 participan en
dulas salivales podrían explicarse por causas diametral- la inmunopatogenia del síndrome primario de Sjögren,
mente opuestas: por una parte, puede ser un intento de se piensa que tal vez tengan un papel dentro de la acti-
neutralizar la producción y los efectos inflamatorios de vación de linfocitos T CD4+. La IL-15 y 17 participan
la IL-2 y del IFNγ; por el otro, puede ser el resultado de en la quimiotaxis selectiva de esta subpoblación celular
la activación celular que existe localmente y que con ello (CD4+) dada por la IL-16. La IL-17 podría ser responsable,
contribuye a la síntesis de inmunoglobulinas y a la acti- al menos parcialmente, de la expresión de moléculas de
vación de los demás linfocitos como se mencionó ante- adhesión por el epitelio glandular.54
riormente. Los mecanismos por los cuales las diferentes subpo-
Ante estos ciclos de estimulación crónica entre las cé- blaciones celulares llegan y se instalan en los sitios in-
lulas infiltrantes y las epiteliales de la glándula, ya sea por munológicamente comprometidos son desconocidos.
la secreción de determinadas citocinas, la presentación Tampoco se sabe si las células son activadas en la pe-
de autoanígeno, la síntesis de inmunoglobulinas o au- riferia y por mecanismos desconocidos permanecen en
toanticuerpos y, probablemente, el depósito de complejos glándulas salivales o si las células llegan por circulación
inmunes circulantes, se inicia la producción del TGFβ. A periférica, son activadas en este sitio, regresan a la peri-
esta citocina se le han atribuído funciones antiinflama- feria y lo que ocurre es la consecuencia de los procesos
torias que intentan reestablecer la homeostasis, pero, por de activación en la glándula salival.
otra parte, se sabe que es una de las citocinas profibróticas También se ha documentado la disminución de las
más importantes. De hecho, aunque la cantidad de TGFβ funciones de las células NK, lo que puede acentuar el ries-
en glándulas salivales no parece ser diferente a la encon- go del desarrollo de linfomas no Hodgkin. Contribuyen a
trada en individuos sanos, sí se ha reportado que esta ello el resto de las alteraciones mencionadas anteriormen-
citocina se encuentra localizada en focos de inflamación te, como la participación de retrovirus como inductores
y en las áreas en las que existe fibrosis. También se han de mutaciones y la expresión de protooncogenes; el bajo
encontrado cantidades moderadas de IL-13 en glándulas número de linfocitos T (aunque gran parte de ellos están
salivales. Esta molécula contribuye a la proliferación de activados), la baja o nula participación de los monocitos
linfocitos B y a la regulación de los niveles y efectos de la en los mecanismos de regulación, o la estimulación con-
IL-1, IL-6 e IL-10 cuando estas últimas se sintetizan por tinua que ocurre sobre los linfocitos B que puede desen-
vías de activación en las que participa el IFNγ. A pesar de cadenar el desarrollo de linfomas.55
[65]
conceptos bÁsicos en reumatología
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7
Quimiocinas
Yvonne Richaud-Patin
Luis Llorente
T a b l a 7.1 . Q u i m i o c i n a s m á s i m p o r t a n t e s d e c a d a s u p e r f a m i l i a y s u s r e c e pt o r e s
Familia C l a s i f i c a c i ó n f u n c i o n a l* Q u i m i o c i n a* * R e c e pt o r e s
* Las quimiocinas inflamatorias se conocen también como inducibles, en tanto que las homeostáticas se consideran linfoides o constitutivas.
** Entre paréntesis se muestra el nombre común de la quimiocina.
[70]
Quimiocinas
aquellas que no muestran dicha secuencia. Las primeras Una característica importante de las quimiocinas es
muestran predilección para atraer neutrófilos y células la “promiscuidad” que exhiben, es decir, una quimio-
endoteliales, en tanto que las últimas actúan principal- cina puede unirse a varios receptores, cambiando así el
mente sobre linfocitos. efecto biológico final. La interacción de la quimiocina
Las quimiocinas β (CCL) suelen atraer monocitos, con el receptor expresado en la célula diana, deriva en la
eosinófilos, basófilos y, con selectividad variable, linfo- activación de las vías de señalización y, por lo tanto, en la
citos. Éstas, al igual que las quimiocinas α, comprenden expresión de genes involucrados no sólo en la migración
también dos grupos: 1) la familia de la eotaxina (CCL11) leucocitaria, sino también de algunos involucrados en la
y las proteínas quimioatrayentes de monocitos, que in- síntesis de otras quimiocinas, proteínas que participan
cluyen las CCL2, CCL3 y CCL4 (MCP-1, MIP-1α y MIP- en apoptosis, liberación de enzimas, angiogénesis o an-
1β, respectivamente), todas ellas muestran entre sí un giostasis, en señales que transforman las interacciones
65% de homología; y 2) el resto de las quimiocinas β.8 mediadas por integrinas y selectinas de baja a alta afi-
[71]
conceptos bÁsicos en reumatología
T a b l a 7. 2 . E x p r e s i ó n d e r e c e pt o r e s f u n c i o n a l e s d e q u i m i o c i n a s e n c é l u l a s h u m a n a s
T i p o c e l u l a r R e c e pt o r Q u i m i o c i n a E x p r e s i ó n f u n c i o n a l
a los receptores de quimiocinas y no a otros igualmente presentes en los vasos afectados. Los macrófagos son los
ubicuos y semejantes estructuralmente es un enigma. progenitores de las células espumosas y, además, son fuen-
Por otra parte, la descripción del CCR5 como co- te de factores de crecimiento que favorecen la hiperplasia
rreceptor del VIH provino de la identificación de una de la íntima; sin embargo, el mecanismo por el cual llegan
variante inactiva del CCR5 (deleción de 32 nucleótidos, y residen en las lesiones ateroescleróticas ha sido poco
también llamada ∆32) que protege de la infección a in- explorado. Se han realizado diversos estudios que invo-
dividuos homocigotos -genéticamente negativos- y hace lucran a las quimiocinas en esta patología. Por ejemplo,
que los heterocigotos evolucionen lentamente.18-20 ¿Cuál se ha detectado la presencia de CCL2 (MCP-1), CCL13
es la función del CCR5? Ésta es, entonces, la pregunta (MCP-4) y la CXCL10 (IP-10) en las placas ateromatosas
obligada puesto que aún no se ha demostrado ninguna de humanos. La CCL2 (MCP-1) también se ha encontrado
anormalidad en los portadores de la ∆32 y el alelo inactivo en la pared aórtica de humanos y conejos alimentados con
puede estar presente con una frecuencia que va del 10% dietas con alto contenido de colesterol.21-23
al 20% en ciertas poblaciones. Ciertamente, la respuesta En condiciones alérgicas, es característica la activa-
a estas preguntas arrojará un enorme conocimiento sobre ción de eosinófilos, basófilos y células cebadas o mas-
la fisiología de las quimiocinas así como de la patogenia tocitos con la concomitante degranulación y liberación
de la infección por VIH. de los mediadores correspondientes. Las quimiocinas
Un ejemplo más es la ateroesclerosis en la que los ma- β (CCL) de la subfamilia de la eotaxina y MCP (CCL2,
crófagos y los linfocitos T son las células inflamatorias CCL3, CCL4, CCL11) ejercen quimiotaxis sobre eosinó-
[73]
conceptos bÁsicos en reumatología
filos y, además, son potentes inductores de la liberación receptores durante la evolución del padecimiento. Así,
de histamina. Sin duda, estas propiedades colocan a las la CCL2 (MCP-1), CCL4 (MIP-1β), CCL5 (RANTES) y
quimiocinas β como el puente molecular entre la acti- los receptores CCR2, CCR3 y CCR5 se han encontrado
vación inmunológica por un alergeno y la migración de sobreexpresados en el tejido nervioso de estos pacien-
eosinófilos a los tejidos.24-26 tes.29-31 Por otra parte, se ha descrito una elevación im-
En los procesos inflamatorios pulmonares agudos, portante de CXCL10 (IP-10) inversamente proporcional a
los neutrófilos infiltran masivamente los tejidos y la con- la expresión de CCL2 (MCP-1) en el líquido cefalorraquí-
centración de quimiocinas que atraen a estas células se deo. Esto se podría explicar porque la CXCL10 (IP-10) se
incrementan en el líquido broncoalveolar, por ejemplo, puede inducir por interferón γ, que es considerado como
la CXCL8 (IL-8) en la neumonía bacteriana y la CXCL5 un importante mediador en el progreso de la esclerosis
(ENA78) en el síndrome de insuficiencia respiratoria múltiple. Otros estudios realizados en tejidos humanos de
aguda.27 necropsias han postulado una participación importante
Por otra parte, se conoce que en muchas infecciones del CCR5 en la migración selectiva de linfocitos T hacia
virales se producen grandes cantidades de interferones. el sistema nervioso central puesto que este receptor se ha
De ellos, el IFNγ es el que participa en la quimiotaxis de encontrado expresado en linfocitos T infiltrantes, macró-
monocitos al inducir la síntesis de CXCL10 (IP-10); por fagos espumosos y células de la microglía.32
ejemplo, en la meningitis viral, el infiltrado de monocitos En el síndrome de Sjögren es claro que la atrofia de
correlaciona positivamente con los niveles de CCL2 (MCP- las glándulas exocrinas se debe, en gran parte, al infil-
1) y CXCL10 (IP-10) en el líquido cefalorraquídeo.28 trado linfocitario, compuesto por células T y B, pero no
La inflamación crónica es, sin duda, un componente macrófagos. En lo que respecta a las quimiocinas, poco
crucial de la patogenia de las enfermedades autoinmunes. se ha reportado en esta enfermedad. Sin embargo, se ha
En ellas, las citocinas y las quimiocinas causan la activa- descrito la expresión de CCL2 (MIP-1), CCL5 (RANTES)
ción y el acúmulo de leucocitos en diferentes tejidos. El y CCL19 (ECL) en las células epiteliales de los ductos de
sitio y la naturaleza del infiltrado leucocitario caracterís- biopsias de glándulas salivales de pacientes con síndrome
tico de cada padecimiento está orquestado, en gran parte, de Sjögren. En los modelos animales de este padecimiento
por el patrón de quimiocinas y receptores presentes en se asoció la expresión de CCL5 (RANTES) y CXCL10 (IP-
los sitios afectados (tabla 7.3). 10) con el desarrollo de infiltrados celulares.33
Por ejemplo, en la esclerosis múltiple se han reportado La artritis reumatoide ha sido la enfermedad en la que
alteraciones importantes en ciertas quimiocinas y sus acaso se hayan realizado más estudios al respecto.34-38 Se
T a b l a 7. 3 . E x p r e s i ó n d e q u i m i o c i n a s e n p a d e c i m i e n t o s i n f l a m a t o r i o s y e n f e r m e d a d e s a u t o i n m u n e s
Enfermedad Quimiocinas
Síndrome de insuficiencia respiratoria aguda CXCL8 (IL-8), CXCL1 (GRO-a), CXCL2 (GRO-b), CXCL3 (GRO-g), CXCL5 (ENA-78)
Asma CCL2 (MCP-1), CCL13 (MCP-4), CCL3 (MIP-1a), CCL11 (Eotaxina), CCL5 (RANTES)
Neumonía bacteriana CXCL8 (IL-8), CXCL5 (ENA-78)
Sarcoidosis CXCL10 (IP-10)
Glomerulonefritis CCL2 (MCP-1), CCL5 (RANTES), CXCL10 (IP-10)
Osteoartritis CCL4 (MIP-1b)
Ateroesclerosis CCL2 (MCP-1), CCL13 (MCP-4), CXCL10 (IP-10)
Enfermedad inflamatoria intestinal CCL2 (MCP-1), CCL3 (MIP-1a), CCL11 (Eotaxina), CXCL10 (IP-10), CXCL8 (IL-8)
Psoriasis CCL2 (MCP-1), CXCL10 (IP-10), CXCL9 (MIG), CXCL2 (GRO-b), CXCL8 (IL-8)
Meningitis bacteriana CXCL8 (IL-8), CXCL1 (GRO-a), CCL2 (MCP-1), CCL3 (MIP-1a), CCL4 (MIP-1b)
Meningitis viral CCL2 (MCP-1), CXCL10 (IP-10)
Diabetes tipo I CXCL12 (SDF-1), CCL3 (MIP-1a), CCL5 (RANTES), CXCL10 (IP-10)
Enfermedad de Graves CCL3 (MIP-1a), CCL4 (MIP-1b), CCL5 (RANTES)
Esclerosis múltiple CCL2 (MCP-1), CCL5 (RANTES), CXCL10 (IP-10), CCL3 (MIP-1a), CCL4 (MIP-1b)
Artritis reumatoide CCL2 (MCP-1), CCL4 (MIP-1b), CXCL8 (IL-8), CXCL9 (MIG), CXCL10 (IP-10),
CXCL12 (SDF-1), CXCL13 (BCA-1), CCL3 (MIP-1a)
Síndrome de Sjögren CCL17 (TARC), CCL18 (DC-CK1), CCL19 (ELC), CCL22 (MDC), CXCL13 (BCA-1), CCL3 (MIP-1a),
CCL4 (MIP-1b), CCL5 (RANTES), CXCL8 (IL-8)
Lupus eritematoso sistémico CCL2 (MCP-1), CCL5 (RANTES), CXCL10 (IP-10)
[74]
Quimiocinas
ha descrito sobreexpresión de distintas de quimiocinas β expresión de los receptores CCR2, CCR3, CCR5, CXCR2,
que incluyen a la CCL2 (MCP-1), CCL3 (MIP-1α), CCL4 CXCR3, CXCR4 y CXCR6. La eficacia de las terapias bio-
(MIP-1β), CCL5 (RANTES), y quimiocinas α como la lógicas con antagonistas del TNF para el tratamiento de
CXCL5 (ENA78), CXCL8 (IL-8), CXCL9 (MIG) y CXCL10 la artritis reumatoide podría estar relacionada, en cierto
(IP-10) en el líquido sinovial de las articulaciones compro- modo, con la disminución colateral de CCL2 (MCP-1) y
metidas. Se ha postulado que tal variedad de quimiocinas CXCL8 (IL-8) reportada bajo este esquema.7
controla el tráfico leucocitario y retiene aquellas células La pregunta crítica es, desde luego, si el exceso en la
que expresen los receptores complementarios. Más aun, producción de quimiocinas y la sobreexpresión de sus re-
por sus propiedades inflamatorias y angiogénicas, a las ceptores es por sí sola responsable de las manifestaciones
quimiocinas CXCL5 (ENA78) y CXCL8 (IL-8) se les ha clínicas de estas enfermedades.
hecho responsables, al menos en parte, de la migración Antes de la descripción de las quimiocinas y sus re-
celular permanente hacia las articulaciones y se les ha con- ceptores se desconocía la existencia de una familia tan
siderado como la fuente de oxígeno y nutrientes necesarios numerosa y ubicua de proteínas. Han transcurrido más
para la formación del pannus. En contraste, la presencia de 16 años desde el descubrimiento de las primeras y, a
de las quimiocinas CXCL9 (MIG) y CXCL10 (IP-10) se pesar de ello, la historia apenas comienza. Se sabe aún
ha interpretado como un mecanismo homeostático para muy poco de su función exacta en innumerables condi-
contrarrestar el efecto angiogénico de aquellas. A su vez, ciones, tanto fisiológicas como patológicas. Actualmente,
en el infiltrado leucocitario articular, compuesto princi- a estas moléculas ya no se les puede ni debe considerar
palmente por linfocitos T y monocitos, se ha detectado la como meras reclutadoras de leucocitos.
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conceptos bÁsicos en reumatología
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trafficking in the immune/
inflammatory response. Clin Exp
Rheum 2003;21:501-8.
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apoptosis
Felipe Andrade
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Apoptosis
amino-terminal (prodominio), una subunidad grande y activar a este grupo de caspasas (figura 8.4).4-9 Desde un
una subunidad pequeña. Para ser activadas, las caspasas punto de vista práctico, estas vías se pueden subdividir
deben ser cortadas entre los dominios, seguido por la en dos grandes grupos. En la primera (vía intrínseca),
asociación de las subunidades grande y pequeña para la célula decide suicidarse y activa la maquinaría de la
formar un heterodímero catalíticamente activo (figura apoptosis por medio de sensores que detectan que la cé-
8.3). Cabe destacar que todos los dominios son generados lula tiene algún tipo de daño irreversible que podría traer
por cortes en la proenzima en sitios consenso para las graves consecuencias en el organismo en caso de no ser
caspasas, lo cual implica que estas enzimas se pueden destruida. Los sitios donde se originan estas señales inclu-
activar ya sea por autoproteólisis o en cascada a través yen el núcleo, la mitocondria, el retículo endoplásmico y el
de otras caspasas previamente activadas. aparato de Golgi.6 Cada uno de estos organelos contiene
Hasta la fecha se han descrito 14 caspasas2, las cuales vías específicas con múltiples componentes que detectan
han sido descubiertas por su homología estructural. Sin e inducen apoptosis según el grado de daño.
embargo, no todas las caspasas están involucradas en la En este texto sólo se comentarán algunos ejemplos de
apoptosis. Por ejemplo, la caspasa-1 (enzima convertidora estos mecanismos y se recomienda que, para ampliar esta
de interleucina-1β), la -5 y la -11 están involucradas con información, el lector revise los artículos seleccionados
los procesos inflamatorios. para este capítulo.
En el proceso de apoptosis, las caspasas directamente En el núcleo, el principal estímulo que lleva a la apop-
responsables del corte de los sustratos de muerte (proteí- tosis es el daño irreversible al ADN. Este daño puede ser
nas del citoesqueleto, proteínas estructurales del núcleo, inducido por diferentes factores como la radiación ultra-
enzimas de reparación y mantenimiento celular, etc.) que violeta, la radiación gamma y medicamentos como los
lleva al desmantelamiento de la célula se definen como antimetabolitos (por ejemplo, el 5-fluorouracilo), los in-
caspasas efectoras, y a las involucradas en los eventos de hibidores de la topoisomerasa (por ejemplo, el etopósido),
regulación que llevan a la activación de caspasas efecto- los agentes que dañan el ADN (por ejemplo, el cis-platino)
ras, se definen como iniciadoras o señalizadoras. y los agentes alquilantes (por ejemplo, la ciclofosfamida),
Basado en la secuencia del tetrapéptido que es recono- entre otros. Además, múltiples agentes infecciosos (por
cido y cortado por cada caspasa, los miembros de esta fa- ejemplo, los virus) pueden activar esta vía.
milia se pueden dividir en tres grupos3: el grupo I incluye Cada uno de estos agentes induce la activación de
a las caspasas 1, 4 y 5; el grupo II, a las caspasas 2, 3 y 7, y diferentes sensores que convergen principalmente en la
el grupo III, a las caspasas 6, 8, 9 y 10 (figura 8.2A). activación del supresor tumoral p53.5 Según el grado de
La secuencia óptima de reconocimiento para el tercer daño, el p53 decide si la célula debe morir o si debe de-
grupo (I/L/V EXD) semeja el sitio de corte usado para tener su ciclo celular con fines de reparación. La elevada
activar varias caspasas, lo que sugiere que este grupo de frecuencia con la cual p53 es inactivado funcionalmente
proteasas son componentes iniciadores (señalizadores) en en cánceres humanos confirma su papel crítico como
la cascada proteolítica inducida por caspasas. La gran- protector contra la expansión de las células somáticas
zima B, una proteasa de serina localizada en los gránu- mutadas. Los mecanismos que llevan a la activación de
los citoplasmáticos de los linfocitos citotóxicos, tiene un las caspasas a través de p53 aún no se han definido cla-
reconocimiento de substrato similar al grupo III de las ramente, aunque es probable que involucre la expresión
caspasas, y tiene la capacidad de cortar y activar nume- de moléculas proapoptóticas como PUMA y Noxa (véase
rosos precursores de caspasas, lo cual ubica a la granzima más adelante, Integración de las vías apoptóticas).
B como una molécula clave en el fenómeno de iniciación El retículo endoplásmico participa en el inicio de la
de la apoptosis inducida por células citotóxicas. apoptosis, por lo menos, por dos mecanismos diferentes:
La secuencia óptima de reconocimiento del grupo II como respuesta a las proteínas estructuralmente defec-
(DEXD) es similar al sitio de corte de sustratos celulares tuosas que se acumulan en el retículo endoplásmico o
degradados durante la apoptosis, lo cual sugiere que los por medio de trastornos que afectan los niveles basales
miembros de esta familia actúan como moléculas efec- de calcio en el retículo endoplásmico. La agregación de
toras del proceso apoptótico. proteínas en el retículo endoplásmico induce la activa-
ción de Ire1-α el cual se une a TRAF-2 (tumor necrosis
Mecanismos de activación de las caspasas factor receptor-associated factor 2) y activan a la caspasa-
e inducción de la apoptosis 12, una caspasa localizada en el lado citoplásmico del
Independientemente del tipo de estímulo que lleve a la retículo endoplásmico10 que, posteriormente, activa la
inducción de la apoptosis, todos convergen en la activación caspasa-9 e inicia el proceso de apoptosis. La caspasa-12
de las caspasas efectoras, es decir, la caspasa-3 y la caspasa- también se puede activar por la movilización intracelular
7. Lo que varía entre éstas son las vías de señalización para de calcio.
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conceptos bÁsicos en reumatología
#RM!P #ASPASA
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ACTIVA #ITOTOXICIDAD MEDIADA POR GRÉNULOS
GRANZIMA " ,
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