Magia Religios6
Magia Religios6
doc1Magia Mágica
Capítulos:
Magia
Religiosidad
Ritos
Creencias
Ofrendas y Sacrificios
Coincidencias
Historias sagradas.
Arqueología
Bebedizos y Encantamientos.
Protectores y Protegidos.
Espíritus y Fantasmas.
Justicia
Los grandes hombres.
Demonios y diablillos.
Mitos y leyendas
Simbolismos.
Adivinación
Apariciones.
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No podemos estudiar el todo del fenómeno mágico - religioso, sin tener
en cuenta sus componentes partes.
Que no son contradictorioas, sino complementarioas. Tanto la magia
como la religión, forman expresiones distintas de un mismo
Magia de la Palabra.-
Ya en la religión egipcia tolomaicatolemaica, se decía que nada toma
ser si antes no recibió nombre. Con ello se quiere expresar el
convencimiento de que la palabra es el origen de las cosas. Esta
doctrina está bien representada en todas las religiones animistas y
espiritistas africanas. En ellas, es fundamental el poder de la palabra.
Atom, dios creador egipcio, conocía todas las palabras que definen las
cosas, desde la eternidad. Nombrándolas las creó. La misma Biblia
continúa esta doctrina. Yahvé nombraba las cosas antes de crearlas.
La religión primitiva de los aborígenes de Australia, incluye a un Dios
Padre, creador y como origen de todo lo existente. A través de sus
deseos y palabras.
En algunas doctrinas, no sólo se piensa que la palabra, por sí, tiene un
poder determinado, sino que su misma grafía o sonido, aún careciendo
de significado concreto, puede convocar poderes. Así se entiende en el
sepamos con certeza si algún dios nos estará escuchando, al menos nos
consolamos suponiéndolo. Lo que nos ayuda a mantener la fe. Pues,
nosotros, sí oímos nuestra plegaria. Puede que eso nos ayude a reunir
la fuerza, tiempo e información que necesitamos para llegar a conseguir
nuestro deseo. Todo junto, puede llegar a actuar con el poder de un
pequeño dios privado, un numen, que nos lleve más allá de nuestros
límites conocidos. Algunos pequeños milagros podrían explicarse así.
A los imanes y ayatolasayatolaes shiíes, se les atribuye asigna el poder
de ver el futuro, virtud que también han de poseer los zadikes del
Casidismo judaico, una rama heterodoxa del Judaísmo.
A ciertos gurúes hindúes, y a muchos maestros budistas, se les asigna
el poder de curar con su sola presencia, etcetc. . Y, en el Hinduismo,
estos poderes inmarcesibles sagrados incluso se heredan, de padres a
hijos, constituyendo la privilegiada casta de los Brahmanesbrahmanes.
En el Judaísmo ortodoxo, la casta sacerdotal estaba formada por los
descendientes de Aarón. La de los servidores del Templo, por los
componentes de la tribu de Leví, manteniendo el monopolio del
acercamiento a lo divino. Su contacto con los objetos de culto, los
convertía en personas sagradas, santas.
Ciertos pastores evangelistas, se especializan en sesiones de sanación
masivas, como medio de administrar sus poderes inmanentes. O sea, se
infiere que, su dedicación al culto, como medio de vida, les convierte en
seres especiales. Capacitadosándolos para obrar prodigios. En otras
corrientes cristianas, como la Christian Science americana, los doctores
de su iglesia pretenden curar las enfermedades mediante la emisión de
ondas benéficas. Dicen basar sus poderes en la aplicación de diferentes
ondas magnéticas y el convencimiento de que el Hombre, como hijo de
Dios, está cercano a la perfección. Pudiendo alcanzarla si es consciente
de su bienestar espiritual eterno. Mediante técnicas de radiestesia y
autosugestión, aseguran poder eliminar el mal de la naturaleza
humana.
Principios parecidos de curas por la mente, sostienen los teóricos de la
Cientología o Dianética.
En cuestiones mágicas y religiosas, siempre hay un interés por la
tradición, por la vuelta atrás, por el conservadurismo. Pero todo
conservadurismo, aunque no lo perciban sus adeptos, es evolucionista,
de forma selectiva. Luego, basan su conservación doctrinal en algo
cambiante, fluido, como son las ideas expresadas, las palabras. De un
valor siempre relativo, por comparación a su entorno, al tiempo y al
espacio, en permanente mutación.
Dado que, tanto la religión como la magia, son, en gran parte,
productos de la imaginación, y, vista la enorme capacidad de fabular de
la mente humana, no podemos afirmar con certeza qué fue primero, si
la magia, más pegada al suelo, o la religión, tratando se elevarse a las
alturas. Aunque todo parezca evidenciar que la magia no es más que un
estadio primitivo de la religión. Y, a veces, pre-religiosoprereligioso.
Nuevas tendencias.-
En las macumbas americanas, se considera que el hombre está
integrado, básicamente, por el alma, el cuerpo y la mente. Del alma se
tiene el mismo concepto de espíritu inmaterial que se admite en el
cristianismo. La mente forma el nexo de unión entre cuerpo y alma. A
Resurrreccciones.-
Si retrocedemos a la teología egipciaca, Osiris no sólo era el dios
protector de los muertos, sino, también, el dios que incorporaba parte
de su ser, su fuerza vital, a todo lo naciente. Igual da que fuese una
planta, un animal, o un hombre. Su atractiva dualidad explica que
transmigrara a las creencias dionisíacas, de Creta, Grecia y todo el
Oriente Medio, hasta devenir en una serie de dioses que mueren y
resucitan, cada año, en las mitologías posteriores.
Una de las principales tareas encomendadas a Osiris era, la de bajar al
reino de los muertos, para ayudar a resucitar con gloria a quienes
Enseñanzas.-
En la China clásica, las ciencias ocultas incluían la medicina tradicional,
junto a la astrología, la adivinación, la magia y la nigromancia. O sea,
eran ramas de un mismo árbol. Lo normal era que, tales actividades,
aunque diferenciadas, fuesen ejercidas por las mismas personas. Siendo
sus conocimientos interdisciplinarios. Cuando decimos ciencias ocultas
es porque, en su tiempo, lo eran. Los conocimientos, ya fuesen de
aplicación científica o mágica, debían permanecer en secreto. Sólo las
autoridades superiores tenían la potestad de recabar explicaciones
sobre la solución de algún problema. Esta práctica fue común en las
antiguas civilizaciones. Los conocimientos se percibían de los maestros
bajo estricto juramento de silencio. La base de la preeminencia era, la
ocultación de lo aprendido. La divulgación de lo secreto, se penaba con
la muerte.
Números mágicos.-
hebreosjudíos. Que se cita con este apelativo en los libros más antiguos
de la Biblia. En el Génesis se puede apreciar cóomo Elohim habla de sí
mismo en plural. Puesto que su concepto básico era el de ‘unión de
poderes’, actuando bajo una sola personalidad. .
Gemas.-
Podemos afirmar que, entre los amuletos más preciados de la
antigüedad, estuvieron siempre las piedras preciosas. Indagando
incluso hasta la prehistoria, encontramos que, ininterrumpidamente,
fueron ambicionadas. A éstas se les atribuían propiedades tanto
mágicas y religiosas como medicinales. Lo que hizo de que su posesión
un anhelo cumplido fuese anhelada. No bastaba su belleza, habían de
tener virtudes añadidas, tales como conexiones con los dioses y fuerzas
de la Naturaleza.
Entre las primeras materias con las que se comerció, encontramos toda
clase de gemas. Los hallazgos de lapislázuli, procedente de Asia Menor,
Símbolos y Costumbres.-
El simbolismo de los colores forma parte delpasó a ser ritual en diversas
religiones. Ya en la Biblia se indican colores obligatorios para distintos
ornamentos sagrados. En el Catolicismo se ve también su derivación en
en los diversos coloridos de casullas y vestidos talares de los
sacerdotes, así como en los adornos eclesiales, según épocas del año y
variedad de festividades o ceremonias. En el Islam, el verde y el blanco
son los colores preferidos del Profeta. En el Universismo chino, si el
blanco es luto, el negro es vicio, el rojo virtud y felicidad y el amarillo
Religiosidad.-
La tendencia más generalizada, actualmente, en las religiones
monoteístas, es la de identificar la magia con engaños del diablo,
presuponiendo la íntima relación entre magos y demonios, como
colaboradores. Esto obedece, indudablemente, a la creencia fomentada
de que todo bien sólo puede provenir de Dios. Se olvida que, una gran
parte de la magia, es bienintencionada, aun cuando subyazca en ella el
pecado de soberbia: el de ‘seréis como dioses’ del Génesis. Pero, ¿de
qué otro pecado pueden estar más cerca los sacerdotes de todas las
religiones, al considerarse a sí mismos más próximos a la divinidad
que el resto de los humanos? La historia religiosa está llena de
contradicciones. En los tiempos más pujantes del cristianismo europeo,
hasta el siglo XVII, las universidades de la Europa cristiana, regidas
Ritos y Ceremonias.-
La magia es acrítica, tanto como las religiones. Aunque se valga de
pociones, bebedizos, sahumerios, baños, lavados, etc. ,etc. , que
puedan encerrar en su motivación primera un cierto cúmulo de
conocimientos empíricos, es la creencia en el efecto del rito, por la
intervención de las fuerzas invocadas, lo que motiva la ceremonia y
Creencias.-
Entre árabes, los ojos de color azul representan el mal, o a personas de
las que no puede uno fiarse. Ilustrativa es la referencia coránica al Día
de la Resurrección, cuando se distinguirá a los culpables por sus ojos
azules. Aunque, 'quien haya hecho obras de misericordia y sea
creyente, no temerá la injusticia.' Aquí, como en la Biblia, se unen la fe
y las buenas obras. Ambas han de ir unidas, para ser válidas ante Dios.
Aunque se dé más valor a la fe que a las obras.
La cultura musulmana, tan enemiga de toda representación figurativa,
ha conservado, sin embargo, dos amuletos principales, la mano de
Fátima y el ‘ojo bueno’. Protectores poderosísimos. Resulta curioso
poder constatar que, en numerosas ocasiones, la figura del ‘ojo bueno’
lleva, como iris, un esmalte o piedra azul,. Preferentemente turquesa o
lapislázuli, con un punto dorado en el centro. Su origen como ‘ojo del
divino halcón solar’, ha quedado en el olvido.
Aunque, 'quien haya hecho obras de misericordia y haya sido creyente,
no temerá la injusticia.' Aquí, como en la Biblia, se unen la fe y las
buenas obras. Ambas han de ir unidas, para ser válidas ante Dios.
Aunque se le dé más valor a la fe que a las obras.
Si de algo no podemos dudar es de nuestra existencia. El ‘’pienso, luego
existo’’, formulado por Descartes, no deja de ser un artificio, basado en
una creencia, arropada conllena de evidencias. Si salimos, en
pensamiento, de nuestro propio cuerpo, las dudas se multiplican. Hay
tantas versiones sobre el principio de la existencia, ya sea ésta
material, espiritual o divina, que, poéticamente, cualquiera de ellas
puede valernos. Mientras no intentemos analizarla, eso sí. Pues ninguna
resiste un examen razonado. Cualquier respuesta que pretenda ser
definitiva, se revelará como provisional, en cuanto la enfrentemos a
razonamientos contrapuestos. Esta casi imposibilidad de llegar a
demostrar una teoría sólida sobre el principio de los tiempos, es la que
han aprovechado los fundadores religiosos para insistir en los
Ofrendas y Sacrificios.-
La Biblia está llena de referencias sangrientas. Ciertamente, una parte
importante del trabajo de los sacerdotes, en el Templo de Jerusalén,
consistía en ejercer de matarifes, carniceros y maestros asadores, como
receptores de las mejores piezas de la cabaña local. Máxima fuente de
riqueza en un pueblo de pastores. La importancia dada, en el Levítico, a
las descripciones del sacrificio de animales, no tiene parangón en otros
sistemas religiosos. El fuego sagrado se alimentaba con el sebo y grasa
de los animales sacrificados, además de las entrañas. Los intestinos y
pezuñas, habían de ser lavados con agua, antes de ser quemados en el
altar del Señor: 'Cuyo olor, suavísimo, es sumamente grato a Dios'. La
sangre, residencia del ‘espíritu de la vida’, no se consumía, porque
servía para ser derramada alrededor del altar sagrado. Como signo
visible de la entrega de esa vida al Supremo. Grasa y sangre no
dpodíanebían ser ingeridas por el hombre, pues pertenecían al Señor.
El sebo y las entrañas servían de alimento al fuego sagrado, cuyos
efluvios subían hasta el cielo. Tanto las de aves como las de reses. La
Biblia es taxativa: Toda persona que comiere sangre, será exterminada
de su pueblo. De ahí la negativa, moderna, de los Testigos de Jehová, a
recibir transfusiones sanguíneas. Considerando la transfusión como una
variante de la ingestión.
En la antigüedad, los judíos no vendían sus animales 'puros', es decir,
sin mácula, falta, defecto, ni enfermedad alguna, más que entre judíos.
Sólo estos animales ‘puros’( en su equivalencia de ‘perfectos’) eran
aptos para sus sacrificios. La idea era ‘ofrecer a Dios sólo lo mejor’. La
Coincidencias.-
Es curioso notar la relación, de imposible casualidad, entrede palabras
semejantes, de en civilizaciones distantes. El término tripi-taca que, en
sánscrito, significa triple cesto, o triple bolsa, y que, al mismo tiempo,
es el gráfico nombre de una doctrina budista, en español, lo usamos
como ‘petaca’, estuche de tres compartimientos, donde se guardaba el
tabaco, antigua planta sagrada en América, usada antes, durante o
despuésy de durante algunas ceremonias religiosas, la yesca o mecha,
el pedernal, y la pipa. Lo raro es que tal palabra se incorporase al
castellano a través del azteca, donde ‘petlacal‘, aparte de tabaquera,
era también el cesto o alforja, divido en dos bolsas, que se colocaba
sobre los animales de transporte, para equilibrar la carga a ambos
lados. Cualquier ‘casualidad’ de este tipo nos hace pensar más en una
causalidad, que incita a la investigación de su origen, pues
interrelaciona a toda la Humanidad.
Historias Sagradas.-
Magia primitiva.-
La interpretación religiosa de la historia, dándole significados celestiales
a sucesos incomprendidos, o a fenómenos de la Naturaleza, va dejando
secuelas en las religiones, que atribuyen, a sus respectivos dioses, la
acción determinante sobre lo acaecido. Un ejemplo común puede ser el
Diluvio Universal, que, en términos geográficos reales, podemos
describir como lo que, con ciertatoda probabilidad, fue una gran
inundación habida en Mesopotamia, a como consecuencia de una
elevación de la temperatura ambiente, tras un período glacial. Con el
resultado de grandes deshielos, ocurridos en las cabeceras de los Ríos
Tigris y Eufrates. En definitiva, consecuencia de un cambio climático,
como tantas veces ha sucedido, a lo largo de los períodos geológicos.
De ello quedan pruebas, tales como sedimentos, más o menos
concluyentes. Se supone que pudo tener lugar entre los años tres mil y
dos mil quinientos antes de Cristo. Pero, desde luego, no interrumpió la
Funcionarios Religiosos.-
La posición alcanzada por José entre el funcionariado egipcio, se aclara
por la antigua costumbre egipcia de conceder privilegios sacerdotales a
quienes supieran interpretar el significado de los sueños o pesadillas,
convirtiéndolos en premoniciones. . Tales expertos, eran nombradosse
convertían en consejeros faraónicos, expertoshabilidosos en profecías.
Dado que el faraón, aparte de ser monarca, estaba considerado como
un dios, sus consejeros eran, al tiempo, funcionarios de la cortel estado
y servidores del dios, como y dignatarios religiosos. Esta dualidad fue
habitual en las monarquías de la época. Más regla que excepción. Por lo
que, el empleado público de alto nivel, solía tener ambas dignidades
ensambladas. En las cortes europeas, hasta el siglo XX, no era extraño
encontrar algún valido, de gran influencia, mezcla de consejero áulico y
mediador con la divinidad. En el mundo musulmán actual, aún se
encuentran muy conexas las dignidades religiosas y políticas.
Conjuros y amuletos.-
En el Libro de los Números, en su camino hacia la Tierra Prometida, dice
Moisés a su pueblo: 'No temáis al pueblo de esa tierra, (Palestina),
porque nos los comeremos a todos como pan. Dios nos protege'. Se
deduce que el Dios de Israel tiene sus preferencias... continuadas.
Los ritos guerreros han sido bien cubiertos por religión y magia. Desde
los pueblos más primitivos a los más civilizados, en este trance decisivo
de la guerra, se pedía y pide ayuda, rindiendo y rendían honores a
toda clase de dioses y espíritus, para obtener su favor.
También se adoptaban diversas costumbres, consideradas efectivas en
la protección del guerrero. En los períodos de guerra, por ejemplo, se
guardaba castidad. Debido a la antigua creencia de que, con el acto
sexual, se escapaba parte de la fuerza vital del individuo.
Al partir hacia la guerra, los sacerdotes bendicen a las tropas y armas
de su pueblo. Esta bendición ha de protegerlos. Antes de entrar en
combate, se realizaban baños rituales de purificación, se hacían
sacrificios a los dioses y se prometía enriquecer los templos con el botín
capturado al enemigo. Terminada la batalla, se lavaban las armas,
ritualmente, en las aguas de fuentes o ríos sagrados. Aún hoy día, las
aguas del Ganges o del Jordán son exportadas a medio mundo, para ser
usadas en ceremonias de bendiciones, consagraciones y ‘limpieza’ de
culpas o pecados.
Una forma muy extendida de protegerse, entre los creyentes, contra
todo mal, es portar algún amuleto, especialmente apropiado para las
circunstancias. Así, todo guerrero que quisiera volver vencedor, debía
proveerse de poderosos amuletos que lo protegieran del enemigo. La
pintura de guerra, las plumas de águila o cóndor, los cuernos de toro o
búfalo, las crines de caballo, las pieles de lobo, tigre, león o chacal, los
dientes de jabalíes o garras de oso, no eran adornos vacíos;. sSino
turquesas del Sinaí, apropiadas para los cultos de Astarté, por maderas
del Líbano, para sus templos y palacios.
También la Mano de Fátima, entre los musulmanes, preserva de malas
acciones. La Cruz de Caravaca, custodiada por serafines, rechaza las
intenciones adversas de nuestros enemigos. El escapulario bendecido,
impide, a quien lo lleve en el momento de la muerte, caer en el Infierno,
etc. ,... El ajo, la cruz y el agua bendita, sirven como repelentes contra
vampiros y seres del Averno. Es de notar que el agua bendita se usa en
varias religiones, con fines parecidos.
En numerosas civilizaciones africanas y pueblos del Pacífico, se
considera que, los objetos confeccionados con fines mágicos o
religiosos, siguiendo la tradición animista, alcanzan la categoría de
sagrados. Puesto que, al ser consagrados al culto, adquieren vida
numinosa. Es decir, son vivificados por un espíritu santo o numen. En
este orden, pueden estar incluidos vasos ceremoniales de libación,
máscaras, cuchillos de sacrificios, dagas rituales, figuras de dioses o
representaciones de espíritus, atavíos, cubrecabezas, bonetes, tiaras,
mitras, velos, turbantes, túnicas, colgantes, utensilios, calzados. Al ser
consagrados al culto, mágico o religioso, adquieren un ánima,
convirtiéndose en objetos vivos, habitados por el espíritu o fuerza que
los anima. Dependiendo de las religiones, varían los simbolismos,
poderes y valores de tales vestiduras o aderezos. Todos ellos adquieren
significados y poderes mágicos, o místicos; sin los cuales las ceremonias
no serían válidas. Casi todas las celebraciones, tanto mágicas como
religiosas, requieren que el celebrante vaya revestido de un ropaje
adecuado a la misma y se presente en estado de limpieza de cuerpo y
espíritu.
Se cree que el primer uso dado a los metales y piedras preciosas, el
principio de su alta estima, no fue meramente la creación de joyas y
ornamentos, sin más que por su belleza, sino debido a las muchas
propiedades mágicas que se les atribuían. A esto podríamos añadir la
costumbre instaurada, desde muy antiguo, de pagar los favores pedidos
a los dioses en metales y piedras preciosas.
Transmisión de poder.-
Ritos agrícolas.
Entre los antiguos ritos mágicos de la agricultura, destacaban las
invocaciones a los antepasados. Se suponía que éstos seguían viviendo
en un mundo subterráneo. De ellos se esperaba una intervención
favorable, que avivara las raíces de lo sembrado. Como señal de que,
aún difuntos, se los seguía teniendo como protectores del núcleo
familiar, queda la evidencia de que, en algunas sociedades primitivas,
se los enterraba en las inmediaciones de la vivienda, y en el huerto
sagrado no sólo han de regirse por una estricta moral de pureza ellos
mismos, sino que deben mantener puro también el fuego puesto a su
cargo. Para no contaminarlo, ni siquiera con su respiración, llevan, en su
presencia, una máscara o velo, que impida a su aliento soplar
directamente sobre la pira sagrada.
Esta íntima conexión entre fuego y religión, sigue también vigente en la
magia. La presencia de una llama es indispensable en muchas
ceremonias mágicas. Ya sea la de una hoguera fuego o la de una simple
vela. Se estimapiensa que una llama viva atrae la presenciaasistencia
de otros espíritus. No hay fuego sin ánima. El fuego mismo es la
manifestación del espíritu.
Estos principios se siguen cumpliendo en el Animismo moderno, donde
se considera que cada parte de la Naturaleza está habitada por alguna
potenciaún espíritu. Estos Eespíritus que, aunque individualizados,
pueden estar ligados entre sí. , Algunos indisolublemente, a algún
componente del mundo material, o bien ser parte de una unión
temporal.
En el Animismo mágico también se supone la presencia de un espíritu,
ánima o fuerza en cada elemento. Tales ánimas son individualmente
independientes entre sí. Considerándose, por ejemplo, ya en tiempos
del Imperio Romano, que un hogar podía estar habitado por lares,
manes y penates. Protectores singulares, todos ellos, de una parte
específica de la casa.: Lla puerta de entrada, las ventanas, el patio, la
cocina, la despensa... tenían sus propios espíritus protectores, o dioses
menores o patronos. El dios principal del hogar residía en el fuego, el
lar, el hogar familiar.
Los límites del huerto familiar, o las encrucijadas de caminos, no
carecían de espíritus guardianes. Esta creencia, común a todos los
continentes, se ve aún reflejada en la frecuente instalación de signos
religiosos en los cruces de caminos rurales. Tales funciones menores, de
guardianes casi policiales, son adjudicadas al cuidado de dioses
menores, o semidioses, en las religiones politeístas modernas. En las
monoteístas, tales labores esson asumidas por algún santo patrón o
ángel protector.
Espíritus y Fantasmas.-
La relación que los antiguos egipcios tenían con sus muertos era de
natural cotidianeidad. Seguían tratándolos como si estuvieran en vida.
Consultándoles sus decisiones y obrando de modo que los espíritus de
los muertos no se sintieran desmerecidos. Bien es verdad que, en su
concepto, la vida y la muerte son como meras etapas sucesivas de una
misma existencia, continuada eternamente. En éstoesto, existen ciertas
coincidencias con las religiones índicas. No existe la destrucción, sino la
transformación.
En la época faraónica, las almas de los difuntos eran representadas en
forma de pájaro negro. En numerosas ilustraciones a lo largo de los
siglos se representa el alma del muerto saliendo del cuerpo, tras haber
tomado la forma de un pájaro.De ahí, Qquizá, por ello, la superstición
que vincula la visita de algún pájaro negro al alféizar de la ventana del
domicilio de un enfermo, con su próxima muerte. Cuervos y mirlos no
eran bienvenidos en las ciudades hebreas. Eran tenidos por impuros.
En otras religiones, en cambio, son considerados emisarios de los
dioses.
Según creencias ancestrales, los espíritus, buenos y malos, se
desplazan, casi siempre por el aire, sin necesidad de vehículo alguno.
De ahí que se los haya representado en forma de aves. Como
derivación, Por ello, también hay pájaros sagrados, respetados o
temidos, en las tradiciones de todos los pueblos.
Dado que muchos pueblos antiguos situaban el espíritu de la vida en los
pulmones, creían que una expulsión repentina y violenta de aire, como
la que se produce con un estornudo, podía expulsar al espíritu de la
vida, o a parte de él, fuera del cuerpo. Esto explica el hecho de que en
todas las civilizaciones exista la costumbre de expresar el deseo de
buena salud y larga vida a la persona que estornuda. El frío invernal y
sus consecuencias malsanas podían ser el peor enemigo de los pueblos
primitivos.
El Espiritismo moderno, en líneas generales, es una suma de elementos
tomados del animismo clásico africano, para luego organizarlos
alrededor de creencias hinduístashinduistas, ceremonias
supuestamente egipcias y sistemas del Budismo Tántrico. Nuevamente
nos encontramos con una escuela basada en la unión y coyunda de
doctrinas anteriores, que dan a luz una nuevaflamante criatura de la
fe.
En la India, numerosos árboles son considerados santos o sagrados, por
creerse que en ellos habita algún dios. En estos casos, se presentan
ofrendas al dios del árbol, que se depositan junto a su tronco. Los mitos
naturistas modernos han recogido parte de esta doctrina,
transformándola en la atribución directa a las plantas de alma,
sentimientos, sentidos, etc. Cuando la idea original era que tales
plantas servían de refugio o residencia a determinadas fuerzas, dioses o
espíritus, que eran los poseedores de tales atributos. Siendo estos los
dotados de sentimientos.
Las creencias hebreas de la época bíblica no eran uniformes en cuanto
a la existencia de seres inmateriales. Mientras los fariseos creían en la
resurrección, en los ángeles y en los espíritus, los saduceos no.
Culpa.-
El principio de que: ‘Quien presencia un acto contra la ley divina, sin
denunciarlo, incurre en parte de la culpa’, está ya recogido en diversas
normas religiosas, desde tiempo inmemorial. En el Levítico también se
representa este criterio.
Portentos y curaciones.-
Se relata en los Hechos de los Apóstoles: ‘Dios obraba milagros, por
manos de Pablo, curando enfermos y endemoniados, sólo al contacto
con telas que habían sido tocadas por Pablo". Sin embargo, quienes
practicaban la magia, "llevaron ante él sus libros, para que fuesen
quemados delante de todos.’
Pablo, a lo largo de sus viajes, hizo gala, frecuentemente, de dotes
curativas, mediante imposición de manos. Esto, normalmente, le servía
como tarjeta de presentación ante los neófitos.
Los fenómenos de curación a través de la imposición de manos, siguen
ocupando el primer puesto entre los méritos atribuidos a sanadores y
curanderos. Claro que se puede dudar de su realidad natural y
científica, pero, la realidad aparente, efectiva sobre el ánimo y la vida
del presunto enfermo sanado, es total.
El magnetismo personal, del que hacen gala brujos, chamanes, magos y
curanderos, suele ser una sensación anímica. Explicable por la
predisposición a la receptividad de quien experimenta su atracción. Así
se pueden producir visiones y curaciones, que han tenido lugar,
realmente, en el cerebro del visionario; o del sanado, en su caso. Lo
desconocido, lo inexplicado, no tiene por qué ser, necesariamente,
milagroso o sobrenatural.
Demonios y Diablillos.-
Casi toda la demonología cristiana ha brotado de fuentes exteriores,
anteriores al Cristianismo. Pues son escasas las citas evangélicas que
fundamenten la extensa clasificación de seres malvados que
encontramos en los tratados postbíblicosposbíblicos, sobre todo de
época medieval.
Los demonios, espíritus del Mal, son inherentes a casi todas las
religiones y teorías mágicas, como opositores a los espíritus del Bien, o
ángeles. Esta contraposición de valores, ya era la base de las religiones
iranias, así como un principio original de la religión egipcia. Se trataba,
básicamente, de variablesde distintas descriptivasciones sobre de la
eterna lucha entre el Bien y el Mal, considerados de forma absoluta. Y
personificados, para una mejor comprensión popular, en los llamados
Príncipe de la Luz y Príncipe de las Tinieblas. El resultado final se
supone que lleva siempre a la victoria última del Bien. Pero, entretanto,
no siempre las batallas eran ganadas unilateralmente.
Entre las muchas ocupaciones de los demonios bíblicos, hay una que,
cuando menos, resulta curiosa. Se dice que fue Azael, el diablo
conquistador, quien enseñó el arte de la cosmética a las mujeres. Si así
fuera, debió comenzar muy tempranamente sus enseñanzas. Ya en
yacimientos prehistóricos, de la Edad de Piedra, se han encontrado
paletas portadoras de afeites clásicos, tales como polvos de lapislázuli,
para perfilar el contorno de los ojos, o almagre y carmín(cochinilla) para
realzar el color rosado de mejillas y labios. Según estas informaciones,
Simbolismos.-
La utilización de símbolos e imágenes es tan común en magia como en
religión.
En el Universismo chino, se dice que el hombre fue hecho a imagen y
semejanza de la Tierra y el Cielo; con la cabeza redonda y los pies
cuadrados. Pues, los más antiguos tratadistas chinos, suponían que la
Tierra era cuadrada y el firmamento redondo.
Dentro del hombre, los chinos consideran que los pulmones, de donde
proceden los suspiros, son la sede de los sentimientos tristes. Y, los
relacionan con el metal, el oesteocaso, la noche y el frío.
En Babilonia, el toro era el símbolo de Adap, el primer hombre. El
dragón representaba a Marduk, el dios supremo, protector de Babilonia.
El huevo, fuente de vida, ya era considerado en la antigua cosmogonía
egipcia como símbolo de la resurrección. Alumbrado por una vida
oculta. Horus, el dios halcón, benéfico dios del Sol, salió de un huevo.
Por lo que se consideraba que los huevos conservaban valores divinos.
En otras épocas, se extendió su simbolismo, hasta abarcar la
fecundidad y representar al Universo. Con este sentido oculto, de
regalar el Universo al ser querido, se ha conservado la costumbre, en
algunas culturas, de ofrecer huevos en la Pascua Florida, cuando la
primavera está en su auge. Uso de claro origen pagano, cuando se
celebraba el resurgir de la de la Naturaleza. En el cristianismo, pasó a
simbolizar la resurrección de Jesucristo. En el norte de Europa, y
especialmente entre los ortodoxos rusos, para celebrar esta festividad,
se regalabanlos huevos, eran adornados primorosamente, hasta
constituir verdaderas obras de arte. Han pasado a la historia como
excepcionales, los huevos de orfebrería que las familias pudientes de la
Rusia imperial se regalaban entre sí.
Los órficos y gnósticos griegos, derivaron el significado del huevo hacia
la purificación. Desde los etruscos, se ha conocido su uso en magia y
religión. Entre las distintas aplicaciones que le daban, estuvo la de
usarlos como medio para interpretaciones proféticas. Cascar un huevo y
ver la forma en que se extiende su contenido, puede constituir todo un
rito mágico de adivinación.
Adivinación.-
Algunas prácticas de adivinación, como la lectura del futuro en las
entrañas de animales sacrificados al efecto, han traspasado la noche de
los milenios. En Egipto, Grecia y la antigua Roma, se practicaban dichos
ritos adivinatorios antes de nuestra era. Actualmente, sigue teniendo
vigencia en algunas macumbas americanas, y en religiones africanas.
En la antigüedad, al parecer, lo de ser adivino o profeta era bastante
común. En los Hechos de los Apóstoles, relata San Pablo: ‘Entramos en
casa de Felipe, el evangelista’... ‘Tenía éste cuatro hijas, vírgenes y
profetisas. No se libró ni una, de su destino.’
Consideremos aparte , que esa relación, casi secuencial, de virginidad y
dotes proféticas, era únicamente exigida a las mujeres. De los hombres
nunca se dice: ‘profeta y virgen’. Sin embargo, en lo tocante a mujeres,
Sueños.-
Los sueños, las ensoñaciones, tienen muchas veces el carácter de
representaciones teatrales, donde vemos, adornados con abundante
parafernalia, nuestros deseos cumplidos. Otras veces, se manifiestan
nuestros temores, que nos agobian con su posible realización. En
cualquier sentido que actúe nuestra disminuida consciencia, se prestará
a las interpretaciones que quiera dárseles. En religión, como en magia,
han sido utilizados los sueños, visiones y pesadillas, como fuentes de
saber. Pero, más que relacionándolo con la personalidad del soñador,
como suele hacerse en ppsicologíasicología o psiquiatría, se les da un
significado exterior al individuo. De forma que, a cualquier amalgama
de imágenes visionadas durante el sueño, se le confiere una
interpretación acorde con las creencias o conveniencias de quien las
traduce.
Apariciones divinas. -
Dice Dios a María y Aarón": ‘Hablo a Moisés, mi siervo, boca a boca, y él
ve claramente a su Señor, no por enigmas o figuras’. Claro que el
transcriptor es el mismo Moisés. Con lo que el valor de prueba queda
algo devaluado.
En el Libro de los Números, responde el Señor a Moisés: ‘Queda
perdonado, conforme lo has pedido. Juro por mi vida, que toda la
redondez de la Tierra se llenará de la gloria del Señor. '
¿Jura Dios por sí mismo, y lo hace por su vida, como si fuera factible
acabar con su aceptada eternidad? Un párrafo algo extraño, dentro de
la doctrina mosaica.
Imágenes sagradas.-
Las imágenes bajadas del cielo, no son exclusivas de una sola religión.
En los Hechos de los Apóstoles, se relata cómo los naturales de Éfeso
se sentían orgullosos de habitar tan privilegiada ciudad. Pues¿Pues:
Mitos y Leyendas.-
La leyenda del perro que se come a devora la Luna cada mes, en la
mitología china, era ya referida en el Egipto tolomaicotolemaico. Sólo
que, entonces, el lugar del perro lo ocupaba un cerdo negro. Se ha de
tener en cuenta que, para los egipcios, éste era el animal nauseabundo,
encarnación de Seth, el espíritu del mal. Es de notar que, su aversión
por el cerdo, la heredaron civilizaciones adyacentes a Egipto, como la
judía y la árabe, que lo introdujeron en sus libros sagrados como el
animal impuro por excelencia. En los Evangelios, conserva su condición
de refugio para los espíritus inmundos, cuando salen del cuerpo de los
endemoniados. Respecto a esta prevención, podemos decir que, los
difuntos, antes de ser enterrados, debían ser desposeídos de cualquier
objeto hecho con piel de cerdo. Para evitar que puedan ser
condenados al fuego del infierno, por toda la eternidad, si los portasen
consigo. Puesto que el contacto de la piel porcina convierte en impuro
a quien la porte. Podríamos añadir que esta particular aversión hacia el
cerdo, que deriva en la prohibición del consumo de su carne, puede
tener un origen lógico. Debido a los hábitos carroñeros de los cerdos,
que tienden a consumir toda clase de inmundicias, estos, en la
antigüedad, se convirtieron en propagadores de diversas
enfermedades.
En otras narraciones semejantes, de distintos pueblos, cambian los
animales devoradores de lunas, transformándose en sapos, coyotes o
lobos de las praderas, etc. Pero siempre con el mismo resultado: la Luna
era devorada por el oscuro animal, en el novilunio, y vomitada al llegar
el cuarto creciente. Esta visión mágica del fenómeno de la luna nueva,
se contemplaba en la teología egipcia con la siguiente variante de
explicación teórica: Se decía que era el resultado de la lucha entre el
Bien y el Mal. Los monstruos de la noche, encarnados en el cerdo negro,
bajaban a tragársela, hasta que su protector, el dios Anubis, conseguía
rescatarla, dando origen al creciente lunar.
Entre las tribus indias de Norteamérica, el Espíritu del Mal es
relacionado con la presencia del coyote. Estos animales son tenidos por
encarnaciones del diablo. De los brujos malintencionados se dice que
pueden convertirse en lobos de la pradera, o coyotes. A su vez, se
piensa que éstos pueden tomar forma humana, para poder hacer el mal
con mayor facilidad. El modo más eficaz de acabar con tal espíritu
maligno, es dispararle con una bala de plata. Pero también se dice que
huyen si se les muestra un crucifijo de plata. Aquí se ve de nuevo el ir y
venir de los encantamientos. El trasvase continuo de creencias, que se
adaptan al medio disponible.
efecto final. Lo que para unos es justicia, para otros puede significar la
consumación de una venganza. Aunque, pocas veces se pueda discernir
la fina línea divisoria entre ambas.
El Corán, no sólo perdona la venganza, sino que la anima: "Dios
auxiliará a quien castiga, del mismo modo que fue castigado, si luego es
oprimido. Dios es absolvente, indulgente."
Leyes Religiosas.-
Una cosa podemos considerar clara, respecto al derecho
consuetudinario de los pueblos, y es que, las religiones que hayan
tenido asiento en sus territorios, van dejando huellas en las costumbres
de la comunidad. Por tanto, en el derecho y las leyes. No entienden de
igual forma los derechos del individuo, quienes hayan sido educados en
diferentes credos religiosos. Una vez se implanta, mayoritariamente,
una religión cualquiera en una sociedad, impregna con su ética todas
las instituciones. Leyes, sociedad, costumbres, enseñanzas, se
convierten en vasallos de la religión imperante. Esta envuelve en un
halo religioso todos los actos y etapas de la vida, privada y comunitaria,
de los sociedades pueblos. Los pueblos cazadores piden perdón al
animal acosado. Nunca matan más de lo necesario. Cuando sus
necesidades de alimento están cubiertas, cesa la cacería. Para no irritar
a la Madre Naturaleza y a sus fuerzas coadyuvantes. Nunca saldrán a la
caza por el placer de matar. Sólo cuando precisan comer. Es el hombre
moderno, desligado de sus raíces naturales, el que usa la caza como
diversión.
No hay que buscar en siglos pretéritos para encontrar testimonios. Un
estudio somero de la legislación actual de cualquier país, desvela en
ésta un reflejo de la sociedad y, consecuentemente, de la religión
predominante, que marca la moral oficial. Desde la antigüedad, los
grandes legisladores invocaron la inspiración de Dios, para justificar y
hacer respetables sus leyes. Curioso es que, ninguno de estos dioses,
olvidaseó colocar, a legisladores y sacerdotes, por encima del pueblo
llano. Moisés, Mahoma, Manu, Hammurabi, los césares romanos, los
faraones egipcios, los zares rusos, los emperadores – dioses japoneses,
o los emperadores europeos, consagrados por los Papas, dan el tipo
perfecto del codificador político - religioso, que gobierna por la gracia
del Dios Creador y con su ayuda.
Un pequeño indicador, casi anecdótico, que puede señalar la íntima
relación entre religión y leyes, en la sociedad occidental, lo tenemos en
una curiosa costumbre, arraigada en la Edad Media, para arbitrar
pleitos: los llamados 'juicios de Dios', u ordalías. Que dejaban al hombre
sometido a una total arbitrariedad, a la justicia del azar, que se
presentaba como justicia divina. Quien saliese perdedor de una pelea,
un duelo, una carrera, o cualquier otra prueba fijada, para deducir
culpas, era declarado autor del delito que se achacase a uno de los dos
posibles implicados, contendientes por su inocencia. Por supuesto que
ganaba siempre el caballero más fuerte, o mejor formado en el ejercicio
que habían caído bajo el dominio de Babilonia. Así se llegó a una lista
casi interminable de monarcas, que se hundía en la noche de la historia.
Cotejando documentos, vemos que la patraña se escribía para adular al
monarca que ocupase el trono en cada momento. Muchas veces, son
menos verdaderos los relatos contemporáneos que los posteriores. Este
principio se podría aplicar, críticamente, a la generalidad de las
historias, siempre mitificadas.
Aún cuando se hayan dado algunas civilizaciones más o menos aisladas,
el hombre se ha caracterizado, desde sus comienzos, por la curiosidad,
y ésta le ha llevado a viajar, a investigar, a moverse constantemente.
Con él portaba su experiencia y saber. Las mezclas de principios y
conocimientos han sido inevitables. Sin curiosidad, el hombre no sería
hombre.
En excavaciones a través del mundo, se ven coincidencias en las
civilizaciones antiguas, que no se podrían explicar de no haber
mantenido contactos entre ellas. O sin tener orígenes comunes. En
yacimientos arqueológicos, fechados en épocas prehistóricas, se han
encontrado vasijas, armas, herramientas, piedras semipreciosas, cuyo
origen, perfectamente localizado, se hallaba a cientos, o quizá miles, de
kilómetros. De forma que ha quedado claro que, desde varios miles de
años antes de Cristo, el hombre viajaba, cubriendo grandes distancias y
portando en sus desplazamientos los objetos de uso cotidiano. Con
ellos iban sus conocimientos.
En tiempos poco documentados, se usaron en Egipto y Mesopotamia
una especie de sellos labrados en piedra o barro cocido, a los que se
atribuía poder mágico. Tales sellos fueron utilizados para fijar la
propiedad de un objeto, marcándolo con un tabú: Nadie, que no fuese
el dueño del sello, debía romperlo, so pena de un castigo celestial. Su
uso se extendió, a lo largo del Sahel, hasta las islas Canarias. Hacia
Oriente, por Persia e Irak. En Europa, por Turquía y Grecia, hasta el
centro europeo. La identificación de propiedadesSu fijación se hacía
presionándolo aplicándolo sobre pellas de barro fresco, donde dejaban
su improntamarca. Con tales marcas ellas se precintaban vasijas y
almacenes en los quedonde se guardaseban el grano y otros bienes. La
creencia enraizada de que el sellado transmitía poderes mágicos al
precinto, servía de guardián efectivo a las mercancías. Sin necesidad
de puertas ni cerrojos. Tales sellos llevaban grabados dibujos que
identificaban a su dueño y, a veces, un signo mágico, lo que elevaba
sus poderes disuasoriosguardianes. En tiempos de los primeros
faraones, estos sellos tomaron la forma de cilindros grabados, que eran
rodados sobre los precintos de barro, para grabar su marcaimpronta.
El dueño solía llevarlo colgado del cuello, en forma de cuenta horadada.
Los pictogramas, usados en Egipto desde épocas muy tempranas, con
fines mágicos y religiosos, se siguieron utilizando durante un largo
período de tiempo. Era una forma, acaparada por la clase sacerdotal, de
RELIGIONES MÁGICAS
por
Emilio del Barco
[email protected]
Capítulos:
Magia
Religiosidad
Ritos
Creencias
Ofrendas y Sacrificios
Coincidencias
Historias sagradas.
Arqueología
Bebedizos y Encantamientos.
Protectores y Protegidos.
Espíritus y Fantasmas.
Justicia
Los grandes hombres.
Demonios y diablillos.
Mitos y leyendas
Simbolismos.
Adivinación
Apariciones.
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No podemos estudiar el todo del fenómeno mágico- religioso, sin tener
en cuenta sus partes.
Que no son contradictorias, sino complementarias. Tanto la magia como
la religión, forman expresiones distintas de un mismo sentimiento: La
creencia del Hombre en fuerzas suprahumanas y en la posibilidad de
manipularlas a su favor.
Las verdades religiosa, mágica o moral y la verdad científica natural,
son esencias distintas, que, en muchos casos, no tienen punto común
alguno.
Magia y Religión deberían estudiarse de forma conectada. Si las
tratamos como humanismos heterogéneos, se hace imposible su
conocimiento racional.
No hay flor que viva dos primaveras, ni ideología que aguante incólume
el paso de los años. Aunque las raíces sean las mismas, se renuevan las
hojas ylos frutos. No basta con mirar, hay que ver. Las gárgolas que
miran al cielo, no ven su inmensa belleza.
Magia de la Palabra.-
Ya en la religión egipcia tolomaica, se decía que nada toma ser si antes
no recibió nombre. Con ello se quiere expresar el convencimiento de
que la palabra es el origen de las cosas. Esta doctrina está bien
representada en todas las religiones animistas y espiritistas africanas.
En ellas, es fundamental el poder de la palabra. Atom, dios creador
egipcio, conocía todas las palabras que definen las cosas, desde la
eternidad. Nombrándolas las creó. La misma Biblia continúa esta
doctrina. Yahvé nombraba las cosas antes de crearlas.
La religión primitiva de los aborígenes de Australia, incluye a un Dios
Padre, como origen de todo lo existente. A través de sus deseos y
palabras.
En algunas doctrinas, no sólo se piensa que la palabra, por sí, tiene un
poder determinado, sino que su misma grafía o sonido, aún careciendo
de significado, puede convocar poderes. Así se entiende en el Tantrismo
tibetano, donde existen sonidos sagrados. Tal poder puede ser
incrementado o disminuido según quien la pronuncie y en qué
circunstancias se haga. En el Animismo se considera que toda persona
transmite, emana o irradia, energías. Y una parte de estas energías es
transportada por sus palabras.
Existen incluso palabras sagradas, que no se debían enunciar, como los
nombres del Señor, o que, por el contrario, atraen sobre quien las
pronuncia, los efectos deseados, sirviendo de llave al cumplimiento de
las peticiones. Esto último, claramente conectado a los conjuros
mágicos. Recordemos el Abracadabra, abridor de arcanos.
Según la tradición coránica, que entronca con relatos de los Vedas,
habiendo seducido la bella reina de Persia a dos ángeles caídos,
sonsacó a éstos la palabra mágica clave que le permitiría abrir las
puertas del cielo. Una vez llegada allí, Dios la transformó en el Lucero
del Alba (Venus).
En el Hinduismo Vedanta, los Hare Krisna, una corriente religiosa de
moderna creación, que ha trascendido las fronteras de la India, creen
que, la pronunciación continuada del nombre del Señor Krisna, produce
efectos benéficos sobre la persona que lo recita, contribuyendo
decididamente a su salvación. La lógica de tal práctica es la siguiente:
El nombre del Señor es parte de su mismo ser. Estando tal nombre
sagrado presente en nuestras mentes, nos encontramos acompañados
por el Señor constantemente. En tal compañía, sólo se puede ascender
a los reinos celestiales.
Estos nombres divinos pueden estar incluidos en mantras, frases,
sonidos o expresiones a las que se les atribuye un poder mágico. Es una
Nuevas tendencias.-
En las macumbas americanas, se considera que el hombre está
integrado, básicamente, por el alma, el cuerpo y la mente. Del alma se
tiene el mismo concepto de espíritu inmaterial que se admite en el
cristianismo. La mente forma el nexo de unión entre cuerpo y alma. A
ella se atribuye el poder de pseudo - materializar los espíritus en el
fenómeno llamado ectoplasma. La mente es personal, asentada en la
materialidad del cuerpo, pero, a su vez, participando de las cualidades
del espíritu, al que acompaña. Se considera que la mente, guiada por el
espíritu, es la que puede comunicarse con los humanos, una vez
traspasada la frontera de la muerte. O sea, una vez abandonado el
cuerpo material.
La creencia en la supervivencia del alma, y en la existencia de los
espíritus, parece que es casi universal. Ello ha proporcionado un campo
enorme a especulaciones fantásticas. Las distintas teorías sobre los
espíritus y su existencia independiente de la materia, son lo que da
base a las creencias animistas, espiritualistas y espiritistas. Tanto si lo
consideramos desde un punto de vista mágico, o del religioso. El mundo
de la realidad y el de la fantasía son complementarios y paralelos. La
ventaja de especular con entes intangibles, invisibles e incorpóreos, es
que se puede dar rienda suelta a la imaginación.
Si admitimos la existencia del alma, del espíritu, ya sea individual o
universal, no podemos oponernos a que alguien convierta ese algo en
una energía vital, que une cuerpo y mente. Después, el dilema, no
solucionado, de creer o no creer en la posible existencia del alma, o de
Resurrecciones.-
Si retrocedemos a la teología egipciaca, Osiris no sólo era el dios
protector de los muertos, sino, también, el dios que incorporaba parte
de su ser, su fuerza, a todo lo naciente. Igual da que fuese una planta,
un animal, o un hombre. Su atractiva dualidad explica que transmigrara
a las creencias dionisíacas, de Creta, Grecia y todo el Oriente Medio,
hasta devenir en una serie de dioses que mueren y resucitan, cada
año, en las mitologías posteriores.
Una de las principales tareas encomendadas a Osiris era, la de bajar al
reino de los muertos, para ayudar a resucitar con gloria a quienes
hubiesen hecho méritos para ello. El posterior culto a Orfeo, estuvo
basado en el de Osiris, en cuyos templos se iniciaron numerosos
sacerdotes griegos. Y la creencia cristiana, relacionada con la
resurrección de los muertos y el rescate de las almas del Purgatorio,
parece una transposición evangélica del mito egipcio primitivo, que
hallamos en todas las religiones circundantes.
La creencia en seres resucitados no es exclusiva de ninguna religión. No
hay grandes diferencias, entre relatos similares, correspondientes a
diferentes religiones de origen emparentado.
Cierta originalidad sobre la idea de la resurrección guardan los
polinesios, con unos conceptos muy precisos. Se piensa, entre ellos, que
Enseñanzas.-
En la China clásica, las ciencias ocultas incluían la medicina tradicional,
junto a la astrología, la adivinación, la magia y la nigromancia. O sea,
eran ramas de un mismo árbol. Lo normal era que, tales actividades,
aunque diferenciadas, fuesen ejercidas por las mismas personas. Siendo
sus conocimientos interdisciplinarios.
Los Ismailitas, especialmente, fueron notables impulsores de la cultura
de su tiempo, por lo que traspasaron gran parte de los conocimientos
antiguos a la posterioridad. Sus estudios religiosos les obligaban a
cultivar las ciencias de la Naturaleza y las matemáticas. Además de las
ciencias ocultas y la magia. Así, no es de extrañar que formaran una
aristocracia del conocimiento, durante la Edad Media. Muchas de las
transcripciones del saber antiguo, griego, persa, egipcio, indio, son
debidas a eruditos ismailitas; que cultivaron el entendimiento de las
antiguas civilizaciones.
Dentro de la civilización islámica, quizá formen los Ismailitas el núcleo
más esotérico. Para ser escogido como miembro de esa congregación,
se siguen los procedimientos de captación, iniciación, y juramentación
de fidelidad, que vemos en otros clanes secretos. Caso de revelar, a
personas externas a su círculo, los secretos que debían compartir sólo
los iniciados, se convertían, automáticamente, en traidores. Lo que
equivalía a ser reos de muerte.
Números mágicos.-
El poder mágico de algunos números, también es considerado como tal
en muchas religiones. Sólo que no se admite explícitamente. Pero, en
Gemas.-
Podemos afirmar que, entre los amuletos más preciados de la
antigüedad, estuvieron siempre las piedras preciosas. Indagando
incluso hasta la prehistoria, encontramos que, ininterrumpidamente,
fueron ambicionadas. A éstas se les atribuían propiedades tanto
mágicas y, religiosas, como medicinales. Lo que hizo que su posesión
fuese anhelada. No bastaba su belleza, habían de tener virtudes
añadidas, tales como conexiones con los dioses y fuerzas de la
Naturaleza.
Entre las primeras materias con las que se comerció, encontramos toda
clase de gemas. Los hallazgos de lapislázuli, procedente de Asia Menor,
en yacimientos arqueológicos prehistóricos del norte de Africa y sur de
Europa, a miles de kilómetros de su origen, lo atestigua. Dados los
primitivos medios de transporte existentes en la época, y los peligros
del camino, eso significaba meses, o años, de recorrido. Es de suponer
que tales esfuerzos para su transporte fueran realizados porque su
Símbolos.-
El simbolismo de los colores pasó a ser ritual en diversas religiones. Ya
en la Biblia se indican colores obligatorios para distintos ornamentos
sagrados. En el Catolicismo se ve también en los diversos coloridos de
casullas y vestidos talares de los sacerdotes, así como en los adornos
eclesiales, según épocas del año y variedad de festividades o
ceremonias. En el Islam, el verde y el blanco son los colores del Profeta.
En el Universismo chino, si el blanco es luto, el negro es vicio, el rojo
virtud y felicidad y el amarillo poder mágico. Así, las interpretaciones
que el uso de un mismo color pueda tener en cada civilización son no
sólo distintas sino contradictorias.
al sur, durante los periodos glaciares de hace unos diez mil años, el
animal venerado era el oso. En la actualidad, aún conserva ciertos
honores entre esquimales, lapones y Ainos, el pueblo aborigen
primitivo, asentado en el norte del Japón.
Con la misma naturalidad se adoptó al león en Etiopía y Judá, en Creta
al toro, en Méjico al jaguar, o al halcón en Egipto. Tales cultos están
siempre ligados, íntimamente, con el Animismo.
En Egipto, las etnias primitivas eran totalmente identificadas con su
animal tótem. Estaba prohibido atacarlos, por considerárselos sagrados.
En muchos casos, algunos grupos familiares se estimaban como
descendientes de sus tótemes. Así, han llegado hasta nosotros
numerosas representaciones de halcones, cocodrilos, verracos,
escorpiones, escarabajos, etc. , que acompañaban a sus poseedores
durante toda su vida y eran depositados en sus tumbas, para que los
acompañasen en el más allá.
La Biblia contribuye, en algunos pasajes, a mantener la antigua creencia
en plantas prodigiosas y animales sabios. La actuación de la serpiente
en el Paraíso, como la extraordinaria diligencia de la burra de Balaam,
el adivino, que habló a éste, por disposición del Señor, para recriminarle
que la golpeara(Números) o la existencia del Arbol de la Ciencia, son
ejemplos de ello.
Las mutaciones humanas, van acompasadas a las de la Naturaleza.
Todo evoluciona, y, probablemente, en conjunto. La armonía natural no
deja resquicios. En las religiones índicas lo tienen muy claro: Los
humanos somos una parte más de la Naturaleza, como ésta es una
parte del Dios Creador. Minerales, plantas, animales, humanos,
espíritus, son distintos eslabones de la misma cadena ininterrumpida.
Religiosidad.-
La tendencia más generalizada, en las religiones monoteístas, es la de
identificar la magia con engaños del diablo, presuponiendo la relación
entre magos y demonios, como colaboradores. Esto obedece,
indudablemente, a la creencia fomentada de que todo bien sólo puede
provenir de Dios. Se olvida que, una gran parte de la magia, es
bienintencionada, aun cuando subyazca en ella el pecado de soberbia:
el de ‘seréis como dioses’ del Génesis. Pero, ¿de qué otro pecado
pueden estar más cerca los sacerdotes de todas las religiones, al
considerarse a sí mismos más próximos a la divinidad que el resto de
los humanos?
No siempre conduce antes a la verdad el pensamiento racional, o
racionalizado. A veces, la fantasía, ese salto en el vacío, propio de niños
y artistas, roza la realidad a menor distancia que la razón. El
pensamiento lineal, parte de una realidad, donde pudo haber algún
error en el origen, que se va arrastrando a lo largo de todo el recorrido.
La fantasía prescinde de la supuesta verdad básica y, por tanto, de sus
posibles errores. En el mundo de la fantasía, donde se mueven magias y
religiones, la verdad se crea de la nada. A partir de ahí, la lógica se
convierte en maleable, siendo todo posible.
San Pablo, en su 1ª Carta a los Corintios, dice: ‘’destruiré la sabiduría de
los sabios y anularé la inteligencia de los inteligentes’’. ’’¿Dónde está el
sabio?’’...’’¿no convirtió Dios en necedad la sabiduría del mundo?’’ En
afirmaciones evangélicas como éstas se basa la regla impuesta en el
Concilio Vaticano I, sobre la prioridad de la fe ante la ciencia.
Aquí, la lógica profana, física, no tiene valor alguno. Si algo debemos
tener bien claro, desde un punto de vista mágico - religioso, es que no
se ha de buscar la verdad en otros, sino en uno mismo. La propia
verdad, que surge de nuestro interior, es la válida para cada individuo.
El mundo está en nosotros, como nosotros estamos en él. Quizá
podamos considerar que el mayor defecto de cualquier sistema mágico
o religioso sea su acriticismo. O su aversión a todo lo que signifique un
análisis crítico del pensamiento propio. Las enseñanzas mágicas y
religiosas dan sus propias teorías por ciertas, sin más. Con la única
Ritos y Ceremonias.-
La magia es acrítica, tanto como las religiones. Aunque se valga de
pociones, bebedizos, sahumerios, baños, lavados, etc. , que puedan
encerrar en su motivación primera un cierto cúmulo de conocimientos
empíricos, es la creencia en el efecto del rito lo que motiva la ceremonia
y lleva a resultados. Importante no es tanto lo que se hace, sino cómo
se hace.
Tantos comportamientos animales parecen antecedentes ciertos de
pautas humanas que, a veces, se nos ocurren heredadaos de etapas
anteriores a la Humanidad. Está claro que el Hombre no puede
desligarse de sus circunstancias. La Naturaleza sigue influyendo en el
ser humano, por muy civilizado que se considere. No es lo mismo que
una persona se críe en las selvas del el Amazonas, o lo haga en una
gran ciudad, que venga al mundo en los trópicos o en la tundra
siberiana. Incluso en lugares cercanos cultural y geográficamente, no
es igual en carácter y actitud ante la vida, el pescador marino que el
pastor de montaña.
Creencias.-
Entre árabes, los ojos de color azul representan el mal, o a personas de
las que no puede uno fiarse. Ilustrativa es la referencia coránica al Día
de la Resurrección, cuando se distinguirá a los culpables por sus ojos
azules.
Aunque, 'quien haya hecho obras de misericordia y haya sido creyente,
no temerá la injusticia.' Aquí, como en la Biblia, se unen la fe y las
buenas obras. Ambas han de ir unidas, para ser válidas ante Dios.
Aunque se le dé más valor a la fe que a las obras.
Si de algo no podemos dudar es de nuestra existencia. El ‘’pienso, luego
existo’’, formulado por Descartes, no deja de ser un artificio, basado en
una creencia, llena de evidencias. Si salimos, en pensamiento, de
nuestro propio cuerpo, las dudas se multiplican. Hay tantas versiones
sobre el principio de la existencia, ya sea ésta material, espiritual o
divina, que cualquiera de ellas puede valernos. Mientras no intentemos
analizarla, eso sí. Pues ninguna resiste un examen razonado. Cualquier
respuesta que pretenda ser definitiva, se revelará como provisional, en
cuanto la enfrentemos a razonamientos contrapuestos. Esta casi
imposibilidad de llegar a demostrar una teoría sólida sobre el principio
de los tiempos, es la que han aprovechado los fundadores religiosos
para insistir en los insondables misterios de la divinidad. Partiendo de
inspiraciones insufladas, a medida de los tiempos y los pueblos donde
han crecido.
Las descripciones que, de Dios, han hecho algunos santos, ponen un
velo de tinieblas sobre su ser, más que aclarar la naturaleza divina.
En el discurso de Pablo en el Areópago, se lee: El Dios que hizo el
mundo,... no habita en templos hechos a mano... Él hizo provenir de uno
a todo el linaje humano,... y, en realidad, no está lejos de nosotros...
porque en él vivimos,... y somos, incluso, de su mismo linaje.' Aquí
reaparece, de nuevo, el Panenteísmo (todo en Dios).
SAquí, se hace coincidir la esencia de Dios con la representada por los
tratadistas panenteístas hindúes. Este párrafo explícito, sitúa al Dios
Creador de los cristianos muy cerca del Brahma hinduísta.
Cuando se afirma que el Hombre fue hecho a imagen y semejanza de
Dios, se lo está acercando, peligrosamente, a la divinidad. Dentro de la
religión islámica, se justifica la superioridad del hombre sobre los
espíritus malignos, en el relato de la Creación. Mientras que los
demonios fueron creados directamente del fuego, al hombre le insufló
Dios su aliento, para darle vida: con lo que se hizo partícipe de la
divinidad.
Ofrendas y Sacrificios.- .
que se hagan en honor de Dios, han de ser ejecutados, según las reglas,
sin interés propio alguno. Con ello, se gana la Eternidad.
Tales organizaciones religiosas, alimentan a sus desinteresados
productores, encargándose de administrar, a la mayor gloria del dios
correspondiente, los despreciables beneficios materiales generados por
sus adoradores. A cambio, el azul del cielo. Básico, para el éxito de esta
doctrina, es inculcar, insistentemente, el desprendimiento total de lo
material. O sea, el desinterés por los frutos de este mundo. Y el gran
mérito moral que supone darlo todo por su dios particular. Claro que,
este afán recolector, no es exclusivo de una sola religión, sino común a
casi todas. Las disposiciones económicas y recaudadoras son bastante
parecidas en la mayoría. Sólo que, algunas, aprietan sin ahogar.
No tienen para nada en cuenta que, una cosa es Dios, en sí, y otras las
infinitas religiones y comunidades que dicen servirlo y representarlo,
de distintas formas. ¿Todo es uno? ¿Necesita Dios portavoces y
administradores? Más bien, Dios está en nosotros, sin sujetarse a
normas ni dogmas, ritos o ceremonias. Todo lo accesorio es obra
humana. Dios es un sentimiento, que el Hombre necesita tener.
La forma más extendida de interpretar el sacrificio a los dioses como el
holocausto de la propia vida, es la reclusión monacal. En ella,
prescinden, en lo posible, del contacto humano, de la vida terrenal,
para concentrarse en los imaginados valores celestiales. Tal retiro
monástico, pretende alejar a los comuneros del 'mundo' y sus
tentaciones.
Se intenta, con ello, llegar a una mayor comunicación con la divinidad.
Al parecer, pretenden se intenta con ello desarrollar cualidades
místicas, poco comunes entre quienes viven inmersos en el mundanal
ruido. Como las de disfrutar con visiones celestiales. Numerosas
corrientes místicas, de origen reciente, calificadas como sectas algunas
de ellas, aseguran la captación definitiva de sus últimos adheridos,
mediante el aislamiento de tipo monástico, hasta que sus mentes se
hayan adaptado a los misterios de la nueva doctrina. Nada inusual en
las religiones preestablecidas.
recaudadorasLa vida monástica tiene viejas raíces. Las comunidades
religiosas parecen inherentes a toda religión organizada. En los cinco
continentes, y en cada religión predominante, han existido lugares
donde pudiesen llevar vida en común, sujetos a reglas de convivencia,
creyentes dedicados, como forma principal de vida, a la práctica y
difusión de sus creencias. Tanto en el Lamaísmo, el Taoísmo, el
Budismo, el Sintoísmo, el Cristianismo, o el Islamismo, como en las
nuevas religiones de nuestro siglo.
Entre los hinduístas existe una clase especial de servidoras del templo:
Se trata de las bayaderas o devadasis; Bailarinas del templo, que
cumplen, generalmente, otras funciones, tales como las de cuidar la
música y el ornato de las instalaciones dedicadas al dios. De ellas
existen dos tipos: las ambulantes o viajeras, que se desplazan entre los
distintos templos del mismo dios y las que ejercen su papel adscritas a
un determinado templo. En algunos casos, según el dios al que sirvan,
complementan su papel con las funciones propias de una sacerdotisa
del amor, ejerciendo su labor como consagración al dios.
Coincidencias.-
Es curioso notar la relación, de imposible casualidad, de palabras
semejantes, en civilizaciones distantes. El término tripi-taca que, en
sánscrito, significa triple cesto, o triple bolsa, y que, al mismo tiempo,
es el gráfico nombre de una doctrina budista, en español, lo usamos
como ‘petaca’, estuche de tres compartimientos, donde se guardaba el
tabaco, antigua planta sagrada en América, usada antes y durante
algunas ceremonias religiosas, la yesca o mecha, el pedernal, y la pipa.
Lo raro es que tal palabra se incorporase al castellano a través del
azteca, donde ‘petlacal‘, aparte de tabaquera, era también el cesto o
alforja, divido en dos bolsas, que se colocaba sobre los animales de
transporte, para equilibrar la carga a ambos lados. Cualquier
‘casualidad’ de este tipo nos hace pensar más en una causalidad que
incita a la investigación de su origen, pues interrelaciona a toda la
Humanidad.
Historias Sagradas.-
En El Corán, se dice: Los ángeles no interceden más que por aquellos de
quienes Dios está satisfecho. Consecuencia: antes de pedir favores a
Dios, se ha de estar en paz con él.
En los mitos tradicionales centroamericanos, vemos una similitud
estructural con los conceptos de las antiguas religiones persas, donde el
hombre tiene como misión ayudar a los dioses en su batalla contra el
mal. Convirtiéndose, por tanto, en un nexo, un punto de transición,
entre la luz y las tinieblas. Las evidencias van confirmando el lento
caminar de tales doctrinas. Desde Persia a la India, China, Japón, el
Pacífico y, por fin, América.
Magia primitiva.-
La interpretación religiosa de la historia, dándole significados celestiales
a sucesos incomprendidos, o a fenómenos de la Naturaleza, va dejando
secuelas en las religiones, que atribuyen, a sus respectivos dioses, la
acción determinante sobre lo acaecido. Un ejemplo común puede ser el
Diluvio Universal, que, en términos geográficos reales, podemos
describir como lo que, con toda probabilidad, fue, una gran inundación
habida en Mesopotamia, como consecuencia decomo consecuencia de
una elevación de la temperatura, tras un período glacial. Con el
resultado de grandes deshielos, ocurridos en las cabeceras de los Ríos
Tigris y Eufrates. De ello quedan pruebas, tales como sedimentos, más
o menos concluyentes. Se supone que pudo tener lugar entre los años
tres mil y dos mil quinientos antes de Cristo. Pero, desde luego, no
interrumpió la vida sobre el planeta. Todo lo más, fue una catástrofe
extraordinaria en una región especialmente húmeda, aunque sujeta a
un régimen muy irregular de lluvias. Su datación aproximada queda
más en manos de geólogos que de historiadores.
Ur o Nínive, que ya eran urbes activas, con núcleos habitados
continuadamente desde unos seis mil años antes de Cristo, seguían
siendo ciudades vivas en tiempos bíblicos, unos cuatro mil años
después. En el subsuelo, los restos arqueológicos se suceden, capa
Funcionarios Religiosos.-
La posición alcanzada por José entre el funcionariado egipcio, se aclara
por la costumbre egipcia de conceder privilegios sacerdotales a quienes
supieran interpretar el significado de los sueños. Tales expertos, se
convertían en consejeros faraónicos. Dado que el faraón, aparte de ser
monarca, estaba considerado como un dios, sus consejeros eran, al
tiempo, funcionarios del estado y dignatarios religiosos. Esta dualidad
fue habitual en las monarquías de la época. Más regla que excepción.
Por lo que el empleado público de alto nivel solía tener ambas
dignidades ensambladas.
Magia de la Palabra.-
Existen incluso palabras sagradas, que no se debían enunciar, como los
nombres del Señor, o que, por el contrario, atraen sobre quien las
pronuncia, los efectos deseados, sirviendo de llave al cumplimiento de
turquesas del Sinaí, apropiadas para los cultos de Astarté, por maderas
del Líbano para sus templos y palacios.
También la Mano de Fátima, preserva de malas acciones. La Cruz de
Caravaca rechaza las intenciones de nuestros enemigos. El escapulario
bendecido, impide, a quien lo lleve en el momento de la muerte, caer
en el Infierno, eEtc.. ,... El ajo, la cruz y el agua bendita, sirven como
repelentes contra para los vampiros y seres del Averno. Es de notar que
el agua bendita se usa en varias religiones, con fines parecidos. .
Transmisión de poder.-
. SiendoEl fin primordial es que sirve sisEn la magia, para que sea
efectiva la transmisión de poder a un objeto, mediante un conjuro, se
requiere, normalmente, que un oficiante, brujo, chaman o mago,
recite, cante, murmure o grite unas palabras determinadas, siguiendo el
rito apropiado al tipo de encantamiento deseado. A tales palabras,
dichas adecuadamente, se les supone un poder desencadenante de las
fuerzas propiciatorias. Esta expresión oral va, generalmente,
acompañada de ciertos gestos, signos o posturas. De su exacta
ejecución, dependerá su eficacia. Una respuesta, efectiva y afectiva, a
la necesidad de protegerse, de afirmar el yo contra el mundo. Por el
contrario, una ceremonia ejecutada sin cumplir todos los preceptos, no
sólo no cumple su fin, sino que puede ser fuente de pecado y condena.
Tal se dice del lavado de pies y manos, en la Biblia, preceptivo antes de
la Consagración, en el Judaísmo.
Ritos agrícolas.
Entre los antiguos ritos mágicos de la agricultura, destacaban las
invocaciones a los antepasados. Se suponía que éstos seguían viviendo
en un mundo subterráneo. De ellos se esperaba una intervención
favorable, que avivara las raíces de lo sembrado. Como señal de que,
aún difuntos, se los seguía teniendo como protectores del núcleo
familiar, queda la evidencia de que, en algunas sociedades primitivas,
se los enterraba en las inmediaciones de la vivienda, y en el huerto
familiar. La familia era el centro de los cultos primitivos. Restos
arqueológicos hallados en Palestina, entre las ruinas de Jericó,
anteriores al año tres mil antes de Cristo, lo evidencian. Se trataba del
culto a una trinidad de dioses, compuesta por padre, madre e hijo. En
estas referencias se basó probablemente Mahoma, para atribuir tal
composición, erróneamente, a la Trinidad cristiana.
El nacimiento de San Juan Bautista se hizo coincidir con el solsticio de
verano, día más largo del año. De gran significado agrícola, puesto que
dicho día se daba por concluida la recogida de los cereales tempranos.
A partir de la misma noche podía prenderse fuego a los rastrojos,
comenzando los festejos de la fertilidad. En tiempos precristianos era
noche de orgía. En la actualidad sigue teniendo connotaciones
orgiásticas, aunque más ocultas tras las fiestas de la cosecha y la
alegría de las danzas nocturnas alrededor del fuego. En algunos países
del centro y norte de Europa aún es costumbre que esa noche las
jóvenes casaderas dancen coronadas de flores. Terminado el baile,
arrojan sus coronas en el agua de algún pozo, río o fuente cercana.
Mientras se se desprenden de tiran las flores, se formulan el deseo de
conseguir el amor de su vida.
Espíritus y Fantasmas.-
La relación que los antiguos egipcios tenían con sus muertos era de
cotidianeidad. Seguían tratándolos como si estuvieran en vida.
Consultándoles sus decisiones y obrando de modo que los espíritus de
Culpa.-
El principio de que: Quien presencia un acto contra la ley divina, sin
denunciarlo, incurre en parte de la culpa, está ya recogido en diversas
normas religiosas, desde tiempo inmemorial. En el Levítico también se
representa este criterio.
Todo lo relacionado con la actividad sexual está fuertemente regulado,
tanto en la Biblia como en el Corán. Una de las posibles causas
prácticas de tal condena generalizada puede ser el ansia de control, de
poder, que los hombres 'santos' quieran tener sobre los 'pecadores'.
Se trata de colocar al creyente en situaciones de difícil amaestramiento,
como medio de aumentar los sentimientos de culpabilidad, para que no
escapen de su control. Por ello, son amenazados con especial dureza
quienes no sólo pecan contra la carne, sino que además lo hacen con
Portentos y curaciones.-
Se relata en los Hechos de los Apóstoles: ‘Dios obraba milagros, por
manos de Pablo, curando enfermos y endemoniados, sólo al contacto
con telas que habían sido tocadas por Pablo". Sin embargo, quienes
practicaban la magia, "llevaron ante él sus libros, para que fuesen
quemados delante de todos.’
Demonios y Diablillos.-
Casi toda la demonología cristiana ha brotado de fuentes exteriores al
Cristianismo. Pues son escasas las citas evangélicas que fundamenten
la extensa clasificación de seres malvados que encontramos en los
tratados postbíblicos, sobre todo de época medieval.
Los demonios, espíritus del Mal, son inherentes a casi todas las
religiones y teorías mágicas, como opositores a los espíritus del Bien, o
ángeles. Esta contraposición de valores ya era la base de las religiones
iranias, así como un principio original de la religión egipcia. Se trataba,
básicamente, de distintas descripciones de la eterna lucha entre el Bien
y el Mal, considerados de forma absoluta. Y personificados, para una
mejor comprensión popular, en los llamados Príncipe de la Luz y
Príncipe de las Tinieblas. El resultado final se supone que lleva siempre
a la victoria última del Bien. Pero, entretanto, no siempre las batallas
eran ganadas unilateralmente.
Entre las ocupaciones de los demonios bíblicos, hay una que, cuando
menos, resulta curiosa. Se dice que fue Azael, el diablo conquistador,
quien enseñó el arte de la cosmética a las mujeres. Si así fuera, debió
comenzar muy tempranamente sus enseñanzas. Ya en yacimientos
prehistóricos, de la Edad de Piedra, se han encontrado paletas
portadoras de afeites clásicos, tales como polvos de lapislázuli, para
perfilar el contorno de los ojos, o almagre y carmín(cochinilla) para
realzar el color rosado de mejillas y labios. Según estas informaciones,
otro demonio malvado, Belfegor, induce a los científicos a realizar
inventos, . pPara poder perderlos por el camino de la vanidad.
Realmente, Belfegor(Señor del Monte Fegor), era un dios de los
Moabitas, pueblo afincado en las cercanías de Jericó, al sur de la actual
Simbolismos.-
La utilización de símbolos e imágenes es tan común en magia como en
religión.
En el Universismo chino, se dice que el hombre fue hecho a imagen y
semejanza de la Tierra y el Cielo; con la cabeza redonda y los pies
cuadrados. Pues, los más antiguos tratadistas chinos, suponían que la
Tierra era cuadrada y el firmamento redondo.
Dentro del hombre, los chinos consideran que los pulmones son la
sede de los sentimientos tristes. Y, los relacionan con el metal, el oeste,
la noche y el frío.
En Babilonia, el toro era el símbolo de Adap, el primer hombre. El
dragón representaba a Marduk, el dios supremo, protector de Babilonia.
Adivinación.-
Algunas prácticas de adivinación, como la lectura del futuro en las
entrañas de animales sacrificados al efecto, han traspasado la noche de
los milenios. En Egipto, Grecia y la antigua Roma, se practicaban dichos
ritos adivinatorios antes de nuestra era. Actualmente, sigue teniendo
vigencia en algunas macumbas americanas, y en religiones africanas.
En la antigüedad, al parecer, lo de ser adivino o profeta era bastante
común. En los Hechos de los Apóstoles, relata San Pablo: ‘Entramos en
casa de Felipe, el evangelista’... ‘Tenía éste cuatro hijas, vírgenes y
profetisas. No se libró ni una, de su destino.’‘
Consideremos aAparte, esa relación, casi secuencial, de virginidad y
dotes proféticas, era únicamente exigida a las mujeres. De los hombres
nunca se dice: ‘profeta y virgen’. Sin embargo, en lo tocante a mujeres,
incluso las brujas habían de ser solteras, para estar a la altura de su
dignidad. Aunque se admitiera que algunas brujas pudieran adquirir la
categoría de madres solteras, y viceversa. pudieran adquirir la
categoría de brujas. En cuyo caso les era dado transmitir la condición
brujeril a sus hijas. Si vemos que la religión está dominada,
modernamente, casi en exclusiva por el hombre, aunque las
practicantes y transmisoras sean, mayoritariamente, mujeres, la
magia parece dar mayor acogida, como oficiantes, a las mujeres.
En algunos pueblos que conservan sus culturas primitivas, la magia se
puede transmitir sólo por vía maternal. Aquí cabe la posibilidad de que
una madre pase la magia propia a un hijo varón, pero éste, a su vez,
pierde el poder de transmisión a sus hijos o hijas. En él muere el linaje.
La transmisora de los poderes mágicos ha de ser, invariablemente, una
mujer.
Sueños.-
Los sueños, las ensoñaciones, tienen muchas veces el carácter de
representaciones teatrales, donde vemos, adornados con abundante
parafernalia, nuestros deseos cumplidos. Otras veces, se manifiestan
nuestros temores, que nos agobian con su posible realización. En
cualquier sentido que actúe nuestra disminuida consciencia, se
prestarán a las interpretaciones que quiera dárseles. En religión, como
en magia, han sido utilizados los sueños, visiones y pesadillas como
fuentes de saber. Pero, más que relacionándolo con la personalidad del
soñador, como suele hacerse en psicología o psiquiatría, se les da un
significado exterior al individuo. De forma que, a cualquier amalgama
de imágenes visionadas durante el sueño, se le confiere una
interpretación acorde con las creencias o conveniencias de quien las
traduce.
Apariciones divinas. -
Dice Dios a María y Aarón": ‘Hablo a Moisés, mi siervo, boca a boca, y él
ve claramente a su Señor, no por enigmas o figuras’.
Imágenes sagradas.-
Las imágenes bajadas del cielo, no son exclusivas de una sola religión.
En los Hechos de los Apóstoles se relata cómo los naturales de Éfeso se
sentían orgullosos de habitar tan privilegiada ciudad. Pues: ’ ¿Quién
puede ignorar que la ciudad de Efeso se honra con la custodia del
templo de Artemisa, (diosa virgen y madre), cuya imagen bajó del
cielo?’
Mitos y Leyendas.-
En la teología egipciaca, Osiris no sólo era el dios de los muertos, sino,
también, el dios que incorporaba parte de su ser, su fuerza, a todo lo
naciente. Igual da que sea una planta, un animal, o un hombre.
La leyenda del perro que devora la Luna cada mes, en la mitología
china, era ya referida en el Egipto tolomaico. Sólo que, entonces, el
lugar del perro lo ocupaba un cerdo negro. Se ha de tener en cuenta
que, para los egipcios, éste era el animal nauseabundo, encarnación de
Seth, el espíritu del mal. Es de notar que, su aversión por el cerdo, la
heredaron civilizaciones adyacentes a Egipto, como la judía y la árabe,
que lo introdujeron en sus libros sagrados como el animal impuro por
excelencia. En los Evangelios, conserva su condición de refugio para los
espíritus impurosinmundos, cuando que salen del cuerpo de los
endemoniados. Respecto a esta prevención, podemos decir que,
Leyes Religiosas.-
Una cosa podemos considerar clara, respecto al derecho
consuetudinario de los pueblos, y es que, las religiones que hayan
tenido asiento en sus territorios, vhan dejando huellas en las
costumbres de la comunidad. Por tanto, en el derecho y las leyes. No
entienden de igual forma los derechos del individuo, quienes hayan sido
educados en diferentes credos religiosos. Una vez se implanta,
mayoritariamente, una religión cualquiera en una sociedad, impregna
con su ética todas las instituciones. Leyes, sociedad, enseñanzas, se
convierten en vasallos de la religión imperante. Esta envuelve en un
halo religioso todos los actos y etapas de la vida, privada y comunitaria,
de los pueblos. Los pueblos cazadores piden perdón al animal acosado.
Nunca matan más de lo necesario. Cuando sus necesidades de alimento
están cubiertas, cesa la cacería. Para no irritar a la Madre Naturaleza y
a sus fuerzas coadyuvantes. Nunca saldrán a la caza por el placer de
matar. Sólo cuando precisan comer. Es el hombre moderno, desligado
de sus raíces, el que usa la caza como diversión.
No hay que buscar en siglos pretéritos para encontrar testimonios. Un
estudio somero de las legislación yes actualesactual de cualquier país,
desvela en éstas un reflejo de la sociedad y, consecuentemente, de la
religión predominante, que marca la moral oficial. Desde la antigüedad,
los grandes legisladores invocaron la inspiración de Dios para justificar
y hacer respetables sus leyes. Curioso es que, ninguno de estos dioses,
olvidó colocar, a legisladores y sacerdotes, por encima del pueblo llano.
Moisés, Mahoma, Manu, Hammurabi, los césares romanos, los faraones
egipcios, los zares rusos, o los emperadores europeos, consagrados por
los Papas, dan el tipo perfecto del codificador político - religioso, que
gobierna por la gracia de Dios y con su ayuda.
siclos de plata por el varón o tres siclos de plata por la hembra. Desde
que cumplían un mes, hasta consumar los cinco años.
Quien no cumpliera las reglas del Templo podía recibir un castigo
extremo. Sobre todo si no se completaban las exigencias relativas a los
privilegios sacerdotales. En el Libro de los Números, vemos que Yahvé
castiga, fulminantemente, a doscientos cincuenta levitas y a sus
respectivas familias. "Hizo que la tierra se los tragara a todos ellos". El
motivo de tal catástrofe bíblica, puede parecer liviano a observadores
actuales: Su pecado fue el de haber ofrecido incienso al Señor. La falta
de equilibrio que parece haber en esta singular historia, se explica
conociendo la motivación de la misma. Tras la fijación de las reglas del
Templo, quien no fuera sacerdote aarónida, es decir, descendiente de
Aarón, no podía ofrecer sacrificios al Señor, so pena de muerte. Pero,
quien parece haber escrito estas reglas, era sacerdote aarónida. Esto no
tendría mayor trascendencia si no fuera porque, la parte que
correspondía a los sacerdotes por cada sacrificio ofrecido, era su
medio de vida directo. Si se generalizaba la potestad de ofrecer
holocaustos, los sacerdotes perdían no sólo sus ingresos, sino también
su poder. Se ha de tener en cuenta que, según las reglas ortodoxas
establecidas, el perdón de los pecados se obtenía sólo si el sacrificio
había sido hecho por un sacerdote. Y esto último era importante para
salvaguardar los privilegios de la clase sacerdotal. No bastaba la buena
intención del pecador, había que pedir perdón correctamente, según el
ritual, a través del sacerdote. Si no, el sacrificio no sólo era inútil, sino
contraproducente. Se convertía en una nueva ofensa al Señor.
Crudamente expresado: Los sacerdotes se erigían en taquilleros del
cielo, y, si no se les pagaba el precio estipulado la entrada, cerraban la
puerta de entrada.
En el mundo hinduísta, el derecho védicohindú también proclama su
origen divino. Esto lo ha convertido en intocable, durante milenios. Sólo
la llegada de la democracia, en tiempos muy recientes, ha empezado a
conmover los cimientos del caduco edificio jurídico - religioso. La
división de castas, con el subsiguiente favor de los privilegiados, y
consecuente detrimento de los intocables, parias y otras clases bajas,
se reflejaba y refleja en todos los órdenes de la vida. Los brahmanes,
casta intelectual y sacerdotal, se cuidaron mucho de proteger sus
privilegios. Ya que ellos mismos fueron los redactores e intérpretes del
dictado divino. Dado que los sacerdotes eran hombres, tampoco
salieron muy favorecidas las mujeres. Como ejemplo, bástenos saber
que la cremación de las viudas, vivas, junto con el cadáver del esposo
recién fallecido, ha sido práctica común hasta tiempos modernos. Ella
no debía sobrevivirle. En el derecho hinduísta clásico, la mujer estaba
sometida a la autoridad de su padre, esposo, hermanos, e incluso de
sus hijos varones.
Respecto a los budistas, podemos decir que han tenido la manga ancha
en la aplicación de derechos y deberes. En la práctica, se limitan a
Aún cuando, con toda precisión, que no ofrece lugar a dudas, se pide
que no se hagan dioses de fundición, él la cinceló de bronce. Cabe
preguntarse si los demás, métodos de reproducción gráfica pudieron
quedar fuera del tabú bíblico. Aún cuando se insiste: 'No os fabricaréis
ídolos ni estatuas '.
Esta serpiente de bronce fue llevada en sus desplazamientos por el
desierto delante del Arca de la Alianza. Más tarde, fue introducida en el
Templo de Jerusalén, donde se la conservó durante siglos. A lo largo de
cientos de años fue tratada con honores religiosos, como se lee en el
Libro de los Reyes. Pues, quemar incienso delante de una imagen,
equivalía a un acto de adoración, y esto se había convertido en práctica