El Modelo Vasco de Quiroga: P o e S Í A y El Crecimiento Impro D U C T I V O, Entre Otros - Vislumbra

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El modelo

Vasco de
Quiroga
Gabriel Zaid

Las tradiciones culturales no excluyen las formas de producción


y consumo. A través de este lúcido rescate de Vasco de Quiroga, el
poeta y ensayista Gabriel Zaid —autor de Campo nudista, Leer
Poesía y El crecimiento improductivo, entre otros— vislumbra
las formas alternativas, y posibles, de producción de bienes y de
organización social frente al gigantismo económico y lo que el
autor llama “la burocratización del mundo”.
No hay en los escritos de Vasco de Quiroga un modelo necesidad de fijar sus reglas por escrito; no al utopista
formal para el desarrollo económico, ni podría haberlo. constructor de maquetas, realizables o no.
La formulación de modelos descriptivos de la econo- Se atribuyen al obispo de Michoacán las tradicio-
mía aparece en el siglo XVIII, los planes de desarrollo en nes artesanales de muchos pueblos de su diócesis: alfa-
el XX. Lo que hubo antes, lo que Vasco de Quiroga rería de Patamban, Santa Fe y Tzintzuntzan, cobre de
(¿1478?-1565) leyó en La república de Platón, La ciudad Santa Clara, guitarras de Paracho, herrería de San Felipe,
de Dios de San Agustín, la Utopía de Moro, no fueron lacas de Qu i roga y Uruapan, muebles de Corupo, redes
modelos de desarrollo, sino modelos de contraste: de- de Erongarícuaro, textiles de Capácuaro y Zamora. Apa-
chados que servían para criticar a la sociedad contem- rentemente no dejó un plan maestro para el reparto de
poránea y proponer cambios radicales. especialidades, ni las razones para asignar cada una. Pero
Vasco de Quiroga fue un promotor del desarrollo no es tan difícil leer estas tradiciones y las Ordenanzas
indígena, pero no actuó en primer lugar por la vía de como se lee a los clásicos: con preguntas de hoy. ¿Pue-
los textos que modifican la manera de pensar, sino por den ser un modelo para el desarrollo desde abajo en el
la vía de los hechos: el litigio, la creación de realidades siglo XXI?
prácticas que suben de nivel la vida personal y comuni- Llama la atención, en primer lugar, que la obra esté
taria. Sus Ordenanzas recuerdan a un fundador de con- viva, después de tantos siglos. Muy pocas cosas resisten
ventos que, después de poner en marcha varios, ve la esa prueba. Como si fuera un texto clásico, que sigue

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SOBRE VASCO DE QUIROGA

Pila de don Vasco Plaza principal Esquina de los portales

diciendo cosas importantes a lectores de muy distintas rias, sino de industria ligera. Son artesanías de
épocas, su obra ha demostrado viabilidad social, histó- alta densidad económica (valor agregado por kilo
rica, cultural, económica. Que, desde el siglo XVI, los o metro cúbico) que, por lo mismo, viajan fácil-
artesanos de Santa Clara del Cobre sigan produciendo mente y pueden buscar mercados más amplios, en
cosas útiles y atractivas para la sociedad, que al produ- los pueblos vecinos, las grandes ciudades y hasta
cirlas se desarrollen como personas de una comunidad en el extranjero. El flete representa mucho menos
orgullosa de su arte, que vivan de ejercerlo y además que en los productos agrícolas. También los cos-
obtengan el Premio Nacional de Ciencias y Artes en tos de almacenaje y los riesgos de que la mercan-
1984, habla elocuentemente de un modelo probado cía se eche a perder. Además, el que sale a vender
por los siglos. a rtesanías está en mejor posición para defender sus
¿Cuáles son sus características? precios (los compradores saben que pueden llevár-
selas a otra parte), a diferencia del que llega con
1.Que no es un modelo puramente económico. La productos perecederos y tiene que rematarlos o
viabilidad económica está al servicio de una vida tirarlos. En el modelo Vasco de Quiroga, los ali-
más digna, interesante y creadora. Esta manera de mentos se producen para el consumo propio o
entender el desarrollo está recuperándose. En 1979, l ocal, no para exportar.
el economista E.F. Schumacher (autor de Small is
beautiful) se quejaba en Good work: las teorías 3.Que favorece la especialización, y así el intercam-
económicas del trabajo no reconocen el valor que bio entre distintas comunidades, según el princi-
tiene para el desarrollo de la vida personal y co- pio de la ventaja comparativa. Lo cual tiene además
munitaria. En 1999, el economista Amartya Sen ventajas semejantes a las marcas industriales: el
(De velopment as fre e d o m) ha replanteado el de- prestigio de Santa Clara del Cobre es una garan-
s arrollo desde este punto de vista. Y, en la misma tía para los compradores y una ventaja para todo
dirección, desde 1990, las Naciones Unidas han el gremio de Santa Clara. Esta concentración de
creado un Índice de Desarrollo Humano, que va muchos que hacen lo mismo en la misma ciudad
más allá del PIB. Producir artesanías admirables, (a diferencia de la concentración de uno que ab-
en microempresas de una ciudad pequeña, con sorbe a todos en una sola empresa) propicia los
aire limpio y la presencia del campo, es una forma azares favorables y la experimentación. También
de vida y convivencia que vale mucho más de lo favorece la difusión tecnológica, porque el ejem-
que miden las cifras puramente económicas. plo de los más innovadores está a la vista de sus
vecinos; porque la especialización local favorece
2.Que no limita el desarrollo rural a la agricultura. el aprendizaje y desarrollo de nuevos artesanos; y
Las especialidades asignadas no son agropecua- p o rque el mercado local de las materias primas

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Vasco de Quiroga fue un promotor del desarrollo
indígena, pero no actuó en primer lugar
por la vía de los textos que modifican la manera
de pensar, sino por la vía de los hechos...

y herramientas atrae la oferta de proveedores de León XII a formular una doctrina social cristiana como
nuevos materiales y equipos. Todo esto llega a respuesta a esas cosas nuevas (Rerum novarum). Pero el
transformar la comunidad: la especialidad actúa énfasis en la justicia dentro del mundo asalariado hizo
como un polo de desarrollo. Así sucedió con los olvidar el desarrollo del mundo no asalariado: el de los
pueblos michoacanos en el siglo XVI y puede su- artesanos, artistas y microempresarios, que supuesta-
c eder todavía hoy, como lo han demostrado los mente iban a desaparecer cuando toda la producción
nuevos Vascos de Quiroga: William Spratling en del planeta estuviera a cargo de grandes burocracias es-
Taxco, Guerrero (platería), Jorge Wilmot en To- tatales, transnacionales y sindicales.
nalá, Jalisco (cerámica), Juan Quezada en Mata Ahora que se han puesto en evidencia los rendi-
Ortiz, Chihuahua (cerámica). mientos decrecientes de la burocratización del mundo
y las ventajas de producir en menor escala, con mayor
4.Que genera muchos empleos y aumentos de pro- flexibilidad; ahora que se re i n venta el espíritu art e s a-
ductividad con inversiones bajísimas. Su baja in- nal y se fomenta el desarrollo humano y microempre-
tensidad de capital no requiere inversiones ma- sarial como algo más prometedor que el gigantismo, el
yúsculas y concentradas, sino mucho trabajo y modelo exitoso de Vasco de Quiroga puede ser la doc-
amor al oficio en múltiples unidades de produc- trina social cristiana del siglo XXI y la solución práctica
ción pequeñas. de un liberalismo inteligente, frente a los problemas so-
ciales que el gigantismo no puede remediar.
El liberalismo del siglo XIX fue ciego ante los valores
del artesanado y combatió a los gremios como reaccio-
narios, frente al pro g reso promovido por el Estado y
Capítulo primero del libro Don Vasco de Quiroga o la Filosofía en Busca de
las grandes empresas. La industrialización de Eu ro- Justicia editado recientemente por el Instituto Mexicano de Doctrina
pa y las consiguientes luchas sindicales lleva ron al papa Social Cristiana.

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