BLOQUE I UD 1, 2 y 3
BLOQUE I UD 1, 2 y 3
BLOQUE I UD 1, 2 y 3
RIESGOS LABORALES
• Unidad didáctica 2: Daños derivados del trabajo. Los accidentes de trabajo y las
enfermedades profesionales. Otras patologías derivadas del trabajo.
Desde los tiempos más remotos de la humanidad, las personas han tenido que realizar una serie
de actividades para poder sobrevivir, muchas de ellas, en presencia de riesgos importantes para
su seguridad y salud.
A medida que ha pasado el tiempo, la sociedad no asume, de la misma forma que antes, la
presencia de determinados riesgos en el trabajo, y se demandan mejoras en las condiciones en
las que se realiza dicho trabajo.
En esta unidad didáctica analizaremos las relaciones entre trabajo y salud, identificaremos los
factores de riesgo susceptibles de ocasionar trastornos o daños en la salud de los trabajadores/as
y profundizaremos en los métodos de trabajo para alcanzar el <estado de bienestar> de manera
que se permita el desarrollo de los individuos a través de su trabajo. Unidad didáctica
fundamental, pues contempla interrelaciones positivas y negativas entre el trabajo y salud, bajo el
prisma de la Seguridad en el trabajo, Higiene industrial, Ergonomía y Psicosociología aplicada y
Medicina del trabajo.
1. OBJETIVOS
Se pretende que se adquieran conceptos fundamentales básicos de trabajo y salud, qué es lo que
se entiende en este momento sobre condiciones de trabajo, así como cuáles son sus posibles
repercusiones sobre la seguridad y la salud en el trabajo.
En el presente capítulo, se persigue también, dar a conocer los derechos y deberes de los
trabajadores/as establecidos en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, con el fin de evitar
los daños a la salud ocasionados por el trabajo.
- Etimológicamente, la palabra << trabajo >> deriva del latín tripalium, que era una herramienta
parecida a un cepo con tres puntas o pies que se usaba inicialmente para sujetar caballos o
bueyes y así poder herrarlos. También se usaba como instrumento de tortura para castigar a
esclavos o reos. De ahí que tripaliare significa: tortura, atormentar, causar dolor.
- Acepción social: << Trabajo >> es toda actividad productiva que desarrolla el ser humano en un
ámbito social generador de relaciones humanas.
- Acepción económica: << Trabajo humano >> como una mercancía. El trabajo es fuente de
riqueza y un medio para satisfacer necesidades materiales. El trabajo es concebido como un
factor de la producción representado por la actividad humana aplicado a la producción de bienes y
servicios, y cuya retribución se denomina salario.
- Acepción jurídica: Se denomina << trabajo por cuenta ajena >> a la prestación de servicios
retribuidos dentro del ámbito de organización y dirección de otra persona, física o jurídica,
denominada empleador/a o empresario/a.
Aún siendo un concepto no muy sencillo de explicar, se ha llegado a aceptar como concepto de <<
trabajo >>, a la actividad social convenientemente organizada que, a través de la combinación de
una serie de recursos, como pueden ser principalmente, el propio trabajador/a, los materiales,
productos, equipos, máquinas, energía, tecnologías y organización, permite al ser humano
alcanzar unos objetivos prefijados y satisfacer unas necesidades.
La realización del trabajo por parte de los trabajadores/as ha supuesto, y va a seguir suponiendo,
con los consiguientes aspectos tanto positivos como negativos que ello comporta, una importante
modificación o transformación de la propia naturaleza, mediante el concurso de dos elementos
fundamentales en el mundo del trabajo: la tecnificación y la organización del trabajo.
2.1 Salud
Etimológicamente, la palabra << salud >> del latín salus, -ūtis es un estado de bienestar o de
equilibrio que puede ser visto a nivel subjetivo (un ser humano asume como aceptable el estado
general en el que se encuentra) o a nivel objetivo (se constata la ausencia de enfermedades o de
factores dañinos en el sujeto en cuestión).
Al igual que el concepto de trabajo, el concepto de salud tiene diversas acepciones que han ido
aflorando a través del tiempo.
Si se quisiera considerar la salud desde un punto de vista médico, dicho concepto se podría
interpretar como la ausencia de enfermedad, o el preservar, mantener o recuperar la salud
colectiva.
Desde un punto de vista social, la salud podría considerarse como un derecho de las personas,
como un logro social o como un mero resultado económico.
Que el trabajo puede ser dañino para la salud y que ambos conceptos están relacionados es
patente.
Entre salud y trabajo se establecen relaciones positivas y negativas, lo que invita a alcanzar
niveles de excelencia en la salud y en la calidad de vida en el trabajo.
Salud y Trabajo es, pues, un binomio con multitud de interrelaciones cuyo resultado, en ocasiones,
es el deterioro de la salud de la persona que realiza el trabajo que es necesario afrontar a través
de la prevención de los riesgos.
Con el fin de englobar en un concepto único aspectos del trabajo que puedan afectar a la salud de
los trabajadores/as se acuñó el término << condiciones de trabajo >>.
Según este término las condiciones de trabajo englobarían tres ámbitos diferenciados:
• Las exigencias de las tareas. El ritmo y la carga de trabajo de la tarea a realizar (esfuerzos,
posturas, atención, monotonía, etc.)
• La organización del trabajo. Forma en la que el trabajo se fragmenta en tareas
elementales, así como el reparto entre los distintos individuos, unido a la velocidad de
ejecución, estructuras de autoridad y de jerarquía, relaciones establecidas, etc.
Por otra parte, en la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales, define
la << condición de trabajo >> como cualquier característica del mismo que pueda tener una
influencia significativa en la generación de riesgos para la seguridad y la salud del trabajador/a,
quedando específicamente incluidas en esta definición:
c) Los procedimientos para la utilización de los agentes citados anteriormente que influyan
en la generación de los riesgos mencionados.
d) Todas aquellas otras características del trabajo, incluidas las relativas a su organización
y ordenación, que influyan en la magnitud de los riesgos a que esté expuesto el
trabajador/a.
El concepto de << condiciones de Trabajo >> va a englobar a todo aquel conjunto de variables
que definen la realización de una tarea concreta y el entorno en que ésta se realiza. A cada una de
dichas variables, susceptibles de producir daños a la salud de los trabajadores/as es común
denominarlas, también, factores de riesgo.
Los principales factores de riesgo laboral los podemos agrupar en cinco grupos:
Se describirá brevemente el contenido de cada grupo para, posteriormente, analizarlos con detalle
en cada unidad didáctica.
Entorno físico de trabajo- Se describirán los componentes físicos del medio ambiente de trabajo:
ruido, iluminación, vibraciones, condiciones termohigrométricas y radiaciones.
Características del trabajo relacionadas con la carga de trabajo- Incluyendo las exigencias
que la tarea impone al trabajador/a (esfuerzo físico, manipulación de cargas, posturas, etc) tanto
física como mental.
Organización del trabajo- Se analizarán todas las lesiones que producen insatisfacción laboral
en el trabajador/a (duración de la jornada, distribución de horarios, etc.).
Se entenderá por << prevención >> el conjunto de actividades o medidas adoptadas o previstas
en todas las fases de la actividad de la empresa con el fin de evitar o disminuir los riesgos
derivados del trabajo (Art. 4. 1º de la LPRL).
Para prevenir los riesgos derivados del trabajo y mejorar las condiciones de trabajo disponemos
de técnicas o especialidades preventivas: seguridad en el trabajo, higiene industrial, ergonomía y
psicosociología aplicada y medicina del trabajo.
3.3 Principios de la actividad preventiva
La prevención de riesgos laborales es un deber general del empresario/a tal y como lo establece
el artículo 15 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
El empresario/a adoptará las medidas necesarias a fin de garantizar que sólo los trabajadores/as
que hayan recibido información suficiente y adecuada puedan acceder a las zonas de riesgo grave
y específico.
Podrán concertar operaciones de seguro que tengan como fin garantizar como ámbito de
cobertura la previsión de riesgos derivados del trabajo, la empresa respecto de sus
trabajadores/as, los autónomos/as, respecto a ellos mismos y las sociedades cooperativas,
respecto a sus socios cuya actividad consista en la prestación de su trabajo personal.
3.4 Peligro
Fuente o situación potencial de daño en términos de lesiones o efectos negativos para la salud de
las personas, daños a la propiedad, daños al entorno del lugar de trabajo o una combinación de
éstos.
3.5 Riesgo
4. REFERENCIA NORMATIVA
Dentro de los efectos negativos que el trabajo puede tener para la salud, los accidentes de trabajo
son uno de los indicadores de unas malas condiciones de trabajo.
El accidente suele ser el final de una cadena de anomalías dentro del proceso productivo a las
que, en ocasiones, solamente prestamos atención cuando éste ha ocurrido.
Entre las anomalías podemos encontrar: los errores, los incidentes, las averías, los defectos de
calidad, los daños personales, etc.
1. OBJETIVOS
En el artículo 156 del Texto Refundido de la Ley General de la Seguridad Social (Real Decreto
legislativo 8/2015, de 30 de octubre) se considera << accidente de trabajo >> toda lesión corporal
que el trabajador/a sufra con ocasión o por consecuencia del trabajo que ejecute por cuenta ajena.
• Los que sufra el trabajador/a al ir o volver del lugar o centro de trabajo; es el denominado
accidente "in itinere".
• Los que sufra el trabajador/a con ocasión o como consecuencia del desempeño de cargos
electivos de carácter sindical, así como los ocurridos al ir o al volver del lugar en que se
ejerciten las funciones propias de dichos cargos.
• Los ocurridos con ocasión o por consecuencia de las tareas que, aun siendo distintas a las
de su categoría profesional, ejecuta el trabajador/a en cumplimiento de las órdenes del
empresario/a o espontáneamente en interés del buen funcionamiento de la empresa.
• Los que sean debidos a fuerza mayor extraña al trabajo, entendiéndose por ésta, la que
sea de tal naturaleza que ninguna relación guarde con el trabajo que se ejecutaba al ocurrir
el accidente.
En ningún caso se considerará fuerza mayor extraña al trabajo la insolación, el rayo y otros
fenómenos análogos de la naturaleza.
• Los que sean debidos a dolo o a imprudencia temeraria del trabajador/a accidentado/a.
Por lo tanto, derivado del análisis del la definición legal de accidente, podemos considerar que
para que un accidente de trabajo sea considerado como tal se deben dar los siguientes requisitos:
• Existencia de lesión
Es precisamente el riesgo que conlleva para las personas, lo que diferencia el accidente, de otros
incidentes o anomalías que perturban la continuidad del trabajo. Por tanto podemos definir el <<
incidente >> como un suceso anormal, no querido ni deseado, que se presenta de forma brusca,
inesperada e imprevista y que interrumpe la normal continuidad del trabajo sin causar daños a las
personas. También, se les denomina accidentes en blanco.
“ Los accidentes son los indicadores inmediatos de unas malas condiciones de trabajo ”
El accidente de trabajo se define como una patología traumática quirúrgica aguda provocada
generalmente por factores mecánicos ambientales.
Para el médico sólo existe accidente si se produce lesión. Identificando así, consiguientemente,
accidente con lesión.
Las causas de los accidentes se deben a las diferentes condiciones o circunstancias materiales o
humanas que aparecen en el mismo.
Influye, por tanto:
- Factor técnico. Conjunto de circunstancias o condiciones materiales que pueden ser origen del
accidente.
- Factor humano. Conjunto de actuaciones humanas, actos peligrosos o prácticas inseguras, que
pueden ser origen del accidente.
En relación a la importancia del factor humano, un estudio efectuado por Frank E. Bird demostró
que de cada 100 accidentes, 85 se debieron a prácticas inseguras y sólo 1 ocurrió por condiciones
inseguras. Los 14 restantes se produjeron por combinación de ambas causas.
Fuente: Cuadro según Bird (Insurance Company of America. International Safety Academy: Safety Training Manual.
Macon Georgia 1971
2.2 Repercusiones de los accidentes de trabajo
Para valorar el total de las pérdidas como consecuencia de un accidente de trabajo o de una
enfermedad profesional, analizaremos las repercusiones humanas, legales y económicas que
suponen los daños ocasionados por el trabajo.
- Repercusiones humanas.
Para el accidentado/a, puede suponer, aparte del dolor físico y moral, o incluso la muerte, una
serie de consecuencias indirectas como: disminución de ingresos, etc.
Para la familia de la víctima, puede suponer, aparte del dolor físico y moral solidario con el
accidentado, las consecuencias económicas que se derivan del daño.
- Repercusiones legales.
Consecuencias derivadas de la actuación legal que el Estado realiza a través de sus poderes
legislativo, ejecutivo y judicial, para evitar y disminuir los daños derivados de los accidentes,
estableciendo las responsabilidades y sanciones que se derivan de la actuación incorrecta en
materia de prevención de riesgos laborales.
- Repercusiones económicas.
Además del control del producto de una empresa a partir de sus gastos generales, costes de
materia primas, etc. se debería disponer de datos que permitieran conocer los costes de los
accidentes y enfermedades profesionales.
La investigación de accidentes es una técnica analítica posterior al accidente, que nos permite
determinar las causas que han originado el accidente.
La finalidad es obtener una información más completa y precisa de cómo se desarrollaron los
hechos y determinar las causas del accidente, para, a partir de estos datos, haciendo uso de otras
técnicas de seguridad llegar al objetivo final de ésta, la eliminación de las causas y la supresión o
reducción de los riesgos de accidentes.
Con la investigación de accidentes se pretende evitar que sucedan accidentes similares con las
medidas correctoras implantadas y descubrir nuevos peligros que se materialicen en futuros
accidentes.
En el artículo 157 del RD Legislativo 8/2015, de 30 de octubre por el que se aprueba el texto
refundido de la Ley General de la Seguridad Social (BOE 26.6.94) se define la enfermedad
profesional de la siguiente forma:
Las enfermedades no incluidas en el citado artículo y que contraiga el trabajador/a con motivo de
la realización de su trabajo siempre que se pruebe que la enfermedad tuvo por causa exclusiva la
ejecución del mismo, se contempla como accidente de trabajo.
Legalmente son enfermedades profesionales sólo aquellas que así define la normativa de cada
país y para cada sistema de Seguridad Social.
En España, siguiendo el criterio de las Recomendaciones y Convenios de la Organización
Internacional del Trabajo, para definir las enfermedades profesionales, se ha seguido el sistema
de Cuadros y Listas donde figuran las Enfermedades Profesionales y se señalan los síndromes y
profesiones en donde se han de dar para que sean reconocidas con el carácter de tales.
- El tiempo de exposición
- Características personales de cada individuo
Con el fin de ampliar el campo de actuación preventiva se hace necesario detectar todo aquello
que pueda generar daño a la salud del trabajador/a, no solo para evitar los efectos negativos del
trabajo, sino también para potenciar los efectos positivos del trabajo.
“Se entiende por enfermedad relacionada con el trabajo, toda la patología relacionada
epidemiológicamente con el trabajo, que no tiene consideración legal de enfermedad profesional”.
"Se entiende por enfermedad del trabajo, toda la patología influida por el trabajo pero no
determinada por él".
Entre estas patologías o alteraciones psico-funcionales destacamos: la insatisfacción, la
monotonía, la desmotivación, los conflictos y los trastornos psicosociológicos.
Se trata de enfermedades que se agravan con el trabajo, pero que en su desarrollo intervienen la
idiosincrasia o las condiciones personales del trabajador/a y las condiciones medio-ambientales
no laborales de tal forma que no todos/as padecen la enfermedad.
La ampliación de nuestro campo de actuación preventivo nos permite enfrentarnos a daños cada
vez más presentes en el mundo del trabajo.
5. REFERENCIA NORMATIVA
• Real Decreto Legislativo 8/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de
la Ley General de la Seguridad Social.
• Técnicas de Prevención de Riesgos Laborales. Seguridad e Higiene del Trabajo. José María
Cortés Díaz.
BLOQUE I. CONCEPTOS BÁSICOS SOBRE SEGURIDAD Y
SALUD EN EL TRABAJO
El marco normativo en materia de prevención de riesgos laborales está formado por diferentes
instrumentos legales, que establecen derechos y deberes para los diferentes sujetos que
intervienen en la relación laboral.
La normativa sobre seguridad y salud en el trabajo está constituida por La Ley de Prevención de
Riesgos Laborales como marco general, sus disposiciones de desarrollo o complementarias
(Real Decreto, Orden Ministerial ...) y por otras normas, de carácter legal o convenios colectivos,
que establecen la adopción de medidas preventivas en el ámbito laboral (normas de industria,
medio ambiente, sanidad, obras públicas...).
1. OBJETIVOS
El objetivo principal de esta unidad consiste en identificar y analizar los fundamentos jurídicos y
las normas básicas de aplicación directa en España en materia de seguridad y salud en el trabajo.
Para ello, se revisarán las principales disposiciones jurídicas que regulan el Ordenamiento
Jurídico Español en esta materia, para conocer los conceptos fundamentales que conforman el
campo de la seguridad y salud laboral.
La palabra “norma”, procedente del latín, designa un mandato o prescripción del comportamiento
humano dictado por la autoridad competente, cuyo incumplimiento lleva aparejada una sanción.
El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española lo define como la “regla que se debe
seguir o a que se deben ajustar las conductas, tareas, actividades, etc.”
Hay variedad en la clasificación de normas, pero considerando la norma jurídica, ésta es una regla
de conducta de carácter obligatorio que ha sido creada por un órgano reconocido por el Estado y
cuyo incumplimiento trae consigo la posibilidad de que la autoridad la haga cumplir mediante la
aplicación de la fuerza coercitiva.
4. Leyes: fuente básica que emana del poder legislativo cuya capacidad de dictar leyes
corresponde a las Cortes Generales (Congreso de los Diputados y Senado), que adoptan
diferentes formas según su procedimiento de elaboración o las materias que regulen,
aunque todas poseen el mismo rango y fuerza de ley:
- Leyes Orgánicas: normas jurídicas emanadas del poder legislativo que regulan derechos
fundamentales y libertades públicas recogidos en la Constitución. Para su aprobación es
necesaria mayoría absoluta del Congreso. Un ejemplo sería la Ley Orgánica de Libertad
Sindical.
Decretos Legislativos: Son aprobados por el poder Ejecutivo (el Gobierno) en virtud de
una autorización concedida por el Congreso.
Ejemplo: el “Texto Refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores”, aprobado por RD
legislativo 2/2015, de 23 de octubre.
6. Reglamentos: Son normas con rango inferior a la ley, dictadas por el Gobierno que
desarrollan los preceptos que establecen las leyes. Si los dicta el Consejo de Ministros son
“Reales Decretos” y si los dicta un Ministerio “Órdenes Ministeriales”.
La actividad judicial consiste en solucionar los conflictos aplicando una determinada normativa.
Para ello, la aplicación de la norma jurídica no se realiza de forma automática, sino que el órgano
judicial debe interpretarla, adaptarla al caso concreto y a las circunstancias en que éste se
produce. A esa interpretación de las normas jurídicas que efectúan los jueces y tribunales se le
denomina jurisprudencia.
La normativa vigente sobre prevención de riesgos laborales es muy extensa y dispersa debido a
las competencias que pueden ejercer las diferentes administraciones en este ámbito y ha
provocado un cambio en la mentalidad de la sociedad española puesto que ya no se trata sólo de
reducir la siniestralidad laboral, sino que el objetivo común de los poderes públicos, empresas y
trabajadores/as es fomentar una auténtica cultura preventiva de los riesgos laborales para mejorar
la calidad, la producción y controlar los costes, así como mejorar la propia seguridad y salud de
los trabajadores y, en definitiva, procurar su bienestar.
La Constitución Española de 1978, reconoce el derecho al trabajo, a la salud y a la integridad
física y encomienda a los poderes públicos velar por la seguridad e higiene en el trabajo:
"Los poderes públicos fomentarán una política que garantice la formación y readaptación
profesional; velarán por la seguridad e higiene en el trabajo y ..." (Art.40.2)
"Compete a los poderes públicos organizar y tutelar la salud a través de las medidas
preventivas..." (Art. 43.2)
"En la relación de trabajo los trabajadores tienen derecho a su integridad física y a una política de
prevención de riesgos laborales."(Art. 4.2.d)
"El trabajador en la prestación de sus servicios, tendrá derecho tendrá derecho a una protección
eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo.” (Art. 19.1)
Es desde este momento, cuando la sociedad española empieza a tomar verdadera conciencia
sobre la necesidad de optimizar al máximo las exigencias de la prevención de riesgos laborales.
La LPRL está compuesta por siete capítulos, cincuenta y cuatro artículos y dieciséis disposiciones
adicionales, dos disposiciones transitorias, una disposición derogatoria y dos disposiciones finales.
Esta Ley y sus normas de desarrollo serán de aplicación tanto en el ámbito de las relaciones
laborales reguladas en el texto refundido de la “Ley del Estatuto de los Trabajadores”, como en de
las relaciones de carácter administrativo o estatutario del personal al servicio de las
Administraciones públicas. Cuando en la presente Ley se haga referencia a los trabajadores/as y
empresarios/as, se entenderán también comprendidos en estos términos, respectivamente, de
una parte, el personal con relación de carácter administrativo o estatutario y la Administración
pública para la que presta servicios, en los términos expresados en la disposición adicional tercera
de la LPRL y de otra, los socios/as de las cooperativas a que se refiere el párrafo anterior y las
sociedades cooperativas para las que prestan sus servicios. (Art. 3, LPRL).
En su art. 14.1 la LPRL reconoce como principio básico, el “derecho de los trabajadores a una
protección eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo, del cual, se deriva un correlativo
deber del empresario de protección de los trabajadores frente a los riesgos laborales”.
• "Los trabajadores tienen derecho a una protección eficaz en materia de seguridad y salud
en el trabajo". (Art. 14.1, LPRRLL).
• "Ser informados sobre los riesgos para la seguridad y salud en el trabajo, las medidas de
protección y prevención aplicables a dichos riesgos, así como sobre las medidas
adoptadas ante posibles situaciones de emergencia". (Art. 18, LPRRLL).
• "Ser consultados y participar en todas las cuestiones que afecten a la seguridad y salud en
el trabajo". (Art. 18, LPRRLL).
• "Garantizar la protección a los trabajadores que por sus propias características personales
o estado biológico conocido, incluidos aquellos que tengan reconocida la situación de
discapacidad física, psíquica o sensorial, sean especialmente sensibles a los riesgos
derivados del trabajo". (Art.25, LPRRLL).
“Corresponde a cada trabajador velar, según sus posibilidades y mediante el cumplimiento de las
medidas de prevención que en cada caso sean adoptadas, por su propia seguridad y salud en el
trabajo y por la de aquellas otras personas a las que pueda afectar su actividad profesional, a
causa de sus actos y omisiones en el trabajo, de conformidad con su formación y las instrucciones
del empresario.(Art. 29.1, LPRRLL)
Los trabajadores/as, con arreglo a su formación y siguiendo las instrucciones del empresario/a,
deberán en particular:
6. Cooperar con el empresario/a para que éste pueda garantizar unas condiciones de
trabajo que sean seguras y no entrañen riesgos para la seguridad y la salud de los
trabajadores/as.
Las principales actividades preventivas a desarrollar en las empresas son las siguientes:
• Plan de Prevención.
El empresario/a aplicará las medidas que integran el deber general de prevención, con arreglo a
los siguientes principios generales (art. 15, LPRL):
• Planificar la prevención
Real Decreto 39/1997, de 17 de Enero, por el que se aprueba el Reglamento de los Servicios
de Prevención
Se define la evaluación de riesgos como el proceso dirigido a estimar la magnitud de los riesgos
que no hayan podido evitarse, obteniendo la información necesaria para que el empresario/a esté
en condiciones de tomar una decisión apropiada sobre la necesidad de adoptar medidas
preventivas y, en tal caso, sobre el tipo de medidas que deben adoptarse.
Los recursos deberán ser suficientes y adecuados a las actividades preventivas a desarrollar, en
función del tamaño de la empresa, el tipo de riesgos o la peligrosidad de las actividades
desarrolladas en la misma.
• Seguridad en el Trabajo.
• Higiene Industrial.
Garantiza que en los lugares de trabajo exista una adecuada señalización de seguridad y
salud siempre que los riesgos no puedan evitarse o limitarse suficientemente a través de
medios técnicos de protección colectiva o de medidas, métodos o procedimientos de
organización del trabajo.
Establece criterios de carácter general que garanticen la seguridad y salud en los lugares
de trabajo, de forma que de su utilización no se deriven riesgos para los trabajadores/as
(estructuras, espacios y superficies, accesos, condiciones ambientales y servicios…)
Regula la protección frente a los riesgos para la vista, problemas físicos y de carga mental
derivados de la utilización de equipos provistos de pantallas de visualización de datos.
5. Real Decreto 664/1997, de 12 de Mayo, (B.O.E. 24/V/97) sobre la protección de los
trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a A gentes Biológicos
durante el trabajo
Establece las disposiciones mínimas aplicables a las actividades en las que los/as
trabajadores/as estén o puedan estar expuestos a agentes biológicos debido a la
naturaleza de su tarea o puesto de trabajo.
Establece las disposiciones mínimas aplicables a las actividades en las que los
trabajdores/as estén o puedan estar expuestos a agentes cancerígenos debido a la
naturaleza de su tarea o puesto de trabajo, sin perjuicio de aquellas disposiciones
específicas relativas a los riesgos derivados de exposiciones a amianto, cloruro de vinilo,
prohibición de determinados agentes cancerígenos, o protección sanitaria contra
radiaciones ionizantes.
Recoge las disposiciones mínimas de seguridad y salud para la utilización de los equipos
de trabajo utilizados por los trabajadores/as (máquinas, aparatos, instrumentos o
instalaciones utilizadas en el trabajo).
Señala los requisitos mínimos de seguridad y salud para la elección, utilización por los
trabajadores/as y mantenimiento de los equipos de protección individual, los riesgos con
los que procede utilizarlos, su clasificación o sectores de actividad donde pueden ser
necesarios.
En el siguiente link podrán encontrar otra normativa, a nivel nacional y a nivel autonómico,
relacionada con la prevención de riesgos:
http://www.invassat.gva.es/normativa-basica-prl
Lo dispuesto en este apartado será igualmente aplicable a los/as socios/as de las cooperativas
cuya actividad consista en la prestación de su trabajo, con las precisiones que se establezcan en
sus Reglamentos de Régimen Interno.
• El trabajador/a
Tipos de responsabilidades:
• Civil
• Penal
• Administrativa
• Disciplinaria
La responsabilidad civil, desde el punto de vista en materia preventiva, tiene por objeto el deber de
reparar el daño causado a las personas por el incumplimiento de las obligaciones de prevención
de riesgos laborales.
La responsabilidad penal puede derivarse cuando la conducta se califica como delito de riesgo
grave para la integridad física o la vida de los trabajadores/as tanto si la actuación es dolosa como
imprudente.
• “Texto Refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores”, aprobado por RD legislativo
2/2015 de 23 de octubre.
• Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas
de seguridad y salud en los lugares de trabajo.
Fuente bibliográfica: