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Agroecología 3: 7-28, 2008
LOS IMPACTOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO SOBRE LAS COMUNIDADES

CAMPESINAS Y DE AGRICULTORES TRADICIONALES Y SUS
RESPUESTAS ADAPTATIVAS
Miguel A Altieri, Clara Nicholls
Department of Environmental Science, Policy and Management, University of California, 137 Mulford Hall-3114, Berkeley,
CA 94720-3114. E-mail: [email protected]
Resumen
La mayoría de los modelos de cambio climático predicen que los daños serán compartidos
de manera desigual por agricultores pequeños del tercer mundo, y particularmente por aquellos
que dependen de las lluvias. El incremento en temperatura, sequía, precipitaciones fuertes, etc.;
podrían reducir la productividad hasta en un 50% en algunas regiones, especialmente en zonas
secas. Algunos investigadores predicen que en la medida que el cambio climático reduzca los
rendimientos, los efectos sobre el bienestar de las familias dedicadas a la agricultura de subsis-
tencia pueden ser muy severos, especialmente si el componente de productividad es reducido.
Los modelos existentes proporcionan en el mejor de los casos una aproximación somera a los
efectos esperados y ocultan la enorme variabilidad en estrategias internas de adaptación que exhi-
ben muchos agricultores. Muchas de las comunidades rurales dominadas por agricultura tradicio-
nal, parecen arreglárselas pese fluctuaciones extremas del clima. De hecho muchos agricultores se
adaptan e incluso se preparan para el cambio climático, minimizando las perdidas en las cosechas
mediante el incremento en el uso de variedades locales tolerantes a la sequía, cosecha de agua,
policultivos, agroforestería, colecta de plantas silvestres y una serie de otras técnicas. Dado esto, se
hace necesario reevaluar la tecnología indígena como fuente clave de información en estrategias
adaptativas centradas en las capacidades selectivas, experimentales y resilientes de agricultores al
enfrentar el cambio climático. Entender los rasgos agroecológicos y mecanismos de adaptación y
resiliencia de los sistemas pequeños de agricultura es esencial para diseñar una estrategia de desar-
rollo de agroecosistemas sostenibles en esta nueva era de variabilidad climática.
Palabras clave: cambio climatico, resiliencia, agroecosistemas tradicionales, capacidad adapta-

tiva
Summary
The impacts of climate change on smallholder and traditional peasant communities and
their adaptive responses.
Most models predict that small farmers will disproportionatelly share the negative effects of
climate change, partuclarly those living in rainfed areas. Increases in temperature, drougths, hur-
ricanes, etc could reduce productivity up to 50% in certain regions. Many researchers assert that
while climate change reduces yields, the effects on the livelihoods of subsistence farmers could
be severe.
Existing models however provide a mere approximation of the expected effects and in most cas-
es hide the enormous variability in the adaptive responses exhicited by hundreds of rural commu-
nities throughout the Third World. Many traditional communities seem to cope and even adapt to
extreme weather fluctuactions. In fact many farmers even prepare to changing climate conditions
minimizing yield reductions through the use of tolerant local varieties, polycultures, agroforestry
systems, water harvesting, organic soil fertilization, and a variety of otehr techniques. Given this, it
is imperative to re-evaluate indigenous knowledge and technologies as a key source of informa-
tion of adaptive strategies centered on the experimental and innovative capacities of small farmers
when confronting climate change. Understanding the agroecological adaptive and resilient mecha-
nisms of small farmers is vital to design new agroecosystems in an era of climate change.
Keywords: climate change, traditional agroecosystems, resiliency, adaptive capacity

8 Agroecología 3
Introducción preocupación por áreas donde la agricultura de subsis-

tencia es la norma, porque la disminución de tan solo
La amenaza del cambio climático global ha causa- una tonelada de productividad podría llevar a grandes
do preocupación entre los científicos ya que variables desequilibrios en la vida rural (Jones y Thornton 2003).
climáticas claves para el crecimiento de los cultivos Muchos estudios y modelos predicen una disminu-
(por ejemplo: precipitación, temperatura, etc.) podrían ción de la seguridad alimentaria en países en desarrollo
ser severamente afectadas y así impactar la producción asumiendo escenarios de severos cambios en el clima,
agrícola. Aunque los efectos de los cambios en el clima poco crecimiento económico, incremento en los precios
sobre la producción de cultivos varía ampliamente de de los alimentos, crecimiento rápido de la población y
una región a otra, se espera que los cambios anticipa- poca capacidad de adaptación a los cambios a nivel de
dos tengan grandes efectos y de gran envergadura fincas (Reddy y Hodges 2000). Los modelos existentes en
principalmente en zonas tropicales de países en desar- el mejor de los casos proporcionan una aproximación su-
rollo con regímenes de precipitación que se encuentran perficial de los efectos esperados y ocultan la enorme va-
entre semiárido y húmedo (Cline 2007). Los peligros in- riabilidad en cuanto a estrategias internas de adaptación.
cluyen el incremento en las inundaciones en las áreas Entre las comunidades rurales dominadas por agri-
bajas, mayor frecuencia y severidad de sequías y calor cultura tradicional, los agricultores parecen afrontar la
excesivo en áreas semiáridas, condiciones que en su situación a pesar de las fluctuaciones del clima (Morti-
conjunto pueden limitar el crecimiento de los cultivos y more y Adams 2001). De hecho investigaciones recien-
sus rendimientos (Howden 2007). tes sugieren que muchos agricultores se las adaptan e
El Panel Intergubernamental del Cambio Climático incluso se preparan para el cambio climático, minimi-
(IPCC) advirtió que el calentamiento para el 2100 será zando las pérdidas en productividad mediante el uso in-
el peor que se haya esperado con un incremento de la crementado de variedades locales tolerantes a la sequía,
temperatura probablemente de 1.8 a 4 °C y un posible cosecha de agua, policultivos, agroforestería, desyerbe
aumento de hasta 6.4 °C. A medida que las temperatu- oportuno, colecta de plantas silvestres y una serie de
ras continúan elevándose, el impacto en la agricultura otras técnicas. Dado esto se hace necesario reevaluar la
será significativo (Doering et al 2002). Estos impactos tecnología indígena como fuente clave de información
están siendo ya experimentados por muchas comuni- sobre la capacidad adaptativa que exhiben algunos
dades en los países del sur, donde también se espera un agricultores para enfrentar el cambio climático (Altieri
aumento en las precipitaciones, las cuales dañarán aun 2002).
más los cultivos debido a la erosión y en algunos casos En países de África, Asia y Latinoamérica los agri-
a inundaciones. Un incremento en la intensidad de los cultores tradicionales han desarrollado y/o heredado
ciclones tropicales causará daño en los cultivos en ecosistemas agrícolas complejos situados en ambientes
sistemas costeros, mientras que al subir el nivel del mar hostiles. Estos sistemas han sido manejados de mane-
los acuíferos costeros se salinizarán. Las islas del Pacífico ra ingeniosa permitiendo que las familias de pequeños
y los grandes deltas ya están siendo afectados por estos agricultores resuelvan sus necesidades de subsistencia
fenómenos. en condiciones ambientales variables sin depender de
La mayoría de los pobres rurales del mundo (cerca de las tecnologías agrícolas modernas (Denevan 1995).
370 millones) viven en áreas pobres en recursos, alta- Aunque muchos de estos sistemas han colapsado o
mente heterogéneas y propensas al riesgo. Los secto- desaparecido en muchas partes del tercer mundo, la
res más pobres están ubicados con frecuencia en zonas persistencia de millones de hectáreas bajo agricultura
áridas o semiáridas, y en montañas y colinas que son tradicional es prueba viviente de una estrategia agrícola
ecológicamente vulnerables (Conway 1997). En mu- indígena exitosa que constituye un tributo a la “creativi-
chos países, en especial la gente con bajos niveles de dad” de los pequeños agricultores de los países en desa-
ingresos, son ahora forzados a vivir en áreas expuestas rrollo (Wilken 1987). Aún hoy, en la primera década del
y marginales (por ejemplo: áreas inundables, zonas de siglo XXI hay en el mundo millones de pequeños agri-
laderas expuestas, y tierras áridas o semiáridas), ponién- cultores tradicionales y/o indígenas practicando tipos
dolos en riesgo a los impactos negativos del cambio de agricultura que proporcionan resiliencia notable a
climático. Para esta gente, aun los cambios menores en los agroecosistemas ante los continuos cambios econó-
el clima pueden tener un impacto desastroso en sus micos y ambientales, además de contribuir substancial-
vidas y fuentes de sustento. Las implicaciones pueden mente a la seguridad alimentaria a nivel local, regional
ser muy profundas para los agricultores de subsisten- y nacional (Netting 1993). Este artículo describe los im-
cia ubicados en ambientes frágiles, donde se esperan pactos del cambio climático en comunidades agrícolas
grandes cambios en productividad, pues estos agricul- de pequeños agricultores tradicionales y las caracterís-
tores dependen de cultivos potencialmente afectados ticas agroecológicas de los sistemas agrícolas indígenas,
(p. ej. maíz, frijoles, papas, arroz, etc.) para su seguridad que pueden servir de base para el diseño de sistemas
alimentaria. Muchos investigadores expresan mayor agrícolas resilientes al cambio climático.
Los impactos del cambio climático sobre las comunidades campesinas y de agricultores 9
La agricultura campesina y tradicional: extensión y sin utilización o poco uso de los fertilizantes y semillas
significancia mejoradas (Richards 1985). Sin embargo, esta situación
ha cambiado en las últimas dos décadas en tanto que
En América latina, las unidades de producción cam- la producción de alimento per capita ha disminuido en
pesinas alcanzaron cerca de 16 millones a finales de los África. Alguna vez autosuficientes en cereales, África
años ‘80 ocupando cerca de 60,5 millones de hectáreas, ahora tiene que importar millones de toneladas para
o 34,5% del total la tierra cultivada; la población campe- llenar el vacío. A pesar del incremento en las importacio-
sina incluye a 75 millones de personas que representan nes, los pequeños agricultores producen la mayor parte
casi dos tercios de la población rural total de América del alimento de África (Beets 1990).
latina (Ortega 1986, Browder 1989). El tamaño medio de En Asia, solamente China, posee casi la mitad de las
finca de estas unidades es cercano a tan solo 1,8 hec- pequeñas fincas de la región (193 millones de hectá-
táreas, sin embargo, la contribución de la agricultura reas), seguidas por la India con 23 por ciento, y seguidas
campesina al suministro de alimentos general en la re- por Indonesia, Bangladesh, y Vietnam. La mayoría de los
gión es significativa. En los años 80, aproximadamente más de 200 millones de agricultores que viven en Asia
41% de la producción agrícola destinada para consumo poseen fincas con menos de 2 hectáreas de arroz. Tan
doméstico provino de la agricultura campesina, la cual solo en China hay probablemente 75 millones de agri-
es responsable de producir a nivel regional el 51% del cultores de arroz quienes aun practican métodos simila-
maíz, el 77% de los frijoles, y el 61% de las papas. Sólo en res a los utilizados hace más de mil años. La mayoría del
el Brasil, hay cerca de 4,8 millones de familias de agricul- arroz producido por los pequeños agricultores asiáticos
tores familiares (alrededor del 85% del total de agricul- se produce en condiciones de pendiente y dependien-
tores) que ocupan el 30% del total de la tierra agrícola tes de lluvias (Uphoff 2002).
del país. Dichas familias de agricultores controlan cerca
del 33% del área sembrada en maíz, el 61% en frijoles, Los impactos del cambio climático en la producción
y el 64% de aquellas tierras cultivadas en yuca, produ- agrícola de comunidades de pequeños agricultores
ciendo así el 84% de la yuca total y el 67% de todas las
frijoles para el consumo nacional. En Ecuador, el sector Los pequeños agricultores (además de los que no
campesino ocupa más del 50% del área dedicada a los poseen tierras y pobres urbanos) están entre los grupos
cultivos alimenticios tales como maíz, frijoles, cebada y más postergados y más vulnerables del mundo en de-
papa. En México, los campesinos ocupan por lo menos sarrollo. A nivel global, cerca de 55% de los hogares de
el 70% del área destinada al maíz y el 60% del área en pequeños agricultores se encuentran por debajo de la
frijoles (Toledo et al. 1985). línea de pobreza. La mayoría de los modelos del cambio
Además del sector campesino y de los agricultores climático predicen que los daños serán compartidos de
familiares, hay cerca de 50 millones de personas que forma desproporcionada por los pequeños agricultores
pertenecen a unos 700 grupos indígenas étnicos quie- del tercer mundo, y particularmente agricultores que
nes viven y utilizan las regiones tropicales húmedas de dependen de regímenes de lluvia impredecibles. En
la región. Cerca de 2 millones de ellos viven en el Ama- algunos países africanos, la mayor parte de la produc-
zonas y México meridional. En México, la mitad de las ción agrícola depende de la lluvia, la cual podría redu-
zonas tropicales húmedas son utilizadas por las comu- cirse en un 50% antes del 2020. Según las proyecciones,
nidades indígenas y los “ejidos” en los cuales se desarro- la producción agrícola en muchos países africanos se
llan sistemas integrados de agricultura-silvicultura con verá afectada seriamente especialmente en zonas semi
la producción dirigida hacia la subsistencia y mercados áridas. Cerca del 70% de los africanos dependen direc-
a nivel local y regional (Toledo et al. 1985). tamente de las tierras secas y semi-húmedas para sus
África tiene aproximadamente 33 millones de fincas sustentos diarios (Rosenzweig y Hillel 1998).
pequeñas, representando 80% de todas las fincas en la Jones y Thornton (2003) predicen una reducción to-
región. La mayoría de agricultores africanos (muchos tal del 10% en la producción del maíz en el año 2055
de ellos son mujeres) son pequeños pero que contro- en África y América Latina, equivalente a pérdidas de
lan dos tercios de todas las fincas con área inferior a 2 $2 mil millones por año, afectando principalmente a 40
hectáreas y el 90% de fincas menores a 10 hectáreas. millones de agricultores pobres en diferentes sistemas
La mayoría de los pequeños agricultores practican una de América Latina y 130 millones de ellos en África sub-
agricultura de “bajos-insumos” basada sobre todo en el Sahariana. Estas pérdidas de la producción se intensi-
uso de recursos locales, y a veces con uso modesto de ficarán de acuerdo al incremento en las temperaturas
insumos externos. Esta agricultura de bajos-insumos y las diferencias en la precipitación lo cual conduce a
produce la mayoría del grano; casi todas las raíces, co- una menor producción de maíz. Algunos investigadores
sechas de tubérculos y plátanos, y la mayoría de legum- predicen que como el cambio climático reduce la pro-
bres. La mayoría de los cultivos alimenticios básicos son ducción de los cultivos, los efectos sobre el bienestar de
producidos por pequeños agricultores prácticamente las familias de agricultores de subsistencia serán muy
10 Agroecología 3
severos, especialmente si el componente de la produc- así como índices crecientes del desarrollo de población,
tividad de subsistencia se reduce. Estos cambios en la crecimiento, migración e hibernación. Se espera que las
calidad y la cantidad de producción pueden afectar la plagas migratorias respondan más rápidamente al cam-
productividad del trabajo de los agricultores e incluso bio climático que las plantas, ya que es posible que pue-
afectar negativamente la salud de sus familias (Rosen- dan colonizar nuevos cultivos y hábitats. Un incremento
zweig y Hillel 1998). gradual del CO2 atmosférico afectará directamente a las
especies de plagas por efecto de la fertilización por CO2
Efectos físicos del cambio climático sobre la agricultura e indirectamente vía interacciones con otras variables
ambientales. Sin embargo, respuestas individuales de las
Se predice que el calentamiento global dará lugar a especies al CO2 elevado variarán. Algunos experimentos
una variedad de efectos físicos incluyendo el aumento recientes en condiciones de CO elevado2 han sugeri-
en la temperatura del agua del mar, junto con la pérdida do que los áfidos pueden llegar a ser plagas más serias,
parcial de glaciares, cuyo resultado será un incremento aunque otros estudios no han discernido ningún efecto
del nivel del mar el cual puede estar en el rango de 0,1 significativo sobre otras especies de homópteros. En ge-
a 0,5 metros hacia mediados de siglo, según las actuales neral poco se sabe los efectos de estos cambios sobre la
estimaciones del Panel Intergubernamental del Cambio dinámica poblacional de cientos de especies de plagas.
Climático (IPCC). Tales incrementos podrían plantear Los modelos sobre efectos en enfermedades de plan-
una amenaza a la agricultura en las áreas costeras, don- tas indican que el cambio climático podría alterar etapas
de se ve afectado el drenaje de agua superficial y sub- y tasas del desarrollo de ciertos patógenos, modificando
terránea, así como también puede ocurrir la intrusión la resistencia del hospedero, y dando lugar a cambios en
del agua de mar en los estuarios y acuíferos. En partes la fisiología de las interacciones entre hospedero y pató-
de Egipto, Bangladesh, Indonesia, China, y de otras áreas geno. Las consecuencias más probables son cambios en
costeras que ya presentan drenajes empobrecidos, es la distribución geográfica de hospederos y patógenos e
probable que la agricultura llegue a ser cada vez más di- incrementos en las pérdidas en cosechas, causados en
fícil de sostener. Algunas islas del Pacifico ya están parti- parte por los cambios en la eficacia de las estrategias de
cularmente en riesgo (Rosenzweig y Hillel 2008). control bajo nuevos escenarios climáticos. Los patrones
Un impacto potencialmente significativo del cambio alterados del viento pueden cambiar la dispersión de
climático para la producción de las pequeñas fincas es la bacterias y hongos y por lo tanto la diseminación de en-
pérdida de materia orgánica del suelo debido al calen- fermedades foliares. La literatura limitada en esta área su-
tamiento de este. Temperaturas más altas del aire pue- giere que el impacto más probable del cambio climático
den acelerar la descomposición de materia orgánica, e será sentido como pérdidas debido a enfermedades que
incrementar las tasas en otros procesos del suelo que cambian su distribución geográfica. En general se espe-
afecten su fertilidad. Bajo un suelo más seco las con- ran incrementos en temperatura y humedad y se predice
diciones de crecimiento de raíces y la descomposición que muchos patógenos incrementan su severidad.
de materia orgánica se suprimen significativamente, y Los posibles aumentos en infestaciones debidas a pla-
dado que la cobertura del suelo disminuye, la vulnerabi- gas y enfermedades pueden llevar al mayor uso de pes-
lidad a la erosión por viento incrementa especialmente ticidas químicos para controlarlos, situación que puede
si los vientos se intensifican. En algunas áreas, se espera incrementar costos de producción y también problemas
un incremento en la precipitación convectiva (causada ambientales asociados al uso de agroquímicos tóxicos.
por gradientes más fuertes de temperatura y presión y Por supuesto ésta no será la estrategia seguida por los
más humedad atmosférica) lo cual puede causar ero- pequeños agricultores quienes utilizan los policultivos,
sión severa del suelo, en especial en laderas. agroforestería u otras formas de sistemas diversificados
Las condiciones que son generalmente más favora- para prevenir las infestaciones de insectos ya sea por-
bles para la proliferación de los insectos plagas se dan que una cosecha puede ser plantada como hospedero
en climas más calientes. Estaciones de crecimiento más diverso, protegiendo otros cultivos más susceptibles o
largas pueden permitir a varias especies de insectos pla- económicamente más valiosos o porque los cultivos que
gas completar un mayor número de ciclos reproductivos crecen simultáneamente promueven la abundancia de
durante primavera, verano, y otoño. Temperaturas más predadores y parásitos que regulan en forma biológica
calientes en invierno también pueden permitir a las lar- las densidades de plagas (Altieri y Nicholls 1999).
vas sobrevivir en áreas donde ahora están limitadas por
el frío, causando así una mayor infestación durante la si- Estrategias de adaptación utilizadas por pequeños
guiente estación de cosecha. La mayoría de los estudios agricultores para aumentar la resiliencia de sus sis-
han concluido que los insectos plagas serán generalmen- temas a la variabilidad climática
te más abundantes a medida que la temperatura aumen-
ta, con un número de procesos correlacionados, incluyen- Resolver el problema de rendimientos variables es cru-
do las posibilidades de extensión y cambios fenológicos, cial para la supervivencia de los agricultores que viven en
ambientes marginales donde las condiciones agro-climá- tan la diversidad intraespecífica mediante la siembra al
ticas son un desafío. El manejo del riesgo es una preocupa- mismo tiempo y en el mismo campo, de diversas varie-
ción importante de las familias rurales en tales ambientes dades del mismo cultivo. En un examen mundial de la
y el único mecanismo seguro disponible para estos agri- diversidad varietal de los cultivos en fincas que involu-
cultores se deriva del uso de autogestión inventiva, cono- craban 27 cultivos, Jarvis et al. (2007) encontraron que
cimiento experimental, y uso de recursos locales disponibles. aun se mantiene en finca una gran diversidad genética
En muchas áreas del mundo los campesinos han de- de cultivos en la forma de variedades tradicionales-crio-
sarrollado a menudo sistemas agrícolas adaptados a las llas, especialmente de cultivos alimenticios importantes.
condiciones locales permitiendo a los agricultores ge- En la mayoría de los casos, los agricultores mantienen la
nerar la producción continua necesaria para subsistir, a diversidad como seguro para enfrentar el cambio am-
pesar de dotaciones marginales de tierra, variabilidad biental o futuras necesidades sociales y económicas.
climática y el bajo uso de insumos externos (Wilken Muchos investigadores han concluido que la riqueza
1987, Denevan 1995). Parte de este desempeño está re- de variedades incrementa la productividad y reduce
lacionado con los altos niveles de agrobiodiversidad ex- variabilidad de la producción, pero como DiFalco et al.
hibidos por los agroecosistemas tradicionales, los cuales (2007) encontraron en su estudio de la diversidad gené-
influencian positivamente la función del agroecosiste- tica del trigo en las montañas de Etiopía, la riqueza debe
ma (Vandermeer 2002). La diversificación es por lo tanto alcanzar cierto umbral, pues al parecer la reducción de
una estrategia importante para el manejo del riesgo de variabilidad en producción ocurre solamente con altos
la producción en sistemas agrícolas pequeños. niveles de diversidad genética. Estos investigadores
En agroecosistemas tradicionales el predominio de también encontraron que el efecto de la diversidad en
sistemas complejos y diversificados es de gran impor- la variación de producción varió con la degradación del
tancia para la estabilidad de los campesinos, permi- suelo. El incremento en la degradación del suelo tiende
tiendo que los cultivos alcancen niveles aceptables de a anular los efectos de la diversidad sobre la reducción
productividad aun en condiciones de stress ambiental. en los riesgos de producción.
En general, los agroecosistemas tradicionales son me- El tipo de diversidad que prevalece en diferentes
nos vulnerables a la pérdida catastrófica porque en áreas depende de condiciones climáticas y socioeconó-
ellos crece una variedad amplia de cultivos y variedades micas y de la respuesta de los agricultores a estos fac-
en varios arreglos espaciales y temporales, exhibiendo tores. Por ejemplo, en las áreas secas del oeste de Asia y
compensación en caso de pérdida. África del norte, la cebada es el único cultivo factible, es-
pecialmente las variedades sembradas por siglos y que
1) Sistemas de cultivos múltiples o policultivos son genéticamente heterogéneas. En ambientes simila-
Los policultivos exhiben una mayor estabilidad y me- res con precipitación escasa en India, variedades local-
nos declinaciones de la productividad durante una se- mente adaptadas del guandul (Cajanus cajan) combi-
quía que en el caso de monocultivos. Natarajan y Willey nan de manera única los perfiles nutricionales óptimos,
(1986) examinaron el efecto de la sequía en produccio- alta tolerancia a stress ambiental, alta productividad de
nes con policultivos mediante tratamientos del stress biomasa, nutrientes y aporte de humedad al suelo. Estas
hídrico con cultivos intercalados de sorgo (Sorghum bi- variedades que muestran alta variabilidad genética tie-
color), maní (Arachis spp.) y mijo (Panicum spp.). Todos nen un enorme potencial de siembra sin aprovechar en
los policultivos mostraron sobreproducción constante muchos ambientes marginales de África y otras partes
en cinco niveles de disponibilidad de humedad, en un amenazadas por el cambio climático. Generalmente en
rango desde 297 a 584 milímetros de agua aplicados en áreas con poca humedad, los agricultores prefieren cul-
la época de siembra. tivos tolerantes a la sequía (como Cajanus, papa dulce,
Sorprendentemente, la tasa de sobreproducción se yuca, mijo, y sorgo), y las técnicas de manejo enfatizan la
vio actualmente incrementada con stress hídrico, tal cobertura del suelo (mulching) para reducir la evapora-
que las diferencias relativas en productividad entre los ción y pérdida de humedad del suelo.
monocultivos y policultivos se acentuaron más a medi- Hay variedades que tienen rasgos morfológicos y
da que el stress incrementaba. Los policultivos exhibie- fisiológicos específicos que las hacen resistentes a los
ron una mayor estabilidad y menos declinaciones de la ambientes secos. Entre las variables medidas que de-
productividad durante la sequía. Estos tipos de estudios mostraron condicionar una tendencia general de mayor
ecológicos sugieren que comunidades más diversas de resistencia a la sequía en variedades de sorgo, solamen-
plantas son más resistentes al disturbio y más resilientes te el ajuste osmótico bajo stress estuvo correlacionado
a las perturbaciones ambientales (Vandermeer 1981). con la precipitación media en cada raza de origen, indi-
cando un mayor ajuste osmótico en variedades criollas
2) Uso de la diversidad genética local de regiones más secas. Aquellas variedades con una ma-
Además de adoptar una estrategia de diversidad inte- yor capacidad para el ajuste osmótico fueron caracteri-
respecífica, muchos agricultores pobres también explo- zadas por ser plantas más pequeñas con altas tasas de
12 Agroecología 3
transpiración y bajas tasas de senescencia en hojas bajo táceas maduran en los campos plantados desde Agosto
stress. En el caso de variedades de mijo, la adaptación hasta Octubre, practicando así sistemas de doble cultivo
comúnmente observada del mijo a los ambientes secos del maíz y de malezas que permite obtener dos cose-
se atribuyó más a la tolerancia a la sequía y/o al calor. chas. Los “quelites” también sirven como el único sumi-
La existencia de la diversidad genética tiene espe- nistro de alimento alternativo cuando las cosechas son
cial significado para el mantenimiento e impulso de la destruidas por el granizo o la sequía (Bye 1981).
productividad de sistemas de fincas pequeñas, ya que
la diversidad también proporciona seguridad a los agri- 4) Sistemas de Agroforestería y mulching
cultores contra enfermedades, especialmente patóge- Muchos agricultores siembran sus cultivos en arre-
nos que pueden ser incrementados por el cambio cli- glos agroforestales utilizando la cobertura de los árbo-
mático. A través de la mezcla de variedades de cultivos les para proteger los cultivos contra fluctuaciones extre-
los agricultores pueden retrasar el inicio de enfermeda- mas en microclima y humedad del suelo. Los agriculto-
des reduciendo la dispersión de esporas, y modificando res ejercen influencia sobre el microclima conservando
condiciones ambientales que son menos favorables a la y plantando árboles, los cuales reducen la temperatura,
dispersión de ciertos patógenos. Este aspecto fue bien velocidad del viento, evaporación, y exposición directa
demostrado por investigadores que trabajaban con a la luz del sol e interceptan granizo y lluvia. Lin (2007)
agricultores en diez municipios en Yumman, China, cu- encontró que en agroecosistemas de café en Chiapas,
briendo un área de 5350 hectáreas. La idea era alentar México, la temperatura, humedad y las fluctuaciones de
a los agricultores a cambiar de monocultivos de arroz la radiación solar incrementaron significativamente a
a mezclas de variedades de arroz local con híbridos. La medida que el sombrío decrecía, así ella concluyó que
diversidad genética aumentada redujo la incidencia de la sombra estuvo relacionada directamente con la miti-
la enfermedad principal al 94% e incrementó la produc- gación de la variabilidad en microclima y humedad del
ción total en un 89%. Antes de dos años de usar las mez- suelo para el cultivo del café. Lejos del ambiente húme-
clas se concluyó que los fungicidas no se requerían mas do y caliente de las zonas bajas tropicales y en ambien-
(Zhu et al. 2000, Wolfe 2000). tes más secos tales como Brasil nororiental, cultivos de
palma babassu (Orbignya phalerata) en áreas de pasto-
3)Promoción y colecta de plantas silvestres reo proporciona sombra para el ganado, mientras que
En muchos países en desarrollo, el sector campesino en lugares de orientación agrícola, sirve como sombra
todavía obtiene una porción significativa de su subsis- para arroz, maíz, yuca e incluso bananos y plátanos, me-
tencia a través de las plantas silvestres alrededor de los jorando el microclima y reduciendo pérdida de agua del
cultivos (Altieri et al. 1987). En muchas sociedades afri- suelo. En algunos sistemas, los agricultores plantan cas-
canas agropastoriles, la colección de hojas comestibles, hew para proporcionar abrigo a otros cultivos produc-
bayas, raíces, tubérculos, frutas, etc. en los matorrales tivos tales como sorgo, cacahuetes y ajonjolí (Johnson
alrededor de las aldeas proporciona una estrategia im- y Nair 1985). Claramente, la presencia de árboles en di-
portante de diversificación del alimento básico. Duran- seños de agroforestería constituye una estrategia clave
te sequías u otras épocas de stress ambiental muchas para la mitigación de la variabilidad del microclima en
plantas silvestres son recolectadas y consumidas, y los sistemas de agricultura minifundistas.
estudios en el noreste de Tanzania sobre el uso de “mi- Muchos agricultores pequeños aplican mulch sobre
chicha” (vegetales silvestres frondosos verdes) demues- el suelo, siembran plantas de cobertura o paja para re-
tran que estas plantas proporcionan cantidades signi- ducir niveles de radiación y calor en superficies recién
ficativas de caroteno, calcio, hierro y proteína a la dieta sembradas, para inhibir pérdidas de humedad, y para
campesina (Fleuret 1979). La adopción también es prac- absorber la energía cinética de la lluvia y del granizo
ticada en México por los indios Puerpecha que utilizan que cae. Cuando se espera helada nocturna, algunos
más de 224 especies de plantas vasculares nativas y cul- agricultores queman paja u otros materiales de dese-
tivadas para propósitos dietéticos, medicinales, domés- cho para generar calor y producir humo, el cual atrapa la
ticos, y combustible. De manera similar en el Huasteca radiación. Los camellones elevados que se encuentran
mexicana, los indígenas usan cerca de 125 especies de a menudo en sistemas tradicionales sirven para contro-
plantas y en Uxpanapa los agricultores locales utilizan lar la temperatura del suelo y reducir la inundación me-
cerca de 445 especies de plantas y animales silvestres, jorando el drenaje (Wilken 1987, Stigter 1984).
de los cuales 229 son para alimento (Toledo et al. 1985).
En muchas regiones, los agricultores dejan voluntaria- 5) Manejo e incremento de la materia orgánica
mente algunas especies de malezas en los campos re- del suelo
lajando así su control. Los indígenas Tarahumara en la Los suelos absorben 75% del carbono terrestre y tie-
Sierra mexicana dependen para alimentarse de las plán- nen un mayor potencial para secuestrar carbono que
tulas de malezas (quelites) desde Abril hasta Julio, un los arboles. Pero en adición al secuestro de carbono, y
período crítico antes del maíz, habas, chiles y cucurbi- de afectar las propiedades físicas, químicas y biológicas
de los suelos, la materia orgánica incrementa notoria- sustento, y calidad de vida para millones de personas.
mente la capacidad de absorción de humedad de los Estos sistemas exhiben elementos importantes de sos-
suelos vía varios mecanismos: tenibilidad, a saber: se adaptan bien a su ambiente par-
ticular, hacen uso de recursos locales, son de pequeña
a. Los residuos orgánicos que cubren el suelo pro- escala y descentralizados, tienden a conservar los recur-
tegen al suelo del impacto de las gotas de lluvia sos naturales básicos y muestran resiliencia al cambio
evitando el agrietamiento, incrementando la infil- ambiental.
tración del agua de lluvias y reduciendo la esco- Estos sistemas incluyen una herencia neolítica de
rrentía. El aumento del contenido de materia or- importancia considerable, aunque la agricultura mo-
gánica contribuye indirectamente a la porosidad derna amenaza constantemente la sostenibilidad de
del suelo al condicionar una mayor actividad de la esta herencia. Debido a su significado, y a la cantidad
fauna edáfica. Una mayor infiltración combinada de conocimiento y experiencia acumulados en el ma-
con un alto contenido de materia orgánica incre- nejo y uso de los recursos que los GIAHS representan, es
menta la capacidad de almacenamiento de agua imprescindible que sean considerados como recurso de
en el suelo. importancia global y por lo que deben ser protegidos y
b. La adición de material orgánica también incre- ser preservados, permitiendo eso si su evolución diná-
menta la cantidad de micro y macro-poros ya sea mica. Tal recurso ecológico y cultural es de valor funda-
“pegando” partículas del suelo formando agre- mental para el futuro de la humanidad, especialmente
gados o creando condiciones favorables para or- porque muchos de ellos representan sistemas que se
ganismos edáficos como lombrices de tierra que han adaptado al cambio climático y ambiental a través
modifican positivamente la estructura del suelo. de los siglos.
La materia orgánica puede almacenar agua hasta
20 veces su peso (Wilken 1985, Denevan 1995). Algunos ejemplos y características de sistemas agrí-
colas tradicionales adaptados a condiciones de cam-
A través del mundo los pequeños agricultores usan bio ambientales a través de los siglos
practicas como la rotación de cultivos, abonos verdes,
cultivos de cobertura, aplicación de compost etc. que Agricultura de camellones
incrementan la producción de biomasa contribuyendo 1. Chinampas de México
a un aumento de materia orgánica en el suelo. Todas las La agricultura en camellones es un sistema de pro-
practicas de manejo de suelos que conllevan al mante- ducción de alimento antiguo usado extensivamente
nimiento y/o aumento los niveles de materia orgánica por los Aztecas en el valle de México pero también en-
son esenciales para una producción sostenida de culti- contrado en China, Tailandia, y otras áreas para explotar
vos en zonas frecuentemente afectadas por sequia. áreas permanentemente inundadas o pantanos que
bordean lagos. Llamadas chinampas en la región Azte-
Sistemas agrícolas heredados de importancia glo- ca, consisten en “islas” o plataformas elevadas (desde 2,5
bal: Una herencia neolítica a 10 metros de ancho y hasta 100 metros de largo) que
fueron construidas con fango raspado de los pantanos
A mediados del siglo XXI y a pesar de la expansión de circundantes o lagos bajos. Los Aztecas construyeron
la agricultura moderna, millones de hectáreas todavía sus plataformas a una altura de 0,5 a 0,7 metros sobre
persisten bajo manejo agrícola tradicional. Estos micro- el nivel del agua y reforzaron los lados con los postes
cosmos de agricultura antigua son el vivo ejemplo de la entretejidos con ramas y árboles plantados a lo largo de
estrategia agrícola indígena exitosa e incluyen un tribu- los bordes (Armillas 1971).
to a la “creatividad” de agricultores tradicionales e indí- El suelo de las plataformas se enriquece constante-
genas. Muchos de estos sistemas agrícolas se documen- mente con la materia orgánica producida por plantas
tan y algunos de ellos se seleccionan como punto focal acuáticas abundantes, así como con sedimentos y depó-
en la iniciativa para la conservación dinámica de la FAO: sitos de materia del fondo de los reservorios. Una fuen-
“Sistemas Agrícolas Heredados de Importancia Global” te importante de materia orgánica hoy es el jacinto de
(GIAHS). La iniciativa ofrece modelos promisorios de agua (Eichornia crassipes), capaz de producir hasta 900
sostenibilidad promoviendo biodiversidad agrícola a la kilogramos por hectárea de materia seca diariamente.
vez que sostiene producciones a lo largo de todo el año Complementado con cantidades relativamente peque-
sin mayor dependencia de agroquímicos (Altieri 1999). ñas de abono animal, los chinampas son en esencia au-
GIAHS no solo constituyen lugares de belleza estética tosuficientes. Los animales, tales como cerdos, pollos, y
excepcional, que mantienen biodiversidad agrícola glo- patos, se mantienen en corrales pequeños y se alimentan
bal, y que representan ecosistemas resistentes y una de los excedentes o residuos producidos por los cultivos
herencia cultural valiosa, sino que también prestan una de las chinampas. Su abono se incorpora nuevamente en
serie de servicios, incluyendo seguridad alimentaria y las plataformas (Gliessman et al. 1981). En los chinampas,
14 Agroecología 3
los agricultores privilegian la producción de cultivos ali- La combinación de camas elevadas y canales ha de-
menticios básicos así como también la producción de mostrado tener efectos importantes en la regulación de
vegetales. Esto incluye el policultivo tradicional de maíz/ la temperatura, prolongando la estación de crecimien-
haba/calabaza, yuca/maíz/haba/pimientos/amaranto, los to y llevando a una productividad más alta en el Waru-
árboles frutales asociados con varios cultivos de cobertu- Warus comparado con suelos normales químicamente
ra, arbustos, o vides. Los agricultores también estimulan fertilizados de la pampa. En el distrito de Huatta, campos
el crecimiento de peces en los cursos del agua. elevados reconstruidos produjeron cosechas impresio-
Los altos niveles de productividad que caracterizan nantes, exhibiendo una producción sostenida de papa
las chinampas son el resultado de varios factores. Prime- de 8-14 toneladas/ha/año, contrastando favorablemen-
ro, la cosecha es casi continua, en general se producen te con las producciones medias de papa de la puna de
3 a 4 cosechas cada año. Uno de los mecanismos princi- 1-4 toneladas/ha/año. En Camjata los campos de papa
pales por los cuales esta intensidad se mantiene son los alcanzaron 13 toneladas/ha/año en Waru-Warus. Se es-
semilleros, en los cuales germinan plantas jóvenes antes tima que la construcción inicial, reconstruyendo cada 10
de que se cosechen los cultivos más viejos. En segundo años, mas el manejo anual de siembra, desyerbe, cose-
lugar, el chinampero mantiene un alto nivel de fertilidad cha y mantenimiento de los campos elevados requiere
del suelo a pesar de la cosecha continua de cultivos, al 270 personas-día/ha/año.
proveer a las chinampas con altas cantidades de fertili-
zantes orgánicos. Los lagos en sí mismos sirven como 3. Agricultura de montaña en los Andes
un reservorio gigantes para captura de nutrientes. Las El impacto del ambiente complejo en la economía
plantas acuáticas funcionan como concentradores de Andina ha dado lugar a arreglos verticales de estable-
nutrientes, absorbiendo nutrientes que se encuentran cimientos humanos y sistemas agrícolas. El patrón de
en baja concentración en el agua y que almacenan en verticalidad deriva de diferencias climáticas y bióticas
sus tejidos. El uso de estas plantas junto con los cana- relacionadas con la localización geográfica y altitudinal.
les de fango y agua fangosa (para el riego) asegura una La adaptación cultural más importante a estos contras-
fuente adecuada de nutrientes siempre disponible para tes ambientales ha sido el sistema de subsistencia: cul-
los cultivos en crecimiento. Tercero, el agua abunda para tivos, animales, y tecnologías agropastoriles diseñadas
el crecimiento de los cultivos. La estrechez de las chi- para proveer una dieta adecuada con recursos locales
nampas es una característica del diseño que asegura de mientras que evitaban la erosión del suelo (Gade 1999).
que el agua de los canales infiltra la chinampa, dando La evolución de la tecnología agraria en los Andes
lugar a una zona de humedad al alcance de las raíces centrales ha producido un conocimiento muy sofistica-
de los cultivos. Aunque durante la estación seca los ni- do sobre el uso del ambiente andino. La aplicación de
veles del lago caen por debajo de la zona de las raíces, este conocimiento resulto en la división del ambiente
la estrechez de la chinampa permite que el chinampero andino en franjas agroclimáticas dispuestos de acuerdo
irrigue desde una canoa. Cuarto, hay especial cuidado a la altitud, cada una caracterizada por prácticas especí-
a cada planta en la chinampa. Tal agricultura cuidadosa ficas de rotación del campo y cultivos, terrazas y siste-
facilita altos rendimientos (Gliessman et al. 1981). mas de irrigación, y la selección de animales, cultivos, y
variedades (Brush et al. 1981). Cerca de 34 cultivos dife-
2. Waru-Warus de Titicaca rentes (maíz, quinoa, Amaranthus caudatus, legumbres,
Los investigadores han descubierto remanentes de habas, lupino, habas, lima), tubérculos (especies de papa,
más de 170.000 has de “campos surcados” en Surinam, yuca, arracacha, etc.), frutas, condimentos, y vegetales
Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, y Bolivia (Denevan son cultivados. Los cultivos principales son chenopo-
1995). Muchos de estos sistemas al parecer consistían dios (Chenopodium quinoa y C. pallidicaule), maíz y pa-
en campos elevados construidos sobre tierras de inun- pas. Los agricultores individuales pueden cultivar tanto
dación estacional en sabanas y laderas de montaña. como 50 variedades de papas en sus campos, y hasta
En Perú, muchos investigadores han estudiado tales 100 variedades locales se pueden encontrar en una sola
tecnologías pre-colombinas en busca de soluciones a aldea. El mantenimiento de esta amplia base genética es
los problemas contemporáneos, tal como las heladas adaptativa puesto que reduce la amenaza de la pérdida
tan frecuentes en agricultura de altitudes elevadas. Un de cultivos debido a plagas y patógenos específicos a
ejemplo fascinante es el renacimiento de un sistema in- variedades particulares de los cultivos (Brush 1982). Los
genioso de campos elevados que evolucionaron en alti- agricultores también manejan una serie de parcelas si-
planicies de los Andes peruanos hace aproximadamen- tuadas en diferentes franjas altitudinales para reducir la
te 3.000 años. Según evidencia arqueológica aquellas frecuencia de pérdida, porque si la helada o la sequía
plataformas o Waru-Warus, rodeadas de zanjas llenas de golpea una franja, los agricultores siempre pueden co-
agua, podían producir cosechas abundantes, a pesar de sechar los cultivos en franjas altitudinales no afectadas.
inundaciones, sequías, y heladas comunes en altitudes Los cultivos también se ubican en la montaña de-
de casi 4000 m (Erickson y Chandler 1989). pendiendo de su adaptación a la altitud, humedad, tem-
peratura, vegetación, tenencia de la tierra, arreglos de 1. Sistemas de cosecha de Agua de lluvia Túnez meri-
cultivo, y tecnología agrícola. Hay una variación regional dional
considerable en los patrones de cultivo de cada franja. En Túnez meridional como en la mayoría de los eco-
Por ejemplo, en las comunidades de Amaru y de Paru- sistemas semiáridos, los cultivos han estado histórica-
Paru en Cuzco, Perú, pueden distinguirse tres franjas mente en riesgo de sequía fisiológica, así que el agua
principales (Gade 1975). Los sitios en la franja de maíz de lluvia se debe recoger, concentrar y transferir rápi-
tienen pendientes suaves, situadas entre 3.400 y 3.600 damente a las áreas cultivadas, reduciendo al mínimo
metros, y los agricultores practican tres rotaciones al- pérdidas por evaporación y percolación. Tal sistema de
ternadas cada cuatro años. Las franjas de papa/haba/ cosecha de agua lluvia tiene una historia larga en la
cereales se encuentran en sitios con cuestas escarpadas, meseta de Matmata (Hill y Woodland 2003). La mayoría
localizados entre los 3.600 a 3.800 metros. Las papas de las lluvias son de alta intensidad, por lo que un flujo
son intercaladas con cebada, trigo, habas y guisantes. por escorrentía se genera rápidamente y escurre sobre
En áreas que dependen de las precipitaciones, las habas cuestas escarpadas, arrastrando agua y suelo hacia el
y Lupinus mutabilis son los componentes claves de ro- fondo del valle. Las represas (tabias- consolidadas por
tación. La franja papa amarga-pastura es una franja fría muros de contención de piedra seca) están localizadas
situada sobre los 3.800 metros. Las rotaciones de culti- progresivamente en la ladera para detener el material
vos que dependen de la precipitación en esta franja ge- erodado de los lados del valle y este sedimento se nivela
neralmente incluyen la papa/ Oyxalis tuberosa/Ullucus para formar unos campos agrícolas llamados “jessour”. El
tuberosus y Trapaeolum tuberosum/cebada. agua atrapada detrás de estas represas después de la
infiltración de lluvia en el suelo abastece el nivel freático
Cosecha de agua en ambientes secos local, aunque temporalmente. El efecto multiplicador de
Las regiones semiáridas son caracterizadas por pre- la cosecha de agua lluvia depende principalmente de la
cipitación errática y baja, suelos pobres en nutrientes y relación entre área de captación y área cultivada. Esta
altas temperaturas, planteando limitaciones serias a la proporción está típicamente entre 2:1 y 10:1 en el sures-
productividad de los cultivos especialmente cuando el te Tunisiano. Al oeste de Matmata, una relación de 6:1
abastecimiento de agua es inadecuado. Las áreas se- se traduce en tamaños de terreno de aproximadamente
miáridas tienen por lo menos un mes completamente 0,6 hectáreas y tamaños de captación de alrededor 4
seco al año y la cantidad de precipitación se encuentra has, variando levemente de acuerdo al sitio, la topogra-
entre 500-1000mm/anual en la mayoría de áreas. Esto fía y la capacidad de los constructores. Si se previenen
significa que las condiciones de déficit de agua, stress las pérdidas de infiltración y evaporación, 10 milímetros
por agua o sequía son comunes en estas áreas y en mu- de lluvia en un área de captación de 1 ha puede rendir
chas regiones la situación es más dramática debido al alrededor 100.000 litros de agua.
cambio climático. El stress por sequía extrema conduce Usando estos métodos, la mayoría de los agricultores
a cosechas pobres y también contribuye a la degrada- en Matmata practican hoy agroforestería en el jessour.
ción y desertificación en suelos secos (Barrow 1999). En campos de 3 has pueden crecer árboles relativamen-
Este proceso ha llegado a ser evidente en la región de te exigentes tales como aceitunas, higos, almendras,
Sahel (África del oeste) donde los niveles de precipita- granadas y palmas datileras. Los cultivos anuales inclu-
ción han disminuido en 20-40% en décadas recientes yen cebada, guisantes, lentejas, habas, y forrajes verdes
acompañadas por degradación severa del suelo. tales como alfalfa. Estas parcelas se dispersan a menudo
En África Sub-Sahariana, el 40% de la tierra agrícola después de la ocurrencia natural del agua en el paisaje,
está ubicada en sabanas semiáridas, secas y sub-húme- así que la fragmentación de tierras es un rasgo común.
das. A pesar de la frecuente ocurrencia de escasez de La captación de agua lluvia en la región permanece
agua, en la mayoría de los años hay agua más que su- ampliamente descentralizada por naturaleza. Los sitios
ficiente para la producción potencial de los cultivos. El se manejan sobre una base colectiva y comunitaria de
problema es que grandes volúmenes de agua se están acuerdo a las costumbres locales y respaldadas por la
perdiendo por escorrentía del agua superficial, evapo- ley islámica. Bajo tales sistemas, el agua se considera
ración y percolación profunda. El desafío es cómo cap- como propiedad común, suficiente para ser consumi-
turar esa agua y ponerla a disposición de los cultivos en da y compartida por la comunidad sin despilfarro. La
épocas de escasez (Reij et al. 1996). Aunque la cantidad experiencia local se arraiga en un conocimiento de la
de precipitación que puede utilizase efectivamente relación recíproca entre agua superficial y subterránea.
para el crecimiento de los cultivos en estas tierras es Casi todos los agricultores están enterados de la nece-
baja, muchos agricultores han creado innovadores sis- sidad de llenar lo que llamaron libremente como los
temas de cosecha de agua que capturan y aprovechan abastecimientos de agua subterráneos para asegurar
la precipitación limitada. Algunos ejemplos de sistemas agua para uso de la comunidad en estaciones futuras.
tradicionales de cosecha de agua se describen a conti- La captación de agua lluvia en laderas ayuda a aumen-
nuación. tar la infiltración y a recargar el agua subterránea, la cual
16 Agroecología 3
se utiliza localmente o en siembras más abajo. Las uni-

dades de tierra se integran efectivamente con respecto 2. Los Papago y otros indígenas de Norteamérica se-
a la hidrología, permitiendo el uso equitativo del agua y, miárida
sobretodo, rellenando depósitos para el largo plazo (Hill En las zonas semiáridas de Norteamérica, en las cua-
y Woodland 2003). les el agua es el principal factor limitante, las experien-
Se ha utilizado el conocimiento vernáculo y la arte- cias de los indígenas Seri, Pima, Papago y otros grupos
sanía, derivados a partir de siglos de interacción con el ofrecen opciones locales para agricultura que solo
ambiente local, para equipar tabias con diversos tipos depende de las lluvias. Estas culturas han usado como
de diseños de drenaje y/o desagüe, los cuales promue- recurso múltiples especies vegetales del desierto con
ven la distribución eficaz del agua y permiten cierta alto contenido nutritivo que puede ser la base para una
flexibilidad ante cambios climáticos extremos. Estos agricultura apropiada en estas zonas. Algunas de ellas
desagües laterales se utilizan en el 60% de tabias en las han desarrollado técnicas agrícolas que utilizan canales
colinas de Matmata. Éstas son aberturas hechas a pro- hechos a mano, terrazas, bermas y otros tipos de diver-
pósito en los camellones de tierra en los lados del valle. sion de escorrentía para retención y utilización de aguas
Los desbordamientos laterales simples se escavan del lluvia (Nabhan 1979).
suelo, y sus pisos de tierra se inclinan a la misma altura La práctica agrícola más usual es el manejo de lluvias
que la terraza cuesta arriba. Esto permite que el exceso torrenciales esporádicas para la producción de cultivos.
de agua fluya por gravedad desde la terraza de arriba, Es una técnica antigua en las regiones al sudoeste de
asegurando que el agua de riego fluya a la próxima te- Norteamérica que está siendo reevaluada actualmente.
rraza con capacidad erosiva mínima. La erosión en estos Condiciones agronómicamente productivas han sido
diseños es reducida reforzando pisos y costados con desarrolladas por alteraciones geomorfológicas del
piedras. Estos sistemas se han observado en 38% de las suelo inundado, incluyendo canales, terrazas, rejillas,
tabias existentes en las colinas de (Reij et al. 1996). aspersores, y vertederos. Estas modificaciones ambien-
La altura de los desbordamientos del tabia aseguran tales sirven para concentrar la escorrentía del agua de
que el cultivo cosechado pendiente abajo no sea pri- una cuenca en un campo localizado estratégicamente,
vado del agua por campos más arriba. Igualmente, la rompiendo la fuerza erosiva del agua entrante. Además,
altura del desbordamiento previene la acumulación de los estos agricultores nativos manipulan la flora silvestre
demasiada agua después de tormentas, de tal manera de los campos inundados eliminando o protegiendo y
que la zona de las raíces no permanezca inundada por cosechando especies seleccionadas (Nabhan 1979).
períodos largos. Esto realza el potencial agrícola aumen- En el Arizona, los Papago y otras culturas nativas del
tando la aireación de las raíces, y reduciendo la saliniza- desierto de Sonora históricamente escogieron los valles
ción del suelo pues el agua se infiltra eficientemente y aluviales (valles bajos donde se concentra el agua y la
es utilizada rápidamente por los cultivos. La capa freáti- materia orgánica se concentran) para establecer cam-
ca reside en profundidad, asegurando que las sales no pos productivos los cultivos adaptados a las condicio-
son traídas a la superficie por incrementos en el nivel nes semiáridas tales como calabaza del coyote, amaran-
de agua. La construcción apropiada del tabia reduce la thus del desierto, habas frijoles tepary, garra del diablo
posibilidad de que el suelo sea lavado pendiente arriba y una variedad de suculentas, cactus y de herbáceas
por procesos de erosión (Figura 1). perennes.
Figura 1. Sistema tradicional de cosecha de agua en agroecosistemas de Tunisia (Hill & Woodland, 2003)
Viviendo en un área del desierto de Sonora que reci- durante el cual se establecieron asentamientos per-
be solo 150-350 milímetros de precipitación anual, los manentes basados en agricultura dependiente de las
Papago regaron tradicionalmente sus campos valles lluvias e incluso a veces construyeron estructuras para
con el agua de arroyos intermitentes creados por tor- captura de agua (Toledo et al. 1985).
mentas, (Nabhan 1982). En el desierto, generalmente El área, que es una de las regiones más pobres y mar-
no hay más de 3-15 eventos importantes de tormenta ginadas de México, muestra cómo la gente puede sobre-
durante el año; de éstos, típicamente no más de 5-6 son vivir con fuentes inusuales de alimento. El valle de Mez-
suficientemente grandes para estimular la germinación quital presenta varias condiciones ecológicas limitantes,
o crecimiento de plantas. especialmente sus suelos calcáreos estériles y escasez
En una comunidad de Papago, 100 familias mantu- de agua. Este ambiente condicionó las relaciones entre
vieron 355 hectáreas de cultivos en fincas que recibían los Otomí y sus paisajes circundantes, especialmente en
precipitación de tormentas, materia orgánica y nu- la percepción y uso de hábitats, y el manejo de recursos
trientes de una cuenca de 240 kilómetros. Con una sola de agua, suelos y especies de plantas.
tormenta intensa, suficiente hojarasca de leguminosas Según los estudios de Johnson (1977), el manejo de
ricas en nitrógeno, heces de roedores y otros detritus recursos naturales que practicaron los Otomí reflejan un
descompuestos de las tierras altas, son vertidos sobre nivel de producción diversificada adaptada a los diver-
los valles aluviales para agregar aproximadamente 30 sos paisajes del valle de Mezquital así como un énfasis
metros cúbicos de material orgánico por hectárea (Na- en agricultura de secano y uso intensivo del maguey
bhan 1984). En adición al maíz de 50 días, los frijoles te- (Agave spp). Las especies de Maguey se utilizan para
pary (Phaseolus acutifolius var. latifolius) son los cultivos producir la fibra para hacer cuerdas y ropa, y especial-
nutricionalmente más importante de los indios Papago. mente pulque, una bebida alcohólica suave resultado
Los frijoles tepary están adaptados al calor y sequía, e de la fermentación natural de la savia azucarada que es-
históricamente son la fuente más importante de proteí- tas plantas producen (Parsons y Parsons 1990). Además,
na y minerales de los Papago. El contenido proteíco y las especies del maguey también se utilizan como plan-
la producción de semillas por planta tienden a ser más tas clave en el manejo de suelos durante la construcción
altos en campos manejados por los Papago que en sus de terrazas para evitar la erosión.
contrapartes modernas irrigadas. Desafortunadamente, Los Otomí distinguen tres clases de unidades del pai-
este cultivo tradicional es un ecosistema agrícola ame- saje: el cerro, la tierra baja y la colina. El cerro, que es nor-
nazado. malmente una tierra comunal, se cubre con vegetación
El sistema agrícola tradicional de los Papago repre- arbustiva silvestre usada para alimentar animales, para
senta una estrategia de producción de alimentos distin- la caza y recolecta. También usan las porciones más ba-
ta a la mayoría de los sistemas introducidos en tierras jas del cerro para construir casas. La mayor parte de los
áridas. y que dependen de agua de riego. Respondiendo campos agrícolas están en las colinas y las tierras bajas.
a la escasa e irregular disponibilidad de agua en el de- Los agricultores Otomí reconocen tres tipos de colinas
sierto, los cultivos que producen los Papago (principal- para cultivar: cárcavas (barrancas), cuestas (laderas) y
mente frijoles tepary, maíz, calabazas y otros) crecen lo tierras planas (planos). Durante la estación húmeda, el
bastante rápido como para evitar la mortalidad debido agua lava el suelo desde las cuestas y cárcavas de las
a la sequía prolongada. Dada la distribución espacial colinas hasta las tierras bajas, de manera que las tierras
desigual de las tormentas, los Papago se concentran en bajas son las áreas que acumulan el agua y los sedimen-
campos pequeños; y utilizan varios de ellos, cada uno tos (Johnson 1982).
separado de los otros. Dentro de cada campo, existen Con un conocimiento detallado de suelos, relieve, ve-
mezclas de plantas con espacios amplios entre ellas, getación y los movimientos del agua, los Otomí constru-
como una táctica de reducción del riesgo. En general, yen bordos para atrapar el agua lluvia y concentrar los
las familias agricultoras Papago raramente “fuerzan” a sedimentos en el suelo. El mejor lugar para un bordo es
un campo a producir más intensificando la manipula- justo en la trayectoria del agua, o sea la misma cárcava.
ción o concentrando sus esfuerzos en un solo recurso Esta clase de bordo se llama atajadizo. Los agricultores
vegetal. La estrategia del Papago busca una producción también construyen bordos en la ladera. Toma seis o
de semilla más confiable en relación al agua disponible, siete tormentas de lluvia para conseguir una cosecha
pero no necesariamente por unidad de tierra. Ya que el de maíz y frijoles en bordos de ladera y atajadizos. Los
agua, no la tierra, es el factor limitante en los desiertos, bordos se colocan normalmente a lo largo de los con-
esta estrategia tiene valor adaptativo (Nabhan 1982). tornos para tomar la mejor ventaja de la corriente. La
colocación de piedras y de plantas del maguey son cru-
3. Los Otomí del valle de Mezquital, México ciales durante la construcción de bordos, y los campos
El valle de Mezquital forma parte de las montañas recurrentemente se fertilizan con estiércol para mejorar
mexicanas centrales, ha sido habitado por el grupo ét- el suelo. Los fertilizantes orgánicos consisten en mezclas
nico Otomí o Hñähñü desde el período pre-Colombino de estiércol de cabra, ovejas y vaca, residuos de las casas,
18 Agroecología 3
cenizas, plantas secas y suelos de otro terreno (Johnson mitas que cavan canales, y mejorando así la estructura
1977). del suelo de modo que más agua pueda infiltrarse y
mantenerse en el suelo. Digiriendo la materia orgánica,
Innovaciones de los agricultores para mejorar la las termitas ponen los nutrientes a disposición más fá-
adaptación de la producción en ambientes climáti- cilmente para las plantas. En la mayoría de los casos los
camente marginales agricultores producen el mijo o sorgo o ambas en el
zai. A tiempo ellos siembran árboles directamente jun-
Mucho del conocimiento tradicional sobre cosecha to con los cereales en el mismo zai. En la cosecha, los
del agua y para el manejo de sistemas agrícolas depen- agricultores cortan los tallos a una altura aproximada
dientes de las lluvias descritos arriba, ha demostrado de 50-75cm, los cuales protegen a los árboles jóvenes
ser invaluable para muchas organizaciones locales de- contra el pastoreo de animales. Los agricultores cavan
dicadas a asistir a agricultores pobres en varias regiones entre 9.000 a 18.000 hoyos por hectárea, con aplica-
en la restauración de la integridad ecológica de micro- ciones de compost que van desde 5,6 a 11 t/ha (Reij y
cuencas y de las capacidades productivas de predios Waters-Bayer 2001).
campesinos-indígenas. Muchas iniciativas lideradas por A través de los años, millares de agricultores en la
organizaciones de agricultores y ONGs que enfatizan la región de Yatenga de Burkina Faso han utilizado esta
reforestación, la conservación de suelos y sistemas efi- técnica localmente mejorada para reclamar centenares
cientes de cosecha de agua constituyen ejemplos exito- de hectáreas de tierras degradadas. Muchos agriculto-
sos de estrategias clave para mejorar el sustento rural en res han sido expuestos a las técnicas mejoradas del zai
ambientes marginales. Abajo se citan algunos ejemplos particularmente después del establecimiento de un zai
de innovación campesina, incluyendo ejemplos del tra- modelo en la escuela de Zai en la aldea de Somyanga.
bajo de ONGs dirigidos a mejorar la seguridad alimenta- Los agricultores cada vez se han interesado más en
ria local en ambientes climáticamente marginales. el zai en tanto que observan que los hoyos recogen y
concentran el agua eficientemente y funcionan con pe-
Agricultores en Zimbabwe queñas cantidades de compost y estiércol. El uso del zai
En Zimbabwe centenares de agricultores de tierras permite a que los agricultores amplíen su base de recur-
secas se han beneficiado de los sistemas de cosecha de sos y aumenten la seguridad alimentaria de sus hogares.
agua desarrollados por un agricultor, Sr. Phiri Maseko. Los rendimientos obtenidos en los campos manejados
La parcela de tres hectáreas de Phiri está situada en la con zai son consistentemente más altos (entre 870 a
cuesta de una colina, inmediatamente debajo de la cual 1.590 kg/ha) que aquellas obtenidas en campos sin zai
está la finca. Uno de los recursos más importantes es (promedio 500-800 kg/ha). Muchos agricultores en la
una roca grande de granito (o ruware), sobre la parcela. meseta de Dogon de Malí, una región con períodos ex-
En una situación incontrolada esta roca podría causar tremos de sequía con temperaturas arriba de los 40 °C y
erosión severa por la formación de una gran cantidad tasas de evaporación de 250 mm por mes, han reporta-
de canales de agua que desaguaran en la finca..Sin em- do ventajas similares desde la adopción del zai.
bargo, la roca proporciona la fuente principal de agua
para los árboles, cultivos y las casas. La roca tiene terra-
zas de piedra que atrapan y dirigen el flujo del agua de Iniciativas lideradas por ONGs
modo que pueda infiltrarse en el suelo y así llenar los
depósitos subterráneos. Las terrazas atrapan semillas Agricultores en México
crean refugios de vegetación que actúan como barreras En la región de Mixteca, un área montañosa de preci-
protectoras. La mayor parte del agua entonces se acana- pitación limitada y suelos muy erosionados, el Centro de
la en un depósito estacional sin sellar, para promover la Desarrollo Integral Campesino de la Mixteca (CEDICAM)
infiltración eficiente del agua en el suelo más bien que tiene desde 1989 un proyecto que ha motivado y capa-
almacenarla en la superficie. Cuando sea necesario agua citado a centenares de agricultores en 9 comunidades
se puede sacar con un sifón en un tanque de almacena- rurales para reforestar áreas grandes y construir zanjas
je hecho de ladrillos y yeso (Reij et al. 1996). de contorno en las laderas sobre los manantiales ame-
nazados y pozos para recargar los acuíferos que alimen-
Agricultores en Burkina Faso y Malí tan estas fuentes de agua potable.
En muchas partes de Burkina Faso y de Malí ha habi- Varios grupos organizados han construido kilómetros
do un renacimiento de los viejos sistemas de cosecha de zanjas para la conservación del suelo y han reforesta-
agua conocidos como “zai”. Los zai son hoyos que los do centenares de hectáreas con pinos (Pinus oaxacana)
agricultores cavan en tierra de roca dura estéril, en la y ciertas especies nativas. En EL Progreso, cerca de 80%
cual el agua no podría penetrar de otra manera. Los de la comunidad total participa y han restaurado 100
hoyos tienen cerca de 20-30 centímetros de profundi- hectáreas de tierra degradada. En Buenavista Tilanton-
dad y se llenan con materia orgánica. Esto atrae ter- go la comunidad reforestó 10 hectáreas. En El Carmen
los agricultores comenzaron reforestando hace 11 años sistemas el maíz rinde 3,5 t/ha, lo que representan hasta
plantando 40.000 árboles en 2003 y 70.000 en 2004. Se un 240 % incremento de rendimientos.
estima que un metro lineal de zanja, de 60cm x 60 cm, El efecto de la cosecha de agua de estas prácticas
puede capturar hasta 360 litros de agua en un evento son obvios al calcularse le producción por unidad de
de precipitación. Una zanja larga de 100 m puede cap- agua. En un sistema convencional se produce 2,6 kg de
turar potencialmente 36.000 litros, que idealmente se grano por mm de lluvia, comparado con 7,4 Kg, mm de
infiltrarían profundamente en el suelo y recargargando precipitación en el sistema de conservación (Mwalley y
así los acuíferos (Altieri et al. 2006). Rocktrom 2003).
Bajo el liderazgo de CEDICAM los agricultores locales han:
México : Programa Agua para siempre de la región
• Usado eficientemente el agua lluvia e incrementa- de la Mixteca.
do el abastecimiento de agua y flujos crecientes El Programa “Agua para Siempre” se creó en 1988 por
de manantiales con las nuevas zanjas del contorno la ONG y Procesos de Participación Social, A. C. para en-
que ahora recogen alrededor del 80% de la lluvia. frentar los problemas climáticos y de degradación de
En varias casas se han construido cisternas que suelos prevalentes en la zona norte de la Mixteca, en
atrapan la lluvia y cada una puede colectar hasta el borde de los estados de Puebla y Oaxaca incluyen-
15.000 litros de agua, proporcionando cada casa do una parte extensa del valle de Tehuacán, alcanzando
hasta seis veces el agua que generalmente consu- aproximadamente a 200.000 habitantes en unas 100 co-
men en los períodos secos. munidades rurales (Toledo y Solis 2001).
• Plantado cerca de un millón de árboles nativos en Este proyecto considera que la escasez del agua está
los últimos 5 años. influenciada por el incremento en la población, el uso
• Rescatado y mejorado variedades nativas de maíz y, inapropiado de los recursos natural y un acceso inequi-
aprendido a producir fertilizantes orgánicos (incluyen- tativo al agua, injustamente concentrada en las manos
do vermicompost) usando desechos y biomasa local. de unos pocos individuos pertenecientes a los grupos
• Diversificado los sistemas de producción de plan- poderosos. Es así, como el proyecto reconoce que la raíz
tas por re-adopción del policultivo tradicional del del problema no solo es obtener agua para satisfacer las
maíz, frijoles y calabaza. Los agricultores locales necesidades, sino también asegurar que la extracción
están produciendo más alimento por hectárea de agua no agotara completamente los suministros
en total que cuando mono-cultivaron maíz, con subterráneos y que el acceso a esta será justo para to-
consiguientes mejoras en la nutrición familiar, la dos los grupos de la sociedad.
fertilidad de suelo y la renta familiar que ya son Con este enfoque, el proyecto se ha desarrollado des-
notables en algunas comunidades. de 2001, con 508 trabajos hidráulicos en las comunida-
des de la región, beneficiando entre 77.000 y 134.000
África: Programa piloto de conservación de sue- habitantes. La cosecha de agua es utilizada a nivel fa-
los y agroforesteria miliar para uso doméstico, la subsistencia animal y agri-
En el Noroeste de Tanzania el Programa piloto de cultura de subsistencia principalmente, la cual produce
conservación de suelos y agroforesteria estableció un maíz, frijol y amaranto. La estrategia está dirigida a la
proyecto para desarrollar sistemas de labranza de con- restauración ecológica de cuencas con varias técnicas
servación para pequenos agricultores. En estos sistemas que cosechan el agua efectivamente y conservan los
los agricultores minimizan la disturbancia del suelo al suelos para una producción sostenible (Figura 2).
utilizar arados y subsoladores tirados por animales, Si el problema del agua en la Mixteca fuese exami-
abriendo pequeños canales de apertura en el suelo nado como un fenómeno aislado, el resultado final se
para la infiltración del agua, usando también azadones reduciría simplemente a construir unos pocos pozos o
para construir pequeñas depresiones tipo zai (Mwalley reservorios de agua, un asunto que solo concierne a los
yRocktrom 2003). geólogos e ingenieros. El enfoque de este proyecto, sin
En muchos casos los agricultores usan la legumino- embargo, considera el problema hídrico como parte de
sa Dolichos lablab como un cultivo de cobertura que en una biorregion (la cuenca) y tiene en cuenta la expe-
adición de fijar nitrógeno se puede vender en el mer- riencia hidrogeológica acumulada por siglos de las cul-
cado. Este sistema de labranza de conservación es el turas locales, así demanda la integración de diferentes
sistema preferido por los agricultores porque permite disciplinas y la creación de equipos multidisciplinarios
la preparación del suelo antes de las lluvias, una opor- de profesionales.
tunidad critica en las zonas semiáridas donde el 25 % La solución tecnológica adoptada incluye tecnolo-
de las lluvias pueden caer en las primeras tormentas. De gías, pre-hispánicas, coloniales y modernas, o una mez-
esta manera en el sistema de conservación se siembra cla de las tres, creando una “tecnología hibrida”. Más de
en seco aplicándose el estiércol y las roca fosfórica en dos décadas de implementación de aproximaciones
los canales de apertura del suelo. En general en estos innovativas-participativas con meta de desarrollar fuen-
20 Agroecología 3
la alimentación humana; cultivos de ciclo corto como

rabano y ajonjolí e higuerilla (Ricinus communis el prin-
cipal cultivo comercial, resistente a la sequia); con unas
cuantas eras de maíz, y frijol caupí el cual llena el res-
to del espacio. El monitoreo de la producción de estos
policultivos muestra que en años de pocas lluvias, los
agricultores lograron cosechar algunos vegetales, maíz,
frijoles, caupí, ajonjolí, guandul; y de los árboles madu-
ros, frutas, madera y forraje. La higuerilla produjo forra-
je para los animales y su excedente se vendió. (http://
www.tortuga.com/permacultura/English/polycultures.
htm).
Resultados similares han sido obtenidos por el Insti-
tuto de Permacultura de Bahía a través de su proyecto
“Policultura No SemiArido” el cual promueve policul-
tivos en tierras secas del oeste de Bahía, combinando
Para regenerar las cuencas de la región de la Mixteca, fueron aplicados tratamientos específicos a las colinas, los valles
plantas de producción de biomasa con cultivos de ali-
y las quebradas usando distintas tecnologías. El trabajo comienza en las colinas con estructuras para retener el agua mentos, impactando 748 familias en varias municipali-
como diques y trincheras (1), anillos de agua (2), reforestación (3) y líneas de contorno con vegetación (4). En el pie de
monte donde la inclinación es menor que en las laderas, bordes y terrazas (5), diques enterrados (17) y lagunas artifi- dades, asegurandoles alimentos aún en condiciones de
ciales (6) pueden ser construidos con el fin de dar de beber al ganado o regar los cultivos. Los cañones donde el agua
tiene mayor facilidad para erosionar el suelo, pueden ser regenerados construyendo compuertas o gabiones que dimi- extrema aridez. (http://www.permacultura-bahia.org.
nuyan la velocidad del agua (8). Estos trabajos disminuyen la velocidad y fuerza inicial del flujo con un estancamiento
provisional del agua y retención del pueblo, logrando así control sobre estos dos recursos naturales. El agua obtenida
br/aconteces.asp?cod=64)
por la construcción de estas compuertas puede ser utilizada para construir charcos (16),galerías de pozas y compuertas
de redireccionamiento del agua (9) que encauzan parte del flujo del agua hacia las tierras cultivadas. Además, el agua
en las partes altas de la cuenca llena de nuevo los nacimientos ya existentes (10).Una vez, el agua ha sido encauzada a Enfrentando la incertidumbre climática: evidencia
los sistemas de riego, se diseñan también sistemas de almacenamiento de agua que previenen su filtración y evapora-
ción, y aseguran su disponibilidad para la distribución a las comunidades.El agua puede ser transportada a donde será reciente
usada por tubos fabricados de barro (12), unidos con cemento o piedra; a pesar de que el transporte por tuberías (14)
es el camino más eficiente para evitar la filtración y evaporación. Antes de colocar las tuberías, es necesario construir
un tanque (15) donde se precipita el material particulado presente en el agua para evitar taponamiento. Para este Observaciones durante las dos últimas décadas del
trabajo, los costos de operación pueden ser disminuidos por uso de energías alternativas como el viento (13) o bombas
manuales que finalmente distribuyan el agua a la población. (Toledo y Solís, 2001) desempeño agrícola después de eventos climáticos ex-
Figura 2. Cosecha de agua a traves de regeneración de cuen- tremos han revelado que la resiliencia a los desastres
cas en la región de Mixteca. México climáticos está íntimamente relacionada con los niveles
de biodiversidad de las fincas. Las mediciones realizadas
tes de agua para mejorar el nivel de vida de los pobres en laderas después del huracán Mitch en América Cen-
han logrado lentamente su objetivo. Ligado al desarro- tral demostraron que los agricultores que usaban prác-
llo ecológico, se ha logrado también un importante de- ticas de diversificación tales como cultivos de cobertura,
sarrollo comercial, llevando a los mercados modernos, cultivos intercalados y agroforestería sufrieron menos
productos con amaranto producido con agua cosecha- daños que sus vecinos convencionales que usaban mo-
da, por 1.100 pequeños agricultores organizados en 60 nocultivos. El análisis, encabezado por el movimiento
cooperativas de movimientos de base (Toledo y Solis Campesino a Campesino que movilizó 100 equipos de
2001). agricultores-técnicos y 1.743 agricultores para realizar
observaciones pareadas de indicadores agroecológi-
Brasil cos específicos en 1.804 fincas diversificadas y conven-
En la región de Sertao en el noreste de Brasil se ha ex- cionales. El estudio involucró 360 comunidades y 24
perimentado un proceso de desertificación a causa de departamentos en Nicaragua, Honduras y Guatemala.
la expansión masiva de monocultivos de soya los cuales Después del huracán las parcelas diversificadas tenían
junto con el aumento de la variabilidad climática, pro- entre 20% a 40% más capa superior de suelo, mayor hu-
vocan inestabilidad social y económica, forzando millo- medad en el suelo, menos erosión y sufrieron menores
nes de habitantes de estas tierras a migrar a los centros pérdidas económicas que las experimentadas por sus
urbanos. vecinos convencionales (Holt-Gimenez 2001).
El Instituto de Permacultura Cerrado, implemen- De las muchas sequías que han afectado a Zimba-
tó un proyecto de policultivos en tierras secas, el cual bwe, la sequía de 1991/92 tuvo un efecto especial en
promueve la evaluación y adopción de la combinación la sub-región donde muchos países exhibieron un dé-
de los siguientes cultivos: forrajes resistente a la sequia, ficit estacional de hasta 80% de precipitación normal,
que garantice producción incluso en los años cuando por lo que hubo pérdidas de cosecha sin precedentes.
se presente el fenómeno del Niño por ejemplo el cactus El subcontinente, usualmente un exportador de ali-
Opuntia, arboles de leguminosas como Gliricidia, Leu- mentos, tuvo que importar 11,6 millones de toneladas
caena y Canavalia para fijar nitrógeno y producir bioma- de alimento valoradas en US$4 billones. La producción
sa, y Cajanus cajan el cual además produce frijoles para regional de granos bajó un 60% con respecto a los ni-
veles esperados. Las sequías incrementaron el hambre los sistemas de cultivo los cuales conducen a una mayor
y la desnutrición con la pérdida de ganado y cosechas. estabilidad y resiliencia ecológica bajo condiciones cli-
Respuestas de los agricultores a los efectos de la sequía máticas extremas.
han sido variados. Los agricultores, especialmente mu-
jeres en los distritos Nyanga, Chipinge, Mudzi, Chivi y 10. Resumen y conclusiones
Gwanda emprendieron muchas acciones para atenuar
los efectos de la sequía, logrando así al menos un nivel No hay duda que el sustento de miles de comunida-
mínimo de seguridad alimentaria: des de agricultores familiares, de agricultores/tradicio-
nales y pueblos indígenas en países en desarrollo serán
• Permacultura: Los agricultores se preparan para afectados seriamente por los cambios climáticos (Mor-
la sequía mediante diseños de uso del suelo que ton 2007). También es cierto que miles de agricultores
promueven la diversidad de cultivos y conserva- tradicionales en muchas áreas rurales se han adaptado
ción del agua. a los ambientes cambiantes, desarrollando sistemas
• Cosecha de agua: Los agricultores cosechan el diversos y resilientes en respuesta a las diversas restric-
agua de tejados y desviándola de fuentes natu- ciones que han enfrentado a través del tiempo. Muchos
rales hacia tanques. Esto asegura que tengan una de estos sistemas agrícolas alrededor del mundo sirven
cantidad substancial de agua para almacenar. En como modelos de sostenibilidad que ofrecen ejemplos
caso de una sequía el agua almacenada podrá sos- de medidas de adaptación que pueden ayudar a millo-
tenerlos por cerca de cinco meses dependiendo nes de pobladores rurales a reducir su vulnerabilidad al
del volumen del tanque y el tamaño de la familia. impacto del cambio climático.
El agua también se utiliza para la irrigación com- Algunas de estas estrategias de adaptación incluyen:
plementaria de vegetales y cultivos.
• Zanjas de infiltración: Algunos agricultores están • Uso de variedades/especies adaptadas localmente
cavando zanjas de infiltración a largo del contorno mostrando adaptaciones más apropiadas al clima
de la ladera. El agua es colectada en las zanjas du- y a los requerimientos de hibernación y/o resisten-
rante el período lluvioso. En tiempo seco, como en cia incrementada al calor y sequía.
el caso de la ausencia temprana de lluvias, el agua • Realzando el contenido de materia orgánica de
se infiltra hacia el subsuelo y es utilizada por las suelos a través de la aplicación de estiércol, abo-
plantas. Los cultivos pueden crecer hasta madurez nos verdes, cultivos de cobertura, etc. incremen-
usando esta humedad conservada. La experiencia tando así la capacidad de retención de humedad.
de los agricultores muestra que aunque hay sola- • Un uso más amplio de tecnologías de “cosecha” de
mente 5 días con lluvia en la estación de lluvias, agua, conservación de la humedad del suelo me-
los cultivos alcanzarán la madurez usando el agua diante mulching), y un uso más eficiente del agua
conservada y cosechada en las zanjas. de riego.
• Graneros: La mayoría de los agricultores tienen un • Manejo del agua para prevenir inundación, ero-
granero específico en el cual almacenan el grano sión, y lixiviación de nutrientes cuando la precipi-
(sorgo, mijos, y maíz por períodos de tiempo muy tación aumenta.
cortos), utilizados especialmente en épocas de se- • Uso de estrategias de diversificación como culti-
quia. vos intercalados, agroforestería, etc.) e integración
• Cultivos tolerantes a la sequía: Muchos agriculto- animal.
res prefieren variedades de grano tradicionales • Prevención de plagas, enfermedades, e infestacio-
tales como mijo y sorgo que son más resistentes a nes de malezas mediante prácticas de manejo que
la sequía que el maíz y por lo tanto dan una bue- promueven mecanismos de regulación biológica
na producción incluso con muy poca lluvia. Los y otros (antagonismos, alelopatía, etc.) y desarrollo
agricultores también prefieren variedades de cul- y uso de variedades y especies resistente a plagas
tivo específicas para la estaciones de sequía como y enfermedades.
aquellas variedades indígenas de mijo chiraufe), • Uso de indicadores naturales para el pronóstico
una cucurbitácea (Nyamunhororo), y una variedad del clima para reducir riesgos en la producción.
de frijol que exhiben maduración temprana (Vigna
unguiculata). El desafío ahora es cómo movilizar rápidamente este
conocimiento de modo que pueda ser aplicado en la
Estos ejemplos son de gran importancia en tanto que restauración de áreas ya afectadas o para preparar áreas
señalan la manera en la cual los agricultores de escasos rurales que se predice serán golpeadas por el cambio
recursos viven en ambientes marginales, proporcionan- climático. Para que esta transferencia horizontal ocurra
do la base para estrategias de manejo adaptativo de los rápidamente, el énfasis debe ser en involucrar a agricul-
recursos naturales que privilegia la diversificación de tores directamente en la extensión de innovaciones a
22 Agroecología 3
través de redes agricultor a agricultor bien organizadas. Bye RA. 1981. Quelites: ethnoecology of edible plants-
El foco debe estar en la consolidación de la investiga- past, present and future. Journal of Ethnobiology
ción local y el desarrollo de capacidades para resolver 1: 109-123
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debe hacer un uso eficaz de las habilidades y conoci- ment, Washington DC.
miento tradicionales, ya que esto proporciona una pla- Conway GR. 1997. The doubly green revolution, Penguin,
taforma para un mayor aprendizaje y niveles de organi- London.
zación local, mejorando así las posibilidades de empo- Denevan WM. 1995. Prehistoric agricultural methods as
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Agroecología 3: 7-28, 2008

LOS IMPACTOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO SOBRE LAS COMUNIDADES

Palabras clave: cambio climatico, resiliencia, agroecosistemas tradicionales, capacidad adapta-

Keywords: climate change, traditional agroecosystems, resiliency, adaptive capacity

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