Reseña de Orden Sacerdotal

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Fundación Universitaria Unicervantes

Curso: Orden Sacerdotal


Docente: Juan Pablo Rodríguez
Estudiante: Oscar Fernando Rivas Quintero

Jacques PHILIPPE, La Paternidad Espiritual del Sacerdote. Un tesoro en vasos de barro,


<<Colección Patmos>>, Madrid: Ediciones RIALP, 2021, 190 x 125 mm., 168 pp, ISBN
978-84-321-5324- 2

El Autor, nacido en Loraine-Francia en el año de 1957 y ordenado sacerdote en 1985 y


miembro de la Comunidad de la Beatitudes, se ha centrado en el acompañamiento espiritual
y la formación de los sacerdotes de su comunidad. Así mismo ha dedicado su vida a dar
retiros espirituales tanto en su país natal y en extranjero. La obra cual como tal escrita en el
año 2021 busca abordar en sus catorce capítulos la problemática sobre la crisis de la
paternidad en el mundo actual. Las preguntas que buscará responder son dos ¿en que
consiste esa verdadera paternidad? Y ¿cómo puede alguien llegar a ser imagen de Dios y
alcanzar, para sí y para los otros, la verdadera libertad de los hijos de Dios?

La paternidad hace parte de la gracia que Dios da al sacerdote en su vida ministerial y


que en la actualidad los ministros no cumplen plenamente. Ella en el primer capítulo, parte
de la gracia y de la participación de la relación filial de Cristo con Dios; la paternidad
requiere una experiencia verdadera que pasa por una conversión continua. Esta última, en el
siguiente capítulo, debe culminar en una renovación profunda que parte de una adoración
eucarística y un amor profundo filial a la Virgen María; para generar una verdadera
paternidad que sane la imagen negativa que, de ella, en el mundo moderno, se ha generado.
Ya en el cuarto capitulo se expresa la problemática que se ha generado esa ausencia de
paternidad, que no es otra cosa que la ausencia de la misericordia divina desde el
sacramento de la reconciliación; lo que termina por dejar al hombre a merced del pecado -
de una libertad desordenada y una fraternidad fragmentada-, y que solo bajo una imagen de
paternidad renovada se pueden sanar desde el amor paterno de Dios, que restaura la
identidad humana herida por el pecado y la llena de la gracia divina, según Jacques
Philippe, en el sexto capitulo.
Esta paternidad renovada a parte de ese amor incondicional, necesita de una autoridad
que no se impone, ni doblega al otro, sino que la ejerce desde el servicio para evitar una
visión distorsionada que termina por engendrar hijos espiritual carentes de libertad o en
exceso de ella. Para cimentar esa idea de paternidad espiritual renovada recurre, en el
capitulo diez, a los personajes bíblicos desde Abraham hasta Pablo de Tarso, verdadera
imagen de esa paternidad sostenida en el ser hijo de Dios, de la Iglesia, ser hermano. el
verdadero padre es pobre de espíritu según las bienaventuranzas esta caracterizada por el
despojo de si mismo y la preocupación por el otro; que parten de la confianza plena en Dios
y en la Iglesia que es su madre a ejemplo de María, la madre de Cristo que engendra en la
Iglesia sacerdotes, tanto en el común – el de todos los bautizados-, como el ministerial. Este
ultimo debe animar a que los fieles tomen conciencia de su sacerdocio; además de
mostrarles la figura autentica del padre desde su testimonio y servicio a la Iglesia.
Con un lenguaje sencillo y capaz de ser entendido por el lector, el autor se limita en
ciertos aspectos los cuales pudo haber desarrollado con mayor profundidad doctrinal, como
una concepción de paternidad espiritual más amplia. Ante ello el uso de las imágenes
bíblicas y de los santos pastores a lo largo de la historia de la Iglesia, y que son del
conocimiento común de muchos sacerdotes, ministros, religiosos y laicos, permite una
mejor asimilación de los contenidos.
El argumento central queda claro, la paternidad es un don que Dios da a algunos por
medio de su Hijo y alimentado por el Espíritu Santo que se debe cuidar para que no se
desparrame y se pierda, causando así que los hijos espirituales también se pierdan.
Jacques Philippe, con un amor paternal plasma en las hojas de su libro un programa para
recuperar la figura de la paternidad en el sacerdocio ministerial centrado en la caridad, el
servicio, y la fidelidad a Dios, unido a ello la preocupación por el otro. Como el público a
quien dirige este libro parece ser a todos los fieles, pero tiene en su mente a un público más
específico: los sacerdotes y ministros de la Iglesia.
Se recomienda tener conocimiento de la Sagrada Escritura para poder seguir la lectura e ir
asimilando los contenidos. Se debe leer en libro desde la perspectiva de un padre que se
preocupa por la vida espiritual de sus hijos, y como un hermano que busca que su familia
siga afianzada en el amor de Dios, de Cristo y de María como modelo de la Iglesia.

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