Pamela Pedadogia Practicos
Pamela Pedadogia Practicos
Pamela Pedadogia Practicos
En este sentido, nos gustaría aclarar que el hecho de que sea complejo no
quiere decir que necesariamente sea complicado. Lo complejo remite a la idea
de que para abordar, definir, pensar en “algo”, en este caso la Educación, no
podemos limitarnos a un solo autor, a una sola mirada, sino que
necesariamente al hablar de Educación hablamos de muchos otros conceptos e
ideas que nos ayudan y aportan. Complejo es que no podemos definir
rápidamente el campo educativo, es decir, todo lo educativo de manera rápida
y resumida porque si lo hacemos estaríamos simplificando o recortando lo que
realmente podemos decir respecto a la Educación como campo de estudio.
Poder determinar estos aspectos es posible gracias a los aportes que algunas
ciencias realizaron a la Pedagogía: por ejemplo, conceptos teóricos propios de
la Sociología nos ayudan a comprender y conceptualizar cómo la educación se
produce en ámbitos sociales como la familia; la Psicología aporta saberes que
nos orientan sobre cómo una persona aprende, entre otras nociones que
podemos mencionar brevemente aquí a modo de repaso.
Ahora bien, esto significa que aún en las sociedades más antiguas existió la
escuela como lugar para educar? Qué es la escuela? La escuela siempre y en
todo lugar funcionó del mismo modo? La escuela tal como hoy la conocemos es
como la escuela que existió antes?
Estas son solo algunas de muchas preguntas que podríamos pensar en este
momento.
1- Seguir “el hilo” de la propuesta de esta clase (caso contrario, no podrán
seguir la lógica de la propuesta)
2- Tener una idea más clara respecto al contenido del texto para resolver la
actividad que se presentará luego.
Habrán notado que luego del título el texto lleva a pensar que es muy probable
que hayamos naturalizado (hecho natural, ver como normal) que la escuela
exista y quizás hasta hemos creído que siempre fue así. Pero la escuela, como
toda institución social, ha tenido un momento de surgimiento, por lo cual
podemos deducir por una parte que no siempre existió, y por otra parte que
algunos eventos del contexto social, cultural, político, económico facilitaron que
surgiera en dicho momento y no en otro.
Como antes dijimos que la educación en sentido amplio existe en otros ámbitos,
y no solo en la escuela, es conveniente también preguntarnos cómo se
educaba antes que la escuela existiera? Si no había “alumnos”, cómo
se los denominaba y quienes los educaban?
Es por eso que se menciona las primeras sociedades de la prehistoria y algunas
sociedades de la edad Antigua, en las que se puede conocer cómo se
organizaban, y cómo la educación fue una herramienta que sirvió para
organizar la vida en sociedad, incluso para ordenar la economía. Conviene
recordar que la edad Antigua abarca desde el 3500 antes de Cristo (AC), hasta
la caída del imperio romano, en el siglo V, después de Cristo (DC).
Es de suponer que en ese lapso de tiempo que comprende unos cuatro mil
años se hicieron importantes varias sociedades y civilizaciones como las que
existieron en China, en la India, en Egipto, en Israel, en Grecia hasta en Roma.
Ahora bien: dijimos que esos anteojos invisibles son de cada uno,
entonces es de esperarse que éstos sigan siendo únicos para mirar y
pensar la escuela.
¡¿Comenzamos entonces?!
Conviene enunciar que más allá del formato en que ven que está
tipeado el texto en PDF, se trata de un libro impreso hace algunos
años, escrito por pensadores en educación de nacionalidad mexicana
cuya propuesta consideramos mantiene vigencia y nos resulta útil a
nosotros porque nos ayudará a interpretar cómo ha variado la
educación escolar desde que la escuela existe, sobre todo por los
cambios de metodologías que a su vez influyen en los modos en que
se establece el vínculo pedagógico entre quien enseña y quienes
aprenden. En otras palabras, la autora de este texto será quien nos
muestre los anteojos de los cual hablamos al principio.
Escuela TRADICIONAL
Escuela NUEVA
Escuela TECNOCRÁTICA
Escuela CRITICA.
Lo interesante quizás sea saber que los pares de anteojos con los que
miramos y pensamos, como cualquier par de anteojos, se puede
cambiar; graduar mejor; limpiar, corregir, mejorar. No tenemos
porqué quedarnos con un mismo par de anteojos siempre. Quizás el
desafío sea ese: animarnos a mirar nuestro par de anteojos y darnos
cuenta de que es hora de mejorarlo o cambiarlo, y animarnos a
hacerlo.
Clase N° 4
¿Por qué se llama igual que la clase 3?: Porque seguimos con esta idea
de los “anteojos” para mirar lo que acontece en la escuela… Y en este
sentido es súper interesante aquí recordar lo que al inicio de la clase 3 les
invitábamos a pensar al respecto de los “anteojos” con que miramos. En
la clase pasada arracábamos contándoles esto:
Imaginemos que todos nosotros...cada uno de nosotros, los que usan anteojos
y los que no lo hacemos, en realidad tenemos todos una especie de anteojos
invisibles. Los tenemos siempre, andamos con ellos constantemente en
nuestra vida cotidiana y ni siquiera tenemos el trabajo de quitárnoslos o
cuidarlos de que se nos caigan al suelo. Imaginemos por un instante en que
todas las personas, todas absolutamente, tenemos esos anteojos.
Con esos anteojos, qué miramos entonces: miramos lo que nos rodea, eso que
nosotros llamaríamos “realidad”, aquello que nos pasa. Miramos también las
acciones de los demás, los dichos de los demás, miramos a los demás en todo
lo que hace a esos Otros. Pero no sólo miramos. Miramos y pensamos desde
esos anteojos invisibles. Y entonces de repente no sólo miramos las acciones o
dichos de los demás sino que nos encontramos de repente diciendo o
pensando si eso que el Otro hizo o dijo es “correcto” o “incorrecto”, “bueno” o
“malo”, o si yo hubiese dicho o hecho “x cosa” de esa forma. Es decir, desde
esos anteojos con los miramos la realidad, lo que nos rodea también pensamos
y definimos.
Bien, en este momento imaginemos que estos mismos anteojos invisibles son
los mismos que en Pedagogía nos ayudan para mirar y pensar la escuela y lo
que en ella debería ocurrir, de la forma en que debería ocurrir, en el tiempo en
que debería, con los materiales que pensamos; y con personas en roles que
también miramos y pensamos cómo debieran ser desde estos anteojos.
Ahora bien: dijimos que esos anteojos invisibles son de cada uno, entonces es
de esperarse que éstos sigan siendo únicos para mirar y pensar la escuela.
¡¿Comenzamos entonces?!
Pero como cada recorrido que se emprende inicia con el primer paso y se
continúa con un paso a la vez, les proponemos que nos acompañen haciendo
la lectura de la clase con cuidado, apuntando datos que crean serán como los
mojones en la ruta, que son esos postes de piedra o madera clavadas en el
suelo, sobre todo a los costados de las rutas, y que sirven para indicar las
distancias o la dirección en un camino. Es decir, pueden apuntar aquellos datos
que les ayuden luego a recordar los aspectos importantes en el recorrido que
hemos emprendido.
El Estado se interesó en esa nueva institución con fines educativos que hubo
estado en su etapa de gestación en manos de la Iglesia, no solo porque
hubiera un movimiento filosófico y cultural del siglo XVIII, conocido como la
Ilustración, sino porque estas nuevas corrientes de pensamiento acentuaban el
predominio de la razón humana y la creencia en el progreso humano, del cual
algunos representantes que se refirieron a la educación fueron Kant,
Rousseau, entre otros, y podría ayudar a construir bases y fundamentos de un
sistema político y económico que concebiría de modos diferentes de la
organización social. Por eso no es casual que por aquella época las ideas del
Iluminismo podrían gestar el socialismo con Marx y Engels, o el liberalismo con
Locke.
En relación con esto, Lucía Lionetti postula que “el concepto de educación fue
el movimiento ilustrado; de la educación individual y, sobre todo, de la
educación pública, piedra angular del edificio que tenía por meta última la
estrecha relación ciudadano-patria. No fueron los pedagogos quienes
esbozaron las líneas maestras de la enseñanza sino los filósofos, o más
exactamente, los ideólogos de la filosofía política…” (99, 100 : La misión
política de la escuela pública. Formar a los ciudadanos de la república. 2007.
Miño y Dávila editores). Lo que la autora expresa es que los pensadores del
Iluminismo pretendían que mediante la educación se formaran hombres útiles y
virtuosos para el proyecto de sociedad de la época. Es decir que veían a la
educación como un instrumento para que desde la infancia se modelara
costumbres, conductas de las personas que componen la sociedad civil. Por
eso el Estado se ocupó en diseñar aquello que se debía enseñar, cómo y quién
lo haría y a quién estaría destinada esa educación.
Hasta aquí, con la ayuda de los autores citados, hemos realizado una gran
parte del recorrido iniciado desde que empezamos a “desnaturalizar” la
escuela. Y sobre todo en esta parte del trayecto emprendido hemos tratado de
describir a grandes rasgos las características que tuvo el contexto. En este
sentido, y más vinculado a la institución recién surgida, sumamos las palabras
de Pablo Pineau
en La escuela como máquina de educar (2007) quien dice que “la escuela es a
la vez una conquista social y un aparato de inculcación ideológica de las clases
dominantes que implicó tanto la dependencia como la alfabetización masiva, la
expansión de los derechos y la entronización de la meritocracia, la construcción
de las naciones, la imposición de la cultura occidental y la formación de
movimientos de liberación, entre otros efectos”. En otras palabras, Pineau dirá
que la escuela no es resultado de una evolución lógica y natural, sino que tuvo
que ver con algunos aspectos que provocaron rupturas en las concepciones
culturales de la época, como los siguientes:
El maestro debía ser un ejemplo de conducta tanto dentro como fuera de la
escuela
Estas fueron algunas de las características que tuvo la escuela Tradicional, que
aún se pueden encontrar en la actualidad porque aunque sea la primera que
surge, el nombre de Tradicional la va a relacionar con la idea de la escolástica.
refieren a este método como “la domesticación del cuerpo”, por eso no debe
llamarnos la atención que se ubicaran en filas mirando hacia un frente, en
pupitres atornillados al piso de madera. Los alumnos se sentaban en esos
bancos de respaldo y asiento recto a los que tenían que adaptarse sus
cuerpos. En dichos asientos se llegaban a sentar diez, doce, dieciséis e incluso
más alumnos que compartían la misma mesa, y con el paso de los años los
pupitres se hicieron para menos cantidad de alumnos. Solían tener un agujero
donde colocar el tintero (un frasco con tinta, pues aun no usaban lapiceras), y
también la mesa era como una cubierta que se podía levantar y debajo, en una
especie de cajón, guardar los útiles.
Los aspectos mencionados son aportados por María Cristina Asprelli en su libro
La didáctica en la formación docente (2011).
Otro de los pensadores que se suele vincular a la escuela Tradicional por haber
vivido en esa época, es Juan Amos Comenio (1592-1670)
,quien nación en Moravia (actual República Checa). A Comenio se lo conoce
como el gran pedagogo de todos los tiempos, el padre de la Pedagogía. Es el
autor del libro “Didáctica Magna”, escrita en 1628 resultó ser como una caja de
herramientas “que a través de normas y explicaciones constituye el esquema
esencial de las actividades de enseñanza, que debe realizar un maestro en una
escuela”, en palabras de Asprelli. A Comenio se le adjudica la expresión que
hay que enseñar todo a todos, lo que resulta una idea democratizadora de la
educación, además de implicar la enseñanza simultánea desde lo
metodológico. Este pensador también considera que debe formarse al hombre
en el área intelectual como en el área espiritual. Consideró que la enseñanza
debía tener en cuenta el desarrollo de las personas en sus distintas etapas:
infancia, pubertad, adolescencia y juventud. Por eso es que llegó a pensar una
organización escolar para cada una de esas etapas.
Pero como hemos hablado también que con el correr del tiempo muchas cosas
cambian, que se producen transformaciones, como también avances,
notaremos que nuestra segunda “parada” tendrá que ver con finales del siglo
XIX e inicios del siglo XX, es decir, desde principios del año 1900 en adelante.
- En cuanto al desarrollo de las ideas, aparecen teóricos como Darwin (teoría
de la evolución) y Mendelt (la genética), Einstein (teoría de la relatividad),
Freud (teoría del psicoanálisis)
Nos interesa nuevamente detener nuestro recorrido para conocer algo más de
una de las representantes de esta corriente pedagógica, como lo fue la italiana
María Montessori (1870-1952). Ella fue una médica y pedagoga que le dio gran
importancia a lo biológico, además de defender la libertad en la educación para
que los niños adquieran autonomía.
Luego los invitamos a poder conocer algunos rasgos más referentes a esta
mujer italiana que se preocupó por atender a los niños con problemas sociales
y también aquellos considerados discapacitados intelectuales en la época. Para
ello sugerimos que descarguen de la sección archivos el siguiente capítulo que
emplearán en la resolución de una actividad que les presentaremos al finalizar
esta clase:
Hasta aquí hemos descrito características generales que nos ayudan a saber
cómo fue el contexto de surgimiento de la Escuela Tradicional y de la Escuela
Nueva. Reconocer esas características (aunque sea a grandes rasgos) nos
ayuda a comprender cómo las corrientes de pensamiento filosóficos influyeron
en lo ideológico y por ende en la manera de interpretar que la institución
escuela debería cumplir su función social de llevar adelante la educación
formal.