Musica Raza y Nacion

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MÚSICA Y COTIDIANIDAD

Música, Raza y Nación

Autor: Wade

Estudiantes:

Kevin Joan Garzón Cabezas

Laura Yineth Arias Parra

Dayan Lorena Cuellar Neira

Maestro:

Eliecer Arenas Monsalve

Licenciatura en Música
Universidad Pedagógica Nacional

Bogotá D.C

2022
Se dice que la música costeña (tal como la cumbia, el vallenato, la música de gaitas, la puya, etc.)
es una de las insignias nacionales más representativas de Colombia, y que en ella convergen todas
las raíces culturales del mestizaje nacional. Sin embargo, es necesario observar bajo qué términos
se ha ido construyendo dicha insignia. Y es que inevitablemente hay términos que pretenden
determinar el “valor” de esta herencia cultural. Desde la colonia hasta la actualidad, las élites han
medido todo lo proveniente de la cultura popular bajo diversas marcas (negritud, clase social,
religión, etc.) buscando generar una “identidad nacional” digna de ser mostrada alrededor del
mundo. Así, por consecuencia, se han creado clichés alrededor de estos géneros musicales, los
cuales al mismo tiempo no son muy precisos en su representación de lo que es nacional y propio
de la sociedad colombiana, ya que se ven mediados por los intereses de las clases dominantes,
suprimiendo así buena parte de la verdadera identidad de los grupos sociales que en principio
crearon estas músicas.

El estigma de pobre, emocional, primitivo, sexual, “caliente”, desorganizado y perezoso, ha sido


evidentemente marca que las élites y las ciudades centrales han atribuido a la diáspora afro que,
en su mayoría, está ubicada en la costa colombiana. Ciertos prejuicios son susceptibles a varias
interpretaciones según el contexto en que se den: por un lado, pueden ser motivo para sentir
rechazo y desprecio, o por otro lado puede ser un atractivo ya sea estético, cultural o artístico. Es
indudable que las expresiones artísticas costeñas son sumamente conocidas por cómo vinculan
sus músicas al cuerpo y al ritmo de una forma tan sofisticada. Este factor, sumado al crecimiento
de la industria discográfica a mitades del siglo pasado, favoreció la popularización de las músicas
costeñas a lo largo de Colombia y del mundo. No obstante, esta situación se dio más con intereses
comerciales que de preservación y cuidado a la herencia cultural que esta música significa para el
país.

Ya los discursos dominantes presentes en las constituciones del siglo XIX y XX dejaban claro cuál
era el rol de los habitantes no blancos en el país. Asimismo, las instituciones como las escuelas se
encargaban de dejar claro el ideal de “ciudadano de bien”, excluyendo así a la población rural,
negra y aborigen de la ecuación. Sin embargo, en la costa siempre hubo una intención de
participar en procesos políticos, construcción de nación, cultura musical, literatura, etc. Así, nada
de lo que salía de la costa pasaba desapercibido de los pilares estatales colombianos ya que
siempre daba de qué hablar.

Entre el siglo XIX y el primer tercio del siglo XX, el bambuco y el pasillo eran los géneros musicales
dominantes en el país dados sus mensajes nacionalistas, lo que dejaba las puertas abiertas para
que la población urbana popular asimilara estos géneros con nuevas interpretaciones
despreciadas asimismo por las clases altas. Pese a su popularidad tan grande, estos géneros
perderían la misma en el momento que se globalizó la industria musical de Estados Unidos, en la
cual desde una época temprana se grabaron canciones latinoamericanas entre las cuales estaba la
música costeña. Al mismo tiempo que se popularizó la radio tanto local como extranjera, se fue
dando a conocer más y más la música proveniente del norte del país. Esta habría sido la causa
directa de la diversificación y a la vez homogeneización de música como la cumbia en el campo
internacional, lo que hace que hoy en día sea tan conocida a lo largo del mundo.

A pesar de que ser ampliamente conocida la música costeña de Colombia, hay que tener en cuenta
el contexto en que se dio esta eventualidad. Los prejuicios, la desigualdad social, las guerras y
otros factores que atentan contra la dignidad humana fueron probablemente los factores más
influyentes en la popularización de estas músicas. Por un lado ayuda al crecimiento de una cultura
musical, pero por otro lado puede reproducir prejuicios de clase, género y raza, en base a los que
crecieron estos géneros.

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