El zorro invitó a cenar a la cigüeña y le sirvió la sopa en un plato poco profundo, por lo que ella no pudo comer. Al día siguiente, la cigüeña invitó al zorro y le sirvió el guiso en un jarro estrecho, por lo que el zorro no pudo comer. La moraleja es no hacerle a los demás lo que no quieres que te hagan a ti.
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El zorro invitó a cenar a la cigüeña y le sirvió la sopa en un plato poco profundo, por lo que ella no pudo comer. Al día siguiente, la cigüeña invitó al zorro y le sirvió el guiso en un jarro estrecho, por lo que el zorro no pudo comer. La moraleja es no hacerle a los demás lo que no quieres que te hagan a ti.
El zorro invitó a cenar a la cigüeña y le sirvió la sopa en un plato poco profundo, por lo que ella no pudo comer. Al día siguiente, la cigüeña invitó al zorro y le sirvió el guiso en un jarro estrecho, por lo que el zorro no pudo comer. La moraleja es no hacerle a los demás lo que no quieres que te hagan a ti.
El zorro invitó a cenar a la cigüeña y le sirvió la sopa en un plato poco profundo, por lo que ella no pudo comer. Al día siguiente, la cigüeña invitó al zorro y le sirvió el guiso en un jarro estrecho, por lo que el zorro no pudo comer. La moraleja es no hacerle a los demás lo que no quieres que te hagan a ti.
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Lee con atención.
Un día el zorro invitó a cenar a su casa a la cigüeña y ella aceptó
con mucho agrado. La cigüeña se presentó a la hora acordada y tras conversar un buen rato, se dirigieron al comedor.
El zorro había preparado una
deliciosa sopa, pero la sirvió en dos platos muy llanos. La cigüeña apenas pudo probar la sopa con la punta de su largo pico. El zorro, entre risas burlonas, se tomó toda la sopa y al final se lamió y relamió el plato. La cigüeña pronto se dio cuenta de la broma de mal gusto que le estaba jugando el zorro. Sin embargo, disimuló su enojo. Al despedirse, dio las gracias al zorro dejándole saber que estaba invitado a almorzar a su casa al día siguiente.
El zorro se presentó en la casa de la cigüeña.
Al entrar, sintió un olor exquisito que le hizo agua la boca y lo llenó de emoción. Pero la emoción le duró poco, porque el guiso que había preparado la cigüeña le fue servido en un jarro muy largo y de cuello estrecho. La cigüeña alcanzaba fácilmente el guiso con su pico, pero no el zorro con su hocico ancho y corto. El zorro, muy avergonzado, se marchó con el rabo entre las patas. Moraleja:No hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti. Ahora marca la respuesta correcta de cada pregunta.
-En el texto, ¿Qué significa “platos muy llanos”?
a Que son platos poco profundos.
b Que son platos profundos.
c Que son platos nuevos.
-¿Por qué no pudo comer la cigüeña?
a Porque no tenía hambre.
b Porque el plato estaba vacío.
c Porque su largo pico le impedía comer del plato
llano. -¿Qué hecho sucede al primero?
a El zorro se presentó en la casa de la cigüeña.
b Un día el zorro invitó a cenar a su casa a la cigüeña. c La cigüeña apenas pudo probar la sopa con la punta de su largo pico. -¿Qué le preparó el zorro para invitarle a la cigüeña?
a Arroz.
b Sopa.
c Jugo. -Dice la lectura, Al zorro se le hacía agua la boca ¿Qué significa?
a Que había bebido mucha agua.
b Que tenía muchas ganas de comer.
c Que quería mucha agua.
-¿Por qué el zorro no pudo comer?
a Porque el jarro era muy largo.
b Porque el jarro era muy llano.
c Porque el jarro era muy profundo.
- ¿Qué decidió darle la cigüeña al zorro?
a Una sorpresa.
b Un plato.
c Una lección.
-¿Qué nos enseña esta fábula?
a Que los amigos se deben invitar a comer.
Que no debemos hacer a los demás lo que no b quieres que te hagan a ti. c Que debemos comer lo que nos invitar comer.