Bloc de Notas - Escapar para Vivir (Spanish Edition) - Yeonmi Park

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 7

Bloc de notas: Escapar para vivir (Spanish Edition) -

Yeonmi Park

Pos. 87 | Subrayado

Cuando hui de Corea del Norte no soñaba con la libertad. Ni siquiera sabía qué significaba ser
libre. Lo único que sabía era que, si mi familia permanecía allí, probablemente moriríamos: a causa
del hambre, las enfermedades o las condiciones inhumanas de un campo de trabajo para
prisioneros. El hambre se había vuelto insoportable; estaba dispuesta a arriesgar mi vida a cambio
de la promesa de un cuenco de arroz.

Pos. 107 | Subrayado

Chosun, la verdadera Corea, un perfecto paraíso socialista donde veinticinco millones de personas
viven únicamente para servir al Líder Supremo, Kim Jong-un.

Pos. 112 | Subrayado

Al régimen se lo conoce como el «Reino Ermitaño», porque trata de volverse incognoscible.

Pos. 135 | Subrayado

Entiendo que a veces la única forma de sobrellevar nuestros propios recuerdos es transformarlos
en una historia que dé sentido a acontecimientos que parecen inexplicables.

Pos. 207 | Subrayado

había intimidad humana y conexión, algo difícil de encontrar en el mundo moderno en el que vivo
hoy en día.

Pos. 212 | Subrayado

Cuando se tiene tan poco, hasta lo más mínimo te hace feliz… y ese es uno de los pocos aspectos
de la vida en Corea del Norte que echo de menos.

1
Pos. 223 | Subrayado

En Corea del Norte, la gente vivía en contacto con la naturaleza y desarrollaba habilidades para
predecir el tiempo que haría al día siguiente.

Pos. 250 | Subrayado

Y, aunque él no me oyera, había espías por todas partes, escuchando junto a las ventanas y
vigilando el patio del colegio. Todos formábamos parte de un inminban, o «unidad popular»
vecinal, y se nos había ordenado delatar a cualquiera que dijera algo indebido. Vivíamos con miedo
y casi todo el mundo (incluida mi madre) había experimentado en primera persona los peligros de
hablar.

Pos. 255 | Subrayado

los verdaderos creyentes (incluida mi madre) pensaban que Kim Il-sung en realidad era inmortal.

Pos. 301 | Subrayado

En la mayoría de los países, las madres animan a sus hijos a preguntar por todo; pero no en Corea
del Norte. En cuanto fui lo bastante mayor para entenderlo, mi madre me advirtió que debía ser
prudente con lo que decía.

Pos. 313 | Subrayado

El sistema songbun clasifica a todo el mundo en tres grupos principales, en función de su supuesta
lealtad al régimen. La clase más alta es la «central», compuesta de revolucionarios respetados
(campesinos, veteranos o familiares de aquellos que lucharon o murieron por Corea del Norte) y
aquellos que han demostrado gran lealtad a la familia Kim y forman parte del aparato que los
mantiene en el poder. La segunda clase es la «básica» o «vacilante», formada por aquellos que han
vivido en Corea del Sur o tienen familia allí, antiguos comerciantes, intelectuales o cualquier
persona normal y corriente de la que se pueda sospechar que no siente una completa lealtad hacia
el nuevo orden. Por último, la clase más baja de todas es la «hostil», que incluye a antiguos
terratenientes y sus descendientes, capitalistas, antiguos soldados de Corea del Sur, cristianos o
creyentes de otras religiones, las familias de los presos políticos y cualquier otra persona a la que
se considere enemiga del Estado.

2
Pos. 359 | Subrayado

Para cuando esta guerra sin sentido llegó a su fin, al menos tres millones de coreanos habían
resultado muertos o heridos, millones se habían convertido en refugiados y la mayor parte del país
estaba en ruinas.

Pos. 387 | Subrayado

los norcoreanos sin formación militar normalmente se los excluye de los mejores empleos.

Pos. 398 | Subrayado

En Corea del Norte, si un miembro de la familia comete un delito grave, todos son considerados
criminales. De pronto, la familia de mi padre perdió su estatus social y político favorable.

Pos. 422 | Subrayado

el comercio en general seguía siendo una actividad clandestina y especializada

Pos. 437 | Subrayado

Prácticamente en cualquier otro lugar, la vocación de mi padre habrían sido los negocios. Sin
embargo, en Corea del Norte, esta actividad simplemente suponía un medio para sobrevivir. Y lo
convirtió en un criminal.

Pos. 515 | Subrayado

Creía sinceramente que Corea del Norte era el centro del universo y que Kim Il-sung y Kim Jong-il
tenían poderes sobrenaturales. Creía que Kim Il-sung hacía que el sol saliera y que, cuando Kim
Jong-il nació en una cabaña en nuestro sagrado monte Paektu (en realidad nació en Rusia), un
arco iris doble y una nueva estrella brillante en el cielo señalaron su llegada. Le habían lavado el
cerebro hasta tal punto que, cuando Kim Il-sung murió, el pánico se apoderó de ella. Fue como si
el mismísimo Dios hubiera muerto. «¿Cómo puede la Tierra seguir girando sobre su eje?», se
preguntó. Las leyes de la física que había estudiado en la universidad se vieron superadas por la
propaganda que le habían inculcado durante toda su vida. Pasarían muchos años antes de que se
diera cuenta de que Kim Il-sung y Kim Jong-il solo eran hombres que habían aprendido de Josef
Stalin, su referente soviético, cómo hacer que la gente los adorara como a dioses.

3
Pos. 526 | Subrayado

En aquel entonces, en Corea del Norte no existía el concepto de «cita». Nuestra cultura siempre ha
sido extremadamente conservadora en cuanto a las relaciones entre hombres y mujeres. Alguien
que se ha criado en Occidente podría pensar que el romance brota de forma natural, pero no es
así. Aprendes a ser romántico a partir de libros y películas, u observando. Pero no existía un
modelo del que aprender en la época de mis padres. Ni siquiera disponían de palabras para
expresar sus sentimientos. Debías adivinar cómo se sentía tu ser querido por la expresión de sus
ojos o el tono de su voz cuando te hablaba. Lo máximo que podían hacer era tomarse de las
manos en secreto.

Pos. 547 | Subrayado

Hay otro dicho coreano: «El hilo sigue a la aguja». Por lo general, el hombre es la aguja y el hilo es
la mujer, así que la mujer sigue al marido a su casa. Pero no toma su apellido. Para muchas
mujeres, esa la única seña de independencia que conservan en sus vidas.

Pos. 561 | Subrayado

el capitalismo era algo indigno para los norcoreanos, y la mayoría de la gente consideraba que el
dinero era un tema demasiado desagradable para mencionarlo en una conversación educada.

Pos. 584 | Subrayado

el gobierno le robaba todo a su pueblo, incluyendo la libertad.

Pos. 601 | Subrayado

En lugar de cambiar sus políticas y reformar sus programas, Corea del Norte respondió haciendo
caso omiso de la crisis. En vez de abrir el país a toda ayuda e inversión internacional, el régimen le
dijo al pueblo que solo hiciera dos comidas al día para preservar nuestras reservas de alimentos.
En 1995, en su mensaje de Año Nuevo, el nuevo Querido Líder, Kim Jong-il, instó a los coreanos a
trabajar más duro. A pesar de que 1994 nos había traído «lágrimas de sangre», escribió, debíamos
recibir 1995 «con energía, determinación y con un único propósito»: hacer más próspera a la patria.

Pos. 612 | Subrayado

Cuando la ayuda alimentaria extranjera comenzó a llegar por fin al país para socorrer a las víctimas
del hambre, el gobierno desvió la mayor parte hacia los militares, cuyas necesidades siempre
4
Pos. 612 | Subrayado (continuación)

estaban en primer lugar.

Pos. 635 | Subrayado

En el mundo libre, los niños sueñan con lo que quieren ser cuando crezcan y cómo pueden usar
sus talentos. Cuando yo tenía cuatro y cinco años, mi única ambición de adulta era comprar todo
el pan que quisiera y comérmelo. Cuando tienes hambre constantemente, en lo único que piensas
es en comida.

Pos. 677 | Subrayado

Yo era la más pequeña en mi clase de primero y, desde luego, no era la más inteligente. Lo sé
porque en Corea del Norte alinean a los alumnos por estatura y les asignan un sitio en clase en
función de sus notas.

Pos. 683 | Subrayado

En lugar de cuentos de miedo, teníamos historias ambientadas en un lugar mugriento y repugnante


llamado Corea del Sur, donde niños sin hogar vagaban descalzos por las calles pidiendo limosna.
Hasta que llegué a Seúl, nunca se me ocurrió que, en realidad, esos libros describían la vida en
Corea del Norte. Pero no podíamos ver más allá de la propaganda.

Pos. 704 | Subrayado

A los norcoreanos se nos educa para venerar a nuestros padres y mayores; forma parte de la
cultura que heredamos del confucianismo. Así que, en nuestra mente colectiva, Kim Il-sung era
nuestro querido abuelo y Kim Jong-il era nuestro padre.

Pos. 710 | Subrayado

En Corea del Norte, al gobierno no le basta con controlar adónde vas, qué aprendes, dónde
trabajas y qué dices. Necesita controlarte a través de tus emociones, convirtiéndote en un esclavo
del Estado al destruir tu individualidad y tu capacidad para reaccionar ante las situaciones según
tu propia experiencia del mundo.

5
Pos. 713 | Subrayado

el adoctrinamiento comienza en cuanto aprendes a hablar y tu madre te lleva a la espalda a las


reuniones de los inminban a las que todo el mundo en Corea del Norte debe asistir al menos una
vez a la semana. Aprendes que tus amigos son tus «camaradas», y así es como las personas se
dirigen unas a otras. Se le enseña al pueblo a pensar con una única mentalidad.

Pos. 716 | Subrayado

En cuanto entras en la escuela, se te inculcan los 10 Principios del régimen, que son como los Diez
Mandamientos de la Biblia. (Número 1: «Debemos dedicarnos por completo a la lucha para unificar
toda la sociedad bajo la ideología revolucionaria del Gran Líder y camarada Kim Il-sung». Número
2: «Debemos respetar al Gran Líder, el respetado camarada Kim Il-sung, con la mayor lealtad». […]
Número 10: «Debemos transmitir los grandes logros de la revolución del Gran Líder y camarada
Kim Il-sung de generación en generación, para que la hereden y completen».) Aprendes el principio
de juche, o autodeterminación nacional. Y se te enseña a odiar a los enemigos del Estado con todo
tu ser.

Pos. 725 | Subrayado

En segundo, nos enseñaban a realizar operaciones matemáticas sencillas, pero no como se


enseña en otros países. En Corea del Norte, incluso la aritmética es una herramienta de
propaganda. Un problema típico sería algo así: «Si matas a un maldito norteamericano y tu
camarada mata a dos, ¿cuántos malditos norteamericanos muertos tienes?». No podíamos decir
simplemente «norteamericanos»: eso sería demasiado respetuoso. Tenía que ser «maldito
norteamericano», «demonio yanqui» o «yanqui narigón». Si no lo decías así, te criticaban por tratar
a nuestros enemigos con demasiada amabilidad.

Pos. 766 | Subrayado

No podía creer que en su propio país una vida humana tuviera menos valor que la de un animal.
Incluso a un perro se lo trataría con mayor respeto.

Pos. 785 | Subrayado

Mi tío Park Jin tenía un reproductor de vídeo y, cuando yo era pequeña, iba a su casa a ver
películas de Hollywood. Mi tía cubría las ventanas y nos advertía que no habláramos de ello con
nadie. Me encantaban Cenicienta, Blancanieves y las películas de James Bond. Sin embargo,
cuando tenía unos siete u ocho años, la película que cambió mi vida fue Titanic. Me asombró que

6
Pos. 785 | Subrayado (continuación)

se tratara de una historia que tenía lugar hace cien años. ¡Aquellas personas que vivían en 1912
disponían de mejor tecnología que la mayoría de los norcoreanos! Pero, sobre todo, no me podía
creer que alguien hubiera hecho una película sobre una historia de amor tan vergonzosa. En Corea
del Norte, habrían ejecutado a los responsables. No se permitían historias humanas reales, nada
salvo propaganda sobre el Líder. Pero, en Titanic, los personajes hablaban de amor y humanidad.
Me impresionó que Leonardo DiCaprio y Kate Winslet estuvieran dispuestos a morir por amor, no
solo por el régimen, como nosotros. La idea de que la gente pudiera elegir su propio destino me
fascinó. Esta película de Hollywood pirateada me proporcionó mi primer atisbo de libertad.

También podría gustarte