Paola Pena Nuevas Practicas Artisticas ContempEspaciosautogestionadMedellin
Paola Pena Nuevas Practicas Artisticas ContempEspaciosautogestionadMedellin
Paola Pena Nuevas Practicas Artisticas ContempEspaciosautogestionadMedellin
prácticas artísticas
contemporáneas:
Espacios autogestionados en la ciudad de Medellín
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PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN
Iván Duque Márquez
MINISTRA DE CULTURA
Carmen Inés Vásquez Camacho
FOTOGRAFIAS
Cortesía archivo Taller 7
Viceministro de Cultura
Cortesía archivo Casa Tres Patios
David Melo Torres
Cortesía archivo Plazarte
SECRETARIA GENERAL Cortesía archivo Campos de Gutiérrez
Claudia Isabel Victoria Niño Izquierdo Cortesía archivo PorEstosDías
Federico Ríos Escobar
DIRECTORA DE ARTES
Guiomar Acevedo Gómez © Ministerio de Cultura
Área de Artes Visuales
ASESOR ARTES VISUALES
© Paola Peña Ospina
Andrés Gaitán Tobar
Abril de 2019
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Contenido
PREFACIO /6
¿QUÉ SE PRETENDÍA? /8
Taller 7 /55
3
Casa Tres Patios /83
Plazarte /107
PorEstosDías /148
COINCIDENCIAS Y DIVERGENCIAS: ALGUNOS CRITERIOS
6 BIBLIOGRAFÍA /190
CIBERGRAFÍA /196
1. En un proyecto de esta naturaleza es imposible abarcar todas las iniciativas sin dejar alguna por fuera. Sin embargo,
es posible contribuir a la construcción y teorización de un tema relativamente reciente, sobre el cual hay pocos cri-
terios para juzgar la naturaleza y práctica de este tipo de espacios. Esta investigación es un intento por encontrar
coordenadas de análisis que puedan servir para nutrir el debate.
¿Qué se
pretendía?
1
9
2. Ver: Becker, Howard Saul. Los mundos del arte: sociología del trabajo artístico. Quilmes: Universidad Nacional
de Quilmes, 2008. Bourdieu, Pierre. Campo de poder, campo intelectual. Tucumán: Editorial Montressor (Pri-
mera edición: 1966), 2002. Bourdieu, Pierre. Las reglas del arte: Génesis y estructura del campo literario. Barcelona:
Anagrama, 1995.
3. Foster, Hal. El retorno de lo real. La vanguardia fines de siglo. Madrid: Akal, 2001 y Rubiano, Elkin. Autonomía y
sujeción. Departamento de Arte-Universidad de los Andes. Disponible en: http://arte.uniandes.edu.co/evento/au-
tonomia-y-sujecion-el-arte-y-los-artistas-en-el-contexto-de-la-gestion-creativa/ (Consultado, julio de 2014).
4. Yúdice, George. La cultura como recurso: usos de la cultura en la era global. Barcelona: Gedisa Editores, 2002.
¿QUÉ SE PRETENDÍA? 10
Hay dos caminos a través de los cuales el arte sale de su autonomía5 y ex-
pande, al mismo tiempo, su ámbito cada día más. El primero, se refiere a la
inserción en el mercado artístico a gran escala. Esto es evidente con la con-
solidación del mercado artístico latinoamericano, donde se han visibilizado
mercados antes no relevantes, como el colombiano,6 con todas las implicacio-
nes que esto tiene en la profesionalización y crecimiento del medio. El segundo,
es un proceso paralelo a esta transformación y está vinculado a la aparición
de nuevos espacios artísticos independientes permeados por el discurso de la
autogestión y la sostenibilidad. Lo anterior, en consecuencia, debe entenderse
bajo la premisa de que la creación se ha convertido en un elemento más de la
cadena productiva, generando un cambio en la producción, la circulación y el
consumo de los productos culturales, entre ellos, los artísticos.
5. La autonomía del arte es explicada por Bourdieu, a través de la reconstrucción del proceso mediante el cual se
configura lo que él denomina campo literario o artístico. Mediante la descripción de las relaciones de interac-
ción que se establecieron entre este y otros campos —como, por ejemplo, el político— buscó explicar cómo se
empezó a gestar una ruptura estética, que condujo a la afirmación progresiva de una autonomía de escritores y
artistas, en oposición a las dependencias que el mundo burgués les imponía. El repudio que sentían del mundo
burgués los artistas e intelectuales de la bohemia (Flaubert o Baudelaire), contribuyó a propiciar una ruptura
en oposición a él, generando por consiguiente, la posibilidad de la constitución de un mundo del arte como un
mundo aparte dentro de la propia sociedad. El concepto de autonomía actuó como concepto articulador de la
vida de la modernidad europea y fue esencial para la diferenciación del ámbito artístico según sus caracterís-
ticas técnicas y de producción. Sin embargo, Peter Bürger señaló como la autonomía “es una categoría ideoló-
gica en el sentido estricto del término y combina un momento de verdad (desvinculación del arte respecto a la
praxis vital) con un momento de falsedad (la hipostatización de este hecho histórico a una “esencia del arte”).
Esta última idea conduce a pensar que la idea de autonomía, no se puede explicar sin comprender las relaciones
ideológicas que la explican y, que, en última instancia, se anclan en lo social. Ver: Bürger, Peter. Teoría de la
vanguardia. Barcelona: Ediciones Península, 1987.
6. Es un hecho evidente la consolidación del arte colombiano en el mercado internacional, Colombia, fue el
país invitado a ARCO Madrid 2015. Ver: Observatorio. “Colombia, país invitado ARCO 2015”. Esfera Pública (5
de marzo de 2014). Disponible en: http://esferapublica.org/nfblog/?p=66249&utm_source=esferapublica+-
facebook&utm_campaign=860b744af9-RSS_EM AIL _CA MPAIGN&utm_medium=email&utm_term=0_
9f4e2303f0-860b744af9-301293177.
11
tienen sobre la realidad. De allí, la importancia que tomaron las voces de los
gestores y artistas para desarrollar el análisis del fenómeno que nos interesa.
7. Las investigaciones sobre los espacios autogestionados, que algunos han dado en llamar independientes, han
sido muy escasas y no están agrupadas o sistematizadas metodológicamente. Aunque es posible dar cuenta de una
serie de textos que se preguntan por este tema, un ejemplo es el compilado del Ministerio de Cultura llamado Giros
y desvíos: Una aproximación a la gestión en las artes visuales (2002). Es sorprendente que la producción de debates
acerca de este tema no sea profusa, y sobre el caso puntual de la ciudad de Medellín es casi inexistente, el único
texto donde se mencionan someramente los espacios autogestionados de la ciudad es en el catálogo del MDE07;
sin embargo, lo hace de forma descriptiva y no analítica.
¿QUÉ SE PRETENDÍA? 12
siguen esperando respuestas. Por eso con el análisis de los cinco espacios au-
togestionados de la ciudad se espera contribuir a conocer mejor el papel que
desempeñan en las nuevas relaciones culturales que se establecen en la ciudad
y permitir también valorar estas prácticas en su alcance en el plano “real”,
es decir, conocer el margen de maniobra de dichas prácticas artísticas en el
contexto inmediato en donde se desarrollan, no solo para tener incidencia
en el espacio local, sino también para su proyección en lo nacional y global.
Baste mencionar que, en marzo de 2013, Medellín fue elegida como la ciu-
dad más innovadora del mundo. La ciudad compitió con Nueva York y Tel Aviv
en el concurso City of the Year organizado por The Wall Street Journal y Citigroup.
Ese mismo año, en mayo, la ciudad recibió otro reconocimiento en el concurso
The Business Destinations Travel Awards, organizado por la revista Business
Destinations, 550 compañías y varios empresarios la eligieron como el mejor
destino de Suramérica para hacer negocios.9 Sin embargo, ese mismo año el
informe del Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos
revela a Colombia como uno de los países más desiguales de América Latina y
a Medellín como la ciudad más desigual de Colombia y una de las mayores en
todo el continente.10 Como dato adicional vale destacar que Medellín fue sede
del Foro Urbano Mundial del 5-11 de abril del mismo año.11 Esta serie de hechos
dan cuenta de una compleja realidad, donde las trasformaciones que se dan en
la ciudad se inscriben en una trama de tiempos en los que se mezclan lo
premoderno, moderno y contemporáneo.
Así, en lo relacionado con el campo del arte, en los últimos años la ciudad
ha experimentado un cambio importante en el ámbito académico.12 Las más
fuertes y significativas academias de arte de la ciudad han sufrido transfor-
maciones para tratar de estar al día con los acontecimientos que experimenta
el campo del arte a nivel global. Sin embargo, la educación universitaria está
sujeta a muchas dificultades de índole estructural, tanto políticas como
9. Ver: El Tiempo [versión electrónica]. “Medellín, la ciudad más innovadora del mundo”. El Tiempo, 1 de mar-
zo de 2013. Disponible en: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-12627468. El Colombiano [versión
electrónica]. “Medellín, el mejor destino para hacer negocios en Suramérica”. El Colombiano, 22 de mayo de 2013.
Disponible en: http://www.elcolombiano.com/BancoConocimiento/M/medellin_el_mejor_destino_para_ha-
cer_negocios_en_suramerica/medellin_el_mejor_destino_para_hacer_negocios_en_suramerica.asp
(Consultados, junio de 2014).
10. ONU-Habitat. Informe mundial sobre asentamientos humanos 2013. Disponible en: http://www.onuhabitat.
org/index.php?option=com_docman&task=doc_details&Itemid=235&gid=954 (Consultado, marzo de 2014).
11. ONU-Habitat. “Sobre el Foro Urbano Mundial y WUF7 Medellín”. Disponible en: http://wuf7.unhabitat.org/
theworldurbanforum-es (Consultado, junio de 2014).
12. Con el ámbito académico me refiero, específicamente a la universidad como el lugar específico socialmente reco-
nocido como el espacio para la profesionalización (educación superior) que deviene en una institución legitimadora
(de forma jerárquica) que detenta el poder de nombrar los objetos de estudio y delimitar las disciplinas.
15
13. Huertas, Miguel. “Reflexiones sobre la educación artística y el debate disciplinar en Colombia”. En: Revista
Educación y Pedagogía, vol. 22, n.° 58, septiembre-diciembre, 2010, p. 165-176.
¿QUÉ SE PRETENDÍA? 16
14. Museo de Antioquia. “Historia. Segunda mitad del siglo XX”. Museo de Antioquia. Disponible en: https://www.
museodeantioquia.co/el-museo/#/historia/historia/4/ (Consultado, junio de 2018).
15. Algunos de estos proyectos fueron: Destierro y reparación (2008), Francisco Antonio Cano (2009) e Interdependen-
cias 2010: una revisión crítica (2010), un proyecto que buscó generar diferentes reflexiones alrededor de la historia
y que, se articuló a través de dos exposiciones, a saber, Colombia 200 años, historia imágenes y ciudadanías y Menos
tiempo que lugar.
16. Dicho Plan tiene tres componentes: “El primero, ‘Centro de Medellín, territorio de vida’, tiene como propósito
mejorar el espacio público y la circulación peatonal, disminuir los altos niveles de indigencia, fortalecer los es-
17
pacios de valor histórico y patrimonial, como también mejorar la calidad ambiental de la Comuna. El segundo, el
‘Plan de Intervención’, es un conjunto de obras como un Centro Infantil Buen Comienzo, el Plan Parcial Naranjal
y Arrabal, el Tranvía de Ayacucho, la reconstrucción de la Estación de Bomberos Libertadores y el primer tramo
del Parque del Río. El tercero, el ‘Plan Estratégico’, que según la Alcaldía de Medellín es la definición a largo plazo
de estrategias para el Centro, que trasciendan la actual Administración Municipal”. En este último componente
están los proyectos estratégicos supramunicipales entre los que se encuentran los proyectos de resignificación
urbana: “1. Plan especial del centro tradicional y representativo metropolitano. Está en proceso de formulación y
continúa como proyecto estratégico. 2. Proyecto eje cultural La Playa-Boyacá. Proyecto ejecutado en un 100 %, la
primera etapa, del Teatro Pablo Tobón Uribe al Museo de Antioquia y continúa como proyecto estratégico. 3. Re-
composición del espacio urbano de La Alpujarra. Se han realizado acciones parciales, que se requieren consolidar
en un proyecto integral. Este proyecto continúa como proyecto estratégico. 4. Espacio cívico de Cisneros. Proyecto
ejecutado en un 100 %. 5. Museo de Antioquia. Proyecto ejecutado en un 100 %”. Ver: Avañe Cataño, Luz. “Recupe-
ración del Centro de Medellín se hace a paso lento”. El Mundo [versión electrónica], 31 de octubre de 2013. Dispo-
nible en: http://www.elmundo.com/portal/noticias/territorio/recuperacion_del_centro_de_medellin_se_ha-
ce_a_paso_lento.php#.U7gwIvmHiSo (Consultado, octubre de 2014).
17. Esta apuesta por utilizar equipamientos culturales para revitalizar o cambiar el uso del suelo en el espacio ur-
bano, no es nueva. Desde los distritos de artistas, que se establecen en barrios deprimidos en los sesenta y setenta
en ciudades como Nueva York, siendo el Soho un buen ejemplo. Hasta el famoso “efecto Guggenheim”, que hace
alusión a la construcción, en 1997, de un monumental museo de arte moderno y contemporáneo diseñado por el
reconocido arquitecto Frank O. Gehry, en la ciudad de Bilbao. El museo fue construido en un terreno en desuso que
formaba parte de la zona industrial, generó una transformación en la zona y colocó a la ciudad en el mapa turís-
tico de España. Para un análisis en clave crítica de este fenómeno revisar El efecto Guggenheim, del espacio basura
al ornamento (2007) de Iñaki Esteban.
18. Cuando se realizó la investigación en 2014, el MAMM apenas estaba desarrollando su plan de expansión, cuyo
proceso comenzó con un concurso internacional para definir el diseño de la ampliación. Se proclamaron como
ganadores la oficina peruana 51-1 Arquitectos, en conjunto con Ctrl+G/Lab de Medellín, la construcción del nuevo
edificio inició en agosto de 2013. El proyecto tuvo un costo total de 24.000 millones de pesos, de los cuales, la
Alcaldía de Medellín aportó el 50 % y el otro 50 % corresponde a apoyos privados.
19. Peña Ospina, Paola. “Enfoque de ciudad/City Focus: Medellín”. En: Art Licks n.° 21, verano 2017.
¿QUÉ SE PRETENDÍA? 18
20. Es importante reconocer que existen más museos en la ciudad, por ejemplo, el Museo de la Memoria, la Casa
Museo Pedro Nel Gómez, el Museo Universitario de la Universidad de Antioquia, El Museo de Agua, y el Museo El
Castillo, entre otros, que con sus actividades también enriquecen el contexto cultural y artístico de la ciudad. Sin
embargo, los museos con más alcance de incidencia y resonancia de sus actividades dentro del campo del arte en
Medellín son el Museo de Antioquia y el MAMM.
21. En el momento de quedar concluida esta investigación, en 2014, solo se habían realizado las dos primeras ver-
siones de estos eventos. El primero de los Encuentros tuvo lugar de enero a junio de 2007, su eje temático se definió
como: Prácticas artísticas contemporáneas: Espacios de hospitalidad. Dicho evento convocó a 80 artistas contempo-
ráneos nacionales e internacionales y trajo el arte contemporáneo al museo, los parques, las calles y los espacios
públicos de la ciudad. Estuvo también atravesado por múltiples actividades desde talleres, conversatorios, ciclos
de cine hasta experiencias sonoras. Fue un evento sin precedentes en la ciudad de Medellín organizado en colabo-
ración con el sector público y privado tanto local, regional, nacional como internacional. El segundo, se desarrolló
entre septiembre y diciembre de 2011 y tuvo como tema Enseñar y aprender. Lugares del conocimiento en el arte. Su
eje de trabajo fue tal como lo manifiesta el museo, “los diferentes modos de construcción y recreación de cono-
cimiento en y desde el arte, así como el potencial pedagógico de las prácticas colaborativas y comunitarias”. En
su versión del 2015, el MDE se pensó a través la temática: Historias locales/Prácticas globales, que buscaba ayudar
a entender transformaciones urbanas y sociales que vive la ciudad, enfocándose en los procesos de cambio para
explorarlos a través de obras de artistas, trabajos comisionados y otras iniciativas de orientación social.
19
22. Por ejemplo, en la primera versión del MDE07, se incluyeron cuatro espacios anfitriones: Taller 7, Casa Tres
Patios, La Jíkara Galería-Café y la Fundación Universitaria Bellas Artes. “Tres Patios acogió a Helena Produccio-
nes de Cali y a Capacete Entretenimientos de Río de Janeiro; Taller 7 recibió a El Basilisco de Buenos Aires y a El
Vicio Producciones de Bogotá; en la Jíkara estuvieron El Bodegón de Bogotá y La Culpable de Lima, y Bellas Artes
fue el lugar de trabajo de Casa Tomada de Cali y Oficina #1 de Caracas. Esta convivencia (no necesariamente pa-
cífica) durante un mes permitió el conocimiento mutuo entre huésped y anfitrión y estableció en algunos casos
una estrecha relación entre ellos”. En: Muñoz, Óscar y Pineda, Adriana. Los espacios anfitriones. Cuadernos MDE07.
Medellín: Fondo Editorial Museo de Antioquia, Museo de Antioquia. 2011, p. 60.
23. Esta investigación solo se enfocó en los cinco primeros. Desde luego, existían otros espacios en la ciudad y con
toda seguridad se han creado varios más en el trascurso de los últimos años, incluso, también es posible que algu-
nos de los espacios mencionados ya no existan. Sin embargo, los cinco espacios analizados en esta investigación,
en su momento eran los que más trayectoria tenían, por esta razón, se consideraron para el análisis.
¿QUÉ SE PRETENDÍA? 20
24. Según la declaración final de Mundiacult “en su sentido más amplio, la cultura puede considerarse actualmente
como el conjunto de los rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos que caracterizan una
sociedad o un grupo social. Ella engloba, además de las artes y las letras, los modos de vida, los derechos funda-
mentales del ser humano, los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias”. Esta perspectiva tiene la virtud
de ampliar el ámbito de la cultura, pero, a la vez, plantea un problema para su gestión, a saber: sí todo cabe bajo el
término cultura, ¿cómo definir qué gestionar?
25. Bravo, Marta Elena. “La formación y formulación de políticas y planes de desarrollo cultural: Experiencias en
Antioquia”. En: Itinerarios culturales 1985-2007: Voces y presencias. Medellín: Editorial Lealon, 2008, p. 140.
26. En 1974, durante el gobierno de Misael Pastrana, Jorge Rojas, primer director de Colcultura, impulsó el primer
Plan Nacional de Política Cultural. En el 1976, durante el gobierno de López Michelsen y en la administración de Gloria
Zea, se publicó La política cultural en Colombia. Entre los años 1983 y 1985, durante el gobierno de Belisario Betancur,
se elaboró un documento de política cultural llamado Plan Sectorial de Desarrollo Cultural. En el gobierno de Barco,
en 1986, se presentó Nueva orientación de una política cultural para Colombia, bajo el lema “Una cultura para la demo-
cracia, una democracia para la cultura”. En el gobierno de Gaviria se elaboraron dos documentos. La cultura en los
tiempos de la transición (1991-1994) y Colombia: El camino para la paz, el desarrollo y la cultura hacia el siglo XXI. Quería
poner al corriente el contexto institucional con el nuevo contexto político generado por la nueva, en ese entonces,
Constitución de 1991, la cual definió la cultura como el fundamento de la nación y reconoció su carácter pluriétnico y
¿QUÉ SE PRETENDÍA? 22
Cuando se elaboró se tuvo siempre una clara conciencia de que era necesa-
rio realizar un plan especial para la capital antioqueña y el Área Metropolitana
que alberga más del 50 % de la población. El Plan buscó responder a la rica vida
cultural y a la variedad de manifestaciones culturales formales y espontáneas
que se daban en la ciudad y que querían ser fortalecidas y valoradas dada la
fuerte crisis que atravesaba la misma. Siguiendo en extenso, la argumentación
de Marta Elena Bravo, como dice el documento introductorio:
pluricultural. Con Andrés Pastrana se formuló el Plan Nacional de Cultura 2001-2010. Hacia una ciudadanía democrática
y cultural. Para un desarrollo detallado de las políticas culturales en Colombia, recomiendo ampliamente remitirse a:
Bravo, Marta Elena. “Políticas culturales en Colombia”. En: Itinerarios culturales 1985-2007: Voces y presencias. Medellín:
Editorial Lealon, 2008, pp. 291-319.
27. Bravo, Marta Elena. “El Plan de Desarrollo Cultural de Medellín 1990”. En: Itinerarios culturales 1985-2007: Voces
y presencias. Medellín: Editorial Lealon, 2008, p. 135.
Este Plan
Vemos como desde este primer Plan de Desarrollo Cultural elaborado por
una ciudad colombiana, Medellín, la cultura aparece como una forma de mitigar
y prevenir la violencia y otros problemas sociales en la ciudad. Esta visión de
la cultura, como elemento capaz de contribuir a mitigar problemas sociales de
diferente índole, ha sido ampliamente desarrollada por el sociólogo nortea-
mericano George Yúdice en su libro La cultura como recurso.30 El tratamiento de
la cultura como recurso, como el mismo autor explica, es mucho más que una
mera mercancía. Se trata, en realidad, del eje de un nuevo marco epistémico
donde la cultura es absorbida en la racionalidad económica y esto en términos
prácticos se traduce en su gestión, conservación, distribución e inversión.31
30. El fenómeno de la cultura como un recurso es complejo y se puede analizar en muchos niveles. Está vinculado
sobre todo a la globalización que pluralizó los contactos entre diversos países y facilitó las migraciones generando
una problematización de la cultura como expediente nacional. La consolidación del fenómeno de la globalización
está asociado a la caída del Muro de Berlín y el fin de la Guerra Fría, que supusieron un cambio para la geopolítica
mundial y las relaciones entre los países. Sin embargo, la Guerra Fría implicó para los Estados Unidos una política
de apoyo a las artes porque estas se utilizaron para legitimar ciertas ideologías políticas del Estado. Véase: Yúdice,
George. La cultura como recurso: Usos de la cultura en la era global. Barcelona: Gedisa, 2002. En términos prácticos,
este apoyo político facilitó que ciertos estilos artísticos tuvieran el impulso necesarío para que, como lo expresó
Serge Guilbaut, Nueva York robara la idea de arte moderno. Cuando cae el Muro de Berlín, el panorama político en
el mundo se trasforma y la política cultural de los Estados Unidos también, se da una reducción de la subvención
directa de todos los servicios sociales prestados por el Estado, incluida la cultura. “Pero la táctica de reducir los
gastos estatales, que podría pararecer el toque de difuntos de las actividades artísticas y culturales sin fines de
lucro, constituye realmente su condición de continuidad. El sector de las artes y la cultura afirma ahora que puede
resolver los problemas de Estados Unidos: incrementar la educación, mitigar las luchas raciales, ayudar a revertir
el deterioro urbano mediante el turismo cultural, crear empleos, reducir el delito y quizá generar ganancia. Esta
reorientación la están llevando a cabo los administradores de las artes y los gestores culturales (…) hoy se encauza
a los artistas hacia el manejo de lo social. [Esta tendencia no fue ajena a Europa desde donde la cultura también
se la empezó a percibir como facilitadora del desarrollo humano] (…)” “En rigor, cuando poderosas instituciones
como la Unión Europea, el Banco Mundial (BM), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), las principales fun-
daciones internacionales, comenzaron a percibir que la cultura constituía una esfera crucial para la inversión,
se la trató, cada vez más, como cualquier otro recurso”. Guilbaut, Serge. De cómo Nueva York robó la idea de arte
moderno. Barcelona: Mondadori, 1990, pp. 26-27.
31. Este discurso ha derivado en lo que hoy se conoce como economía creativa o naranja.
¿QUÉ SE PRETENDÍA? 24
literatura, cine y demás. Esto se explica dado que “el concepto de recurso
absorbe y anula las distinciones, prevalecientes hasta ahora, entre la definición
de alta cultura, la definición antropologica de cultura y la definición masiva de
cultura”.32 Y es, justamente, en este nuevo marco epistémico que se empiezan a
gestar estos planes regionales.
33. Bravo, Marta Elena. “Políticas culturales en Colombia”. En: Itinerarios culturales 1985-2007: Voces y presencias.
Medellín: Editorial Lealon, 2008, p. 300.
34. Plan de Desarrollo Cultural de Medellín 2011-2020: Medellín, una ciudad que se piensa y se construye desde la cultura.
Medellín: Alcaldía de Medellín, 2011, p. 28.
25
los cuales hacen parte de una realidad polifónica, que debe ser entendida en
muchos niveles. En esta contextualización se quiso esbozar a grosso modo tres
aspectos que tienen importancia para el análisis: primero, las contradicciones
sociales que vivencia la ciudad; segundo, la consolidación cada vez más am-
plia de su campo artístico, y tercero y último, el importante desarrollo que
las políticas culturales han tenido en Colombia y, particularmente, en Medellín
como pionera en estos procesos en el país. Estos tres niveles de diagnóstico son
necesarios pues los espacios autogestionados en sus prácticas transitan, se
relacionan e influyen en todos ellos.
2
35. Iturraspe, Francisco. “Participación, congestión y autogestión en América Latina”. En: Nueva Sociedad, Vol.1,
1986, p. 30. Citado por: Hudson, Juan Pablo. “Formulaciones teórico-conceptuales de la autogestión”. En: Revista
Mexicana de Sociología 72, n.°4, 2010, pp. 571-597.
36. Hudson, Juan Pablo. “Formulaciones teórico-conceptuales de la autogestión”. En: Revista Mexicana de Sociología
72, n.° 4, 2010, p. 589.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 28
38. Ibíd.
29
39. Taibo, Carlos. Repensar la anarquía. Acción directa, autogestión y autonomía. Madrid: Los Libros de la Catarata,
2013, p. 84.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 30
40. Con capitalismo postindustrial nos referimos a las trasformaciones que sucedieron desde la crisis de los años
setenta del modelo industrialista y proteccionista de posguerra. En otras palabras, la producción y sus formas de
organización se adaptaron rápidamente a un tipo de capitalismo que se denominó capitalismo informacional (Ma-
nuel Castells) caracterizado por una nueva era de la economía de la imagen y la comunicación, un desarrollo tec-
nológico que transformó no solo la economía haciéndola más especulativa y financiera, sino también las formas
de subjetividad, e impulsó, además, un trabajo intelectual y cognitivo (capitalismo cognitivo-Moulier Boutang).
Este proceso modificó las formas de regulación de las relaciones laborales y el modelo de protección social carac-
terístico del Estado benefactor de la posguerra, dando como resultado una nueva era de flexibilidad y precariedad
laboral.
41. Marín G., Teresa, Martín, Juan y Villar, Raquel. “Emergencias colectivas. Mapa de vínculos de actividades ar-
tísticas (autogestionadas) en la Comunidad Valenciana”. Archivo de Arte Valenciano. Vol. XCII, 2011, p. 516.
31
42. Ibíd.
43. Guasch, Ana María. “Los Estudios Visuales. Un estado de la cuestión”. En: Estudios Visuales, n.° 1, 2003, pp. 8-9.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 32
visual, música, literatura, etc.—; desde las cuales es difícil definir a qué tradi-
ción artística pertenecen: si se trata de performance, pintura, escultura, etc. Así
pues, los Estudios Visuales vienen a apoyar, por decirlo de alguna manera, un
interrogante que se instaló desde los movimientos de vanguardia de principios
del siglo XX: el interrogante sobre los parámetros o criterios para determinar lo
qué es una obra de arte, esto es, si basta con proponer algo como obra artística
para que en verdad lo sea. El interrogante viene motivado no solo por la evolución
misma del arte, donde los perfiles de lo artístico parecen haberse desdibujado,
sino también por la ausencia de patrones de verificación que permitan establecer
una línea que eventualmente fije sus confines.
44. La posmodernidad trata de aludir a la época que se enmarca después de la Guerra Fría, con el derrumbe del Muro
de Berlín, el fin de los metarelatos (como el marxismo, no tanto como corriente filosófica sino como movimiento
insurgente y mesiánico de salvación), por lo que muchos creyeron en el fin de la historia (Francis Fukuyama) y,
por consiguiente, en el advenimiento de lo que se vino a denominar posmodernidad. Esta se relaciona con el giro
lingüístico que tiene sus orígenes en la filosofía analítica y hermenéutica, en las humanidades es heredera del es-
tructuralismo clásico francés de F. Saussure, C. Lévi Strauss y R. Barthes. Esta corriente esencialmente llamaba la
atención sobre cuatro aspectos: la oposición de los significantes, el carácter arbitrario del signo, la dominancia del
todo sobre las partes y el descentramiento del sujeto. El reconocimiento del lenguaje como agente estructurante por
parte de las humanidades llevo a Francois Lyotard, junto con Michael Foucault, Gilles Deleuze, Jean Baudrillard,
Jacques Derrida y Félix Guattari a convertirse en los más importantes exponentes de lo que se denominó postestruc-
turalismo francés que tendría gran influencia en varias corrientes de pensamiento. El postestructuralismo francés
dio las claves conceptuales que permitirían la desconstrucción de los grandes metarelatos, posibilitarían la ruptura
del tiempo lineal y entronarían la multiplicidad y la diferencia, como conceptos articuladores del nuevo mundo
posmoderno. Para algunos el posmodernismo también llego a su fin, tras el 11 de septiembre, que sería el punto de
inflexión que marca una nueva comprensión de la época contemporánea. Sobre esta última idea Véase: Duque, Félix.
Terror tras la postmodernidad. Madrid: Abada Editores, 2004, pp. 7-32.
45. Vilar, Gerard. “Democracia, pluralismo y relativismo”. En: Las razones del arte. Madrid: La Balsa de la Medusa, 2005, p. 195.
33
Que esto sea positivo o negativo podría valorarse desde muy variados
puntos de vista, pero lo importante ahora es comprender que la situación en la
que se sumergió el arte desde ese momento es de una pluralización absoluta,
que expresa aisladas y fragmentadas visiones de mundo, las cuales exigen
ser capaces de reconocer como “mundo” una colección de elementos disper-
sos que no reúnen ningún material unificador, es decir, que invita a encontrar
sentido en los fragmentos sin que esto implique una dispersión absoluta.46 La
pluralidad de propuestas y prácticas artísticas plantea una exigencia de com-
prensión y un diálogo activo que, sin duda, busca comunicar alguna cosa, ya sea
con una obra, con instalación o una práctica colectiva que se quiere alejar de lo
convencional-institucional, o al abrir espacios que lo convencional-institucio-
nal no le posibilita. Las prácticas artísticas autogestionadas, vienen a expandir
el campo del arte mucho más allá del mismo y exigen de los artistas incorporar
otro tipo de competencias (creativas, organizacionales, técnicas, conceptuales,
etc.) que suman matices a la forma en que es pensado y practicado el arte en la
contemporaneidad.
La liberación del corsé estético47 ha dado a los artistas una libertad desco-
nocida para el arte del pasado. Esta libertad artística plantea nuevas maneras
46. Bourriaud, Nicolás. Estética relacional. Buenos Aires: Adriana Hidalgo Editora, 2008, p. 20.
47. La expresión hace referencia a la deconstrucción y redefinición sistemática de los cánones y criterios tradicio-
nales de belleza o las apuestas vanguardistas, que el arte contemporáneo ha llevado a cabo, y que han conducido a
un relativismo estético. “La escena del arte contemporáneo podríamos formularla como un espacio de competen-
cias y sinergias, en el que posiciones distintas y coexistentes —que se corresponden con las diferentes prácticas
y elecciones artísticas— se definen una en relación con otras por proximidad, oposición o hibridación estética, o
por su vinculación de ámbito desigual, y por la naturaleza de la red en la que se integran”. Ver: Golvano, Fernando.
“Redes, campos y mediaciones: Una aproximación sociológica al arte contemporáneo”. En: Revista Española de
Investigaciones Sociológicas, n.° 84, 1998, pp. 291-304.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 34
Resumiendo, el giro del arte hacia la autogestión se relaciona con tres as-
pectos. El primero tiene que ver con una resignificación dentro del arte mismo, el
acrecentamiento de la pluralidad artística y el cambio generado por los Estudios
Visuales abrieron una variedad de vías para el desarrollo y la conceptualización
de lo artístico. El segundo se relaciona con una crisis en lo económico que incide
notablemente no solo en los procesos de flexibilización laboral a nivel general,
sino también y, específicamente, con la precariedad laboral de los artistas. El
tercero alude a la incapacidad de los modelos de creación, producción y gestión
artístico-cultural convencionales, es decir, la institución arte, para satisfacer las
necesidades materiales y creativas de los artistas favoreciendo e impulsando
procesos de autogestión.
48. Desde el momento en que se empieza a gestar el arte moderno, esta nace con un espíritu vanguardista. El pri-
mer movimiento, el impresionismo, fue un grupo de artistas rebelde y combativo. Rompieron las reglas y retaron
al establishment de la época y propiciaron esa revolución que ahora llamamos arte moderno. La tensión con los cá-
nones de la Academia, no les dejaba opción y, como es conocido para el año 1874, Renoir, Pissarro, Sisley, Morisot,
Cézanne, Degas y Monet habían decidido desafiar a la Academia y hacer su propia muestra. Gestos como este se
repetirán a lo largo de la historia del arte, la tensión con lo establecido siempre ha sido motivación para expandir
el ámbito del arte y, en muchas ocasiones, este ha sido transformado y resignificado considerablemente.
49. Burger, Peter. Teoría de la vanguardia. Barcelona: Ediciones Península, 1987. Citado por: Herrera, María José.
“Gestión y discurso”. En: {{em_rgencia}, n.° 04, 2010, p. 69.
35
entender, o mejor aún, ver qué tanto de lo dicho está por discutirse
en una revisión más consciente. Por ejemplo, se deben identificar los
procesos de obtención de recursos, difusión, circulación, transmi-
sión y adquisición de conocimientos, elaboración de proyectos, entre
producción artística y difusión, dependiente de los centros de poder,
también llamados centros de arte.50
En la actualidad,
50. Camacho, Alix y Ariza, Fernanda. “Sobre la (auto)gestión como práctica artística”. Disponible en: {{em_rgencia},
n.° 04, 2010, p. 59.
51. Marín G. Teresa, Martín, Juan y Villar, Raquel. “Emergencias colectivas. Mapa de vínculos de actividades
artísticas (autogestionadas) en la Comunidad Valenciana”, p. 518.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 36
52. Bayardo, Rubens. “Gestión cultural, economía de la cultura y políticas culturales ante la diversidad cultural”.
Bobbio, Daniela (Comp.). Tensiones: Selección de conferencias del programa de formación en gestión cultura. Córdoba:
Ediciones del Centro Cultural España, 2008, p. 70.
en torno de los cuales giran los proyectos de cada uno de los espacios auto-
gestionados de la ciudad de Medellín. Los ejemplos que hemos seleccionado
muestran un panorama artístico plural y fragmentado. Si bien algunas de las
propuestas como son Casa Tres Patios, Campos de Gutiérrez y Plazarte están
dirigidas por una persona que toma la vocería, hablamos de ellas como colec-
tivas porque en sus estrategias recurrieron a diferentes formas de colaboración
y, en su conjunto, generan un entramado colectivo lleno de conexiones y
ramificaciones entre sí.
54. Ibíd.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 38
La descentralización artística
55. Escobar, Juliana y Ayala Alfonso, David (2010). “Espacios de posibilidad. Sobre las formas y los alcances de los
proyectos de (auto)gestión”. En: {{em_rgencia}, n.° 04, 2010, p. 84.
39
56. Fonseca Yerena, Eudoro. “La descentralización cultural en México, revisiones y perspectivas”. En: III Encuentro
Internacional de promotores y gestores culturales. Desarrollo cultural: Del pluralismo cultural a la interculturalidad.
Guadalajara, 26-30 de abril de 2005. Disponible en: http://sic.cultura.gob.mx/documentos/835.doc (Consultado,
octubre de 2014).
57. Vale aclarar que el análisis, como se ha visto, considera espacios cronológicos más amplios. El año 2003 es un punto
en el tiempo que marca el comienzo de la consolidación de la práctica autogestionada en la ciudad de Medellín.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 40
En definitiva, son varios los factores que, cada vez más, favorecen procesos
de descentralización dentro del campo del arte, pero quizá ninguno más vi-
sible como el de los espacios autogestionados, que en su labor ha generado
una concepción más sofisticada de la gestión artística. Como se mencionó, la
descentralización implica transferir poder de los centros o autoridades artís-
ticas hacia espacios que no están subordinados. Esto significa que los espacios
autogestionados en su accionar logran abrir espacios de decisión y autonomía
respecto al medio artístico oficial. Entran a actuar en paralelo a las centra-
lidades —instituciones museísticas, por ejemplo— expandiendo, de esta
forma, la red de lugares de acción existentes dentro de su campo. Apelando
a nuevos métodos de circulación y promoción artística, los espacios artísticos
autogestionados introducen líneas de fuga respecto a los relatos y prácticas
41
58. Marín G., Teresa, Martín, Juan y Villar, Raquel. “Emergencias colectivas. Mapa de vínculos de actividades
artísticas (autogestionadas) en la Comunidad Valenciana”, p. 515.
59. Sus amplias casas se convirtieron en sede de la Clínica El Prado y algunas instituciones no gubernamentales o
sin ánimo de lucro que tomaron sus casas para centros culturales o religiosos.
60. La recuperación de Prado-Centro se inscribe en el proyecto Plan Especial del Centro Tradicional y Represen-
tativo Metropolitano, que aún está en proceso de formulación y se considera un proyecto estratégico de la línea de
resignificación urbana del Plan Integral para la Recuperación del Centro de Medellín, en la línea de entre los que
se encuentran los proyectos de resignificación urbana.
61. Si bien es cierto que su actividad puede generar otras dinámicas en la zona, no se trata de pecar de ingenuos,
resulta importante anotar que estos espacios contribuyen, pero las trasformaciones requieren cambios estruc-
turales y voluntad política para poder hacer frente a los graves y complejos fenómenos sociales que experimenta
esta zona de la capital paisa.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 42
en una zona comercial e industrial donde los espacios culturales son casi inexis-
tentes y cuyas actividades abren un espacio único en la dinámica del barrio. El
segundo, ubicado en zona rural en la vereda Media Luna del corregimiento de
Santa Elena, a 20 minutos del centro de la ciudad. Campos de Gutiérrez fusio-
na lo urbano-rural en sus prácticas hasta convertirse en un espacio original
al ofrecer un acercamiento a las costumbres y dinámicas de las zonas rurales,
que hacen parte también del imaginario y la vida del Área Metropolitana de
Medellín, a sus visitantes.
62. Para Paul Ardenne el “contexto” designa el conjunto de circunstancias en las cuales se inserta un hecho. Un
arte o una praxis cultural llamada “contextual” optan, en consecuencia, por establecer una relación directa entre
43
la obra y la realidad. La obra es inserción en el tejido del mundo concreto, es decir, es una confrontación con las
condiciones materiales. Su apuesta pretende hacer valer el potencial crítico y estético de las prácticas artísticas
más enfocadas a la presentación que a la representación, prácticas propuestas en el modo de la intervención de la
realidad, aquí y ahora. Una realidad que el artista quiere hacer, más que representar, lo que lo lleva a abandonar
las formas clásicas de representación (arte autónomo) y preferir la relación directa y sin intermediarios de la obra
y de lo real. La preocupación que manifiestan los artistas por el contexto o la realidad es consecutiva de un dis-
tanciamiento del “mundo del arte”, entendido en su acepción tradicional. El ámbito de la galería, del museo, del
mercado, de la colección se ha convertido para muchos artistas en demasiado reducido. De ahí la elección de un
arte contextual, que lo motiva el deseo de abolir las barreras espacio-temporales entre la creación y la percepción
de las obras y por apostar por estrategias ligadas a la autogestión cultural. Ver: Ardenne, Paul. Un arte contextual:
Creación artística en medio urbano, en situación, de intervención, de participación. Murcia: Cendeac, 2002.
63. Véase: Ladagga, Reinaldo. Estética de laboratorio. Buenos Aires: Adriana Hidalgo Editora, 2010, p. 263.
64. Si bien es necesaria la labor de preservar el arte y la cultura precedente en colecciones y exposiciones que ayuden
a referenciar el presente —tal y como lo hacen los museos a nivel mundial— es preciso articular mecanismos que
hagan posible que los espacios o centros de arte puedan implicarse en procesos de investigación y producción ade-
cuados a las dinámicas de trabajo que marcan las prácticas artísticas actuales. Un paso a nivel local desde el ámbito
institucional lo ha realizado el Museo de Antioquia a través de la organización de los Encuentros Internacionales
de Arte de Medellín (MDE) en el 2007, 2011 y 2015. Estos eventos, en sus tres versiones, han manifestado un interés
por vincular procesos sociales más amplios con las prácticas artísticas contemporáneas. Han apostado por un arte
que busca la vinculación con el contexto de la ciudad, un arte donde las obras se realizan en el “contexto real” y las
producciones artísticas propenden por tejer con el mundo que lo rodea. En definitiva, unas prácticas artísticas que
apuestan por un cambio en los paradigmas tanto de las prácticas artísticas como sociales, por la reinterpretación de
procesos y modos de hacer desde el arte y por enfoques transdisciplinarios y polisémicos.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 44
65. La cuestión de la pedagogía en la producción cultural es un elemento de debate que ha emergido con una
fuerza inusitada en la última década en diversos contextos y reflexiones en el ámbito cultural contemporáneo.
Desde hace una década, en efecto, este nuevo centro de interés cultural se ha traducido en importantes proyectos
artísticos. A manera de ejemplo citaremos algunos: la importante exposición titulada Radical Education en la Ga-
lería de Arte de Moderno de Liubliana en Eslovenia en el 2006; la Manifesta 6 que tenía como propuesta curatorial
la escuela; la Documenta 12 de Kassel que formuló, bajo presupuestos pedagógicos, uno de los tres ejes rectores
del macroevento bajo la siguiente pregunta: ¿Qué hacer?; la exposición itinerante A. C. A. D. E. M. Y comisariada
por Irit Rogoff y Dieter Roelstraete en 2006 en múltiples lugares en Europa; la exposición procesual Pedagogical
Factory: Exploring Strategies for an Educated City organizada en el 2007 por Stockyard Institute de Chicago; y,
finalmente, Un saber realmente útil, comisariada por el colectivo croata WHW en 2014 en el Reina Sofía en Madrid.
A nivel editorial diversos movimientos han articulado sus propuestas siguiendo este interés por la pedagogía:
Zehar en Alemania o AREA en Chicago. Todos estos eventos o propuestas demuestran que el factor pedagógico ha
traspasado la cuestión de la escuela y se ha constituido como un eje clave a la hora de pensar las relaciones entre
las prácticas artísticas y la sociedad. Lo que también se ha definido como el “giro pedagógico” (Grant Kester) o “el
giro educativo” (Irit Rogoff) en las artes. Un caso en el ámbito local lo constituye Casa Tres Patios.
66. Parramón, Ramón. “Acciones reversibles en proceso”. En: Acciones reversibles: Arte, educación y territorio.
Barcelona: Eumo Editorial, 2008, p. 15.
45
68. Rodrigo, Javier. “El trabajo en red y las pedagogías colectivas: retos para una producción cultural”. En: Acciones
reversibles: Arte, educación y territorio. Barcelona: Eumo Editorial, 2008, p. 41.
70. Esto es lo que muchos autores han criticado de las estéticas relacionales, al marcar un ámbito pseudoparticipativo
restringido. Claire Bishop ha sido una de las teóricas que más ha criticado las propuestas relacionales. En un texto
publicado en el 2004 en la revista October con el título “Antagonism and Relational Aesthetics” Bishop apuntaba a la
necesidad de evaluar los aspectos políticos y éticos que tanto promulga Nicolas Bourriaud, a través de cuestionar el
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 46
tipo de relaciones resultantes de las obras relacionales. En vista de que Nicolas Bourriaud ha afirmado en más de una
ocasión que el sentido de existencia y el criterio para evaluar el éxito el arte relacional es la creación de relaciones,
“Bishop considera que la siguiente pregunta que debiera formularse es “¿qué tipo de relaciones están siendo produ-
cidas, por quienes y por qué?”. Para la autora resulta lógico querer indagar a este respecto, sobre todo porque desde
la estética relacional nunca es problematizada la calidad de las relaciones que crea. Al contrario, parece que se asume
sin ningún reparo que todas las relaciones que permiten el diálogo son automáticamente democráticas y por lo tanto
buenas”. Véase: Prado, Marcela. “Debate crítico alrededor de la Estética Relacional”. Disturbis, n.° 10, otoño 2011. En:
http://disturbis.esteticauab.org/DisturbisII/Prado.html (Consultado, octubre de 2014).
71. Muñoz, Francesc. Urbanalización. Paisajes comunes, lugares globales. Barcelona: Gustavo Gili, 2008.
47
definen de manera poco clara el grupo social al que se refieren, ya que los espa-
cios autogestionados pueden realizar una determina actividad temporal con un
grupo de gente y acto seguido pasar a otro espacio con otra actividad genera-
da con parámetros diferentes. Barrio y comunidad son cada vez más parecidos y
más distantes, porque ambos son cada vez más multiplex. Si ampliamos el abanico
y consideramos otras formas de generar comunidades o microcomunidades
dentro de los barrios, podemos plantear que las personas se agrupan no tanto
por una cuestión de identificación identitaria (que en algunos casos sí) como
para compartir problemáticas, situaciones temporales, reivindicaciones con-
cretas o aficiones, para ocupar el tiempo libre, por vocación de transformación
de la realidad, para no sentirse solas, porque habitan en un mismo edificio, para
ocupar una vivienda, porque viven en un barrio, para divertirse, para desarro-
llar actividades culturales, por ser miembro de una asociación, por tener unas
orientaciones sexuales específicas, por pertenecer a un segmento de edad
concreto o por afinidades políticas, etc. Un individuo puede pertenecer al mismo
tiempo a varios colectivos y ser miembro de diferentes comunidades, unas
voluntariamente, otras porque son categorías que predefinen su pertenencia.
Por lo tanto, la construcción categórica de comunidad o el hecho de formar parte
de una comunidad no pueden quedar definidos por unos límites concretos, son
circunstancias permeables, cambiantes e interconectadas.72 Los espacios
autogestionados han encontrado en la disolución de estos límites la posibilidad
y el deseo de generar proyectos culturales y/o artísticos que potencian comuni-
dades temporales por afinidad.
72. Ramón, Parramón. “Idensitat. Proyecto en proceso”. En: Arteterapia. Papeles de arteterapia y educación artística
para la inclusión social. Vol. 4, 2009, pp. 213-223.
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 48
Hay dos aspectos muy interesantes del trabajo de los espacios autogestio-
nados, el primero, radica, principalmente, en las decisiones relativas a su
actuación a través de gestos que se extienden más allá del instante de producción
de la obra-objeto, y tocan los contornos del sistema del arte en diversas ins-
tancias: gestión, circulación, producción, exhibición, etc. Lo que se relaciona de
manera clara con el segundo aspecto, y es que, en muchos proyectos impulsados
por los espacios autogestionados, la figura del artista es sometida a un fuerte
49
73. Basbaum, Ricardo. “Desplazamientos rítmicos: el artista como gestor, curador y crítico”. En: Ruiz, Andrea (Comp.).
Hibrido y puro. Prácticas curatoriales en el arte contemporáneo. Córdoba: Ediciones del Centro Cultural España, p. 15.
75. Esta distinción —curador de servicio y curador de infraestructura— es introducida por el curador chileno Justo
Pastor Mellado en un texto titulado “Producción de infraestructura” incluido en el libro Hibrido y puro. Practicas
curatoriales en el arte contemporáneo. Córdoba: Ediciones del Centro Cultural España, 2009. También la discusión
aparece en: “Apuntes para una delimitación de la noción de curador como productor de infraestructura”. Micro-
museo, 2002. Disponible en: https://www.micromuseo.org.pe/lecturas/jpastor.html (Consultado, agosto de 2014).
76. Ibíd.
77. Wechsler, Diana B. “Estudios curatoriales, un área de investigación”. En: Estudios curatoriales. Año 1 n.° 1,
primavera 2012. Disponible en: http://untref.edu.ar/rec/num1_editorial.php (Consultado, agosto de 2014).
¿QUÉ SON LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS? 52
78. Es necesario aclarar que, en el ámbito local de la ciudad de Medellín, al no estar completamente consolidado,
la distinción entre curador de servicios y de infraestructura debe matizarse, desde luego, esto no quiere decir, que
desde el espacio institucional no se puedan plantear discursos críticos que generen escena local. El papel institu-
cional, especialmente los museos, en el campo del arte de la ciudad de Medellín —como se mencionó en la primera
parte del texto— ha jugado un papel protagónico para la consolidación y profesionalización del mismo, así como
también para la ampliación y diversificación de la oferta cultural y artística. Sin embargo, tal como lo plantea Justo
Pastor Mellado la distinción trata de hacer énfasis en “separar abruptamente estilos y estrategias de trabajo”, en
este sentido es operativa al contexto de la ciudad. Ya que tanto las estrategias, los tiempos, los recursos, los inte-
reses, las posibilidades, los contactos, etc. distan mucho de un curador institucional a uno que no lo es.
53
79. Marín G., Teresa, Martín, Juan y Villar, Raquel. “Emergencias colectivas. Mapa de vínculos de actividades
artísticas (autogestionadas) en la Comunidad Valenciana”, p. 508.
3
Espacios de
contingencia:
cinco espacios artísticos
autogestionados de la
ciudad de Medellín
55
Rally de dibujo, Taller 7 y José Antonio Suárez Londoño (2009). Fotografía: Taller 7.
Taller 7
Integrantes: Adriana Pineda, Mauricio Carmona y Julián Urrego.
80. Taller 7 fue fundado por los artistas plásticos Paola Gaviria, Julián Urrego, Carlos Carmona, Adriana María
Pineda, Mauricio Carmona Rivera, Javier Álvarez y María Isabel Vélez. Dos artistas que ayudaron y participaron
en calidad de invitados durante los primeros años fueron: Albany Henao y Milton Valencia.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 56
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
primera exposición fue de los integrantes del Taller 7, las demás fueron de
otros artistas aunque normalmente participaba alguien del Taller que hacía
las veces de “anfitrión”. Fueron escasas las veces donde solo participaron
integrantes del Taller 7, Espacios recorridos una exposición de Paola Gaviria
y María Isabel Vélez, da cuenta de ello. En palabras de Julián Urrego, como
artistas sabían por experiencia propia que “el circuito del arte en Medellín
es muy cerrado”.81 Por esta razón, empezaron a mostrar obras de artistas de
toda la ciudad, les interesaba hacer visible lo que estaba pasando, pero, sobre
todo, lo que pasaba con artistas jóvenes que son los que tienen menos espacios de
circulación, Calle5E, exposición individual de Cesar Guzmán (Yeyo), y Huma-
na, una muestra de grado de la desaparecida Escuela Popular de Arte (EPA),
son dos buenos ejemplos. Ese mismo año hicieron otra exposición llamada De
nuevo nueve con artistas de más trayectoria,82 algunos de los cuales habían
sido sus profesores. Esta exposición revela uno de los rasgos de este espacio
y, es que, a lo largo de los años han sabido integrar varias generaciones de
artistas. En palabras de Taller 7 “a través de la articulación de los procesos
de artistas emergentes con los de artistas con trayectoria se propicia un cru-
ce intergeneracional que nos permite generar nuevos enlaces y expandir la
crítica y reflexión alrededor del arte”.83 Estas ideas evidencian la materiali-
zación de gestos inicialmente espontáneos que, en el devenir de los años, se
han ido formalizando hasta permitir la gestación de un discurso que explica
uno de los propósitos de Taller 7.
82. Los artistas que participaron en esta exposición fueron: Óscar Jaramillo, Jorge Ortiz, Carlos Uribe, Gloria
Posada, Libia Posada, Jorge Gómez, Freddy Serna, John Mario Ortiz y Natalia Restrepo.
De izquierda a derecha: Jorge Ortiz, Juan Camilo Uribe, Carlos Uribe y Gloria Posada.
85. “Taller 7 por Adriana Pineda, Carlos Carmona y Mauricio Carmona”. En: Cuadernos MDE07: Encuentro Interna-
cional Medellín 2007. Prácticas artísticas contemporáneas. Medellín: Fondo Editorial Museo de Antioquia, 2011, p. 75.
59
casa. En el caso de las exposiciones, las costean los mismos artistas, cada uno
de los artistas participantes realiza un aporte simbólico para las invitaciones
y la limpieza y el resto lo aporta el Taller. A través de los años han implemen-
tado diversos modos de financiación como compartir gastos y hacer trueques
—por ejemplo, 50 % dinero y 50 % apoyo con labores que surgían de las
actividades— y, con el tiempo, han gestionado recursos desde lo institucional
al aplicar a becas y convocatorias de diversa naturaleza. Respecto al dinero
Julián Urrego afirmó: “Hemos tratado que el dinero no prime y poder tirar
para adelante con el proyecto”, es decir, que el dinero no ha determinado lo
que hacen en el Taller, deciden qué quieren hacer y lo realizan con los recur-
sos tengan. En definitiva, siempre han apostado por “ser artista a pesar de no
tener plata”86 y trabajar colectivamente pese a los escasos recursos. Es casi
una obviedad afirmar que el aspecto más difícil de superar para este tipo de
espacios es el factor económico. Sin embargo, Taller 7, tras diez años de tra-
yectoria, ha demostrado una gran capacidad para mantenerse activo y generar
diversas formas de financiación.87 Existen algunas razones que podemos es-
bozar para entender su continuidad. La primera es que fueron pioneros en el
contexto de Medellín, eso hizo que el medio artístico les garantizara cierto
apoyo al encontrar un espacio único en su naturaleza en una ciudad con un
medio limitado.88 Si bien, esta puede ser una razón plausible es insuficiente.
La segunda tiene que ver con la determinación, como lo evidencian las pa-
labras de Julián Urrego “ser artista a pesar de no tener plata”, es decir, hay
convicción en la labor de su quehacer profesional, ese querer hacer y no esperar
que otros hagan por mí es un rasgo que caracteriza el impulso de muchos
espacios autogestionados y reafirma la base anarquista de este tipo de prácticas.
Las palabras de Adriana Pineda son muy significativas:
87. Los diez años se cumplieron en 2014, año en que se llevó a cabo la presente investigación.
88. En el país existieron otros espacios independientes de discusión y exposición artística como Magma (1985-
1987), espacio alterno y taller de los artistas Jaime Iregui, Rafael Ortiz, Marta Combariza y María Victoria Durán;
Gaula (1990-1991), espacio creado por Danilo Dueñas, Carlos Salas y Jaime Iregui; el proyecto Tándem (1993-1997),
de Jaime Iregui en colaboración el filósofo Alfonso Flórez y con el matemático Isaac Dyner, que hacía publicacio-
nes, exposiciones y talleres en los que participaron otros artistas e investigadores de otras disciplinas; Espacio
Vacío (1997-2002), un proyecto realizado por José Hernández y dirigido por Jaime Iregui, que también hacía ex-
posiciones, o un espacio más reciente como El Bodegón (2005-2009) espacio de Víctor Albarracín y otros artistas,
todos en la ciudad de Bogotá. En el contexto de Medellín, un espacio con las características del Taller 7 era inédito,
si bien existía, como veremos más adelante, Taller Sitio Estudio, un colectivo que tenía un espacio para sus acti-
vidades, Taller 7 es un punto de inflexión en la práctica autogestionada del arte en la ciudad. Ver: Archivo de Jaime
Iregui. Disponible en: https://jaimeiregui.wordpress.com/tag/magma/ (Consultado, agosto de 2018).
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 60
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
para conseguir unos objetivos según los intereses que nos agrupan,
que podrían pensarse como una forma de resistencia.89
90. Gil, Javier. “Gestión de la creación, creación de la gestión”. En: Giros y desvíos: Una aproximación a la gestión
desde las artes visuales. Bogotá: Ministerio de Cultura, 2002, p. 24.
que, con el tiempo, se han consolidado como proyectos de más largo aliento. Un
buen ejemplo de esto último son las sesiones de dibujo con diez años de trayec-
toria; este programa empezó por la amistad con José Antonio Suárez, quien
visitó el Taller con Paola Gaviria, y siguió asistiendo, desde ese momento,
todos los viernes. Las sesiones están abiertas a todo tipo de público: artistas,
dibujantes, señores jubilados, jóvenes, etc., han funcionado gracias al voz a
voz porque no se hace convocatoria y han apostado por prácticas artísticas
colectivas donde cualquier persona interesada puede explorar y experimentar
sistemáticamente el medio del dibujo.
Sesiones de dibujo que se desarrollan cada viernes desde el año 2004 en Taller 7.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 62
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Más allá de los diversos proyectos que realizamos, hay un día a día, una
confrontación con el otro, que exige repensar el espacio, el proyecto y
las prioridades. El diálogo continuo ha sido de vital importancia en esta
organización que posee una estructura horizontal, que se concatena a
los intereses personales, tiempos y formas de hacer de cada uno de los
integrantes, y ha hecho necesaria la constante discusión, negociación y
disposición que en algunos momentos han sido difíciles de articular por
el tiempo que exigen las actividades por fuera del taller. En consecuen-
cia, el número de integrantes ha disminuido con el pasar de los años, ya
que muchos decidieron tomar otras vías que los alejaban del trabajo en
grupo, cuestión inevitable, que exige una reorganización de la estruc-
tura interna de trabajo.93
94. El retiro de los integrantes ha sido intermitente. Paola Gavira se fue de la ciudad en 2003, pero siguió vinculada y
colaborando con el proyecto durante un par de años más desde el exterior; María Isabel Vélez se desvinculó en 2003;
Milton Valencia en 2007; Albany Henao en 2008; Javier Álvarez en 2009; Carlos Carmona en 2011, pero mantuvo
vínculos con algunos proyectos del Taller y, finalmente, Julián Urrego en 2016, aunque en 2017 apoyó varias activi-
dades. Actualmente Adriana Pineda y Mauricio Carmona son quienes están a cargo. La salida de los integrantes se
produjo por múltiples razones: porque se iban del país, querían concentrarse en su trabajo individual o tenían otros
proyectos profesionales.
Ahora, bien, aunque Taller 7 nace como una alternativa a los espacios ins-
titucionales, ha mantenido una estrecha relación con el ámbito institucional
a lo largo de los años. Esto no constituye una contradicción, una característica
de los espacios artísticos autogestionados es que no entran a competir con lo
institucional, es decir, aunque abogan por prácticas no convencionales no se
yerguen como una corriente disidente en sentido estricto. En el caso de Taller
7, su intención es “generar nuevas vías de difusión e intercambio a través de la
implementación de plataformas alternas, que permitan, desde la autogestión
y el trabajo colectivo, nuevos puntos de conexión”.96 Pero la relación con lo
institucional es mucho más compleja, los espacios autogestionados propenden
por unas prácticas artísticas diferentes a las institucionalizadas y cuestionan
no solo sus modos de circulación sino también sus modos de hacer, sus valores
y la forma de legitimar “el arte”. En definitiva, hay una tensión latente entre
las lógicas que subyacen a cada una de las diferentes prácticas que se producen
desde ambos ámbitos. En el caso local, el desarrollo del medio artístico de
Medellín para la época en que nace Taller 7 era tan incipiente que ellos como
espacio autogestionado, así como las mismas instituciones, se beneficiaron
mutuamente de su colaboración. Sin embargo, no deja de existir una tensión,
esto es claro, en opinión de Julián Urrego, en referencia a los espacios alterna-
tivos de la ciudad:
96. Ibíd.
los diferentes actores del medio. Pero además porque lo institucional —museos
o galerías— encuentran en este tipo de espacio una forma de diversificar su
oferta, que coincide con directrices más amplias que se establecen desde las
políticas públicas de la ciudad exigiéndole a los espacios culturales institucio-
nales ciertos modos de hacer y resultados específicos. En el caso de las galerías,
estos espacios toman riesgos que un espacio comercial difícilmente está dis-
puesto a tomar y pueden apostarle a artistas que no están consolidados o son
desconocidos para el mercado permitiendo la circulación de nuevos artistas y
diversificando la oferta.
98. Cuando hablamos de campo artístico lo hacemos en el sentido que lo propone Bourdieu. Aunque, como ya lo
hemos señalado, hoy los usos sociales del arte van mucho más allá de lo que se relaciona con este concepto —dadas
las profundas transformaciones en los campos de la economía y la cultura—, la noción de campo nos sirve sobre
todo para señalar el proceso que, en el caso local, se relaciona con su consolidación que, en otras palabras, se ex-
plicaría con una configuración cada vez mayor de su autonomía, es decir, un fortalecimiento de sus características
técnicas y de producción. Este uso del concepto no está planteado en clave moderna, sino que considera procesos
contemporáneos que influyen en la manera que en ciudades como Medellín se configura su campo artístico.
Montaje y exposición de los resultados del Rally de Dibujo, que hicieron Taller
7 y José Antonio Suárez, el viernes 30 de octubre de 2009 entre las 8:00 a.m. y
la 1:00 p.m. La exposición se inauguró el 26 de noviembre de 2010, en LDF Galería
(Buenos Aires). El rally reunió un grupo de 33 personas que “se encontró con la
excusa de dibujar nuevamente, pero esta vez los dibujos fueron construidos a partir
de una lista de 10 ejercicios previamente formulados, con un tiempo máximo de
elaboración de 20 minutos por dibujo. El proyecto nunca planteó una competencia
entre dibujantes, sino un simple juego, una carrera contra el tiempo, una prueba de
resistencia después de la interminable lucha contra la hoja en blanco” (Taller 7).
reconocer más este tipo de labores (…) puede haber mucho más apo-
yo, en general, no solamente concertaciones o becas, sino algo más
permanente, pues es para la cultura en general. Siento que estamos
mostrando una buena cara, por el buen trabajo que estamos haciendo
como Taller 7 y todos los agentes culturales de los espacios alternativos
y eso está resonando. En la medida que tengamos más posibilidades
a la hora de realizar nuestra gestión —que se pueda dignificar más la
labor, pues todavía trabajamos mucho con las uñas—, se podría hacer
mucho más. Estos espacios podrían ser financiados durante todo un
año sin necesidad de estar gestionando proyecto a proyecto y así
estabilizarse un poquito más (…)102
102. Ibíd.
104. Alcaldía de Medellín. Plan de Desarrollo Cultural de Medellín 2011-2020: Medellín, una ciudad que se piensa y se
construye desde la cultura. Medellín: Alcaldía de Medellín, 2011, p. 28.
105. El Consejo Municipal de Cultura de Medellín-CMCu es un espacio de participación ciudadana que articula a la
sociedad civil del sector artístico y cultural con los entes político-administrativos de la ciudad.
Fachada Taller 7.
108. Ver la reseña escrita por Alejandro Martín de su experiencia en Taller 7: “Una temporada en Taller 7”. En:
http://esferapublica.org/nfblog/una-temporada-taller-7/ (Consultado, julio de 2018).
79
se enfocó cada vez más en las residencias que han tenido como enfoque
la investigación más que la producción. En ese sentido, la actividad se
volvió cada vez más íntima y silenciosa, se tejen y fortalecen redes
entre los residentes nacionales e internacionales con artistas, cura-
dores, gestores y personas locales de diferentes disciplinas de acuerdo
a los intereses de cada residente y, más que exposiciones, se abre al
público el resultado de las residencias. En este sentido se hacen menos
eventos públicos.109
109. Pineda, Adriana. Comunicación por correo electrónico con la autora. Julio 20 de 2018.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 80
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
(México, D.F.), Cometa (São Paulo) y ZK/U Berlin. Center for Art and Urbanistics
(Alemania) financiado con un convenio con la Alcaldía de Medellín y su progra-
ma de Apoyos Concertados. El intercambio de artistas ha potenciado las redes
construidas al permitir la llegada de artistas a la ciudad de Medellín y la puesta
en circulación de artistas locales a nivel nacional e internacional.110
110. Los artistas paisas seleccionados fueron Camilo Marulanda, enviado a R.A.T (México); Daniela Serna, enviada
a Cometa (São Paulo); John Mario Ortiz, enviado a ZK/U Berlín (Alemania); Vanessa Vahos, enviada a Lugar a Du-
das (Cali), y Natalia Giraldo, enviada a El Parche (Bogotá).
81
Me dio mucho pesar ver llegar a los estudiantes de arte, que tienen que
llegar a un espacio no adecuado para hacer una instalación y no tienen
tiempo para estudiar el espacio, ni para entender la naturaleza de una
casa o una sala, pero tienen que justificar la acción de este espacio, esto
muy raro. Simplemente quería abrir un espacio y decir: “Ustedes tienen
este espacio, pueden trabajar aquí tranquilamente tres, cuatro semanas
y luego vamos a ver qué pasa”. Eso fue el asunto.113
113. Ibíd.
114. Ibíd.
115. Los artistas que participaron en la exposición fueron María Teresa Cano, Alejandro Castaño, Álvaro Correa,
Ramiro Correa, Bairo Martínez, Ana María Mejía, Armando Montoya, Ana Claudia Múnera, Óscar Roldan, Beatriz
Suaza, Carlos Uribe, Juan Fernando Vélez y Santiago Vélez.
85
dio la idea de que quizá era posible invitar a artistas a trabajar una semana o
más en la casa para desarrollar diversos proyectos. Y, además, como se lo hizo
notar Juan Fernando Vélez, la exposición no solo había permitido que artistas
de la Universidad Nacional de Colombia, la Universidad de Antioquia y la Fun-
dación Universitaria Bellas Artes estuvieran juntos en un mismo espacio, sino
que también era la primera vez, en muchos años, que en una exposición no ins-
titucional se reunía a artistas procedentes de diversas instituciones artísticas
de la ciudad.
117. El resto de exposiciones que Casa Tres Patios realizó durante 2006 son: Mixta-Sin título, Habitus, Entrever y
Artes y espacio en la tierra. Para más información ver: http://www.casatrespatios.org/ (Consultado julio de 2014).
118. “En el Eje Curatorial Espacios Anfitriones, inscrito en el Encuentro Internacional Medellín 2007/Prácticas
87
podría apoyarlo en el marco del evento con unas residencias. Como él mismo
cuenta, “eso fue un gran impulso (…) el museo nos dio unas residencias, pero no
económicamente, fue el impulso más emocional y espiritual que yo necesitaba
para tomar la decisión porque realmente era Sonia [esposa de Tony] la que apoyó
la casa durante los primeros cuatro años”.
Artísticas Contemporáneas, Espacios de Hospitalidad, se invita a un grupo de ocho espacios independientes, cuatro
nacionales y cuatro internacionales, a realizar su práctica durante un mes en la ciudad de Medellín. Estos invita-
dos serán a su vez acogidos por cuatro espacios y colectivos independientes que funcionan en la ciudad: La Jíkara
Galería-Café, Casa Tres Patios, Taller 7 y la Fundación Universitaria Bellas Artes, donde podrán residir y desa-
rrollar su actividad”. Ver: Encuentro Internacional Medellín 2007, MDE07. “Espacios anfitriones”. Disponible en:
http://mde.org.co/mde07/nodo/memorias-del-mde07/zonas-de-activacion/espacios-anfitriones/ (Consultado,
julio de 2014).
120. Ver: http://www.casatrespatios.org/ Además de los recursos financiados, han tratado de establecer redes con
otros espacios, C3P “hace parte de Residencias en Red Iberoamericanas y ResArtis”.
121. En la tercera versión del Encuentro Internacional Medellín 2015, Casa Tres Patios participó nuevamente, como
Espacio Anfitrión. Tony Evanko hizo parte del equipo curatorial, como curador local, al lado de Nydia Gutiérrez
(directora artística), Fernando Escobar (curador nacional), Sharon Lerner y Edi Muka (curadores internacionales).
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 90
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
no somos contadores. Ganar ese apoyo fue una cosa súper clave porque
nos permitió profesionalizarnos (…) y qué implica eso: unos sueldos
no grandes pero dignos y la capacidad de contratar con personas que
tienen las capacidades que nosotros no tenemos.122
Estas palabras son elocuentes y nos permiten deducir varias ideas. La pri-
mera que la posibilidad de profesionalizarse implicaba incorporar personas
capacitadas en labores administrativas y, además, pagar sueldos. Muchos
espacios autogestionados generan diversas estrategias para sostenerse que
pueden implicar intercambios de muy diversa naturaleza y que, en variadas
oportunidades, comportan trabajos no remunerados. “Sin embargo, estas
nuevas estrategias, que muchas veces se sustentan en el entusiasmo y la fuer-
te motivación, más que en una verdadera planificación viable, también conllevan
grandes peligros para los artistas, pudiendo producir un efecto paradójico de
mayor precariedad”.123 Las actividades artísticas, en ocasiones, pueden generar
prácticas laborales abusivas sustentadas en un discurso basado en ganancias
simbólicas. Por eso la apuesta por la profesionalización en el C3P es importan-
te porque demuestra la importancia de trabajar bajo unos mínimos —podría
agregarse dignos— para que el proyecto sea sostenible y viable en el mediano
plazo. Por eso, el apoyo de Arts Collaboratory fue determinante. Lo segundo
es que el dinero les brindó el tiempo para pensar en los procesos (en ese
momento C3P llevaba trabajando en la sede de Prado desde 2007).
123. Marín G., Teresa, Martín, Juan y Villar, Raquel. “Emergencias colectivas. Mapa de vínculos de actividades
artísticas (autogestionadas) en la Comunidad Valenciana”, p. 517.
125. Ibíd.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 92
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
126. Evanko, Tony. “Casa Tres Patios”. En: Tránsitos. Medellín: Fundación Casa Tres Patios, 2013, p. 7.
127. Evanko, Tony. “Tránsitos”. En: Transiciones. Medellín: Fundación Casa Tres Patios, 2012, p. 12.
Con este objetivo diseñaron una serie de afiches y stickers que se distribuye-
ron por la ciudad. Este tipo de proyectos, que se generan desde la casa, nacen de
los intereses sociales que tiene la misma mostrando así como C3P está pen-
sada como una plataforma para la comunidad, idea que está presente des-
de sus comienzos pero que ha evolucionado hacia otras instancias durante los
últimos años. En ese mismo sentido, también en 2012, fueron invitados por la
Secretaría de Cultura Ciudadana a organizar y diseñar un proyecto piloto para
la Red de Artes Visuales (RAV).
http://www.casatrespatios.org/index.php?option=com_content&view=article&id=115&Itemid=93&lang=es
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 94
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
La RAV se gestó “con el propósito de generar cambios a través del arte como
proceso de transformación donde niños, niñas y jóvenes de la ciudad den rienda
suelta a la imaginación, la percepción y el goce a través de propuestas estéti-
co-creativas ofreciendo talleres de pintura, dibujo, escultura, fotografía y otras
áreas de las artes visuales”.130 Esta idea es un claro ejemplo de cómo el discurso
de la cultura como recurso ha permeado el ámbito institucional. La idea del pro-
yecto piloto responde a los preceptos que traza el Plan de Desarrollo: Medellín
un hogar para la vida 2012-2015 donde se ha apostado por “vincular la cultura
con la educación ciudadana como forma de fortalecer el tejido social”.131 En este
contexto, C3P fue invitada a desarrollar durante cinco meses un proyecto piloto
que buscaba reestructurar los procesos formativos que venía realizando la RAV.
130. Red de Artes Visuales. “Introducción: Transformaciones, la primera cosecha”. En: Transformaciones. Mede-
llín: Secretaría de Cultura Ciudadana, Red de Artes Visuales, 2012, p. 11.
131. Ibíd.
analizar los resultados del proyecto piloto comparándolos con las metas
y las capacidades de C3P. Escribimos una propuesta más amplia y ambi-
ciosa que se llama Laboratorios Comunes de Creación. La nueva mirada
proviene de la experiencia de C3P con artistas en residencia que traen
propuestas propias que dialogan con el contexto de Medellín. En los
Laboratorios Comunes de Creación se incorporó esa experiencia para
convocar artistas, arquitectos, músicos y guionistas, entre otros pro-
fesionales, a nivel, local, nacional e internacional para realizar quince
proyectos creativos en toda la ciudad.134
134. “Célula Madre”. En: Alcaldía de Medellín. Fenómenos Comunæs: Red de Artes Visuales de Medellín-Laboratorios
Comunes de Creación. Medellín: Alcaldía de Medellín, 2013, p. 10.
97
también se llevaba a cabo de una forma tradicional: con una muestra destinada
a los padres de familia donde se exponían los resultados de los meses de traba-
jo. Si bien varios niños y jóvenes de zonas vulnerables de la ciudad tuvieron la
posibilidad de acercarse a otros medios expresivos la
Por su parte, las prácticas artísticas contemporáneas transitan por una va-
riedad de formas de hacer y pensar que cuestionan las técnicas y se enfocan en
los procesos. Las actividades de C3P apuestan por acercar este tipo de prácticas
a la ciudad, donde los procesos y no los resultados son más importantes. Esto
los acerca a los postulados de la cultura visual donde la educación artística
136. Valle Flórez, Rosa Eva. “Educación y arte contemporáneo: ¿Nuevas presencias? El museo se hace eco de la diver-
sidad”. En: Calaf M., Roser, Fontalm, Olaia, Valle, Rosa Eva (Coords.). Museo de arte y educación: Construir patrimonios
desde la diversidad. Gijón: Ediciones Trea S.L., 2007, p. 94.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 98
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Cuando uno entra en una relación, en cualquier relación, hay que hacer
compromisos y llegar a un punto en el cual todos ganen en todos los
niveles y si uno no está contento en la relación pues no se involucra.
Entrar en una relación sin tener la disposición de cambiar un poco para
que la relación funcione no es normal, es como en la vida (…) A veces
equivocamos la ética personal o artística o creativa y las formas o las
necesidades burocráticas, no somos capaces de mirar cuál es la prio-
ridad o qué necesito yo para hacer un proyecto (…) Pero si llegamos a
acuerdos es posible trabajar y decir: “Voy a tomar esa oportunidad”,
aunque cada uno tenga sus intereses.140
139. Escobar, María del Rosario. En: Alcaldía de Medellín. Fenómenos Comunæs.
Por otro lado, paralelo a este proyecto, que ocupó gran parte de su tiempo
durante el 2012 con la prueba piloto y durante el 2013 con los LCC, C3P también
ha desarrollado en los últimos años otros proyectos que tratan de conservar
el espíritu que acompañó su fundación. Ejemplo de esto es el proyecto expe-
rimental llamado el CuBO.X “que pretende visibilizar a los artistas locales,
proporcionando el espacio [por un mes] para la investigación y experimenta-
ción en su quehacer artístico; en donde no se busca un producto final, sino un
proceso enriquecido por cuestionamientos que diariamente irán surgiendo”.141
También continua con su programa de residencias y con un proyecto editorial
que apuesta por profundizar en la investigación y la documentación de los
programas y proyectos realizados. En este último proyecto se encuentra con-
signada una pequeña parte —dos de los ocho años— de las actividades realizadas,
las reflexiones de sus procesos y las ideas que los sustentan.142
142. Para el momento en que se realizó la presente investigación, 2014, C3P contaba con pocas publicaciones. Sin em-
bargo, en los últimos años su producción editorial, tanto impresa como digital, se ha consolidado significativamente.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 100
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
C3P es un espacio con más de ocho años de trayectoria que se ha ido institu-
cionalizando en la ciudad pero que a su vez ha logrado mantener un margen de
autonomía en sus procesos.143 Es un espacio que ha conseguido gestionar recur-
sos y generar modelos de sostenibilidad que pueden ser ejemplo para otros. C3P
demuestra que un espacio autogestionado, para que sea sostenible en el tiempo,
tiene que ser consecuente con sus principios y capaz de evaluar sus procesos,
reinventarse y adaptarse. Sin embargo, como todos los espacios que trabajan
bajo estas lógicas de autogestión, corre el riesgo de la sujeción, riesgo que se
incrementa en la medida en que el espacio crece, pues empieza a demandar más
recursos y a hacer más concesiones para continuar. Los espacios autogestionados,
al ser difícilmente encasillables, pueden transitar por muy diversos caminos
y generar variados modelos de gestión y por eso siempre pueden devenir en
impensadas e imprevistas posibilidades.
143. Nuevamente se hace necesario aclarar que los ocho años están contados hasta 2014, año en que se realizó la
presente investigación. Hasta 2018 C3P ha continuado con su actividad en la ciudad de Medellín, acumulado más
años de trayectoria
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 102
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
También en 2015 Tony Evanko fue invitado como curador local para el
MDE15. El evento tuvo como tema articulador Historias locales/Prácticas globales y
fue abordado a través de varias líneas temáticas145, algunas de las cuales hacían
énfasis en la violencia y generaban una reflexión crítica sobre el concepto de de-
sarrollo que se ha implementado en la gestión de las ciudades contemporáneas.
Estas líneas temáticas se articulan en este macro evento a través de múltiples
actividades (exposiciones, talleres, conversatorios, procesos con comunidad, etc.)
que transitan del museo a la ciudad y sus comunidades para generar experien-
cias y reflexiones que pretenden tener cierta incidencia en la forma que tenemos
de entender fenómenos cotidianos relacionados con las temáticas definidas: la
violencia, el conflicto, la memoria, el cuerpo, el poder, la ciudad, etc. Sin embargo,
después de finalizado el MDE15, se realizó una reflexión acerca de la efectividad
de este evento y otros de la misma naturaleza con el fin de visibilizar y propo-
ner una visión crítica de problemáticas relacionadas con temas que, finalmente,
tienen que ver con la forma en que se desarrolló el sistema capitalista y
el neoliberalismo. En palabras de Tony Evanko “estábamos cuestionando la
relevancia de las instituciones, tanto museos como espacios artísticos auto-
gestionados, frente a las situaciones en el mundo. Así que, en 2016, empezamos a
trabajar sobre el tema “Nuevas relaciones con el capital (NRC)”. La intención era
invitar artistas y curadores cuyas prácticas tenían relación con el tema del capital
en el sentido más amplio. Intentamos reducir el nivel de actividades, pero todavía
quedamos con poco tiempo para reflexionar sobre las experiencias con los artistas
en residencia y para entender el impacto en la comunidad”.146
144. Evanko, Tony. Comunicación por correo electrónico con la autora, 17 de julio de 2018.
146. Evanko, Tony. Comunicación por correo electrónico con la autora, 17 de julio de 2018.
103
148. Evanko, Tony. Comunicación por correo electrónico con la autora. Julio 17 de 2018.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 104
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
149. Los ETCR son el resultado de la transformación de las llamadas Zonas Veredales Transitorias de Normaliza-
ción (ZVTN), que se definieron para garantizar el cese al fuego y la dejación de las armas e iniciar la preparación
para la reincorporación de las FARC-EP a la vida civil y su tránsito a la legalidad. Estas ZVTN se trasformaron en
ETCR, “a efectos de continuar el proceso de reincorporación de los exmiembros de las FARC-EP. La transforma-
ción de las zonas en Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (ETCR) no implica suspensión de la
normalidad institucional ni del Estado social y democrático de derecho”.
En: Comisión de Conciliación Nacional. Los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación. Ver: http://
www.comisiondeconciliacion.co/actualidad-zvtn/los-espacios-territoriales-de-capacitacion-y-reincorpora-
cion/ (Consultado, julio de 2018).v
150. Evanko, Tony. Comunicación por correo electrónico con la autora, 17 de julio de 2018.
151. Evanko, Tony. Comunicación por correo electrónico con la autora, 17 de julio de 2018.
105
las comunidades, y por cómo desde las actividades, que pueden ser transdisci-
plinarias y tienen un fuerte componente creativo, se puede contribuir a generar
un impacto positivo para empoderar el pensamiento en relación con una realidad
que muchas veces no se cuestiona.
Por otro lado, C3P ha seguido operando la Red de Artes Visuales de Medellín
por quinto año consecutivo, desarrollando y consolidando el modelo pedagó-
gico, resultado de años de trabajo y reflexión, que se pone a prueba en los
Laboratorios Comunes de Creación. Este proyecto les ha dejado experiencias
importantes, que se unen a su tema transversal “Conocimiento sobre el poder
y la paz”, el cual no se puede desligar del momento crucial por el que atraviesa
el país después de la firma del Acuerdo de Paz. En palabras de Tony Evanko: “A
través de esas experiencias y la observación de los procesos relacionados con
la negociación para el Acuerdo de Paz confirmamos que era necesario seguir
buscando la forma de contribuir, de alguna forma, a procesos que posibilita-
rán diálogos entre las distintas facciones de la sociedad”.152 Son evidentes la
intención y el compromiso de C3P por poner su capacidad de trabajo al servicio
de experiencias que tengan un impacto significativo en la transformación del
pensamiento respecto a la realidad social y política que vive el país, lo que
significa pasar de un pensamiento pasivo a uno crítico capaz de preguntar y
poner en duda lo dado. Esto se convierte en el primer paso para pasar de la
reflexión a la acción y al empoderamiento de la vida cotidiana.
Los procesos desarrollados en C3P en los últimos años han sido documentados
y este es un hecho importante dado que para C3P poder hacer esa memoria de
lo aprendido y generar documentación, que reflexione acerca de sus aprendi-
zajes, se convierte en la posibilidad de difundir esa información entre aquellos
que estén interesados en conocer las reflexiones de sus cuestionamientos o bien
aplicar los modelos pedagógicos que han desarrollado.153 Después de repasar las
actividades desarrolladas en los últimos tres años por C3P, sabemos que uno de
los aspectos más característicos de este espacio es su capacidad de adaptación,
es decir, su capacidad de hacer tránsitos hacia nuevos horizontes de trabajo por
el permanente cuestionamiento de su razón de ser. Esa cualidad los ha llevado
a convertiste en un centro de pensamiento y un ejemplo interesante como
modelo de gestión cultural.
152. Ibíd.
Plazarte
Integrantes: Mirtha Burbano (directora) y Mauricio Benavidez.
154. El grupo original estaba integrado por las arquitectas Coppelia Vargas y Beatriz Montoya, los artistas Julio
Cesar Salazar, Víctor Muñoz, Reina Vásquez, Mauricio Benavidez y Mirtha Burbano y el actor e historiador Jorge
Luis Agudelo. Los integrantes han ido cambiando a lo largo de los años y hoy los miembros más visibles son Mirtha
Burbano y Mauricio Benavidez.
155. Barrio perteneciente a la Comuna 9 (Buenos Aires) una de las 16 comunas de la ciudad de Medellín.
157. Saldarriaga, John. “Por estos días maquillan la oreja de San Juan”. En: El Colombiano (virtual): http://www.
elcolombiano.com/BancoConocimiento/P/por_estos_dias_maquillan_la/por_estos_dias_maquillan_la.asp
(Consultado, agosto de 2014).
109
Por otra parte, como la nueva casa no les permitía tener galería se dedica-
ron a realizar mosaicos y performances en colegios y pueblos. Como colectivo su
intención era una práctica artística más vinculada con lo social. A este respecto
Mirtha Burbano nos dijo: “No participábamos nunca de festivales y eventos de
arte (…) Decidimos no trabajar para el universo de los artistas (como bienales,
galerías, convocatorias) (…) sino más hacia el público, la sociedad y las comu-
nidades porque nuestros proyectos son de espacio y posicionar un espacio tiene
que ver con el espacio más inmediato que tienes (…)”.158 Las anteriores ideas
evidencian dos aspectos fundamentales que van a permanecer en lo que será
Plazarte. El primero se relaciona con una práctica artística que no solo piensa
la arquitectura del espacio en el que se habita, sino que también es un inten-
to por reflexionar permanentemente sobre conceptos como “casa, nido, cueva,
nicho, calle, ciudad parque”. Es decir, se trata de una tentativa que busca enten-
der cómo se configura el espacio y las formas que se definen para habitarlo. El
segundo aspecto tiene que ver con una forma de entender el arte al servicio de
lo social y la comunidad. Estos preceptos los llevaron a plantear proyectos más
ambiciosos, entre los cuales se encuentra una intervención en el cerro Pan de
Azúcar llamada Sonidos de libertad. Con ella se recuperó una parte del cerro a
través de la creación de una huerta comunitaria y algunos senderos ecológicos.
159. Asociación cultural sin ánimo de lucro que desde 1980 actúa como agente gremial del sector cultural y artístico
de la ciudad de Medellín.
160. Ibíd.
161. Ibíd.
162. En un artículo de prensa publicado el día 6 de abril de 2005, se evidencia la polémica que se vivía en el sector
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 112
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Plazarte con Martha Plaza y su esposo Jorge Gómez, Taller Sitio en cabe-
za de Mirtha Burbano, Doña Gloria representado por Juan Esteban Bedoya,
por cuenta del “Plan de Rehabilitación Integral del barrio Prado” que ya empezaba a plantear al sector la nece-
sidad de conservación del patrimonio arquitectónico del barrio y a socializar algunas propuestas para llevar a
cabo dicha conservación y, adicionalmente, la reactivación del sector para los vecinos y la ciudad. Esto debido a
que Prado es la única zona de conservación arquitectónica en el Plan de Desarrollo Territorial (POT) de Medellín,
lo que genera restricciones al uso de los inmuebles. Este hecho generó diferencias entre los propietarios de las
viviendas y quienes llevaban las investigaciones para elaborar el plan. Esto es un antecedente importante pues en
este contexto se inscribe el Taller Sitio cuando llega al barrio. Ver: “Polémica por Plan de Prado”. En: http://www.
eltiempo.com/archivo/documento/MAM-1676045 (Consultado, octubre de 2014).
163. El Consejo Municipal de Cultura de Medellín, CMCu, es un espacio de participación ciudadana que vincula la
sociedad civil participante del sector artístico y cultural con los entes político-administrativos de la ciudad. Es un
espacio de participación que hace parte del Sistema Municipal de Cultura y sus actividades son acompañadas por
el equipo de Movilización y Participación Cultural de la Secretaría de Cultura Ciudadana.
164. Ibíd.
165. Este, de hecho, era un proyecto personal de Marta Plaza desde 2007, que recibía sus clases de pintura en la
casa que para ese momento estaba muy deteriorada, pero pese a eso le gustaba estar allí.
113
166. En palabras de Chascarrillo se trató de un evento con “mucho color, natural, mucha alucinación y con más
de diez artistas. Su trabajo se basa en el ojo del reptil, de ahí el concepto visión alucinógena. La gráfica del evento
es un ojo con un efecto óptico. Para artistas como ellos hacemos algo llamado “Explosición”, una exposición con
un enfoque claro que es el arte gráfico, las exposiciones tradicionales son muy aburridas: cuatro paredes, cuadros
colgados, vino. Nosotros queremos convertir esto en una fiesta. Debe existir interactividad, para ello incluimos
gente, marcas y artistas”. Ver: Bermúdez, Nancy. “La fuerza gráfica de Doña Gloria”. En: Siderola, http://siderola.
com/lo-que-hay-detras-de-toda-la-fuerza-grafica-de-dona-gloria/ (Consultado, septiembre de 2014).
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 114
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
170. Ibíd.
171. Ibíd.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 116
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Esa tensión entre lo independiente y lo institucional tiene que ver con los
procesos y el momento en que los espacios sienten que sus acciones pueden
ser coartadas por los procedimientos que exige lo institucional. En el caso de
Plazarte, afirmaciones como “lo institucional es muy peligroso, porque se
172. Ibíd.
173. Ibíd.
117
Interior de Plazarte.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 118
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
174. Ibíd.
119
175. En Paralelo hace parte del proyecto “Arte expandido” que desarrolla una organización sin fines de lucro
llamada 4-18. Para más información, ver: http://www.4-18.org/about/ y http://www.4-18.org/en-paralelo/ (Con-
sultado, julio de 2018).
176. Este proyecto se realizó, en el marco del 43 Salón (Inter)Nacional de Artistas. Para ver ampliamente el proceso
del proyecto visitar: http://www.4-18.org/medellin (Consultado, julio de 2018).
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 120
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
177. Ibíd.
121
Fachada de Plazarte.
178. Lippard, Lucy R. “Caballos de Troya: arte activista y poder”. En: Wallis, Brian. Arte después de la modernidad:
Nuevos planteamientos en torno a la representación. Akal. 2001 p. 351.
181. También puede entenderse como el encargado del espacio como habitable, adecuaciones, arreglos, instala-
ción, adicionalmente, su trabajo se ha direccional mucho a la gestión del territorio de la mano de Mirtha.
Otro proyecto, que vale la pena mencionar, es la Mesa Cultural del Prado
conformada por diferentes instituciones, colectivos y artistas habitantes de
Prado.183 La mesa busca articular agentes con el fin de fortalecer el trabajo
colectivo para resignificar el único barrio patrimonial con que cuenta la
ciudad a través de proyectos de arte comunitario y el desarrollo de un Plan
de Especial de Salvaguardia con el propósito de convertir a Prado, en el largo
plazo, en un Distrito Cultural y Patrimonial para la ciudad.184 Este proyecto
resultó ganador de la Convocatoria de Estímulos para el Arte y la Cultura 2018
de la Secretaría de Cultura Ciudadana de la Alcaldía de Medellín y, adicional-
mente, recibió apoyo, a través del Programa Nacional de Concertación Cultu-
ral del Ministerio de Cultura, para el desarrollo de su primera etapa. Sin duda,
este proyecto sigue la línea de trabajo de Plazarte que ha apostado por repensar
el patrimonio cultural de la ciudad, pero sobre todo su apropiación y uso.
183. Este proyecto es la reactivación de la mesa de la Comuna 10, que buscaba convertir a Prado en una “Plataforma
cultural”. Hoy el proyecto es más refinado y apuesta por convertir a Prado en un Distrito Cultural y Patrimonial.
La Mesa Cultural del Prado actual está integrada por la Corporación Centro Plazarte, Hábitat Latente, Corporación
Distrito Candelaria, TVo Digital, Academia Sócrates, Casa Tres Patios, el artista Orlando Pulido y la arquitecta
Gilda Wolf. Ver: Prado Distrito Cultural y Patrimonial, 2 de julio de 2018.
185. Ver: Zambrano, Diego. “Con Esmad desalojaron el centro cultural Plazarte en Prado”, El Colombiano, 26 de
diciembre de 2017. http://www.elcolombiano.com/antioquia/desalojo-del-centro-cultural-plazarte-KX7918862
(Consultado, junio de 2018).
125
186. Para ver el comunicado completo ver: Plazarte Cultura Independiente. “Plazarte y el movimiento cultural en
Prado”. En: https://www.facebook.com/notes/plazarte-cultura-independiente/plazarte-y-el-movimiento-cul-
tural-en-prado/2135378133350508/ (Consultado, junio de 2018).
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 126
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Campos de Gutiérrez
187. Los subsidios dan descuentos de 33 % a artistas latinoamericanos y colombianos bilingües y de 10 % a artis-
tas internacionales bilingües y artistas que compartan habitación.
Vemos que las motivaciones detrás del proyecto son muy personales. En
el caso de Campos de Gutiérrez, hubo una serie de factores afortunados que
posibilitaron su éxito tales como: contar con una sede, la ayuda de su fami-
lia —especialmente de don Carlos—, la determinación de Andrés Monzón y el
contexto de cambio en relación con el ambiente artístico de la ciudad. Del úl-
timo factor daban cuenta el MDE07 y el MDE11 que oxigenaron y dinamizaron
el campo artístico y visibilizaron la ciudad como punto de encuentro del arte
contemporáneo, esto aunado al hecho de que ya existían otros espacios como
Taller 7 y Casa Tres Patios. De esta forma Campos de Gutiérrez surgió con el
“deseo de promover la preservación histórica del lugar sin dejar de readecuar
las estructuras del pasado en el presente”. Su propósito “es facilitar la interac-
ción entre sus diversos grupos de participantes y las comunidades culturales de
Medellín. Como espacio para las artes visuales, Campos de Gutiérrez se enfoca
en la producción, crítica, exposición, circulación de artistas internacionales y
formación de público local”.189 Estas ideas muestran un rasgo del carácter de
Campos de Gutiérrez al que ya hicimos alusión: la conciencia del pasado, pues
sus planteamientos ponen de manifiesto un vínculo especial con el patrimonio
tanto material como inmaterial. Un buen ejemplo de esto es la recuperación de
la casa, pues lograron que esa estructura del siglo pasado sea un ambiente
funcional para las prácticas contemporáneas, “aunque no sea muy visible, la
estructura de la casa en sí funciona como centro-base de operaciones”.190
191. La casa al tener más de cien años de construida hace parte no solo de la historia de la de la zona, sino que
también constituye parte de la historia y memoria de la ciudad de Medellín y el departamento de Antioquia. Ver:
Peña Ospina, Paola y Bermúdez Tobón, Juan Guillermo. Campos de Gutiérrez: Un encuentro de memorias. Medellín:
Tragaluz Editores y Alcaldía de Medellín, 2017.
129
193. Ibíd.
194. Narváez Montoya, Ancízar. “El concepto de industria cultural: una aproximación desde la economía política”.
En: Pereira G. José M y otros. (Coords.). Industrias culturales, músicas e identidades: Una mirada a las interdependencias
entre medios de comunicación, sociedad y cultura. Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana, 2008.
131
Por otro lado, con el paso del tiempo, el proyecto de residencias se ha con-
solidado y expandido con otros proyectos como Espiga, que constituye su rama
curatorial. Si bien Campos de Gutiérrez ha realizado exposiciones con los artistas
en residencia desde que empezó su labor, Espiga es un proyecto que nace de la
necesidad de consolidar alianzas con plataformas similares en la ciudad para
buscar espacios expositivos para los artistas en residencia y, además, apuesta
por involucrar artistas locales en las exposiciones. Para Andrés Monzón,
196. Los tres años corresponden hasta el 2014, momento en el que se realizó la investigación.
197. Ibíd.
133
198. Thornton, Sarah. Siete días en el mundo del arte. Buenos Aires: Edhasa, 2009, p. 65.
199. Ibíd., p. 66
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 134
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Estas últimas características, que les atribuye Thornton a las crits, son las
que en la experiencia de Andrés Monzón valen la pena ser tenidas en cuenta. A
este respecto afirma:
201. Ibíd.
202. Ibíd.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 136
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Por otro lado, las crits no solo ayudan a los procesos de los artistas, tam-
bién juegan un papel importante en un segundo nivel de curaduría que tiene
que ver con las exposiciones, pues en ellas “se analizan los puntos centrales de
conexión entre las obras que están haciendo los residentes y se trata de invitar
a artistas locales que tengan algo en común o que puedan conectar la obra para
que la exposición sea más coherente (…)”.203 Lo anterior demuestra procesos de
profesionalización en la práctica de la curaduría que se ven reforzados por la si-
guiente reflexión: “La curaduría es particular, no es un curador buscando obras
de arte, es un curador partiendo de obras de arte y es un reto hacer que esas
obras sean coherentes en el marco de una exposición”.204 El trabajo de curaduría
en sus dos niveles, el primero de selección de los residentes y el segundo de
definición de las temáticas expositivas, revela un espacio que está haciendo un
esfuerzo por pensar de forma más rigurosa un proceso importante en el medio
artístico favoreciendo con su práctica su consolidación y profesionalización.
203. Ibíd.
204. Ibíd.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 138
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
205. Campos de Gutiérrez cuenta con un equipo de trabajo que incluye desde las personas que se encargan de
las labores de mantenimiento y limpieza de la casa hasta una contadora, una coordinadora de residencia, una
coordinadora de exposiciones, un jurado de residencias, un jurado adicional que colabora en algunas sesiones de
residencias y colaboradores de muy diversa índole. Algunas de las labores de este equipo de trabajo no son remu-
neradas demostrando nuevamente que estos proyectos de autogestión están mediados por otro tipo de lógicas y se
sostienen del trabajo y ayuda de diversas personas. Ver: http://www.camposdegutierrez.org/nosotros/
206. Ibíd.
139
207. Reformulando Memoria fue proyecto expositivo realizado en junio de 2013 que contó con la curaduría de
Sarojini Lewis, artista residente, y Óscar Roldán Álzate, en ese entonces curador del MAMM. En este proyecto se
exhibieron obras de 30 artistas tanto nacionales como extranjeros.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 140
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
Todos estos logros señalados no han sido procesos sin dificultades, Andrés
Monzón como director de Campos de Gutiérrez, así como otros gestores de los
espacios autogestionados ya analizados, han señalado que “no tener una esta-
bilidad económica es lo más difícil” de este tipo de proyectos y muchos de estos
espacios han apostado por gestionar becas y estímulos. Campos de Gutiérrez
208. Ibíd.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 142
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
209. En 2014 Campos ganó un estímulo de la Alcaldía de Medellín para continuar con su programación durante ese año.
210. Ibíd.
143
Campos de Gutiérrez.
Lo que más me motiva, y me hace sentir que estoy haciendo algo bueno,
es cuando alguien, que no tiene nada que ver con una formación artística,
me dice: “Me gustó demasiado haber asistido a cierto evento” o “me
he conectado con el mundo de las artes visuales que no era importante
para mí (…)” Eso demuestra que Campos tiene un propósito en la ciudad,
pero al mismo tiempo está la motivación inicial de que los artistas que
vienen se lleven la imagen de Colombia como un lugar donde se pueden
hacer proyectos.211
211. Ibíd.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 144
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
212. De esta beca también quedó una publicación: Peña Ospina, Paola y Bermúdez Tobón, Juan Guillermo. Campos
de Gutiérrez: Un encuentro de memorias. Medellín: Tragaluz Editores y Alcaldía de Medellín, 2017.
145
cafetera del siglo XIX, tiene una historia que hizo posible repensar la noción de
patrimonio cultural como algo activo que se hace y no se posee. La exposición
exploró la idea de que la memoria simplemente no se “encuentra” ni se “produce”
exclusivamente en la arquitectura de la casa, sino que ha sido recreada y ne-
gociada continuamente a medida que las diferentes personas que han habitado
allí han reinterpretado y reevaluado el significado del pasado. La exposición se
realizó en las instalaciones de Campos de Gutiérrez y contó con obra de Andrés
Monzón, a quien se le comisionó la misma especialmente para esta exposición
que también se convirtió en una especie de homenaje a su historia familiar.
PorEstosDías
JUAN MORENO
viable. A este respecto, afirma Jaime Carmona: “Aquí pago mi casa y pasan un
montón de cosas (…) Lo que pasa aquí no tiene un valor, para mí es un lujo que
uno se puede dar (…) y es posible porque es una escala doméstica”.214 El segun-
do tiene que ver con la posibilidad de que el arte esté en una escala cotidiana.
Esta última idea es más compleja. Por un lado, apunta a que la familiaridad y
comodidad de lo doméstico facilita que la comunidad —especializada o no—
se acerque a las actividades que se proponen desde la casa, ya que no es un es-
pacio académico, un museo o una galería, sino un espacio cotidiano en el que
“no hay que demostrar nada”. Por otro lado, sugiere una concepción del arte
que se aparta de lo academicista. A este respecto Juan Moreno señala:
217. Para una versión digitalizada de “La faltante” de la colección de Credencial Historia. Ver: http://issuu.com/
porestosdias/docs/la_faltantee (Consultado, junio de 2014).
153
218. PorEstosDías. Para conocer más sobre este proyecto. Ver: http://cinematine1.blogspot.com/ (Consultado, julio
de 2014).
155
219. Comer es uno de los mayores actos de socialización de las culturas. Comer significa mucho más que com-
partir la comida, pues, a través del acto de cocinar, servir y degustar, se comparten emociones, sentimientos,
sensaciones, reflexiones, encuentros y desencuentros, afectos y disgustos. El acto mismo de comer está cargado
de significado y, le sumamos hacerlo en un espacio doméstico, se torna aún más significativo. El ritual de comer
junto a la familia (asociada al espacio doméstico) se extiende a los amigos, invitados o visitantes y afianza la idea
de que el significado del acto de compartir la mesa en “familia” supone mantenerse juntos o renovar la cercanía.
Por eso las cenas subjetivas nos resultan tan significativas para expresar esa reivindicación de lo colectivo, pues
la comida activa todos los sentidos, “toca y es tocada, no solo por los sentidos papilares y olfativos sino también
por las atmosferas afectivas del hogar, cuyo calor depende en buena medida de aquella”. Alrededor de una comida
se materializan significados y esto sustenta la idea de que a través de este tipo de actividades se afirman otros
valores como el de la hospitalidad que, según DRAE, es la “buena acogida y recibimiento que se hace a los extran-
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 156
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
jeros o visitantes”. Al cocinar para otros se expresa justamente el deseo de ocuparse del otro y de compartir con
el otro. Ver: Hernández, Marisela. “A la altura de lo cotidiano: algunos sentidos del cocinar y comer en casa”. En:
Fundamentos en Humanidades. Año IX, n.° 2, 2008, pp. 71-90.
(…) Esa es la motivación que te mantiene ahí”.221 De estas dos afirmaciones po-
demos deducir varias cosas.
221. Restrepo, Juan David y Acosta, Olga. Entrevista con la autora, 9 de junio de 2014.
ESPACIOS DE CONTINGENCIA: CINCO ESPACIOS ARTÍSTICOS 158
AUTOGESTIONADOS DE LA CIUDAD DE MEDELLÍN
La segunda idea, que podemos deducir, es que cada uno de sus integran-
tes —Juan David, Olga, Juan Sebastián, Alejandra y Jaime— es consciente de
que PorEstosDías puede llegar a ser una plataforma para establecer redes que
eventualmente pueden traducirse en trabajos. Olga Acosta afirmó: “Seguro van
a salir trabajos en las redes que se han tejido entre arquitectura, comunica-
ción, bibliotecas, museos (…) Nosotros llegamos acá con una historia detrás, que
traemos a hacer parte de un proceso que se mezcla (…)”. Al respecto, Juan David
Restrepo comentó: “Este lugar ha sido muy bueno, porque es un lugar donde
no solamente tienes una gran cantidad de gente, haces contactos, conoces y te
sientes a gusto, sino donde literalmente puedes expresar cómo quisieras hacer
las cosas, incluso comercialmente, y eso es muy importante (…) Por eso yo
hablaba también de este espacio como una plataforma de trabajo”.222
Las ideas anteriores evidencian, por un lado, la apuesta por generar espacios
laborales donde el trabajo no se sienta separado de la vida —como ya se
222. Ibíd.
159
225. Acosta, Olga y Carmona, Jaime. Entrevista con la autora, 9 de junio de 2014.
161
226. Restrepo, Juan David y Acosta, Olga. Entrevista con la autora, 9 de junio de 2014.
las actividades características del espacio: las cenas subjetivas. Así, por ejemplo,
los premios eran platos de una vajilla con alguno de los días de la semana y
entre más alta era la suma de dinero donado se adicionaba una libreta o un
delantal diseñados por PorEstosDías o bien una obra de arte; la recompensa
mayor era una vajilla única con todos los días de la semana y una cena en
compañía preparada por el equipo de PorEstosDías. La casa del frente alcanzó
su objetivo económico el día 5 de junio de 2015, recaudó más de lo planeado,
$11.120.000 pesos, demostrando de esta forma que los lazos comunitarios, que
el espacio había construido con su práctica, se materializaban en la entusiasta
participación de personas y amigos que tenían mucho afecto por el proyecto.
En su nueva sede, con más espacio y un lugar para residencias artísticas,
PorEstosDías realizó cientos de actividades, afianzó sus fuertes redes de amigos
y contactos y se convirtió en uno de los espacios artísticos autogestionados
más prometedores de la ciudad.
A finales de ese año Jaime Carmona dejó el colectivo y, muy al estilo del
espacio, el grupo realizó una exposición de despedida que se llamó La huida.
Esto se repitió en otras oportunidades cuando el cierre del espacio ya era inmi-
nente. La huida de Jaime Carmona marcó el comienzo de un cambio que influyó
en la continuidad del espacio, pues los proyectos personales de cada uno de los
integrantes, que se hacían inaplazables, evidenciaban que llegaría un momento
en el que el proyecto, que se había sostenido gracias a una fuerte labor colectiva,
no podría continuar.
Durante 2016, siguieron con la dinámica cotidiana del espacio con la orga-
nización de exposiciones, cenas, charlas, cineclub, fiestas y ventas de garaje.
Sin embargo, un espacio como este suele atravesar situaciones complejas más
allá de las actividades que de cara al público se realizan. Las sensibilidades y
afectos que se construyen, las historias de vida que lo atraviesan, los buenos
y malos ratos y los estados de ánimo le imprimen un carácter a cada espacio
autogestionado. Por ejemplo, Olga Acosta luchó contra el cáncer durante 2015 y
2016; Juan David Restrepo viajó a Chile en julio de 2016 para hacer una maestría;
Juan Sebastián Moreno y Alejandra Jaramillo, que habían sido pareja durante
todo el proceso, rompieron y Juan decidió hacer una película que demandaba
gran parte de su tiempo.229 Estas situaciones modificaron las dinámicas y los
grados de compromiso con el proyecto.
229. La Torre fue el resultado y se convirtió en la ópera prima de Sebastián Múnera, nombre con el que debutó como
director en 2017. El largometraje cuenta la historia de tres personajes vinculados con la Biblioteca Pública Piloto
de Medellín (BPP). La aparición de una fotografía, única evidencia gráfica de un ataque explosivo que sufrió la BPP
en marzo de 2004, sirve de excusa para contar la historia de los protagonistas.
232. Acuerdo 5441 de Shanghái. Declaración de ausencia de PorEstosDías (1 de diciembre de 2017, Paris). Ver: https://
www.facebook.com/photo.php?fbid=948029998682723&set=pcb.948031135349276&type=3&theater (Consultado,
julio de 2018).
167
Hemos visto cómo cada uno de los espacios analizados contó con unos esque-
mas de trabajo diversos que enriquecen el panorama artístico. A continuación,
se mostrarán algunas generalidades, pero también se esbozarán algunas
particularidades.
Una de las diferencias entre los distintos espacios son los procesos de
curaduría, pues en unos han sido más rigurosos y en otros más espontáneos.
En Casa Tres Patios y Campos de Gutiérrez estuvieron más definidos los proce-
dimientos a través de los cuales se convocaban artistas para residencias. Casa
Tres Patios buscaba atraer artistas que pudieran ampliar el vocabulario artís-
tico y el registro del arte en la ciudad. Tony Evanko, por ejemplo, explicaba que,
con sus criterios de selección, buscaban artistas con una buena práctica como
profesional, pero “sobre todo que tengan una práctica diferente a las prácticas
que se ven aquí. Puede ser un fotógrafo, pero uno que tenga otra forma diferente
de pensar la fotografía para poder ampliar el vocabulario artístico (…)”.235 En
Campos de Gutiérrez hay un jurado236 que selecciona los artistas que entran a
la residencia. Una vez es superado este primer filtro, las sesiones de críticas
complementan todo el proceso de curaduría que culmina con la exposición
final que concluye cada ciclo de residencias que, normalmente, es de tres meses.
239. Acosta, Olga y Jaramillo, Alejandra. Entrevista con la autora, 9 de junio de 2014.
240. Ardenne, Paul. Un arte contextual: Creación artística en medio urbano, en situación, de intervención, de
COINCIDENCIAS Y DIVERGENCIAS: ALGUNOS CRITERIOS QUE 174
SUSTENTAN LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS
Es evidente el fuerte interés por los procesos más que por las obras tan-
to en Casa Tres Patios como en Taller 7 y Plazarte. En el caso de este último
es muy palpable puesto que para Mirtha Burbano “la obra de arte no es un
242. Ibíd.
247. Ibíd.
COINCIDENCIAS Y DIVERGENCIAS: ALGUNOS CRITERIOS QUE 176
SUSTENTAN LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS
248. “Taller 7 por Adriana Pineda, Carlos Carmona y Mauricio Carmona”. En: Cuadernos MDE07: Encuentro Interna-
cional Medellín 2007. Prácticas artísticas contemporáneas. Medellín: Fondo Editorial Museo de Antioquia, 2011, p. 76
249. Ibíd.
177
Hay formas de trabajar, definir el arte y relacionarse con los espacios en que
estas propuestas tienen ciertas afinidades pero es visible también que existen
diferencias y matices de fondo. No obstante, en su permanente actividad y en
su conjunto, los espacios autogestionados generan una serie de situaciones que
nos permiten esbozar ciertas consideraciones sobre su práctica.
250. Emergencias colectivas. Mapa de vínculos de actividades artísticas (autogestionadas) en la Comunidad Valenciana,
2001-2011. p. 521.
COINCIDENCIAS Y DIVERGENCIAS: ALGUNOS CRITERIOS QUE 178
SUSTENTAN LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS
252. Cortés, José Miguel. “Repensando el hecho expositivo. Algunas notas desde la periferia”. En: Sánchez, José A.
y Gómez, José A. (Coords.). Prácticas artísticas y políticas culturales. Algunas propuestas desde la universidad. Murcia:
Universidad de Murcia, 2003, p. 75.
253. Ibíd.
COINCIDENCIAS Y DIVERGENCIAS: ALGUNOS CRITERIOS QUE 180
SUSTENTAN LAS PRÁCTICAS ARTÍSTICAS AUTOGESTIONADAS
254. Parramón, Ramón. Arte, experiencias y territorios en proceso. Calaf: Idensitat, 2008, p.11.
181
5
183
Si tuviera que definirse con una sola palabra la situación de los espacios
artísticos autogestionados en la ciudad de Medellín esa sería: positiva. En
términos generales, todas las actividades desarrollas y gestadas por dichos
espacios aportan en muchos niveles a la ciudad. En efecto, las prácticas artís-
ticas autogestionadas benefician a los artistas-gestores o miembros activos
de dichos espacios en dos niveles diferenciados pero complementarios: por un
lado, amplían las posibilidades de su quehacer profesional y, por otro, crean y
fortalecen redes profesionales y artísticas. Su labor beneficia al medio artís-
tico en general al diversificar la oferta cultural y al ampliar el registro de las
prácticas artísticas contemporáneas en la ciudad permitiendo la circulación
de personas e ideas. Dichos espacios no solo están generando dispositivos
alternativos importantes de exhibición en la ciudad, sino que también se han
ido erigiendo en plataformas de investigación e intercambio de pensamiento
a partir de una auto-organización alternativa a las instituciones formales:
museos, galerías y universidades. No obstante, estos últimos se benefician de
su labor. Los museos y las galerías, por un lado, encuentran artistas que cir-
culan por la ciudad con la ventaja que los espacios autogestionados pueden
experimentar y apostar por artistas menos conocidos que a veces ni los mu-
seos o las galerías pueden o quieren traer. Las universidades, por otro lado,
pueden encontrar en estos espacios interlocutores que vinculen estudiantes
de artes o pueden ser un espacio para realizar proyectos en colaboración. Las
actividades que desempeñan favorecen la ciudad al posibilitar espacios abiertos
a un público diverso, especializado o no. A su vez, generan otros imaginarios
y valores en relación con formas de organización e interacción social al abrir
espacios de discusión, ampliando y posibilitando generar conocimiento tanto
desde los mismos espacios, como por fuera de ellos —en espacios académi-
cos o institucionales, por ejemplo—. En general, su labor es beneficiosa, el
tipo prácticas que impulsan los espacios autogestionados constituye un campo
de acción donde la diversidad de ideas, propuestas y perfiles profesionales se
articulan a través del arte como sistema de experimentación y trasgresión
en conexión directa con la cotidianeidad y aspectos vivenciales de la realidad
local.
Una idea interesante que vale la pena ampliar se relaciona con los princi-
pios éticos que subyacen a las prácticas artísticas autogestinadas. Es posible
asegurar, sin caer en un romanticismo ingenuo, que dichas prácticas entrañan
una ética que afianza valores que empoderan la vida cotidiana y constutuyen
una posibilidad que podríamos denominar como una infiltración, una línea de
255. Guzmán, Carlos Felipe. “Ensayo y error para espacios independientes”. En: {{em_rgencia}, n.° 04, 2010, p.14.
256. Incluso algunos hablan de un boom del arte colombiano. Vease el respecto: “El ‘Boom’ colombiano”. Ar-
tishock: Revista de Arte Contemporáneo. Disponible en: http://www.artishock.cl/2014/10/el-boom-colombiano/
(Consultado, noviembre de 2014).
257. “Colombia protagonista en ARCO Madrid 2015”. Disponible en: Agenda Cultural, Cámara de comercio de Bo-
gotá: http://camara.ccb.org.co/contenido/contenido_imprimir.aspx?conID=14984&catID=237. (Consultado, no-
viembre de 2014). En esta feria tuvieron presencia algunos espacios autogestionados: Casa Tres Patios y Taller 7 de
Medellín; Lugar a Dudas de Cali, y Flora, Miami, El Parche, La Agencia, La Mutante, La Usurpadora y La Nocturna
de Bogotá, demostrando así el importante lugar ganado en el desarrollo y la consolidación del arte en el país y el
exterior.
185
La ética del hazlo tú mismo que constituye el espíritu mismo del arte de
la autogestión se fuga directamente tomando distancia del individua-
lismo y el egoísmo que por naturaleza definen el espíritu capitalista. La
competencia y el beneficio personal no son valores centrales, mientras la
solidaridad y el beneficio común se ejercen constante e intrínsecamente
en sus experiencias. Técnicamente, la autogestión puede ser capturada
y usada por el capital, pero cuando se ejerce plenamente vivida, desde
la ética solidaria del hazlo tú mismo, su espíritu se hace incapturable al
desplegar valores absolutamente incompatibles con el egocentrismo in-
dividualista del Sistema. De cualquier manera, la autogestión no es una
idea redentora ni emancipadora a pesar de su naturaleza libertaria.258
260. Dos espacios que lograron avances significativos en esta vía son Taller 7 y Casa Tres Patios.
187
referimos a aquellos espacios —como por ejemplo, Casa Tres Patios y Taller 7—
que tuvieron una trayectoria importante y encontraron modelos mixtos, donde
se desdibujan, se modifican o infiltran las maneras de hacer desde lo institu-
cional logrando expandir su forma de operar a ámbitos que tradicionalmente se
habían mirado como contrapuestos.
261. Dado el contexto local, incluso lo institucional, tanto museos como galerías, también están luchando por
una mayor estabilidad económica y por lograr mayor inserción y reconocimiento de los públicos inmediatos. En
este sentido son cercanos a los espacios autogestionados puesto que deben también gestionar recursos, afianzar
públicos, generar proyectos, etc. Sin embargo, su forma de operar, su escala, sus fines y su estructura son muy
diferentes y menos versátiles, tanto en procedimientos como en el margen de decisión de sus actores, lo que los
aleja de las lógicas de los espacios artísticos autogestionados.
262. Una queja recurrente de los gestores de estos espacios era la dificultad que implicaba acceder a cierto tipo de
becas o ayudas que iban condicionadas a generar impactos que beneficiaran a cierto tipo de población o a proyectos
que respondieran a temáticas específicas y que, en ocasiones, se vuelven clichés: arte y memoria, arte y violencia,
arte y violencia de género, etc. y manifestaban, a su vez, que su trabajo beneficiaba a la comunidad artística o que
el núcleo de su público era artístico por lo que, a veces, no era posible justificar su actividad en los indicadores que
encuentran las administraciones para justificar la inversión de recursos o no les interesaba participar en convoca-
torias que condicionaran sus propuestas.
BALANCE DE LA SITUACIÓN DE LOS ESPACIOS ARTÍSTICOS AUTOGESTIONADOS 188
EN LA CIUDAD DE MEDELLÍN: ALGUNAS CONSIDERACIONES Y RECOMENDACIONES
263. Es importante aclarar que, aunque existen planes estratégicos que marcan un horizonte común, las políticas
públicas y su efectiva implementación también están al vaivén de la voluntad política de las diferentes adminis-
traciones de turno.
264. Bayardo, Rubens. “Gestión cultural, economía de la cultura y políticas culturales ante la diversidad cultural”.
En: Bobbio, Daniela (Comp.). Tensiones. Selección de conferencias del Programa de Formación en Gestión Cultural.
Córdoba: Ediciones del Centro Cultural España, 2008, p. 83.
189
265. Ejemplo de ello es la secretaria de Cultura, María del Rosario Escobar, quien es “periodista y comunicadora
social, especialista en Semiótica y Periodismo Urbano, y magister en Estudios Humanísticos de la Universidad
EAFIT”. Personas como ella, con un perfil cercano a las artes y que además ha tenido experiencia como gestora
cultural “por un poco más de una década fue la coordinadora de Extensión Cultural de la Universidad Eafit, ins-
titución educativa que emprendió el liderazgo desde el ámbito privado de un proyecto cultural incluyente para la
ciudadana y orientado a la formación del público joven”, ponen de manifiesto la diferencia que puede significar el
perfil del funcionario para las decisiones que tienen que ver con la cultura. Ver: Alcaldía de Medellín, Secretaría de
Cultura: http://www.medellin.gov.co
6
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• Noticias Caracol [versión digital]. “Violento desalojo del Centro Cultural Plazarte
dejó sin espacio a más de 50 artistas de la ciudad”. Noticias Caracol, 26 de
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violento-desalojo-del-centro-cultural-plazarte-dejo-sin-espacio-mas-de-50-
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• Ospina, Laura. “¿Por qué desalojar con violencia un centro cultural?”. Revista
Arcadia [versión digital], 16 de enero de 2017) Disponible en: https://www.
revistaarcadia.com/especiales/cultura/articulo/plazarte-desalojado-por-el-
esmad-derechos-cultura-en-medellin/67682 (Consultado, junio de 2018).
• Evanko, Tony (Casa Tres Patios). Entrevista con la autora, 11 de junio de 2014.