El Rechazo
El Rechazo
El Rechazo
El asunto de la Salvación no se trata de haber nacido en la familia correcta ósea judío o gentil,
si no de confesar con Fe que Cristo resucito de entre los muertos y a través de este sacrificio
hermoso y único hoy somos Salvos, esto quiere decir confiar en Él, depender de Él, reposar en
Cristo como el fundamento de nuestra esperanza.
En estos versículos hay un aspecto que vale la pena resaltar, el vv.9 creer que Dios levantó a
Jesús de los muertos para ser salvo en v.10 confesar con la boca para salvación, nos da a entender
que el hombre por iniciativa de él (decisión) tiene que declarar a Jesús el Señor, no sólo
verbalmente, sino vivir en esa declaración que lo dirige a la salvación. O sea, la plenitud de la
salvación será en un futuro, entonces la confesión más que declarar una oración estructurada, es
vivir y reconocer a Jesucristo como el Salvador, liberador, auxiliador en nuestras debilidades,
tentaciones y tribulaciones para continuar una vida diferente, es decir en santificación.
CONTEXTUALIZACIÓN
Es claro que no alcanzamos a percibir la verdadera voluntad de Dios, ya que con nuestros
hechos mostramos lo contrario de lo que profesamos, hoy lo que menos evidenciamos es el Amor
al prójimo, el cual nos ayudaría a atraer y mantener ovejas en el redil.
Escudriñas y reinterpretar las Escrituras, practicar las disciplinas espirituales (oración, ayuno,
evangelismo, comunión, etc.) y sobre todo la Fe son acciones que ayudarían de manera
importante al joven a vivir en el proceso de Salvación, no como cualquier religioso sino como un
joven que cuenta con una nueva existencia y así poner en práctica los elementos de la Fe: la
gracia; la cual Cristo le ha regalado para obtener su salvación y reconciliación con Él, la misión;
no solo se trata de creer y confesar sino también de realizar la obra que den una respuesta a las
necesidades del individuo para llegar a reconocer a Cristo como salvador de su vida.
BIBLIOGRAFÍA