Principio de Publicidad Cristian

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PRINCIPIO DE LA PUBLICIDAD

INTRODUCCIÓN

Se parte de comprender el principio de la publicidad y como esta ha desempeñado el rol de


dar a conocer al público y a los interesados, en forma sistemática y permanente, sin que medie
petición alguna, sus actos, contratos y resoluciones, mediante las comunicaciones,
notificaciones y publicaciones que ordene la ley, ello para regular y hacer público los procesos
y estados financieros por así decir que llevan a cabo las organizaciones legales.

En congruencia el conocimiento de el papel del principio de publicidad permite desarrollar los


procesos en armonía con los estamentos legales establecidos para así garantizar que dichos
procesos se lleven a cabo bajo la legalidad, veracidad, autenticidad y lealtad, tanto a las
normas como a los principios de las organizaciones.
OBJETIVOS

Objetivo General.

 Comprender el principio de publicidad y el papel que desempeña en Colombia en


materia de regulación

Objetivos Específicos.

 Analizar el principio de publicidad y el papel que desempeña en Colombia en materia


de regulación

 Profundizar en cada uno de los aspectos del principio de publicidad y el papel que
desempeña en Colombia en materia de regulación

 Diferenciar las diferentes normas y leyes del principio de publicidad y el papel que
desempeña en Colombia en materia de regulación
Principio de la Publicidad

Principio referido a la publicidad de las actuaciones judiciales desarrolladas en toda clase de


procesos y que permite distinguir, de una parte, la publicidad de las actuaciones procesales
que se encuentran en trámite, lo que significa que las mismas han de llevarse a efecto ante el
órgano judicial, en audiencia pública, y, de otra parte, la publicidad procesal en su vertiente de
derecho a la información y el acceso a las actuaciones procesales ya finalizadas, incluidas las
sentencias, integradas en libros, archivos o registros judiciales.

El principio está dirigido a garantizar la transparencia, la imparcialidad y la rectitud en la


administración de justicia, y en lo que consiste y se traduce es en permitir que cualquier
persona que lo desee pueda asistir y presenciar la realización de los actos procesales. La
“audiencia pública” es precisamente la norma procesal establecida para la observancia de ese
principio de publicidad.

El principio de publicidad dentro del debido proceso administrativo Según la Carta


Fundamental (artículos 29 y 209), el debido proceso administrativo impone la publicidad como
principio rector de las actuaciones (artículo 209 C.P. y 3º C.P.A.C.A.), de tal manera que la
Administración está obligada a dar a conocer a sus destinatarios aquellos actos que supongan
una afectación directa de su situación jurídica.

Al respecto, afirmó la Corte Constitucional en la Sentencia C-096 de 2001: El conocimiento de


los actos administrativos, por parte del directamente afectado, no es una formalidad que
pueda ser suplida de cualquier manera, sino un presupuesto de eficacia de la función pública
administrativa artículo 209 C.P.- y una condición para la existencia de la democracia
participativa. (Corte Constitucional, 2001).

En desarrollo del principio de publicidad, la notificación de las decisiones asegura la legalidad


de las determinaciones adoptadas y el uso efectivo de los derechos de defensa, de
contradicción y de impugnación que el ordenamiento jurídico consagra.

Sobre las notificaciones precisa el Consejo de Estado En cuanto al artículo 68 del C.P.A.C.A. que
dispone sobre las notificaciones personales: si no hay un método más eficaz de notificación al
interesado, podrá enviarse la citación “a la dirección sin formalidad alguna; y amplía las
posibilidades de envío a un número de fax, a un correo electrónico o los datos que se puedan
obtener del registro mercantil. (Consejo de Estado-Sala de Consulta y Servicio Civil, 2017)

La norma establece garantías para el contribuyente, responsable, agente retenedor y/o


declarante, de tal manera que con la notificación electrónica no se impida su defensa. Es así
como se establece en el artículo 566-1 que en el evento de que por razones tecnológicas no se
pueda acceder al contenido del acto administrativo, el contribuyente, responsable, agente
retenedor y/o declarante podrá comunicarlo a la DIAN dentro de los tres días siguientes a su
recibo y esta deberá enviar nuevamente la notificación, sin perjuicio de que empiecen a correr
los términos legales deberán transcurrir cinco días a partir del recibo del correo. Si no puede
notificarse electrónicamente, por inconvenientes por parte de la administración o del
contribuyente, se notificará el acto personalmente, de acuerdo con los artículos 565 y 568 del
Estatuto Tributario. Ospina, W. A. G., & Martínez, O. H. B. (2020).

De acuerdo con estos lineamientos legales, la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales


emitió la Resolución 000038 del 30 de abril de 2020, donde determina que la notificación por
medios electrónicos será el mecanismo preferente de notificación de las actuaciones en
materia tributaria, aduanera o cambiaria. En términos generales este acto reglamentario
también dispone que al administrado tributario se le remitirá a su dirección de correo
electrónico los siguientes elementos: a) Código de verificación, que permita al administrado
verificar la autenticidad del mensaje enviado. b) Nombre completo del Administrado, NIT, la
fecha de expedición del mensaje y la indicación de los medios electrónicos complementarios
para visualizar el acto administrativo y su contenido, en caso de existir. c) El acto
administrativo adjunto, en su totalidad y, d) La advertencia que mediante el respectivo correo
se está notificando el acto administrativo adjunto, los recursos que legalmente proceden, las
autoridades ante quienes deben interponerse y los plazos para hacerlo (Artículo 5) Ospina, W.
A. G., & Martínez, O. H. B. (2020).

En Colombia se define el principio de publicidad como el acto procesal de notificación


responde al principio constitucional de publicidad de las actuaciones públicas, mediante el cual
se propende por la prevalencia de los derechos fundamentales al debido proceso y al acceso a
la administración de justicia (artículos 29 y 229 de la Constitución Política), dado que se
garantiza el ejercicio de los derechos de defensa, de contradicción y de impugnación previstos
en el ordenamiento jurídico. De suerte que, la notificación del inicio y de las distintas
actuaciones efectuadas en desarrollo de un proceso, permiten hacer valederos los derechos
procesales constitucionales de los asociados, ya que faculta a las partes y a los intervinientes
tanto para oponerse a los actos de la contraparte como para impugnar las decisiones
adoptados por la autoridad competente dentro de los términos previstos en la ley. Ospina, W.
A. G., & Martínez, O. H. B. (2020).

Ahora bien, la obligación de notificar a las partes e interesados, se establecen en virtud de un


mandato constitucional consagrado en el artículo 29 de la Constitución Política, el principio de
publicidad, visto como instrumento para la realización del debido proceso, implica la exigencia
de proferir decisiones debidamente motivadas en los aspectos de hecho y de derecho, y el
deber de ponerlas en conocimiento de los distintos sujetos procesales con interés jurídico
dentro del proceso, a través de los mecanismos de comunicación instituidos en la ley, con el fin
de que puedan ejercer sus derechos a la defensa y contradicción. Ospina, W. A. G., & Martínez,
O. H. B. (2020).

El ámbito judicial en general, y penal en particular, el principio de publicidad del proceso se ha


erigido en uno de los pilares del sistema democrático, permitiendo un proceso público con
todas las garantías tanto en consideración a la ciudadanía, como a las partes implicadas en el
mismo. Una doble dimensión pues; interna a los efectos de los intervinientes en el
procedimiento en toda su complejidad, como externa, en consideración a la comunidad y su
posibilidad de conocer las actuaciones judiciales tanto previas como coetáneas al proceso. A
este efecto, la libertad de información jugará un papel determinante y necesario para tal
proyección más allá del círculo de personas vinculadas a la tramitación del procedimiento, y
principalmente, las que en su caso puedan encontrarse en la Sala de vistas en la fase del juicio
oral. Tamayo Carmona, J. A. (2013).

El Principio de Publicidad del Proceso

Es innegable la estrecha vinculación del derecho de informar con el principio de publicidad


procesal, y cuya actuación a través de los medios de comunicación es uno de los elementos
más decisivos para su más completo desarrollo, otorgando una dimensión pública que
trasciende de los aspectos tanto espaciales, como temporales de la información en cuestión.
Pero tal consideración debe ser matizada, en cuanto ni todo el íter procesal estará regido por
el principio de publicidad (al menos en toda su extensión), ni el derecho a la libertad de
información será absoluto. Tamayo Carmona, J. A. (2013).

Publicidad Interna – Publicidad Externa

En el ámbito procesal, se pueden distinguir dos ámbitos de actuación del principio de


publicidad: interno y externo, que a su vez tendrá una doble dimensión: colectiva e individual.
Mediante la primera, se aseguraría el derecho de las partes a un proceso justo y con todas las
garantías proscribiendo la arbitrariedad en las actuaciones judiciales, encontrando su punto de
referencia normativo en el 24.2 CE, y vinculándose igualmente con su derecho de defensa;
mientras que la segunda, la publicidad externa, estaría orientada, como una suerte de
principio programático, a la posibilidad de que la actuación judicial pudiese ser conocida por
terceros ajenos al procedimiento, encontrando su refrendo legal en el art. 120 CE. A este
respecto, a su presentará una doble impronta: individual, u orientada a garantizar un juicio
justo (art. 24 CE), y colectiva, con relación al control de las actuaciones judiciales por parte de
la ciudadanía teniendo su principal ámbito de actuación el derecho a la libertad informativa del
art. 20 CE. Tamayo Carmona, J. A. (2013).

Fases del procedimiento y principio de publicidad

Es necesario apuntar la distinta intensidad del mandato constitucional a un proceso público, en


consideración a la propia estructura judicial de los procedimientos en general, y penales en
particular. Básicamente, se pueden establecer dos fases: una primera de investigación y
preparación del juicio; Fase de instrucción o de formación del sumario y, en segundo término,
y consecuencia del anterior, la fase de enjuiciamiento o del juicio oral, en la que se dilucidará
la responsabilidad penal de acusado. Tamayo Carmona, J. A. (2013).

Respecto a la primera, la fase de instrucción del proceso penal no estará regida por el principio
de publicidad, so pena de desvirtuar las debidas investigaciones del hecho delictivo, orientado
a determinar las personas imputadas que en su caso serán objeto de acusación formal. Ahora
bien, principio de publicidad en su vertiente externa, que no interna: las partes tendrán
derecho a conocer tanto los cargos que se les imputan, como el devenir de las actuaciones, so
pena de indefensión. Tamayo Carmona, J. A. (2013).

Será en la fase siguiente, la del juicio oral, donde el principio de publicidad cobrará relevancia
en su dimensión externa, tanto a efectos individuales como colectivos, y donde la publicidad
del proceso se verá eventualmente proyectada con la intervención del derecho a la libertad de
información (art. 20 CE) a través de los medios de comunicación. Tamayo Carmona, J. A.
(2013).

Regulación del principio de publicidad

Existe una pluralidad de normas tanto a nivel estatal como internacional que hacen mención y
reiteran el principio de publicidad procesal como elemento determinante del Estado de
Derecho, en las dos dimensiones –interna y externa mencionadas en el apartado anterior. No
obstante, tal principio, que se erigirá en derecho fundamental en su caso (art. 24 CE) no es un
derecho absoluto, encontrando sus limitaciones sea en la doctrina legal del TC, sea en las
propias normas reguladoras del procedimiento judicial. Tamayo Carmona, J. A. (2013).

Regulación orgánica: En primer lugar, y a nivel internacional, encontramos el art. 6. 1º y 3º a)


de la Convención Europea para la protección de los Derechos Humanos y Libertades
Fundamentales (CEDH), equivalente al art. 14.1 del Pacto Internacional de Derechos civiles y
Políticos, al declarar que toda persona tiene derecho a que su causa sea oída de una forma
equitativa y pública dentro de un plazo razonable por un Tribunal imparcial, y debiéndose
pronunciar la sentencia de forma igualmente pública, pero añadiendo que la posibilidad de
acceso a la Sala por el público y la prensa durante la totalidad o parte del procedimiento,
podrá ser prohibida “en interés de la moralidad, del orden público o de la seguridad nacional
en una sociedad democrática”, o bien cuando lo exija la protección de los intereses de los
menores, la tutela de la vida privada de las partes intervinientes en el proceso o, en fin,
cuando la publicidad pudiese ser perjudicial para los intereses de la Justicia. Tamayo Carmona,
J. A. (2013).

Restricciones y límites al principio de publicidad

De la clasificación de la publicidad procesal, interna y externa, el punto de debate se centrará


en esta última, y más concretamente, en su acepción colectiva, o la referida a la posibilidad de
que cualquier persona ajena al procedimiento pueda conocer tanto la dinámica como el
contenido de las actuaciones judiciales. Y como tal tercero o terceros, se encuentran los
profesionales de los medios de comunicación, en cumplimiento de sus funciones informativas.
Tamayo Carmona, J. A. (2013).

La función de control reconocida al principio de publicidad, hará que se erija en un elemento


central la posibilidad de redimensionar el procedimiento mediante los medios de
comunicación, permitiendo como ya se ha indicado más arriba, proyectar la información más
allá de los límites espaciales tanto referidos a la propia Sala de Vistas, como territoriales y
temporales. Tamayo Carmona, J. A. (2013).

De tal modo, la posibilidad de restringir o limitar la publicidad de las actuaciones judiciales


encontrará una nueva variable de extraordinaria importancia a tener en cuenta por el Tribunal:
la entrada de la opinión pública en el decurso del procedimiento. Tamayo Carmona, J. A.
(2013).

Tal y como se dispone en el propio art. 20 CE, al reconocer como derecho fundamental
“comunicar y recibir libremente información veraz por cualquier medio de difusión” sin que
pueda ser objeto de “ningún tipo de censura previa”, además de los límites implícitos en la
propia enunciación del derecho (información veraz), apunta los derechos del Título I (Derechos
y libertades fundamentales), y en especial, los derechos al honor, intimidad personal y familiar
y a la propia imagen, y la protección de la juventud y de la infancia. Tamayo Carmona, J. A.
(2013).

Libertad informativa

Tal y como ha sido entendido este derecho fundamental, sancionado en el art. 20 CE, presenta
una dimensión que trasciende el propio interés individual de los profesionales de la
información, y se orienta aun fin colectivo “garantía de la posibilidad de existencia de una
opinión pública libre, indisolublemente unida al pluralismo político propio del Estado
democrático”. Pero ello no significará que no tenga restricciones, encontrando dos tipos de
límites: intrínsecos veracidad e interés general de la información, y extrínsecos con relación a
la propia remisión del art. 20.4 CE al resto de derechos y libertades públicas del Título I, y en
especial, a los derechos al honor, intimidad personal y familiar y a la propia imagen (art. 18.1
CE). Tamayo Carmona, J. A. (2013).
De este modo, el derecho a la información desde el punto de vista activo, o relativo a la
posibilidad de difusión de la noticia- se considerará prevalente a otros derechos
fundamentales siempre y cuando no exceda de sus límites, que se encontrarán a su vez
delimitados por las directrices de la Ley 1/1981, de 5 de mayo, de Protección civil del derecho
al honor, intimidad personal y familiar y a la propia imagen, y en concreto, por las propias
excepciones y contra excepción del art. 8.2 respecto al derecho a la propia imagen. Tamayo
Carmona, J. A. (2013).

Restricciones al principio de publicidad en el proceso: tipos y medidas.

Respecto a las limitaciones del principio de publicidad en consideración a la libertad


informativa, son punto de referencia las SSTC 56/2004 y 57/2004, de 19 de abril, respecto a las
reglas de acceso de los medios de comunicación al Tribunal Supremo, tanto a las Salas de Vista
como al resto de dependencias, junto a poder hacerlo con instrumentos ópticos o
audiovisuales. Ambas resoluciones concluyen declarando que la regla general, respecto a las
Salas de Vista en su actividad jurisdiccional es la posibilidad de acceso de los medios de
comunicación sin distinguir el carácter del mismo (prensa escrita, o audiovisual), y la
denegación su excepción, debiéndose realizar a partir de un juicio de ponderación entre los
intereses en conflicto y proporcionalidad de la medida que se adopte. Tamayo Carmona, J. A.
(2013).

Así pues, el carácter público de las actuaciones judiciales permitirá la cobertura informativa a
realizar por los profesionales de tal actividad, resultando su entrada preferente al resto de
ciudadanos en el supuesto de tener que restringir el acceso por razones de espacio; pudiendo
vetarse por contra, cuando se declare el juicio a puerta cerrada, ahora sin distinción con el
público en general. Tamayo Carmona, J. A. (2013).
CONCLUSIÓN

Después de realizar este trabajo se hace comprensible la importancia del principio de


publicidad y el papel que desempeña en Colombia en materia de regulación, y del mismo
modo las diferentes normar, leyes y procedimientos que se rigen a partir de la aplicabilidad de
este en los procesos que se llevan a cabo en la nación y que conciernen a estamentos públicos
y privados.

Así como también se comprende que en Colombia se define el principio de publicidad como el
acto procesal de notificación responde al principio constitucional de publicidad de las
actuaciones públicas, mediante el cual se propende por la prevalencia de los derechos
fundamentales al debido proceso y al acceso a la administración de justicia (artículos 29 y 229
de la Constitución Política).

Por ello es congruente y necesario conocer y comprender porque y para qué es necesario
hacer uso de las regulaciones y leyes en cuanto a los principios de publicidad en el país,
acciones que benefician de manera directa los procedimientos legales y tributarios y
regulatorio de las organizaciones en el país y de la población en general.

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