Capitulo 1 PDF
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Terapeuta: Cuéntame qué te trae por aquí. Mientras lo haces, ¿puedo interrumpirte con
preguntas? Solo serán preguntas que me ayudarán a entender cómo se siente
experimentar lo que te trae aquí. Una vez que sienta que lo entiendo—a grandes
rasgos, por supuesto, no detalladamente—te lo reflejaré. Puede pasar una de estas tres
cosas. Puedes decir: “Sí, eso es todo.” O puedes decir: “Eso es prácticamente todo,
pero hay un par de cosas más.” O puedes decir que no lo entendí en lo absoluto, en
ese caso espero que me des otra oportunidad. Luego, cuando sientas que lo entendí, te
mostraré un punto de vista desde el cual podemos trabajar. ¿Estás de acuerdo con
eso?
En la conversación que sigue, pregunta sobre el impacto de lo que los clientes están
experimentando. ¿Cómo les afecta en sus relaciones, trabajo o estudio, actividades de ocio, y su
autocuidado? Asegúrense de tomarse el tiempo para hacerlo, ya que no darse un tiempo para
conectar y validar su experiencia a menudo causa que las personas se estanquen y se vuelvan
poco receptivas hacia los intentos de ayudarlas. Una vez que los clientes reconozcan su reflejo de
su experiencia y perciban que entiendes dónde están, se sentirán validados y escuchados.
También estarán más abiertos a observar lo que sea que quieras mostrarles. Esto sienta las bases
para presentar el punto de vista de la flexibilidad psicológica.
Presentando la Matrix
La matrix es, en esencia, una forma de presentar y trabajar en un punto de vista funcional
contextual, al cual nos referiremos de diversas maneras, como el punto de vista, el punto de vista
de la flexibilidad psicológica, o la matrix. La terminología importa menos que asegurarse que
operamos desde esta perspectiva.
Encontramos que no es necesario empezar hablando de qué se trata este punto de vista.
Preferimos socializar a los clientes en él, ayudándolos a dar un primer vistazo a la matrix. Asi
que pregunta a los clientes si te dejan enseñarles un punto de vista. Si aceptan, puedes proceder
por las siguientes líneas.
Terapeuta: Este es solo un punto de vista. No pretendo que sea el único punto de vista posible, ni
el mejor, o incluso que sea una representación precisa de la realidad. Es simplemente
un punto de vista que las personas encontraron que facilita elegir hacer lo que es
importante, incluso en presencia de obstáculos. Si miramos a través de este punto de
vista desde la óptica de un animal, digamos un conejo, en cualquier momento
podemos verlo aproximándose a cosas que pueden percibirse con los cinco sentidos,
como zanahorias u otros conejos, o alejándose de cosas percibidas con los cinco
sentidos, como, por ejemplo, un perro que le está ladrando. A veces incluso podemos
ver conejos aproximándose a las zanahorias mientras se alejan de perros que ladran.
Mientras dices estas palabras, dibuja una línea horizontal en una hoja de papel, con flechas
en cada extremo, y escribe la palabra “aproximación” a la derecha, y la palabra “evitación” a la
izquierda. (También puedes usar una pizarra para esto, pero si lo haces, querrás documentar al
final la matrix completa, quizás tomándole una foto con tu teléfono y el del cliente.)
Luego comienza a dirigirte a explicar cómo se aplica esta dinámica a los seres humanos,
diciendo algo similar a las siguientes líneas.
Terapeuta: Los seres humanos son similares a los conejos, en el sentido de que nosotros también
nos aproximamos o alejamos de cosas que son percibidas con los cinco sentidos,
como las zanahorias y los perros. Pero no creo que estés aquí porque te encantan las
zanahorias o por un miedo paralizante a los perros que ladran. Allí es donde las cosas
por debajo de la línea horizontal aparecen. Los seres humanos también podemos
acercarnos a aquellas cosas importantes para nosotros, que no siempre pueden
experimentarse con los cinco sentidos. Y de la misma forma, nos podemos alejar de
aquello que no puede ser percibido con los cinco sentidos, como el miedo,
pensamientos difíciles, o recuerdos. Así que ahora veamos si podemos echar un
vistazo a este punto de vista desde tu propia perspectiva.
Llegado este punto, dibuja una línea punteada vertical que atraviese la línea horizontal. Con
la práctica, empezarás a dejar un espacio en medio de ambas líneas.
Seguidamente, comienza a guiar a tu cliente en su exploración de la matrix con cinco
preguntas clave:
¿Qué haces o podrías hacer para acercarte a las personas o cosas que son importantes?
Terapeuta: Necesito hacerte un par de preguntas más para terminar esta exploración inicial y ver
si estarías dispuesto a trabajar desde esta perspectiva. Imagina que pudieras elegir
entre dos vidas posibles: la primera, aquí a la izquierda (señalando el lado izquierdo
de la matrix), en el cual lo que haces principalmente -pero no exclusivamente- es
alejarte de esta clase de cosas (indica la parte inferior izquierda); y la segunda vida,
aquí a la derecha (señalar el lado derecho de la matrix), en el que gran parte de lo
que haces, -pero no exclusivamente- es acercarte a personas o cosas importante para ti
(señalando la parte inferior derecha). Además, imagina que la elección que estoy por
invitarte a realizar podría determinar el resto de tu vida, desde este momento en
adelante. ¿Cuál de estas dos vidas—la del lado izquierdo o la del derecho—crees que
elegirías?
Habiendo hecho esta pregunta a miles de personas, hemos notado que una mayoría
abrumadora vota por la segunda vida. Al combinar todas nuestras experiencias, menos de una
docena de personas eligieron la primera opción de vida. Votando por la segunda vida, las
personas están eligiendo vidas valiosas por sobre una vida centrada en controlar pensamientos,
emociones y otros obstáculos internos difíciles. Esto es lo que sucede cuando simplemente
presentas el punto de vista de la matrix e invitas a los clientes un clasificar sus experiencias en la
matrix. Los clientes, que con toda probabilidad recurrieron a ti para aprender a evitar más
efectivamente o a controlar la experiencia interna no deseada, en cambio elegirían de buena gana
aproximarse a lo que les importa. Esto crea espacio, y a la vez les ayuda un comenzar a practicar
la flexibilidad psicológica de inmediato, dado que están eligiendo acercarse a lo valioso y
realizan esa elección a la vista de algunas cosas que usualmente los llevan a efectuar
movimientos de evitación. En esencia, la pregunta refuerza el contraste, al punto que la mayoría
de las personas naturalmente escogen el control apetitivo sobre el control aversivo.
A continuación, puedes hacer la pregunta completa de la flexibilidad psicológica: “¿Estarías
interesado en aprender la forma más fácil de elegir hacer esto (mientras señalas el cuadrante
superior derecho), incluso en presencia de esto (señalando el cuadrante inferior izquierdo)?”.
De nuevo, desde nuestra experiencia, la mayoría de la gente responde que sí.
Esto sella el contrato terapéutico ya que, una vez que los clientes respondieron estas dos
preguntas, efectivamente se apuntaron a un entrenamiento en flexibilidad psicológica como
objetivo terapéutico primordial. Y efectuando esa elección, ya están volviéndose más flexibles.
Ahora tú y tus clientes tienen una vara con la cual evaluar los progresos: ¿Están notando que
resulta cada vez más fácil elegir movimientos de aproximación, incluso en presencia de la
aparición de obstáculos internos?
Terapeuta: Algunas personas pueden llegar a sentir como si las cosas que aparecen en el extremo
inferior izquierdo son como olas que estaban tratando de detener, o de las que
buscaban alejarse nadando. Sin embargo, no importa lo que hagan, eventualmente no
podrán detenerlas, y sin importar lo rápido que naden, las olas los alcanzarán.
Entonces se hunden, se caen y son arrastrados al mar. Pero hay una alternativa:
pueden aprender un surfear. Cuando practicas surf, no necesitas contener las olas o
escapar de ellas, ¿verdad? Y no solo no te ves arrastrado, sino que incluso puedes
elegir en qué dirección ir. La cuestión es que es posible que esas olas aparezcan aquí.
Pueden referirse un nuestro trabajo, a nosotros mismos o a nuestra relación. En
realidad eso es normal y aceptable, y nos dará preciosas oportunidades de notar esas
olas cuando aparezcan. Después podrás empezar un surfearlas mientras te acercas a la
vida y a las relaciones que quieres.
Preguntas frecuentes
¿Tengo que presentar la matrix en el orden presentado en este capítulo?
No necesariamente tienes que empezar en el cuadrante inferior derecho y finalizar en la parte
superior derecha. Luego de que aprendas a conectar las experiencias del cliente con el diagrama
de la matrix, puedes ajustar la secuencia si se requiere. Con eso dicho, nosotros hemos notado
que la secuencia que presentamos funciona bien. Comienza con quién o lo que es importante
(reflejando los valores, que son el corazón mismo de ACT), y concluye con lo que los clientes
pueden hacer para aproximarse a esos valores (o acción comprometida, lo que es vital para el
trabajo en ACT).
La primera pregunta que se hace es importante porque deja una impronta en las respuestas de
las personas durante la sesión. Es como una bifurcación en el camino. Un camino, el de la
aproximación, conduce a hablar de los valores. El otro, el de la evitación, usualmente lleva a
hablar de los problemas y a atascarse. Si comienzas por la izquierda, podrías predisponer a tus
clientes a hablar de los problemas y a buscar soluciones para ellos. Luego, cuando quieras hablar
de lo valioso y de cómo aproximarse a ello, podría ser más difícil moverse al lado derecho de la
matrix.
Aunque generalmente es mejor empezar por el lado derecho, hay más opciones para
continuar. Por ejemplo, luego de invitar a los clientes a enumerar quienes o qué cosas son
importantes, puedes preguntarles qué pueden ser vistos haciendo cuando se aproximan a esas
personas o cosas, completando el lado derecho antes de moverse hacia el izquierdo. Dicho esto,
recomendamos que primero practiques la secuencia presentada en este capítulo. Una vez que
seas hábil en este enfoque, puedes cubrir los cuadrantes en cualquier secuencia que parezca
workable.
¿Qué sucede si los clientes dicen que nadie ni nada es importante para ellos?
Antes solíamos preguntar primero “¿Qué es importante para ti?”. De cuando en cuando, un
cliente respondía, “No lo sé”, “Nada” o “Ya nada es importante”. Desde que cambiamos y
comenzamos a preguntar “¿Quién es importante?”, no hemos tenido ni un solo cliente que
responda “nadie”. Sin embargo, si un cliente respondiera “nadie ni nada”, esto es lo que
decíamos, con gran éxito: “Imagina que pudieras elegir entre dos vidas, una en la cuan alguien o
algo es importante, y otra en la cual no hubiera nada que fuera importante. ¿Cuál de estas dos
vidas elegirías?”. Con toda probabilidad, los clientes dirán que prefieren una vida con personas y
cosas importantes. Entonces simplemente puedes escribir “Alguien o algo importante” en el
cuadrante inferior derecho, y decir: “Hagamos que dilucidar quién o qué es importante sea parte
de nuestro trabajo, ¿de acuerdo?”.
Terapeuta: La buena noticia es que esta es una habilidad que puedes aprender, y vamos a
trabajar en eso. De hecho, y esto puede sonar raro, ya estuviste practicándola al elegir
aproximarte a lo importante, aún en presencia de tus dudas y preguntas sobre cómo
hacerlo, sumado a todos los obstáculos internos que has notado en el cuadrante
inferior izquierdo. Entre éste y el próximo encuentro, ve si puedes notar algunos de
tus movimientos de aproximación y de evitación, y tal vez incluso algunas
experiencias internas que aparecen junto con esos movimientos.
Además, ten en cuenta que la matrix es una herramienta para ayudar a las personas a
encontrar sus propias soluciones, identificando lo que funciona para ellos. No hay muchas
soluciones ya preparadas para los problemas de la vida humana. Qué es lo que funciona siempre
depende del contexto. Si les damos soluciones pre-fabricadas, genéricas, es posible que no sea
una buena opción, y los clientes pueden no ser capaces de adoptarlas por completo. O quizás
funcionen, pero solo por un corto lapso. Darles a los clientes una herramienta para identificar y
probar sus propias soluciones—la matrix—tendrá un impacto más duradero en su habilidad de
vivir una vida valiosa.
Profundizando
En este primer vistazo de lo que se encuentra detrás del trabajo con la matrix, discutiremos
los procesos de priming, el conectar a los clientes con su experiencia y con la matrix, el
apartarse de historias atascadas, y tomar las ideas con liviandad. También discutiremos algunos
de los procesos de marcos relacionales que pueden jugar un rol en el paso que fue delineado en
este capítulo.
Priming
Sin importar que enfoque utilices para introducir la matrix a los clientes, hablarás con ellos
sobre acercarse a personas o cosas importantes para ellos en presencia de experiencias internas
no deseadas. Como se discutió en la sección de Preguntas frecuentes, la mayoría de los clientes
llegan esperando contarte sobre sus experiencias indeseadas, como la depresión, y que les digas
como deshacerse de ellas. Durante todo el paso 1, les presentas una perspectiva diferente,
primándolos para que miren desde un nuevo punto de vista.
Así que miremos más profundamente a este proceso de priming. Mientras lees la palabra
“manzana”, casi instantáneamente estás haciendo un priming, así puedes responder más
rápidamente a la palabra “naranja”. Cientos de experimentos han demostrado los efectos del
priming. En el más famoso de ellos se imprimó a estudiantes, dándoles una tarea que incluía un
montón de palabras asociadas con los ancianos (Bargh, Chen, & Burrows, 1996). Luego a esos
estudiantes y a un grupo control se les pidió que caminen por un pasillo, y aquellos que habían
sido imprimados con palabras relacionadas con los ancianos caminaban más lentamente. El
priming sucede automáticamente y es inevitable, explicando por qué las primeras impresiones
son tan importantes—y el por qué te alentamos a presentar primero el lado derecho
(Aproximación) de la matrix.
Retrocediendo un poco, los medios masivos priman a las personas a venir a la terapia
buscando soluciones para sus problemas. Si empiezas preguntándoles por los problemas, estás
predisponiéndolos a que esperen una solución. Especialmente sucede en aquellos clientes que
ven a especialistas que pueden hacer prescripciones.
Trabajar con la matrix de ACT es un proceso, no una solución cerrada. De hecho, una parte
importante del proceso es ayudar a las personas a notar que pasar mucho tiempo buscando
soluciones a problemas puede ser parte de sus problemas. A través de la matrix, pueden cambiar
de enfoque y ver que puede ser más beneficioso en cambio comprometerse en un proceso
continuo y cotidiano diario de descubrimiento de comportamientos (internos y externos) que
promueven una vida valiosa. Apegarse a resolver problemas muchas veces se interpone en ese
proceso.
Finalmente, dado que las personas ya están primadas para buscar soluciones a problemas, si
comienzas presentando el lado izquierdo (evitación) de la matrix, los clientes pueden caer en
largas historias acerca de sus problemas y soluciones frustradas. Entonces te enfrentarías con la
tarea de interrumpir una historia bien ensayada, y eso puede ser complicado.
Enmarcando
De acuerdo a la Teoría de los Marcos Relacionales (RFT), nos enmarcamos a nosotros
mismos en el ser. Si bien puede sonar extraño, considera esto: Cuando llegaste al mundo, no te
conocías a ti mismo como “yo”. Solo eras un pequeño ser haciendo cosas, mayormente en
respuesta a tus experiencias sensoriales. Mientras ibas adquiriendo el lenguaje, gradualmente
aprendiste a diferenciarte verbalmente (yo-aquí) de los otros (tu-allá). Pronto el “yo” tomó toda
clase de significados para ti, mientras construías una historia sobre “mí”.
Cuando mostramos a las personas la matrix para facilitarles el punto de vista de la
flexibilidad psicológica, los entrenamos para extender esa visión de sí, haciendo que noten
intencionalmente el “self” (el sí mismo) a través del proceso de vivir en, al menos, dos
dimensiones experienciales: percibir el mundo y a sí mismo en términos de los cinco sentidos y
la experiencia interna, y percibirlos en términos de sus comportamientos (aproximación y
evitación). En el trabajo con la matrix, regularmente retornamos a esas dos tareas básicas de
discriminación, porque funcionan muy bien para expandir la forma en que los clientes enmarcan
activamente sus experiencias y su sentido del self mientras los momentos de sus vidas se
despliegan.
En tanto que la matrix es presentada en el paso 1, los comportamientos de enmarcado más
útiles que enseñas a los clientes involucran la discriminación de relaciones jerárquicas y
deícticas. En RFT, los marcos de perspectiva son conocidos como marcos deícticos. Incluyen el
aquí-allí, el ahora-después, y el yo-tú. Desarrollar la habilidad de notar estas tres diferencias en la
perspectiva nos lleva a volvernos conscientes de nosotros mismos, de una forma auto reflexiva.
Estos tres marcos son la clave de un sentido estable del self y de las habilidades de toma de
perspectiva, y también están relacionadas con la empatía, la compasión y la flexibilidad. En
cualquier momento, nuestro sentido del self es una colección de incontables experiencias y de
nuestro enmarcado de esas experiencias. “Ahora me siento bien”, “Ayer me sentía enojada”,
“Voy a la tienda”, “Fui a la tienda”, “Reprobé el examen”, “Obtuve un aumento”, “Abracé a mi
compañero”, “Quiero ponerme mejor”, “Me siento desesperanzado”, “Estoy deprimido”, “Me
voy a mejorar”, “Sólo voy a empeorar”, “Soy una luchadora”, “Soy un perdedor”—todos esos
dichos son partes de la constelación que constituye nuestro sentido del self en un momento dado.
Cuando es saludable, este sentido del self se mantiene flexible y abierto a nuevos marcos y
nuevas experiencias. Cuando el énfasis está en los productos de los marcos, como sentirse de una
manera particular (como suele suceder en las interacciones típicas y en nuestro discurso interno),
esto suele llevar a marcos inflexibles de experiencia del self y a conceptos inflexibles del self.
Mediante la activación de marcos deícticos y jerárquicos, el uso de la matrix puede expandir y
ampliar nuestro sentido del self para incluir todas nuestras experiencias como partes normales de
la vida y conducir a definiciones más amplias de lo que podemos lograr. En otras palabras, nos
da un sentido más amplio de quién somos y de quién podemos ser.
Los marcos jerárquicos involucran enmarcar algo como parte de algo más (A es un atributo o
miembro de B). Activar los marcos deícticos también puede activar los marcos jerárquicos en el
sentido de que toda la experiencia interna y el comportamiento son enmarcados como parte de la
experiencia y del self de uno mismo. El resultado de este proceso de aprender un repertorio de
marcos es la emergencia de una perspectiva y sentido del self estables, a veces denominados el
yo que observa. Este proceso, el cual es central para ACT, es una especie de comportamiento que
nos provee de una perspectiva desde la cual notar todas nuestras experiencias y elegir nuestro
comportamiento.
Cuando las personas ubican elementos en la matrix, de hecho se encuentran en la posición de
Yo-aquí-ahora, observando su experiencia como si fuera la de otra persona: tu-allí-después.
Muchas veces eso les permite tomar suficiente distancia y perspectiva para elegir el
comportamiento que va en la línea de nuestros valores. Este tipo de proceso puede ser central en
la construcción de marcos. Quizás emerja de vernos a nosotros mismos desde la mirada de otros.
Antes de que puedas enmarcar algo como “igual a”, “diferente de”, “contrario a”, “mayor que” o
“menor que” otra cosa, y así sucesivamente, primero debes retroceder y tomar perspectiva de las
cosas enmarcadas por esas relaciones. Entonces, en el fondo, la matrix se trata de marcos
deícticos y jerárquicos, y adoptar el punto de vista de la matrix ejercita el músculo de
observación del self.
Como verás a lo largo de este libro, usar la matrix activa una compleja red de relaciones que
ayuda a las personas a encontrar nuevas relaciones y elegir acciones valiosas, incluso desde las
situaciones de mayor atascamiento. Dependiendo de la historia del cliente, algunos de estos
marcos pueden comenzar a activarse desde el vamos, haciendo que las cosas avancen. Por
ejemplo, cuando los clientes clasifiquen un comportamiento como de aproximación o de
evitación, pueden empezar a percibir los movimientos de evitación como menos atractivos si se
enmarcan como opuestos a los de aproximación. De forma similar, pueden comenzar a percibir
los movimientos de acercamiento como más atractivos si se enmarcan como una parte de
aproximarse a quiénes o aquello que es importante para ellos. Esos nuevos marcos podrían
incrementar la probabilidad de que aparezcan movimientos de aproximación, y por lo tanto,
contribuir a una mayor flexibilidad en una situación dada.
Checklist del paso 1
Qué hice
❏ Aclaré al cliente que no necesariamente tiene que hacer la práctica diaria; y que
todo lo que necesita hacer es notar si la realiza y si no la lleva a cabo.
❏ Explicar