Aclara y Peticiones Subsidiarias - Arriagada JPL

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EN LO PRINCIPAL: Aclaración, rectificación o enmienda –

PRIMER OTROSÍ: En subsidio reposición con apelación en


subsidio – SEGUNDO OTROSÍ: Apelación directa. TERCER
OTROSÍ: Delega Poder

S.J. DE POLICÍA LOCAL DE LA PINTANA

Javier Esteban Leiva Albornoz, abogado, por la


accionante, causa Rol 206.837-1, a V.S., respetuosamente
digo:
En uso de los derechos y garantías
constitucionales y legales, vengo en solicitar a V.S., se
sirva aclarar el contenido de la resolución de fecha 25
de noviembre de 2020, que reza:
Lo anterior, de acuerdo a los fundamentos de
hecho y de derecho que a continuación paso a exponer.

1. Marco regulatorio aplicable:

Como V.S., bien recordará, el margen en el cual


el la competencia del tribunal, no se encuentra descrita
de forma exclusiva y excluyente en un solo cuerpo
normativo. Así, es como podemos establecer dicho margen
de acción del Tribunal, a través de métodos
interpretativos como lo ha señalado el destacado jurista
Hans Kelsen1:

“(…)En todos estos casos, la norma a ejecutarse


constituye sólo un marco dentro del cual se dan varias
posibilidades de ejecución, por lo que es regular
todo acto jurídico que se mantiene dentro de ese
marco, llenándolo en algún sentido posible.(…)”

De lo anterior se sigue, que las principales


fuentes normativas que perfilan la acción soberana de todo
tribunal, incluyendo al de marras, se configuran a partir
de los siguientes instrumentos de apreciación jurídica:

a) Constitución Política de la República y Tratados


Internacionales sobre Derechos Humanos.
b) Código Orgánico de Tribunales.
c) Ley de Organización y Atribuciones de los Juzgados
de Policía Local.

1
Kelsen, Hans, La Teoría Pura del Derecho, introducción a la problemática
científica del Derecho, Editorial Losada, Buenos Aires, 1941. p. 131
d) Ley del tránsito.
e) Código de procedimiento civil.

a) Constitución Política de la República y Tratados


Internacionales sobre Derechos Humanos.

Ha sido nuestro constituyente, quien ha


reconocido como límite a la potestad creadora de nuestro
ordenamiento jurídico no sólo las normas que en la
constitución misma se reconocen, sino que además a
aquellas en las cuales el Estado mismo se obliga
internacionalmente en materia de Derechos Humanos (art.
5º inc. 2º CPR), sino que además de su incumplimiento se
predica el mancillamiento del honor de nuestra patria.

Por lo anterior, todo tribunal debe permitir


el ejercicio de TODAS las acciones y derechos que,
legítimamente, todo auxiliar de la administración de
justicia entable en defensa de los intereses de su
representado, de cara a la observancia del derecho a la
tutela judicial efectiva del artículo 19 Nº3 de la
Constitución Política de la República, que asegura a todas
las personas:

“(…)3º.- La igual protección de la ley en el ejercicio


de sus derechos.

Toda persona tiene derecho a defensa jurídica en


la forma que la ley señale y ninguna autoridad o
individuo podrá impedir, restringir o perturbar la
debida intervención del letrado si hubiere sido
requerida.

Toda sentencia de un órgano que ejerza jurisdicción


debe fundarse en un proceso previo legalmente
tramitado. Corresponderá al legislador establecer
siempre las garantías de un procedimiento y una
investigación racionales y justos (…)”

Siendo esto así, las enunciaciones a las que


ha hecho referencia esta parte al presentar la querella
con demanda civil en conjunto, accionando tanto en sede
infraccional como indemnizatoria, deben tenerse por
reconocidas desde el momento en el cual se ha proveído y
notificado cualquier proceso, como es en el caso de
marras, siendo éstas normas de orden público.

b) Código Orgánico de Tribunales.-

El cual indica dos normativas que son relevantes para


efectos de entender cómo se construye bajo parámetros de
racionalidad y justicia, la potestad que ejercen los
tribunales en materia de Policía Local. Así, se indica en
los siguientes artículos:

“(…)Artículo 5º inciso final


Los demás tribunales especiales se regirán por las
leyes que los establecen y reglamentan, sin perjuicio
de quedar sujetos a las disposiciones generales de
este Código.(…)”

(énfasis añadido)
“(…)Art. 10. Los tribunales no podrán ejercer su
ministerio sino a petición de parte, salvo los casos
en que la ley los faculte para proceder de oficio.(…)”

(énfasis añadido)

El profesor Iván Hunter Ampuero2 ha señalado respecto a este principio


dispositivo que:

(…) La actividad jurisdiccional sólo puede iniciarse


ante la petición del interesado, es decir, todo
órgano jurisdiccional debe actuar rogadamente ("nemo
iudex sine actore")[14]. Esta manifestación del
principio está recogida en los artículos 3 y 230
PCPC., y además de reflejar el respeto por la
titularidad privada de los derechos permite separar
las funciones de parte y juez asegurando la
imparcialidad del juzgador.

En segundo lugar, la determinación concreta del


interés cuya satisfacción se solicita del órgano
jurisdiccional es exclusiva facultad de las partes;
el actor por medio de la pretensión y el demandado a
través de la resistencia, marcan los límites del
objeto del juicio y el juez carece de potestades para
modificar algunos de sus elementos: las partes, la
causa de pedir o el objeto pedido. Así se dispone
también en el artículo 3 del PCPC.[15]. (…)”

2
Hunter Ampuero, Iván. (2010). El principio dispositivo y los poderes del juez. Revista de
derecho (Valparaíso), (35), 149-188. https://dx.doi.org/10.4067/S0718-68512010000200005
p. 155.
Por lo anterior agrega:

(…)Esta prohibición de ir más allá de los límites


impuestos por las partes también puede justificarse
desde el derecho de defensa. El juez no puede cambiar
los términos del debate ni decidir una cuestión que
no haya sido introducida previamente y sobre la cual
no se haya generado contradicción. En este sentido,
puede decirse que la contradicción es el límite y a
la vez lo que legitima la decisión
jurisdiccional. (…)”

(énfasis añadido)

Del anterior tratamiento doctrinal de la


normativa procesal citada, indica cuáles son los
parámetros donde comienza toda función jurisdiccional y
es necesario recordar que esta parte en caso alguno ha
solicitado pronunciamiento al tribunal de V.S., respecto
a la estabilidad del ejercicio de las acciones
(infraccional y civil), en orden a aclarar si es que las
mantiene, pues ello es potestad exclusiva y excluyente de
quien entabla tales solicitudes de pronunciamiento
jurisdiccional.

c) Ley de Organización y Atribuciones de los Juzgados


de Policía Local.

Como complemento a lo previamente señalado,


parece necesario ir a revisar si dentro del marco
normativo, se establece la potestad de ratificar o no una
acción civil en sede de policía local. V.S., como bien
recordará, se señala lo siguiente en la Ley 15231 que
conforma a los Juzgados de Policía Local y otorga
determinadas competencias para su funcionamiento, que
existen algunos preceptos legales que refieren a la acción
civil indemnizatoria, que conjuntamente se puede entablar
por la parte accionante en dicha sede jurisdiccional:

“(…)Artículo 18.o- En los casos de demanda, denuncia


o querella presentada por particulares, el Tribunal
la mandará poner en conocimiento del demandado,
denunciado o querellado y, teniendo presente lo
dispuesto en el artículo 19.o, fijará día y hora para
la celebración de un comparendo en una fecha lo más
próxima posible, al cual las partes deberán concurrir
personalmente o representadas por algunas de las
personas señaladas en el inciso primero del artículo
41 de la Ley Orgánica del Colegio de Abogados, con
sus testigos y demás medios de prueba, bajo
apercibimiento de proceder en rebeldía de la
inasistente (…)”

Artículo 19.o- El Juez será competente para conocer


de la acción civil.
Sin embargo, tratándose de las materias a que se
refiere el artículo 14, letra B, N.o 3, cuando el
procedimiento hubiere comenzado por querella o
denuncia, si la parte no notificare su demanda civil
con 48 horas de anticipación al comparendo de estilo
podrá solicitar en dicha, audiencia la reserva de la
acción para el tribunal ordinario que corresponda.
Efectuada la reserva, la parte que la hubiere
formulado no podrá deducir la acción civil hasta que
no se declare por el Juzgado de Policía Local la
culpabilidad de la persona a quien se pretenda demanda

De lo anterior se sigue que mediante la


petición del tribunal de “ratificar la acción civil” como
práctica jurisprudencial reiterada que ha ocurrido en las
audiencias de estilo que ha fijado el tribunal de V.S.,
genera sendas dudas acerca de si lo que realmente se está
solicitando a esta parte y por tanto, es necesario que el
tribunal pregunte nuevamente. Lo anterior reviste vital
importancia, porque implicaría en los hechos, que se
aplicaría igual significancia a la voz “reserva”, que
“ratificación”. Como V.S., podrá ver, al consultar ambos
términos “ratificar” (como verbo) y “reserva”, sus
acepciones en el diccionario de la Real Academia de la
Lengua Española señalan diversas interpretaciones:

“(…)Ratificar: Del latín ratus 'confirmado' y -ficar.


Aprobar o confirmar actos, palabras o escritos
dándolos por valederos y ciertos.(…)”

(énfasis añadido)

(Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española3)

Y luego, respecto del término siguiente:

“(…)Reservar: Del latín reservāre.

1. tr. Guardar algo para lo futuro.

3
https://dle.rae.es/ratificar
2. tr. Dilatar para otro tiempo lo que se podía
o se debía ejecutar o comunicar al presente. U.
t. c. prnl.

3. tr. Destinar un lugar o una cosa, de un modo


exclusivo, para uso o persona determinados.

4. tr. Exceptuar, dispensar de una ley común.

5. tr. Dicho de una persona: Separar o apartar a


lgo de lo que se distribuye, reteniéndolo para s
í o para entregarloa otro. U. t. c. prnl.

6. tr. Retener o no comunicar algo o el jercici


o o conocimiento de ello.

7. tr. Encubrir, ocultar, callar algo.

8. tr. En algunos juegos de naipes, conservar di


screcionalmente ciertas cartas que no hay obliga
ción de servir.

9. tr. Rel. Encubrir el Santísimo Sacramento, qu


e estaba manifiesto.

10. tr. Desus. Jubilar a alguien, especialmente


a los criados de la casa real y de personas prin
cipales.
11. prnl. Conservarse o irse deteniendo para mej
or ocasión.

12. prnl. Cautelarse, precaverse, guardarse, des


confiar de alguien.(…)”

(énfasis añadido)

(Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española4)

Como V.S., podrá apreciar, en caso alguno puede


entenderse bajo el sentido natural y obvio de las palabras
como regla interpretativa en materia legal (artículo 19
del Código Civil); que la ratificación que se ha

4
Ibíd.
solicitado en la audiencia, sea sinónimo de la reserva que
menciona la ley.

d) Código de procedimiento civil.

V.S., las previas leyes que hemos citado y


conforman el marco normativo en el cual las decisiones
judiciales en sede de Policía Local pueden tener asidero
bajo parámetros de un procedimiento racional y justo como
se menciona constitucionalmente, no nos entregan solución
alguna para respondernos a la pregunta respecto a cómo el
asunto sometido a consideración por esta parte, respecto
a la discrecional ratificación del poder, tuviere algún
fundamento. Ahora bien, desde el punto de vista procesal,
sigue siendo aplicable el Código de Procedimiento Civil,
pues como V.S., bien recordará:

“(…) Art. 3° Se aplicará el procedimiento ordinario


en todas las gestiones, trámites y actuaciones que
no estén sometidos a una regla especial diversa,
cualquiera que sea su naturaleza(…)”

Por ello, se hace imperioso recordar además lo


dispuesto en el artículo 261 del Código del ramo, que
señala cuándo realmente podemos estar frente a un pleito
constitucional y legamente tramitado. La respuesta viene
a entregarla el referido precepto, el cual indica:

“(…) Art. 261 (258). Notificada la demanda a


cualquiera de los demandados y antes de la
contestación, podrá el demandante hacer en ella las
ampliaciones o rectificaciones que estime
convenientes.
Estas modificaciones se considerarán como una
demanda nueva para los efectos de su notificación, y
sólo desde la fecha en que esta diligencia se
practique correrá el término para contestar la
primitiva demanda.(…)”

(énfasis añadido)

A lo recientemente señalado, debemos agregar


el hecho de que ya se ha notificado no sólo la acción
infraccional, sino también la demanda civil, entendiendo
entonces que existe una litis que ya se encuentra trabada
de acuerdo a las reglas comunes y que son aplicables
supletoriamente en el proceso de marras:

Por todas estas consideraciones, es que esta


parte viene en solicitar a V.S., se sirva aclarar el
contenido de la resolución de fecha 25 de noviembre de
2020,
POR TANTO, En conformidad a lo
expuesto y al mérito de la
normativa previamente citada,
junto con todo el resto de la
normativa constitucional y legal
aplicable,

SOLICITO A V.S., Se sirva tener por interpuesto fundado


recurso de aclaración, rectificación o enmienda respecto
de la resolución de fecha 25 de noviembre de 2020.

PRIMER OTROSÍ: En el improbable caso en que V.S., estimare


improcedente o impertinente lo solicitado en el cuerpo
principal del escrito, esta parte viene en interponer bajo
los mismos argumentos previamente expuestos, fundado
recurso de reposición con apelación en subsidio,
solicitando desde ya se dicte una resolución conforme a
derecho y en el sorprendente e improbable caso en que
V.S., no se sirviera de acceder a lo pedido, solicito se
eleven estos autos a la Ilustrísima Corte de Apelaciones,
a fin de que ella, conociendo de esta petición, dicte una
resolución que ponga fin a este agravio constitucional y
procesal, restableciendo el imperio del Derecho.

SEGUNDO OTROSÍ: En el improbable caso en que V.S.,


considerase inoportuno e improcedente ambas peticiones
previamente entabladas, esta parte viene en apelar
directamente de la sentencia que se pronuncie respecto a
las dos peticiones previamente expuestas en el presente
escrito, solicitando se eleven estos autos a la
Ilustrísima Corte de Apelaciones, a fin de que ella,
conociendo de esta petición, dicte una resolución que
ponga fin a este agravio constitucional y procesal,
restableciendo el imperio del Derecho

TERCER OTROSÍ: Sírvase V.S., tener presente, que delego


poder en la habilitada en derecho, doña ALEJANDRA DENISE
ALARCÓN MORA, chilena, soltera, cédula nacional de
identidad número 16.124.243-8; con idénticas facultades a
mí conferidas, con quien podré actuar conjunta o
separadamente y quien firma en señal de aceptación.-

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