CB3 SSM La
CB3 SSM La
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Índice
6 E1. Escucho a Dios en su Palabra
Vi
al
Una experiencia de vida
¿Alguna vez has escondido algún objeto que sea muy valioso para ti?, o ¿has encontrado algo que parecía
un tesoro y que estuvo enterrado durante muchos años?
Círculo de amor
Dibuja lo que más llamó tu atención de la historia de Iwao, Xansu y su nieto Bonzi.
Para compartir
Vi
al
¿Es la Palabra de Dios un tesoro para ti?
Dios me habla
Escucho a Dios
Expreso mi fe
¿Qué le pides a Dios para ser tierra buena y que nada ni nadie destruya la semilla que Dios deposita en
tu corazón? ¿Cómo aprender a amar la Palabra de Dios y a cuidarla para que dé mucho fruto?
Escribe una petición a Dios en forma de oración:
Valoro
La tierra buena es la persona que recibe la Palabra de Dios con un corazón noble, generoso y perseverante.
Realiza las siguientes actividades para que pongas en práctica lo que has aprendido
en este encuentro.
1. Durante este mes, leeremos una cita bíblica antes de iniciar las clases.
2. Pregunta a tu familia: ¿qué importancia tiene la Palabra de Dios para ellos? Después, escribe sus
respuestas:
Vi
al
la Eucaristía
Una experiencia de vida
¿Cómo te sientes cuando estás a punto de recibir una noticia o un regalo que puede cambiar tu vida? ¿Has
recibido un regalo que te hizo sentir muy feliz?
Círculo de amor
Un regalo de cumpleaños
Hace unos meses, Ana María se accidentó cuando estaba paseando en su bicicleta y fue llevada de in-
mediato al hospital. Los médicos le informaron a la familia que Ana se había lesionado severamente la
columna vertebral.
El diagnóstico fue devastador, los doctores decían que Ana María tenía pocas posibilidades de volver a
caminar. Sin embargo, dijeron que por medio de una cirugía podría haber una pequeña esperanza.
La operación fue programada pocos días
después del accidente, sin embargo, coinci-
dió exactamente con su cumpleaños número
ocho. Ana estaba tranquila y con mucho áni-
mo de celebrar, por lo que pidió a sus padres,
hermanos y amigos que le dieran un sólo re-
galo: “estar con ella en el hospital”, pues su
cumpleaños siempre ha sido muy especial
para ella.
Todos llegaron a tiempo al hospital, antes de
que entrara a la sala de operaciones. Le lle-
varon regalos, decoraron la habitación y ella
les agradeció mucho esa emotiva celebración.
Pronto llegaron los médicos para llevarla a la
sala de cirugías. Ana María se despidió de su familia y amigos con una sonrisa que demostraba su fe en
que todo saldría bien.
Después de cinco horas en el quirófano, por fin salió el doctor y buscó a los padres de Ana. Mirándoles a
los ojos, les dijo: ¡Ana María ha recibido un gran regalo! ¡Volverá a caminar de nuevo!
Vocabulario
10
Elabora un collage que exprese los regalos que recibió Ana María el día que cumplió
ocho años.
3. Creo que hasta ahora, los mejores regalos que he recibido son…
Para compartir
11
Vi
al
Recibir a Jesús en la Eucaristía, ¿es un
gran regalo?
Dios me habla
Escucho a Dios
12
Expreso mi fe
Colorea la siguiente frase:
“ Te amo, JESÚS”.
Valoro
El acompañamiento de las Hermanas del colegio, a mis maestros y a mi familia en mi preparación para
mi Primera Comunión.
13
Vi
al
mis obras
Una experiencia de vida
¿Cuáles son las consecuencias de caminar o tratar de encontrar lo que buscamos cuando no tenemos la luz
necesaria? ¿Cómo te sentirías si no pudieras ver?
Círculo de amor
Vocabulario
14
Algunos poetas y escritores han comparado la luz con la música, con un poema e, incluso, con la alegría
de ver una puesta de Sol.
Lee las siguientes frases y, después, escribe con tus propias palabras una poesía o frase
que describa la importancia de la luz del Sol.
Observa la siguiente fotografía y subraya los sentimientos que consideras que expre-
sa este niño mientras está frente al Sol.
Paz Apatía
15
Vi
al
¿Cómo entra el amor de Dios
en mi corazón?
Dios me habla
Lee en tu Biblia la cita de Hechos 2, 1-3; descubre lo Los frutos o manifestaciones de la presencia del Es-
que les sucedió a los primeros seguidores de Jesús píritu Santo en nuestra vida son: alegría, paz, pa-
en el día de Pentecostés. ciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad,
El día de tu bautismo recibiste al Espíritu Santo y con amor y el dominio propio.
Él sus siete dones: fortaleza, consejo, inteligencia, El Padre Ramírez lo invocaba con la siguiente fra-
sabiduría, ciencia, temor de Dios y piedad. se: ¡Oh amor, oh amor, oh Santo Espíritu!
Escucho a Dios
En un momento de silencio, agradecemos a Dios por la presencia del Espíritu Santo a lo largo de nuestra
vida y le pedimos que siempre guíe nuestro caminar.
Mi círculo de armonía
Relaciona las columnas: une con una flecha los dones del Espíritu Santo con las
citas bíblicas que los mencionan.
1) Fortaleza a) “Te basta mi gracia, porque mi fortaleza se manifiesta en tu
debilidad”. 2 Corintios, 12, 9.
2) Consejo b) “El hijo sabio es la alegría de sus padres”. Proverbios 10, 1.
c) “Muchos son los planes en el corazón del hombre, más el
3) Inteligencia consejo del Señor permanecerá”. Proverbios 19, 20-21.
d) “El Señor nos mandó que observáramos todos los manda-
4) Sabiduría mientos y que practicáramos el temor de Dios, para no sepa-
rarnos nunca de Él”. Deuteronomio 6, 24.
5) Ciencia e) “¿Quién ha puesto Tu conocimiento en lo más íntimo de mi
ser, y ha dado a mi mente inteligencia?”. Job 38, 36.
6) Piedad
f) “Desecha los cuentos profanos y ejercítate para la piedad”.
1 Timoteo 4, 7.
7) Temor de Dios
g) “También había hecho producir el Señor Dios de la tierra todo
árbol deseable a la vista, el árbol de vida en medio del huerto,
y el árbol de la ciencia del bien y del mal”. Génesis 2, 9.
16
Valoro
Conozco y reconozco los dones del Espíritu Santo.
Con ayuda de tu maestro(a) relaciona las ilustraciones con cada uno de los dones del
Espíritu Santo colocando en el recuadro el número que le corresponde.
1. Sabiduría 2. Inteligencia 3. Consejo 4. Fortaleza
5. Ciencia 6. Piedad 7. Temor de Dios
17
Vi
al
Una experiencia de vida
¿De qué manera tu familia te demuestra su amor? ¿Cómo demuestras tu amor a los demás? ¿Crees que
es suficiente ver la apariencia física de una persona para conocerla?
Círculo de amor
Mi tía Rosita, es muy especial. Ella nos deleita los oídos con su hermosa voz cuando canta en las fiestas
familiares. Desde pequeña usa una prótesis de brazo y no le apena. ¡Ella es fantástica! Un día quise saber
qué fue lo que le sucedió, por qué tiene ese brazo… Se lo pregunté a mi mamá.
–Hace algunos años, tu tía iba camino a la escuela y, al cruzar por una avenida, un auto la impactó, lan-
zándola varios metros. En ese accidente su brazo quedó muy lastimado, los médicos no pudieron salvárselo
–dijo mi mamá.
–Ahhh… ¡Qué horror!, mamá –respondí angustiado.
–Sí, ¡fue una pesadilla!, para nosotros y más para tu tía. Estuvo hospita-
lizada varías semanas, se deprimió mucho y no quería ver a nadie, más
que a tus abuelos. Ya después permitió más visitas. En cuanto la dieron
de alta nos la llevamos a la casa –agregó mi mamá.
–Y luego qué pasó, ¿cómo la ayudaron a salir adelante? –pregunté.
–Amándola mucho, animándola, apoyándola. Siempre y en todo momen-
to la respetamos y la vimos con amor. Varios meses después le colocaron
el nuevo brazo –dijo mi mamá.
–¿Con amor, mamá?, ¿cómo es eso? –pregunté.
–Ver con amor, con el corazón... Cómo te explico… Cuando ves a alguien
consciente o inconscientemente ves si tiene o le falta algo, ya sea en la
ropa o en su cuerpo. Por ese motivo tu tía Rosita no quería ser vista por
sus amigos. Al decir que nosotros la veíamos con amor, quiero decir que la mirábamos a ella por ser ella.
No nos fijábamos en que ya no tenía su brazo o en su prótesis. Evitamos compadecerla en todo momento.
Las palabras de mi mamá me hicieron comprender que cuando miramos a las personas con amor, podemos
incluso cambiarles la vida.
18
Realiza en este espacio una composición acerca del amor que sientes por tu familia y
amigos. Puede ser escrita, con símbolos, emoticones…
Para compartir
19
Vi
al
¿Con qué podrías comparar el amor
de Dios?
Dios me habla
Jesús siempre tiene su mirada amorosa puesta en ti, sabe lo que necesitas, puedes acudir a Él con la segu-
ridad de ser escuchado. Cuando tengas alguna preocupación, ve a la capilla o algún lugar propicio y, en un
momento de silencio, preséntale tu oración con fe, humildad y confianza.
Escucho a Dios
20
“ Jesús me ve
con amor ”.
Expreso mi fe
Valoro
Pertenezco a un colegio donde vivimos el amor misericordioso de “Jesús”.
21
Vi
al
Una experiencia de vida
¿Cómo te sientes cuando alguien confía en ti? ¿Te es fácil confiar en los demás?
Círculo de amor
Responsabilidad: es el cumplimiento
de las obligaciones o cuidado al hacer
o decidir algo, es considerada un valor y
Vocabulario una cualidad del ser humano.
22
De acuerdo con la lectura, subraya las razones por las que Pedro se ha ganado la con-
fianza de sus papás, maestra y compañeros:
Cumple tus promesas y sé responsable. Sé el tipo de persona en la que otros puedan confiar.
Así como la Madre Reynalda y el Padre Agustín.
Para compartir
23
Vi
al
¿Dios confía en nosotros?
Dios me habla
A Dios también le gusta tener amigos y confiar en ellos. Eligió
a un hombre llamado Moisés para que fuera su amigo y le
confió una misión muy importante.
Dios se dio cuenta que el pueblo de Israel estaba sufriendo,
porque lo tenían como esclavo en Egipto. Entonces tuvo mise-
ricordia de su pueblo y lo liberó de la esclavitud. Por medio de
Moisés sacó de Egipto a los israelitas:
“El clamor de los israelitas ha llegado hasta mí. He visto tam-
bién cómo son oprimidos por los egipcios. Ve pues, yo te envío
al faraón, para que saques de Egipto a mi pueblo”. Éxodo 3,
9-10.
Dios les pidió que fueran fieles a sus Mandamientos, que no
tuvieran otro Dios fuera de Él. Los israelitas confiaban en el
amor de Dios: “Yo soy el Señor, tu Dios, el que te sacó de Egip-
to, país de la esclavitud. No tengas otros dioses fuera de Mí”.
Cfr. Éxodo 20, 2-3.
En el libro del Éxodo, hay un diálogo entre Dios y Moisés, en el que Dios considera a Moisés como un hom-
bre de confianza:
“Moisés dijo al Señor:
–Tú mismo me ordenaste: ‘Conduce a este pueblo’, pero no me dijiste a quién enviarías en mi ayuda y eso
que tú me habías dicho: ‘Eres mi hombre de confianza y gozas de mi protección’. Pues bien, si gozo de tu
protección, descúbreme, por favor, tus proyectos. Así te reconoceré y seguiré gozando de tu protección.
Considera, además, que esta nación es tu pueblo.
El Señor le respondió:
–Yo mismo te guiaré y te daré un lugar de descanso (…). Haré lo que me pides, porque gozas de mi protec-
ción y eres mi hombre de confianza”. Cfr. Éxodo 33, 1-17.
Escucho a Dios
Dios anhela que seamos sus amigos, es decir, personas de confianza, con las cuales pueda contar para
llevar a cabo su plan de salvación. Lo único que nos pide es que aprendamos a confiar en Él siempre y le
expresemos nuestras inquietudes y dificultades, como lo hacía Moisés. Escribiremos en una hoja blanca,
una acción que ofreceremos durante este mes, para cuidar nuestra amistad con Dios.
24
Isaías 40, 31
Deuteronomio 31, 6
Josué 1, 9
Expreso mi fe
Recemos juntos esta oración de San Francisco de Asís:
Valoro
Prestar ayuda cuando me Saber perdonar cuando nos Pensar sólo en mis gustos y
necesitan los demás. hemos disgustado. deseos.
25
Vi
al
de la Misericordia
Una experiencia de vida
¿Alguna vez has realizado un acto de servicio a alguien que necesitaba ayuda? ¿Cómo te sentiste al ayu-
dar? ¿Conoces a personas que entregan su vida para servir a otros?
Círculo de amor
Mi deseo es servir
Mi nombre es Rebeca. Mi papá se llama Alfredo, es oncólogo y trabaja en el Hospital infantil. Ayer cuando
llegó a casa se veía un tanto preocupado, nos pidió que hiciéramos una oración por sus pacientes, nos
explicó, a mi hermana y a mí que sus pacientes son niños que tienen una enfermedad muy agresiva y do-
lorosa, llamada cáncer, y puede ser mortal si no se trata a tiempo.
Nos comentó que las personas que padecen esa enfermedad dejan de realizar sus actividades cotidianas,
requieren de mucho cariño, apoyo y comprensión, especialmente de las personas cercanas a ellas.
Mi papá, por su especialidad, sólo atiende a niños. Afortuna-
damente muchos de ellos se han logrado salvar de esa enfer-
medad y tratan de seguir su vida con normalidad. Cuando mi
papá me explico lo que hace, me dio mucha tristeza saber que
hay muchos niños que sufren tanto. Y le pregunté: ¿Qué te
motivó a ser oncólogo pediatra?
Mi papá me dijo: –Rebeca, hija mía, es muy difícil comprender
lo que sufren estos pequeños y sus familias. Hace muchos años
decidí estudiar medicina y dedicarme a curar a los niños con
cáncer, porque tenía en mi corazón el deseo de servir y de po-
ner todos mis conocimientos al servicio de aquellos que sufren
tanto. Me gustaría que todos los niños con cáncer pudieran
superar la enfermedad y curarse, en la medida de las posibili-
dades que la medicina nos ofrece.
Abracé muy fuerte a mi papá y le agradecí por hacer este trabajo para ayudar a tantos niños. Me di cuenta
que tiene un gran corazón. Me siento muy orgulloso de él, sé qué hará todo lo que pueda por salvar la
vida de sus pacientes, porque no le gusta ver sufrir a las personas. Quiero mucho a mi papá y cuando sea
grande, me gustaría seguir su ejemplo.
Vocabulario
26
Subraya las acciones que te pueden ayudar a ejercitarte en el servicio a los demás:
Para compartir
27
Vi
al
¿Se puede servir a Dios y servir a
los demás?
Dios me habla
El Venerable Padre, Agustín Ramírez Barba, originario de San Miguel El Alto, y la Reverenda Madre, Reynal-
da Gallegos Franco, desde su juventud sintieron el llamado a consagrar su vida a Dios.
El Padre Agustín tenía especial devoción al Santísimo Sacramento. Inició sus estudios para ser sacerdote en
la Pascua de 1902, en el Seminario Conciliar de Guadalajara, Jalisco. Era muy inteligente, humilde y senci-
llo; le gustaba orar y buscaba siempre hacer la voluntad de Dios. Se distinguió por su amor a la Santísima
Virgen María.
Agustín era callado, fue excelente estudiante y tuvo una conducta
ejemplar. Fue ordenado sacerdote el 2 de agosto de 1908 en la Iglesia
de la Soledad, de manos del Arzobispo Ortiz y Rodríguez.
La Madre Reynalda (Reina, como le decían sus hermanos) vivía
en Tepatitlán, Jalisco, admiraba las virtudes del Padre Agustín
Ramírez y en 1918 le pidió que fuera su guía espiritual y con-
fesor. El Padre Ramírez descubrió que Reina era una joven
virtuosa y obediente, que seguía con fidelidad sus consejos.
Ese mismo año, Reynalda decidió consagrar su vida a Dios.
En 1924, Reynalda se hizo amiga, confidente y animadora
de muchas señoritas que, entusiasmadas, seguían la doctrina
de Santa Teresita. Tenía especial preocupación por la salvación
de los pecadores. Otro de los grandes anhelos de su espiritualidad fue el deseo constante de desagraviar a
Jesús Sacramentado.
Pasados algunos años, y unidos en profunda oración y sacrificios, entendieron que la voluntad de Dios era
fundar una Congregación religiosa que viviera, a imitación de Santa Teresita, la Infancia Espiritual. Pusieron
todo su empeño en formar el grupo de hermanas, que más tarde serían las religiosas Siervas del Señor de
la Misericordia. El P. Agustín y la M. Reynalda vivían para hacer que sus hermanas amaran a Jesús con su
amor tierno y delicado, para hacer de sus vidas un continuo desagravio y lograr con sus ruegos la santidad
de los sacerdotes.
Escucho a Dios
28
Todos los bautizados somos llamados a poner nuestra vida al servicio de Dios y de los demás. A este
llamado lo conocemos como vocación. Por ello hay sacerdotes, religiosos, religiosas, laicos comprome-
tidos, matrimonios, etcétera. Por medio de su vocación, estas personas brindan un servicio a la Iglesia
y a la sociedad.
Después de analizar cada imagen, relaciona las columnas con la vocación co-
rrespondiente y el servicio que presta a la Iglesia:
Expreso mi fe
Valoro
En un momento de silencio, piensa en un servicio que tú puedes ofrecer en tu casa y en la escuela.
Después, escríbelo en una hoja en blanco y pégala en tu salón de clase, para que juntos se animen a
realizar, con amor, el servicio que eligieron.
29
Vi
al
Una experiencia de vida
Círculo de amor
30
N R Q A Ñ O N U E V O
A G D F G B G J Y W S
S C R W Q D G V X C N
O N U K Y Q B H M E J
B T T M H V H W Q B D
A V Y N P F R Y N A F
U Z A A U L K V P U G
D X Z V J D E S A T H
E N W I G O Q A R I B
I M E D N Z E G Ñ Z O
R G R A D U A C I O N
K J V D X N V I E M S
O I R A S R E V I N A
Para compartir
31
Vi
al
¿De quién hablan los cuatro Evangelios?
Dios me habla
La Biblia cuenta una historia que se vivió durante muchos siglos, se presen-
ta en dos partes. La primera se llama Antiguo Testamento y narra acerca
de la creación, los profetas y la historia de un pueblo que Dios eligió
y salvó de la esclavitud, ese pueblo se llama Israel.
La segunda parte de la Biblia se llama Nuevo Testamento y nos
habla de Jesús. Ahí tenemos los cuatro Evangelios, el libro de los
Hechos de los apóstoles y muchas cartas escritas por los Após-
toles.
Los cuatro Evangelios narran la vida de Jesús y fueron escritos
por cuatro personas que trataron de explicar a detalle todo lo
que Jesús vivió.
Al leer los cuatro Evangelios, nosotros nos podemos acercar a
Jesús, nos ayudan a imaginar cómo era, de qué manera pensaba,
actuaba, vivía y amaba a todos.
Escucho a Dios
Mi círculo de armonía
32
Escribe una oración de agradecimiento a Jesucristo, el Hijo de Dios hecho hombre, por
haber venido al mundo y mostrarnos con su vida cómo amar a nuestro Padre Dios:
Valoro
Elige una de las cuatro parábolas y escribe o dibuja cómo vas a poner en práctica su
enseñanza.
La oveja perdida (Lucas 15, 1-7) El pastor y sus ovejas (Juan 10, 1-5)
33
Vi
al
Una experiencia de vida
¿Hay alguna persona de tu familia con la que te gusta platicar más? ¿Por qué?
Círculo de amor
La dulzura de mi abuelita
Me llamo Carmen y cada sábado pido a mi mamá, que me lleve a casa de mi abuelita Josefina.
Mi abuelita es una excelente cocinera y me encanta visitarla. Juntas preparamos deliciosos platillos, espe-
cialmente nuestros favoritos: ¡los postres!
Cada sábado, ella busca una nueva
receta en sus libretas, revistas o en
Internet, dice que es bueno experi-
mentar con nuevos sabores e ingre-
dientes.
Me agrada estar con ella porque es
muy alegre y divertida, a veces nos
contamos chistes mientras cocinamos
y nos reímos mucho. Un día me plati-
có que su mamá la enseñó a cocinar
y que era una de las actividades que
más le gustaban desde que era pe-
queña.
Mientras cocinamos, también com-
parto con mi abuelita situaciones di-
fíciles que he tenido en la escuela o con mis hermanos. Mi abuelita me escucha con atención y después,
con su dulzura, me anima a ver el lado positivo de las cosas.
Ella también me ha platicado situaciones dolorosas, como cuando se enfermó mi abuelito Roberto y estuvo
en el hospital, o cuando mi tío Alberto salió del país y ella lo extrañaba mucho.
Yo le tengo tanta confianza a mi abue Jose porque siempre me da muy buenos consejos. La dulzura de los
postres que cocinamos no se compara con la dulzura del corazón de mi abuelita.
¿Con quién te gusta compartir tu platillo favorito?
34
¿Cuáles son las razones por las que escogiste a esas personas?
Colorea el recuadro con la palabra que describe lo que sientes cuando dialogas con
ellas. Utiliza el color que muestre tu estado de ánimo en ese momento.
Confianza Enojo
Miedo Paz
Angustia Escucha
Alegría Seguridad
Para compartir
35
Vi
al
¿Con quién platicaba Jesús?
Dios me habla
Escucho a Dios
El Padre Nuestro es una oración que nos une a todos como hermanos, independientemente del país o
nacionalidad que tengamos. Lee la oración del Padre Nuestro en inglés e italiano:
Our Father, who art in heaven Padre Nostro che sei nei cieli,
hallowed be thy Name; sia santificato il tuo Nome,
thy kingdom come, venga il tuo Regno,
thy will be done, sia fatta la tua volontà,
on earth as it is in heaven. come in cielo così in terra.
Give us this day our daily bread, Dacci oggi il nostro pane quotidiano,
and forgive us our trespasses, rimetti a noi i nostri debiti,
as we forgive those who trespass against us; come noi li rimettiamo ai nostri debitori,
lead us not into temptation, e non ci indurre in tentazione,
but deliver us from evil. Amen. ma liberaci dal male. Amen.
36
Formen equipos para reflexionar lo que significa para ustedes cada una de las frases
del Padre Nuestro. Después de la reflexión, cada equipo lo explicará al resto del grupo
y escribirán las respuestas en este espacio.
6. Perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a los que nos ofenden:
Expreso mi fe
Escribe una frase con diez palabras agradeciendo a Dios por darnos una oración para
comunicarnos con Él.
Valoro
Memoricen la siguiente oración y, sin leer, repítanla tres veces de manera grupal.
Gracias, Dios, por acompañarnos en todo momento y permitirnos confiar en Ti.
37
Vi
al
Una experiencia de vida
¿Alguna vez has preguntado a tus papás cómo se sentían antes de que nacieras? ¿Has vivido la llegada a
casa de un nuevo hermanito o hermanita? ¿Qué sentiste?
Círculo de amor
Vocabulario
38
Dibuja un momento que recuerdes del amor de tu mamá y de tu papá hacia ti.
Decora el corazón y escribe dentro de él una palabra a tu mamá para agradecerle to-
dos los cuidados y el amor que te ha dado desde que estabas en su vientre.
Para compartir
39
Vi
al
¿Conoces el amor que la Virgen María
tiene por nosotros?
Dios me habla
Al igual que nuestra mamá de la Tierra que nos cuida y nos prote-
ge con ternura, así María, nuestra Madre del Cielo, muestra su
amor por nosotros y nos consuela en nuestras necesidades.
María esperó a Jesús durante nueve meses, igual que cual-
quier otra mamá espera la llegada de su bebé. Ella sabía
que ese niño sería muy especial y daba gracias a Dios por
ser madre. Cfr. Lucas 1, 48.
Ella cuidó de Jesús desde que estaba en su seno materno
hasta el día en que, con mucho dolor, lo vio morir en la cruz.
Todo el tiempo, María lo acompañó y le aconsejó cómo ser un
buen hijo de Dios. El día de su muerte, Jesús hizo algo mara-
villoso, como buen hermano mayor: ¡nos regaló a su mamá! A
partir de ese día, María se convirtió en la Madre de Dios y de todos
nosotros. Cfr. Juan 19, 26.
Es por eso que le tenemos un cariño y un agradecimiento muy especial. Ella nos cuida a cada uno, como
sus verdaderos hijos. Nos lleva en lo profundo de su corazón, nos habla con cariño y nos hace saber que
siempre estará ahí, para cuidar de nosotros: “¿No estoy yo aquí que soy tu madre?”, le dice a Juan Diego en
el Tepeyac, pero también nos lo dice a cada uno, en lo profundo de nuestro corazón.
Escucho a Dios
¿Cómo corresponder al amor de María que recibimos? Para mucha gente, rezar la oración de la Salve es
una manera de decirle a nuestra Madre del cielo cuánto la amamos.
Inicialmente, la Salve era un himno que se cantaba en latín. En el año 1250 el Papa Gregorio IX la aprobó
y pidió que los monjes la cantaran todos los días antes de dormir. Se trata de una oración muy antigua, es
una oración que ha gustado en todas las épocas, por la ternura con la que nos presenta a María.
Salve significa el saludo que el ángel le da a María el día de la Anunciación: “Dios te salve María” (Cfr.
Lucas 1, 28) quiere decir: Dios te saluda María.
Después del saludo, la oración describe las cualidades de María como Reina y como madre llena de mise-
ricordia. Además, la llamamos con otros adjetivos: vida, dulzura y esperanza nuestra. Sólo un hijo que se
siente muy amado puede expresar tan bella oración y hacerla canción para decírsela cada día con mucho
cariño y agradecimiento, por tanto amor que Ella, nuestra Madre del cielo, nos da.
40
Escribe una frase que exprese el amor de María. Después, en grupo realicen un collage
que represente las cualidades de María.
Expreso mi fe
La Iglesia católica nos entrega la oración de la Salve, mediante la cual pedimos la protección de la
Virgen María y su intercesión. Rézala despacio, junto con tus compañeros, pensando en el amor mise-
ricordioso de María hacia nosotros.
Valoro
Subraya aquellas acciones que te ayudarán a conocer y amar más a María:
1. Rezaré cada día la oración de la Salve, como un saludo a mi Mamá del Cielo.
2. Compartiré con mi familia la oración de la Salve y les explicaré lo que he aprendido.
3. Dormiré sin dar gracias a Dios, ni rezar.
4. Cuando vaya a Misa, agradeceré a Jesús que nos haya regalado a su mamá.
5. Invitaré a mi familia, cada noche, a rezar la Salve todos juntos.
41
Vi
al
Una experiencia de vida
¿Has visitado últimamente a tus abuelos? ¿Cómo te sientes cuando estás con ellos? ¿Sabes lo que tus
abuelos sienten por ti?
Círculo de amor
El diario de un abuelito
Enero 2019: mi nieta Sofía acaba de cumplir nueve años, la última vez que la vi era una pequeña bebé
de un año. ¡Cómo recuerdo la alegría de tener a esa pequeñita entre mis brazos! Cada año, el día de su
cumpleaños, la llamo por teléfono para felicitarla y decirle que la quiero mucho, y que espero verla pronto.
Marzo 2019: para mí no han sido fáciles estos años sin
ver a mi nieta. Mi hijo mayor y su esposa, es decir, los papás
de Sofía, trabajan en Estados Unidos y se les complica venir
a México a visitarnos. Sé que mi nieta está contenta donde
vive y ella me ha contado, cuando hablamos por teléfono,
que va a una escuela muy bonita y grande, donde le hablan
en inglés todo el tiempo. Pero no puedo evitar decirle que
la extraño.
Mayo 2019: ahora estoy viviendo con mi hija Cristina, ella
me cuida muy bien y me tiene mucha paciencia, porque ac-
tualmente ya no puedo caminar. Hace algunos años que mis
piernas ya no tienen la fuerza que tenían antes y por eso me
encuentro en esta silla de ruedas.
Junio 2019: el próximo mes cumpliré 80 años, pero ni la edad, ni la silla de ruedas me han quitado las
ganas de vivir y de encontrarme con mis seres queridos. De hecho, hoy he pedido un deseo para mi cum-
pleaños número 80 y espero se cumpla: deseo ver nuevamente a mi nieta Sofía, ya debe estar tan grande
que probablemente ni siquiera la voy a reconocer.
Julio 2019: ¡no lo puedo creer! ¡El mejor regalo que podía haber pedido! Después de ocho años, nueva-
mente vuelvo a ver a mi nieta. No puedo explicar lo que siento. He llorado de alegría al ver a Sofía, espe-
cialmente cuando me vio y corrió hacia mí. Sé que ya estoy viejo y dicen que soy más sensible que antes,
pero es inexplicable el gran amor que se tiene por los nietos.
42
¿Qué piensas cuando le expresas a tu familia y amigos lo que sientes por ellos?
Da like, coloreando la manita en las caritas que lo demuestren.
Escribe una mensaje para tus abuelos o para algún familiar que te gustaría visitar
pronto:
Para compartir
43
Vi
al
¿Cómo puedo reconocer a Jesús cuando
venga a visitarme?
Dios me habla
“Jesús entró en Jericó y atravesaba la ciudad. Había en ella un hombre rico llamado Zaqueo, que era jefe
de los que recaudaban impuestos para Roma; quería conocer a Jesús, pero como era bajo de estatura, no
podía verlo a causa del gentío. Corriendo se adelantó y se subió a un árbol para verlo, porque iba a pasar
por allí. Cuando Jesús llegó a aquel lugar, levantó los ojos y le dijo:
–Zaqueo, baja en seguida, porque hoy tengo que hospedarme en tu
casa.
Él bajó a toda prisa y lo recibió muy contento. Al ver esto, todos mur-
muraban y decían:
–Se ha hospedado en casa de un pecador.
Pero Zaqueo se puso en pie ante el Señor y le dijo:
–Señor, la mitad de mis bienes, se la daré a los pobres, y si en-
gañé a alguien le devolveré cuatro veces más.
Jesús le dijo:
–Hoy ha llegado la salvación a esta casa, pues también éste es
hijo de Abrahán. Pues el Hijo del hombre ha venido a buscar y
a salvar lo que estaba perdido”. Lucas 19, 1-10.
Escucho a Dios
44
Jesús también quiere visitarte, sólo necesitas reconocerlo y darte cuenta que Él se alegra mucho de
poder estar contigo y de que lo dejes entrar en tu vida. Relaciona las columnas que muestran las dife-
rentes maneras en las que puedes descubrir a Jesús:
En la comunidad de fieles,
que es la Iglesia: “Donde
están dos o tres, reunidos en mi
nombre, ahí estoy Yo en medio
de ellos”.
Mateo 18, 20
Expreso mi fe
Valoro
Comparte con tus compañeros:
¿Cómo te estás preparando para vivir uno de los mejores momentos de tu vida? ¿Cómo prepararas tu
corazón para recibir a Jesús y que se pueda quedar ahí contigo, para siempre?
45