Tema Teología Dogmatica
Tema Teología Dogmatica
Tema Teología Dogmatica
INTRODUCCIN
Siguiendo una larga tradicin, actualmente entendemos por dogma una verdad
que pertenece al campo de la fe o de la moral, que ha sido revelada por Dios, y
transmitida desde los Apstoles a travs de las Escrituras. En el lenguaje actual y
de la teologa el dogma es una doctrina en la que la Iglesia, propone de
manera definitiva una verdad revelada.
El dogma, una verdad propuesta oficialmente por la Iglesia como revelada por
Dios y por lo tanto obligatoria para todos y para siempre. Los dogmas se
proclaman no se inventan, ya que se encuentran precisamente en la Revelacin
en el mbito cristiano esta revelacin es la Biblia. Al surgir un problema acerca
de una verdad, la Iglesia reflexiona sobre el asunto y define el dogma, aclarando
la verdad en cuestin y proponindola como obligatoria para todos y para
siempre.
Es importante subrayar que cada grupo religioso tiene sus dogmas, es decir
verdades que todos estn obligados a creer. Por ejemplo, para los adventistas del
sptimo da, la observancia del sbado es un dogma; para los pentecostales, es
dogma que el Espritu Santo se manifiesta mediante el don de lenguas.
cuenta con una confesin comn. Esto significa que la Iglesia tiene que formular
la verdad, y de esta manera dar expresin a su conocimiento de ella. Por lo tanto,
la unidad de doctrina envuelve la confesin de un dogma comn. No sera lgico
admitir que la Iglesia necesita doctrinas, y al mismo tiempo negar que necesita
dogmas. La Iglesia no puede cumplir su funcin en el mundo a menos que se
haga consciente del contenido de su fe y le d expresin clara. La Iglesia de
Jesucristo fue designada como depositara, vigilante y testigo de la verdad, y slo
puede ser fiel a su llamamiento si tiene un concepto definido de la verdad A los
ministro-, se les exhorta a retener la forma de las sanas palabras,31 y a los
creyentes, en general, a que contiendan ardientemente por la fe que ha sido una
vez dada a los santos, pero cmo podrn cumplir su importante tarea si no
estn de acuerdo en cuanto a las "sanas palabras" y a lo que la Iglesia cree? La
Iglesia tiene que tratar con los equivocados, corrigindolos, reprendindolos y,
posiblemente excluyndolos del redil, pero no podra hacerlo de manera
inteligente y eficaz a menos que posea una aprehensin clara de la verdad y por
lo mismo una medida definida de juicio. La Historia ensea con claridad que
antes de que la Iglesia pudiera juzgar a los herejes tuvo que contar con alguna
medida o prueba oficial. Y es obvio que no podr sostener un testimonio unido y
poderoso en pro de la verdad a menos que presente un frente indivisible. 28 I
Cor. 1:10 29 Gl. 1:8 y 9 30 Tito 3:10 31 II Tim 1:13
d. La posicin de la Iglesia en el mundo demanda un testimonio unido. Cada
Iglesia tiene deuda con otras Iglesias y con el mundo que la rodea en cuanto a
hacer declaracin pblica de sus enseanzas Resulta natural que tengamos
deseos de saber algo acerca del carcter y las convicciones de las personas a
quienes quisiramos confiar nuestros intereses materiales, estimaramos mucho
muy deseable, y de hecho, por completo esencial, que supiramos con exactitud
dnde hay una Iglesia en la que quisiramos encontrar direccin para nosotros y
para nuestros hijos. Adems, una Iglesia tendr que informarse sobre la posicin
de otra, para poder determinar, hasta donde sea conveniente, la cooperacin y
posible afiliacin con una de ellas. La Iglesia de Jesucristo jams debe refugiarse
en la simulacin, ni tratar de esconder su identidad. Y esto que no debiera hacer,
es precisamente lo que hace en la medida en que deja de dar una clara e
inequvoca expresin de su fe.
e. La experiencia ensea que los dogmas son indispensables. Cada iglesia tiene
sus dogmas. Hasta las iglesias que constantemente declaman contra los dogmas,
tambin los tienen en efecto. Al decir que quieren un cristianismo sin dogmas, en
esa misma afirmacin estn declarando un dogma. Todos ellos, en materias
religiosas, tienen ciertas convicciones definidas, y tambin les atribuyen cierta
autoridad; aunque no siempre las definen oficialmente, ni las reconocen con
candidez. La historia prueba con claridad que aun la oposicin actual, no es, en
realidad, oposicin a los dogmas como tales, sino mera oposicin a cierta clase
de dogmas, o a ciertos dogmas especficos, los cuales no encuentran acogida
entre los telogos modernos. Una iglesia sin dogmas sera una iglesia muda, y
esto resulta una contradiccin de trminos. Un testigo mudo, no servira de
testigo, y jams convencera a nadie D.