Carta A Sergio Mondragón - Ludovico Silva

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 8

el c o r n o e m p l m n a d o

número 22 • abril 1967

t h e p l i i m e d horii
number 22 • april 1967
U N A REVISTA D E LA CIUDAD D E MEXICO
editores:
Sergio mondragón asistente editorial:
margaret randall judith gutiérrez

Poesía, prosa, cartas en espéiñol e inglés, arte. Toda correspon


dencia diríjase al Apartado Postal No. 13-546. México 13, D.
F. Originales que no se publiquen no serán devueltos si no se
acompañan de timbre y sobre. Los derechos regresan a los au-
tores 30 días después de la publicación. E L C O R N O E M P L U -
M A D O se distribuye en América Latina, Estados Unidos, Ca-
nadá, Inglaterra, Australia y España.

representantes/representatives:

hansjorge mayer, Alemania, Germany; ektor nho & victor gar-


cía robles, Argentina; adrián rawlins, Australia; haroldo de
campos, Brasil; george bowering, Canadá; nicanor parra, Chile;
oazario román, Costa Rica; roberto Fernández retamar, Cuba;
gonzalo arango, Colombia; alejandro moreano, Ecuador; anselm
hollo, Inglaterra, England; marco antonio flores, Guatemala;
malay roy choudhury, Calcuta. India; miguel ángel fernández,
Paraguay; raquel jodorowsky, Perú; jaime carrero. Puerto Rico;
rubén yakovski, Uruguay; ludovico silva & josé moreno, Ve-
nezuela; david ossman, serge gavronsky, ron connally, lawrence
ferlinghetti, alex rode, j. d. whitney, john miller, Estados Uni-
dos, The United States; josé batlló, España, Spain; roque
dalton, Checoslovaquia.
A MAGAZINE FROM MEXICO CITY
editors:
¡«ergio mondragón editorial assistent:
margaret randall judith gutiérrez

Poetry, prose, letters in english and Spanish, artwork. All co-


rrespondence should be addressed to Apartado Postal No.
13-546, México 13, D. F. Unsolicited manuscripts will not
be returned. All rights revert to authors 30 days after pu-
blication.

Copyright 1967
s u m a r i o

c o n t e n t s

nota de los editores 5


editor's note 5
denise levertov 7
harold norse 8
emesto cardenal 12
Claudio bertoni 15
Sergio mondragón 33
alan trachtenberg 39
anselm hollo 42
hornero aridjis 43
Cecilia vicuña 45
elvio eduardo gandolfo 49
Juan martínez 51
lenore kandel 54
robert sward 55
michael heller 58
rochelle owens 62
José agustín goytisolo 72
hugo rodríguez alcalá 74
margo glantz 75
ariel ferraro 79
jerónimo'pablo gonzález martin 80
rubén darlo translated by elinor randall 83
John mills 87
charles Icvendosky 95
keith Wilson 98
halvard johnson 100
daisy aldan 105
Víctor de la rosa 110
lawrence ferlinghetti traducido pot femando alegría 114
hector yánover 118
gonzalo rojas 120
Steve mindel 122
james 1. weil 123
Jerome rothenberg 124
hector cattolica 126

books: commentary by margaret randall 127

cartas — letters 129


gonzalo arango, cecilia vicuña, william agudelo, claudio
bertoni, teodoro pablo lecman, ludovico silva, cid corman,
William coakley, george bowering, gordon asslett, dan
georgakas

notas sobre los colaboradores 145


contributor's notes 146

reproducciones —' reproductions


umberto peña 23 - 32
guillermón 69-71

portada/cover: felipe ehrenberg


cho la ocasión para pedirles una foto de ustedes que dese&mos
de verdad, es natural que los cornos lleguen con 2 meses^, por
lo' menos, de atraso?
fin.
en vez de decir' chao quisiéramos decir "nadja", que es el
principio de la palabra esperanza, besos de Cerília,
loa abraza

CLAUDIO BERTONI

Buenos Aires, enero de 1967.


. . . gracias, mil veces gracias, Coíno. Tengo aquí los dos úl-
timos números llegados a Buenos Aires, y, como siempre co-
mento con un amigo, el C o m o es un gran lujo. Es un gran
lujo para los que creemos que ser poeta no es sumergirse en
etéreos o en un mar de palabras hermosas. Que es en cambio
tener los pies bien puestos sobre la tierra pero tan bien puestos
que. duelan. Y por esp, gracias por la protesta del N ú m . 20,
porque nos da un poco más de ánimo a los que estamos can-
sados de la miseria y la explotación en América, por parte
de los E E . u n . y de los payasos sangrientos que nos gobier-
nan, sobre todo ahora, aquí, en Argentina, Y otra vez gracias
porque revistas, casi libros, como el Corno, parecen imposibles
en esta atmósfera. Y tenemos los pies en la tierral, y la tierra
está roja, y los pies duelen. Y vivimos en "el centro de una
revolución", pero yo diría una revolución total, vital. Los sa-
ludo esperando el próximo Corno.
TEODORO PABLO LECMAN

Caracas, noviembre de 1966.

. .tenía tiempo sin escribirte. Yo no sabía —y por eso te com-


prendo mejor ahora— todos los, problemas que conlleva ha-
cer uno solo «na gran revista, triínestral de literatura. Si sólo
se tratara de las xolabpracípnes, no sería nada: a^pra me llue-
ven colaboraciones de. todas partes del mundo, y de escritores
ya famosos; pero se trata de la imprenta. Es un trabajo duro,
besitial y angustioso. El núm, I fue un éxito completo: en mes
y medio.se agotó una edición tan grande como la del Corno
Emplumado. Recibimos el Corno 19, muy bueno, junto con
137
tu carta, en la cual, por cierto, m e pides iqpe te hable de Z O N A
F R A N C A , de Juan Lizcano, v los problemas que estos dos
nombres suscitan. N o hay en Zona Franca ninguha delación
directa, aunque sí indirecta. Es una revista netamente antico-
munista y, tal como se lo dije una vez públicamente a Lizcano,
se trata de un anticomunismo enfermizo. Por el último artícu-
lo de Lizcano que te envío, verás que no tiene pelos en la len-
gua para pedir descaradamente represión contra los revolucio-
narios, intervención directa sobre Cuba. El se puso muy bra-
vo y m e contestó con una especie de defensa pública. Pero él
sabe, en el fondo, que lo que ha ocurrido es esto: la juventud
lo abandonó. El estaba antes más o menos cercano al comu-
nismo, y era un hombre plenamente de izquierda. Ahora, por
rabia de hallarse solo, cada día se ha ido haciendo más radi-
calmente enemigo de los jóvenes •—como no sean los pocos jó-
venes adictos al "anticomunismo" (tal es su doctrina) y ha
terminado por convertirse en esta abominación: E N E M I G O
D E LA U N I V E R S I D A D , E N E M I G O A B I E R T O D E LA
U N I V E R S I D A D , a la que llama "casa de los segundones"
porque los jóvenes piensan de un modo y él de otro. Se ha
vuelto de espaldas a la historia. Y, naturalmente, su revista
también. Esta hace (para el exterior, claro está) un juego JDe-
ligroso que se Jjucde poner fácilmente al descubiierto (Lizca-
no se ha encargado de hacerlo en declaraciones públicas), y
consiste en invitat a escritores de izquierda para que colabo-
ren y así poder decir: "somos amplios". Pero, así como la jus-
ticia, la amplitud entra por casa. Y en casa — e n Venezue^—
Lizcano se ha dedicado al más' furibundo anticomunismo y a
la reacción más lamentable. Hace poco, un grupo de presos
políticos (en La Pica, Estado Monagais) quísieiíoiri'realizar un
festival cultural y deportivo. El gobierno lo prohibió, y, ade-
más, incomonuicó por 60 días — e n contra de la ley de Ré-
gimen Penitenciario— a los organizadores. Bueno, con estas
cosas — c o n este Gobierno— se solidariza el artista y escri-
tor Lizcano. Eso se llama perder la libertad interior y caer en
la neurosis más atroz. No, Lizcano no ha denunciado al F A L N
en Zona Franca, pero sí lo ha hecho en El Nacional, en el que
ha pedido represión, cosa que, naturalmente, ha obtenido. No,
él cuida muy bien su Z O N A ' F R A N C A , y hasta nos invita a
colaborar en ella. Pero la juventud le ha. dicho N O ! , y enton-
ces ha recurrido a escritorfes extranjeros, ignorantes del pro-
blema. Qué destino puede tener una revista que en dos años
de vida sólo ha logrado la colaboración nacional de dos o tres
izquierdistas traidói:e$ y renegados? C o m o te Sigo, no culpo
a ningún extranjero, y tu puedes colaborar en Zona Franca si

asi lo deseas. Pero sí culpo a los veiíezolanos traidores. Pue-
des publicar esto si quieres. Cosas iguales, o parecidas, he di-
cho aquí en la prensa. E n lo personal, Lizcano no m e cae mal.
M e doy cuenta de que está lleno de problemas y de que se
ha metido en un callejón sin salida. Ojalá salga algún día, pues
es un escritor^ m u y estimable. N o le debe doler tanto la repulsa
de la juventud. ¡Si intentara comprendernos! N o soy partidatcio
de escupirle en la cara, sino de comprenderlo. Atínque no sean
m u y comprensible las delaciones. E n cuanfo a Z O N A
F R A N C A , pese a todo es una buena revista, desde el punto
de vista literario, y ojalá siga saliendo. E n fin, esperemos el
porvenir...
L U D O V I C O SILVA.

Utano. 10 January 1967


... perhaps as an old friend of both Ted and Denise I ca
risk walking between their fires and try to show that they are
not so far apart as Denise's "retort" would have it.
Ted's point of view is an honorable one. It is related to the
view Ezra Ponud has restated from Confucius as "If a m a n
have not order within him H e cannot spread order about' him".
Denise, though she numbers her points, is far from or-
derly in making them. B y and large what she quotes to attack
and what she refutes bear little resemblance to one another.
For example, she attacks T e d for saying tbat he "feels as
strongly as any about Viet N a m " by saying "It is presumtion
for anyone to say it because such feelings are not measurable".
Yet she goes on precisely at this point to measure such feelings.
She claims tbat his urge that political awareness be subsumed
in a more joined personal life and in the nearer community is
a "sneer" at those w h o do feel politically activated. I dont
myself feel any "sneer" involved. A n d Denise seems to think,
innocently enough, that "more political awareness might have
saved this country from being railroaded by Johnson into the
Tonkin "Resolution, etc". She seems not to reahze that it is
political awareness, par excellence, that moves Johnson and
those in, politics.
I feel all of us have clear notions of political issues and T e d
no less than Deoise. A n d I admit the political in T H E P L U -
M E D H O R N does not "disturb" m e , except w h e n it seems
childish. Those w h o are gripped by politics ought to be ¡enough
so as to get themselves into it and feel the. burden of respon-
n$
fraser university in burnaby, british Columbia.. . C H A R L E S
L E V E N D O S K Y sends us these poems from new york city
... K E I T H W I L S O N lives and works among pecan trees and
geese (not to mention four children, his wife and various
dogs) in the small town of san miguel, new mexico. his exci-
ting graves registry will startle readers soon with its depth
and beauty...HALVORD J O H N S O N another poet of the
southwestern united states, lives and writes in el paso, tcxas,
where he also teaches at the university of texas... D A I S Y
A L D A N is in europe this year where she is preparing a new
book for publication. .. J A M E S W E I L , aside from his own
poetry, publishes one of the best little magazines around —
E L I Z A B E T H — as well as an impressive series of poetry books
out of new rochelle, new york.. S T E V E M I N D E L writes
from san fransisco where he recently joined dozens of other
poets to read in benefit for el corno. . . J E R O M E R O T H E N -
BERG's the gorkt) poems is still available from el corno press
. . . H E C T O R C A T T O L I C A is an argentine poet living in
paris. he publishes one of the best of the new magazines,
M A R G E N ... U M B E R T O P E N A is a cuban artist and G U I -
L L E R M O N sends drawings from argentina.

P A P E L E S
Revista Trimestral del Ateneo de Caracas

150 páginas de poesía, ensayo, relato, crítica, teatro.


dibuio. suscríbase por un año : 5 dólares

diríjase a LUDOVICO SILVA

Ateneo de Caracas
Apartado 662,
CARACAS, VENEZUELA.

H7

También podría gustarte