UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DEL PERÚ

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES

TAREA ACADÉMICA 1

TRABAJO MONOGRÁFICO

“LAS MEDIDAS CAUTELARES PARA FUTURA EJECUCIÓN FORZADA”

Curso:
Derecho Procesal Civil II

Docente:
Abog. Torres Anchante, César Eduardo

Sección:
13155

Aluma:
Aquije Yarasca, María Grazzia

Código de Alumna:
U20217349

Ica, 07 de octubre del 2022

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INTRODUCCIÓN

Se tiene de conocimiento que las medidas cautelares tienen por finalidad salvaguardar
la tutela judicial efectiva. Entendiéndose por esta última, como el derecho que tiene toda
persona en el ejercicio o defensa de sus derechos o intereses, en relación a un debido
proceso, quiere decir, que ninguna persona puede ser ajena ni desviada de la
jurisdicción predeterminada por la ley, así como tampoco puede ser sometida a un
procedimiento distinto de los ya establecidos. De la misma manera, no puede ser
juzgada por órganos jurisdiccionales de excepción, y menos ser juzgada por comisiones
especiales, sea cual fuese su denominación. Como señala Jesús Gonzales Pérez (1989,
p. 27), “el derecho a la tutela jurisdiccional es el derecho de toda persona a que se le
haga justicia; a que cuando pretenda algo de otra, esta pretensión sea atendida por un
órgano jurisdiccional, a través de un proceso con unas garantías mínimas”.

Partiendo desde ese punto, es imperante indicar que el presente trabajo versa sobre las
medidas cautelares para una futura ejecución forzada, la cual para ser comprendida
requiere que se conozca de donde proviene. Es así que tenemos, que las medidas
cautelares son una concreción del Derecho constitucional de la tutela judicial efectiva.
Como bien se reconoce este Derecho no se encuentra presente solo al inicio del
proceso, sino que también se manifiesta durante el desarrollo del mismo y en su etapa
final, el de la ejecución. Asimismo, se debe hacer mención a la tutela cautelar, la cual
es una de las formas que adopta la tutela jurisdiccional como deber de Estado; en tal
sentido, garantiza la efectividad de las tutelas jurisdiccionales de cognición y ejecutiva
para asegurar anticipadamente el óptimo rendimiento de éstas, finalidad que se extiende
a las pretensiones tramitadas en procesos no contenciosos. Piero Calamandrei explica
que, “la tutela jurisdiccional cautelar está destinada, más que a hacer justicia, a dar
tiempo a la justicia de cumplir eficazmente su obra”. En esa misma línea, también se
describe al proceso cautelar, el mismo que es aquel proceso contencioso cuya finalidad
está destinada a garantizar la eficacia de una decisión jurisdiccional dictada en proceso
contencioso o no contencioso. Se materializa a través de medidas asegurativas,
conservativas, transformativas y anticipatorias. El proceso cautelar se usa para indicar
el desenvolvimiento de la función jurisdiccional cuando se dirige a emitir decisiones
destinadas a garantizar la eficacia de una pretensión principal.

De lo expuesto anteriormente se desprenden las siguientes interrogantes: ¿Qué son las

medidas cautelares? ¿Cuáles son sus características como tal? ¿En cuántos tipos se
divide? ¿De dónde proviene las medidas cautelares para futura ejecución forzada?
Dichas preguntas serán absueltas al pasar al marco teórico del presente trabajo, con el

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fin de poder arribar a una conclusión clara y poder comprender mejor este tema, que
resulta muy importante en la etapa del proceso civil.

MEDIDAS CAUTELARES

El proceso cautelar tiene como fin garantizar la eficacia de los procesos de conocimiento
y ejecución, además de la conservación del orden y de la tranquilidad pública,
impidiendo cualquier acto de violencia o que las partes quieran hacerse justicia por sí
mismas durante la sustanciación del proceso, prescindiendo del órgano jurisdiccional
(Ledesma 2008: 9).

Asimismo, las medidas cautelares son reconocidas como la modalidad de la actividad

judicial que tiene por finalidad el resguardo de los bienes o situaciones extraprocesales
con trascendencia jurídica que, por falta de custodia, podrían frustrar la eficacia de la
sentencia a expediente (Cas. 2479-2014, Callao). Dicho en otras palabras, se podría
entender que las medidas cautelares son disposiciones judiciales que se dictan para
garantizar el resultado de un proceso y asegurar el cumplimiento de la sentencia,
evitando así la frustración del derecho del peticionante derivada de la duración del
mismo (Martínez, 1990, pp. 27 – 29).

De igual forma, es sabido que las medidas cautelares se deben decretar y ejecutar en
relación con el proceso al cual se hallan referidas, por lo que se deben hacer ciertas
consideraciones. Piero Calamandrei relaciona las medidas cautelares con el principio
que “el proceso tiene que garantizar, a quién tenga derecho y dentro de lo posible
prácticamente, todo y justo lo que el mismo tiene derecho a conseguir”, y llega a
considerar “la acción aseguradora” como práctica general. Asimismo, Calamandrei
distingue las medidas sumariales anticipadas, medidas dirigidas a asegurar la ejecución
forzada, medidas dirigidas a adelantar las disposiciones decisorias y la caución
procesal. Es así, que la teoría de Calamandrei sostiene eficazmente la conclusión que,
con excepción del caso del secuestro, las demás medidas cautelares entran en la
categoría de los procedimientos preventivos y así, por consiguiente, en la limitación del
principio de instrumentalidad.

Haciendo un recuento del último punto señalado, se debe mencionar que el dictado de
una medida cautelar supone una decisión jurisdiccional con las características de
provisoriedad, instrumentalidad y variabilidad. Entendiéndose que es provisoria porque
tiene una duración limitada con el tiempo a diferencia del proceso y porque está
relacionada con el fallo definitivo. Esto es que, emitida la sentencia desaparece

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automáticamente la medida cautelar. Por otro lado, es instrumental porque el carácter
de la medida recae en que nace al servicio del proceso definitivo. Esta siempre
subordinada a un fallo definitivo, aun cuando preceda al proceso. Lo que significa que
se orienta más que actuar el derecho, a conseguir o asegurar la eficacia práctica de la
sentencia. Del mismo modo, es variable porque se refiere a un aspecto consecuencial,
que responde a un aspecto más trascendente, que es que las resoluciones cautelares
se dictan con base a ciertas circunstancias, cuya variación, tienen una consecuencia en
la propia resolución que ha sido conferida (Priori, 2016, p. 696). Ello significa, que para
conceder o denegar una medida cautelar el juez ha tenido que evaluar algunas
circunstancias que al momento en que concedió o denegó la medida constituían o no, a
su juicio.

MEDIDAS CAUTELARES PARA FUTURA EJECUCIÓN FORZADA

Dentro de los tipos de medida cautelar regulados en el Código Procesal Civil se

encuentran:

• Las medidas para futura ejecución forzada.

• Las medidas temporales sobre el fondo.
• Las medidas innovativas
• Las medidas de no innovar
• Las medidas genéricas.

De las cuales se desarrollará las medidas cautelares para futura ejecución forzada.

Estas medidas tienen como propósito asegurar la ejecución, es decir, afectar algún bien
o derecho del ejecutado para el momento en que tenga que procederse a la realización
coactiva del derecho contenido en una sentencia o en un título ejecutivo sometido a
ejecución judicial. Como dice específicamente Monroy Gálvez, “impiden que los bienes
que van a estar sujetos a futura ejecución se dispersen o desaparezcan”. Estas medidas
en nuestra legislación y por lo general en la legislación extranjera son el embargo, el
secuestro y la anotación de demanda conocida también como anotación de litis.

1) EMBARGO

El embargo se define como la afectación jurídica de uno o varios bienes del obligado o
presunto obligado, que se encuentren o no en su poder, para asegurar el cumplimiento
de la obligación exigida, una vez que sea reconocida por sentencia firme. La afectación
de los bienes puede hacerse efectiva tanto para el pago de un crédito reclamado en un

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proceso ya iniciado, como para el pago de un crédito que se reclamará en un proceso
futuro.

Es una medida cautelar que resulta procedente en casi toda clase de procesos, aunque
exige para su procedencia que la pretensión principal sea apreciable en dinero.
Asimismo, es importante precisar que el embargo nunca supone la desposesión de un
bien, pues ello, a contexto del Código Procesal Civil, corresponde al secuestro, que es
una medida cautelar distinta. Conforme a nuestro Código Procesal Civil, las formas de
embargo son:

1.1) Embargo en forma de Depósito

Comúnmente se entiende al embargo en forma de depósito como la medida con la que

se produce la desposesión física de los bienes del embargado. Se tiene la idea de que
este tipo de embargo es aquel en virtud del cual, a fin de garantizar el cobro del crédito,
se incautan y son entregados a un tercero determinados bienes del obligado, en
diligencia ejecutada en el domicilio de este último. Entonces, se puede decir que el
embargo en forma de depósito es la afectación jurídica de los bienes del deudor, los
mismos que quedan en poder del depositario.

Cabe resaltar que, al adquirir la calidad de depositario, el obligado asume distintos

deberes, como el de conservar los bienes en depósito o custodia en el mismo estado en
que los recibe, en el local destinado para ello y a la orden del juzgado. Asimismo, debe
permitir el acceso permanente a los bienes en depósito a fin que puedan ser objeto de
observación, y dará cuenta inmediata de todo hecho que pudiera significar su alteración.
Responderá civil o penalmente por el incumplimiento de sus obligaciones. No obstante,
el obligado puede decidir no aceptar su designación como depositario, en cuyo caso se
hará efectivo el secuestro de sus bienes, nombrándose a un tercero depositario de los
mismos, de preferencia un almacén legalmente constituido.

El objeto de un embargo en forma de depósito puede ser tanto bienes muebles como
inmuebles, pero principalmente deberán ser bienes no inscritos, pues en caso que el
obligado cuente con bienes inscritos, lo más adecuado será efectuar un embargo en
forma de inscripción. Así pues, conforme al artículo 650 del Código Procesal Civil,
cuando se trate de un inmueble no inscrito, el embargo podrá limitarse al bien mismo,
esto es, con exclusión de sus frutos, debiendo necesariamente nombrarse como
depositario al obligado, quien deberá poseer el bien de forma inmediata. Se encuentra
regulado en el artículo 649 del Código Procesal Civil.

1.1.1) Ejemplo de embargo

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Jesús Martínez identificado con DNI N° 45432169, es una persona de 37 años, es
trabajador independiente y tiene su negocio de comida, gracias al buen ingreso que tuvo
en el año 2019, decidió sacarse un préstamo bancario y así poder comprarse la
camioneta que ostenta ahora, la cual es marca TOYOTA con placa de rodaje ABX –
819. Cuando el solicito dicho crédito, no imagino que sucedería el cierre indefinido de
los servicios de comida por la pandemia COVID – 19. Este hecho lo perjudicó y no
canceló las cuotas pactadas con la Rehabilitadora. En el año 2021, la acreedora
interpuso una demanda de obligación de dar suma de dinero por el monto de 10,000.00
soles, que era lo adeudado a la fecha, hacia el deudor Jesús Martínez. Asimismo, la
acreedora solicitó una medida cautelar en la modalidad de embargo, a fin de asegurar
el cumplimiento de pago de dicha obligación.

1.1.2) Ejemplo de embargo en forma de Depósito

Mercedes Ibala solicita al juez que se dicte una medida cautelar de embargo en forma
de depósito sobre la Colección de muebles de caoba (08 juegos de muebles) del
carpintero y diseñador Giuseppe Durán Souza. Estando su local ubicado en La
Angostura, Tamarix 400, departamento, provincia y distrito de Ica. Dichos muebles son
bienes del obligado José Raúl Mendoza López, el mismo que deberá constituirse como
depositario de dichos juegos de muebles. Asimismo, la afectación de los muebles de
caoba por el proceso de obligación de dar suma de dinero, se da hasta por la suma de
S/. 10,000.00.

1.2) Embargo en forma de Inscripción

Según la Doctora Marienella Ledesma (2008, p. 234), “el embargo en forma de

inscripción se orienta a inmovilizar jurídicamente los bienes del deudor para evitar que
estos se dispersen. En el caso específico del embargo en forma de inscripción, el bien
está registrado y, por tanto, en atención al principio de la publicidad, se pone en
conocimiento erga omnes la afectación del bien por un monto determinado. Ello no
impide la transferencia del bien, sólo comunica la existencia de la medida cautelar, de
tal manera que, quien lo adquiere asume los efectos jurídicos de dicha medida”. En otras
palabras, se puede decir que es una medida cautelar de naturaleza civil que puede
dictarse cuando la pretensión es apreciable en dinero, lo que implica la incorporación en
los registros públicos del monto ejecutable de los bienes afectados. De esta forma, se
asegura la posibilidad de ejecutar los bienes ante un fallo que declare fundada la
pretensión civil, sin necesidad de ordenar su traslado y prohibir su disposición.

Entonces, cuando el deudor cuenta con uno o más bienes embargables, se debe
solicitar que se trabe un embargo en forma de inscripción. Aquí la medida se ejecuta

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mediante su inscripción en la partida o ficha registral del bien embargado, en el rubro
destinado a los gravámenes, debiendo indicarse el monto de la afectación. No
requiriéndose el nombramiento de un depositario. No obstante, este tipo de embargo no
impide la enajenación del bien, pero el sucesor asume la carga hasta por el monto
inscrito, y la certificación registral de la inscripción se agrega al expediente.

Se resalta también, que el objeto del embargo en forma de inscripción puede ser tanto
bienes muebles como inmuebles, siempre y cuando éstos estén inscritos en registros.
Cabe precisar que la afectación aquí sólo incide sobre el bien mismo y no sobre sus
frutos o productos. Se encuentra regulado en el artículo 656 del Código Procesal Civil.

1.2.1) Ejemplo de embargo en forma de Inscripción

El día 28 de enero de 2021, el dueño de la empresa Petrolera TRAS PETROL José Luis
Muñoz Escalante, interpuso una demanda de obligación de dar suma de dinero contra
la empresa de Transportes M&M S.A.C., en razón de que este último dueño en una de
sus contrataciones no hizo el pago debido como estaba pactado en el acuerdo. Por lo
que, a fin de que por mandato judicial se cumpliese con pagar la deuda ascendente a la
suma de $ 10,000.00, se dio la demanda. Así pues, mediante Resolución N° 03 se
resolvió admitir a trámite la demanda sobre obligación de dar suma de dinero. No
obstante, habiendo pasado 6 meses de la fecha de inicio (15 de julio de 2022) no se ha
llevado a cabo ningún trámite. En razón a ello, José Luis Muñoz con la finalidad de
garantizar el pago adeudado hacia su empresa, solicitó al Juez que dicte la medida
cautelar de embargo en forma de inscripción respecto de los vehículos que poseía la
empresa M&M S.A.C. Entre los cuales se detalla: Camión de marca Volkswagen, de
Placa de Rodaje G8W – 846, Camión de marca Volkswagen, de Placa de Rodaje H6F
– 245, Camión de marca Volvo, de Placa de Rodaje A1P – 713, Camión de marca Volvo,
de Placa de Rodaje Z2C – 839, Camión de marca Mitsubishi, de Placa de Rodaje W6F
– 572, Camión de marca Foton, de Placa de Rodaje T4H – 317. Por el monto de
afectación requerido que deberá concederse hasta por $ 10,000.00.

1.3) Embargo en forma de Retención

Este tipo de embargo se da cuando el deudor no tiene en su poder bienes embargables,

inscritos o no, o en su defecto, los bienes que posee no son suficientes para garantizar
el pago total de la deuda. Sin embargo, él puede ser titular de algún crédito frente a un
tercero, o cuenta con algún bien que le pertenezca y que temporalmente se encuentra
detentado por otra persona. Es aquí, donde la normatividad procesal permite en ese
supuesto afectar dichos bienes y créditos, a través de la medida cautelar de embargo
en forma de retención.

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A través de la retención se ordena a un tercero que suspenda los pagos que debía hacer
al embargado o que retenga como depositario un bien perteneciente a este último.
Monroy Gálvez (1987, p. 52) señala que es presupuesto para la ejecución del embargo
en forma de retención que el bien a embargar se encuentre en posesión de un tercero,
que a su vez es deudor del embargado. Sin embargo, precisa también que en este caso
la utilización del vocablo deudor no es excesivamente rígida: “Así, pues, si mantenemos
dinero en nuestra cuenta corriente bancaria, de alguna manera es posible concebir que
el banco es nuestro deudor, por cierto, no en la acepción obligacional del término”.

Se hace mención también a las responsabilidades asumidas por el tercero retenedor,

pues el Código Procesal Civil regula dos supuestos específicos. En primer lugar, la
norma señala que, si el tercero al ser intimado para la retención niega la existencia de
créditos o bienes, será obligado a pagar el valor de éstos al vencimiento de la obligación,
sin perjuicio de la responsabilidad penal a que haya lugar. Y, en segundo lugar, se regula
lo referido al llamado “doble pago”, esto es, que si no obstante la orden de retener, el
tercero paga directamente al embargado, quedará obligado a efectuar nuevo pago a la
orden del juzgado.

Entonces, cuando la medida recae sobre derechos de crédito u otros bienes en posesión
de terceros, cuyo titular es el afectado con ella, puede ordenarse al poseedor retener el
pago a la orden del Juzgado, depositando el dinero en el Banco de la Nación.
Tratándose de otros bienes, el retenedor asume las obligaciones y responsabilidades
del depositario, salvo que los ponga a disposición del Juez. Todo lo mencionado, se
encuentra regulado en el artículo 657 Código Procesal Civil.

1.3.1) Ejemplo de embargo en forma de Retención

El día 07 de mayo de 2021, Liseth Castro Rojas, encargada del área de cobranza de la
empresa MERCAJE S.A.C, solicitó la medida cautelar de embargo en forma de
retención sobre las cuentas bancarias. Siendo estas: cuenta corriente de soles de BCP
380 – 0748888010, cuenta corriente de soles de INTERBANK 025 – 8952470025,
cuenta corriente de soles de BBVA 411 – 5874368541 del imputado Lorenzo Martínez
Palomino, el mismo que presenta una deuda ascendiente a S/. 15,000.00, para lo cual
solicitó en todos los bancos la retención del dinero de las cuentas señalados en el Banco
de la Nación a favor de la empresa demandante, debiendo depositarse en dicho banco,
puesto que desde hace 8 meses el imputado no ha cumplido con abonar la suma que
se adeuda. Por ello, se ha dado inicio a la ejecución forzada, interponiendo la presente
medida debido a la existencia de un peligro de evadir su responsabilidad.

1.4) Embargo en forma de Intervención en Recaudación

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El embargo en forma de intervención como tal, se da ante bienes embargables que en
su conjunto conforman una actividad comercial, esto es, frente a empresas. Es así, que
este tipo de embargo supone el nombramiento de uno o más “interventores”, quienes
son las personas que a fin de garantizar el pago del crédito podrán intervenir en la
actividad de una empresa, pero sin afectar su operatividad. Asimismo, existe dos
modalidades de intervención: en recaudación y en información.

En el caso de embargo en forma de Intervención en Recaudación, se hace referencia a

que el interventor cumple la función de recaudar los ingresos de una empresa, que
puede ser persona natural o jurídica, o de una persona jurídica sin fines de lucro. Esto
no supone la paralización de la actividad de la empresa, ya que esto podría generarse
de ordenarse otro tipo de medida cautelar, como un secuestro.

La participación del interventor se restringe al retiro periódico de los ingresos, conforme

se haya dispuesto en la resolución cautelar, los mismos que deberá poner a disposición
del juzgado en un lapso de tres días, consignándolos a la orden de éste en el Banco de
la Nación. Se manifiesta también que el interventor responderá civil y penalmente por el
manejo que dé al dinero que recaude, asimilándose su situación a la de un depositario.
Asimismo, se obliga al interventor a verificar el funcionamiento y conservación de lo
intervenido, llevar el control de los ingresos y de los egresos de la empresa, proporcionar
de los fondos que recauda lo necesario para la actividad regular de la empresa, informar
en los plazos que le haya fijado el juzgado el desarrollo de la intervención y, sobre todo,
informar sobre aspectos que pudiesen resultar perjudiciales para el embargante, como
la falta de ingresos o la obstrucción de sus labores. Este tipo de embargo se encuentra
regulado en el artículo 664 del Código Procesal Civil, el cual permite que en caso la
intervención en recaudación resulte improductiva, la medida pueda variarse a una de
secuestro, teniendo por consiguiente la clausura del negocio.

1.4.1) Ejemplo de embargo en forma de Intervención en Recaudación

Julieta Ormeño Vela, responsable del área de cobranza de la empresa MINSUR,

empresa encargada del transporte de frutas y verduras hacia el sur, solicitó el día 20 de
marzo de 2018 interponer la medida cautelar de embargo en forma de intervención en
recaudación en contra de la micro empresa de abarrotes JUSTO, a cargo de Julio
Mamani Bautista, pues existe una deuda pendiente de S/. 6,000.00 desde el mes de
octubre del año 2017. Dicha persona recibió mercancía durante los meses del plazo
señalado, y al no haber alguna iniciativa de cancelación, generó que se interpusiera
dicha medida, con la única finalidad de recabar directamente los ingresos propios sobre

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el movimiento económico de la micro empresa, asegurando así el pago efectivo del
monto adeudado.

1.5) Embargo en forma de Intervención en Información

Esta medida consiste en el nombramiento de uno o más interventores, que asumirán la

obligación de informar al juez, por escrito, todo lo relativo al movimiento económico de
la empresa intervenida y respecto de otros asuntos que interesen a la materia
controvertida. Asimismo, al igual que en la intervención en recaudación, se debe
informar de cualquier hecho que pueda significar un perjuicio para el titular de la medida
cautelar o que importe la obstrucción del desarrollo de sus labores. Y, de igual forma, el
interventor informador responderá civil y penalmente por la veracidad de la información
que ofrezca.

Básicamente, el caso de embargo en forma de Intervención en Información se da

cuando, a fin de asegurar el cumplimiento de la obligación, resulte indispensable obtener
información respecto del manejo económico de la empresa deudora. Para lo cual se
debe conocer el estado de los bienes que se negocian y qué operaciones se realizan,
para poder ejercer algún tipo de control sobre su actividad comercial. Es en dichos
casos, cuando se solicita se trabe este tipo de embargo, empero, esta medida no supone
por sí solo el cumplimiento de una obligación, ya que lo único que se obtiene es
información respecto al manejo de la empresa, por lo que debe ser complementada con
otro tipo de medidas cautelares.

1.5.1) Ejemplo de embargo en forma de Intervención en Información

Carolina Montalvo Linares, jefa encargada del área de ejecución coactiva del SAT,
solicitó el día 21 de diciembre de 2019, la aplicación de la medida cautelar de embargo
en forma de intervención en información en contra de Pedro Parodi Toledo, por la deuda
tributaria que mantiene al no haber realizado los pagos correspondientes a los años
2017, 2018, y el actual 2019 en relación al impuesto predial. Dicho deudor, es dueño de
un restaurante y de una pequeña empresa de abarrotes, por tal motivo pide dicha
medida para verificar sus ingresos y movimientos bancarios, a fin de poder garantizar el
cumplimiento de dicha obligación tributaria.

1.6) Embargo en forma de Administración

Ocurre cuando para asegurar el cumplimiento de la obligación, resulta insuficiente

afectar sólo los ingresos de la empresa deudora, y más insuficiente adquirir información
de su manejo económico, debido a que la empresa ya intervenida en recaudación, o la
que recién será intervenida, no está generando los ingresos suficientes para garantizar

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la satisfacción del crédito, en razón a la mala forma como está siendo administrada, por
lo que resulta de mucha utilidad el embargo en forma de administración.

Según el Código Procesal Civil, se pueden dar dos modalidades de embargo en

administración: el embargo en forma de administración de bienes y el embargo en forma
de intervención en administración. El primero incide sobre cualquier tipo de bien
fructífero. La medida tiene por finalidad que la administración del bien sea puesta al
cuidado de una persona denominada administrador, quien deberá recaudar los frutos
obtenidos y ponerlos a disposición del juzgado respectivo. Asimismo, estará obligado a
realizar los gastos ordinarios y los de conservación del bien, pagar tributos u otras
obligaciones legales que hubiere, e informar al juez lo que éste le exija referente a su
gestión. Y el segundo, está diseñado para el caso de empresas, ello significa que en
este supuesto el administrador o administradores asumirán la representación y gestión
de la empresa deudora afectada. Al igual que en la anterior modalidad respecto a las
obligaciones señaladas, el administrador en la intervención en administración, deberá
cumplir con gerenciar la empresa embargada con sujeción a su objeto social, satisfacer
las obligaciones laborales que correspondan, formular los balances y las declaraciones
juradas dispuestas en la ley, y, en general, cumplir cualquier otro tipo de obligación que
le establezca la normatividad vigente.

El artículo 670 del Código Procesal Civil establece que ha pedido fundamentado del
titular de la medida, se puede convertir la intervención en recaudación en intervención
en administración.

1.6.1) Ejemplo de embargo en forma de Administración

La empresa química farmacéutica GERMAN CHEMISTRY tiene como representante

legal al señor Luis Morales García, quien con fecha 28 de noviembre de 2021 se ve
obligado a interponer una demanda de obligación de dar suma de dinero contra la botica
farmacéutica ROSARIO, la cual tiene como dueña a Belén Santi Llanos, por la suma de
$ 15,000. Solicitando así, un embargo en forma de administración sobre la botica
farmacéutica por la suma ya mencionada, con la finalidad de recaudar los frutos que
produzca la referida botica, la misma que estará a cargo de la Administradora Mercedes
Buleje Pino, quien de manera excluyente contará con la representación de la ejecutada
Belén Santi Llanos ante el Ministerio de Salud del Perú, autorizándolo a efectuar, iniciar
y/o continuar cualquier tipo de procedimiento administrativo relacionado con la
explotación y funcionamiento de la empresa. Hasta que Belén Santi Llanos cumpla con
pagar a la ejecutante la suma total del dinero correspondiente.

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 2) SECUESTRO

Consiste en la entrega de un bien mueble o inmueble, lo cual se hace en calidad de

depósito o administración, según la naturaleza o la utilización del bien, a nombre de la
autoridad o funcionario que lo decretó, de manera que el secuestro constituye un acto
procesal y judicial. Por el secuestro, el depositario del bien adquiere la tenencia de la
cosa con cargo de custodia o administración y con la obligación de restituirla por orden
judicial, tiene como características la existencia de una orden judicial; supone la entrega
material del bien afecto con la medida que hace el funcionario a la persona destinada; y
queda fuera del comercio (López, 2017, pp. 25 – 26).

Según el artículo 643 del Código Procesal Civil, cuando el proceso principal tiene por
finalidad concreta la dilucidación del derecho de propiedad o posesión sobre
determinado bien, la medida puede afectar a éste, con el carácter de secuestro judicial,
con desposesión de su tenedor y entrega a un custodio designado por el Juez.
Asimismo, cuando la medida tiende a asegurar la obligación de pago contenida en un
título ejecutivo de naturaleza judicial o extrajudicial, puede recaer en cualquier bien del
deudor, con el carácter de secuestro conservativo, también con desposesión y entrega
al custodio. Se aplican al secuestro, en cuando sean compatibles con su naturaleza, las
disposiciones referidas al embargo.

2.1) Secuestro Judicial

El secuestro judicial es una medida cautelar de conservación de un bien específico.

Como tal garantiza el mantenimiento de la integridad del bien de litis hasta el final del
proceso, para hacer posible la ejecución específica de la sentencia. La medida se
instrumentaliza desapoderando al poseedor del bien y entregando a un tercero, quien
se convierte en custodio (Ledesma, 2004, p. 174).

Básicamente, la idea central en este tipo de medida es que la acción que se ejercite en
el proceso principal esté dirigida a obtener la entrega de una cosa específica o
determinada, como consecuencia de haberse dilucidado el derecho de propiedad o
posesión sobre un bien determinado. No se trata de pretensiones dinerarias sino de
declarativas de derechos. El secuestro judicial o llamado secuestro autónomo tiende a
preservar la integridad o evitar el uso de la cosa que constituye materia de un litigio
actual o futuro y recae por lo tanto sobre el objeto mediato de la pretensión principal ya
interpuesta o que se ha de interponer (Ledesma, 2004, pp. 174 – 175).

Entonces, el acto de desposesión en esta medida recae justamente sobre el bien que
es materia de la litis, cuando lo que se está discutiendo en el proceso, es a quién le

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corresponde el derecho de propiedad o posesión de un determinado bien, por lo cual
este último es quitado a su tenedor y entregado a un custodio designado por el juez.

2.1.1) Ejemplo de Secuestro Judicial

El día 20 de octubre de 2019, Miguel Aquije Yarasca solicita que se dicte una medida
cautelar de secuestro judicial contra Leonel Martínez Palomino, sobre el bien mueble
(camioneta 4X4, de marca TOYOTA, con placa de rodaje B8R – 254). Con la finalidad
de que se dé la desposesión de su tenedor y se haga entrega al custodio que designe
el Juez para garantizar la eficacia de la sentencia y evitar un perjuicio irreparable al
solicitante. Así pues, la medida cautelar se solicita con el propósito de asegurar el
proceso de demanda de obligación de dar suma de dinero, puesto que la presente
medida se da en base al monto de S/. 100,000.00. Dicho monto solicitado cubrirá los
intereses de ley, ya que, con fecha 25 de agosto de 2018 se realizó el préstamo
correspondiente equivalente en la suma de S/. 85,000.00, el cual fue avalado por el
pagare firmado por el mismo Leonel Martínez. Sin embargo, a pesar del tiempo
trascurrido, dicha deuda no fue pagada, obligando pues a Miguel Aquije Yarasca a
interponer este tipo de medida, puesto que, siendo el pagare un título ejecutivo, y siendo
el vehículo el único bien jurídico con que cuenta el obligado, y con la posibilidad de que
este pueda ser enajenado de cualquier forma, representa un peligro inminente en el
cumplimiento de la obligación antes mencionada, debido a que si transcurre más tiempo
de lo previsto, el deudor puede disponer de este bien, y podría hacerse inejecutable
dicha sentencia.

2.2) Secuestro Conservativo

En el secuestro conservativo, en cambio, el acto de desposesión se hace efectivo contra

uno o varios bienes del deudor, igualmente con entrega al custodio designado, pero ello
en garantía de una obligación cualquiera, cuyo pago ha sido ordenado en un mandato
ejecutivo.

El secuestro conservativo es procedente cuando la pretensión sea de dar suma de

dinero, es allí donde el demandante (acreedor) podrá solicitar el secuestro de los bienes
del deudor para proceder posteriormente al remate de los mismos y poder cobrar el
crédito que se le adeuda. Este secuestro es parecido al embargo en cuanto afecta al
bien o bienes del deudor, solo que es en mayor medida más gravoso, ya que genera la
desposesión de los bienes al deudor y su entrega al custodio. (Sevilla, 2016, p. 21). En
otras palabras, en el secuestro conservativo también habrá desposesión de un bien y
su posterior entrega a un custodio hasta que culmine un proceso de dar suma dinero.

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En caso el acreedor resulte vencedor podrá cobrarse la deuda impaga con el monto
producto del remate del bien secuestrado.

2.2.1) Ejemplo de Secuestro Conservativo

Carmen Luisa Angulo Gutiérrez, representante del área de ejecución coactiva del SAT,
solicitó el día 15 de marzo de 2022, después de haberse cumplido el plazo determinado
para que el obligado tributario cumpla con lo que se le requirió, la aplicación de la medida
cautelar de secuestro conservativo de sus bienes en contra de María Luisa Fernández
Jurado, por la deuda tributaria que mantiene al no haber realizado los pagos
correspondientes a los años 2019, 2020, y 2021 en relación al impuesto predial. Dicha
deudora en su domicilio presenta dos televisores de 55 pulg marca SAMSUNG, un
equipo de sonido marca SONIC, tres juegos de muebles de cedro, una refrigeradora
inteligente marca SAMSUNG. Asimismo, tiene a su nombre el vehículo (auto) de marca
SUZUKI con placa de rodaje G7J – 563. Los mismos que se solicitan para la
desposesión de su tenedor, a fin de entregarlos al custodio respectivo para garantizar
la eficacia de la sentencia a emitirse y evitar el perjuicio irreparable al solicitante. La
presente medida cautelar tiene por finalidad asegurar el cumplimiento del pago de la
obligación tributaria.

2.3) Secuestro Vehicular

El Decreto Legislativo N° 1190, norma que regula el secuestro conservativo, estipula

como primera medida la incorporación del artículo 312-A al Código Procesal Penal. En
esta, se prevé que el Fiscal de oficio o a solicitud de parte, podrá requerir al juez el
secuestro conservativo de vehículos motorizados del imputado o del tercero civilmente
responsable, que implica la desposesión física del bien y su entrega a un custodio.

Referente a la materia procesal civil, en el artículo 647 se tipifica que, el vehículo

sometido a secuestro este internado en almacén de propiedad o conducido por el propio
custodio, accesible al afectado o veedor, si lo hay. El vehículo no podrá ser retirado sin
orden escrita del juez de la medida. Mientras está vigente el secuestro, no se levantará
la orden de captura o de inmovilización.

Asimismo, el demandante de la medida de secuestro debe ofrecer como custodio a una

persona que sea propietaria de almacén o que, como segunda opción, sea conductor
de un local que preste servicios de almacenaje o que pueda actuar como almacén. Está
terminantemente prohibido que el custodio o el ejecutante reiteren el vehículo del lugar
de almacenaje para realizar actos de uso personal e incluso prestar servicios de taxi,
como suele suceder con mucha frecuencia. Es así que, en estos casos, el Juez sin

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trámite alguno, dictará auto de secuestro conservativo sobre el vehículo identificado,
designando a un custodio, no pudiendo recaer tal designación en el propio imputado o
tercero civilmente responsable. La resolución podrá ser impugnada dentro del tercer día
de notificada sin efecto suspensivo.

2.3.1) Ejemplo de Secuestro Vehicular

El día 30 de mayo de 2018, Inés María Rodríguez Matta, solicita la aplicación de la

medida cautelar para futura ejecución forzada en la modalidad de secuestro vehicular,
sobre el vehículo blanco de marca Mercedes Benz, año 2016, con placa de rodaje D4B
– 786, el mismo que está bajo la propiedad de Emilio Muñante Peralta, para lo cual pide
que se disponga la correspondiente orden de captura o de inmovilización. La presente
medida cautelar se da hasta por el monto de S/. 80,000.00 soles, más intereses legales,
costas y costos, debido a que el demandado no ha cumplido con cancelar la deuda
puesta a cobro, recalcando que se le hizo reiterados requerimientos a fin de que cumpla
con la obligación pactada. Es por ese motivo, que se solicita dicha medida. De igual
forma, se le designa como custodio a Marcos Cárdenas Fuentes, propietario de la playa
de estacionamiento de vehículos “Mi morena”, el mismo que tiene su bien ubicado en la
calle Tacna N° 257, asimismo, el custodio se encuentra domiciliado en la Urbanización
San Isidro, Calle Lilias N° 410, debiendo el vehículo quedar internado en la mencionada
playa de estacionamiento.

CONCLUSIONES

En base a todo lo investigado se puede deducir que, las medidas cautelares son
dictadas para asegurar la satisfacción del interés de la parte que las ha solicitado. Dicho
interés radica en la pretensión de quien requirió la medida cautelar y que por el paso del
tiempo podría verse perjudicado indefinidamente.

Referente a las medidas cautelares para futura ejecución forzada, como su mismo
nombre lo indica, tienen como finalidad asegurar la ejecución, es decir, afectar algún
bien o derecho del ejecutado para el momento en que tenga que procederse a la
realización coactiva del derecho contenido en una sentencia o en un título ejecutivo
sometido a ejecución judicial. Dentro de ellas encontramos al embargo, secuestro y
anotación de demanda.

Ahora, se podrán solicitar embargos respecto de pretensiones que tengan por objeto la
entrega de un bien como el dar un bien mueble o inmueble ya que ambos son pasibles
de valorización económica. El embargo no solo se puede trabar en los procesos

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cautelares y en los procesos únicos de ejecución, sino también en las etapas de
ejecución correspondientes a las acciones de cognición, como el proceso de
conocimiento, abreviado, sumarísimo. De igual forma, la concesión del embargo al
acreedor, es decir la afectación de un bien o derecho del deudor, aunque esté en
posesión de tercero, presupone la existencia de una relación jurídica obligatoria entre
un deudor y acreedor, una obligación dineraria o valorizable en dinero, y los requisitos
generales de cualquier otra medida cautelar: peligro en la demora y verosimilitud en el
derecho (medio de prueba documental).

En cuanto al secuestro, se determina que es la entrega de un bien mueble o inmueble

a una persona designada, y se da cuando el proceso principal tiene por finalidad
concreta la dilucidación del derecho de propiedad o posesión sobre determinado bien.
Entre este encontramos al secuestro judicial, conservativo y vehicular. Entendiendo
pues, que en el primer tipo de secuestro habrá desposesión de un bien y su posterior
entrega a un custodio hasta que culmine un proceso. Lo mismo ocurre en el caso del
secuestro conservativo, ya que también habrá desposesión de un bien y su posterior
entrega a un custodio hasta que culmine un proceso de dar suma dinero. Y si el
vencedor resulta ganador, podrá cobrarse la deuda impaga con el monto producto del
remate del bien secuestrado.

Algo similar ocurre en el secuestro vehicular, pues se requiere al juez el secuestro

conservativo de vehículos motorizados del imputado o del tercero civilmente
responsable, que implica la desposesión física del bien y su entrega a un custodio. Esto
se da en base al objetivo que busca asegurar efectivamente las responsabilidades
pecuniarias derivadas de los delitos de lesiones u homicidios culposos, cometidos con
el uso de vehículos motorizados de servicio de transporte público o privado. Es por ello,
que el Poder Ejecutivo emitió en el diario oficial El Peruano, el Decreto Legislativo N°
1190, norma que regula el secuestro conservativo.

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