MIGE103 - S7 - Texto - Académico - Psicología Del Aprendizaje - PdelA
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y Gestión Educativa
Referencias .........................................................................................................................10
Objetivo general
1. El origen de la Gestalt
Al respecto, cabe mencionar que, aunque no fue su intención, los estudios de Khöler
sobre el discernimiento influyeron fuertemente en la psicología del aprendizaje,
especialmente al contrastar con las nociones de aprendizaje por ensayo y error propuestas
por los conductivas de primera generación, particularmente por Thorndike.
Un aspecto que llamó especial atención al psicólogo fue el hecho de que parecía que
la respuesta aparecía instantáneamente en la mente de los chimpancés, como si su cerebro
arrojara la respuesta necesaria al vincular asertivamente las distintas variables implicadas en
el problema. Este aspecto entraba en conflicto directo con Thorndike, quien planteaba, en la
ley del efecto, que la conducta se afinaba por ensayo y error, a partir de las consecuencias
deseables o indeseables generadas a partir de la ejecución.
2. Percepción y aprendizaje desde la Gestalt
Es necesario mencionar que en la percepción emergen las relaciones de las partes que
integran la forma, conformándose en un todo, en donde las propiedades individuales
modifican sus atributos, de manera que el todo no será necesariamente la suma de sus partes.
Todo dependerá de la estructura y relaciones del sistema de la figura percibida.
Una vez que las estructuras de la experiencia se hayan afianzado en el sujeto podrá
aplicar el mismo aprendizaje en otras situaciones similares, extrapolando el contenido de
manera dinámica. Esto se puede realizar porque en la Gestalt, más que importar la
memorización, se destaca el papel de la comprensión. Cuando un contenido internalizado es
modificado constantemente o se pierde la comprensión de su estructura tiende a ser olvidado
o distorsionado.
3. Pedagogía Gestalt
Para que este enfoque pueda ejecutarse eficazmente en los contextos educativos es
necesario enfatizar el contacto y el encuentro con el ser humano desde una pedagogía
integral que abarque diversos componentes de orden antropológico, como la interioridad,
la corporeidad y la intersubjetividad. A a final de cuentas, esto constituye la forma en la que
el educando se compone como figura, además de que no hay que olvidar que se parte de un
posicionamiento ontológico en donde cada persona es responsable de su propia existencia,
de manera que es configurada por sus decisiones y asociaciones con la realidad.
Aunque se hace una distinción casi didáctica del ser humano como figura unificada es
necesario aclarar que esto no atenta contra el carácter holista de su naturaleza. Es
precisamente por ello que autores como Petzold (en López Flores, 2020) recomiendan
considerar cinco dimensiones desde una pedagogía Gestalt integrativa para el diseño de
cualquier intevención: la corporal, la afectiva, la cognitiva, la contextual y la ecológica.
Aunque por razones didácticas se separen estas dimensiones, es claro que funcionan como
un todo articulado, de manera que la acción educadora debe contemplar al aprendiz tanto en
su totalidad orgánica como en su composición holísta y es por ello por lo que Petzold (en
López Flores, 2020) concibe a la pedagogía Gestalt como una pedagogía integrativa o como
una antropología integrada.
Finalmente, como afirma Perls (en López Flores, 2020), aprender es descubrir algo
nuevo, darse cuenta de que algo es posible, desde el contexto y realidad de cada persona. Es
decir, es una oportunidad para la humanización y dar sentido de la existencia, para el
contacto entre el ser humano y la realidad desde una postura que nace del “darse cuenta”,
de uno mismo, del otro y del conocimiento, partiendo de una escucha tanto del mundo
interno, como del mundo externo, para favorecer la creatividad y la integración de la persona.
Referencias