Capitulo 1 y 2 Ulrich Beck
Capitulo 1 y 2 Ulrich Beck
Capitulo 1 y 2 Ulrich Beck
La Serena
Resumen Captulos 1 y 2
La Sociedad del Riesgo Global
Ulrich Beck
Por: Agnes Cuadra Corrales
Yohanna Garca Olivares
Pablo Gonzalez Vallejos
Para: Anlisis Sociolgico Contemporneo
Docente Pedro Romero
Mayo de 2014
CAPITULO 1: INTRODUCCIN
El manifiesto Cosmopolita
La premisa bsica es que la sociedad contempornea est sometida a un cambio
radical que plantea a un reto a la modernidad basada en la Ilustracin y abre un
mbito en el que las personas eligen formas sociales y polticas nuevas e inesperadas.
Los debates sociolgicos de los noventa han intentado captar y conceptualizar esa
reconfiguracin:
Posmodernidad = Bauman, Lyotard, Harvey, Haraway.
Modernidad Tarda = Giddens
Era Global = Albrow
Modernidad reflexiva= Beck, Giddens, Lash.
Nuevas formas de identidad= Melucci y socialidad (Maffesoli)
Relacin entre individualizacin y cultura poltica= Touraine
Constelacin posnacional= Habermas
Democracia cosmopolita= Held.
Antes de hablar de estas transformaciones, el autor distingue entre una primera y
segunda modernidad:
Primera Modernidad: Basada en las sociedades de estados-nacin. Las relaciones,
redes sociales y comunidades son entendidas en el marco de la territorialidad.
Segunda Modernidad: Las pautas colectivas de vida, progreso, controlabilidad, pleno
empleo y explotacin de la naturaleza (cuestiones tpicas de la primera modernidad),
se han quebrantado dando paso en esta etapa a 5 procesos interrelacionados: La
globalizacin, individualizacin. La revolucin de los gneros, el subempleo, y los
riesgos globales (crisis ecolgica, colapso de mercados financieros globales)
Paradjicamente, el desafo de esta segunda modernidad es que la sociedad debe
responder simultneamente a todos estos retos.
Se considera que estos procesos son consecuencias imprevistas del triunfo de la
primera modernidad (simple, lineal e industrial, basada en el estado nacin) Tema
estudiado por la sociologa clsica: Durkheim, Weber, Marx, Parsons, Luhmann.
Se desecha la idea de controlabilidad, seguridad o certidumbre caracterstica en la
primera modernidad.
Sociolgica y polticamente es necesario un cambio de paradigma, un nuevo marco de
referencia, pues existe un nuevo tipo de capitalismo, un nuevo tipo de economa, de
orden social, una nueva sociedad, por lo tanto una nueva cotidianidad. De ah la
concepcin de segunda modernidad y no post modernidad, ya que todos estos cambios
difieren de las fases anteriores del desarrollo social. Nace una modernizacin reflexiva
como lo denomina.
Esta modernizacin reflexiva no se enfoca solamente a la decadencia del modelo
occidental, sino como ese modelo se relaciona con las diferentes modernidades de
otras partes del mundo.
En la sociedad del riesgo global tanto sociedades occidentales como no occidentales
comparten los mismos retos de la segunda modernidad antes descritos. Superando el
sesgo evolutivo que afecta a la ciencia social occidental. Sesgo que caracteriza a las
sociedades no occidentales como pre-modernas (con ausencia de modernidad). Por lo
tanto situar el mundo no occidental en el mbito de la segunda modernidad permite
una pluralizacin de la modernidad, abriendo un espacio para estas mltiples
modernidades.
Invirtiendo el dictamen de Marx (manifiesto comunista), el autor plantea que muchas
partes del Tercer Mundo muestran a Europa la imagen de su propio futuro. Las
caractersticas positivas se describen: Desarrollo de sociedades multireligiosas,
multitnicas, y multiculturales, los modelos interculturales y la tolerancia de la
diferencia cultural, el pluralismo legal y la multiplicacin de las soberanas. El aspecto
negativo; La extensin del sector informal de la economa, la flexibilizacin del trabajo,
desregulacin legal de grandes sectores de la economa y de las relaciones laborales,
la perdida de legitimidad del estado, crecimiento del desempleo y subempleo, la
intervencin ms enrgica de las corporaciones multinacionales y los elevados ndices
de violencia y crimen cotidianos. Por todo esto es necesario este nuevo marco de
referencia que permita entender la dinmica y las contradicciones de la segunda
modernidad, un mundo de peligros y riesgos.
Una definicin de riesgo: Es el enfoque moderno de la previsin y control de las
consecuencias futuras de la accin humana, las diversas consecuencias no deseadas de
la modernizacin radicalizada. Es un intento institucionalizado de establecer el futuro
(un mapa cognitivo).
La sociedad de riesgo es global, no nacional, est relacionado con el proceso
administrativo y tcnico de decisin: anteriormente las decisiones se tomaban con
normas fijas de clculo, ligando medios y fines o causas y efectos. La sociedad del
riesgo global invalida estas normas. (Un claro ejemplo; las masivas compaas de
seguros)
El concepto de riesgo y sociedad de riesgo combina lo que en tiempos era
mutuamente excluyente: Sociedad y naturaleza, Construccin discursiva del riesgo
(Ciencias Sociales) y materialidad de las amenazas (Ciencias naturales).
Frente a una postura que ha guiado a los socilogos: No existe nada ms que
sociedad, La sociedad del riesgo global rompe con esta autosuficiencia y
autorreferencia. Sostiene que existen simultneamente la inmaterialidad (definiciones
del riesgo) y la materialidad del riesgo (riesgo fabricado en industrias). Por esto el
riesgo requiere de un enfoque interdisciplinar.
Relacin entre sociedad de riesgo y poltica: Los riesgos se han convertido en una de
las principales fuerzas de movilizacin poltica, (superando incluso las desigualdades
como fuerza movilizadora). Por tanto, existe un nuevo juego de poder del riesgo: En
una sociedad de incertidumbres fabricadas, Quin define los riesgos de un producto,
una tecnologa y con qu criterios? En la sociedad de riesgo reas de intervencin y
accin poltica que aparentemente carecen de importancia estn cobrando
extraordinaria relevancia, y los cambios menores si inducen transformaciones bsicas
a largo plazo en el juego de poder de la poltica del riesgo.
El marco de la sociedad del riesgo vuelve a conectar reas que haban sido
estrictamente discretas: El problema de la naturaleza, la democratizacin de la
democracia, el papel futuro del estado. El debate poltico por tanto se centra en la
decadencia del poder, y la legitimidad del gobierno y la necesidad de renovar la
cultura de la democracia.
La nueva preminencia del riesgo vincula por un lado la autonoma individual y la
inseguridad en el mercado laboral y en la relacin de gnero y por otro la arrolladora
influencia del cambio cientfico y tecnolgico. Se abre el debate pblico y la ciencia
social a los retos de la crisis ecolgica.
En la era global el riesgo une mbitos de la nueva poltica transnacional con la cuestin
de la democracia cosmopolita: Con la nueva economa poltica de la incertidumbre, los
mercados financieros, los conflictos transculturales por los alimentos y otros
productos (crisis de las vacas locas), las comunidades de riesgo emergente y la
anarqua de las relaciones internacionales.
Un punto importante; La globalidad del riesgo no significa una igualdad global del
riesgo, sino todo lo contrario: La primera ley de los riesgos medioambientales: la
contaminacin sigue al pobre. En la ltima poca se ha agudizado en todas partes,
ms personas viven sin saneamientos bsicos, acrecen de agua potable, viviendas, etc.
Aumenta la desnutricin, no por falta de alimentos sino por la creciente
marginalizacin y exclusin de los pobres.
No solo aumenta la brecha entre ricos y pobres, sino que adems aumenta el nmero
de personas que cae en la pobreza. Las polticas de libre mercado impuestas por
Occidente a pases endeudados empeora la situacin. Las naciones pobres ahora
gastan ms dinero en saldar esta deuda que en preocuparse de la sanidad y educacin
de su propio pas. En definitiva, la ideologa del libre mercado ha aumentado la suma
de miseria humana: El consumo est prcticamente fuera de control en los pases ms
ricos
1
El riesgo y la responsabilidad estn intrnsecamente relacionados, como tambin el
concepto de confianza y seguridad, a la pregunta a quin puede atribuirse la
responsabilidad? Este es uno de los principales puntos de los conflictos politos de
nuestra poca. Se cree que el riesgo induce control, es decir entre mayor riesgo, mayor
la necesidad de controlabilidad. Sin embargo pasa lo contrario, pues en la sociedad del
riesgo global existe una controlabilidad limitada de los peligros que nos hemos
creado. La cuestin es, como tomar decisiones en condiciones de incertidumbre
fabricada, cuando no solo es incompleta la base de conocimiento sino que el disponer
de ms y mejor conocimiento frecuentemente supone ms incertidumbre.
El riesgo del mercado global es una nueva forma de irresponsabilidad organizada
porque es una forma institucional impersonal hasta el punto de carecer de polticos
controla el riesgo del mercado global. Como no hay un gobierno global, el riesgo del
mercado global no puede regularse como el de los otros mercados nacionales.
Uno de los problemas de esta nueva poltica econmica liberal global es que son
demasiado pocos los polticos de la economa internacional que han estado en
desacuerdo en que el mundo es cada vez ms democrtico.
El riesgo de conflicto entre naciones crece; el libre mercado global se est
derrumbando y la ideologa global del libre mercado se est colapsando. En todo el
mundo se apunta hacia una nueva poltica: Se est reinventando el proteccionismo,
nuevas instituciones transnacionales para controlar el flujo financiero global; lo
principal que la ideologa del libre mercado es sustituido por una politizacin de la
economa global del mercado.
En definitiva: en la sociedad del riesgo financiero global como en la sociedad del
riesgo ecolgico global:
Existe una interrelacin entre dos conflictos: la distribucin de bienes y la
distribucin de males.
1
Segn la ONU, se ha sextuplicado en menos de veinticinco aos. El 20% ms rico de la poblacin consume
aproximadamente 6 veces ms comida, energa, agua, transporte, petrleo y minerales que sus padres.
Los fundamentos del clculo del riesgo se ha quebrantado, no tiene sentido
asegurarse frente a una recesin global.
La explosividad social de los riesgos financieros globales se hace real:
desencadena una dinmica de cambios culturales y polticos que socava las
burocracias, desafa el dominio de la economa clsica y del neoliberalismo y
redibuja las fronteras y frentes de batalla de la poltica contempornea.
La institucin del estado nacin se colapsa,
El riesgo implica siempre el tema de la responsabilidad, la necesidad de
globalizacin responsable es fundamental.
Surgen nuevas opciones: proteccionismo nacional y regional, instituciones
transnacionales y democratizacin.
La tica de la autorrealizacin y logro individual es la corriente ms poderosa de la
sociedad occidental moderna. Esta generacin de yoicos ha sido muy criticada, sin
embargo el autor lo caracteriza como un individualismo moral y poltico en un sentido
nuevo. Los hijos de la libertad tienen sentimientos ms apasionados y morales que los
de antao en una amplia gama de situaciones (Ej: en el trato del medio ambiente, los
animales, el gnero, los derechos, etc.)
Si bien el nuevo cosmopolitanismo sita a la globalidad en el ncleo de todo, es sabido
que cualquier intento de cohesin social debe reconocer la individualizacin, la
diversidad y el esceptisismo como parte de nuestra cultura.
Distinguiendo el concepto individualizacin, del individualismo y la individuacin,
podramos decir que es un concepto estructural relacionado con el estado de
bienestar, es decir individualismo institucionalizado. Se propone el empleo y la
educacin como motor de movilidad, a travs de esto se invita a las personas a
constituirse como individuos; a planear, a entenderse como individuos.
Paradjicamente la individualizacin implica un estilo colectivo de vida.
Somos una sociedad del primero yo? Uno podra pensar que si considerando; la
disolucin de la solidaridad, la decadencia de los valores, la cultura del narcisismo, el
hedonismo, etc. Es decir que la modernidad est socavando sus propios e
indispensables prerrequisitos morales. Segn el autor esta concepcin de la sociedad
es falsa: la moralidad y la libertad poltica nos son excluyentes sino mutuamente
incluyentes.
Qu es modernidad? Beck dice: No solo el capitalismo (Marx), la racionalizacin
(weber), la diferenciacin funcional (Parsons, Luhmann) sino tambin la dinmica de
la libertad poltica, la ciudadana y la sociedad civil. La modernidad lleva en su seno un
manantial de significado que es la libertad poltica. Desde este punto de vista significa
que un mundo de certidumbre tradicional est muriendo a la vez es sustituido por un
individualismo legalmente sancionado para todos.
En la primera modernidad el derecho a la libertad era resuelta recurriendo a aspectos
como la naturaleza del gnero, la etnicidad (ontologa de la diferencia). En la segunda
modernidad, la estructura de la comunidad, del grupo y de la identidad pierde su
cemento ontolgico. Luego de la democratizacin poltica y la democratizacin social
(estado de bienestar), una democratizacin cultural est transformando los
fundamentos de la familia, las relaciones de gnero, el amor, la sexualidad y la
intimidad. Esto desafa hasta las propias bases de la vida cotidiana, as como a la
poltica global.
Mientras que en el antiguo sistema de valores el yo siempre tena que subordinarse a
las pautas de lo colectivo, las nuevas orientaciones hacia el nosotros estn creando
algo as como un individualismo altruista. el pensar en uno mismo y el vivir para
otros
En cuanto al futuro, las personas se ven obligadas a considerarlo como una amenaza y
no un refugio. Entendamos como se desarrolla la economa poltica de la
incertidumbre:
Primero: El nuevo juego de poder entre actores polticos territorialmente fijos
(gobierno, parlamento, sindicatos) y actores econmicos no territoriales es el
elemento central. (Ej el capital es global, el trabajo es local). En todo el mundo el
trabajo frgil aumenta con rapidez (trabajo a tiempo parcial, por cuenta propia, etc.),
si esto continua, dentro de 10 o 15 aos cerca de la mitad de la poblacin activa de
occidente trabajara en condiciones de incertidumbre.
Segundo: Esto conlleva a elegir entre 2 opciones; La proteccin social del creciente
nmero de pobres a costa de un elevado desempleo (pases europeos), o aceptar la
pobreza para alcanzar un ndice de desempleo ligeramente inferior (EE.UU).
Tercero: Se vincula al fin de la sociedad del trabajo a medida que un nmero cada vez
mayor de seres humanos son sustituidos por las tecnologas inteligentes.
Cuarto: Se presenta un fenmeno efecto domino aquello que sola complementarse y
reforzarse mutuamente, tiende ahora a ponerse mutuamente en peligro.
Quinto: En todas partes se exige flexibilidad. En un ejemplo concreto un empleador
tiene que poder despedir a sus empleados con mayor facilidad. La flexibilidad implica
tambin una redistribucin de los riesgos transfirindolos del estado y la economa al
individuo. Cuanto ms se desregulan y se flexibilizan las relaciones laborales, ms se
convierte la sociedad del trabajo en una sociedad de riesgo que no es susceptible de
clculo por parte de los individuos o de la poltica.
Volviendo al tema anterior entonces Cmo puede una sociedad del riesgo global
alentar al mismo tiempo un sentimiento de pertenencia, confianza y cohesin?
La tesis de Beck dice que solo es posible recurriendo a la democratizacin cultural y la
libertad poltica. Cuando se logre esto hombres y mujeres que ya no teman usar su
libertad pueden encontrar el tiempo, la voluntad y el coraje de abordar los desafos de
la segunda modernidad. Con su centro en la libertad poltica la modernidad no implica
decadencia de valores, sino una poca de valores.
La globalizacin implica el debilitamiento de las estructuras del estado, de la
autonoma y de los poderes del estado. Esto es paradjico ya que son precisamente
los colapsos del estado los que han producido la mayora de los conflictos humanos.
Por otro lado la idea de responsabilidad global implica la posibilidad de un nuevo
humanismo militar occidental: imponer los derechos humanos en todo el mundo.
La democracia cosmopolita no deja de ser una utopa necesaria. El manifiesto
comunista se public hace 150 aos, el cual trataba el conflicto de clases. Hoy en los
comienzos de este milenio es necesario un Manifiesto Cosmopolita, este trata de un
conflicto transnacional nacional y de un dialogo de los mismos que es preciso
inaugurar y organizar. Y el objeto de este dialogo global son las metas, valores, y
estructuras de una sociedad cosmopolita. La posibilidad de la democracia en una era
global.
Quin planteara esta discusin? Los hijos de la libertad. La intervencin activa de los
ciudadanos se ha vuelto habitual y ha roto las convenciones pasadas sobre todo en los
segmentos jvenes y educados de la poblacin. Se acotan los espacios de pensamiento
moral responsable y se amplan los espacios de relaciones personales ms intensas.
Los jvenes se movilizan por cuestiones que la poltica nacional excluye en gran
medida. Sin embargo los hijos de la libertad practican un alejamiento de la poltica
sumamente poltico.
Lo clave del Manifiesto Cosmopolita es que existe una nueva dialctica de cuestiones
globales y locales que no tiene cabida en la poltica nacional (cuestiones glocales).
Estn de a poco van formando parte del debate de la agenda poltica, pero solo se
pueden plantear o debatir adecuadamente en un marco transnacional. Es necesario
por lo tanto una reinvencin de la poltica, una revisin del nuevo sujeto poltico
(partidos cosmopolitas).
Aqu se exige una comprensin de que las principales preocupaciones humanas son
problemas mundiales. Las expresiones de una poltica cosmopolita ya se estn
desarrollando dentro del marco de los estados nacionales, esto crea oportunidades
para movimientos y partidos cosmopolitas, que aunque en un principio solo movilicen
minoras, tiene como base de su poder la apertura del mbito transnacional. Una tarea
difcil, y ms an para pases ms divergentes culturalmente.
Beck plantea que las comunidades no territoriales organizadas deben entenderse
como socio-paisajes. El compartir riesgos o la socializacin de los riesgos puede
convertirse en una poderosa base de la comunidad, una base con aspectos
territoriales y no territoriales.
En este captulo se ha catalogado el fenmeno del riesgo de manera negativa, sin
embargo puede ser un fenmeno positivo cuando implica el compartir riesgos sin
fronteras. El compartir riesgos implica responsabilidades.
Existe una estructura bsica de poder dentro de la sociedad mundial del riesgo que
divide a quienes producen y se benefician de los riesgos y a quienes se ven afectados
por estos mismos.
Las comunidades no territoriales de riesgo compartido son difciles de desarrollar,
pero pueden esbozarse algunos modelos, por ejemplo en tratados ecolgicos, en
organizaciones no gubernamentales, movimientos globales como las redes ecolgicas
o feministas. Estos movimientos forman un partido mundial en tres sentidos:
1. Sus valores y objetivos no tienen un fundamento nacional sino cosmopolita:
apelan a valores y tradiciones humanos en toda cultura y religin (libertad,
diversidad, tolerancia)
2. Son partidos mundiales porque sitan la globalidad en el ncleo de la
imaginacin, la accin y las organizaciones pblicas.
3. Solo son partidos mundiales en el sentido de que solo son posibles como
partidos multinacionales, as al interactuar mutuamente en los diversos
mbitos de la sociedad mundial luchen por producir valores, reciprocidades e
instituciones transnacionales.
CAPITULO 2 SOCIEDAD DEL RIESGO GLOBAL COMO SOCIEDAD COSMOPOLITA?
Cuestiones Ecolgicas en un marco de incertidumbres fabricadas
La Sociedad del Riesgo, pensada de manera Global, tiene como centro los peligros
producidos por la civilizacin. Implica una Sociedad que ha anulado las bases de la
primera modernidad o modernidad industrial, y se encuentra en un trnsito hacia una
nueva modernidad sin delimitacin de tiempo ni espacio.
Para establecer un anlisis de los problemas ecolgicos sobre los que se quiere
reflexionar, BECK, propone un marco que conceptualiza a estos como el mundo
interior de la sociedad, y no como problemas del medio ambiente o del mundo que
nos rodea. Teniendo como principio axial las incertidumbres fabricadas dentro de
nuestra civilizacin: riesgo, peligro, efectos colaterales, asegurabilidad,
individualizacin y globalizacin.
El anlisis del autor sobre estas cuestiones, favorece la autocomprensin de la
sociedad del riesgo global, la que se hace reflexiva en tres sentidos:
-la sociedad se convierte en una cuestin y problema por s misma, lo que
perfila aparentemente una esfera pblica global.
-la globalidad de una civilizacin que se pone en peligro as misma impulsa el
desarrollo de instituciones internacionales cooperativas.
-los lmites de lo poltico, empiezan a eliminarse,
Resumiendo, se podra afirmar que la Sociedad Cosmopolita Kantiana, la idea de que
todos los seres humanos pertenecen a una misma colectividad (sea moral y/o
poltica) podra cobrar forma en la necesidad percibida de una sociedad de riesgo
global.
ELEMENTOS DE UNA TEORA DE LA SOCIEDAD DEL RIESGO GLOBAL
Indeterminacin de los conceptos de naturaleza y ecologa
El que los efectos colaterales de la produccin industrial estn poniendo en riesgo los
requisitos bsicos de la vida, pudiendo desencadenar un colapso en los mercados, una
falta de confianza en la poltica y el capital econmico, desde la perspectiva de Beck, es
un xito, que evidencia lo vago del concepto de Ecologa y falta de direccin en la
preservacin de los recursos naturales.
A su vez, se hace imprescindible entender que el empleo de la palabra naturaleza
refiere siempre a un modelo cultural, por ende, la propia naturaleza no es naturaleza
sino un concepto, una norma, un plan alternativo, e incluso una utopa. En el debate
Ecologista, los intentos por utilizar la naturaleza, como bandera contra su propia
destruccin se basan en una falacia naturalista, es decir, la naturaleza invocada ya no
existe. Lo que existe son conceptos culturales de naturaleza, por ende, diferentes
formas de concebirla, poniendo en conflicto a los expertos, las frmulas y los peligros
que conllevan.
Con todo, la naturaleza en s es incapaz de constituir una herramienta analtica para
la crisis ecolgica y criticar al sistema. Quien da luces al respecto es la ciencia de la
naturaleza, al entregar herramientas tcnicas que indican si el nivel de dao y
destruccin son tolerables, pero ignora las percepciones culturales o grados en que se
presentan los mismos peligros para diversas naciones y genera modelos de desarrollo
que obvian la conservacin natural.
Otra perspectiva, es la ciencia de la cultura, donde la urgencia de la crisis ecolgica
vara de acuerdo a las percepciones y evaluaciones intra e interculturales. Parece que
los peligros no existen en s mismos sino que se convierten en una cuestin poltica
cuando la gente es consciente de ellos. Son constructos sociales, que se definen,
ocultan o dramatizan estratgicamente en la esfera pblica con la ayuda de material
cientfico suministrado para ello.
Por ejemplo, en 1982, Douglas y Wildavsky, sealaron que no haba ninguna
diferencia sustantiva entre los peligros que se presentaban en la historia temprana y
los de la civilizacin actual, exceptuando la variacin en la percepcin cultural.
Afirmacin errada, que ignora la definicin social del riesgo o peligro. Adems de la
capacidad de aniquilacin nuclear y ecolgica de la sociedad actual; y la diferente
dinmica poltica de los peligros de autodestruccin fabricados por el ser humano.
EL DEBATE REALISMO CONSTRUCTIVISMO
El punto de partida de la teora de la sociedad de riesgo global radica en la
justificacin de este concepto, que tiene una respuesta realista y una constructivista.
La perspectiva realista, indica que las consecuencias y peligros de la produccin
industrial ahora son globales. La dinmica de conflicto de la sociedad es el desarrollo
de fuerzas productivas y destructivas, que se expresa en grandes desastres (como
Chernobil), en el conocimiento que tiene cualquiera de las malas condiciones, a nivel
mundial, del aire, agua, suelo, plantas y alimentos. La sociedad del riesgo global surge
como resultado de la forzada relacin global para hacer frente a los peligros
producidos por la civilizacin. Frente a ellos, las instituciones transnacionales
constituyen el nuevo Estado del mundo.
Desde la visin histrica del realismo, se define la sociedad en funcin de dos
momentos o etapas: Una donde la importancia primordial eran las cuestiones de clase,
otra las cuestiones ecolgicas. Sin embargo, sostiene el autor, que las crisis ecolgicas,
econmica y del mercado laboral se agravan mutuamente.
La perspectiva adems, olvida el hecho de que el realismo es conciencia colectiva
sedimentada, fragmentada e inducida por los medios de comunicacin. No es objetivo,
por lo qu, las imgenes y smbolos ecolgicos no tienen una certidumbre intrnseca,
sino son percibidos, mediatizados y construidos culturalmente. Con todo, la potencia
definitoria del realismo descansa al excluir ciertos elementos que estn ms a favor de
la perspectiva constructivista.
La perspectiva constructivista, tiene como primer elemento diferenciador el que no se
basa en una globalidad cientficamente diagnosticada de los problemas, sino en
coaliciones de discurso transnacionales, que plantean dentro del espacio pblico las
cuestiones de una agenda internacional global.
En la dcada actual, estas coaliciones han empezado a transformar el paisaje temtico
en torno a los problemas del planeta, requiriendo una institucionalizacin del
movimiento ecologista y la construccin de redes de actores transnacionales
2
los que
se ven continuamente enfrentados a poderosas contracoaliciones.
Las mismas (contra) argumentan que:
-el conocimiento profano y experto dista de tener claridad de los peligros
globales.
-la misma definicin global de los problemas, es de corte neoimperialista, en el
sentido de que los estados occidentales se aseguran el liderazgo del conocimiento con
respecto a los pases tercermundistas, y que encubren su responsabilidad bsica en
las amenazas mundiales
-la definicin global de las cuestiones ecolgicas, a modo de gestin mundial,
no conduce a la conservacin de la naturaleza
2
Como Greenpeace, WWF, ministerios de medioambiente, legislaciones que intentan
abordar la gestin global de los problemas ecolgicos.
Si bien, ambos enfoques son contradictorios en mtodos y supuestos bsicos, a su
forma cada uno, acenta la idea de sociedad de riesgo global. El realista enfatiza la
sociedad de riesgo global y el constructivista la sociedad de riesgo global.
En la perspectiva constructivista, los actores transnacionales ya tienen que haber
logrado que se acepte su poltica discursiva, de manera que la globalidad de cuestiones
ambientales sea decisiva para las percepciones y exigencias de acciones sociales. Para la
realista esa globalidad se basa nicamente en la auto-autoridad evidente de los peligros
objetivos.
Perspectivas
Ideas centrales
Realismo
Constructivismo
Problemtica Ecolgica Cerrada Mantiene su apertura
Centro de atencin de la
sociedad de riesgo global
Peligros o escenarios de
desastre total
Oportunidades de los
contextos en los que
actan los actores
Los peligros globales
deben
Dar lugar a instituciones y
tratados transnacionales
Suponer coaliciones
transnacionales de
discurso comprometidas
en una accin con xito
(Resumen enfoques de la sociedad de riesgo global)
Slo en la medida que se suponga que realismo y constructivismo interactan
ingenuamente, podrn proporcionar desde sus perspectivas, una visin incluyente de
la sociedad de riesgo global y sus modos de explicarla.
Cmo se construye socialmente-y se reconstruye sociolgicamente- la distincin
naturaleza-sociedad?
Algunos programas de investigacin y la sociologa buscan superar la dualidad
Sociedad-Naturaleza, al mismo tiempo que se encuentra en boga la redefinicin y
reconceptualizacin del sentido de relaciones sociales simblicamente mediadas por
la naturaleza.
Desde un contexto de investigacin cientfica, Bruno LATOUR y Donna HARAWAY, han
propuesto la sociologa de los artefactos o de los hbridos. El elemento distintivo de
esta teora es que considera actantes
3
tanto a humanos, como a objetos ("no-
3
El trmino actante es utilizado como una forma neutral de referir a actores tanto
humanos como no-humanos, ya que sus principales autores han considerado que la
palabra actor tiene una carga simblica ligada al "ser personas".
humanos), y discursos. Seala la importancia de lo tecnolgico en la explicacin del
mundo, tratndolo de una manera equivalente a la manera en que se trata lo social.
Segn LATOUR, las personas y las mquinas debern ser tratadas como iguales para
hacer estudios sociales (principio de simetra), es decir que considera un error
plantearse explicaciones que hacen referencia a dualismos como naturaleza-sociedad
o lo humano de lo no-humano. Son elementos indisociables y podran, ms aun,
deberan ser descritos en los mismos trminos.
En el mbito de investigaciones de gnero, a travs de la eco-sociologa feminista y
algunos otros intentos, se ha avanzado en esta dicotoma, asumiendo una relacin
especial entre la mujer y la naturaleza. Reemplazando el concepto de normal por el
de especial. El primero responde a la relacin hombre-naturaleza o dominio tcnico
industrial por sobre la naturaleza, impuesta por el patriarcado, que paralelamente
sera el dominio de los hombres sobre las mujeres.
La eco-sociologa feminista se desarrolla en trminos esencialistas (o realistas),
constructivistas y como una combinacin de ambos. En cualquier caso, las mujeres,
basndose en su experiencia de maternidad, son quienes tienen una relacin ms
cercana con la naturaleza.
-Desde una perspectiva esencialista, esta relacin se interpreta de manera simblica o
espiritualista, considerando que hay muchos momentos en la vida de una mujer en
los que adquiere conocimiento vivencial, en una poderosa relacin cuerpo/mente, de
las verdades holsticas de la espiritualidad. (Charlene SPRETNAK)
-KING, asume que la proximidad de las mujeres a la naturaleza es un constructo social.
Las mujeres feministas tienen tres alternativas: se pueden integrar el mundo de los
hombres, cortando el lazo naturaleza-cultura; pueden fortalecer ese lazo; o pueden
elegir conscientemente no cortar el nexo mujer-naturaleza al unirse al mundo de la
cultura masculina.
Explica ADAM. El tiempo natural est implicado en el ser y devenir del conocimiento
humano, constituye nuestro horizonte temporal y una parte integrante de la
organizacin social y de la regulacin de la actividad cultural. Como mquina
exteriorizada el tiempo est vinculado a la produccin industrial, al papel del
intercambio abstracto del valor y al control social.
El reconocernos como quienes hemos desarrollado, quienes somos y quienes creamos
los tiempos de la naturaleza (tiempo social), permite que los aspectos construidos y
simbolizados se conviertan en una expresin ms entre otras. Los significados y
dimensiones del tiempo natural y social vinculan las perspectivas realista y
constructivista de forma sumamente reflexiva.
Desde la teora del capitalismo tardo, se ha identificado lo que denominan crisis
social en la relacin con la naturaleza. Aunque manifestndose en contra de las vas
muertas del naturalismo y del socio centrismo, intentan combinar los logros de
ambos, con la idea de que por s solos estos no responden al ncleo de la crisis
ecolgica.
Por paradjico que resulte, el contenido naturalista esencialista presente al hablar de
sobre la destruccin de la naturaleza se transforma en una teora de los actores y las
instituciones referida a la accin. En el centro de la cuestin se encuentran ahora
coaliciones de discursos que crean, disean y modifican los mapas cognitivos (o
las formas en cmo se construye) en torno a la crisis ecolgica. De esta forma la
realidad se convierte en el proyecto y el producto de la accin.
La produccin discursiva, puede enfatizar en dos aspectos: el carcter cognoscitivo,
referido a la construccin de conocimiento; o sobre la accin, es decir, sobre la
transformacin o configuracin de las realidades. Las construcciones de realidad
pueden distinguirse segn su mayor o menor contenido de realidad. Cuanto ms se
acerquen a la institucionalizacin de prcticas sociales, ms poderosas son; y tanto
ms cercanas a la accin, ms reales parecen.
El esencialismo, iluminado por la sociologa del conocimiento, se transforma en una
especie de institucionalismo estratgico, orientado al poder y a la accin. En una
civilizacin que lo disuelve todo en decisiones, la realidad en s se deriva de poderosas
estructuras de accin en las que se realizan o redibujan los mapas cognoscitivos.
La forma tan directa en que se habla de la naturaleza y su destruccin, puede indicar
una estrategia paradjica, que destruye la impresin de que este discurso ha sido
construido, producindose una apariencia de realidad en s.
HAJER se refiere a estas cuestiones en lo concerniente a la posibilidad de las
construcciones por ende de-construidas- realmente reales de la realidad social.
Pero en diversos estudios comparativos internacionales, expone e ilustra toda una
serie de estrategias discursivas (polticas) para producir verdades autoevidentes, que
permiten crear una idea de integrabilidad.
En palabras de BECK, la crisis ecolgica es, pues, un discurso de auto confrontacin que
exige una reconsideracin de las prcticas institucionales que lo han producido.
Riesgos inasegurables
Teniendo en cuenta la superacin del dualismo sociedad-naturaleza, la teora de la
sociedad del riesgo global se concreta an ms a travs de la siguiente pregunta,
Cmo podemos manejar la naturaleza despus de su fin? La respuesta es el
constructivismo institucional.
La produccin y definicin material y simblica de naturaleza y la destruccin de la
naturaleza se correlaciona con la capacidad institucional de actuar y modelar. Se
refieren entonces a coaliciones de discurso dentro y entre redes de accin bastante
diferentes y de alcance mundial. El desafo para futuras investigaciones sera
examinar cmo se producen, suprimen e integran estas construcciones en las
instituciones y los conflictos entre actores cognitivos.
La teora de la sociedad de riesgo global se plantea una siguiente interrogante Cmo
aborda la sociedad moderna las incertidumbres fabricadas autogeneradas? Para
responder a ello, es necesario distinguir entre los riesgos que dependen de decisiones
y que pueden ser controlables, de los peligros que han escapado del control de la
sociedad industrial. Este proceso puede adoptar dos formas.
En primer lugar, la inexistencia del indicador de riesgo cero, considerando que las
normas e instituciones dentro de la sociedad industrial pueden fallar. Las industrias y
tecnologas controvertidas
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son aquellas que no cuentan con un seguro privado y
adems tampoco pueden acceder a l, porque sus peligros plantean demasiados
problemas Qu aseguradora querra cubrir el desastre de una amenaza nuclear? Por
ello se afirma que la sociedad del riesgo global, avanza haciendo equilibrios ms all
de los lmites de la asegurabilidad.
En segundo lugar, el modelo de decisiones de la sociedad industrial y la globalidad de
sus consecuencias, agregadas vara entre dos pocas diferenciadas.
En la medida en que las decisiones ligadas a la dinmica cientfica, tcnico-econmica
siguen organizndose en el nivel del estado-nacin y la empresa individual, las
amenazas resultantes nos convierten a todos en miembros de la sociedad del riesgo
global. Poniendo trmino a la figura del estado-nacin con la aparicin en el discurso
ecolgico.
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Por ejemplo, energa atmica, ingeniera gentica e incluso sectores de alto riesgo de produccin qumica.
Las normas establecidas de atribucin y responsabilidad se derrumban. Esto significa
que aplicarlas a pesar de todo en la administracin, le gestin y la terminologa
producen un resultado opuesto: los peligros aumentan debido a que se hacen
annimos. Las antiguas rutinas de decisin, control y produccin causan la
destruccin de la naturaleza, en otras palabras, no se trata de la ruptura de las normas
por s misma, sino que las normas normalizan la destruccin de la naturaleza.
Existe una irresponsabilidad organizada, en la que el estado, la poltica, la gestin
industrial y la investigacin negocian los criterios que determinan lo que ha de
considerarse como racional y seguro.
De esta forma, la teora de la sociedad de riesgo global sustituye el discurso sobre la
destruccin de la naturaleza, por la siguiente idea clave: La conversin de los efectos
colaterales invisibles en la produccin industrial en conflictos ecolgicos globales
crticos, no es un problema del mundo que nos rodea, sino una profunda crisis
institucional de la primera fase (nacional) de la modernidad industrial. (MODERNIDAD
REFLEXIVA)
La sociedad de riesgo global, como figura conceptual abre la posibilidad de redefinir
reflexivamente el modelo de modernidad occidental.
Una tipologa de amenazas globales
Aplicando esta teora pueden distinguirse tres tipos de amenazas globales:
-Existen conflictos sobre qu puede dominarse males, es decir, destruccin ecolgica
y peligros tecnolgicos industriales motivados por la riqueza.
-Otra categora comprende los riesgos que estn directamente relacionados con la
pobreza.
-La tercera amenaza son las armas de destruccin masiva (NBC)
LA APARICIN DE UNA OPININ PBLICA MUNDIAL Y DE UNA SUBPOLTICA
GLOBAL
El concepto de subpoltica
Cuando se habla de una sociedad de riesgo global, es necesario decir que las amenazas
motivan a la gente a actuar. Por lo que entran a discusin dos perspectivas (mbitos o
actores); la primera es la globalizacin desde arriba, un ejemplo de esto son los
tratados e instituciones internacionales. Y la segunda es la globalizacin desde abajo,
que vendran a ser por ejemplo actores transnacionales que operan al margen del
sistema de poltica parlamentaria, y desafan las organizaciones polticas. Existen
importantes manifestaciones de ambos tipos de globalizacin.
Richard Falk identifica cierto nmero de mbitos polticos en los que la globalizacin
desde arriba se negocia e impulsa: la respuesta a las amenazas de reservas
estratgicas de petrleo en Medio Oriente (), la aplicacin coercitiva del rgimen de
no proliferacin nuclear, (). Las implicaciones legales de la globalizacin desde
arriba tenderan a suplantar el derecho interestatal por una especie de derecho global,
derecho que, sin embargo, esta en conflicto en la mayora de sus aspectos con el
derecho de humanidad (Falk, 1994)
Los diversos movimientos de boicoteo han evidenciado que la importancia de la
poltica para tratar con el bloque industrial es una impotencia referida al escenario
clsico, dado que han aparecido en escena poderosos actores de una globalizacin
desde abajo, en especial organizaciones no gubernamentales. La ONU calcula
alrededor de cincuenta mil grupos de este tipo en el mundo; dato no muy revelador
dado que casi todos los grupos son distintos entre ellos.
La Nueva Internacional ocupa un terreno entre el mercado y el Estado pero que,
como tercera fuerza, obtiene cada vez ms influencia y exhibe su potencia poltica
respecto a gobiernos, corporaciones internacionales y autoridades. Aqu vemos lo que
llaman ciudadana global o la nueva constelacin de un subpoltica global.
En la modernidad industrial el sentido comn est tomando la mentalidad de todo
bajo control, sin embargo, el cumplimiento de esta forma de control y orden produce
lo contrario: el regreso de la incertidumbre y la inseguridad. Es donde se presentan
los peligros de segundo orden. Una forma no intencionada, de efectos colaterales de
los peligros globales, en donde la sociedad se abre a lo subpoltico.
La modernizacin reflexiva es en teora, la aplicacin a s misma; empricamente,
autotransformacin; polticamente, prdida de legitimidad y un vaco de poder. Por
otra parte Thomas Hobbes, el terico del Estado, defendi la idea de un Estado fuerte
y autoritario, pero tambin mencion el derecho individual de resistencia civil. Si un
Estado produce condiciones que amenazan la vida, o si exige a un ciudadano
abstraerse de cualquier cosa sin la cual no pueda vivir, entonces ese hombre tiene la
libertad de desobedecer (Hobbes, 1968)
Los peligros que se estn produciendo en la industria, son exteriorizados por la
economa, individualizados por el sistema legal, legitimados por las ciencias naturales
y presentadas como inofensivos por la poltica. El que esto est desmoronando el
poder y la credibilidad de las instituciones solo se evidencia cuando se pone en apuros
el sistema. El resultado es la subpolitizacin de la sociedad mundial. Un ejemplo es
Greenpeace.
El concepto de subpoltica se refiere a la poltica al margen y ms all de las
instituciones representativas del sistema poltico de los estados-nacin. Centra la
atencin en la auto organizacin de la poltica que tiende a poner en movimiento
todas las reas de la sociedad. La subpoltica quiere decir poltica directa, es decir la
participacin individual en las decisiones polticas, sorteando a las instituciones de
opinin representativa, y muchas veces sin proteccin jurdica. En resumidas cuentas,
subpoltica quiere decir configurar la sociedad desde abajo. Lo que caracteriza a la
subpoltica son las coaliciones de opuestos como los partidos, religiones, clases,
gobiernos, regiones, naciones, etc.
El boicoteo masivo simblico: un caso para el estudio de la sub poltica global
Como ejemplo, Greenpeace, logr por primera vez obligar a Shell a deshacerse de una
de sus plataformas petrolferas obsoletas en tierra y no en el mar. Y as otros intentos
por causas medioambientales. Donde se preguntan muchos si era el final de ciertas
reglas bsicas de la poltica (exterior) el que un actor no autorizado pudiera
desempear su propia poltica mundial interior sin respetar la soberana nacional ni
las normas diplomticas.
Lo que no se tom en consideracin era que lo que logr este tipo de cambios fue el
boicoteo pblico masivo. Por tanto no es Greenpeace por s sola la que sacude el
sistema poltico.
En todas partes hay indicios de este modelo de coalicin de la subpoltica global o de
la poltica directa. Se estn produciendo alianzas de fuerzas totalmente incapaces de
aliarse entre s. Adems se descubrieron y desplegaron elementos polticos en la vida
cotidiana (un ejemplo es cuando los automovilistas no cargan combustible durante un
da en protesta. O en el caso de Shell al llenar los depsitos de gasolina se aliaron
frente a la industria petrolfera). La alianza anti-Shell desemboc un cambio de
escenario entre la poltica de la primera a la segunda modernidad. Luego de esto no
les queda ms a los gobiernos nacionales que mirar lo que los actores no autorizados
de la segunda modernidad hacen dirigiendo el rumbo de la accin.
Se gener una alianza eventual de poltica directa que trascenda las diferentes
naciones, economas, religiosas y poltico-ideolgicas. Por tanto, surgi una coalicin
global de fuerzas simblicas y econmicas contradictorias. En la prctica, en esta
poltica de la segunda modernidad, su globalidad no excluye a nada ni a nadie: no slo
socialmente, sino que moral e ideolgicamente tambin. Por lo tanto se trata de una
poltica sin oponentes o fuerza de oposicin, una poltica sin enemigos.
Las amenazas globales generan comunidades globales de riesgo: al menos
comunidades ad hoc para el momento histrico.
El aliarse a estas alianzas de subpolticas no es ms que para distraer la atencin de
las personas de otros hechos que se pretendan esconder.
Las lecciones de las polticas difieren de las de la moralidad. Precisamente entre
alianzas de creencias mutuamente excluyentes empieza a manifestarse la nueva
cualidad de lo poltico.
No existen soluciones de expertos en el discurso sobre el riesgo, porque los expertos
solo pueden aportar informacin fctica, y nunca sern capaces de evaluar qu
soluciones son culturalmente aceptables.
La poltica y la moralidad estn alcanzando prioridad sobre el razonamiento experto.
Los lmites de la subpoltica global, no debera confundirse con la poltica de los
gobiernos nacionales. El proceso de subpolitizacin no debera considerarse en
absoluto irracional, porque tiene todos los rasgos de la modernidad republicana.
La participacin individual-colectiva en las redes de accin global es sorprendente y
decisiva; los ciudadanos estn descubriendo que el acto de comprar es un voto directo
que siempre pueden utilizar de forma poltica.
Habra un nexo global de responsabilidad mediante el que los individuos podran
participar en forma directa de las decisiones polticas. Con esto nace el concepto de
ciudadana tecnolgica, la recuperacin de los derechos democrticos frente al
gobierno de nadie de los desarrollos tecnolgicos.
La mayora de los anlisis que ha desarrollado la ciencia social sobre el desarrollo
tecnolgico no consigue reconocer la diferencia entre el hecho de que la tecnologa
requiera legislacin y el que la tecnologa es legislacin. Los sistemas tecnolgicos
son las formas ms influyentes de tirana del mundo moderno, y segn Andrew
Zimmerman, la autonoma tecnolgica est vaciando de contenido a la autonoma
social.
Frankenfeld menciona objetivos normativamente comprensivos de la ciudadana: la
autonoma, la dignidad, la asimilacin de los miembros de la comunidad poltica. Por
consiguiente esto incluye: los derechos al conocimiento o a la informacin, los
derechos a la participacin, los derechos a las garantas del consentimiento
informado, los derechos a que se limite la suma total de peligros a los que pueden
estar expuestos colectividades e individuos.
La inmediatez de la participacin tecnolgica global se establece, por ejemplo, en la
unidad de los actos de compra y voto. Es una forma de poltica y protesta directa,
anarquista, aqu, ahora y en cualquier lugar, que muchas veces no cuesta nada.
El lugar poltico de la sociedad del riesgo global no es la calle sino la televisin. Los
smbolos culturales se escenifican en los medios de comunicacin de masas, donde
puede descargarse la mala conciencia acumulada de los actores y de los consumidores
de la sociedad industrial. Existen tres formas de ilustrar esta apreciacin: primero, la
omnipresencia abstracta de los peligros, la destruccin y la protesta estn
simblicamente mediadas. Segundo, al actuar contra la destruccin ecolgica, todo el
mundo es tambin su propio enemigo. Tercero, la crisis ecolgica est generando la
conciencia de una Cruz Roja cultural.
Nos vemos obligados a depender de una poltica simblica de los medios de
comunicacin. Esto es especialmente en cuanto al carcter abstracto y omnipresente
de la destruccin que mantiene en funcionamiento la sociedad del riesgo global. La
capacidad de actuar debera ser mayor cuanto ms simple y ntido es el smbolo
escenificado, menores los costos individuales de las acciones de protesta pblicas y
mayor la facilidad con la que cada persona puede limpiar de ese modo su conciencia.
La simplicidad significa mucho. En primer lugar, transmisibilidad, todos somos
pecadores medioambientales. Segundo, la indignacin moral, los de arriba pueden
destruir y contaminar, mientras nosotros los de abajo, luchamos reciclando la basura,
ahorrando el agua y la luz. Tercero, la expeditividad poltica, difcilmente se apoye a
una subpoltica por sobre un poker de poder nacional e internacional. Cuarto, acciones
alternativas simples, preferir la utilizacin de la competencia. Quinto, la venta de
indulgencias ecolgicas.
Los peligros ecolgicos globales, lejos de intensificar una falta general de sentido en el
mundo moderno, crean un horizonte pleno de sentido en cuanto a evitar, proteger y
ayudar, un clima moral que se agudiza con la escala del peligro percibido y en el que
se dota a los papeles de hroe y villano de un nuevo significado poltico.
A medida que se difunde la conciencia del peligro, la sociedad del riesgo global se
hace autocrtica. Sus bases, coordenadas y coaliciones prefiguradas entran en un
estado de turbulencia. La poltica irrumpe de una forma nueva y distinta ms all del
alcance de las responsabilidades y jerarquas formales.