TD 3155 1
TD 3155 1
TRABAJO DIRIGIDO
Acreditada por Resolución CEUB 1126/02
MONOGRAFÍA
La Paz – Bolivia
2012
DEDICATORIA
ÍNDICE .................................................................................................................................. 1
PRÓLOGO ............................................................................................................................. 5
INTRODUCCIÓN ................................................................................................................. 6
TÌTULO PRIMERO DESARROLLO DE LA INVESTIGACIÓN ..................................... 7
CAPÍTULO I EVALUACIÓN Y DIAGNÓSTICO DEL TEMA ............................................................ 7
1. Marco Institucional ....................................................................................................................... 7
2. Marco Teórico ............................................................................................................................... 8
3. Marco Histórico ...........................................................................................................................13
4. Marco Estadístico........................................................................................................................14
5. Marco Conceptual .......................................................................................................................19
6. Marco Jurídico Positivo Vigente Y Aplicable...........................................................................27
CAPITULO II DIAGNÓSTICO DEL TEMA DE MONOGRAFÍA .......................................................35
LA POSTULANTE
TÌTULO PRIMERO
DESARROLLO DE LA INVESTIGACIÓN
CAPÍTULO I
EVALUACIÓN Y DIAGNÓSTICO DEL TEMA
1. Marco Institucional
2. Marco Teórico
a) El Positivismo Jurídico
El iuspositivismo, también conocido como positivismo legal, es una
corriente de pensamientos jurídicos. La principal tesis del iuspositivismo
es la separación entre moral y derecho, que supone un rechazo a toda
relación conceptual vinculante entre ambos.
El iuspositivismo entiende que derecho y moral son conceptos distintos
no identificables. Dado que el Derecho existe con independencia de su
correspondencia o no con una u otra concepción moral: una norma
jurídica no tiene condicionada su existencia a su moralidad; en todo
caso, puede ésta afectar su eficacia o legitimidad, mas eso es una
cuestión distinta. El Derecho puede ser justo e injusto, aunque lo
deseable sea lo primero.
El verdadero pilar del Iuspositivismo, que define al Derecho como un
producto únicamente de la voluntad del legislador, y a las
consecuencias de Derecho como el mero resultado lógico de colocarse
en el supuesto jurídico del que se trate en lo ordenado, es el
austriaco Hans Kelsen, autor de "Teoría pura del Derecho". Para
algunos iusnaturalistas la postura opuesta al iuspositivismo los
iuspositivistas son "malos" e "inmorales" porque avalan la existencia del
derecho injusto; sin embargo, como se verá más adelante, existen
varias clases de iuspositivismo, y algunos iuspositivistas también
critican las leyes injustas y la obediencia a las mismas, sólo que no
dicen que no sean verdadero derecho, sino que son derecho injusto1.
La idea del derecho responde aquí a una concepción formalista,
centrada en la forma o manera en que debe ser realizada una acción
para que sea un acto jurídico, y no en su contenido, justo o injusto, ni
en su finalidad. Sólo interesa asegurar un razonamiento coherente,
prescindiendo de su contenido. Es un retorno a Kant y a su
normatividad y formalismo. Se produce sobre todo a través de las
concepciones jurídico-filosóficas de dos de los hombres más
representativos del positivismo: Rodolfo Stammler y Hans Kelsen2.
Al concepto de hombres vinculados socialmente debe unirse la idea de
la vinculación de fines.
De manera que los juristas de la teoría pura no están llamados a
construir, sino a observar y a analizar el derecho, tal como éste se
presenta. Es preciso dejar de lado la preocupación por su origen, causa
o finalidad para centrarla en el derecho puesto, en el derecho positivo.
1
http://es.wikipedia.org/wiki/Iuspositivismo 20.03.12 Hrs. 20:00
2
http://www.todoelderecho.com/Apuntes/Varios/Apuntes/POSITIVISMO.htm 20.03.12 Hrs. 20 :10
es absorbido por la culpabilidad la cual consiste en un juicio de
reproche.
La corriente finalista surge de la concepción de los elementos que
maneja la corriente causalista, claro está que con enfoques
completamente distintos. “La teoría finalista de la acción surgió para
superar la teoría causal de la acción, dominante en la ciencia alemana
penal desde principios de siglo.”
El jurista Hans Welzel dio origen a la teoría de la acción finalista que
plantea una sistematización jurídico penal diferente a la ya conocida
teoría causalista, en general Welzel acepta que el delito parte de la
acción, que es una conducta voluntaria, pero ésta misma tiene una
“finalidad”, es decir persigue un fin.
Welzel basa su teoría no solamente en lo que respecta a los elementos
integradores del delito, sino también en el derecho penal. “La misión del
derecho penal consiste en la protección de los valores elementales de
conciencia, de carácter ético-social, y sólo por inducción la protección
de los bienes jurídico-particulares”.
Detrás de cada prohibición, asegura el fundador de la teoría finalista
podemos encontrar los deberes éticos sociales y la pena debe dirigirse
sólo a la protección de los fundamentales deberes ético sociales como
la vida, la libertad, el honor.
La teoría finalista afirma que el legislador al crear tipos penales debe
estar sujeto a las estructuras permanentes de la teoría del delito y
no violentar las estructuras para evitar caer en contradicciones. De
tal modo que el legislador debe partir de los conceptos de acción,
antijuricidad y culpabilidad, como estructuras fundamentales, que
servirán para preservar los derechos fundamentales del hombre, es
decir que su actividad creadora no debe ser autónoma, si no sujetarse a
los principios de la teoría del delito.
El sistema finalista, ubica el dolo y la culpa en el terreno de la acción y
omisión típica; no acepta la distinción de los causalistas en fase objetiva
y subjetiva del delito; le otorga a la culpabilidad un contenido diverso,
excluyendo de este elemento el dolo y la culpa, que se ubican en el
estudio de la tipicidad.
El sistema causalista se fundamenta en la filosofía positivista y ve
al fenómeno jurídico penal de la acción, como un hecho de orden
natural, libre de sentido y valor.
En cambio, el sistema finalista se inspira en la filosofía de Kant, que a
su vez es el fundamento de la escuela llamada “filosofía de valores”,
desarrollada en Alemania a principios del siglo XX, donde se plantea
que el derecho no es una reproducción de la realidad, sino el resultado
de los conceptos extraídos de esa realidad a través de una elaboración
metodológica fundada en “valores” y “fines”.
En forma muy esquemática podríamos decir que en el sistema
causalista el método determina el estudio del objeto; en el sistema
finalista el estudio del objeto determina el método.
3
Santiago Mir Puig, Derecho Penal- Parte General, Ed. Juventud, pág. 48.
3. Marco Histórico
Esta redacción del texto original del Código Penal Boliviano fue
posteriormente modificada por la Ley 1768 de Reformas al Código Penal,
dada su abierta contradicción con el derecho a la vida consagrado
expresamente por la misma Constitución, que es una norma de aplicación
preferente en virtud de la supremacía constitucional.
4
http://www.la-razon.com/suplementos/la_gaceta_juridica/Reimplantar-pena-muerte-
Bolivia_0_1572442814.html 25.03.12 Hrs. 21:00
4. Marco Estadístico
PANDO
BENI
SANTA CRUZ
TARIJA
POTOSI
ORURO
COCHABAMBA
LA PAZ
CHUQUISACA
Homicidio Homicidio
7% 18% 12%
15%
25% 19%
Violación, Violación,
estupro y abuso 51% estupro y abuso
53%
deshonesto deshonesto
Robo Robo
Bolivia 2011
Homicidio
19% 15%
17% Violación, estupro y
49% Robo
Robo Agravado
(atracos)
BOLIVIA: DENUNCIAS DE CASOS DE DELITOS NO CONSUMADOS Y/O NO ESCLARECIDOS, POR
DEPARTAMENTOS, 2009 – 2011 (P)
CASO BOLIVIA CHUQUISACA LA PAZ COCHABAMBA ORURO POTOSI TARIJA SANTA CRUZ BENI PANDO
2009
Tentativa de asesinato 194 12 50 89 7 3 10 11 7 5
Tentativa de homicidio 871 35 148 155 19 28 53 385 23 25
Tentativa de violación 418 39 115 40 20 30 37 87 31 19
Robo Frustrado 323 43 36 23 24 21 7 87 75 7
2010
Tentativa de asesinato 264 9 118 72 11 10 11 18 6 9
Tentativa de homicidio 930 28 219 113 21 20 52 332 129 16
Tentativa de violación 585 29 147 63 21 18 54 126 100 27
Robo Frustrado 366 51 92 32 16 26 15 90 43 1
2011
Tentativa de asesinato 211 23 44 69 9 8 4 30 19 5
Tentativa de homicidio 1000 50 219 113 29 35 72 352 114 16
Tentativa de violación 593 83 136 86 13 20 51 99 85 20
Robo Frustrado 295 49 71 32 4 8 7 72 47 5
Fuente: POLICÍA NACIONAL
INSTITUTO NACIONAL DE ESTADÍSTICA
(P): Preliminar
Tentativa de Tentativa de
11% asesinato 17% 12% asesinato
18%
Tentativa de Tentativa de
23% homicidio homicidio
48% 27% 44%
Tentativa de Tentativa de
violación violación
Robo Robo
Frustrado Frustrado
Bolivia 2011
Robo Frustrado
BOLIVIA: POBLACIÓN PENAL SEGÚN DEPARTAMENTO Y SEXO, 2006 – 2008 (P)
CASO BOLIVIA CHUQUISACA LA PAZ COCHABAMBA ORURO POTOSI TARIJA SANTA CRUZ BENI PANDO
2009 8073 200 1897 1745 267 334 338 2558 568 119
Hombres 7142 183 1588 1513 243 308 364 2306 525 112
2010 9406 267 1971 2000 300 363 546 3255 544 160
Hombres 8337 241 1643 1712 272 337 511 2948 525 148
2011 11195 316 2558 2108 407 407 609 4017 606 167
Hombres 9886 286 2122 1838 366 375 655 3610 577 155
4500
4000
3500
3000
2500
2000 2009
2010
1500
2011
1000
500
0
BOLIVIA: COMPORTAMIENTO DELICTIVO DE LAPOBLACIÓN PENAL, SEGÙN DEPARTAMENTO Y TIPO DE
DELITO (1), 2006 – 2008 (P)
CASO BOLIVIA CHUQUISACA LA PAZ COCHABAMBA ORURO POTOSI TARIJA SANTA CRUZ BENI PANDO
2009
Violación 1420 46 217 333 61 76 144 447 72 24
Asesinato 822 24 269 136 62 35 39 213 34 10
Homicidio 407 8 87 89 26 23 32 115 22 5
Robo 1538 33 270 215 39 75 55 634 187 30
2010
Violación 1717 52 214 479 47 74 172 578 71 30
Asesinato 916 29 279 167 76 47 38 241 34 15
Homicidio 511 14 104 125 33 24 35 149 22 5
Robo 1934 47 267 304 58 100 121 817 178 42
2011
Violación 2272 43 431 318 56 85 82 1002 210 45
Asesinato 2057 72 319 504 74 96 209 671 84 28
Homicidio 1177 37 368 211 105 44 53 320 35 13
Robo 624 23 150 125 41 36 42 178 24 5
Fuente: DIRECCIÓN GENERAL DE RÉGIMEN PENITENCIARIO
INSTITUTO NACIONAL DE ESTADÍSTICA
(1) Existen internos que registran más de un delito
(P): Preliminar
Violación Violación
37% 34% 38% 34%
Asesinato Asesinato
19% Homicidio 18% Homicidio
Robo Robo
10% 10%
Bolivia 2011
10%
37% Violación
19%
Asesinato
Homicidio
34%
Robo
De las entrevistas realizadas al interior de Fiscalía – Zona Central se
puede deducir que:
ENTRE EL SISTEMA PENAL EL SISTEMA MODIFICAR LA C.P.E EXISTENCIA DE LA
VISTAD BOLIVIANO PENITENCIARIO CON REF. A RETARDACION DE
O SANCIONES JUSTICIA
Fiscal No se encuentra El sistema progresivo No, porque el problemas Sí, porque existe
Inspector formulado de acuerdo a la nunca se puso en vigencia está en la aplicabilidad corrupción, burocracia, y
realidad social otros
Fiscal Debe ser modificado de Debe ser modificado de Sí, porque no tiene leyes Sí, por falta de personal y
Div. acuerdo a la realidad acuerdo a la realidad para reinserción y su material de oficina
Corrupció social. social. aplicación
n Pública
Fiscal La normativa es adecuada, Se halla en crisis No, porque las penas no Sí, porque la forma de
Div. el operativismo adolece de hacen a la comisión del admisión y tramitación es
DIPROV deficiencias delito deficiente
E
Personal Está muy atrasado a pesar Existen falencias por el Sí, porque es más Sí, por parte de los
Subaltern dela ley 007, necesita hacinamiento y sancionador y debe buscar operadores de justicia y
o ECO- mejoras retardación de justicia medidas de rehabilitación también a los abogados
FIN
Personal Actualmente está en Tiene buenos propósitos Sí, porque con la pena Si, por la mala praxis
Subaltern decadencia por no pero este no cumple el fin máxima no estamos realizada por los abogados
o ECO- adecuarse a la actualidad. propuesto cumpliendo el máximo y funcionarios y el poco
FIN que tiene nuestro sistema conocimiento de los
penal ciudadanos en la
aplicación de la ley
Procurado Falta implementación de Existe una gran falla Sí, porque existe Sí, por falta de
r nuevos tipos penales de porque el sistema desbalance respecto a la conocimientos por parte
acuerdo a la evolución penitenciario no cumple punibilidad y el tipo penal delos funcionarios y la
científica y social. con la reinserción social. establecido en la CPE. masiva carga procesal.
Fiscal Está correctamente Que faltan condiciones de Sí, para que modifiquemos Sí, por la carga procesal
Asistente establecida pero poco equipamiento y existe nuestro CPP para que no estructura e instrumentos.
Div. implementada para nuestra mucho hacinamiento. exista contradicciones
Corrupció realidad. tiene que ser modificada
n Pública nuestra CPE.
Personal Es un tanto obsoleta para Pobre y triste, porque el Sí, porque debe ser acorde Sí, porque existe mucha
subaltern nuestra coyuntura ya que sistema no se atreve a a la modernización de la recarga laboral
o Div. existen muchos vacíos tratar a todos por igual. sociedad.
F.E.P.D.C jurídicos.
Personal Está mejorando pero aún Es aceptable pero no Sí, aplicando la pena de Sí, por la negligencia en el
Subaltern existen falencias, cumple con la norma muerte. personal de apoyo en
o ECO- establecida existen juzgados.
FIN deficiencias.
Abogada Necesita modernizarse y Existe bastante Sí, porque en relación Sí, porque los procesos en
Independi mayor celeridad hacinamiento en las delos delitos de corrupción su mayoría duran más de
ente penitenciarías y con ello estos si deberían tres años.
se hace inviable la prescribir.
efectivización del sistema
progresivo.
Personal Las penas son Tiene que superar la Sí Sí
subaltern benevolentes contra los retardación de justicia.
o Div. reincidentes.
Corrupció
n Pública
Personal Se podría decir que ha Se encuentra en Sí, todas las etapas Sí.
subaltern mejorado por sus orales en hacinamiento total que va deberían ser más cortas y
o Div. los juicios. en contra delos D.D.H.H. menos las dilaciones.
Corrupció
n Pública
Personal Que se encuentra en Que aún le falta una visión No, porque el mal no se Sí, por el mal manejo.
subaltern proceso de cambio con las global de colaboración a encuentra ahí.
o Div. nuevas leyes penales. las personas que son
Corrupció recluidas
n Pública
5. Marco Conceptual
5
Carlos Jaime Villarroel Ferrer, DERECHO PROCESAL Y LEY ORGANICA JUDICAL, Impreso en: IMPRENTA Y
ENCUADERNACION “II TIGRES” julio de 2003 La Paz - Bolivia, pág. 19
6
Loc. Cit.
7
Ibíd. Pág. 139
propios de la misma, bajo las responsabilidades que establecen la
constitución y las Leyes.8
DELITO: Edmundo Mezger en su tratado de derecho penal el Delito
es la acción típicamente antijurídica y culpable. El delito es acto
humano, es decir conducta, cualquier mal o daño que no tiene origen
en la actividad humana, por graves que sean sus consecuencias no
puede reputarse como delito.9
VIOLACIÓN: Infracción, quebrantamiento o transgresión de ley o
mandato. Incumplimiento de convenio. Tener acceso carnal con
mujer privada de sentido, empleando fuerza o grave intimidación o,
en todo caso, si es menor de 12 años, en que carece de
discernimiento para consentir un acto de tal trascendencia para ella.
(V. VIOLACIÓN DE LA MUJER.). Profanación de lugar sagrado. (V.
PROFANACIÓN.). Alejamiento, desdoro de una cosa. Delito, falta.
DE CORRESPONDENCIA. Atentado contra el secreto o respeto que
el correo merece, por la confianza de las personas que lo utilizan y
para no defraudar, en cuanto a los organizadores del servicio, a
quien ha pagado el franqueo para que el traslado y la entrega de la
correspondencia se efectúe con total normalidad. DE DOMICILIO.
Entrada en domicilio ajeno contra la voluntad del dueño, y sin que
concurra alguna necesidad imperiosa y legítima para quien lo hace ni
el cumplimiento de un deber como autoridad o con relación al
prójimo En algunos ordenamientos jurídicos, la permanencia en
vivienda de otro, aun habiendo entrado con su permiso, cuando se
ordena el inmediato abandono del domicilio. DE LA LEY. Infracción
del Derecho positivo; ya sea norma de índole civil, que permite exigir
su cumplimiento forzoso o la reparación consiguiente: y a algún
principio cuya transgresión lleve aneja alguna consecuencia punitiva,
por constituir delito o falta. DE LA MUJER. Delito contra la
8
Ibíd. Pág. 125
9
Benjamín Miguel Harb, DERECHO PENAL, tomo I librería Ed. Juventud La Paz-Bolivia, Pág. 178
honestidad y contra la libertad que se comete yaciendo carnalmente
con mujer contra su voluntad expresa, por emplear fuerza o grave
intimidación ; contra su voluntad presunta, por encontrarse privada
temporal o permanentemente de sentido, por enajenación mental,
anestesia, desmayo o sueño, o por faltarle madurez a su voluntad
para consentir en acto tan fundamental para su concepto público y
privado, para la ulterior formación de su familia y por la prole
eventual que pueda tener. DE SECRETOS. Delito que comete el
funcionario público que revela o descubre cuestiones reservadas de
las que, por razón de su cargo, tenga noticia o hechos de publicidad
vedada. o por divulgar documentos que estén bajo su custodia.
ASESINATO: Acción y efecto de asesinar; esto es, de matar con
grave perversidad, con alguna de las circunstancias que califican
este delito en los códigos penales.
REINCIDENTE: Se dice del hecho de un individuo que, luego de
haber sido condenado por un delito o una infracción, cometa otro
igual (reincidencia especial) o de distinta naturaleza (reincidencia
general). Hay reincidencia cuando el condenado por sentencia firme
comete un nuevo delito, antes de prescribirse el anterior. La
reincidencia es considerada circunstancia de mayor peligrosidad,
que autoriza a graduar más severamente la pena que corresponde al
segundo delito; obsta a la condena condicional, a la libertad
condicional y a la excarcelación. Algunas legislaciones tienen en
cuenta la fecha de la primera sentencia y otras, la del delito.10
Son muchas las acepciones que podemos encontrar dentro de la
doctrina sobre Reincidencia. Para Cabanellas “Reincidencia es la
repetición de la misma falta, culpa o delito; insistencia en los mismos.
Estrictamente hablando se dice que reincidencia es la comisión de
igual o análogo delito por el reo ya condenado. Agrava la
10
GARRONE, José A., Diccionario Jurídico–Tomo IV, Ed. Lexis Nexis, Buenos Aires, 2005, pág.
158
responsabilidad criminal por demostrar la peligrosidad del sujeto, la
ineficacia o desprecio de la sanción y la tendencia a la habitualidad”
(Cabanellas Tomo VII: 112).
Reincidencia es la realización de un nuevo delito, por el mismo
agente después de haber sido condenado por otro anterior, cuya
pena se haya sufrido en todo o en parte y antes de haber
transcurrido un determinado tiempo fijado por la ley. Coincidiendo
con Amado Ezaine respecto a la Reincidencia, diremos que es la
“recaída en el delito” (Ezaine 1977: 253-254)
RECONVENCIÓN: (Derecho Procesal Civil) Figura por la que la
parte demandada, al contestar la demanda, busca hacer valer la
pretensión que tiene contra su demandante. Es una contrademanda;
se puede decir que se hacen valer dos pretensiones en una misma
acción. Comúnmente conocida como la contrademanda o
contracción. Según Alsina es una “demanda que introducen el
demandado en su contestación (...) y constituye un caso de
pluralidad de litis en un proceso entre las mismas partes”. Constituye
una pretensión, esta vez, planteada por el demandado frente al actor
originario (sujeto activo), dándose una acumulación de pretensiones.
Acto de petición hecha por el demandado contra el demandante ante
el mismo juez y en respuesta a la demanda que se le ha interpuesto,
para que ambas sean tramitadas y resueltas con la sentencia.11
TRATADO: Como obra, la que versa sobre una ciencia o arte, que
considera amplia y sistemáticamente. Convenio, contrato, Por
antonomasia, convención internacional, suscrita por dos o más
príncipes o gobiernos.
PACTO: Acuerdo obligatorio de voluntades, Lo así convenido.
Convención jurídica desprovista de acción judicial. Contrato,
Tratado internacional. Cualquiera de las cláusulas o condiciones de
un concierto voluntario, entre particulares o entre Estados. Supuesto
11
http://www.librejur.com/descargas/diccionario.pdf 21.12.11 hrs. 22:00
trato o convenio con el demonio, para obrar prodigios o sortilegios. A
este respecto se distingue entre el pacto explicito, en que existe
formal consentimiento humano; y pacto implícito o tácito, cuando se
hace algo ligado al pacto aun no concertado expresamente.
ACCESORIO. Cualquiera de los acuerdos agregados a un contrato
principal, cuya estructura modifica ampliándola, restringiéndola o
alterándola, pero con subsistencia de su carácter esencial. PACTO
ADICIONAL. Cláusula o convenio entre partes que ya han celebrado
un pacto o contrato y agregan al mismo una nueva declaración de
voluntad tendente a modificarlo, aclararlo o anularlo en lodo o en
parte. ANTICRÉTICO. Convenio entre acreedor y deudor en virtud
del cual el primero percibe, por vía de intereses, los frutos de la
prenda que le entrega el segundo, hasta llegar el caso de que éste le
satisfaga el importe de la deuda. COLECTIVO DE CONDICIONES
DE TRABAJO Son las normas reglamentarias acordadas por
representaciones clasistas que, ostentando el mandato de los
empresarios y de los trabajadores de las actividades en general a
que se hayan de referir, tienen fuerza de ley, una vez aprobadas por
la autoridad, y las que se dan por incluidas en los contratos
individuales de trabajo, sin que la sola voluntad de las partes puedan
dejarlas sin efecto en perjuicio de los trabajadores. La Oficina
internacional del Trabajo dio la siguiente definición: "Toda
convención escrita, concluida por un cierto período, entre uno o
varios patronos, o una organización patronal de una parle y un grupo
de obreros o una organización obrera de otra parte, con el fin de
uniformar las condiciones de trabajo individuales y, eventualmente,
reglamentar otras cuestiones que interesen al trabajo". COMISARIO.
Cláusula contractual que permite a cada una de las partes la
rescisión del convenio si no cumple el otro obligado. COMISORIO
EN LA PRENDA. Cláusula del contrato pignoraticio sobre cosas
muebles que faculta al acreedor, en caso de vencer la deuda y no
pagarla el deudor, para quedarse con el objeto que constituye la
garantía de la obligación. DE ADICIÓN. Se le denomina también
pacto de señalamiento de día o de adición en 1111 día. Escriche lo
caracteriza como aquel que, en un contrato de venta, se hace a
veces entre el vendedor y el comprador, conviniendo ambos en que,
si hasta cierto día encuentra el vendedor quien le ofrezca más precio
por la cosa vendida, pueda retirarla de las manos del comprador
para darla al segundo oferente. DE CUOTA LITIS. Convenio que
celebra un abogado con su cliente para patrocinarlo a cambio de
percibir una cuota parte del objeto del litigio, para el supuesto de
ganar el pleito. Comprende asimismo la análoga convención
realizada por un procurador. DE MEJOR COMPRADOR La
estipulación de quedar deshecha la venta si se presenta otro
comprador que ofrece precio más ventajoso. DE NO AGRESIÓN.
Nombre poco afectuoso, ya que parece reprimir apenas un impulso
bélico evidente o atenuar tan sólo una aversión peligrosa, que la
diplomacia actual aplica a los tratados temporales suscritos por dos o
más Estados para respetarse mutuamente y resolver sus conflictos
sin recurrir a las armas. DE PREFERENCIA. Cláusula agregada al
contrato de compraventa, por la cual el adquirente se obliga a
conceder preferencia al vendedor en el su puesto de vender la cosa
el comprador. Con carácter más general, Capitant define este pacto
como la convención por la cual una persona se compromete, para el
caso en que se decida a celebrar un contrato determinado, a dar la
preferencia al beneficiario de 'la promesa en las mismas condiciones
que las que ofrezca un tercero o en aquellas determinadas en el
momento de la convención, DE RETROVENTA, DE RETRO o DE
RETRAER. una de las cláusulas más importantes y relativamente
frecuente derivadas del contrato de compraventa y por la cual el
vendedor, quizá apremiado para enajenar, pero deseoso de recobrar
lo que vende, se reserva la facultad de recuperar la cosa vendida,
devolviendo el precio recibido del comprador, o lo convenido, dentro
del plazo estipulado o en las circunstancias concertadas. La Part. V.
tít. Y, ley 42, lo caracteriza como el que se hace entre el comprador y
vendedor, estipulando que devolviendo éste el precio haya de
recobrar la cosa vendida. Pothier lo define como el pano que reserva
al vendedor el derecho de redimir o volver a comprar la cosa
vendida. DE SUCESIÓN FUTURA. Convención en que una de las
partes se obliga con respecto a otra persona a procurarle derechos
sucesorios, como heredero o legatario en su propia sucesión. Por
violar la esencial facultad revocatoria del restador, y para evitar
pactos inmorales o abusivos económicamente, se prohíbe en las
legislaciones actuales. DE VENTA A SATISFACCIÓN DEL
COMPRADOR. Esta estipulación es In que se hace de no haber
venta o de quedar deshecha la misma si la cosa vendida no agrada
al comprador. DEL ATLÁNTICO NORTE. También se menciona
abreviando el punto cardinal: Pacto del Atlántico, El suscrito entre
varias naciones europeas y del norte de América, para defenderse
contra la amenaza y las posiciones ocupadas por Rusia y satélites
contra el bloque que se autodenomina democrático. EN
CONTRARIO. El acuerdo privado de voluntades que se aparta de la
regulación previsora o supletoria que el legislador establece para
determinadas situaciones jurídicas o por si las partes se limitan a
declarar que realizan determinado contrato o pacto, sin detallar
debidamente su contenido. NUDO. Dentro del Derecho romano, la
convención o acuerdo voluntario desprovisto de acción en juicio,
pero con fuerza de obligación natural. PROHIBIDO. El que la ley
veda que se celebre y cuya nulidad declara al menos, cuando no
determina alguna sanción penal. SOCIAL. Para la acepción
correspondiente al Derecho político, inspirada por las ideas
rusomanas, (V. CONTRATO SOCIAL.) En el Derecho Mercantil y
Civil, conjunto de condiciones que rigen los derechos y obligaciones
de cada uno de los miembros de la sociedad. (V. SOCIO.)
Sociológicamente, la serie de obligaciones y compromisos que los
convencionales humanos imponen para posibilitar la convivencia en
una esfera determinada de la organización social o en un lugar
concreto. SUCESORIO. El convenio entre dos personas para
heredar una de ellas los bienes de la otra o sucederse
recíprocamente.
12
http://www.derecho.com/c/Derechos_humanos 01.04.12 Hrs. 22:00
no se podrá reimplantar la pena de muerte en los Estados que la han
abolido; lo cual se ha efectivizado por vía constitucional, en el caso de
Bolivia.
f) LEY 007
En su Artículo 226,infiere, que el fiscal podrá ordenar la aprehensión del
imputado, cuando sea necesaria su presencia y existan suficientes indicios
de que es autor o partícipe de un delito de acción pública sancionado
con pena privativa de libertad, cuyo mínimo legal sea igual o superior a
dos años y de que pueda ocultarse, fugarse o ausentarse del lugar u
obstaculizar la averiguación de la verdad, excepto en los delitos previstos y
sancionados por los Artículos 132 bis, 185, 254, 271 primer párrafo y 331
del Código Penal.
Además que la persona aprehendida será puesta a disposición del juez, en
el plazo de veinticuatro (24) horas, para que resuelva dentro del mismo
plazo, sobre la aplicación de alguna de las medidas cautelares.
g) LEY DE EJECUCIÓN DE PENAS Y SISTEMA PENITENCIARIO
En los artículos 8 inciso c) y 22 inciso c), indican que el condenado tiene
que demostrar aptitud y hábito de trabajo. Y satisfacer la responsabilidad
civil o constituir fianza real o personal. Además si se encuentra en libertad
tenga un buen comportamiento y se someta a la tutela del Juez de
Vigilancia y de los servicios Post penitenciarios dependientes de la
Dirección General, hasta el cumplimiento total de la condena.
13
Carlos Flores Aloras, Derecho Penitenciario y Ley de Ejecución Penal y Supervisión, S/n Editorial Pág. 102
Declaración Universal de los Derechos del Hombre, en la que
prevalece como precepto fundamental el derecho a la vida.
En Bolivia, son muchas las razones para la inaplicabilidad de la
mentada pena de muerte.
Además, somos parte del contexto internacional en el que formamos
parte de organizaciones que en los diferentes convenios y tratados
emanados se establece la prohibición de dicha práctica. Por último,
la razón por la que no se puede reinstaurar la pena de muerte a
cogoteros y toda clase de asesinos es por la sencilla situación de
que no se posee medios adecuados para determinar, en casi la
totalidad de los casos, la culpabilidad a ciencia cierta del verdadero
asesino, toda vez que las ciencias forenses en nuestro país se
limitan a simples y aberrantes presunciones, por no contarse con los
medios especiales para tal fin, tanto del ente investigador como el
del ofendido. Por ende, por un análisis adecuado de la realidad en
nuestro país, aplicar la pena de muerte sería la más grande
aberración en la situación presente.
Otras de las razones de la inaplicabilidad, creo, es que estamos en
una sociedad culturalmente corrupta, donde vemos a diario que
algunos investigadores policiales, fiscales, jueces, abogados y
magistrados sólo se avocan a intereses personales, es decir, a
percibir un quantum económico a cambio de favorecer la causa de
quien ha invertido, dejando en situación impune el delito, por lo que
la pena de muerte sólo sería una cruel injusticia para el desposeído
económicamente, como viene sucediendo hasta hoy en día; es una
situación lamentable para tratar de imponer una pena que no amerita
retroactividad en la vida de quienes padezcan la injusticia de ser
inmolados.
Hoy, en la zona andina, por presión social, se instaura sentencia por
el sindicado, sentencias de las más crueles que hemos podido
observar; es decir, bajo la indignidad de la tortura y el vejamen
contra la humanidad como la quema en vida, el entierro en vida y
otras atrocidades por algún delito reparable. Lo peor es que muchas
veces se realiza con el gran error de identificación del verdadero
culpable, ya que la sola sindicación vale para que se cometan estas
bestialidades producto de la perversión que arroja la ignorancia
generalizada de los actores, en desconocimiento del cuerpo legal del
ordenamiento jurídico nacional e internacional para el tratamiento
penal de los infractores. Lo más grave es que estas situaciones son
mostradas a la población sin ningún cuidado mediante medios
visuales que lastiman la cognición de los seres humanos.
De toda esta cruda realidad, establecemos en concreto, en común
acuerdo con muchas personalidades que han expresado su opinión
con base en realidades y motivos, que no se puede revalidar esta
cruel sanción. Todos los fundamentos desarrollados por el ser
humano son a favor de la vida y en contra de la pena de muerte,
donde el intelecto de estas personas han establecido y dejado de
lado esta vieja práctica de la antigüedad que en su época fue más
justa que la que hoy pretenden implementar en barrios y
comunidades andinas, toda vez que en el pasado se castigaba en
igual medida al delito y no de manera desigual como se viene
realizando.14
b) Jurídicos en Bolivia
Cada sociedad, históricamente, ha creado, y crea, sus propias
normas penales, con rasgos y elementos característicos según el
bien jurídico que en cada caso se quiera proteger.
En los tiempos primitivos no existía un derecho penal estructurado,
sino que había toda una serie de prohibiciones basadas en
conceptos mágicos y religiosos, cuya violación traía consecuencias
14
http://alanvargas4784.blogspot.com/2012/03/el-debate-sobre-la-pena-de-muerte-en.html 06.08.2012 Hrs. 09:00
no sólo para el ofensor sino también para todos los miembros de su
familia, clan o tribu.
En el Incario se puede reconocer:
La Imputabilidad Personal.
Circunstancias modificativas de la responsabilidad, para los
que se tomaban en cuenta aspectos tanto criminológicos
como la edad, sexo, estado mental, carácter de delincuente;
como también victimológicos, como el carácter dela víctima y
otros aspectos relacionados.
Su justicia se esforzaba por comprender la situación personal
del culpable, de tal manera que se llegó hasta perdonar el
robo por necesidad.
Su postulado de Política Criminal de orden preventivo el ama
sua, ama llulla y ama quella (no seas ladrón, no seas
mentiroso y no seas flojo).
Imponían las penas ejemplarizadoras como la privativa de
libertad en cárceles, pena de esclavitud como los yanaconas.
Se evitaba en gran manera la delincuencia y esta era
bastante escasa por su ejemplar sistema de organización
social, la gravedad y certeza de ejecución de las penas.
Exigió en todo instante, salvo las excepciones de una técnica
penal imperfecta, una consideración personal del delincuente
para determinar su responsabilidad que no se basaba en el
simple resultado, habiendo elementos suficientes para
conjeturar una distinción entre el dolo y la culpa.
El estudio histórico de la función represiva muestra la evolución del
Derecho de sancionar. De esto surge el verdadero valor del derecho
de castigar que es el actual Derecho Penal, pues en su evolución
muestra el asentamiento de la autoridad del Estado y por ello no ha
faltado alguien como Augusto Carnaz exprese “la reforma del
Derecho Penal está íntimamente ligada al movimiento general de la
civilización”.15
Las falencias del sistema penal boliviano, presto por diversas
razones a la discriminación, podrían dar lugar a la imposición de la
pena de muerte a algunos, mientras que quizás otros que hayan
cometido delitos similares o peores se libren del castigo, ya sea
porque las primeras no hayan tenido recursos económicos
suficientes para contratar asistencia competente o, en su caso,
fueren juzgados por tribunales que se comportaran más
severamente por diversos factores como la corrupción o la presión
social.
Es de reconocer que nuestra justicia no está exenta del “error
judicial” por el cual, erróneamente, se podría condenar a muerte a un
inocente. Una realidad evidenciada por Amnistía Internacional en
diversas partes del mundo es un ejemplo de lo aseverado, con el que
cientos de condenados a la pena capital lograron escapar a la
sanción impuesta por el surgimiento de pruebas posteriores que
demostraron que la sentencia se debió a una conducta indebida del
Ministerio Público o la Policía, al uso de testimonios, pruebas o
confesiones poco fiables, o una asistencia inadecuada.
Ahora bien, más allá de los argumentos señalados, hay que tomar en
cuenta que la finalidad de una pena es, por una parte, proteger a la
sociedad del delito y, por otra, lograr la enmienda y reinserción del
condenado a través de una cabal comprensión de la ley (artículo 3
de la Ley de Ejecución Penal y Supervisión).
Se debe recordar que el Estado boliviano es parte de los
instrumentos que forman el bloque de constitucionalidad del
Segundo Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos sobre la Abolición de la Pena de Muerte, ratificada
15
Benjamín Miguel Harb, Derecho Penal Tomo I Parte General, Editorial Juventud-Sexta Edición La Paz –
Bolivia 2003, Pág. 33
por la Ley 3423; del Protocolo Adicional a la Convención Americana
sobre Derechos Humanos, relativo a la Abolición de la Pena de
Muerte; y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos; y
no son susceptibles de reforma interna y que imposibilitan el
restablecimiento de la pena capital.
Por ello, si bien es cierto que nadie puede quedar indiferente ante un
crimen que vulnera el derecho a la integridad o a la vida de una
persona, pues, nuestra naturaleza como miembros de esta gran
familia humana nos provoca sentimientos de justicia, no es menos
cierto que los mismos sentimientos que, en realidad son valores, no
deben permitirnos concebir la idea de restablecer la pena de muerte
como una forma de solución sin considerar previamente la esencia
de que esas dimensiones deshumanizantes son las causas del
problema.
Pedir la pena de muerte, en el fondo de este complejo asunto, es
reconocer que como comunidad hemos fracasado. En la medida que
esa toma de conciencia sea unánime, estaremos en condiciones de
dar el salto cualitativo que nos permita reconstruir nuevos tejidos
sociales en el escenario del nuevo Estado Plurinacional, del que
todos estamos convocados a ser parte, donde necesariamente debe
prevalecer la capacidad de convivir entre todas y todos los bolivianos
apegados a la Constitución Política del Estado, al ordenamiento
jurídico vigente, a la normativa nacional e internacional de los
derechos humanos constitucionalizados, con aquellos valores de
usos y costumbres liberadores que colocan la vida en el centro de
los instrumentos jurídicos, de los pueblos indígena originario
campesinos de los que emergen los principios del equilibrio entre la
comunidad y el Estado.
Para ello, se hace cada vez más imperioso aceptar nuestras
diferencias étnicas, sociales, culturales, religiosas, políticas o
económicas, como los mejores espacios para resolver los problemas
que ahora nos acucian. Logrando esos avances estaremos en
mejores condiciones de enfrentar retos para los problemas a futuro.
2. Ámbito Internacional
a) Los Derechos Humanos
Lista de Instrumentos internacionales y regionales de derechos
humanos ratificados por Bolivia
o Convención sobre Prevención del Crimen y la Sanción del Delito
de Genocidio, Nueva York, 9 diciembre de 1948.
Ratificada por Bolivia mediante Ley Nº 3061 promulgada el
30 de mayo de 2005.
Depósito del instrumento de ratificación el 14 de junio de
2005.
o Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las
Formas de Discriminación Racial, Nueva York 7 marzo de 1966.
Ratificada por Bolivia mediante D.S. Nº 09345 de 13 de agosto
de 1970, elevado a rango de Ley Nº 1978 promulgada el 14 de
mayo de 1999.
Depósito del instrumento de ratificación el 22 de septiembre de
1970.
2a. Enmienda al artículo 8 de la Convención Internacional
sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación
Racial, Nueva York 15 enero de 1992.
o Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y
Culturales, Nueva York 16 diciembre de 1966.
Bolivia se adhiere mediante D.S. Nº 18950 de 17 de mayo de
1982, elevado a rango de Ley Nº 2119 promulgada el 11 de
septiembre de 2000.
Depósito del instrumento de ratificación el 12 de agosto de
1982.
o Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, Nueva York
16 diciembre de 1966.
Bolivia se adhiere mediante D.S. Nº 18950 de 17 de mayo de
1982, elevado a rango de Ley Nº 2119 promulgada el 11 de
septiembre de 2000.
Depósito del instrumento de ratificación el 12 de agosto de
1982.
o Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles
y Políticos, Nueva York 16 diciembre de 1966.
Bolivia se adhiere mediante D.S. Nº 18950 de 17 de mayo de
1982, elevado a rango de Ley Nº 2119 promulgada el 11 de
septiembre de 2000.
Depósito del instrumento de ratificación el 12 de agosto de
1982.
o Convención sobre la Imprescriptibilidad de los Crímenes de
Guerra y de los Crímenes de Lesa Humanidad, Nueva York, 26
noviembre de 1968.
Bolivia se adhiere mediante D.S. Nº 19777 de 13 de
septiembre de 1983, elevado a rango de Ley Nº 2116
promulgada el 11 de septiembre de 2000.
Depósito del instrumento de adhesión el 6 de octubre de 1983.
o Convención Internacional sobre la Supresión y Castigo del
Crimen del Apartheid, Nueva York, 30 noviembre de 1973.
Bolivia se adhiere mediante D.S. Nº 19777 de 13 de
septiembre de 1983, elevado a rango de Ley Nº 2116
promulgada el 11 de septiembre de 2000.
Depósito del instrumento de adhesión el 6 de octubre de 1983.
o Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles e
Inhumanos o Degradantes, Nueva York 19 diciembre de 1984.
Ratificada por Bolivia mediante Ley Nº 1930 promulgada el 10
de febrero de 1999.
Depósito del instrumento de ratificación el 12 de abril 1999.
Enmiendas a los artículos 17 (7) y 18 (5) de la Convención
contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles e Inhumanos
o Degradantes, Nueva York 8 septiembre de 1992.
o Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y otros
Tratos o Penas Crueles e Inhumanos o Degradantes, Nueva
York 18 diciembre de 2002.
Ratificado por Bolivia mediante Ley Nº 3298 promulgada el 12
de diciembre de 2005.
Depósito del instrumento de ratificación el 23 de mayo 2006.
o Convención Internacional sobre la Supresión y Castigo del
Crimen del Apartheid, Nueva York, 30 noviembre de 1973.
Bolivia se adhiere mediante D.S. Nº 19777 de 13 de
septiembre de 1983, elevado a rango de Ley Nº 2116
promulgada el 11 de septiembre de 2000.
Depósito del instrumento de adhesión el 6 de octubre de 1983.
o Convención Internacional contra el crimen del Apartheid en los
Deportes, Nueva York 10 diciembre de 1985.
Depósito del instrumento de ratificación el 27 de abril 1988.
o Segundo Protocolo Facultativo de la Convención de Derechos
Civiles y Políticos, destinado a Abolir la Pena de Muerte, Nueva
York 15 diciembre de 1989.
o Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia
Organizada Transnacional, Palermo, Italia 15 de diciembre de
2000.
Ratificada por Bolivia mediante Ley Nº 3107 promulgada el 2
de agosto de 2005.
Depósito del instrumento de ratificación el 10 de octubre de
2005.
Declaraciones de Bolivia en fecha 18 de mayo de 2006
respecto de los artículos 5 6, 8 y 23 de la Convención.
Notificaciones de Bolivia en fecha 18 de mayo de 2006
respecto de los artículos 16.5, 18.13 y 18.14 de la
Convención.
o Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos
Humanos Civiles y Políticos.
Ratificado mediante Ley 3423 de 12 de junio de 2006
Acuerdo entre el Alto Comisionado de las Naciones Unidas
para los Derechos Humanos y el Gobierno de la República
de Bolivia relativo al establecimiento de una Oficina en
Bolivia. Ley 3713 13 de julio de 2007
o Convención sobre Protección y Promoción de la Diversidad de
las Expresiones Culturales de la UNESCO. Ley 3424 de 12 de
junio de 2006.
o Convención Internacional para la protección de todas las
personas contra las desapariciones forzadas. Ley 3935 de 26 de
octubre de 2008 Derechos Humanos OEA
o Convención Interamericana sobre Concesión de los Derechos
Políticos a la Mujer, suscrita en la Novena Conferencia
Internacional Americana, Bogotá Colombia el 2 de mayo de
1948.
Ratificada por Bolivia mediante Ley Nº 2011 promulgada el
12 de septiembre de 1999.
Depósito del instrumento de ratificación el 16 de noviembre
de 2001.
o Convención Interamericana sobre Concesión de los Derechos
Civiles a la Mujer, suscrita en la Novena Conferencia
Internacional Americana, Bogotá Colombia el 2 de mayo de
1948.
Ratificada por Bolivia mediante Ley Nº 2012 promulgada el
17 de septiembre de 1999.
Depósito del instrumento de ratificación el 16 de noviembre
de 2001.
o Convención Americana sobre Derechos Humanos, “Pacto de
San José de Costa Rica”, suscrita en la Conferencia
Especializada Interamericana de Derechos Humanos, en San
José de Costa Rica el 22 de noviembre de 1969.
Bolivia se adhiere mediante D.S. Nº 16575 el 13 de junio de
1979, elevado a rango de Ley Nº 1430 promulgada el 11 de
febrero de 1993.
Depósito del instrumento de adhesión el 19 de julio de
1979.
o Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la
Tortura, suscrita por Bolivia el 9 de diciembre de 1985.
Ratificada por Bolivia mediante Ley Nº 3454 promulgada el
27 de julio de 2006.
Depósito del instrumento de ratificación el 21 de noviembre
de 2006.
o Protocolo a la Convención Americana sobre Derechos
Humanos relativo a la Abolición de la Pena de muerte, suscrita
en Asunción el 8 de junio de 1990.
Ratificado por Bolivia mediante Ley Nº 3447 promulgada el
21 de julio de2006.
o Convención Americana para Prevenir y Sancionar la Tortura
Ley 3454 de 27 de julio de 2006.
o Protocolo Adicional Carta Americana de Derechos Humanos
relativos a la abolición de la pena de muerte Ley 3447 de 21 de
julio de 2006.
3. Impacto Social
a) La Violación
Sin necesidad de entrar en la discusión teórica sobre la acción penal y
su importancia en el Derecho Procesal Penal, pasemos a revisar como
el Estado ha ejercicio la titularidad de la acción penal, específicamente
en el delito de violación. En tal sentido, es bueno recordar que los
delitos de acción pública, son todos aquellos en los que por la gravedad
del delito y donde generalmente toda la sociedad se siente ofendida, la
titularidad de la acción y la propia persecución penal, le corresponde
exclusivamente al Estado y siendo que tal ejercicio le corresponde al
Ministerio Publico; de otro lado, en los delitos de acción pública, y por la
poca gravedad del delito en relación a la sociedad, la acción penal es
ejercida solo por la víctima, prescindiendo del Ministerio Publico.
16
http://www.la-razon.com/mundo/iniciativa-aumentar-penas-recibida-region_0_1579042181.html
06.08.2012 Hrs. 21:00
Recordamos que en el Código Penal de 1834, los delitos de “abuso
deshonesto” o violación eran delitos de acción pública, tal cual lo
señalaba el artículo 512 del Código Penal Santa Cruz, este efecto se
debía, al gran poder punitivo que el Estado ejercía en aquel tiempo
sobre el tratamiento del delito y en el caso en concreto por esos delitos
sexuales, atacaban las buenas costumbres, la moralidad pública, por lo
que consecuentemente siendo víctima toda la sociedad, el Estado
estaba perfectamente habilitado para ejercer la acción penal.
Código Penal: Artículo 308.- (VIOLACIÓN) Quien empleando violencia
física o intimidación, tuviera acceso carnal con persona de uno u otro
sexo, penetración anal o vaginal o introdujera objetos con fines
libidinosos, incurrirá en privación de libertad de cinco a quince años.
El que bajo las mismas circunstancias del párrafo anterior, aunque no
mediare violencia física o intimidación aprovechando de la enfermedad
mental, grave perturbación de la conciencia o grave insuficiencia de la
inteligencia de la víctima, o que estuviere incapacitada por cualquier
otra causa para resistir, incurrirá en privación de libertad de quince a
veinte años.
Previo a este análisis interpretativo, no se debe dejar de entender que
hoy en día, delitos sexuales, atacan en realidad a la “libertad sexual” de
la persona, es decir, al derecho que tenemos hombre y mujeres, de
tener o mantener relaciones sexuales en la calidad o cantidad deseada,
pero siempre en los límites de la ley. Por lo que razonando por lo
absurdo, un sujeto no está amparado por la ley si en mala aplicación de
su “libertad sexual”, pretende mantener relaciones sexuales con
menores de edad, caso en el cual estaríamos traspasando un límite de
la ley (Código Penal) y por lo tanto constitutivo del delito de violación.
Sujeto activo de este delito puede ser cualquier persona, mayor
imputable, ya sea hombre o mujer, aunque generalmente se trata de un
tipo de delincuencia generalmente masculina; no se descarta la
posibilidad de que la mujer pueda ser también sujeto activo del delito.
El delito se consuma mediante el acceso carnal únicamente por las vías
que señala el tipo, es decir, ya sea vía anal, en la que victima puede ser
mujer, u hombre, generalmente niños, o por vía vaginal, caso en el que
la víctima obviamente es mujer.
Para la consumación del delito, no es determinante que el autor haya
concluido el acceso carnal con el acto fisiológico de la eyaculación.
Asimismo, no interesa si la relación fue corta o prolongada, o que exista
rotura de himen en caso que la víctima fuera virgen. En caso de
embarazo por violación, nuestra legislación penal, da paso al llamado
aborto impune, en el cual su práctica no es delictiva pero a condición
previa de la denuncia y su correspondiente autorización judicial.
Ahora bien, las formas clásicas del acceso carnal son dos: violencia o
intimidación. En el caso de la violencia, nos estamos refiriendo a la
violencia física que se ejerce sobre el cuerpo de la víctima y mediante la
cual, se vence su resistencia y de manera ilícita se consigue el acceso
carnal. Por otra parte, se da la intimidación cuando se logra constreñir a
una persona, en merito a una amenaza, grave, posible y cierta, de la
cual la víctima no tiene la facultad de elección ya que sin poder de
elección se la subyuga sexualmente. Cabe mencionar que para este
último caso, es necesario, hacer el análisis de la circunstancia y de la
calidad de la víctima, ya que existe personas más o menos intimidables.
Es bueno recordar, que clásicamente se decía que la violación podía
cometerse en contra de la voluntad de la víctima, y en algunos casos
sin que exista su voluntad; al respecto, y en virtud a que estamos frente
a delitos contra la libertad sexual, la persona puede escoger libremente
con quien mantener relaciones sexuales, y al mismo tiempo negar esa
posibilidad, ante esta última circunstancia, la negativa de la persona o
víctima debe ser siempre seria y constante. Estos dos elementos son
fundamentales para determinar que la víctima, nunca otorgó su
voluntad para ejercer el acto sexual.17
b) El Asesinato
Establecido en su artículo 252 del Código Penal; Título VIII; Delitos
contra la vida y la integridad corporal; Capítulo 1 Homicidio, la cual
señala que: “Será castigado con la pena de presidio de 30 años, sin
derecho a indulto el que matare: 1) a sus descendientes cónyuges o
conviviente sabiendo que lo son, por motivos fútiles o bajos, con
alevosía o ensañamiento, en virtud de precio, dones o promesas, por
medio de sustancias venenosas u otras semejantes y finalmente para
facilitar o consumar u ocultar otro delito o para asegurar sus
resultados”.
Se configura por su comisión alevosa, premeditada o ensañada, así
como también por realizarse mediante, precio, recompensa o promesa.
La agravación del homicidio simple puede convertirse en calificado o
asesinato, puede también estar determinada por los vínculos de
parentesco entre el agresor y la victima (ascendientes, descendientes
o cónyuges).
17
Nicolás Cusicanqui Morales, Delitos contra la Libertad Sexual – Revisión histórica-dogmática de la
legislación boliviana, Ed. La Paz, p. 135
crímenes, tenemos una cifra de doce muertes de su directa
responsabilidad. En cualquier país civilizado se trata de un indicador de
extrema gravedad. Por menos que eso se han iniciado cacerías de
asesinos en serie. Olvidemos por un momento a los autores concretos
y detengámonos en la cifra inicial, más de sesenta personas
asesinadas por la vía del estrangulamiento con el objeto de robarles.
El tema ha merecido apenas unos cuantos titulares de prensa, alguno
muy destacado, y una repercusión relativamente relevante de radio y
televisión. No más que eso. ¿Por qué tal indiferencia?. Una explicación
es que las víctimas en su mayoría eran personas relativamente
anónimas, de origen pobre, o simple y llanamente vivían en zonas
urbanas (de La Paz y El Alto) clasificadas arbitrariamente como
“populares”. En buen romance, que los asesinados eran “nadie” y por
eso los medios se ocupan poco de ellos y sus historias. Si es así,
ocurre algo estremecedor, una forma flagrante de discriminación que
pone en evidencia a una sociedad que sigue con sus viejas taras a
pesar del tan cacareado “cambio”.
Pero hay otras razones tanto o más preocupantes. Vivimos una
pérdida de sensibilidad humana que demuestra que la vida no está
entre nuestros valores más caros. Estamos resignados ante la
evidencia de que las autoridades de gobierno y su brazo armado la
Policía carecen de los medios, la capacidad y la credibilidad mínimos
para llevar adelante un trabajo eficiente en la lucha contra el crimen
(organizado y desorganizado). Además, hay una carencia de liderazgo
mediático que coloque el tema como una prioridad.
Está claro que la inseguridad ciudadana es, si no el asunto más
importante, uno de los más importantes entre las preocupaciones
ciudadanas, pero lo que no está tan claro es cómo lo encara la
sociedad.
El incremento de la criminalidad es un azote particularmente grave en
América Latina, de la que Bolivia no es la excepción. Es cierto que el
narcotráfico, en claro aumento en el país, viene acompañado de
violencia de la dura. Pero hay una razón mucho más profunda. Hace
ya muchos años que Bolivia vive literalmente bajo el imperio de la ley
de la selva, o para ponerlo de otra manera, en medio de una galopante
anomia social. Esto marca un síndrome que se ha apoderado de todos,
la presunción de que la resolución de cualquier conflicto, problema,
demanda, reivindicación o solución de una injusticia, no pasa en
ningún caso por considerar que la ley existe. No, simplemente se sale
a la calle y se confronta.
Es una ruptura que se convierte en una forma de patología colectiva
que nace de una actitud entre desamparada e irresponsable del
individuo mimetizado en la masa. Nadie ha logrado restaurar (si es que
alguna vez existió) la idea básica de que nuestras vidas valen en tanto
el otro reconozca su valor, y en tanto las reglas que la protegen sean
aceptadas por la mayoría, y sepamos que la garantía de su
preservación pasa por la certeza de que aquellos a quienes delegamos
la administración de justicia la harán valer.
La violencia se ha convertido en rutina. Toda violencia, la de los
bloqueos diarios, la de la corte de los milagros en que se convirtió la
marcha de los discapacitados, el t‟inku insólito entre orureños y
potosinos, los muertos de Yapacaní, y también los muertos que como
un cuentagotas pertinaz llenan el vaso nacional de sangre
interminable. Cogoteros, sicarios del narcotráfico, maridos o
concubinos machistas, violadores, pederastas, borrachos o drogados,
siegan vidas un día sí y otro también.
La respuesta frecuente desde los afectados nos lleva a otra
constatación. La respuesta a la falta de justicia es frecuentemente -de
hecho o de intención, tanto o más violenta que el crimen que se quiere
combatir. Su expresión más obvia pero no única: los linchamientos que
acaban con la vida de los supuestos delincuentes.
La inseguridad se ha instalado entre nosotros y nada parece indicar
que se la pueda desterrar. De vez en vez, cuando nos toca
directamente, o le toca a alguien próximo, nos horrorizamos por unos
minutos o unas horas, y a otra cosa.
Lo que estamos pagando es una factura por nuestra absoluta
incapacidad de tomar al toro por las astas. El país vive en medio de la
casi total falta de control de sus impulsos más primitivos. La retórica
legal (leyes y leyes que llueven como suele llover en enero y febrero)
no es más que una gran cortina de humo para disfrazar este erial de
insensibilidad, desprecio por la vida y por la convivencia civilizada. 18
c) Otros delitos
DELITO DE ROBO
Es importante definir el concepto de la palabra y su significado por robo
entendemos (el acto de quitar o tomar para sí con violencia o por la
fuerza la cosa ajena. Diferenciándose del hurto, en que éste se comete
encubiertamente y aquel públicamente, uno sin fuerza y aquel con ella;
de modo que en el robo no solo se priva al dueño de lo que le
pertenece, como en el hurto, sino además se atenta a su tranquilidad
intimidándole con armas o amenazas: por lo cual debe castigarse el
robo con más rigor que el hurto, sin embargo en la práctica suelen
usarse indistintamente ambas palabras con el mismo sentido.
El delito de robo es:
- de acción.- Si la conducta típica queda expresada en la ley con el
término "apoderarse", es indudable que se requiera un actuar
voluntario, un movimiento corporal identificado con el traer de la cosa
al poder del agente, con exclusión e la inactividad u omisión.
- unisubsistente o plurisubsistente.- Es un delito unisubsistente, pues la
aprehensión de la cosa, que implica colocarla en la esfera de poder del
ladrón, con el consiguiente desapoderamiento para el sujeto pasivo, es
18
Suplemente Página, publicada el 04 de marzo de 2012
una acción que no permite por su esencia fraccionamiento en varios
actos, sino que por sí sola (acto único) expresa, en el plano subjetivo la
voluntad criminal. Excepcionalmente el robo se presenta como delito
plurisubsistente.
- de lesión
- de resultado material
- instantáneo.- Si se toma en consideración el momento consumativo,
el robo es un delito instantáneo, por cuanto dicha consumación tiene
lugar al verificarse el apoderamiento.
Dado que sus elementos constitutivos pueden servir para la
formulación de otros tipos, agravados respecto a su penalidad y que en
él se complementan.
- autónomo o independiente.- Toda vez que no requiere de ningún otro
tipo penal para tener existencia legal.
- anormal.- No solo se integra con elementos descriptivos sino también
con el elemento normativo señalado.
En el delito de robo, el comportamiento típico es el apoderamiento,
consistente en la acción de tomar, asir o capturar una cosa con
intención de ejercer poder de hecho sobre ella.
Aunque es fácil comprender esta noción, ocurre que en la práctica se
dan diversos conflictos cuando se quiere precisar en qué momento se
consuma el delito; esto es, cuándo se da el apoderamiento.
En cuanto a este problema, se han elaborado diversas teorías:
I. El robo se integra en el momento en que el agente "toca la cosa con
su mano".
II. No solo es necesario tocar la cosa, sino desplazarla (removerla) del
lugar en que originalmente se encontraba.
III. El robo se consume cuando el activo no solo toca y remueve.
4. La Reincidencia
a) Enfoque Social
No obstante lo señalado, más allá del inmenso bagaje de cuerpos
normativos locales e internacionales de protección y tutela formal de la
integridad humana, actualmente nos encontramos frente a una realidad
compleja en la cual la vulneración del citado derecho se presenta de
variadas formas y cometida por diversos actores; tal es el caso de
particulares, quienes han optado por asumir de mano propia lo que
entienden por justicia. Eso, como una forma de reacción e indignación
ante problemas estructurales presentes en la comunidad. Así, vemos
cotidianamente cómo este género de violencia ha ido creciendo al punto
de llegar a agredir gravemente y segar la vida de personas por hechos
tales como el robo de una garrafa, el tránsito por un lugar y a horas
inadecuadas, o la simple sindicación infundada basada en criterios
subjetivos, discriminatorios y hasta racistas.
Debemos analizar esta situación desde dos perspectivas. La primera,
en cuanto a la situación de pobreza de hombres y mujeres,
principalmente jóvenes, que diariamente experimentan la imposibilidad
de desarrollar un proyecto de vida, al tener que dedicar sus esfuerzos
19
http://www.hoybolivia.com/Noticia.php?IdNoticia=65159 26.07.2012 Hrs. 20:00
hacia una realidad que no avizora perspectivas de cambio y que al
sentirse ajenos a los valores de una sociedad distante, no conciben al
delito como un acto contrario al derecho, sino, más bien, como una
alternativa de vida.
Por otro lado, la ausencia de mecanismos efectivos para prevenir y
reprimir conductas ilícitas que atentan contra los bienes que gozan de
protección jurídica es un aspecto que se complementa con la
desconfianza en los ya existentes. De esta manera, es de amplio
conocimiento que la Policía Boliviana está conceptualizada por la
población como una institución corrupta y al mismo tiempo vulneradora
de derechos humanos; un Ministerio Público que trata de cumplir sus
funciones con medios precarios o sin ellos; un Órgano Judicial que
aplica un procedimiento penal no adecuado a nuestra realidad,
sumergido en un excesivo formalismo burocratizado de la justicia;
además de abogados que olvidando el apostolado de su profesión han
tergiversado las formas de acceso a la justicia y la verdad.
Entonces, resulta lógico pensar que la población busque aquellos
medios que tengan por objeto o resultado obtener seguridad aunque
éstos sean ilegales y vayan contra aquellos preceptos imperativos de
carácter universal como son la integridad y la vida de sus semejantes.
Ahora bien, esto no puede de ninguna manera justificar la adopción de
medidas como el linchamiento hasta que el Estado implemente
mecanismos efectivos de protección y reestructure instituciones
destinadas a brindar seguridad ciudadana y justicia, pues, dichos
comportamientos no sólo lesionan el derecho a la libertad de quienes
son sometidos a tales actos, sino también su derecho a la dignidad, a la
integridad física, a la vida, así como a la prohibición de torturas, tratos
crueles, inhumanos y degradantes.
b) Enfoque Jurídico
Es difícil proporcionar un concepto satisfactorio de «reincidencia» a
nivel internacional, dado que los esfuerzos que se vienen realizando en
este sentido desde hace décadas no resultan alentadores, como lo
demuestran las tentativas en el Congreso Internacional de Criminología
de 1955 y en el Curso Internacional de 1971 (cfr. Bergalli). Esta
dificultad obedece a varias razones: a) Conspira contra una definición
pacíficamente aceptada la disparidad de presupuestos exigidos en la
legislación comparada, que da lugar a la clasificación más corriente
entre genérica o específica y ficta o real, b) Esa misma disparidad y la
incorporación legislativa de conceptos que implican a la reincidencia o
que le son próximos (como la multireincidencia, la habitualidad, la
profesionalidad o la tendencia), hacen inevitable la parcial
superposición con éstos, c) Ocasionalmente, estos conceptos próximos
y parcialmente superpuestos admiten hipótesis de reiteración, lo que
confunde más las cosas al desdibujar los límites entre esta y la
reincidencia, d) Por último, los intereses científicos de los juristas y de
los criminólogos no suelen coincidir en esta materia, por lo cual los
objetos que focalizan son diferentes y, por ello, las delimitaciones
conceptuales resultan dispares.20
Un hombre puede cometer varios delitos. Unas veces un mismo
propósito los liga, bien porque el mismo acto constituye varias figuras
del delito (concurso ideal) o bien porque uno de ellos sea medio para
cometer el otro o se hallen relacionados entre sí (delitos conexos).
Recae en la comisión de delitos: entonces se dice que hay, o concurso
real y reiteración, o reincidencia.21
En Bolivia, de los 11.516 internos que guardan detención en 54
cárceles existentes, 1.842 (16 por ciento) son reincidentes, promedio
obtenido en base al número de privados de libertad que tienen
20
Eugenio R. Zaffaroni, Hacia un Realismo Jurídico Penal Marginal, Caracas Monte Ávila Editores 1992, pág.
117
21
Luis Jiménez de Asúa, La Ley y el Delito, Ed. Hermes Buenos Aires 1993, Pág. 535
sentencias ejecutoriadas, mientras que del restante 84% no se puede
definir su catalogación por tener carácter preventivo.
Un porcentaje significativo de las personas que llegan a un proceso
penal tienen antecedentes penales o ya han sido investigadas.
La principal causa de reincidencia es que las cárceles en Bolivia no
cumplen con una labor de rehabilitación y se convierten en escuelas de
aprendizaje del delito.
En Bolivia se cometen diariamente un promedio de cuatro mil delitos, en
un 50 por ciento los protagonistas serían criminales reincidentes, de
acuerdo a un análisis de la Policía Boliviana. En mayo de 2010, se
promulgó en Bolivia la Ley de Modificaciones al Sistema Normativo
Penal Nro 007, con el fin de fortalecer las sanciones a delincuentes
reincidentes, ampliar el resguardo a las víctimas y aprobar la
confiscación de bienes en delitos de narcotráfico y separatismo.
Esta norma establece que los delincuentes reincidentes ya no se
pueden favorecer con medidas cautelares ante un juez, sino deben ser
encarcelados directamente, siendo la principal causa para que se haya
incrementado el número de internos dentro de los recintos carcelarios
provocando hacinamientos.
Datos
Sin sentencia. Las estadísticas de Régimen Penitenciario indican que
solo el 16% de los privados de libertad que están en los 53 recintos de
Bolivia cuenta con sentencia mientras que el resto, 84%, guarda
detención preventiva.
22
Suplemento “El Día” de fecha 24 de abril 2012
Habitualidad criminal, solicitando la medida cautelar de Detención
Preventiva, si concurren los requisitos establecidos en los Arts. 232,
233, 234 y 235 del CPP., ante los Jueces de Materia Penal, en
aplicación de normas legales referidas".
El Instructivo de la Fiscal Departamental de La Paz, determina: "Las y
los Fiscales que evidencien que en la sustanciación y resolución de
aplicación de medidas cautelares, cesación a la libertad preventiva y
revocatoria de medidas cautelares, los señores Jueces no dieren
estricto cumplimiento a la normativa procesal antes referida, deberán
elevar informe de inmediato ante la Fiscalía Departamental de La Paz a
los efectos de velar estricto cumplimiento a las modificaciones
incorporadas por la Ley 007 y la normativa procesal penal, y ejercer las
acciones legales que correspondan".
5. Las Penas
a) Normativa Vigente
Nuestro Código Penal Boliviano, en su artículo 25, señala:
Artículo 25º. (LA SANCIÓN)
La sanción comprende las penas y las medidas de seguridad. Tiene
como fines la enmienda y readaptación social del delincuente, así como
el cumplimiento de las funciones preventivas en general y especial.23
Es decir que cuando se impone una pena a quien ha cometido delito, se
busca como fin, que el sujeto se enmiende y se readapte socialmente
durante el tiempo que cumple su sentencia. Pero por otro lado, la pena
busca el cumplimiento de las funciones preventivas en general, vale
decir esa intimidación que el Código hace a la sociedad, en el
enunciado, “el que cometa un delito tendrá una pena de N años”.
Según la teoría de la prevención general, se busca que la sociedad,
sepa por un lado, que conductas son delictivas y que pena merecen,
pero por otro lado hacer saber a la sociedad que el Estado está en el
23
Bolivia, Código Penal, Gaceta Oficial de Bolivia.
Derecho de imponer sanciones y finalmente a disuadir a algunos
sujetos de la sociedad a que no cometan delitos.
En tanto que la prevención especial, es ya la función del Juez o
Tribunal, que al momento de imponer la pena (observando el artículo
37, 38, 39, 40 y siguientes del Código Penal) prevé que tiempo debe
durar el “tratamiento” de readaptación y enmienda, es decir, el Juez
determina el tiempo de privación de libertad en relación a la
readaptación y enmienda del delincuente.
Por ello la pena no es castigo, es solo un fin para conseguir que el
sujeto antes de salir a la sociedad se enmiende y readapte a la misma,
de tal suerte que no vuelva a cometer delitos.
El actual Código Penal, está enmarcado en las teorías de la
readaptación social.
Pena de Muerte
Tomando en cuenta los actuales Tratados Internacionales y la
legislación vigente, la aplicación de la pena de muerte en Bolivia es
inviable, porque prohíben su institución en el país.
En varias partes del mundo se busca la despenalización de la justicia y
aseguró que al incrementar las sanciones o los castigos no se
disminuirá de ninguna manera la comisión del delito.
Existen tratados y convenios que han abolido y prohíben la pena de
muerte y esto es fundamental porque se ha visto que en el mundo pese
a las grandes teorías, unos que aceptan la pena de muerte y otros que
la rechazan, el incremento de la sanción no disminuye de ninguna
manera la comisión del delito.
El Gobierno debe garantizar la seguridad ciudadana utilizando los
mecanismos no represivos, sino concientizadores y al mismo tiempo
eliminar la pobreza, el desempleo y el narcotráfico.
El Gobierno tiene el desafío de garantizar la seguridad ciudadana,
eliminar la extrema pobreza, crear fuentes de empleo y eliminar el
narcotráfico y es así que se podrá vivir en un mundo de paz y de
seguridad. No es la pena de muerte, una de las salidas más eficaces
sino son las políticas gubernamentales que vayan en beneficio de todos
los ciudadanos del país.
b) Cadena Perpetua
El término "cadena perpetua" hace referencia a una pena que ya se ha
extinguido en la casi totalidad de la legislaciones (sólo Perú mantiene
este término en su legislación aunque tampoco existe la "cadena" como
pena). A este tipo de pena, recogida en los códigos penales
decimonónicos, se la fraccionaba en "años de cadena" y la más
gravosa era la "cadena perpetua" lo que significaba pasar el tiempo de
la condena encadenado a un muro. Hoy se habla de "prisión perpetua"
o más técnicamente "prisión o reclusión por tiempo indeterminado",
pues ya no se encadena a los reos y la condenación de por vida es
extremadamente excepcional. De todos modos se sigue utilizando
"cadena perpetua" como designación coloquial de este tipo de
condena.24
El tema de la cadena perpetua es objeto de debate, que siempre está
bien debatir los conceptos e ideas, como la forma en que se está
planteando el mismo y también quién lo está planteando.
En nuestro ordenamiento jurídico no se contempla la cadena perpetua,
ni las medidas que no sean correctoras y tendentes a reintegrar en la
sociedad a quienes cometen un delito, no por un mero capricho o una
decisión arbitraria, sino porque ello es un reflejo de unos principios
éticos y de conducta y reflejo de unos valores humanos concretos.
Los penalistas, y en general la filosofía del derecho, lleva siglos
definiendo cuales son los medios adecuados para, en primer lugar,
desincentivar el delito, en segundo lugar para reparar el daño causado y
en tercer lugar para no excluir de la sociedad a las personas una vez
cumplido su castigo.
En grandes líneas estas son las preocupaciones de un sistema de
pensamiento jurídico que se ha preocupado en definir el sistema
punitivo de los estados modernos a partir de la Ilustración.
La regulación contenida en los sistemas penales modernos, incluido el
nuestro, es fruto de la reflexión y del estudio, en definitiva, de la ciencia
jurídica.
Las razones contra la cadena perpetua están estudiadas y
documentadas, toda vez que ni impiden la comisión de más delitos, ni
resuelven el problema de las personas que los cometen si bien es
verdad que no siempre dejan satisfecha a la víctima o sus familiares.
Sin embargo, por hechos cometidos por lo más abyecto de nuestra
sociedad, se erigen los familiares de las víctimas en postuladores de la
defensa de la cadena perpetua como herramienta para mejorar nuestro
sistema punitivo.
24
http://es.wikipedia.org/wiki/Cadena_perpetua 03.09.12 Hrs. 13:30
Su discurso se elabora desde el sufrimiento directo por la pérdida de un
ser querido, no desde la reflexión y el estudio de la cuestión con la
lectura y análisis de los trabajos y estudios de los investigadores del
derecho penal y la filosofía del derecho.
No se aportan ni datos, ni consideraciones de tipo criminalístico, ni
análisis, ni las razones por las que esa decisión es la mejor que se
puede adoptar, simplemente se elevan al púlpito de la opinión pública.
Amparándose en la empatía con su dolor no sirve a los efectos de
discutir, no al menos en una sociedad dónde la razón debe estar por
encima de otras consideraciones.
c) Sumatoria de penas
Nuestro Código Penal contempla tanto el “concurso ideal" como el
“concurso real o material” de delitos.
El “concurso ideal” está previsto en el artículo 44 del CP, estableciendo:
“El que con una sola acción u omisión violare diversas disposiciones
legales que no se excluyan entre sí, será sancionado con la pena del
delito más grave, pudiendo el juez aumentar el máximo hasta en una
cuarta parte”.
Como puede advertirse, el “concurso ideal de delitos” se presenta,
cuando una sola acción por parte del sujeto activo da como resultado
una pluralidad de delitos; tal es el caso de “A” que dispara contra “B”,
matando a dos personas (“B” y “C”), configurándose, en el caso de "B"
un homicidio simple o calificado (doloso), y en el supuesto de “C” un
homicidio culposo.
Asimismo, el “concurso real de delitos” está previsto en el artículo 45
del Código Pelal, señalando: “El que con designios independientes, con
una o más acciones u omisiones, cometiere dos o más delitos, será
sancionado con la pena del más grave, pudiendo el juez aumentar el
máximo hasta la mitad”.
El “concurso real de delitos” se presenta, cuando frente a una pluralidad
de acciones por parte del sujeto activo se produce una pluralidad de
delitos.
Cada una de las acciones es independiente y tiene su propia finalidad
criminal; tal es el caso de “A”, que un día hurta y al día siguiente roba
(concurso real homogéneo); o el caso de “A”, que un día roba, luego
mata, y finalmente viola a una mujer (concurso real heterogéneo).
Según la redacción actual del artículo 45 del CP, en el concurso real de
delitos opera un “sistema mixto”, para los efectos de la determinación
de la pena.
Se tiene la necesidad de adaptar nuestro sistema persecutorio y
sancionatorio a las nuevas modalidades del crimen organizado.
Reiteramos que la globalización de la economía ha traído aparejada la
globalización del delito y la delincuencia.
El principio de cúmulo de penas, caracteriza a la familia jurídica
anglosajona.
El no cúmulo o confusión de penas, que consiste en imponer al
imputado o delincuente la pena de la infracción que conlleve la sanción
más grande; y la sumatoria de penas, que es el ejemplo norteamericano
en el que a cada infracción se le aplicará la pena correspondiente
sumándolas todas luego.
Manuel Osorio en su diccionario de Ciencias Políticas Jurídicas y
Sociales distingue entre: acumulación de acciones, cuando se unen
diferentes acciones en un mismo proceso o se ejercitan diferentes
acciones en una misma demanda cuando dando lugar a un mismo
proceso donde se conocen todas ellas; acumulación de procesos se
unen varios o diferentes procesos en un único proceso diferente; y
acumulación de penas, está última vino o resurgió en el Derecho penal
como consecuencia de figuras jurídicas como el concurso ideal o
concurso real, o lo que es lo mismo, cuando un sujeto con una sola
acción produce varios resultados o comete varias acciones individuales
e independientes en un mismo espacio temporal, por ejemplo, colocar
un explosivo en un garaje, activarlo y producir diferentes daños a bienes
y a personas, o introducirse en un parking privado y robar en diferentes
coches. Las soluciones en este tipo de acumulación fueron las
siguientes:
A) Penar la acción que tuviera señalada mayor pena.
B) Penar todas las acciones con su pena correspondiente.
C) Sumar las diferentes penas resultantes y establecer un tope de
cumplimiento.
Más tarde se plantea la acumulación de condenas, a la que se
trasladan los criterios doctrinales anteriormente expuestos. Podemos
definirla como: aquella operación aritmética (triple de la pena más
grave) resultante de unir diferentes condenas impuestas por distintos
Tribunales, que de producirse y ser hábil ésta, podría haber conocido
un único Tribunal en un proceso único. Tiene una limitación, la condena
resultante no puede ser superior a la suma de todas ellas.
Hay que diferenciarla del tope máximo de cumplimiento y ello porque
puede acontecer que en una misma sentencia se condene por varios
hechos diferentes y haya que establecer un tope máximo de
cumplimiento. Esta figura jurídica no es refundición, la refundición o
acumulación de condenas se da cuando éstas han recaído en
diferentes procedimientos.
1. Legislación Comparada
a) Europa
ESPAÑA: Las penas alternativas para algunas de las sanciones son las
que se enumeran a continuación.
Perdón o Dispensa: El Juez no dicta condena y no hay
antecedentes.
Perdón o Dispensa Condicional y Suspensión del Fallo: El Juez
no dicta condena subordinándola a que la persona no delinca
durante un tiempo determinado.
Amonestación: reprobación oral del Juez.
Caución de Conducta: obliga al autor a pagar una cantidad como
garantía de que no volverá a cometer delito durante un tiempo.
Reparación: Obligación del autor de compensar a la víctima. Dos
sistemas.
NORUEGA: Tiene como final un proceso de mediación.
• Multa: Pagar una cantidad de dinero.
• Probation: se suspende la condena y se supervisa a la persona
durante un tiempo.
• Probation intensiva: la persona sufre una mayor intervención y
debe participar en determinadas actividades o tareas de tratamiento.
• Trabajo al servicio de la comunidad: Trabajar algunas horas sin
remuneración.
• Inhabilitación: privación del ejercicio de algún derecho por tiempo
determinado.
• Suspensión de la ejecución: la condena no se ejecuta
condicionada a que la persona no delinca durante un tiempo
determinado.
• Suspensión condicional de la condena: igual pero sujeto a
condiciones de comportamiento.
• Toque de queda: obliga a la persona a permanecer en determinado
lugar durante determinadas horas al día. Se puede controlar
electrónicamente.
• Arresto domiciliario: obligación de permanecer en el domicilio. Se
puede controlar electrónicamente.
Formas atenuadas:
• Arresto fin de semana: solo se ingresa en prisión o depósito
carcelario el fin de semana.
• Semilibertad: obligación de permanecer solo ciertas horas en
prisión.
• Remisión: La pena se acorta como consecuencia de haber
realizado determinas actividades.
• Libertad condicional.25
b) Asia
REPÚBLICA POPULAR DE CHINA: Administra actualmente la pena
capital por una variedad de crímenes, aunque la mayoría de los juicios
son para casos de asesinato agravado o tráfico de drogas a gran escala.
China se encuentra por encima de todos los países en ejecuciones,
aunque algunos países, como Irán o Singapur, tienen mayores tasas de
ejecución per cápita. El artículo 49 del código penal chino prohíbe
explícitamente la pena de muerte a criminales con menos de 18 años al
cometer el crimen. Además la pena capital puede aplicarse (de manera
absurda) en casos como un simple soborno y arbitraje fraudulento de
partidos de fútbol.
La pena de muerte es ilegal en Hong Kong y Macao, ya que estas
ciudades tienen distintas jurisdicciones por el principio de un país, dos
sistemas.
En comparación de otros países desarrollados, las sentencias de muerte
se llevan a cabo rápidamente. Después de un primer juicio realizado por
un Tribunal popular intermedio que haya concluido en pena capital, debe
continuar un sistema de doble proceso de apelación. La primera
apelación es llevada a cabo por un Tribunal superior popular, y desde
2007, la segunda apelación es realizada por un Tribunal popular
supremo de la República Popular de China en Pekín. La ejecución se
produce en poco tiempo después. Como resultado de sus reformas, el
25
http://www.eumed.net/rev/cccss/07/lgr.htm 15.06.12 Hrs. 20:15
gobierno Chino ha informado, que el Tribunal popular supremo revocó el
15 por ciento de las sentencias de muertes dictadas por los tribunales
superiores en el primer semestre de 2008. En un breve informe en
Mayo, el New China News Agency informó, a través de fuentes
anónimas, de que los tribunales chinos dictaron un 30 por ciento menos
de sentencias de muerte en 2007 en comparación con 2006.
Actualmente China usa dos métodos de ejecución. El más común es el
fusilamiento, que consiste en único disparo de un fusil de asalto con una
bala de punta hueca en la cabeza. La inyección letal comenzó a ser
usado en 1997. Se lleva a cabo tanto en lugares fijos como en
furgonetas de ejecución móviles que han sido modificadas. Como la
inyección letal está siendo cada vez más común, se ha intensificado el
debate sobre usar igualmente la inyección letal para ejecutar a altos
funcionarios condenados por corrupción y para criminales comunes, o
ejecutar a estos últimos por fusilamiento. La opinión pública de China
piensa que la inyección es la manera más fácil para el condenado de
morir.26
JAPÓN
La pena capital es legal en Japón en caso de homicidio o traición. Entre
1946 y 1993, los tribunales japoneses condenaron a muerte a 766
personas (incluyendo un reducido número de chinos, surcoreanos y
malayos), 608 de los cuales fueron ejecutados. La pena de muerte se
establece normalmente en los casos de asesinatos múltiples con
factores agravantes.
Según el artículo 475 del "Código de Procedimiento Penal japonés", la
pena de muerte debe ser ejecutada dentro de los seis meses
posteriores al fracaso de la última apelación del preso. Sin embargo, el
período que solicita un nuevo juicio o el indulto está exento de este
reglamento. Por lo tanto, en la práctica, la estancia media en el corredor
26
http://es.wikipedia.org/wiki/Pena_capital_en_China 21.05.2012 Hrs. 08:30
de la muerte es de entre cinco y siete años. Para algunos, la estancia ha
sido de más de 30 años (Sadamichi Hirasawa murió de causas
naturales a la edad de 95 años, después de esperar su ejecución
durante 32 años).
Proceso de aprobación
Tras el fracaso de la apelación final de proceso a la Corte Suprema, los
registros de todo el juicio se envían a la oficina de la fiscalía. Con base
en estos registros, el fiscal jefe de la oficina de la fiscalía compila un
informe para el Ministro de Justicia. Este informe es examinado por el
oficial de la Oficina de Investigación Criminal del Ministerio de Justicia.
Se plantea la posibilidad de indulto y/o nuevo juicio, así como los
posibles problemas legales que exigen un examen antes de que la
ejecución sea aprobada. Este oficial es por lo general de la oficina de los
fiscales. Una vez satisfecho, el oficial escribe una propuesta de
ejecución, que tiene que pasar por el proceso de aprobación de la
Oficina de Investigación Criminal, la Oficina de Libertad Condicional y
Corrección de la Mesa. Si el condenado demuestra estar mentalmente
incapacitado durante este proceso, la propuesta es devuelta a la Oficina
de Investigación Criminal. La aprobación final está firmada por el
Ministro de Justicia. Una vez firmada la aprobación final, la ejecución se
lleva a cabo en el plazo de una semana. Por el Reglamento de la
sección del código penal Art. 71, inciso 2, la ejecución no puede tener
lugar en un día festivo, sábado, domingo, o entre el 31 de diciembre y 2
de enero. La fecha de ejecución se mantiene en secreto, incluso a la
familia de los condenados y la familia de la víctima.
Corredor de la muerte
Los condenados a muerte se encuentran dentro de los centros de
detención de Sapporo, Sendai, Tokio, Nagoya, Osaka, Hiroshima y
Fukuoka (Takamatsu es la 8º ciudad con sede del Tribunal Supremo,
pero por razones inexplicables el Centro de Detención Takamatsu no
está equipado con una cámara de ejecución. Por consiguiente, las
ejecuciones administradas por el Tribunal Superior de Takamatsu se
llevan a cabo en el centro de detención de Osaka). Debido a que están
en espera de ejecución, los condenados a muerte no están clasificados
como prisioneros por el sistema judicial japonés. Los reclusos carecen
de muchos de los derechos reconocidos a otros prisioneros japoneses.
Se les mantiene bajo régimen de incomunicación y se les prohíbe la
comunicación con sus semejantes. Se les permiten dos períodos de
ejercicio a la semana. No se les permiten televisores y sólo pueden
poseer tres libros. Las visitas tanto por familiares como por
representantes legales son poco frecuentes y supervisadas de cerca.
Ejecución
Las ejecuciones se llevan a cabo en la horca en una cámara de la
muerte en el Centro de Detención. Cuando una orden de muerte se ha
emitido, el condenado es informado en la mañana de su ejecución. A los
condenados se les da a elegir la última comida. La familia del preso y
los representantes legales no son informados hasta después. Desde el 7
de diciembre de 2007, las autoridades han publicado los nombres,
naturaleza de la delincuencia y las edades de los presos ejecutados. A
finales de enero de 2009, había 95 personas en espera de ejecución en
Japón.27
c) América
NORTEAMERICA
En la práctica los diferentes medios de ejecución han variado de un país
y en relacionen con el tiempo, en la actualidad se reconocen tales como:
el ahorcamiento, fusilamiento, decapitación, lapidación, electrocución,
cámara de gas e inyección letal. Existen países que reconocen varios de
ellos, como es el caso de Estados Unidos que reconoce todos
exceptuando la decapitación y lapidación. La cuestión se ha tornado en
un problema de tipo humanista y muchos de los partidarios de su
27
es.wikipedia.org/wiki/Pena_capital_en_Japón 02.05.12 Hrs. 21:00
defensa (retencionistas) creen que ningún otro castigo sería justo por la
magnitud del hecho cometido, no se trata de dejar impune un hecho
reprochable, para nada, la esencia está en respetar algo que le es dable
al hombre por fortuna, su vida.
En la búsqueda de literatura sobre el tema se pudo constatar que la
creación de la figura del juez de ejecución y el tratamiento a las penas
alternativas tanto en nuestro país, como en otros del área
Latinoamericana y Europa es de reciente creación y no todos le dan el
mismo enfoque, ya que algunos países desarrollan teorías abolicionistas
de las prisiones. Aunque no debe abusarse de la privación de libertad
cuando existen penas alternativas. También están los que piensan que
las penas alternativas no resuelven las deficiencias carcelarias.
Independientemente de ello países del primer mundo como Suiza,
Holanda y Canadá son defensores de ellas pero no renuncian a la
prisión.
En Estados Unidos no es preocupación del Estado la reeducación de los
comisores de delitos a pesar de las grandes sumas de dinero que se
destinan a la construcción de prisiones. Las características de su
sistema y de su sociedad, a pesar de que está establecido por los
organismos internacionales, no la conciben y se dan pasos avanzados
hacia la privatización de las prisiones obviando al hombre como un ser
social. Ejemplo de ello lo ha podido presenciar el mundo en la ilegal
cárcel de la Base Naval de Guantánamo.
CENTROAMERICA
CUBA: Papel que desarrollan los órganos jurisdiccionales,
fundamentalmente desplegado por el Juez de ejecución amparado en la
Instrucción 163.bis el cual tiene como ventajas las siguientes:
• Se logra mayor control por parte de los jueces respecto a las
penas alternativas a la privación de libertad.
• Se alcanza la reinserción social de la mayoría de los ciudadanos
objeto de sanciones no privativas de libertad, sin necesidad de
apartarlos del seno de la sociedad, lo cual disminuye
sustancialmente el costo económico y sociopolítico del proceso.
• Se consigue disminuir la reincidencia delictiva.
• Se gana que la sociedad en general participe en el proceso de
reincorporación social de los controlados, asumiéndolo como una
responsabilidad que no es solo de los funcionarios del sistema
penal y con ello que aumente su cultura jurídica y sensibilidad
respecto al fenómeno delictivo. (Existe aceptación del trabajo de
los jueces encargados del control de la ejecución por parte de los
controlados, de sus familias y de la sociedad).
• Se logra una mejor individualización de la pena, ya que los
tribunales juzgadores tienen más confianza en la efectividad de las
sanciones alternativas que en la privación de libertad y
consecuentemente van ampliando su arbitrio judicial.
• Se fortalece el prestigio y la autoridad del sistema penal en la
sociedad, aumentando su reconocimiento social.
Por lo antes mencionado se logra que los jueces y funcionarios
judiciales se vinculen más a las comunidades y centros laborales.
En la ejecución de las penas se desarrolla también un trascendental
momento de adecuación de la sanción otorgando beneficios al penado
que lo estimulen en su reinserción a la sociedad y al cumplimiento de las
normas que se le han fijado.
En esta importante etapa jurídica, el tribunal ha de jugar un destacado
papel, al conceder o denegar, razonadamente, tales beneficios, para lo
cual debe guiarse por el sentido de justicia y la preocupación ponderada
del fin resocializador de la pena. No se trata de acceder a toda
propuesta o petición de beneficio que se formule, ni de negarse a
concederlos, lo que debe caracterizarlos es la delicada labor de analizar
y fundamentar con parámetros criminológicos, y no punitivos, la decisión
que adopte.
SUDAMÉRICA
La instauración del Juez de ejecución en América Latina, se ha
experimentado de forma reciente, esta se enmarca en el proceso de
reforma procesal general, que se sucedió hace varios años, surge
producto de los cambios que se produjeron por la realidad carcelaria,
evidenciándose que no es la solución a los problemas que presentan
estas instituciones , esta figura se introduce en el Código Procesal
Penal, modelo para Ibero América en 1989 considerándose como algo
novedoso, por ser distinto a los jueces que hasta el momento se
encargaban de los trámites de ejecución.
2. La Pena de Muerte
En el moderno Estados Unidos, donde se sigue aplicando la pena de
muerte, los doce estados norteamericanos que no la aplican tienen igual o
menor cantidad de homicidios que los estados donde sí se la utiliza, según
estadísticas gubernamentales. Esto indica que la amenaza de ser
condenado a muerte no disuade a los delincuentes. Las cifras hacen que
resulte difícil pensar que haya algún tipo de efecto disuasivo.
Según el informe de Amnistía Internacional sobre las condenas a muerte y
ejecuciones en 2010, los países que siguen utilizando la pena de muerte se
están quedando cada vez más aislados. Arabia Saudí, China, Estados
Unidos, Irán y Yemen siguen figurando entre los que llevan a cabo más
ejecuciones.
“En varios países continúan imponiéndose penas de muerte por delitos
como los relacionados con drogas, los económicos, el mantenimiento de
relaciones sexuales entre adultos con consentimiento mutuo y la blasfemia,
en contra de lo dispuesto por las normas internacionales de derechos
humanos que, excepto en el caso de los delitos más graves, prohíben el
uso de la pena de muerte”, dice el informe. Asia y Oriente Medio son las
dos regiones en las que se llevan a cabo más ejecuciones.
(Con datos de El Diario, Jornada, El Clarín, Amnistía Internacional, Los
Tiempos, BBC).
3. Cadena Perpetua
ESPAÑA
El titular de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha presentado hoy al Consejo
de Ministros el borrador del anteproyecto de ley de reforma del Código
Penal que incluye por primera vez en la historia de la democracia la pena
de prisión permanente revisable. Según ha explicado el propio ministro,
este castigo podrá imponerse a los terroristas con asesinatos a sus
espaldas, magnicidas, genocidas y grandes asesinos. En este último tipo,
29
Suplemento La Razón de fecha 24 de agosto de 2012
según el texto de Justicia, entrarán los asesinos de menores de 16 años o
de “personas especialmente vulnerables”, los homicidas que maten
después de cometer delitos sexuales o los asesinatos múltiples, incluidos
los cometidos entre bandas. Ruiz-Gallardon ha explicado que las „cadenas
perpetuas‟, como ocurre en varios países europeos, sería revisables entre
los 25 y los 35 años de cumplimiento efectivo. El ministro insistió que la
introducción de la prisión permanente revisable, dirigida a proteger “bienes
jurídicos de especial interés”, tiene amparo jurídico del Tribunal Europeos
de Derecho Humanos y por el Consejo de Estado que ya dictaminó que
este castigo es acorde a la Constitución. Las otras novedades que incluirá
el Código Penal desgranadas por el ministro son:
Custodia de seguridad: El nuevo Código Penal introduce, por primera vez,
la custodia de seguridad. Se trata de una medida privativa de libertad para
casos excepcionales que se aplicará una vez cumplida la pena de prisión y
después de que el tribunal valore si se mantiene la peligrosidad del penado.
La custodia de seguridad tiene una duración máxima de diez años aunque
se pondrá fin inmediatamente a esta medida de seguridad si el tribunal
estima que desaparecen las circunstancias que la hacían necesaria. Esta
medida sólo será aplicable a quienes hayan sido condenados por delitos de
especial gravedad como son los delitos contra la vida, la integridad física, la
libertad, la libertad o indemnidad sexual, los cometidos con violencia o
intimidación, contra la comunidad internacional, terrorismo o tráfico de
drogas.
Detención ilegal y delito continuado: Es una reforma muy relacionada
con el caso Bretón. Se modifica la regulación del delito de detención ilegal
con desaparición. En los casos en los que no se dé razón de lo ocurrido con
la víctima se fijará una pena única equivalente a la que corresponde al
delito de homicidio, con independencia de que aparezca el cuerpo o no.
Libertad condicional: La libertad condicional pasa a ser regulada como
una suspensión de la pena, de tal modo que si, una vez en libertad, el
penado vuelve a delinquir, podrá ser devuelto a la cárcel para que siga
cumpliendo condena desde el momento en que quedó en suspenso. Se
aplica en los mismos términos en los casos de prisión permanente
revisable, cuando una vez cumplidos los años fijados se revise su situación
y el tribunal entienda que puede acceder a esta medida.
Supresión de las faltas: Con el objetivo de hacer efectivo el principio de
intervención mínima del Derecho penal y de reducir el número de asuntos
menores que sobrecargan los juzgados, se ha decidido suprimir las faltas.
Se mantendrán las que son merecedoras de reproche penal, pero como
delitos leves, denominados de escasa gravedad y que estarán castigados
con penas de multa.
Asesinato: El Código Penal actualiza el delito de asesinato, de forma que
se considerará tal, además de los ya previstos, el homicidio que se cometa
para facilitar al comisión de otro delito o para evitar ser descubierto.
Hurto y robo: Se suprime la falta de hurto para sustituirla por un delito leve
de hurto que castigará los casos en los que lo sustraído no supere los 1.000
euros, aunque para fijar este límite se tendrá en cuenta la capacidad
económica de la víctima.
Multireincidencia: Se prevé que en el caso de delincuencia profesional y
organizada se les pueda condenar con el tipo agravado a penas de uno a
tres años de prisión e, incluso, en los casos más graves, de entre dos y
cuatro años.
Las agravantes del delito de robo son: el desamparo de la víctima y el
pillaje que puede darse en situaciones de catástrofe; la profesionalidad; el
portar armas; la participación de un grupo organizado, y el hurto de
conducciones de suministros eléctricos o de cableado de
telecomunicaciones.
Atentado, resistencia y desobediencia: La reforma del Código Penal
clarifica la definición del delito de atentado que incluye todos los supuestos
de acometimiento, agresión, empleo de violencia o amenazas graves de
violencia sobre el agente. Pero no se equipara con la acción de resistencia
meramente pasiva que, junto a la desobediencia, se mantiene, como hasta
ahora, penada con entre seis meses y un año de cárcel. La falta de
desobediencia desaparece del Código, pero se sancionará como infracción
administrativa de la Ley de Seguridad Ciudadana. Se incluyen como sujetos
protegidos los miembros de los equipos de asistencia o rescate.
Incendios forestales: La reforma del Código Penal contempla un
endurecimiento de las penas para los autores de incendios forestales que
se consideren especialmente graves. La pena prevista actualmente para
estos delitos es de tres a cinco años de cárcel y, con la reforma, la pena se
elevará hasta los seis. Además, cuando los incendios afecten a espacios
naturales protegidos se castigarán del mismo modo que los delitos contra el
medioambiente, lo que significa que sus autores podrán ser castigados con
la pena superior en grado, que en este caso supone nueve años de prisión.
Delitos económicos: Tipificación de las conductas de obstaculización de la
ejecución y ocultación de bienes. Se adecua la insolvencia punible a los
supuestos de acreedores declarados fraudulentos y se da una respuesta
proporcionada a posibles conductas ilícitas de los administradores
concursales.
Transposición europea: La reforma incluye la transposición de varias
directivas europeas relativas a la lucha contra el racismo y la xenofobia, por
la que se tipifica la negación del genocidio siempre que incite al odio contra
las minorías; la lucha contra los abusos y explotación sexual de los
menores y pornografía infantil, en la que se delimita la pornografía infantil
punible, incluyendo montajes fotográficos con menores, y la lucha contra la
trata de seres humanos.
Esterilización: Atendiendo a las recomendaciones del Comité de
Seguimiento de la Convención Internacional sobre los Derechos de las
Personas con Discapacidad, aprobada por Naciones Unidas en diciembre
de 2006 y ratificada por España en abril de 2008, se reconduce a la vía civil
el tratamiento de la esterilización de las personas discapacitadas.30
30
http://www.abc.es/20120914/espana/rc-cadena-perpetua-revisable-para-201209141416.html
15.09.2012 Hrs. 15:30
4. Sumatoria de Penas
La acumulación de condenas versa sobre la existencia de o más penas que
han de cumplirse, bien por haberse impuesto en el mismo título ejecutivo o
en títulos ejecutivos distintos, con ella se establece el modo en que ha de
procederse para su cumplimiento y los límites que, en su caso, se pueden
imponer en la ejecución de las mismas.
La acumulación de condenas, teóricamente, puede ser de penas de
diferente naturaleza (por ejemplo, acumulación aritmética y consiguiente
cumplimiento simultáneo de pena privativa de libertad y pena de
inhabilitación).
Clases:
Acumulación aritmética:
Las penas privativas de libertad, dado su carácter temporal, no admiten
el cumplimiento simultáneo con otras penas privativas de libertad, por
ello se debe proceder a su cumplimiento sucesivo. El establecimiento
del orden de cumplimiento sucesivo de las penas se realizará conforme
a la gravedad de las mismas.
Acumulación jurídica:
La limitación se aplicará aunque las penas se hayan impuesto en
distintos procesos si los hechos, por su conexión, pudieran haberse
enjuiciado en uno solo.
En este último caso, el Juez de Ejecución penal, valorando, en su caso,
las circunstancias personales del reo, la evolución del tratamiento
reeducador y el pronóstico de reinserción social, podrá acordar
razonadamente, oído el Ministerio Fiscal, la aplicación del régimen
general de cumplimiento.
Requisito general para aplicación de la acumulación de condenas: La
conexidad.
Se plantea la necesidad de establecer el criterio para la aplicación de la
acumulación de condenas, dado que un mismo sujeto puede venir
condenado a diferentes penas sin que entre las mismas exista vínculo
alguno.
A los efectos de acumulación de condenas se entiende por última
sentencia:
a) Aquella que haya sido condenatoria, de modo que si el último
tribunal sentenciador ha dictado sentencia absolutoria del sujeto éste
no tendrá competencia alguna.
b) La última sentencia debe entenderse, desde el punto de vista
temporal, desde que la misma ha adquirido firmeza.
c) En el supuesto de sentencias que no sean susceptibles de ser
incluidas en la acumulación jurídica de condenas, si las mismas con
claridad son excluibles, por referirse a hechos ocurridos con
posterioridad a la firmeza de la primera de las sentencias de tal
carácter que se pretenden acumular, el órgano judicial que dictó
estas sentencias no sería competente, y habría que deferir la
competencia a favor del último Tribunal de Sentencia entre aquellos
que hubieren impuesto condenas susceptibles de ser acumuladas;
no obstante, también, la doctrina y jurisprudencia no son pacíficas.
Es necesario reformar el Código Penal y del Código de Procedimiento
Penal.
En el Código Penal Boliviano si bien no se puede una cadena perpetua o
pena de muerte una alternativa fidedigna se refiere a la acumulación de
penas, ahora una persona delinque e incurre en dos o tres tipos penales y
resulta que se le procesa sólo por el tipo penal más grave, entonces la
propuesta es que los procesos y sanciones sean independientes y
acumulativos. Lo que generaría sanciones más duras.
Sin embargo, la actual Constitución contempla la máxima sanción de sólo
30 años para los delincuentes; aunque el planteamiento es que la
acumulación de penas permita el tratamiento independiente de las
diferentes sanciones.
Se debe sumar las penas y no romper la norma constitucional vigente por lo
cual es necesario modificar el art. 118 parágrafo II de la actual Constitución
Política del Estado
5. Concurso Real
En el concurso real existen dos o más acciones del sujeto. Se da cuando el
mismo autor, mediante una pluralidad de acciones, ha realizado varios
delitos, independientes entre sí, los cuales han de juzgarse en el mismo
proceso. Para su apreciación son necesarios dos presupuestos: uno de
Derecho penal sustancial, que un mismo autor haya realizado dos o más
acciones que constituyan varios delitos independientes; y otro de Derecho
procesal: que esa pluralidad de delitos haya de juzgarse en el mismo
proceso. La determinación de cuándo esos delitos deben ser juzgados en
un único proceso pertenece a las normas jurídico-procesales.
En otras palabras también denominado pluralidad de acciones y delitos,
es otra forma de participación empero la condición es que no exista una
sola acción, sino una o varias acciones con el requisito de que las
voluntades olas pretensiones delictivas sean independientes entre sí, se
cometan dos o más delitos. Es decir dos o más acciones con designios
distintos, que vulneren dos o más bienes jurídicos. La sanción a aplicarse
será la pena del delito más grave, el juez tiene la posibilidad de la pena no
debe exceder de los 30 años.
6. Concurso Ideal
El concurso ideal se da cuando el autor mediante una y la misma acción
viola varias leyes penales o varias veces la misma ley penal. Para la
apreciación del concurso ideal son necesarios, por tanto, dos requisitos:
existencia de una sola acción y que esta acción suponga la realización de
varios tipos penales. El concurso ideal hace posible considerar la acción
desde la vertiente de diferentes tipos penales y someterla a una variedad
de valoraciones jurídicas. La doctrina distingue dos formas de concurso
ideal: el homogéneo y el heterogéneo. Se da el primero cuando la acción
única del sujeto realiza dos o más veces el mismo tipo penal. Estamos ante
el segundo cuando el autor con su acción realiza diferentes tipos penales.
En otras palabras también denominado unidad de acción y pluralidad de
delitos, es la realización de una acción u omisión de carácter delictivo que
tiene como consecuencia la comisión de varios hechos delictivos con la
condición de que no se excluyan entre sí. Habrá concurso de delitos
cuando un sujeto atente contra la vida, la libertad sexual y la propiedad.
Nuestra legislación determina que la sanción será con la pena del delito
más grave, con la posibilidad de aumentar el máximo de esa pena para el
delito más grave hasta una cuarta parte. Una sola acción que produce la
lesión de varios tipos penales que no se excluyan entre sí.
7. Repercusión Social
En Bolivia, las airadas manifestaciones solicitando la pena de muerte más
que buscar el deceso del que delinque, demandan su castigo en un proceso
rápido, no el dilatorio como el actual.
Los ciudadanos asocian de inmediato la pena de muerte con el
linchamiento o con la mal concebida justicia comunitaria, porque en esos
procedimientos sumarísimos la turba se convierte en víctima, fiscal, juez y
verdugo al mismo tiempo, pensando que ante la ausencia de Estado
pueden satisfacer su ansia de justicia.
En Bolivia se planteó un debate en torno a los linchamientos después que
fue reconocida la justicia comunitaria. Según los legisladores oficialistas en
la justicia indígena no estarían reconocidos los linchamientos, aunque se
trata de una práctica muy utilizada por los nativos. No existen cifras precisa,
pero en los últimos años se registraron varios linchamientos en
Cochabamba, La Paz y Santa Cruz.
La ola de delincuencia, crímenes, asesinatos, atracos y toda clase de actos
de violencia ha conmovido a la opinión pública y ha revelado que no existe
la denominada “seguridad ciudadana” de la que tanto alarde hicieron los
candidatos al Gobierno y que ofrecieron eliminar, en cuanto se hiciesen
cargo de las riendas del Estado. La protesta pública llegó hasta los sectores
campesinos e indígenas que no tardaron en pronunciarse haciendo
demostraciones demandando sanciones para los culpables y llegando, al
mismo tiempo, al extremo de pedir el dictado de una ley -previa reforma de
la Carta constitucional- que restablezca en el país la pena de muerte para
quienes fuesen hallados como autores de crímenes horrendos, como los
que suceden a diario en todo el país. En particular llamó la atención que
quienes pidieron la pena de muerte fueron los campesinos que inclusive
llenaron las calles de La Paz y exhibieron letreros exigiendo la aplicación de
esa medida. En efecto, los indígenas, que regularmente estuvieron
demandando la aplicación de la “justicia comunitaria” -que tiene como
práctica regular la aplicación de la justicia por mano propia-, reclamaron
legalizar ese procedimiento, es decir dar continuidad a una de sus prácticas
ancestrales, consistente en dar muerte a quienes fuesen hallados culpables
de diversos actos de violencia. Los linchamientos en el medio rural y aun
urbano han proliferado en los últimos seis o siete años y han estremecido a
la población porque, en la mayoría de los casos, las víctimas no fueron
procesadas por las autoridades competentes y se comprobó que, en
algunos casos, los linchados fueron personas inocentes. Esa manera de
proceder para “hacer justicia” fue denominada algunas veces como “justicia
comunitaria” e inclusive fue incorporada en la Constitución aprobada en la
última Constituyente. Ahora, sin embargo, los indígenas que fueron
favorecidos con la “justicia comunitaria” -que practica la pena de muerte de
manera ancestral- piden que se dicte una ley que legalice ese castigo, vale
decir que desean que se legalice el sistema de sanción extrema de acuerdo
con sus prácticas tradicionales. En efecto, legalizar ahora la pena de
muerte será legalizar las prácticas tradicionales de un sistema judicial
primitivo, en el cual no existen autoridades debidamente designadas, no
hay derecho a la defensa, no existe la apelación, tampoco se conoce la
presunción de inocencia, así como gran cantidad de modernos principios
jurídicos que alcanzó la humanidad durante los últimos siglos. Resulta,
pues, congruente la exigencia de los pobladores rurales (que son alrededor
del 30 por ciento de la población total del país y que tienen por práctica
tradicional la aplicación de la pena de muerte), con sus procedimientos
comunitarios y así poner en práctica los principios comunitarios del “ama
sua, ama llulla, ama kella” que también están incluidos en la Constitución
vigente. En síntesis, el pedido de los indígenas consistiría en legalizar la
práctica de la pena capital establecida por la antigua “justicia comunitaria”,
sistema que últimamente se ha ido extendiendo a casi todo el país y que,
en muchos casos, horrorizó a la población por la aplicación del
linchamiento, la lapidación, quema con gasolina, degollamiento y otros
métodos inconcebibles en el mundo, donde la justicia ha evolucionado y
dejado de lado tan bárbaros procedimientos.31
1. Marco Teórico
Modificación a la Normativa Penal Vigente
Nuestro Código Penal tiene desfases ideológicos, y propugna una reforma.
Frente al desafío de las multiculturas y las interpretaciones de lo indígena.
El código penal boliviano durante el gobierno de facto del Gral. Hugo
Banzer Suárez se crea una comisión de “notables” a la que se le
encomendó la elaboración de nuevos cuerpos legales, la misma que
desempolva el anteproyecto que casi una década antes habría
confeccionado la Comisión Codificadora del código penal, nombrada por el
Presidente Víctor Paz Estenssoro en 1962 y conformada por juez Manuel
Durán Padilla, Hugo Cesar Cadima Maldonado, Raúl Calvimontes Núñez
del Prado y Manuel José Justiniano. Es así que el Gral. Banzer Suárez en
fecha 23 de agosto de 1972 aprobó el Código Penal mediante Decreto Ley
No. 10426.
El Neoidealismo filosófico o Tecnicismo jurídico al materializarse en
cuerpos legales se caracterizó por utilizar al derecho penal para proteger
31
Suplemento el Diario de fecha 08 de Marzo de 2012
al Estado, de allí que esos tipos penales contengan penalidades muy
severas. Y una característica muy particular, fue la utilización de la pena de
muerte para los tipos delictivos que protegen al Estado y a las personas;
como lo vemos en el antiguo código penal que a partir de su vigencia
(1973) incorpora la pena de muerte para algunos delitos contra la
seguridad del estado y para determinados delitos contra la vida y la
integridad corporal (asesinato y parricidio), aunque la pena de muerte sólo
fue aplicada al indígena Suxo por la violación y muerte de una menor de
edad en el año 1975, y el entonces Presidente Banzer conmutó algunas
otras; con el advenimiento de la democracia, la pena de muerte quedó en
desuso por un claro e inequívoco manejo de la Constitución Política del
Estado, y posteriormente se la quita del texto oficial mediante Ley No. 1768
del 10 de marzo del 1997, adecuando la pena a lo máximo que establece
la Constitución Política del Estado de ese entonces. Al Código Penal le
introducen una serie de modificaciones, producto de una sistematización
de las críticas que durante 2 décadas había recibido; reformas que se
realizaron con apoyo de cooperación extranjera.
El actual Código de Procedimiento Penal (1999), es esencialmente
garantista, prioriza los derechos y garantías de las personas, vemos que su
esencia guarda coherencia con la Constitución Política del Estado (1967),
lo que no sucede con el Código Penal (1972).
El Código Penal actual de manera paulatina ha sufrido modificaciones
sustanciales con la promulgación de la Ley Nº 1970 de fecha 25 de marzo
de 1999.
Las costumbres no están formalizadas y/o legalizadas, porque la
diversidad no ha sido admitida.
Un análisis de la realidad jurídica de cualquier País constituida como
Estado Social y Democrático de Derecho, nos demuestra que después de
la Constitución Política del Estado, el Código Civil y su procedimiento
(como reguladores de las relaciones entre particulares) y el Código Penal y
su procedimiento (como reguladoras de las conductas tipificadas como
delitos y la forma de aplicación al caso concreto o juzgamiento) constituyen
las bases de cualquier legislación moderna. Por lo cual el actual Código
Penal, debe ser adecuado al momento en que Bolivia vive, inmersa en el
contexto mundial y fundamentalmente de reconocimiento de su diversidad.
No a la Pena de Muerte
Las cosas no se resuelven ojo por ojo y diente por diente. Tenemos que
crecer como sociedad y como seres humanos para comenzar a tomar las
decisiones correctas.
Además, se debe tomar en cuenta que en 1966, la Comisión de Derechos
Humanos de las Naciones Unidas redactó el Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos. En este pacto, vigente desde 1976, los
Estados firmantes se comprometen a dictar las disposiciones legislativas
necesarias para hacer efectivos los derechos reconocidos en esa
convención internacional. Entre ellas una serie de restricciones en relación
con la imposición de la pena de muerte como castigo a las personas
juzgadas y encontradas culpables de cometer delitos.
La rápida solución definitiva de la pena de muerte no contribuye más que
otros castigos a disuadir de cometer crímenes. En cambio, contribuye a
incrementar el clima de violencia, algunos ceden a la presión popular y se
centran en el castigo, creando un clima de venganza y brutalidad. Los
gobiernos podrían introducir reformas para erradicar la pobreza, la
marginación y la desesperación. En lugar de ello algunos se apoyan en
sistemas judiciales plagados de deficiencias para remediar las
consecuencias de la desesperación de la única forma que pueden hacerlo
imponiendo castigos durísimos pero arcaicos.
La pena de muerte no es un concepto abstracto. Significa causar traumas y
lesiones tan graves a un cuerpo humano que hacen que la vida se extinga.
Significa dominar instintos humanos básicos como la voluntad de sobrevivir
y el deseo de ayudar a otros seres humanos que están sufriendo. Es un
acto repulsivo que a nadie se debe pedir que ejecute o presencie y que
nadie debe tener el poder de autorizar.
En Estados Unidos, varios estados usan aún la silla eléctrica. Una de las
ejecuciones más recientes con ese método tuvo lugar en Florida en 1997.
Pedro Medino, refugiado cubano con un historial de enfermedad mental,
fue atado a una silla construida en 1924. La silla no funcionó bien, la
máscara de cuero negro que protegía el rostro aterrorizado de Pedro se
incendió y la cámara de ejecución se llenó de un denso humo negro. La
corriente eléctrica se mantuvo hasta que murió. En Afganistán, en 1998, al
menos a cinco hombres, declarados culpables de sodomía por los
tribunales de la ley islámica (Sharía), los colocaron delante de unos muros;
después derrumbaron los muros y los hombres quedaron enterrados entre
los escombros. Dos de ellos no murieron hasta el día siguiente, en el
hospital. Un tercero sobrevivió. En ese mismo país se pueden llevar a cabo
ejecuciones lapidando al condenado, colgándolo de una grúa o
degollándolo.32
La pena de muerte es siempre un método injusto de hacer justicia.
Revisando antecedente muy pocos millonarios se hallan en el Penal de
San Pedro, Chonchocoro, Palmasola, Centro de Orientación Femenina de
Obrajes y otros centros Penitenciarios. Por lo que si se aplicaría la pena de
muerte se aplicaría de forma arbitraria, dependiendo de la “chicanas” que
usan los abogados, las negociaciones de sentencia ante estrados
judiciales o los indultos concedidos para celebrar los cumpleaños de los
gobernadores. Que alguien viva o muera puede ser una lotería. Y la pena
de muerte siempre conlleva el riesgo de acabar con la vida de personas tal
vez totalmente inocentes, por errores judiciales inevitables.
Cadena Perpetua
La cadena perpetua no tiene un efecto significativo si la Justicia no opera
con eficacia. Numerosos casos quedan en la impunidad porque no se
32
http://html.rincondelvago.com/abolicion-de-la-pena-de-muerte_1.html 22.07.12 Hrs. 21:00
denuncian o no se demuestran, independientemente de la pena que
podrían recibir, más que adoptar la cadena perpetua para castigar un solo
tipo de crimen, sería necesario hacer una revisión integral del Código
Penal.
La cadena perpetua no tiene un efecto disuasivo real, como lo demuestra
la experiencia de países que la aplican. En el campo de lo jurídico,
considero que desconoce los principios del Pacto de San José. Solicitar la
pena de muerte o la cadena perpetua es una opción política, cuya
respetabilidad no aumenta ni disminuye porque quien lo demande sea
víctima o simplemente partidario de la ley del talión. La cadena perpetua es
inhumana y cierra toda posibilidad de reforma o rehabilitación.
Me parece inadmisible que un adulto culpable de abusos sexuales contra
una menor de edad pueda salir con condena de 10 a 20 años.
La cadena perpetua solo tiene un efecto mediático pero no es efectivo de
cara al reo, y además es inconstitucional.
Sí, son muchas las cosas que hay que hacer en el ámbito de la Justicia.
Pero entre ellas no se cuenta la instauración la cadena perpetua, que, al fin
y al cabo, es una especie de "pena de muerte" social.
Lo que hay que hacer es aplicar con eficacia la legislación vigente.
Sumatoria de penas
Consiste en aplicar penas independientes por cada delito, que luego
individualizadas se proceden a acumular. La pena que sufre el autor es
igual a la suma de ambas.
La acumulación jurídica de penas constituye una metodología para la
medición judicial de la pena cuando concurre el fenómeno del concurso de
delitos, según la cual, una vez establecida la pena imponible a cada delito
se aplica aquella correspondiente al delito más grave, aumentada en una
determinada proporción.
La Sociedad
Con esta nueva tipificación de delitos, incluidos en el código penal como el
que se propone “Acumulación de penas”, la sociedad estaría relativamente
conforme. Al margen que algunos partidos políticos quieran manipularlo
para propaganda política;
Si bien en la actualidad por el asesinato de los hermanos Peñasco, el
asalto al bus Apolo – La Paz, entre muchos que se ve a diario en estrados
judiciales, fueron estos hechos los que hicieron que la sociedad salga a las
calles y pidan irrefutablemente la pena de muerte para estos reincidentes,
claro está que alternativamente pedían “cadena perpetua”; sin embargo
revisando todos los antecedentes se puede evidenciar que, ni la pena de
muerte, ni la cadena perpetua son viables en nuestro Estado Plurinacional
de Bolivia, pero podríamos tomar en cuenta la acumulación de penas como
se plantea en el título, como una alternativa más al pedido dela sociedad.
Esta acumulación o sumatoria de penas no atentaría contra la vida, no
sería una salida fácil de detención de por vida, sino más bien daría una
alternativa a que el acusado con sentencia condenatoria tenga también
como persona el derecho a rehabilitarse y reinsertarse en la sociedad.
33
http://www.jornadanet.com/n.php?a=72792-1 25.01.2010 hr. 19:00
Según la gravedad
Muy graves
Graves
Leves
2. Marco Conceptual
a) La Violación
La violación es la imposición de la cópula sin consentimiento, por
medios violentos. Se caracteriza el delito en estudio, por la ausencia
total de consentimiento del pasivo y la utilización de fuerza física o
moral. Este concepto se refiere al tipo básico del delito, los subtipos de
violación se examinarán en su oportunidad en el apartado
correspondiente.
La cópula en la violación se entiende en su sentido más amplio, esto es,
no se limita a cópula por vía idónea entre varón y mujer, sino abarca
cualquier tipo de cópula, sea cual fuere el vaso por el que se produzca
la introducción.
Respecto del sujeto pasivo, puede ser cualquier persona con
independencia de sexo, edad, conducta o cualquier otra situación
personal, de manera que la violación puede cometerse en personas del
sexo masculino o femenino, menor de edad o adulto, púber o impúber,
de conducta digna o indigna, en fin, en cualquier sujeto.
La violencia puede ser física o moral, por violencia física se entiende la
fuerza material que se aplica a una persona y la violencia moral consiste
en la amenaza, el amago que se hace a una persona de un mal grave
presente o inmediato, capaz de producir intimidación. Debe existir una
relación causal entre la violencia aplicada y la cópula, para que pueda
integrarse cuerpo del delito y probable responsabilidad.
b) El Asesinato
Acción de dar muerte a una persona concurriendo alguna de las
circunstancias siguientes alevosía; precio, recompensa o promesa;
ensañamiento, aumentando deliberada e inhumanamente el dolor del
ofendido.
Es un acto que es considerado un delito contra la vida para el Derecho y
normalmente es la infracción más grave que recogen los códigos
penales. Para determinar si dicha infracción es una variante agravada
del homicidio o un delito autónomo, lo decisivo son las circunstancias
que integran la configuración de la conducta, que pueden ser de
carácter objetivo, ya sea por alevosía, utilización de veneno, explosivos,
precio, promesa o recompensa; o de carácter subjetivo: premeditación,
ensañamiento, sadismo, etc. De acuerdo a la Real Academia Española
se lo puede definir (también denominado homicidio calificado) como un
delito contra la vida humana, de carácter muy específico, que consiste
en matar a una persona concurriendo ciertas circunstancias.
Son innumerables las comparaciones con el homicidio, pero mientras
que el homicidio es el delito que alguien comete por acabar con la vida
de una persona, el asesinato requiere de un mayor número de
requisitos.
Si bien el tema se ha discutido mucho, el asesinato no se trata de un
simple homicidio agravado, sino de un delito diferente (de acuerdo con
la mayoría de la doctrina y la jurisprudencia), en el que las
circunstancias señaladas son elementos constitutivos del mismo. En el
asesinato existe una mayor intensidad del propósito criminal que en el
homicidio, por los medios utilizados de un modo especial o por la
inconfundible malicia y peligrosidad que se revela.
1. Conclusiones Críticas
Para determinar el análisis del fenómeno delictivo es importante encontrar
las formas de erradicación y prevención. Siendo entonces un fenómeno
social complejo, el análisis de sus causas, formas de coerción y prevención
están condicionadas a sus propias raíces materiales y sociales.
La propia sociedad trata de disponer las vías pertinentes para el combate
frontal contra el delito, establece bajo qué condiciones se viabiliza la
investigación de tales conductas, posibilitándose la elaboración y
planificación de una red de indicadores jurídicos, sociológicos, educativos,
culturales y económicos que coadyuven a la erradicación de las nefastas
consecuencias que engendra el mismo.
Asimismo, se debe tomar en cuenta que, la reinserción como una actividad
preventiva mediadora es necesaria. Además la Constitución contempla las
penas con el fin de rehabilitar al delincuente, pero en los casos en los que
esta rehabilitación es imposible y que el delincuente en libertad es un
peligro evidente para la sociedad, se deben articular las medidas para
proteger a los ciudadanos. Como ejemplo basta mencionar a los violadores
y asesinos en serie.
De la revisión prolija de la Constitución podemos determinar que dos
artículos son contrarios a instaurar y/o rehabilitar la pena de muerte en el
país. En la Constitución Política del Estado (CPE) el artículo 15 parágrafo I
establece: “Toda persona tiene derecho a la vida y a la integridad física,
psicológica y sexual. Nadie será torturado, ni sufrirá tratos crueles,
inhumanos, degradantes o humillantes. No existe la pena de muerte”.
Inclusive, posteriormente, la Ley de Deslinde Jurisdiccional estableció la
prohibición de pena de muerte (artículo 6), al señalar que: “En estricta
aplicación de la Constitución Política del Estado, está terminantemente
prohibida la pena de muerte bajo proceso penal en la justicia ordinaria por
el delito de asesinato a quien la imponga, la consienta o la ejecute”.
Esto en concordancia con la Convención Americana de Derechos Humanos
(Pacto de San José de Costa Rica, aprobado y ratificado por Bolivia
mediante Ley Nº 1430, de 11 de febrero de 1993) que declara
expresamente (artículo 4) que “no podrá reimplantarse la pena de muerte
en los Estados que la han abolido...”, lo cual se ha efectivizado por vía
constitucional, en el caso de Bolivia.
Melquiades Suxo, en 1973, fue el último castigado en Bolivia con la
ejecución, por violación y asesinato, en un periodo en el cual no existía
claridad sobre la legalidad de ese tipo de sanciones. El acusado, un
campesino de 54 años sentenciado a muerte el 7 de diciembre de 1972, fue
fusilado después de nueve meses de penurias en la cárcel. Este hecho
aconteció en el gobierno dictatorial del extinto Hugo Banzer Suárez y se
constituye en la última ejecución ordenada por la justicia en nuestro país en
el marco de los Códigos Banzer, que restablecieron la pena de muerte
durante un año. Entonces la población exigía la pena capital por la
impotencia frente a los actos delictivos. El establecimiento de la condena en
la redacción original del Código Penal, en su artículo 26, en el Decreto Ley
Nº 09980, del 5 de noviembre de 1971, fue ordenado por el régimen
banzerista y de facto con bastante anticipación. La redacción del texto
original del Código Penal Boliviano fue modificada un año más tarde por la
Ley Nº 1768 de Reformas al Código Penal, debido a su abierta
contradicción con el derecho a la vida consagrado expresamente por la
misma Constitución, que es una norma de aplicación preferente en virtud de
la supremacía constitucional. El dictamen judicial generó mucha polémica
en los pasillos judiciales porque los denominados Códigos Banzer se
pusieron por encima de la Constitución Política del Estado.
No se debe tener la ideología de que pena de muerte = seguridad
ciudadana, dado que siendo conceptos tan distintos en sus alcances, es
algo absolutamente ilógico suponer que la reimplantación de la pena de
muerte, nos brindará seguridad ciudadana, o viceversa, que la seguridad
ciudadana tiene como base fundamental la eliminación de los delincuentes
(idea que tampoco puede ser considerada una solución eficaz), no aporta
nada constructivo para el desarrollo actual de nuestra sociedad, sino que
perjudica la estabilidad de nuestro régimen democrático, además debe
considerarse principalmente que el sistema democrático que rige en Bolivia,
ha dado paso a la construcción de un régimen penal destinado
principalmente a formar ciudadanos conscientes y responsables, capaces
de conducirse de acuerdo a su razón y aptitudes, siendo en consecuencia
proclive a la abolición de la pena de muerte, en tanto nuestra organización
política se encuentre sustentada en el régimen democrático, que implica la
supresión de toda clase de torturas y/o penas crueles, inhumanas o
degradantes, en razón del respeto a la dignidad humana, dado que dichas
bases constitucionales son absolutamente incompatibles con la destrucción
de la vida (en una especie de venganza del talión), mediante padecimientos
físicos, de tal forma que implementar esta forma de castigo, sería
contradictorio.
Sin embargo en caso de error judicial, la aplicación de la pena de muerte,
es definitivamente irreparable. Por tanto, hay que insistir en que no es
racional plantear una pena que lesiona derechos humanos, valores y
principios fundamentales, como es la vida, para resolver un grave problema,
como es el delito (sea de violación, asesinato, atraco u otros) que tiene sus
causas y factores múltiples que requieren ser eliminados, y no solamente el
sistema procesal penal se ocupe de atacar el delito, sino también de
rehabilitar al delincuente, a fin de lograr su reinserción a la sociedad.
2. Recomendaciones Sugerencias
La situación es clara, no se puede sancionar el delito de asesinato
cometiendo otro asesinato (la pena de muerte); más aún si se considera
que en los tiempos actuales, ha quedado totalmente descontextualizada
toda idea de justicia basada en la Ley del Talión "ojo por ojo, diente por
diente"; además de que está demostrado que en los países y Estados en
los que todavía está vigente la pena de muerte para sancionar los
homicidas, no se ha logrado reducir efectivamente la tasa de crecimiento de
este tipo de delitos.
Se debería trabajar en impulsar reformas al Código Pena, código procesal
penal y si es necesario a la propia Constitución Política del estado
Plurinacional de Bolivia para darles la verdadera efectividad a las penas.
Sin embargo, no se debe atentar contra los derechos humanos, como la
figura de modificar el Código de Procedimiento Penal con la pena de
muerte o la cadena perpetua para los delincuentes que atenten contra la
vida de una persona. De ahí que, no es recomendable encarar el problema
por las ramas sino por las raíces.
Si las personas (procesadas) no cumplen con las reglas de conducta,
entonces se ejecuta la pena y si vuelven a cometer otro delito la pena que
le corresponda por el nuevo delito se le suma a la anterior, porque con la
reforma del código de procedimiento penal se contemplaría la sumatoria
de penas (previa modificación de la actual Constitución Política del Estado),
a diferencia del actual, en el cual solo existe la base de la pena única, es
decir todo (los procesos) se subsume en una sola pena que debe ser la
mayor obviamente.
Incluir la sumatorias de penas evitaría la reincidencia de los asesinos y
violadores que salen tras cumplir su pena. Evitaría también causar dolor a
más familias por parte del reincidente. No podemos reinsertar en la
sociedad a alguien que lo más probable es que vuelva a matar o a violar sin
ningún tipo de remordimiento.
3. Apéndices o Anexos
Reglas mínimas para el tratamiento de los reclusos
Adoptadas por el Primer Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito y
Tratamiento del Delincuente, celebrado en Ginebra en 1955, y aprobadas por el Consejo
Económico y Social en sus resoluciones 663C (XXIV) de 31 de julio de 1957 y 2076 (LXII) de 13
de mayo de 1977
Observaciones preliminares
1. El objeto de las reglas siguientes no es de describir en forma detallada un sistema
penitenciario modelo, sino únicamente establecer, inspirándose en conceptos
generalmente admitidos en nuestro tiempo y en los elementos esenciales de los
sistemas contemporáneos más adecuados, los principios y las reglas de una buena
organización penitenciaria y de la práctica relativa al tratamiento de los reclusos.
2. Es evidente que debido a la gran variedad de condiciones jurídicas, sociales,
económicas y geográficas existentes en el mundo, no se pueden aplicar
indistintamente todas las reglas en todas partes y en todo tiempo. Sin embargo,
deberán servir para estimular el esfuerzo constante por vencer las dificultades
prácticas que se oponen a su aplicación, en vista de que representan en su conjunto las
condiciones mínimas admitidas por las Naciones Unidas.
3. Además, los criterios que se aplican a las materias a que se refieren estas reglas
evolucionan constantemente. No tienden a excluir la posibilidad de experiencias y
prácticas, siempre que éstas se ajusten a los principios y propósitos que se desprenden
del texto de las reglas. Con ese espíritu, la administración penitenciaria central podrá
siempre autorizar cualquier excepción a las reglas.
4. 1) La primera parte de las reglas trata de las concernientes a la administración
general de los establecimientos penitenciarios y es aplicable a todas las categorías de
reclusos, criminales o civiles, en prisión preventiva o condenados, incluso a los que
sean objeto de una medida de seguridad o de una medida de reeducación ordenada
por el juez. 2) La segunda parte contiene las reglas que no son aplicables más que a las
categorías de reclusos a que se refiere cada sección. Sin embargo, las reglas de la
sección A, aplicables a los reclusos condenados serán igualmente aplicables a las
categorías de reclusos a que se refieren las secciones B, C y D, siempre que no sean
contradictorias con las reglas que las rigen y a condición de que sean provechosas para
estos reclusos.
5. 1) Estas reglas no están destinadas a determinar la organización de los
establecimientos para delincuentes juveniles (establecimientos Borstal, instituciones
de reeducación, etc.). No obstante, de un modo general, cabe considerar que la primera
parte de las reglas mínimas es aplicable también a esos establecimientos. 2) La
categoría de reclusos juveniles debe comprender, en todo caso, a los menores que
dependen de las jurisdicciones de menores. Por lo general, no debería condenarse a los
delincuentes juveniles a penas de prisión.
Primera parte
Reglas de aplicación general
Principio fundamental
6. 1) Las reglas que siguen deben ser aplicadas imparcialmente. No se debe hacer
diferencias de trato fundadas en prejuicios, principalmente de raza, color, sexo, lengua,
religión, opinión política o cualquier otra opinión, de origen nacional o social, fortuna,
nacimiento u otra situación cualquiera. 2) Por el contrario, importa respetar las
creencias religiosas y los preceptos morales del grupo al que pertenezca el recluso.
Registro
7. 1) En todo sitio donde haya personas detenidas, se deberá llevar al día un registro
empastado y foliado que indique para cada detenido: a) Su identidad; b) Los motivos
de su detención y la autoridad competente que lo dispuso; c) El día y la hora de su
ingreso y de su salida. 2) Ninguna persona podrá ser admitida en un establecimiento
sin una orden válida de detención, cuyos detalles deberán ser consignados
previamente en el registro.
Separación de categorías
8. Los reclusos pertenecientes a categorías diversas deberán ser alojados en diferentes
establecimientos o en diferentes secciones dentro de los establecimientos, según su
sexo y edad, sus antecedentes, los motivos de su detención y el trato que corresponda
aplicarles. Es decir que: a) Los hombres y las mujeres deberán ser recluidos, hasta
donde fuere posible, en establecimientos diferentes; en un establecimiento en el que se
reciban hombres y mujeres, el conjunto de locales destinado a las mujeres deberá estar
completamente separado; b) Los detenidos en prisión preventiva deberán ser
separados de los que están cumpliendo condena; c) Las personas presas por deudas y
los demás condenados a alguna forma de prisión por razones civiles deberán ser
separadas de los detenidos por infracción penal; d) Los detenidos jóvenes deberán ser
separados de los adultos.
Locales destinados a los reclusos
9. 1) Las celdas o cuartos destinados al aislamiento nocturno no deberán ser ocupados
más que por un solo recluso. Si por razones especiales, tales como el exceso temporal
de población carcelaria, resultara indispensable que la administración penitenciaria
central hiciera excepciones a esta regla, se deberá evitar que se alojen dos reclusos en
cada celda o cuarto individual. 2) Cuando se recurra a dormitorios, éstos deberán ser
ocupados por reclusos cuidadosamente seleccionados y reconocidos como aptos para
ser alojados en estas condiciones. Por la noche, estarán sometidos a una vigilancia
regular, adaptada al tipo de establecimiento de que se trate.
10. Los locales destinados a los reclusos y especialmente a aquellos que se destinan al
alojamiento de los reclusos durante la noche, deberán satisfacer las exigencias de la
higiene, habida cuenta del clima, particularmente en lo que concierne al volumen de
aire, superficie mínima, alumbrado, calefacción y ventilación.
11. En todo local donde los reclusos tengan que vivir o trabajar: a) Las ventanas
tendrán que ser suficientemente grandes para que el recluso pueda leer y trabajar con
luz natural; y deberán estar dispuestas de manera que pueda entrar aire fresco, haya o
no ventilación artificial; b) La luz artificial tendrá que ser suficiente para que el recluso
pueda leer y trabajar sin perjuicio de su vista.
12. Las instalaciones sanitarias deberán ser adecuadas para que el recluso pueda
satisfacer sus necesidades naturales en el momento oportuno, en forma aseada y
decente.
13. Las instalaciones de baño y de ducha deberán ser adecuadas para que cada recluso
pueda y sea requerido a tomar un baño o ducha a una temperatura adaptada al clima y
con la frecuencia que requiera la higiene general según la estación y la región
geográfica, pero por lo menos una vez por semana en clima templado.
14. Todos los locales frecuentados regularmente por los reclusos deberán ser
mantenidos en debido estado y limpios.
Higiene personal
15. Se exigirá de los reclusos aseos personales y a tal efecto dispondrán de agua y de
los artículos de aseo indispensables para su salud y limpieza.
16. Se facilitará a los reclusos medios para el cuidado del cabello y de la barba, a fin de
que se presenten de un modo correcto y conserven el respeto de sí mismos; los
hombres deberán poder afeitarse con regularidad.
Ropas y cama
17. 1) Todo recluso a quien no se permita vestir sus propias prendas recibirá las
apropiadas al clima y suficientes para mantenerle en buena salud. Dichas prendas no
deberán ser en modo alguno degradantes ni humillantes. 2) Todas las prendas deberán
estar limpias y mantenidas en buen estado. La ropa interior se cambiará y lavará con la
frecuencia necesaria para mantener la higiene. 3) En circunstancias excepcionales,
cuando el recluso se aleje del establecimiento para fines autorizados, se le permitirá
que use sus propias prendas o vestidos que no llamen la atención.
18. Cuando se autorice a los reclusos para que vistan sus propias prendas, se tomarán
disposiciones en el momento de su ingreso en el establecimiento, para asegurarse de
que están limpias y utilizables.
19. Cada recluso dispondrá, en conformidad con los usos locales o nacionales, de una
cama individual y de ropa de cama individual suficiente, mantenida convenientemente
y mudada con regularidad a fin de asegurar su limpieza.
Alimentación
20. 1) Todo recluso recibirá de la administración, a las horas acostumbradas, una
alimentación de buena calidad, bien preparada y servida, cuyo valor nutritivo sea
suficiente para el mantenimiento de su salud y de sus fuerzas. 2) Todo recluso deberá
tener la posibilidad de proveerse de agua potable cuando la necesite.
Ejercicios físicos
21. 1) El recluso que no se ocupe de un trabajo al aire libre deberá disponer, si el
tiempo lo permite, de una hora al día por lo menos de ejercicio físico adecuado al aire
libre. 2) Los reclusos jóvenes y otros cuya edad y condición física lo permitan,
recibirán durante el período reservado al ejercicio una educación física y recreativa.
Para ello, se pondrá a su disposición el terreno, las instalaciones y el equipo necesario.
Servicios médicos
22. 1) Todo establecimiento penitenciario dispondrá por lo menos de los servicios de
un médico calificado que deberá poseer algunos conocimientos psiquiátricos. Los
servicios médicos deberán organizarse íntimamente vinculados con la administración
general del servicio sanitario de la comunidad o de la nación. Deberán comprender un
servicio psiquiátrico para el diagnóstico y, si fuere necesario, para el tratamiento de los
casos de enfermedades mentales. 2) Se dispondrá el traslado de los enfermos cuyo
estado requiera cuidados especiales, a establecimientos penitenciarios especializados
o a hospitales civiles. Cuando el establecimiento disponga de servicios internos de
hospital, éstos estarán provistos del material, del instrumental y de los productos
farmacéuticos necesario para proporcionar a los reclusos enfermos los cuidados y el
tratamiento adecuados. Además, el personal deberá poseer suficiente preparación
profesional. 3) Todo recluso debe poder utilizar los servicios de un dentista calificado.
23. 1) En los establecimientos para mujeres deben existir instalaciones especiales para
el tratamiento de las reclusas embarazadas, de las que acaban de dar a luz y de las
convalecientes. Hasta donde sea posible, se tomarán medidas para que el parto se
verifique en un hospital civil. Si el niño nace en el establecimiento, no deberá hacerse
constar este hecho en su partida de nacimiento. 2) Cuando se permita a las madres
reclusas conservar su niño, deberán tomarse disposiciones para organizar una
guardería infantil, con personal calificado, donde estarán los niños cuando no se hallen
atendidos por sus madres.
24. El médico deberá examinar a cada recluso tan pronto sea posible después de su
ingreso y ulteriormente tan a menudo como sea necesario, en particular para
determinar la existencia de una enfermedad física o mental, tomar en su caso las
medidas necesarias; asegurar el aislamiento de los reclusos sospechosos de sufrir
enfermedades infecciosas o contagiosas; señalar las deficiencias físicas y mentales que
puedan constituir un obstáculo para la readaptación, y determinar la capacidad física
de cada recluso para el trabajo.
25. 1) El médico estará de velar por la salud física y mental de los reclusos. Deberá
visitar diariamente a todos los reclusos enfermos, a todos los que se quejen de estar
enfermos y a todos aquellos sobre los cuales se llame su atención. 2) El médico
presentará un informe al director cada vez que estime que la salud física o mental de
un recluso haya sido o pueda ser afectada por la prolongación, o por una modalidad
cualquiera de la reclusión.
26. 1) El médico hará inspecciones regulares y asesorará al director respecto a: a) La
cantidad, calidad, preparación y distribución de los alimentos; b) La higiene y el aseo
de los establecimientos y de los reclusos; c) Las condiciones sanitarias, la calefacción,
el alumbrado y la ventilación del establecimiento; d) La calidad y el aseo de las ropas y
de la cama de los reclusos; e) La observancia de las reglas relativas a la educación física
y deportiva cuando ésta sea organizada por un personal no especializado. 2) El
Director deberá tener en cuenta los informes y consejos del médico según se dispone
en las reglas 25 (2) y 26, y, en caso de conformidad, tomar inmediatamente las
medidas necesarias para que se sigan dichas recomendaciones. Cuando no esté
conforme o la materia no sea de su competencia, trasmitirá inmediatamente a la
autoridad superior el informe médico y sus propias observaciones.
Disciplina y sanciones
27. El orden y la disciplina se mantendrán con firmeza, pero sin imponer más
restricciones de las necesarias para mantener la seguridad y la buena organización de
la vida en común.
28. 1) Ningún recluso podrá desempeñar en los servicios del establecimiento un
empleo que permita ejercitar una facultad disciplinaria. 2) Sin embargo, esta regla no
será un obstáculo para el buen funcionamiento de los sistemas a base de autogobierno.
Estos sistemas implican en efecto que se confíen, bajo fiscalización, a reclusos
agrupados para su tratamiento, ciertas actividades o responsabilidades de orden
social, educativo o deportivo.
29. La ley o el reglamento dictado por autoridad administrativa competente
determinará en cada caso: a) La conducta que constituye una infracción disciplinaria;
b) El carácter y la duración de las sanciones disciplinarias que se puedan aplicar; c)
Cuál ha de ser la autoridad competente para pronunciar esas sanciones.
30. 1) Un recluso sólo podrá ser sancionado conforme a las prescripciones de la ley o
reglamento, sin que pueda serlo nunca dos veces por la misma infracción. 2) Ningún
recluso será sancionado sin haber sido informado de la infracción que se le atribuye y
sin que se le haya permitido previamente presentar su defensa. La autoridad
competente procederá a un examen completo del caso. 3) En la medida en que sea
necesario y viable, se permitirá al recluso que presente su defensa por medio de un
intérprete.
31. Las penas corporales, encierro en celda oscura, así como toda sanción cruel,
inhumana o degradante quedarán completamente prohibidas como sanciones
disciplinarias.
32. 1) Las penas de aislamiento y de reducción de alimentos sólo se aplicarán cuando
el médico, después de haber examinado al recluso, haya certificado por escrito que
éste puede soportarlas. 2) Esto mismo será aplicable a cualquier otra sanción que
pueda perjudicar la salud física o mental del recluso. En todo caso, tales medidas no
deberán nunca ser contrarias al principio formulado en la regla 31, ni apartarse del
mismo. 3) El médico visitará todos los días a los reclusos que estén cumpliendo tales
sanciones disciplinarias e informará al director si considera necesario poner término o
modificar la sanción por razones de salud física o mental.
Medios de coerción
33. Los medios de coerción tales como esposas, cadenas, grillos y camisas de fuerza
nunca deberán aplicarse como sanciones. Tampoco deberán emplearse cadenas y
grillos como medios de coerción. Los demás medios de coerción sólo podrán ser
utilizados en los siguientes casos: a) Como medida de precaución contra una evasión
durante un traslado, siempre que sean retirados en cuanto comparezca el recluso ante
una autoridad judicial o administrativa; b) Por razones médicas y a indicación del
médico; c) Por orden del director, si han fracasado los demás medios para dominar a
un recluso, con objeto de impedir que se dañe a sí mismo o dañe a otros o produzca
daños materiales; en estos casos, el director deberá consultar urgentemente al médico,
e informar a la autoridad administrativa superior.
34. El modelo y los métodos de empleo autorizados de los medios de coerción serán
determinados por la administración penitenciaria central. Su aplicación no deberá
prolongarse más allá del tiempo estrictamente necesario.
Información y derecho de queja de los reclusos
35. 1) A su ingreso cada recluso recibirá una información escrita sobre el régimen de
los reclusos de la categoría en la cual se le haya incluido, sobre las reglas disciplinarias
del establecimiento y los medios autorizados para informarse y formular quejas; y
cualquiera otra información necesaria para conocer sus derechos y obligaciones, que le
permita su adaptación a la vida del establecimiento. 2) Si el recluso es analfabeto, se le
proporcionará dicha información verbalmente.
36. 1) Todo recluso deberá tener en cada día laborable la oportunidad de presentar
peticiones o quejas al director del establecimiento o al funcionario autorizado para
representarle. 2) Las peticiones o quejas podrán ser presentadas al inspector de
prisiones durante su inspección. El recluso podrá hablar con el inspector o con
cualquier otro funcionario encargado de inspeccionar, sin que el director o cualquier
otro recluso miembro del personal del establecimiento se hallen presentes. 3) Todo
recluso estará autorizado para dirigir por la vía prescrita sin censura en cuanto al
fondo, pero en debida forma, una petición o queja a la administración penitenciaria
central, a la autoridad judicial o a cualquier otra autoridad competente. 4) A menos
que una solicitud o queja sea evidentemente temeraria o desprovista de fundamento,
la misma deberá ser examinada sin demora, dándose respuesta al recluso en su debido
tiempo.
Contacto con el mundo exterior
37. Los reclusos estarán autorizados para comunicarse periódicamente, bajo la debida
vigilancia, con su familiar y con amigos de buena reputación, tanto por
correspondencia como mediante visitas.
38. 1) Los reclusos de nacionalidad extranjera gozarán de facilidades adecuadas para
comunicarse con sus representantes diplomáticos y consulares. 2) Los reclusos que
sean nacionales de Estados que no tengan representación diplomática ni consular en el
país, así como los refugiados y apátridas, gozarán de las mismas facilidades para
dirigirse al representante diplomático del Estado encargado de sus intereses o a
cualquier autoridad nacional o internacional que tenga la misión de protegerlos.
39. Los reclusos deberán ser informados periódicamente de los acontecimientos más
importantes, sea por medio de la lectura de los diarios, revistas o publicaciones
penitenciarias especiales, sea por medio de emisiones de radio, conferencias o
cualquier otro medio similar, autorizado o fiscalizado por la administración.
Biblioteca
40. Cada establecimiento deberá tener una biblioteca para el uso de todas las
categorías de reclusos, suficientemente provista de libros instructivos y recreativos.
Deberá instarse a los reclusos a que se sirvan de la biblioteca lo más posible.
Religión
41. 1) Si el establecimiento contiene un número suficiente de reclusos que pertenezcan
a una misma religión, se nombrará o admitirá un representante autorizado de ese
culto. Cuando el número de reclusos lo justifique, y las circunstancias lo permitan,
dicho representante deberá prestar servicio con carácter continuo. 2) El representante
autorizado nombrado o admitido conforme al párrafo 1 deberá ser autorizado para
organizar periódicamente servicios religiosos y efectuar, cada vez que corresponda,
visitas pastorales particulares a los reclusos de su religión. 3) Nunca se negará a un
recluso el derecho de comunicarse con el representante autorizado de una religión. Y,
a la inversa, cuando un recluso se oponga a ser visitado por el representante de una
religión, se deberá respetar en absoluto su actitud.
42. Dentro de lo posible, se autorizará a todo recluso a cumplir los preceptos de su
religión, permitiéndosele participar en los servicios organizados en el establecimiento
y tener en su poder libros piadosos y de instrucción religiosa de su confesión.
Depósitos de objetos pertenecientes a los reclusos
43. 1) Cuando el recluso ingresa en el establecimiento, el dinero, los objetos de valor,
ropas y otros efectos que le pertenezcan y que el reglamento no le autoriza a retener,
serán guardados en un lugar seguro. Se establecerá un inventario de todo ello, que el
recluso firmará. Se tomarán las medidas necesarias para que dichos objetos se
conserven en buen estado. 2) Los objetos y el dinero pertenecientes al recluso le serán
devueltos en el momento de su liberación, con excepción del dinero que se le haya
autorizado a gastar, de los objetos que haya remitido al exterior, con la debida
autorización, y de las ropas cuya destrucción se haya estimado necesaria por razones
de higiene. El recluso firmará un recibo de los objetos y el dinero restituidos. 3) Los
valores y objetos enviados al recluso desde el exterior del establecimiento serán
sometidos a las mismas reglas. 4) Si el recluso es portador de medicinas o de
estupefacientes en el momento de su ingreso, el médico decidirá el uso que deba
hacerse de ellos.
Notificación de defunción, enfermedades y traslados
44. 1) En casos de fallecimiento del recluso, o de enfermedad o accidentes graves, o de
su traslado a un establecimiento para enfermos mentales, el director informará
inmediatamente al cónyuge, si el recluso fuere casado, o al pariente más cercano y en
todo caso a cualquier otra persona designada previamente por el recluso. 2) Se
informará al recluso inmediatamente del fallecimiento o de la enfermedad grave de un
pariente cercano. En caso de enfermedad grave de dicha persona, se le deberá
autorizar, cuando las circunstancias lo permitan, para que vaya a la cabecera del
enfermo, solo o con custodia. 3) Todo recluso tendrá derecho a comunicar
inmediatamente a su familia su detencion o su traslado a otro establecimiento.
Traslado de reclusos
45. 1) Cuando los reclusos son conducidos a un establecimiento o trasladados a otro,
se tratará de exponerlos al público lo menos posible y se tomarán disposiciones para
protegerlos de los insultos, de la curiosidad del público y para impedir toda clase de
publicidad. 2) Deberá prohibirse el transporte de los reclusos en malas condiciones de
ventilación o de luz o por cualquier medio que les impongan un sufrimiento físico. 3)
El traslado de los reclusos se hará a expensas de la administración y en condiciones de
igualdad para todos.
Personal penitenciario
46. 1) La administración penitenciaria escogerá cuidadosamente el personal de todos
los grados, puesto que de la integridad, humanidad, aptitud personal y capacidad
profesional de este personal dependerá la buena dirección de los establecimientos
penitenciarios. 2) La administración penitenciaria se esforzará constantemente por
despertar y mantener, en el espíritu del personal y en la opinión pública, la convicción
de que la función penitenciaria constituye un servicio social de gran importancia y, al
efecto, utilizará todos los medios apropiados para ilustrar al público. 3) Para lograr
dichos fines será necesario que los miembros del personal trabajen exclusivamente
como funcionarios penitenciarios profesionales, tener la condición de empleados
públicos y por tanto la seguridad de que la estabilidad en su empleo dependerá
únicamente de su buena conducta, de la eficacia de su trabajo y de su aptitud física. La
remuneración del personal deberá ser adecuada para obtener y conservar los servicios
de hombres y mujeres capaces. Se determinarán las ventajas de la carrera y las
condiciones del servicio teniendo en cuenta el carácter penoso de sus funciones.
47. 1) El personal deberá poseer un nivel intelectual suficiente. 2) Deberá seguir, antes
de entrar en el servicio, un curso de formación general y especial y pasar
satisfactoriamente pruebas teóricas y prácticas. 3) Después de su entrada en el
servicio y en el curso de su carrera, el personal deberá mantener y mejorar sus
conocimientos y su capacidad profesional siguiendo cursos de perfeccionamiento que
se organizarán periódicamente.
48. Todos los miembros del personal deberán conducirse y cumplir sus funciones en
toda circunstancia, de manera que su ejemplo inspire respeto y ejerza una influencia
beneficiosa en los reclusos.
49. 1) En lo posible se deberá añadir al personal un número suficiente de especialistas,
tales como psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales, maestros e instructores
técnicos. 2) Los servicios de los trabajadores sociales, de maestros e instructores
técnicos deberán ser mantenidos permanentemente, sin que ello excluya los servicios
de auxiliares a tiempo limitado o voluntarios.
50. 1) El director del establecimiento deberá hallarse debidamente calificado para su
función por su carácter, su capacidad administrativa, una formación adecuada y por su
experiencia en la materia. 2) Deberá consagrar todo su tiempo a su función oficial que
no podrá ser desempeñada como algo circunscrito a un horario determinado. 3)
Deberá residir en el establecimiento o en la cercanía inmediata. 4) Cuando dos o más
establecimientos estén bajo la autoridad de un director único, éste los visitará con
frecuencia. Cada uno de dichos establecimientos estará dirigido por un funcionario
residente responsable.
51. 1) El director, el subdirector y la mayoría del personal del establecimiento deberán
hablar la lengua de la mayor parte de los reclusos o una lengua comprendida por la
mayor parte de éstos. 2) Se recurrirá a los servicios de un intérprete cada vez que sea
necesario.
52. 1) En los establecimientos cuya importancia exija el servicio continuo de uno o
varios médicos, uno de ellos por lo menos residirá en el establecimiento o en su
cercanía inmediata. 2) En los demás establecimientos, el médico visitará diariamente a
los presos y habitará lo bastante cerca del establecimiento a fin de que pueda acudir
sin dilación cada vez que se presente un caso urgente.
53. 1) En los establecimientos mixtos, la sección de mujeres estará bajo la dirección de
un funcionario femenino responsable, que guardará todas las llaves de dicha sección
del establecimiento. 2) Ningún funcionario del sexo masculino penetrará en la sección
femenina sin ir acompañado de un miembro femenino del personal. 3) La vigilancia de
las reclusas será ejercida exclusivamente por funcionarios femeninos. Sin embargo,
esto no excluirá que funcionarios del sexo masculino, especialmente los médicos y
personal de enseñanza, desempeñen sus funciones profesionales en establecimientos o
secciones reservados para mujeres.
54. 1) Los funcionarios de los establecimientos no deberán, en sus relaciones con los
reclusos, recurrir a la fuerza, salvo en caso de legítima defensa, de tentativa de evasión
o de resistencia por la fuerza o por inercia física a una orden basada en la ley o en los
reglamentos. Los funcionarios que recurran a la fuerza se limitarán a emplearla en la
medida estrictamente necesaria e informarán inmediatamente al director del
establecimiento sobre el incidente. 2) Los funcionarios penitenciarios recibirán un
entrenamiento físico especial que les permita dominar a los reclusos violentos. 3)
Salvo en circunstancias especiales, los agentes que desempeñan un servicio en
contacto directo con los presos no estarán armados. Por otra parte, no se confiará
jamás un arma a un miembro del personal sin que éste haya sido antes adiestrado en
su manejo.
Inspección
55. Inspectores calificados y experimentados, designados por una autoridad
competente, inspeccionarán regularmente los establecimientos y servicios
penitenciarios. Velarán en particular porque estos establecimientos se administren
conforme a las leyes y los reglamentos en vigor y con la finalidad de alcanzar los
objetivos de los servicios penitenciarios y correccionales.
Segunda parte
Reglas aplicables a categorías especiales
A.-Condenados
Principios rectores
56. Los principios que se enumeran a continuación tienen por objeto definir el espíritu
conforme al cual deben administrarse los sistemas penitenciarios y los objetivos hacia
los cuales deben tender, conforme a la declaración hecha en la observación preliminar
1 del presente texto.
57. La prisión y las demás medidas cuyo efecto es separar a un delincuente del mundo
exterior son aflictivas por el hecho mismo de que despojan al individuo de su derecho
a disponer de su persona al privarle de su libertad. Por lo tanto, a reserva de las
mediadas de separación justificadas o del mantenimiento de la disciplina, el sistema
penitenciario no debe agravar los sufrimientos inherentes a tal situación.
58. El fin y la justificación de las penas y medidas privativas de libertad son, en
definitiva, proteger a la sociedad contra el crimen. Sólo se alcanzará este fin si se
aprovecha el período de privación de libertad para lograr, en lo posible, que el
delincuente una vez liberado no solamente quiera respetar la ley y proveer a sus
necesidades, sino también que sea capaz de hacerlo.
59. Para lograr este propósito, el régimen penitenciario debe emplear, tratando de
aplicarlos conforme a las necesidades del tratamiento individual de los delincuentes,
todos los medios curativos, educativos, morales, espirituales y de otra naturaleza, y
todas las formas de asistencia de que puede disponer.
60. 1) El régimen del establecimiento debe tratar de reducir las diferencias que puedan
existir entre la vida en prisión y la vida libre en cuanto éstas contribuyan a debilitar el
sentido de responsabilidad del recluso o el respeto a la dignidad de su persona. 2) Es
conveniente que, antes del término de la ejecución de una pena o medida, se adopten
los medios necesarios para asegurar al recluso un retorno progresivo a la vida en
sociedad. Este propósito puede alcanzarse, según los casos, con un régimen
preparatorio para la liberación, organizado dentro del mismo establecimiento o en
otra institución apropiada, o mediante una liberación condicional, bajo una vigilancia
que no deberá ser confiada a la policía, sino que comprenderá una asistencia social
eficaz.
61. En el tratamiento no se deberá recalcar el hecho de la exclusión de los reclusos de
la sociedad, sino, por el contrario, el hecho de que continúan formando parte de ella.
Con ese fin debe recurrirse, en lo posible, a la cooperación de organismos de la
comunidad que ayuden al personal del establecimiento en su tarea de rehabilitación
social de los reclusos. Cada establecimiento penitenciario deberá contar con la
colaboración de trabajadores sociales encargados de mantener y mejorar las
relaciones del recluso con su familia y con los organismos sociales que puedan serle
útiles. Deberán hacerse, asimismo, gestiones a fin de proteger, en cuanto ello sea
compatible con la ley y la pena que se imponga, los derechos relativos a los intereses
civiles, los beneficios de los derechos de la seguridad social y otras ventajas sociales de
los reclusos.
62. Los servicios médicos del establecimiento se esforzarán por descubrir y deberán
tratar todas las deficiencias o enfermedades físicas o mentales que constituyen un
obstáculo para la readaptación del recluso. Para lograr este fin deberá aplicarse
cualquier tratamiento médico, quirúrgico y psiquiátrico que se juzgue necesario.
63. 1) Estos principios exigen la individualización del tratamiento que, a su vez,
requiere un sistema flexible de clasificación en grupos de los reclusos. Por lo tanto,
conviene que los grupos sean distribuidos en establecimientos distintos donde cada
grupo pueda recibir el tratamiento necesario. 2) Dichos establecimientos no deben
adoptar las mismas medidas de seguridad con respecto a todos los grupos. Convendrá
establecer diversos grados de seguridad conforme a la que sea necesaria para cada
uno de los diferentes grupos. Los establecimientos abiertos en los cuales no existen
medios de seguridad física contra la evasión, y en los que se confía en la autodisciplina
de los reclusos, proporcionan por este mismo hecho a reclusos cuidadosamente
elegidos las condiciones más favorables para su readaptación. 3) Es conveniente evitar
que en los establecimientos cerrados el número de reclusos sea tan elevado que llegue
a constituir un obstáculo para la individualización del tratamiento. En algunos países
se estima que el número de reclusos en dichos establecimientos no debe pasar de 500.
En los establecimientos abiertos, el número de detenidos deberá ser lo más reducido
posible. 4) Por el contrario, no convendrá mantener establecimientos que resulten
demasiado pequeños para que se pueda organizar en ellos un régimen apropiado.
64. El deber de la sociedad no termina con la liberación del recluso. Se deberá
disponer, por consiguiente, de los servicios de organismos gubernamentales o
privados capaces de prestar al recluso puesto en libertad una ayuda postpenitenciaria
eficaz que tienda a disminuir los prejuicios hacia él y le permitan readaptarse a la
comunidad.
Tratamiento
65. El tratamiento de los condenados a una pena o medida privativa de libertad debe
tener por objeto, en tanto que la duración de la condena lo permita, inculcarles la
voluntad de vivir conforme a la ley, mantenerse con el producto de su trabajo, y crear
en ellos la aptitud para hacerlo. Dicho tratamiento estará encaminado a fomentar en
ellos el respeto de sí mismos y desarrollar el sentido de responsabilidad.
66. 1) Para lograr este fin, se deberá recurrir, en particular, a la asistencia religiosa, en
los países en que esto sea posible, a la instrucción, a la orientación y la formación
profesionales, a los métodos de asistencia social individual, al asesoramiento relativo
al empleo, al desarrollo físico y a la educación del carácter moral, en conformidad con
las necesidades individuales de cada recluso. Se deberá tener en cuenta su pasado
social y criminal, su capacidad y aptitud físicas y mentales, sus disposiciones
personales, la duración de su condena y las perspectivas después de su liberación. 2)
Respecto de cada recluso condenado a una pena o medida de cierta duración que
ingrese en el establecimiento, se remitirá al director cuanto antes un informe completo
relativo a los aspectos mencionados en el párrafo anterior. Acompañará a este informe
el de un médico, a ser posible especializado en psiquiatría, sobre el estado físico y
mental del recluso. 3) Los informes y demás documentos pertinentes formarán un
expediente individual. Estos expedientes se tendrán al día y se clasificarán de manera
que el responsable pueda consultarlos siempre que sea necesario.
Clasificación e individualización
67. Los fines de la clasificación deberán ser: a) Separar a los reclusos que, por su
pasado criminal o su mala disposición, ejercerían una influencia nociva sobre los
compañeros de detencion; b) Repartir a los reclusos en grupos, a fin de facilitar el
tratamiento encaminado a su readaptación social.
68. Se dispondrá, en cuanto fuere posible, de establecimientos separados o de
secciones separadas dentro de los establecimientos para los distintos grupos de
reclusos.
69. Tan pronto como ingrese en un establecimiento un condenado a una pena o
medida de cierta duración, y después de un estudio de su personalidad, se establecerá
un programa de tratamiento individual, teniendo en cuenta los datos obtenidos sobre
sus necesidades individuales, su capacidad y sus inclinaciones.
Privilegios
70. En cada establecimiento se instituirá un sistema de privilegios adaptado a los
diferentes grupos de reclusos y a los diferentes métodos de tratamiento, a fin de
alentar la buena conducta, desarrollar el sentido de responsabilidad y promover el
interés y la cooperación de los reclusos en lo que atañe su tratamiento.
Trabajo
71. 1) El trabajo penitenciario no deberá tener carácter aflictivo. 2) Todos los
condenados serán sometidos a la obligación de trabajar habida cuenta de su aptitud
física y mental, según la determine el médico. 3) Se proporcionará a los reclusos un
trabajo productivo, suficiente para ocuparlos durante la duración normal de una
jornada de trabajo. 4) En la medida de lo posible, ese trabajo deberá contribuir por su
naturaleza a mantener o aumentar la capacidad del recluso para ganar honradamente
su vida después de su liberación. 5) Se dará formación profesional en algún oficio útil a
los reclusos que estén en condiciones de aprovecharla, particularmente a los jóvenes.
6) Dentro de los límites compatibles con una selección profesional racional y con las
exigencias de la administración y la disciplina penitenciarias, los reclusos podrán
escoger la clase de trabajo que deseen realizar.
72. 1) La organización y los métodos de trabajo penitenciario deberán asemejarse lo
más posible a los que se aplican a un trabajo similar fuera del establecimiento, a fin de
preparar a los reclusos para las condiciones normales del trabajo libre. 2) Sin embargo,
el interés de los reclusos y de su formación profesional no deberán quedar
subordinados al deseo de lograr beneficios pecuniarios de una industria penitenciaria.
73. 1) Las industrias y granjas penitenciarias deberán preferentemente ser dirigidas
por la administración y no por contratistas privados. 2) Los reclusos que se empleen
en algún trabajo no fiscalizado por la administración estarán siempre bajo la vigilancia
del personal penitenciario. A menos que el trabajo se haga para otras dependencias del
gobierno, las personas para las cuales se efectúe pagarán a la administración el salario
normal exigible por dicho trabajo teniendo en cuenta el rendimiento del recluso.
74. 1) En los establecimientos penitenciarios se tomarán las mismas precauciones
prescritas para proteger la seguridad y la salud de los trabajadores libres. 2) Se
tomarán disposiciones para indemnizar a los reclusos por los accidentes de trabajo y
enfermedades profesionales, en condiciones similares a las que la ley dispone para los
trabajadores libres.
75. 1) La ley o un reglamento administrativo fijará el número máximo de horas de
trabajo para los reclusos por día y por semana, teniendo en cuenta los reglamentos o
los usos locales seguidos con respecto al empleo de los trabajadores libres. 2) Las
horas así fijadas deberán dejar un día de descanso por semana y tiempo suficiente para
la instrucción y otras actividades previstas para el tratamiento y la readaptación del
recluso.
76. 1) El trabajo de los reclusos deberá ser remunerado de una manera equitativa. 2)
El reglamento permitirá a los reclusos que utilicen, por lo menos, una parte de su
remuneración para adquirir objetos destinados a su uso personal y que envíen otra
parte a su familia. 3) El reglamento deberá igualmente prever que la administración
reserve una parte de la remuneración a fin de constituir un fondo que será entregado
al recluso al ser puesto en libertad.
Instrucción y recreo
77. 1) Se tomarán disposiciones para mejorar la instrucción de todos los reclusos
capaces de aprovecharla, incluso la instrucción religiosa en los países en que esto sea
posible. La instrucción de los analfabetos y la de los reclusos jóvenes será obligatoria y
la administración deberá prestarle particular atención. 2) La instrucción de los
reclusos deberá coordinarse, en cuanto sea posible, con el sistema de instrucción
pública a fin de que al ser puesto en libertad puedan continuar sin dificultad su
preparación.
78. Para el bienestar físico y mental de los reclusos se organizarán actividades
recreativas y culturales en todos los establecimientos.
Relaciones sociales, ayuda postpenitenciaria
79. Se velará particularmente por el mantenimiento y el mejoramiento de las
relaciones entre el recluso y su familia, cuando éstas sean convenientes para ambas
partes.
80. Se tendrá debidamente en cuenta, desde el principio del cumplimiento de la
condena, el porvenir del recluso después de su liberación. Deberá alentarse al recluso
para que mantenga o establezca relaciones con personas u organismos externos que
puedan favorecer los intereses de su familia así como su propia readaptación social.
81. 1) Los servicios y organismos, oficiales o no, que ayudan a los reclusos puestos en
libertad a reintegrarse en la sociedad, proporcionarán a los liberados, en la medida de
lo posible, los documentos y papeles de identidad necesarios, alojamiento, trabajo,
vestidos convenientes y apropiados para el clima y la estación, así como los medios
necesarios para que lleguen a su destino y puedan subsistir durante el período que
siga inmediatamente a su liberación. 2) Los representantes acreditados de esos
organismos tendrán todo el acceso necesario a los establecimientos y podrán visitar a
los reclusos. Se les consultará en materia de proyectos de readaptación para cada
recluso desde el momento en que éste haya ingresado en el establecimiento. 3)
Convendrá centralizar o coordinar todo lo posible la actividad de dichos organismos, a
fin de asegurar la mejor utilización de sus actividades.
B.- Reclusos alienados y enfermos mentales
82. 1) Los alienados no deberán ser recluidos en prisiones. Se tomarán disposiciones
para trasladarlos lo antes posible a establecimientos para enfermos mentales. 2) Los
reclusos que sufran otras enfermedades o anormalidades mentales deberán ser
observados y tratados en instituciones especializadas dirigidas por médicos. 3)
Durante su permanencia en la prisión, dichos reclusos estarán bajo la vigilancia
especial de un médico. 4) El servicio médico o psiquiátrico de los establecimientos
penitenciarios deberá asegurar el tratamiento psiquiátrico de todos los demás
reclusos que necesiten dicho tratamiento.
83. Convendrá que se tomen disposiciones, de acuerdo con los organismos
competentes, para que, en caso necesario, se continúe el tratamiento psiquiátrico
después de la liberación y se asegure una asistencia social postpenitenciaria de
carácter psiquiátrico.
C.- Personas detenidas o en prision preventiva
84. 1) A los efectos de las disposiciones siguientes es denominado "acusado" toda
persona arrestada o encarcelada por imputársele una infracción a la ley penal,
detenida en un local de policía o en prisión, pero que todavía no ha sido juzgada. 2) El
acusado gozará de una presunción de inocencia y deberá ser tratado en consecuencia.
3) Sin perjuicio de las disposiciones legales relativas a la protección de la libertad
individual o de las que fijen el procedimiento que se deberá seguir respecto a los
acusados, estos últimos gozarán de un régimen especial cuyos puntos esenciales
solamente se determinan en las reglas que figuran a continuación.
85. 1) Los acusados serán mantenidos separados de los reclusos condenados. 2) Los
acusados jóvenes serán mantenidos separados de los adultos. En principio, serán
detenidos en establecimientos distintos.
86. Los acusados deberán dormir en celdas individuales a reserva de los diversos usos
locales debidos al clima.
87. Dentro de los límites compatibles con un buen orden del establecimiento, los
acusados podrán, si lo desean, alimentarse por su propia cuenta procurándose
alimentos del exterior por conducto de la administración, de su familia o de sus
amigos. En caso contrario, la administración suministrará la alimentación.
88. 1) Se autorizará al acusado a que use sus propias prendas personales siempre que
estén aseadas y sean decorosas. 2) Si lleva el uniforme del establecimiento, éste será
diferente del uniforme de los condenados.
89. Al acusado deberá siempre ofrecérsele la posibilidad de trabajar, pero no se le
requerirá a ello. Si trabaja, se le deberá remunerar.
90. Se autorizará a todo acusado para que se procure, a sus expensas o a las de un
tercero, libros, periódicos, recado de escribir, así como otros medios de ocupación,
dentro de los límites compatibles con el interés de la administración de justicia, la
seguridad y el buen orden del establecimiento.
91. Se permitirá que el acusado sea visitado y atendido por su propio médico o su
dentista si su petición es razonable y está en condiciones de sufragar tal gasto.
92. Un acusado deberá poder informar inmediatamente a su familia de su detencion y
se le concederán todas las facilidades razonables para comunicarse con ésta y sus
amigos y para recibir la visita de estas personas, con la única reserva de las
restricciones y de la vigilancia necesarias en interés de la administración de justicia, de
la seguridad y del buen orden del establecimiento.
93. El acusado estará autorizado a pedir la designación de un defensor de oficio
cuando se haya previsto dicha asistencia, y a recibir visitas de su abogado, a propósito
de su defensa. Podrá preparar y dar a éste instrucciones confidenciales. Para ello, se le
proporcionará, si lo desea, recado de escribir. Durante las entrevistas con su abogado,
el acusado podrá ser vigilado visualmente, pero la conversación no deberá ser
escuchada por ningún funcionario de la policía o del establecimiento penitenciario.
D.- Sentenciados por deudas o a prisión civil
94. En los países cuya legislación dispone la prisión por deudas u otras formas de
prisión dispuestas por decisión judicial como consecuencia de un procedimiento no
penal, los así sentenciados no serán sometidos a mayores restricciones ni tratados con
más severidad que la requerida para la seguridad y el mantenimiento del orden. El
trato que se les dé no será en ningún caso más severo que el que corresponda a los
acusados a reserva, sin embargo, de la obligación eventual de trabajar.
E.- Reclusos, detenidos o encarcelados sin haber cargos en su contra
95. Sin perjuicio de las disposiciones del artículo 9 del Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos, las personas detenidas o encarceladas sin que haya cargos en su
contra gozarán de la misma protección prevista en la primera parte y en la sección C
de la segunda parte. Asimismo, serán aplicables las disposiciones pertinentes de la
sección A de la segunda parte cuando esta aplicación pueda redundar en beneficio de
este grupo especial de personas bajo custodia, siempre que no se adopten medidas que
impliquen que la reeducación o la rehabilitación proceden en forma alguna respecto de
personas no condenadas por un delito penal.
Cadena Perpetua en el mundo: Contemplada como sanción penal Contemplada como sanción penal
únicamente bajo ciertas condiciones Abolida Se desconoce, probablemente es legal
BIBLIOGRAFÍA
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jurisprudencial en los códigos penales españoles el siglo XIX. Bilbao 1982.
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