LAS EMOCIONES

Qué son las emociones?

En el discurso cotidiano a menudo se escucha la palabra emoción, se dice que se
puede sentir emocionado, que Ana tenía una emoción fuerte, que Sergio estaba
emocionalmente mal ¿pero a ciencia cierta a qué se refieren con el término emoción?
Dar una definición de este vocablo no es fácil, cuando se consulta los diccionarios,
libros y páginas webs se puede encontrar con muchas definiciones. María Mejía dice
que “la palabra emoción proviene del latín motere (moverse)”. En este sentido, la
enciclopedia virtual wikipedia, dice que etimológicamente, el término emoción
significa ”el impulso que induce la acción”. Véase dos definiciones de emoción:

La emoción, es entonces, aquella tendencia que impulsa a actuar. Psicológicamente,

según la enciclopedia wikipedia, la emoción se define: “como aquel sentimiento o
percepción de los elementos y relaciones de la realidad o la imaginación, que se
expresa físicamente mediante alguna función fisiológica como reacciones faciales o
pulso cardíaco, e incluye reacciones de conducta como la agresividad, el llanto, la
alegría”

Daniel Goleman, en su libro “Inteligencia emocional”, expresa:

El término emoción se refiere a un sentimiento y a los pensamientos, los
estados biológicos, los estados psicológicos y el tipo de tendencias a la
acción que lo caracterizan. Existen centenares de emociones y muchísimas
más mezclas, variaciones, mutaciones y matices diferentes entre todas
ellas. En realidad, existen más sutilezas en la emoción que palabras para
describirías.
 Componentes de la emoción
Las emociones tienen tres componentes que son: La conducta, la fisiología y la
cognición, factores estos relacionados íntimamente con la psicología, el conocimiento
del ser. Está comprobado que en las emociones influyen los factores culturales, sociales
e interpersonales, factores que influyen notablemente en el comportamiento humano.

Las emociones relacionadas con la conducta conducen a

respuestas de patrones básicos emocionales tales como la
paralización, el escape, la aproximación o el ataque, ya que
la conducta emocional es una forma de comunicación.

En cuanto a los aspectos cognitivos de las emociones,

se puede decir que se presentan en este aspecto
situaciones de valoración, que son atribuciones y otras
formas de procesar la información del mundo que nos
rodea, las cuales son fundamentales para la experiencia
emocional.

Desde el campo de la fisiología, la emoción es una

función cerebral que asocia las áreas del cerebro más
primitivas. La conexión directa entre estas áreas y los ojos,
tal vez permita que el procesamiento emocional evite las
influencias de los procesos cognitivos superiores. Es así
como el tema está íntimamente relacionado con la
psicología.
 LA IMPORTANCIA DE LAS EMOCIONES
Las emociones son muy importantes para la sobrevivencia porque cumplen un papel
central en la gestión de procesos de autoprotección y autorregulación del organismo
frente a situaciones extremas. Estas funciones se pueden diferenciar de la siguiente

Preparación para la acción: las emociones actúan como

un nexo entre los estímulos recibidos del medio y las
respuestas del organismo. Las respuestas emocionales son
automáticas y por tanto no requieren ningún tipo de
raciocinio o de control consciente.

Delimitación del comportamiento futuro: las emociones

influyen en la asimilación de información que servirá para dar
respuestas en el futuro a hechos similares. Dichas
respuestas podrán ser de rechazo o de búsqueda de
repetición del estímulo.

Regulación de la interacción social: las emociones son

un espejo de nuestros sentimientos y su expresión permite a
los observadores hacerse a una idea de nuestro estado de
ánimo
 Clasificación de las emociones
Emociones primarias

Dice Walter Riso, que “las emociones primarias son

aquéllas con las que nacemos. Son naturales, no
aprendidas, son biológicas, y cumplen una función
adaptativa, son de corta duración y se agotan a sí
mismas. Solamente duran lo indispensable para
cumplir su misión”. Dentro de las emociones
primarias se puede clasificar: la ira, el miedo, la
alegría, el amor, la sorpresa, el disgusto, el interés y
la tristeza. Estas emociones son necesariamente
positivas puesto que aseguran la supervivencia y
facilitan la adaptación frente a los problemas de la
existencia. Riso explica que “si se reprimen
sistemáticamente y se interrumpen con frecuencia,
afectan gravemente la salud física y mental. Hay
que convivir con todas, integradas a nuestra vida y
aprender de su funcionamiento”.
Veamos la explicación que da Walter Riso de las emociones Primarias:

La ira: en la ira la sangre fluye hacia las manos para

facilitarle la fuerza para defenderse por medio de golpes, o
tomar un arma. El ritmo cardiaco también se eleva y se
liberan hormonas como la adrenalina que disponen el
cuerpo para la acción. “La ira se asocia con la furia, el
ultraje, resentimiento, cólera, indignación, fastidio,
hostilidad y en extremo, con la violencia y el odio
patológicos”.

El miedo: es una emoción que quiere proteger, avisa de

un posible peligro. Cuando no se controla se asocia con
emociones secundarias como la ansiedad, nerviosismo,
preocupación, inquietud, cautela y en un nivel profundo,
con fobia y pánico.

La alegría: se asocia con el placer, deleite, diversión,

placer sensual, gratificación, euforia, éxtasis y en extremo,
con manía.

El disgusto: según Darwin, “el gesto facial de disgusto

aparece como un intento por bloquear las fosas nasales en
caso de probar una sustancia desagradable o de que exista
necesidad de escupirla”.
La sorpresa: esta emoción permite estar alerta ante
los hechos imprevistos, y analizar mejor la situación de los
eventos. Pues como dice Medina, el “levantar las cejas en
expresión de novedad o sorpresa permite ampliar el
campo visual y que llegue más luz a la retina; esto ofrece
más información sobre el hecho inesperado, facilitando
cualquier análisis e ideando el mejor plan de acción”.

El amor: hace referencia a los sentimientos de ternura,

en el amor se activa el despertar parasimpático, el cual
activa un conjunto de reacciones en todo el organismo
que generan un estado general de calma y satisfacción,
facilitando la cooperación. “Se asocia con aceptación,
simpatía, confianza, amabilidad, afinidad, adoración y en
casos patológicos puede conducir a la extrema
dependencia”.

La tristeza: la tristeza es una emoción que cumple una

función adaptativa en caso de pérdidas significativas. La
tristeza desencadena una caída de la energía y el
entusiasmo por las actividades de la vida, sobre todo las
diversiones y los placeres; frena el metabolismo del
organismo e induce al aislamiento y recogimiento. Cuando
no se maneja bien la tristeza puede desembocar en
depresión.

Interés: esta emoción tiene como función ayudarnos a

captar los estímulos provenientes del medio para darles
una valoración.
 EMOCIONES SECUNDARIAS

Las emociones primarias son automáticas y cumplen una

función adaptativa y saludable dentro del organismo al
ayudarnos a reaccionar inmediatamente frente a un
estímulo. Cuando estas emociones no son procesadas
adecuadamente sufren una "mutación" y no son
superadas, quedando convertidas en emociones
secundarias. Las emociones secundarias tienen
componente cognitivo y emocional, son disfuncionales
(rencor, agresividad, ansiedad, depresión,
restricción-apego, etc.) son emociones primarias no
elaboradas. También explica Riso en su libro De regreso
a casa:

“que las emociones secundarias son aprendidas,

mentales, y aunque alguna de ellas, bien administradas,
pueden llegar a ser útiles, no parecen cumplir una
función biológica adaptativa. Son defensivas o
manifestaciones de un problema no resuelto, y casi
siempre implican debilitamiento del yo. A diferencia de
las primarias no se agotan a sí mismas y pueden
permanecer por años o toda la vida. Si las dejamos
actuar libremente y no las controlamos o eliminamos,
nos enfermamos “
Es así como cada emoción primaria se asocia a una emoción
secundaria:

- Ira en Rencor –violencia y odios patológicos–

- Miedo en Ansiedad –fobia y pánico–
- Amor en Dependencia
- Alegría en Manía
- Sorpresa en Ansiedad
- La Tristeza en Depresión
- Interés en Paranoia.

Conclusión

Como se ve, todos los seres humanos por naturaleza tenemos un grupo de
emociones básicas (primarias), las cuales nos acompañan a lo largo de todas
nuestra vida. Lo importantes en la vida es aprenderlas a identificar, y cuando
aparezcan, saberlas escuchar, entender el mensaje que nos quieren revelar.
Cuando nos hacemos los sordos a nuestras emociones primarias ellas pasan
sus límites, y se pueden convertir en emociones secundarias, las cuales son
dañinas y sólo nos quieren perjudicar.

La Clave, entonces, de la salud mental, está en saber reconocer nuestras

emociones, y saberlas autoregular.
Fuentes:

MESA Pablo Cesar, La Inteligencia Emocional. Santafé de Bogotá: Javier Vergara

Editor S.A., 1996. Fecha de Consulta: 3 de septiembre de 2008. Disponible en
Internet: http://www.monografias.com/trabajos7/coem/coem.shtml

RISO Walter, Sabiduría emocional, un reencuentro con las fuentes naturales del
bienestar y salud emocional (De Regreso a Casa), Editorial Norma, Bogotá 2004,
p.22.

BISQUERRA, R. (2003). Educación emocional y competencias básicas para la vida.

Revista de Investigación Educativa (RIE), 2|,1,7-43. Fecha de consulta,
Septiembre 2008. Disponible en Internet:
http://www.mediacioneducativa.com.ar/experien29.htm