Manual Micro Pequeña Mediana Empresa-CEPAL-MAlvarez 2009 - Parte B
Manual Micro Pequeña Mediana Empresa-CEPAL-MAlvarez 2009 - Parte B
Manual Micro Pequeña Mediana Empresa-CEPAL-MAlvarez 2009 - Parte B
Amenazas y Oportunidades
Los capítulos que preceden han delineado la importancia que las micro, pequeñas y medianas empresas
tienen en la economía, cómo se las define y clasifica. En la segunda sección se buscó revisar cómo se
incorporan las MIPYMES en la economía nacional y en el sector externo, observando sus aportes y
determinantes. Es ahora necesario adentrarnos en cuáles son los principales problemas y amenazas a
los que las MIPYMES se enfrentan, y cuáles son las posibles formas de solucionar dichas barreras a su
desarrollo.
Analizaremos primero los principales problemas recogidos en las tipologías de los estudios empíricos del
sector; esto a fin de ofrecer una muestra de la amplia gama de desafíos a los que se enfrentan las
MIPYMES, según recogen dichos estudios a través de encuestas.
Posteriormente nos abocaremos al análisis más en detalle de algunas de las grandes amenazas al
desarrollo que sufren las micro, pequeñas y medianas empresas, con el objetivo de ofrecer algunas
alternativas en modo de solución a dichos inconvenientes.
32
Ejemplo de ello son nociones como la esbozada por López (2005) acerca de que la micro empresa presenta un
menor grado de inserción en los mercados que la pequeña y mediana. Es altamente probable que esto
efectivamente se así, pero el texto no presenta dato alguno que lo sustente.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Problemas generales
Las tipologías de problemas de las MIPYMES son variadas y extensas, antes de aventurarnos en ellas es
necesario establecer una clasificación principal entre las que se relacionan con factores y causales
internas a la empresa y aquellas que se presentan como impuestas por el medio, es decir que son
externas a la firma. Dicha clasificación es funcional al reconocimiento del ámbito de gestión de la
barrera, ya que los desafíos internos deben ser abordados desde una óptica –principalmente– de
capacitación de la empresa; mientras que para las amenazas externas se aplican políticas públicas, tanto
de fomento y apoyo al sector, como de estabilización macroeconómica.
Sobre las barreras externas e internas resaltamos cuatro clasificaciones realizadas por distintos
académicos –Huang y Brown (1999); Haar, Leroy-Beltrán y Beltrán (2004); y Dini, Ferraro y Gasaly
(2007)– y por el sector privado –la Cámara de Comercio de Santiago (2007)–; en la tabla que sigue
reclasificamos los problemas presentados en dichas tipologías, entre amenazas desde el interior y el
exterior de las empresas. Aquellas categorías que se repitan entre las distintas clasificaciones serán
tomadas como de una sola, a fin de evitar duplicaciones.
33
La categoría se repite en ambos sectores.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
sector, que muchas veces surgen a fin de resolver problemas económicos concretos y no apuntan a una
estrategia de inserción o producción a futuro.
En la misma línea Dini, Ferrero y Gasaly (2007) mencionan una serie de entrevistas en que los
empresarios de MIPYMES reconocieron responder más a una lógica productiva que competitiva,
haciendo que la atención a los clientes y la inserción en el escenario competitivo resulten de un largo
proceso de aprendizaje a través de prueba y error.
115
110
105
100
95
90
85
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
El segundo gran desafío del modelo económico impulsado por el “Consenso de Washington” fue la
liberación del tipo de cambio; donde Peres y Stumpo (2002) mencionan que la sobrevaloración de las
monedas ocurrida en la región latinoamericana en la década de los noventa, minó gravemente la
competitividad de las MIPYMES, ya que sus productos se encarecieron, comparativamente, con aquellos
importados desde mercados con monedas cuyo valor, medido en tasa de cambio, era menor; lo mismo
afectó a la competitividad de las exportaciones.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Lo anterior redunda en una creciente utilización, por parte de los empresarios, de recursos propios en el
desarrollo de su firma, ya sean estos ahorros o reinversiones de las ganancias obtenidas. Esto no es
negativo per sé, pero sí implica un techo de recursos que dificulta el desarrollo y crecimiento de las
empresas del sector. Otras formas de financiamiento que también son comunes implican el crédito de
consumo y recurrir a prestamistas, ambas son perjudiciales para el microempresario; la primera por sus
elevadas tasas de intereses –comparadas con los créditos bancarios– y la segunda por las connotaciones
negativas y las condiciones impuestas por los usureros, a lo que se suman intereses regularmente
elevados.
De acuerdo a un estudio realizado por Milesi y Aggio (2008) se puede clasificar a las fuentes de
financiamiento de las MIPYMES entre diez categorías principales; en orden de importancia de acuerdo a
lo relevado en el estudio:
Si bien el estudio separa entre MIPYMEX exitosas y no exitosas (medidas de acuerdo con el índice de
éxito exportador que veremos en el capítulo de Indicadores), en ambas la principal fuente es el
autofinanciamiento, y aunque existe una diferencia de casi diez puntos porcentuales entre la estructura
de ambos tipos de MIPYMEX, los componentes son 62% de autofinanciamiento en las exitosas y 71% en
las no. En cualquier caso, se destaca la debilidad de los sistemas financieros en los que operan las
empresas y la necesidad de mejorar el acceso a recursos, tanto para el inicio de actividades como para
las actividades de innovación.
Asimismo, el estudio de Gonzáles y G. de Adames (2008) establece cuáles son los principales factores, en
Panamá, que restringen la demanda de crédito, donde se destacan las garantías colaterales, los altos
costos y la baja calidad de los servicios públicos, los excesivos trámites de formalización, los problemas
en la titulación de tierras, y la escasa publicidad de los servicios de microfinanzas, entre otros.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Finalmente es necesario separar, como plantean Zamora y Sancho (2008), entre MyPEs y PyMEs, debido
a que las primeras solo acceden a créditos de consumo, prestamistas o instituciones de microfinanzas
(IMF), mientras que las segundas pueden obtener financiamiento por parte de la banca; lo importante
es notar que el sector de pequeñas empresas se encuentra en ambos segmentos, esto debido a su
diversidad, lo cual hace imposible el enclaustramiento de todas las firmas pequeñas en una sola
categoría. Resulta entonces fundamental mantener esta distinción, que si bien no divide claramente las
aguas, si plantea una diferenciación de las empresas a partir de los créditos a los cuales puede acceder,
debido a su tamaño.
El concepto general ha sido aplicado para estudios más específicos –aunque de áreas económicas más
extensas– como los de Díaz (2005) y Alvarez (2008), donde se destaca que las barreras sanitarias y
fitosanitarias, al igual que las medidas de seguridad en el comercio por las que son rechazados los
productos de exportación de firmas latinoamericanas, se deben en gran medida a que los
productores/exportadores desconocían la existencia de dichas reglamentaciones.
Es de esperarse que las grandes empresas cuenten con un departamento jurídico/técnico que se
encargue de mantener informada a la empresa en el desarrollo de legislaciones; lo mismo no puede
decirse de las medianas empresas, y mucho menos de las pequeñas o micro, donde no se plantea la
división de trabajo.
Y si los desconocimientos legislativos son importantes para la exportación a terceros mercados, lo son
más aún cuando el país se encuentra inmerso en un mercado común. Los procesos de integración,
superado cierto estadio, implican la libre movilidad de bienes, servicios y factores de la producción, a fin
de que esto sea efectivo, es necesario que el microempresario pueda tomar conocimiento de la
legislación pertinente en todos los Estados Miembros.
Existen dos vías para ello, la primera –más simple debido a que mantienen intangible la soberanía de los
Estados– es generar capacitaciones sobre las legislaciones vigentes en otros Estados; no obstante, ésta
modalidad es útil en tanto el número de Estados sea reducido, para el caso contrario se recomienda una
segunda aproximación, más compleja, que implica la armonización de ciertas normativas a nivel
comunitario.
Vulnerabilidad
El Libro Blanco de la Microempresa (1997) destaca tres ámbitos donde la Microempresa salvadoreña
presenta vicios de vulnerabilidad; dicha clasificación puede ser cómodamente aplicada a las
microempresas en todos los países, sino también a la pequeña empresa.
i. Vulnerabilidad legal: construida sobre la informalidad del sector y su falta de registro
formal, lo cual la desvincula de las obligaciones legales, pero la excluye de los derechos
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
que la ley otorga. Así mismo, esta vulnerabilidad se expresa, en algunos países, en la
disparidad de incentivos propuestos, aún estando la empresa legalmente inscrita; es
decir: el fomento hacia otros sectores es mayor que hacia el microempresariado.
ii. Vulnerabilidad empresarial: ésta se ve en la carencia de capacidades de gestión,
normalmente expresada a través de la falta de registros contables y de conocimientos
sobre herramientas básicas de gestión.
iii. Vulnerabilidad comercial: debido a la competencia que enfrentan en mercados
dominados por otras formas empresariales.
La clasificación del LBM se basa en tipos ideales, complementarios pero no excluyentes y con
descripciones genéricas; lo anterior implica que los tres tipos de vulnerabilidades no necesariamente se
presentan en conjunto en todas las economías, ni lo hacen necesariamente de la forma en que son
descriptas, dicha tipología responde a la ejemplificación de lo que implica una vulnerabilidad en cada
uno de los sectores, sin ser necesariamente figuras de aplicación textual.
En dicho escenario, la estrategia a largo plazo –rompiendo la barrera vista con anterioridad– e
implementación de decisiones orientadas a aprovechar las oportunidades y sobrellevar los desafíos
pesan grandemente en el desarrollo de las micro, pequeñas y medianas empresas, tanto en el contexto
doméstico como de internacionalización de productos.
Aquí es nuevamente positiva la articulación entre MIPYMEX y, especialmente, con GE exportadoras, que
apoyen y acompañen a las pequeñas firmas en los primeros momentos de su internacionalización.
También son importantes las colaboraciones estatales en facilitar a las MIPYMEX la participación en
ferias internacionales y la utilización de oficinas comerciales como fuentes de información especializada
acerca de los mercados de destino.
Oportunidades
Lo visto anteriormente en referencia con las amenazas a que se enfrentan las firmas de menor tamaño
puede dejar un resabio amargo sobre su posible desarrollo, pero hemos querido ir dejando entrever que
existen herramientas, novedosas y no tanto, que pueden y deben ser puestas a disposición de los
empresarios del sector, a fin de garantizar la factibilidad del desarrollo de éstos, siendo que ya se ha
visto la importancia que las empresas del sector revisten para las economías nacionales y el bienestar de
las sociedades.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Enfocaremos la presente sección desde cuatro grandes áreas de apoyo a la MIPYME, la primera es la que
corresponde al sector público y que reviste, en primera instancia, el debate sobre la necesidad de que
éste efectivamente intervenga; para luego ver cómo podría hacerlo. Luego veremos las herramientas
que se presentan desde el sector privado, principalmente como alianzas mixtas con el sector público e
iniciativas desde las grandes empresas hacia las MIPYMES. En tercer lugar se verá el aporte que se
espera desde la academia, como generadora de conocimiento y de capacitaciones enfocadas en el
microempresario. Finalmente se analizará el posible efecto benéfico de las tecnologías de la información
y las comunicaciones (TICs), y el comercio electrónico; para finalmente detenernos en el acceso a
recursos de financiamiento.
Desde el gobierno
Los primeros estudios sobre la relación entre el Estado y el sector MIPYME ofrecían una visión de libre
mercado, donde se presentaba a un gobierno italiano cuya política industrial en los primeros años de
desarrollo de la pequeña industria, había sido la “no-política”34, esta ausencia de intervención del sector
público era considerada como facilitadora del desarrollo de la MIPYME.
Dicha aseveración sería revisada años más tarde; como resultado se concluyó que el sector público sí
realizó una intervención, pero ésta pasó inicialmente desapercibida por los estudios ya que no se basó
en políticas de promoción directa de las firmas de menor tamaño, sino en inversión en infraestructura –
caminos y escuelas técnicas, entre otros– y establecimiento de estándares de calidad y salud
municipales.
En el camino hacia esta visión positiva de la intervención gubernamental a favor de las MIPYMES, ciertos
interrogantes debieron de ser resueltos; algunos de ellos –como hemos visto– respondieron a
concepciones teóricas o paradigmáticas generales; otras, en cambio, responden a situaciones propias de
cada país, que han sido resueltas en muchas economías, pero que deben ser encaradas en cada nueva
política nacional de fomento del sector; así Späth (1993) va a resumir el concepto bajo la noción de que
las MIPYMES deben ser apoyadas solo si prueban ser viables tanto económica como socialmente.
Di Tommaso y Dubbini (2000) cuestionan que se realicen intervenciones sin la existencia de una
verdadera teoría de la MIPYME que aporte luces sobre el funcionamiento del sector y las verdaderas
necesidades de éste. No obstante, debemos destacar que aún sin contar con dicho marco de referencia,
las inversiones en infraestructura parecieran haber probado ser lo suficientemente eficientes de manera
transversal como para poder ser implementadas sin mayor desarrollo teórico. Al mismo tiempo, el
desarrollo de la teoría sobre las MIPYMES –en el que se enmarca el presente trabajo– ha evolucionado
considerablemente desde el trabajo de Di Tommaso y Dubbin y creemos que se encuentra en un estadio
en el que ya posibilita a los Estados a implementar programas exitosos de apoyo a las MIPYMES.
En segunda instancia Peres y Stumpo (2002) destacan que existe una gran diferencia entre lo que se dice
y lo que se hace en materia de promoción de las MIPYMES; resultando esto en un apoyo público más
nominal que real, donde gran parte del discurso oficial no se ve respaldado por acciones que cuenten
con los recursos o los fondos necesarios para repercutir en el desempeño de las empresas del sector. Si
34
Ver CEPAL (1988, pág. 52).
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
esta realidad no es tenida en cuenta y se analiza la eficiencia de la intervención pública a través de los
resultados esperados de los discursos, programas o leyes, sin tener en cuenta los que realmente han
sido implementados, se estará sesgando la investigación. En la misma línea Meyer-Stamer (2001, pág.
38) afirman que “las MIPYME son objeto de la política social y no de una política económica dinámica”,
lo cual implica una aproximación, desde el gobierno, que atañe a la empresa de menor tamaño como
herramienta social y no reconoce su valor económico.
En tercer lugar el ámbito fiscal es de suma relevancia para la competitividad de las empresas, tanto para
dar confianza y certeza a los inversionistas, como para fijar tasas impositivas similares o competitivas
con los socios comerciales, bajando los costos de transacción de las operaciones fiscales. La presencia de
estos elementos puede no garantizar la competitividad, pero la ausencia de ellos la condena (Macias,
2008).
En lo que respecta a las políticas de promoción se destaca la necesidad de que en estas se incorporen los
conceptos de focalización, es decir una orientación de los programas hacia la inclusión de una población
económicamente marginal, diversificando los servicios a fin de adaptarlos a sectores de distintos
ingresos. Integralidad, que se entiende como el desarrollo simultáneo de diversas áreas y la
combinación de esfuerzos de éstas a fin de lograr el objetivo de desarrollo. Identificación de mercados, a
fin de que los productos se concentren en aquellos nichos donde efectivamente tienen oportunidades
de éxito. Y Fortalecimiento productivo a través de una base tecnológica que permita producir bienes que
compitan de acuerdo a las necesidades y gustos del mercado. (Parra Escobar, 2000)
Aparte de las políticas de promoción, existen también como herramientas públicas las Acciones de
Apoyo al sector, entre las que se destacan las enfocadas en áreas de capacitación –empresarial y
técnica–; asistencia técnica; facilitación de información; acceso al financiamiento; y organización (Parra
Escobar, 2000).
En cuarto lugar, el Estado tiene un rol fundamental en lo que respecta a evitar la continuidad del vacío
estadístico, jurídico y fiscal que constatan estudios como el de González y G. de Adames (2008) en
Panamá; situación que es preocupante, tanto para el desarrollo del sector como para la estabilidad del
empleo y la efectividad de las políticas públicas que a él se dirigen.
Por último, pero no menos importante, a fin de apoyar a las MIPYMES y a los trabajadores vulnerables
del sector, el Estado debe cumplir un rol coordinador entre los programas de apoyo a la capacitación de
los ministerios de trabajo, educación y comercio, experiencia que ha resultado muy positiva en muchos
países35. Lo mismo debe decirse de los programas de apoyo económico y financiero elaborados por los
bancos centrales y ministerios de economía.
redundará, eventualmente, en mejoras también de los suministros que ésta aporta a la GE. En un
segundo ámbito, se plantea también como parte de la Responsabilidad Social Empresarial36 (RSE) el
ayudar a las MIPYMES como parte de la ayuda a la población en la que se inserta la GE.
Existen gran cantidad de herramientas que las grandes empresas pueden y utilizan a fin de mejorar el
rendimiento de las MIPYMES asociadas a ellas. Estas áreas de articulación entre las grandes y las micro,
pequeñas y medianas empresas son recogidas por Bercovich, Martínez, Moori y Wiñazky (2006) a partir
de un estudio de campo realizado en Argentina; allí destacan siete áreas:
El mencionado estudio relevó que de las empresas involucradas en algún tipo de acuerdo de
articulación, más del sesenta por ciento reportaban haber experimentado efectos positivos a partir de
ellos, mientras que casi el cuarenta por ciento indicaron que el impacto fue significativo en su
desempeño exportador, como se reproduce en la siguiente tabla.
En tercer término debemos tener en cuenta que las iniciativas empresariales requeridas para el correcto
desarrollo de las MIPYMES en el ámbito de economías abiertas y con reestructuración económica de
mercado requieren no solo esfuerzo por parte del sector público o de la voluntad de las grandes
empresas en ayudar a las MIPYMES; Kaufmann y Tesfayobannes (1997) elaboran un listado de los
puntos en que es necesaria esta iniciativa por parte de las mismas micro, pequeñas y medianas
empresa, a fin de lograr el desarrollo estable y perdurable en el largo plazo:
36
“La responsabilidad social de la empresa (RSE) es el reflejo de la manera en que las empresas toman en
consideración las repercusiones que tienen sus actividades sobre la sociedad, y en la que afirman los principios y
valores por los que se rigen, tanto en sus propios métodos y procesos internos como en su relación con los demás
actores.” (Organización Internacional del Trabajo, 2008).
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
ii. Calidad y valor agregado. Las crecientes demandas en este ámbito empiezan a hacer
imperativa la adecuación de los procesos de producción a los estándares
internacionales de calidad, lo cual también implica buscar proveedores que garanticen
dicha calidad.
iii. Eficiencia. La forma de asignar recursos generando mayor producción y menor
contaminación ambiental exigen un nuevo estilo de conducción, con incentivos para el
personal y capacitación, modernizando así la cultura empresarial.
iv. Modernización. Las técnicas de producción suelen responder a procesos ya antiguos y
que requieren de una actualización, a fin de continuar siendo competitivos y
ofreciendo productos atrayentes.
v. Flexibilidad organizacional. Es necesario que se den mayores posibilidades de
cooperación empresarial, redes integradas y nucleamiento dentro del sector.
Los puntos señalados buscan una reorientación del empresariado mismo hacia la innovación no solo de
productos sino también de procedimientos y lógica empresarial. La MIPYME no debe esperar que las
ayudas y programas de promoción externos mejoren su competitividad y situación económica, si no está
dispuesta a implementar ella misma cambios al interior de su planta. Así, “todo lo anterior pierde validez
si no se asume un fuerte compromiso y capacidad de organización empresarial [… lo que] se traduce en
la identificación de características de liderazgo empresarial y capacidades de organización en los
empresarios de las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES)” (Figueroa de Santamaría, La
experiencia de las redes empresariales en Centroamérica, 2008, pág. 358).
La academia
El rol de los centros de investigación y de formación profesional es central en el desarrollo de una
industria nacional innovadora y, por lo tanto, afecta ya sea directa o indirectamente a la micro, pequeña
y mediana empresa. Con el sector de la academia existen dos tipos de vinculaciones importantes para el
microempresario, pero que deben partir desde los claustros, presentándose así como oferta y no
debiendo responder únicamente a la demanda.
El primer vínculo que debe robustecerse y que es fundamental para el desarrollo y fortalecimiento del
sector es la academia como generadora de capacidades. Esto no implica únicamente programas de
formación de técnicos –lo cual es importante–, pero sí de capacitación en el uso de tecnologías de la
información y las comunicaciones, en la utilización de herramientas de gestión y administración de las
empresas, en las formas modernas y más eficientes de organizar los talleres; y finalmente, pero no por
ello menos importante, en los nuevos medios y métodos para relacionarse con el cliente y aprender de
él.
El segundo vínculo, tiene relación con la función de la academia como generadora de innovaciones y
facilitadora de nutrientes de la empresa. La mayoría de las MIPYMES no cuentan con los recursos
necesarios para hacer investigación y desarrollo, y menos para pagar las licencias de las grandes
empresas. Es por ello que a la academia le corresponde la función pilar de desarrollar nuevos productos
y procesos, a fin de ponerlos a disposición de los microempresarios a menores costos que los de
mercado. Aquello siempre bajo la lógica de que el microempresario no debe ser favorecido en deterioro
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
de otros, sino para otros, que el conocimiento transversal solo se puede lograr cuando académicos y
empresarios comprenden que el trabajo mancomunado debe enfocarse a la ayuda y el desarrollo
comunitario, especialmente en sectores de tanta importancia para el desarrollo social y que no cuentan
con los recursos necesarios para realizar las investigaciones que las universidades tienen.
Estas articulaciones pueden darse tanto desde las universidades, como de los centros de formación
profesional y los bachilleratos; sean estos privados o públicos y a sabiendas de que debido a que el
espectro de las MIPYMES es tan amplio que todas las especialidades son necesarias y útiles al sector.
Las TICs no son per sé generadoras de eficiencia o de oportunidades, pero sí son herramientas
sumamente útiles al momento de reforzar la competitividad tradicional de las firmas y posibilitar el
ingreso a un mercado más demandante; lo que conduce a las MIPYMES a alejarse de un enfoque
estático de producción y acercarse más a las necesidades de los consumidores.
30,000
25,000
20,000
15,000
10,000
5,000
0
2005 2006 2007 2008 2010/e
Fuente: reproducido desde Centro de Estudios de la Economía Digital (2009, pág. 25)
Nota: año 2010 son estimaciones.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Si bien las TICs son transversales a las empresas, la capacitación para su utilización y la inversión para
adquirir las plataformas informáticas, así como el equipamiento necesario, resultan muchas veces
demasiado onerosos para los pequeños empresarios, donde el sector público debiera de intervenir a fin
de facilitar dicha tecnología.
Una de las herramientas TIC más extendidas es el comercio electrónico (e-Commerce), que orienta su
aporte a variar el canal o método tradicional de generar comercio, reduciendo intermediarios y,
consecuentemente, costos de transacción; haciendo de la transacción algo más eficiente en tanto
tiempos y dinero invertido, para la obtención de un mismo producto.
Las TICs también ayudan a la integración vertical de las empresas, propiciando a éstas un ambiente
digital en el cual pueden interactuar de forma simple, optimizando el uso de recursos; en consecuencia
nuevamente se eliminan intermediarios, no todos, pero si aquellos que no agregan valor al producto
(Kuwayama, E-commerce and export promotion policies for Small and Medium-Sized Enterprises: East
Asian and Latin American Experiences, 2001).
Es importante destacar las distintas dimensiones de las TICs, que implican no solo el poseer un
ordenador o acceso a internet, sino el uso que se da a estos implementos. Ueki (2005) relevó estas
interacciones para el caso chileno, donde el 93,5% de las PYMES tienen línea telefónica, pero solo el
72,5% cuentan con una máquina de fax; luego, solo el 62,7% tiene una computadora en sus oficinas, y
de éste porcentaje solo el 66,7% cuenta con acceso a internet; lo cual implica que solo el 41,8% de las
empresas acceden a la red.
Estos problemas se acentúan aún más entre los distintos tipos de empresas, donde las medianas
empresas cuentan con más acceso a internet que las pequeñas –67,9% en el primer caso y 37% en el
segundo– y a su vez, mientras el 35,6% medianas tienen página Web, solo un 9,8% de las pequeñas
presentan dicha característica.
El mismo estudio recoge las razones por las que las PYMES chilenas no contaban con internet en 2005 y
mientras se destaca un 20,5% que no tenía interés en contar con dicha tecnología, es importante
destacar que el 28,2% no contaba con el conocimiento o capacidad para la utilización de TICs y, más
importante, el 47% dijo que la razón para no contar con internet eran problemas presupuestarios.
Esto también conduce al concepto de “herramientas según nivel de desarrollo” de Zevallos (2008), que
implica la aplicación de políticas de fomento de las TICs, no solo hacia el sector MIPYME en general, sino
diferenciando internamente los distintos niveles de desarrollo en dicha área de acuerdo a cuatro grupos
generales.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
El grupo A lo componen aquellas empresas que requieren desarrollar competencias básicas, sin las
cuales no podrían incorporar las TICs más allá de los usos de correo electrónico e internet; el grupo B
son las firmas que ya pueden hacer cierto uso empresarial de las herramientas TICs, como transacciones
en línea, difusión y análisis de mercados. Finalmente el grupo C son las que incorporarían a las TICs para
interrelacionarse con el mercado, contactos con clientes, certificados, servicios de postventa, entre
otros. (Zevallos, 2008)
Grupo C
Grupo B
Grupo A
Número de empresas
Fuente: reproducido desde Zevallos (2008, pág. 42).
En primer lugar existe un debate importante al respecto de si el Estado debe intervenir en materia de
financiamiento y que, si debe hacerlo, cuál es la forma de proceder que favorezca mejor a las micro,
pequeñas y medianas empresas.
En segundo lugar, se plantea que los créditos del Estado no siempre están embebidos de una lógica de
mercado, prefiriendo el asistencialismo antes que premiar el desarrollo; esto no es negativo en cuanto
apoyo a la subsistencia del sector, pero sí lo es debido a que va en detrimento de las demás
organizaciones que ofrecen microfinanzas y que ven minada su capacidad de gestión debido a las
facilidades otorgadas por el Estado.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Lo anterior no implica que el Estado no deba intervenir en el mercado financiero, pero sí que dicha
intervención debe ser cautelosa a fin de evitar distorsiones –tanto intencionales como no–. La
herramienta más eficiente pareciera ser entonces la tasa de interés de referencia –o de política
monetaria– que maneje el banco central del país, y que sirve al sector privado como indicador del
interés a cobrar en sus préstamos. No obstante, este instrumento no se focaliza en las MIPYMES sino
que aqueja a todos los préstamos, y por lo tanto no sería una política enfocada directamente al sector.
Un segundo ámbito de acción son los bancos estatales, donde se pueden confeccionar líneas de crédito
específicas para las micro, pequeñas y medianas empresas, con requisitos más flexibles o tasas de
interés más convenientes. Esta política pública representa una mejor forma de acercar los beneficios
financieros al sector, ayudando a este a obtener los recursos que necesita; pero siempre que se
enmarquen dentro de las lógicas bancarias que las restantes instituciones financieras puedan
acompañar; esto debido a que el Estado no puede cubrir todo el espectro de las MIPYMES, entonces es
necesario que marque el camino a seguir a las demás instituciones, pero que estas puedan
efectivamente recorrerlo.
La tercera vía consta de garantías estatales a los préstamos para las MIPYMES. Muchas veces los bancos
privados son reticentes a prestar a los microempresarios por no considerar que éstos cuenten con las
garantías necesarias para cumplir con los requerimientos del crédito; allí el Estado tiene margen de
maniobra para intervenir como garante.
Respecto de la cantidad de instituciones que aportan recursos a las empresas del sector, las entidades
públicas parecieran poder hacer poco al respecto, no obstante, pueden elaborar nuevas líneas de
redescuentos que permitan facilitar créditos a las MIPYMES, bajo condiciones más favorables y con
mayor disponibilidad.
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Indicadores
Línea de base y el monitoreo de las MIPYMES
En muchos de los países latinoamericanos la MIPYME representa una proporción muy importante del
empleo y el PIB, en algunos de ellos llega a ser cercano al 90% del total de las empresas establecidas
(como es el caso de El Salvador); por ello hablar de estrategias para la micro, pequeña y mediana
empresa, implica hablar del desarrollo del país.
A razón de ello, establecimos en apartados anteriores que las estadísticas del sector MIPYME flaquean
en los ámbitos de la disponibilidad de datos. Asimismo se ha verificado que el análisis comparativo entre
países ha de realizarse con cautela debido a la no plena comparabilidad de los datos disponibles. Se hace
necesario dar solución a dichos inconvenientes a través de mayores esfuerzos por recolectar
información oportuna de empresas MIPYMES, por un lado, y por otro, impulsar la determinación de una
definición transversal a los países, mediante la aplicación de una encuesta uniforme –como se verá en el
capítulo siguiente–. A partir de allí es posible la plena aplicación de la formulación de indicadores de la
evolución y desarrollo de las empresas del sector, propuestos en esta sección.
Estos indicadores deben ser articulados, a su vez, en una línea de base que permita observar luego el
comportamiento de las micro, pequeñas y medianas empresas a lo largo del tiempo; a fin de poder
comparar el camino recorrido con la ruta trazada en consecuencia con los objetivos nacionales y/o
regionales que se determinen en los planes de gobierno para la MIPYME.
Esta sección del documento presenta el desarrollo en detalle de algunas líneas de trabajo para el análisis
de las MIPYMES. A diferencia de estudios particulares del fenómeno MIPYMES en países concretos,
donde el punto de partida son los datos existentes, el enfoque aquí seguido se basa en listar los
indicadores deseables con el fin de tener una buena herramienta de diagnóstico del estado de las
MIPYMES, con el objeto de promover una estrategia de definición de un instrumento adecuado para la
recolección de los mejores datos para un entendimiento cabal del estado de la MIPYMES. Para alcanzar
este propósito se revisaron numerosos trabajos y estudios de caso; tanto a fin de rescatar aquellos
indicadores propuestos en la literatura, como para generar nuevos a partir de las necesidades
observadas.
Un criterio que cruza los indicadores es el relativo al filtro clasificador a emplearse cuando se defina a
una empresa como micro, pequeña o mediana. En rigor, hablamos de uno de los tres indicadores
transversales empleados por los países, esto es: empleo, ventas y/o activos.
Se anticipa que el despliegue de indicadores sugeridos aquí, es complementado con una propuesta de
encuesta para el relevamiento de datos a nivel de empresa. Asimismo, el trabajo presenta los
lineamientos generales de una legislación estándar, que pudiera ser incorporada en un instrumento
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Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
legal apropiado en cada país, a fin de garantizar la confidencialidad de los datos entregados por los
particulares propietarios u operadores de MIPYMES, gran parte de los cuales pertenecen al sector
informal, muy difícil de incorporar a los censos o encuestas oficiales.
Con esta advertencia de método, se procede al listado y desarrollo de los indicadores y método a
emplear para dar seguimiento analítico al fenómeno de las MIPYMES en forma generalizada en un país
tipo, por lo que los ejemplos en muchos casos no se refieren a un único país, y en algunos corresponden
a ejemplos hipotéticos, ya que el énfasis se ha puesto más en el método y su interpretación que en los
casos particulares.
Análisis de estructura
El indicador más básico para el análisis preliminar del peso de las MIPYMES en el conjunto de la
actividad económica de un país determinado es el que se realiza a partir de la descomposición de las
principales variables que conforman los diversos tipos de empresas, a saber: empleo, valor agregado,
ventas brutas o netas, pasivos, exportaciones, importaciones, entre otras. A continuación presentamos,
en forma generalizada.
A lo largo de este manual generalizaremos estos dos subíndices (i y j) para identificar el tipo de
empresas, sin perjuicio de que el investigador pueda a su vez realizar un análisis de estructura en que
introduzca las dimensiones microempresa, pequeñas empresas y medianas empresas como entidades
individuales de análisis, como parte del vector de variables alfa.
La tabla 15 desglosa las diversas dimensiones del análisis estructural para cada uno de los elementos de
la ecuación arriba desplegada. Se advierte que el investigador y/o técnico involucrado en el seguimiento
y/o análisis de las MIPYMES podrá incorporar nuevas variables en función de la disponibilidad de datos.
Así por ejemplo, cabe la posibilidad de incorporar además una variable espacial geográfica territorial
que defina a cada una de las entidades sub-nacionales o municipales de un país determinado.
65
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
La tabla 16 refiere a manera de ejemplo en análisis de la estructura de las empresas por tamaño y sector
en el Brasil para año 2000. La información arroja que las MIPYMES representan el 99,6% del total de las
empresas del país, con una marcada participación de las microempresas en todos los sectores
considerados.
El resultado se expresa en puntos porcentuales del total, y arroja luces sobre el grado de participación
del grupo de MIPYMEX en un sector concreto. Cuanto mayor sea este porcentaje, mayor será el grado
de poder de negociación del sector en la economía en cuestión, por el mayor peso conjunto en el total
de las exportaciones y número de empresas. Se hace notar que el segundo término que multiplica la
ecuación es un factor de corrección del peso de las MIPYMES en el total del número de firmas del sector
en cuestión.
Donde: X está referido a las exportaciones; XT a las exportaciones totales; s es el sector económico; i se
refiere a las MIPYMES; j a las Grandes Empresas; n al número de empresas de la categoría i (MIPYMES);
y N el número total de empresas.
Se hace hincapié en que este indicador se propone para el caso de un sector particular. No obstante,
cabe la posibilidad de que se calcule para el conjunto de las empresas MIPYMES de un país específico.
Bastaría en este caso agregar el total de las empresas de todos los s sectores. Ante la eventualidad de no
disponer de datos de exportaciones, es posible recurrir a la variable ventas como variable proxy, así se
apreciará en el ejemplo que sigue a propósito de la ilustración de la forma de cálculo y de interpretación
del indicador.
La interpretación es directa y sencilla y se relaciona con el mayor valor del índice que en rigor ha de ser
calculado para el conjunto de las empresas MIPYMES. La tabla 17 presenta datos para tres países tipo.
Chile, con una gran cantidad de microempresas que exportan poco en relación al total; Brasil, con un
66
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
nivel relativamente más reducido de empresas pequeñas que Chile, pero con un nivel más alto de
exportaciones. Finalmente El Salvador, con una gran cantidad de MIPYMES, con un gran peso de las
medianas en el total de las ventas.
Cuando se calcula el índice, es importante tener en cuenta que ha de hacerse a partir de la sumatoria
del conjunto de participación de las exportaciones del total del grupo i, esto es de todas las micro,
pequeñas y las medianas empresas juntas para que el índice capte el poder conjunto de negociación que
el grupo MIPYMES pudiera tener en una economía determinada.
De hecho, los cálculos para los datos que aporta la tabla 17, y que se reportan en la tabla 18, permiten
observar que en el caso en que se calcula el índice para las micro, pequeñas, y medianas empresas
separadamente, el porcentaje resultante es menor que en el caso en que se calcula conjuntamente. Esto
es interesante, ya que como ya dijimos, el índice capta bien el poder de negociación cuando todas las
empresas actúan por una vocería única, que no por separado, caso en el que el indicador resultante en
todos los casos es bastante bajo.
El gráfico 9, pone de manifiesto la característica saliente del índice, que no es otra que ser el resultante
de la combinación de ambos factores, el peso de la estructura de la población empresarial, multiplicado
por el peso de la participación de mercado en el total de las exportaciones que alcanza el grupo
MIPYMES.
67
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
98,9 * 14,0
MiPyME Gran Empresa
98,9 86,0
13,8
Donde: VA equivale al valor agregado, y VAT significa valor agregado total, que incluye el valor agregado
tanto por las empresas MIPYMES como por las de GE. El resultado se expresa en base 100.
La interpretación del IVA es directa. A mayor valor agregado incorporado, el índice tendrá un resultado
más alto, de lo que se deduce que el sector MIPYME en el sector en cuestión analizado tiene más
ventajas competitivas por su mayor absorción y participación en la generación de valor total. Asimismo,
en el caso del índice agregado, el resultado medirá el peso de las MIPYMES en el valor agregado total en
un año o período determinado. La tabla 19 ejemplifica el caso del valor agregado censal como
proporción de las ventas brutas totales por tipo de empresas. Si bien no es exactamente el indicador
arriba referido, permite ilustrar las diferencias que se producen entre los distintos tipos de empresas.
Allí puede apreciarse que dentro del grupo de MIPYMES, el grupo de microempresas es el que posee un
valor agregado más elevado como proporción de las ventas brutas totales (46,7%), esto es casi el mismo
coeficiente que las GE (48%). En términos agregados, la incorporación de valor agregado en el total por
parte del conjunto de las MIPYMES es más baja que el de las grandes empresas, pese a que en el
conjunto de ventas totales las MIPYMES alcanzan al 47% del total.
Con fines únicamente ilustrativos se presenta un caso estilizado de alta y baja incidencia de valor
agregado (véase el gráfico 10). Este tipo de análisis es útil cuando se quiere tener una panorámica del
grado de mayor o menor peso de la generación del valor a nivel de sector económico.
Lamentablemente, la disponibilidad de datos a ese nivel es prácticamente escasa o nula, hasta donde
tenemos conocimiento.
68
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Tabla 19 – Ventas Totales, Valor Agregado e Índice de Valor Agregado por estrato
de MIPYMES: El Salvador, 2005
(En millones de dólares y porcentajes)
Ventas Brutas totales Valor Agregado Censal IVA
Tipos de empresas Millones de En porcentajes Millones de En porcentajes En porcentajes del
dólares del total dólares del total total
MIPYMES 9.242 47,0% 3.730 42,7% 40,4%
Micro 1.242 8,0% 732 8,4% 46,7%
Pequeñas 3.028 15,4% 1.151 13,2% 38,0%
Medianas 4.648 23,6% 1.847 21,1% 39,7%
Grandes Empresas 10.425 53,0% 5.006 57,3% 48,0%
Total 19.667 100,0% 8.736 100,0% 44,4%
Fuente: autores sobre la base de El Salvador (2007).
Gráfico 10 – Taxonomía tipo de alta y baja incidencia del valor agregado de las MIPYMES
(En porcentajes del valor agregado total)
Baja incidencia Alta incidencia
Grandes
empresas
MiPYMES
17%
27%
Grandes
empresas MiPYMES
73% 83%
Una forma de interpretar este indicador cuando se dispone de una serie temporal más o menos larga es
graficar su tendencia en el tiempo, lo que puede ser captada por números índices de base 100. Se
recomienda el cálculo de tal indicador para datos deflactados por un índice de precios, de modo tal que
se analice los cambios reales en la productividad por empleado del conjunto, o de diversos sectores en
particular.
69
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
La tabla 20 presenta dos medidas alternativas de productividad por empleado en miles de dólares para
el caso del total de las ventas brutas y el valor agregado obtenido por el Censo de El Salvador en 2005.
Nótese que la productividad mayor por empleado ocupado está detentada por las empresas medianas,
seguidas por las grandes empresas, con una clara baja productividad por empleado en las
microempresas.
150
100
50
0
MiPyMEs Micro Pequemas Medianas Grandes
Fuente: autores sobre la base de información de la tabla 20. La productividad por empleado
total según valor agregado = 12.487 dólares; la productividad por empleado según
ventas totales = 28.112, corresponden a los valores medios del índice = 100.
70
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
El gráfico 11 presenta el cálculo de los índices base 100 sobre la base de los resultados de la tabla 20. Allí
se aprecia con mayor nitidez el mayor peso de las empresas medianas en términos de productividad por
empleado, y el bajo desempeño de las microempresas.
Donde: Xi representa el valor total de las exportaciones de todos los diferentes estratos de las MIPYMES.
El resultado es un número entre 0 y 1. Un número pequeño y más cercano a cero es indicativo de mayor
diversificación de la variable analizada. Si se trata del número de empresas, un número pequeño indica
una mayor dispersión de empresas, lo que hace relación a un mercado con competencia perfecta. Si el
número es alto, se estaría en presencia de gran concentración de empresas MIPYMES en pocos sectores,
o alternativamente de un gran número de establecimientos concentrados en pocos sectores.
En el caso en que se disponga de información más desagregada que la de las ventas, o la participación
de mercado para el conjunto de sectores, y se pueda llegar a un mayor detalle a nivel de firma; mientras
71
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
más reducida sea la muestra de empresas de que se dispone, se recomienda el uso del índice
normalizado de Herfindhal-Hirschman el cual se obtiene de la corrección del índice de Hirfindhal con el
número de empresas del conjunto de la muestra analizada.
Nótese que en el caso en que el valor de n, en nuestro caso (el número de empresas) es alto, el valor del
IHH normalizado convergerá al valor del IH, por lo que se recomienda el uso del IH.
Para ejemplificar el uso de este indicador, se realiza un análisis sencillo a partir del conjunto de datos
por número de empresas y ventas para un grupo de subsectores del total de empresas de Chile entre
1999 y 2006. La tabla 21 presenta la información tal como se presenta en un reciente estudio de “La
Dinámica empresarial en Chile (1999-2006)”.
Tabla 21 – Número de empresas y nivel de ventas según sector: Chile, 1999, 2002 y 2006.
(En número de empresas y millones de dólares)
Desglose según sectores Número de empresas por sector Ventas Totales
1999 2002 2006 1999 2002 2006
Producción Agropecuaria 76.644 82.835 81.413 4.287 4.667 8.523
Servicios Agrícolas 16.317 20.790 6.399 2.313 2.867 1.768
Silvicultura 4.635 5.381 5.297 1.746 1.896 4.465
Pesca 2.984 5.019 4.003 1.667 2.342 4.092
Minas y Canteras 1.974 2.472 4.552 7.010 9.107 41.986
Alimentos, Bebidas y Tabacos 18.458 22.943 15.406 11.105 10.914 18.861
Textil y Cuero 10.738 12.429 12.467 2.316 1.884 2.967
Madera y Papel 7.523 8.642 11.167 5.191 5.341 9.887
Química, Petróleo, Caucho y Metales 4.100 4.428 5.091 8.059 9.556 12.623
Máquinas e Instrumentos 6.820 8.609 13.000 2.322 2.563 7.137
Otras Manufacturas 8.941 10.328 11.906 2.897 3.820 9.251
Electricidad, Gas y Agua 1.848 2.587 2.805 6.292 6.785 12.601
Construcción 38.091 46.877 54.226 9.720 10.162 21.751
Comercio 289.132 301.177 323.396 50.671 51.108 100.979
Restaurantes y Hoteles 32.227 31.747 35.118 2.079 1.774 3.570
Transporte y Telecomunicaciones 116.384 103.712 92.061 15.871 18.102 40.242
Servicios Financieros 15.580 17.912 31.490 29.193 32.814 72.555
Servicios Técnicos y Profesionales 69.018 73.943 85.983 12.997 11.602 41.332
Servicios Estatales, Sociales e Institucionales 15.818 19.944 24.551 5.219 5.017 10.166
Diversión y Esparcimiento 7.914 7.339 5.150 977 791 1.519
Servicios Personales 5.558 5.703 10.288 621 604 2.818
Otras Actividades 45.263 38.603 43.144 1.391 1.234 3.881
Total 795.967 833.420 878.913 183.945 194.951 432.973
IH calculado 0,18 0,17 0,18 0,13 0,12 0,12
Fuente: autores sobre Benavente H. (2008, pág. 19).
Puede apreciarse que el número de empresas se concentra en los rubros: comercio, transporte y
telecomunicaciones, que acumulan cerca del 50% del total de las empresas chilenas. Asimismo, estos
sectores, más el de servicios financieros captan igualmente el total de la ventas. Vamos a utilizar el
índice de Herfindahl para medir de forma sintética el nivel de concentración que ya se aprecia al revisar
los datos totales, utilizando la información estadística de la tabla 21. El índice calculado se reporta en la
última fila, y confirma con claridad la característica de un mercado moderadamente concentrado según
el número de empresas y ventas respectivamente, aunque un tanto menos en el caso de las ventas. El
gráfico 12 presenta la evolución del indicador durante el último tiempo. Nótese que esta moderada
72
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
concentración ha sido una característica invariante en el último tiempo en el caso del país del ejemplo
propuesto. Obviamente se resalta que los datos además de las MIPYMES incluyen al total de las
empresas, esto es que agregan también las ventas de las grandes empresas.
.180 .180
.160 .160
.140 .140
.120 .120
.100 .100
1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006
Fuente: autores sobre la base de Benavente H. (2008).
Finalmente, se indica que este indicador puede ser calculado también para los diferentes sectores por
diferentes tipos de empresas. Como en el ejemplo anterior y para el caso de Chile esto no fue posible, y
para una mayor didáctica, se procedió a su ilustración con la información desagregada de exportaciones
sectoriales según tipo de empresas para el caso de Argentina. Los cálculos del IH para las exportaciones
según tipo de empresas arrojaron que las grandes empresas son más concentradas que las
correspondientes a la categoría PyMEs. Como en otros casos anteriormente mencionados, la ausencia
73
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
de datos dificulta este tipo de análisis, muy útil para el estudio de la estructura y evolución de los
diferentes tipos de empresas de un país determinado.
Este coeficiente de base 100, presenta una medida adecuada para la intensidad del empleo de un sector
determinado dentro de los diversos estratos de empresas. Si el índice resultante es mayor que 100,
entonces estaremos ante una empresa más intensiva en mano de obra. La tabla 23 ilustra el caso de
esta razón para El Salvador. Allí se observa con claridad que las empresas más pequeñas poseen una
propensión más alta a ser más intensivas en mano de obra, esto es a emplear más que
proporcionalmente en el proceso productivo, a diferencia de las empresas medianas y grandes que
requieren menos mano de obra.
Este tipo de análisis ha de ser realizado a nivel de cada empresa; para, a partir de los microdatos, llegar
ex post a un resultado agregado promedio para el conjunto de las MIPYMES de una economía o región
particular. En la sección siguiente desglosaremos una metodología similar, explicando con bastante
detalle y con ejemplos prácticos para cada una de las variables o determinantes de la performance
exportadora. Asimismo explicaremos detalles de la construcción a partir de la valoración esquemática
de los diferentes variables de análisis.
74
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Básicamente son cuatro los indicadores que se consolidan en el índice compuesto de éxito exportador:
1) la continuidad exportadora; 2) el dinamismo exportador; 3) la diversificación de mercados; y 4) las
condiciones de acceso a los mercados para cada empresa en particular. Cada uno de estos subíndices
tiene una ponderación que va entre cero “0” y “10”, dependiendo de algunas condiciones
preestablecidas para cada caso. A continuación analizaremos cada uno de los factores considerados en
el índice compuesto, con la inclusión de las particularidades de su construcción. Los cuatro índices se
calculan como el promedio del índice del total de las n empresa consideradas en el estudio o análisis de
caso, esto es:
El número resultante captará el recorrido de la variable de las n empresas del país k. Para simplificar, se
utilizó la nomenclatura Índice f. Esta fórmula puede ser generalizada para cada uno de los cuatro índices
(ICEx; IDinX; IDIVX e ICAM), cuya modalidad de cálculo y asignación de puntajes se define a
continuación.
El índice de continuidad exportadora (ICEx) es una medida que evalúa a la empresa según su desempeño
exportador en función de la continuidad de las operaciones en un período determinado. A manera
ilustrativa, la tabla 25 presenta la tabulación utilizada por Milesi y Aggio (2008), quienes siguiendo a
Crespo, Contanzó y Sarudianzky (2007), asignaron un puntaje entre 0 y 10 a un grupo de empresas que
tuvieron actividad exportadora en el cuatrienio comprendido entre 2001 a 2004.
75
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
En términos prácticos, para aplicar los criterios de calificación, si una empresa exportó sólo un año, le
corresponderá un valor de 0 en el índice. Al contrario, si exportó durante todos los años del período, el
índice será igual a 10.
El índice de dinamismo exportador (IDEx) es una medida que captura la evolución de los montos
exportados en función de la tasa de crecimiento promedio anual para el período de exportación de
análisis. Siguiendo con el ejemplo del estudio de Milesi y Aggio (2008), para el período comprendido
entre 2001 y 2004, el cálculo a realizar previa la asignación del puntaje será el siguiente:
Donde Xn es el valor de las exportaciones del último año del período (2004 en el caso del ejemplo); y XN
el valor en el año inicial en que la empresa comenzó a exportar. El exponente m del radical se calcula
tomando la diferencia entre el último año y el primero del período. Así entre 2004 y 2001 hay
únicamente 3 periodos, calculados como la diferencia entre 2004-2001. Para el cálculo de los puntajes
del indicador propiamente dicho, Crespo et. al. (2007), al igual que Milesi y Aggio (2008) utilizaron una
tabla de asignación de puntajes en función del nivel de la proporción alcanzada por cada empresa de la
tasa promedio de las exportaciones manufactureras totales del país en el período de análisis (2001-
2004) en el caso del estudio de la referencia. La tabla 26, presenta los puntajes, y tasas de crecimiento
El Índice de Diversificación de exportaciones según mercados (IDivX), asigna a la empresa del grupo
algunos puntajes entre 0 y 10 en función de la cantidad de países a los que haya realizado
exportaciones. El criterio es simple. A mayor número de destinos mayor puntaje, como sigue:
76
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
El Índice de Condiciones de Acceso a los mercados (ICAM) asigna puntajes a las empresas en función de
si hay exportaciones realizadas bajo el amparo de un acuerdo de libre comercio o bajo la modalidad de
preferencias arancelarias recibidas como producto de uniones aduaneras o trato preferente unilateral,
como lo son los casos de los esquemas de integración, o las exportaciones hacia países que otorgan
beneficios bajo el Sistema Generalizado de Preferencias. La tabla de puntajes sugerida por Milesi y Aggio
define las siguientes valoraciones:
Nótese que el indicador puntúa más a aquellas empresas que exportan una mayor proporción de sus
exportaciones hacia países con los que no hay preferencias arancelarias recibidas. Esto porque se quiere
precisamente capturar el efecto del éxito exportador hacia lugares no cubiertos por tratados de libre
comercio u otro sistema de preferencias especiales, incluido aquellos programas con SGP (Estados
Unidos, Japón y la Unión Europea).
Ahora que hemos definido los cuatro indicadores que forman parte del índice de éxito exportador (IEEx),
vamos a explicar la forma de llegar al indicador sintético, mediante la ponderación de los cuatro
componentes.
Para un mejor entendimiento utilizaremos dos enfoques complementarios. Uno más esquemático, y
otro más formal. Para el primer enfoque lo haremos siguiendo la última revisión de Milesi y Aggio (2008)
de sus trabajos precedentes, y referida en la tabla 29 en el que se identifican los cuatro componentes
básicos y sus ponderaciones para el cálculo del indicador sintético. Nótese que dos componentes son de
carácter dinámico, y dos de carácter estático, lo que a juicio de Milesi y Aggio, da mayor valor a su
enfoque, que considera no sólo factores cuantitativos, sino también aquellos de tipo cualitativo.
77
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Téngase en cuenta que la construcción del IEEx da mayor peso a la dos condiciones básicas del
desempeño exportador, como son la continuidad exportadora (35%) y el mayor grado de diversificación
(35%). Los otros dos componentes –dinamismo exportador y condiciones de acceso– pesan 15% del
total.
En cuanto a la formalización del cálculo mediante el método de promedios ponderados, el cálculo del
IEEx se realiza del siguiente modo:
El índice resultante toma un valor entre 0 y 10 al igual que los valores asignados para cada uno de los
subíndices. Para su interpretación, se considera exitosa la empresa cuyo IEEx sea mayor o igual a 7
(siete), y no exitosa a aquella empresa con valores del IEEx menores o igual a 4 (cuatro).
Para efectos prácticos e ilustrar sobre el uso de este índice compuesto, la tabla 30 reproduce los valores
correspondientes a los cuatro índices para el conjunto de las empresas MIPYMES de 4 países. En la
misma tabla, en la última columna se presentan los resultados del índice para los cuatro componentes.
Se destaca que para poder realizar un análisis de este tipo en lo posible es necesario identificar bien el
número de empresas objetivo del análisis, que normalmente ha de ser balanceado entre países,
sectores.
78
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Brasil dispone de información desagregada que permite calcular este tipo de indicador. La tabla 31
detalla la distribución de las empresas por estrato dentro del sector MIPYME y también del conjunto de
las GE. Esto permitió el cálculo del peso de la base productiva en la base exportadora. Nótese como las
medianas empresas son para Brasil muy importantes en cuando número, ya que en términos relativos,
representan poco más del 13% del total de la base productiva, muy por debajo del mismo indicador para
el conjunto de las empresas del país.
La explicación formal sigue la línea de lo referido del análisis de estructura. A manera de ejemplo se
presenta en la tabla 32 la distribución de empresas y la participación en el valor exportado por
subregión para los Estados Federados de Brasil. Allí puede apreciarse la gran concentración
empresarial de MIPYMES en las regiones del sudesde del Brasil, las que concentran el 58,4% de las
empresas y a su vez el 52,3% de las exportaciones totales del grupo.
79
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Contribución al PIB
Una medida gruesa, pero de utilidad para el diseño de la política pública, tanto nacional como
también regional o local es el cálculo de índice de la contribución del valor agregado del sector
MIPYME en el total del Producto Interno Bruto Nacional.
A mayor valor agregado generado, mayor será la importancia de las MIPYMES en el total producido del
país. Este tipo de indicadores es de mayor utilidad cuando se calcula a partir de la desagregación de los
diversos sectores que conforman la economía del país. En países pequeños, este coeficiente de algunos
sectores que tienen a ser más grandes en la generación de valor. Su identificación y potenciación son de
gran preponderancia al momento del diseño de la política pública.
El coeficiente arroja como resultado la proporción del salario de las MIPYMES como parte del salario
mínimo. Si este índice es mayor que cien, se ha producido un proceso de convergencia entre los salarios
de los sectores MIPYMES hacia el salario legal nacional.
Nótese que la incorporación de la variable tiempo permite tener una idea del recorrido del coeficiente
en el tiempo. De este modo se puede observar si se está produciendo convergencia o divergencia del
salario medio del sector MIPYME hacia el salario mínimo legal. La gráfica siguiente ejemplifica un caso
estilizado de divergencia y otro de convergencia para un período de 15 años. Se advierte que los datos
de este ejercicio son sólo ejemplificadores y por tanto no corresponden a país o sector particular.
80
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
120
100
80
60
40
MiPyMEs región A MiPyMEs región B
20
1996
2001
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1997
1998
1999
2000
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
Fuente: elaboración propia sobre datos hipotéticos.
Mientras más elevado el número resultante del cálculo precedente, mayor será la dependencia del país
a las MIPYMES en la generación de empleo.
81
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
La intuición de este indicador está dada por la interacción simultánea de la producción y las
exportaciones de un país o grupo de empresas determinado. La tabla 34 presenta cifras hipotéticas para
dos países tipos, a partir de las cuales vamos a calcular la propensión marginal a exportar, derivando de
allí algunas conclusiones importantes.
En la práctica, cuando un sector en un país aumenta su producción por un lado, y también lo hacen sus
exportaciones en forma simultánea, la PMX es positiva, con lo que el peso de las exportaciones en el
total de la producción aumenta. En el caso contrario, cuando un grupo de empresas reduce su nivel de
exportaciones, aún cuando aumente su producción, tendrá una propensión media a exportar negativa,
con lo que al mismo tiempo vera comprometida su posición exportadora, y por ente su nivel de
internacionalización declinará en el tiempo. La tabla 35 presenta la visión estilizada de este indicador.
82
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Hasta el momento desconocemos de bases de datos que incluyan información de este tipo, detallada
para el caso de empresas MIPYMES. La recopilación de este dato a nivel de encuestas o en forma censal
es crucial para el estímulo de la política pública, sobre todo que a nivel más micro cabe la posibilidad de
identificar los sectores y actividades con mayor incidencia y/o ausencia de este tipo de estímulo
empresarial.
83
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Este indicador tiene una lógica de cálculo muy similar a la del índice de éxito exportador sugerido por
Crespo et. al. (2007) y recientemente adaptado por Milesi y Aggio (2008). La tabla 38 presenta los pesos
de cada uno de los seis factores antes referidos, los mismos que se reagrupan en tres factores centrales:
a) El desarrollo de competencia; b) la innovación; y c) la circulación del conocimiento.
84
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Relevamiento de datos
Modelo de formulario para relevamiento de datos
A continuación se presenta un formulario tipo, con las preguntas que se sugieren debieran de ser
incorporadas en un censo nacional, a fin de poder construir desde él una línea de base que permita el
análisis del sector. Una vez censado el universo, el mismo formulario puede ser utilizado para la
realización de una encuesta a una muestra representativa de la población.
Dos aclaraciones son pertinentes, la primera es que las preguntas han sido pensadas para un modelo
censal con encuestador y no para ser enviadas por correo, si se deseara seguir dicho patrón, es
necesario incorporar aclaraciones a las preguntas. En segundo lugar se plantea un formulario lo más
extenso posible, de manera que los países puedan ejercer recortes al mismo, si es que lo consideren
necesario, pero que no se vean luego en la indisponibilidad de datos si aplican en formulario tal y como
se presenta a continuación.
Encuestador __________
Fecha __ / __ / ____
Código de la Encuesta ######
País __________
Ciudad __________
Barrio __________
Nombre del Encuestado __________
Teléfono de contacto +## (##) #####
Correo electrónico de contacto __________@__________.___
85
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Cuántas ####
Registro Único Tributario de las
SI
sucursales, Nombres o
dirección
Número de Empleados Tiempo Completo ####
Dependientes
Medio Tiempo ####
Tiempo Completo ####
Independientes
Medio Tiempo ####
Tiempo Completo ####
Temporarios
Medio Tiempo ####
Aprendices/Practicantes ####
Número de Empleados hace 1 año Tiempo Completo ####
Familiares
Medio Tiempo ####
Tiempo Completo ####
Dependientes
Medio Tiempo ####
Tiempo Completo ####
Independientes
Medio Tiempo ####
Tiempo Completo ####
Temporarios
Medio Tiempo ####
Aprendices/Practicantes ####
Número de Empleados hace 4 años Tiempo Completo ####
Familiares
Medio Tiempo ####
Tiempo Completo ####
Dependientes
Medio Tiempo ####
Tiempo Completo ####
Independientes
Medio Tiempo ####
Tiempo Completo ####
Temporarios
Medio Tiempo ####
Conoce el monto de las ventas brutas del año SI Cuánto ####
pasado ó del mes pasado Cuánto esperan que sean las
NO ####
ventas brutas este mes
Conoce el valor de los activos SI Cuánto ####
A cuánto vendería su local y
NO ####
maquinaria
Conoce el gasto anual ó mensual en Materias primas ####
insumos SI Energía ####
Otros ####
Cuánto esperan se gaste este
####
mes en Materias primas
Cuánto esperan se gaste este
NO ####
mes en Energía
Cuánto esperan se gaste este
####
mes en otros insumos
La empresa ha tomado créditos SI
SI Especiales para MIPYMES
NO
SI
NO Tomaría
NO
Cómo se financia Recursos propios
Bancos Privados
Proveedores
Bancos Públicos
Clientes extranjeros
Programas públicos de apoyo a la innovación individual
Clientes nacionales
Programas públicos de apoyo a la innovación
asociativa
Fundaciones
Prestamistas
Créditos de consumo (tarjetas de crédito)
Otros
Conoce cuánto paga la empresa en impuestos NO Cuánto estima pagar este mes ($ ó %)####
Imp. Único ($ ó %)####
SI Imp. Ingresos Brutos ($ ó %)####
Imp. Al Valor Agregado ($ ó %)####
86
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
87
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
14001:2004
27001:2005
Otra __________
Licencias y Franquicias La empresa ha tomad Licencia de productos
Franquicias comerciales
La empresa ofrece Otros: _____________
Cuáles son los mayores problemas que enfrenta la Para crecer
Financiamiento Externo
empresa (Seleccionar las 5 más importantes) Por problemas financieros
Falta de capacitación
Pocos ingresos o inconstantes
Problemas financieros
Problemas de gerenciamiento
Problemas de contabilidad
Investigación de mercado
Bajas ventas
Dependencia de pocos clientes
Ventas
Canales de distribución
Falta de promoción o publicidad
Cambios en el mercado
Problemas en desarrollar nuevos productos o servicios
Productos
Cambios en la utilización de productos
Controles de calidad
Costos de Insumos
Disponibilidad de Insumos
Producción
Capacidad
Espacio físico
Computarización
Falta de experiencia
Poco personal o tiempo
Administración
Poco control sobre el crecimiento
Falta de planificación
Contratación
Retención
Satisfacción
Recursos humanos Despido
Entrenamiento
Legislación laboral
Gremios/sindicados
Situación macroeconómica
Tasas de interés
Inestabilidad
Ambiente económico
Tipo de cambio
Competencia Interna
Competencia Externa
Burocracia estatal
Seguros
Ambiente regulatorio Licencias
Cambios frecuentes de leyes
Inseguridad en el imperio de la ley
Montos excesivos
Impuestos
Complejidad en los pagos
Derechos de Autor Propiedad intelectual
Otros Otros
Cuenta la empresa con Línea Telefónica
Máquina de Fax
Computador
Conexión a Internet
Correo electrónico de la empresa
Correo electrónico del director
Sitio Web
Cuánto se gasta mensualmente en Servicios de telefonía ####
Servicios de internet ####
Servicios de marketing ####
Servicios de información Televisión ####
88
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Periódicos ####
Revistas especializadas ####
Exporta la empresa Desearía exportar ¿A dónde?: ____________
NO
No le interesa
__________
A qué destinos principales __________
__________
Qué montos/proporción ($ ó %) ####
Ganancia esperada
Reducir la dependencia
del mercado local
Demanda de los mercados
externos
Experiencia positiva
previa
Poca demanda del
mercado local
Como parte de la
expansión
Que motivó la exportación
Iniciativa externa
Contratos
SI
Exceso de producción
Iniciativas
gubernamentales
Cámaras de Comercio
Consulados/Embajadas
extranjeras
Ruedas de negocios
Misiones Comerciales
Otro
Elabora productos especiales SI
para la exportación NO
Venta Directa
Distribuidor/representante
Presencia Directa
Con qué modalidad se exporta
Acuerdos
Traders
Comercio Electrónico
Alguien se dedica específicamente al Comercio SI
Exterior NO
Se conoce la situación competitiva del mercado de SI
destino NO
Tiene relaciones con promotoras de exportación NO
SI
SI Han sido de utilidad
NO
Se han producido productos nuevos SI
NO
Cuántos productos Hacía inicialmente ####
Hace actualmente ####
Se han cambiado los procesos de producción Por mejora de calidad
SI Por nuevas tecnologías
Otros: ___________
NO
Se ha modificado la organización de la empresa SI
NO
Se han realizado cambios a partir de consultas a SI
clientes NO
Cómo podría ayudar mejor el gobierno a la empresa Planes de promoción
(seleccionar tres) Planes de financiamiento
Mejoramiento de la infraestructura
Mejoramiento la situación económica del país
Simplificación de la burocracia
Simplificación de la tributación
Capacitación técnica
89
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Capacitación regulatoria
Mejorando los estándares nacionales de calidad
Incorporando los estándares internacionales de calidad
Se relaciona la empresa con Una MIPYME Cómo proveedora
Una gran empresa Cómo cliente
Ninguna Otra relación
Está la empresa subcontratada SI Por quién ______________
Ha estado subcontratada por: _______________
NO
Nunca estuvo subcontratada
La empresa subcontrata SI A quién ______________
Ha subcontratado a: _______________
NO
Nunca ha subcontratada
Son los productos utilizados como insumos por otra NO
empresa < 25%
SI En qué porcentaje > 25% < 50%
> 50%
Utiliza la empresa insumos de otra empresa en NO
particular Nacional
De qué origen
Importados
SI < 25%
En qué porcentaje > 25% < 50%
> 50%
Promedio de edad actual de los empleados ####
Promedio de edad de hace cinco años o al inicio ####
Cuál es el salario de los empleados Promedio ####
El más alto ####
El más bajo ####
En promedio, los empleados ganaban en su trabajo Más
anterior Menos
Igual
No trabajaban
No Sabe
Cuántos años tiene su maquinaria Más vieja ####
Más nueva ####
La última vez que compró una máquina, fue Nueva
Ferias
Remates
Usada En Locales de compra/venta
Ferias
Otros: _____________
Nacional
De origen
Importada
Participa la empresa con dinero en actividades de NO
desarrollo social SI
SI Como parte de su negocio
NO
Dónde se compran normalmente sus insumos Mayorista Cerca de su empresa En el país
Minorista Lejos de su empresa En el extranjero
Cuántos proveedores se utilizan ####
Se cambia regularmente de proveedor SI
NO
Se contrató alguna vez a una consultora o empresa NO
de marketing SI
SI Le fue de utilidad
NO
90
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
Una segunda herramienta para el relevamiento de datos, que sería de interés y resulta de mayor
facilidad para la aplicación, consiste en incorporar a los formularios de aduana de los países una línea en
que las empresas se clasifiquen como micro, pequeñas o medianas, de acuerdo a los criterios
seleccionados.
Este tipo de medida tiene tres inconvenientes, en primer lugar existe el riesgo de que las firmas mientan
respecto de su tamaño por miedo a que la información pueda ser utilizada a fines fiscales. En segundo
lugar, solamente se van a estar recopilando datos respecto de las MIPYMES formales y exportadoras.
Finalmente, no recaba información sobre aquellas empresas que exporten dentro de la cadena de valor
de otra firma, es decir indirectamente. No obstante las mencionadas dificultades, se considera que, a fin
de obtener una rápida aproximación al tamaño y dinamismo del sector exportador, esta herramientas es
de suma utilidad.
Obstáculos
La aplicación de la encuesta propuesta, así como de cualquier otro instrumento estadístico que se
proponga relevar la información de las micro, pequeñas y medianas empresas, se enfrenta a una barrera
principal, encarnada en la reticencia de los empresarios del sector a responder abiertamente las
preguntas. Dicha actitud puede deberse a dos razones principales, la primera es el desconocimiento de
la información requerida, donde los encuestadores deberán de considerar los canales alternativos para
generar la información (estimaciones del microempresario, ventas del año anterior, entre otras).
La segunda razón, y la más importante a los fines de la presente sección, es el miedo a que la
información proporcionada pueda ser utilizada para perjuicio del empresario encuestado, ya sea esto
debido a que el revelar sus verdaderas estadísticas le impliquen un cambio en la categoría de empresa
en que se encuentre, con la consecuente modificación de beneficios –sean estos tributarios, crediticios o
laborales–, o que su empresa (total o parcialmente) no se encuentre cumpliendo con los requisitos
constitutivos legales.
Al segundo inconveniente se presentan tres vías de sortear el obstáculo, la primera es descartar dichas
observaciones estadísticas, dejando de lado a los empresarios que prefieran no ofrecer información
sobre su negocio; pero, como se ha explicado, la informalidad es parte del sector y, en ciertos países, se
estima que representa una amplia mayoría del sector MIPYME –especialmente en el caso de las
microempresas–; por lo tanto se deben hacer todos los esfuerzos necesarios para incluir los datos de
todas las empresas, incluyendo los de aquellas que, a primera instancia, se nieguen a proporcionarlos.
Una segunda vía de solución al obstáculo es la imposición por ley de la obligatoriedad de responder a las
preguntas de los encuestadores; este camino puede generar impopularidad en la medida e inducir a la
mentira, ya que los empresarios no sentirán beneficio alguno en la encuesta, por el contrario, se verán
bajo presión al momento de contestarla y esto desincentivará el emprendimiento del sector, ya que la
encuesta los obligaría a la legalidad; lo cual puede impedir su desarrollo inicial.
91
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
40,8%
Informal
59,2% Formal
No se pretende aquí hacer una apología de la informalidad de algunas de las empresas incluidas en el
sector MIPYME, pero sí es importante relevar los datos de aquellas a fin de poder generar políticas de
fomento, que las ayuden a desarrollarse, en la esperanza de que una vez firmemente establecidas,
regularicen su situación. Lo anterior es siempre preferible a ignorarlas o condenarlas en lugar de
corregirlas.
El tercer camino es el utilizado en los Estados Unidos para la recolección de estadísticas de servicios e
inversión extranjera por parte del Bureau of Economic Analysis37, para ello se promulgó en 1976 la ley
denominada International Investment in Trade and Services Act (Ley Pública 94-47238), dicha norma
efectivamente obliga a las empresas a contestar las encuestas, bajo apercibimientos legales, pero a la
vez le asegura a estas la confidencialidad de la información revelada, tanto a fines de la publicación de
los datos de la empresa, como de la utilización de los mismo por otros organismos del Estado.
Es decir que se les garantiza a los empresarios que la información que entreguen no será utilizada para
perseguir el pago de impuestos o para modificaciones por parte de agencias crediticias; en definitiva: la
información solo será utilizada para el análisis estadístico y no para fines impositivos, y esto es
garantizado por ley, de forma tal que si dicha información fuera efectivamente utilizada en cualquier
proceso legal, el empresario podría recurrir a la justicia a fin de imputarlo.
En segunda instancia se debe reforzar, y en esto colabora la ley al eliminar los fines percibidos como
negativos (impuestos, entro otros) que el responder las preguntas del encuestador redundará en
beneficios para el empresario y que está en su mejor interés el entregar la mayor cantidad de
información de que disponga y que la misma sea de la mejor calidad posible.
Medidas de confidencialidad
Para la confección del presente apartado se procedió a la revisión de la “International Investment in
Trade and Services Act” de los Estados Unidos (1976), a fin de confeccionar un cuerpo normativo tipo
que debiera ser promulgado dentro de un instrumento legal (ley, decreto o resolución ministerial, entre
37
Ver Durán Lima y Alvarez (2009).
38
Estados Unidos (1976).
92
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
A los ojos del lector la norma que se propone a continuación puede aparentar sobre proteger al
empresario, se insiste en que aquella es la sensación que se busca trasmitir al empresario con la norma,
a fin de que aquel se sienta seguro de poder facilitar los datos requeridos, sin temor a que sean
utilizados en su perjuicio.
Se insiste también en que el modelo a presentar no pretende ser un texto legal completo, antes se
presentan los componentes que debieran estar incluidos en una norma de las características
propuestas. En rigor nos concentramos en los considerandos y la sección resolutiva de lo que sería un
modelo a discutir en la legislatura, ministerio o institución de cada país interesado en promover el
enfoque recomendado.
Considerando:
Que la micro, pequeña y mediana empresa representa una proporción importante
del comercio local.
Que la micro, pequeña y mediana empresa es empleadora de la mayoría de los
trabajadores nacionales.
Que el apoyo, fomento y promoción de la MIPYME es no solo deseable, pero
también necesario para el desarrollo de la economía del país.
Que para la formulación de políticas de apoyo, fomento y promoción del sector
MIPYME se hace necesario conocer al detalle la situación de las empresas y sus
necesidades.
Que la recolección de los datos debe hacerse en el espíritu de ayuda y nunca de
perjuicio hacia los empresarios y sus empleados.
Que es del propósito del presente instrumento legal facultar al instituto a recolectar
los datos necesarios a través de encuestas.
Que dicho propósito debe armonizarse con la protección del empresario a través de
la confidencialidad de los datos que este otorgue.
b) Laborales,
c) Aplicación de derechos civiles o penales,
d) Evaluación de otorgamiento de financiamiento.
5. El Instrumento legal de implementación de la presente norma, especificará
también las sanciones a aplicar a los encuestadores, funcionarios
gubernamentales o cualquier otra persona o institución que divulgase total o
parcialmente la información individualizada por empresa.
94
Manual de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa
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