FR I Prevenció D'isquio
FR I Prevenció D'isquio
FR I Prevenció D'isquio
Y PREVENCIÓN DE LA
LESIÓN ISQUIOTIBIAL
EN DEPORTES DE
VELOCIDAD
GRADO EN CIENCIAS DE LA ACTIVIDAD
FÍSICA + GRADO EN FISIOTERAPIA
Nº Expediente:
RESUMEN
SUMMARY
Introduction: The hamstring injury has a high prevalence in sports based on speed,
as well as a high prevalence. Objectives: The objective of this systematic review is
to elucidate the risk factors as well as to search for the best prevention methods for
the injury. Methodology: A search was made in the databases (Academic Search
Ultimate, CINAHL with full text, Medline complete, Open Dissertation, Rehabilitation
& Sport Medicine Source y SPORTDiscuss with full text) with the terms “Prevention
or Risk factors” and “Hamstring injury or Hamstring strain or Hamstring tear” and
“Velocity or Speed”. Results and conclusion: The review points to clear risk factors
such as a previous hamstring injury and age, and risk factors with less evidence
such as hamstring strength or fatigue, where there is disagreement between
authors. Likewise, we see that prevention programs will be based on strength,
balance and plyometric exercises such as “The 11+” program. It is concluded that
the risk factors are broad and most with low reliability, so their classification is
complex, and makes it difficult to carry out good prevention programs.
INDICE
1. INTRODUCCIÓN…………………………………………………..6
1.1 Anatomía de la musculatura…………………………….....7
1.2 Biomecánica de la carrera de velocidad...……………....9
2. OBJETIVOS………………………………………………...…….13
3. METODOLOGÍA………………………………………………….14
3.1 Diseño…………………………………………………...……14
3.2 Estrategia de búsqueda………………………………...…14
3.3 Criterios de selección………………………………...……14
3.4 Diagrama de flujo……………………………………...……15
4. RESULTADOS……………………………………………………16
4.1 Cuadro resumen de los artículos empleados………....16
4.2 Resumen artículos empleados………………………...…20
5. DISCUSIÓN…………………………………………………...…..29
5.1 Factores de riesgo no modificables……………………..29
5.2 Factores de riesgo modificables…………………………32
5.3 Prevención de la lesión…………………………………....39
5.4 Disminución del rendimiento post-lesión……………...42
6. FUTURAS LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN………………….....44
7. CONCLUSIONES……………………………………………...…45
8. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS…………………………...46
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla 1…………………………………………………………………………….16
Cuadro resumen de los artículos empleados.
Tabla 2…………………………………………………………………………….30
Resultado de las variables medidas con respecto al numero de lesiones.
Tabla 3…………………………………………………………………………….31
Lesionados dependiente de la edad.
Tabla 4…………………………………………………………………….………39
Evidencia de los factores de riesgo de la lesión isquiotibial.
Tabla 5…………………………………………………………………………....40
Reducción de lesiones con el programa 11+.
Tabla 6……………………………………………………………………….…...41
Cambios en los valores de fuerza con el programa “11+”.
Tabla 7……………………………………………………………………….…...42
Comparación de los datos entre lesionados y no lesionados.
ÍNDICE DE FIGURAS
Figura 1……………………………………………………………………...8
Anatomía de la inserción isquiotibial.
Figura 2………………………………………………………………….….10
Ejemplo gráfico de la división de las fases de la carrera.
Figura 3……………………………………………………………….…….11
Gráfica de la activación muscular de los isquiotibiales en la carrera.
Figura 4………………………………………………………………….…15
Diagrama de flujo.
Figura 5………………………………………………………………….…33
Número de lesiones divididas por momentos de la temporada.
1. INTRODUCCIÓN
Por ultimo, debe señalarse que la lesión isquiotibial es la más prevalente durante
las competiciones internacionales de atletismo (11,4% de las lesiones) (Tokutake
et al., 2018).
Figura 1.
Nota: Recuperada de Made et al., (2015). En la figura podemos ver los músculos
1) semitendinoso , 3) semimembranoso, y 4) cabeza larga del bíceps femoral, y su
inserción en la tuberosidad isquiática.
Su tasa de reincidencia es 2 veces más alta que la de cualquier otra lesión en este
deporte, ocurriendo en la propia temporada de reincorporación en un porcentaje del
31%, lo que supone que esta tasa sea el doble que la probabilidad de reincidencia
de un esguince de tobillo. (Liu et al., 2012).
a) Early swing: Momento en el que el pie se eleva del suelo para comenzar
la flexión de rodilla. En este momento podemos ver que lo normal es
encontrar ángulos alrededor de 60º de flexión de rodilla y 15º de
extensión de cadera.
b) Mid swing: Momento de máxima flexión de la rodilla. Con la pierna aún
en vuelo, la rodilla se encuentra con 140º de flexión y la cadera con 60º
de flexión.
c) Late swing: Fase final del vuelo en la que la pierna se prepara para el
apoyo. En esta fase la rodilla se encuentra con una flexión de 40º y la
cadera con una flexión de 60º.
d) Early stance/ foot strike: Momento en el que el pie hace contacto con
el suelo. En este momento la rodilla se encuentra con una flexión de 30º
y la cadera con una flexión de 40º.
e) Mid stance: Momento en el que se da el mayor apoyo del pie antes de
comenzar el despegue. En esta fase la rodilla tiene una flexión de 40º y
la cadera una flexión de 30º.
f) Late stance/ toe off: Momento previo al despegue del pie. En esta fase
la rodilla tiene un flexión de 35º y la cadera una extensión de 10º.
Figura 2.
Como precisan Kenneally et al., (2019), la que hasta ahora se creía que era la fase
más lesiva era la fase de vuelo u oscilación, específicamente el mid swing. Pero
estudios recientes concuerdan en que durante la fase de foot strike o early stance,
las fuerzas de reacción impuestas por el suelo a las que se someten los músculos
isquiotibiales (concretamente la cabeza larga del bíceps femoral), sumado a los
grados de estiramiento a los que están expuestos estos músculos, podría ser el
momento más lesivo para estos músculos. No obstante, varios estudios apuntan a
que tanto la fase de late swing como de early stance serían las más lesivas, por las
fuerzas que tendría que soportar la musculatura isquiotibial. En la primera, por la
Figura 3.
Gráfica de la activación muscular de los isquiotibiales en la carrera.
Nota: Recuperada de: De Hoyo et al. (2013). En la figura podemos observar como
la fase final del swing es la fase de mayor activación de los isquiotibiales, así como
la fase de mayor elongación, aumentando la posibilidad de lesión en estas fases.
Hasta ahora, basándose en este enfoque del movimiento en las distintas fases de
la carrera, los diversos autores se han referido a varios factores de riesgo. Se alude
en primer lugar a una baja fuerza de la musculatura isquiotibial, que hasta el
momento se creía que era el principal factor de riesgo para esta lesión,
2. OBJETIVOS
3. METODOLOGÍA
3.1 Diseño
Para este trabajo realicé una revisión sistemática de las siguientes bases de datos:
Academic Search Ultimate, CINAHL with full text, Medline complete, Open
Dissertation, Rehabilitation & Sport Medicine Source y SPORTDiscuss with full text.
La búsqueda se realizo sobre la prevención de lesiones referidas a las lesiones
isquiotibiales en deportes de velocidad, utilizando los siguientes términos, tanto en
ingles como en español, no encontrando resultados relevantes en este ultimo
idioma: “Prevention or Risk factors” and “Hamstring injury or Hamstring strain or
Hamstring tear” and “Velocity or Speed”
FIGURA 4
Diagrama de flujo.
Eliminados por no
cumplir los criterios de
temporalidad: 49
n= 520 artículos
Eliminados por no
disponer del texto
completo: 207
n= 313 artículos
n= 128 artículos
Eliminados por tratar
sobre otras lesiones
o sobre rehabilitación:
39
n= 89 artículos
Eliminados por no tratar
sobre deportes de
velocidad: 15
n= 74 artículos
Eliminados por ser
revisiones o
metaanálisis: 35
n= 39 artículos
4. RESULTADOS
Tabla 1.
Arsenis, S. et al., Evaluar el efecto del 2 grupos de 16 jugadores de Se midió la fuerza muscular Mientras que las medidas pre- La practica de la rutina “FIFA 11+”
(2020). programa de prevención de fútbol de 19 años (± 1), un grupo (mediante un dinamómetro intervención fueron iguales entre durante 8 semanas, 3 veces por
lesiones “FIFA + 11” (nivel 2) control, y un grupo que realizaba isocinético) y la capacidad de grupos, se encontró una mejora semana, es efectiva en la mejora de la
en la fuerza y habilidad del la rutina “FIFA + 11”. equilibrio (mediante un sistema significativa en el grupo que realizó capacidad de equilibrio, la fuerza
miembro inferior, y su de estabilización Biodex). la rutina “FIFA 11+” de los concéntrica de los músculos de la
capacidad de reducir la parámetros evaluados. cadena posterior y mejora la relación
incidencia lesional en muscular de los MMII, ayudando así a
futbolistas jóvenes. minimizar el riesgo lesional.
Brito, J. et al., Evaluar la eficacia del 20 jugadores de fútbol sub-élite Mediante el uso de un biodex, Los jugadores mejoraron sus Los jugadores mejoraron su fuerza y
(2010). programa de prevención de de 22.3 ± 4.2 años, de los cuales se midieron la fuerza tanto resultados de fuerza isocinética en equilibrio de los músculos flexores y
lesiones “FIFA + 11”, su completaron el estudio 18. concéntrica como excéntrica, la mayoría de variables medidas, extensores de rodilla al realizar el
capacidad para mejorar la de los grupos musculares especialmente en la fuerza de los programa de prevención FIFA 11+, lo
fuerza isocinética de los cuádriceps e isquiotibiales. isquiotibiales, tras la aplicación del que sugiere que el programa podría
flexores y extensores de protocolo durante 10 semanas. tener un impacto en la reducción de la
rodilla, ayudando así a incidencia lesional en este grupo
reducir la incidencia lesional. poblacional.
Coratella, G. et Medir el efecto de la fatiga 22 jugadores amateur de fútbol Usando un dinamómetro se El ángulo de torque máximo solo La incidencia lesional isquiotibial al
al., (2015). provocada por un partido, en de 20 a 22 años, con al menos 5 midió el ángulo de torque aumento en los flexores de rodilla, termino de los partidos se puede ver
el ángulo de torque máximo años de experiencia, que no máximo de cuádriceps e y el ratio de flexores y extensores influenciada por una reducción del ratio
articular, y el ratio de fuerza hubieran sufrido una lesión en el isquiotibiales, tras una de rodilla funcional solo se vio funcional cuádriceps/isquiotibiales, de
entre cuádriceps y ultimo año, ni realizaran exposición a un programa que afectado en ejercicios de alta la misma manera un aumento de la
isquiotibiales post fatiga. programas de prevención simula la fatiga de un partido intensidad. extensibilidad de los isquiotibiales
lesional específicos. de fútbol. debido al aumento del ángulo de torque
máximo, también puede aumentar el
Costa, P. B. et Medir el efecto agudo del 21 mujeres de edades entre los Se midió mediante un Los resultados del estudio El uso de estiramientos dinámicos pre
al., (2014). estiramiento dinámico en el 20-22 años sin lesiones previas. dinamómetro el torque máximo muestran como tanto el torque ejercicio disminuyen la fuerza de los
torque máximo, de los de fuerza de los músculos máximo concéntrico y excéntrico grupos musculares cuádriceps e
isquiotibiales y cuádriceps isquiotibiales y cuádriceps, así de ambos grupos musculares y el isquiotibiales, pudiendo de esta
además de los efectos en los como los ratios convencionales ratio convencional y funcional manera aumentar el riesgo de lesión en
ratios convencionales y y funcionales de comparación (H:Q) disminuyen actividades con necesidades de fuerza
funcionales de estos de isquiotibiales/ cuádriceps significantemente. alta.
músculos (H:Q). (H:Q) antes y después de un
programa de estiramientos
dinámicos.
Edouard, P. et Analizar la relación entre la Estudio de 248 jugadores de Se midieron sprints de 30 m Las mediciones puntuales de la Se evidencia la importancia de realizar
al., (2021). lesión isquiotibial en fútbol y fútbol a lo largo de una durante varios momentos de la fuerza horizontal a baja velocidad análisis biomecánicos de la velocidad,
la fuerza de velocidad temporada completa. temporada, para analizar así se asociaban con una lesión para identificar parámetros que pueden
horizontal a altas los factores de la velocidad isquiotibial posterior. estar relacionados con la lesión
velocidades y bajas (fuerza horizontal) y se isquiotibial, y así mejorar su
velocidades. observaron las lesiones que prevención.
ocurrieron durante la
temporada.
Higashihara, A. Estudiar los efectos de la 8 atletas de velocidad y vallas Mediante un sistema de La longitud de los músculos Se evidencia en este estudio que
et al., (2015). inclinación anterior del tronco (100ml, 200ml, 400ml y 400mv) cámaras y de marcadores isquiotibiales durante las fases durante la fase de apoyo, existiría una
durante la carrera en la sub 21 sanos. corporales se midió la claves del ciclo de la marcha con incidencia potencial de lesión más alta,
cinemática muscular de los biomecánica de la carrera de una inclinación anterior del tronco por la distensión de estos músculos
isquiotibiales, y el efecto que los corredores, tanto con una es mayor. Además se observó una durante la carrera con inclinación
esto puede tener en su mayor inclinación de tronco mayor velocidad de distensión de anterior del tronco.
lesión. como sin ésta. los músculos, durante la fase final
del apoyo,
Ishøi, L. et al., Comparar el rendimiento en Se estudiaron 2 grupos, un grupo Mediante la app My sprint se No se encontraron diferencias Una lesión isquiotibial previa no afecta
(2020). un sprint de velocidad entre de 11 jugadores sub élite de 25 midieron 6 sprints de 30 significativas entre los grupos en al rendimiento deportivo, aunque los
sujetos con y sin una lesión años con lesión isquiotibial metros, donde se analizó la las variables medidas. En todo déficits neurofisiológicos, comúnmente
isquiotibial previa. previa en el año anterior y un producción de fuerza máxima caso se observó una mejor eficacia encontrados en sujetos con lesión
grupo de 33 jugadores sub élite horizontal, la velocidad teórica mecánica y una potencia horizontal previa isquiotibial, serán los que más
de 25 años. Se excluyo a los máxima de carrera, la potencia máxima mayor para el grupo con afecten a una posible recidiva lesional.
porteros. horizontal máxima, y la lesión previa.
efectividad de la cadencia,
medida mediante la fuerza
incremental por aumento de la
velocidad.
Lehnert, M. et Estudiar el efecto de la fatiga 20 jugadores de fútbol de élite de Se midieron el índice de Se pudo observar que no hubo Se concluye en este estudio que el
al., (2018). aguda en la función muscular 16 años, los cuales rellenaron un reactividad de fuerza mediante cambios con el protocolo de aumento de la incidencia lesional
y neuromuscular en cuestionario de salud previo para un drop jump, la rigidez de intervención en la fuerza y el ratio debido a la fatiga no puede ser
jugadores de fútbol jóvenes. poder ser incluidos. ambas piernas y el ratio de fuerza (H:Q), aunque sí hubo causado por una perdida de fuerza,
funcional de fuerza entre una disminución de la rigidez de sino que tiene que tener más relación
cuádriceps e isquiotibiales ambas piernas, aumentando con una disminución de la estabilidad
(H:Q), además de realizar una incluso el índice de reactividad de dinámica, aunque los autores recalcan
prueba de lactato para ver la fuerza. que los sujetos no percibieron el
respuesta metabólica. protocolo tan intenso como un partido
de fútbol.
Lundberg Investigar como los factores Atletas de élite tanto masculinos Se registraron todas las El 64,6% de los atletas sufrió Dependiendo de la zona lesionada los
Zachrisson, A. et biomecánicos están como femeninos de alto lesiones y zonas que se dieron alguna lesión durante la factores de riesgo aumentaban en gran
al., (2021). relacionados con un posible rendimiento con carreras durante la temporada atlética y temporada, el 54,8 de éstas fueron medida, siendo una baja velocidad de
riesgo de lesión y agrupar las deportivas amplias, analizando se midieron diferentes registradas en tobillo o pie y el 25.8 flexión de rodilla uno de los mayores
lesiones para entender si de finalmente 96 atletas variables tanto de movimiento en el muslo, y se encontraron factores de riesgo lesional.
esta manera los factores de (ROM) como de velocidad y variables diferentes para cada
riesgo se vuelven más fuerza grupo lesional, según la zona de la
fuertes. lesión.
Mendiguchia, J. Describir los cambios de 2 casos: Jugador de Se midió la velocidad de sprint La capacidad para producir fuerza La reducción de la capacidad de
et al., (2016). fuerza, potencia y velocidad rugby profesional de 23 años con horizontal, y sus propiedades horizontal a bajas velocidades se producir fuerza horizontal puede tener
de dos sujetos posterior a una lesión isquiotibial 53 días mecánicas, así como los ve alterada después de la lesión un efecto directo en el rendimiento
una lesión isquiotibial, y antes Jugador tiempos de carrera a baja isquiotibial deportivo, así como ser causa posible
como afecta esto a la de fútbol profesional de 25 años velocidad y velocidad pico. de la reincidencia lesional tan alta que
biomecánica de la carrera. con lesión isquiotibial previa que se da en las lesiones isquiotibiales.
sufre una lesión a los 8 días de
iniciar el estudio.
Schache, A. G. Lograr un mejor 5 hombres y 2 mujeres de Se registró un modelo Se encuentra que los músculos Debido a los hallazgos biomecánicos
et al., (2012). entendimiento de la edades cercanas a los 30 años, cinemático completo de los isquiotibiales biarticulares, encontrados en la fase final del swing
biomecánica de la carrera y con experiencia en carreras de sujetos durante los sprints, así alcanzan la fuerza pico, la se teoriza que esta es la fase más
concretamente de la velocidad y que no sufrían como su fuerza de reacción contracción pico y tienen como vulnerable a la lesión, por el
isquiotibial, para entender ninguna lesión en el momento con el suelo, realizando resultado un trabajo negativo total, posicionamiento biomecánico así como
porque la incidencia lesional del estudio posteriormente un modelo en la fase final del swing en la por el tipo de contracción que
de tipo rotura es tan alta. tridimensional con los datos carrera. encontramos, por lo que se
obtenidos. recomendará un entrenamiento
excéntrico isquiotibial con cargas altas,
en amplitudes musculares amplias.
Shalaj, I. et al., Registrar las lesiones 143 jugadores de élite de fútbol Se recogieron medidas Se describieron 43 lesiones Hay factores predisponentes a la lesión
(2020). isquiotibiales y sus de primera división nacional, de antropométricas básicas isquiotibiales en un ratio de isquiotibial como es una mala
características, para 11 equipos deportivos en (altura y peso), así como el 1.17/1000 horas, los lesionados capacidad de fuerza excéntrica, una
investigar su prevalencia y Kosovo. Los jugadores con ratio H:Q de fuerza entre por lo general eran más mayores, edad avanzada o un peso alto, los
posibles factores de riesgo lesiones previas de MMII y con isquiotibiales y cuádriceps, se con una mayor masa corporal que cuales se deben tener en cuenta a la
realizó un test de isquiotibiales hora de realizar programas específicos
Nórdico, se midió la velocidad,
de éstas en jugadores de cirugías recientes fueron agilidad y flexibilidad con los no lesionados, y su test de de prevención de lesiones
fútbol profesionales. excluidos del estudio. diversos test, así como la isquiotibiales nórdico fue peor. isquiotibiales.
cantidad de lesiones que
sucedieron durante el estudio.
Tokutake , G. et Investigar la relación entre la 61 atletas varones de velocidad Se midieron la fuerza de flexión 18 atletas sufrieron una lesión Se evidencia que la existencia previa
al., (2018). lesión isquiotibial y los sub 21, a los que se les y extensión de cadera y de isquiotibial en el periodo de de lesión isquiotibial es el mayor factor
factores de riesgo monitorizó durante toda la rodilla, así como el ROM de observación. Se evidencia que en de riesgo para que esta sea recurrente,
intrínsecos en la carrera de temporada. Se excluyeron a cadera y rodilla, la densidad de la mayoría de parámetros (edad, no encontrando específicamente
velocidad. atletas con dolor o malestar. los músculos bíceps femoral y peso, altura…) no hubo diferencias correlaciones entre los otros
glúteo mayor, y se realizó un entre los grupos lesionados y no parámetros y la lesión.
cuestionario sobre lesiones lesionados, siendo la lesión previa
isquiotibiales previas. isquiotibial, y el ROM de cadera
mayor en el grupo lesional.
Tokutake, G. y Investigar la prevalencia de Todos los atletas del club de Se anotó el momento (día) de Se anotaron 183 lesiones Las bajas temperaturas y el incremento
Kuramochi, R., la lesión isquiotibial con atletismo de la universidad de la temporada en que ocurrió la isquiotibiales en los 4 años de rápido en la velocidad que se dan al
(2020). respecto al momento Chukyo. Se midieron los datos lesión, la pierna lesionada, el estudio, observándose que la inicio de las temporadas atléticas, son
temporal de la temporada, y entre 2013-2016. género del lesionado y la recurrencia al inicio de temporada grandes factores de riesgo de la lesión
el efecto del clima en ésta. temperatura media del día. y con climas fríos era mucho isquiotibial.
mayor.
Yeung, S. S., Investigar la incidencia de 35 hombres y 9 mujeres de 19 Se midieron la flexibilidad 8 atletas sufrieron una lesión Utilizar el test de fuerza comparativo
Suen, A.M.Y., lesiones isquiotibiales en años, deportistas de velocidad isquiotibial, los picos isquiotibial durante la temporada, entre cuádriceps e isquiotibiales al
Yeung, E.W., velocistas y relacionarlo con con experiencia previa, isocinéticos de torque de la incidencia lesional fue mayor inicio de temporada, podría ser útil para
(2009). posibles predictores durante pertenecientes al instituto fuerza tanto excéntricos como durante el inicio de la temporada. predecir que atletas son más
la pretemporada. deportivo de Hong Kong, a la concéntricos de estos Los atletas con un ratio de fuerza susceptibles a lesiones isquiotibiales y
asociación atlética amateur de músculos y se observó la entre cuádriceps e isquiotibiales realizar programas de prevención
Hong Kong, o a la liga incidencia lesional durante los menor a 0.60 tenían un riesgo más específicos para estos.
interuniversitaria de la siguientes 12 meses alto de lesión isquiotibial.
universidad politécnica de Hong
Kong.
Esta revisión tiene como principal objetivo identificar los factores de riesgo que
pueden predisponer a esta lesión en los deportes basados en la velocidad, así
como exponer los factores clave de un programa de prevención de la lesión, basado
en tales factores, que puedan ayudar a reducir el riesgo de sufrir dicha lesión.
Edouard et al., (2021) tratan de relacionar una baja producción de fuerza horizontal
durante la carrera a bajas velocidades (Fh0) y a altas velocidades (V0) con las
lesiones isquiotibiales en el fútbol. Se concluye como hipótesis, que una baja fuerza
horizontal a baja velocidad estaría estrechamente relacionada con una alta
incidencia de esta lesión en el fútbol. Estos autores realizaron mediciones en 284
jugadores de fútbol de distintos países (Japón, Francia y Finlandia) en los que se
realizaron diversas mediciones durante una temporada de varios parámetros de la
velocidad, haciendo test de velocidad máxima durante 30 metros, y computando
los datos para realizar sus curvas de fuerza velocidad. Además, se tomaron datos
de todas las lesiones que ocurrieron durante esa temporada en todos los jugadores,
donde se registraron un total de 47 lesiones isquiotibiales durante la temporada en
un 13% de los jugadores. Los investigadores confirman que las mediciones de Fh0
y V0 al inicio de la temporada no estarían directamente relacionadas con una mayor
incidencia lesional, aunque las mediciones regulares de Fh0 durante la temporada
sí que estarían relacionadas con una subsecuente lesión isquiotibial posterior a esta
medición. Por ello, analizar la mecánica de la velocidad de carrera, será importante
a la hora de prevenir este tipo de lesiones.
Mendiguchia et al., (2016) describen dos casos de lesión isquiotibial en los que se
intenta encontrar si hay una diferencia en la potencia, fuerza y velocidad de estos
atletas tras sufrir esta lesión. Describen las situaciones de un jugador de rugby de
23 años el cual sufrió una lesión isquiotibial en el momento de la toma de datos, y
un jugador de fútbol de 25 años que sufrió una lesión 8 días después de la toma de
datos, volviendo a tomarse datos 33 días después de la lesión. Se midieron la
velocidad teórica máxima, la velocidad horizontal y la curva de fuerza velocidad de
ambos atletas. Se encontró como resultado que en ambos casos hubo una
reducción de la curva de fuerza velocidad, teorizándose que la capacidad de
producir fuerza horizontal a bajas velocidades se ve alterada tras una lesión
isquiotibial, por lo que la medición de la fuerza horizontal durante el sprint podría
ser un buen medidor desde un punto de vista de la prevención de lesiones.
Tokutake et al., (2018) tienen como propósito investigar los principales factores de
riesgo que pueden conducir a una lesión isquiotibial, centrándose en factores de
riesgo medibles, específicamente de rango de movimiento y fuerza de los músculos
de las articulaciones de la cadera y rodilla. 61 atletas, con implicaciones de
velocidad en sus respectivas pruebas, de alrededor de 20 años, participaron en el
estudio en el que se les observó durante una temporada atlética completa.
Mediante un dinamómetro isocinético a 60º/s, se midió la fuerza de los flexores y
extensores de cadera, así como de los flexores y extensores de rodilla, además del
ROM de cadera y rodilla, y el grosor de la cabeza larga del bíceps femoral y el
glúteo mayor, mediante ecografía. Por último, los participantes rellenaron un
cuestionario sobre lesiones previas isquiotibiales. Durante la temporada 18 atletas
5. DISCUSIÓN
La lesión previa se ha establecido por varios autores como el mayor factor de riesgo
de padecer una lesión isquiotibial, siendo uno de los mayores predictores de
reincidencia y de rotura en esta musculatura (Yeung et al., 2014).
Así lo confirman Shalaj et al., (2020) exponiendo que una lesión previa, ya sea
isquiotibial o de cualquier otra parte del cuerpo, podría tener una influencia en la
coordinación neuromuscular y el control motor del individuo, por lo que una lesión
anterior del miembro inferior podría ser un gran factor predisponente a una lesión
isquiotibial previa. Como sus resultados indican, podemos ver como la incidencia
lesional de los jugadores de fútbol con historia previa de lesión isquiotibial es casi
del doble que la de los jugadores sin una historia previa de esta lesión (60% vs
40%). Por ello, la probabilidad de padecer una lesión de este tipo es mucho mayor
en deportistas con una historia previa de dicha lesión. Reafirman estos datos
Edouard et al., (2021) como se expone en la Tabla 2, la probabilidad de lesión es
mucho mayor en aquellos que padecieron esta lesión con anterioridad siendo hasta
4 veces mayor, por lo cual sería un factor de riesgo claro de lesión isquiotibial.
Tabla 2.
5.1.2 EDAD
Tabla 3.
Figura 5.
5.2.2 FATIGA
Por tanto, puede considerarse que bajo la suficiente demanda y con una fatiga alta
nos encontraríamos con una disminución de la fuerza excéntrica isquiotibial, lo que
conllevaría un aumento de riesgo de la lesión isquiotibial, por lo que trabajar esta y
su fatigabilidad será clave en los programas de prevención lesional.
5.2.3 FUERZA
Los ratios de fuerza de fuerza H:Q (Hamstrings:Quadriceps) son una relación entre
los torques de fuerza pico de ambas musculaturas del muslo, por lo que una gran
diferencia entre estos estará asociado con un mayor riesgo de lesión. Existen varios
tipos de ratios, el ratio H:Q convencional mide la fuerza concéntrica máxima de
ambos músculos a la misma velocidad angular, mientras que el ratio H:Q funcional
mide la fuerza excéntrica de la musculatura isquiotibial comparada con la
concéntrica de la musculatura del cuádriceps. Una gran diferencia entre
musculaturas, o entre ambas piernas podría suponer un predictor de lesión del
MMII. (Barca Inovation Hub, 2019)
Costa et al., (2014) explican como una disminución de los ratios H:Q son
directamente proporcionales a un aumento de la posibilidad de la lesión, y por esto
los ratios H:Q se han utilizado como predictores de lesión isquiotibial y de rodilla en
los últimos años. Así mismo Yeung et al., (2009) encontraron una estrecha relación
entre las mediciones llevadas a cabo en la pretemporada del ratio convencional
H:Q a 180º/s y una mayor incidencia de lesión isquiotibial, ya que al disminuir este
ratio, aumentaba el riesgo de lesión. Llegan a afirmar que un ratio H:Q convencional
(180º/s) menor de 0.6 multiplicaba de gran manera el riesgo de lesión siendo 17
veces más probable, aunque estos valores no serían los mismos en el ratio
funcional.
Estos mismos autores comentan que con lo encontrado en otros artículos, las cifras
de riesgo en el ratio H:Q convencional variarán dependiendo del deporte, el sexo
de los participantes y su nivel, por lo que parecería claro que los ratios H:Q son un
predisponente de lesión fiable. No obstante, son varios los autores que discrepan
de estos resultados, como Shalaj et al., (2020) y Tokutake et al., (2018) que
encontraron pocas diferencias significativas al analizar los ratios H:Q, concluyendo
ambos que la utilización de estos ratios no es efectiva como predictor de lesión
isquiotibial por su baja fiabilidad.
Por todo ello, podemos concluir que los valores en los ratios de fuerza H:Q no son
un predisponente de lesión claro, debido a las discrepancias de los autores y los
resultados que obtienen, aunque habrá que tener en cuenta su variabilidad, debido
a las velocidades angulares en las que se miden, y que su posición de medición no
será especifica de las acciones deportivas (medición sentado entre 80º-110º de
flexión de cadera), por lo que aunque las conclusiones sobre la eficacia de este
ratio a la hora de predecir una lesión isquiotibial sean confusas, será importante
aclarar que sigue siendo un parámetro que se utiliza frecuentemente en la
investigación, y como medidor de la fuerza general, como es el caso de los artículos
de Arsenis et al., (2020), Brito et al., (2010), Costa et al., (2014) y Lehnert et al.,
(2018).
Como ya hemos podido ir vislumbrando por otros factores de riesgo como la fatiga
la cual afectaba a la fuerza excéntrica o los ratios H:Q funcionales, este será un
importante factor de riesgo para la lesión. Schache et al., (2012) encuentran que el
momento más vulnerable de la carrera a la lesión isquiotibial es la fase final del
vuelo previa al apoyo inicial, debido a la alta carga excéntrica que sufre esta
musculatura en ese momento. Los autores recalcan que las acciones excéntricas
son las más lesivas para el músculo, pudiendo producir daño a nivel de las fibras
del músculo. Por lo que concluyen que una baja fuerza excéntrica isquiotibial es un
Puede concluirse que aunque no concuerden todos los autores que se analizan en
el estudio, es bastante fiable afirmar que la medición de Fh0 de manera periódica,
será una gran herramienta en la prevención de lesiones isquiotibiales, debido a su
correlación directa entre su disminución y una lesión isquiotibial inminente.
lo que eliminar esta posición en momentos en los que se necesita una gran
aceleración podría no ser la mejor solución, siendo un factor de riesgo con difícil
modificabilidad. En todo caso debe señalarse la falta de investigación por otros
autores de este factor.
Con esta información podemos ver claramente como algunos factores de riesgo
como son una lesión previa, la edad o la fuerza excéntrica isquiotibial tienen una
evidencia alta, conviniendo la mayoría de las investigaciones en la prevalencia de
éstos como factores potenciales de riesgo. Ciertamente existen otros factores con
evidencia no tan clara, o respecto de los cuales no se pueda dilucidar su implicación
en la lesión, requiriéndose una mayor investigación. Como puede verse en la Tabla
4, se pueden organizar los factores de riesgo según su evidencia, determinado si
Tabla 4.
Nota: En la tabla podemos encontrar los factores con más evidencia en color verde,
los factores de riesgo con evidencia aunque con discrepancias entre los autores en
color naranja y los factores que necesitan mayor investigación en color rojo.
Son varios los estudios que hablan del programa de prevención de lesiones
propuesto por la FIFA (11+), el cual tuvo una primera versión en el año 2005 y una
revisión posterior en el año 2011, donde ya se publicó un manual completo (Bizzini
et al., 2011).
En este manual se expone que los equipos de fútbol que realizaban el programa de
prevención al menos 2 veces a la semana tenían una reducción en la incidencia
Tabla 5.
El programa esta dividido en 3 partes. Una primera parte con ejercicios de carrera
a baja velocidad y estiramientos activos, una segunda parte basada en ejercicios
de fuerza y pliométricos, sumando agilidad y equilibrio, y por ultimo una parte de
ejercicios de velocidad rápidos con ejercicios de cambios de dirección. El programa
cuenta con 3 niveles de dificultad en los que los jugadores pueden ir avanzando
según dominen los ejercicios del nivel anterior.
como podemos ver en la Tabla 6. Por ello, se plantea que el programa es efectivo
a la hora de mejorar la fuerza y por tanto en prevenir lesiones específicamente de
rodilla y lesiones de la musculatura isquiotibial, en concordancia con lo expuesto
anteriormente en esta revisión sobre la importancia de la fuerza excéntrica
isquiotibial como posible factor de riesgo.
Tabla 6.
De la misma manera Arsenis et al., (2020) en concordancia con los creadores del
programa y con Brito et al, encuentran un aumento de la fuerza concéntrica de los
músculos isquiotibiales en ambas piernas (un 15% de mejora para la pierna
dominante y un 8% para la no dominante), además de encontrar una mejora en los
índices generales de equilibrio de ambas piernas. Sus resultados coinciden por
tanto con los anteriores autores en que el programa “11+” es eficaz a la hora de
prevenir lesiones en futbolistas jóvenes, siendo este un programa basado en la
fuerza de la musculatura del tren inferior así como de equilibrio. No obstante, en
este estudio no consideran como parámetro clave a la mejora de la fuerza
excéntrica isquiotibial, lo que si ha sido afirmado por otros trabajos. A pesar de ello,
puede recalcarse la eficacia probada de este programa, en el que los diferentes
entrenadores podrán basarse, adaptándolo siempre a su deporte y a cada
deportista de forma individual.
de la musculatura isquiotibial, así como una disminución del ratio H:Q funcional. Por
ello consideran que el uso de estiramientos dinámicos como método de prevención
de lesiones implementándolos en el calentamiento, no serán eficaces, ya que la
disminución de fuerza y de los ratios H:Q, estarían ligados a un mayor riesgo de
lesión específicamente de rodilla y de la musculatura isquiotibial en deportes en los
que los requerimientos de velocidad sean altos. Para este estudio, una disminución
de la fuerza excéntrica isquiotibial sería un factor de riesgo de lesión isquiotibial,
por lo que no se recomendaría que los programas de prevención incluyeran estos
estiramientos, de manera previa a entrenamientos o competiciones que requieran
de acciones de velocidad.
Tabla 7.
En este estudio se señala que la tasa de reincidencia lesional después de una rotura
isquiotibial es muy alta en los primeros meses de volver al deporte (siendo hasta
de un 50% en el primer mes de volver a la practica del fútbol), por lo que consideran
que aunque no haya una diferencia significativa en los parámetros de la carrera de
velocidad, serán los déficits neurofisiológicos que se dan comúnmente después de
una lesión, la principal razón de la alta reincidencia lesional. Por ello concluyen que
en los factores de rendimiento no veremos realmente una disminución una vez el
jugador se haya recuperado de la lesión.
Por ultimo, casi todas las investigaciones se realizan con un solo club deportivo o
equipo, por lo que seria interesante incluir varios clubs o equipos deportivos para
que las variables del entrenamiento y de cómo los entrenadores plantean éste,
estuvieran presentes a la hora de medirlas como posibles factores de riesgo.
7. CONCLUSIONES
Respecto a los objetivos principales del trabajo, se concluye que los factores de
riesgo de la lesión isquiotibial en los deportes basados en la velocidad son amplios
y diversos y difíciles de clasificar. Y aunque algunos presentan mayores evidencias,
como son una historia previa de lesión isquiotibial o un aumento de la edad, la
mayoría de ellos no son concluyentes debido a los diversos resultados encontrados
por los autores y las diferentes metodologías de estudio. Resulta necesario realizar
más investigaciones para poder afirmar que estos factores influyen y de qué
manera en una posible lesión isquiotibial en los deportes basados en la velocidad.
De la misma manera, al desconocer realmente la mayoría de factores de riesgo y
su relación con la lesión isquiotibial realizar programas de prevención será
complejo, sin que exista una investigación al respecto. Aunque existen programas
como el “11+” de la FIFA, los cuales tienen una relación probada con una
disminución de la lesión en jugadores jóvenes de fútbol, aun cuando los mismos no
son específicos de la lesión isquiotibial. Por ello es importante crear programas de
prevención específicos para cada deporte, centrándolos en la lesión isquiotibial
debido a la prevalencia de ésta.
8. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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