Caso de Studio Final - Alibaba - Unidad 1
Caso de Studio Final - Alibaba - Unidad 1
Caso de Studio Final - Alibaba - Unidad 1
Este no es precisamente un feliz año nuevo para Alibaba Group Holding Ltd. Justo
antes de Navidad, el representante de Comercio estadounidense agregó a Taobao,
el sitio de comercio electrónico de Alibaba, a una lista de “mercados notorios” que
comercian falsificaciones. Es un lugar indecoroso para una compañía cotizada en
bolsa: otros miembros son un centro de compras chino que se especializa en
artículos de cuero falsificados y un mercado fronterizo paraguayo donde abunda el
crimen organizado que vende de todo, desde falsos Ray-Ban hasta DVD de
imitación.
A Alibaba no le gusta que lo asocien a este grupo variopinto. Pero al igual que a
Amazon.com Inc., EBay Inc. y otros mercados online que dependen de los
fabricantes chinos, le ha costado mantener su integridad ante el embate de las
imitaciones. Sin medidas enérgicas y agresivas del gobierno de China, estos
mercados no tienen muchas posibilidades de hacer frente a las falsificaciones.
En muchos aspectos, la falsificación es uno de los principales sectores industriales
de China. Un estudio realizado por la Cámara de Comercio estadounidense
demostró que aporta anualmente unos US$396.000 millones, lo que representa
alrededor de 12 por ciento del total de exportaciones de China y 1,5 por ciento de su
producto interno bruto. El año pasado, cuando una provincia china decidió tomar
medidas severas, cerró 417 “locales de fabricación y ventas” con existencias por
valor de más de US$200 millones.
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esfuerzos destinados a imponer protecciones a la propiedad intelectual. En un
párrafo, contaba que la iniciativa de Apple Inc. destinada a cerrar una línea de
falsificación de MacBook había sido rechazada porque hubiese puesto en peligro
“100 empleos locales”.
Por ser una compañía con sede en China, Alibaba tiene una mayor exposición a la
falsificación que Amazon, dado que los consumidores chinos son en general muy
sensibles a los precios y menos reacios a comprar imitaciones. Pero no es
impotente. En primer lugar, podría simplificar sus procedimientos para que los
propietarios de marcas denuncien casos de falsificación. Podría utilizar su perfil
mundial y su influencia política para impulsar al gobierno a procesar a más
falsificadores.
Esto podría resultar riesgoso para Alibaba, pero la alternativa es resignarse a tener
la mala reputación propia de un mercado de pulgas, no de una de las empresas de
comercio electrónico más influyentes del mundo. Ante la alternativa, Alibaba no
debería vacilar en demostrar que es mejor que los falsificadores.
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Bibliography
Minter, A. (2017, 04 01). Bloomberg. Retrieved from Los Problemas de Alibaba con
falcificaciones no parecen acabar:
https://www.bloomberg.com/latam/blog/problemas-de-alibaba-con-
falsificaciones-no-parecen-acabar/
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