La Radio y La Televisiocc81n

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LA

RADIO

LOS GÉNEROS RADIOFÓNICOS

Los géneros radiofónicos representan unos rasgos constructivos que dan
estructura formal a los contenidos del discurso. Se entienden como "modos de
armonizar los distintos elementos del lenguaje radiofónico de manera que la
estructura resultante pueda ser reconocida como perteneciente a una modalidad
característica de la creación y difusión radiofónica" tanto por profesionales como
por oyentes.

La discusión teórica en torno a los géneros en radio se ha limitado muchas veces a
realizar una adaptación de los géneros informativos para la prensa sin considerar
que la voz que enuncia el discurso, las propiedades de la comunicación oral, la
fugacidad del mensaje y la presencia de elementos no lingüísticos –por mencionar
sólo algunos– son rasgos que no encuentran una respuesta en dicha teoría, más
próxima a la tradición impresa que a la tradición oral que, al fin de cuentas,
constituye la base de la comunicación radiofónica.

Mariano Cebrián Herreros, en 1992, con su libro Géneros informativos
audiovisuales es el primer autor español que propone una definición de géneros
informativos audiovisuales, en los que se incluyen los géneros radiofónicos, y que
caracteriza con los siguientes rasgos:

1) Son estructuras formales que se atienen a reglas flexibles que cada autor en
cada época adopta según su personalidad.
2) Son convenciones explícitas e implícitas que admiten sellos personales.
3) Son algo vivo, se desarrollan, crecen, rejuvenecen.
4) No están determinados por un tema o contenido, sino por unas formas y
funciones.
5) No aparecen en estado puro en la práctica, existen fronteras ambiguas, puntos
de contacto, aproximaciones, y sobre todo, trasvases.
6) El medio radiofónico imprime o contagia unos rasgos peculiares entre los que se
incluyen las condiciones técnicas y el tratamiento en directo.
7) Existen, con mayor o menor rigurosidad, en la práctica profesional, y tienen una
funcionalidad profesional y pedagógica.
8) Sólo conociendo los géneros pueden modificarse, recrearse o inventarse otros.

Según afirma el propio autor, esta concepción de los géneros recoge tres vertientes
teóricas: la tradición de la teoría literaria, la práctica de los géneros periodísticos
escritos y la historia de la comunicación e información audiovisual. Cada una de
estas influencias contribuye de modo diferente y complementario a la
configuración de los géneros audiovisuales: la tradición literaria aporta la
estructura; la prensa, el contenido de actualidad; y lo audiovisual, una narrativa
propia.

A partir de estas influencias, Cebrián Herreros presenta una tipología de géneros
cuyo criterio de clasificación es la actitud con la que el autor se enfrenta a la
realidad. En concreto destaca que existen tres modos esenciales de aproximarse a
la realidad que, a su vez, se materializan en tres modos de configurarla:

1) Una actitud que va de adentro hacia afuera, que expresa una situación anímica
interpretativa o de opinión personal, que da lugar a modos de configuración
expresivos.
2) Una actitud que va de fuera hacia adentro, que parte de una realidad exterior al
usuario y que da lugar a modos de configuración referenciales.
3) Una actitud dialógica que se traduce en modos de configuración apelativos.

De estos modos de configuración de la realidad se derivan los géneros y sobre ellos
construye su tipología.

Los géneros expresivos –también denominados testimoniales– ofrecen la
concepción y configuración personal del autor respecto de la realidad. En algunos
casos exponen el pensamiento, la interpretación, la opinión, los sentimientos y la
actitud del autor y en otros su testimonio. Este es el tipo de géneros en el que el
autor argumenta, ataca, ironiza, comenta, critica positiva o negativamente los
hechos informativos, relata lo que ha presenciado, etc. Según el autor, dentro de
este grupo cabe incluir géneros como el editorial, el comentario, la crítica o la
crónica.

Los géneros referenciales –o expositivos– tratan de eliminar todo posible sesgo
de subjetividad y ofrecen una versión distanciada de los hechos. Se orientan a la
narración o descripción tanto de hechos comprobables como de ideas u opiniones
ajenas. El autor da testimonio de lo que ocurre en su entorno y de los hechos
informativos, más que de forma global, de manera fragmentada. En este grupo, el
autor incluye diversos géneros en función del grado de fidelidad que se quiera
adoptar respecto a la realidad. Los géneros que incluye son: noticia
(constituyendo boletines, informativos…), reportaje, informe periodístico,
documental y docudrama.

Por su parte, los géneros apelativos –también denominados dialógicos–
permiten indagar y profundizar en el pensamiento, acciones y sentimientos de los
demás mediante una especie de "pugilato dialéctico". Estos géneros se orientan a
exponer hechos, ideas u opiniones de personalidades, expertos y, en suma, de
personas que tienen información y opinión, mediante el diálogo del periodista con
otra o varias personalidades. A juicio del autor, este grupo de géneros se
caracteriza además por el uso predominante del diálogo y de la presencia sonora o
audiovisual de las fuentes de la información. De esta manera, el informador cumple
la función de organizador, seleccionador de personalidades, coordinador de las
intervenciones o formulador de preguntas, mientras que el protagonismo recae en
los interlocutores. En este grupo y según la actitud que tenga el autor a la hora de
ofrecer la información, Cebrián Herreros incluye los siguientes géneros:
entrevista, encuesta, rueda de corresponsales y de emisoras, consultorios,
debates y tertulias.

Los dos primeros grupos de géneros –expresivos y referenciales– se articulan
según estructuras propias del monólogo, mientras que la base del tercer grupo
que incluye a los géneros apelativos se encuentra en el intercambio y en la
confrontación de interpretaciones y opiniones mediante la formulación de
preguntas o de propuestas polémicas por parte del informador (diálogo).

En cuanto a la relación entre programas y géneros, el autor matiza que se trata de
cuestiones diferentes. Por programa entiende el modo de organizar contenidos en
un espacio y tiempo radiofónico, mientras que el género es el modo de organizar el
tratamiento, los enfoques o las actitudes del autor al abordar una realidad que se
desea comunicar.

La teoría de Cebrián Herreros sigue siendo un referente fundamental en la
actualidad, pero hay que indicar que aporta una definición y una tipología de
géneros que se ajusta exclusivamente a los textos informativos, sin recoger otros. Y
una teoría de los géneros radiofónicos no puede limitarse a describir sólo los
géneros informativos, aunque sea un primer paso. Por esa razón, nosotros aquí la
ampliaremos con aportaciones posteriores.

I. LOS GÉNEROS INFORMATIVOS

¿CUÁLES SON?

I.1. LA NOTICIA

Es la fórmula estrella de transmisión de los contenidos informativos radiofónicos y
es, también, la base sobre la que se edifican los dos géneros predominantes en el
terreno de la Información: el boletín y el servicio principal de noticias, también
conocido como radiodiario, diario hablado, etcétera.

I.2. EL BOLETÍN

Es un pequeño bloque de noticias que presenta con brevedad (entre 3 y 5 minutos)
las novedades más importantes y recientes de la actualidad informativa. La alta
presencia que este género tiene en el conjunto de la oferta convencional española -
supone alrededor del 8% del total- obedece, fundamentalmente, al hecho de que
los boletines son el más claro exponente de las características del medio radio
(rapidez, simultaneidad, etc.), así como el elemento que ayuda al oyente de una
determinada emisora a seguir la evolución que la actualidad informativa
experimenta a lo largo de toda una jornada. Está presente en todas las emisoras
generalistas y en muchas de las especializadas (por ejemplo, algunas de las
musicales que ofrecen información en las horas punta).

I.3. INFORMATIVO, DIARIO HABLADO O SERVICIO PRINCIPAL DE NOTICIAS

El servicio principal de noticias es lo que todos conocemos como un informativo
por excelencia (equivaldría a los telediarios televisivos), cuya duración oscila entre
los 30 y los 60 minutos. Este género suele estar conformado por tres grandes
partes. La primera de ellas es un tramo que actúa de entrada y en el que, a modo de
batería de titulares o sumario, se avanzan las noticias que de inmediato serán
ampliadas. La segunda es el cuerpo del informativo propiamente dicho, donde se
desarrollan todos los temas. Finalmente, la tercera es el cierre del informativo, una
suerte de recordatario muy similar al sumario de entrada. Además, suele incluir
una desconexión territorial con información autonómica y local.

El propósito del Servicio Principal de Noticias rebasa la pura difusión y entra en el
análisis y la interpretación, por lo que suele ser habitual que, a lo largo del
programa, aparezcan informaciones con las voces de sus protagonistas, así como
reportajes y entrevistas.

Es un género típico de la radio generalista y, como mínimo, suele programarse tres
veces al día. Aproximadamente el 40% de la Información que emiten las grandes
cadenas se hace mediante esta forma de transmisión de los contenidos de
actualidad. En los Servicios Principales que se pueden escuchar a primera hora de
la mañana se confiere especial relevancia a la información de servicios, sobre todo
la relativa a la situación de las carreteras y al estado del tiempo. También es
habitual que estos espacios incorporen la agenda de actividades previstas para la
jornada. En cambio, los informativos nocturnos suelen incluir una tertulia cuyo
objetivo es analizar, reflexionar y opinar sobre algunos de los temas que han
marcado la actualidad del día.

I.4. AVANCE

Otro género que trabaja con la Noticia y que tiene una alta presencia en la
programación radiofónica, sobre todo en los magacines de mañana y tarde, es
el avance, una especie de avanzadilla informativa , de aquellos temas que serán
tratados en los Servicios Principales de Noticias.

I.5. EL REPORTAJE

El reportaje es un género que se caracteriza por tratar en profundidad un hecho
noticioso de mayor o menor actualidad. Se trata de un relato monotemático, cuya
riqueza reside precisamente en aportar distintas visiones sobre el asunto tratado,
incorporando la voz de los protagonistas del hecho, los antecedentes, las
consecuencias, etc. En radio existen distintos tipos de reportajes y diferentes
formas de enfocarlos, tal y como describen, por citar solo algunos, los profesores
Emili Prado en su libro Estructura de la información radiofónica, o Mariano Cebrián
Herreros, en su ya citado Géneros informativos audiovisuales.

I.6. LA ENTREVISTA

La entrevista es un género informativo dialogado en el que el periodista o la


periodista interroga a algunos de los actores implicados en un hecho noticioso (por
ejemplo, un testigo ocular de un importante accidente de tráfico, una escritora que
acaba de publicar un libro, el ganador de un premio, un futbolista de reconocido
prestigio que acaba de ser fichado por un equipo de primera división, etc.).
Normalmente, las preguntas que conforman una entrevista se preparan con
antelación, por lo que es preciso que el periodista/locutor se documente sobre el
personaje al que va a entrevistar. No obstante, queda siempre espacio, como es
lógico, para la improvisación.
Al igual que sucede con el reportaje, en radio existen distintos tipos de entrevistas
y diversas formas de afrontarlas. Como norma general, no obstante, el periodista
debe facilitar la comunicación interactiva y mantener el interés del diálogo.

I.7. LA RADIOFÓRMULA INFORMATIVA

La radiofórmula informativa es un género que se basa en la emisión continuada


de noticias y comentarios de actualidad, además de apuntes referidos a la situación
del tráfico, la previsión meteorológica, etc. La radiofórmula mantiene 24 horas
sobre 24 una estructura formal repetitiva que se establece previamente y cuya
pauta la marca un Hot clock o reloj de programamción. Es el género que utiliza una
emisora como R5TN

El all news --repetición periódica y continuada de los diferentes aspectos que van
conformando la actualidad--, está concebido para ser escuchado durante un
período de tiempo relativamente breve por aquel sector de la audiencia que busca
informaciones puntuales en determinados momentos del día. Todo ello determina
que los diferentes bloques programáticos se reproduzcan normalmente cada 30
minutos.

I.8. EL MAGACÍN INFORMATIVO

Finalmente, el magacín informativo es un gran género que se suele
denominar Contenedor, ya que está conformado por distintos espacios y secciones
que, a su vez, no dejan de ser, igualmente, géneros (reportajes, entrevistas,
tertulias, boletines, etc.). En sintonía con estas apreciaciones, Francisco Sanabria se
refiere al magazine como una mezcla generosa de casi todos los géneros.

CARACTERÍSTICAS DE LA LOCUCIÓN EN LOS GÉNEROS INFORMATIVOS

En general, la transcripción fonética de los géneros informativos requiere de una
actitud que despierte en el oyente la sensación de naturalidad y fluidez, pero
procurando no caer en una excesiva afabilidad que reste credibilidad al discurso
informativo.

En cuanto a la transmisión oral de noticias, es fundamental cuidar la organización
de los grupos fónicos, ya que cualquier ruptura de los mismos sería susceptible de
alterar el significado de aquello que en realidad pretende comunicar el
redactor/locutor.
Por otra parte, la neutralidad que debe presidir la exposición de noticias obliga al
locutor a fabricar un discurso equilibrado y sostenido, pero no lineal. Así, salvo en
los lugares que precisan de una entonación concreta (como una cadencia al
finalizar la exposición de un enunciado), el locutor está llamado a construir con su
voz una curva melódica atractiva, en la que se combinen distintas alturas tonales.
De hecho, uno de los rasgos de la locución informativa radiofónica consiste en
resaltar, mediante una ligera agudización del tono y una subida de la intensidad,
algunas palabras clave. Esta práctica dota al discurso de mayor ritmo y lo hace más
soportable.

En la conducción de magazines, tertulias, entrevistas, etc., donde el locutor tiene la
posibilidad de manifestar opiniones, solidarizarse con un entrevistado, transmitir
sensaciones, emocionarse, describir movimientos, etc., la máxima es la naturalidad,
puesto que, al tratarse, o bien de géneros expresivos o bien de géneros apelativos,
la intencionalidad de los hablantes y la presencia de lo dialógico rompe con la
peligrosa monotonía en la que pueden caer los géneros referenciales.

II. LOS GÉNEROS DEPORTIVOS

¿CUÁLES SON?

Las formas de trasmisión de los contenidos deportivos que imperan en la radio


española son tres: el informativo, el magacín y el carrusel, género, este último,
que debe su nombre a su particular manera de estructurar la emisión, puesto que
se trata de una rueda de conexiones que se van sucediendo periódicamente a lo
largo de un extenso periodo de tiempo.

II.1. LA RETRANSMISIÓN EN DIRECTO Y EL MODELO DEL CARRUSEL

El carrusel es la estrella de la programación del domingo por la tarde o de todo el


fin de semana en buena parte de emisoras, especialmente en las grandes cadenas
de corte generalista. De hecho, coincidiendo con la disputa de los partidos de la liga
de fútbol, desde los estudios centrales de los diferentes operadores se conduce un
espacio, de unas cuatro horas de duración, en el que constantemente se pide paso
desde los terrenos de juego. En cada estadio, las emisoras cuentan con un equipo
de profesionales que son los encargados de informar sobre los goles, las jugadas
más interesantes, las faltas, etcétera.

Cuando hay un evento deportivo de especial importancia, la retransmisión en


directo se limita a un solo encuentro.

II.2. EL MAGACÍN DEPORTIVO

En el terreno deportivo, el magacín mantiene las características ya comentadas en


el caso de la información, si bien su inserción en las parrillas programáticas varía
sustancialmente con respecto al magacín puramente informativo, puesto que en
este caso es el rey de la noche y de las primeras horas de la madrugada. Son, en
todos los casos, programas en los que no faltan las entrevistas con deportistas,
presidentes o ejecutivos de entidades deportivas, autoridades del mundo del
deporte, etc., así como los reportajes, las últimas noticias deportivas, etc.

II.3. EL INFORMATIVO

Tienen un espacio importante en los boletines informativos del mediodía y de la


tarde.

CARACTERÍSTICAS DE LA LOCUCIÓN EN LOS GÉNEROS DEPORTIVOS


La locución deportiva radiofónica presenta unos rasgos específicos, sobre todo
cuando se trabaja el Carrusel. Este es un género en el que los radiofonistas que
intervienen manipulan constantemente su voz, alternando en su discurso tonos
graves con otros agudos, alargando notablemente la duración de las sílabas en
algunos momentos, haciendo énfasis sobre ciertas palabras, etcétera. Todo
depende del cariz de los acontecimientos que se estén narrando (alegría o
decepción por la encajada de un gol, jugada peligrosa, relajación en el terreno de
juego, etcétera).

III. LOS GÉNEROS MUSICALES

III.1. LA RADIO FÓRMULA MUSICAL

La radio fórmula musical es uno de los géneros más legendarios. Conocidos como
listas de éxitos o tops musicales, emiten de forma repetitiva una selección musical
prefijada.

III.2. EL PROGRAMA MUSICAL ESPECIALIZAD0

El musical especializado se corresponde con un programa basado en un estilo


concreto de música (blues, jazz, pop), en el que habitualmente se aportan
informaciones sobre conciertos, últimas novedades discográficas, biografías de los
componentes de un determinado grupo, concursos, etc.; en ocasiones, cuando
incluyen todas esas variedades, pueden ser considerados una especie de mini-
magacín.

III.3. EL MAGACÍN MUSICAL

Parten de la idea anterior e incluyen entrevistas como pieza fundamental de la


emisión; a veces también caben los “acústicos”, donde los músicos interpretan con
los medios del estudio algunos temas, o fragmentos de retransmisiones musicales
que merecen emitirse. Especial atención merecen los programas musicales de
autor, donde el dj selecciona la música en función del conocimiento derivado de su
propia trayectoria personal en un estilo concreto.

III.4. LA RETRANSMISIÓN DE CONCIERTOS

En algunos casos tienen entidad propia y conforman programas enteros, como Los
conciertos de Radio 3 o Los conciertos de Radio clásica.

CARACTERÍSTICAS DE LA LOCUCIÓN EN LOS GÉNEROS MUSICALES

La locución en los programas musicales está altamente condicionada por el


formato que se explote, por lo que difícilmente podemos hablar de denominadores
comunes.

IV. LOS GÉNEROS DE ENTRETENIMIENTO


Sin duda alguna, el magacín se consagra como el género protagonista de los
contenidos de entretenimiento imperantes en la oferta radiofónica española,
aunque en este terreno no faltan los programas de humor, que han ido
acrecentando progresivamente su presencia en las ondas. En cambio, el concurso,
un género estrella del entretenimiento en otras épocas, ha ido perdiendo
posiciones con el transcurso de los años.

IV.1. EL MAGACÍN

Como señalan los profesores Martí, Bonet y Perona, los aspectos más destacables
que caracterizan los típicos magacines de entretenimiento son la notoriedad de su
conductor/a y la inclusión de espacios cuyos variados temas (salud, cocina,
astrología, actualidad, meteorología, personajes famosos, música, tradiciones, etc.),
están destinados a una audiencia heterogénea (mujeres, jóvenes, tercera edad,
etc.). Aunque está considerado como entretenimiento, pueden rayar la frontera
con lo informativo y, sobre todo, con la opinión.

IV.2. EL PROGRAMA DE HUMOR

Suelen estar ligados al humor político, con la colaboración de actores radiofónicos


que interpretan a personajes basados en personas reales relevantes de la
información política o cultural. Es habitual que adopten las líneas generales de
programas de entrevistas ficticias, debates ficticios o talk shows. También recurren
al chiste, la broma, la burla… Requieren una gran dosis de ingenio y sutileza, así
como un ritmo ligero y sin vacíos.

IV.3. EL CONCURSO

Se utilizan para dar agilidad al ritmo del programa e invitar a la participación del
oyente a través de la línea telefónica o el mensaje escrito on line. Identificación de
voces grabadas, reconocimiento de temas musicales, respuestas a preguntas de
cultura general… forman parte habitual de los concursos.

CARACTERÍSTICAS DE LA LOCUCIÓN EN LOS PROGRAMAS DE


ENTRETENIMIENTO

En este tipo de programas es muy importante que la locución sea lo más natural
posible, con el fin de generar la ilusión de que entre el conductor y los oyentes
existe una relación de amistad, de cercanía, de proximidad. Si esto no se consigue,
difícilmente lograremos entretener a la audiencia.

V. OTROS CONTENIDOS, OTROS GÉNEROS

En el conjunto de la oferta radiofónica se explotan también otros contenidos y


otros géneros, aunque gozan de una presencia mucho más limitada que los
tratados hasta este momento. Entre estos géneros se encuentran los que persiguen
la polémica, de corte dialógico, como el debate o la tertulia, y que, dadas sus
características, suelen formar parte de los magacines informativos y de
entretenimiento.
También debemos referirnos a la participación, un contenido que ha ido
adquiriendo protagonismo en las madrugadas radiofónicas y que habitualmente se
resuelve con el género línea telefónica, una fórmula que consiste básicamente en
dejar a los oyentes que, a través del teléfono, manifiesten sus opiniones sobre
alguna cuestión planteada o algún acontecimiento de actualidad, expresen
libremente sus sentimientos, formulen preguntas para que las contesten otros
oyentes, etcétera. En este tipo de programas las tareas de producción son mínimas,
ya que es la audiencia la que, en realidad, llena de contenido la emisión. El oyente,
en definitiva, actúa de hilo conductor; un hilo que, con sus intervenciones, va
hilvanando el conductor o la conductora del espacio.

Si la participación ha ido ganando posiciones, la ficción, y su género por


excelencia, el radioteatro, las ha ido perdiendo, hasta el punto de que hoy por hoy
resulta prácticamente imposible sintonizar programas que fueron la estrella de la
oferta radiofónica española sobre todo en sus primeras décadas, a pesar de que
algunas emisoras generalistas tratan de recuperarlo con cierta frecuencia.
Contaban con un prestigioso cuadro de actores, un equipo de técnicos especialistas
en efectos sonoros, un directos, un ambientador musical y un realizador de actores
y de estudio. Del mismo modo, cada vez son más escasos los programas
eminentemente culturales, un contenido que, en pequeñas proporciones, tiende a
formar parte de los grandes magacines.

VALOR FUNCIONAL, EXPRESIVO Y COMUNICATIVO DE LOS RECURSOS
SONOROS DE UNA PRODUCCIÓN RADIOFÓNICA

El profesor Armand Balsebre en su libro El lenguaje radiofónico define el lenguaje
radiofónico como el “conjunto de formas sonoras y no sonoras representadas por
los sistemas expresivos de la palabra, la música, los efectos sonoros y el silencio,
cuya significación viene determinada por el conjunto de los recursos técnico-
expresivos de la reproducción sonora y el conjunto de los factores que caracterizan
el proceso de percepción sonora e imaginativo-visual de los radioyentes”.

Efectivamente, los componentes del lenguaje radiofónico, o, dicho de otro modo,
las materias primas con las que trabaja la radio son cuatro: la voz (o el lenguaje de
los humanos), la música (o el lenguaje de las sensaciones), los efectos sonoros (o el
lenguaje de las cosas) y el silencio. Como es lógico, el uso que se hace de estas
materias varía en función del tipo de programa y, así, mientras que en un
informativo predominan las voces de aquellos redactores/locutores que relatan las
noticias, en una radio fórmula musical es precisamente la música la que tiene un
papel protagonista.

Los cuatro componentes del lenguaje radiofónico tienen un valor funcional,
expresivo y comunicativo, puesto que tienen una función (una sintonía sirve, por
ejemplo, para presentar un programa), consiguen transmitir sensaciones a través
de la expresión y comunican un mensaje (el efecto sonoro de una puerta
cerrándose). Esto explica que, por ejemplo, un pequeño fragmento musical en
medio de un boletín informativo signifique que cerramos página en cuanto a
noticias nacionales se refiere y que pasamos al bloque de actualidad internacional,
o que al oír la voz de un/a locutor/a que nos asegura que le gusta mucho el disco
que acabamos de escuchar, tengamos la impresión de que, en realidad, nos está
diciendo justamente lo contrario, o que a través de una música o de un efecto
sonoro el oyente se alegre o se entristezca o que visualice en su mente un paisaje.

I. LA VOZ

La palabra es el instrumento habitual de comunicación del ser humano y, en la
radio, la palabra es voz. Como consecuencia de la particular relación
emisor/receptor que se da en la comunicación radiofónica, la voz se dota de una
especial significación, ya que ésta es la única herramienta de la que dispone el
locutor para transmitir esa información complementaria (gestos, expresiones
faciales, muecas, etc. ) que siempre aparece en aquellas otras situaciones
comunicativas en las que sí es posible ver su imagen, como por ejemplo en el
teatro, el cine o la televisión.

La voz es sonido y, como tal, cuando se emite presenta siempre un tono,
una intensidad y un timbre determinados, al margen de otras características
acústicas que se encabalgan sobre cualquier discurso verbal, como el ritmo o la
entonación.

Tono, intensidad y timbre. Definición y valores expresivos

El tono, la intensidad y el timbre tienen siempre un valor expresivo susceptible de
variar en función de las variaciones tonales, tímbricas y de intensidad que
efectuemos mientras hablamos. Pero para aproximarnos a esos valores, es
prioritario definir estos tres conceptos.

EL TONO

El tono es la impresión que nos produce la frecuencia de vibración a la que se
manifiesta una determinada onda sonora. En el caso de la voz, la marca del tono
(grave o agudo) viene dada por la cantidad de movimiento que se produce en las
cuerdas vocales al emitirla, es decir, por el número de vibraciones que en ellas
tienen lugar. Cuantas más vibraciones se produzcan, más aguda será la voz, más
alto será su tono. Por el contrario, cuantas menos vibraciones acontezcan en la
laringe -lugar en el que, como sabes, se genera la voz humana-, más grave será el
sonido resultante, más bajo será su tono.

La unidad de medida del tono es el Hertzio o Hertz (Hz), que expresa la frecuencia
a la que vibra un cuerpo. Esta unidad de medida debe su nombre a Heinrich Hertz,
personaje fundamental en la historia de la radio ya que halló el método para medir
las ondas electromagnéticas.

Las asociaciones arquetípicas establecen una estrecha relación entre la audición de
una voz grave y las sensaciones de tristeza, depresión, pesimismo, melancolía, etc.
Por el contrario, la agudización del tono indica alegría, optimismo o sorpresa, pero
también miedo, nerviosismo y tensión. Finalmente, los tonos bajos incentivan la
imaginación y la creación de personajes sombríos, misteriosos y/o malévolos,
mientras que los altos son más adecuados para la recreación de tipos joviales,
cómicos, etcétera.

LA INTENSIDAD

Por su parte, la intensidad de la voz depende básicamente de la potencia con la que
el aire que procede de los pulmones cuando hablamos golpea los bordes de la
glotis, de modo que, cuanto más amplias son las vibraciones que se producen
durante la fonación, tanto mayor es la fuerza a la que se emite una voz. La
intensidad equivale al volumen, por lo que es normal asociarla con la impresión de
alta/baja o de fuerte/débil y se mide en decibelios.

Sobre la intensidad de la voz, resaltaremos su capacidad para expresar también
actitudes emocionales. De hecho, las variaciones de intensidad son muy adecuadas
para representar estados de ánimo y aspectos relativos al carácter de un
determinado personaje: la agresividad, la cólera, el miedo, la tensión o el
nerviosismo se ilustran con un volumen más alto que la tristeza, el cansancio, la
debilidad o la depresión. Por otra parte, la intensidad ayuda a describir tamaños y
distancias y, en combinación con la agudeza o gravedad del tono, refuerza la
ilusión espacial de lejanía (volumen más bajo) o proximidad (volumen más alto).

EL TIMBRE

El timbre es la principal seña de identidad que presenta cualquier sonido. Es su
cualidad más particular, su especificidad, aquello que en realidad posibilita que al
percibir un sonido lo podamos diferenciar de otro porque lo hace distinto, aunque
ambos presenten el mismo tono y la misma intensidad.

En el caso del ser humano, el choque del aire con las cavidades bucal y nasal, el
velo del paladar, los labios, la lengua y los dientes, determina la forma que acaba
adaptando una voz, originándose así esa especificidad a la que nos hemos
referido. No obstante, la particularidad que el timbre otorga a una voz no es
obstáculo para que este no se pueda manipular parcialmente y, por tanto, el sonido
de nuestra voz cambie. De hecho, si esto no fuera así raramente podrían explicarse,
por ejemplo, las imitaciones con las que nos deleitan algunos humoristas.

El timbre, por consiguiente, puede llegar a informar, más que cualquier otra
cualidad acústica, sobre el aspecto del hablante (edad, altura,...), por lo que se
perfila como una señal que facilita la construcción de un determinado personaje o
el retrato que del locutor radiofónico quiera este que se hagan los oyentes. Por este
motivo, los oyentes de radio reconstruyen en su mente el rostro de su locutor
preferido a partir, esencialmente, del timbre, aunque luego no concuerde con la
realidad.

La locución

Aunque son muchas las variables que intervienen en la locución, aquí solo vamos a
centrarnos en las más importantes (la vocalización, la entonación y el ritmo), en
tanto que son las que determinan el grado de inteligibilidad de cualquier discurso
verbal radiofónico.

La vocalización consiste en articular con precisión las vocales, consonantes y
sílabas de las palabras para hacerlas totalmente inteligibles. Recordemos que la
claridad del mensaje en cuanto a su construcción sintáctica y semántica es clave en
la emisión radiofónica, (en gran parte por su carácter fugaz) y de la misma manera
que se han de usar, por ejemplo, las oraciones simples (frente a las compuestas)
para asegurar la realización de función comunicativa del mensaje (el receptor no
puede intervenir y, por tanto, no podrá decirnos que no nos ha entendido), de la
misma manera, decimos, se debe perseguir esa claridad o inteligibilidad sonora.

La entonación guardará una estrecha relación con el tipo de texto que
vayamos a transcribir oralmente. Sin embargo, para que el discurso resulte
atractivo y no acabe aburriendo a los oyentes, se recomienda a los locutores
que huyan de la linealidad entonativa y que construyan con la voz una curva
melódica en la que se combinen distintas alturas tonales.

En cuanto al ritmo, sabemos que cualquier discurso verbal presenta una


estructura rítmica interna determinada por la duración de las sílabas, la
longitud de los grupos fónicos y la duración de las pausas que separen dichos
grupos fónicos. Es crucial para mantener la atención del oyente y para
despertar sensaciones diferentes en este. Así, la manipulación de la estructura
rítmica interna hará que en la mente del receptor se genere una imagen de
tranquilidad y sosiego (pausas largas, grupos fónicos extensos, etc.) o, por el
contrario, una impresión de nerviosismo y tensión si el ritmo se hace más
rápido.

II. LA MÚSICA

La relación entre música y radio es tan estrecha que difícilmente podríamos


hacernos una idea de cómo sería el medio sin la existencia de este componente
del lenguaje radiofónico. En los informativos, en los espacios deportivos, en
las tertulias, en los anuncios..., siempre hay un lugar para la música, como
también lo hay, obviamente, en aquellas emisoras que basan en esta materia
prima toda su programación (Cadena 40, Cadena Dial, Radio Clásica, etc.).

En los inicios de la radio, la música solo tenía presencia cuando la radio se


desplazaba para emitir desde una sala de conciertos o cuando los músicos iban
al estudio. A partir de los años sesenta, el desarrollo de la industria
fonográfica permite que las emisoras reproduzcan los discos de pizarra o de
vinilo, incorporando así la música como un elemento indispensable.

En los programas musicales, la música constituye el contenido básico de ese


programa o, si se trata de una emisora temática musical, el contenido de toda
la emisora. Algunos autores se refieren a esta como “función programática”,
en el sentido de que constituye el contenido básico del “programa”. Es, sin
donde encontramos una interesante variedad de funciones de la música; las
analizamos a continuación.

Según el contexto, la música cumple diferentes funciones:

a) Función sintáctica o gramatical

Tiene esta función cuando se utiliza para ordenar y distribuir contenidos y


secciones, es decir, cuando tiene un carácter organizador. Es muy habitual en
los informativos y se presenta en diferentes tramos de corta duración, lo que
da lugar a que se pueda hablar de distintos tipos de inserciones, como
la sintonía, la cortina, la ráfaga y el golpe musical.

• Sintonía: distintivo de apertura y cierre de un programa. Suele durar


entre 15 y 30 segundos.
• Cortina o cortinilla: cumple la función de “correr o descorrer una
cortina” entre una información y otra. Es una especie de punto y aparte,
muy breve (10-15 segundos). Suele utilizarse para pasar de una sección
a otra en un mismo programa. En ocasiones, está constituida por
algunas frases musicales extraídas de la sintonía.
• Ráfaga: al igual que la cortina, sirve también para separar contenidos o
bloques temáticos dentro un mismo programa. Sin embargo, dada su
menor duración (unos 5 segundos), marca una transición más corta y
dinámica, por lo que suele utilizarse asiduamente en los informativos
radiofónicos. La ráfaga se usa, por ejemplo, para separar las noticias
nacionales de las internacionales, o la economía del deporte. Al igual
que en el caso anterior, es habitual que las ráfagas se extraigan también
de la sintonía.
• Golpe musical: Se trata de un fragmento extremadamente corto (entre 2
y 3 segundos) que se utiliza para llamar la atención del oyente en un
momento determinado o para separar fragmentos sonoros verbales que
están enlazados por un/a mismo/a locutor/a (por ejemplo, en un bloque
de información deportiva varias noticias seguidas sobre el FC
Barcelona). Para producir el efecto de golpe, conviene que el fragmento
presente una marcada ascendencia tonal.
b) Función descriptiva

Nos referimos a esta función cuando la música genera un ambiente, nos sitúa en un
espacio y sirve, por tanto, de importante apoyo al contenido que se nos está
transmitiendo.

c) Función expresiva
La música tiene la capacidad de generar emociones y sensaciones y en la radio
a menudo es utilizada con esa intención.

En ocasiones, las dos funciones anteriores aparecen simultáneamente.


Pensemos, por ejemplo, en un reportaje sobre las compras navideñas. La
música de villancicos forma parte de la realidad que se está describiendo,
ubica en un lugar (cualquier mercadillo navideño, pequeñas tiendas, grandes
superficies) y, además, puede despertar ciertas emociones en un receptor que,
al escucharla, sienta, por ejemplo, nostalgia por encontrarse lejos de casa.

La música también tiene una función importante en el mensaje publicitario,


aunque aquí no nos detendremos en ello por abordarlo en el tema de “La
publicidad”.

III. LOS EFECTOS SONOROS

El efecto sonoro es aquel sonido, natural o artificial, que sustituye objetiva o


subjetivamente la realidad, desencadenando en el oyente la percepción de una
imagen auditiva, es decir, del referente al cual restituye. Las formas sonoras
de un efecto se reconocen y se interpretan porque están asociadas al mundo
que nos rodea: objetos, animales, fenómenos meteorológicos, etc., aunque en
ciertas ocasiones dichas formas pueden no tener un referente real como, por
ejemplo, las señales horarias radiofónicas.

En los años 60 y 70, cuando las radionovelas ocupaban buena parte de la


programación de las emisoras españolas, los efectos sonoros eran muy
abundantes y hasta los años 90 existía en las grandes emisoras el técnico de
efectos especiales, que contaba con una serie de artefactos para crear los
efectos en el momento. En la actualidad, algunos locutores suelen incorporar a
sus intervenciones efectos sencillos que realizan con la ayuda de pequeños
mecanismos como juguetes, maquinitas, instrumentos musicales o con
palmas, golpes, pisadas que realizan ellos mismos. Tienen distintas funciones:

a) Descriptiva: el sonido de las olas al hablar del mar.


b) Expresiva: no forma parte de aquello que se está describiendo sino que
tiene un valor comunicativo propio, como por ejemplo, el sonido de la lluvia
que puede generar un estado de nostalgia o de tristeza.
c) Narrativa: Existen efectos sonoros que por sí solos evocan una acción,
como la apertura de una puerta, el arranque de un coche o los pasos sobre la
arena, por citar tres ejemplos ilustrativos. Estos efectos desempeñan una
función narrativa, en tanto que no hace falta la presencia de ningún otro
componente del lenguaje radiofónico para explicar lo que esos sonidos
representan.
d) Estética: Se presenta cuando el efecto sonoro tiene un valor puramente
accesorio y, en esencia, sólo sirve de refuerzo. Por ejemplo, el suave trino de
un pájaro dentro de una casa para sugerir una sensación hogareña.

IV. EL SILENCIO

Aunque resulte paradójico, el silencio tiene una fuerza comunicativa rotunda.


El silencio es una pausa intencionada capaz de narrar, expresar, describir…
gracias a su ubicación entre elementos que lo anteceden y que lo siguen.
De hecho, existen numerosas situaciones en las que podemos hacer uso del
silencio, como por ejemplo para representar el estado emocional de una
persona que decide dejar de intervenir en un diálogo; o para estimular la
reflexión, cuando, ante un tema controvertido, el radiofonista realiza un
silencio convidando a los oyentes a pensar sobre ello. Es más, el silencio, en
ocasiones, puede ser construido con la ayuda de un sonido, como la recreación
radiofónica de "un minuto de silencio" mediante el repique de campanas.

El silencio puede convertirse en la marca profesional de un locutor, si lo


maneja con dominio y sin abuso. En España, el precursor del uso del silencio
como recurso en la palabra radiofónica fue Jesús Quintero, en los ochenta, en
su programa El loco de la colina. Los silencios de Jesús Quintero (también en
televisión con El perro verde y Ratones coloraos) confirieron al periodista un
ritmo personal y un estilo único.

LOS ESTUDIOS DE AUDIENCIA Y SU REPERCUSIÓN EN LA


PROGRAMACIÓN DE RADIO Y TELEVISIÓN

Los medios de comunicación dan mucha importancia a los datos de audiencia,


puesto que quieren saber cuánta gente los escucha (caso de la radio), los ve
(caso de la televisión y el cine) o los lee (caso de los medios impresos). Pero
no solo eso, sino que, además, necesitan conocer qué tipo de personas están al
otro lado del aparato receptor o de los ejemplares vendidos. Es lo que se llama
el perfil de la audiencia. Este término engloba un determinado tipo de
información sobre el público como el sexo, la edad, el estado civil, el nivel
cultural, la clase social o el lugar de residencia, entre otros aspectos.

El número de la audiencia quita y pone figuras y programas de radio y


televisión, sostiene o hunde revistas y diarios. Efectivamente, el nivel de
audiencia tiene una enorme influencia porque puede ser definitivo en la vida
de un programa por una cuestión de prestigio y porque cuanto mayor éxito
tenga, mayores beneficios tendrá (sobre todo en inversión publicitaria).

Factores que influyen en la percepción del lenguaje audiovisual y que,


por tanto, incidirán en la audiencia
• Factores psicológicos y fisiológicos: la memoria y la atención

Cuando percibimos señales sonoras o visuales, la memoria nos remite


inmediatamente a la experiencia personal, conectando con datos particulares,
que otorgan a la información una carga valorativa adicional. La memoria de
experiencias sensoriales (incluso las físicas) queda almacenada en forma de
imágenes.

Por su parte, la atención funciona como filtro ante los estímulos, decidiendo
cuáles son más relevantes y estableciendo una jerarquía de prioridades.
Dependiendo de la fuerza del estímulo (en relación con la familiaridad,
novedad e intensidad que nos procuren), un estímulo audiovisual llamará más
o menos nuestra atención.

• Factores comunicativos: la importancia del código común.

Para que entre un emisor y un receptor se produzca la comunicación de un


mensaje, ambos deben hacer uso de un código común, en este caso un código
audiovisual fácilmente descifrable por ambas partes que permitan la
interpretación del mismo. El código permite que la idea concebida por el
profesional informativo llegue en buenas condiciones de recepción al oyente o
telespectador.

“Target”: definición

Es el público objetivo al que se dirige un producto o servicio. La definición


del público objetivo suele contemplar tres tipos de criterios: sociodemográfico
(sexo, edad, nivel de estudios), socioeconómico (ingresos, pautas de consumo,
clase social) y psicográfico (personalidad, estilo de vida, sistema de valores).
Es, por tanto, fundamental, tanto en el diseño de programas como en el
análisis de los datos de audiencia.

Instrumentos de medición de audiencias en radio.


Estudio General de Medios (EGM):

El Estudio General de Medios es el estudio con mayor relevancia en este


campo, ya que si bien hay otros sistemas de medición específicos para medios
concretos como la televisión (Audímetro), el EGM los engloba a todos los
medios de comunicación e incluye, además, el cine e internet. Es, sin duda, un
auténtico estudio multimedia.

El EGM se elabora a partir de una encuesta realizada a una muestra


representativa de la población española a partir de los 14 años a la que se le
interroga, a través de un cuestionario, acerca de su comportamiento con
respecto a los medios. Así, en el caso de la radio, se les pregunta cuándo la
escuchan, en qué lugar (hogar, trabajo, coche....), qué emisora sintonizan, qué
programas y qué locutor, entre otras cosas. Pero, además, se les pide que
informen sobre el equipamiento del hogar y si consumen determinados tipos
de productos. De esta manera se consigue saber no solo la cantidad de
personas que escuchan, ven o leen un determinado medio, sino qué tipo de
personas son y cuáles son sus hábitos.

A lo largo del año, este estudio, que depende de la Asociación para la


Investigación de los Medios de Comunicación (AIMC), realiza más de 40.000
entrevistas en tres campañas, o lo que ellos llaman Oleadas, que coinciden
con las temporadas de invierno, otoño y primavera (el verano se desestima
porque los hábitos de la población se modifican sustancialmente). La elección
de las personas a las que se entrevista se hace de manera aleatoria y en
función de una proporción geográfica, o lo que es lo mismo, cuanto mayor
número de habitantes tenga una localidad (siempre y cuando cuente con más
de 50.000), mayor número de personas serán susceptibles de ser encuestadas
por el EGM.

El Audímetro: la medición de la audiencia en TV

La medición de audiencias en TV, al margen de otro tipo de estudios (como el


EGM), se realiza principalmente a través de audímetros. Estos aparatos son un
complemento que se conecta al televisor de un grupo de población elegido de
forma que represente al total de la población. Así, de los datos reales de
consumo de estas personas se extrapola la cifra global del país o región.

DATOS DE AUDIENCIA EN 2015 (Fuente: Anuario SGAE 2016).


RADIO

En 2015, la radio cuenta con una audiencia ligeramente inferior al año


anterior: en este año el 60,1% de la población mayor de 14 años escuchaba la
radio, frente al 61% en 2014. En cuanto al tipo de programación, el que más
predomina, al igual que en 2014, es la programación temática (36,5% de los
oyentes de 2015), y hay un 28,4% de programación generalista (una
proporción similar a la de 2014, cuando los oyentes de la programación de
carácter temático suponían aproximadamente un 37% y los de la
programación generalista, el 28,7%).

En cuanto a las franjas horarias, la mayor cantidad de oyentes se registra en


horario de mañana seguida por la franja del mediodía; la de la tarde es la
tercera franja en audiencia los días laborables, mientras que este lugar lo
ocupa la noche durante los sábados y los domingos.
El perfil medio de audiencia de radio de lunes a domingo de modo genérico
está equilibrado en cuanto a género (el 51,9% son hombres y el 48,1%,
mujeres), sustentador principal (47%) y ama de casa (43,1%), clase social
media media (44,3%), de una edad promedio de 45,6 años, casado (61,2%) y
con estudios a nivel BUP/ COU/FP (34,7%).

Los perfiles de audiencia específicos para las diferentes cadenas temáticas


musicales muestran algunas diferencia en relación a los perfiles de las
emisoras de radio generalistas. En este caso, el perfil de audiencia se
caracteriza por ser mujer (51,8%), de clase social media media (46,2%), ama
de casa (41,2%), de entre 35 y 44 años de edad (26,6%), casada (55,9%) y de
poblaciones entre 10.001 a 50.000 habitantes. Lógicamente, este perfil
promedio presenta algunos matices por cadenas concretas. Así, por ejemplo,
cadenas como MegaStar FM, Hit FM o Flaix, por citar algunos ejemplos,
muestran un perfil más joven (de 25 a 34 años).

Al analizar de modo concreto la audiencia de cada cadena generalista, hemos


de destacar que la Cadena SER vuelve a ser otro año más la generalista líder
en audiencia, con 4.422.000 oyentes (haciendo el promedio en los tres
periodos mostrados para 2015) y superando los 4,5 millones en el periodo de
abril a mayo. La siguiente cadena en número de oyentes, aunque con una
diferencia importante respecto a la SER, es la Cadena COPE, con un
promedio de 2.109.000 oyentes, llegando a los 2.511.000 oyentes en el
periodo de octubre a noviembre de 2015. De este modo, le quita esta posición
a Onda Cero, que era la cadena generalista segunda en audiencia el año
anterior. Precisamente, la tercera cadena generalista más seguida es Onda
Cero, que obtiene una audiencia en 2015 de 2.053.000 oyentes y su periodo de
mayor audiencia es el comprendido entre abril y mayo, donde llega a
acumular 2.230.000 oyentes.

En el apartado de cadenas temáticas musicales, destaca en número de


seguidores Los 40 Principales, del Grupo Prisa. Esta cadena sigue siendo la
primera en audiencia, pero ha perdido seguidores en 2015 (de un promedio de
3.184.000 oyentes ha descendido a 2.979.000). La siguiente en audiencia es
Cadena Dial, con una audiencia promedio en los tres periodos de 2.223.000
oyentes. Le siguen C100, Europa FM y Kiss FM.

En el apartado de cadenas temáticas musicales de emisión nacional con menos


de 500.000 oyentes, el liderazgo en audiencia corresponde un año más a
Radiolé; RNE 3 se sitúa como la segunda cadena temática más seguida.

En cuanto a las cadenas temáticas informativas, encabeza los datos de


audiencia Radio Marca seguida de R5TN.

Consecuencias de los malos datos de audiencia


El riesgo de tener una audiencia baja es como un dominó en el que la primera
ficha hace caer al resto. Una cadena tiene unos niveles medios de share, una
cifra que siempre debe intentar hacer crecer. Si un programa no contribuye a
esto sino que, por el contrario, hace que la media de la cadena descienda, tiene
un problema serio que, posiblemente, desembocará en la retirada de esa serie
o programa.

La cadena se mantiene gracias a la publicidad que contratan las marcas y éstas


no se van a mostrar partidarias a aparecer en un hueco en el que no hay
muchos espectadores a los que les pueda llegar el mensaje. Las marcas
beneficiarán a los programas que más audiencia consigan, algo totalmente
lógico y es por ello por lo que un programa necesita irremediablemente tener
audiencia.

Son muchos los casos en los que un programa se retira de la parrilla de


programación por los malos datos de audiencia; en algunos casos vemos cómo
la calidad del producto queda supeditada a los datos de audiencia, por
ejemplo, en el caso de la serie de renombre internacional Homeland que, en su
cuarta temporada, fue retirada de la cadena Cuatro cuando faltaban cinco
capítulos para acabar la temporada.

En los últimos años existe un fenómeno en nuestra televisión que arrasa con
programas y series y afecta a todas las cadenas, siendo una de las prácticas
televisivas más criticadas por parte de los espectadores. Se trata de la
contraprogramación, en la que una cadena pone a competir a un programa
con mucho poder de convocatoria contra el espacio de otra cadena, con el fin
de dinamitarlo, restarle audiencia y conseguir que salga de la parrilla.

Audiencia total o “rating” y la cuota de pantalla o “share”

La audiencia total o “rating” hace referencia al número total de espectadores


que han visto un programa televisivo y al porcentaje que representan sobre el
total de la población.

La cuota de pantalla o “share” refleja el porcentaje que representan los


espectadores de un determinado programa televisivo respecto al número total
de personas que en ese momento están viendo la televisión.

Las cadenas de televisión ponen especial atención en atraer el máximo de


audiencia posible durante el horario de máxima audiencia, cuando hay más
espectadores delante de los televisores (“prime time”), ya que en esta franja
horaria los medios reciben más ingresos por publicidad.

“Prime time” y “Acces prime time”


El horario estrella de la televisión española comienza actualmente
pasadas las 22.30 horas y se alarga habitualmente hasta más allá de la
medianoche. (En nuestro país se entiende como segundo horario de
prime time las emisiones de sobremesa entre las 15:00 y las 16:00).
El prime time ha sufrido un retraso de más de una hora en los últimos
25 años (72 minutos) y es más tardío y más corto que en otros países
(casi 6 horas en EEUU o en el Reino Unido). Los telediarios de TVE
y El informal de Telecinco son dos de los principales
responsables del progresivo desajuste. Una guerra de informativos,
otra por el control del access prime time y un reciente intento de
abaratar costes constituyen los tres puntales del desmadre horario.

El access, que en principio no consistía más que en una antesala del


prime time, ha acabado resultando crucial. Liderar esa franja permite
partir con ventaja en el horario estrella. Por consiguiente y para
explotar al máximo ese arrastre, la cadena que domina el access lo
extenderá cuanto esté en su mano para tapar el inicio de los
principales formatos de la competencia, con lo que la programación
posterior se posiciona a horas aún más avanzadas.
La sexta ha apostado por el Gran Wyoming con El intermedio a las
20.45 (sus informativos son a las 20.00 h.) y Antena 3 con El
hormiguero.

Coincidente con los años de crisis, el alargamiento del access ha


posibilitado que las cadenas ahorren en costes: el prime time se
retrasa y estira, por lo que se suprimen los formatos de late
night -un programa menos que asumir por parte de los operadores-. Si
el prime time no se prolonga lo suficiente, basta con recurrir a
repeticiones o a espacios de making of, tan comunes hoy en día.

El dislate continúa sin freno hasta la actualidad, con un prime time


que ya empieza pasadas las 22.40 horas. De 1991 a 2015 se ha sufrido
un retraso medio de tres minutos por año. Desde el Gobierno de
Mariano Rajoy se ha propuesto sin éxito una implicación de los
operadores por la racionalización de los horarios. TVE hizo una
timorata intentona, finalmente descartada. En las privadas, el rechazo
ha sido tajante.
A pesar de que el inicio del prime time se ha retrasado 72 minutos en
los últimos 25 años, el pico de audiencia apenas se ha movido: tan
sólo ha variado en siete minutos desde las 22.35 de 1993 hasta las
22.42 de 2015. Es decir, el retraso progresivo emprendido por las
cadenas no tiene correspondencia con un cambio en los hábitos de los
españoles. Cuando se concentra el mayor número de espectadores
(desde las 20.30 h. ya se supera el 25% de la población) ni siquiera ha
comenzado el contenido supuestamente de prime time. Así, por
decisión de las cadenas, se da la circunstancia de que las series y los
programas más caros se inician cuando el consumo televisivo ya
está descendiendo.

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DATOS DE AUDIENCIA EN TV EN OCTUBRE DE 2016

1. Telecinco
2. A3
3. La1
4. La Sexta
5. Autonómicas
6. Temáticas de pago
7. Cuatro
8. FDF
9. La 2
10. Neox

Por grupos, Mediaset es el líder de audiencia.

Por targets, Telecinco es líder en mujeres, Antena 3 en hombres y Clan en


niños.

Por franjas horarias, Telecinco es líder en “prime time” y “late night”,


mientras que Antena 3 lo es en las mañanas y La 1 en la sobremesa. Las
temáticas de pago son líderes en la madrugada.

Fuente: Barlovento comunicación. El documento completo está colgado en el


blog.

LA RADIO Y LA TELEVISIÓN PÚBLICA FRENTE A LAS


PRIVADAS
Tal y como se recoge en la LEY 17/2006, de 5 de junio, de la radio y la
televisión de titularidad estatal, el servicio público es un servicio esencial
para la comunidad y la cohesión de las sociedades democráticas que tiene por
objeto la producción, edición y difusión de un conjunto de canales de radio y
televisión con programaciones diversas y equilibradas para todo tipo de
público, cubriendo todos los géneros y destinadas a satisfacer necesidades de
información, cultura, educación y entretenimiento de la sociedad española;
difundir su identidad y diversidad culturales; impulsar la sociedad de la
información; promover el pluralismo, la participación y los demás valores
constitucionales, garantizando el acceso de los grupos sociales y políticos
significativos.

Las funciones de la corporación de Radio y Televisión Española, S. A. como


servicio público son:

1. Promover el conocimiento y difusión de los principios constitucionales


del Estado y los valores cívicos.
2. Garantizar la información objetiva, veraz y plural.
3. Facilitar el debate democrático y la libre expresión de opiniones.
4. Promover la cohesión territorial, la pluralidad y la diversidad
lingüística y cultural de España.
5. Ofrecer acceso a los distintos géneros de programación y a los
acontecimientos institucionales, sociales, culturales y deportivos,
dirigidos a todos los sectores de la audiencia, prestando atención a
aquellos temas de especial interés público.
6. Procurar atender a la más amplia audiencia, asegurando la máxima
continuidad y cobertura geográfica y social, con el compromiso de
ofrecer calidad, diversidad, innovación y exigencia ética.

TVE empezó sus emisiones en 1956 y en 1982 el Tribunal Constitucional


permitía la posibilidad de una televisión privada, siempre y cuando se
respetasen los principios de igualdad y pluralismo.

Actualmente, la oferta de canales de TDT de los operadores de ámbito


nacional es la siguiente: (Nótese lo estereotipado del perfil al que van
dirigidos muchos de los canales temáticos)

De ámbito nacional:

• Corporación RTVE (La única televisión pública): La 1 y la 2


(generalistas), 24 h. (canal temático de noticias), Clan (temático,
público infantil), Teledeporte (temático deportivo).
• Atresmedia Televisión: Antena 3 y La Sexta (generalistas), Neox
(público joven, series y entretenimiento), Nova (ocio y estilo de vida)
• Grupo Mediaset España: Telecinco, Cuatro (generalistas), Boing
(infantil y adolescente), Divinity (cine, series, telenovelas; público
femenino), FDF (series y algo de cine), Be Mad (espacios dirigidos al
público masculino; “factual” tipo Veterinarios en acción), Energy
(público masculino: deportes, documentales actualidad, cine, series).
• Net Televisión: Disney Channel (infantil), Paramount Channel (cine).
• Veo Televisión: DMax: (Infotainment, Docureality sobre motor, mundo
salvaje, supervivencia, cocina… Público muy amplio.)
• Radio Blanca: DeKiss (canal generalista dirigido a un público femenino
joven-adulto con mucho espacio factual suministrado por la compañía
estadounidense Discovery Network como Tú ensucia que yo limpio).
• 13 Televisión (La Conferencia Episcopal es su principal accionista): 13
TV (canal generalista con programación de espacios de contenido
religioso y con informativos y tertulias políticas como plato fuerte: El
cascabel).
• Grupo Secuoya: Ten (Telerrealidad: Dating show como Cita en pelotas
y noticias en breves boletines con una “línea editorial blanca”, según
sus responsables, en los que no entra la política sino los sucesos)
• Real Madrid Televisión: Realmadrid Tv: canal madridista.

Existen también canales de ámbito autonómico (TV3) e incluso local.

Por otra parte, tenemos los canales de pago como #0 (de Movistar +) o Fox
(cuya emisión comparten Orange TV y Movistar + entre otras), MTV, etc.

Finalmente, plataformas como Yomvi o Netflix son una buena muestra de


cómo están cambiando los hábitos de los telespectadores.

http://www.televisiondigital.gob.es/TDT/Paginas/canales-tdt.aspx

Los nuevos canales incorporados a la TDT en 2016 (Ten, DKiss, 13TV, Be


Mad…) han inundado la televisión de telerrealidad. El Gobierno convocó el
concurso con el objetivo de ampliar el pluralismo y “las ideas y corrientes de
opinión”, además de “satisfacer las demandas e intereses plurales de los
ciudadanos”. Sin embargo, en las parrillas de las nuevas frecuencias los
géneros informativos son prácticamente inexistentes mientras abunda
formatos factual (mezcla de documental y ficción) y de telerrealidad
realizados en Estados Unidos.

Asimismo, las televisiones deberían evitar los estereotipos y, sin embargo,


como vemos en la relación de cadenas existentes, en muchas de ellas, el
público al que van dirigidas se basa en estereotipos sobre todo de género.
Ocurre, además, que vemos actitudes machistas incluso en la televisión
pública, cadena que debería ser especialmente cuidadosa con ello. (Ver: “Sara
Carbonero: la última víctima del machismo de Bertín Osborne” en El País).

LOS NUEVOS GÉNEROS TELEVISIVOS

Umberto Eco diferencia la “paleotelevisión” de la “neotelevisión”. En esta


última, no existe la ocultación del medio, sino que la televisión, como medio,
es un agente más en el proceso comunicativo y no solo un mero transmisor de
imágenes y sonido. Esta evidencia de la existencia del medio permite que la
programación pueda ser ahora más cálida, cercana y, en definitiva, más
inclusiva para el espectador. Se abre entonces una dimensión emocional
explotable por todo tipo de programas, incluidos los informativos,
caracterizados en la “paleotelevisión” por una frialdad y un carácter
eminentemente racional.

El nuevo modelo informativo:

La práctica periodística y la forma en la que los ciudadanos nos informamos


cambian con gran rapidez. La multitud de soportes a través de los cuales
recibimos y compartimos información han aumentado y, por ejemplo, es
posible recibir una misma noticia a través de una red social, un periódico, la
radio o una televisión. La proliferación de soportes y el aumento de la
competencia ha afectado a la manera y rapidez con la que consumimos
información y a la propia calidad de esta. En este contexto, es comprensible
que los modelos informativos más clásicos se hayan tenido que renovar para
competir con los medios más innovadores.

El reflejo de lo anterior lo vemos en la inclusión en los informativos de


noticias “blandas”, es decir, noticas que tratan temas más sencillos de
comprender como historias personales, noticias de celebridades, hechos
curiosos o, poniendo un ejemplo más contemporáneo, un vídeo viral de
Youtube de un perro ladrando una canción. Estas noticias blandas suelen
apelar a las emociones del espectador, con recursos con la personalización o la
dramatización de los protagonistas de las historias.

En los 90, en esta misma línea, aparecieron en la televisión española los


programas de infosátira como Caiga Quien Caiga (1996). En ellos se tratan
asuntos de actualidad jugando con el humor, la irónia y la parodia. Este es el
formato que continúa actualmente El intermedio.

EL INFOENTRETENIMIENTO (INFOTAINMENT)

Género o macrogénero que hibrida información y entretenimiento


combinando la función informativa clásica con la búsqueda de la emotividad y
el uso de un lenguaje audiovisual determinado.
La mayoría de los estudiosos sitúan el origen del infoentretenimiento entre
finales de los 80 y principios de los 90 en los informativos de las televisiones
occidentales. Su detonante sería la expansión de la televisión comercial
privada frente a la pública y, derivado de ello, la necesidad de desarrollar
estrategias para atraer a una audiencia masiva en un mercado altamente
competitivo. Posteriormente ha constituido, también en internet, una tendencia
en auge.

Características del género:

• Temáticas sociales como los sucesos, las costumbres y tradiciones, las


“celebrities”, la gastronomía, la moda, los fenómenos meteorológicos,
etc.
• Técnicamente, se utiliza la grabación mediante cámara al hombro, los
primeros planos o planos detalle, la incorporación de elementos
extradiegéticos como la música o la inclusión de transiciones y, por
encima de todo, el uso de la imagen como elemento indispensable para
atraer de forma instantánea a la audiencia. Si comparamos, por
ejemplo, los telediarios de las públicas y las privadas, observamos que
el ritmo de la narración en estas últimas es mayor tendiendo a la
“espectacularización”.
• Incorporan sentimientos personales, dramatismo e ingredientes
cómicos.

EL FACTUAL ENTERTAINMENT: entretenimiento de no ficción

En la época dorada de las series de ficción en televisión, la realidad, el


“factual entertainment” (entretenimiento de no ficción) ocupa cada vez más
espacio en las parrillas españolas. Y es que esta mezcla de informativo y
entretenimiento, lo personal y lo profesional, es lo que hace atractivo este
género basado en la realidad. Si las funciones básicas de la televisión son
formar, informar y entretener, en la parrilla actual para competir en audiencia
no se puede hacer por separado. La realidad es la materia prima con la que
se construye el programa, pero el objetivo ya no es informar al
espectador sobre el mundo real sino entretenerlo.

El nacimiento de Cuatro y, especialmente, de Callejeros, supuso un antes y un


después en el desarrollo del factual entertainment en España. Luego llegarían
otros programas en esta y otras cadenas hasta el lanzamiento (en 2012) de
Discovery Max (ahora DMax), la marca por excelencia del factual en el
mundo. Ha sido la cadena que mejor ha combinado la mezcla de
entretenimiento y de realidad sin importar el tema tratado. El último
superviviente es un gran ejemplo: partiendo de una premisa documental se
muestran distintas técnicas de supervivencia convirtiendo al producto, casi, en
una película de aventuras donde con modos observacionales, pero con estilo
más propio de la ficción, consiguen entretener en cada capítulo con una
historia sobre la lucha por la supervivencia de Bear Grylls en medio de la
naturaleza.

Una de las cuestiones más polémicas en torno a este género ha sido siempre la
pregunta sobre ¿cuánto hay de realidad, cuánto de ficción o de guion? Cada
vez tiene más peso el entretenimiento: no importa tanto que lo que se cuente
sea verdad como que sea entretenido.

Otra de las características de este género es la dificultad de establecer límites


claros entre los subgéneros: Reality, coaching, infotainment, docureality,
docutainment, docuseries…, formatos basados en la realidad que son
sucesores del factual y se han generado a partir de la combinación de diversos
elementos dando más peso a la realidad, al entretenimiento o, en algunos
casos, a la ficción directamente.

El éxito de la telerrealidad tiene mucho que ver con su capacidad para


sorprender; son, además, formatos sencillos de ver y permiten al público
identificarse con ellos. Además, permiten competir en el prime time con
presupuestos bajos y aportan fidelidad de audiencia y marca.

• REALITY (Show): Programa en el que un grupo de personas en un


ambiente cerrado compiten en un concurso mientras son observados
por las cámaras. Gran Hermano, Supervivientes (los dos en Telecinco).
El DATING SHOW se puede considerar un subgénero de Reality sobre
formación de parejas. Desnúdame en DKiss, Tú, yo y mi avatar
(Cuatro)
• TALENT SHOW: Varios concursantes muestran su talento delante de
un jurado y un público. Tu cara me suena (Antena 3), Got Talent
(Telecinco), Masterchef.
• DOCUREALITY: Formato en el que se muestra la vida de un grupo de
personas con el único objetivo de entretener mostrando su vida y sus
experiencias. Alaska y Mario (MTV), Espíritu salvaje (Cuatro) sobre la
vuelta al mundo de una familia de Tarragona.
• COACHING: A través de casos reales (“Docu reality”) se trata de
mostrar modos y formas de superar problemas o conflictos, desde
problemas alimenticios, de conducta o educación. Empezaron con
Supernanny (2006), después Hermano Mayor y la última novedad ha
sido Mejor llama a Pilar (sobre conflictos sentimentales de pareja).
Mediaset y, concretamente, Cuatro ha sido la cadena que más ha
apostado por este formato.
• INFOTAINMENT: Programas de carácter informativo bajo un prisma
de entretenimiento. A través del montaje se genera expectación en las
historias y tramas. España Directo (La 1), Callejeros (Cuatro, ya
desaparecido), Comando actualidad (La 1), Españoles por el mundo
(La 1)
• DOCUSERIES: Formato de carácter divulgativo en el que en varios
episodios se realiza un seguimiento de una persona o colectivo
utilizando técnicas tanto de documental como de las series de ficción.
Antena 3 está preparando una docuserie sobre el caso Asunta.

Como hemos visto, los nuevos géneros (todos ellos en torno a la telerrealidad)
están tan presentes en nuestra televisión que merecen un capítulo aparte. No
obstante, la clasificación tradicional de los géneros televisivos (muy
semejante a la que vimos de los géneros radiofónicos) es la siguiente:

Suele decirse que la televisión pretende informar, formar y entretener. En


la actualidad, predomina la información y, sobre todo, el entretenimiento con
la hibridación como tendencia más extendida. Pero, en cualquier caso, esas
tres premisas permiten clasificar los géneros televisivos del siguiente modo:

1) INFORMATIVOS: Flash, Telediario, Ediciones especiales (eventos de


importancia), Opinión (tertulias, debates), Reportajes de actualidad (Informe
semanal, En portada), Entrevistas, El tiempo, Deportes.

2) CULTURALES/DIVULGATIVOS: Documentales (no necesariamente de


actualidad), Musicales, Educativos y otros especializados en viajes, cine, arte,
etc.

3) FICCIÓN: series (entre ellas la “sitcom”: comedia de situación en la que se


repite el espacio y los personajes y en la que se suelen incluir risas grabadas,
telenovelas, miniseries…), Tv movies o Telefilmes ( películas producidas
específicamente para televisión; no se estrenan en cine) y cine.

4) ENTRETENIMIENTO: Magacines, galas, concursos, talk-shows


(testimonios en plató o entrevistas como En tu casa o en la mía; cuando se
emiten en torno a la medianoche se les llama Late show, como Late motiv, de
Buenafuente en #cero) o Reality, en todas sus variedades (ver más arriba).

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