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Carrera:
Derecho.
Fecha:
24/03/2023.
“RELACION JURIDICO TRIBUTARIA, OBLIGACIONES PRINCIPALES Y ACCESORIAS,
NACIMIENTO Y ESTRUCTURA DEL HECHO GENERADOR”
Este carácter complejo de la relación jurídico-tributaria hace que distintos tipos de relaciones
jurídicas se mezclen entre sí. Así de este modo, podemos ver como el derecho tributario
material abarca relaciones jurídicas cuyo orden de subsidiariedad se emparenta más con el
derecho privado, civil y mercantil; las relaciones de derecho tributario formal se conectan con
el derecho administrativo y las relaciones de derecho tributario sancionador con el derecho
penal. Las obligaciones tributarias materiales giran en torno a una relación jurídica de crédito
entre el sujeto deudor o pasivo y el sujeto acreedor o activo (ente público), con la obligación a
cargo del primero de dar una suma de dinero en concepto de tributo como obligación
tributaria principal.
En el artículo 12 del código tributario se estable el concepto de obligación tributaria dado por
el legislador al decir: “La Obligación Tributaria es la relación jurídica que emana de la ley y
nace al producirse el hecho generador. Según el cual un sujeto pasivo se obliga a la prestación
de una obligación pecuniaria a favor del Estado, quien tiene a su vez la facultad, obligación y
responsabilidad de exigir el cumplimiento de la obligación tributaria. También hay otro tipo de
obligaciones que el sujeto pasivo, está obligado a cumplir, como son las obligaciones
tributarias formales:
Cuando hablamos del hecho generador, como presupuesto de hecho normativo, puede ser
desglosado a través de una estructura que distingue los elementos y aspectos, en primer
lugar, podemos distinguir el elemento subjetivo del hecho generador, que responde a la
pregunta “¿quién realiza el hecho generador?”. A su vez, este elemento puede ser
desmenuzado en los siguientes aspectos:
Aspecto material: Se refiere a las características legales o estructurales del sujeto que
realiza el hecho generador. Así, éste puede ser una persona física, jurídica o, bien, un ente
colectivo sin personalidad jurídica. Para comprende es necesario saber el concepto de
contribuyente, que viene definido por el artículo 18 del código tributario al decir; “Para
todos los efectos legales, son contribuyentes, las personas directamente obligadas al
cumplimiento de la obligación tributaria por encontrarse, respecto al hecho generador, en
la situación prevista por la ley. Tendrán el carácter de contribuyente, por consiguiente:
1. Las personas naturales, las personas jurídicas de derecho público o derecho privado y los
fideicomisos.
Aspecto temporal, que adquiere relevancia en aquellos supuestos en que el sujeto que
realiza el hecho generador debe mantenerse temporalmente en cierta situación. El caso
típico es el requisito del domicilio o de la residencia para efectos de los impuestos sobre la
renta, que implica el permanecer en el territorio del ente impositor durante cierto tiempo,
en ciertas condiciones de permanencia.
Aspecto espacial, que es relevante cuando el sujeto debe estar ubicado en una cierta
delimitación territorial. El propio requisito del domicilio o de la residencia alude a este
otro aspecto, pues la permanencia del sujeto debe ser en el ámbito geográfico del ente
impositor.
En segundo lugar, encontramos el Elemento Objetivo, que podríamos definirlo como el hecho
o comportamiento considerado en sí mismo, sin vinculación personal, de igual forma,
respecto del elemento subjetivo, podemos apreciar los siguientes aspectos:
En tercer lugar, este aspecto es relevante para fijar el momento del “devengo” del hecho
generador, definido, por ejemplo, en el artículo 21 de la Ley General Tributaria española como
“el momento en el que se entiende realizado el hecho generador y se produce el nacimiento
de la obligación tributaria principal.” Así, en un tributo periódico el devengo puede ubicarse
en el primer día, en el último o en cualquier otro dentro del período fiscal. Esto significa que el
hecho generador se entiende realizado en dicho momento, aunque otros aspectos del hecho
generador no se hayan completado.
Aspecto espacial: Alude al territorio en que debe ocurrir el hecho generador. Así, se abre la
disyuntiva de si los hechos deben realizarse únicamente en el territorio del ente impositor
(territorio nacional, en el caso de un tributo estatal; territorio municipal en el caso de un tributo
municipal) o, bien, se pueden ocurrir fuera de éste, a nivel mundial. En este sentido, el llamado
criterio de territorialidad o de la fuente en los impuestos sobre la renta implica que la renta
debe ser generada en el territorio del ente impositor, mientras que el criterio de la residencia o
renta mundial implican que la renta se grava independientemente del lugar en que se produzca.
Aspecto cuantitativo: En algunas ocasiones, el elemento objetivo del hecho generador puede
ser acotado con un elemento cuantitativo. Es el caso, por ejemplo, del derogado impuesto de
renta ocasional, específicamente el caso de transmisión de bienes inmuebles que se pagaba un
1% y luego fue incrementado a 4%, posteriormente nuevamente fue reducido a 1%.
1. En las situaciones de hecho, desde el momento en que se hayan realizado los actos o
circunstancias materiales necesarias para que se produzcan los efectos que
normalmente le corresponden;
2. En las situaciones jurídicas, desde el momento en que estén constituidas
definitivamente e conformidad al derecho aplicable.
El hecho generador se considerará ocurrido en el lugar donde se hayan realizado los actos,
circunstancias o elementos constitutivos del presupuesto de hecho legal, o donde se haya
realizado el último de aquellos cuando hubieren acaecido en diferentes lugares o donde la ley
considere que se han realizado. En el caso de tributos que se apliquen sobre documentos
referentes a actos o contratos, la simple emisión de los mismos origina el hecho generador
que configura la obligación tributaria. Si el hecho generador estuviere condicionado por la ley,
se considerará perfeccionado en el momento de su acaecimiento y no en del cumplimiento de
su condición.
En cuanto a las “situaciones jurídicas”, también es de indicar que debe distinguirse entre la
fuente de la obligación del negocio jurídico como tal y la fuente de la obligación tributaria que
se genera cuando el negocio jurídico es elevado a hecho generador. Como exponía SAINZ DE
BUJANDA, 24 “en los tributos cuyo presupuesto consiste en un negocio jurídico, los efectos
tributarios nunca son efecto de la voluntad de las partes, sino exclusivamente de la ley.” De
este modo, si bien la voluntad de las partes es la fuente del negocio jurídico, ésta no es la
fuente de la obligación tributaria, que tiene su fuente en la ley. El acuerdo de voluntades
deberá ser calificado para determinar si configura o no el negocio jurídico gravado, a partir de
lo cual se sabe si nace o no la obligación tributaria.
En el ordenamiento nicaragüense, el impuesto de timbre fiscal, como resulta del artículo 240
de la ley de concertación tributaria, al ligarse el pago del impuesto a distintos tipos de
negocios jurídicos (contratos privados, poderes, fianzas, etc.), es un caso típico de impuesto
cuyo hecho generador está conformado por “situaciones jurídicas”. En cambio, los impuestos
cedulares que conforman el Impuesto sobre la Renta gravan la obtención de rentas de
distintos tipos, las cuales vienen definidas directamente por el legislador, sin acudir a negocios
jurídicos propios del ordenamiento jurídico privado.
El artículo 28 del código tributario nos dice que la realización del hecho generador origina el
nacimiento de la obligación tributaria. De aquí podemos derivar el principio de que basta con
que un elemento o aspecto no esté presente para que simplemente no surja la obligación
tributaria, con los matices que exponemos a continuación.
Ahora, este efecto básico del hecho generador está condicionado a un momento en el tiempo
que es, el llamado “devengo”, definido en el artículo 21 de la Ley General Tributaria española
como el momento en que se entiende realizado el hecho imponible y se produce el
nacimiento de la obligación tributaria. Este mismo artículo agrega que “la fecha del devengo
determina las circunstancias relevantes para la obligación tributaria, salvo que la Ley de cada
tributo disponga otra cosa”.
De esta definición podemos deducir que la obligación tributaria podría nacer aun cuando no
se hayan completado todas las circunstancias del hecho imponible o generador, sino las que
se consideran “relevantes” para tener por nacida la obligación. En ese sentido, es factible
adelantar el momento del devengo a una fecha en que aún no se han completado todas las
circunstancias previstas en el hecho generador, lo cual resulta evidente en el caso destacado
líneas atrás de los tributos periódicos en que el hecho generador se considera devengado en
los primeros días del período fiscal. También debe distinguirse esta acepción del término
“devengo” del que hemos usado atrás para ejemplificar el elemento temporal de un impuesto
periódico como el de renta, en que “devengo” es un término contable que puede traducirse
jurídicamente como la existencia de un derecho sobre la renta que no esté sujeto a condición,
aunque sí a plazo. El momento del devengo tiene la importante función de determinar la
legislación aplicable en el tiempo. Con menor precisión, el artículo 29 Ctr nos dice que se
considera ocurrido el hecho generador “
1. En las situaciones de hecho, desde el momento en que se haya realizado los actos o
circunstancias materiales necesarias para que produzca los efectos que normalmente le
corresponden
La Exención Tributaria
El artículo 53 del código tributario nos ofrece la siguiente definición de exención: “La exención
tributaria es una situación especial constituida por ley, por medio de la cual se dispensa del
pago de un tributo a una persona natural o jurídica. La exención tributaria no exime, sin
embargo, al contribuyente o responsable de los deberes de presentar declaraciones, retener
tributos, declarar su domicilio y demás obligaciones consignadas en este Código”. Así mismo
tenemos varios análisis a lo que vendría siendo la exención tributaria, por lo cual voy citar solo
una parte de la sentencia de la Sala Primera de la Corte de Costa Rica, “La exención tributaria.
La constituye el efecto de algunos supuestos de hecho contenidos en el ámbito del hecho
imponible cuyo acaecer, no da lugar al nacimiento de la obligación tributaria de pago,
constituyéndose en una excepción a los efectos normales de la realización de aquel…”. Este
que la exención tributaria no nace la obligación, pero choca de un hecho imponible de un
deber impositivo que eso sería la obligación de pagar, pero al cabo la exención esta con otros
efectos de incumplimiento con esta obligación.
Llega autores sudamericanos como Fonrouge, 25 de Araujo Falcao26 y otros, “de recibo en
muchos códigos tributarios y en especial por la doctrina brasileña, en general” Lanziano27
resume esta concepción así: “…Sé produce la relación tributaria y como consecuencia, nace la
deuda tributaria, la carga obligacional, la cual no puede ser exigida por el ente público
acreedor, en mérito al precepto legal.” Que esto quiere decir que, aunque exista la exención
el sujeto aun así debería estar obligado a cumplir con el pago tributario, en este caso siempre
va a existir el nacimiento de su obligación, pero no le va afectar. La consecuencia básica de lo
anterior es que la exención es independiente del hecho generador, por lo que puede nacer
antes o después de su realización. Asimismo, pese a la exención, la obligación tributaria nace,
sólo que no es exigible. Otra consecuencia importante que, en forma crítica, le señala la
doctrina a esta concepción es que convierte a la obligación tributaria en una suerte de
“obligación natural”. Así, la exención produce el efecto de que le quita a la administración el
derecho de exigir el cumplimiento de la obligación; pero si el contribuyente cumple con la
obligación pese a la exención, no podría obtener un reintegro.
Una segunda teoría considera que la exención consiste en un hecho previsto en una norma
ajena a la que regula el hecho generador, el cual tiene como efecto impedir el nacimiento de
la obligación tributaria; “el derecho tributario material no sólo estudia hechos imponibles,
sino que también comprende otros hechos o situaciones que son descritos hipotéticamente
en otras normas de los ordenamientos tributarios, y que, acaecidos en el mundo fenoménico,
producen el peculiar efecto de neutralizar la consecuencia jurídica normal derivada de la
configuración del hecho imponible, o sea, el mandato de pagar el tributo cuyos elementos de
mensuración pecuniaria son también normativamente fijados.” De acuerdo con esta teoría, a
diferencia de la tesis de la dispensa legal, la exención sí afecta el momento del nacimiento de
la obligación tributaria, impidiéndolo. Sin embargo, al igual que ésta, plantea que el hecho
exento puede nacer con independencia de la realización del hecho generador.