La Contaduría: Pasado, Presente y Futuro: Patricia Rodríguez Parra Alberto Morales Ospina

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Capítulo 2

La contaduría: pasado,
presente y futuro
Patricia Rodríguez Parra 1
Alberto Morales Ospina2

Magister en Dirección y Gestión de Proyectos, investigador junior adscrito al grupo


1.

EDUPRO, Fundación Universitaria San Mateo. Correo electrónico: investigación.for-


[email protected]
Profesional en Ciencias Militares, Magister en Seguridad y Defensa Nacionales, can-
2.

didato a doctor en Ciencias de la Educación. Investigador-docente en la Fundación


Universitaria San Mateo, Programa de Administración de Empresas. Correo electró-
nico: [email protected]

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Pasado, presente y futuro

RESUMEN

Desde su nacimiento, la contaduría pública ha tenido implicaciones políticas, eco-


nómicas, y financieras, inmersa en procesos de ética y legalidad; ha pasado por di-
ferentes problemáticas en la adaptación. De igual manera, las nuevas realidades de
la economía a nivel mundial vienen generando cambios significativos en las formas
de asumir este reto transformador; en cómo se apropia la globalización, decidida a
impactar en campos como las tecnologías y las nuevas economías, aspectos que abar-
can todas las disciplinas existentes. El presente capítulo se estructura a partir de una
revisión documental, centrada en la recolección y revisión de fuentes que expliquen
la aplicación de la contaduría desde el pasado hasta la época actual. Por ende, este
capítulo consta de dos (2) aspectos a conocer: el inicio de la contaduría y los aspec-
tos relevantes para avanzar en este campo. Además, se destaca la investigación como
herramienta utilizada para el desarrollo científico en la aplicación de la contabilidad
como ciencia social en los diversos sectores. Por último, se contemplan las competen-
cias relevantes para un investigador; se visualiza la integralidad como necesaria tanto
a nivel cognitivo como relacional en el campo profesional.

PALABRAS CLAVE: Historia; competencias; contabilidad; investigación.

HISTORIA

En sus inicios, la contaduría se consideró como ciencia matemática; se asemejaba por


los procesos exactos y la aritmética comercial basada en procedimientos de registro
ordenado y adecuado de las operaciones comerciales (Garnier, 1987). En la actualidad
se visualiza como ciencia social, descrita desde tres (3) aspectos: como técnica, como
tecnología o como ciencia.

No son desconocidas las tablillas en cerámica Código de Hammurabi donde se rea-


lizaban las cuentas los sumerios. Tablas como las de 1700 a J.C donde registraron las
normas civiles de arrendamiento, ventas, compras, disposiciones comerciantes (Ti-
moteo, Zonia, Wilian, Sindy & Antonio, 2012). Lo cual presumen cómo desde los
principios de la humanidad se han encontrado diferentes formas y estilos de llevar y
formalizar los procesos contables.

Por otro lado, el Instituto Americano de Contadores la define como “El arte de re-
gistrar, clasificar y resumir, de manera significativa y en términos monetarios, tran-
sacciones que son, en parte al menos, de carácter financiero, así como de interpretar
los resultados obtenidos” (Silva, 2010). Lüque de Lázaro (2014) la define como “[…] la

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Pasado, presente y futuro

ciencia que tiene por objeto el estudio cuantitativo y cualitativo del patrimonio de la
empresa, tanto en su aspecto estático como en el dinámico, con la finalidad de lograr
la dirección apropiada de las riquezas que lo integran” (p. 19).

LA CONTABILIDAD COMO TÉCNICA

De antemano, se define técnica según la Real Académica Española (RAE) la define


como un “conjunto de procedimientos, materiales o intelectuales, aplicado en una
tarea específica, con base en el conocimiento de una ciencia o arte, para obtener un
resultado determinado” (Significados, 2017).

En ese sentido, se dice que la contabilidad es una técnica porque trabaja de manera
procedimental y sistemática en la recolección y análisis de factores económicos y pro-
vee información sobre esta misma. Por lo anterior, se pensaba en la recolección de la
información para registro en libros y en la aplicación de las normas de estos.

LA CONTABILIDAD COMO TECNOLOGÍA

La tecnología se concibe como el “conjunto de los instrumentos y procedimientos in-


dustriales de un determinado sector o producto” (RAE, 2019). En el contexto colom-
biano, la contaduría es una de las profesiones más controlada por el Estado. Su fun-
ción se remonta al periodo independentista (durante inicios del siglo XIX), aunque
es poco conocida; así, Suárez, Franco, Triviño y Alonso (2017) consideran que “fue
el origen de la contabilidad pública para la organización de las cuentas de la naciente
República, sumida en una crisis fiscal y azotada por el flagelo de la corrupción de al-
gunos funcionarios públicos” (p. 116).

Ahora bien, el término “público” es para el ejercicio profesional de la contaduría pú-


blica. Hace que referencia al contador y su actuar ante la comunidad con responsabi-
lidad social y un actuar ético frente a la aprobación de los procesos llevados a cabo;
siempre ante la comunidad estar con la verdad en su actuar.

En la actualidad, en la parte normativa, el ejercicio contable es regulado por la Junta


Central de Contadores, desde 1956, bajo el Decreto-Ley 2373 del 18 de septiembre
(Ministerio de Educación Nacional , 2005). La contaduría también es regulada por el
mismo Ministerio de Educación Nacional (MEN); ejerce un papel de docente ante las
instituciones de educación superior.

De igual manera, forma parte del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo bajo
la Ley 43 de 1990, decisión del expresidente Alberto Lleras Camargo. Como dato, esta

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Pasado, presente y futuro

ley se promulgó 30 años después de su creación. La consolidación de la estructura


jurídica de la regulación contable se terminó bajo el mando de Alberto Ruiz Novoa
y un equipo de trabajo. Con la promulgación de la Ley 145 de 1960, se incitó a la
comunidad y a los profesionales para responder a las nuevas dinámicas de apertura
económica del país. A lo largo del año, otros países latinoamericanos cambiaron sus
constituciones política, y por ende su régimen contable, conforme a la ruptura econó-
mica de los años 90, para responder a crisis económicas emergentes, pronosticadas y
estudiadas (Suarez, 2017).

Dicho de otra manera, en los años 90 se vio un desbalance económico financiero por
los malos manejos en una contaduría fraudulenta; llevado a cabo en Estados Unidos,
con repercusiones mundiales. Por otro lado, es necesario observar el proceso de terra-
tenientes y lavado de activos, realizado por el movimiento de manejo de activos entre
1980 y parte de 1990, por parte de los grupos al margen de la ley o de los grupos que
manejaron el narcoterrorismo en el país durante la década.

Antonio Lopes de Sá, investigador contable, declaró que la crisis financiera de los
años 90, y el más fuerte en el año 2008, ocurrió por una falta de ética del profesional
ejercida desde el mal manejo de la teoría contable por la adaptación a los códigos de
ética realizados. Frente a lo anterior, Lopes de Sá (Citado por Suárez, 2010) menciona:
“Instrumentalismo ético, conocido como la adaptación de los códigos de ética como
instrumento para proteger las pretensiones económicas de los grupos de interés, en
detrimento de la protección del público”. Por añadidura, la investigación realizada por
autor el Manuel Castells concluye que en el periodo de 1990 a 2000 (año de finaliza-
ción de la investigación), la economía moderna se caracterizaba por tres (3) aspectos:

- Economía informacional: ejecutada a nivel mundial bajo las tendencias de


desarrollos tecnológicos. En 1995, Castells establece que “Es informacional porque la
productividad y competitividad de las unidades o agentes de esta economía (ya sean
empresas, regiones o naciones) depende fundamentalmente de su capacidad para
generar, procesar y aplicar con eficacia la información basada en el conocimiento”
(Castells, 1995). Básicamente el uso de los componentes de sistematización y uso de la
tecnología para el tránsito y manejo de la información.

- Globalización: realizada a partir del capitalismo financiero el cual ha gene-


rado retos de manera constante a los países, a partir de la adopción de las diferentes
normas. Permite establecer competitividad y mayor productividad a las empresas, así
como la expansión de estas. Dicho proceso cuenta con metas de manejo financiero lo

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Pasado, presente y futuro

cual conlleva a la aplicación de normas y políticas homogéneas y de cubrimiento para


los países que aplican los mismos estándares y prácticas políticas.

Ahora bien, en relación con la globalización, Carlos Vargas (2017) manifiesta: “En
este proceso resulta vital comprender los factores, causalidades y consecuencias que
se derivan de la aplicación de normativas internacionales, en especial, entendiendo
los impactos que se derivan para la cultura empresarial y profesional”. Lo anterior,
en el marco de las políticas las diferencias culturales y los movimientos mismos de la
banca nacional versus la internacional. Esta globalización establece necesidades como
un lenguaje financiero universal, también espera cloquear en misma sintonía a los
diferentes actores inversionistas, la banca, los mismos entes políticos, y una estanda-
rización de los estados financieros.

- Mentalidad de los agentes sociales como actores del desarrollo de los paí-
ses, a través de sus organizaciones y del marco de los diferentes ejercicios de actuación
de la misma contaduría social. Lo anterior, como respuesta a las necesidades de la
comunidad y de las dimensiones de la contaduría, a saberse: contabilidad de los recur-
sos humanos, del capital intelectual, ambiental y responsabilidad social, de la gestión
social y cultural (necesidades presentes dentro de las comunidades).

La teoría del capital humano manifiesta que, en el desarrollo y crecimiento de la eco-


nomía, confluyen diferentes elementos como la educación y su función dentro de las
comunidades; a través de las capacidades, talentos, destrezas y habilidades del recurso
humano. Uno de los primeros autores de esta teoría es Hermanson (1964) citado por
Martínez (1998) en su documento La contabilidad de los recursos humanos al capital
intelectual y la gestión del conocimiento: una ampliación necesaria; se refiere a que
uno de los activos de la economía son operacionales, denominados como represen-
tativos a los activos humanos los cuales, en sí, son recursos escasos que operan en la
entidad y no son poseídos.

El documento también anuncia trabajos considerados seminales en contabilidad


como el de Hekimian y Jones (1967); buscaban una manera de asignar un valor mo-
netario a los empleados para mejorar su gestión, proponiendo para ello un modelo de
coste de oportunidad”. Dichos autores trascienden el concepto a la representación de
los activos humanos en los balances (citado por Martínez, 1998).

En este sentido, se despertaron un sin número de objeciones al convertir el recurso en


objeto o maquinaria como tal; genera conflicto ante las mismas capacidades con las

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Pasado, presente y futuro

que cuenta el individuo. De igual manera, puede llegar a tener consecuencias dentro
de los equipos de trabajo al pensarse por qué este capital humano cuenta con esas
capacidades sustentadas por la empresa y yo no; así cae en el uso del recurso pero tam-
bién en los posibles despidos dentro de las organizaciones. Bajo esta premisa qué tan
lejos está de la realidad este tipo de conceptos en la actualidad conllevando a proble-
mas dentro de las organizaciones; a esto se le añade el trámite de influencias existente.

Desde esa época viene en evolución una trasformación del concepto; se ‘dieron cuen-
ta’ que no era suficiente establecer un orden contable en las destrezas y habilidades
con las que ‘dice’ el contar el personal, también deben desarrollarse. A partir de allí,
se podría establecer el capital intelectual como tal, esto es, si proviene del hecho; de
la capacidad de producción de cada uno de los individuos a partir de su intelecto
(entendido como la capacidad del ser humano de entender, comprender, aprender y
desarrollar a partir de su conocimiento).

Desde elementos como patentes, el desarrollo de obras culturalmente reconocidas,


hasta la misma tecnología con el desarrollo de software, bases de datos, marcas o
signos distintivos, son denominados capital estructural. Esta clase de capital es enten-
dido como el conocimiento que las empresas buscan a partir de explicitar, ordenar e
internalizar; en sí, está latente en las personas y los equipos. Además, cuando se puede
exponer e impulsar se pueden colocar a nombre de esta misma organización.

Zamorano y Reza (2002), citados por Villalobos Monroy & Flores (2009), manifiestan
que el resultado de la unión de capital humano más capital estructural es el capital
intelectual. Este último es el desarrollo y apalancamiento del capital relacional con el
que se cuenta, sea interna o externa a la empresa; de sus capacidades, y de la misma
gestión del conocimiento con el apoyo de la organización.

Este tipo de capital es muy evidente en el mercado laboral correspondiente al egresado


de la educación superior. Su medición está a cargo de entidades como el observatorio
laboral, el Ministerio de Trabajo o, en otras instancias, a través de los procesos inves-
tigativos de las unidades académicas correspondientes y su aporte al desarrollo del
país cuyos resultados se evidencian en la clasificación de sus grupos de investigación
al interior de Colombia.

CONTADURÍA AMBIENTAL

En este tránsito y evolución se da paso a observar el exterior de las empresas y los


cambios históricos climáticos y medioambientales por los atraviesa el planeta tierra,

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Pasado, presente y futuro

así como el impacto de la mano del hombre. El milenio da inicio con una catástrofe
mundial que ha impactado todos los territorios (incendios, contaminación de mares,
desechos tóxicos, amenazas nucleares, eliminación de especies naturales). Todo lo an-
terior, sin discusión alguna, es consecuencia directa del efecto invernadero, del des-
gaste de la capa de ozono; suma de los actos industriales y la indiferencia en la toma
de medidas consecuentes para su sostenibilidad.

La presión de las organizaciones mundiales con solicitudes directas y expresas a paí-


ses industrializados presionan a través de la solicitud de políticas ecologistas; implan-
tan sistemas de calidad ambientales a todos los procesos organizacionales que re-
presentan un desgaste para el medio ambiente. Es así que en la actualidad se vienen
implementando normas internacionales para la protección medioambiental como la
ISO; unas orientadas a la preservación y las otras a conservación, lo cual demanda un
manejo de recursos.

En 1972, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la


Cultura (UNESCO) da inicio al proceso de conservación. Tras su conferencia en Pa-
rís, aprobó la protección del patrimonio mundial, cultural y natural; las formas de
interacción del hombre y el medio. Consecuentemente, en 1993 la Organización de
Estados Americanos (OEA) realizó un seminario en el Departamento de Desarrollo
Regional y Medio Ambiente. Allí se discutió la manera en que se iban a incluir la con-
tabilidad ambiental y los recursos naturales a las cuentas nacionales y cómo usarlas
en la formulación de políticas de desarrollo. A la fecha, no son tan evidentes estos
impactos teniendo en cuenta las acciones realizadas por parte de diferentes actores.

En 1982, las Naciones Unidas (NN. UU) establecieron la aceptación del impacto de
las acciones de las industrias y el evidente uso del medio; también, cómo vienen afec-
tando directamente las estructuras sociales, económicas y políticas. Para este fin, en
2005, dentro de la declaración de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) los
líderes mundiales generaron una agenda de acciones concretas. Pretendieron abordar
necesidades como “poner fin a la pobreza, proteger el planeta y mejorar las vidas y las
perspectivas de las personas en todo el mundo”. Dentro de ella se cuenta con nueve (9)
de 17 objetivos, orientados a la protección y preservación del medio ambiente. Ade-
más, solicitaron a las naciones su manejo y su aporte a la medición y regulación de los
impactos que se vienen acervando y desgastando el mismo sistema. Por lo anterior, se
hizo urgente su aplicación.

Bajo este concepto, la contabilidad ambiente se define como la relación existente entre
la empresa, el medio ambiente y la aplicación de sus políticas contables para ser renta-

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Pasado, presente y futuro

ble a las organizaciones, por un lado. Por el otro, responsable en el mantenimiento del
medio ambiente. Así, es imperiosa la activa participación por parte de los diferentes
actores involucrados. En efecto, Bischhoffshausen Von (1999) clasifica la contabilidad
ambiental desde tres (3) perspectivas:

a) De ingreso nacional: desde un macro contexto y su implicación en el Produc-


to Interno Bruto (PIB).

b) Ambiental-financiera: la información que cada una de las empresas desa-


rrolla sobre su situación y los resultados de sus inversiones; en el marco de los
pasivos y costos ambientales; en relación con la responsabilidad de las empresas,
los daños ocasionados y su amortización, sujeta a normas de aplicación general.

c) Ambiental administrativa: recopila, almacena y analiza la información para


usuarios internos en la empresa, como apoyo en la toma de decisiones, es de-
cir, costos y desempeños ambientales en las decisiones estratégicas y operativas
(diseño de productos y procesos, localización macro y micro de las empresas).

En ese sentido, de acuerdo a Nayibe Ablan Bortone y Elías Méndez Vergara (2004),
quienes citan lo expuesto por parte de la Agencia de Protección Ambiental (Envi-
ronmental Protection Agency), de Estados Unidos. Allí establecen tres (3) líneas de
impacto y clasificación de la contaduría ambiental.

a) Contabilidad nacional: expuesta a nivel macroeconómico y realizada en sen-


tido externo.

b) Contabilidad gerencial: se observan políticas contables para los usos al inte-


rior de la empresa, departamentos, línea de producción. Es interno a la empresa,
su la medición está en términos cuantitativos y cualitativos, financieros y no.
Además, cuenta con el diseño y la construcción de indicadores sobre la gestión
ambiental de la organización.

c) Contabilidad financiera: la empresa externa es basada en el sistema de in-


formación con la que cuente las organizaciones esta permite tener al día los
estados.

De esta manera, la contaduría ambiental cada vez toma más fuerza en cuanto a su
posición ante las empresas y la responsabilidad que tiene con el medio ambiente y con
el mundo en general.

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Pasado, presente y futuro

CORRIENTES A PARTIR DE LAS ESCUELAS

Como una ciencia social, la contaduría ha venido evolucionando. Permite visualizar


las tendencias y usos de la misma ciencia. Pasa por periodos empíricos, clásicos y cien-
tíficos, tal como lo muestra la Figura 1.

Figura 1. Evolución de las reglas contables

Fuente: Construcción propia a partir de Revista Internacional Legis


De Contabilidad & Auditoría

De acuerdo con cada una de ellas, se evidencia cómo se pasa a través de su evolución
desde la explicación y justificación de las reglas contables, a través de partidas dobles
en la cuales su expresión está entre deudor y acreedor. Pasa por el control de la em-
presa, a través de la relación existente entre la contabilidad y la empresa; por la escuela
lombarda la cual induce a llevar el control, a través de demostrar el resultado de sus
operaciones. En la actualidad, estas se estructuran desde la mirada de aspectos eco-
nómicos como la inflación y su influencia tanto al interior como al exterior del país.

Dichas corrientes establecen un oriente significativo para la generación de investiga-


ción en el ámbito contable. Sin embargo, en la parte actitudinal ante los profesionales
de este sector, por un lado, debe considerarse la claridad en las necesidades de avanzar
y profundizar. Por el otro lado, fortalecer las competencias con las que cuentan los

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Pasado, presente y futuro

profesionales y los que están en vía de hacerlo, con el fin de contar con una participa-
ción más activa y profunda en los procesos políticos de la disciplina.

EL EJERCICIO CONTABLE Y LA INVESTIGACIÓN

Dentro del proceso de formación académica de los profesionales del área, es necesario
fomentar una investigación contable que persiga la conformación de un saber relacio-
nado con el objeto de estudio y la indagación del comportamiento financiero. Tam-
bién, una búsqueda racional y objetiva del conocimiento que permita la explicación de
los resultados financieros; del profesional actualizado con alternativas de soluciones.
Por último, la capacidad de generar cambios que contribuyan a la optimización de los
recursos en busca de la sostenibilidad y permanencia de las organizaciones en mer-
cados globales cada vez más competitivos. Según Echavarría (2009), la investigación
en contaduría pública permite describir, explicar, controlar y predecir los fenómenos
y hechos que estudia, mediante la aplicación de las normas, principios y técnicas que
rigen la práctica contable, para hacer válidos y confiable los resultados que presenta de
los actos sociales expresados en términos financieros.

Así mismo cobran fuerza las dos (2) razones académicas desde la investigación for-
mativa: una que va desde la misión hasta las herramientas para su aplicación. Defini-
tivamente se hace necesario pasar de la teoría de los conceptos a la práctica, desde la
misma epistemología conceptual de la contaduría; hay que tener especial cuidado y
no ser conducentes a un activismo, hasta la gran pregunta de la mayoría de las disci-
plinas: el “cómo” aplicar dichas teorías en contextos donde se requiera. Como marco
inicial se encuentra la definición de González (2005), la investigación como proceso
de fundamentación cognoscitiva, que permite acceder al espacio de avance del saber
fundamental como producto del pensamiento, la reflexión sobre el funcionamiento
del dispositivo contable, que debe darse desde una perspectiva sociológica para que la
contabilidad perpetúe nuevas formas de interacción social, basadas en la argumenta-
ción racional.

Por su parte, Gómez (2003) plantea las dos (2) formas de la investigación dentro de
la contabilidad. Por un lado, manifiesta que la investigación básica cuenta con un
corte de epistemologías, teoría general y sus aplicaciones y la relación existente con
otros campos del conocimiento. Su objeto central es “dar consistencia y rigor a las
definiciones y estructuras contables” (p. 139). Por el otro lado, está la investigación
aplicada; basada en la parte instrumental y funcional; orientada en medición y con-

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Pasado, presente y futuro

trol del contexto, así como en las entidades responsables, organizaciones privadas o
gubernamentales.

En el documento Caracterización de la investigación contable. El aporte de Chua


(Vargas, 2013), el autor argumenta dos (2) espacios de desarrollo elaborados por Gon-
zález en 2005. El primero se basa en una postura teórica ofrecida desde el saber disci-
plinar; pretende desarrollar nuevos saberes a partir de su desarrollo y profundización.
El segundo surge desde la práctica contable; denota los avances que se descubre en su
desarrollo. Por otro lado, Villarreal y Córdoba Martínez (2017) visualizan las corrien-
tes de investigación en contabilidad dados en el siguiente cuadro:

Tabla 1. Corrientes de investigación en contabilidad

Nombre Orientada a Fundamentación Relación


Corriente principal de Investigación clásica, Ryan, Scapens y Theo- Ciencias matemáticas
la contabilidad orientada al funciona- bald, (2004). Ciencias económicas
miento de la contabili- Considera la conducta (riquezas optimización
dad financiera regula- de los individuos que de recursos, búsqueda
ciones y normas la practican como par- de beneficios ante el
te determinante para fisco.
establecer metodolo-
gías aplicadas. Permite
estandarizar métodos
y procesos desde la
evidencia de su efecti-
vidad (normalización
de prácticas contables).

Contable interpretati- Control Social a través Habermas y la escuela Ciencias sociales


va de las interpretaciones de Frankfurt. Orienta-
de políticas conflictos da a visualizar y com-
de poder e incidencia prender el impacto de
en la humanidad. No las políticas en la hu-
Interviene, solo inter- manidad. Se evalúa a
preta. través de la capacidad
de empleo, la misma
equidad y distribución
de la riqueza.

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Pasado, presente y futuro

Crítica Investigación alterna- Frankfurt y de Alfred Sociología


tiva a los fenómenos Schutz. Economía política
contables. Generar la capacidad Ecología
Su objeto es promover de cuestionar la legiti- Filosofía,
un nuevo papel para midad política de
la contabilidad como los diversos regíme-
disciplina de conoci- nes de contabilidad.
miento y vinculada Consiste en plantear
con la crítica social preguntas sobre el uso
(Villarreal & Córdoba de la contabilidad, más
Martínez, 2017). allá de implementarla
(preparar reportes fi-
nancieros) sin ningún
cuestionamiento.

Fuente: Elaboración propia a partir de Villarreal & Córdoba Martínez (2017).

En este sentido, el contador público requiere de diferentes tipos de competencias que


le permitan realizar una mirada profunda al sistema competitivo del país. Se requiere
una mirada holística que inicie desde un ámbito pedagógico; en la manera en la cual
se enseña a abordar las necesidades; las herramientas de concertación para nuevos es-
pacios educativos, como mesas de trabajo, y el establecimiento de redes que conlleven
a la reflexión propositiva desde marcos sociopolíticos y económicos. Lo anterior con
el fin de abordar dichas problemáticas sociales que resalten la importancia propia del
país y conviertan la contabilidad que aporte a los gremios.

Conviene mencionar la necesidad existente del uso de las tecnológicas como medio y
no como fin para la ejecución de la información contable. Contribuye a la recolección
de información, para la proporción de datos que aúnen esfuerzos a las nuevas tenden-
cias contables.

Por otro lado, el pensamiento contable es definido como la reflexión del experto sobre
cada realidad contable, sirviéndose de tales abstracciones, mediante un seguimiento
metódico y sistemático en tiempos y espacios de cada actividad (Ortega, 2017). Dicha
teoría surge a partir de la necesidad de eliminar la afirmación de una contabilidad
que solo se basa en técnicas e información para formularios. En cambio, se enfoca a
relacionar la contabilidad con disciplinas sociales.

En Colombia el ejercicio investigativo llevado a cabo por los diferentes grupos, líneas,
e instituciones orientadas a este quehacer, cuentan con tendencias de desarrollo in-
vestigativo. Beltrán-González (2017) demuestra que entre los años 2011 al 2015 la pre-
ferencia estuvo marcada en investigación y educación contable; la contabilidad y las

39
Pasado, presente y futuro

NIIF y la teoría contable. Estas son las tres (3) áreas en relación directa con las escuelas
y corrientes contables y las necesidades del país.

De igual manera, dichas tendencias observadas por Gómez Villegas (2013). El autor
manifiesta el resultado de la aplicación de este tipo de investigación durante los últi-
mos años: “La investigación en contabilidad adelantada en los últimos veinte años y
dos serían las más connotadas vertientes de la investigación internacional en conta-
bilidad: una que podríamos denominar como la económica y otra que se denomina
investigación sociológica-organizacional” (p. 25). Desde competencias básicas o gené-
ricas, transversales, como disciplinares, se establecen en un macro de acción propio
del área. Así, la mirada para el profesional se organizaría según Figura 2.

De igual manera organismos internacionales como International Federation of Ac-


countants, en español, Federación Internacional de Contadores (IFAC), organización
mundial para la profesión de contador. Considera las normas para el funcionamiento
del contador dentro de las cuales se encuentra la Norma Internacional de formación
(IES) 3: Habilidades Profesionales y Formación general. Es necesario tener en cuenta
las IES en el momento de formar sus profesionales, (IFAC, 2008).

Figura 2. Competencias en el Profesional de Contaduría

Permite contar con una mirada crítica ante el reconoci-


Manejo Comunicación Comprensión

miento de las diferentes teorías


del conoci-

Aplica los conocimientos adquiridos nuevos o poco conoci-


miento

dos dentro de contextos multidisciplinares.


Integra sus conocimientos con capacidad de resolución de
problemas en entornos relacionados con su área de estudio.
Básicas Enfrentarse a la complejidad.
Análisis de la información.

Cuenten con la capacidad de expresar de manera verbal y


escrita.

Manejo de sistemas tecnológicos


tecnológico

Competencias Tratar los datos de un estudio.


Análisis descriptivo y explicativo
específicas Calcular riesgos
Interpretar la información
Capacidad de construir modelos.
Credibilidad

Competencias Fuente confiable


transversales Diseñar, analizar, y evalúa los posibles riesgos

Fuente: Construcción propia a partir de análisis comparativo

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Pasado, presente y futuro

El alcance está relacionado con el conjunto de habilidades que una Institución de


Educación Superior (IES) debe desarrollar dentro del profesional en formación, así
como técnicas, intrapersonales e individuales. Están agrupadas en cinco (5) temas:
técnicas, funcionales, personales, interpersonales (comunicación), gerenciales y de or-
ganización. Esto permite al sector empresarial contar con profesionales capacitados
para hacer el mejor uso de sus conocimientos para el bien de la comunidad organi-
zacional, tanto al interior como al exterior. De igual manera, permite establecer la
medición internacional para acreditación de contadores.

Cada una de las competencias anteriores cuenta al interior con un desarrollo. Así que
cada una de ellas se complementa entre sí para la gestión de la investigación. Entre
ellas se encuentran:

Tabla 2. Competencias para el investigador en contador público


La capacidad de plantearse preguntas para la investigación, el pen-
samiento lógico y analítico, el razonamiento y análisis crítico.
La habilidad de identificar y resolver problemas no estructurados
Intelectuales que pueden darse en escenarios desconocidos.
Experiencia en la investigación y la evaluación de datos cuantitati-
vos.

Recibir y trasmitir información.


Formular juicios razonados y tomar decisiones eficazmente.
Interpersonales

La planificación estratégica, gestión de proyectos, administración


Organizacionales y geren- de personas y recursos, y toma de decisiones.
ciales

Fuente: Construcción propia a partir de (Norma Internacional de Formación)

De acuerdo con la Tabla 2, dichos componentes de las competencias no distan de la


formación que los profesionales de las áreas sociales requieren para su profundización
en el ámbito investigativo. Así, las primeras llamadas a fortalecer y generar son las
IES. En este sentido, las IES no solo son las precursoras de las competencias a nivel de
organizaciones como el Instituto Americano de Contables Públicos Certificados en
Estados Unidos (Suárez & Linares, 2017); también hablan de competencias para estos
profesionales, cuyas evaluaciones dan cuenta de las con los negocios.

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Pasado, presente y futuro

A nivel europeo se cuenta con Common Content Project; auspiciado por ocho (8)
asociaciones profesionales de seis (6) países europeos. Este expone un marco que el
profesional en contaduría debe contar como: “Cinco áreas de servicio en las que se
deben desarrollar habilidades cognitivas, de comportamiento, integradoras y multi-
disciplinarias, las cuales se enmarcan en un entorno de valores, actitudes y conducta
ética del profesional” (Pérez Escobar & Jiménez Cardoso, 2009, p. 303).

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) denomina las competencias labora-


les “como una capacidad efectiva para llevar a cabo exitosamente una actividad labo-
ral plenamente identificada. La competencia laboral no es una probabilidad de éxito
en la ejecución de un trabajo; es una capacidad real y demostrada” (2020).

Los organismos nacionales e internacionales cuentan con clasificaciones, denomina-


ciones y diversas áreas que cubren las competencias para la formación del profesional
en contaduría. De igual manera se encuentran transversales y permiten el incentivo
de la investigación. Por ende, se requiere dentro del país aspectos como incentivar la
participación de los contadores a la generación de nuevo conocimiento; fortalecer la
concepción de la globalización y fomentar a través de los currículos la investigación
con impactos sociales ambientales.

Ahora bien, si están son las tendencias, las conclusiones de dichas investigaciones se
encuentran en paradigmas contables; orientadas en corrientes interpretativas y poco
de sociocrítica. Los resultados e impactos demostrados en el medio cuentan con un
devenir orientado a la globalización, a la aplicación de las normas, principios y teorías
que permitan incorporar estas dentro de los gobiernos corporativos para su evolu-
ción. Además, solo visualiza los resultados a través de la evidencia de los activos pre-
sentes en la empresa.

La necesidad de profundizar en investigación es vital, cualquiera que sea su rama


gubernamental, social, ambiental, corporativa o educativa, su corriente, escuela o ten-
dencia. La investigación se hace vital en la medida en que permite resolver limitantes
actuales como normas internacionales y transversales a todos los países, así como
normas aplicables para las empresas. La contaduría pública es una ciencia social que
requiere con urgencia comunicar las innovaciones y las nuevas formas de visualizar,
más allá de pasivos y activos corporativos.

Si bien es cierto que la contaduría es una ciencia antigua y ha pasado por diferentes
etapas, se podría aseverar las dificultades con las que se cuenta en la actualidad. Tal

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Pasado, presente y futuro

parece existir un estancamiento relacionado con las formas de aplicación contable en


un mundo globalizado. Esto refuerza la idea según la cual la investigación debe tras-
pasar los límites de los países y establecer vínculos internacionales y, así, contar con
profesionales en contaduría con capacidades de analizar, interpretar y comprender la
realidad social económica y administrativa desde su propio que hacer.

Por otro lado, es necesario ampliar el panorama de las ciencias económicas y adminis-
trativas por su relación directa y existente. Se debe proponer un trabajo interdiscipli-
nario e interinstitucional, a la luz de Colciencias en cooperación y cohesión. Entonces,
más que estrategia debe realizar aportes significativos a las problemáticas actuales.

La investigación es elaborada dentro del contexto de formación humanista; incor-


porada en los currículos de las diferentes IES bajo la misma línea. En este sentido, es
evidente la mirada en retrospectiva que hay que efectuar para llegar a contar con una
investigación de calidad. Esto es, hacia la formación diseñada para los profesionales
del área; en donde se incuba la formación y se incentiva el interés a profundizar en la
disciplina como tal.

De igual manera, se requiere un trabajo interdisciplinario y empresarial. Esta unión


relacional permite contar con una mirada holística de desarrollo con impactos reales
en el contexto, que impacten de manera propositiva. Además, volver la mirada a la
integralidad de las escuelas y las corrientes, permitirá visualizar el futuro de la expan-
sión global del profesional contable.

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Pasado, presente y futuro

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